¿Qué es la "encriptación del poder"?
Gabriel Méndez-Hincapié (Oct-2019)
Es una crítica novedosa del significado de "democracia". La novedad
reside en el tratamiento (original) del concepto de "diferencia". En la
tradición occidental, de Platón a Heidegger, la Diferencia no ha tenido su
debido espacio de florecimiento. En dicha tradición el estudio y la vida del
Ser (ontología) se ha centrado en los modelos de Identidad, con la
diferencia ocupando un lugar muy marginal (por ejemplo, en figuras muy
marginales como: Deleuze o Marx… etc). De ahí que en el espacio-tiempo
occidental lo Político se haya desplegado como la agencia de múltiples
identidades en conflicto (étnicas, sexuales, de clase, etc). Por lo tanto, la
Democracia (liberal) en tanto horizonte ideal de lo político se revela como
farsa, porque desde su matriz ya está excluido el despliegue de la
diferencia. La democracia verdadera, entonces, será aquella en cuyo
núcleo “todas las agencias cuenten”1, es decir, la democracia como
agencia de la diferencia.
La encriptación de lo político
Lo político es el despliegue (agencia) de la Vida humana en el espaciotiempo de la Historia. Sin embargo, está claro con Darwin que la Vida no
estaba predefinida de ninguna manera, con otras palabras, que la
Diferencia es inmanente a la vida misma, hecho que se constata
empíricamente como mega-diversidad ecológica. Pero al entrar en la
escena Histórica, o sea, al constituirse la relación Vida-Poder (potestas),
la plasticidad o elasticidad del poder de la vida (potentia) queda
petrificada en sólidos modelos de Identidad. Al comenzar la historia lo
político se encripta en modelos trascendentes y cuyas claves predefinen
la calificación de la Vida. Esa es la genealogía de la Polis que deviene
Imperio, Colonialidad y Capitalismo, con el Liberalismo fungiendo
actualmente (Modernidad) como bisagra articuladora de los tres.
Sanín-Restrepo, Ricardo. “Notas sobre el Significado de la Encriptación del Poder como
Filo de la Navaja de los Político”, (trad. inglesa en Critical Legal Thinking, 3 de Agosto de
2017).
1
La encriptación de la diferencia
En los extensos borradores de El capital (i.e. en los Grundrisses) es
posible reconstruir uno de los más sofisticados (y desconocidos)
desarrollos teóricos del concepto de la Diferencia: Marx denomina ΔX al
plusvalor que el capital extrae violentamente de la fuente última de todo
valor: la Vida misma. En el capitalismo la Vida (potentia viva en actu o
enérgeia) colapsa en un mero medio para el capital como fuerza o
capacidad de trabajo. En el capitalismo, la inmanencia de la Diferencia no
es un Fin en sí mismo sino un trascendental Medio para el capital, porque
determina las condiciones de posibilidad de su acumulación ampliada. En
ese sentido, el significado de ΔX como incremento de creatividad o
potencialidad a la N, queda obliterado o precluido para la vida y encriptado
para el goce del imperio del capital y su colonialidad globalizada.
Psicodelia de la des-encriptación del poder
Es 2034; han pasado 50 años desde 1984 (Orwell, 1949). La Federación
Rusa y China han unido sus fuerzas y se han constituido en una nueva
“Euroasia” que reúne la mayor potencia militar y económica del mundo.
Para “Euroasia” 2034 es el año fijado por los ancianos presidentes Putin
y Xi, para traspasar el control político y económico de sus sociedades a
una Entidad creada por los expertos en Inteligencia Artificial (IA) y cuyo
traspaso de poder debe ser legitimado cada cierto tiempo en plebiscitos
digitales por los ciudadanos en edad de votar. Se trata de la última
innovación de estas “democracias i-liberales” que han decidido confiar a
los algoritmos de la IA el trabajo de la Administración, hasta alcanzar las
más altas esferas. En “Euroasia” los banqueros, los jueces y los ministros
han sido, finalmente, remplazados por máquinas.
Apartando al hombre del poder (potestas) se acaba la corrupción. El
secreto para que este proceso funcione está en que los algoritmos puedan
ser inspeccionados libremente por todos los ciudadanos (y no solo por los
expertos). Levantado el ‘velo de ignorancia’ sobre la estructura encriptada
de los algoritmos, el poder queda distribuido simétricamente.
Si en el 2030 los robots terminaron con el 50% del trabajo asalariado y
ahora casi nadie trabaja más de 24 o 34 horas a la semana, era lógico
que los ciudadanos de “Euroasia” y sus expertos en IA hayan decidido
ensayar un nuevo y superior sistema de gobierno, que a falta de otro
nombre es denominado: Postcapitalista (Avanessian y Reis, 2017; Mason,
2016). En “Oceanía”, por el contrario, aún impera el capital, el Imperio
del Capital y su democracia liberal, etc, por lo que los lenguajes de la IA
permanecen encriptados lo que se ha traducido en más pobreza y
desigualdad para los no-propietarios de las máquinas.
En cambio, con la desencriptación del Big Data todas las agencias
cuentan. La estructura del poder recupera su pre-histórica elasticidad en
una post-histórica plasticidad del poder de las máquinas. Ahora éstas
pueden “sentir” en tiempo real las necesidades de cada quién y
satisfacerlas según las capacidades de cada cual. Gracias a los algoritmos
abiertos de esta “IA socializada” (Morozov, 2015) estamos ante una
sociedad donde el libre flujo de la diferencia (creatividad) sale al
encuentro (embate) de la identidad. Como consecuencia, las empresas y
los estados se han hecho obsoletos. El poder está desencriptado (Sanín;
2016, Méndez y Sanín; 2018).
Bibliografía
Avanessian, Armen y Reis, Mauro, 2017 (comps.): Aceleracionismo.
Estrategias para una transición al postcapitalismo. Buenos Aires. Caja
Negra.
Mason, Paul, (2016): Postcapitalsimo. Hacia un nuevo futuro. Barcelona.
Paidós.
Morozov, Evgeny (2015): “Socialize the data centres!” New Left Review,
91 (January/February)
Orwell, George (2003): Rebelión en la granja/1984. México: Porrúa.
Sanín, Restrepo (2016): Decolonizing Democracy. Power in a Solid State.
Rowman & Littlefield, London-New York.
Méndez, Gabriel y Sanín, Ricardo (2018): “The Encrypted Constitution:
New Ways of Emancipation from Global Power” en, Sanín, Restrepo
(comps.) Decrypting Power. Rowman & Littlefield, London-New York.