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Borrador de Amado Nervo

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AMADO NERVO

Amado Nervo nació el 27 de


agosto del año 1870 en Tepic,
Nayarit (México).
Su padre falleció cuando tenía
nueve años.
Poco después, su madre mandó
a su hijo a estudiar al colegio
San Luis Gonzaga de
Michoacán, ingresando con
posterioridad en el Seminario
de Zamora (Michoacán).
Tras abandonar sus iniciales tendencias a convertirse en sacerdote, Nervo dio
sus primeros pasos literarios en Mazatlán escribiendo para el periódico “El
Correo De La Tarde”.
Más tarde se trasladó a la gran urbe de Ciudad de México, en donde tuvo que
trabajar en diversos oficios antes de colaborar en publicaciones como El
Mundo Ilustrado, El Mundo o El Imparcial.
También fundó junto a Manuel Gutiérrez Nájera la revista Azul.
En el año 1895 publicó su primer libro, una novela titulada “El Bachiller”
(1895), al que siguieron volúmenes poéticos como “Perlas Negras” (1898) y
“Místicas” (1898
En el año 1900 se trasladó como corresponsal de El Imparcial a París, la
capital cultural mundial por aquella época en donde además se estaba
celebrando la Exposición Universal.
En la “Ciudad de la Luz” conoció a importantes literatos como Paul
Verlaine, Oscar Wilde, Leopoldo Lugones o Rubén Darío, con quien
compartió pertenencia a la corriente modernista.
En Francia también intimó con Ana Cecilia Luisa Dailliez, quien se convirtió
en la mujer de su vida. Lamentablemente, Ana Cecilia falleció en 1912,
dejando un grave pesar en el corazón del escritor.
La muerte de su compañera sentimental le inspiró una de sus obras más
famosas, “La Amada Inmóvil” (1922).
En el año 1902, Nervo regresó a su país para escribir en La
Revista Moderna que había fundado junto a Jesús E.
Valenzuela.
Trabajó como profesor de Lengua en la Escuela Nacional
Preparatoria y en el año 1905, año en el que apareció el
poemario “Los Jardines Interiores” (1905), fue nombrado
segundo secretario adscrito a la Legación de México en
Madrid, en donde escribió libros como “En Voz Baja”
(1909), “Serenidad” (1914) o “Plenitud” (1918).
En el año 1914 abandonó su puesto diplomático a causa de
la Revolución, pero cuatro años después fue nombrado Ministro
Plenipotenciario del Gobierno Mexicano en Argentina y Uruguay.
Amado Nervo falleció en Montevideo el 24 de mayo de 1919 cuando ocupaba
el cargo de Jefe de la Misión Diplomática mexicana en el país uruguayo.
Tenía 48 años de edad.
Está enterrado en el Panteón de Dolores, situado en Ciudad de México.
Su obra es modernista, preocupada por el existencialismo vital y
marcadamente religiosa con rasgos místico

Amado Nervo (1870 - 1919) fue uno de los grandes representantes de la


literatura modernista latinoamericana. A diferencia de sus
contemporáneos, que cultivaron una obra en la que destacaban el dolor y
la melancolía, optó por privilegiar una mirada positiva hacia la vida.

El poeta mexicano destacó con una producción en la que predominan la


búsqueda de la espiritualidad, la reflexión sobre la existencia, la naturaleza
y el amor.

Características de sus Obras


Las características literarias de Amado Nervo radican en su
conocimiento literario, la colaboración en todas las revistas y
periódicos en que realizo publicaciones, la influencia de escritores
como Rubén Darío y Leopoldo Lugones que permiten que sus
obras tengan un estilo, técnica y modernismo en cada una de ellas.
Amado Nervo sus obras también establece una relación con la
naturaleza y surge algunas como lo es Hermana agua y Los jardines
interiores, empieza aquí un refinamiento en sus escritos, logrando
la perfección de la forma y el protagonismo absoluto de la estrofa,
haciendo que los lectores sientan en lo más profundo aquellos
sentimientos de todos los huérfanos de padre, que les da la
oportunidad de hacer suyos todas aquellas emociones

De esta manera, el principal género literario desarrollado por


Amado Nervo se encuentran tres etapas:

Romanticismo, donde hay abundancia de sentimientos tristes,


apasionados, melancólicos y suaves, con el debido uso de adjetivos
y expresiones que caracterizan las obras del autor.

El modernismo Amado Nervo, que es el enfoque de su carrera


poética ya que, utiliza la simplificación y la innovación de la técnica
dentro de sus escritos.

La evolución en la prosa que hace que Amado Nervo siempre


escriba para aquellos lectores de periódicos y revistas de gran
circulación.
POEMAS
El día que me quieras
El día que me quieras tendrá más luz que junio;
la noche que me quieras será de plenilunio,
con notas de Beethoven vibrando en cada rayo
sus inefables cosas,
y habrá juntas más rosas
que en todo el mes de mayo.

Las fuentes cristalinas


irán por las laderas
saltando cristalinas
el día que me quieras.

El día que me quieras, los sotos escondidos


resonarán arpegios nunca jamás oídos.
Éxtasis de tus ojos, todas las primaveras
que hubo y habrá en el mundo serán cuando me quieras.

Cogidas de la mano cual rubias hermanitas,


luciendo golas cándidas, irán las margaritas
por montes y praderas,
delante de tus pasos, el día que me quieras...
Y si deshojas una, te dirá su inocente
postrer pétalo blanco: ¡Apasionadamente!

Al reventar el alba del día que me quieras,


tendrán todos los tréboles cuatro hojas agoreras,
y en el estanque, nido de gérmenes ignotos,
florecerán las místicas corolas de los lotos.

El día que me quieras será cada celaje


ala maravillosa; cada arrebol, miraje
de "Las Mil y una Noches"; cada brisa un cantar,
cada árbol una lira, cada monte un altar.

El día que me quieras, para nosotros dos


cabrá en un solo beso la beatitud de Dios

REFLEXION
En "El día en que me quieras" se encuentra presente el influjo romántico
donde predomina la expresión de emociones. Existe una idealización del
encuentro amoroso, pues el día en que la mujer al fin corresponda sus
sentimientos, el mundo cobrará sentido.
A través de las palabras, el poeta busca hacernos sentir lo que significa
estar enamorado, mostrándolo desde sus ojos. Por ello, compara el amor
como el inusual encuentro de un trébol de cuatro hojas y el descubrimiento
de Dios.

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