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P CIENCIAS E INNOVACIÓN
CURSO: BIOLOGÍA
DOCENTE:
ESTUDIANTE:
BIMESTRE: 2024-1
HUÁNUCO-PERU
2024
PILLCO MARCA
I.E.P CIENCIAS E INNOVACIÓN
DEDICATORIA
Dedico este trabajo culminado con mucho
esfuerzo, pero también con mucho amor,
especialmente a mis padres que, aunque no
esten constante, siempre nos acompañan y
sabemos que donde se encuentren siempre
contare con su apoyo.
A la profesora ……………………………... por dedicar
su paciencia en mi persona, por enseñarme de
la mejor forma para formar para poder
mejorar mis debilidades.
A mis compañeros y amigos, por su amistad y
compañerismo, quienes nos acompañan por
este año académico.
A todas y cada una de las personas que de
alguna u otra manera contribuyen a lograr las
metas que nos proponemos en la vida, y que
permiten a que podamos crecer
intelectualmente como personas y seres
humanos.
CARACTERISTICAS DE LA INTELIGNCIA
ARTIFICAL: La inteligencia artificial (IA) se refiere a la
capacidad de las máquinas para realizar tareas que, en teoría,
requerirían inteligencia humana. Las características de la
inteligencia artificial pueden incluir la capacidad de aprender,
razonar, percibir, reconocer el habla y procesar el lenguaje
natural. Además, la IA puede ser programada para realizar tareas
específicas, como jugar juegos, realizar análisis de datos y
reconocimiento de patrones. En general, las características de la
inteligencia artificial están diseñadas para imitar la inteligencia
humana y mejorar la eficiencia y precisión de las tareas
automatizadas.
Entre las características más comunes de la inteligencia artificial,
podemos destacar:
Aprendizaje automático.
Toma de decisiones.
Adaptabilidad.
Creatividad.
Automatización.
✌🏽Conclusión.
IMPORTANCIA DE LA
INTELIGENCIA ARTIFICIAL: Aunque
los seres humanos temamos ser reemplazados por las
tecnologías, lo cierto es que ellas nos acompañan hace varios
años, mejorando la eficiencia, optimizando procesos y
reduciendo errores. A futuro, la IA podría resultar aún más útil,
colaborando a un mayor bienestar social.
El término Inteligencia Artificial (IA) despierta un común debate
de ciencia ficción que enfrenta a humanos con máquinas. Hoy en
día, con todo lo que circula en Internet que fue producido por
esta tecnología (imágenes, audios y vídeos, entre otros), se
suscita nuevamente tanto al miedo de ser reemplazados como al
interés de lo que estos sistemas complejos son capaces.
Sin embargo, la IA no es nueva. Según investigadores, la
implementación de esta tecnología está presente desde, al
menos, la década de 1980. Por lo tanto, llevamos mucho tiempo
conviviendo con ella y explorando sus posibilidades.
De hecho, este tipo de modelos de inteligencia se encuentran en
el corazón de los servicios digitales que utilizamos en nuestra
vida cotidiana: smartphones, los asistentes virtuales, motores de
búsqueda, automóviles, los sistemas de recomendación,
chatbots, traductores, consolas de videojuegos, etc. Incluso,
muchas personas recurren a ella sin saberlo; por ejemplo,
cuando van al supermercado, cuando organizan y clasifican sus
mails, cuando realizan pagos de servicios y hacen operaciones
financieras online.
En otras palabras, cada vez estamos más rodeados —o
integrados— de acciones automatizadas generalizadas.
RPA + IA, su relevancia e impacto
Al respecto, Juan Rella, arquitecto de soluciones de GlobalLogic
LATAM, afirma que “la Inteligencia Artificial es una disciplina
informática que busca crear sistemas y programas capaces de
realizar tareas que requieren inteligencia humana”. Por eso, nos
permite realizar labores más complejas y avanzadas que la
simple automatización de actividades repetitivas (que son
dirigidas por la automatización robótica de procesos o RPA, por
sus siglas in inglés).
De igual manera, ambas tecnologías están transformando la
forma en que se realizan los procedimientos y el trabajo en
diferentes industrias. Es así que al unir la potencia de RPA e IA en
la mejora de procesos, por un lado, se logra automatizar tareas
rutinarias y, por el otro, que la IA aporte inteligencia y capacidad
de aprendizaje para abordar encargos más complejos.
Algunos casos de éxito que ilustran cómo estos sistemas pueden
ser aplicados para optimizar técnicas y mejorar la productividad
son el sector bancario y la industria de la salud. En el primero, se
utilizan para automatizar tareas como la verificación de
identidad, el procesamiento de solicitudes de préstamos, la
detección de fraudes y el análisis de riesgos. En el segundo, se
emplean para agilizar la facturación y el procesamiento de
reclamaciones, la gestión de registros médicos, la programación
de citas y la atención al paciente; asimismo, la IA se utiliza en el
diagnóstico médico asistido por computadora, la detección
temprana de enfermedades y la personalización de tratamientos.
“Desde el momento en que se automatizaron los procesos y se
redujeron errores, los clientes y usuarios finales reciben un mejor
servicio y una atención más rápida y precisa. Además, de esta
manera se les brinda una experiencia más personalizada, ya que
pueden recibir respuestas y soluciones rápidas y precisas a sus
necesidades y preguntas”, asegura el especialista.
Si bien existen consideraciones para obtener mejores resultados
en términos de eficiencia operativa (tales como la selección
adecuada de procesos para automatizar, la seguridad de los
datos, la capacitación y el cambio organizacional), se considera
que la Inteligencia Artificial y los procesos de automatización
presentan grandes beneficios y oportunidades para la sociedad.
Entre ellos, entender mejor la realidad, predecir tendencias,
identificar variables que contribuyan a la vulnerabilidad o
desigualdad, evaluar el impacto de proyectos y definir nuevas
acciones y políticas que respondan a las necesidades reales.