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La Edad Media en España

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LA EDAD MEDIA EN ESPAA

Fragmentada
Cesreo Jarabo Jordn
pensahispa@gmail.com
ndice:
CAPTULO I Pgina 2
El Reino Visigodo: Tres siglos de la Historia de Espaa
CAPTULO II Pgina 35
Desde la invasin en 711 hasta el 722 con la batalla de Covadonga
CAPTULO III Pgina 46
Desde Covadonga en 722 hasta la llegada de Alfonso II en 791
CAPTULO IV Pgina 60
El reinado de Alfonso II el Casto (aos 791 a 842)
Captulo V Pgina 69
Desde la muerte de Alfonso II el ao 842 hasta el ao 929, con la proclamacin del
califato de Crdoba por parte de Abderraman III
Captulo VI Pgina 89
Desde el ao 929, con la proclamacin del califato de Crdoba por parte de Abderraman III
hasta la reconquista de Toledo por Alfonso VI el ao 1085
Captulo VII Pgina 113
Desde 1085 con la toma de Toledo por Alfonso VI hasta 1212 en los momentos anteriores a la
batalla de las Navas
Captulo VIII Pgina 139
La Batalla de las Navas de Tolosa (16-7-1212)
Captulo IX Pgina 150
Desde la Batalla de las Navas en 1212 hasta la muerte de Jaime I en 1276
Captulo X Pgina 171
Desde 1276 a la muerte de Jaime I hasta 1327 a la muerte de Jaime II de Aragn
Captulo XI Pgina 187
Desde la muerte de Jaime II de Aragn en 1327 hasta el Compromiso de Caspe el ao 1412
Captulo XII Pgina 213
Desde el Compromiso de Caspe el ao 1412 hasta la muerte Enrique IV en 1474
Captulo XIII Pgina 237

Desde la muerte de Enrique IV en 1474 hasta 1481, a la muerte de Alfonso V de Portugal


Captulo XIV Pgina 254
Desde 1481, a la muerte de Alfonso V de Portugal hasta la toma de Granada el ao 1492

(Primera parte de Historia de la Espaa musulmana)


Este texto no tiene grandes pretensiones; se limita a hacer un viaje, muy por encima, de
la parte que nos interesa de la historia de Espaa.
Para analizar la invasin rabe comenzaremos el estudio de la realidad espaola que dio
lugar a esa situacin haciendo una introduccin a la historia del pueblo espaol
(hispano romano y visigodo), desde la formacin del reino visigodo, obviando, por
motivos del estudio, las etapas anteriores y los motivos que propiciaron la conquista
por parte del pueblo godo, y marcando an ms por encima las invasiones
protagonizadas por los suevos, vndalos y alanos.
Todos eran conocidos en el imperio romano como germnicos, aunque la extraccin de
todos ellos era diversa, y todos eran conocidos como brbaros, significando
originariamente sencillamente extranjero. El tono peyorativo que hoy tiene la
palabra, sin suda fue conseguido por la propia actuacin de los brbaros, que en no
pocas ocasiones eran sencillamente la negacin de la civilizacin.
Roma tema invasiones procedentes de la frontera septentrional del imperio; por ello
Roma dedic grandes esfuerzos a consolidar la frontera, anexionndose las Galias e
iniciando una campaa que, por el asesinato de Julio Csar no pudo dar fin a la
conquista total de Germania. Augusto abandon la campaa, y ello, a la larga,
posibilitara las asonadas de los siglos posteriores.
El ao 409, tras haber atravesado el Rin, llegaron a los Pirineos y entraron en Espaa
tropas brbaras, suevos, vndalos y alanos, encontrando franca la entrada gracias al
apoyo de de Constantino III, emperador ful que se haba adueado de parte de la Galia
y de Hispania.1
Los vndalos procedan de las orillas del Bltico. Los suevos procedan del Danubio y
del Elba, y los alanos procedan del mar Caspio. De entre todos, stos eran los ms
brbaros; adoraban un sable clavado en el suelo y llevaban crneos humanos como
adorno de sus monturas. Todos adoraban a Odn.
Los Vndalos se instalaron en la Btica romana, antigua Turdetania (que comprenda
tambin el norte de frica),, y dieron nombre a la tierra que ocuparon: Vandalusa
(Andaluca); los suevos se instalaron en la zona de Galicia2.
De los Alanos se dice que no conocan la agricultura, y que su vivienda era un carro en
el que recorran grandes distancias aprovechando los pastos para alimentar a sus
caballos.3
El pueblo godo tiene su origen histrico en las tierras del Sur de lo que hoy es Suecia;
posiblemente en Gtaland, aunque historiadores del siglo XXI afirman que no eran una
1

La Espaa Visigoda. Roger Collins


Historia General de Espaa. Antonio de Crcer de Montalbn. Pag. 296
3
Historia General de Espaa. Antonio de Crcer de Montalbn Pag. 297
2

raza nrdica, sino un conglomerado de razas que se llev a efecto en los Balcanes4. Su
lengua, hasta donde se sabe de ella, entronca con el germano antiguo y posiblemente
tuviera la misma raz. No se sabe con certeza en qu poca los godos se diferenciaron de
otros pueblos nrdicos vecinos de ellos, tales como gpidos, jutos, etc. Por ello no es
posible trazar con total exactitud las races de los godos hasta su primer origen.
/
En cuanto a las costumbres, a los modos de los godos, en el transcurso de los aos, con
el contacto permanente con Roma, con el trato que tenan con los prisioneros romanos
que tomaban, fueron suavizndose y civilizndose, llegando a influir en ellos la cultura
greco-latina y el cristianismo.
En el transcurso de los aos acabaran adoptaron el cristianismo, en tiempos de
Constantino II, y en 370, empujados por la invasin de los Hunos, abandonaron sus
tierras de los Balcanes y se dirigieron a Occidente. Fue entonces cuando el obispo godo
Ulpilas convirti a los godos al arrianismo, hereja que profesaba el emperador Valente.5
Los godos, en este tiempo haban pasado de ser meros guerreros, a cultivar la tierra, a
explotar la minera, y a comerciar con el Imperio. Esta actividad les llevara a la
bsqueda de territorio donde asentarse, que toma cuerpo con el emperador Aureliano,
quien, como ya hemos sealado, en 270 reconoce los asentamientos godos en Dacia
como los de un pueblo amigo y aliado. Condicin que veran mejorada en 332 con el
emperador Constantino, que los convirti en federados. Estas eran concesiones que
Roma haca por falta de capacidad para controlar la frontera, y este extremo no pasaba
desapercibido a quienes al final acabaran invadiendo el Imperio.
El problema se agudiz cuando en 376, y como consecuencia del empuje de los Hunos,
Valente les permiti asentarse en Tracia, dejando desguarnecida la frontera del Danubio,
y dos aos ms tarde se hacan con los Balcanes. Finalmente Teodosio los vencera y los
asentara en Tracia y Mesia, hasta que muri Teodosio en 390, momento en que
invadieron Grecia.
/
Por su parte, tras el saco de Roma, los godos pretendan continuar su conquista del
Imperio por el norte de frica, pero su inexperiencia marinera les forz a continuar por
tierra sus conquistas. Comandados por Ataulfo continuaron hasta conquistar Espaa. El
reino visigodo, as, dur tres siglos.
Pero los visigodos (godos del Oeste), como los ostrogodos (godos del este), ya venan
relativamente cristianizados; eran arrianos. El arrianismo, desviacin propagada por
Arrio que negaba la Santsima Trinidad, fue condenado en el primer concilio de Nicea,
celebrado el ao 325, y mantendra una lucha ms intensa que menos, con el
catolicismo. De especial importancia es este concilio en la Iglesia; en el mismo se
proclam el Credo que hoy mismo rezamos. Los visigodos permanecieron en el
arrianismo hasta la celebracin del tercer Concilio de Toledo, celebrado el ao 589.
4
5

La Espaa Visigoda. Roger Collins


Historia General de Espaa. Antonio de Crcer de Montalbn. Pag. 299

Si es cierto que los godos invadieron el Imperio Romano, no es menos cierto que a su
vez se vieron conquistados por una cultura, la romana, que era muy superior a la por
ellos aportada. Respetaron las instituciones hasta el extremo que el mismo Braulio,
obispo de Zaragoza, autor del siglo VI, en la vida de San Milln de la Cogolla, hace
mencin de senadores y curiales de Espaa en aquel tiempo.6
/
Esto suceda el ao 413 (451 de la era Hispnica) con Ataulfo (Atta, padre; Hulfe,
socorro), que en el saqueo de Roma, de donde parte el tesoro de los visigodos7, y que en
principio es la base de la corona, haba secuestrado a Gala Placidia, hermana del
emperador Honorio, con quin cas. Parece que Gala Placidia influy decididamente en
Ataulfo, quin combati y venci a los vndalos y restableci el orden romano en sus
dominios, pero su postura pro-romana, que le llev a mantener todo el aparato del
estado romano, ocasion su asesinato y el de sus tres hijos, el ao 415, por parte de
Sigerico, con sentimientos anti-romanos, Pero Sigerico dur 7 das como rey, ya que
fue asesinado. Haba tomado forma el modo visigodo de cambiar de rey. Por su parte,
Gala Placidia casara con Constancio, general de Honorio, de quin engendrara a
Valentiniano III y sera emperatriz regente durante su minoridad.8
Aparte las ciudades ya creadas y habitadas por la ciudadana romana, que contaba con
poblaciones como Tarraco, Mrida, Sevilla, Cordoba, Lugo, Astorga, o Pamplona, por
citar algunas, la mayor parte de la poblacin vivira en el medio rural, bien en vici
(aldeas pequeas), fundos seoriales, pequeas agrupaciones urbanas fortificadas y
emplazamientos castreos en las zonas de montaa, estos especialmente ubicados en la
cornisa cantbrica, en los territorios habitados por astures, cntabros, vrdulos, caristios
y autrigones, la zona menos romanizada, que ocupaba un territorio equivalente a las
actuales provincias de Asturias, Cantabria, Guipzcoa, Vizcaya y lava, siendo que
Asturias no conoci la organizacin municipal romana9. El hbitat sera de tipo disperso
y con poca densidad. La poblacin se concentrara preferentemente en las cercanas de
las vas de comunicacin y en las vegas fluviales de los ros.
/
En ese sentido, las condiciones esenciales en que se desarroll el comercio exterior de la
Espaa visigoda fueron las mismas que haban caracterizado su desarrollo durante el
Bajo Imperio. Las principales rutas comerciales fueron las que unan los puertos
mediterrneos de la pennsula con Cartago y otros puntos del frica del Norte, as como
las que ponan en comunicacin con Italia, Grecia, Asia Menor y Septimania. Tambin
se mantuvieron activas las rutas que unan Cdiz con ciertos puertos atlnticos de las
Islas Britnicas (de donde se importaba, sobre todo, estao) y de las Galias.10
Las mismas condiciones comerciales que durante el imperio, pero con un evidente
enrarecimiento del comercio interior y debilitamiento del exterior, derivados ambos
factores de la falta de demanda y de la baja produccin. Tambin se produjo un
descenso del nivel de consumo. La polarizacin social hizo que la mayora de la
6

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la


muerte de Fernando VII. Modesto Lafuente-Juan Valera
7
http://redul.wikispaces.com/Visigodos+%28tema%29
8
Otra Historia de Catalua. Marcelo Capdeferro. Pag. 23
9
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 52
10
El Mundo perdido de los visigodos. Gabriel Garca.
http://germanicus.com.ar/Visigodos/cuarta_parte.htm

poblacin, que se mova en niveles cercanos a la miseria, redujese su demanda de


productos, mientras que la minora opulenta, mediante la tesaurizacin, apenas
presionase al mercado. Al tiempo, se produjo una atomizacin de la actividad
econmica en mltiples clulas prcticamente independientes, lo que impidi la
conformacin de un mercado integrado.11
/
Entre tanto, en este 415 del asesinato de Ataulfo por Sigerico, los alanos expulsaron a
los vndalos, que debieron salir de la btica para retirarse a Galicia, cerca de los
suevos.
Walia sucedi a Sigerico cuando ste fue asesinado en el sptimo da de su reinado, y
se esforz en luchar contra suevos, vndalos y alanos, con gran xito, y desestimando
luchar ms contra los romanos, porque por qu perder un tiempo precioso
combatiendo con semejantes hombres, cuando es ms glorioso despreciarlos que
vencerlos?12. El hecho es que Roma le concedi territorios en Aquitania como
compensacin por su lucha contra Suevos, Vndalos y Alanos, y su presencia en
Hispania era de carcter menor, limitada a unidades militares. El pueblo visigodo se
hallaba en la Provenza, y sin dominio sobre las grandes ciudades.
Por su parte, el emperador Honorio segua teniendo como propios los xitos de Walia, a
quin perdonaba los constantes excesos que ejerca sobre la poblacin galo-romana,
motivado principalmente por el desorden reinante en su corte, que le haca estar ms
pendiente de su propia supervivencia que de cualquier otra cuestin. El ao 420 muri
Walia, habiendo constituido un imperio que iba desde Tolosa al Atlntico, y es que el
sentimiento de unidad, ya presente durante el Imperio Romano, no dej de estar
presente durante la Edad Media.
/
Como en otras ocasiones en la Historia, fue el enemigo interior quin acab con el
Imperio. Las ciudades eran abandonadas por los ejrcitos romanos, y sistemticamente
ocupadas por los visigodos, que eran bien recibidos por el pueblo, harto de la
corrupcin que haba acabado con el Imperio.
Pero por el contrario, algunos aspectos de Roma haban calado ya en los visigodos; as,
Teodoredo (Teodorico I), dict las conocidas Leyes de Teodorico, cuyo texto no se ha
conservado, pero que los historiadores deducen que deba tratar cuestiones de reparto
de tierras, as como el aposentamiento militar, segn el cual, el husped militar reciba
una tercera parte de la finca en que se instalaba. Derecho de conquista, s, pero ms
suave que el que tres siglos despus sera aplicado por los nuevos invasores, que por
cierto, empezaron siendo bastante ms ventajosas para los invadidos que las aplicadas
por los visigodos.
Entre tanto, el reino de Tolosa se consolidaba, con un ncleo de nobles coordinados con
el rey. Mientras, en el este, Atila constitua un vasto imperio que conforme dice
Jornandes13, procedan de Tartaria Iban vestidos de pieles y cueros, beban la sangre
y el orn de los caballos y coman carne cruda.
/
11

Economa y sociedad en la Espaa Visigoda. https://sites.google.com/site/historiadeespaa/otrosmateriales/esquemas/economia-y-sociedad-en-la-espana-visigoda


12
Historia General de Espaa. Antonio de Crcer de Montalbn. Pag. 302
13
Historia General de Espaa. Antonio de Crcer de Montalbn. Pag. 313

En 455 era asesinado el emperador Valentinano en medio del caldo de intrigas en que
nadaba la corte imperial (en las que Valentiniano mand asesinar a Aecio), y le sigui
un periodo de nuevas intrigas para acceder al cargo donde los visigodos apoyaban a
Avito frente a Petronio Mximo, y se produjo una guerra entre godos y vndalos en
Italia, de la que salieron vencedores los godos. Como consecuencia, los suevos
volvieron a la carga, saquearon Roma durante catorce das y tomaron parte de la
cartaginense y de la tarraconense, lo que ocasion una campaa de Teodorico II que le
llev al apresamiento de Rekiario, rey de los suevos, y al control del reino suevo, que
dej de tener presencia destacable.
/
Durante el reinado de Eurico caa, el ao 476, el ltimo emperador romano (que por
cierto haba sido impuesto por Orestes, secretario de Atila), Rmulo Augstulo, nombre
que si le haba sido puesto por su padre, fue recogido por el pueblo para un emperador
que haca gala del sobrenombre. Por esta poca los visigodos ya tenan asentamientos
en Mrida y en el valle del Guadalquivir.
Por su parte Clodoveo, rey de de los francos, conspiraba para cortar el creciente poder
de los visigodos, si bien se vea frenado por Teodorico, rey de los ostrogodos de Italia.
Eurico mora en 484, sucedindole su hijo Alarico II, que perfeccion la tarea de
gobierno de su padre, consolidando la estructura gubernativa del Reino de Tolosa, y
poseyendo ciudades en Hispania, entre las que destaca Pamplona, desde donde se
combata, con tropas auxiliares vasconas, las rebeliones de los cntabros y los astures.
En esta marcha, se asentaron a ambas orillas del Duero, desde Soria hasta ms all de
Toro (Villa gothorum?) y desde la cordillera cantbrica hasta la central, llegando a
controlar los territorios de Burgos, Palencia, Valladolid, Soria, Segovia, vila,
Guadalajara, Madrid y Toledo.14El momento cumbre de tal proceso lo constituy la
promulgacin de la Lex Romana Visigotorum, un nuevo texto legal compilado sobre la
base del cdigo de Eurico.
/
Su asentamiento, dado el escaso nmero que eran no pudo ser hegemnico ni
homogneo, dndose una mayor densidad de asentamientos en la Cartaginense, en
concreto en la Meseta Norte, en un tringulo delimitado aproximadamente por las
ciudades de Palencia, Sigenza y Toledo. Le sigue en importancia la Tarraconense,
desde la costa hasta la tierra fronteriza con los vascones y cntabros, Vardulia,
ocupadas por los bagaudas. Segn se remontaba el curso del Ebro la densidad de
poblacin visigoda disminua. Y por supuesto, en la Septimania (o Galia Gtica), de la
que los francos no llegaron a echarlos. La Btica, la Lusitania y la Cartaginense Sur
eran romanas, mientras que los suevos se mantenan en Galicia, mezclados con la
poblacin hispano romana.
Se respetaron las instituciones; los visigodos se regan por sus leyes, y los hispanoromanos por las suyas. En el seno de la sociedad hispanogoda, la divisin que de forma
ms clara y trascendente divida a las personas, es la que lo haca en nobles, libres,
semilibres y esclavos. En nobles, se integraba tanto la antigua nobleza goda,
perteneciente a los linajes de ms tradicin, como aquellos que se haban ennoblecido
por su vinculacin, mediante un juramento de fidelidad, al rey o a algn noble muy
importante, es decir, los fideles o gardingos (los miembros del comitatus) del rey o de
los nobles ms importantes; en general todos ellos reciban la denominacin de
14

Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 52

seniores. A su lado, la antigua nobleza hispanorromana se haba integrado


perfectamente en el seno de la nobleza de la sociedad hispanogoda. Estaba constituida,
esencialmente, por grandes terratenientes que pertenecan a la clase de los senatores
que, en ocasiones, descendan de antiguos comerciantes enriquecidos, transformados en
propietarios agrcolas ante el cariz que empez a tomar la vida comercial a partir de la
crisis del siglo III. La mayor parte estaban vinculados o lo haban estado a las
curias municipales y al gobierno provincial. Los dos sectores de la nobleza de la
sociedad espaola de los siglos V y siguientes la goda y la romana no tardaron en
mezclarse, aun antes de que ello fuese admisible desde el punto de vista legal, hasta
convertirse en un solo cuerpo social que desempeaba las funciones que, aos atrs,
haban desempeado cada uno de sus componentes por separado.15
/
A Teudiselo sucedi Agila (549-555), que fue nombrado arbitrariamente por los
asesinos de aquel. Tuvo serios enfrentamientos en Crdoba, ocasionados por partidarios
de Theudiselo, y all profan la tumba de San Acisclo, contra la tradicin arriana de ser
respetuosos en estas cuestiones16, lo que comport nuevas sublevaciones en todo el
reino, principalmente en el norte, astures, cntabros y vascones. Se produjo una guerra
civil en la que Atanagildo era el cabecilla de la sublevacin. Agila sera asesinado por
sus parciales, que aclamaron como rey a Atanagildo17 (555-567) que se haba sublevado
contando con el apoyo de Bizancio, cuyo emperador, Justiniano, ansiaba la
reconstruccin del cado Imperio Romano de Occidente, y que obtuvo a cambio la
cesin de una buena franja del litoral peninsular, desde Denia a Gibraltar, donde se
establecera la provincia bizantina de Espaa (555-625), Bizancio ya tena las islas del
Mediterrneo. Atanagildo traslad la corte a Toledo, donde haba mayor concentracin
de visigodos y se enfrent a Bizancio sin consecuencias, al tiempo que casaba a sus dos
hijas, Brunequilda y Galswinda con Sigiberto y Chilperico, prncipes galos que
buscaban reforzar su posicin18. Por su parte, tambin Atanagildo reforzaba su posicin
frente a los galos y sobre todo frente a los bizantinos. A su muerte, curiosamente
acaecida por causas naturales, en puridad, el reino hispano visigodo contaba con 60
aos de vida.
Durante su reinado se consolid el catolicismo en Galicia. A su muerte fue sustituido
por Liuva, que se instal en Narbona para controlar a los francos, pero como esta
decisin no era del agrado de los nobles, puso a su hermano Leovigildo al frente del
reino en Espaa. El ao 572, finalmente, Leovigildo asumira el control total del reino y
acabara expulsando a los funcionarios imperiales. Con l se produce el fin del Imperio
Romano en Espaa.19
En esta poca aparecen las primeras referencias al Condado del Roselln cuya
jurisdiccin corresponda, muy probablemente, al de la antigua ciudad iberorromana de
Ruscino y con el obispado de Elna. Este primitivo condado, que comprenda las

15

El colapso econmico del mundo romano. Gabriel Garca Volt


http://germanicus.com.ar/Visigodos/cuarta_parte.htm
16
17

http://es.wikipedia.org/wiki/Agila_I
http://www.artehistoria.jcyl.es/historia/personajes/4820.htm

18

LA MONARQUA VISIGODA Y SU POLTICA MATRIMONIAL: EL REINO VISIGODO DE TOLEDO. Mara Rosario


VALVERDE CASTRO. http://www.toletumvisigodo.eu/upload/novedades/16_6235-21651-1-pb.pdf
19

Javier Arocena. http://vascon.galeon.com/

comarcas histricas de Plana del Roselln, Conflent y Vallespir, lo cre el rey visigodo
Liuva I en el ao 571.20
El rey Leovigildo (565-586) es el verdadero creador del Estado hispano-godo y, por
ende, de la nacionalidad hispnica misma: Hispania, reino, entidad poltica
independiente, suceda a la antigua provincia sujeta al poder de Roma. Primeramente,
desde su gobierno de Toledo, a salvo de la amenaza de francos y de bizantinos, intent
con xito someter a la autoridad central la mayor parte del territorio peninsular en un
momento crtico de fragmentacin poltico-territorial, As, tras consolidar el poder real,
derrot a los suevos del noroeste, que eran catlicos, incorporando su reino y redujo a
cntabros y vascones, alzados contra su autoridad. Desde su coronacin tuvo al menos
una importante campaa militar anual, en cada una de las cuales someti a cntabros,
astures, suevos, sappos, bizantinos hasta que en 570 tuvo unificado el reino salvo una
franja mediterrnea ocupada por Bizancio. No obstante, los conflictos con astures,
cntabros y vascones seran un problema enquistado hasta la misma desaparicin del
reino.
/
Leovigildo retom Mrida en 582 y en 583 Sevilla y Crdoba. A principios de 584
acababa la guerra con clara victoria de Leovigildo, que continu la guerra contra los
suevos.
Y es que en aras de la religin, Hermenegildo pidi y consigui ayuda del reino suevo,
pero la ayuda lleg tarde, cuando ya estaba prisionero. En 584, tras un pacto entre
Leovigildo y Bizancio, haba sido vencido Hermenegildo, que tras negarse a abrazar el
arrianismo fue degollado por el duque Sisberto en Tarragona el 13 de Abril de 585. En
1585 sera canonizado.21
Aprovechando las circunstancias, los francos invadieron Septimania, pero fueron
rechazados por Recaredo.
Tiernas son las cartas que padre e hijo se remitieron. El padre, reprochando
cariosamente que el hijo abandonase el arrianismo, y el hijo aduciendo que es sumiso
a su padre, pero que est presto a derramar hasta la ltima gota de su sangre por la
nica religin verdadera.22
/
El tercer Concilio de Toledo tuvo especial significado en la concepcin de la unidad
nacional de Espaa, y a toda la catolicidad, siendo el complemento perfecto del concilio
de Nicea23. Fueron congregados hasta el nmero de sesenta y dos prelados y cinco
metropolitanos24 bajo el magisterio del obispo hispalense Leandro. La fe era el vnculo
20

http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=30589261

21

http://es.wikipedia.org/wiki/Hermenegildo
Ver transcripcin completa de las cartas en Historia General de Espaa. Antonio de Crcer de
Montalbn. Pag. 336-337
23
Mi parecer es que debe guardarse todo lo establecido antiguamente en el concilio Niceno. Concilio
primero de Toledo, celebrado en tiempo de los emperadores Arcadio y Honorio, el da 7 de septiembre,
en el consulado de Estilicn, era 435 con asistencia de diecinueve obispos
http://www.filosofia.org/cod/c0397t01.htm
22

24

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera

esencial de los pueblos de Espaa, y la historia nos ha demostrado que esa misma fe es
la que posteriormente propici la Reconquista y la formacin de la Hispanidad, y fue, en
definitiva, un reconocimiento por parte de la minora visigoda, de la fe defendida por la
inmensa mayora del pueblo espaol. La conversin al catolicismo de la clase dirigente
visigoda signific la eliminacin de las diferencias existentes entre la clase dirigente y
el pueblo, y quienes perseveraron en el arrianismo fueron, al final, quienes vendieron
Espaa al dominio musulmn.
El Concilio puso orden en la Iglesia, prohibiendo usos poco acordes con el espritu
cristiano; regulaba la vida de matrimonio de los clrigos, a quienes les permita infligir
castigos a su esposa, y prohiba que quin despus del bautismo accediese a la milicia
fuese admitido al diaconado.
Llenos estn los concilios de los primeros siglos de la Iglesia espaola de disposiciones
acerca del matrimonio de la continencia de los clrigos. Tres disposiciones dedic
esta materia el concilio de Gerona de 517.25 Y los dems concilios provinciales dedican
la misma atencin al asunto. En concreto en el segundo de Toledo, en 527, se
exigi expresamente los jvenes el celibatismo como condicin precisa para recibir el
subdiaconado.
/
En lo militar Recaredo debi enfrentarse a los francos, que atacaron Septimania, que fue
genialmente defendida por el general Claudio, quin asest una terrible derrota a los
francos en Carcasona. Dice san Isidoro que los combatientes espaoles no pasaban de
trescientos26, y se enfrentaron a un ejrcito de 70.000 francos. Esta batalla fue cantada
como en su momento fue la de los Campos Catalunicos, y segn el cronista Juan de
Biclaro esto pudo ocurrir gracias a la misericordia de Dios y a la fe catlica que
Recaredo y los godos haban adoptado27. Por su parte, Gregorio de Tours, historiador
franco la relata indicando que los francos tuvieron 5000 muertos y mil cayeron
prisioneros28. La agresin franca estaba encaminada a desalojar a los godos de la
Narbonense.
En el terreno de la unidad nacional, dict muchas leyes que mand fuesen obligatorias
indistintamente para los pueblos, echando de este modo los cimientos de la unidad
poltica sobre la base de la unidad religiosa.29
Era Recaredo, dice San Isidoro, de un natural amable, pacfico y bondadoso, y tal el
imperio de su dulzura sobre los corazones, que sus mismos enemigos no podan resistir
al atractivo que los arrastraba hacia l, liberal hasta el extremo.30
El binomio Leovigildo-Recaredo se caracteriz por los esfuerzos del poder monrquico
por mantener o crear un Estado centralizado, con una administracin pblica de
tradicin tardorromana justinianea, no totalmente en manos de la potente nobleza
25

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
26
Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
27
El Concepto de Espaa en la Historiografa Visigoda y Asturiana. Alexander Pierre Bronisch
28
Entre Vouille y Guadalete. Jos Orlandis Rovira. Revista de H Militar. 2001
29
Entre Vouille y Guadalete. Jos Orlandis Rovira. Revista de H Militar. 2001
30
Entre Vouille y Guadalete. Jos Orlandis Rovira. Revista de H Militar. 2001

terrateniente hispanovisigoda, para lo que era necesario lograr la mxima unidad


jurdica e ideolgica de la sociedad hispanovisigoda, realzando el vinculo personal de
sbdito frente a los lazos de dependencia personal de tipo clientelar y protofeudal.31 El
Cdigo revisado de Leovigildo sera el cuerpo legal desarrollado en este sentido, tanto
por l como por Recaredo.
A la muerte de Recaredo quedaba una Espaa unificada, poderosa y temida que segua
teniendo fsicamente presente, en Cartagena, al imperio bizantino, que coincidiendo con
la celebracin del III Concilio de Toledo reforzaba las defensas y dejaba en entredicho
la afirmacin en que justificaba su presencia en Espaa: La defensa de la fe catlica
Y se hablaba de Espaa como patria, lo que posteriormente posibilit que, tras la
asonada rabe, se hablase de Reconquista.
/
San Leandro y San Isidoro eran hermanos y en ellos conflua la herencia visigoda de su
madre y la hispano romana de su padre. San Leandro, que en Constantinopla se hizo
amigo del que posteriormente sera San Gregorio Magno, tuvo parte en la conversin de
San Hermenegildo. Tambin tuvo que ver en la demanda de ayuda que San
Hermenegildo hizo a Constantinopla. Este hecho estuvo a punto de costarle la cabeza,
pero Leovigildo se limit a desterrarlo de Sevilla, si bien al final le levant la sancin y
le encarg la atencin de su hijo Recaredo. San Leandro muri en 596, y le sucedi en
la sede apostlica su hermano San Isidoro, que volc toda su sabidura en conformar la
unin hispano romana visigoda dentro del concepto de romanidad. Mora en 634.
San Isidoro desarroll la conformacin cultural de Espaa, desarrollando escuelas en los
principales ncleos de poblacin. Gran estudioso, dot de reglas a los monasterios y
abord su obra magna: Las etimologas, recogiendo todos los conocimientos humanos.
Su obra fue esencial en la Edad Media, habiendo implantado en Espaa un nivel cultural
que contrastaba con la barbarie europea.
El IV Concilio de Toledo impone una sentencia digna de ser hoy recordada: En cuanto
a los reyes de las edades futuras, promulgamos en toda verdad esta sentencia: Si alguno
de ellos, con menosprecio de las leyes, con orgulloso despotismo, cegado por el fausto
real, hace pesar sobre los pueblos una dominacin cruel, para saciar su ambicin, su
avaricia o sus apetitos, sea anatemizado en nombre de Jesucristo, sea separado de Dios
por su santo juicio.32
En la prctica, el concilio era una asamblea legislativa en la que el ejecutivo no tena
ms voz que la presentacin del Concilio, a cuyas resoluciones deba someterse.
En 636 subi al trono Chintila, en cuyo reinado, que dur tres aos, se convocaron dos
nuevos concilios en Toledo que siguieron conformando la estructura de la monarqua.
En ellos se regulaba por primera vez la sucesin al trono, cuyo titular deba ser de la
alta nobleza visigoda, y se marcaban nuevas normas contra los hebreos.
/
31
32

http://www.artehistoria.jcyl.es/historia/contextos/786.htm
Historia General de Espaa. Antonio de Crcer de Montalbn. Pag 354

10

A pesar de los defectos de estilo y de forma naturales y casi indispensables en la poca


de su redaccin, apenas se hallar ya quien dude haber sido el Fuero Juzgo el cdigo
legislativo ms ordenado, ms completo, ms moral y ms filosfico de cuantos en
aquella edad se formaron, y muy superior a todos los cdigos llamados brbaros, como
era superior la sociedad hispano-goda a todas las que nacieron de los pueblos
septentrionales.33 Un hecho importante es la inexistencia de dependencia seorial, como
existi en el feudalismo europeo. En Espaa los siervos podan cambiar de seor,
siempre que devolvieran al patrono lo que de l hubieran recibido, y al siervo no se le
poda matar ni mutilar, y se respetaban los derechos que haban sido aceptados34.
Determinaba la igualdad ante la ley; la intromisin de algn poderoso era causa para
que el fallo favoreciese a la parte contraria; la proteccin de la familia, de la agricultura,
el derecho de propiedad estaban fuertemente asentados en el Fuero Juzgo No
obstante, qued evidenciado que algo fallaba cuando para deponer a un rey tirano era
necesario asesinarlo.
Lo cierto es que Chindasvinto reorden el estado en base a la distribucin territorial
romana, alcanzando unos niveles, si no similares a los de Roma, s mucho ms
desarrollados que lo que hasta entonces haban sido en el reino visigodo.
Es el caso que convoc el VIII Concilio de Toledo en 653, en el cual amnistiaba a todos
los perseguidos por su padre, pero no les devolva lo que les haba quitado, que quedaba
bajo el poder real. Tambin se convino que el rey sera elegido por la nobleza y la
iglesia en el mismo sitio donde muriese el rey anterior35.
En este concilio, al que por primera vez asistieron miembros de la nobleza36, se abri del
siguiente modo: Recesvinto rey, a los reverendsimos padres residentes en este santo
snodo... Os encargo que juzguis todas las quejas que se os presenten, con el rigor de la
justicia, pero templado con la misericordia. En las leyes os doy mi consentimiento para
que las ordenis, corrigiendo las malas, omitiendo las superfluas y declarando los
cnones oscuros dudosos... Y a vosotros, varones ilustres, jefes del oficio palatino,
distinguidos por vuestra nobleza, rectores de los pueblos por vuestra experiencia y
equidad, mis fieles compaeros en el gobierno, por cuyas manos se administra la
justicia... os encargo por la fe que he protestado a la venerable congregacin de estos
santos padres, que no os separis de lo que ellos determinen, sabiendo que si cumpls
estos mis deseos saludables agradaris a Dios, y aprobando yo vuestros decretos
cumplir tambin la voluntad divina. Y hablando ahora con todos en comn, tanto con
los ministros del altar, como con los asistentes elegidos del aula regia, os prometo que
cuanto determinis y ejecutis con mi consentimiento lo ratificar con el favor de Dios,
y lo sostendr con toda mi soberana voluntad.37
33

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
34
El depanimento que es fecho de las tierras et de los montes entre los godos y los romanos, eu ninguna
manera non debe seer quebrantado, pues que pudiere seer probado: nin los romanos (as llamaban ellos
los espaoles) non deben tomar, nin deben demandar nada de las dos partes de los godos; nin los godos de
la tercia parte de los romanos, si non quando los nos diremos. Fuero Juzgo, lib. X, tit. I, 1. 8.
35

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
36
Asistieron al concilio VIII de Toledo 17 palatinos y condes, y 52 obispos: 15 nobles y 35 obispos al
XII : hallbanse en el XIII 26 proceres y 48 prelados: en el XV 16 nobles y 77 clrigos: 16 grandes y 61
obispos y 5 abades en el XVI. As respectivamente en todos
37
VIII Concilio de Toledo

11

/
A Wamba le sustituy Ervigio, descendiente de Chindasvinto y autor de la conjura junto
al obispo de Toledo, Julin, y sospechoso de haber posibilitado el intento de invasin
musulmana. En el concilio que convoc (el XII de Toledo) se dedic a devolver los
privilegios que Wamba haba recortado a los nobles, en concreto las obligaciones
militares impuestas a los nobles. Este concilio, dirigido por el obispo Julin, judo de
raza38, se fortaleci la ley antijuda, no sin antes conceder inusitados privilegios a los
judos realmente convertidos, a quienes da ttulo nobiliario y los exime de capitacin.
En el XIII, del ao 683, amnisti a Paulo y los cmplices de la sublevacin de la
Narbonense contra Wamba. Y tambin en este concilio se marc el miedo del rey a
posibles represalias por su actuacin, ya que se sealaba de forma muy especial en la
redaccin del mismo la voluntad de proteger a su familia, en concreto a su mujer, de la
que para el caso se cita el nombre, y la proteccin de sus hijos,
quedando sealado que nadie podra abiertamente o en secreto intentar matarlos,
enviarlos al exilio, tonsurarlos o privarlos de sus propiedades. Las reinas, sus hijas y sus
nueras no podran ser obligadas a entrar en la vida monstica tras la muerte del rey.
Todas estas actuaciones o intenciones quedaron prohibidas por los obispos so pena de
anatema eterno y condena imparcial en la otra vida39, as como que ningunopor
estratagema urdida por el rey o por instigacin de otra potestadsea privado del
honor En este Concilio se asimil a los sacerdotes con los gardingos y con los
primates de palacio. Marcaba, en fin, seguridades para el rey y para su familia40
En 687 le sucedi en vida su yerno Egica, sobrino de Wamba, que procur restablecer el
derecho de Recesvinto y convoc el XV Concilio de Toledo el 11 de Mayo de 688, el
cual puede decirse que no tuvo ms objeto que resolver una grave duda y escrpulo que
traa al rey desasosegado. Era el caso que al desposarse con Cixilona, la hija de Ervigio,
haba hecho juramento de amparar en todo a la familia de su suegro, y cuando recibi la
corona haba jurado hacer justicia por igual a todos sus sbditos. El Concilio respondi
que el primer juramento, el de proteger a la familia de su predecesor, no obligaba sino
en cuanto no fuese contrario a la justicia que deba a todos sus sbditos. 41, por lo que
en el canon IX justificaron tambin que el nuevo monarca repudiara a la hija de su
predecesor, con la cual se haba unido en matrimonio como parte de las medidas
adoptadas para asegurar su propia sucesin. La reina Liuvigoto, tras ser repudiada, fue
sometida a reclusin en un monasterio junto con sus hijas y a su familia se la priv de
las posesiones que haba adquirido injustamente.42
Otro asunto relevante que trat el XVI Concilio del ao 693 fue el de la sodoma; el
castigo que se impona a todo clrigo o laico sodomita era ser azotado, decalvado,
castrado y desterrado.43 Tambin se anatematizaba el suicidio. Todo, clara muestra de la
depravacin en que estaba sumido el reino.
/
38

La Espaa Visigoda. Roger Collins. Pag. 103


La Espaa Visigoda. Roger Collins. Pag. 104
40
El colapso econmico del mundo romano. Gabriel Garca Volt
http://germanicus.com.ar/Visigodos/cuarta_parte.htm
41
Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
42
La Espaa Visigoda. Roger Collins. Pag. 106
43
El Mundo perdido de los visigodos. Gabriel Garca.
http://germanicus.com.ar/Visigodos/cuarta_parte.htm
39

12

Egica asoci al trono a su hijo Witiza, que sera rey en solitario del ao 702 al 709.
En estas fechas, segn la crnica de Juan de Vclaro, una flota de Constantinopla intent
reconquistar posiciones en Espaa; no lo consigui, pero s import la peste, que
rpdamente se extendi por Espaa, y con especial virulencia en Toledo, de donde
parti la corte el ao 701.44
Witiza organiz al estilo de los invasores que estaban en puertas un harn, dando
libertad para que todos hiciesen lo propio y promulgando que el clero tambin lo
hiciese, as como negando obediencia al sumo Pontfice. Convoc el XVIII Concilio,
que nada tiene que ver con la doctrina y si contra la doctrina, ya que se dictaron leyes a
favor de la poligamia y el concubinato y del matrimonio de los clrigos.45 Pero de este
concilio no se conservan las actas
Por otra parte, Witiza, previendo conspiraciones, persigui a los descendientes de
Chindasvinto, que estaban al servicio de la corona, matando con su propia mano a
Favila, padre de D. Pelayo, que huy a sus estados, en Vizcaya, y de los que Witiza
sospechaba alguna conjura46.
No conforme con eso, Witiza hizo derribar las murallas de defensa de casi todas las
ciudades excepto las de Toledo, Len y Astorga,47 y desmembr el ejrcito, hizo
arzobispo de Toledo a su hermano Oppas y amenaz al Papa con invadir Roma porque
ste le amenaz con la excomunin.
El pueblo se rebel ante un nuevo asesinato, el de Teodofredo, to de Pelayo y padre de
Rodrigo, llegando a proclamar rey a ste, quin combati y venci a Witiza, que haba
designado sucesor a su hijo Agila II, que lleg a emitir moneda.
Existen historiadores actuales que sealan la posibilidad de que se produjese una guerra
civil que enfrent a los partidarios de Rodrigo con los partidarios de Witiza.
No obstante, la crnica de Alfonso III dice que Witiza naci del matrimonio de Egica
con Cixilo, hija de Ervigio. Dado que este matrimonio se plane como parte de los
acuerdos para que Egica sucediera a Ervigio, y si Witiza fue el fruto de esta unin, no
pudo nacer mucho antes de 688. Si esto es as, entonces slo tena alrededor de
veinticinco aos en el momento de su muerte o cuando fue depuesto, por lo que no
poda tener hijos con edad suficiente para traicionar a alguien o algo; como mucho, el
mayor de ellos tendra todava menos de diez aos en 711 o 712. 48
Rodrigo mand sacar los ojos a Witiza y lo encarcel, segn los datos allegados de esas
fuentes. No hay datos de dnde y cmo muri Witiza.
/

44

La Espaa Visigoda. Roger Collins. Pag. 110


Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
46
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 6-7
47
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 6-7
48
La Espaa Visigoda. Roger Collins. Pag. 135 a 142
45

13

Unos y otros animaron la invasin, a la que ya venan decididos los musulmanes, como
lo haban demostrado aos atrs, y en vistas a la invasin que sera definitiva,
desembarc Trif el ao 710 con quinientos soldados que volvieron con un importante
botn. Convencido con esto Muza de la exactitud de las noticias de Julin, y
considerando el xito de esta primera tentativa como un buen agero y presagio de la
prosperidad de sus armas, prepar otra segunda y ms respetable expedicin para la
primavera siguiente.49
Los hijos de Witiza, en concreto Aquila, se sublevaron en la provincia Narbonense
con la idea de desviar las fuerzas militares de Rodrigo lejos del estrecho, y en el curso
de este enfrentamiento, que comparta protagonismo con nuevo levantamiento de los
vascones, sucedi la asonada rabe al mando de Trik, que haba sido atrado por los
partidarios de Witiza para ayudarles en su lucha contra Rodrigo, con la idea de que
ocupasen Toledo mientras ellos mantenan a las fuerzas leales a Rodrigo en el norte.
El conde Teodomiro tuvo varias escaramuzas y comunic a Rodrigo la situacin, lo que
ocasion que ste abandonase la campaa para acudir a enfrentarse en Guadalete con
los invasores rabes a primeros de Julio del 711.
Y en puridad, aqu acaba la historia del reino visigodo. No se trata, por mi parte, de
aportar ninguna novedad; nada he relatado que sea producto de mi investigacin. Es,
tan slo, un repaso de la historia; un intento similar a los intentos que, por parte de
personas honestas, y a caballo entre los siglos VI y VII, intentaron evitar lo que se les
vena encima con la realidad que vivan bajo la tirana de Ervigio-Egica-Witiza.
Lo que resulta altamente extrao es que mientras Roma tard dos siglos en conquistar
Espaa, los rabes lo hicieron fulminantemente. Once aos? Ponemos como final el
alzamiento en Asturias? No. Mucho menos. Y esa realidad ocasiona una pregunta que
tras trece siglos sigue sin respuesta. Claudio Snchez Albornoz seala que el arraigo en
la tierra de los godos produjo sin duda un descenso de su entusiasmo blico50, pero no
parece que eso tenga el suficiente peso para justificar el terrorfico derrumbe de
Espaa, mxime cuando como el mismo autor seala, esas circunstancias las sufrieron
tambin los francos.
Por mi parte, y sobre los godos, un juicio que tomo prestado: Nosotros, sin
constituimos en apologistas de los godos ni de su sistema de gobierno, cuyos defectos
hemos apuntado, aadiremos, por ltimo, que si hemos de juzgar de la civilizacin de
un pueblo, no por el ostentoso aparato de los triunfos militares comprados precio de
sangre humana; no por el brillo exterior de pomposos espectculos, que fascinan y
corrompen un tiempo; sino por su mayor moralidad, por el menor nmero de intiles
matanzas de hombres, por el mayor respeto la humanidad, la propiedad, la libertad
individual de sus semejantes, por la mayor suavidad de sus leyes y de sus castigos, por
su mayor justicia y su mayor consideracin la dignidad del hombre, Espaa debi
grandes beneficios un pueblo que modific y alivi la dureza de la esclavitud, que
aboli la brbara costumbre de entregar los hombres ser devorados por las fieras del
circo, que hizo menos mortferas las guerras, que economiz la pena de muerte, que
consign en sus leyes la libertad personal, y que le dio, en fin, una nacionalidad y un
trono que no tena. Bajo este concepto la civilizacin goda aventaj en mucho la
romana, como guiada por el principio civilizador y humanitario del cristianismo. As, al
travs de sus defectos de constitucin, de las leyes brbaras conservadas en su cdigo,
49

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
50
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 69

14

de los regicidios que mancharon el principio y el fin de su dominacin, y de otros males


de que no pretendemos eximir aquel perodo de tres siglos, incomparablemente menos
terrible para Espaa que lo fue para los pueblos de Europa, la sociedad sigui su
marcha progresiva, aunque lenta, hacia su mejoramiento social. Ahora retroceder otra
vez, para encontrarse ms avanzada al cabo de centenares de aos, que tal es y tan
pausado y por tantas contrariedades interrumpido el desarrollo de la vida de la
humanidad. 51
/

Desde la invasin en 711 hasta el 722 con la batalla de Covadonga


FRAGMENTOS
La situacin que vena enquistada enfrentando a la nobleza visigoda en los dos clanes
Wamba-Egica y Chindasvinto-Recesvinto tena visiblemente debilitada la estructura
nacional espaola; aspecto que no pas desapercibido a los invasores musulmanes,
quienes tiempo atrs venan haciendo incursiones informativas cargadas de regalos para
comprar los intereses del clan que acabara posibilitndoles la invasin, y todo sin
olvidar la inestimable colaboracin de los judos, que si haban sufrido un
endurecimiento de las leyes con Egica, con Witiza tuvieron libertad de movimiento.
Resulta curioso, no obstante, que acabaron ponindose del lado del sector que ms haba
atacado sus intereses y quienes los haban sometido a servidumbre, salvedad hecha de
Witiza, que los protega. Esta colaboracin fue de vital importancia, ya que estaban
asentados en las principales ciudades del reino (Narbona, Tarragona, Sagunto, Elche,
Lucena, Elvira, Crdoba, Mrida, Zaragoza, Sevilla y en la capital, Toledo.)
La confianza que de ellos hicieron los sarracenos al tiempo de la conquista prueba que
obraban ya de concierto los sectarios de Mahoma y los secuaces de la ley de Moiss.52
En manos de los judos dejaron Toledo; en manos de los judos dejaron Tarragona, y los
hebreos volvieron a desarrollar su actividad en el trfico de esclavos.
Otro asunto se aliaba contra Espaa: El hambre haba hecho presa en los ltimos tres
aos y se haba llevado a la mitad o ms de la poblacin.53 Y hay que aadir que la
sociedad espaola estaba profundamente sumida en una desmoralizacin que
multiplicaba el nmero de suicidios; las plagas de langosta eran reincidentes y se
prolongaban durante lustros. Todo ello, sin duda, debi pesar a la hora de enfrentarse (o
como es el caso, de no enfrentarse, al invasor).
Muza, que estaba al servicio del califa Aludid y haba ocupado la prctica totalidad del
territorio del norte de frica, incluida Tnger y las plazas fuertes de los visigodos, con
quienes haban pactado que stos siguiesen al mando, y siguiendo las indicaciones de
Julin, seor de Ceuta y de otra ciudad de Espaa que cae sobre el estrecho y se llama
51

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
52
Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la
muerte de Fernando VII. Modesto Lafuente-Juan Valera
53
Conquista de frica del Norte y de Espaa ,Ajbar maymu ca,Annimo (traduccin de Reinhart Dozy)
Monografas y Documentos sobre la Historia de Tarifa Nmero 10 - Ao 2010

15

Al-Hadr [La Verde]54, y de los hijos y hermanos de Witiza, mand a Trif con una
fuerza de 500 hombres, que desembarc en la antigua Tartesio, robando todo lo que
tuvo a mano.
El historiador rabe coincide en reafirmar la traicin de Julin por los mismos hechos
relatados en el romancero, y que se circunscribe a la violacin de su hija por parte de
Rodrigo. El historiador rabe asegura que fue directamente Julin quin condujo los
barcos invasores hasta Gibraltar, engaando las escasas vigas existentes en Espaa, que
confiaron dado que, a lo que se ve, Julin acostumbraba a navegar sus barcos entre
Ceuta y Gibraltar con objetivos diversos, presumiblemente comerciales o de pesca.
/
Una vez avanzada la batalla, cuando tras tropas espaolas vencan a los invasores
sucedi algo inesperado: los hijos de Witiza, que comandaban los flancos del ejrcito
espaol, se separaron del ejrcito visigodo pasando a engrosar el sarraceno y dejando a
Rodrigo en inferioridad numrica y tcnica contra los musulmanes. E quando en lo mas
fuerte de la pelea estaban e non se conocia por quien quedaba lo mejor ni quien era
vencido e los christianos andaban fuertes, metiose en la batalla el conde Iulian e don
Opas el Obispo con los que ellos trahian en fabor de los moros. E quando los christianos
esto vieron desmayaron mucho e los moros obieron mas esfuerzo, e tanto ficieron con
su ayuda, que vencieron la lid en todas partes. E por fuerza dejaron los christianos el
campo, e los moros e los del conde Iulian e don Opas fueron en pos dellos, e mataron a
quantos podieron. E ansi vencieron los moros la batalla.55 No se sabe el final que tuvo
Rodrigo. Historiadores espaoles e historiadores rabes lo dan por muerto en Guadalete;
alguno dice que fue muerto y sus secuaces, una vez desalentados y dispersos, sufrieron
una derrota general. Tras esto, Tric tom la cabeza de Rodrigo y se la envi a su jefe
Muza, el cual mand a uno de sus hijos que la llevara al califa Algualid56, pero cabe la
posibilidad de que no perdiese la vida en esta batalla, puesto que, parece, particip
posteriormente en la defensa de Mrida57, y se le presenta en posteriores
enfrentamientos tenidos con los invasores ms al norte. Snchez Albornoz aboga
porque el cadver fue recogido por sus fieles y enterrado en Viseo.58
Tras la batalla, Trik hizo alarde de sus huestes; nombr caudillos, otorg premios y
areng sus soldados, recomendndoles, segn costumbre de los musulmanes, que no
ofendiesen los pueblos y vecinos pacficos y desarmados, que respetaran los ritos y
costumbres de los vencidos y que slo hostilizasen los enemigos armados, luego lleg
a Toledo, que se rindi por pacto en el que se garantizaba la vida, religin y hacienda de

54

Conquista de frica del Norte y de Espaa, c Abd al-Hakam (traduccin de Emilio Lafuente Alcntara) Monografas y
Documentos sobre la Historia de Tarifa Nmero 10 - Ao 2010
55

Crnica del Moro Rasis, versin del Ajbar Muluk al-Andalus de Ahmad ibn Muhammad ibn Muza alRazi, 889-955; romanizada para el rey don Dionis de Portugal hacia 1300 por Mohamad, alarife, y Gil
Prez, clrigo de don Perianes Porel, edicin de Diego Cataln y M Soledad de Andrs, Gredos, 1974,
pp. 346-348.
56
Al-Imama wal-Siyasa , Ibn Qutayba.Monografas y Documentos sobre la Historia de Tarifa Nmero 10 - Ao 2010
57
INICIO DE LA INVASIN RABE DE ESPAA. FUENTES DOCUMENTALES MRMOL
CARVAJAL, Luis de: Primera parte de la descripcin general de Africa: con todos los succesos de
guerras que a auido desde que Mahoma inuento su secta hasta el mil quinientos setenta y vno, Granada,
1573, folios 75-78. Documentos sobre la Historia de Tarifa Nmero 10 - Ao 2010
58
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 86

16

quienes se quedaran, y la saque.59 Esto suceda el 11 de Noviembre del ao 711.60


Dominado todo el terreno, escribi a su amo Muza pidiendo ms tropas y comunicando
la situacin. Slo en la Tarraconense, un tal Aquila se hizo fuerte, pero por breve
tiempo. Muza le orden que no continuase la conquista hasta su llegada, pero Trik
desobedeci y tom cija, Jan, Mlaga, Elvira y otras plazas sin lucha, y tom por
traicin Crdoba; a todas las dej bajo el control de los judos.
Esa era la poltica de dominacin. Relata Ajbar Maymua que cuando ocupaban una
ciudad reunan todos los judos y dejaban con ellos un destacamento de musulmanes,
continuando su marcha el grueso de las tropas. Y las noticias se repiten por todos los
cronistas y compiladores musulmanes. Sin su colaboracin y la de los witicianos la
conquista musulmana habra sido mucho ms difcil y mucho ms lenta.61
Y siempre desidia. La prdida de Crdoba, por ejemplo, no fue una excepcin, y s un
ejemplo. 700 bereberes, al mando de Mugit, apodado, para mayor inri, al-Rumi (el
romano), acamparon extramuros de Crdoba. No pas nada. Un pastor facilit la
entrada en la ciudad, que fue tomada sin resistencia, y su gobernador se encerr en la
iglesia de San Acisclo, donde fue asediado y posteriormente muerto. Mugit ocupara el
mismo palacio que anteriormente haba ocupado Rodrigo cuando era gobernador de la
Btica Y todo sigui igual; o as La baslica de San Vicente sera profanada y
convertida en mezquita la mitad de la misma; los cristianos podran seguir con sus
cultos, pero no construir nuevos templos ni hacer alarde pblico de su fe; seran
incautados los bienes de quienes haban muerto o huido, Y todo lo dems segua
igual de momento.
/
/
En los primeros tiempos regira quizs el estatuto del califa Umar I, segn el cual los
ricos deban pagar cuarenta y ocho dirhemes anuales; las gentes de mediana fortuna la
mitad, y los trabajadores la cuarta parte.62
La parte que fue incautada fue debidamente repartida entre posesiones del Emir (el
25% de lo conquistado) y los soldados conquistadores, no quedando tierras para
distribuir entre los sucesivos refuerzos que fueron llegando, y es que, como queda
dicho, la mayor parte de Espaa fue conquistada por capitulacin. A partir de ese
momento, y cuando la decisin de quedarse ya estaba tomada, invitaban a los espaoles
al islam o a la chizia; es decir, a hacerse musulmanes o a pagar la capitacin. Quienes
se oponan perdan sus bienes y en no pocas ocasiones, la vida.63
Pronto empezaron los abusos; pronto empezaron a no cumplirse los pactos; pronto
comenz la huida del pueblo espaol, francamente catlico, al norte de la pennsula, si
bien quedaron relegados aquellos que continuaban firmes en su fe catlica y que
sufrieron desde un principio, y progresivamente, la opresin musulmana. El Arzobispo
D. Rodrigo Ximenez, traducido por Alfonso X dice en la Crnica General de

59

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
60
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 86
61
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 88
62
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 93
63
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 48

17

Espaa: E los moros por aqueste enganno prisieron todas las tierras, e pues que las
ouieron en su poder, quebraron toda la postura robaron las iglesias los omnes64.
La legislacin musulmana se desarroll a lo largo de los aos. Marcaba que los
cristianos dimmies o mozrabes deban tratar a los musulmanes con honor y
reverencia, como a superiores, levantndose cuando ellos se acercasen y cedindoles el
asiento cuando ellos quisieran sentarse; no deban ocupar jams puestos de preferencia
en las reuniones; nunca deban ser los primeros en saludarlos; cuando estornudase un
dimmi no deba decrsele Dios tenga piedad de ti, sino El te mejore, y para
distinguirse de los musulmanes deban vestir de modo distinto, conservando la forma
de sus antiguos vestidos, afeitarse de distinto modo, llevar calzado similar al de los
musulmanes, no podan poseer espada y sobre todo no podan llevar vestidos lujosos.
No podan tener casa ms elevada que las de los musulmanes; no podan tener criados
musulmanes ni se les podan hacer prstamos; con ellos no se poda tener relaciones de
amistad. Y finalmente, el culto deba ser privado; los enterramientos lejos de los
enterramientos rabes, y an dentro de los templos los cristianos no deban elevar el
tono de voz. Y mientras, los templos deban estar permanente abiertos para dar albergue
a los mahometanos, no pudiendo reconstruir ningn templo que amenazase ruina. Por
el contrario, todo cristiano que abrazase el Islam se vea liberado de los impuestos. En
justa reciprocidad, quien abandonase el Islam sera condenado a decapitacin.65
/
El ao 717, el mismo en que era asesinado Abdelaziz ben Muza, hua de Crdoba
Pelayo, antiguo espatario de Rodrigo y en 718, ya rey segn unos (parece que sin base)
y simple caudillo segn otros, organizaba la resistencia en Asturias, en los territorios
que, presumiblemente, gobernaba su padre. Los rebeldes comenzaron por no pagar los
impuestos acostumbrados y por atacar a los berberiscos.66
Por otra parte, la suerte de los mozrabes cambiada radicalmente con la ascensin del
nuevo gobernador Alhor ben Abderramn, que fue cruel y benvolo a conveniencia,
tanto con los espaoles como con los mismos moros. Sera sustituido por Alsama ben
Mlic el ao 719, que hizo un censo y catastro de todo el pas, dando tierras a quienes
le acompaaban, y afirmando la voluntad de permanecer visto el control ejercido por el
Islam sobre toda Espaa.67 A lo que parece, el califa Omn exiga que los tributos
obtenidos lo fuesen conforme a ley, lo cual es cierta garanta. Pero esa exigencia acab
el ao 720, cuando falleca.
El ao 721 la invasin rabe lleg a dominar el condado del Roselln, que no sera
liberado hasta el ao 760 por Pipino el Breve, despus de haber liberado Narbona un
ao antes. Pipino el Breve restableci el antiguo condado visigodo, fijando la capital en
Ruscino; los condes posean un castillo, el "Castrum" o "Castellum Rossilio", por eso
Ruscino pas a llamarse Castellroselln.
El ao 72268 (o 718 segn otros autores, como Modesto Lafuente) iniciaba la
reconquista con la batalla de Covadonga, venciendo al general Alsama, primero y a los
pocos das a Munuza. Faltaban 10 aos para que Carlos Martel parase los pies en
Poitiers a los islamistas. Covadonga es, segn Claudio Snchez Albornoz, una batalla
de trascendentes consecuencias en la historia del mundo. Una de las consecuencias que
64

Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet . Pag. 67


Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag.79 a 87
66
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 102
67
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag 154
68
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 107
65

18

abonan ese aserto es que como consecuencia del resultado victorioso de las tropas
espaolas, es el retorno de las tropas que Alhor tena desplazadas en la Septimania,
renunciando a su expansin por la Galia.69 Este emir morira en batalla contra los
francos el ao 725 y sera sustituido por un general sanguinario. Se sucederan en el
gobierno varios emires que aportaban nuevas cargas a los espaoles.
Esta batalla signific, sin duda, el fin del empuje rabe, que llevaba invicto nueve
dcadas Y el principio de una Espaa nueva.70
/

A la muerte de Pelayo tom las riendas de los sublevados Favila, que no consigui
ningn logro frente a los rabes, habindose limitado a construir una iglesia en Cangas
de Ons, en honor a la Santa Cruz, sobre una representacin pagana, un dolmen, donde
ubic la Cruz de la Victoria, y donde posteriormente sera enterrado, tambin en el
mismo lugar que reposan los restos de caudillos ancestrales. Segn la lpida encontrada
en la tumba de Favila, la iglesia fue consagrada en el ao 738 por un personaje llamado
Asterio, al que se califica de vate, palabra latina que quiere decir 'adivino, profeta'71.
Esta iglesia fue objeto de sacrilegio llevado a cabo por las fuerzas democrticas en
1936. Sin embargo, se conserva la lpida de su fundacin, con una inscripcin que
consagra la misma a la Cruz.
Los hijos de Witiza fueron tratados de manera extraordinaria por los invasores. Si bien
no conservaron el reino, conforme les haba sido prometido, conservaron grandes
posesiones. Sara, la nieta de Witiza, posea 1000 aldeas, y su hermano Artobs o
Ardabasto otras 1000, y a Rmulo otras 1000.72 Andando los pocos aos, Abderramn
acabara incautando las posesiones de Artobs, que acab viviendo a cuenta de sus
sobrinos.
Mientras, en la Espaa sometida al poder musulmn, la sociedad hispana qued
notablemente alterada por los fueros y estatutos recibidos de los conquistadores y a los
que nos hemos referido sucintamente.
Los mozrabes quedaban amparados en sus derechos personales por el estado
musulmn con diferencias marcadas por el hecho de haber sido sometidos por
capitulacin o por la fuerza, si bien con el tiempo, los pactos fueron violados y todos
quedaron sometidos a un mismo estatuto. Todos eran dimnies y rayas (sujetos al
imperio muslim), 73 formando parte del Dar-al-Islam o territorio musulmn, siendo as
ciudadanos de segunda categora, conservando algunas leyes propias, por lo que
sobrevivi en cierto modo el Fuero Juzgo en mbitos locales y siempre que no
contraviniera el derecho musulmn.
Los dimnies y rayas se gobernaban a nivel local por ellos mismos, y las ciudades
importantes por un comes que era nombrados por la autoridad musulmana; el juez,
llamado en rabe alcadi, de donde procede alcalde, alguacil y otros.

69

Historia General de Espaa desde los tiempos primitivos hasta la muerte de Fernando VII. Modesto
Lafuente-Juan Valera
70
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet . Pag 154
71
http://es.wikipedia.org/wiki/Reino_de_Asturias#Ocupaci.C3.B3n_isl.C3.A1mica_y_revuelta_astur
72
La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz
73
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J,. Simonet. Pag. 105

19

Ardabasto, hijo de Witiza, fue nombrado Comes de Andaluca, y era tratado como el
sumo de todos los catlicos, recibiendo el nombre de Serensimo.74 Algunos
mozrabes conservaron gran parte de su riqueza y hasta de su poder, contrastando con
la gran masa de mozrabes, que caan permanentemente en la miseria mientras los
invasores, que llegaban pobres acababan opulentos. De entre ellos destaca un tal
Servando, que pas de clase servil a Comes de Crdoba y fue un azote para la
cristiandad cordobesa.
Y todo esto era posible porque segn el Corn (no pidis luz ni lumbre a los
politestas)75 y segn fatua dada por Ibn Naccax, los musulmanes deben alejarse de los
cristianos y judos y evitar su trato y conversacin76 .
/
/
El ao 32 de la Hgira (20-8-749 a 9-8-750 d.C.) se produjo la matanza de los
Omeyas en Bagdad, el desarrollo de la cual nos deja muestra de la calidad humana que
adornaba a los invasores: El califa abbasida Abul Abbas amnisti a los omeyas que
haban sobrevivido a la salvaje persecucin de que haban sido objeto, y en medio de
un banquete dado para celebrar la amnista, todos los miembros de la familia omeya
fueron asesinados mientras las carcajadas y los instrumentos musicales sonaban sobre
los moribundos. De esta matanza supo huir un joven de 16 aos: Aberramn, que en
una rocambolesca y eterna huda llegara a Al Andalus ocho aos despus, donde con
el apoyo de sus patronos, que eran muchos, y de los yemenes, se hizo con el poder,
aprovechando las luchas intestinas existentes entre los invasores. Elimin a Yusuf y a
su principal aliado, Al-Sumail, que dominaba en Aragn y contaba con el apoyo de los
maulas77, que eran quienes lo haban llamado cuando conocieron la persecucin de
que era objeto.
En 758 lleg Abderramn a Espaa de acuerdo con los Banu Unayya. Al Sumail quera
combatirle, pero Yusuf le ofreci su hija en matrimonio. Fueron rechazadas sus ofertas
y el embajador fue prendido.
Yusuf, que regresaba victorioso de su campaa sobre el rebelde Amr, mont en
clera, asesin a los prisioneros que haba tomado, se sublev e invit a sublevarse a
Al-Sumail y busc la alianza con los yemenes, que no quisieron combatir a
Abderramn, no sin antes haber procurado una matanza entre sus adversarios
polticos.78
Yusuf fue derrotado por Abderramn, que volvi a enfrentarse el ao 758, pero en esta
ocasin no consigui el apoyo de Al Sumail, que sin embargo fue encarcelado por no
haber avisado del levantamiento.
Organiz un ejrcito de 20.000 hombres que dirigi contra Sevilla, pero al verla poco
guarnecida cambi su objetivo. Los de Sevilla, en menor nmero, lo siguieron y lo
derrotaron. En su huda, llegando a Toledo fue asesinado.

74

Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 111


Corn
76
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J,. Simonet. Pag. 133
77
esclavos
78
Historia General de Espaa. Modesto Lafuente. Tomo II. Pag. 160
75

20

A las guerras intestinas entre los invasores, que por cierto siempre se cobraran una
magra cuota de vctimas espaolas, se aada la terrible sequa que asol Espaa desde
el ao 749 a 754, que aportaba nuevas penurias al pueblo espaol, si bien, por otra
parte, la sequa, junto a las derrotas sufridas por parte del segmento rabe de los
invasores, signific que un importante nmero de invasores bereberes volviesen a
frica. La posicin de los invasores qued muy debilitada, pero Espaa no pudo
expulsarlos porque esa misma sequa era padecida por ella misma, corregida y
aumentada con la opresin de los invasores, que iba creciendo de manera impasible.
Esta situacin; la del enfrentamiento entre los enemigos invasores; la retirada de las
avanzadas bereberes en Galicia como consecuencia del hambre y de las guerras
intestinas, si bien no fueron lo suficiente para acabar con la presencia de los invasores,
s posibilitaron que alguna parte del pueblo espaol se sacudiese las opresin islmica.
As, en el ao 751 se levantaron en armas contra los pocos bereberes y rabes que
haban quedado en el norte, al tiempo que llamaban en su auxilio a Alfonso el
Catlico, rey de Asturias, a quin reconocan como soberano. Quin posteriormente
sera Rey de Asturias, Fruela, hijo de Alfonso, fue el encargado de liberar aquellas
plazas del norte que haban sufrido la opresin sarracena durante ms de cuarenta aos.
/
Los levantamientos contra Abderramn duraron 20 aos; los alzamientos fueron
constantes y constantemente ahogados en sangre, y en impiedad. En la sublevacin
de Al-Ala, en Carmona, decapit a 7000 hombres. Castigo similar recibi Toledo.
Era implacable: en Sevilla se rebel Abu Sabbah por haber sido nombrado y
posteriormente destituido val de la ciudad. Lo mand llamar a Crdoba en son de paz
y lo mat. Nuevas sublevaciones en Sevilla significaron nuevas matanzas en 773.
Intentonas de derribar a Abderramn se sucedieron, aportando nuevos contingentes de
africanos que se refugiaban en distintos lugares para combatir a Abderramn. Sierra
Elvira, la Alpujarra, la Serrana de Ronda, se llenaron de ellos, y las invasiones de los
valies ded frica le acosaban. Intentos de desembarco llevaron a poner en grave
situacin las costas de Tortosa, donde finalmente el val de la misma logr vencer a los
atacantes. Entre tanto Toledo se encontraba sublevado y sitiado por las tropas de
Abderramn.79
Pero muestra de la moral que arrastraban los invasores nos la da Marsilio, general de
las tropas de Abderraman, quin, al huir su hijo de un combate, no dud en atravesarlo
con su propia lanza.80
No dud en exterminar a los yemenes, quienes le haban puesto en el trono Y
quienes siempre pagaban por uno u otro motivo eran los mozrabes, que o bien
tomaban las armas por alguno de los partidos contendientes, o sin tomarlas eran
masacrados por la ferocidad y codicia de los invasores. Tan es as que segn consta en
una crnica de la poca, el emir Yusuf mand hacer un nuevo censo de la cristiandad
tributaria, haciendo borrar de la misma a un nmero importante de espaoles que
haban sido asesinados o haban huido al norte81, siendo que la confeccin del censo
fue requerida por el resto de mozrabes, que vean cmo acrecentaban sobre s las
obligaciones que no podan ser cumplidas por sus hermanos ausentes.

79

Historia General de Espaa. Modesto Lafuente. Tomo II. Pag. 166


Historia General de Espaa. Modesto Lafuente. Tomo II. Pag. 167
81
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 214
80

21

El trato a los espaoles? en 758, a los habitantes de Castella, capital del cantn de
Elvira (en Granada), se les impuso que pagasen anualmente 10.000 onzas de oro, diez
mil libras de plata, 10.000 cabezas de los mejores caballos y otros tantos mulos, con
ms de 1000 armaduras, mil cascos de hierro y otras tantas lanzas (dado en Crdoba a
tres de Safar del ao 142).82 Era un impuesto por ser espaol del que no se libraban los
renegados, los mulads, lo que acab provocando levantamientos que
indefectiblemente eran ahogados en sangre.
La justicia musulmana actuaba contundentemente, y en ocasiones hasta con justicia.
Nos han llegado sentencias ejemplares, como aquella en que el juez, desoyendo la
recomendacin de Abderramn, no permiti que un noble rabe arrebatase una finca a
un espaol. Finalmente le obligaron a vender pero al menos cobr.
/
(Los moros) Eran muy prolficos, destacando entre todos ellos Abderramn II, que
tuvo 87 hijos; el segundo en esta escala fue Mohammad, que tuvo 54 hijos; el tercero
Al Hakam I, que tuvo 40 hijos, y el cuarto Abd Allah, que tuvo 24 hijos; Abderramn I,
veinte. El resto ya entra dentro de lo que podemos entender como normalidad.
Y tambin eran dados a la poesa, en concreto Abderramn I, Al Hakam I, Aderramn
II, Abd Allah y Abderramn III.83
Pero la parte negativa de la poesa la sufra, naturalmente, el pueblo espaol. Tema la
sublevacin del pueblo espaol, en esos momentos mayoritario, y buscaba su
colaboracin, en la que ponderaba el hbito al orden, a la disciplina y a la obediencia,
por lo que prometi guardar los pactos, tantas veces quebrantados. La apostasa creci
en el pueblo espaol, falto de fe y de patriotismo, que con la apostasa reciba tierras y
prebendas84. La poblacin surgida de estas artes, as como la producto de los
matrimonios mixtos seran conocidos como mulades, y conformara el principal
ncleo poblacional de Al-Andalus; ncleo que lo sera tambin de conflictos, pues al
fin, el sentimiento patritico y cristiano acabara surgiendo en ellos. Se reproducira,
as, la misma situacin que siglos atrs se vivi con el poder visigodo. En ambos casos,
el pueblo espaol quedaba relegado a ciudadana de segunda; pero en este caso, no
existi ningn Leovigildo ni ningn Recaredo que condujese las aguas a sus justos
cauces, dependiendo exclusivamente del avance de la Reconquista.
Los mulades seran los mdicos y los maestros; los filsofos y los artistas de los que el
poder invasor hara gala, y que sin lugar a dudas procedan de las escuelas espaolas
de Sevilla, Toledo y Crdoba.
Mientras tanto, el norte espaol segua fortalecindose o as. A la muerte de Alfonso
I, en 757 fue alzado al trono su hijo Fruela, a quin se tiene por fundador de la ciudad
de Oviedo, donde erigi una baslica y que haba casado con la alavesa Munia con la
que tuvo a quin sera Alfonso II. Su condicin spera y dura, su genio irritable85,
acarrearan problemas que posibilitaran el estancamiento del reino hasta que rein su
hijo Alfonso II, pero entre ambos reinados pasaron veintin aos.
Fruela llev adelante una importante labor de repoblacin, marcando una frontera
segura en el ro Mio, y tuvo serios enfrentamientos con el ejrcito invasor y con sus
propios vasallos; tuvo que sofocar una rebelin de los vascones, tras cuya victoria cas
82

La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz


La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz
84
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet. Pag. 238
85
Historia General de Espaa. Modesto Lafuente. Tomo II. Pag. 169-171
83

22

con una vascona, Munia. Puso orden en el clero prohibiendo el matrimonio a los
clrigos86, que vena siendo habitual desde el reinado de Witiza, y en 759 debi sofocar
un levantamiento de la nobleza gallega, que se sublev contra la pragmtica dictada
sobre el matrimonio de los clrigos.
Muri el ao 768, ajusticiado por los suyos como castigo por haber matado a su
hermano Vimara que se haba aliado con el clero aristocrtico. Su sepultura, en la
iglesia de San Salvador de Oviedo sera saqueada por las hordas rabes el ao 794. Y
los relatos de su muerte censuran la de su hermano, en contraste, como seala Snchez
Albornoz, con la historiografa hispano-musulmana, que incluso alaba a veces las
violencias crueles de sus emires o califas.87 Al fin, un hecho que recuerda la actuacin
de los visigodos; algo que no haba sucedido desde la asonada rabe.
/
/
Hixam I, victorioso en las luchas sucesorias de Crdoba, se embarcaba en la misin de
acabar con el reino de Asturias, al que hasta la fecha no se le haba hecho mucho caso.
Hixam no dudaba de la insignificancia de la resistencia por lo menudo del terreno que
no representaba nada en relacin al territorio dominado por el Islam, que poda
permitirse el lujo de enviar cuantas aceifas quisiera, sin mucho esfuerzo por parte de los
atacantes y con gran desgaste por parte de los resistentes. Sera una misin molesta,
pero no demasiado larga En esta misin env un ejrcito mandado por Ubayd Allah
ben Uthman, que alcanz la Bureba, por el Ebro, y otro, dirigido a la parte occidental
del reino, mandado por Yusuf ben Bujt. El primero invadi lava y Bardulia, y el otro
march hacia Galicia y retrocedi hasta Astorga. Bermudo le hizo frente en Villafranca
del Bierzo, pero fue derrotado en el ro Burbia, en Astorga, en 791. Eso le oblig a
abdicar del trono, otorgndoselo a Alfonso II el casto.
Con Bermudo acababa una mcula en la Reconquista. Era el ltimo de los cuatro reyes
que desde 768 conformaba una etapa oscura y de regresin del reino de Asturias, cuyos
reyes (Aurelio, Silo, Mauregato y Bermudo) son conocidos por algunos historiadores
como reyes holgazanes.88
Alfonso II el Casto llegaba con ganas de cumplir su cometido y sera la anttesis de sus
cuatro predecesores.
/
El 14 de septiembre de 791 acceda al trono de Asturias Alfonso II. Un personaje
merecedor de especial atencin, engendrado en una vasca por el violento y feroz
Fruela, educado en la corte por sus tos Adosina y Silo, desplazado del trono por su to
Mauregato, refugiado durante aos entre sus parientes vascones, que a los veinticinco
aos accede al trono como consecuencia de la derrota sufrida por Bermuda el dicono,
que logra escabullirse del intento de rapto llevado a cabo en la aceifa del mismo ao
que tom el trono; posteriormente depuesto por un oscuro levantamiento, tras lo cual
repone el orden gtico y ordena lo que ya podr llamarse corte real, y que reina ms de
cincuenta aos en lucha contra los poderosos ejrcitos de Crdoba, apareciendo con sus
huestes en cualquier punto de su alargado reino que iba del Pirineo al Atlntico
llevando una vida casta, pura, inmaculada. Insisto, merecedor de atencin especial. En
86

Historia general de Espaa y de las naciones americanas. Antonio de Crcer. Tomo II pag. 78
Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 135
88
http://es.wikipedia.org/wiki/Reino_de_Asturias#Ocupaci.C3.B3n_isl.C3.A1mica_y_revuelta_astur
87

23

su reinado se descubri el sepulcro de Santiago, que tanto bien hara en la Reconquista


de Espaa,89
Con l volva la energa al trono asturiano despus de 34 aos de componendas y
ominosos tributos pagados al enemigo musulmn, y con l se puede decir que se
consolid el reino de Asturias, que surgi como un caudillaje sobre los pueblos de la
Cornisa Cantbrica que haban resistido tanto a los romanos como a los visigodos y que
no estaban dispuestos a someterse a los dictados de los invasores y todava a principios
del siglo IX en el testamento de Alfonso II se renegaba de los visigodos culpndoles de
la prdida de Hispania90. Alfonso II ensanch las fronteras del reino acercndose al ro
Duero, llegando sus peleas hasta Lisboa y combati con dos monarcas rabes: Al
Hakam y Abderramn II. Alfonso II fue el nexo necesario de unin de los pueblos
hispnicos liberados. Junto a Alfonso el Casto pelearon muchas veces incluso los
paganos que habitaban en las lejanas de las tierras otrora de vrdulos y caristios,
vasconizadas a la cada del Imperio Romano.91
Pero la actividad de Alfonso II va ms all: Adems de ser un excelente caudillo
guerrero organiz poltica, religiosa y administrativamente el reino; activ la
implantacin del derecho y tambin lo organiz socialmente.92 A ello colabor el
concilio de Frankfurt del ao 794 en que se condenaba el adopcionismo de Elipando.
Con motivo de este concilio, el Papa Adriano dirigi una carta a los "dilectsimos hermanos y
consacerdotes nuestros que presiden las Iglesias de Espaa y de Galicia", es decir, de la Espaa rabe y
del Reino de Asturias, al que por primera vez se le reconoca una organizacin eclesial propia93
/
/
Zaragoza haba cado en manos del rebelde Balul ibn Marzuk, los pamploneses haban
matado al gobernador Mutarrif, de los Banu Qasi, y Alfonso el Casto, aprovechando las
discordias del enemigo, arras Lisboa en 798, de donde entreg a Carlomagno, como
presente siete mil prisioneros94 . Esta osada turb a los invasores, que no supieron
reaccionar, turbados por las discordias noroccidentales con los tos del emir, cuando el
ao 800 Abdala, tomaba Huesca. A la zona noroccidental dirigi Al Hakam las aceifas
del ao 801, que sufrieron una terrible derrota por parte de las tropas espaolas en el
desfiladero d Arganzn95, lo que les impidi llegar a combatir con su objetivo, Abdala,.
En 803 sufri una nueva derrota por parte de Alfonso el Casto en el valle del Pisuerga.
Puesto finalmente en marcha Al Hakam, recuper Gerona, Huesca, Lrida, Gerona,
Barcelona, y en Narbona degoll a la poblacin.
Mientras, sus tos se haban hecho con Valencia y con Murcia, donde se retiraron, su
general Amr toma Toledo y ejecuta al cad. Atacaron Crdoba por sorpresa, pero Al
Hakam los venci en batalla, matando a su to Suleiman.96 Tras esta derrota, su otro to,
Abdala, pidin el amam, la paz.
Era el ao 801.
89

Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 197-197
http://es.wikipedia.org/wiki/Reino_de_Asturias#Ocupaci.C3.B3n_isl.C3.A1mica_y_revuelta_astur
91
Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 131
92
Historia General de Espaa. Modesto Lafuente. Tomo II. Pag. 217
93
http://es.scribd.com/doc/196031/-EL-REINADO-DE-ALFONSO-II-EL-CASTO. Ignacio Montes
94
Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 196
95
LA ESPAA MUSULMANA. Claudio Snchez Albornoz Pag. 161-162
96
Historia General de Espaa y de las naciones americanas. Antonio de Crcer. Tomo II pag. 105 e H
General de Espaa. Tomo II Pag. 194
90

24

El ao 800, la Espaa liberada conoci un nuevo caudillo: Iigo Arista, fundador de la


primera dinasta navarra97, tras deshacerse del sometimiento franco. Era Iigo familia
de la familia islamizada Banu Qasi, y particip en las reyertas que stos mantuvieron
con el poder de Crdoba. Muri el ao 850, un ao despus de haber claudicado los
Banu Qasi ante Crdoba.
Pero el buen sol que brillaba para Espaa se vio turbado el 802 por el alzamiento de un
personaje cuyo nombre nos es negado por la historia, y que a punto estuvo de dar al
traste con Alfonso, pero un grupo de fieles venci al rebelde y restituy en su trono a
Alfonso, que permaneci recluido en el monasterio de Ablaa durante un ao98. El
presente de Alfonso a Carlomagno parece ser el origen de las discordias internas que a
punto estuvieron de acabar con el reinado de Alfonso. Lo cierto es que no volvieron a
efectuarse semejantes presentes.99
Durante los siguientes aos de su reinado, dedicara Alfonso grandes esfuerzos a
embellecer su reino con hermosas construcciones, e instalando nuevos monasterios
desde Vardulia hasta Galicia y repoblando castros y ciudades con la poblacin
mozrabe que hua del dominio musulmn. Y es que en estos momentos se haba
consolidado el frente del noreste. La Marca Hispnica, donde emigraban muchos
espaoles huyendo del poder sarraceno absorba la atencin de Crdoba, y el prncipe
Abderramn se enfrentaba y haca huir de Tarragona a Ludovico Pio el ao 809.100 Algo
que volvera a repetir el ao 811, cuando retom Gerona y lleg a Narbona.
La cultura reverdeci en el reinado de Alfonso II, habindose llegado a escribir la
conocida como crnica asturiana perdida cuya existencia fue demostrada por Claudio
Snchez Albornoz101, y restableci el gobierno de palacio, que podemos entender como
la estructuracin del gobierno. As mismo cre el obispado de Oviedo102.
/
El ao 809 mora Aureolo, tradicionalmente considerado como el jefe de los francos en
Aragn desde el 802, aunque su dominio resulta ms que dudoso para los historiadores,
que lo ponen en relacin con el seor de Zaragoza. Le sucedi Aznar I Galndez, que
fue conde hasta 820, cuando pas a ser conde de Cerdaa y de Urgel, como
consecuencia de sus relaciones con los Banu Qasi. Fue depuesto por Garca I Galndez,
a quin Iigo Arista le proporcion un pequeo ejrcito con el que depuso a Aznar I
Galndez, tom el gobierno del condado de Aragn, y con la ayuda de los Banu Qasi de
Zaragoza se enfrent a los francos. En 833 cedi el puesto a su hijo Galindo Garcs, 103
que sera conde de Urgell y de Cerdaa y usurp los condados de Pallars y Ribagorza de
los dominios de Berenguer.104
Mientras, entre los aos 812 y 832 fue conde de Roselln Gaucelmo, hijo del conde
Guillermo I de Tolosa, hermano de Bernardo de Septimania y hermanastro del conde
Bera. Ese 812, Ludovico Pio se estableci en Pamplona, y en 816 Al Hakan envi un
poderoso ejrcito contra l y contra Alfonso II, que alcanc una victoria que fue
97

Reinos y Jefes de Estado desde el 712. Juan Jos Menezo. Pag. 27


Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 166
99
Historia General de Espaa. Tomo II Pag. 194
100
H General de Espaa. Modesto Lafuente. Tomo II Pag. 194
101
Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 170
102
Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 172
103
http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=30907798
104
http://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Archivo:Bernatseptimania.png
98

25

aplastante en el rio Orn, que acab en retirada105. Ese mismo 816 Gaucelmo se
convirti en conde de Ampurias y, a partir del ao 829 utiliz el ttulo de marqus de
Gothia. Luego pasara a poder del conde Ser I de Ampurias106.
En estas fechas, los espaoles que haban vivido casi un siglo sojuzgados por los
conquistadores, conversos al Islam o fieles a Cristo, haban al cabo adquirido conciencia
de su fuerza frente a la oligarqua oriental que les dominaba y explotaba; haban
empezado a sufrir con trabajo su coyunda y haban comenzado a alzarse en los
tradicionales ncleos urbanos otrora catalizadores de la vida poltica hispana: Mrida,
Toledo, Zaragoza... y hasta en la misma Crdoba...107
El siglo IX fue, sin lugar a dudas el siglo en que el invasor rompi todos los pactos
firmados durante los principios de la invasin. Se despoj de todo derecho a los
espaoles y se les puso graves cargas, entre las que no eran las menores la circuncisin
obligatoria y la regala, atrevindose a nombrar prelados y a convocar concilios que
eran nutridos por representantes del Emir.108 Y todo con la anuencia de algunos
prelados, como el de triste recuerdo Saulo, Obispo de Crdoba en 850, que aprobaba
los irrefrenables aumentos de impuestos con los que el emir cargaba a los cristianos
conduciendo irremisiblemente a la pobreza absoluta de la poblacin espaola. No
obstante, este obispo acabara rehabilitado por su actuacin ante la persecucin iniciada
el siguiente ao 851.
El ao 822 mora Al Hakam y suba al trono Abderraman II, que adems de poseer una
sensualidad extrema que le llevaba a abandonar una aceifa porque haba tenido un sueo
ertico, se significara, como su padre, en la sauda persecucin ejercida sobre el pueblo
espaol, y en la feroz represin ejercida entre su propia gente, que sufri fuertes
discordias civiles surgidas entre rabes y bereberes.
Aprovechando esas discordias civiles, Toledo volvi a sublevarse, azuzado por el
mulad Haxim Addarrab, quien mantuvo en pie de guerra a la poblacin hasta que fue
muerto en combate, en el ao 831. Estas luchas permitan que Toledo permaneciese
libre de la efectiva dominacin musulmana, que fue rechazada repetidamente hasta el
834, cuando tras vencer la ltima aceifa, atacaron el castillo de Calatrava, donde fueron
deshechos y hecha una montaa con las cabezas de los atacantes, como era costumbre
musulmana, y sobre la cual eran entonadas alabanzas a Al por un ayatola.

/
/
Galindo I Aznarez fue conde de Aragn del 844 al 867, sucediendo a Galindo Garcs.109,
y a ste le sucedi Aznar II Galndez, que morira en 893.
Mientras tanto, Carlos el Calvo mat al conde Bernardo de Barcelona, cabecilla, al
parecer, de una bandera que quera sacudirse del yugo franco. Su hijo Guillermo, para
vengarlo, se ali a Crdoba en una lucha perdur hasta el ao 847, cuando Carlos el
105

Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 175
http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=30589261
107
Orgenes de la Nacin espaola. El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 179
108
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 360
106

109

http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=30907792
26

Calvo se ali con Abderramn II, que retir el apoyo al rebelde, quin a pesar de todo
tom Barcelona y Ampurias. Morra en batalla al ao siguiente.110
Por el este, en 848 Abderramn volvi a invadir Baleares, que se haba liberado con la
ayuda franca. La dominacin rabe dur diez aos, cuando los invasores normandos
saquearon sin distincin a moros y a cristianos.111 Por su parte, en 885 Ibiza fue tomada
por primera vez por los moros, mientras Bizancio mandaba embajadores solicitando
alianza con Crdoba en su lucha contra Bagdad; alianza que fue rechazada.
El ao 849 Carlos el calvo se present en Narbona para nombrar a Alern como conde
de Barcelona, Ampurias y Roselln, y marqus de Gothia (847), en contra de la
costumbre establecida de otorgar tal cargo a un noble de origen godo; asimismo
concedi a Wifredo los condados de Gerona y Besal, y a Salomn los condados de
Cerdaa, Urgel y Conflent. Los rabes atacaron y conquistaron Barcelona el 851-852
saqueando y diezmaron la poblacin, aunque se retiraron despus. Posiblemente Alern
muriera en estos combates. 112 Fue sustituido por Odalrico, que protagoniz
enfrentamientos con Musa ben Musa, y muri en 857, siendo sustituido por Hunifredo
de Gotia, que acab enfrentado con Carlos el Calvo, y vencido, huy de sus posesiones
en 864.113
El 1 de febrero del ao 850, muere Ramiro I, que en 8 aos conoci ms sublevaciones
adems de la que cort en el mismo momento de su coronacin, y el florecimiento de
los magos, a los que acab exterminando. Snchez Albornoz seala que, tal vez, el
fenmeno de los magos fuese un coletazo del priscilianismo.114
Fue elevado al trono de Asturias Ordoo I, su hijo, con lo que queda instaurada la
monarqua hereditaria, quin obtuvo una sonora victoria sobre los invasores y otra
sobre una nueva invasin normanda y llev sus dominios sobre los territorios vascones.
En 856 repobl Len, que ira creciendo en actividad social y econmica, lo que la
llev a ser la capital del reino en tiempos de Garca I, el ao 910, cre los obispados de
Len y Astorga, y se reviva las relaciones iglesia-estado que tanto influyeron en la
monarqua visigoda.
A los dos aos de iniciado su reinado mora Abderramn II y Ordoo tomaba con bro
la colonizacin del valle del Duero, mientras los vascones retomaban su costumbre de
sublevarse al cambio de rey. El asunto se solvent con un encuentro victorioso frente a
las tropas de Al-Mundir, tras lo cual se pacific el territorio. Tal vez el levantamiento
tuviera relacin con el asunto de Navarra, donde el ao 851 ascendi al trono Garca
Iiguez, hijo de Iigo Arista, que fue educado en Crdoba115. El 859 los normandos lo
tomaron preso, y fue rescatado mediante una gruesa suma pagada por el reino de
Asturias, a pesar de que nunca tuvo buenas relaciones con Ordoo. Este hecho

110

Historia General de Espaa y de las naciones americanas. Antonio de Crcer. Tomo II


pag. 153
111
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 317
112
http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=22062595
113
http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=26911475
114
Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz.
Pag. 210
115
Reinos y Jefes de Estado desde el 712. Juan Jos Menezo. Pag. 31
27

significara que Garca Iiguez dejase de lado a su primo Muza y girase su atencin
hacia sus benefactores.116
/
El verdadero organizador del Emirato Independiente fue Abderramn II, quien deleg
los poderes en manos de los visires y logr una islamizacin muy rpida de la pennsula,
reduciendo considerablemente el nmero de cristianos en territorio musulmn.
Abderramn II embelleci Crdoba con soberbios monumentos, hacindola centro de
todas las delicias, llena de voluptuosidad, mientras los cristianos eran confinados a la
miseria ms absoluta, lo que posibilit el nacimiento de un bando mozrabe pro
musulmn, que fue cantera para el ejrcito sarraceno y para los servicios del entramado
administrativo del emir, teniendo como consecuencia, entre otras cosas, que las
prohibiciones en cuanto al vestido eran soslayadas para estos colaboracionistas.
Las quejas emitidas por los pensadores espaoles al respecto muestran la triste situacin
de la poblacin espaola, desnortada y actuando conforme la voluntad del invasor, que
apoyaba abiertamente sta situacin propiciando la hereja y el cisma casianista y el
jovinianista, que permitan la bigamia y el incesto117, al tiempo que cargaba de
impuestos a los espaoles.
Espiraindeo y sus discpulos Eulogio y lvaro Paulo, combatieron ferozmente estas
herejas tras haber obtenido una formacin superior; San Eulogio llev a Crdoba el
texto de La Ciudad de Dios, de San Agustn, la Eneida, de Virgilio, poesas de Juvenal
y de Honorio, los opsculos de Porfirio y otras obras que haba recogido en su viaje a
los reinos cristianos del norte.118
Dice D. Marcelino Menndez Pelayo que en esta poca los cristianos, en Crdoba, hasta
podan tocar las campanas de las iglesias, que eran seis, pero el sensualismo musulmn,
y la total prdida de principios haca que quienes haban padecido todo tipo de
persecuciones y cortapisas, viesen en el momento que vivan, en el que todo estaba bien,
un ejemplo de convivencia que les haca volverse favorablemente al Islam O algo
peor, cual era, vivir dicindose cristianos y con un harn...o practicando el vicio
abominable por excelencia, que si bien es castigado por el Islam, parece que es de uso
generalizado.
Alertados por esta situacin tomaron cartas en el asunto Espiraindeo, Eulogio y lvaro,
reclamando en los fieles cristianos una vuelta a la fe, lo que les oblig a poner al
descubierto la falsedad y la perfidia del Islam en general y en concreto de Mahoma,
segn queda reflejado en el mismo Corn. Usando el Corn resaltaron las manifiestas
contradicciones que no resisten el menor de los anlisis y destacaban los pecados de
Mahoma, llegando Espiraindeo a calificarlo de dogmatizador impuro, cabeza vaca, lazo
de perdicin y sentina de todos los vicios. Estas expresiones que en un mundo relativista
como era el de Crdoba, eran asumibles en el terreno privado, eran inaceptables si se
decan en pblico, y justo eso fue lo que hicieron los discpulos cristianos de
116

Orgenes de la Nacin Espaola, El reino de Asturias. Claudio Snchez Albornoz.


Pag. 233
117
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 372
118
Historia de los Mozrabes de Espaa. Fco. J. Simonet Pag. 384
28

Espiraindeo, hablando de Jess en los zocos y en las mezquitas de Crdoba, a tiempo y


a destiempo, como San Pablo dice que debe hacerse.
/
/
Lupo, el hijo de Muza que gobernaba Toledo, huy a Asturias, acogindose al amparo
de Ordoo, que obtuvo grandes xitos militares llegando a Lisboa, donde caus daos a
los invasores.
Consecuencia de estos actos blicos, fue la aceifa que ese mismo ao parti al mando
del prncipe Almondir, que lleg a Pamplona, apresando a Fortn Garcs.
Mohamed qued contento con la destruccin de Muza, pero otro problema ms serio le
estaba creciendo dentro de sus propios dominios: Omar ben Hafsun.
En 852 haba sido nombrado gobernador de Mrida el mulad Marwan Al-Yilliqi. En
868 se sublev su hijo, Ben Marwan, contra Mohamed I al frente de un grupo de
mozrabes y de conversos (mulades) descontentos con la situacin social y las
presiones fiscales.
Desde su feudo de Mrida se enfrentara en repetidas ocasiones con los emires
cordobeses, siendo derrotado varias veces, pero nunca de forma definitiva. Tras una
grave derrota, Marwan se niega a reducirse, de nuevo, y se atrinchera en la fortaleza de
Alange.
En 868 fue vencido por las tropas del Emir, y enviado a Crdoba en calidad de rehn;
lleg a capitn de la escolta real, acaparando la envidia de los invasores, hasta el
extremo que el general Haxim, hombre de extraordinaria importancia, lo abofete en
pblico, lo que motiv que Ben Marwan se reuniese con sus antiguos camaradas y se
fortificase en un castillo cercano a Mrida, donde acab rindindose por asedio y por
pacto que le permiti vivir libremente en el antiguo poblado de Badajoz, desde donde,
con el apoyo de Sadn el Xurumbaqui, que se haba rebelado en Coimbra, y con el de
Alfonso III, nuevamente se enfrent al poder rabe en 877, aglutinando a mozrabes y
mulades, entre los que quiso predicar una nueva religin, mezcla de cristianismo e
islam.119
Refund Badajoz en 875, que por aquel entonces constaba de unas pocas casas encima
de un asentamiento de origen romano, y desde donde controlaba el rea circundante.
Desde esa posicin incluso lleg a tomar prisionero al general Haxim, que fue rescatado
con una gran suma, segn relata Ben Al Qutiya120.
Al final, los emires omeyas terminaron reconocindole como seor de Badajoz y del
Algarbe. Posteriormente se uni a los Banu Jaldun de Sevilla, y juntos lucharon contra
el emir Abdala. El resultado de estas luchas fue la prdida temporal de Badajoz, que fue
ocupado por un grupo de berberes.
Morir en su reducto, an independiente en el 889. Le sucedera su hijo Abd Allah Ibn
Muhammad, quien conseguira recuperar Badajoz. Finalmente, el hijo de ste,
119
120

Historia de los mozrabes de Espaa. Fco. Javier Simonet. Pag. 509


La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 257
29

Abderraman, entregara la ciudad a Abderraman III en el 929, tan slo un ao despus


de que, al otro lado del nuevo Califato, cayera Bobastro121.
/
rabes y bereberes, acrrimos enemigos, encontraron en el levantamiento de los
espaoles el motivo de su unin. Juntos volvieron a ejercer de matarifes, no ya con los
soldados espaoles en armas, sino con la poblacin pacfica, en concreto en los centros
cristianos ms importantes y acomodaticios: Elvira y Sevilla, que previendo la
persecucin, se haban manifestado sumisos al emir y haban pactado con los rabes
maaditas y con los bereberes, acrrimos enemigos de los yemenitas.
Comenz la guerra civil entre los invasores, y naturalmente las consecuencias recayeron
sobre los espaoles; ben Glib, que haba ofrecido sus servicios al emir con el objetivo
de defender a los espaoles, fue traicionado y asesinado para satisfacer a sus opositores
yemenes, lo que ocasion un levantamiento en Sevilla, donde los sublevados, el 9 de
Septiembre de 889, asaltaron el alczar del gobernador de Sevilla y acometieron el
palacio del prncipe Mohamed, donde fueron masacrados. 122 La persecucin fue
terrorfica, y el poeta rabe Ibn Hayyan cantaba: Con espada en mano hemos
exterminado a esos hijos de siervos: veinte mil de sus cadveres cubran el suelo, y las
hinchadas ondas del ro arrebataban a los restantes.
En Crdoba Omar haba ascendido en la corte y en medio de estas revueltas fue enviado
a pacificar Elvira, que se encontraba sumida en una revuelta ocasionada por las
matanzas llevadas sobre ellos por el general Sauar. Durante el ao 881, la situacin en
Elvira se hizo de todo punto insostenible, pues los cristianos y los mulades, exhaustos
por los abusos cometidos sobre ellos, imposibilitados ya para aguantar los desplantes y
la prepotencia de las tribus berberes, se haban sublevado contra el gobernador, que
efectuaba una feroz represin sobre la poblacin espaola, martirizando a cristianos y
mulades bajo la acusacin de traicin y rebelin, y se estaba produciendo una
persecucin como la que anteriormente se haba producido en Crdoba. Los espaoles
tomaron el Albaicn, pero finalmente fueron puestos en fuga. La masacre no se llev a
efecto porque en esos momentos llegaba Omar, que fren de manera violenta a los
rabes, y dej pacificada la ciudad bajo el mando de un subordinado de Mohamed I,
Said ben Chudi 123 124, que si por una parte era amigo de Sauar, por otra era comedido en
sus actuaciones. Finalmente, los iliberritanos daran muerte a su carnicero Sauar en una
emboscada.
/
/
Desde el 904 la estrella de Omar iba en claro ocaso y fue acumulando derrotas de
importancia junto a victorias de menor entidad, perdiendo a sus capitanes, que
irremisiblemente eran crucificados. Slo resista firmemente Bobastro.
121

http://usuarios.multimania.es/historiador1969/omar.htm
Historia de los Mozrabes de Espaa Fco. Javier Simonet. Pag. 535
123
Omar ben Hafsn. Jorge Alonso Garca
124
Historia de los Mozrabes de Espaa Fco. Javier Simonet. Pag. 547
122

30

Omar se mantendra irreductible en su Bobastro hasta su muerte, en el 917. Sus hijos


continuaran la resistencia once aos ms (928), hasta que el primer califa, Abderraman
III, tom la plaza y profan la tumba del hroe, crucificando su cadver entre un perro
y un cerdo. Omar haba hecho profesin pblica de fe cristiana el 12 de Enero de 899.125
Las aceifas contra el norte se vieron casi extintas durante el reinado de Omar ben
Hafsun, que las sufri el ao 900 (2); el ao 903, el 904 (2), el 907, el 908, el 909, el
910 (2), el 912, el 913, el 914, cometindose feroces asesinatos masivos segn relata
Ben Idhari,126 y ello sirvi slo para ensanchar el territorio de los reinos espaoles. Pudo
servir de mucho ms, pero se qued en eso. No obstante, alguna aceifa se produjo, como
la lanzada el ao 882 por Almundir, prncipe heredero, acompaado de 80.000 soldados.
Siti la Zaragoza de Ismail ben Muza, sin doblegarla. March contra Tudela, en poder
de Fortn ben Muza, con el mismo xito, y aliados con el traidor Mohamed ben Lope
sufrieron nueva derrota en Cellorigo, sin ms xitos que contar, segn relata la Crnica
Albeldense.127
Pero si ciertamente la sublevacin de Omar ben Hafsun fue la ms importante, no fue la
nica. Ciertamente Ben Marwan fue tambin un importante hroe hispnico, como lo
fueron los Muza de Zaragoza, pero hubo ms. Sawwar ben Handum, en la zona de
Elvira combata al emir y combata a Ben Hafsun, quien finalmente lo vencera, siendo
muerto en Elvira.
Ben Chudi actu del mismo modo, pero en esta ocasin fue el emir quin acab con su
vida. Ibrahim ben Hachchach, en Sevilla, se ali con Omar ben Hafsun, a quin luego
traicion. Otros sublevados: Daysan ben Isaac en Lorca; Ubaidala ben Umaya, en Jan;
Abd al Malik en Beja; Ben al Salim en Sidonia; Jayr ben Xakir en Jdar; Said ben
Huhayl en Montelen; ben Mastana en Priego; Banu Habil en Jan; Isaac ben Ibrahim
en el castillo de Mentesa; Said Ben Sulayman en Granada; Mohamed Ben Adda, Bak
ben Yayha, los ben Muhalab; Ben Galib, los hijos de Jorge en el castillo de Bacor y el
de Mairena128 Una rebelin generalizada que casi en su totalidad coincida con el
espritu de Omar y era fomentada por espaoles, y en parte caa en el mbito de los
invasores. Hasta un hijo del emir, Mutarrif, se sublev y apoy con un pequeo ejrcito
la sublevacin de Omar, aunque luego volvi con su padre Abdala, por quin sera
muerto tras haber matado tambin a Muhammad, otro de sus hijos y padre del futuro
Abderraman III. Y es que las intrigas no tenan nmero; los asesinatos entre la familia
del emir no eran circunstancias aisladas.
/
El ao 917 mora en su cama el gran hroe hispnico Omar ben Hafsun, y con l, toda
esperanza para el pueblo espaol, que debera seguir sometido al yugo africano la
friolera de 575 aos ms. Y todo por la actuacin cicatera de un rey que ha pasado a la
historia como Magno.
Nunca ser suficientemente reivindicada la memoria de este insigne hroe hispnico,
merecedor de todas las glorias de la Patria. Se acababa un periodo que si bien haba
mejorado la situacin de la Reconquista, no obtuvo todos los frutos merced a que los
125

La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 281


La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 281 a 285
127
La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 247
128
La Espaa Musulmana. Claudio Snchez Albornoz. Pag. 286
126

31

reinos del norte no supieron aprovechar las oportunidades que les brindaron los
caudillos hispnicos Ben Marwan y, sobre todo, Ben Hafsn. En concreto es de
lamentar la actuacin de Alfonso III, que libre de las incursiones musulmanas haba
mudado su corte a Len y extendido sus conquistas por Lusitania; haba nacido el
condado de Castilla y haba crecido el reino de Navarra.129.
El ao 914 mora Garca I de Asturias tras un reinado de cuatro aos y con una nica
hazaa llevada a cabo sobre Talavera.130 Con su muerte volvi a unificarse el reino en la
persona de Ordoo II, que pas a ser el primer rey de Len. Tuvo dos importantes
enfrentamientos con Abderraman III; el primero favorable a los espaoles y el segundo
contrario.131
El ao 919 reduca considerablemente las posesiones del reino cristiano de Bobastro,
gobernado por Chfar, hijo mayor de Omar que pas a ser feudatario de Abderraman
III132 y acabara siendo asesinado cuando abraz el islamismo, en 920. Le sucedi su
hermano Suleiman, que mantuvo independiente Bobastro siete aos, entre disensiones
internas de los espaoles. l no vera la prdida de Bobastro porque muri un ao antes
en una refriega con los brbaros. Le sucedi su hermano Hafs, que sucumbi a los
pocos meses, el da 21 de Enero de 928.133 Abderramn desenterr los cuerpos de Omar
y de su hijo Chafar, y en Crdoba los crucific entre un cerdo y un perro.134 All
aquellos restos sirvieron de escarmiento saludable para los rebeldes y de recreo para los
ojos de los buenos muslimes, segn relata un cronista rabe.135
/
Abderramn III tom el ttulo de califa con el sobrenombre al Nasir li-din Allah, aquel
que hace triunfar la religin de Dios. Previamente, en 927 haba tomado Melilla y
contaba adems con las plazas fuertes de Tnger y Ceuta, desde donde controlaba la
evolucin de sus enemigos fatimes.
El califato dividi su territorio en demarcaciones administrativas y militares,
denominadas Coras, y la opulencia del califato durante estos aos queda reflejada en la
palabras del gegrafo Ibn Hawqal: "... La abundancia y el desahogo dominan todos los
aspectos de la vida; el disfrute de los bienes y los medios para adquirir la opulencia
son comunes a los grandes y a los pequeos, pues estos beneficios llegan incluso hasta
los obreros y los artesanos, gracias a las imposiciones ligeras, a la condicin excelente
del pas y a la riqueza del soberano; adems, este prncipe no hace sentir lo gravoso de
las prestaciones y de los tributos ...".
Para realzar su dignidad y a imitacin de otros califas anteriores Abderramn III edific
su propia ciudad palatina: Medina Azahara; dot a Crdoba con cerca de setenta
bibliotecas, fund una universidad, una escuela de medicina y otra de traductores del
griego y del hebreo al rabe e hizo ampliar la Mezquita de Crdoba.
129

Historia de los Mozrabes de Espaa Fco. Javier Simonet. Pag 585


Reinos y Jefes de Estado desde el 712. Juan Jos Menezo. Pag. 34
131
Reinos y Jefes de Estado desde el 712. Juan Jos Menezo. Pag. 34
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Historia de los Mozrabes de Espaa Fco. Javier Simonet. Pag. 588
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Historia de los Mozrabes de Espaa Fco. Javier Simonet. Pag. 595
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130

32

Esta etapa de la invasin es sin dudas la de mayor esplendor, y en ella relumbraron


grandes intelectuales, la mayora espaoles, aunque fue de corta duracin pues en la
prctica termin en el 1009 con la fitna o guerra civil que se desencaden por el trono
entre los partidarios del ltimo califa legtimo, Hisham II, y los sucesores de su primer
ministro o hayib Almanzor. 136
Cuenta algn historiador137 que el Califato fue la primera economa comercial y urbana
de Europa tras la desaparicin del Imperio Romano, siendo que a la cabeza de la red
urbana estaba la capital, Crdoba, la ciudad ms importante del Califato, que superaba
los 250.000 habitantes en 935 y rebas los 500.000 en el ao 1000.
Los estudios filosficos y astronmicos debieron su principal cultivo a los mozrabes y
dems espaoles.... En cuanto a la astronoma, ciencia aborrecida por los musulmanes
fanticos, cuyos libros fueron quemados... Ciertas obras de Aristteles...las trajo de
oriente cierto Abu Omar ben Martn... Espaol era Ben Hazam... Y en medicina Abdala
Yayha, mozrabe mdico de Abderramn III. Ejemplos... que si se muestran en ciencias
despreciadas por los musulmanes, tambin se muestran en las que les son afines.
Historiadores que cultivaban la ciencia en los monasterios y que luego destacaron en la
vida cultural de la Crdoba de Abderramn III y de Alakam, tales como Mohamed
Alagostin, Ben Sad, Ibn Alcutia (descendiente de Sara, nieta de Witiza); Suleiman ben
Biter (Pedro), Ibn Hayyan... Y en la poesa, Servando de Toledo, Ibn Gundisalbo, Ibn
Martn... En la jurisprudencia, teologa, tradiciones rabes.... Nombres que nos han
llegado con referencia de su raiz espaola, que sin lugar a dudas son una pequea
muestra de la realidad, dado que lo normal era que los espaoles ocultasen su condicin
y se inventasen genalogas rabes con raigambre para evitar el desprecio y el insulto.
/
En 930 Abderramn III puso cerco a Toledo, mantenindolo durante dos aos, cuando
los toledanos se sometieron, debiendo admitir, adems, la construccin del Alczar.
Toledo recibi ayuda de Ramiro II, pero debi cejar en la misma merced a las discordias
civiles que se vivan en Len, fomentadas por su hermano Alfonso IV138 que, sucesor de
Fruela II, haba abdicado precisamente en Ramiro II cinco aos despus de haber
accedido al trono.
Con este hecho finalizan las noticias relativas a las rebeliones propiciadas por los
mulades. Ya slo qued la Reconquista a cargo de los cristianos, si bien tambin
reconocen los historiadores que, a partir de este momento, y en el reinado de
Abderraman III, los mozrabes se vieron eficazmente protegidos contra la persecucin
de las otras razas, y vieron respetados sus fueros y libertad religiosa hasta principios del
siglo XI, y no participaron en nuevos altercados.139
En el curso de estos acontecimientos Ramiro I de Aragn mora el ao 1063 en el asedio
de Graus, frente a Al Muqtadir, que contaba con el apoyo de Castilla.
136

Daniel Eisenberg No hubo una Edad "Media" espaola

http://users.ipfw.edu/jehle/deisenbe/Other_Hispanic_Topics/NOHUBOUN.htm
137

Daniel Eisenberg No hubo una Edad "Media" espaola

http://users.ipfw.edu/jehle/deisenbe/Other_Hispanic_Topics/NOHUBOUN.htm
138
Historia de los mozrabes de Espaa. Fco.Javier Simonet. Pag. 601
139
Historia de los mozrabes de Espaa. Fco.Javier Simonet. Pag. 603
33

Hemos visto que en 930 Ramiro II accedi al trono de Len, y lo hizo con tanto empuje
como el que dieciocho antes tuvo Abderramn III (tan es as que los espaoles lo
llamaban el grande mientras los moros lo llamaban el diablo). No pudo tomar
Toledo, pero par los pies a Abderramn en San Esteban de Gormaz el ao 933. Pero en
934 una aceifa sarracena lleg a Pamplona y Abderramn obtuvo la sumisin de su ta,
la reina Toda, pero Ramiro II, con el apoyo de Fernn Gonzlez, obtendra una
importante victoria en Osma sobre las tropas musulmanas, consecuencia de la cual, el
rey moro de Zaragoza, Aboyada, se someti a Ramiro. Las victorias musulmanas tenan
un buen caudillo, Almudafar, pero si Ramiro II, que rein de 930 a 950, puso en prisin
a su hermano y a sus primos, pretendientes de la corona y culpables de sedicin.
Desmantel las murallas de Talavera, lo que ocasion una aceifa de Abderramn que fue
frenada en Osma con la ayuda del conde Fernn Gonzlez de Castilla140, que haba sido
proclamado conde independiente el ao 929, el mismo ao en que Crdoba rompi con
Damasco.
/
/
El ao 956, a la muerte de Ordoo III, accede al trono de Len Sancho I el Gordo, que
segn cita Juan Luis Puente en su libro Reyes y reinas del reino de Len, pesaba 220
kilos y coma 7 veces al da con 17 platos distintos, principalmente de caza.
Pero dos aos despus, rechazado por su extrema gordura, fue destronado por los nobles
leoneses y castellanos, encabezados por el conde Fernn Gonzlez, nombrando rey a
Ordoo IV el malo, su yerno, y primo de Sancho el Gordo, cuyas reseas histricas
son mnimas; lo que parece ser cierto es que era perverso y se gan el desafecto de su
abuela, la reina Toda, del pueblo y de su mujer. Mora exiliado en Crdoba en 960.
Las relaciones que mantenan los reinos cristianos con los invasores permitieron que,
gracias a la intervencin de su ta, la reina Toda de Navarra, Sancho se desplazase a
Crdoba para recibir un tratamiento a su obesidad; tratamiento que dur tres aos, a
cambio de unas plazas en la ribera del Duero. Tras el tratamiento, con el apoyo de
Abderramn, recuper el trono de Len en 956, que no fue objetivo de las aceifas
musulmanas hasta que accedi al trono cordobs Alakam II. Pero las aceifas fueron
suplidas por las conjuras, y Sancho el gordo muri envenenado en Coimbra el ao 967,
seis aos despus de morir su to y protector Abderramn III.
En los ltimos aos de su reinado se sucedieron las rebeliones nobiliarias y se afianz la
independencia de los condes castellanos y gallegos. En 966 termin su reinado y al ao
siguiente muri envenenado en el Monasterio gallego de Castrelo do Mio. Le sucedi
su hijo Ramiro III.
De los mozrabes no hay noticias, lo que es una tranquilidad, pero parece que lo era
principalmente para los invasores que, parece, eliminaron a los suficientes como para
imponen en el resto el terror, ya que, por otra parte, perseveraban las antiguas dicesis y
poblaciones cristianas con sus obispos y clero, pues conservamos los nombres de
140

Reinos y Jefes de Estado desde el 712. Juan Jos Menezo. Pag. 40


34

algunos prelados, condes, jueces y magistrados mozrabes en todo este tiempo. Pero
parece significativo que el metropolitano de Toledo el ao 956 se llamase Obaidala ben
Csim.
Pero nos podemos hacer a la idea de lo que pasaba con los mozrabes si consideramos
que, al frente de una embajada enviada por Abderramn III ante el emperador de
Alemania, Otn I, iba un obispo mozrabe cuyo nombre no ha trascendido, y que
trasmita un mensaje que resultaba injurioso para la religin cristiana. La respuesta,
viril, era aportada por el obispo Juan de Gorce, que tuvo que defender su postura ante el
obispo Juan, enviado por Abderramn III, a quin le acusaba de haberse sometido hasta
el extremo de haber aceptado la circuncisin y de haber aceptado la existencia de
alimentos inmundos. Esta postura ocasion una amenaza de Abderramn III que pona
en entredicho la vida de los mozrabes, y tambin signific la promocin a obispo de
Iliberris (Granada) de un lego que se pleg a los deseos del emir, y que vuelve a poner
en evidencia la situacin de los mozrabes, cuyos obispos eran nombrados por el mismo
emir, sin respetar, adems los cnones de la Iglesia.
/
Sancho Garcs II sera el primero en usar el ttulo de Rey de Navarra y el primero en
usar el ttulo de rey de Aragn.
Garca Fernndez, conde de Castilla que segua reconociendo sumisin al rey de Len,
aunque no hubo confirmacin previa por parte de ste, aport una interesante novedad
en el campo del derecho, y que da muestra del carcter del condado de Castilla:
Promulg las ordenanzas sobre los caballeros villanos de Castrojriz, equiparando a los
caballeros villanos con los infanzones: aquellos campesinos que dispusieran de un
caballo para la guerra seran equiparados automticamente con los nobles de segunda
clase.
En su poltica familiar, cas con Doa Ava, hija del conde Ramn II de Ribagorza, cuyo
bisabuelo se independiz del conde de Tolosa. El inters estratgico era importante,
porque el condado limitaba con el reino de Navarra, cuosos reyes posean Aragn y
Sobrarbe. Parece que en el enlace tuvo algo que ver la reina Toda de Navarra.
Eran aos de paz con el invasor; Len mantena tregua con Alakam, que mantena
supremaca cultural de Al Andalus sobre todos los reinos peninsulares, pero Garca
Fernndez quebrant la paz en 974 saqueando las tierras de Soria y Guadalajara. Form
coalicin con los reyes de Pamplona y de Len y con los Banu Gmez de Saldaa, e
intent tomar la fortaleza de Gormaz, que era como una flecha clavada en el flaco de
Castilla, fracasando en el primer intento. Desgraciadamente para ellos, el mejor general
Cordobs Teman Ghalib, que acaba de volver victorioso de frica, diriga la hueste
musulmana. Pero no fue slo eso, sino el mpetu de reconquista que llev a las tropas
espaolas hasta las mismas puertas de Crdoba, con la colaboracin de los mozrabes.
Los reinos de Len y Navarra, y el condado de Castilla estaban unidos por lazos
familiares, y juntos sufrieron la nueva asonada rabe capitaneada por Almanzor, que
infligi una cadena de derrotas humillantes, que pasaron de cincuenta, a todos los
asentamientos espaoles.

35

En 973, Almanzor, a la edad de 38 aos, se desplaza hasta Marruecos para inspeccionar


las tropas all estacionadas. Establece contactos y se hace con el control efectivo de esos
guerreros. A su regreso, es nombrado jefe de las tropas mercenarias acantonadas en
Crdoba.
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En el ao 1000 Almanzor ataca Castilla, Sancho Garca sale a su encuentro y es
derrotado en la Batalla de Cervera no sin antes causar un gran nmero de bajas en las
filas de Almanzor.
En 1002 se produjo la batalla de Calataazor, en Soria, donde las tropas leonesas,
castellanas y navarras pararon los pies a Almanzor en la que fue su ltima expedicin
militar dirigida contra la Espaa cristiana. Lo nico cierto que de ella se sabe es que
lleg hasta Canales, cerca de Njera; camino de Burgos destruy el monasterio de San
Milln de la Cogolla, y poco despus muri en Medinaceli, donde fue enterrado.
Los historiadores no se ponen de acuerdo sobre la muerte de Almanzor y algunos
incluso niegan la existencia de la batalla de Calataazor.
A Almanzor le sucedi su hijo Abdalmalik, que gobern seis aos y cuya muerte dio
paso a la descomposicin de Al-Andalus que culminara con la implantacin de los
reyes de taifa.
Abdalmalik haba de recurrir a una constante actividad militar al objeto de mantener su
preponderancia, por lo que forz la mquina de guerra. En el ao 1007 y gracias a una
victoria recibi el ttulo de "al-Muzaffar". No pudo disfrutar mucho de su ttulo ya que
al ao siguiente falleca en extraas circunstancias, especulndose sobre un posible
envenenamiento a manos de su hermano Sanchuelo, hijo de Almanzor y nieto de Sancho
Garcs II de Navarra, quien se convertir en su sucesor.
En 1004 muri Garca Snchez II de Navarra y subi al trono su hijo Sancho Garcs III
el Grande, que haba participado en Calataazor. Era bisnieto de Fernn Gonzles, su
madre era leonesa y su mujer castellana. Bajo su mandato el reino cristiano de NjeraPamplona alcanz su mayor extensin territorial, abarcando casi todo el tercio norte
peninsular, desde Astorga hasta Ribagorza.
Las disensiones entre los reinos cristianos estaban a la orden del da. Pero los invasores
no estaban en mejor situacin. Hixam II, hijo de Subh, la vascona, nombr heredero a
Abderramn Sanchuelo, lo que llen de odio a los Omeya ya que rompi el legitimismo,
y provoc el enfrentamiento entre diversos sectores tnico-tribales y determin la
emergencia de poderes locales: los reinos de taifas141. El Califato acab sucumbiendo en
el 1031. La fitna (divisin, guerra civil) comenz en 1009 con un golpe de Estado que
supuso el asesinato de Abderramn Sanchuelo y de su aliado el conde de Carrin; la
deposicin de Hisham II y el ascenso al poder de Muhammad ibn Hisham ibn Abd alYabbar, bisnieto de Abderramn III, Mohamed II. En el trasfondo se hallaban tambin
problemas como la agobiante presin fiscal necesaria para financiar el coste de los
esfuerzos blicos.
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141

http://redul.wikispaces.com/Al+%C3%81ndalus#tocAl%20%C3%81ndalus12
36

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Hacia el ao 1030, Mir Geribert posee el castillo de Subirats y de la Vit, heredados de
sus padres, la fortaleza de Ribes, concedida por su primo Guislabert el obispo de
Barcelona, y el feudo de Sant Mart Sarroca adquirido por enlace matrimonial. Siendo el
ms poderoso de los seores del Peneds, hacia el 1035, para sealar su autoridad, se da
el ttulo de prncipe de Olrdola, apoyado por los nobles partidarios de la guerra contra
el invasor, que vean paralizada su accin por el conde de Barcelona, y mermados sus
derechos feudales. Se rebelan contra Ermesenda, y Berenguer Ramn, pero sobre todo
se rebelan contra la legislacin que priva sus derechos feudales: el Liber Iudiciorum. Es
pus, este Mir Geribert quin se autoimpone el ttulo de prncipe, ttulo que muere con
l.
Pero el hecho curioso es que Ramn Berenguer I se ala en 1041 con Mir Geribert a
quien reconoce su posicin de dominio en el Peneds y en perjuicio de su hermano, el
conde Sancho.
Consecuencia de todas estas situaciones fueron las revueltas de los otros nobles, que se
salvaron graciasla accin popular, movilizada para salvaguardar los usos concedidos por
Berenguer Ramn I en 1025.
La vida de Ramn Berenguer I fue convulsa en todos los campos; su hijo asesin a su
madrastra Almodis, madre de Ramn Berenguer II y de Berenguer Ramon II, tercera
esposa de Ramn Berenguer I, siendo que a la segunda esposa la haba repudiado.
A la muerte de Bermudo III de Len en 1037, accede Fernando I el Magno (su cuado y
conde Castilla desde 1028) al trono de Len y con ese acto convierte el condado de
Castilla en reino, si bien el condado haba perdido a favor de su hermano Garca III de
Navarra las tierras de Bureba, lava y gran parte de Vizcaya, lo que lleva al
enfrentamiento de los dos reinos hasta la batalla de Atapuerca, en 1054, mediante la que
recuper Bureba, volvindose a partir de entonces contra el enemigo natural.
En Al Andalus el guirigay continuaba a plena marcha. En 1038 mora el eunuco Zuayr,
seor de la taifa de Almera, y por entresijos de la legalidad musulmana, result que su
heredero era Abdelaziz de Valencia, el nieto de Almanzor, quin vista la herencia, pidi
ayuda a Muyahid de Denia para atacar Granada, con resultado final de enfrentamiento
mutuo dada la negativa de ste a enfrentarse con los bereberes. El reino de Sevilla
conquistara el Algarbe, pero sera frenado por el reino de Crdoba y los
enfrentamientos entre ste, Sevilla, Granada y Toledo seran la orden del da, todo lo
cual le llevo a emparentar con Muyahid de Denia, casando con una de sus hijas. Es
curioso que un homosexual como Al Mutamid tuviese un harn de setecientas
concubinas, y para colmo, casase con la hija de un esclavo, a quin convirti en reina de
Sevilla.
/
/
El 5 de diciembre de ese mismo ao 1079, Ramn Berenguer II se diriga a Barcelona
atravesando el bosque de Perxa del Astor en el Montnegre. Unos desconocidos, tal vez

37

sus propios acompaantes, le asesinaron en ese bosque. Su cadver fue trasladado a


Gerona donde recibi sepultura. Su hermano, Berenguer Ramn II, fue acusado de este
asesinato, por lo que recibi el apodo del Fratricida y debi ir, en expiacin, en 1099,
como cruzado a Jerusaln.
Con el sarcfago de este conde surgi polmica en relacin a las 4 barras de Aragn. La
tumba de Ramn Berenguer II fue hallada en 1982 en la catedral de Gerona, un
sarcfago liso y rectangular cuya nica decoracin exterior, en buen estado de
conservacin, consiste en una sucesin de 17 tiras verticales de unos 5 cm,
alternativamente rojas y doradas.
Segn algunos autores nacionalistas, este primitivo sarcfago de Gerona vendra a
apoyar la tesis del origen cataln del escudo de armas, afirmando que el linaje condal de
Barcelona tena como emblema palos rojos sobre un fondo dorado con anterioridad a la
unin del Condado de Barcelona con el Reino de Aragn y por tanto, antes incluso del
nacimiento documentado de la herldica en Europa Occidental.
La existencia del emblema de palos de oro y gules en la tumba original de Ramn
Berenguer II es cuestionada por especialistas en herldica y acadmicos como Alberto
Montaner Frutos y Faustino Menndez Pidal de Navascus, para quienes la decoracin
herldica de la tumba es un aadido con motivo de su traslado en 1385 al interior de la
Catedral de Gerona por iniciativa de Pedro IV de Aragn, por lo que la pintura aludida
sera 300 aos posterior, puesto que, segn estos autores, es imposible que conservara la
pintura a la intemperie en su emplazamiento original durante tres siglos.Por su parte,
Francesca Espaol Bertrn, que estudi en profundidad el sepulcro, afirma que las
pinturas en ningn caso pueden ser contemporneas al momento de su inhumacin
inicial.
En 1081, Rodrigo Daz de Vivar el Cid, enemistado con su rey Alfonso VI de Len y
Castilla, se traslad a Barcelona y ofreci su colaboracin, que no fue aceptada. Acto
seguido, qued al servicio del rey Al-Muqtadir y de su hijo Al-Mutamn, reyes de la
taifa de Zaragoza, mientras que Al Mundir, rey de Lrida, se apoyaba en los navarros
primero y en los condes de Barcelona despus. Se enfrentaros los dos reyes moros y
esto enfrent a Berenguer Ramn con el Cid en la batalla de Almenar en el verano de
1082, ya que cada uno apoyaba a una faccin. Berenguer fue derrotado y hecho
prisionero siendo liberado poco tiempo despus, a cambio, seguramente, de un
importante rescate.
Alfonso VI someti a parias la mayor parte del territorio moro, y en 1082 atac Sevilla,
pero en 1083 sufri una emboscada en el castillo de Rueda, cuando supuestamente iba a
ser rendida a Alfonso. Aqu salv la vida gracias a la intervencin del Cid, que con este
acto se gan el agradecimiento de Alfonso VI, que le invit a volver a Castilla, extremo
que no es aceptado por el Cid.
../
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38

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Por su parte, Aragn, adems de las tareas de reconquista, llevaba a efecto la expansin
martima. La actividad martima y comercial repercuti en la expansin del barrio
martimo de Barcelona y en la influencia de sus prohombres, que consiguieron de Jaime
I importantes privilegios, como el de 1227 que asegur a las naves barcelonesas la
prioridad en el trnsito de mercaderas destinadas a Alejandra y a Ceuta, o las de
retorno con preferencia a cualquier barco extranjero. Privilegios que fueron ampliando,
especialmente como consecuencia de la conquista de Mallorca.142
La creacin del consulado del Mar fue un hito legislativo en el que se regulaba la
seguridad de las naves, las relaciones laborales entre el patrn y los marineros, el
mercado martimo, y la creacin del cnsul itinerante, que viajara en las naves con
autoridad delegada. El consulado del mar se estructurara definitivamente en 1348,
siendo que ya se haban extendido los mismos privilegios a Valencia y a Mallorca, que
los recibieron respectivamente en 1283 y en 1326. La idea de extendi posteriormente
tambin a otros puertos, e incluso Burgos adopt la idea en 1494.143
En este orden de cosas, se cre la Taula de Canvis, que vena a sustituir la legislacin
romana y goda que regan este negocio.
Estos son algunos de los artculos de esta legislacin bancaria, desarrollados pocos aos
despus:
- El 13 de febrero de 1300 se estableci que cualquier banquero que se declarara en
bancarrota sera humillado por todo el pueblo, por un voceador pblico y forzado a vivir
en una estricta dieta de pan y agua hasta que devolviese a sus acreedores la cantidad
completa de sus depsitos.
- El 16 de mayo de 1301 se decidi que los banqueros estaran obligados a obtener
fianzas y garantas de terceras partes para poder operar, y a aquellos que no lo hicieran
no se les permitira extender un mantel sobre sus cuentas de trabajo. El propsito de ello
era sealar a todo el mundo que estos banqueros no eran tan solventes como aquellos
que usaban manteles, es decir, que estaban respaldados por fianzas.
Cualquier banquero que rompiera esta regla (por ejemplo, que operase con un mantel,
pero sin fianza) sera declarado culpable de fraude. Sin embargo, a pesar de todo, los
banqueros pronto empezaron a engaar a sus clientes.
Debido a esos engaos, el 14 de Agosto de 1321 se estableci que aquellos banqueros
que no cumpliesen inmediatamente sus compromisos, se les declarara en bancarrota, y
si no pagaban sus deudas en el plazo de un ao, caeran en desgracia pblica, lo que
sera pregonado por voceros por toda el pueblo. Inmediatamente despus, el banquero
sera decapitado directamente enfrente de su mostrador, y sus propiedades vendidas
localmente para pagar a sus acreedores.
142

EL CONSOLAT DE MAR I ELS CONSOLATS D'ULTRAMAR, INSTRUMENT I MANIFESTACI


DE L'EXPANSI DEL COMER CATAL. MARIA TERESA FERRER I MALLOL
143

EL CONSOLAT DE MAR I ELS CONSOLATS D'ULTRAMAR, INSTRUMENT I


MANIFESTACI DE L'EXPANSI DEL COMER CATAL. MARIA TERESA
FERRER I MALLOL
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En el norte se llevaba, adems de esta guerra, otra. Sancho VII de Navarra no tena
descendencia y tema el ataque de Castilla, por lo que buscaba alianzas cerca de Aragn.
Sancho VII y Jaime I firmaron en Tudela (1231) un tratado de prohijamiento por el que
acordaban que aquel de los dos que sobreviviese al otro, ocupara el reino sin
obstculos. Finalmente, a la muerte de Sancho, acaecida por enfermedad el 7 de Abril
de 1234, Jaime I no ejercitara su derecho, subiendo al trono su sobrino Teobaldo, hijo
de su hermana Blanca, el 7 de abril de 1234, con lo que comenz a reinar en Navarra la
dinasta de Champaa.144
Teobaldo redujo la importancia de las tenencias como divisin territorial e implant
cuatro grandes distritos encomendados a merinos, a quienes atribuy funciones fiscales
y de orden pblico. Estableci sus leyes por escrito, elaborando un Cartulario Magno
con todas ellas, e inici la compilacin de las tradiciones jurdicas de la monarqua
navarra conocida como "Fuero General".145
En 1232, cuando la Inquisicin en Francia llevaba aplicando drsticos mtodos en la
persecucin de la hereja albigense, que iban desde la confiscacin y la crcel hasta la
amputacin de la lengua y la quema en la hoguera, fue introducida en Espaa por breve
del papa Gregorio IX. No obstante, es de destacar que en el reinado de Enrique IV de
Castilla (siglo XIV), no exista tribunal de la Inquisicin, y el hecho lo muestra la queja
de Alfonso de Espina, que auxili a lvaro de Luna, al lamentarse de la inexistencia de
inquisidores.
La Corona de Aragn llevaba su marcha imparable, iniciando la conquista de la taifa de
Valencia; en 1232 son tomadas Pescola y Burriana; Castelln en 1234. Se repuebla
principalmente con personas provenientes de Aragn.
En esas fechas, 1234, se constituy la taifa de Niebla, al mando de Mohamed ben
Mahfuz, emir del Algarbe, que ocupaba las actuales Huelva, Serpa, Moura, el Algarbe,
Faro, Tavira y Loul. Fue atacado sin xito por Ben Hud. Desapareci en 1262,
conquistada por Alfonso X.
Jaime I de Aragn, que en 1235 haba completado la toma de las Baleares con la
conquista de Ibiza y Formentera, tom Valencia en 1236 y la Castilla de Fernando III el
Santo tom Crdoba el mismo ao y Sevilla en 1248. En Granada perdur el poder
rabe con la fundacin del reino nazar, que no capitul hasta el 2 de enero de 1492,
fecha que puso fin a la Reconquista.
Por otra parte, los condados de Urgell y Ampurias fueron comprados por el rey Jaime I
de Aragn, a sus titulares Pedro de Portugal conde de Urgell, y al de Ampurias entre los
aos 1230 a 1235.146
/
144
145
146

Sancho VII de Navarra. http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=31289262


Teobaldo I de Navarra. http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=30294046
http://historiaregnemallorca.blogspot.com/2010/12/origenes-del-nombre-de-cataluna.html

40

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El tratado de Almizra fue un resultado interesante cuando los dos reyes hispnicos
estaban a punto de darse batalla. Mediaron hombres de prudencia y se evit el
encuentro; dando pie a un tratado de lmites que marc el fin de la expansin aragonesa,
el cual por haberse firmado en Almizra, es llamado comnmente con este nombre.
Violante, o Yolanda, esposa de Jaime I, busc para sus hijos e hijas matrimonios ilustres
y pretendi romper la unidad del reino creada en tiempo de don Berenguer IV, para que
sus hijos fuesen tambin reyes y condes independientes, primero en perjuicio de don
Alfonso, el hijo del primer matrimonio del rey y Leonor de Castilla, hija de Alfonso
VIII, despus en perjuicio del mayor de los habidos en el segundo.
Esta malfica influencia de doa Violante sobre su marido y la debilidad de ste
hicieron que don Jaime separase Aragn de Catalua, nombrando sucesor suyo en aqul
al infante don Alfonso y en ste a don Pedro. Para que los aragoneses juraran fidelidad y
reconocimiento a su futuro soberano, los llam a cortes en Daroca (en 1243) y entre los
llamados figuraban los ciudadanos de Lrida, dando a entender con ello que Lrida
formaba parte de Aragn.147 Pero luego, por decreto, deslig Lrida del reino de Aragn
y seal los linderos de sta entre el Cinca desde sus fuentes hasta el Ebro y este ro
hasta Tortosa.
Estos extremos se establecieron mediante el testamento de 1247. En dicho documento,
Jaime I legaba a Alfonso, hijo de su primer matrimonio con Leonor de Castilla, el reino
de Aragn; para Pedro, fruto de su unin con Violante de Hungra, el condado de
Barcelona, el reino de Mallorca y el condado de Ribagorza; y a Jaime y Fernando,
hermanos de ste, respectivamente les correspondan el reino de Valencia y el condado
de Roselln. El descontento de Alfonso le hizo recurrir al monarca castellano y provoc
una revuelta nobiliaria, solventada por las cortes de Alcaiz (1250), en las que se
estableci que a Alfonso le correspondern Aragn y Valencia; a Pedro, Catalua y a
Jaime el reino de Mallorca y el seoro de Montpellier.148 El conflicto con Alfonso se
resolvera en 1260, ya que falleci, y un nuevo testamento sera el que llegara a
cumplirse: En su testamento de 1261, Jaime I de Aragn dispuso que los condados del
Roselln y la Cerdaa haban de pasar a formar parte del reino de Mallorca, que
correspondera a su hijo Jaime, quedando separados de Aragn, Catalua y Valencia que
seran para Pedro III de Aragn (Pedro el Grande); a partir de entonces, el infante Jaime
administra como veguer (una versin local del corregidor castellano) su futuro reino.
Tras la muerte de Jaime I (1276), este testamento se puso en prctica y los condados del
Roselln y de Cerdaa pasaron a dominio de Jaime II de Mallorca (1276-1311), que
convirti a Perpin en la segunda capital del reino.
En 1245, la hambruna se haba cebado sobre la poblacin de Jan. Mientras, las huestes
del rey santo estaban nuevamente al asalto. Asol el territorio entre Jan y Granada sin
que los moros osasen hacer frente. Finalmente cerc Jan. Era la tercera vez que lo
intentaban los ejrcitos espaoles en veinte aos (1225 y 1230 fueron las ocasiones
anteriores), y sta sera la definitiva. Ces la lucha en 1246. Jan, y con l todo el valle
del Guadalquivir, cay en manos espaolas, y con ello, la sumisin del reino nazar que
147

http://www.teresafreedom.com/modules.php?name=News&file=article&sid=203

148

http://www.artehistoria.jcyl.es/historia/personajes/5236.htm
41

comportaba, adems del pago de parias (150.000 maravedes anuales), el vasallaje del
reino y el compromiso de ayudar militarmente a Fernando III cuando fuesen requeridos.
/
/
La nobleza levantisca era un problema existente tanto en Aragn como en Castilla, y los
fueros que la amparaban le permitan dejar el servicio a la monarqua y prestrselo
abiertamente a sus enemigos, y planteaba problemas como el exigir al rey que no
tuviese en su consejo letrados y legistas entendidos a quienes consultar.149
En 1261 Alfonso X tomaba Jerez y la comarca del Guadalete, y en 1262, con apoyo
nazar, Niebla, taifa vasalla de Castilla. Esto debi alarmar a Mohamed I, que comenz
a urdir revueltas.150
En 1262 se produjo una revuelta de los mudjares descontentos, auspiciada por
Mohamed I, que ya vea cercano el final de la tregua de veinte aos firmada con
Fernando III en 1246. Las relaciones con Alfonso X contrastaban con las tenidas con
Fernando III.
Mohamed I pidi ayuda a los benimerines, que el ao 1263 desembarcaron en Tarifa
tres mil jinetes al mando de Abdala ben Idris, y que aguardaron en Mlaga el estallido
de la revuelta mudejar.151 La rebelin, que cogi desprevenido a Alfonso X, conoci
varios focos, principalmente centrada en Jerez y su comarca y en la taifa de Murcia,
estaba perfectamente coordinada, consiguiendo victorias a destacar en Osuna y en
Baena, e incursiones en Baeza, beda y Quesada. En Jerez tomaron el alczar.152
Las noticias musulmanas dicen que volvieron al poder musulmn treinta y dos
localidades, y que Alfonso X desenterr el cuerpo de su padre de su sepultura en Sevilla
y lo llev a Toledo, y el Llibre del Fets afirma que en tres semanas se perdieron
trescientos lugares, entre ciudades, villas grandes y castillos. Y las matanzas, segn
relatan las fuentes rabes, fueron descomunales.153
Las noticias castellanas dicen lo siguiente: los que haban fincado en el reyno de
Murcia alzronse contra el rey don Alfonso e cobraron algunos de los castillos que
tenan los cristianos. E otros los moros que avan fincado en Xerez e en Arcos, e en
Lebrija e en Utrera, alzronse contra el rey don Alfonso, e el rey de Granada comenz a
facer la guerra mucho afincada E eso mesmo hicieron los moros de cada uno de los
otros lugares a los alcaldes que estaban por el rey don Alfonso en los castillos,
sealadamente en el regno de Murcia.154
149

Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo IV. Pag. 272
Muhammad I y el nacimiento del Al-Andalus Nazar (1232-1273) Brbara Boloix
Gallardo. Pag 194
151
Muhammad I y el nacimiento del Al-Andalus Nazar (1232-1273) Brbara Boloix
Gallardo. Pag 235
152
Muhammad I y el nacimiento del Al-Andalus Nazar (1232-1273) Brbara Boloix
Gallardo. Pag 236
153
Muhammad I y el nacimiento del Al-Andalus Nazar (1232-1273) Brbara Boloix
Gallardo. Pag 240
150

42

La revuelta dur tres aos, hasta 1266, y fue tan intensa en Murcia como lo fue en el
occidente. En Murcia, el hijo de Ben Hud tom el control de la situacin y encabez la
revuelta, llegando a reconocer la autoridad de Mohamed I.
Pero la sedicin en el bando moro estaba sembrada; los benimerines exigan la posesin
de las plazas tomadas, el mando exclusivo de las tropas y remuneraciones en dinero, lo
que propici el incomodo de las tropas andaluses, lo que unido a los problemas
sucesorios pona palos en las ruedas de los intereses musulmanes. Mlaga, Comares,
Guadix y Ronda pidieron ayuda a Castilla en 1266.
/
En el ao 1265 Jaime I de Aragn crea para la ciudad de Barcelona el
CONSELL DE CENT", Ayuntamiento de Barcelona, ciudad y condado
que hasta esta fecha haba sido propiedad feudal de Jaime I de Aragn,
con sus ciudadanos sbditos feudales sin ningn derecho civil, sujetos a
los Usatges (escritos en lemosn, no en cataln) cdigo feudal de
Barcelona (no de Catalua) que les haba dado Ramn Berenguer I. 155
Por su parte, Jaime I embarc en 1269 a Tierra Santa, solicitado por el Khan de los
trtaros y por el emperador de Constantinopla para luchar con ellos contra los turcos,
pero la expedicin fracas en el mar, y se vio obligado a renunciar a la empresa O
Jaime I no estim oportuno participar, y se volvi.
Los conflictos con los judos seguan larvados en los reinos hispnicos, donde se haba
llevado una poltica de asimilacin que haba resultado ineficaz. Jaime I desarrolla una
intensa labor de proselitimo, especialmente entre los aos 1263 a 1265, mientras su
yerno Alfonso prohbe a los judos yacer con cristianas ni tener siervos bautizados.
Por otra parte, La voz popular acusaba a los judos de crmenes y profanaciones
inauditas. Oyemos decir, escribe el legislador, que en algunos lugares los judos
ficieron et facen el dia de Viernes Sancto remembranza de la pasin de Nuestro Seor
Jesu Christo, furtando los nios et ponindolos en la cruz, e faciendo imgenes de cera,
et crucificndolas, quando los nios non pueden aver. Gonzalo de Berceo, en los
Milagros de Nuestra Seora, y el mismo D. Alonso, en las Cantigas, haban consignado
una tradicin toledana muy semejante.156
En 1275 se sublevaron los mudjares valencianos y Jaime I fue en persona a sofocar la
revuelta. El Conquistador fue derrotado por los moros en Llutxent (junio de 1276),
falleciendo el 27 de Julio de 1276 a los 71 aos, tras sesenta y tres de reinado. Sera
enterrado en el monasterio de Poblet, dejando un reino con confrontaciones armadas y
una poblacin de 200.000 musulmanes y 30.000 cristianos en el Reino de Valencia, y
una importante minora juda.157
154

Crnica del Rey D. Alfonso X. Claudio Snchez Albornoz. La Espaa Musulmana. T.


II Pag. 435-436
155
http://historiaregnemallorca.blogspot.com/2010/12/origenes-del-nombre-decataluna.html
156
Historia de los heterodoxos espaoles. Marcelino Menndez Pelayo. Pag. 400-401
157
Apellidos y Migraciones Internas en la Espaa cristiana de la Reconquista. Fernando
Gonzlez del Campo Romn
43

Cuando las continuas divisiones de los reinos en funcin de matrimonios, testamentos y


repartos desborda el malestar nobiliario, la oposicin al heredero del trono se
materializa en la alianza y confederacin de una parte de la nobleza con un bastardo de
Jaime I, don Ferrn Snchez, asesinado en el Cinca. Conflicto que desemboca en un
enfrentamiento frontal contra la monarqua tras morir el Conquistador, cuando accede al
trono Pedro III y los nobles consiguen arrancarle en 1283 el Privilegio General y, unos
aos ms tarde, en 1287, tambin logran obtener de su sucesor Alfonso III el Privilegio
de la Unin.158
/
A finales de Junio de 1412 se resolvi en Caspe el vaco sucesorio ocasionado en la
Corona de Aragn a la muerte de Martn el Humano. Tres personas tienen especial
significacin en el mismo: Berenguer de Bardax y Pedro de Luna (Benedicto XIII, el
papa Luna) y San Vicente Ferrer.
A la muerte del rey Martn el Humano en 1410 sin sucesin directa legtima, eran varios
los aspirantes al trono en distinto grado de parentesco. Por primera vez en la historia de
la Corona -y por segunda en el reino de Aragn- se planteaba un problema de vaco de
poder despus de que, durante siglos, la sucesin se haba resuelto tradicionalmente por
primogenitura y masculinidad. La incgnita de la ltima voluntad del monarca difunto,
que haba perdido la garanta de la continuidad dinstica con el fallecimiento de su
nico hijo Martn de Sicilia en 1409, permiti especular con las postreras palabras del
moribundo respecto al debate sucesorio que se prevea inmediato tras el ltimo
estertor.159
A diferencia de Castilla o Navarra, ni en la legislacin aragonesa ni en la catalana o
valenciana constaba ordenamiento alguno que regulara explcitamente la sucesin real.
Las nicas disposiciones legales referidas al acceso al trono de un nuevo monarca daban
por supuesta su legtima designacin y se ocupaban exclusivamente de los actos
referentes a la coronacin y juramento.
Pero, en esta ocasin, faltaba la continuidad de la casa de Barcelona en la ocupacin
directa del trono. Si hasta la fecha en los testamentos de los reyes se haca constar la
persona a la que correspondan los reinos y tierras de la Corona, el del rey Martn no
resolva la cuestin, pues en el nico testamento conservado dejaba heredero universal a
su hijo Martn de Sicilia, fallecido antes que l, y, en su defecto, a sus descendientes,
slo que el rey de Sicilia nicamente tena un hijo bastardo, condicin que le exclua
automticamente del trono. 160
Seis eran los candidatos, pero dos los nicos que tenan posibilidades: Fernando de
Trastmara, sobrino de Martn el Humano y Jaime, conde de Urgel, sobrino nieto. Los
otros cuatro: Alfonso de Ganda, pariente en quinto grado; Luis de Anjou, hijo de su
sobrina Violante; Federico de Luna, hijo ilegtimo; Juan, conde de Prades.
158

JAIME I, ARAGN Y LOS ARAGONESES: REFLEXIONES SOBRE UN REY,


UN TERRITORIO Y UNA SOCIEDAD. M Luz Rodrigo Estevan Pag. 23
http://ifc.dpz.es/recursos/publicaciones/29/46/_ebook.pdf
159
160

http://www.enciclopedia-aragonesa.com/voz.asp?voz_id=4057
http://www.enciclopedia-aragonesa.com/voz.asp?voz_id=4057

44

Los jueces que determinaron la sucesin representaban a Aragn, Valencia y Catalua,


siendo que las decisiones siempre deban estar apoyadas, al menos por un representante
de cada territorio. La nica nota discordante eran los conjurados del Parlamento de
Mequinenza, que intentaban imponer al conde de Urgel. Curiosamente ningn
representante perteneca a la nobleza, sino al clero y a gentes de leyes.
A finales de 1411 todo pareca indicar que la nica solucin era la de las armas Cada
faccin rival tena su parlamento simultneo En 1412 el papa Benedicto XIII, desde
Pescola propuso una solucin: la eleccin de compromisarios en nmero igual por los
parlamentos de Aragn, Valencia y Catalua, a los que se encargara la papeleta de
decidir el sucesor. No se acept representacin del reino de Mallorca ni del de Sicilia.161
/
/
La situacin en que quedaron las fuerzas aragonesas en Npoles se vea debilitada ante
la coalicin a la que se haba sumado el papa Martn V, pero afortunadamente, se le
unieron los descontentos genoveses y una flota siciliana les sac del apuro en 1425.
En 1425 mora Carlos III de Navarra y ascenda al trono Blanca I, siendo consorte Juan,
hermano de Enrique, que se hallaba encarcelado por Juan II de Castilla, y hermano de
Alfonso el Magnnimo, que sucedera a ste como Juan II de Aragn, de cuyo enlace
nacera el prncipe Carlos, Prncipe de Viana.
Juan se ocup ms de los asuntos de Castilla que de los de Navarra; tanto que no sera
jurado como rey hasta 1428, cuando las Cortes le negaron los apoyos para proseguir la
guerra, por lo que se vio obligado a embargar sus bienes y los de Blanca de Navarra.
Siendo ya rey de Navarra, consigui Juan la libertad de su hermano Enrique, quin acto
seguido organiz una liga de nobles que se conjur contra lvaro de Luna, del que
consigui un decreto de destierro por parte de Juan II. lvaro de Luna tuvo un destierro
de oro desde el que mantena una fluida correspondencia con el rey. La anarqua se
generaliz en el reino, por lo que fue llamado a la corte. l se neg, y finalmente el rey
le oblig a reasumir el cargo162.
Y qu nobles eran los que tenan tanto poder? Los mismos que mantendran las
discordias sociales durante el reinado de Enrique IV y durante parte del reinado de los
Reyes Catlicos: Juan Pacheco (Marqus de Villena); arzobispo Carrillo; Juan Alfonso
Pimentel, el conde de Benavente, Pedro Girn (Maestre de Calatrava); Beatriz Pacheco
(Condesa de Medelln), y la familias Pimentel, Portocarrero y Acua, todos dedicados a
enriquecer su patrimonio acaparando bienes y ttulos nobiliarios; formaron alianzas,
provocaron desequilibrios y posibilitaron enfrentamientos dentro del reino de Castilla y
entre Castilla y Portugal.
En 1427 era derrocado Mohamed IX, sustituido por Mohamed VIII, hasta que en 1429,
un nuevo golpe elev a Mohamed IX, que acab asesinando a Mohamed VIII dos aos
despus. El reinado de Mohamed IX se parece al Guadiana, ya que volvi a ser
161
162

Otra Historia de Catalua. Marcelo Capdeferro. Pag. 142-143


Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 12

45

derrocado en 1431; volvi en 1432 y volvi a ser derrocado en 1445 para volver a reinar
a partir de 1447 hasta 1454.
Diego de Silves lleg a las Azores en 1427 y Gonalo Belho Cabral alcanz las islas
ms orientales del archipilago en 1431. Las islas no tenan poblacin humana. Seran
pobladas principalmente por genoveses, judos, moriscos y franceses.
En 1429, el futuro Juan II de Aragn invadi Castilla en defensa de sus hermanos los
Infantes de Aragn, pero la expedicin fue abortada por la intervencin de Mara de
Aragn, esposa de Juan II de Castilla e hija de Fernando I de Aragn, si bien, el apoyo
de Alfonso V el Magnnimo a sus hermanos Enrique y Pedro acarreara la guerra entre
Castilla y Aragn entre los aos 1429-1430. Juan II embarga los bienes de los infantes
de Aragn y encarcela a Leonor, madre de los infantes.
/

/
En 1441 falleca Blanca de Navarra, que sera sucedida por Carlos IV, su hijo, el
Prncipe de Viana, que, aliado a los beamonteses y al condestable de Castilla lvaro de
Luna, declar la guerra a su padre (el futuro Juan II de Aragn) en 1451, tras graves
desencuentros entre los que no fue el menor la boda de Juan con Juana Enriquez, hija
del almirante de Castilla. Agramonteses y biamonteses tomaron partida en sendos
bandos.163
En 1442, Alfonso V de Aragn conquist finalmente Npoles, frente a la alianza del
papa Eugenio IV con Venecia, Florencia y Gnova, y se mantena alejado de los graves
problemas que acuciaban Aragn por entender que se trataba de maniobras del duque de
Anjou para hacerle desistir de su conquista. Haba tardado veinte aos en lograr su
objetivo. Nuevamente mostr su magnanimidad al perdonar a quien tantas veces le
haba traicionado, el duque de Bari, y dio asiento en su ejrcito a otros que le haban
combatido. Nombr a su hijo bastardo, Fernando, duque de Calabria y sucesor del reino
de Npoles.164
Mientras segua el enfrentamiento en Castilla, donde Juan, consorte viudo de Navarra,
acta como nico rey, llegando a secuestrar a Juan II, que fue encerrado en el castillo de
Portillo. Este hecho posibilit que buena parte de la nobleza pasase a apoyar a lvaro de
Luna, que abandonando su destierro consigui sacar de su cautiverio a Juan II. Los
ejrcitos acabaron enfrentndose en Olmedo (Valladolid) el 19 de Mayo de 1445, con un
resultado dudoso tras el que se retiraron los ejrcitos navarro y aragons. lvaro de
Luna volva a su apogeo, y reparta cargos y mercedes a sus nuevos aliados, Pedro
Girn, Juan Pacheco, Iigo Lpez de Mendoza Llegando incluso a pactar el
matrimonio del rey, recientemente viudo, con Isabel, hija del infante Juan de Portugal,
quin al fin sera responsable de su ruina.165

163

Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 101.102
Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 81-82
165
Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 35-36
164

46

Por otra parte, el nunca extinto conflicto judo haba llevado en este tiempo una serie de
vaivenes; por una parte se haba acosado al pueblo judo prohibindole ejercer como
mdicos, cirujanos, tenderosetc. Pero Juan II dio en Arvalo una pragmtica por la
que pona bajo su custodia a los hijos de Israel Pero el sacrilegio llevado a cabo por
un judo en Segovia signific el ahorcamiento de algunos rabinos, con un hecho
aadido: los ilustres conversos Pablo de Santa Mara, Alfonso De Cartagena, Fray
Alonso de Espina, y otros judos que haban abrazado el cristianismo eran los que ms
concitaban los nimos contra sus antiguos correligionarios.166
Fr. Alonso de Espina se quejaba en el Fortalitium de la muchedumbre de judaizantes y
apstatas, proponiendo que se hiciera una inquisicin en los reinos de Castilla. A
destruir este judasmo oculto dedic con incansable tesn su vida. El peligro de la
infeccin judaica era grande y muy real. Confesbalo el mismo Fr. Alfonso de Oropesa,
varn evanglico, defensor de la unidad de los fieles, en su libro Lumen Dei ad
revelationem gentium, el cual, por encargo del arzobispo Carrillo, hizo pesquisa en
Toledo, y hall, conforme narra el P. Sigenza, de una y otra parte mucha culpa: los
cristianos viejos pecaban de atrevidos, temerarios, facinerosos; los nuevos, de malicia y
de inconstancia en la fe.167
/
Los abencerrajes estaban descontentos con el nuevo rey por la tirana que ejerca; puesta
esta familia de acuerdo con Juan II de Castilla cruzaron la frontera cerca de Montefro,
llevndose con ellos al prncipe Ismail, primo hermano del monarca, y en el lugar
conocido por las Angosturas, en el camino hacia Alcal la Real, los caballeros cristianos
de aquel sector fronterizo y principalmente el Conde de Cabra, Diego Fernndez de
Crdoba, lo proclamaron rey de Granada. Gobern por espacio de 7 aos, se nombr
decimoctavo rey de la dinasta nazarita con el nombre de Ismail III, (el aben Ismail de
las crnicas cristianas). 168
En 1445, Diego Alfonso mand colocar en el cabo Blanco un pedrao, el primero de los
mojones que fueron jalonando la ruta de los descubrimientos portugueses. En 1446
Alvaro Fernndez alcanz Sierra Leona. Durante los siguientes aos las exploraciones
se detienen, tras un ritmo frentico en el que cada dcada traa varios descubrimientos a
cual ms significativo. El motivo no est claro, pero se sabe que hasta que las
pretensiones portuguesas no fueron sancionadas en 1454 por la bula de Nicols V
Romanus Pontifex, que en la prctica pona todas las tierras descubiertas en manos de
Portugal, las exploraciones no continuaron.169
En 1447 Alfonso V el Magnnimo era el indudable rbitro de Italia; slo Venecia y
Florencia se mantenan en sus posiciones anteriores, y hasta los Sforza se sometieron,
nombrando heredero de sus estados, el Milanesado, a Alfonso, lo que ocasion un
levantamiento en armas contra los catalanes, como conocan en Italia a los soldados de
Aragn.

166

Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI Pag. 308
Historia de los heterodoxos espaoles. Marcelino Menndez Pelayo. Pag. 403
168
http://es.wikipedia.org/wiki/Montefr%C3%ADo
169
Enrique el Navegante. Juan Antonio Castro Jimnez
167

47

A todos se impuso el Magnnimo, y todos solicitaron finalmente su amistad. El duque


de Gnova, Demetrio de Rumana, Jorge Castrioto, de Albania Hasta que el nuevo
duque Sforza de Miln volvi a sublevarse en 1451.170
Tambin en 1447 Castilla est nuevamente en guerra, con la nobleza enfrentada por sus
intereses particulares. El prncipe Enrique y Juan Pacheco huyeron, y todos constataban
que el poder de Castilla estaba en manos de lvaro de Luna.
En 1448 era proclamado mayor de edad Alfonso V de Portugal, que anul todas las
leyes y edictos que se haban aprobado durante la regencia. La situacin se volvi
inestable y, en los aos siguientes, Alfonso declar la guerra a su to Pedro y derrot a
su ejrcito en la batalla de Alfarrobeira, dndole muerte. Entonces se dio a la conquista
de frica, y dio a poyo a su to Enrique el Navegante en la exploracin del Ocano.
/
No parece que lvaro de Luna fuese tirano, sino un buen servidor de su rey. Aqueste
muy valeroso Maestre Condestable fu en cercar con el Rey su seor muchas
cibdades, villas castillos que estaban l rebeldes, en las combatir, tomar por pura
fuerza trabajo , derramando su sangre, escogiendo ante todos con generoso grand
corazn para s los mas abiertos , conoscidos peligros. Aqueste fu muchas veces el
delantero , que primero firi en los enemigos , fue muchas veces ferido, rescibi
muchos golpes en el pecho en la cara, en otras partes de su cuerpo, sin ser ferido
ninguna vez en las espaldas. Persigui iszo fuir muchas veces sus enemigos, nunca
por ser perseguido fuy de ninguno dellos. Fu en dos veces en deliberar su Rey, que
estaba detenido contra su voluntad. Fu cercado con l una vez, comi carne de
caballo por necessidad.
Fu otra vez meterse con el Rey su seor quando en Medina lo tenan cercado. Fu
muy riguroso contra los levantados por sobervia, muy manso benigno contra los
cados. Suplic al Rey muchas veces que perdonasse los que le avian trabado la muerte ,
por aver misericordia dellos. Pues de la grandeza de su estado , quin que bien lo
sopiesse , templadamente lo podra escrebir Nin la su grand riqueza , grand
tesoro moderadamente estimar?171
El 10 de marzo de 1452 naca en Sos el hijo de Juan II de Aragn, Fernando, y pocos
meses despus fue asediado en Estella por las tropas castellanas. Acudi Juan, que tom
preso a su hijo primognito Carlos, el prncipe de Viana. Pero las cortes de Aragn se
mostraron partidarios de Carlos, y Pamplona, partidaria de los piamonteses, envi
embajadores a favor del prncipe, que fue puesto en libertad.
Esas mismas cortes nos sealan la situacin social. Esta guerra ha despoblado vuestras
fronteras; slo en rescate de prisioneros hemos gastado cuatrocientos mil florines; la
industria y el comercio se han paralizado.172 Si es cierto que la desaceleracin
econmica se manifestaba con crudeza, y que fue sufrida de forma personal por el
propio monarca aragons, tambin es cierto que la red comercial e industrial estaba
170

Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 91
CRNICA DE D. ALVARO DE LUNA, DON JOSEF MIGUEL DE FLORES.
http://archive.org/details/cronicadedalvaro00flor
172
Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 186
171

48

pergeada en ese momento. Ya en 1422 se hizo un reglamento general para la


perfeccin de las fbricas de paos de Catalua y se prohibi la importacin de prendas
de lana y de seda, as como todo tejido de oro y plata.173
En Barcelona, los hombres de la Busca, se hicieron con el poder en 1453. La nobleza y
praticiado urbano se aliaron para defender sus derechos frente a la amenaza de
subversin en la ciudad y en el campo. El virrey, D. Galcern de Requesns, que se
haba ganado la enemistad de la oligarqua y el rey y al que los campesinos haban
llamado, suspendi los seis malos usos en 1455 y proclam la libertad de los remensas.
Las "Corts" se establecieron en sesin permanente desde 1454 a 1458 y reaccionaron
violentamente, por lo que el rey tuvo que suspender el decreto al ao siguiente,
volvindolo a confirmar en 1457.
El 29 de Mayo de 1453 entraron los turcos en Constantinopla, matando al emperador
Constantino Palelogo y a toda la nobleza cristiana, ante la desidia de toda la
cristiandad, y con la sola preocupacin de Alfonso el Magnnimo, que procur el
socorro de una coalicin que no lleg a formarse hasta el ao siguiente, muriendo el
papa Nicols V dos meses despus, cuando fue sucedido por Alfonso de Borja como
Calixto III.174
/
Los nobles empezaron a conspirar. Juan Pacheco se haba convertido en privado, y
destitua quin le molestaba en sus intereses. Juan Pacheco era hechura de lvaro de
Luna, a quin igual en ambicin pero no en lealtad, y aventaj en egosmo y maa para
urdir intrigas. Conspiraba con todos y contra todos, y era el revolvedor ms activo y
peligroso.175
La situacin en Castilla era de total anarqua; grandes y prelados vilipendiaban el trono
mientras opriman al pueblo, al tiempo que el pueblo aborreca a la nobleza. Discordias,
insultos, guerras de uno contra todos; desorden moral, robos, asesinatos, anarqua Tal
era el estado del reino de Enrique IV.
Enfrentado Enrique con Aragn, apoy a Carlos de Viana, sublevado contra su padre en
1450 al negarse ste a darle el trono de Navarra. En el curso de este enfrentamiento,
anul el acuerdo matrimonial existente entre Isabel y Fernando, comprometiendo a
Isabel con Carlos, prncipe de Viana. Luego la comprometera con Alfonso V de
Portugal, con Pedro Girn, y con el duque de Guyena, hermano de Luis XI de Francia.
Isabel se opona a todo. Quera casarse con su primo Fernando de Aragn, pero con el
beneplcito papal, que no era concedido.
Alfonso V el Magnnimo segua deseando participar en la reconquista de
Constantinopla, con tanto vigor como clamaba por su defensa antes de caer en manos de
los otomanos, pero Calixto III le recrimin el no haber iniciado la reconquista, el
Magnnimo se quejaba: Yo habl con vosotros los das pasados sobre lo de la empresa
173

Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 189
Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 91
175
Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 212
174

49

de los turcos, y por ser cosa tan grande he esperado cmo se moveran otros, y he
diferido el determinarme en ello. Ya veis que los reyes y prncipes cristianos,
mirndonos unos a otros, dormimos; y as el nimo y osada del enemigo siempre se
aumenta y crece.176
Y ah qued Constantinopla, perdida hasta hoy para la civilizacin. Alfonso el
Magnnimo intent evitarlo, y slo le sirvi para enfrentarse con el papa Calixto III.
Entre tanto, un prncipe de Viana derrotado se present en la corte de Alfonso V el
Magnnimo en 1456, pidiendo su intermediacin en el conflicto que mantena aquel con
su padre, y mientras los biamonteses lo proclamaban rey, Juan lo desheredaba junto a su
hermana Blanca, nombrando heredera a la hermana menor, Leonor y a Gastn de Foix,
e instituy gobernadora general del reino a Leonor, que se estableci en Sangesa.
Durante estos aos la guerra civil impidi la gobernacin cabal que, de hecho,
ejercieron Martn y Pierres de Peralta, jefes de los agramonteses.177
/
Muri el Magnnimo en 1458, dejando como rey de Npoles a su hijo bastardo
Fernando de Calabria, y como rey de Aragn, Valencia, Mallorca, Cerdea, Crcega y
Sicilia y conde de Barcelona, a su hermano Juan, a la sazn rey consorte de Navarra.
Sera conocido como Juan II el Grande. Esta nueva situacin truncara las expectativas
del prncipe de Viana, de quin el difunto era valedor.178
Carlos se qued en Npoles, pero como quisieran coronarlo rey, march a Sicilia hasta
que atendiendo la invitacin de su padre embarc para Aragn. All, de parte de Enrique
IV de Castilla, le lleg la oferta de matrimonio con Isabel, mientras reciba
humildemente a su padre y madrastra. La respuesta de Juan II fue encerrar en un castillo
a Carlos, Prncipe de Viana. El motivo del encierro fue provocado por los consejeros de
Juan II, que ciego de cataratas como estaba, no pudo comprobar unos supuestos
documentos en los que Enrique IV de Castilla, adems de la boda con Isabel, le ofreca
ayuda total contra su padre y la cesin de Soria, Calahorra y Agreda como premio.179
Pero para acceder al trono, las cortes, que apoyaban al prncipe de Viana, reunidas en
Lrida en 1460 pidieron a Juan II que liberara a su hijo. Tambin le obligaron a acatar la
Capitulacin de Villafranca del Peneds, donde se le limitaba el poder real y se le
prohiba entrar en Catalua sin permiso, extremo que no lleg a cumplir. Esta situacin
oblig a Juan II, el 25 de febrero de 1461, a liberar al prncipe.
Por su parte, en Portugal, a la muerte de Enrique el Navegante en 1460, las
exploraciones portuguesas sufrieron un duro revs, ya que el infante portugus haba
sido el mayor apoyo de los marinos y hombres de ciencia embarcados en dicho
proyecto.180

176

Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI Pag. 93-94
Leonor de Foix. http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=31529138
178
Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 106
179
Otra Historia de Catalua. Marcelo Capdeferro. Pag. 160
180
Enrique el Navegante. Juan Antonio Castro Jimnez
177

50

En 1461, en Castilla, Juan Pacheco, su hermano Pedro Girn, su to el arzobispo


Carrillo, el almirante, el marqus de Santillana, Pedro de Haro, Rodrigo e Iigo
Manrique, y Pedro Gonzlez Mendoza, obispo de Calahorra, constituyeron una liga
nobiliaria a la que Enrique IV prcticamente les cedi el poder, y en base a l iban
adquiriendo propiedades territoriales.
En 1462 naca Juana, la hija de la reina Juana de Castilla, supuestamente engendrada
por Beltrn de la Cueva, que comenz a conocerse como la Beltraneja. Su supuesto
padre alcanzaba ttulos que escandalizaban a todos, y una nueva conjura sigui
desestabilizando el reino.
El primado de Toledo, el marqus de Villena, el almirante don Fadrique, los condes de
Plasencia, Alva, Paredes, el obispo de Coria, el maestre de Calatrava, se conjuraron
contra el rey y una noche entraron en palacio con la intencin de prender al rey y a
Beltrn de la Cueva, extremo que no llegaron a cumplir por tratarse, tal vez, tan slo de
mostrar su poder. Enrique IV no se dio por enterado y nombr maestre de Santiago a
Beltrn de la Cueva, privando del ttulo a quien por ley le corresponda: a Alfonso, su
hermanastro y hermano de Isabel.181
/
El ao 1462, Juan II hizo jurar como heredero a su hijo Fernando, que contaba nueve
aos de edad. A la par obtena el apoyo de Luis XI Francia a cambio de poner como rey
de Navarra al hijo de ste, que casara con Blanca, y a un emprstito para el que
empeaba los condados de Roselln y Cerdaa, que finalmente quedaran retenidos
hasta 1493.
Blanca, viendo el negro porvenir que le esperaba, escribi a Enrique IV, que la haba
repudiado aos atrs, cedindole sus derechos a la corona de Navarra. Luego sera
envenenada por su hermana Leonor.
El ejrcito de la Generalidad siti a la reina Juana y a su hijo Fernando en Gerona, que
era defendida por los remensas comandados por Francisco de Verntallat, siendo liberada
cuatro meses despus. El resultado fue la prdida de Cerdaa y Roselln, que pasaron a
poder del rey de Francia.
La guerra se generaliz. En 1462 las tropas reales sitiaron Barcelona. El rey Juan II y
Fernando fueron declarados por la diputacin enemigos de la repblica, proclamando a
Enrique IV de Castilla conde de Barcelona, que en 1463, instado por Juan Pacheco, que
persegua intereses particulares (Pacheco haba firmado acuerdos con Juan II y con el
otro implicado, el monarca francs Luis XI, que le prometi casar a una de sus hijas
bastardas a un hijo de Pacheco)182 abandon el apoyo que prestaba, por lo que fue
ofrecido el condado a don Pedro, Condestable de Portugal, que el 21 de Enero de 1464
fue coronado en Barcelona rey de Aragn y de Sicilia. Los partidarios de Juan II, y por
tanto de Fernando, fueron considerados traidores, puesto precio a su cabeza y cazados
sin contemplaciones.183

181

Historia general de Espaa Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 146-147
Pacheco, Juan Fernando, Marqus de Villena (1419-1474).http://www.mcnbiografias.com/appbio/do/show?key=pacheco-juan-fernando-marques-de-villena
183
Otra Historia de Catalua. Marcelo Capdeferro. Pag. 151
182

51

La accin de Pachecho y el abandono de Enrique IV conllev un terremoto en la corte


castellana. Beltrn de la Cueva sustituy a todos los efectos al marqus de Villena como
nuevo privado de Enrique IV. Movido por esta cuestin, Pacheco, junto a su hermano, el
maestre, y su to, el arzobispo Carrillo, agrup a los descontentos con el ascenso de
Beltrn de la Cueva para urdir un plan novedoso: forzar a Enrique IV a nombrar
heredero a su hermano Alfonso, en detrimento de su hija Juana. Muchos de los grandes
del reino, como el almirante de Castilla, Fadrique Enrquez, el conde de Paredes,
Rodrigo Manrique, su hermano Gmez Manrique, el conde de Benavente, Rodrigo
Alonso de Pimentel (yerno del marqus de Villena), el conde de Plasencia, lvaro de
Estiga, o el conde de Alba, Garca lvarez de Toledo, se unieron a la trama. En
octubre de 1464, el marqus de Villena ya se haba convertido en tutor del joven
prncipe, lo que, unido al apoyo nobiliario, hizo posible que Enrique IV aceptase jurar a
su hermano Alfonso como heredero, invistindole con el ttulo de Prncipe de Asturias
el 4 de diciembre de 1464.
Fernando, en febrero de 1465, venci en Prados del rey a Pedro de Portugal, donde
cayeron prisioneros multitud de nobles, entre ellos el conde de Pallars, jefe del ejrcito
de la Diputacin. Fue el principio de la victoria final de Juan II, favorecida por el
fallecimiento de Pedro por enfermedad, y por la sagacidad de la reina Juana, en lo
poltico y en lo militar, que contrarrestaban las deficiencias que por motivo de las
cataratas tena Juan II.
/
/
La poblacin total de Espaa era en estos momentos algo ms de seis millones de
personas: Aragn contaba con 850.000 habitantes; Portugal 1.000.000; Navarra
120.000; el reino de Granada 300.000, y Castilla casi el doble que todos ellos juntos:
4.200.000.184
A la muerte de Leonor de Navarra design como heredero a su nieto Francisco I, de diez
aos de edad, bajo la regencia de su madre Magdalena de Francia, que contaba con el
apoyo de los agramonteses. Los beamonteses se pusieron en la rbita de Fernando el
Catlico, que implant un protectorado sobre el reino. Finalmente, beamonteses y
agramonteses solicitaron a los Reyes Catlicos que tomasen Tudela con una guarnicin
militar castellana para mantener el orden, tras lo cual pudo el rey Fernando dedicarse de
lleno a culminar la obra ocho veces secular de librarse de la invasin sarracena.185
Los nobles levantiscos tenan soliviantada Galicia A resolver los asuntos gallegos
acudi Fernando de Acua, con 400 caballeros, mientras Fernando e Isabel acudan a
Barcelona a resolver las quejas por los pactos tenidos con el rey Juan II al final del
conflicto de los remensas.186 Los payeses de remensa eran campesinos adscritos a la
tierra de forma hereditaria, que podan romper dicha adscripcin mediante el pago de
una cantidad de dinero, la remensa. Adems de la remensa, los campesinos soportaban
184

http://es.wikipedia.org/wiki/Evoluci%C3%B3n_de_la_poblaci%C3%B3n_espa%C3%B1ola_en_la_
%C3%A9poca_precensal
185
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 56
186
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 9

52

los denominados malos usos (seis, contando la remensa). Se trataba de seis obligaciones
o condiciones abusivas impuestas para mantener la relacin del campesino con la tierra
de trabajo. El levantamiento de los payeses contra la nobleza en 1484 determin el
apoyo de la monarqua a los nobles y, tras la derrota de los insurrectos, fueron
ajusticiados sus principales dirigentes.187
Las discordias nobiliarias se iban encauzando conforme a los deseos de los Reyes
Catlicos. No obstante, seguan producindose refriegas como la acometida por Diego
de Merlo, asistente de los Reyes Catlicos, contra el Duque de Medina Sidonia, cuya
resolucin pas por el juicio de los Reyes188. Buena muestra del cauce que estaban
dando a la nobleza, que pocos aos antes hubiese significado una guerra civil particular
entre el de Medina Sidonia y el de Merlo.
Los Reyes Catlicos reclamaron el pago del tributo consuetudinario a Muley Hacn y
ste replic con la toma de Zahara (1481) cerca de Ronda, iniciando as la guerra de
Granada, sumamente difcil para el ejrcito cristiano, a pesar de las discordias que
dividan a la familia nazar. La primera respuesta fue la toma de la ciudad fortificada de
Alhama, tras cuya toma los Reyes Catlicos tuvieron que aglutinar las fuerzas de los
nobles, a las que no falt la colaboracin de Beltrn de la Cueva, duque de
Alburquerque, padre supuesto de Juana la Beltraneja, y luchando codo con codo, el
duque de Medina Sidonia, Enrique de Guzmn que tena contenciosos con los sitiados,
y el marqus de Cdiz Rodrigo Ponce de Len, hasta haca bien poco enemigos
irreconciliables entre s, y ahora, gracias a las formas de los Reyes Catlicos, amigos
ntimos. La reina, nuevamente en situacin de buena esperanza, estaba al pie de
Alhama. La reina, y slo la reina, impidi que esta conquista quedase en nada, al
negarse a abandonar la plaza, extremo que era requerido por los expertos que alegaban
su costosa defensa. Alhama signific la demostracin del poder real, del poder nacional,
frente al poder de la nobleza, que ya se mostraba sumisa de manera manifiesta.
Sorprenden actuaciones como la sealada de la toma de Zahara, pero era pacto no
escrito entre los reinos espaoles y moros que cualquiera de ellos, en tiempo de tregua,
poda hacerse con una plaza o un castillo del otro si ste no estaba debidamente
guarnecido. Haba ms leyes no escritas, como el derecho a tomar replesalias de
cualquier violencia siempre que los adalides no ostenten insignias blicas, que no se
convoque a la hueste a son de trompeta y que no se armen tiendas. Adems, en tiempos
de los Reyes Catlicos se permita a los moros del reino de Granada la navegacin a
frica desde las costas de Mlaga.189
Cuando Muley Hacn volva de su desastrosa campaa, Boabdil se sublev en Guadix y
fue reconocido en Granada gracias al apoyo de los abencerrajes, soliviantados con los
errores cometidos por aquel y dado que adems haba sometido a sus sbditos a graves
impuestos, suprimiendo, por otra parte, las ddivas y regalos con los que sola agasajar a
sus hombres ms entregados. En 1482 mand asesinar a su esposa Ftima y a sus hijos,
pero slo pudo asesinar a uno, encerrndose Ftima y Boadbil en la alcazaba del
albaicn, desde donde fue proclamado emir con el nombre de Mohamed XI.

187

LOS REYES CATLICOS Y LA CONSTRUCCIN DEL ESTADO MODERNO Grupo Ulises.


Mrida. http://redul.wikispaces.com
188
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 10
189
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 12-13

53

Este ao 1482 era nombrado Inquisidor General Toms de Torquemada, que en 1483
sera tambin inquisidor de Aragn; la Inquisicin era la primera institucin comn a los
reinos hispnicos.
La sistematizacin de los procedimientos y penas llevada a cabo por la Inquisicin
espaola constituy una mejora en el sentido jurdico con respecto a los usos empricos
y posibles arbitrariedades de los tribunales medievales. Se moderaron algunos abusos
anteriores y se tomaron medidas, no siempre eficaces, para corregir las posibles
extralimitaciones de los inquisidores. Recogindose la experiencia anterior, se dio a la
Inquisicin moderna un carcter ms centralizado que a la medieval, de lo que result
una potenciacin de su eficacia.190
Pero la Inquisicin resulta un punto de escndalo, sobre todo en cuanto de habla de
la Inquisicin espaola, llegndose a entender que la nica Inquisicin fue la
espaola. Dejando de lado el inters que se mostr en 1478 porque la Inquisicin
espaola tuviese su propio marchamo, sealemos que se instaur en Aragn en
1242, a quin sigui Navarra y Portugal; no as Castilla, que no tuvo Inquisicin
hasta 1478 y no fue abolida formalmente hasta 1834. Su actuacin ms intensa
se registra entre 1478 y 1700, durante el gobierno de los Reyes Catlicos y los
Austrias. En cuanto al nmero de ajusticiados, los estudios realizados por
Heningsen y Contreras sobre las 44.674 causas abiertas entre los aos 1540 y 1700,
concluyeron que fueron quemadas en la hoguera 1346 personas (algo menos de 9
personas al ao en todo el imperio).
El britnico Henry Kamen, conocido estudioso no catlico de la Inquisicin
espaola, ha calculado un total de unas 3.000 vctimas a lo largo de sus seis siglos
de existencia. Kamen aade que "resulta interesante comparar las estadsticas sobre
condenas a muerte de los tribunales civiles e inquisitoriales entre los siglos XV y
XVIII en Europa: por cada cien penas de muerte dictadas por tribunales ordinarios,
la Inquisicin emiti una".191
Basndose en la Historia de la Iglesia, investigadores judos nos indican que en el
proceso, al final se realizaba un acto de fe pblico. (Por cierto, en una poca, se utiliz
ms con los protestantes que con los judeoconversos)192.
Son numerosos los expertos anglosajones, franceses, centroeuropeos, escandinavos,
judos y espaoles, pertenecientes a escuelas y tendencias diversas, quienes han
realizado anlisis sin el sesgo antihispnico o anticatlico de otras pocas. Puede
afirmarse que entre muchos especialistas en la Inquisicin espaola su leyenda
negra est asimilada y superada.193
Por otra parte, hispanistas tan manifiestamente britnicos (o tan manifiestamente
antiespaoles), como Henri Kamen, confirman con estadsticas que en pocas
190

Historia de la Inquisicin y la Reforma en Espaa. Samuel Vila


Qu sucedi realmente con la Inquisicin?
http://mercaba.org/FICHAS/IGLESIA/Inte03/que_sucedio_con_la_inquisicion.htm
191

192

La Inquisicin en Espaa. Yehuda Ribco. http://serjudio.com/dnoam/inquisicion.htm

193

La Leyenda sobre la Inquisicin. Beatriz Comella.


http://mercaba.org/FICHAS/IGLESIA/Inte03/leyenda_sobre_la_inquisicion.htm

54

"duras" (hasta 1530) en tribunales muy activos se utiliz el tormento en el uno o


dos por ciento de los casos.194
Los Reyes Catlicos, entre tanto, ordenaban el asalto final a Granada convocando a
todos los caballeros del reino para proseguir la guerra de Granada; armaron una
escuadra que impidiese la comunicacin de los nazares con frica, al tiempo que
comenzaban el asedio de Loja, defendida por el famoso Aliatar, donde el rey Fernando
cometi un error que le cost la vida del Maestre de Calatrava, Rodrigo Tllez Girn, y
puso en grave riesgo a todo el ejrcito espaol, que a punto estuvo de perder Alhama. Se
aprest a una batalla extremadamente desigual en nmero y en ubicacin de los campos,
desoyendo los consejos del marqus de Cdiz, y sufri una estruendosa derrota que a
punto estuvo de costarle la vida.
A este desastre se sum el arrostrado por la flota barcelonesa contra los genoveses, que
haban asaltado Barcelona y en el enfrentamiento posterior hicieron prisionero a la flor
y nata de la nobleza barcelonesa.195
Los Reyes Catlicos estaban ordenando el estado en todas las rbitas. Nada escapaba a
su profunda reforma Ni el mbito de la Iglesia, de la que siempre se mostraron hijos
tan perfectos. Del mismo modo que para los asuntos sociales y polticos demostraban a
un tiempo generosidad y firmeza, tambin en el mbito religioso hicieron lo propio, lo
que les llev a retirar de la corte vaticana de Sixto IV todo tipo de representacin al
observar por parte de Roma un trato impropio de buena madre, siendo Espaa la ms
obediente a la silla apostlica. Se avino Roma a suavizar sus modos con lo que la
religin gan el concurso de personas de gran vala que se vieron impelidas a ocupar los
puestos que les correspondan en el gobierno de la Iglesia.
Este era un asunto que preocupaba en gran manera a la Reina Isabel, que buscaba
realizar una reforma en profundidad para evitar las situaciones desagradables en tantos
mbitos, lo que llev a los Reyes a tener enfrentamientos con las ms altas instancias de
la Iglesia. Los Reyes se negaban a dar dicesis a los ausentes. En 1462 los cannigos de
Valencia se lamentaban que haca 30 aos que no tenan obispo. Dicesis como
Barcelona o Salamanca estaban vacantes por aos.196 Tres nombres son de destacar en la
reforma religiosa propiciada por los Reyes Catlicos: Hernando de Talavera, Diego
Deza y Francisco Jimnez de Cisneros.
Para apoyar a Fray Francisco Jimnez de Cisneros en la renovacin clerical que le haba
encomendado la Reina, obtuvo todas las asistencias cannicas y con ellas pudo sacar a
la iglesia espaola del abismo de la incultura y prepararla de este modo para la decisiva
batalla moral que el norte europeo iba a reir poco despus con el medioda.197
Isabel volc en la obra renovacionista todo su poder de reina y su intrpida energa,
reservndose para s misma la purificacin de los conventos de religiosas, en los que su
bondad, trato discreto y grandes dotes de corazn consiguieron los ms envidiables
frutos ascticos. Slo cuando no fueron bastantes estas soberanas dotes de insinuacin
194

La Leyenda sobre la Inquisicin. Beatriz Comella.


http://mercaba.org/FICHAS/IGLESIA/Inte03/leyenda_sobre_la_inquisicion.htm
195
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 22
196
La Reforma de los Reyes Catlicos. http://mercaba.org/FICHAS/IGLESIA/HT/9-11_capitulo.htm
197
Actos de clausura del V Centenario de Isabel la Catlica D. Juan-Luis Beceiro Garca
http://www.delsolmedina.com/SantidadIsabelICastilla.htm#10

55

ech mano de la severidad, amenazando a los rebeldes con penas cannicas y visitas
rigurosas, que ella alcanzaba de la curia de Roma. Pero el sistema peculiar suyo de
atraccin fue casi siempre el de su feminidad y su dulzura.198
Pero no limit ah su actividad; contando con la actuacin del irremplazable cardenal
Cisneros, prepar el terreno para el Concilio de Trento, llevando a cabo las reformas que
quedaban a su alcance. Era tal su actividad que, hasta el mismo Arzobispo Carrillo, mal
avenido con los rigores monacales, haba lanzado un edicto prohibiendo a los clrigos
de su dicesis jugar a los dados y vestir trajes de colores vivos. En la parte positiva
ordenaba que los sacerdotes celebrasen la Santa Misa al menos cuatro veces al ao y los
obispos tres. Manga ancha, como se ve, que denotaba un estado social de cruda
relajacin en el terreno moral y religioso. La Iglesia est llena -escriba en su Gua del
cielo el dominico Fray Pablo de Len- "de necedad e ignorancia, de luxuria, de malicia
y de soberbia". "No tiene hoy la Iglesia mayores lobos ni enemigos, ni tiranos, ni
robadores, que los que son sus pastores de nimas y tienen mayores rentas" ...
"Obispotes" llamaba Fray Francisco de Osuna en el Abecedario Espiritual a los malos
obispos, en los cuales el da de la muerte har "gran gira" el demonio. Juan Padilla, el
Cartujano, declama contra la simona; otros predicadores tronaban contra la glotonera y
las inmoralidades que aqu no nos atrevemos a estampar. Oanse de nuevo los acentos
de San Pedro Damiano y de San Bernardo, execrando con frases aceradas las perversas
costumbres de muchos clrigos y monjes de su tiempo.199
Las arcas del estado seguan exhaustas, por lo que los reyes pidieron en Cortes un
emprstito que fue cubierto por las personas pudientes del reino as como por las
rdenes militares aragonesas y castellanas, al objeto de emprender la reconquista del
ltimo trozo de la Patria que permaneca en poder extranjero. Mientras, algunos nobles,
si bien haban reconducido sus formas en cuanto al respeto a los nuevos tiempos
marcados por los Reyes Catlicos, seguan actuando por su cuenta, como el adelantado
Pedro Enriquez, el Maestre de Santiago y otros nobles de la frontera, que en marzo de
1483 iniciaron una particular campaa en la Axarqua, repleta de iniciativas individuales
y encontradas, que acab en la punta de la espada de el Zagal, que dio al lugar del
encuentro definitivo el expresivo nombre de cuesta de la matanza.
Tambin en este tiempo, los nobles levantiscos gallegos, encabezados por Pedro Pardo
de Cela, yerno del conde de Lemos, se aliaban con la Beltraneja an aos despus de
haber sido firmada la paz con Portugal. Sera el 7 diciembre 1483, en castillo de
Frouxeira, cuando el ejrcito de Luis de Mudarra apres al levantisco, a su hijo y a Don
Pero de Miranda, "con moitos fidalgos onrados que con el estaban", llevndolos a
Mondoedo para ejecucin pblica ejemplar.200 El mariscal Pardo de Cela es hoy, ms
que un seor feudal levantisco, un hroe de leyenda para los nacionalismos liliputienses.
Se hai un feito histrico onde o mito e a realidade coecida se distancien tanto, este o
caso do mariscal Pedro Pardo de Cela: a sa morte violenta creou as condicins para a
invencin dunha biografa que o converteu no mrtir por excelencia da literatura

198

Actos de clausura del V Centenario de Isabel la Catlica D. Juan-Luis Beceiro Garca


http://www.delsolmedina.com/SantidadIsabelICastilla.htm#10
199
Actos de clausura del V Centenario de Isabel la Catlica D. Juan-Luis Beceiro Garca
http://www.delsolmedina.com/SantidadIsabelICastilla.htm#10
200
El Mariscal Pardo de Cela. Carlos Barros. http://www.pangalaica.com/britonia/historia/mariscal.htm

56

galeguista tradicional, no mximo representante desa nobreza galega que tia que ter
sido e non foi.201
Eduardo Pardo de Guevara considera que los datos que se han ido comprobando acerca
de la vida de Pardo de Cela, "alejan su figura cada vez ms de la leyenda". En este
sentido, ha recordado que est comprobado que no fue "hermanado de la Revolucin
Irmandia" y que fue partidario de Isabel la Catlica y no de Juana la Beltraneja, a pesar
de que la primera, con posterioridad a su acceso al trono espaol, orden su
ejecucin.202
Asimismo, las investigaciones tambin han confirmado que los hechos no se
desarrollaron con la rapidez con la que establece el "mito" de Pardo de Cela, dado que
el asedio a la fortaleza de A Frouxeira se haba producido "un ao antes", el Mariscal
fue detenido "en el verano" y pas por "un proceso judicial" antes de su ejecucin. 203
Todo, a la postre, parece concluir en que Pardo de Cela no fue sino un noble levantisco
ms, vido de poder feudal, que sucumbi en su lucha contra la Espaa representada por
los Reyes Catlicos.
El imaginario romntico, separatista, se agarra a Pardo de Cela imaginando una historia
que pudo ser conveniente para sus aspiraciones ideolgicas, pero non ten fundamentos
documentais que xustifiquen a sa versin imaxinaria de Pedro Pardo de Cela.204
En qu se centr pues el problema Pardo de Cela?... Polas fontes orais sabemos que
foron as rendas do bispado de Mondoedo as que desencadearon o conflicto que o
levar cadalso. E das fontes xudiciais tiramos que o cobro das rendas reais xustificou a
confiscacin pos-mortem dos seus bens. 205 Resumiendo: Parece que se trataba de un
seor con aspiraciones feudales, pero sin medios que respaldasen sus aspiraciones, y a
lo que parece, os vasalos rebeldes derrocaran a fortaleza A Frouseira "donde prendieron
al Mariscal Pedro Pardo", deixndoo con vida malia a sa sona de bandoleiro, cousa que
dezaseis anos despois non farn os oficiais da raa Isabel a Catlica. Pardo de Cela non
foi logo o dirixente dos irmandios que imaxinou o novelista Vicetto en "Los hidalgos
de Monforte", senn un dos seus inimigos mis teimudo. 206
Fernando, que se encontraba en Galicia reprimiendo estas aspiraciones de los nobles
levantiscos, e Isabel, que estaba enredada en los asuntos de Portugal, dejaron sus
quehaceres para atender el terrible desastre de la Axarqua.207
201

Ascenso e cada do mariscal Pardo de Cela. Carlos Barros


debate.com/cbarros/spanish/ascenso.htm
202
http://www.20minutos.es/noticia/1708355/0/
203
http://www.20minutos.es/noticia/1708355/0/
204
Ascenso e cada do mariscal Pardo de Cela. Carlos Barros
debate.com/cbarros/spanish/ascenso.htm
205
Ascenso e cada do mariscal Pardo de Cela. Carlos Barros
debate.com/cbarros/spanish/ascenso.htm
206
Ascenso e cada do mariscal Pardo de Cela. Carlos Barros
debate.com/cbarros/spanish/ascenso.htm
207
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 29

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http://www.hhttp://www.hhttp://www.h-

57

Pero esta victoria era perjudicial para Boabdil, quin para ganar prestigio inici en 1483
una campaa militar con el apoyo del famoso Aliatar, su suegro, que acab en desastre
cuando pona sitio a Lucena. Aliatar muri y Boabdil cay prisionero de los Reyes
Catlicos, que lo trataron de manera inmejorable y en 1486 lo dejaron en libertad bajo
humillantes condiciones con la idea de que continuase la guerra civil, ya que Muley
Hacen, cuando fue vencido Boabdil en Lucena haba recuperado su trono en la alambra,
y el Zagal se haba convertido en su adalid. Boabdil lleg a Granada, y los abencerrajes
lo proclamaron nuevamente rey, llegando a un sangriento encuentro con los partidarios
de Muley Hacen, que no ces hasta que el reino qued dividido; Boabdil quedara como
rey en Almera.
El 7 de Enero de 1483, Catalina de Foix sucede a su hermano Francisco I Febo en la
corte de Navarra. Su to Juan de Foix, segundo en orden de sucesin, amparndose en la
Ley Slica, le disput el trono entre 1483 a 1492, reanudndose la Guerra Civil de
Navarra entre beaumonteses y agramonteses. La inclinacin que sentan los reyes
navarros por la poltica francesa y las negociaciones para casar a su primognito
Enrique, Prncipe de Viana, con una hija de Luis XII de Francia, fueron los argumentos
que esgrimi Fernando el Catlico para enviar al Duque de Alba a conquistar el Reino
de Navarra en 1512. El 25 de julio de 1512 Fadrique de Toledo, duque de Alba, ocup
Pamplona. La familia Real tuvo que huir y buscar refugio en la Baja Navarra y en el
Bearne.208
Este mismo ao 1486 se mejoran las condiciones de los payeses de remensa por la
Sentencia Arbitral de Guadalupe. Por la misma eran abolidos los malos usos, tuvieron
que abonar una cantidad a los seores y, a cambio, podan permanece en los campos con
arrendamientos de larga duracin y transmitirlos a sus herederos. Contribuy a mejorar
la situacin del campesinado cataln y a reducir la tensin social en el campo.
Tambin este ao 1486 es importante en la prosecucin de la Reforma iniciada en la
Iglesia espaola. A principios de enero, el papa Inocencio VIII aprob las penas
impuestas por los Reyes Catlicos a los clrigos y religiosos que vivan
deshonestamente. Y l mismo impuso otras, por indicacin de los Soberanos, a los
clrigos de mala vida en la Bula del 8 de septiembre del mismo ao. 209 Y los frutos no
tardaron en producirse: los nombres de San Pedro de Alcntara, de Santa Teresa y de
San Juan de la Cruz, el Beato Juan de Avila, San Ignacio y San Francisco Javier, Santo
Toms de Villanueva, San Francisco de Borja marcan el ms alto nivel de aquella
bienhadada reforma.210
Entre tanto, Npoles y Sicilia, atraan la atencin de los Reyes Catlicos, ya que los
problemas que acuciaban a esos reinos repercutan de manera muy directa en la
monarqua hispnica, y los problemas de stos con los prncipes italianos y con los
turcos se manifestaban candentes.

208

Catalina de Foix. http://es.wikipedia.org/w/index.php?oldid=31407258


Actos de clausura del V Centenario de Isabel la Catlica D. Juan-Luis Beceiro Garca
http://www.delsolmedina.com/SantidadIsabelICastilla.htm#10
210
Actos de clausura del V Centenario de Isabel la Catlica D. Juan-Luis Beceiro Garca
http://www.delsolmedina.com/SantidadIsabelICastilla.htm#10
209

58

En este tiempo, el conde de Tendilla Iigo Lpez de Mendoza invent el papel moneda.
Carente como estaba el reino de oro, y al objeto de acallar las quejas de las tropas,
imprimi moneda de cartn, obligando a que fuese reconocida como autntica, y con la
promesa de cambiarla por moneda de metal.
Isabel estaba ocupada en ese momento en frenar las apetencias el rey Luis de Francia,
que fallecera el 25 de Agosto de 1483.
Entre 1482 y 1483, Diego Co descubri el ro Congo y lleg al Cabo de Santa Mara,
ms al sur de la actual Namibia. Tres aos despus, en un segundo viaje (1485-1486)
casi alcanz el trpico de Capricornio.211
Entre tanto, Cristbal Coln continuaba con sus estudios. Se descubri la aplicacin del
astrolabio a la navegacin, y este hecho, unido a la fama que ya haba adquirido con la
copia de mapas nuticos, le anim a acercarse a la corte de Juan II de Portugal,
ofrecindose a llegar a la India siguiendo la ruta de occidente, extremo que fue
desechado por ridculo por parte de la corte portuguesa, por lo que, habiendo fallecido
su esposa, Cristbal Coln emigr a Castilla acompaado de su hijo Diego.
Francisco I muri el 12 de Febrero de 1483, siendo sucedido por Catalina de Foix, su
hermana, que se vio envuelta en una nueva guerra con su to Juan de Foix, que pretenda
la corona. La guerra entre beaumonteses y agramonteses se prolongara hasta 1492.
Los conflictos con los judos haban llevado a los Reyes Catlicos al establecimiento de
la Inquisicin, que signific el primer organismo con mbito nacional en toda Espaa
cuando fray Toms de Torquemada fue hecho inquisidor General de Castilla el dos de
Agosto de 1483, y de Aragn el diecisiete de Octubre del mismo ao. Tambin se
organiz la Santa Hermandad a modo de polica.
En 1484 se incorpor Gran Canaria definitivamente a la corona de Castilla. En Gran
Canaria haba dos Guanartemes dos Fagzames, los Guardatemes eran reyes en lo
seglar en todo mayores, los Fagzames eran as como en lo espiritual como obispos; el
uno era rey, el otro obispo de Galda, el otro rey de Telde, el otro Obispo de Telde,
que eran dos parcialidades dos reinos en toda la isla; y era mayor el rey de Telde de
mas gente que el otro, el rey de Galda se fizo amigo de los christianos asegurse
fzose vasallo del Rey de Castilla, envilo Pedro de Vera Castilla, donde el Rey y la
Reyna le ficieron mucha honra, lo vistieron, fizo con ellos su amistad prometi, de
serles siempre leal, volvi en Gran Canaria, ayud mucho hacer la guerra al Rey.212
Al mismo tiempo, se crearon fraguas en el entorno de Granada, al objeto de
confeccionar caones cerca del lugar donde iban a ser utilizados. La primera ciudad en
caer fue lora, el mismo 1484. El asedio a Granada llevaba a los sitiadores hasta la
misma puerta de Bibrambla, talando rboles para facilitar el avance de la artillera.213
El 11 de Agosto mora el papa Sixto IV lo que signific un gran alivio para muchos que
haban padecido su inicua actuacin y tenan la suerte de poder contarlo. Se tema el
211

http://www.icarito.cl/enciclopedia/articulo/segundo-ciclo-basico/historia-geografia-y-cienciassociales/mundo-moderno/2010/06/369-3084-9-4-el-periodo-de-descubrimientos.shtml
212
Historia de los Reyes Catlicos. Andrs Bernldez Cura de los Palacios. Pag. 184
213
Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 341

59

cisma, pero finalmente se resolvi el problema con el nuevo papa, Inocencio VIII, que
para evitar males mayores se vio forzado a dejar impunes los innumerables crmenes,
atropellos, y grandes rapias del conde Jernimo (hermano de Sixto IV), sufri gran
pobreza para facilitar el incremento de las rentas de algunos cardenales, como Rodrigo
Borja, que envi a Espaa a su hijo Luis para que obtuviese algn seoro. Pero los
Reyes Catlicos lo encarcelaron y embargaron los bienes de los Borja, lo que motiv
que el cardenal se replantease toda su actuacin y posibilitase modificar los trminos de
la bula de Sixto IV en lo tocante al tercio de la recaudacin que, ahora s, sera
entregada para atender los gastos de la campaa de Granada.214
Pero las artimaas de Rodrigo Borja no acabaran ah. Poco despus cambiaban las
condiciones en lo tocante al reino de Aragn y exiga la libertad de su hijo Luis.
Enviara a ngelo Amerino como comisionado para tratar con los Reyes Catlicos su
acceso a la sede metropolitana de Sevilla, a lo que los Reyes no accedan; la libertad de
su hijo Luis y otros asuntos de su inters. Los Reyes no quisieron recibirlo durante largo
tiempo, pero al final logr convencerlos mediante engaos, descubiertos los cuales le
cost ser expulsado de Espaa. Las tensiones diplomticas entre Espaa y la Santa Sede
duraron aos. Espaa no nombraba embajadores y Roma no provea las vacantes
eclesisticas.215
Los problemas de Espaa haban cambiado en diez aos. En tan slo diez aos, y tras
una guerra civil e internacional (frente al reino portugus), se produjo un cambio
notable en el contexto de Castilla: los enfrentamientos banderiles no desaparecieron,
pero, al canalizarse a travs de las vas legales, a travs de la disputa poltica en las
instituciones, se abandon la violencia; la reduccin de la violencia banderil trajo
consigo una reduccin de la violencia en general, y un mejor funcionamiento de los
rganos de gobierno y de la justicia; una nueva poltica monetaria consigui acabar con
las devaluaciones de la moneda y, gracias a ello, con la subida de los precios; la lucha
contra los musulmanes pareca avanzar por primera vez tras varias dcadas de
estancamiento; se hablaba de la llegada al trono de unos soberanos justicieros dispuestos
a castigar a los malos... Los artfices de toda esta labor fueron Isabel y
Fernando, los futuros Reyes Catlicos.216
Por oriente, el turco segua aprovechndose de las discordias que minaban Italia y con
una flota de ms de 300 naves de distinto calado tom Moncastro y Licostomo, dos
plazas fuertes en la desembocadura del Danubio Colostomo.217
Coln estaba convencido de que poda llegar al Extremo Oriente, pues sostena que la
Tierra era redonda, pero se necesitaba dinero, hombres y barcos para realizar tal
expedicin. Frente al rechazo recibido en Portugal, pas a Castilla en 1485.
Acompaado de su hijo Diego lleg al convento de franciscanos de la Rbida, donde
pidi pan y agua, pero el padre Marchena, que haba sido confesor de la reina, detect
algo en los mendicantes; se ofreci a protegerles y a introducirlos en la corte.
Fue recibido por los Reyes Catlicos por la intermediacin del cardenal Mendoza, que
fue convencido por la elocuencia del descubridor. Sin embargo, demorara casi seis aos
214

Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 57-59


Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 59
216
La pacificacin de los Reyes Catlicos (1475-1485)
217
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 66
215

60

en obtener el apoyo necesario para su empresa, pues los monarcas estaban consagrados
a la reconquista del reino de Granada.
Por otra parte, el proyecto requera, adems de una buena dosis de ilusin y espritu
aventurero, una buena dosis de conocimientos cientficos, por lo que el proyecto fue
sometido a una asamblea de hombres ilustrados que se reuni en Salamanca bajo la
presidencia de Fray Fernando de Talavera. Coln tuvo que escuchar de todo; desde
hereje hasta tonto por pensar que poda existir un lugar donde la gente caminase cabeza
abajo.
Tuvo que salir en su favor el dominico Diego de Deza, inquisidor general, que se
convirti en su protector junto a los duques de Medina Sidonia y de Medinaceli, que
vean en las exposiciones del aventurero una posibilidad real. Pero no eran ello solos;
los mismos Reyes Catlicos, que dadas sus prioridades del momento no podan atender
como deban a Coln, procuraban que estuviese a su lado; as, con ellos estuvo en el
sitio de Mlaga y en el de Granada.

En Aragn la instalacin de la Inquisicin ocasion algn disturbio que en 1485 lleg a


cobrarse la vida del inquisidor Pedro Arbus, dentro de su propia casa y a pesar de que
siempre iba provisto de su cota de malla. El crimen produjo en el pueblo el efecto
contrario al esperado, organizando motines que hubieron de ser acallados por las buenas
artes del arzobispo de Zaragoza, Alfonso de Aragn, hijo natural de Fernando, no sin
que antes perseguir a unos cuantos cristianos nuevos de especial significacin como
fueron Luis de Santngel (escribano de Fernando el Catlico); Gonzalo de Santa Mara
(asesor del gobernador de Aragn y autor de la crnica de Juan II) y Francisco de Santa
Fe, siendo reconciliado el vicecanciller Alfonso de la Caballera.218
Otros asuntos caldeaban tambin el ambiente en Catalua. Revueltas de los remensas,
payeses acaudillados por un tal Juan Sala, segaron la vida a algunos nobles y acabaron
conformando un ejrcito que reclamaba el reconocimiento del rey Fernando el Catlico
de quin se declaraban sbditos.219
Por otra parte, en Italia se caldeaba el ambiente con la alianza de los prncipes italianos
y el papa Inocencio contra Npoles, al observar que era difcil que Fernando pudiese
recibir ayuda de Espaa, dado el conflicto existente en Granada.220
En 1485, estando preso de Fernando V Boabdil, el Zagal fue nombrado regente por
Muley Hacen, y l aprovech la ocasin para destituirle. A poco morira Muley Hacen.
El Zagal se proclam rey como Mohamed XII.
Mientras caa Coin y Crtama, y poco despus el que fue nido del caudillo Omar ben
Hafsun, Ronda, que resisti cuatro das de asedio. Corra el mes de Mayo de 1485,
cuando soldados espaoles eran castigados por haberse propasado con las cautivas o con
los soldados vencidos.221 Justo lo contrario haba sucedido en Benamaquix, donde los
218

Historia de los heterodoxos espaoles. Marcelino Menndez Pelayo. Pag. 403


Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag, 72
220
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 90-93
221
Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 344
219

61

sitiados asesinaron a varios cautivos. La respuesta fue contundente: Mientras ellos


pedan la libertad como condicin de rendicin, fueron ejecutados el 20% de los
varones.222 La poblacin era obligada a abandonar las plazas fuertes y a asentarse en
lugares llanos donde fuese difcil organizarse militarmente. Las plazas de iban rindiendo
conforme se acercaba el ejrcito espaol, sin que llegase a mediar pelea en gran nmero
de ocasiones, ni an en las plazas difciles de sitiar. Hasta la propia Marbella pact la
rendicin y la evacuacin de la plaza, y Fuengirola fue abandonada.223
Pero si las cosas marchaban sobre ruedas en el asunto de la Reconquista, y sobre las
ruedas una buena artillera, arma que result decisiva, todo ello era posible gracias al
sometimiento de la nobleza. No obstante, an quedaban algunos flecos que recortar en
este asunto. As, el conde Rodrigo de Lemos se haba hecho con la fortaleza de
Ponferrada, rompiendo los acuerdos impuestos por los Reyes Catlicos, y amparndose
en la distancia geogrfica que mediaba entre Ponferrada y Granada, pero no cont con
la actitud decidida de Isabel, que siti Ponferrada lanzndole un ejrcito comandado por
Rodrigo Pimentel, acrrimo enemigo del de Lemos. La lucha sera encarnizada.
Los asuntos en Catalua seguan enfrentando a los remensas con los nobles, y en Sicilia
creca la alarma ante la actitud del invasor turco, si bien, la peste vino a aliviar este
asunto, ya que diezm los efectivos del turco, que se vio forzado a disolver la armada.224
Pero la peste tambin se hara presente en Espaa.
Una vez liberado Boabdil, y despus de enconadas luchas entre to y sobrino se lleg
entre ellos a una particin del reino granadno, correspondiendo a Boabdil la Alhambra
y el territorio que se extenda hasta Mlaga, y al Zagal el Albaicn, Almera y las
comarcas inmediatas.
El enfrentamiento entre to y sobrino estaba sembrado, y Boabdil se apoyaba en los
Reyes Catlicos, que esperaban la oportunidad para tomar el reino de Granada. Pero
naturalmente, Fernando le mostr su incomodidad por los tratos habidos entre l y el
Zagal, y le dijo que eso era un a coalicin contra Espaa a la que deba hacer frente con
las armas. Poco despus, en 1486, las tropas espaolas sitiaban Loja, donde Gonzalo
Fernndez de Crdoba se distingui por su bravura. La ciudad resisti con fuerza
durante nueve das, pero el empuje del ejrcito espaol se impuso abiertamente, por lo
que Boabdil anim a la rendicin de la ciudad.225
Del resultado de la batalla, Boabdil abdicara el ttulo de rey de Granada; entregara
Granada con todas sus pertenencias y castillos y se le conceda el ttulo de marqus de
Guadix si esta ciudad se conquistaba antes de seis meses, debiendo combatir a su to, el
Zagal. Poco despus se reconquist llora, y luego Mocln, Montefro, Colomera y el
Salar, y se asedi Granada, estando los Reyes Catlicos en primera fila dando idea de la
firme determinacin adoptada, y garantizando el buen trato tanto a las tropas espaolas
como a los vencidos sarracenos. Por su parte, la reina Isabel cuidaba que la asistencia a
los heridos fuese la mejor posible.226

222

Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 75


Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 80-82
224
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 82
225
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 101
226
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 102
223

62

El dinero para el pago de las tropas espaolas escaseaba, por lo que tras talar toda la
vega de Granada no pudo seguir adelante, licenciando a las tropas, que marcharon a sus
lugares de origen.227
En este tiempo, el conde de Lemos haba obtenido una importante victoria sobre sus
sitiadores y en Italia, el papa Inocencio pergeaba alianzas con Francia para combatir a
Fernando de Npoles, y poner en su lugar al duque de Lorena, al tiempo que los
venecianos recorran en son de guerra la costa catalana. A todo atendi Espaa enviando
una armada en defensa de Fernando de Npoles, mientras los Reyes Catlicos acudan
en persona al frente abierto por el conde de Lemos, lo que ocasion la defeccin de
todos sus partidarios que manifestaron haber entrado en la contienda en defensa de los
intereses de Espaa, tras lo cual el propio conde de Lemos entreg el castillo de
Ponferrada a los Reyes. Los asuntos de Italia no llevaron peor derrotero; el papa
Inocencio, harto del estado de anarqua y tirana en que estaban sumidos sus estados,
firm la paz el 12 de Agosto de 1486, con el disgusto de venecianos y franceses.228
Pero la actitud del papa, segn algn historiador tan contraria a su nombre, haba
significado el enfrentamiento armado de los principados italianos, haciendo de Italia un
totum revolutum que slo beneficiaba los intereses del turco.
Boabdil se enfrent con su to para la toma del Albaicn, pero el Zagal propuso un pacto
a Fernando que no lleg a nada por haberse promovido un motn en la alambra como
consecuencia de la presencia de emisarios espaoles. Poco despus tom el Albaicn y
no apoy a su to en el cerco que sufra en Mlaga, que acab en poder espaol, y en
1489 posibilit la toma de Baza, que tambin estaba en manos del Zagal.
El Zagal fue derrotado por los cristianos ante Vlez-Mlaga en 1487, tras la cual
cayeron multitud de villas y fortalezas, siendo la toma de Mlaga, defendida por Hamet
el Cegr, la ms costosa, dado el carcter de ste militar, que no dudaba en ejecutar a
quin propusiese la capitulacin.
La toma de Velez Mlaga signific la entrega sin condiciones de doce villas ms con
cerca de cincuenta fortalezas y aldeas,229 pero tambin signific la purga de un
contingente de gallegos que tras la sumisin del conde Lemos haba sido condenado a
redimir sus penas en el frente de batalla. Llegados que fueron a Velez Mlaga, se
lanzaron en algarada contra el enemigo, que los recibi produciendo en ellos una gran
matanza. En vano se esforzaron asturianos, vascos y castellanos en ayudar a los
primeros; todos eran rechazados, hasta que puesto en vanguardia el rey Fernando
recondujo la batalla llegando a apoderarse primero del arrabal y luego de toda la ciudad
y toda la comarca. 230
Lo del contingente de gallegos hay que explicarlo: No slo en Galicia, sino en toda
Espaa, para un buen nmero de individuos la guerra pas a convertirse en la nica
herramienta para salvarse de los delitos que haban cometido en tiempos pasados;
algunos de notable crueldad.231 El ordenamiento jurdico y policial permita a la nueva
Monarqua cortar esos enfrentamientos que tenan podrida la sociedad, y la guerra de
227

Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 105


Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 106-109
229
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 120
230
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 213
231
La pacificacin de los Reyes Catlicos (1475-1485) Pag. 66
228

63

Granada permita a esa misma monarqua limitar al mximo las condenas a muerte y a
presidio, que eran sistemticamente sustituidas por la prestacin de servicios en el frente
de lucha contra el ltimo reducto dl invasor.
El Zagal (conocido tambin como Abohardillas), tras la derrota de Vlez Mlaga ya no
pudo volver a Granada, por lo que se retir a Guadix, desde donde envi una expedicin
en auxilio de Mlaga que fue interceptada por Boabdil, quien lejos de obtener la
complacencia de los Reyes Catlicos obtuvo, con esta accin, el mayor de los
desprecios. Tras duro asedio y excelente defensa, cay Mlaga el 18 de Agosto de 1487,
tras lo cual fueron ejecutados doce espaoles traidores que servan a los moros,
quedando el Zagal con Almera, Baza, Guadix y parte de la Alpujarra, mientras Boabdil
se mantena en Granada gracias al apoyo prestado en la persona de Gonzalo Fernndez
de Crdoba. Los Reyes Catlicos estaban interesados en que los dos reyezuelos moros
siguiesen peleando entre s.232
Las rdenes Militares, creadas en el siglo XII con el espritu de cruzada de la
Reconquista, se haban convertido en poderosas instituciones con elevadas rentas y un
inmenso patrimonio territorial. Los RR CC se propusieron controlarlas, para limitar su
poder poltico y para beneficiarse de sus rentas, que compensaran las prdidas de la
Corona. Para ello presionaron a las rdenes Militares castellanas para que eligieran al
rey como gran maestre de cada una de ellas. De este modo, Fernando fue nombrado
gran maestre de la Orden de Calatrava en 1487, de la de Alcntara en 1494 y de la de
Santiago en 1499.233
Este ao 1487, Bartolom Daz lleg hasta el extremo sur de frica, al cual dio el
nombre de Cabo de las Tormentas, probando que haba un paso hacia el Lejano Oriente.
Al conocer esta noticia, el rey de Portugal cambi el nombre del cabo por el de Buena
Esperanza.234
Entre tanto, los conflictos en Aragn hacan necesaria la presencia del rey Fernando.
All acudi e instaur la Hermandad para combatir a los ladrones que asolaban
Zaragoza.235
El ao 1488 en Aragn se aportaba un subsidio para la toma de Granada y se instauraba
la Santa Hermandad, al tiempo que se despachaba de vuelta a unos embajadores
franceses cuya misin no era la devolucin de Roselln y la Cerdaa.
Tambin en este ao (el 25 de Enero) se celebr el primer auto de fe de la Inquisicin en
Catalua, en el que se conden a garrote a cuatro judaizantes, siendo quemados en
estatua otros doce.236
Acto seguido pasaron los reyes a Murcia para continuar con la Reconquista, siendo que
Vera, Cuevas, los Velez, Castilleja y otras poblaciones se entregaron, tras lo cual
acometieron Almera y Baza, sin xito inicial, por lo que los reyes marcharon a Jaen,
232

Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI.


LOS REYES CATLICOS Y LA CONSTRUCCIN DEL ESTADO MODERNO Grupo Ulises.
Mrida. http://redul.wikispaces.com
234
http://www.icarito.cl/enciclopedia/articulo/segundo-ciclo-basico/historia-geografia-y-cienciassociales/mundo-moderno/2010/06/369-3084-9-4-el-periodo-de-descubrimientos.shtml
235
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 140
236
Historia de los heterodoxos espaoles. Marcelino Menndez Pelayo. Pag. 404
233

64

desde donde se fueron tomando diversas fortalezas cercanas a Baza, encontrando gran
oposicin en la Alpujarra, lugar predilecto del Zagal, del que obtena importantes
tributos dada la feracidad de sus tierras y la importante produccin de seda.237
Las tropas espaolas se dividieron en dos ejrcitos al tiempo que talaban un buen trecho
de la vega. Tanto trabajo desesper a Hernn Prez del Pulgar, quin no obstante no os
actuar por su propia iniciativa, como haca pocos aos hubiese hecho. Junt a
doscientos caballeros y pidi permiso a Fernando para atacar Guadix. Hicieron una
expedicin de castigo que acab con el enfrentamiento con una columna de caballera
rabe, a la que desbarataron y con la que Prez del Pulgar alcanz la gloria de merecer
ser armado caballero por el rey Fernando.
Ante estos acontecimientos, Beyazid II (o Bayaceto), sultn del Imperio Otomano,
mand un mensaje a los Reyes Catlicos quejndose de su accin de Reconquista e
indicndoles que si no dejaban en paz a los moros, l arremetera contra los cristianos de
los Santos Lugares, a lo que los Reyes Catlicos respondieron que en otro tiempo los
moros se haban apoderado injustamente de Espaa y los espaoles haban recibido
insultos y agresiones alevosas todos los das, por lo que tenan derecho a defenderse.
Por otra parte respondan que si el Gran Turco trataba bien a los cristianos de Palestina,
tambin los reyes de Espaa guardaban toda consideracin a los mahometanos
sometidos a su imperio.238 Simultneamente, la flota turca tomaba Malta.239
Mientras, Boabdil cortaba las cabezas de quienes cuestionaban su autoridad. El sitio de
Baza segua, y la actividad frentica de los Reyes, tambin. Se mand construir caminos
para proveer a las fuerzas sitiadores de todo lo que precisasen, desde armas a alimentos
o vestidos, y ante la carencia de medios, la reina lleg a vender sus joyas y su vajilla,
ejemplo que fue seguido por las damas de su corte.240
Baza se resista, y el invierno se ali con los sitiados; slo el genio de la reina Isabel
impidi que cesase el asedio. Hizo acto de presencia en medio del campamento, rodeada
de sus damas; revis las tropas en primera lnea, y la gentileza del defensor moro, Cid
Hiaya, le llev a hacer un desfile en honor de la reina, tras lo cual present la
capitulacin con la aquiescencia del Zagal. El da 4 de Diciembre de 1489 entraron los
reyes en Baza, mientras Cid Hiaya se bautizaba cristiano con el nombre de Pedro de
Granada.241 La entrega de Baza signific tambin la entrega de Purchena y mltiples
villas y fortalezas se entregaron sin lucha. El 21 de Diciembre los Reyes Catlicos
tomaban posesin de Almera, donde eran cumplimentados por el propio el Zagal, a
quien la magnificencia de los Reyes Catlicos impidi que se humillara ms, exigiendo
que al vencido se le rindiesen honores como rey, hacindole montar en su cabalgadura y
caminando junto a l hasta el pabelln real donde fue obsequiado con un banquete real
al que no asisti la reina Isabel (nueva cortesa), que se haba retrasado en el avance,
siendo servidos a la mesa por los condes de Tendilla, Cifuentes, lvaro de Bazn y
Garcilaso de la Vega. Las Alpujarras, Salobrea, Almuecar, todos los lugares que
obedecan al Zagal se entregaron ese da a Espaa. Guadix fue entregada el da 30.242
237

Guerra de Granada. Alonso de Palencia Pag. 142


Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 370
239
Guerra de Granada. Alonso de Palencia. Pag. 153
240
Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI.
241
http://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_de_Granada
242
Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VI. Pag. 376
238

65

La guerra haba costado a Espaa la cuarta parte del ejrcito, 20.000 hombres de los
80.000 que participaron hasta la cada del Zagal, y quedaba por conquistar la ciudad de
Granada, su vega y lo que poda observarse desde la Alambra, lo que estaba gobernado
por un rey absolutamente desprestigiado entre sus sbditos.
El Zagal sera nombrado seor de Lecrn, pero finalmente se march a Orn, donde los
partidarios de Boabdil le quemaron los ojos.
Exigi Fernando a Boabdil el cumplimiento de lo comprometido cuando la toma de
Loja, pero el chico pareca haber tenido una laguna de memoria, y se consideraba fuerte
en una ciudad que si ciertamente haca acopio de toda la basura de los rabes, tambin
haba recogido todo lo bueno que poda existir entre ellos. Haba renegados y gente
valerosa; industriales y gandules; traidores y nobles; gente turbulenta y gente pacfica. Y
con ellos la tensin que deba crear la necesidad de cumplir un pacto y la tentacin de
incumplirlo; la tensin entre el honor y el deshonor. En base a este sustrato social
desoy la reclamacin de los Reyes Catlicos, quienes no dudaron en hacer pblico el
tratado de Loja, lo que ocasion la general indignacin entre los granadinos cuya ira no
pudo esquivar Boabdil sino recurriendo a la guerra, que era justo lo que estaban
deseando los Reyes Catlicos.243
Era abril de 1490 cuando se celebraban los esponsorios de la princesa Isabel con el
prncipe Alfonso de Portugal, cuando Boabdil tuvo la genial idea de atacar algunos
castillos espaoles. De inmediato, el conde de Tendilla reforz el cerco a Granada
mientras Fernando, con cinco mil caballeros y veinte mil peones llegaba a Granada
segando las mieses granadinas, ante cuyas murallas armaba caballero a su hijo Juan en
presencia de sus nuevos aliados el Zagal y Cid Hiaya. Pocas acciones ms se llevaron a
cabo; las tropas espaolas se retiraban, mientras los moriscos de Guadix se mostraban
insumisos y provocaban la cada de la fortaleza de Alhendn en poder de Boabdil, quin
tras degollar a sus defensores tuvo la osada de acometer las propiedades de el Zagal y
de Cide Hiaya, amn de acometer otros castillos de menor importancia, todo lo cual
provoc ms ansias de rebelin en los mudjares que fueron cortadas con una
inteligente accin del marqus de Villena que puso a los moriscos en la tesitura de
someterse a pesquisa por traicin o a exiliarse, eligiendo en masa la segunda opcin.244
Por su parte, Boabdil intent en 1490 conquistar una plaza de costa, por lo que atac
Salobrea, de donde acab huyendo cuando se acercaba el rey Fernando, quien poco
despus invit a marcharse a los moros de Baza y de Almera, dado que se mostraban
levantiscos.
En esta campaa gan gran fama Hernando Prez del Pulgar, quin en cierta ocasin
entr en Granada y en la puerta de la mezquita dej clavado con su pual un papel que
rezaba Ave Mara. Y es que entre los caballeros espaoles haba cierta competencia
por la osada; entre ellos destacaba Gonzalo Fernndez de Crdoba, Martn de Alarcn,
o Iigo Lpez de Mendoza conde de Tendilla, quin se despachaba con osadas
galanteras como secuestrar a una dama rabe a quin devolvi cargada de presentes sin
pedir nada a cambio.

243
244

Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VII Pag 1 a 5
Historia general de Espaa. Modesto Lafuente y Juan Valera. Tomo VII Pag. 1 a 5

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Corra el ao 1491. Granada tena en aquel momento doscientos mil habitantes, y los
ejrcitos de Espaa, al mando directo de sus amados reyes tom posesin de la vega de
Granada. Las tiendas se situaron en orden simtrico, formando calles como de una
poblacin a la que de inmediato acudieron las doncellas de la corte. Los retos
caballerescos comenzaron a menudear, lo que finalmente tuvo que ser prohibido por el
rey. La reina inspeccionaba personalmente, a caballo las tropas espaolas. Pero el 14 de
Julio se produjo un importante incendio en el campamento espaol, ocasionado por el
descuido de una duea en la tienda de la reina Isabel. Desgracia que acab siendo
gracia, porque los reyes determinaron que en el mismo lugar se construyesen nuevas
estancias, pero no de tela, sino de cal y canto. En menos de tres meses tendran
levantada la nueva ciudad que sera bautizada con el nombre de Santa Fe, y este hecho
sera determinante para la rendicin de Granada, acordndose el 25 de Noviembre que
en sesenta y cinco das haran entrega de la misma.
Ante esta situacin, un ayatol incendi los nimos llamando traidor y cobarde a
Boabdil; reclut a veinte mil hombres armados que arrinconaron a Boabdil en la
Alambra, lo que le incit a pedir a los Reyes Catlicos el adelanto del acto de entrega de
la ciudad.
Entre tanto, Coln exiga de los Reyes una respuesta definitiva a sus propuestas,
mientras la junta de Salamanca haba calificado la expedicin como una quimera. Slo
contaba con el cardenal Mendoza y con Inquisidor General Diego Deza. Ya se marchaba
a presentar su proyecto a Carlos VIII de Francia, cuando, al ir a despedirse del Padre
Marchena en la Rbida, ste pidi audiencia especial a la reina, con la que se reuni en
la recin fundada Santa Fe. Ah se encontraba Coln el da 2 de Enero de 1492.
El dos de Enero de 1492 era definitivamente tomada Granada, y Boabdil se retiraba a
Andrax, en la Alpujarra, hasta que pocos meses despus fue invitado a vender su
seoro y a marchar a Marruecos. Morira en 1527. Acto seguido se proclam el Edicto
de Granada, por el que se expulsaba a los judos de los reinos hispnicos.
La cada de Granada provoca un gran impacto tanto en el mundo occidental cristiano
como en el oriental musulmn. Para los cristianos, el triunfo de los Reyes Catlicos
supone la constatacin de su hegemona cultural sobre el Islam. Para los musulmanes, la
derrota constituye un dramtico epgono de la expansin iniciada tras la muerte de
Mahoma y el inicio de un retroceso global de sus posiciones en el Mediterrneo
occidental.245
En medio del gran momento histrico de la definitiva expulsin del invasor musulmn,
se estaba gestando el gran momento histrico de la mayor gesta de todos los tiempos: el
descubrimiento y la conquista de Amrica.
A punto estuvieron de romperse las negociaciones ya que las exigencias de Coln (ser
virrey, almirante, derecho a nombrar gobernantes) parecan excesivas a los miembros
del consejo, en concreto al arzobispo de Talavera. Pero las buenas artes del Inquisidor
Diego Deza, juntamente con el banquero judo Luis de Santngel y el camarero personal
del rey Fernando, Juan Cabrero, convencieron a Hernando de Talavera de lo que a
simple vista pareca evidente: Que si el plan resultaba fallido, nada se perda.
245

LOS REYES CATLICOS Y LA CONSTRUCCIN DEL ESTADO MODERNO Grupo Ulises.


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67

En marzo, y al objeto de evitar una nueva persecucin de judos como las acaecidas en
reinados anteriores, los Reyes Catlicos decretaron la expulsin de los judos. Una
cuestin es de tener en cuenta: Los Reyes Catlicos no sentan animadversin personal
contra los hebreos (el propio rey Fernando tena sangre juda por parte de madre) y en
su corte se hallaban financieros, consejeros, mdicos y artesanos hebreos. Finalmente se
exiliaron unos 100.000, parte de los cuales volvera despus de forma encubierta. La
Inquisicin actuara, no sobre los judos, sino sobre los conversos, sobre los
criptojudios, que practicaban la religin mosaica a escondidas. La jurisdiccin de la
Inquisicin estaba en el terreno de la heterodoxia. La pena de muerte en hoguera se
aplicaba a hereje contumaz no arrepentido. El resto de los delitos se pagaban con
excomunin, confiscacin de bienes, multas, crcel, oraciones y limosnas penitenciales.
Las sentencias eran ledas y ejecutadas en pblico en los denominados autos de fe,
instrumento inquisitorial para el control religioso de la poblacin.
El edicto de expulsin de los judos pblicos (31 de marzo de 1492), fundado, sobre
todo, en el dao que resultaba de la comunicacin de hebreos y cristianos, vino a
resolver en parte aquella tremenda crisis. La Inquisicin se encarg de los dems. El
edicto, tantas veces y tan contradictoriamente juzgado, pudo ser ms o menos poltico,
pero fue necesario para salvar a aquella raza infeliz del continuo y feroz amago de los
tumultos populares. Es muy fcil decir, como el Sr. Amador de los Ros, que debieron
oponerse los Reyes Catlicos a la corriente de intolerancia. Pero quin se opone al
sentimiento de todo un pueblo? Excitadas las pasiones hasta el mximo grado, quin
hubiera podido impedir que se repitieran las matanzas de 139l? La decisin de los Reyes
Catlicos no era buena ni mala; era la nica que poda tomarse, el cumplimiento de una
ley histrica.246
Dice el escritor hebreo ibn Verga que los judos eran amados por los Reyes y de los
sabios, pero odiados por el pueblo y los monjes.247
Cada vez ms son los estudiosos que desmontan la Leyenda Negra, e intentan
comprender el decreto de expulsin sealando en el mismo una lnea politica adoptada
anteriormente en reinos europeos como Inglaterra y Francia. Bien conocan Isabel y
Fernando que su decisin no era "rentable" desde el punto de vista econmico, ya que
muchos hebreos se dedicaban al comercio y al mundo financiero, pero en su postura
tuvo gran peso un motivo religioso y social: se tema la efectividad del proselitismo
hebreo y se quiso evitar la violencia popular de los acreedores contra las aljamas.248
Finalmente, el 17 de Abril se firmaban las Capitulaciones de Santa Fe, que comenzaban
por llamar a Coln don Cristbal Coln, con lo que quedaba incluido en el nmero de
la nobleza espaola.
Las concesiones principales estipuladas en el acuerdo eran:
Poseera Coln el ttulo de almirante con las mismas prerrogativas reconocidas en
Castilla, con carcter vitalicio y transmisin hereditaria perpetua.
246

Historia de los heterodoxos espaoles. Marcelino Menndez Pelayo. Pag. 404


LOS REYES CATLICOS Y LA CONSTRUCCIN DEL ESTADO MODERNO Grupo Ulises.
Mrida. http://redul.wikispaces.com
248
La Leyenda sobre la Inquisicin. Beatriz Comella.
http://mercaba.org/FICHAS/IGLESIA/Inte03/leyenda_sobre_la_inquisicion.htm
247

68

Sera Coln virrey y gobernador de las islas y tierras que descubriera, pudiendo
proponer a los Reyes ternas para las personas que hubiesen de gobernar, bajo su
autoridad, las distintas provincias; los monarcas quedaban obligados a escoger uno de
los tres nombres.
Gozara del diezmo, no del quinto, de todas las riquezas o mercancas que all se
obtuvieran.
Ejercera jurisdiccin en aquellas querellas originadas por la explotacin comercial de
las islas y tierras por l descubiertas.
Tena Coln privilegio para participar con una octava parte en todas las empresas
mercantiles que negociasen en las nuevas tierras.249
Por supuesto, todas las concesiones quedaban supeditadas a la realizacin exitosa del
proyecto descubridor.
Para convertir el proyecto en realidad eran imprescindibles las naves y sus respectivas
tripulaciones. Los Reyes Catlicos dirigieron a Cristbal Coln hacia Palos, porque all
Diego Rodrguez Prieto y otros compaeros suyos, por quebrantamiento de las
disposiciones reales, haban sido condenados por el Consejo a poner a disposicin de los
Reyes dos carabelas (bautizadas Pinta y Nia) por un plazo de dos meses; de modo que
basta un tercer barco ms y las tripulaciones para los tres.
El tercer barco fue una nao (bautizada Santa Mara), perteneciente a Juan de la Cosa,
natural de Santa Mara del Puerto (actual Santoa, en Cantabria).
Otro problema haca su aparicin: cubrir las plazas de marinero. Nadie quera embarcar,
pero finalmente consiguieron la tripulacin necesaria para las tres embarcaciones, y el 3
de Agosto partan del puerto de Palos partan finalmente ciento veinte personas.
Espaa cerraba una epopeya secular mientras abra otra epopeya secular.
Las medidas que aplicaron los Reyes Catlicos tenan incidencia en todos los mbitos:
Hemos visto cmo controlaban a la nobleza; cmo controlaban a las rdenes militares;
cmo controlaban la delincuencia con la creacin de la Santa Hermandad; cmo
procedieron a la formacin de un ejrcito nacional; cmo ordenan la administracin de
Justicia, la modernizacin dl Consejo Real, y hemos pasado por alto otros aspectos
como la creacin de la figura del corregidor, o la creacin de los embajadores
permanentes, o la creacin del Consejo de Aragn, de Indias y de la Inquisicin, y
Aspectos como la Fiscalidad han quedado someramente sealados, siendo que Isabel la
Catlica sane la hacienda pblica merced a un estricto sistema fiscal e incentiv el
desarrollo de la ganadera ovina y del comercio lanero. La accin de los Reyes
Catlicos fue total en todos los mbitos de la vida nacional.
Y con Isabel, la admiracin por el bien hacer rebasa todos los lmites: El telogo
jurista y asceta maese Rodrigo define a la reina: "Pura en fe. Entera en castidad.
Profunda en consejo. Fuerte en constancia. Constante en justicia. Llena de real
clemencia, humildad e gracia. Gloria de nuestros siglos. Reina de las Reinas que vimos
249

http://www.momentosespaoles.es/contenido.php?recordID=144

69

y leymos".250 Testimonio de santidad que se reitera en los cronistas y en multitud de


referencias de diversos personajes, desde Fray Bartolom de las Casas hasta Coln,
pasando por el Rey Fernando.

250

Actos de clausura del V Centenario de Isabel la Catlica D. Juan-Luis Beceiro Garca


http://www.delsolmedina.com/SantidadIsabelICastilla.htm#10

70

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