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Historia de Las Historias de La Nación Mexicana Enrique Florescano
Historia de Las Historias de La Nación Mexicana Enrique Florescano
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Durante los dos primeros siglos del gobierno espaol proliferaron diversas interpretaciqnes del pasado, limitadas por una estrecha visin corporativa. Las rdenes mendicantes promovieron un
relato que nanaba su asentamiento en el pas extrao, exaltaba la
labor evangelizadora y elogiaba el ardor religioso de sus miembros. Las ciudades, comenzando por la capital del reino, mimaron a letrados distinguidos, quienes escribieron crnicas
laudatorias del territorio, los monumentos y el talante de los pobladores. Los grupos tnicos, encerrados en los lmites de la Repblica de Indios, elaboraron un relato pueblerino dedicado a
proteger las tierras comunales y la identidad local. Se trata, como
se advierte, de discursos ensimismados que ignoran la memoria
del otro y expresan la profunda divisin que separaba a los pobladores de Nueva Espaa en estamentos, grupos y etnias antagnicos. En estos aos no haba condiciones para imaginar una
historia que comprendiera el conjunto del virreinato.
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Figura 124. Mapa general del virreinato de Nueva Espaa de Jos Anton io de
Alzate, 1772. Fotografa tomada de El territorio mexicano, 1982: 30.
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Figura 126. Mapa general del reino de Nueva Espaa elaborado por
AleJandro de Humboldt.
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HI STO RI A DE l A S HI STO RIAS [) E LA NACI (JN M EXICANA
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Una circunstan cia externa reactiv e l inters por las identidades de la patri a criolla. Entre 17 49 y 1780, algunos de los
autores ms influyentes de la Ilustracin europea (el conde
de Buffon el abate Raynal , Cornelius de Pauw y el historia '
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d o r escocs William Robe rts o n) escribieron pagma s
denigratorias sobre la naturaleza americana y_a~virtieron una
incapacidad natural de los oriundos de Amenca para crear
obras de cultura y ciencia. 8 Los primeros en responder a estos ataques fueron los religiosos y letrados cri~ ~l os qu~. se
haban distinguido por alentar una interpre taC1on pos1t1va
d el pasado mes oa m erica no y por afirmar l~s v irt:u~ e s
creativas de los nacidos en Amrica. As, Juan Jose de Egu1ara
y Eguren respondi a esas invectivas con una Bibliotheca
mexicana (1755), una obra monumental, consagrada a mostrar los mritos de la produccin cientfica y literaria de los
mexicanos desde los tiempos ms . antiguos hasta las primeras dcadas del siglo :xvm .9
Francisco Javier Clavijero es el mayor de los humanistas
ilustrados novohispanos que florecieron en la segunda mitad
del siglo XVJII. Entre sus numerosas contribuciones sobresale
su propuesta para pensar el pasado de su patria des ~e otro
mirador, una idea que se plasm en su Storia antzca del
Messico, publicada en 1780 en Cesena, Italia, durante el amargo
.
.
exilio que comparti con sus compaeros jesuitas .
Contrariamente a la interpretacin cristiana de la h1stona,
canonizada por los cronistas religiosos que le precedieron, la
Historia antigua de Mxico es un relato de hechos humanos
explicados por sus propios condicionamientos .geogrfi~os ,
polticos o sociales. Como dice Luis Villoro , "Abnmos el libro
de Clavijero y, d esde sus primeras pginas, nos encontramos
con una histo ria en la que toda dimensin sobre natural parece
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res ms desamparados y los ideales de autonoma, patriotismo y fervor guadalupano de los criollos. Este movimiento
plural y poderoso, que por primera vez fundi las pulsiones
de ls masas indgenas con las aspiraciones polticas del gru po criollo, encontr en Hidalgo y Morelos su mxima expresin y capacidad de realizacin. 32
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y annimos convertidos en llama revolucionaria, y los dirigentes que abanderaron la ca usa popular son los hroes qu~ .
merecen las loas ms emotivas del cronista.
Con esos hroes y la narracin de sus batallas, triunfos y
derrotas, Bustamante construy un panten patritico, un , ..
mapa heroico y una crnica emotiva de la independencia. Las obras de Bustamante prolongan las ideas indigenistas caras a Servando Teresa de Mier. Exaltan la antigedad azteca y
difunden la tesis de la nacin indgena esclavizada por los
espaoles y luego liberada por los insurgentes, que de esta
manera vienen a ser los herederos de Cuauhtmoc. De mu- .
chas pginas del Cuadro y del Diario brota la imagen de una .. : .
continuidad histrica entre el imperio idealizado de los azte- :
cas y la nacin independiente liberada por los insurgentes. A.
Bustamante se debe el neoaztequismo que prolifer durante ..
la guerra y en los aos que siguieron a la declaracin de in de- .
pendencia. Por iniciativa de Bustamante el Congreso de
Chilpancingo recibi el nombre de Congreso de Anhuac. La
obsesin por restaurar la nacin indgena impuls a Mier y a
Bustamante a proponer, sin xito, que la nueva repblica lle--.
vara el nombre de Anhuac. .
Movidos por esos resortes solicitaron ante el Congreso cam"
biar la bandera trigarante del Plan de Iguala por la que lleva~ ..
ba los colores del reino de Motecuzoma. En varas de sus obras
Bustamante convierte a los antiguos reyes indgenas en ma~
nes, en sombras protectoras de los hroes de la independen'cia. Compone galeras de los antiguos reyes indgenas y las
ofrece como espejo de virtudes de gobernantes, y a travs de :.
esas idealizaciones transforma el Mxico antiguo en una edad .
augusta. El afn por darle a la nacin liberada una imagen
prestigiosa de su pasado llev a Bustamante a escribir sus
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Durante los dos primeros siglos del gobierno espaol proliferaron diversas interpretaci<?nes del pasado, limitadas por una estrecha visin corporativa. Las rdenes mendicantes promovieron un
relato que nanaba su asentamiento en el pas extrao, exaltaba la
labor evangelizadora y elogiaba el ardor religioso de sus miembros. Las ciudades, comenzando por la capital del reino, mimaron a letrados distinguidos, quienes escribieron crnicas
laudatorias del territorio, los monumentos y el talante de los pobladores. Los grupos tnicos, encerrados en los lmites de la Repblica de Indios, elaboraron un relato pueblerino dedicado a
proteger las tienas comunales y la identidad local. Se trata, como
se advierte, de discursos ensimismados que ignoran la memoria
del otro y expresan la profunda divisin que separaba a los pobladores de Nueva &paa en estamentos, grupos y etnias antagnicos. En estos aos no haba condiciones para imaginar una
historia que comprendiera el conjunto del virreinato.
EL PATRI07ISMO CRIOLLO
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Figura 124. Mapa general del virreinato de Nueva Espaa de Jos Anton io de
Alzate, 1772. Fotografa tomada de El territorio mexicano, 1982: 30.
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Fig~ra 126. Mapa general del reino de Nueva Espaa elabo rado por
AleJandro de Humboldt.
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Una circunstancia externa reactiv el inters por las identidades de la patria criolla. Entre 1749 y 1780, al?unos de los
autores ms influyentes de la Ilustracin europea (el conde
de Buffon el abate Raynal, Cornelius de Pauw y el historia ,
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dor escocs William Robertson) escribieron pagma s
denigratorias sobre la naturaleza americana y,a~virtieron una
incapacidad natural de los oriundos de Amenca para crear
obras de cultura y ciencia. 8 Los primeros en responder a estos ataques fueron los religiosos y letrados cri~~los qu~. se
haban distinguido por alentar una interpretaClon ~osttlv a
del pasado mesoamericano y por afirmar l~s vut:u~e s
creativas de los nacidos en Amrica. As,juanjose de Egmara
y Eguren respondi a esas invectivas con una Bibliotheca
mexicana (1755), una obra monumental, consagrada amostrar los mritos de la produccin cientfica y literaria de los
mexicanos desde los tiempos ms antiguos hasta las primeras dcadas del siglo XVIII. 9
Francisco Javier Clavijero es el mayor de los humanistas
ilustrados novohispanos que florecieron en la segunda mitad
del siglo XVIII. Entre sus numerosas contribucio~es sobresale
su propuesta para pensar el pasado de su patna des~e otro
mirador, una idea que se plasm en su Storia antzca del
Messico, publicada en 1780 en Cesena, Italia, durante el amargo
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exilio que comparti con sus compaeros jesuitas.
Contrariamente a la interpretacin cristiana de la htstona,
canonizada por los cronistas religiosos que le precedieron, la
Historia antigua de Mxico es un relato de hechos humanos
explicados por sus propios. cond~cio~amie~tos ?eogrfi~os ,
polticos o sociales. Como d1ce LUis Vtlloro, Abnmos el hbro
de Clavijero y, desde sus primeras pginas, nos encontramos
con una historia en la que toda dimensin sobrenatural parece
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res ms desamparados y los ideales de autonoma, patriotismo y fervor guadalupano de los criollos. Este movimiento
plural y poderoso, que por primera vez fundi las pulsiones
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