Palto
Palto
Palto
Editado por A.W. Whiley Maroochy Research Station Queensland Horticulture Institute Queensland, Australia B. Schaffer Tropical Research and Education Center University of Florida Florida, EE.UU. y B.N. Wolstenholme Horticultural Science University of Natal, Sudfrica
CABI Publishing
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Titulo original: The Avocado. Botany, production and uses. Edited by A.W. Whiley, B. Schaffer and B.N. Wolstenholme CABI Publishing Versin en espaol: El Palto. Botnica, produccin y usos. Ediciones Universitarias de Valparaso, 2007 Inscripcin N 166.640 ISBN 978-956-17-0415-2 Tirada: 1.000 ejemplares Traduccin: Paola Puelma Goya Revisin de la Traduccin: Tatiana Cantuarias Aviles Diseo Grfico: Guido Olivares S. Asistente de Diseo: Mauricio Guerra P. Asistente de Diagramacin: Alejandra Larran R. Correccin de Pruebas: Osvaldo Oliva P. Ediciones Universitarias de Valparaso Pontificia Universidad Catlica de Valparaso Telfono (56-32) 227 3087 - Fax (56-32) 227 3429 Correo electrnico: euvsa@ucv.cl www.euv.cl Impresin: Litogarn, Valparaso HECHO EN CHILE
ndice
Historia, Distribucin y Usos R.J. Knight, Jr. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Pg. 13 Taxonoma y Botnica R.W. Scora, B.N. Wolstenholme y U. Lavi . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25 Gentica y Mejoramiento Clsico E. Lahav y U. Lavi . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47 Ecologa: El Clima y el Ambiente Edfico B.N. Wolstenholme . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 75 Biologa reproductiva S. Gazit y C. Degani . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .103 Fisiologa ambiental B. Schaffer y A.W. Whiley . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .133 Cultivares y Portainjertos S.D.E. Newett, J.H. Crane y C.F. Balerdi . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .155 Propagacin G.S. Bender y A.W. Whiley . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .177 Biotecnologa F. Pliego-Alfaro; Witjaksono; A. Barcel-Muoz; R.E. Litz y U. Lavi. . . . . . . . . . . . . . . . . .199
Captulo 10. Manejo del cultivo A.W. Whiley . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .215 Captulo 11. Riego y Nutricin Mineral E. Lahav y A.W. Whiley . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .241 Captulo 12. Enfermedades foliares, del fruto y el suelo K.G. Pegg, L.M. Coates, L. Korsten y R.M. Harding . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .275 Captulo 13. Plagas de Insectos y caros G.K. Waite y R. Martnez Barrera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .311 Captulo 14. Cosecha, Embalaje, Tecnologa de Postcosecha, Transporte y Procesamiento P.J. Hofman, Y. Fuchs y D.L. Milne . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .331
Autores
C.F. Balerdi, Miami-Dade County Cooperative Extension Service, University of Florida, Institute of Food and Agricultural Sciences, 18710 SW 288 Street, Homestead, FL 33030, USA A. Barcel-Muoz, Centro de Investigacin y Formacin Agraria, Cortijo de la Cruz, s/n, 29140 Churriana, Mlaga, Spain G.S. Bender, University of California Cooperative Extension, 5555 Overland Avenue, Building 4, San Diego, CA 92123 1219, USA L.M. Coates, Queensland Horticulture Institute, Indooroopilly Research Centre, Department of Primary Industries, 80 Meiers Road, Indooroopilly, Queensland 4068, Australia J.H. Crane, Tropical Research and Education Center, University of Florida, 18905 SW 280 Street, Homestead, FL 33031, USA C. Degani, Institute of Horticulture, ARO, The Volcani Center, PO Box 6, Bet Dagan 50250, Israel Y. Fuchs, Institute for Technology and Storage of Agricultural Products, ARO, Department of Postharvest Science of Fresh Produce, The Volcani Center, PO Box 6, Bet Dagan, 50250 Israel S. Gazit, The Kennedy-Leigh Centre for Horticultural Research, The Hebrew University of Jerusalem, PO Box 12, Rehovot 76100, Israel R.M. Harding, School of Life Sciences, Gardens Point Campus, Queensland University of Technology, 2 George Street, Brisbane, Queensland 4001, Australia P.J. Hofman, Maroochy Research Station, Queensland Horticulture Institute, Department of Primary Industries, PO Box 5083 SCMC, Nambour, Queensland 4560, Australia R.J. Knight, Jr, Tropical Research and Education Center, University of Florida, 18905 SW 280 Street, Homestead, FL 33031, USA L. Korsten, Department of Microbiology and Plant Pathology, University of Pretoria, Pretoria 0002, South Africa E. Lahav, Institute of Horticulture, ARO, The Volcani Center, PO Box 6, Bet Dagan 50250, Israel U. Lavi, Institute of Horticulture, ARO, The Volcani Center, PO Box 6, Bet Dagan 50250, Israel R.E. Litz, Tropical Research and Education Center, University of Florida, 18905 SW 280 Street, Homestead, FL 33031, USA R. Martinez Barrera*, Facultad de Agrobiologa, Universidad Michoacana de San Nicols de Hidalgo, Paseo Lzaro Crdenas Esquina Berlin, Uruapan, Michoacn, Mxico D.L. Milne*, Merensky Technological Services, PO Box 14, Duiwelskloof 0835, South Africa * Fallecidos.
S.D.E. Newett, Maroochy Research Station, Queensland Horticulture Institute, Department of Primary Industries, PO Box 5083 SCMC, Nambour, Queensland 4560, Australia K.G. Pegg, Queensland Horticulture Institute, Indooroopilly Research Centre, Department of Primary Industries, 80 Meiers Road, Indooroopilly, Queensland 4068, Australia F. Pliego-Alfaro, Departamento Biologa Vegetal, Facultad de Ciencias, Campus de Teatinos, s/n, 29071 Mlaga, Spain B. Schaffer, Tropical Research and Education Center, University of Florida, 18905 SW 280 Street, Homestead, FL 33031, USA R.W. Scora, Department of Botany and Plant Sciences, University of California, Riverside, CA 92521, USA G.K. Waite, Maroochy Research Station, Queensland Horticulture Institute, Department of Primary Industries, PO Box 5083 SCMC, Nambour, Queensland 4560, Australia A.W. Whiley, Maroochy Research Station, Queensland Horticulture Institute, Department of Primary Industries, PO Box 5083 SCMC, Nambour, Queensland 4560, Australia Witjaksono, Tropical Research and Education Center, University of Florida, 18905 SW 280 Street, Homestead, FL 33031 USA B.N. Wolstenholme, Horticultural Science, School of Agricultural Sciences and Agribusiness, University of Natal, Pietermaritzburg 3209, South Africa
Prefacio
La Palta (Persea americana Mill.), la cual ha sido descrita como la fruta ms nutritiva de todas (Purseglove, 1968), ha ganado el reconocimiento mundial y un lugar importante en el mercado internacional. A pesar de ser relativamente nueva en el mercado internacional, esta fruta nica ha sido valorizada y utilizada durante, al menos, 9 mil aos dentro y fuera de su lugar de origen en Meso Amrica y sus alrededores (Smith, 1966). La semi-domesticacin de la palta data de la poca Precolombina, cuando era muy apreciada por las civilizaciones Maya y Azteca como lo evidencia su presencia en la iconografa de dichos pueblos (Storey et al., 1986; Gama-Campillo y Gmez-Pompa, 1991). Se cree que estas culturas seleccionaron activamente los frutos segn su tamao y palatabilidad (Smith, 1966). La informacin acerca de la biologa, produccin y utilizacin de la palta ha estado disponible en la literatura por muchos aos, tanto en forma de artculos en revistas cientficas y econmicas, como en folletos de divulgacin, boletines e informes. Dichas publicaciones se centran, generalmente, en determinados aspectos de la biologa del cultivo, produccin o manipulacin y, normalmente son especficas para cada regin. Desde hace mucho ha sido necesario un texto cientfico detallado, con una visin internacional, que resumiera el conocimiento actual sobre este cultivo. El intercambio global de informacin sobre la biologa, produccin y uso de este fruto ha progresado mucho desde el Primer Congreso Mundial de la Palta, realizado en Sudfrica en 1987 y los tres Congresos posteriores que tuvieron lugar en California, Israel y Mxico. Estos encuentros han dado la oportunidad a los productores, cientficos de la horticultura, extensionistas y otros profesionales relacionados con la in-
dustria de la palta, de discutir los problemas centrales que limitan el desarrollo del cultivo y los posibles mtodos para superar dichos obstculos. Estos intercambios internacionales de ideas han proporcionado un marco para un tratamiento completo y global de la botnica, produccin y utilizacin de la palta, que es presentado en este libro. El origen Mesoamericano de este fruto abarca hbitats que van desde el nivel del mar hasta altitudes que sobrepasan los 3.000 metros, comprendiendo una amplia gama de climas y tipos de suelo, que originaron la gran diversidad gentica y amplia adaptabilidad observada en esta especie. Pese a que el palto evolucion en latitudes tropicales, el efecto moderador de la altitud ha tenido un fuerte impacto sobre el acervo gentico. El germoplasma de los ecotipos guatemaltecos y, en menor medida, de los ecotipos mexicanos originarios de las zonas tropicales altas o de climas subtropicales costeros, est adaptado de igual forma a las reas subtropicales clidas, dominando la produccin en estas regiones. Los primeros huertos comerciales de paltos fueron plantados en California a comienzos del siglo XX, cuando se dio inicio a la mayor parte de los trabajos pioneros de investigacin y de tecnologa del manejo de los huertos. Los cultivares ms ampliamente plantados, el cv. Fuerte y luego el cv. Hass, se hicieron populares en California y fueron tambin adoptados despus por las industrias ms nuevas en Israel, Espaa, Sudfrica, Chile y Australia. El rico y nogado sabor de estos cultivares, que poseen un alto contenido de aceite, ha sido descrito como un gusto adquirido, debido a la lenta aceptacin inicial por parte de los consumidores de las reas subtropicales donde se produce.
En contraste con lo anterior, el germoplasma antillano, en algunos casos hibridado con ecotipos guatemaltecos, est adaptado a los climas tropicales hmedos de las tierras bajas. La pulpa del fruto, que es ms pobre en aceite pero con mayor nivel de azcar que la mexicana y la guatemalteca, tiene un sabor claramente diferente y su cultivo es el dominante en las zonas tropicales y subtropicales de poca altitud. Este cultivo es mayoritariamente producido a partir de rboles provenientes de semillas, los que, generalmente son manejados con tecnologas menos avanzadas que los cultivares subtropicales. Sin embargo, la industria del palto en Florida ha seleccionado muchos cultivares superiores, producidos en rboles injertados y esta regin contina generando tecnologa para la produccin de cultivares antillanos e hbridos. Este libro resume la ciencia y tecnologa del cultivo de la palta a principios del siglo XXI. Los autores fueron seleccionados basndose en su experiencia tcnica, disponibilidad y familiaridad con los temas tratados en cada captulo. Inevitablemente, la eleccin de los autores y tratamiento de los temas enfatiza el segmento subtropical de la industria mundial, ms que el tropical. Los autores intentaron describir la situacin a nivel mundial, sin embargo solo unos pocos pases con industrias tecnolgicamente avanzadas han dominado la literatura de referencia sobre el cultivo. La riqueza de la informacin contenida en los captulos de este libro indica que la palta es uno de los ms comprendidos entre los nuevos cultivos subtropicales/tropicales. Desde el punto de vista de cientficos y productores, el nuevo milenio presenta muchos desafos para la produccin de este fruto. Algunas industrias han hecho progresos considerables para superar la mayor amenaza a su viabilidad, que es la pudricin de la raz causada por Phytophthora, utilizando para ello una novedosa tcnica de inyeccin de fungicida fosfonado. Sin embargo, la resistencia natural de los portainjertos, junto con la mejora del desempeo hortcola, parecen todava lejanas. Existe an la necesidad de una mayor cantidad de cultivares realmente de elite, especialmente de paltos tropicales. La barrera de rendimiento promedio de 20 toneladas por hectrea durante, al menos, los 4 primeros aos de los cultivares ms utilizados en huertos a gran escala, desafa inflexiblemente a los avances tecnolgicos. Los programas de mejoramiento an no han tenido un xito significativo. Los crecientes volmenes de exportacin requieren mejoras en las tecnologas de post-cosecha que permitan jornadas de transporte ms largas. La proteccin de los cultivos es cada vez ms complicada, debido a las restricciones en el
uso de pesticidas, mientras que el mercado de produccin orgnica de fruta crece rpidamente. Tal vez la ms importante de las futuras restricciones es el desafo del cambio climtico y especialmente el calentamiento global, que harn necesaria la expansin hacia nuevas reas de produccin para escapar al creciente estrs ambiental. Con respecto al marketing, la agricultura en general afronta una disminucin en los precios de los productos bsicos. Muchos pases en vas de desarrollo intentarn solucionar este problema generando un intercambio internacional a travs de las exportaciones de cultivos de alto valor. Los productores de estos pases enfrentan la reduccin de sus mrgenes de ganancia como resultado del aumento de los costos y de las menores ganancias reales, debido a la creciente competencia. La supervivencia econmica demanda una mayor eficiencia productiva y, considerando que el 90% del crecimiento de la poblacin se produce en pases en vas de desarrollo, las oportunidades dependen de las innovaciones en el rea de marketing y de la lenta mejora en los estndares de vida. Un desafo vital es el aumentar el consumo de paltas en los pases del Asia altamente poblados, donde su consumo no es tradicional, tales como China e India. La tecnologa aplicada a la produccin de la palta contina avanzando rpidamente, lo que implica un aumento significativo del volumen de publicaciones sobre este cultivo. La industria actualmente est lidiando con las consecuencias de la intensificacin de los cultivos dictada por la realidad econmica, pero la tecnologa requerida para vencer este desafo est an en fase de transicin. El futuro demanda una disminucin de la polmica dependencia de los agroqumicos adems de la acomodacin del creciente segmento de cultivo orgnico y la obtencin de mayores producciones de fruta de alta calidad, manteniendo el tamao del rbol y los costos controlados. Sin embargo, la participacin de la palta en el mercado frutcola mundial deber continuar creciendo, ya que los atributos de esta fruta altamente nutritiva parecen estar hechos a la medida de las dietas ms saludables. Este libro est principalmente dirigido a investigadores dedicados a este cultivo, acadmicos, estudiantes, asesores, productores que aplican tecnologa de punta y a los trabajadores de esta industria. El texto destaca tanto el estado actual del cultivo como las reas en las cuales nuestro conocimiento es limitado, y es por eso que en l se hace hincapi a los desafos que se le presentan a la nueva generacin de investigadores. Para superar estos desafos ser necesario incorporar soluciones que permitan la produccin sustentable a largo plazo y la preocupa-
cin por los posibles efectos dainos de las prcticas modernas usadas en los huertos sobre la integridad medioambiental.
Referencias
Gama-Campillo, L. and Gomez-Pompa, A. (1991) An ethnoecological approach for the study of Persea: a case study in the Maya area. In: Lovatt, C., Holthe, P.A. and Arpaia, M.L. (eds) Proceedings of the Second World Avocado Congress, Vol. 1. University of California, Riverside, California, pp. 1115. Purseglove, J.W. (1968) Persea americana Mill. In: Tropical Crops: Dicotyledons. 1. Longmans, London, pp. 192 198. Smith, C.E., Jr (1966) Archaeological evidence for selection in avocado. Economic Botany 20, 169175. Storey, W.B., Bergh, B. and Zentmyer, G.A. (1986) The origin, indigenous range and dissemination of the avocado. California Avocado Society Yearbook 70, 127133.
Agradecimientos
Los editores agradecemos a todos los autores que aportaron su tiempo para contribuir con este libro. Adems damos las gracias por la ayuda prestada a los cientficos que revisaron los distintos captulos y que realizaron valiosas contribuciones al material aqu presentado. Los editores y publicadores desean tambin agradecer el apoyo financiero recibido por parte de la Federacin Australiana de Productores de Palta, la Comisin de la Palta de California y la Asociacin de Productores de Palta de Australia Occidental, que permiti financiar las imgenes a color incluidas en el libro. Quisiramos tambin agradecer a Adrianno Lambe por el diseo de la portada. Anthony W. Whiley, Bruce Schaffer, B. Nigel Wolstenholme
Origen
El palto (Persea americana Mill.) es una especie arbrea polifrmica, que sera originaria de una amplia zona geogrfica, que se extiende desde las sierras centrales y orientales de Mxico y Guatemala, hasta la costa Pacfico de Centro Amrica (Popenoe, 1920; Smith, 1966, 1969; Storey et al., 1986). Las evidencias arqueolgicas indican que el uso y la seleccin de este frutal en Mxico comenz hace unos 10.000 aos. El hallazgo de semillas de palto en cavernas del valle de Tehuacn, en el estado de Puebla, de un tamao mayor a las encontradas en excavaciones anteriores, demuestra que, durante ese tiempo se produjo una seleccin progresiva en busca de un mayor crecimiento del fruto, entre otras cualidades (Smith, 1966, 1969). El nombre ms comn de este fruto en espaol es aguacate o ahuacate, que proviene de la palabra de origen nhuatl, ahuacatl. De ella tambin deriva su nombre en ingls, avocado; en holands, advocaat o avocat; en alemn, Abakate y abacat en portugus. Otro nombre utilizado en algunos pases de Sudamrica, como en Chile, es palta. Ocasionalmente, en ingls tambin se le llama aligator pear y midshipmans butter (Annimo, 1961; Ochse et al., 1961; Morton, 1987). antillano es inexacto pues, como se pudo demostrar a comienzos del siglo pasado, los paltos eran desconocidos en las Antillas antes del arribo de los conquistadores espaoles (Popenoe, 1935). La subespecie antillana fue rebautizada como taxn de las tierras bajas por Scora y Bergh (1992), un trmino que describe en forma ms precisa su adaptacin, sin referirse a su origen geogrfico. Sin embargo, el primer trmino est fuertemente arraigado y es el ms usado en este libro. Popenoe (1934) determin que las tres razas que l haba descrito anteriormente ya haban sido esencialmente reconocidas y diferenciadas en 1653 por Fray Bernab Cobo, en su Historia del Nuevo Mundo. Para mayor informacin acerca de las caractersticas de las distintas razas, vea Scora et al. (Captulo 2) y Lahav y Lavi (Captulo 3) en este libro. En la actualidad, se ha llegado a un consenso en cuanto que la raza de las tierras bajas se origin probablemente en la costa Pacfico de Amrica Central, en la regin comprendida desde el sur de Guatemala, hasta Panam. (Fig.1.1) (Storey et al. 1986; A. Ben-Yaacov, Bet Dagan, 1998 comunicacin personal). Como resultado de la extensa distribucin del germoplasma del palto hacia zonas bastante alejadas de su sitio de origen, se ha producido un considerable cruzamiento interracial, al tal grado que los actuales cultivares de mayor importancia econmica, tanto en reas subtropicales como tropicales, son resultado de la hibridacin entre las distintas razas.
Razas Ecolgicas
Antes de que los europeos conocieran los paltos, ya haban sido seleccionados algunos tipos hortcolas, que fueron considerablemente mejorados durante milenios a partir de los tipos silvestres. Estos tipos mejorados pertenecan a tres taxones o subespecies distintas, que son las actualmente denominadas razas mexicana, guatemalteca y antillana (o de las tierras bajas) segn la clasificacin de Wilson Popenoe (1920). El trmino
Adaptaciones Ecolgicas
Persea americana es una especie variable formada por distintos taxones, variedades botnicas y subespecies
Figura 1.1. Supuestos centros de origen de las razas ecolgicas mexicana, guatemalteca y antillana del palto (Storey y otros (1986), con autorizacin).
que incluyen las tres razas ya nombradas (respectivamente: variedad drymifolia (mexicana), variedad guatemalensis (guatemalteca) y variedad americana (antillana)), adems de otros parientes cercanos, entre los cuales se destacan las variedades nubigena, steyermarkii, tolimanensis, zentmyerii, floccosa y probablemente tambin la costarricensis y la tilaranensis (vase Scora et al., Captulo 2 de este libro). El llamado palto antillano es un rbol originario de las selvas de las tierras bajas, clidas y hmedas de Amrica Central, donde existe una estacin lluviosa corta. Por otro lado, el supuesto hbitat nativo de los paltos mexicanos se ubica en regiones ms elevadas (1.400-2.500 m.) y ms frescas, con temperaturas medias anuales entre 14,2 y 19,8C, precipitacin de 665 a 1562 mm. y una estacin seca de 6 a 8 meses durante el invierno y la primavera (Wolstenholme y Whiley, 1999). El hbitat del que seran originarios los paltos guatemaltecos presenta condiciones menos extremas, comunes a las sierras tropicales, con clima fresco durante todo el ao y que fueron descritas como tierras templadas hmedas por Papadakis (1966). Antes de 1492, los paltos fueron trasladados de los lugares donde originalmente crecan para ser introducidos en el norte de Sudamrica y Centroamrica, en algunas zonas de Mxico y tambin en el Per. Existen 8 referencias sobre restos de paltos encontrados en sitios arqueolgicos precolombinos del Per (Towle, 1961). Adems hay evidencias de que los Incas habran trado frutos desde la provincia de Palta hacia el Valle de Cuzco, donde se localizaba su capital. Restos de frutos
descubiertos en dos excavaciones en el valle Moche, datan del 4000 al 3500 AC y del 3500-1400 AC, respectivamente (Pozorski, 1976). Algunos ecotipos, adaptados al clima de las tierras tropicales bajas, fueron llevados a las Antillas poco despus de la conquista espaola (Popenoe, 1920).
Primeras Distribuciones
El reconocimiento del valor nutricional de la palta impuls a los colonizadores de las Amricas a diseminar dicho cultivo hacia territorios del hemisferio oriental, donde el clima permita su cultivo. No obstante, la aceptacin del fruto por los habitantes de esas zonas y el xito de dichas introducciones fueron variables. El palto fue introducido en Indonesia alrededor de 1750 (Morton 1987). Existen algunas dudas acerca de cundo fue introducido en Filipinas, pese a que Merril (1923) plantea que esto ocurri a fines del siglo XVI. Si as fuera, el palto no tuvo all un buen establecimiento, pues slo un rbol sobrevivi luego de la ocupacin espaola, el cual finalmente fue destruido por un tifn en 1905. P.J. Wester, un horticultor norteamericano que estuvo involucrado en el desarrollo agrcola de Filipinas durante las primeras dcadas del siglo XX, afirma que la introduccin del palto en este pas ocurri al menos 25 aos antes de la ocupacin norteamericana. Sin embargo, G.E. Nesom, uno de los primeros directores de la Oficina Filipina de Agricultura, atribuy la introduccin del palto a un sacerdote espaol que trajo frutos consigo desde Acapulco, Mxico, en 1890. La existencia de un nico espcimen conocido, destruido en 1905, coincidi-
ra con esta teora. En 1903 comenzaron introducciones de paltos en Hawai, Costa Rica y Estados Unidos, que se prolongaron hasta 1915 (Piang, 1936). La palta fue introducida a Brasil en 1809 y actualmente es producida comercialmente en siete estados, localizados entre las latitudes 15 y 25 sur. El germoplasma originalmente introducido en esta zona era de origen antillano, y fueron obtenidos nuevos cultivares de esta raza a partir de selecciones locales, aunque posteriormente se realizaron introducciones de material de la raza guatemalteca. Los cultivares de mayor importancia econmica en la actualidad corresponden a hbridos de las razas antillana y guatemalteca (Donadio, 1984). En el siglo XIX, rboles antillanos, que probablemente fueron introducidos mucho antes desde Cuba, llegaron a las islas Canarias, donde actualmente son usados como fuentes de semillas para obtener portainjertos tolerantes a la salinidad, adecuados a los cultivares producidos en la pennsula ibrica (Galn y Fernndez, 1983). El palto fue introducido en Hawai a comienzos del siglo XIX y en 1855 ya era un cultivo comn en Oahu (Yee, 1964). En 1958 fue llevado a la isla de Crcega, Italia, justo cuando la Estacin Agrcola San Giuliano (Station de Recherches Agronomiques de Corse San Giuliano) inici su funcionamiento (Vullin, 1982).
bin en Swazilandia. El clima de Nelspruit en la regin de Mpumalanga ha sido clasificado como tierra fra baja con monzn seco y es adecuado para el cultivo de trigo, maz, arroz y algodn (Papadakis, 1966). Entre 1961 y 1996 la produccin de paltas en Sudfrica aument en ms de 11 veces, pasando de 4.700 a 53.800 toneladas, la mayor parte de las cuales es exportada (Tabla 1.2).
Israel
Los primeros paltos fueron introducidos en la regin que actualmente conocemos como Israel en 1908, sin embargo, cultivares como Fuerte y Dickinson slo fueron introducidos en 1924. En 1934 se importaron los cultivares Benik, Nabal y Queen desde California. En 1947, el cultivar comercial ms importante era Fuerte pero, debido a su produccin errtica, se busc otro cultivar que fuese ms confiable. En la misma poca fueron evaluados otros cultivares como Duke, Northrup, Mexicola, Ganter, Puebla, Caliente y Anaheim (Oppenheimer, 1947). El cultivar Hass fue introducido en Israel a finales de los aos 40 y fue incluido en la lista de variedades recomendadas a mediados de los 60 (Ohad, 1965; Ticho y Gefen, 1965). Pese a sus limitaciones (Gustafson, 1967) el cultivar Fuerte continu siendo el ms plantado en los aos 70 y an contina teniendo gran importancia en dicho pas. En los ltimos aos, se han plantado cultivares desarrollados en Israel, entre los que destacan Iriet, Adi y Gil, as como algunas de las variedades californianas ms nuevas, tales como Reed, Pinkerton y Ardith (Lahav, 1994). El clima subtropical mediterrneo en Israel se caracteriza por una estacin invernal (entre noviembre y mediados de marzo) generalmente fra, aunque la temperatura puede llegar a 30C en das despejados. Ocasionalmente pueden registrarse temperaturas de 40C o ms en primavera, durante los das de hamsin. En la planicie costera pueden presentarse, espordicamente, temperaturas bajo cero de hasta -4,5C en algunas zonas con poca ventilacin (Oppenheimer, 1947). El xito de la industria de la palta en Israel, basada en el germoplasma trado de California (originalmente proviniente de Mxico), se ve reflejado en los niveles de produccin alcanzados, los que, en un periodo de 35 aos, aumentaron de 800 toneladas en 1961 a 75.900 toneladas en 1996 (Tabla 1.2).
Chile
Chile tiene una gran variedad de climas; dos de los cuales son muy adecuados para el cultivo del palto: el clima mediterrneo subtropical semirido y el mediterrneo marino (Papadakis, 1966). Desde los tiempos de la colonia se cultivan rboles de semilla de la raza mexicana en el pas, sin embargo, en 1928 el Ministerio de Agri-
Tabla 1.1. Produccin mundial y regional de paltas y reas plantadas con rboles (Base de datos FAOSTAT, 2001). Regin Produccin Mundial Africa Asia Centro Amrica y El Caribe Europa Norteamrica Oceana Sud Amrica
a
1961 697,9 (76,8) 44,9 (10,8) 44,2 (9,7) 349,1 (15,9) 0,3 (0,035) 51,3 (10,5) 2,1 (0,04) 206 (29,8)
Produccin en diferentes regiones del mundo entre 1961 y 1996 (expresado en miles de toneladas)a 1966 1971 1976 1981 1986 1991 869 1.075,3 1.269,8 1.532,9 1.949,6 2.125,4 (91,7) (115,1) (152) (200,2) (264) (308,2) 52,8 68,7 101,9 125 155,4 187,8 (12,7) (16,2) (20,5) (24,4) (26,6) (30,3) 68,2 50,8 86,5 105,6 161,5 177,1 (11,6) (10,2) (17,6) (25,9) (31,2) (40,0) 415,6 501,4 580,7 764,1 937,9 1097,2 (21,6) (33,3) (47,6) (67,4) (106,2) (122,8) 0,5 0,9 3,2 10,5 30,8 74,3 (0,052) (0,054) (0,485) (1,65) (4,52) (18,6) 55,7 78,2 128,5 165,8 274,9 167,8 (9,7) (9,9) (15,5) (29,5) (34,9) (33,4) 2,7 3,4 3,2 5,3 13,7 17,1 (0,06) (0,08) (0,15) (0,42) (4,6) (4,6) 273,5 371,9 365,8 356,2 375,4 404,1 (36,0) (45,3) (49,9) (50,9) (55) (58,4)
1996 2.303,4 (339,1) 198,6 (31,4) 311,5 (31,4) 1148,8 (128,3) 66,8 (17,9) 173 (26,6) 21,9 (5,9) 382,8 (60,7)
cultura import desde California los primeros cultivares comerciales. Debido a las limitaciones climticas del lugar donde fueron plantados (Santiago), estos rboles llamaron muy poco la atencin. No obstante, en 1932 un envo martimo de 14 cultivares de origen mexicano, guatemalteco e hbrido, fue plantado en La Cruz, y otros cultivares fueron adicionalmente importados en envos posteriores. stos formaron el ncleo de la creciente industria de la palta en la regin. El cultivar Hass fue importado en 1944 y desde entonces se ha convertido en el cultivar predominante. En 1958 toda la produccin de paltas de Chile era comercializada a nivel nacional y los precios solan bajar cuando la oferta excedia a la demanda de fruta (Magdahl, 1958). Sin embargo, en 1965 la demanda ya era alta y la industria creca (Schmidt, 1965). Esta tendencia se mantuvo y se acrecent cuando Chile entr al mercado exportador, aumentando la produccin de paltas de 8.000 toneladas en 1961 a 55.000 en 1996 (Tabla 1.2).
hizo aumentar la demanda por este fruto, la cual creci paulatinamente despus de la Segunda Guerra Mundial (Sharpe, 1950; Storey, 1960). La consolidacin de los numerosos cultivares plantados en Australia ocurri gradualmente y entre los aos 60 y finales de los 80 cuando el cultivar Fuerte se convirti en el ms importante. Sin embargo, esta situacin cambi rpidamente en la dcada del 90 y hoy el cultivar ms plantado es Hass, seguido de los cultivares Shepard y Sharwil, ambos en segundo lugar en importancia (Newet et al., 2001). Shepard es un cultivar californiano que no dio resultados en su lugar de origen, debido a su sensibilidad a las bajas temperaturas durante la floracin, mientras que Sharwil es de origen australiano. Ambos tienen excelentes producciones cuando son cultivados en climas subtropicales clidos. Los paltos son cultivados en distintas localidades a lo largo de la costa este de Australia (Schultz, 1961), en climas que varan de subtropical hmedo a subtropical clido y subtropical mediterrneo (Papadakis, 1966). Las regiones tradicionales de cultivo son el sur de Queensland y el norte de Nueva Gales del Sur, no obstante durante la dcada del 70 la produccin se extendi a otras reas, incluida la meseta de Atherton al norte de Queensland y los asentamientos regados a lo largo del valle de Murria, al sur de Australia. Recientemente, se ha producido una importante expansin de la produccin de palta hacia el sudoeste de Australia occidental, desde donde la fruta puede abastecer mercados lucrativos durante los meses de verano (diciembre a marzo) (Newett et al., 2001). La creciente popularidad
Australia
Los paltos fueron introducidos en Australia por el Vivero Estatal de Kamerunga, en Queensland a fines del siglo XIX (Whiley, 1982), pero no fue hasta los aos 30 que se importaron cultivares de renombre desde California (Zentmyer, 1965). En la dcada de los 40 haban slo unos pocos huertos comerciales (Alexander, 1978). La palta no era muy conocida por los consumidores australianos durante los aos que siguieron a su introduccin, pero la llegada de militares norteamericanos en 1942
Tabla 1.2. Produccin mundial de palta dividida por pases (Base de datos FAOSTAT, 2001). Continente Africa Pas Africa Central Camern Cte dIvoire Ghana Marruecos Rep. de Seychelles Rep. Dem. El Congo (Zaire) Rep. El Congo Sudfrica China Chipre Filipinas Indonesia Israel Turqua Barbados Costa Rica Cuba Dominica El Salvador Islas Caimanes Granada Guadalupe Guatemala Hait Honduras Jamaica Martinica Mxico Panam Puerto Rico Repblica Dominicana Santa Luca Trinidad y Tobago Espaa Francia Grecia Portugal Estados Unidos Australia Guam Islas Cook Islas de Pacfico Nueva Zelanda Polinesia Francesa Samoa Argentina Bolivia Brasil Chile Colombia Ecuador Guyana Francesa Guyana Paraguay Per Venezuela PRODUCCION MUNDIAL Produccin por pas entre 1961 y 1996 expresada en miles de toneladas 1961 1966 1971 1976 1981 1986 1991 1996 0,20 0,25 0,35 0,70 1,10 1,40 3,00 4,10 12,00 15,00 18,00 20,00 25,00 30,00 38,00 46,00 2,00 2,60 3,50 3,00 2,00 2,00 2,00 2,00 4,00 4,10 4,00 4,00 4,00 5,00 6,00 6,30 1,00 1,00 1,00 1,00 1,00 2,50 5,00 7,00 0,01 0,01 0,01 0,01 0,01 0,01 0,01 0,02 14,00 7,00 4,70 0,00 0,04 13,30 30,00 0,80 0,00 0,16 10,60 35,00 0,10 16,40 0,00 2,00 0,10 12,20 40,00 3,6 2,9 1,4 108,1 5,1 4,8 106,2 0,3 0,2 0,3 0,0 0,0 0,0 51,3 0,4 0,0 0,5 0,0 0,0 0,0 1,2 2,0 1,5 82,5 8,0 12,0 16,0 0,1 0,3 10,0 19,9 53,7 697,9 16,00 9,90 4,00 0,00 0,05 15,90 50,00 2,30 0,00 0,18 13,30 13,00 0,10 20,80 0,00 2,10 0,15 16,40 44,00 4,2 2,6 1,8 169,5 6,0 5,7 115,2 0,3 0,2 0,5 0,0 0,0 0,0 55,7 0,6 0,0 0,6 0,0 0,0 0,0 1,5 4,2 1,8 117,5 10,0 12,6 23,0 0,1 0,4 8,9 46,5 48,6 869 18,80 13,50 8,70 0,00 0,06 15,20 28,00 7,60 0,00 0,27 18,00 11,80 0,10 24,50 0,00 2,10 0,20 19,00 49,00 3,7 2,5 1,8 236,8 2,3 5,4 123,3 0,4 0,2 0,9 0,0 0,0 0,0 78,2 0,9 0,0 0,7 0,0 0,0 0,0 1,8 9,1 2,0 161,5 12,0 13,0 21,7 0,1 0,4 15,0 96,4 40,7 1075 22,80 16,60 17,10 0,00 0,06 24,00 44,00 18,50 0,00 0,36 25,50 21,20 0,10 29,00 0,00 0,91 0,22 20,00 55,00 4,8 2,6 2,4 280,4 2,0 4,0 131,5 0,4 0,2 3,0 0,2 0,0 0,0 128,5 0,6 0,0 0,6 0,0 0,0 0,0 2,0 9,1 2,9 139,7 15,0 15,4 43,5 0,1 0,4 16,2 82,9 40,6 1269,9 37,10 18,60 21,10 0,00 0,06 25,30 72,20 8,00 0,00 0,41 28,00 10,00 0,16 32,00 0,00 1,40 0,44 22,40 59,00 5,8 2,8 1,1 460,9 2,1 3,2 134,0 0,4 0,2 10,0 0,0 0,5 0,0 165,8 2,4 0,0 0,5 0,0 0,2 0,0 2,2 3,2 3,1 135,6 25,0 18,3 30,6 0,0 0,4 16,5 77,0 46,3 1532,5 41,90 20,50 33,30 0,00 0,50 21,90 71,10 68,00 0,00 0,46 21,90 11,20 0,28 35,00 0,00 1,50 0,30 25,10 62,00 6,7 3,0 3,2 627,9 2,0 3,9 132,7 0,5 0,3 30,3 0,0 0,6 0,0 274,9 9,7 0,0 0,7 0,0 0,8 0,0 2,4 2,7 4,3 122,3 35,0 49,0 20,3 0,0 0,5 18,0 80,1 43,2 1949,6 40,50 23,00 49,10 0,00 0,83 22,00 91,40 52,70 0,10 0,47 23,00 9,00 0,72 39,00 0,01 1,80 0,25 29,00 57,00 2,5 3,5 1,2 780,4 2,7 4,3 141,6 0,5 0,3 52,1 0,3 1,6 20,3 167,8 11,5 0,0 0,5 0,0 3,2 0,1 1,8 3,1 5,6 111,3 39,0 72,1 18,1 0,1 0,4 15,4 85,7 53,4 2125,4 29,60 25,50 53,80 45,00 1,40 45,80 143,20 75,90 0,20 0,47 24,00 7,50 0,40 41,50 0,01 1,60 0,27 24,30 45,00 0,8 4,0 0,4 837,8 2,8 2,1 155,0 0,5 0,3 52,1 0,2 1,5 13,1 173,0 16,4 0,0 0,2 0,0 3,5 0,1 1,7 3,5 6,1 80,7 55,0 74,0 31,7 0,3 0,3 12,3 82,7 36,3 2303,4
Asia
Centroamrica y El Caribe
Europa
Norteamrica Oceana
Sudamrica
del consumo domstico de esta fruta en los ltimos aos se ve reflejada en el aumento de la produccin, de 400 toneladas en 1961 a 16.400 toneladas en 1996 (Tabla 1.2). Esta tendencia se ha acelerado en los ltimos 4 aos, con una produccin que alcanz las 31.740 toneladas en 2000 (Whiley, 2001).
mente en Camern se incluyen uno de raza mexicana que es originario de California (Zutano); tres de la raza guatemalteca (Nabal, Itzamna y Taylor); un hbrido californiano (Anaheim) y cinco hbridos de las razas guatemalteca y antillana, provenientes de Florida y del Caribe (Booth 7, Booth 8, Hickson, Lula y Semil 34) (Ducelier y Rey, 1989). Entre 1933 y 1998 se registraron 179 distribuciones de germoplasmas de palto en el banco de germoplasma del Departamento de Agricultura de los EE.UU. en Miami. Cada distribucin consista en la entrega de una o ms unidades de germoplasma (cultivares, selecciones o semillas). El destino geogrfico de cada una de estas entregas no qued registrado, pero se conocen 163 receptores de ese material: 35 distribuciones llegaron a Florida, 15 a California, 21 al resto de los Estados Unidos, 23 a Centroamrica y El Caribe, 23 a Asia, 22 a frica, 14 a Sudamrica, 4 a Seychelles, 3 a Europa, 1 a Australia, 1 a Fiji y 1 a la Isla Reunin. Considerando que la mayor parte de estas distribuciones de germoplasma correspondan a material clonado de alto valor comercial, sin lugar a dudas esto contribuy al espectacular aumento de la produccin de paltas, que se prolong durante un periodo de 35 aos, en muchas partes del mundo donde este cultivo no era tradicional.
Estados Unidos
La primera introduccin de paltos en California se produjo antes de 1856, cuando cerca de San Gabriel fue observado un rbol proveniente de Nicaragua, probablemente llevado all por algn inmigrante atrado por la fiebre del oro (Condit, 1916). La introduccin ms importante de paltos en California, que ms tarde se expandi al resto del mundo, ocurri en 1911, cuando el botnico Carl Schmidt, enviado por Fred Popenoe, propietario del vivero comercial West Indian Garden en Altadena, recolect esquejes de un ejemplar de caractersticas notable, de parentales mexicano y guatemalteco, que creca en la hacienda Rodiles, cerca de Atlixco en el estado mexicano de Puebla. Este cultivar llamado Fuerte, fue propagado vegetativamente y se convirti en la base de la industria paltera californiana y, ms tarde, de muchos otros pases (Popenoe, 1926). A la fecha, los cultivares Hass y Fuerte son los de mayor importancia comercial en todo el mundo. Los primeros paltos introducidos con xito en Florida fueron trados probablemente desde Cuba, poco antes de 1850, cuando los primeros colonos encontraron paltos de la raza antillana que crecan en los bosques forestales (hammocks) de la regin de Miami (Fairchild, 1945). La primera produccin comercial de paltas en Florida fue de cultivares antillanos, sin embargo la introduccin de germoplasma guatemalteco a principios de la dcada del 1900, propici la creacin de un nuevo tipo de palto, constituido por un grupo de hbridos que combinaban la excelente calidad de frutos y la maduracin en otoo-invierno de los cultivares guatemaltecos, con la adaptacin al clima clido de las tierras bajas de los cultivares antillanos. Este nuevo grupo permiti que en 1930 la industria de Florida entrara a los mercados de otoo-invierno, consiguiendo sobrevivir durante un periodo de severa depresin econmica provocado por la fuerte competencia con Cuba por liderar el mercado de verano (Brooks, 1929; Annimo, 1934). Esto permiti adems que en muchas reas de las tierras bajas tropicales, que no eran adecuadas para el cultivo de los hbridos mexicano-guatemaltecos (de buen desempeo bajo las condiciones subtropicales de California), se produjeran frutos de calidad superior, aptos tanto para el mercado interno como para exportacin (Knight y Cambell, 1999). Por ejemplo, entre los cultivares producidos actual-
mayor produccin de los Estados Unidos. La produccin de Mxico, que est considerada dentro del bloque de Amrica Central y El Caribe, tuvo un incremento de 3,2 veces, de 349.062 a 1.148.796 toneladas, siendo esta ltima cifra un reflejo de la enorme cosecha obtenida en Mxico el ao 1996 (Tabla 1.1). La situacin contina siendo dinmica en muchas partes del mundo, tanto en regiones donde el palto es un cultivo nuevo, como en lugares donde ya era un cultivo tradicional, pero tuvo una fuerte expansin (como en Mxico). Por el contrario, en pases como Brasil, donde no hay aumento en la demanda de los mercados de exportacin, la produccin se ha mantenido ms o menos esttica (Tabla 1.2). Lo anterior nos demuestra el dramtico crecimiento de la produccin mundial de paltas desde 1961, ao en que la FAO comenz a llevar un registro de la produccin de este fruto. En el continente africano, la produccin de Camern aument de 12.000 toneladas en 1961 a 45.000 toneladas en 1996; en la Repblica Democrtica de El Congo (Zaire) el incremento fue de 14.000 a 29.645 toneladas en el mismo perodo y en Sudfrica pas de 4.700 en 1961 a 53.800 toneladas en 1996 (Tabla 1.2). En Asia, la produccin israel de palta se expandi de 800 toneladas en 1961 a 75.900 toneladas en 1996, en tanto que en Indonesia, pas de 30.000 a 143.200 toneladas. En Europa el mayor aumento productivo ocurri en Espaa, que posee una zona en las Islas Canarias donde el palto es tradicionalmente cultivado y otra rea ms reciente de plantacin situada en la pennsula ibrica. La produccin espaola creci de 340 toneladas en 1961 a 52.085 toneladas en 1996. En Oceana, Australia mostr un aumento de 41 veces en un periodo de 35 aos, pasando de 400 toneladas en 1961 a 6.416 toneladas en 1996 (Tabla 1.2). Sin lugar a dudas, la produccin de paltas continuar expandindose en algunas regiones, mientras que en otros lugares donde el palto ya es un cultivo importante, la produccin se mantendr ms o menos estable. En China, por ejemplo en 1991 no existan registros de produccin, sin embargo en el ao 1996 se inform de 45.000 toneladas producidas, lo que la convierte en un rea donde el desarrollo de este cultivo parece bastante factible. Una seria limitacin para la expansin de la industria de la palta en muchos pases de America Central, Sudamrica y El Caribe es la amenaza de la pudricin de raz causada por Phytophthora cinnamomi (Ver Pegg et al., Captulo 12 de este libro). Esta enfermedad fue detectada en Honduras en 1950 (Zentmyer y Popenoe, 1951) y desde entonces se ha propagado a tal grado que hoy es prcticamente imposible cultivar paltos en la zona cafetera hondurea (800-1.000 m de altitud) (C.W. Campbell, Homestead, 2001, comunicacin personal).
En 1951, el patgeno Phytophthora cinnamomi fue encontrado tambin en paltos enfermos en Mxico y Costa Rica (Zentmyer, 1951). Actualmente la amenaza que este patgeno representa para la sobrevivencia del palto es tan grande que, en algunas reas de este ltimo pas, la especie Persea americana est considerada en peligro de extincin y ha desaparecido como cultivo en las tierras bajas (J. Len, San Jos, 2001). A raz de la escasez de fruta causada por esta enfermedad, muchas ciudades del trpico americano han visto permanentemente insatisfecha la demanda de paltas. En otras partes del mundo, el uso del fosfonato mono y dipotsico ha controlado efectivamente a P. cinnamomi. La tecnologa de los fungicidas fosfonados incluye tanto inyecciones del producto en el tronco del rbol, como aplicaciones foliares y aplicaciones radiculares, por medio de zanjas en el suelo (Guest et al., 1995; Whiley et al., 2001). Debido a su xito, la transferencia de esta tecnologa es de vital importancia en reas de Centro y Sudamrica donde la pudricin de la raz est teniendo actualmente un impacto negativo.
Tabla 1.3. Composicin de la porcin comestible de las paltas californianas (principalmente del cultivar Fuerte) por 100 g. (resumido de Watt y Merrill, 1975). Agua (g) Energa (kcal) Componentes energticos (g) Protenas Lpidos Carbohidratos totales Fibra Elementos minerales (mg) Calcio Fsforo Hierro Sodio Potasio Vitaminas (ui de Vitamina A o mg). A cido ascrbico Tiamina Riboflavina Niacina 290.0 14.0 0.1 0.2 1.6 10.0 42.0 0.6 4.0 604.0 2.2 17.0 6.0 1.5 73.6 171.0
Tabla 1.5. Contenido mineral en la pulpa de la palta (resumido de Slater et al., 1975)). Mineral Fsforo Potasio Calcio Magnesio Sodio Hierro Boro Rango de concentracin (mg por 100 g de peso fresco) 20-80 340-723 10-15 40-60 5-15 0.5-2 1-3
Lpidos
El contenido de aceite de las paltas, determinado en base al peso fresco del fruto, vara segn el ecotipo (raza hortcola) de 2,5 a 8,0% en los cultivares antillanos (Hatton et al., 1964), entre 10 a 13% en los cultivares guatemaltecos y de 15 a 25% o inclusive ms, en los cultivares mexicanos. Los frutos de los cultivares Fuerte y Hass, ambos hbridos de las razas mexicana y guatemalteca, fueron analizados en California para determinar su contenido de aceite. Los frutos del cultivar Fuerte cosechados entre marzo y mayo tenan un contenido de aceite de 15 a 22%, mientras que los frutos de Hass cosechados en el mismo periodo mantuvieron un nivel de 20% (Ericsson y Porter, 1966). Para efectos de comparacin, la aceituna, otro fruto rico en aceite, contiene entre 18 y 25% en los cultivares cosechados para la produccin de aceite, mientras que los frutos cosechados verdes tienen un 14% de aceite (Hartmann, 1971). El contenido de aceite en las paltas cultivadas en climas subtropicales frescos es alto y aumenta con el retraso de la cosecha, llegando a 25 -30% en los frutos de los cultivares Hass y Fuerte a comienzos de la floracin de la siguiente temporada (Kaiser y Wolstenholme, 1994). La ley N 422 de Estandarizacin de la Palta (Avocado Standardization Bill) aprobada en 1925 en California, para cultivares de origen mexicano, guatemalteco o hbridos de ambas razas, defini que la fruta sea considerada legalmente madura cuando su contenido de aceite alcanza un 8% del peso (Lee, 1981). Sin embargo, evaluaciones posteriores de sabor han demostrado que este valor es muy bajo para algunos cultivares (Hodgkin, 1928), razn por la cual los estndares definidos por los productores californianos de paltas (Calavo Growers) estn basados en la relacin a una satisfactoria calidad del sabor y el contenido de aceite del fruto. Gracias a los esfuerzos realizados por esta asociacin con el objetivo de relacionar la palatabilidad con el contenido de aceite de los frutos de nueve cultivares comercializados en 1939, la Calavo Growers defini
Tabla 1.4. Contenido de vitaminas en la pulpa fresca de palta (resumido de Slater et al. (1975) y Seymour y Tucker (1993)). Componente Betacaroteno (pro-vitamina A) Alfatocoferol (vitamina E) cido ascrbico (vitamina C) Biotina (vitamina B8) Colina (vitamina B7) Folacina (vitamina B9) Niacina (vitamina B3) cido pantotnico (vitamina B5) Piridoxina (vitamina B6) Riboflavina (vitamina B2) Tiamina HCI (vitamina B1) Menaquinona (vitamina K) Calciferoles (vitamina D) Rango de concentracin (por 100 g de peso fresco) 370-750 (ui) 1.6-2.4 (ui) 1.6-30 (mg) 3.2-10 (g) 17-22 (mg) 30-62 (g) 1.4-3.5 (mg) 0.25-1.14 (mg) 0.22-0.62 (mg) 95-230 (g) 60-240 (g) 0-8 (g) No informado
como estndar un contenido de 12 a 14% de aceite para los frutos del cultivar Fuerte; los frutos del cultivar Anaheim fue considerado aceptable con apenas 11,5% de aceite, y para los frutos del cultivar Lyon se defini un contenido de aceite de hasta 16,5%. Estos niveles de aceite exigidos para una buena palatabilidad de las paltas, fueron definidos por un grupo de catadores muy crticos, que ya estaba familiarizado con el fruto y que era ms exigente que el consumidor promedio (Hodgkin, 1939). Los cultivares antillanos son considerados aceptables para el consumo, con contenidos de aceite inferiores a los de las otras dos razas. Los hbridos antillanos y guatemaltecos, en su mayora, poseen niveles de aceite ms altos que los cultivares antillanos puros. Para cultivares antillanos representativos los valores son 4 a 6% de aceite para Fuchs, 4 a 8% para Peterson, 3 a 5% para Pollock, 3 a 6% para Trapo, y 6 a 10% para el cultivar Waldin. Para los hbridos de las razas guatemalteca y antillana, los contenidos aceptables son 10 a 14% para Booth 7, 8 a 12% para Booth 8, 13% para Choquette, 12 a 16% para Hall, 8 a 10% para Hickson, 12 a 16% para Lula y 10 a 14% para el cultivar Monroe (Wolfe et al., 1949).
tas durante el desarrollo del fruto, que es acompaado de una consecuente disminucin del contenido de agua. Observando el cultivar Fuerte, Kikuta y Ericsson (1968) notaron variaciones progresivas a lo largo de la temporada de crecimiento del fruto, con un contenido de cido oleico que llegaba a 2% del peso fresco total del fruto en octubre y aumentaba constantemente, hasta llegar a un mximo de 14% en marzo. El cido palmtico, en tanto, aument de menos de 1% en septiembre a un mximo de poco ms de 4% en febrero, para luego caer a menos de 4% en marzo. El contenido de cido linoleico del fruto vari de un poco ms de 1% en septiembre, hasta casi 4% en marzo. El contenido de este cido present poca variacin, mantenindose en menos del 1% del peso total del fruto durante todo el periodo de muestreo. Estos resultados coinciden con otros estudios que sealan que en la pulpa de la palta estn presentes trazas de los siguientes cidos grasos: linoleico, mirstico, esterico y araqudico (Ahmed y Barmore, 1980). En un estudio realizado con 16 pacientes masculinos que fueron alimentados con paltas durante dos periodos de 3 meses cada uno, se demostr que los niveles totales de colesterol y lpidos en la sangre disminuyeron significantemente en el 50% de los pacientes, sin que se registrase un aumento del nivel de colesterol durante el periodo analizado (Grant, 1960). Un estudio similar, conducido por Colquhoun et al. (1992), confirm dichos resultados. En algunos pases se le da gran importancia a la informacin nutricional a la hora de promocionar el consumo de paltas. La organizacin australiana independiente Heart Foundation ha certificado que la palta es un alimento saludable para el corazn por medio de un logotipo, que es utilizado para publicitar su consumo (A.W. Whiley, Nambour, 2001, comunicacin personal). Actualmente, los esfuerzos realizados por la Comisin de la Palta de California (California Avocado Comission) tambin estn referidos a la salud humana, mediante la distribucin de diez tems distintos que incluyen publicaciones de la Asociacin Norteamericana de Diettica (American Dietetic Association), de la Asociacin Norteamrica del Corazn (American Heart Association), adems de un par de impresos publicados recientemente (G. Witney, California, 2001, comunicacin personal).
Protenas y Cenizas
La pulpa de palta es ms rica en protenas que la de otras frutas, sin embargo, comparada con la carne, la leche y algunas legumbres, no puede ser considerada como una fuente proteica importante. Contiene mayores concentraciones de aminocidos libres que otras frutas, siendo los principales la aspargina, el cido asprtico, la glutamina y el cido glutmico. En la pulpa de la
palta Fuerte fueron encontrados en menor cantidad los siguientes aminocidos: serina, treonina, alanina, valina y cistina. Todos los cidos esenciales estn presentes en la pulpa. Las paltas contienen niveles relativamente altos de cenizas (1,0-1,4% en los cultivares Fuerte, Hass y Anaheim) que son ricas en hierro disponible fisiolgicamente, segn fue comprobado en experimentos conducidos con ratas, y por lo tanto es considerado potencialmente til en la prevencin o cura de la anemia (Ahmed y Barmore, 1980).
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