Carlo y Anna nunca imaginaron que cuando sus hijos, Alessandra y Emilio, se mudaran a la ciudad, se perderían todas las reuniones familiares, incluida la Navidad.Carlo y Anna nunca imaginaron que cuando sus hijos, Alessandra y Emilio, se mudaran a la ciudad, se perderían todas las reuniones familiares, incluida la Navidad.Carlo y Anna nunca imaginaron que cuando sus hijos, Alessandra y Emilio, se mudaran a la ciudad, se perderían todas las reuniones familiares, incluida la Navidad.