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c.3-BAJA EDAD MEDIA 23-24

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TEMA 3- BAJA EDAD MEDIA

1-INTRODUCCIÓN.
Entre los siglos VIII y XV, la población hispana estuvo distribuida, desde el punto de vista cultural y religioso, en tres
grandes grupos: cristianos, musulmanes y judíos. Musulmanes y cristianos mantuvieron entidades políticas propias
e independientes. Sin embargo, no se crearon sólo dos Estados, uno por cada confesión religiosa, sino que el mapa
político fue mucho más complejo y cambiante a lo largo de los siglos. Los reinos cristianos de la Edad Media nacieron
en el S.VIII, arrinconados por Al-Ándalus en el extremo norte de la Península y, con el tiempo, fueron expandiéndose
hacia el sur (“Reconquista”), alcanzando Andalucía y Murcia a mediados del S. XIII. Tras el fin de las grandes
campañas militares cristianas, la Península quedó configurada durante la Baja Edad Media (S.XIII-XV) en 5 reinos:
cuatro de ellos cristianos (Portugal, Corona de Castilla, Navarra y Corona de Aragón) y uno, musulmán (Granada).

2-DESARROLLO.
2.1-Evolución territorial de los reinos cristianos en la Edad Media:
Tras la conquista musulmana (711), la resistencia cristiana dio lugar a cuatro núcleos independientes:
1-El núcleo asturiano, del que surgió el reino astur-leonés, y después los reinos de León y de Castilla. 2-El núcleo
pamplonés, del que surgió el reino de Navarra. 3-El núcleo aragonés, del que nació el reino de Aragón. 4-Los
condados catalanes, un conjunto de siete condados dependientes de la monarquía carolingia, que se unificaron
en el condado de Barcelona y se independizaron de aquella a finales del S.X.
La expansión de esos reinos cristianos hacia el sur fue muy pequeña hasta el S.XI. Sólo León y Castilla
consiguieron avances significativos (línea del Duero). El gran avance reconquistador se produjo a partir de finales
del S.XI, con las conquista de dos grandes ciudades musulmanas: Toledo (1085) y Zaragoza (1118). Los imperios
musulmanes norteafricanos, almorávides y almohades, frenaron el empuje cristiano durante un tiempo, pero en el
S.XIII, tras la victoria de una coalición cristiana en la batalla de las Navas de Tolosa (1212), se produjo la conquista
de casi todo el sur y levante: Badajoz (1230), Castellón (1233), Córdoba (1236), Valencia (1238), Murcia (1243),
Sevilla (1248)...quedando reducido el dominio musulmán al reino nazarí de Granada (hasta 1492).

2.2-Castilla y Aragón en la Baja Edad Media:


La Baja Edad Media comprende los siglos XIII, XIV y XV. En la Península Ibérica se caracterizó por el fin de las
grandes campañas de la Reconquista del S.XIII, con la configuración definitiva de las Coronas de Castilla y
Aragón, que se reorganizaron en paz. Surgió, así, la consolidación institucional en ambos territorios, dando como
resultado dos maneras distintas de entender la monarquía: autoritaria en Castilla y pactista en Aragón. Además,
los reinos cambiaron su política expansionista, mirando ya fuera de la Península: al Atlántico, Castilla y al
Mediterráneo, Aragón. En el siglo XIV se produjo una crisis en ambos territorios que afectó a todas las estructuras,
observando en el siglo XV signos de recuperación (más en Castilla que en Aragón).
El periodo de la Baja Edad Media presenta características que lo sitúan en la confluencia entre la Edad Media y
la Edad Moderna. Tenemos la creación de instituciones que ponen los cimientos del Estado Moderno que los
Reyes Católicos desarrollaron a finales del siglo XV.

2.2.1-Instituciones:
En la Corona de Castilla se dan los primeros pasos para una monarquía autoritaria a través de las Partidas de
Alfonso X. Este rey recoge la idea del origen divino del poder del rey, recupera el concepto de potestas del
Derecho Romano (por el cual el rey ha de tener plenos poderes) y los concreta en una codificación legal que fortalece
su poder (las Partidas). Este documento será rechazado, en principio, por la nobleza, pero tras una guerra civil será
finalmente aprobado, en tiempos de Alfonso XI, mediante el Ordenamiento de Alcalá (1348).
Las principales instituciones que ayudan al fortalecimiento del poder real son: El Consejo Real, formado por 12
personas de confianza del monarca. Esta institución tenía una función consultiva, aunque terminará siendo el
principal instrumento de gobierno. Como órgano supremo de administración de justicia encontramos a la Audiencia
o Chancillería. La Corte estaba formada sobre todo por nobles y contaba con una serie de cargos al servicio
personal del monarca. La Real Hacienda sufrirá una renovación para poder aumentar la recaudación y fortalecer
así al monarca. En cuanto a la administración local surgen dos instituciones, los regimientos (concejos cerrados) y
los corregimientos (enviados por el rey a controlar a estos nuevos poderes locales). La única institución que pone
límite al poder real serán las Cortes, reunidas por primera vez en 1188, están compuestas por el rey y
representantes de la nobleza, del clero y de las principales ciudades. Se reúnen a convocatoria del rey para aprobar
subsidios a la corona y tratar quejas y peticiones de los enviados de las ciudades. Con el tiempo y el fortalecimiento
del poder real, esta institución irá perdiendo poder. La administración territorial se dividía en concejos,
merindades y adelantamientos.
En la Corona de Aragón, el tipo de monarquía que se practica será el modelo pactista. Hay que tener en cuenta
que esta corona estaba integrada por cuatro reinos: Aragón, Cataluña, Valencia y Mallorca, cada uno con sus
propias instituciones y leyes, ante las que el rey debe responder, restándole poder. Las necesidades económicas
de los reyes, debido a sus políticas de conquista del Mediterráneo, contribuirán, también, al modelo pactista. El rey
Jaime I llevó a cabo durante su reinado una labor reformadora, con medidas como la redacción del Fuero General
de Aragón o la promulgación de los Fueros (Furs) del Reino de Valencia, para así organizar sus reinos respetando
la autonomía de cada uno. En 1283 las Cortes Aragonesas y Catalanas imponen a Pedro III el Grande el juramento
del Privilegio General (privilegios para los nobles y el clero). También se le obliga a comprometerse a convocar
Cortes y aceptar la figura del Justicia Mayor en Aragón (defendía los privilegios estamentales frente al rey). En 1359
Pedro IV aceptó la Diputació del General (Generalitat), institución que vigila que se cumplan los acuerdos de
Cortes cuando éstas no están reunidas. Llegará a actuar como un gobierno catalán en la práctica. Otras instituciones
a destacar son el virrey (gobernador o lugarteniente del rey en cada uno de los reinos), el Consejo Real y Audiencia
(encabezada por un canciller) que cumplen las mismas funciones que en Castilla (función consultiva y administración
de justicia). La administración territorial queda dividida en concejos, veguerías y bailías.

2.2.2-Crisis-
A partir de mediados del siglo XIV se produjo una crisis que afectará a todas las estructuras: demografía, sociedad
y economía. En el siglo XV se experimentó cierta recuperación, pero no en todos los territorios (por ejemplo,
Cataluña, seguirá sumida en una profunda crisis).
A nivel de demografía, desde mediados del siglo XIV se produjo una reducción de la población por una serie de
malas cosechas y carestía de productos de primera necesidad (hambrunas). A esto hay que sumar la epidemia de
peste negra de 1348 (un 20-40% de pérdidas humanas). Se trataba de una epidemia cíclica que volverá a golpear
a la población en las siguientes décadas. A esto hay que añadir numerosos conflictos sociales y bélicos que
aumentaban la mortalidad. Las principales consecuencias fueron: pueblos y aldeas abandonados, subida del precio
de los alimentos, falta de mano de obra, reducción en la recaudación de impuestos...
A nivel económico, la agricultura que se practicaba era de subsistencia y entró en crisis por una serie de malas
cosechas. La crisis demográfica afectó especialmente a esta actividad económica por la pérdida de población
campesina y el abandono de tierras. Para intentar compensar la pérdida de mano de obra se apostó por desarrollar
la ganadería ovina (que requiere menos mano de obra). En 1273, Alfonso X (Castilla) reconoce al Honrado
Concejo de la Mesta con grandes zonas de pasto y cañadas por las que transita el ganado trashumante.
Como consecuencia de los problemas demográficos y económicos se van a producir graves tensiones sociales.
Al reducirse la población, los señores feudales subieron los impuestos y derechos señoriales para compensar la
disminución de sus ingresos. En Cataluña, por ejemplo, impusieron la condición de remensa (adscripción a la tierra)
y aumentaron impuestos y obligaciones ya perdidos (malos usos). Eso creó una gran inestabilidad social y
enfrentamientos entre campesinos y nobles contra los llamados malos usos (rebelión de los payeses de remensa).
En Castilla, la pequeña burguesía y las clases populares crearon hermandades para luchar contra los abusos de
la nobleza. Se produjeron frecuentes motines y revueltas por las dificultades económicas.
Otros conflictos sociales vendrán del enfrentamiento con las dos minorías étnicas presentes en ambos reinos. Por
un lado, los musulmanes en Castilla se van convirtiendo al cristianismo (cristianos nuevos) o se van a Granada; por
otro, los judíos serán víctimas de antisemitismo, produciéndose pogromos (matanzas) y conversiones forzosas.
Tras las conversiones, surgió el "problema converso", por la hostilidad de una parte de las masas populares
cristianas contra los "cristianos nuevos".
2.2.3-Evolución política-
En Castilla se producen varias guerras civiles: una de ellas, entre Pedro I (apoyado por Inglaterra) y su
hermanastro Enrique de Trastámara (con el apoyo de la Corona de Aragón y Francia); otra, entre Enrique IV y
una parte de la nobleza (marqués de Villena, arzobispo de Toledo...), que derivó en una guerra de sucesión entre
los partidarios de Juana "la Beltraneja" (hija de Enrique IV) y los de Isabel (hermana de Enrique IV y futura Isabel
"la Católica).
En la Corona de Aragón, durante los siglos XIII y XIV, se llevaron a cabo las campañas de expansión por el
Mediterráneo: Baleares, Cerdeña, Sicilia..., entrando en conflicto con Génova. En 1410, Martín I “el Humano”
muere sin descendencia: Mediante el Compromiso de Caspe es elegido Fernando de Castilla, lo que supuso
que los “los Trastámaras” gobernasen en Castilla y en Aragón. Durante el reinado de Juan II (1458-1479) tuvo
lugar la Guerra Civil Catalana.

3-CONCLUSIÓN.
Desde el punto de vista cultural destacan:
1) La secularización de la cultura a través de las universidades.
2) La superación del teocentrismo escolástico, dando paso a una mentalidad antropocéntrica producto de la
superación de la crisis.
3) La escuela de cartografía de Mallorca (Yahuda Cresques y sus mapas portulanos).
4) En literatura: Francesc Eiximenis, Llibre de les dones; Juan Manuel, El Conde Lucanor; Arcipreste de Hita,
El Libro del Buen Amor; Jorge Manrique, Coplas a la muerte de su padre…
5) La historiografía castellana (Crónicas de Pedro López de Ayala...).
6) En Arte: la época de apogeo del Gótico, que tuvo su máxima expresión en las grandes catedrales españolas,
y el Arte Mudéjar, que dejó su impronta en edificios civiles y religiosos.

BIBLIOGRAFÍA: -Valdeón,J; Pérez,J. y Juliá,S. (2008): Historia de España. Editorial Austral.

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