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El Sueño de Un Sueño - José Gaos
El Sueño de Un Sueño - José Gaos
El Sueño de Un Sueño - José Gaos
de un sueno
Jos Gnos
Universidad de Mxico
que no son, en efecto, sino imgenes del fracaso: unas, por ocurren-
tes justo para figurarlo,como la vista cegada por el Sol, el naufragio,
la estatua de pies de barro y sobre todas, caro: otras, porque aun-
que aducidas a otros fines, como el de ponderar la altura, o la
ponderan con no poder alcanzarla, o son de suyo ejemplos tan ilus-
tres de fracaso como las ocurrentes para figurar ste, as la Torre de
B.abe1.
Es que el fracaso, un singular fracaso, es el sentido esencial del
sueo, tema central del poema, y de ste entero.
El alma de la poetisa se suea tan librada de la vinculacin al
cuerpo, que es el dormido, por este mismo dormir del cuerpo, que se
suea elevada a la cima de s misma, o en la parte puramente inte-
lectual de su espritu, o concentrada su vida exclusivamente en su
ms alta actividad intelectual. sta, la ms alta actividad intelec-
tual, tiene por objeto, en virtud de la naturaleza misma de las cosas,
el universo en la unidad de su diversidad, en suma, el objeto tradi-
cional de la filosofa, que no otra que sta es la ms alta actividad
intelectual. Ahora bien, como la vida entera de la poetisa, dormido
su cuerpo, se reduce a la vida de su alma, y esta vida psquica la
suea reducida a la pura actividad intelectual que es por excelencia
la filosfica, no puede menos de pensarse que ya este preludio de la
narracin del sueo delata el ms radical afn vital y personal de la
poetisa: ser puramente intelectual y filsofa. Por lo dems, sin este
afn por raz, no tendra el sueo sentido.
La actividad intelectual as vuelta autrtica procede a ejerci-
tarse primeramente por la va de la intuicin, pues este nombre es el
propio para lo que el poema mismo llama en determinado punto
un "conocer con un acto intuitivo todo lo criado". La intuicin uni-
versal se presenta as como la forma espontnea del ejercicio de la
actividad filosfica,con profunda y certera intuicin, hay que repe-
tir el trmino, as del desarrollo psicolgico del conocimiento
humano como del desenvolvimiento histrico del-filosfico.
Pero la intuicin unitaria fracasa ante la diversidad poco me-
nos que infinita del mundo. Y entonces el intelecto acude, ya
reflexivamente, al discurso, a la otra forma del pensamiento opues-
ta tradicional y cardinalmente a la del pensamiento intuitivo, a la
Prolija Memoria I,1 El sueo de un sueo
cierto sentido estn como soados tambin por la poetisa, sobre todo
si es cierto que la vida entera es sueo.
No, cualesquiera que sean las relaciones extrnsecas,no ya his-
tricamente comprobadas, sino comprobables, entre Soledades y
Sueo, el lugar histrico de ste no lo determina su relacin a aqu-
llas, sino su ndole de poema filosfico en el ms estricto sentido del
trmino, del gnero designado por este trmino. Es en la historia del
poema filosfico del Renacimiento a la del poema filosfico de la
Ilustracin donde hay que localizar el Sueo, como ha visto muy
bien Vossler. Pero ya a ste, al intentar localizar ms precisamente
an el poema, y a pesar de su conocimiento de las literaturas occi-
dentales en general, y muy en especial de las romnicas, y
singularmente de la espaola, no se le viene a las mientes un solo
trmino concreto de comparacin y referencia, una sola obra con
la que emparejarlo por alguna influencia o coincidencia. El poema
de Sor Juana es un astro de oscuros fulgores absolutamente seero
en el firmamento literario de su edad, a tal distancia de todas las
dems estrellas de su tipo, es decir, de todos los poemas filosficos
coetneos, anteriores, simultneos y posteriores, que no es dado
citar ninguno. Pudiera atribuirse tal situacin a la ignorancia de la
autora en materia de literaturas modernas extraas a las ibricas y
a la indigencia de stas en materia de poesa filosfica estrictamen-
te tal, ya que estrictamente tal no es la poesa religiosa, ni siquiera
la mstica, y pudiera ocurrirse buscar los antecedentes del poema
en las literaturas clsicas, hechas inmediatas por el Renacimiento
y bien conocidas de Sor Juana. Y, en efecto, ms antecedentes del
Sueo de sta habra en el de Escipin o el de Macrobio que en nin-
guno de los sueos coetneos en verso o en prosa. Pero la razn
efectiva de la situacin histrica del poema est en la absoluta ori-
ginalidad de ste: es oriundo de la experiencia personal de Sor Juana
tan exclusivamente, es expresin tan fiel de esta experiencia nica,
que no poda menos de resultar tan sin antecedentes, concomitan-
tes y consiguientes, tan incomparable como Sor Juana misma.
La literatura de lengua espaola sera pauprrima en este g-
nero del poema filosfico, si no contara junto con ste. Pero cuenta
con ste, y ste no cuenta en la historia universal de la literatura
Jos Gaos Prolija Memoria I,1