Trabajo de Lesiones
Trabajo de Lesiones
Trabajo de Lesiones
Fortalecimiento de la Educación”
Docente:
Dra. Inés Rosalía Valdeiglesias Hidme
Asignatura:
Medicina Forense
Tema:
Lesiones por Arma Blanca
Alumnas:
Zúñiga Vergara Génesis
Figueroa Ayala Mariela
Ortega Cháves Ingrid
Bustamante Olortegui Yasmin
2015
MEDICINA FORENSE 1
DEDICATORIA:
MEDICINA FORENSE 2
ÍNDICE:
LESIONES POR ARMA BLANCA
Introducción……………………………………………………………………………4
CAPITULO 1:
1.1 Antecedentes……………………………………………………………………….5
1.2 Definición………………………………………………………………………….5
1.3 Tipos de arma blanca…………………………………………………………........6
1.3.1. Punzante
1.3.2. Cortante
1.3.3. Punzo Cortante
1.3.4. Contuso cortante
CAPITULO 2:
2.1 HERIDAS PUNZANTES
2.1.1 Definición…………………………………………………………………….7
2.1.2 Mecanismos de acción………………………………………………………..8
2.1.3 Características…………………………………………………………….......9
2.1.4 Pronostico…………………………………………………………………….9
2.2 HERIDAS CORTANTES
2.2.1 Mecanismos de acción………………………………………………………10
2.2.2 Características……………………………………………………………….11
2.2.3 Clasificación…………………………………………………………………12
2.2.4 Pronostico……………………………………………………………………14
2.2.5 Causa de muerte……………………………………………………………..14
2.3 HERIDAS PUNZO-CORTANTES
2.3.1 Mecanismos de acción…………………………………………………………16
2.3.2 Características…………………………………………………………………17
2.4 HERIDAS CONTUSO-CORTANTES
2.4.1 Mecanismos de acción…………………………………………………………20
2.4.2 Características…………………………………………………………………21
CAPITULO 3:
3.1. Problemas de las heridas por arma blanca…………………………………………22
3.2. Etiología médico forense……………………………………………………….......24
Conclusiones……………………………………………………………………………27
Bibliografía……………………………………………………………………………..28
MEDICINA FORENSE 3
INTRODUCCIÓN:
El presente trabajo tiene como finalidad desarrollar diversos aspectos y clasificaciones
de las heridas por arma blanca que entran con gran frecuencia en la práctica del médico
forense tanto en su consideración de lesiones, que requieren una correcta valoración del
daño corporal; como en la Patología Forense cuando dichas heridas determinan la muerte
de una persona.
En este último caso, como luego se desarrollará, el abordaje médico forense va dirigido a
determinar la causa, mecanismo y etiología de la muerte así como aquellas otras
circunstancias que rodean al fallecimiento y que tienen una gran trascendencia en la
valoración jurídica del mismo.
La frecuencia de las armas blancas como causa de lesiones y de muerte en nuestro medio,
está relacionada fundamentalmente con dos circunstancias:
Las armas blancas están muy ligadas histórico-socialmente a la cultura hispánica
así como a la de otros pueblos del sur de Europa.
En nuestra vida diaria estamos rodeados de utensilios y objetos que tienen las
características y consideración de armas blancas, pudiendo ser utilizados como
tales.
Las clasificaciones clásicas incluyen a las armas blancas en el grupo de las armas de
mano, dividiéndolas en armas blancas de corte, de punta, o de corte y punta, de tal modo
que, como bien expone Raffo “El mecanismo de acción es el que nomina la lesión y señala
el arma utilizada
MEDICINA FORENSE 4
LESIONES POR ARMA BLANCA:
I.ANTECEDENTES:
Las lesiones ocasionadas por arma blanca tienen como antecedentes en sus textos más
clásicos a partir del siglo XIX entre ellos se destaca en el Tratado de Medicina Legal y
Cirugía del autor Pedro Mata1 donde definía a las armas blancas por primera vez como:”
“todo cuerpo o instrumento mecánico capaz de perforar y cortar la estructura anatómica”,
Desde entonces, todos los grandes tratadistas han aportado definiciones y descripciones
hasta llegar a la más reciente donde establecieron que son: “instrumentos lesivos
manejados manualmente que atacan la superficie corporal por un fi lo, una punta o ambos
a la vez”.
Diferentes son las hipótesis que se barajan respecto al origen de la denominación de Arma
Blanca, y así, para López Gómez reciben este nombre por la brillantez de su hoja.
Armas blancas, son los instrumentos lesivos manejados manualmente que atacan la
superficie corporal por un filo, una punta o ambos a la vez, están constituidas por una
lámina, comúnmente metálica. De acuerdo con este mecanismo de acción se clasifican
las heridas que producen.
1
Mata P. Tratado de Medicina y Cirugía Legal (2). 3ª edición. Madrid: Imp. de Baylli-Bailliere; 1857. pp. 536-49.
MEDICINA FORENSE 5
3.- Heridas por instrumentos punzocortante.
4.- Heridas por instrumentos contusos cortantes.
PUNZANTES:
Existen armas punzantes:
De perfil redondo o corte de sección circular, como la aguja, la lezma, el clavo,
etc.
De superficie de sección con aristas, como la espada, el florete, la bayoneta, etc.
CORTANTES:
Son armas de gran filo, como la navaja, la hoja de afeitar, un vidrio roto como el pico roto
de una botella, el cuchillo cuando actúa por su filo cortante.
PUNZOCORTANTES:
Son aquellos elementos, armas o instrumentos que poseen punta y filo cortante, como el
cuchillo, el puñal, la espada, etc. e inclusive los hay de doble filo como daga, un puñal,
etc.
CONTUSO CORTANTES:
Son aquellas armas que poseen solidez o peso importante y un filo cortante, como el
hacha, el sable, el machete, etc.
1. HERIDA PUNZANTE:
Se llaman así a las producidas por instrumentos de forma alargada, de un diámetro
variable, pero nunca muy considerables, de sección circular o elíptica, que terminan en
una punta más o menos aguda. En suma, se trata de cuerpos cilindros cónicos alargados
en forma de punta afilada.
Estos instrumentos pueden ser naturales o artificiales. Entre los primeros figuran las
espinas, los aguijones y otras defensas de animales. Son más frecuentes, sin embargo, los
artificiales, entre los que deben citarse; alfileres, agujas, clavos, punteros, flechas, flores,
lanzas, etc.
MEDICINA FORENSE 6
MECANISMO DE ACCIÓN.
Los instrumentos punzantes penetran en los tejidos actuando a modo de cuña, disociando
y rechazando lateralmente los elementos anatómicos del tejido atravesado. Pero cuando
el instrumento tiene cierto grosor hay, además, un verdadero desgarro, al vencer los
límites de su elasticidad. Por tanto, lo fundamental en la acción de estos instrumentos es
la punta, que concentra la fuerza viva en una superficie muy limitada.
Un arma punzante, actúa percutiendo y perforando con la punta hundida, separando las
fibras del tejido y penetrando en profundidad.
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Las heridas por instrumentos punzantes o perforantes se definen por la existencia de un
orificio de entrada, de un trayecto más o menos largo y, cuando traspasan completamente
una zona del cuerpo, por un orificio de salida.
El orificio de entrada radica ordinariamente en la piel; más raramente en mucosas.
Cuando el instrumento es tan fino que al dislocar los tejidos no sobrepasa su límite de
elasticidad, queda reducido a un punto rojizo o rosáceo, cuya huella desaparece en dos o
tres días. La levedad del orificio de entrada no prejuzga el pronóstico de la herida, puesto
que lesiones de apariencia insignificante pueden tener consecuencias graves por alcanzar
órganos profundos importantes. Las complicaciones infecciosas son también susceptibles
de agravar el pronóstico. Por último, a veces el instrumento se rompe y quedan partes del
mismo en el fondo de la lesión.
La forma y dirección del orificio de entrada son de una gran importancia médico legal,
ya que en ello reposa en buena parte el diagnóstico del instrumento responsable. De ahí
que motivará investigaciones experimentales, hoy clásicas, y cuyos resultados se
sintetizan en las llamadas leyes de Filhos y Langer:
Ley de Filhos: La lesión producida por arma cilindrocónica simula la que
produciría un arma aplanada y con dos filos. En una región determinada, las
lesiones producidas por éste tipo de arma tienen siempre la misma dirección,
mientras que las producidas por armas corto punzantes con dos filos pueden
presentar las más diversas direcciones.
Ley de Langer: Cuando un instrumento punzante lesiona un punto en el cual
convergen diversos sistemas de fibras de dirección divergente, la herida toma una
forma triangular o en punta de flecha.
La dirección del orificio está determinada por la que tengan las fibras elásticas de la
dermis cutánea. Si se conoce este dato puede preverse la dirección del orificio en las
distintas regiones del cuerpo, y si coinciden ambas direcciones sirve como comprobación
MEDICINA FORENSE 8
de que la herida ha sido producida por un instrumento punzante, diferenciándola así de
las producidas por instrumentos cortantes.
Los esquemas de Langer, resultantes de los experim entos hechos por este autor en 1881,
señalan la dirección de las fibras elásticas en los distintos territorios cutáneos.
El trayecto de las heridas debidas a instrumentos punzantes viene constituido por un canal
que atraviesa los distintos tejidos interesados en la lesión. En el cadáver este trayecto se
señala por una línea rojiza que resulta del derrame de sangre en su interior. Pero lo
característico de esta clase de heridas cuando el trayecto interesa diversos tejidos
superpuestos por planos, es que la dirección del ojal que se forma en cada uno de ellos es
diferente, según sea la forma de sus respectivos elementos elásticos. Se mantiene aquí la
misma regularidad que para el orificio cutáneo.
El orificio de salida cuando existe, es de ordinario más irregular que el de entrada, pues
la piel al perforarse de dentro hacia fuera, da lugar a una especie de estallido, con lo que
suelen producirse fisuras y roturas atípicas. Su tamaño suele ser menor que del orificio de
entrada, lo que es debido a la forma cilindrocónica del instrumento, con lo que su
extremidad libre es de menor diámetro.
PRONÓSTICO.
Aunque generalmente es bueno, depende considerablemente de los siguientes factores:
grosor del instrumento, zona herida, profundidad de la lesión, limpieza del arma. Las
circunstancias que agravan el pronóstico son: que la herida sea penetrante en una
cavidad; que haya interesado órganos vitales o de importancia funcional; que por la
contaminación del instrumento se produzca una infección en profundidad.
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ARMAS PUNZANTES PUEDEN SER:
Los instrumentos cortantes se definen por la existencia de una hoja de poso espesor y
sección triangular que obra sólo por el filo. Ciertos objetos actúan accidentalmente como
instrumentos cortantes: láminas delgadas de metal o trozos de vidrio. Los verdaderos
instrumentos cortantes están representados por cuchillos, navajas, navajas de afeitar,
bisturíes, etc.
MECANISMO DE ACCIÓN.
Como se ha dicho, estos instrumentos actúan por el filo que penetra en los tejidos a
manera de cuña y los divide produciendo soluciones de continuidad. El corte es facilitado
cuando el filo aborda oblicuamente la superficie, pues el ángulo cortante resulta tanto más
agudo cuanto mayor sea la oblicuidad. La acción del instrumento puede llevarse a cabo
por simple presión o por presión y deslizamiento; en el último supuesto los efectos son
muchos mayores.
a) Seccionan o cortan el tejido por: presión y
b) Deslizamiento ó por golpe con el borde cortante del arma.
MEDICINA FORENSE 10
e) Termina en “cola en ambos extremos; la más corta indica el lugar por donde se
inició la herida y la más larga que se prolonga en una fina erosión filiforme indica
el lugar por donde terminó la herida.
f) La evolución es grave según la zona anatómica afectada.
A. HERIDAS LINEALES:
Las heridas lineales se producen cuando el instrumento penetra perpendicularmente
produciendo una simple solución de continuidad. Por efecto de la elasticidad de los tejidos
seccionados, la herida tiende a abrirse adquiriendo la forma de óvalo alargado, cuyos
extremos es frecuente hagan más superficiales, llegando a prolongarse por un verdadero
arañazo superficial que no siempre tiene la misma dirección que el resto de la incisión.
Cuando los extremos asumen estas características reciben el nombre de colas.
MEDICINA FORENSE 11
la dirección del traumatismo y la zona interesada; la retracción es máxima cuando el corte
interesa perpendicularmente la dirección de las fibras elásticas cutáneas. También influye
la posición de la región en el momento de la herida, por lo que sí es distinta a la que se
hace adoptar para la observación puede aumentar o disminuir la separación de los bordes,
como ocurre en las heridas que asientan en la rodilla, codo, hueco axilar, etc.
Depende asimismo de que existan adherencias a tejidos profundos, como sucede con la
piel del cráneo, que se separa poco en las heridas superficiales y mucho, en cambio,
cuando es lesionado la aponeurosis subyacente.
EXTREMOS:
Como hemos dicho, suelen terminar haciéndose superficiales, formando las llamadas
colas. Las colas son más aparentes cuando en el corte de la piel predomina el mecanismo
de deslizamiento. Hay una cola de ataque, que corresponde a la iniciación del corte, y una
cola terminal. Ambas colas pueden ser iguales o desiguales y aún falta en uno de los dos
extremos del corte ; en todo caso la cola más larga es la última producida en el corte, al
ir perdiendo contacto el instrumento con los planos cutáneos, carácter éste que puede
servir para indicar la dirección o sentido en que fue producido el corte.
PAREDES:
Las heridas cortantes tienen, a veces una notable profundidad, dando lugar a la formación
de las paredes que concluyen hacia abajo, dibujando una sección triangular de vértice
inferior. Las paredes son lisas y regulares; no obstante, dentro de ésta característica,
cuando el corte ha interesado capas superpuestas de distinta estructura y, en su caso,
elasticidad, la diferente retracción de estos tejidos puede dar una cierta desigualdad a la
pared.
En efecto, la piel y el tejido muscular se separan mucho, sobre todo si el instrumento ha
cortado las fibras en sentido perpendicular a su dirección; se separan poco, en cambio,
los tejidos fibrosos, cartilaginoso, hepático y esplénico; no se separa nada el tejido óseo.
No hay nunca puentes de sustancia que unan las paredes. Finalmente, cuando en la zona
herida hay un plano óseo superficial, se detiene en él el corte, formando el fondo de la
herida.
B.HERIDAS EN COLGAJO
Las heridas en colgajo se producen cuando el instrumento cortante penetra más o menos
oblicuamente, con lo que uno de los bordes queda cortado en bisel obtuso, mientras que
MEDICINA FORENSE 12
por el otro resulta una lámina o colgajo de sección triangular con el borde libre o corta,
gruesa o delgada, dependiendo estos caracteres de la longitud del arma, de la oblicuidad
del corte y de su profundidad.
C.HERIDAS MÚLTIPLES:
Se producen cuando el instrumento ataca una parte saliente del cuerpo (la oreja, la
extremidad de los dedos, la punta de la nariz, el pezón mamario) dando lugar a su
separación completa. Si el arma no está muy afilada es corriente que se unan mecanismos
de arrancamiento o tracción.
ROZADURAS O EROSIONES:
Se originan cuando el instrumento no hace más que rozar tangencialmente la superficie
cutánea, en la que sólo produce una erosión o el desprendimiento parcial de la epidermis.
HERIDAS IRREGULARES:
La falta de filo del arma o la existencia de melladuras da lugar a que la herida presente
irregularidades, dentella duras, hendiduras y laceraciones. Según el número e intensidad
de éstas, se modifica más o menos la forma de las heridas incisas, los que, a veces, hace
muy difícil el diagnóstico de su naturaleza.
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PRONÓSTICO
Es muy variable de caso a caso, dependiendo del instrumento (la finura de su filo,
la limpieza del arma) y de la zona herida (vascularización de la región, órganos
subcutáneos que pueden resultar interesados por el corte).
Las heridas cortantes pueden ser rápidamente mortales por hemorragias o por
embolia gaseosa (heridas del cuello que interesen las venas). La hemorragia, en
efecto, es constante en este tipo de heridas, ya que la finura con que lesiona los
vasos no provoca ningún tipo de retracción, la cuantía de la hemorragia dependerá
de la vascularización de la región herida También es posible una muerte tardía si
hay complicaciones infecciosas
Si la muerte no tiene lugar, la duración de estas lesiones suele ser corta, porque la
cicatrización es rápida generalmente, dando lugar a cicatrices lineales o elípticas,
más o menos alargadas. Sin embargo, pueden quedar estados residuales y
trastornos funcionales permanentes consecutivos a la lesión de troncos nerviosos,
tendones, músculos, etc. que no se hayan consolidado viciosamente; esto es, el
tratamiento llevado a cabo, condiciona seriamente el pronóstico.
ARMAS CORTANTES
Son armas de gran filo, como la navaja, la hoja de afeitar, un vidrio roto como el pico
roto de una botella, el cuchillo cuando actúa por su filo cortante.
CAUSA DE MUERTE
a) Hemorragia
b) Asfixia, en heridas que interesen vías respiratorias.
c) Embolias gaseosas, en lesión de vasos cervicales.
d) Taponamiento cardíaco, en heridas penetrantes de corazón.
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4. HERIDAS POR INSTUMENTOS CORTO-PUNZANTES
La parte lesiva de los instrumentos corto-punzantes está constituida por una lámina más
o menos estrecha terminada en punta y recorrida por una, dos o más aristas afiladas y
cortantes Según el número de estas aristas, los instrumentos se llaman monocortante,
bicortantes o pluricortantes.
Entre los instrumentos corto-punzantes más frecuentes en la práctica médico legal deben
citarse las navajas, los cuchillos de punta, los puñales, los estiletes, etc.
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b) Posee una característica cola que se reconoce por ser el ángulo más agudo de la
herida y que suele prolongarse en una fina erosión lineal. Indica el lugar por donde
terminó la herida.
c) Predomina la profundidad sobre el largo y ancho de la herida.
d) Márgenes o labios de la herida son netos, regulares y limpios, usualmente sin
equimosis o hematoma.
e) Generalmente tiene 2 ángulos; a veces son tres o más.
f) La longitud de la herida es igual o mayor al ancho penetrando del instrumento.
g) La profundidad de la herida puede ser mayor al largo de la hoja que penetró.
h) El fondo de la herida es triangular y muestra las paredes planas y limpias.
Puede ser típico y atípico. En cuanto al primero, su morfología es variable con la forma
del instrumento:
o Hoja plana y bicortante.- Cuando el instrumento posee una hoja plana y
bicortante la herida que produce tiene la forma de una fisura, parecida a la de
instrumento cortante, pero más profunda. Su dirección sigue la del diámetro
transversal del instrumento y, por tanto, cambia según la posición de esté, con
independencia de la orientación de las fibras elásticas de la piel. Puede no tener
cola si el arma entró y salió perpendicularmente; tener una si al entrar o salir formó
ángulo agudo; y tener dos si cada vez lo forma por un lado.
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o Hoja plana monocortantes.- Forma también una fisura, pero de sus dos extremos
uno es más agudo y, a menudo, presenta una cola evidente, mientras que el otro
es más romo, como redondeado. Esta diferencia entre los extremos de la fisura se
difumina cuando la herida es perpendicular a la dirección de las fibras elásticas
cutáneas, por lo que la retracción de los bordes de la herida se hace muy acusada
y adquiere entonces una forma oval alargada. E estos casos basta aproximar los
bordes de la herida para hacer evidente la diferencia de los ángulos.
o Hoja gruesa monocortante.- Lo característico de este tipo de arma es la
presencia de un lomo, opuesto al borde cortante. Como consecuencia, la herida
forma un verdadero ojal, uno de cuyos extremos es agudo y en cola; el otro es casi
cuadrado, por presentar dos pequeñas hendiduras debidas a los ángulos que el
borde romo forma con las dos caras de la hoja.
Además de estos orificios típicos pueden encontrarse heridas atípicas. Las causas
principales que dan origen a estas heridas atípicas radican en el instrumento o en la forma
de producirse la herida. Por lo que respecta al instrumento deben señalarse aquellos cuya
hoja es de superficie irregular y el corte, o cortes, desafilados, de los que son ejemplo
representativo las limas.
En este caso el ángulo de la herida correspondiente al borde cortante no es muy agudo y
no presenta cola, mientras en los bordes de la herida se observan numerosos y
pequeñísimos desgarros. En cuanto a la forma de producirse la herida, le da carácter
atípico el que la víctima o el arma se muevan, en cuyo caso la herida deja de ser rectilínea,
describiendo una línea curva, quebrada o mixta.
4.4 TRAYECTO
El trayecto de las heridas corto-punzantes puede adoptar diversas formas:
o Es único o múltiple, según que el instrumento haya realizado más de una
penetración, aun sin haber salido del todo.
MEDICINA FORENSE 17
o Es perpendicular al plano de la piel u oblicuo. En este último caso, si el arma ha
abordado oblicuamente los tejidos, con oblicuidad paralela a la caras del arma, el
bisel producido permite diagnosticar desde fuera la dirección del trayecto.
Por último, el trayecto puede ser un fondo ciego o en canal completo, traspasando por
completo la parte anatómica y dando lugar a un orificio de salida.
De la misma manera que en el orificio cutáneo, los distintos planos atravesados por el
trayecto de las heridas corto-punzantes presentan los correspondientes orificios siempre
orientados en el mismo sentido, lo que permite diferenciar éstas de las heridas punzantes.
Algunas veces el trayecto puede no aparecer como rectilíneo debido a la diferente
elasticidad de los distintos tejidos y a la eventual movilidad de algunos órganos
4.6 PRONÓSTICO.
MEDICINA FORENSE 18
Tales características radican en el orificio de entrada cutáneo, que aparece bajo dos
aspectos distintos. Según el modo como haya entrado el instrumento. Si éste se
introduce con las dos ramas cerradas produce una herida única en forma de ojal o
incluso de rombo, a veces con una melladura en uno o ambos lados, que resultan de
la acción cortante del borde afilado de cada rama de la tijera. Si, por el contrario, se
ha introducido con las ramas abiertas se producen simultáneamente dos heridas en
forma de fisura lineal que dibujan en conjunto una V completa o incompleta, según
que se unan totalmente, o no, en el vértice.
En las extremidades proximales de ambas fisuras, que corresponden a los bordes
cortantes de las ramas, es posible la formación de una pequeña cola. Debe hacerse
constar, sin embargo, la frecuencia con que se producen heridas atípicas, que se
confunden unas veces con heridas punzantes y otras con heridas corto-punzantes
Las heridas por tijeras, pese al frecuente uso que de ellas se hace en la vida ordinaria,
son poco abundantes en la casuística médico legal. Dos excepciones deben señalarse,
el infanticidio y las riñas y agresiones entre gitanos. Es el único caso porque muchos
de ellos se dedican a esquilar animales, lo que les hace llevar consigo ordinariamente
sus tijeras des esquilador, que se han acostumbrado a utilizar como arma agresiva.
MEDICINA FORENSE 19
5.1 MECANISMO DE ACCIÓN
Los instrumentos cortantes y contundentes reúnen la acción contusiva y la
propiamente cortante, predominando una u otra según las características del arma.
Cuanto mayor sea la masa, y por consiguiente el peso, tanto más prepondera la fuerza
viva sobre el filo cortante. Si el arma es muy afilada predomina la acción de diéresis,
pero siempre incrementada en sus efectos por la fuerza viva que resulta del peso del
instrumento y de la fuerza con que es manejado. Con este tipo de arma no suele darse
la acción de deslizamiento.
Los instrumentos contuso-cortantes actuando al golpe, cortan por el filo y provocan
contusión por el peso que poseen.
MEDICINA FORENSE 20
Las heridas producidas por instrumentos cortantes y contundentes, también
llamadas heridas inciso-contusas, reúnen los caracteres de las heridas cortantes a
los producidos por ciertos tipos de armas contundentes, como se desprende de su
mecanismo de acción- Por tanto, sus rasgos esenciales consisten en la existencia
de una diéresis tisular, a la que se une la contusión y la laceración. Una u otras
prevalecerán según el espesor de la hoja y el estado del borde cortante. Pero, en
todo caso, la profundidad de la herida supera sensiblemente a las producidas por
instrumentos cortantes y se da en ella el fenómeno de no respetar, en general, las
partes duras, lo que era una característica típica de las heridas incisas.
Cuando el instrumento está bien afilado las heridas inciso – contusas aparecen
iguales que las heridas de corte, aunque más profundas y llagan a interesar el
esqueleto. Es más corriente, sin embargo, que el filo no sea muy agudo, pues el
arma suele tener un cierto espesor que impide que sea muy afilada; en este caso,
la herida presenta los bordes irregulares y el contorno contundido, como las
heridas contusas.
1. CON LAS HERIDAS INCISAS.- Los rasgos propios de las heridas incisas contusas
que sirven para esta diferenciación son las siguientes:
Carecen generalmente de cola, los bordes de las heridas presentan siempre huellas de
contusión bajo la forma de un borde equimótico y, a veces, de pequeñas irregularidades
de su contorno.
MEDICINA FORENSE 21
En las heridas contusas se observa, a veces, que ciertas partes de tejidos, por su mayor
elasticidad, resisten sin romperse, permaneciendo de manera de pequeños puentes de
unión entre los bordes y paredes de la herida lo cual no se observa nunca en las heridas
producidas por instrumentos cortantes, aunque tengan una acción contusiva sobre –
añadida. En las heridas inciso – contusas se observan vastos colgajos y lesiones de los
huesos, aun cuando irregulares, no lo son tanto como en las heridas producidas por
instrumentos contundentes, los cuales, a su vez, nunca determinan lesiones tan profundas
y al mismo tiempo con cierta irregularidad.
5.3 PRONÓSTICO:
El pronóstico de las heridas inciso – contusas en mucho más grave que el de las cortantes:
1. Su mayor extensión y profundidad, por lo que con frecuencia interesan partes
esqueléticas y también órganos internos.
2. Su mayor facilidad de complicaciones infectivas, análogamente a las heridas
contusas.
Con frecuencia las heridas inciso - contusas son mortales, unas veces por lesionar grandes
vasos produciendo hemorragias masivas, y otras veces por interesar directa o
indirectamente órganos vitales. Si la herida no es mortal puede crear graves secuelas,
como se dijo para las heridas cortantes.
6.1 EVENTUALIDADES:
a) DESCUARTIZAMIENTO
Es la separación de zonas corporales unas de otras. Puede motivarse por
razones pasionales como agresión, pero asimismo, puede motivarse para
posibilitar el ocultamiento de un homicidio.
MEDICINA FORENSE 22
Con motivo de ocultamiento, la finalidad de disminuir el peso para facilitar el
transporte, cremar o solubilizar parcialmente con ácidos los restos, esconder
las piezas, disimular la causa de la muerte o imposibilitar la identificación.
b) DEGUELLO
Es la sección del cuello en su parte anterior o ánterolateral. Generalmente
corresponde a suicidio pero la lesión puede ser imitada en un homicidio; el
accidente es más raro.
En el suicida, la herida es de izquierda a derecha y de arriba abajo en los sujetos
diestros; en el zurdo, es de derecha a izquierda y de arriba hacia abajo. El lugar
de inicio de la herida es más profundo que el de terminación.
Suelen haber las llamadas “heridas preliminares” ó de intenciones previas al
corte definitivo; son casi paralelas a la herida principal.
c) DECAPITACIÓN
Consiste en separar la Cabeza del Tronco.
Puede ser de etiología homicida, suicida, accidental o judicial.
d) EMPALMIENTO
Es la penetración de un agente punzante en la región ano-perineal. Puede
ocurrir por mecanismo activo en una tortura o por mecanismo pasivo en un
accidente al caer la víctima sobre rejas, palos, columnas, etc.
e) HARA – KIRI
Es una herida suicida por sección que se inicia en las paredes abdominales. La
herida puede ser supra o infraumbilical. Las posibles direcciones son 3:
transversal, oblícua y vertical.
Hay consecuencias inmediatas, como evisceración hemorragia, colapso o
schock y consecuencias mediatas, como peritonitis, shock, hemorragia,
arranque de intestinos, etc.
f) SECCIÓN DE VENAS
Es este un tipo de herida cortante típica del suicidio. Fue el método elegido por
el gran poeta romano Petronio. Tiene ciertas zonas de elección: En primer lugar
la región anterior de la muñeca izquierda, seguida por la flexura del codo
izquierdo; estas localizaciones se trasladan al lado derecho de los zurdos. No
están excluidas otras localizaciones, como el hueco poplíteo, si bien son mucho
más raras. En un caso hemos visto estas lesiones en el pliegue inguinal. En
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general las heridas suelen ser un poco profundas, por lo que no llegan a
interesar tendones ni troncos nerviosos.
6.2 CARACTERES ATIPICOS DE LAS HERIDAS
a) En heridas cortantes, puede apreciarse que el inicio de la herida es
característicamente cortante pero el final es de aspecto desgarrado; ello ocurre
por rotura del arma.
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antebrazos y manos, en la palma de la mano al intentar coger el arma agresora o
en la cara al esconder o esquivar el cuello.
En accidentes, el individuo es sorprendido por la lesión y es propio de caídas,
accidentes de tránsito, etc.
b) NUMERO DE HERIDAS
Generalmente un número grande está a favor de una agresión, de un homicidio y
ello es mayor si algunas de las otras lesiones son contusas.
c) EXAMEN DE LA VESTIMENTA
El suicida suele abrirse el vestido para dejar desnuda la zona anatómica elegida
para aplicar el arma suicida.
Los desgarros o tracciones de las ropas suelen estar en relación con una acción
agresora.
MEDICINA FORENSE 25
6.6 POSICIÓN VICTIMA – AGRESOR
a) Tiene gran valor en las heridas punzocortantes, la presencia de la “cola” de
la herida.
b) Se ha de considerar también, el sitio y dirección de la herida, el lugar de los
hechos, la estatura del agresor y de la víctima.
MEDICINA FORENSE 26
CONCLUSIONES:
Hemos llegado a la conclusión sobre las lesiones por arma blanca que en la
práctica, este tipo de lesiones es frecuente causa de evaluaciones periciales que
deben realizarse tanto en sujetos vivos como en cadáveres, siendo estas últimas
el objeto del presente estudio.
MEDICINA FORENSE 27
BIBLIOGRAFÍA:
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