Palacio de la Moneda

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Incicito Chile.png Este artículo contiene altas dosis de chilenismos y humor chileno. Si no cachái el mote, mejor pregúntale a un chileno, o vírate o ándate a la que tú sabís o a la otra que tú sabís
Cita3.png¡Miren qué lindo avioncito! Si parece de juguete... ¡Miren, se está acercando! Parece que el piloto nos quiere saludar...Cita4.png
Cita3.pngAhora soy menos ambicioso, ya no quiero más billete, tan sólo una monedaCita4.png
Sebastián Piñera sobre su mudanza a una casa más grande

El Palacio de La Moneda, también conocido como "la Casa donde tanto se sufre" o la "Casa de Remolienda", es un edificio situado en el centro del centro de Santiago de Chile, muy bien apreciable desde un caza bombardero Hawker Hunter. Contiene la oficina donde se supone que trabaja el que oficia de Presidente de la República de Chile. También alberga los ministerios del Interior, Secretaría General de la Presidencia y Secretaría General de Gobierno, conocido como el "comité político" del Gobierno, porque así estos se comunican más rápidamente y se ponen de acuerdo en decir todos la misma mentira. Comúnmente se le designa como La Moneda.

Si le interesa visitar el edificio y no cuenta con un GPS, éste se ubica en la comuna de Santiago, entre las calles Moneda (norte), Teatinos (oeste), Morandé (este) y la Alameda. Puede estacionar convenientemente y visitar un lindo museo con forma de caracol comercial que hay abajo, así como un restorán, un café y una pequeña biblioteca. Pronto será inaugurada una sala de cine, un salón de masajes, sauna y un spa.

Historia

Cita3.pngVoy a echar mucho de menos este lugar, al menos, me quedarán los recuerdos...Cita4.png
La gordis mientras se lleva el sillón presidencial de souvenir.
La guardia de La Moneda baila al ritmo del Aserejé.

El palacio fue proyectado originalmente para la acuñación de monedas durante la época colonial, y de ahí proviene su original nombre. En vista de que las autoridades locales de entonces no contaban con los recursos para construir un edificio para tal fin –acuñar las monedas–, la Corona Española, en un esfuerzo supremo, decidió que tendría que ser un particular el que llevara el proyecto. Fue así como el palacio fue construido entre 1786 y 1812, gracias al financiamiento de Francisco García de Huidobro, marqués de Casa Real y posible antepasado de la Titi García Huidobro.

Su arquitectura fue obra de el italiano Joaquín Toesca, quien había sido expulsado de Italia luego de un intento de enderezar la Torre de Pisa. En 1785 comenzaron las obras y un año después llegaron los materiales: cal de la hacienda Polpaico; arenas del río Maipo; piedras de la cantera colorada del Cerro San Cristóbal; madera de roble y ciprés de los bosques valdivianos; cerrajería y forja española de Vizcaya; y 20 variedades de ladrillos horneados en Santiago para la construcción de dinteles, esquinas, pisos, molduras y los sólidos muros de más de 1 metro de espesor. La idea era que el edificio fuera capaz de resistir intentos de asalto, terremotos, intentos de robo, inundaciones, intentos de bandidaje, catástrofes naturales e intentos de hurto. Lo malo fue que no lo diseñaron para evitar los robos desde adentro ni los bombardeos aéreos, aunque esto último se explica considerando que en esa época los aviones no existían.[cita requerida]

Durante el gobierno del papá de Bernardo Riquelme, Ambrosio O'Higgins —quien consideraba que el edificio superaba en mucho la obra para la cual estaba destinado—, Toesca encarga a España el resto de los materiales, los cuales fueron traídos en la fragata El África y llegaron al puerto de Valparaíso en marzo de 1792, el listado comprendió: 104 rejas para ventanas, 42 balcones, chapas y pestillos, 620 clavos de media vara, 5.500 clavos de tercio, 18.000 de cuarto y 28 quintales de clavos medio tillado, 12.000 ratas y ratones, termitas varias, pulgas, garrapatas, piojos y liendres. Estas últimas aún sobreviven.

Toesca muere en 1799 víctima de una severa incompatibilidad con la vida y no logra ver terminada la Real Casa de Moneda, pues estaba muerto cuando fue inaugurada. En su reemplazo es nombrado el ingeniero militar Agustín Caballero. Fue inaugurada oficialmente en 1805 por el gobernador de la época, Luis Muñoz de Guzmán, a pesar que aún faltaban detalles en sus terminaciones, en una actitud reiterada por todos los gobiernos subsiguientes. Durante la independencia se acuñaron las primeras monedas del Chile independiente, las cuales sirvieron para jugar en los primeros tragamonedas del Chile independiente.

Como el presidente Manuel Bulnes Prieto se pasaba más tiempo en el Palacio de la Moneda robando pesitos que en el Palacio de Gobierno robándole al pueblo, en 1845 La Moneda pasó a ser oficialmente la sede del gobierno y residencia de los presidentes de Shile.

Bombardeo y reconstrucción

Soldados contemplan la sede de gobierno durante una práctica de tiro.

Durante el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, en que fue derrocado el presidente Salvador Allende, el edificio fue bombardeado por cañones del Ejército de Chile y por los cohetes Sura 3 de dos aviones Hawker Hunter, de fabricación británica, de la Fuerza Aérea de Chile, pues éstos habían decidido que era hora de una remodelación total tanto de la sede de gobierno como de sus ocupantes. Los trabajos de remodelación duraron 17 años, tras los cuales el edificio quedó más o menos igual que antes del bombardeo, pero sin techo, para poder ver con claridad si se acerca algún avión...

Tras el regreso a la democracia, durante el gobierno del presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle, se pintó el edificio en su color original (blanco invierno), aprovechando que el dueño de casa anduvo de viaje... permanentemente. A su vez, el Rey Ricardo de los Lagos I contrató una guardia de stormtroopers entrenados para evitar cualquier intento de asalto o bombardeo.

Actualmente el edificio es resguardado por antiguos Stromtroopers jubilados y es pintado con rayos láser.

Actualidad

Aunque es posible transitar a través del edificio (de norte a sur, pues si trata de hacerlo de sur a norte no lo van a dejar), no es posible acceder a sus dependencias a no ser que se encuentre usted en un city tour o, por esas cosas raras de la vida, llegue usted a tener algún cargo importante que le permita visitarlo. No trate de encontrar a la Gordis ahí, pues lo más probable es que se esté candidateando para algún puesto en la ONU o en casa de Vladimir Putin enseñándole cómo se compra un cuarto de libra con queso en McDonald's.

Véase También


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