La Célula Procariota
La Célula Procariota
La Célula Procariota
disperso en el citoplasma, reunido en una zona denominada nucleoide. Por el contrario, las
células que sí tienen un núcleo diferenciado del citoplasma, se llaman eucariotas, es decir,
aquellas en las que su ADN se encuentra dentro de un compartimento separado del resto de
la célula.
Casi sin excepción los organismos basados en células procariotas son unicelulares.
Se cree que todos los organismos que existen actualmente derivan de una forma unicelular
procariota (LUCA).
Existe una teoría, llamada endosimbiosis seriada, que considera que a lo largo de un lento
proceso evolutivo, hace unos 2300 millones de años, los procariontes derivaron en seres
más complejos por asociación simbiótica: los eucariotes.
Estructura celular
La estructura celular procariota básica tiene los siguientes componentes:
Membrana celular
Pared celular (excepto en micoplasmas y termoplasmatos)
Citoplasma
Nucleoide
Ribosomas
Compartimentos procariotas. Se han identificado compartimentos que parecen tener el
propósito de resguardar o llevar a cabo ciertos tipos de tareas especializadas. Algunos de
ellos son Clorosomas, Carboxisomas, Anammoxosomas, Ficobilisomas, Proteosomas y
Magnetosomas.
Adicionalmente también puede haber:
Flagelo(s)
Membrana externa (en bacterias Gram negativas)
Periplasma.
Cápsula
Inclusiones citoplasmáticas (nutrientes y vesículas de gas)
Pili o fimbrias
Glicocálix
Biopelícula
Formación de esporas.
Plásmidos
Mesosoma
Para su comparación con la célula eucariota, véase la Tabla comparativa.
Diversidad bioquímica y metabólica
Desde su aparición, no han sufrido gran diversificación. El metabolismo de las procariotas
es enormemente variado (a diferencia de las eucariotas), y causa que algunas procariotas
sean muy diferentes a otras. Algunas son muy resistentes a condiciones ambientales
extremas como temperatura o acidez, se las llama Extremófilos.
Nutrición
La nutrición puede ser autótrofa (quimiosíntesis o fotosíntesis) o heterótrofa (saprofita,
parásita o simbiótica). En cuanto al metabolismo los organismos pueden ser: anaerobios
estrictos o facultativos, o aerobio.
Nutrición saprofita: basada en restos de seres vivos, de los que produce la descomposición.
Nutrición parásita: obtienen el alimento de un hospedador al que perjudican pero no llegan
a matar.
Nutrición simbiótica: los seres que realizan la simbiosis obtienen la materia orgánica de
otro ser vivo, el cual también sale beneficiado.
Reproducción
Se da de dos maneras: reproducción asexual o parasexual
Reproducción asexual por bipartición o fisión binaria: es la forma más sencilla y rápida en
organismos unicelulares, cada célula se parte en dos, previa división del material genético y
posterior división de citoplasma (citocinesis).
Reproducción parasexual, para obtener variabilidad y adaptarse a diferentes ambientes,
entre las bacterias puede ocurrir intercambio de ADN como la conjugación, la transducción
y la transformación.
Conjugación: Proceso que ocurre cuando una bacteria hace contacto con otra usando un
hilo llamado PILI. En el momento en el que los citoplasmas están conectados, el individuo
donante (considerado como masculino) transfiere parte de su ADN a otro receptor
(considerado como femenino) que lo incorpora (a través del PILI) a su dotación genética
mediante recombinación y lo transmite a su vez al reproducirse.
Transducción: En este proceso, un agente transmisor, que generalmente es un virus, lleva
fragmentos de ADN de una bacteria parasitada a otra nueva receptora, de tal forma que el
ADN de la Bacteria parasitada se integra al ADN de la nueva bacteria.
Transformación: Una bacteria puede introducir en su interior fragmentos de ADN que están
libres en el medio (plásmidos). Estos pueden provenir del rompimiento o degradación de
otras bacterias a su alrededor.
Tipos de Célula Procariota
Según su morfología
A) Gracilicutes (=piel delgada), propio de las bacterias gram negativas, las cuales son
didérmicas, es decir, de doble membrana y entre estas membranas una delgada pared de
peptidoglicano
B) Firmicutes (=piel fuerte), propio de las bacterias gram positivas, con una membrana
citoplasmática y una gruesa pared de peptidoglicano
C) Mendosicutes (=piel rara), propio de las arqueas, con una pared celular mayormente de
glicopéptidos diferentes del de las bacterias. La membrana plasmática es igualmente
diferente, ya que los lípidos se unen a los gliceroles con enlaces éter, en lugar de enlaces
éster como en las bacterias
D) Tenericutes (=piel delicada), propio de los micoplasmas, bacterias endoparásitas que
carecen de pared celular, al parecer como una adaptación evolutiva al hábitat intracelular
Clasificación biológica
Arqueas son microorganismos unicelulares muy primitivos. Al igual que las bacterias, las
archaea carecen de núcleo y son por tanto procariontes. Sin embargo, las diferencias a nivel
molecular entre archaeas y bacterias son tan fundamentales que se las clasifica en grupos
distintos. De hecho, estas diferencias son mayores de las que hay, por ejemplo, entre una
planta y un animal. Actualmente se considera que las archaea están filogenéticamente más
próximas a los eucariontes que a las bacterias. Las archaea fueron descubiertas
originariamente en ambientes extremos (como en fosas oceánicas o en aguas con elevado
contenido en sal), pero desde entonces se las ha hallado en todo tipo de hábitats.
Metanógenos son microorganismos procariontes que viven en medios estrictamente
anaerobios y que obtienen energía mediante la producción de gas natural, el metano (CH4).
Gracias a esta característica, este tipo de organismo tiene una gran importancia ecológica,
ya que interviene en la degradación de la materia orgánica en la naturaleza, y en el ciclo del
carbono. Además, son un grupo filogenéticamente heterogéneo en donde el factor común
que las une es la producción de gas metano y sus cofactores únicos. Las podemos encontrar
en nuestro intestino.
Halófilas:Viven en ambientes extremadamente salinos. Halococcus y Halobacterium solo
viven en medios con más del 12% de sal (mucho más salado que el agua de mar).
Las hipertermófilas viven y desarrollan en condiciones de temperaturas extremas y pH
extremos en sitios con actividad volcánica (como géiseres) en las dorsales oceánicas, donde
la mayoría de seres vivos serían incapaces de sobrevivir. Existe la teoría de que fueran
posiblemente las primeras células simples.
Bacterias son organismos microscópicos formados por células procariotas más
evolucionadas. Las cianobacterias, también conocidas como algas verdeazules, son
eubacterias fotosintéticas y coloniales que han estado viviendo sobre nuestro planeta por
más de 3 000 millones de años. Esta bacteria crece en esteras y montículos en las partes
menos profundas del océano. Hoy en día solo las hay en algunas regiones, pero hace miles
de millones de años las había en tan gran número, que eran capaces de añadir, a través de la
fotosíntesis, suficiente oxígeno a la primitiva atmósfera de la Tierra, como para que los
animales que necesitaban oxígeno pudieran sobrevivir.