Psychology">
Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

Trastorno Control de Impulsos EXP.

Descargar como pptx, pdf o txt
Descargar como pptx, pdf o txt
Está en la página 1de 91

TRASTORNO DEL CONTROL

DE LOS IMPULSOS
El impulso

es una sensación de tensión que se va


incrementando hasta el momento de
cometer el acto, para luego del mismo
experimentar placer y gratificación o
simplemente la liberación de la tensión
acumulada. Esta acción puede o no
verse acompañada de culpa o
autoreproche
Un impulso se conecta a la realización de una
acción y se caracteriza por:
• Existe una urgencia para realizarla
• Este último punto es muy confuso
– Algunos de estos trastornos no conllevan una
acción urgente
– En la piromanía el pirómano planea
minuciosamente la acción, y el alivio de la tensión
el acto de planear el fuego
Una adicción

• es una enfermedad física y psicoemocional, según


la OMS en el sentido tradicional, es una
dependencia hacia una sustancia, actividad o
relación (codependencia).
• Está representada por los deseos que consumen
los pensamientos y comportamientos (síndrome de
abstinencia)del adicto, y estos actúan en aquellas
actividades diseñadas para conseguir la sensación
u efecto deseado o para comprometerse en la
actividad deseada (comportamientos adictivos).
• En las adicciones (alcohol, drogas,
tabaco, juego, etc.) el adicto se siente
impulsado a beber, fumar, jugar, comer,
etc. sin ser capaz de encontrar el modo
de dejar de hacerlo.
Que es TRASTORNO DEL CONTROL DE LOS IMPULSOS?

incapacidad para resistir o manejar un


impulso que es peligroso para otros o
para sí mismo, de etiología
desconocida y curso crónico que suele
verse agravada por el consumo de
alcohol u otras sustancias
psicoactivas; algunos pacientes
presentan EEG anormal y signos
neurológicos levemente patológicos.
Características generales
• Dificultad para resistir un impulso, una
motivación o una tentación de llevar a cabo un
acto perjudicial para la persona o para los
demás.
• En la mayoría de los trastornos, el individuo
percibe una sensación de tensión o activación
interior antes de cometer el acto
• Luego experimenta placer, gratificación
o liberación en el momento de llevarlo a
cabo.
• Tras el acto puede o no haber
arrepentimiento, autoreproches o culpa.
• No están clasificados en otras
patologías: trastornos por sustancias,
parafilias, trastorno antisocial de la
personalidad, trastorno disocial,
esquizofrenia, trastornos del estado del
ánimo con descontrol de impulsos
CLASIFICACIÓN
1. Trastorno explosivo intermitente
2. Cleptomanía
3. Piromanía
4. Juego Patológico
5. Tricotilomanía
6. ADICCIONES A SUSTANCIAS
7. OTROS Trastorno del control de los
impulsos no especificado
1. TRASTORNO EXPLOSIVO
INTERMITENTE
• El trastorno explosivo intermitente se
encuentra dentro de la categoría de los
trastornos del control de los impulsos. Se
caracteriza por el fracaso a la hora de
resistir los impulsos agresivos, dando como
resultado asaltos graves o destrucción seria
de propiedades. Ejemplos de este
comportamiento incluyen amenazar o herir a
otra persona o romper o dañar
intencionadamente un objeto del valor.
Criterios diagnósticos
• Criterios diagnósticos
– Varios episodios aislados de dificultad para
controlar los impulsos agresivos que dan lugar a
violencia o a destrucción de la propiedad.
– El grado de agresividad durante los episodios es
desproporcionado con respecto a la intensidad de
cualquier estresante psicosocial precipitante.
– El diagnóstico se establece solo después de que
hayan sido descartados otros trastornos mentales
que cursan con episodios de comportamiento
agresivo (trast. antisocial y límite de la
personalidad, trastorno psicótico, episodio maníaco,
trastorno disocial o por déficit atencional con
hiperactividad, o por sustancias, etc.)
Causas
• La mayoría de casos ocurren cuando el individuo está entre la última
adolescencia y el final de la veintena. Hay cierta evidencia de que el
neurotransmisor serotonina puede desempeñar un papel en este desorden.
Aunque la prevalencia del trastorno explosivo intermitente es desconocida
y se considerado raro, es probablemente más común de lo observado y
puede ser una causa importante de comportamiento violento.
•  
• Tratamiento
 
•  Es importante que estas personas reconozcan que pierden el control y que
necesitan ayuda para aprender a controlar sus impulsos. Una terapia
psicológica cognitivo-conductual puede ayudarles a lograr el control de sus
impulsos y a transformar esa intensa ira en emociones más controlables y
adecuadas. También se ha utilizado terapia farmacológica. Se aconseja a
estas personas no utilizar alcohol ni drogas, pues pueden hacer que pierdan
el control con más facilidad.
Tratamiento
 
•  Es importante que estas personas reconozcan que
pierden el control y que necesitan ayuda para
aprender a controlar sus impulsos. Una terapia
psicológica cognitivo-conductual puede ayudarles a
lograr el control de sus impulsos y a transformar
esa intensa ira en emociones más controlables y
adecuadas. También se ha utilizado terapia
farmacológica. Se aconseja a estas personas no
utilizar alcohol ni drogas, pues pueden hacer que
pierdan el control con más facilidad.
2. Cleptomanía
• La cleptomanía es un trastorno del
control de los impulsos cuya
característica esencial es la dificultad
recurrente para controlar los impulsos
de robar cualquier objeto, aun cuando no
sea necesario para el uso personal o por
su valor económico
El cleptómano, a diferencia del ladrón, roba por
necesidad de satisfacer un desorden mental,
mientras que el último roba, por diversión, o
necesidad de satisfacer un deseo material,
económico o social llegando incluso al
profesionalismo.

Un ladrón puede pasar horas, días e incluso años


planeando un gran golpe, mientras el cleptómano
obedece generalmente a un impulso relativo
dependiendo del lugar y tiempo en que se encuentre.
Características de la cleptomanía
• Realización de hurtos sin planificación previa.
• Robar de forma repetida objetos que no
poseen valor ni utilidad para el sujeto.
• Sentimiento de presión que va en aumento
mientras se hurta.
• Sentimiento de alivio o relajación después de
realizar el hurto.
• Culpa o depresión ya que la persona es
consciente de que su actividad es delictiva
• La persona teme ser arrestada y se
siente deprimida o culpable de los robos.
• Los trastornos depresivos mayores, de
ansiedad, de la conducta alimentaria
(bulimia) y los trastornos de personalidad
pueden presentar cleptomanía.
• El trastorno crea problemas personales,
profesionales, familiares y legales
Criterios para el diagnóstico de
Cleptomanía
• Dificultad recurrente para controlar los impulsos de robar
objetos que no son necesarios para el uso personal o por su
valor económico.
• Sensación de tensión creciente inmediatamente antes de
cometer el robo.
• Bienestar, gratificación o liberación en el momento de
cometer el robo.
• El robo no se comete para expresar cólera o por venganza y
no es en respuesta a una idea delirante o a una alucinación.
• El robo no se explica por la presencia de un trastorno
disocial, un episodio maníaco o un trastorno antisocial de la
personalidad.
Tratamiento de la cleptomanía

• El tratamiento para una persona cleptómana, y


que el psicoterapeuta brinda al paciente,
depende del origen de dicha patología, y que
ha provocado su aparición (las causas
principales).
• En cualquier caso, exisen una serie de terapias
y de medicamentos que pueden ayudar a la
persona a calmar la ansiedad que el sujeto
pueda experimentar en dicho momento
diferencia entre la cleptomanía y otras
formas de robo
• La característica definitoria de la cleptomanía es
• que la persona roba en ausencia de necesidad por
• el objeto robado o su valor monetario
• • Tienden a experimentar el impulso de robar como
• ajeno y no deseado (egodistónico)
• • Ellos roban en el momento instigados por la
• presión constante y urgencia para robar
• • Pueden robar cualquier cosa, y el artículo puede
• guardado acumulado tirado o devuelto
• La persona puede estar preocupada sobre si la
• cogen no pero no planea la acción pensando en esta
consecuencia
• • No suelen ser antisociales
• • Roban solos, sin cómplices
• • Suele haber más mujeres que hombres con
• este trastorno
• • Las demás conductas de robo tienen otras
• formas
• • ladrones buscan el artículo determinado
• Los determinado,
• incluso si es de bajo valor
• El robo suele ser planeado y se han
pensado cuidadosamente los peligros y
consecuencias de la posible detención
• Estas motivaciones y pensamientos no
son típicos de la cleptomanía y si lo
están deben hacernos plantear el
diagnóstico Como una posible conducta
del comportamiento antisocial
• El ciclo de tensión que se da antes del
robo, placer o alivio durante su comisión,
y la depresión o culpa después
normalmente no está presente en el hurto
delictivo
– La búsqueda de sensaciones puede ser un
factor del hurto delictivo
• – La existencia de cómplices es más
común en este
3. PIROMANÍA
• La piromanía es un trastorno o
enfermedad psicológica del control de
los impulsos, que produce un gran
interés por el fuego, cómo producirlo,
observarlo y extinguirlo.
Síntomas y trastornos asociados

• Los pirómanos pueden hacer preparativos para provocar un incendio.


Pueden ser indiferentes a las consecuencias del fuego sobre la vida o la
propiedad, o bien obtener satisfacción con la destrucción de una
propiedad. Estos comportamientos conducen a cometer delitos, a
consecuencias legales o a la lesión o la muerte del que provoca el incendio
o de otra persona.

• Los pirómanos son conocidos por tener sentimientos de tristeza y soledad,


seguidos por ira, los cuales llevan a iniciar incendios como una salida.
•  Para un diagnostico positivo, debe haber iniciado un incendio de forma
conciente en al menos dos ocasiones. Esto es por el solo hecho de hacerlo,
y no por alguna otra motivación.
• Se trata de gente con un perfil intelectual más bajo que la media, gente
solitaria, que no destaca por nada en concreto y más bien suele pasar
desapercibida.
Diagnóstico diferencial

• Beneficio, sabotaje, venganza, crimen, acto


terrorista, protesta, para llamar la atención
o reconocimiento. El jugar con fuego
durante la infancia o RM. Como expresión
comunicativa de algunos trastornos
mentales. Como parte de un Trastorno
Disocial, episodio maníaco o trastorno
antisocial de la personalidad, psicosis, RM,
demencia o intoxicación por sustancias.
Edad y sexo

No hay edad típica de inicio. No hay relación


comprobada de la provocación de pequeños
incendios en la infancia y la piromanía del adulto.
Es episódica y su frecuencia puede aumentar o
disminuir. Se desconoce el curso longitudinal

• Pero Más del 40% de los arrestados son menores


de 18 años en USA. Es rara en la infancia. Más
frecuente en varones con pocas habilidades
sociales y dificultades de aprendizaje
Criterios para el diagnóstico de
Piromanía

• A. Provocación deliberada e intencionada de un incendio en más de una


ocasión.
• B. Tensión o activación emocional antes del acto.
• C. Fascinación, interés, curiosidad acerca de o atracción por el fuego y su
contexto situacional.
• D. Bienestar, gratificación o liberación cuando se inicia el fuego, o cuando se
observa o se participa en sus consecuencias.
• E. El incendio no se provoca por móviles económicos, como expresión de una
ideología sociopolítica, para ocultar una actividad criminal, para expresar
cólera o venganza, para mejorar las propias circunstancias de la vida, en
respuesta a una idea delirante o a una alucinación, o como resultado de una
alteración del juicio (p. ej., en la demencia, retraso mental, intoxicación por
sustancias).
• F. La provocación del incendio no se explica por la presencia de un trastorno
disocial, un episodio maníaco, o un trastorno antisocial de la personalidad.
Tratamiento

• No existe tratamiento concreto para este


tipo de enfermedad. El mayor problema es la
falta de motivación para curarse que estos
sujetos experimentan. El encarcelamiento, o
la supervisión de por vida, suele ser la única
manera de prevenir la repetición de sus actos.
Es un trastorno o enfermedad psicológica que
quita el control de los impulsos, que produce
un gran interés por el fuego, cómo producirlo,
observarlo y extinguirlo.
4. JUEGO PATOLÓGICO

La ludopatía es un impulso irreprimible de jugar a pesar de ser


consciente de sus consecuencias y del deseo de detenerse

El juego patológico cuya característica esencial es un


comportamiento de juego, desadaptativo y persistente, que
altera la continuidad de la vida personal, familiar o
profesional.
Criterios diagnósticos

A. Comportamiento de juego desadaptativo, persistente y recurrente,


como indican por lo menos cinco o más de los siguientes ítems:

1. Preocupación por el juego (preocupación por revivir experiencias


pasada de juego, compensar ventajas entre competidores o planificar
la próxima aventura, o pensar formas de conseguir dinero)
2. Necesidad de jugar con cantidades crecientes de dinero para
conseguir el grado de excitación deseado.
3. Fracaso repetido de los esfuerzos para controlar, interrumpir o
detener el juego.
4. Inquietud o irritabilidad cuando intenta interrumpir o detener el
juego.
5. El juego se utiliza como estrategia para escapar de los problemas o
para aliviar la disforia (sentimientos de desesperanza, culpa,
ansiedad, depresión)
6. Después de perder dinero, se vuelve otro día para intentar
recuperarlo (tratando de “cazar” las propias pérdidas)
7. Se engaña a los miembros de la familia, terapeutas u otras
personas para ocultar el grado de implicación con el juego.
8. Se cometen actos ilegales, como falsificación, fraude, robo,
o abuso de confianza, para financiar el juego.
9. Se han arriesgado o perdido relaciones interpersonales
significativas, trabajo y oportunidades educativas o
profesionales, por el juego.
10. Se confía en que los demás proporcionen dinero que alivie la
desesperada situación financiera causada por el juego.

B. El comportamiento de juego no se explica mejor por la


presencia de un episodio maníaco.
Síntomas y trastornos asociados

• Puede haber distorsión del pensamiento (negación, superstición,


confianza excesiva o sentido de poder y control)
• Algunos creen que el dinero es la causa y solución a sus
problemas.
• Son altamente competitivos, enérgicos, inquietos y se aburren
fácilmente. Excesivamente preocupados por la aprobación de los
demás y son generosos hasta la extravagancia.
• Cuando no juegan suelen ser adictos al trabajo o hacerlo en
“atracones”
• Predispuestos a enfermedades médicas asociadas al estrés
(hipertensión, UGD, migraña)
• Mayor frecuencia de trastornos del ánimo, DA con
Hiperactividad, abuso de sustancias, trastornos antisocial,
narcisista y límite de la personalidad.
• Entre los que están en tratamiento, el 20% han hecho intento
suicida.
• La mayoría son mujeres, aunque depende de la variación cultural, juegan
para evadirse de su realidad y están muy predispuestas a la depresión.
Sin embargo, el juego patológico comienza pronto en los adolescentes,
hombres, y más tardíamente en mujeres.
• Estos individuos son muy propensos a sufrir enfermedades relacionadas
con el estrés como hipertensión, úlcera, migraña, ... Entre los que piden
ayuda profesional se da una elevada tasa de ideación suicida.

Diagnóstico diferencial
• Juego social y profesional
• Episodio maníaco, trastorno antisocial de la personalidad.
Tratamiento del juego patológico

• Existen una gran variedad de tratamientos para el


juego patológico que incluyen el consejo, los grupos de
autoayuda y la medicación psiquiátrica. Sin embargo, no
se considera que ninguno de estos tratamientos sea el
más eficaz, y no se ha aprobado ninguna medicación por
parte de la FDA para el tratamiento del juego
patológico.
• Jugadores anónimos es un tratamiento comúnmente
utilizado para la ludopatía. Modelado con base en el
tratamiento de Alcohólicos Anónimos, utiliza un modelo
en 12 pasos que hace hincapié en un enfoque de ayuda
mutua.
• Se ha visto que un enfoque, la terapia cognitivo-conductual
reduce los síntomas y las urgencias relacionadas con el
juego. Este tipo de terapia se centra en la identificación de
los procesos mentales relacionados con el juego, las
distorsiones cognitivas y del ánimo que incrementan la
vulnerabilidad al juego incontrolado. Además, esta terapia
utilizan técnicas de adquisición de competencias orientadas
a la prevención de las recaídas, asertividad y rechazo del
juego, resolución de problemas y refuerzo de las
actividades e intereses inconsistentes con el juego. Algunas
páginas web como www.ludopatia.org o www.ludopatia.cat
dan consejos a jugadores y familiares afectados por
ludopatía.
• Existen evidencias de que la paroxetina es
eficiente en el tratamiento del juego
patológico. Además, para pacientes que sufren
la comorbididad del trastorno bipolar y el
juego patológico, la administración continuada
de litio se ha mostrado eficaz en ensayos
preliminares. El fármaco antagonista de los
opiáceos conocido como malmefeno también
ha resultado exitoso en los ensayos para el
tratamiento del juego compulsivo.
5. TRICOTILOMANÍA
• Trico significa “pelo”, manía “impulso” de
realizar una conducta. La tricotilomanía es
el comportamiento recurrente de
arrancarse el propio cabello, y/o vello
del cuerpo, por simple placer,
gratificación o liberación de la tensión.
• Se trata de un hábito nervioso reversible.
Algunas personas consultan después de años
de padecimiento y otras, ya resignadas,
conviven con esta patología. Recién en los
últimos años este trastorno empezó a tener
peso propio,DSM IV lo incorporó como un
apartado estableciendo claros criterios
para su diagnóstico. En esta clasificación
psiquiátrica, la tricotilomanía  considerada
un trastorno del control de los impulsos:
“dificultad para resistir el impulso que es
perjudicial en su efecto”
Criterios diagnósticos

 
– Arrancamiento del propio pelo de forma recurrente,
que da lugar a una pérdida perceptible de pelo.
– Sensación de tensión creciente inmediatamente antes
del arrancamiento de pelo o cuando se intenta resistir
la práctica de ese comportamiento.
– Bienestar, gratificación o liberación cuando se
produce el arrancamiento del pelo.
– La alteración no se explica mejor por la presencia de
otro trastorno mental y no se debe a una enfermedad
médica ( p. ej., dermatológica)
– La alteración causa malestar clínicamente
significativo o deterioro social, laboral o de otras
áreas importantes de la actividad del individuo.
Síntoma y trastornos asociados

- El examen de la raíz del pelo, el retorcimiento o la sujeción de la trenza


entre los dientes y la tricofagia también pueden darse con la tricotilomanía.
- El arrancamiento no se produce en presencia de otras personas (excepto
miembros muy próximos de la familia), y puede haber una evitación de las
situaciones sociales.
- Niegan frecuentemente su comportamiento y ocultan o camuflan la alopecia
resultante
- Algunas tiene la necesidad de arrancarle el pelo a otras personas y
subrepticiamente.
- Pueden arrancar el pelo de animales domésticos, muñecas y otros materiales
fibrosos (suéteres, alfombras).
- Pueden morderse las uñas, rascarse, mordisquear y hacerse excoriaciones,
asociados.
- Pueden tener trastornos del ánimo, de ansiedad o RM.
 
Cultura y sexo
• Igual distribución de sexo en los niños.
En adultos más frecuente en mujeres.

Prevalencia
• 1 a 2% en población escolar 

Curso
• Edad de inicio entre los 5-8 años y 13
años. Continuo o intermitente
 
Diagnóstico diferencial
- Considerar otras causas de alopecia en
las personas que niegan arrancarse el
pelo.
- Esquizofrenia, TOC, trastorno facticio.
TratamienTO
• El tratamiento farmacológico no arroja datos de
eficacia a largo plazo. Sabemos que se han
utilizados inhibidores de serotonina (por el
compromiso del sistema serotoninérgico,
dopaminérgico y opioide) pero no se conoce la
eficacia de un fármaco en particular que señale su
terapéutica de elección. En la tricotilomanía, los
síntomas pueden reducirse con medicación, sin
que por eso se elimine el trastorno, con la
administración de antidepresivos como la
fluoxetina.
• La terapia de reversión de hábito es la que hoy promueve la
comunidad científica como eficaz para la tricotilomanía.
El objetivo es aprender a controlar el impulso nervioso, hasta
que este desaparezca. En esta terapia fomentamos la
autoobservación y el registro de los episodios, porque una vez
que la persona conoce en profundidad su funcionamiento
podemos comenzar con las técnicas que implican la reversión del
hábito nervioso. Este proceso, de unas pocas sesiones, permite
evaluar –mediante mediciones concretas- la intensidad, duración
y frecuencia del comportamiento que será erradicado. En
general, estos pacientes no poseen información suficiente sobre
su problema, consideran que son los únicos a quienes les ocurre y
suelen sentirse muy aliviados cuando el terapeuta diagnostica y
psicoeduca sobre el tratamiento.
ADICCIONES:

Criterios para Dependencia de


sustancias
• Un patrón desadaptativo de consumo de
la sustancia que conlleva un deterioro o
malestar clínicamente significativos,
expresado por tres (o más) de los ítems
siguientes en algún momento de un
período continuado de 12 meses:
1 tolerancia, definida por cualquiera de los
siguientes ítems:
• (a) una necesidad de cantidades
marcadamente crecientes de la sustancia
para conseguir la intoxicación o el efecto
deseado
(b) el efecto de las mismas cantidades
de sustancia disminuye claramente con
su consumo continuado
• 2. abstinencia, definida por cualquiera de los
siguientes ítems:
• (a) el síndrome de abstinencia
característico para la sustancia (v. Criterios
A y B de los criterios diagnósticos para la
abstinencia de sustancias específicas)
(b) se toma la misma sustancia (o una muy
parecida) para aliviar o evitar los síntomas
de abstinencia
3. la sustancia es tomada con frecuencia
en cantidades mayores o durante un
período más largo de lo que inicialmente
se pretendía
4. existe un deseo persistente o
esfuerzos infructuosos de controlar o
interrumpir el consumo de la sustancia
• 5. se emplea mucho tiempo en actividades
relacionadas con la obtención de la sustancia
(p. ej., visitar a varios médicos o desplazarse
largas distancias), en el consumo de la
sustancia (p. ej., fumar un pitillo tras otro) o
en la recuperación de los efectos de la
sustancia
• 6. reducción de importantes actividades
sociales, laborales o recreativas debido al
consumo de la sustancia
7. se continúa tomando la sustancia a
pesar de tener conciencia de problemas
psicológicos o físicos recidivantes o
persistentes, que parecen causados o
exacerbados por el consumo de la
sustancia (p. ej., consumo de la cocaína a
pesar de saber que provoca depresión, o
continuada ingesta de alcohol a pesar de
que empeora una úlcera)
• Especificar si:
• Con dependencia fisiológica : signos de
tolerancia o abstinencia (p. ej., si se
cumplen cualquiera de los puntos 1 o 2)
Sin dependencia fisiológica : no hay
signos de tolerancia o abstinencia (p. ej.,
si no se cumplen los puntos 1 y 2)
Criterios para Abuso de sustancias

• A. Un patrón desadaptativo de consumo


de sustancias que conlleva un deterioro
o malestar clínicamente significativos,
expresado por uno (o más) de los ítems
siguientes durante un período de 12
meses:
• 1. consumo recurrente de sustancias, que da lugar
al incumplimiento de obligaciones en el trabajo, la
escuela o en casa (p. ej., ausencias repetidas o
rendimiento pobre relacionados con el consumo de
sustancias; ausencias, suspensiones o expulsiones
de la escuela relacionadas con la sustancia; descuido
de los niños o de las obligaciones de la casa)
2 . consumo recurrente de la sustancia en
situaciones en las que hacerlo es físicamente
peligroso (p. ej., conducir un automóvil o accionar
una máquina bajo los efectos de la sustancia)
• 3 . problemas legales repetidos relacionados con
la sustancia (p. ej., arrestos por comportamiento
escandaloso debido a la sustancia)
4 . consumo continuado de la sustancia, a pesar
de tener problemas sociales continuos o
recurrentes o problemas interpersonales
causados o exacerbados por los efectos de la
sustancia (p. ej., discusiones con la esposa
acerca de las consecuencias de la intoxicación, o
violencia física)
• B. Los síntomas no han cumplido nunca
los criterios para la dependencia de
sustancias de esta clase de sustancia
Criterios para Intoxicación por sustancias

• A. Presencia de un síndrome reversible


específico de una sustancia debido a su
ingestión reciente (o a su exposición).
Nota: diferentes sustancias pueden
producir síndromes idénticos o similares.
• B. Cambios psicológicos o comportamentales
desadaptativos clínicamente significativos
debidos al efecto de la sustancia sobre el
sistema nervioso central (p. ej.,
irritabilidad, labilidad emocional, deterioro
cognoscitivo, deterioro de la capacidad de
juicio, deterioro de la actividad laboral o
social), que se presentan durante el consumo
de la sustancia o poco tiempo después.
• C. Los síntomas no se deben a una
enfermedad médica y no se explican
mejor por la presencia de otro trastorno
mental
Criterios para Abstinencia de sustancias

• A. Presencia de un síndrome específico de una


sustancia debido al cese o reducción de su
consumo prolongado y en grandes cantidades.
• B. El síndrome específico de la sustancia causa un
malestar clínicamente significativo o un deterioro
de la actividad laboral y social o en otras áreas
importantes de la actividad del individuo.
• C. Los síntomas no se deben a una enfermedad
médica y no se explican mejor por la presencia de
otro trastorno mental.
OTRAS ADICCIONES O IMPULSOS

• Recientemente se han venido


considerando ciertas conductas como
adictivas cuando dicha denominación
se reservaba al consumo de sustancias
que tenían la potencialidad de producir
dependencia, ligada posteriormente a su
abuso.
• Con los años se ha observado que
existen también conductas que en sí
mismas, y sin mediar ningún tipo de
sustancias, tienen la capacidad de
producir dependencia, así como algunas
de las características asociadas con la
dependencia de sustancias
• En este sentido el concepto de adicción
se ha hecho más extenso y complejo,
apareciendo otros términos nuevos
asociados al de adicción, como es la
pérdida de control, concepto hoy
esencial para la explicación de las
conductas adictivas.
• Actualmente se incluyen dentro de las
conductas adictivas tanto el consumo
abusivo de sustancias psicoactivas que
producen dependencia, tales como el
alcohol, la heroína, la cocaína, etc., como
distintas conductas, tales como el juego
patológico, las compras compulsivas, el
trabajo, el sexo compulsivo, el abuso de
Internet o de las nuevas tecnologías, etc.
Tabaquismo
• La nicotina es la sustancia causante a nivel
biológico de la adicción y la dependencia del
tabaco, si bien en tal adicción también influyen
factores de tipo social y psicológico, dado que
fumar es en sí mismo una experiencia aversiva,
hasta que con la practica no se ha desarrollado
un efecto de tolerancia a la nicotina, para
convertirse entonces en una experiencia
reforzante que se irá generalizando a multitud
de situaciones y contextos.
• La nicotina es una sustancia cuyas propiedades
euforizantes y reforzantes, tienen cierto
grado de similaridad con la cocaína y los
opiáceos, teniendo con estas adicciones
muchos puntos en común. En realidad la
nicotina es usada por el fumador como
mecanismo de afrontamiento psicológico ante
estados de ánimo negativo como la tristeza o
la ira, para reducir el estrés, situaciones que
producen ansiedad, controlar el peso, etc.
• En cualquier caso, el fumador irá negando, en función
del grado de su dependencia, todas la informaciones
negativas sobre el tabaco pensando que no le
incumben, o al menos le incumben a otros; sensación
de inmunidad que es facilitada por la aceptación,
facilitación y potenciación del hábito de fumar que
existe en familiares, amigos, compañeros, etc., sin
contar la influencia de la publicidad que hasta hace
unos años asociaba, sobretodo entre los más jóvenes,
cierto roles de madurez, prestigio o éxito social al
consumo del tabaco.
• El inició del tratamiento para dejar de
fumar debe contar primero con la
decisión y la motivación necesarias por
parte del fumador, ya que quien no
quiere dejar de fumar no podrá
beneficiarse de ninguna técnica para
hacerlo.
• Para ello el fumador que desea dejar de
serlo debe primero tener claro sus
objetivos y planteárselos de manera
realista. Ante de llegar a la decisión
firme de dejar de fumar, el fumador
puede pasar por varias fases, las cuales
deben estar guiadas por el profesional.
Alcoholismo
• El alcohol cumple una gran variedad de funciones
en nuestra sociedad tales como psicotrópica,
terapéutica, alimentaria, como fuente de calorías
para ciertos trabajos que requieren esfuerzo,
como instrumento de cohesión, integración y
estructuración cultural, como mecanismo de
identificación y control social, como forma de
transgresión, como recurso de afrontamiento y
adaptación en situaciones de cambio, como modo
de “llenar” “tiempos vacíos”, y como mecanismo de
sociabilidad
• El alcoholismo es un trastorno que entre
los varones suele iniciarse en la
adolescencia, progresa lentamente, y se
convierte en un problema hacia los
veinte años. La dependencia del alcohol
requiere un abuso reiterado de la bebida
durante años, en los que el alcohólico
desarrolla un patrón de comportamiento
característico
• Entre las mujeres, aunque también en
algunos varones, el alcoholismo suele
darse a una edad avanzada sin que hayan
existido problemas de abuso o
dependencia del alcohol anteriores
• Los principales problemas que nos
encontramos en el alcohólico tienen que ver
el patrón de consumo adquirido. Estos
problemas van desde los agudos como la
intoxicación o la abstinencia, a problemas
desarrollados a lo largo del tiempo como la
dependencia y el abuso. El consumo
continuado y reiterado de alcohol produce
dependencia física, cuyo síndrome de
abstinencia puede ser grave o incluso mortal.
Los tratamientoS
• pueden estar orientados a la abstinencia
completa o a un uso controlado de la bebida,
sin embargo su elección está en función de la
evaluación previa del problema, los recursos y
habilidades de la persona, el grado de
patología o secuelas físicas alcanzado, el nivel
de exigencias y expectativas del medio social
y familiar, y los patrones motivacionales
hacia la bebida frente a otras áreas de la
vida, entre otros.
• La intervención psicológica combina
programas de autocontrol y
multicomponente, junto a
entrenamientos en habilidades sociales y
de afrontamiento, y diversas técnicas
para reducir la ansiedad y el estrés, así
como de técnicas para el incremento de
la motivación al proceso de cambio
Internet y Nuevas Tecnologías
• Las nuevas tecnologías de la información
como Internet, o los teléfonos móviles,
han supuesto una revolución no sólo en la
inmediatez y las posibilidades de
compartir información, sino muchos de
nuestros hábitos cotidianos a la hora de
comunicarnos con otras personas, así
como de distribuir nuestro tiempo
• Pasarse el día delante del ordenador, jugando o chateando,
trabajando o intercambiando información, puede no tener porque
ser ningún problema, sin embargo, cuando se declinan
responsabilidades hacia uno mismo o los demás, se empieza a
faltar a las propias obligaciones, o se descuidan las relaciones
sociales con el entorno para dedicarse exclusivamente al
ordenador a Internet o mandarse mensajes por el móvil, se puede
pensar que la persona ya no es enteramente libre para usar o
dejar de usar esos medios de comunicación o entretenimiento, y
es posible que, como en otros comportamientos que generan
adicción, el alejamiento del ordenador o del móvil se viven con una
gran ansiedad, pensamientos e imágenes recurrentes y obsesivas,
de tal manera que tal malestar emocional solo se alivia cuando la
persona retoma la actividad con estos equipos.
• Por el tipo de actividad, gustos de ocio y el
afán por la novedad, los adolescentes y
jóvenes suelen ser la población donde
pueden darse más casos de personas cuya
vida social, familiar, escolar o laboral se ve
deteriorada por el uso y abuso exclusivo, la
mayor parte del día, en actividades
dedicadas a Internet, los ordenadores,
móviles o las nuevas tecnologías en general
TRATAMIENTO
• Será necesaria una evaluación pormenorizada
en los diferentes ámbitos y capacidades del
individuo para saber si la adicción está
motivada por compensación hacia los déficits
en otras áreas, y se corresponde entonces un
entrenamiento y desarrollo de otras
habilidades y motivaciones ligadas a la propia
autoestima e ideas de superación que solvente
progresivamente tales carencias, ampliando el
abanico de actividades e intereses.
Adicción al Trabajo
• Los cambios sociales han elevado la importancia del trabajo
como fuente principal de reforzamiento, convirtiéndose en
el principal medio para el aumento del estatus social, con las
consiguientes ganancias materiales asociadas a tal estatus;
así mismo el aumento de la sensación de competencia, éxito
y control contribuye internamente a dicho reforzamiento;
todo ello favorece que para muchas personas el trabajo se
convierta en la única forma de afrontamiento activo para
cubrir necesidades afectivas, o pasivo para evitar/escapar
a situaciones difíciles de manejar, como pueden las
dificultades en otros campos de la vida, ya sean familiares o
sociales
• La ambición profesional en combinación con
determinados rasgos personalidad puede dar lugar a
la “Adicción al trabajo”. El adicto al trabajo se
diferencia del trabajador con estrés crónico en que
el primero no se siente mal por el trabajo, sino que
llega a experimentar sensaciones placenteras. Sin
embargo, el adicto al trabajo sólo vive para trabajar,
a diferencia del buen profesional que aunque es
eficaz y se siente comprometido (“engagement”) con
su trabajo, nunca olvida su tiempo libre junto a sus
otras actividades familiares o sociales.
• Las características del adicto son pérdida de
interés por la familia, amigos, ocio, relaciones
sexuales; dedica más horas al trabajo aunque
esté agotado; cuando no trabaja manifiesta
irritabilidad, ansiedad y tristeza; rasgos
obsesivos de personalidad como
perfeccionismo, inflexibilidad, rigidez,
obstinación, preocupación, programación del
tiempo; y se siente insatisfecho pese a
poseer cuantiosos logros profesionales
• Algunos estudios han encontrado también
relaciones entre este patrón adictivo y una baja
asertividad; baja autoestima junto con
pensamientos catastróficos; una baja capacidad
para relajarse; y mostrarse incapaces de
establecer prioridades al querer hacerlo todo al
mismo tiempo. También se ha visto en estas
personas una predisposición a tener menor
Estabilidad Emocional, lo cual indicaría también la
tendencia a la ansiedad, la hostilidad y la
depresión.
• La intervención psicológica para salir de la adicción pasa
por reconocer primeramente el problema, realizar un
entrenamiento en toma decisión y distribución del tiempo;
aprender a delegar, en particular en puestos directivos, no
llevar trabajo a casa, delimitando el horario en la oficina
para ir reduciendo el trabajo progresivamente. Al mismo
tiempo se deberían tratar aquellos factores emocionales
que puedan estar alterados en relación con adicción, al
tiempo que enseñar y entrenar a la persona en nuevas
formas de afrontamiento de cara a poder sacar partido y
disfrute de esas otras áreas de su vida que ha estado
evitando por una posible falta o pérdida de habilidades
LO SEXUAL
• VISTO CON UN TRASTORNO
OBSESIVO COMPULSIVO
• VISTO COMO UN TRASTORNO DEL
CONTROL DE LOS IMPULSOS
• TOC;
Las compulsiones, sin embargo, están definidas
en DSM IV como comportamientos repetitivos
(tales como lavarse las manos en exceso,
orden en exceso o control en exceso) o actos
mentales (tales como rumiar, contar o hablar
silenciosamente), que son llevados a cabo para
reducir el dolor o la ansiedad y no para
proveer placer o gratificación (APA, 1994).
• Los argumentos a favor de la
clasificación de este síndrome de
comportamiento sexual como una forma
de trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
enfatizan la función defensiva de la
actividad sexual, en tanto que operan
para reducir la ansiedad y otros
sentimientos dolorosos
• Los que proponen estos argumentos notaron que,
cuando la actividad sexual es bloqueada, los individuos
que sufren esta condición, experimentan
disconformidad (Quadland 1985; Weissberg y Levay
1986).
• Hollander (1993) incluyó las parafilias y las
compulsiones sexuales no parafilicas entre las
condiciones que marcó como desórdenes del espectro
compulsivo-obsesivo, dado que algunos síntomas,
comorbilidad, causas posibles, transmisión familiar y
respuesta a tratamientos farmacológicos y de
comportamientos parcialmente se superponen con OCD.
• TCI;
• Barth, R. J. & Zinder, B.N. (1987) argumentaron
que este síndrome sexual debería ser designado
como “impulsividad sexual”, dado que se ajusta el
criterio de diagnóstico para impulsos atípicos de
desórdenes de control en el entonces DSM III.

• El DSM IV incluye la siguiente descripción de los


desórdenes de control de los impulsos:
• La descripción del DSM-IV del desorden de
control del impulso parece entonces
caracterizar este síndrome sexual. Pero las
objeciones para clasificar este síndrome
como un trastorno del control del impulso,
generalmente dependen de argumentos que
afirman que el comportamiento sexual no es
en realidad impulsivo sino planeado, y que un
tiempo considerable puede separar un acto
sexual del sentimiento que lo instiga
• El rasgo esencial del Desorden de Control del
Impulso es la falla para resistirse al impulso,
la conducción o el intento para ejecutar un
acto que es dañino para la persona u otros. El
individuo siente un incremento de la tensión o
excitación antes de cometer el acto y luego
experimenta placer, gratificación alivio en el
mismo momento de cometer el acto. Seguido
al acto, puede o no puede haber auto
reproche culpa o remordimiento.
YA

También podría gustarte