El Tantra y Las Prostitucion Sagrada
El Tantra y Las Prostitucion Sagrada
El Tantra y Las Prostitucion Sagrada
Ante todo hay que decir que instituciones semejantes a esta han
funcionado en las diversas áreas culturales del ámbito indoeuropeo y
fuera de éste, se encuentran por doquier, desde América Central a Caldea
y del África a la Polinesia. En todos los casos, se trata de mujeres
jóvenes vinculadas al servicio de un culto particular, que otorgan sus
favores a los sacerdotes y a los fieles de dicho culto. El precio pagado
por el servicio requerido a estas prostitutas no va nunca directamente a
ellas sino, en su totalidad, es entregado a «la Deidad», a través de los
responsables religiosos del santuario, del lugar de peregrinación, de las
tumbas de los santos personajes o del templo mismo, en cuyas dependencias
se da acogida a estas mujeres para ser visitadas por sus devotos.
Prostitución y santuarios
Hay que añadir que sólo los templos de Shiva y los santuarios de la diosa
habían dado acogida a estas «cortesanas divinas», como era también el
caso de Grecia, es decir, que no todos los templos podían ofrecer estas
«facilidades» a sus fieles. Pero, si tenemos en cuenta el inmenso
territorio de la India, vamos a encontrar que había en realidad un número
considerable de muchachas dispersas en los innumerables lugares del
culto. La repartición de aquellos fue ciertamente igual durante mucho
tiempo, pero los avances de la conquista musulmana hicieron que, durante
los dos primeros siglos la institución sólo existiera en el extremo sur
de la península o en algunas zonas apartadas como el Assam o los altos
valles del Himalaya.
Las devadasis.