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Introduccion A La Teologia - Apunte

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Seminario Bautista Confesional del Ecuador

CBTS International Programs

INTRODUCCIÓN A LA TEOLOGÍA:
SU ESTUDIO Y SU ESPIRITUALIDAD

DESCRIPCIÓN DEL CURSO

Esta clase es una introducción al estudio de la teología que tiene el propósito de mostrarle al
estudiante por qué el estudio de la Teología debe ser llevado a cabo con la rigurosidad
académica de otras ciencias ⎯pues, la teología es la ciencia de Dios⎯ y, al mismo tiempo,
tiene características y demandas superiores a los de cualquier otra ciencia, una espiritualidad
reverente y santa por parte del estudiante. Este curso cubre tres partes principales: los
principios del estudio de la teología, la preparación y presentación de escritos teológicos, y
la piedad del estudiante de teología.

OBJETIVOS EDUCATIVOS

El propósito de esta clase es darle al estudiante (1) una perspectiva correcta desde donde
pueda direccionar sus estudios teológicos, (2) una orientación teórico-practica sobre la
elaboración de escritos teológicos y (3) una contemplación del carácter santo y espiritual en
el que se desenvuelve la ciencia del conocimiento de Dios.

LECTURAS REQUERIDAS

1. Jensen, Michael P.; «Cómo escribir un ensayo de teología» (Ellensburg, WA: Proyecto
Nehemías, 2017). Lectura completa [disponible gratuitamente en la página:
https://proyectonehemias.org/].
2. Salas, Carlos; «Trucos para escribir mejor» (Publicado por el autor, 2007). Lectura completa
[disponible en formato digital en Amazon Kindle].
3. Scougal, Henry; «La Vida de Dios en el alma del hombre» (Santo Domingo, Ecuador:
Legado Bautista Confesional, 2020). Lectura completa.

TRABAJOS ESCRITOS

1. Hacer una reseña crítica del libro «La Vida de Dios en el alma del hombre» de Henry
Scougal. La reseña debe ser elaborada en base a los normas para la presentación de trabajos
escritos. Debe tener una extensión de entre 4 a 6 páginas.

2. Realizar los siguientes ejercicios de investigación:

1
(1) Hacer seis ejemplos siguiendo el ejercicio utilizado en clase para encontrar un tema
para una investigación. Dos de esos ejemplos serán sobre un tema dentro de la
Teología Sistemática, para lo cual el estudiante debe ir a una sección de una teología
sistemática, tomar un capítulo específico y escoger uno de los temas que se tratan allí.
Los otros dos ejemplos, serán sobre un tema dentro de la Teología Histórica, para lo
cual el estudiante debe ir a un libro de historia de la iglesia y escoger un tema
específico. Los últimos dos ejemplos, serán sobre un aspecto práctico de la vida
cristiana, para lo cual el estudiante deberá ir a un libro de vida cristiana y escogerá un
tema específico de ahí. Será evaluada la conexión lógica que el estudiante demuestre
entre el tema general y el tema específico escogido, pasando a través de cada uno de
los escalones que lo lleven de lo general a lo específico (siguiendo el proceso de los
ejemplos vistos en clase).

(2) Elabora una lista basada en los libros de tu biblioteca (o la de tu pastor o iglesia) en
la que puedas clasificar entre fuentes primarias, secundarias y terciarias. Procura que
por cada fuente haya entre 5 a 10 libros. Registra cada libro siguiendo la siguiente
pauta:

Apellido, nombre; nombre completo del libro (ciudad, país de publicación:


casa editorial, año de publicación)

Renihan, Samuel D.; El Misterio de Cristo, Su Pacto y Su Reino (Santo Domingo,


Ecuador: Legado Bautista Confesional, 2020)

APROBACIÓN Y EVALUACIÓN

Para aprobar el módulo “Introducción a la Teología: Su Estudio y Su Espiritualidad”, los


estudiantes deberán cumplir con su asistencia a clases, completar las lecturas requeridas,
aprobar las evaluaciones (exámenes diarios y examen final) y obtener una calificación mayor
a 7/10 en los trabajos escritos asignados. Para aprobar esta módulo es necesario cumplir con
todas las tareas asignadas.

Porcentaje de Calificaciones:

Valor de Componentes del curso

Lectura Completa = 20%


Exámenes Diarios (3) = 15%
Examen Final = 15%
Reseña Crítica = 20%
Ejercicios de Investigación = 30%
100%

2
INTRODUCCIÓN A LA TEOLOGÍA:
SU ESTUDIO Y SU ESPIRITUALIDAD
Introducción General

Otro nombre que pudiéramos darle a esta clase introductoria a la teología sería: Prolegómenos.
Aunque esta palabra suena algo intimidante, en realidad transmite una idea muy sencilla.
Pro es un prefijo griego que significa antes y lego es el verbo decir. Prolegómenos significa
aquello que se dice antes. Son las consideraciones preliminares de algo, en nuestro caso, son las
consideraciones preliminares del estudio de la teología.

El propósito de esta primera clase del programa del seminario es darte un contexto apropiado
al estudio de la teología a través de considerar estos tres aspectos previos que como
estudiantes de teología debemos tener en cuenta.

El bosquejo general de nuestra clase será:

I. Los Principios del Estudio de la Teología.


II. La Preparación y Presentación de Escritos Teológicos.
III. La Piedad del Estudiante de Teología.

En la primera parte de este curso consideraremos los principios sobre los que se sustenta el
estudio de la teología: su naturaleza, su legitimidad y sus presuposiciones. En la segunda
parte, nos enfocaremos en un asunto más práctico al hablar de los tipos de escrito que se
requieren en la formación teológica, formas apropiadas de hacer una investigación para
desarrollarlos y la manera de presentarlos. Finalmente, en la tercera parte veremos la
demanda de piedad que la teología hace en todos aquellos que la estudian. A diferencia de
las partes uno y dos que se enfocan en la teología desde una perspectiva más científica, la
parte tres lo hacer desde aquello que diferencia a la teología del resto de ciencias, su carácter
sagrado.

I. LOS PRINCIPIOS DEL ESTUDIO DE LA TEOLOGÍA


Cuando hablamos de principios nos referimos al fundamento sobre el que se sostiene el estudio
de la teología. Pensemos en la metáfora de un edificio que se levanta sobre unas bases lo
suficientemente firme como para sostener toda su estructura. La teología tiene principios que
todo estudiante debe tenerlos presentes mientras vive su proceso de formación.

¿Cuáles son las cosas sobre las que se sostiene el estudio de la teología?

1. La Naturaleza del Estudio de la Teología


2. La Legitimidad del Estudio de la Teología
3. Las Presuposiciones del Estudio de la Teología

3
1. La Naturaleza del Estudio de la Teología
Cuando hablamos de la naturaleza de algo, hacemos la pregunta: ¿qué es? Por tanto, en este
encabezado consideramos la pregunta: ¿qué es la teología? Lo haremos a través del siguiente
bosquejo:

A. La afirmación de la teología como una ciencia


B. El equilibrio de la teología como una ciencia
C. Las demandas de la teología como una ciencia

A. La afirmación de la teología como una ciencia

El Diccionario de la Real Academia Española define ciencia como:

Conjunto de conocimientos obtenidos mediante la observación y el razonamiento,


sistemáticamente estructurados y de los que se deducen principios y leyes generales
con capacidad predictiva y comprobables experimentalmente.1

Según esta definición, la ciencia es el resultado de la observación y los razonamiento que se


hacen sobre un objeto o campo determinado del cual se derivan principios y leyes que son
organizados de manera lógica para su presentación. La implicación necesaria es que para que
exista una ciencia se necesita un objeto o campo conocible.

Cuando pensamos en la ciencia desde esta perspectiva notamos que las ciencias humanas no
son otra cosa que la observación que el hombre ha hecho de las cosas creadas por Dios. ¿Qué
es la medicina? Es la observación que el hombre ha hecho a través de los años del cuerpo
humano. ¿Qué es la botánica o la arquitectura? No son otra cosa que la forma en la que el
hombre ha tratado de colocar de manera lógica y ordenada sus observaciones sobre la vida
de las plantas y las leyes físicas. La creación constituye la fuente de las ciencias humanas.

Sin embargo, ¿podemos considerar la teología como una ciencia? Claro que sí, y la razón
descansa en el hecho de que Dios ha querido revelarse a los hombres. De hecho, Su revelación
hace obligatoria la observación y razonamiento del hombre sobre aquello que Él ha revelado.

Considera conmigo uno de los pasajes clásicos sobre la revelación:

Deut. 29:29 Las cosas secretas pertenecen al Señor nuestro Dios, mas las cosas
reveladas nos pertenecen a nosotros y a nuestros hijos para siempre, a fin de que
guardemos todas las palabras de esta ley.

En este pasaje hay un contraste muy importante:

1 REAL ACADEMIA ESPAÑOLA: Diccionario de la lengua española, 23.ª ed., [versión 23.4 en línea].
<https://dle.rae.es> [23 de julio de 2021].

4
«Las cosas secretas pertenecen al Señor nuestro Dios» – Esta frase nos muestra el concepto básico
de revelación (i. e., correr el velo, o dar a conocer). Este correr el velo es una prerrogativa divina
porque si Él no lo revelara sería imposible conocerlo. La revelación no es una obligación
divina, sino una manifestación de su deseo condescendiente de que el hombre le conozca
para que sepa lo que necesita para ser redimido y lo que Dios demanda de Él.

«mas las cosas reveladas nos pertenecen a nosotros y a nuestros hijos para siempre, a fin de que
guardemos todas las palabras de esta ley» – Esta frase afirma el hecho de que Dios se ha revelado
al hombre, pero también (y de una manera enfática) la responsabilidad que esa revelación
conlleva. ¿Cuál es la implicación de que Dios se haya revelado? Que el hombre tiene la
responsabilidad de hacer uso de la observación y el razonamiento para ordenar de manera
lógica lo que ve y entiende.

Desde esta perspectiva, el hombre tiene responsabilidad sobre el conocimiento que Dios ha
revelado «concerniente a todas las cosas que son necesarias para Su propia gloria, la
salvación del hombre, la fe y la vida».2 La teología es el resultado inevitable de la revelación
de Dios. Por lo tanto, la teología es una ciencia; la ciencia de Dios.

Sin embargo, la teología como ciencia dista mucho de las otras ciencias porque el centro de
su enfoque científico y la fuente de donde toma sus datos son diferentes al resto. Según la
definición que citamos anteriormente la ciencia está basada en la observación y el razonamiento,
y sus principios y leyes deben tener la capacidad de ser comprobables. A diferencia del resto
de ciencias, la teología trata con el conocimiento de Dios basado en una fuente autoritativa,
la Palabra de Dios. Eso significa que a diferencia de las observaciones que se hacen en las
otras ciencias en donde las conclusiones están basadas en la experiencia y apreciación
humana, la observación que se hace en la teología está basada en presuposiciones bíblicas
que Dios reveló, las cuales el hombre nunca podría haberlas encontrado sin la intervención
y revelación divina. Por eso afirmamos que la teología no es una ciencia descubierta por el
hombre (es decir, no llegamos a nuestras conclusiones por causa del estudio y la
observación), sino revelada por Dios. Todas estas cosas fueron reveladas por Dios en Su
Palabra con el propósito de que el hombre indagara diligentemente en ella para sostenerlas,
enseñarlas y defenderlas.

Por otro lado, la teología también dista de las otras ciencias porque esta se sostiene sobre fe,
la cual ⎯aunque no es contraria a la razón⎯ va mucho más allá de ella, porque trata con
asuntos sobrenaturales que demandan ser creídos más allá de lo que la razón o la ciencia
puede explicar. Si observamos apropiadamente el corazón de la discusión de la legitimidad
de la teología como una ciencia, podremos observar que el problema no es si la teología
puede pasar el filtro de la demostración experimental, sino que la ciencia también es un asunto
de fe. Al final, la decisión no es entre la fe y la ciencia experimental y demostrable, sino entre

2 Segunda Confesión Bautista de Fe de Londres, 1:6.

5
creer en las posturas no demostrables de la ciencia o poner tu fe en lo que dice la Palabra de
Dios. La teología es una ciencia, la ciencia de Dios.3

B. El equilibrio de la teología como una ciencia

Sin embargo, ¿cuál es el equilibrio que debemos mantener al reconocer a la teología como
una ciencia? Que no es una ciencia como las demás.

El Dr. Sam Waldron empieza su clase de prolegómenos considerando este principio. Esto es
lo que dice:

Abraham Kuyper, en el libro conocido en inglés como Principios de la Sagrada Teología,


incluye un capítulo breve en defensa de la práctica antigua y reformada de llamar a la
ciencia de la teología «teología sagrada». Aunque reconoce que no hay nada
particularmente «sagrado» en la frase «teología sagrada», Kuyper sostiene que es
importante resistir una tendencia moderna a «secularizar» la teología. Cree que es
necesario recordar constantemente que la ciencia de la teología es diferente a cualquier
otra área de estudio científico en algunas formas muy fundamentales.4

Siguiendo el tratamiento que el Dr. Waldron hace de este principio, quiero compartir contigo
un resumen de su exposición de Proverbios 9:10.

Prov. 9:10 El principio de la sabiduría es el temor del Señor, y el conocimiento del Santo
es inteligencia.

En este pasaje hay tres cosas que se nos dice sobre la teología:

Primero, la teología tiene un tema único. En este texto se habla del Señor y del Santo, dos
palabras que hablan del Dios verdadero y se encuentran en forma de un paralelo. Señor refleja
a Dios en su relación pactual con el hombre, es decir, su inmanencia. Santo refleja el carácter
trascendente de Dios como un Ser «separado» del resto. La teología tiene como tema central
a Dios, por eso podemos decir que su enfoque es único, es diferente al resto de ciencias. Por
supuesto, este enfoque demanda una relación única [su objeto de estudio está vivo y activo],
una fuente única [no es la observación limitada del hombre, sino la revelación infalible de
Dios] y un contenido único [el Dios infinito].

Segundo, la teología tiene un objetivo definido. El texto utiliza dos palabras en el paralelo:
sabiduría y conocimiento. Estas palabras muestran que el propósito o meta del estudio
teológico involucra el aspecto espiritual práctico. De esta afirmación se desprende el que todo

3 Esta declaración la hago siendo consciente de que este es un asunto debatido en el escolasticismo protestante.
Para una lectura introductoria sobre este tema, véase Richard A. Muller, Dictionary of Latin and Greek Theological
Terms: Drawn Principally from Protestant Scholastic Theology (Grand Rapids, MI: Baker Academic: A Division of
Baker Publishing Group, 2017), 358.
4 Waldron, Sam; Principios de la Religión Cristiana: Una Teología Sistemática desde una Perspectiva Bautista Reformada,

Libro 1: Prolegómenos y Apologética (Santo Domingo, Ecuador: Legado Bautista Confesional, 2021), sp.

6
verdadero estudio teológico debe ser casto [es decir, humilde, que el estudiante entienda su
lugar frente a Dios], práctico en su objetivo [no una intelectualidad vacía, sino una aplicación a
la vida cotidiana] y tener como objetivo el beneficio espiritual del estudiante o el de aquellos a quienes
pretende ministrar [el propósito honorable de conocer a Dios, salvar a las almas y proclamar
la gloria de Dios].

Tercero, la teología tiene un prerrequisito distintivo. El texto dice que el temor del Señor es
anterior a la sabiduría y el conocimiento del Santo a la inteligencia. Esto se implica de la palabra
principio en nuestro texto que en otros pasajes «se usa para hablar del principio o la primera
parte de una cosecha, el reinado de un rey, un discurso, e incluso del desarrollo de una
oración (Rut 1:22; Esdras 4:6; Ecl. 10:13; Dan. 9:23)».5 El prerrequisito obligatorio del
conocimiento y la sabiduría que imparten el estudio de la teología es un corazón que tiembla
delante del Señor. Una mente que se reconoce su incapacidad y se postra ante el misterioso
e incomprensible enfoque de su estudio, Dios mismo. La implicación inmediata de este
prerrequisito es el despojo de toda soberbia en los verdaderos estudiantes de teología. ¿Cómo
podría alguien acercarse de forma arrogante a un estudio que nunca podrá dominar y al
tratar con cosas tan maravillosas que no es capaz de entender en su dimensión total? Solo la
locura pondría en la misma ecuación a la soberbia humana y a la teología.

Sí, la teología es una ciencia, pero no es una ciencia común, ¡es la ciencia sagrada que estudia
a Dios! El estudiante debe recordar esto en cada paso y progreso de sus estudios teológicos.

C. Las demandas de la teología como una ciencia

Entonces, si la teología es una ciencia sagrada, debe ser estudiada de manera científica y ello
demanda de un esfuerzo serio y comprometido. Consideremos juntos estas dos demandas
que la teología hacer como ciencia.

Primera Demanda: un esfuerzo intelectual Serio y Comprometido.

Podemos decir que la parte científica de la Teología tiene que ver con la investigación
diligente por parte del creyente en la Palabra de Dios de manera que sea capaz de proclamar
las verdad que le han sido reveladas. Para este propósito, es necesario que el estudiante de
la Palabra de Dios tenga el fundamento intelectual y técnico necesario. Esto significa
aprender a hacer correctamente su investigación y a presentarla de una manera clara y
estructurada, de manera que sea capaz de compartirla efectivamente con otros.

Hay textos muy conocidos que nos recuerdan esta verdad de esfuerzo y diligencia en el
estudio de las Escrituras (Jn. 5:39; 2 Tim. 2:15, etc.) ; sin embargo consideremos de manera
particular lo que dice Hechos 17:11.

5 Waldron, Sam; Principios de la Religión Cristiana, n/p.

7
Hch. 17:11 Estos eran más nobles que los de Tesalónica, pues recibieron la palabra con
toda solicitud, escudriñando diariamente las Escrituras, para ver si estas cosas eran
así.

En este texto se hace un contraste entre aquellos que oyeron la Palabra en Tesalónica y los de
Berea. El relato nos muestra la disposición que se espera de aquellos que escuchan la Palabra
de Dios. Lo primero que encontramos es un elogio a los bereanos llamándolos más nobles que
los de Tesalónica. Esta palabra se refiere al tipo de actitud que se asocia normalmente con las
personas bien educadas, de mente noble o de mente abierta.6 Una mente abierta o noble es
aquella que muestra una disposición de escuchar, indagar y aprender al respecto. Esto
implica la capacidad de tener una mente enseñable que no tiene miedo de indagar,
cuestionar, aprender o cambiar. Esto es lo que Matthew Henry comenta al respecto:

Los judíos de la sinagoga de Berea tenían una mejor disposición a recibir el evangelio
que aquellos judíos de la sinagoga de Tesalónica; no eran tan intolerantes ni tenían
tantos prejuicios contra él, ni eran tan malhumorados ni de mal carácter; eran más
nobles, mejor educados.7

Esto es afirmado por la explicación que el mismo texto nos da: pues recibieron la palabra con
toda solicitud. Esta disposición es la que muestra su mente noble. Los bereanos tuvieron la
disposición de escuchar; sin embargo, su actitud va aún más allá al afirmarse que ellos
escudriñaban lo que oían para comprobar si eso era así o no. La palabra escudriñando
[ἀνακρίνοντες, anakrínontes] que aparece en el texto significa «comprometerse en un
cuidadoso estudio de un asunto».8 Puede ser traducido como preguntar, indagar, examinar.

Lo que este texto dice con respecto a los bereanos se convierte en una estándar para todo
aquel que oye y estudia la Palabra de Dios, pues el elogio recibido nos muestra la aprobación
de parte de Dios. Tanto la expresión eran más nobles, como recibieron… con toda solicitud y
escudriñaban implican el uso de la mente con el propósito de encontrar razones o respuestas.

Al igual que en este texto, todos los imperativos que las cartas pastorales le dan al hombre
de Dios con respecto al uso de la Palabra nos muestra esta misma idea de esfuerzo, solicitud
y humildad.

2 Tim. 2:15 Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no
tiene de qué avergonzarse, que maneja con precisión la palabra de verdad.

6 William Arndt et al., A Greek-English Lexicon of the New Testament and Other Early Christian Literature (Chicago:
University of Chicago Press, 2000), 404.
7 Matthew Henry, Matthew Henry's Commentary on the Whole Bible: Complete and Unabridged in One Volume

(Peabody: Hendrickson, 1994), 2141.


8 William Arndt et al., A Greek-English Lexicon of the New Testament, 66.

8
2 Tim. 3:14 Tú, sin embargo, persiste en las cosas que has aprendido y de las cuales te
convenciste, sabiendo de quiénes las has aprendido;

2 Tim. 3:16–17 Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para
reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea
perfecto, equipado para toda buena obra.

Por tanto, permíteme compartirte tres razones por las que el estudiante de teología debería
considerar seriamente el estudio científico de la teología con mucha responsabilidad y
esfuerzo intelectual:

Primero, la excelencia del oficio teológico lo exige.

En Su sabiduría, Dios creó el lenguaje humano con el propósito de revelarse a los hombres y
que los hombres pudieran comunicar esa revelación de manera efectiva a otros hombres. El
lenguaje es la plataforma a través de la cual el oficio teológico debe ser ejercido. Usando de
la inteligencia natural que Dios deposito en él, el hombre ha sido capaz de desarrollar el
lenguaje y comunicar de manera apropiada el conocimiento y las reflexiones que ha obtenido
producto de su observación del mundo creado (Revelación General). La medicina, así como
cualquier otra ciencias, no es otra cosa que la acumulación de observaciones que el hombre
ha hecho de las cosas que Dios creó, puestas de una manera científica y lógica, utilizando
nombres y frases que tuvieron que ser inventadas con el propósito de llamar de alguna
manera a las cosas que pueden ser vistas en la creación. Si aquellas ciencias, importantes y
provenientes de una observación cuidadosa y profunda de la sabiduría de Dios revelada en
Su creación, han sido tan profundamente organizadas y presentadas por los hombres,
¿cuánto más debería ser aquella revelación que no proviene de una observación a lo creado
sino que ha sido divinamente revelada por Dios y, no para asuntos naturales o temporales,
sino para la salvación del alma y el conocimiento del Dios verdadero? La revelación de Dios
de la Historia de la Redención tiene un valor infinitamente superior a cualquier observación
hecha por los hombres. Los expositores de la verdad revelada de Dios deben escribir bien y
expresar con claridad las verdades que proclaman porque su oficio es infinitamente superior
al oficio de cualquier “observador de la creación”.

Segundo, la realidad cultural lo requiere.

Especialmente hablando de nuestra cultura latinoamericana, tenemos que admitir que es una
cultura de consumo; es decir, hemos sido influenciados por una forma de pensar y vivir en la
que no estamos acostumbrados a producir o aportar, sino que somos dados a consumir. Por
supuesto, hay personas en medio de nuestra cultura que han marcado una diferencia muy
importante, pero ellos son los héroes de una contra−cultura, por eso son tan admirados y
amados. Encontramos muchas respuestas a nuestra realidad cuando rastreamos nuestra
cultura a sus orígenes. Fuimos colonizados por un catolicismo romano impositivo que nos
enseñó que no importaba cuan absurdo pudiera parecer algo, tenía que ser creído con la

9
convicción más profunda y devota. Esto, unido a una manipulación de los sentimientos, se
nos enseñó que pensar diferente era traicionar a la familia y pervertir la herencia de tantos
años. Se nos obligó a no pensar. El pseudo−evangelio católico romano ha marcado los pasos
en la cultura del pensamiento en cada uno de los lugares en los que han puesto su bandera.
En un contraste muy distinto, la cultura marcada por el cristianismo bíblico llevaba consigo
la premisa de la necesidad de indagar, pensar y defender la verdad de Dios, que había sido
revelada y depositada en la Escritura.9

Sin embargo, esta realidad cultural no es lo único que ha influenciado la escena teológica, la
formación teológica que se ha impartido en nuestros países es otro elemento importante.
Muy lejos de desconocer el gran esfuerzo que muchos han hecho por traer educación
teológica a nuestros pueblos, debemos ser realistas al momento de hacer una evaluación con
el propósito de buscar una solución. La instrucción teológica que hemos recibido por años
ha estado marcada por dos factores importantes: la necesidad inmediata y la falta de instrucción
académica. El mundo teológico es tan amplio que los misioneros y pastores que vinieron a
nuestros países tuvieron que escoger aquello que era necesario y que tendría utilidad en las
misiones. Por esa razón, las discusiones teológicas y la academia estuvieron lejos de la
formación que se le dio a los futuros pastores y misioneros en el campo misionero. El otro
gran desafío fue que una gran mayoría de los hombres fieles que encontraron y escogieron
como estudiantes, eran hombres que en la mayoría de los casos no tenían una formación
académica previa, o sino una muy elemental. Con los años, aunque la formación académica
en general fue mejorando en cada uno de los países, la enseñanza teológica nunca se alineó
con esta nueva realidad. Los institutos bíblicos y escuelas teológicas se caracterizaron por
enseñar «verdades dogmáticas» sin profundidad académica, en una versión apologética. En
otras palabras, fue una enseñanza que capacitó a hombres y mujeres a defender lo que habían
aprendido, aun cuando no fueran capaces de discutir con otros o contestar sus preguntas.
Todas estas cosas son lo que ha dado a luz nuestra realidad contemporánea de teólogos que
no conocen la Biblia y que intencionalmente han cerrado sus ojos a la academia y la historia.

Tercero, la misión que recibimos lo demanda.

Después de todo, ¿por qué los estudiantes de teología tienen la responsabilidad de estar
comprometidos con un esfuerzo intelectual profundo y real? Porque si no es así, no sería
posible para ellos cumplir con la misión que han recibido. La Gran Comisión consiste en ir
por el mundo y anunciar las buenas nuevas de perdón y vida eterna en Cristo Jesús. Aquellos
que creen se convertirán en discípulos del Señor (viviendo conforme a lo que dicen creer),
los cuales en obediencia a la Palabra y por convicción de su alma buscarán ser bautizados
como un testimonio público de su fe y conversión; al serlo, serán añadidos a una iglesia local
en donde aprenderá a guardar todo lo que el Señor ha mandado. En todo este proceso, la
enseñanza es vital. La misión de la iglesia está enlazada con la de hombres fieles que deben

9 Te animo a que puedas considerar en algún momento hacer un análisis cuidadoso de esta realidad cultural.

10
enseñar con precisión la Palabra de Dios a otros. Un estudiante de teología debe ser diligente
en buscar ser cada día más claro como comunicador de la revelación de Dios. Investigar,
analizar y escribir es un ejercicio necesario en la vida de un siervo de Dios. Hacerlo bien, es
una necesidad imposible de exagerar.

Segunda Demanda: un tratamiento científico.

El hecho de reconocer a la teología como ciencia sagrada, la ciencia de Dios, no solo nos lleva
a pensar en el esfuerzo intelectual que eso demanda, sino también en el tratamiento científico
que exige. Si es una ciencia, debe ser ordenada y tratada de una manera científica. Eso es
precisamente lo que los hombres han procurado hacer en la historia. Luego de tomar el
tiempo de revisar el contenido de la Palabra, los creyentes han entendido la responsabilidad
de organizar su contenido de manera lógica y enseñarlo a otros de esa manera.

La Enciclopedia de la Teología

A las divisiones científicas de la teología se las conoce como “Enciclopedia de la Teología”.


La palabra enciclopedia se deriva de las palabras griegas ek, kuklos, y paideia, las cuales
significan el ciclo completo de instrucción.10 A través de los años, diferentes teólogos han tratado
de organizar este «ciclo completo» con el propósito de tener un mapa adecuado de lo que la
teología como ciencia encierra. Para esta breve presentación, por razones del tiempo y por la
forma en la que está establecido nuestro currículo de estudios, utilizaremos el cuadro
proporcionado por Abraham Kuyper, el cual dividió a la teología como ciencia en cuatro
ramas principales.

Este es el cuadro de Kuyper con algunas pequeñas modificaciones11:

10 Waldron, Samuel E.; Notes On Introduction to Systematic Theology, pg.18 (Covenant Baptist Theological
Seminary).
11 Waldron, pg. 20.

11
Descripción

Hay cuatro ramas principales: Teología Exegética, Teología Histórica, Teología Sistemática y
Teología Práctica.

La Teología Exegética es la rama de la teología que busca como meta suprema la interpretación
correcta de las Escrituras. Dentro de esta disciplina está el estudio de los libros de la Biblia,
lo cual incluye el estudio general o panorámico de cada uno de ellos. También trata con el
texto de la Biblia a través del estudio de las lenguas bíblicas, la crítica textual o variantes en
el texto, los principios de interpretación de las Escrituras y sus conclusiones. Finalmente,
también tiene que ver con el contenido de la Biblia lo cual incluye la arqueología, historia y
teología bíblica. Con respecto a esta última, debido a su importancia, hay algunos que han
preferido considerarla como otra rama dentro de la enciclopedia de la teología. La teología
bíblica es la disciplina que busca presentar de manera apropiada el marco de referencia del
contenido de la Escritura, es decir, la razón suprema y unificante de cada una de sus partes,
lo cual es: La historia de Redención.

La Teología Histórica es la rama de la teología que tiene como propósito desarrollar una
perspectiva histórica de la doctrina y su relación la iglesia a lo largo de los siglos. Esta
disciplina considera tanto la historia de la iglesia desde una perspectiva cronológica, en
lugares específicos y denominaciones, así como la historia de la doctrina o el progreso del
dogma cristiano, es decir, cómo fue desarrollándose el entendimiento de las diferentes
doctrinas y cuál fue el contexto de ese desarrollo.

La Teología Sistemática es la rama de la teología que busca organizar el contenido doctrinal de


la Palabra de Dios de una manera ordenada, creando subdivisiones en las que se agrupa lo
que la Biblia enseña sobre diferentes temas. En su teología sistemática, el Dr. Waldron define
a la Teología Sistemática como comprensiva [todos los temas que ella comprende], temática
[ordenada en forma de temas], exhaustiva [todo lo que ella dice sobre esos temas] y lógica
[ordenados de una forma comprensible].12

La Teología Práctica es la rama de la teología que busca la aplicación o mediación efectiva


entre lo que entendemos de la Palabra de Dios y lo que aplicamos de ella.

Relaciones Internas

¿Cómo se relacionan las ramas de la teología entre sí? El entender la respuesta a esta pregunta
es vital al momento de considerar cualquiera de las ramas de la teología, pues ninguna se
encuentra en competencia con otra, ni ninguna subsiste sin las otras. Hay algunos que
erróneamente dicen: «yo voy a ser un teólogo exegético porque la exegesis trata con la Biblia
directamente y eso es mejor que la teología sistemática, la cual trata con lo que otros hombres
han dicho». Este divorcio en la mente de un estudiante de teología trae consecuencias fatales.

12 Waldron, Principios de la Religión Cristiana, s/p.

12
Estas cuatro ramas se encuentran en una relación íntima en la que se sostiene la una a la otra
en una harmonía perfecta. Un teólogo ha ilustrado esta relación de dependencia mutua así:

Si igualamos a la teología con la construcción de una casa, podemos decir que los
materiales de esa construcción deben ser provistos por la Teología Exegética. Los
asesores, consultores y consejeros en este proyecto son proporcionados por la Teología
Histórica. Es responsabilidad de la Teología Sistemática el tener que construir la casa.
La Teología Pastoral o Práctica es quien la vende.13

Entender esta relación es lo que nos permite


mantener una perspectiva correcta de la teología
como un todo. Por tanto, dentro de esta enciclopedia
de la teología existe una relación orgánica,
jerárquica y dependiente entre sus componentes.

Una relación jerárquica: El orden en el que han sido


ordenadas las cuatro ramas de la teología es lógico
y nos demuestra esta realidad jerárquica. La teología
exegética constituye el fundamento de todas las
demás. Podemos decir que, dado que la teología
tiene como fuente la Palabra de Dios, todas las
demás ramas de la teología dependen de la teología
exegética. Sin embargo, la relación entre las otras
tres ramas entre sí es más orgánica.

Una relación orgánica: Las cuatro ramas de la teología tienen una relación natural que produce
una interacción necesaria entre ellas. Aunque son independientes, tienen una interrelación
fundamental. Por ejemplo: la teología sistemática no depende de la teología histórica, pero la
teología histórica tiene una gran influencia sobre ella.

Una relación de dependencia: Tal como se puede observar en el cuadro denominado «el rostro
de la teología», existe una verdadera relación de dependencia en las diferentes escalas
jerárquicas de la enciclopedia de la teología. La teología exegética es el fundamento o base
de toda la enciclopedia. La teología histórica depende de la exegética de una manera
importante porque ella abarca la forma en la que los creyentes han interpretado la Biblia a
través de los años. La teología sistemática depende de la teología exegética y, aunque no
depende de la teología histórica, es profundamente influenciada por ella. Finalmente, en el
último rango de la escala jerárquica está la teología práctica que surge como el resultado de
la interacción entre las otras tres ramas de la teología.

13 Waldron, pg. 23.

13
Su relación con nuestro currículo

El programa de estudio de nuestro seminario te llevará en un recorrido por la enciclopedia


de la teología de una manera panorámica con un énfasis especial en teología sistemática.
Debido a la necesidad que satisface este programa hemos tenido que priorizar la teología
sistemática por causa del carácter confesional que sostenemos. Más adelante consideraremos
esto en más detalle.

Teología Exegética Teología Histórica Teología Sistemática Teología Práctica


Teología Histórica I, La Introducción a la Introducción a la
Hermenéutica Bíblica
Iglesia Primitiva Confesión de Fe Teología Pastoral I
Teología Histórica II,
La Doctrina de la Introducción a la
Teología Bíblica I La Iglesia Medieval/de
Palabra Teología Pastoral II
la Reforma

La Doctrina de Dios

La Doctrina del
Hombre y la Ética
La Doctrina de Cristo y
la Salvación
La Doctrina de la
Iglesia
La Doctrina de las
Últimas Cosas
Teología Pactual
Bautista Reformada

14
2. La Legitimidad del estudio de la teología
Hay un segundo aspecto fundamental que el estudiante de teología debe tratar de tener claro
antes de empezar sus estudios teológicos y ese es: la legitimidad del estudio de la teología.
Básicamente este aspecto tiene que ver con dos preguntas principales: (1) ¿quién debe
estudiar teología?; y, (2) ¿quién debe impartir ese entrenamiento?

Con el propósito de contestar estas dos interrogantes importantes sobre la legitimidad del
estudio de la teología, consideremos las palabras del apóstol Pablo en 2 Tim. 2:2.

Introducción

Desde el momento en que la gracia de Dios abrió nuestros ojos y nos enseñó la aplicación
gloriosa de la Palabra de Dios como nuestra única regla suficiente, segura e infalible de todo
conocimiento, fe y obediencia salvadores, empezamos la bendita tarea de revisar todo lo que
creemos y hacemos a la luz de esta regla. Al pensar en el mandamiento de preparar hombres
para el ministerio, es necesario volver a preguntamos si es legítima la función que los
seminarios hacen para este propósito; porque, después de todo, la Palabra de Dios nos enseña
que la Iglesia es el centro de todo lo que Dios ha hecho, hace y hará en la tierra. Por tanto,
¿cuál debería ser nuestra perspectiva con respecto a los seminarios?

Algunos han preferido catalogar a los seminarios como instituciones paraeclesiásticas, es decir,
como un ministerio que se lleva a cabo fuera de la estructura de las iglesias locales;14 y, visto
desde esta perspectiva, es una añadidura al ministerio de la Iglesia que de alguna manera
busca suplir (o reemplazar) a la iglesia local en su responsabilidad de preparar hombres para
la obra del ministerio. Sin embargo, ¿qué podemos decir al respecto? A través de esta clase
mi propósito será mostrarte que cuando la estructura de un seminario es apropiada, no solo
que debemos negarnos a identificarlo como un ministerio paraeclesiástico, sino que podemos
verlo como una forma bíblica, apropiada y práctica de dar cumplimiento al mandato de
preparar hombres para el ministerio.

Consideremos, en primer lugar, las palabras de Pablo a Timoteo en 2 Tim. 2:2; y, luego, en
segundo lugar, algunas conclusiones que nos ayudarán a responder a nuestra inquietud.

καὶ ἃ ἤκουσας παρʼ ἐμοῦ διὰ πολλῶν μαρτύρων, ταῦτα παράθου πιστοῖς
ἀνθρώποις, οἵτινες ἱκανοὶ ἔσονται καὶ ἑτέρους διδάξαι.
«Y aquello que oíste de mi delante de muchos testigos esto encarga a hombres dignos
de confianza que sean competentes para enseñar a otros también»

14Véase la definición de «organización paraelesiástica» [parachurch organization] en Donald K. McKim, The


Westminster Dictionary of Theological Terms, Second Edition, Revised and Expanded (Louisville, KY: Westminster
John Knox Press, 2014), 226.

15
En este versículo tan importante en lo que respecta a la preparación de hombres para el
ministerio podemos observar dos características fundamentales del tipo de entrenamiento
que estos deben recibir:

I. El Contenido Definido de este Entrenamiento (vers. 2a)


II. El Carácter Distintivo de este Entrenamiento (vers. 2b)

I. El Contenido Definido de este Entrenamiento (vers. 2a)

καὶ ἃ ἤκουσας παρʼ ἐμοῦ διὰ πολλῶν μαρτύρων,


Y aquello que oíste de mi delante de muchos testigos

La primera característica que encontramos con respecto a este excelso mandato es el


contenido de este entramiento. Las palabra de Pablo lo delimitan y definen dejando por
sentado que el entrenamiento no debe ser llevado a cabo bajo ninguna otra consideración
que no sea este lineamiento. Este contenido es mencionado en otras partes como el «depósito»
que Pablo había recibido y que ahora estaba poniendo sobre los hombros de Timoteo.

A. Su Identidad

La expresión «aquello que oíste de mi» es una referencia a la doctrina o enseñanza que Timoteo
había oído/recibido de parte de Pablo. «Ante muchos testigos» nos muestra el aspecto público
de esta enseñanza, la cual había sido proclamada por Pablo en presencia de otros hombres
(posiblemente los ancianos de las iglesias – 1 Tim. 4:14). Este depósito no es algo que se
originó en Pablo, sino que él también lo recibió de parte de Dios (Gal. 1:11, 12) y fue
constituido como predicador de esta verdad (2 Tim. 1:11). Este depósito es la enseñanza
apostólica, la cual fue dada por el Espíritu Santo conforme a la promesa del Señor (Jn. 16:13)
y proclamada por los apóstoles del Señor tanto en cartas y libros como en predicaciones
públicas de la Palabra. En un sentido limitado, esta enseñanza apostólica es una referencia al
Evangelio; sin embargo, en el contexto de este pasaje (y de muchos más), la enseñanza
apostólica o el depósito que Timoteo tenía que guardar eran las enseñanzas apostólicas que
establecían el cuerpo de doctrina que la iglesia debía defender y proclamar (1 Tim. 3:14−16).

B. Su Importancia

La importancia de este depósito, aunque es evidente, puede ser probada por la centralidad
que éste tiene en esta carta. Considera conmigo lo siguiente:

a. Pablo le manda a guardar la forma de lo que había oído (2 Tim. 1:13). La palabra
“forma” es la traducción del vocablo griego ὑποτύπωσις el cual es usado en 1 Tim.
1:16 en donde el Apóstol dice que él era el ejemplo o prototipo de todos aquellos que
serían perdonados. En otras palabras, es como si Pablo estuviera diciendo: «lo que
Dios ha hecho conmigo, también puede hacerlo contigo». La palabra tiene un uso
similar en 2 Tim. 1:13 donde Pablo le dice a Timoteo que guarde la forma o el esbozo

16
que él ha hecho para Timoteo en lo que respecta al depósito que ahora está en sus
manos y tiene la responsabilidad de proclamar y transmitir. En otras palabras, el
mandato es a guardar íntegramente el depósito que había recibido.

b. Pablo le manda a encargarle a otros lo que había oído (2 Tim. 2:2). El mandato es
a encargar responsablemente el depósito a hombres fieles.

c. Pablo le manda a que procure ser un obrero fiel que proclama con fidelidad lo que
ha oído (2 Tim. 2:15), no cayendo en «discusión de palabras» (2 Tim. 2:16),
«rechazando razonamientos lógicos» (2 Tim. 2:23) y «corrigiendo tiernamente a los
que se oponen» (2 Tim. 2:25−26). El mandato es a proclamar fielmente el depósito
que había recibido.

d. Pablo le manda a persistir en lo que había oído (2 Tim. 3:10,14). A través de las
palabras: «tú has seguido mi enseñanza», Pablo insta a Timoteo a que siga
manteniéndose firme en ello. La palabra persiste del versículo 14, tiene la idea de
«alguien que no abandona un determinado reino o esfera».15 El contraste del texto
(«tú, sin embargo») implica que esta persistencia debía ser hecha a pesar de las
presiones externas, por lo tanto, con esfuerzo. El mandato es a persistir
esforzadamente en guardar la pureza del depósito.

e. Pablo le manda a predicar lo que había oído (2 Tim. 4:2). El mandato es a predicar
diligentemente el mensaje que había recibido.

La importancia de este depósito es manifestada en que Pablo le manda a Timoteo a guardar


íntegramente, encargar responsablemente, proclamar fielmente, persistir esforzadamente y
predicar diligentemente el depósito de la fe que había recibido de parte de él.

C. Su Implicación

La identidad e importancia de este depósito o «aquello que oíste de mi» nos lleva
naturalmente a las siguientes implicaciones presentadas en líneas de argumentación:

(1) Este depósito apostólico necesariamente debe ser algo concreto y conocible. Si no fuera así,
¿cómo guardarlo o encargarlo a otros? La doctrina apostólica define la doctrina de la
iglesia cristiana y se encuentra grabada en la Palabra de Dios, la cual constituye el
registro apostólico.

William Arndt et al., A Greek-English Lexicon of the New Testament and Other Early Christian Literature (Chicago:
15

University of Chicago Press, 2000), 631.

17
(2) Debido a que la Escritura es el registro apostólico y en ella se encuentra la doctrina
apostólica (el depósito), es la responsabilidad de la iglesia el indagar en ella con el
propósito de obtener una expresión concreta de esta fe.

(3) Las Confesiones de Fe, así como los Credos y las Declaraciones Doctrinales, son el
intento legítimo de la iglesia por conservar la fe apostólica, el depósito que una vez
Pablo le entregó a Timoteo. Esto hace de ellos, no solo algo legítimo y válido, sino algo
completamente necesario en la vida de una iglesia bíblica.

(4) Lo que los pastores deben encargar y compartir con otros está perfectamente
limitado y especificado en este texto: la enseñanza apostólica. Esto nos sugiere la gran
importancia de entrenar hombres bajo una enseñanza confesional.

Por tanto, el contenido del entrenamiento para el ministerio debe estar cimentado en las
Escrituras, centrado en el Evangelio y estructurado confesionalmente.

II. El Carácter Distintivo de este Entrenamiento (vers. 2b)

ταῦτα παράθου πιστοῖς ἀνθρώποις οἵτινες ἱκανοὶ ἔσονται καὶ ἑτέρους διδάξαι.
esto encarga a hombres dignos de confianza que sean competentes para enseñar a otros también

Su carácter distintivo, es decir, el hecho de que este es un mandato peculiar y distinto puede
ser visto en:

A. Los Responsables de este Mandato

¿Quién tiene esta responsabilidad? Es evidente que esta responsabilidad recae sobre el
recipiente original de esta carta, Timoteo; sin embargo, él representa en su calidad de pastor,
a todos los ancianos/pastores que la iglesia de Cristo tendría después del periodo apostólico
a lo largo del mundo y de la historia. Esto se debe a que Timoteo vivió en el mismo periodo
de tiempo que el resto de los pastores de la historia (los últimos días – 2 Tim. 3:1) y porque
fue pastor de una iglesia ordinaria al igual que el resto de los pastores en la historia (en
contraste con la iglesia en el Antiguo Testamento y la iglesia extraordinaria del libro de
Hechos que, aunque sirven de ejemplo para nosotros, no tiene una aplicación directa debido
a su naturaleza especial). Por esta razón, la responsabilidad que una vez Timoteo tuvo que
asumir ahora debe ser asumida por todos los pastores de las iglesias de Cristo.

Aquí podemos notar un contraste muy interesante entre este mandato de entrenar hombres
para el ministerio y la Gran Comisión. La Gran Comisión fue dada por el Señor a Sus
apóstoles y, cuando llegó el tiempo de que ellos salieran de la escena, fue puesta sobre los
hombros de la iglesia local. El mandato de entrenar hombres fue dado a Timoteo como un
pastor en representación de todos los pastores que las iglesias tendrían. Los responsables de
este mandato son los pastores de las iglesias de Cristo.

18
B. La Responsabilidad de este Mandato

¿Qué demanda la responsabilidad de este mandato? Además, este mandato consiste en una
enseñanza formal y con propósito, lo cual podemos asumir al considerar el verbo encarga [gr.
παράθου], que significa: «encargar algo para ser cuidadosamente guardardo».16 Esta
formalidad es acorde con un mandato distinto al de la gran comisión. No se refiere a la
predicación del evangelio que todos los creyentes debemos hacer a otras personas, sino de
una responsabilidad formal de encargar algo que debe ser guardado, de la misma forma en
la que lo hace un administrador con aquello que le dieron a cuidar. Este mismo verbo se
repite en 1 Tim. 1:18 donde Pablo le dice a Timoteo: «Esta comisión te confío [παρατίθεμαί],
hijo Timoteo». Este es un encargo formal y ministerial.

C. El Alcance de este Mandato

¿A quiénes se extiende este mandato? Al igual que en los puntos anteriores, en este mandato
también hay un contraste con la Gran Comisión. La Gran Comisión tiene un alcance universal
y sin distinción, el Señor ordenó que se predicara «a toda criatura». El mandato de entrenar
hombres es particular y limitado en su alcance, no es a toda criatura, sino a hombres de ciertas
características y cualidades.

Primero, Pablo dice que deben ser a hombres dignos de confianza (πιστοῖς ἀνθρώποις). Esto
asume que son hombres creyentes que han sido reconocidos por otros hombres como fieles
o dignos de confianza. Esto nos recuerda las palabras de los apóstoles: «escoged de entre
vosotros siete hombres de buena reputación, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes
podamos encargar esta tarea» (Hch. 6:3). Es la iglesia la que reconoce a esos hombres. Ella ha
sido comisionada para el reconocimiento, desarrollo, examen y confirmación de los dones de
aquellos que aspiran al servicio en la misma. Luego añade: que sean competentes para enseñar
(οἵτινες ἱκανοὶ ἔσονται …διδάξαι). Estos hombres no pueden ser solamente dignos de
confianza (que denota carácter) sino también calificados o competentes para enseñar. Esta
competencia manifiesta una cualidad ministerial, lo cual va más allá de ser simplemente un
verdadero creyente. Los hombres que estén siendo considerados para la preparación para el
ministerio pastoral deben manifestar, por lo menos en una forma incipiente, el carácter, los
dones y las gracias prescritas en pasajes tales como 1 Timoteo 3, Tito 1, Hechos 20 y 1 Pedro
5. Por tanto, el alcance de este mandato es limitado y específico a este tipo de hombres, a
diferencia de la gran comisión que es universal.

Algunas reflexiones conclusivas

Este breve análisis de 2 Timoteo 2:2 nos enseña lo siguiente:

William Arndt et al., A Greek-English Lexicon of the New Testament and Other Early Christian Literature (Chicago:
16

University of Chicago Press, 2000), 772.

19
Primero, que el mandato de preparar hombres para el ministerio sigue vigente y debería ser
una preocupación tomada con mucha seriedad por todos aquellos que quieren honrar al
Señor.

Segundo, que el mandato de preparar hombres para el ministerio fue dado a los pastores y
debe distinguirse de la Gran Comisión; pues, aunque es una parte específica de esta, no es
equivalente. Por esta razón, es completamente lícito que pastores trabajen juntos para este
propósito.

Tercero, que el mandato de preparar hombres para el ministerio debe ser en el contexto de
una enseñanza bíblica confesional, es decir, compartiendo con ellos el depósito de la verdad
de Dios enunciada en forma de afirmaciones.

Cuatro, que el mandato de preparar hombres para el ministerio debe estar centrado en el
ministerio de la iglesia local que es la única con la autoridad para reconocer a los hombres
fieles que son idóneos para enseñar a otros.

Entonces, a la luz de estas cuatro afirmaciones, ¿es legítima la participación de los seminarios
teológicos en el excelso mandato de entrenar hombres? La respuesta es sí. Cuando los
seminarios teológicos existen como resultado de la cooperación entre pastores de iglesias
locales, funcionan bajo la supervisión de iglesias locales, presentan su enseñanza en un
contexto confesional y permiten que las iglesias locales sean el filtro de sus estudiantes, no
solo no contradicen el mandato bíblico de 2 Timoteo 2:2, sino que son una forma bíblica,
apropiada y práctica de dar cumplimiento al mandato de preparar hombres para el
ministerio.

Sin embargo, ¿por qué, en vez de abrir seminarios teológicos, los pastores no entrenan a sus
hombres? Debido a que la tarea de preparar hombres para el ministerio es una tarea ardua
que requiere de un entrenamiento minucioso y exhaustivo, tiempo y dones particulares, que
no todas las iglesias ni todos los pastores poseen. Esto es acorde con la verdad de que el Señor
Jesucristo dio una variedad de dones a Su iglesia (Efe. 4:8-11) y el Espíritu los repartió como
Él quiso (1 Cor. 12:4-11). Por eso, es completamente lícito y apropiado que las iglesias, cuando
estén establecidas por la providencia de Dios de manera que puedan gozar de la oportunidad
y el beneficio de ello, puedan tener comunión entre sí, para su paz, crecimiento en amor y
edificación mutua, lo cual incluye el trabajo en conjunto para la formación de hombres para
el ministerio.

Además, como un argumento menor, podemos añadir que esta fue la práctica en la historia
de nuestros antepasados los bautistas particulares. El Dr. James Renihan nos informe que en
la reunión de la Asociación de Iglesias Bautistas Particulares en 1689, se destinó un fondo

20
para la educación de hombres jóvenes y prometedores para el ministerio.17 El Bristol Baptist
College, una institución educativa con el propósito de preparar hombres para el ministerio,
fue establecida por el trabajo en conjunto de las iglesias bautistas reformadas en 1679.18

Esta es la razón por la que podemos afirmar que en obediencia al mandato del Apóstol Pablo
a Timoteo ––de que los hombres de Dios deben encargar la preciosísima doctrina que han
recibido a hombres fieles que sean idóneos para enseñar a otros (2 Tim.2:2)––, las iglesias
locales que conforman la AIBRE (Asociación de Iglesias Bautistas Reformadas del Ecuador)
establecieron el Seminario Bautista Confesional del Ecuador como una forma fiel de cumplir con
este encargo divino.

17 Veáse James M. Renihan, Edificación y Belleza: La Eclesiología Práctica de los Bautistas Particulares Ingleses, 1675-
1705 (Santo Domingo, Ecuador: Legado Bautista Confesional, 2020), pg. 280.
18 Veáse H. Foreman, Baptist Provision for Ministerial Education in the 18th Century {trad. no oficial: La Provisión

Bautista para la Educación Ministerial en el Siglo XVIII}, BQ 27 (Oct. 1978): 359. Véase también «Bristol Baptist
College—the 250th Anniversary» Baptist Quarterly, Volume 4, 1929 - Issue 7.

21
3. Las Presuposiciones del estudio de la teología
Una presuposición es algo que se toma como verdadero y constituye la base sobre la que se
desarrolla un argumento o una obra determinada. Por esa razón, al hablar de las
presuposiciones del estudio de la teología estamos hablando de aquellas verdades bíblicas
sobre las que se levanta nuestro estudio sobre el conocimiento de Dios. En otras palabras, es
la respuesta a la pregunta: ¿qué debe saber un estudiante de teología antes de empezar su
proceso de estudio? Para responder esta pregunta, consideremos las palabras de Job 42:1-6,
en donde Job está delante del Señor y hace declaraciones que son sumamente importantes
para todo aquel que está en la búsqueda del conocimiento de Dios.

Job 42:1-6 1 Entonces Job respondió al Señor, y dijo: 2 Yo sé que tú puedes hacer todas
las cosas, y que ningún propósito tuyo puede ser estorbado. 3 «¿Quién es este que
oculta el consejo sin entendimiento?». Por tanto, he declarado lo que no comprendía,
cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no sabía. 4 «Escucha ahora, y hablaré;
te preguntaré y tú me instruirás». 5 He sabido de ti solo de oídas, pero ahora mis ojos
te ven. 6 Por eso me retracto, y me arrepiento en polvo y ceniza.

En base a este texto, consideraremos las tres presuposiciones que debe tener todo estudiante
de teología:

A. La insuficiencia del hombre en el estudio de la teología.


B. La revelación es el fundamento de la teología.
C. El carácter integral de la teología.

A. La insuficiencia del hombre en el estudio de la teología

«…he declarado lo que no comprendía, cosas demasiado maravillosas para mí, que yo
no sabía» (vers. 1-3).

Después de una larga autodefensa en contra de las acusaciones de sus amigos (y jurando
perjurio sobre sí mismo si su defensa era falsa), Job termina de justificarse a sí mismo en
31:40, donde dice: «Aquí terminan las palabras de Job».

En los capítulos 32 al 37, encontramos la intervención de Eliud, uno de los amigos de Job ⎯el
más joven de ellos. Después de escuchar como la conversación resultó en un silencio total
porque Job se justificaba a sí mismo y sus amigos, que lo acusaban injustamente y sin razones
objetivas apropiadas, se quedaron en silencio aceptando la inocencia de un Job que reclamaba
su inocencia diciendo: «Yo soy limpio, sin transgresión; soy inocente y en mí no hay culpa»
(Job 32:9), Eliud se encendió en ira y comenzó a exhortar a los «más ancianos» que él y a
confrontar a Job con respecto a su postura.

¿Qué es lo que Eliud hace para mostrarle a Job que estaba equivocado? Eliud declara la gloria
de Dios a través de hacer una exposición de Su inmensidad y gloria, y comparándola con la

22
pequeñez del hombre. El hombre es incapaz de responder cosas simples de la creación,
¿cuánto menos entender o expresar la gloria de la naturaleza de Dios?

Job 37:14–24 14 Escucha esto, Job, detente y considera las maravillas de Dios. 15 ¿Sabes
tú cómo Dios las establece, y hace resplandecer el relámpago de su nube? 16 ¿Sabes tú
la posición de las densas nubes, maravillas del perfecto en conocimiento, 17 tú, cuyos
vestidos están calientes cuando la tierra está en calma a causa del viento del sur? 18
¿Puedes con Él extender el firmamento, fuerte como espejo de metal fundido? 19
Enséñanos qué le hemos de decir a Dios; no podemos ordenar nuestro argumento a
causa de las tinieblas. 20 ¿Habrá que contarle que yo quiero hablar? ¿O debe un hombre
decir que quiere ser tragado? 21 Ahora los hombres no ven la luz que brilla en el
firmamento; pero pasa el viento y lo despeja. 22 Del norte viene dorado esplendor:
majestad impresionante alrededor de Dios. 23 Es el Todopoderoso; no le podemos
alcanzar; Él es grande en poder, y no pervertirá el juicio ni la abundante justicia. 24 Por
eso le temen los hombres; Él no estima a ninguno que se cree sabio de corazón.

En el capítulo 38, Dios mismo habla con Job desde un torbellino y manifiesta Su inmensidad
al hacer comparaciones en las que queda en evidencia las limitaciones que tienen los
hombres. Dios empieza su glorioso discurso preguntando: «¿Quién es este que oscurece el
consejo con palabras sin conocimiento?» (Job 38:2). El importante significado de esta
pregunta es bien explicado por Matthew Henry:

Dios acusa {a Job} de ignorancia y presunción en lo que había dicho (v. 2): «¿Quién es
este que habla de esta manera? ¿Es Job? ¿Qué? ¿Un hombre? Esa criatura débil,
insensata y despreciable, ¿pretende prescribirme lo que debo hacer o luchar conmigo
por lo que he hecho? ¿Es Job? ¿Qué? ¿Mi siervo Job, un hombre perfecto y recto?
¿Puede olvidarse tanto de sí mismo y actuar de forma distinta? ¿Quién es y dónde está
el que oscurece así el consejo con palabras sin conocimiento? Que muestre su rostro,
si se atreve, y mantenga lo que ha dicho.19

Job no estaba viendo las cosas desde una perspectiva apropiada. El juicio del hombre tiene
que ser dado desde un entendimiento correcto de su posición ante Dios. La forma en la que
Dios confronta a Job es a través de preguntas desafiantes que no pueden ser respondidas por
nadie y que tienen el propósito de romper toda altivez o pretensión de creer que Dios puede
ser cuestionado.

Job 38:3–7 3 Ciñe ahora tus lomos como un hombre, y yo te preguntaré, y tú me


instruirás. 4 ¿Dónde estabas tú cuando yo echaba los cimientos de la tierra? Dímelo, si
tienes inteligencia. 5 ¿Quién puso sus medidas?, ya que sabes, ¿o quién extendió sobre

19 Matthew Henry, Matthew Henry’s Commentary on the Whole Bible, 731.

23
ella cordel? 6 ¿Sobre qué se asientan sus basas, o quién puso su piedra angular 7 cuando
cantaban juntas las estrellas del alba, y todos los hijos de Dios gritaban de gozo?

En el capítulo 40, después de recibir esta revelación de la gloria de Dios (en los capítulos 38
y 39) encontramos las palabras de un Job confrontado que ya no está tan presto a defenderse,
de hecho, ni siquiera estaba dispuesto a volver a hablar.

Job 40:3–5 3 Entonces Job respondió al Señor y dijo: 4 He aquí, yo soy insignificante;
¿qué puedo yo responderte? Mi mano pongo sobre la boca. 5 Una vez he hablado, y
no responderé; aun dos veces, y no añadiré más.

A pesar de la respuesta de Job, el Señor vuelve a manifestar la gloria de Su grandeza en el


resto del capítulo 40 y 41.

Finalmente, llegamos a nuestro texto que empieza con la respuesta de Job a lo que el Señor
había dicho. Job ya no tiene una respuesta contradictorio de autojustificación o
cuestionamiento, sino una respuesta de un hombre quebrado que se somete a la realidad de
la gloria de Dios. Hay tres cosas que podemos notar de la respuesta de Job.

En primer lugar, sus palabras muestran que había entendido el mensaje que el Señor había
revelado desde el torbellino (Job 38-41). Job reconoce la gloria, el poder y la sabiduría
incomparables y eternas de Dios:

Job 42:2 Yo sé que tú puedes hacer todas las cosas, y que ningún propósito tuyo puede
ser estorbado.

En segundo lugar, retomando la pregunta que Dios mismo hizo en Job 38:2 [i. e., ¿Quién es
este que oculta el consejo sin entendimiento?] Job responde con un corazón sincero reconociendo
que él había sido un insolente delante de Dios hablando lo que no entendía: ¡yo soy ese
hombre! Esto nos muestra que la comprensión de la revelación de Dios llevó a Job a reconocer
su posición de ignorancia y limitaciones.

En tercer lugar, Job reconoce que las cosas que antes había hablado y expresado, en realidad
no las comprendía, pues eran cosas demasiado maravillosas para él (Job 42:3b). La palabra
hebrea que se traduce como «demasiado maravillosas» [‫ ]נִפְ ל ָֹ֥אות‬significa literalmente «algo
que es muy difícil de entender»20 denotando algo que va más allá de las fuerzas o la capacidad
que uno tiene para hacerlo. El significado está muy relacionado con la palabra maravillarse.
Las cosas que son más grandes que nuestra capacidad para entender nos maravillan. El
Antiguo Testamento utiliza la misma palabra-raíz de Job 42:3 [‫ ]פלא‬en otros pasajes también
en los que se menciona que las obras de Dios y Su persona son demasiado maravillosos:

Francis Brown, Samuel Rolles Driver, and Charles Augustus Briggs, Enhanced Brown-Driver-Briggs Hebrew and
20

English Lexicon (Oxford: Clarendon Press, 1977), 810.

24
Sal. 131:1 Señor, mi corazón no es soberbio, ni mis ojos altivos; no ando tras las
grandezas, ni en cosas demasiado difíciles para mí. [Énfasis añadido]

Sal. 136:1-6 1 Oh Señor, tú me has escudriñado y conocido. 2 Tú conoces mi sentarme


y mi levantarme; desde lejos comprendes mis pensamientos. 3 Tú escudriñas mi senda
y mi descanso, y conoces bien todos mis caminos. 4 Aun antes de que haya palabra en
mi boca, he aquí, oh Señor, tú ya la sabes toda. 5 Por detrás y por delante me has
cercado, y tu mano pusiste sobre mí. 6 Tal conocimiento es demasiado maravilloso para
mí; es muy elevado, no lo puedo alcanzar. [Énfasis añadido]

¿Por qué podemos afirmar que este conocimiento es demasiado maravilloso al punto de que
no podemos entenderlo?

Porque el centro de su enfoque es Dios y es imposible que el hombre finito pueda entender
al Ser infinito. Por lo tanto, las maneras en las que podemos hablar del Dios infinito no son
más que intentos limitados por el lenguaje finito y la naturaleza de las cosas con las que
podemos compararlo: «¿A quién, pues, asemejaréis a Dios, o con qué semejanza le
compararéis?» (Isa. 40:18).

¿Cuáles son las implicaciones de este conocimiento demasiado maravilloso?

Por el hecho de que este conocimiento es «más allá de nuestra capacidad», la consecuencia
es que nunca nadie será un experto o tendrá la facultad de «dominar el tema». Todo
estudiante de teología vivirá siempre en la posición de un estudiante; de hecho, mientras más
tenga la oportunidad de contemplar la revelación de Dios «desde el torbellino» el hombre de
Dios será más consciente de su pequeñez y necesidad. ¡Mientras más nos acercamos al
torbellino, somos más conscientes de su poder y grandeza! La humildad y el reconocimiento
de su propia incapacidad es el resultado inevitable de entender apropiadamente el estudio
de la teología.

También, este conocimiento «demasiado maravilloso» nos mueve a la reverencia, esa que
uno muestra ante aquello que no puede controlar ni entender. El estudiante de teología debe
hablar con temor pesando bien sus palabras; no con ignorancia, ni altivez ⎯ocultando el
consejo sin entendimiento.

Por esta razón, todo estudiante de teología debe reconocer que está entrando en tierra santa
y que debe quitarse el calzado de sus pies. Debe saber que nadie es suficiente para este
propósito; nadie es capaz de tener una visión apropiada del conocimiento de Dios y no ser invadido
por una sensación de pequeñez, limitación e ignorancia.

25
B. La revelación es el fundamento de la teología

«te preguntaré y tú me instruirás» (vers. 4).

Luego del reconocimiento de ignorancia y presunción en sus palabras, Job cambia el tono de
autoconfianza en un clamor por ayuda al Señor. Es como si dijera: «Señor, me he equivocado
tanto en mis razonamientos. Señor, ¡qué necio he sido! Por favor, enséñame lo que debo
hacer».

Este cambio en las palabras y actitud de Job nos muestra un principio fundamental en el
estudio del conocimiento de Dios que tiene que ver con el fundamento mismo de la teología:
la revelación.

La palabra principio [lat. principium] habla de «aquello de lo que procede cualquier cosa de
cualquier manera».21 ¿De dónde procede la teología? Esta es una pregunta importa que ha
generado debate en la historia del cristianismo. A pesar de eso, es primordial que el
estudiante de teología tenga una respuesta apropiada a esta pregunta ya que de ahí se
desprenden todos los asuntos fundamentales sobre los que se construirá su teología.

Según el escolasticismo protestante, la teología tiene dos principios [lat. principia]: la Palabra
de Dios y Dios.22 Dios es la esencia o principio de todas las cosas; y, al mismo tiempo, la forma
de conocer verdaderamente a Dios es a través de Su Palabra. Esta es la razón por la que
algunos tratados teológicos comienzan hablando de Dios y otros, de Su Palabra.

Algunos han dado una respuesta alternativa sumando a estos dos principios a la razón. Su
argumento es que antes de la Palabra de Dios, el hombre puede tener un conocimiento de
Dios que es verdadero (aunque no salvífico) a través de la revelación que Dios ha hecho en
la creación; y, por lo tanto, esta teología natural constituye un preámbulo a la fe y a la Palabra
de Dios. Así, la teología no procede completamente de la Escritura, sino también de la razón
a través de la revelación natural.

¿Cuál es el principio último desde donde todo parte en la teología?

Una respuesta sin ambigüedades

El principio último desde donde todo parte en la teología es la Palabra de Dios. Esa es una respuesta
sin ambigüedades que requiere una explicación. Permíteme hacerlo a través de la explicación
de la pregunta 3 del Catecismo Bautista:

21Richard A. Muller, Dictionary of Latin and Greek Theological Terms: Drawn Principally from Protestant Scholastic
Theology (Grand Rapids, MI: Baker Academic: A Division of Baker Publishing Group, 2017), 289.
22Para distinguirlos los clasifican como principium essendi y principium cognoscendi. Para una
exposición de estos términos, véase Richard A. Muller, Dictionary of Latin and Greek Theological Terms: Drawn
Principally from Protestant Scholastic Theology, 290.

26
P. 3. ¿Cómo podemos saber que hay un Dios?
R. La Luz de la Naturaleza en el hombre y las Obras de Dios declaran lisa y llanamente
que hay un Dios, pero solo Su Palabra y Su Espíritu lo declaran plena y eficazmente
para la Salvación de los Pecadores.

La teología es el estudio de Dios o el conocimiento de Dios. Nuestro conocimiento de Dios


viene a través de dos de dos fuentes, la revelación natural y la revelación especial. La natural
tiene que ver con el conocimiento de Dios revelado en la luz de la naturaleza y en las obras de
Dios (i. e., la creación y la providencia). Este conocimiento de Dios es innato y general, pues
todos los hombres están expuestos a él todo el tiempo y en todos los lugares. Pero, ¿qué
sucede con este conocimiento de Dios? El catecismo nos responde que no es un conocimiento
pleno ni eficaz para la salvación; pero, ¿por qué? Porque aunque esta revelación cumple su
propósito de dejar al hombre sin excusa delante de Dios (Rom. 1:20), es insuficiente para dar
el conocimiento necesario para la salvación. Podemos entender que sea insuficiente porque
la salvación viene únicamente a través de Cristo y sin la revelación especial es imposible
conocer el plan de redención; pero, ¿qué hay de otro tipo de conocimiento sobre Dios (es
decir, Sus atributos, Su gloria y eterno poder, etc.)? La revelación general tampoco puede
ofrecer al hombre un conocimiento general de Dios apropiado pero no porque no pueda, sino
por causa del pecado del hombre.

Por causa del pecado, el hombre no es capaz de receptar apropiadamente la revelación que
recibe de Dios por medio de la naturaleza. La religión natural del hombre (su análisis de las
cosas que ve en la revelación general) está manchada de pecado y es el resultado de su
aborrecimiento natural de Dios; por esta razón, aunque hay una revelación verdadera de
ciertos atributos de Dios a través de las cosas creadas, el hombre las mira a través de sus
lentes perversos y subjetivos. Esta es la razón por la que la razón del hombre natural no
puede producir otra cosa que una religión falsa.23

Esta es la razón por la que es necesario que el estudiante de teología coloque a la Palabra de
Dios como el fundamento de la teología. La Palabra de Dios es la que debe interpretar la
revelación general, pues ella es la que le permite conocer verdaderamente a Dios mostrándole
Sus atributos y el plan de redención decretado desde la eternidad. La Palabra de Dios es el
principium cognoscendi [el principio de conocimiento] sin el cual no podría haber un verdadero
conocimiento de Dios y, por tanto, ningún sistema teológico.24

Las implicaciones de esta respuesta

23 Véase, Richard A. Muller, Dictionary of Latin and Greek Theological Terms: Drawn Principally from Protestant
Scholastic Theology, «theologia naturalis», 363.
24 Muller, Dictionary of Latin and Greek Theological Terms, 288.

27
¿Cuáles son las implicaciones de establecer a la Palabra de Dios como el fundamento de la
Teología? La autoridad y suficiencia de las Escrituras para el conocimiento de Dios. Estas dos
verdades son reveladas en 2 Timoteo 3:14-17.

2 Tim. 3:14−17 14 Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo


de quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las
cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. 16 Toda
la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir,
para instruir en justicia, 17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente
preparado para toda buena obra.

En primer lugar, la Palabra de Dios es la autoridad suprema para el conocimiento de Dios.

Es la fuente autorizada por Dios para dar el conocimiento de Dios al hombre. Esta autoridad
proviene del hecho de haber sido inspirada por Dios y, por lo tanto, inerrante y verdadera
en todo lo que dice.

Este pasaje claramente nos enseña que la Escritura es inspirada por Dios. Este atributo es lo
que hace o habilita a la Escritura como una guía confiable para alcanzar el propósito que Dios
se ha propuesto: que le conozcamos. Las palabras de los hombres ciertamente que pueden
ser muy útiles, pero son falibles, cambiantes y no seguras. Es necesario que un propósito tan
importante, como lo es conocer al Señor y saber cuáles son las cosas que Él demanda de
nosotros, no puede descansar en criterios o consejos relativos, sino que debe ser sostenido en
algo que sea verdadero. Lo que habilita a la Palabra como útil para este propósito es que Dios
mismo se las dio al hombre por medio de una obra sobrenatural en la que capacitó a hombres
falibles para escribirlas sin error, convirtiendo así a la Escritura en un cimiento firme sobre el
cual pueda descansar el cumplimiento de este propósito. La inspiración es lo que hace la
diferencia entre una verdad relativa y la verdad de Dios. La inspiración es lo que habilita a
la Escritura como una herramienta infalible en el cumplimiento de este propósito.

El estudiante debe comenzar su proceso de formación teológica sabiendo que la máxima


autoridad en la vida de un creyente para el conocimiento de Dios (y en todas las demás cosas
de su vida y práctica) es la Palabra de Dios. De ahí la máxima:

Scriptura Sacra locuta, res decisa est [Las Santas Escrituras han hablado, la cuestión
está decidida].

La autoridad suprema de la Palabra en el conocimiento de Dios es contrastada con el esfuerzo


moderno por establecer la razón, la experiencia o cualquier otra cosa como el juez supremo
en los asuntos de fe y práctica.

En segundo lugar, la Palabra de Dios es suficiente para el conocimiento de Dios.

28
La palabra Suficiente es definida por el Diccionario Inglés Oxford como: “{aquello que tiene}
una cualidad, extensión o propósito adecuado para un objetivo o propósito concreto.” 25 Lo que esto
significa es que la Palabra de Dios es completamente hábil para cumplir el propósito que se
ha trazado.

En este pasaje podemos notar el doble propósito de las Escrituras. En el versículo 15


encontramos el primero de ellos, el cual es que las Escrituras pueden hacer sabio para la salvación
por la fe en Cristo Jesús. ¿Cuál es el significado de esta frase? Matthew Henry afirma que “esto
significa, que es una guía segura en nuestro camino hacia la vida eterna.” 26 Al mencionar la
sabiduría o el hecho de que la Palabra de Dios nos puede hacer sabios nos enseña una conexión
importante, y esta es que, la verdadera sabiduría tiene que ver con preocuparse por el alma
y tener la capacidad de mirar más allá de las cosas simplemente terrenales. En otras palabras,
sabios son aquellos que son sabios para la salvación.27 La Escritura es la única que tiene la
capacidad de hacernos sabios para la salvación.

En el versículo 16 y 17 encontramos el segundo propósito de las Escrituras, equipar o capacitar


al hombre de Dios para cumplir sus deberes ante Dios. Es importante notar que, debido a su
contexto ⎯una carta dirigida a Timoteo, el cual era un ministro⎯ estas palabras son escritas
específicamente en el contexto del equipamiento que el hombre de Dios necesita para hacer la
Obra de Dios. Dios se ha propuesto hacer del hombre de Dios alguien perfecto. Otras versiones
lo traducen como cabal o completo; capacitado (RVA, NVI), eficiente, eficaz, preparado (RVR,
DHH, TLA), equipado (LBLA). Esta palabra en el Nuevo Testamento es usada para hablar de
equipamiento o madurez. Se podría definir como estar bien equipado para alguna función.28
Claramente, la implicación de esto es que si el hombre de Dios obtiene de la Escritura todas
las cosas necesarias para estar preparado para cumplir con efectividad su ministerio,
entonces no necesita de nada más fuera de ella, sino de ser entrenado, moldeado y
direccionado por la Palabra.

El estudiante de teología debe abrazarse de la suficiencia de las Escrituras en sus estudios


teológicos. Esta verdad está preciosamente expuesta en la Segunda Confesión Bautista de Fe
de Londres:

1.6 Todo el consejo de Dios concerniente a todas las cosas que son necesarias para Su
propia gloria, la salvación del hombre, la fe y la vida está expresamente escrito o
necesariamente contenido en la Santa Escritura, a la cual no debe añadirse nada en ningún
momento, ni por nueva revelación del Espíritu ni por las tradiciones de los hombres.

25 The Compact Edition of the Oxford English Dictionary, 2 vols. (New York: Oxford University Press, 1971).
26 Henry, Matthew; “Matthew Henry´s Commentary on the whole Bible – New Modern Edition” (Hendrickson
Publisher, Peabody, 1991), pg.682.
27 Ibid.

28 Arndt, W., Danker, F. W., & Bauer, W. (2000). A Greek-English lexicon of the New Testament and other early

Christian literature (3rd ed., p. 136). Chicago: University of Chicago Press.

29
C. El carácter integral de la teología

«He sabido de ti solo de oídas, pero ahora mis ojos te ven. Por eso me retracto, y me
arrepiento en polvo y ceniza» (vers.5)

Las palabras finales del discurso de Job en respuesta a su encuentro con la gloria de Dios se
enfocan en una realidad fundamental en el estudio del conocimiento de Dios que es «el
propósito de todo estudio teológico es siempre práctico y aplicativo».

¿Qué es lo que debe provocar el conocimiento de Dios? ¿Qué viene como resultado de ver la
gloria de Dios y la pequeñez humana? ¡Adoración! La adoración es el resultado de haber
entendido el verdadero sentido de las cosas. La verdadera adoración nunca es superficial ni
meramente cognoscitiva, es una que involucra todo lo que el hombre es: lo lleva a
arrepentirse, a cambiar de dirección o de actitud, lo hace reconsiderar su ideas y planes, lo
quebranta y lo deja en silencio, lo maravilla y renueva sus compromisos espirituales, lo
transforma. El verdadero conocimiento de Dios nunca deja al hombre igual, ¡nadie puede
quedar igual después de contemplar al Señor!

Isa. 6:5 Entonces dije: ¡Ay de mí! Porque perdido estoy, pues soy hombre de labios
inmundos y en medio de un pueblo de labios inmundos habito, porque han visto mis
ojos al Rey, el Señor de los ejércitos.

Luc. 5:8 Al ver esto, Simón Pedro cayó a los pies de Jesús, diciendo: ¡Apártate de mí,
Señor, pues soy hombre pecador!

¿Cuál es la implicación de esta verdad?

El estudiante de teología debe anhelar profundizar más y más en el conocimiento de Dios


por dos razones principales: conocer a Dios y lo que Él demanda del hombre. Al conocer más a
Dios, su mente será sobrecogida por la sensación de la grandeza y gloria de su Señor que lo
llevará a ser más consciente de Su presencia y majestad. Al conocer más sobre lo que Dios
demanda del hombre, su corazón será movido a arrepentirse en «polvo y ceniza» y buscará
caminar cada día más cerca de Él.

Esta es la razón por la que no podemos desprender el conocimiento de Dios ⎯el estudio de
la teología⎯ del escenario en el que Dios lo dio: Su iglesia, la vida en comunidad con el
pueblo de Dios. El divorcio entre la teología y la práctica ha causado un gran problema en el
mundo académico y siempre ha terminado pervirtiendo la esencia misma de la teología:
mover nuestro corazón ⎯a través de una mente afectada por la verdad⎯ a vivir una vida
para la gloria de Dios.

30
II. La Preparación y Presentación de Escritos Teológicos
La segunda parte de nuestra clase tiene un carácter teórico-práctico y tiene el propósito de
ayudar al estudiante de teología a contestar cinco preguntas fundamentales con respecto a la
preparación y presentación de sus escritos teológicos.

Nuestro bosquejo será el siguiente:

1. ¿Qué debo saber sobre los escritos teológicos?


2. ¿Qué es una investigación?
3. ¿Cómo definir un proyecto de investigación?
4. ¿Cuáles son las diferentes fuentes de una investigación?
5. ¿Cómo debo presentar mis trabajos escritos?

1. ¿Qué debo saber sobre los escritos teológicos?


Para comenzar hay algunas cosas que debemos saber sobre los escritos teológicos.

A. Su Identidad

a. Reseña – es una crítica/análisis de un texto. Debe contener dos partes. Primero, un


resumen del libro, el cual debe tener una extensión máxima de 2500 palabras.
Segundo, una opinión personal del libro. Señalar aspectos positivos, negativos, si lo
recomendaría, que aportes tiene el libro a la materia, etc.

b. Ensayo (trabajo escrito original de investigación) – Se espera que el alumno


profundice en alguno de los aspectos de la materia que se trabajó. Debe tener una
extensión de cuerpo del trabajo de mínimo 5 páginas y máximo 10. Lo que se busca
evaluar es profundidad y originalidad. Debe tener fuentes bibliográficas (mínimo tres
o cuatro), el 80% del documento debe ser original, pero debe contener citas (anotadas
al pie de página) y debe tener análisis de textos bíblicos.

c. Redacción de un Sermón – Lo que se espera del estudiante es que escrita todo el


contenido de un sermón siguiendo estrictamente las normas homiléticas. El trabajo
debe tener: a. Título del Sermón, b. Texto Bíblico, c. Tema (es la ampliación del título
para dejar en claro el contenido del Sermón), d. Propósito (el propósito del predicar al
compartir este sermón), e. Introducción, f. Proposición (también conocida como
Oración de Transición – Es el hilo del sermón que conecta cada uno de los puntos), g.
Desarrollo de los puntos del Sermón (deben ser mínimo 3 máximo 5 – Cada punto
debe explicar, ilustrar y aplicar – Los puntos deben contestar lo planteado en el título y
en la proposición; deben estar interrelacionados; deben ser progresivos), h.
Conclusión.

31
d. Tesis – Se espera del estudiante un estudio original de algún tema que contenga
todas las herramientas aprendidas, a saber: investigación en fuentes sólidas,
exposición de textos, doctrinas, historia de la Iglesia, principios homiléticos para la
presentación del escrito, etc. Debe tener una extensión de mínimo 30 y máximo 40
páginas de contenido.

B. Su necesidad

a. Son una forma de evaluación apropiada.

b. Son una forma de aprender y crecer.

C. Sus Demandas

a. Conocimiento – Una investigación apropiada. El error de indagar en lo que ya


conocemos nos aleja de unos de los beneficios más grandes de un trabajo escrito:
ayudarnos a pensar y a crecer en nuestro entendimiento de un tema. Un trabajo escrito
demanda una búsqueda de conocimiento esforzada: lectura e investigación.

b. Compromiso – Los buenos trabajo no se escriben en una noche, son el resultado de


un trabajo comprometido que demanda seguimiento y perseverancia.

c. Claridad – Los trabajos prácticos deben ser producto de la reflexión del estudiante.
Tener muchas páginas en un trabajo no significa excelencia. El propósito de un trabajo
escrito ya sea este un ensayo o una crítica tiene el propósito de comunicar o proponer
algo. Una de las falencias comunes es la falta de claridad en las ideas. Esto dificulta no
solo la investigación en un trabajo escrito, sino también su presentación.

d. Consistencia – Tanto las frases como los párrafos y los capítulos (o partes) deben
estar encadenados de modo lógico y armónico. Es recomendable también que los
capítulos (o partes) guarden alguna simetría en su estructura y dimensión.

e. Creatividad – Aunque no se pretende motivar al estudiante de teología a tener un


espíritu innovador (porque si algo es nuevo, no es verdad; y si algo es verdad, no es
nuevo), sin embargo, se debe cultivar la creatividad en la forma de presentar, analizar
y desarrollar el tema que se está investigando.

f. Consagración – El estudiante debe tener integridad al momento de realizar sus


trabajos prácticos. Aunque la ética es siempre un aspecto fundamental en la formación
de hombres en cualquier área del conocimiento, esta se convierte en un aspecto
indispensable en la misión de preparar hombres en la Palabra de Dios para la Obra de
Dios. Sinónimos: Honorabilidad, honestidad, sinceridad e integridad.

32
2. ¿QUÉ ES UNA INVESTIGACIÓN?
Introducción

Estoy muy de acuerdo contigo en que la frase “los tiempos han cambiado” ha sido objeto de
tanto abuso y repetición que naturalmente nos resistimos a ella; sin embargo, hay momentos
específicos en los que su veracidad sale a flote con mucha claridad. Iniciar una clase sobre
Investigación es uno de ellos. ¡Los tiempos han cambiado! Piensa en esto. Hace solo unos
años atrás, los profesores tenían la inmensa responsabilidad de informar la mente de sus
estudiantes sobre cómo interpretar el mundo a través de datos y fórmulas. Hoy, los
profesores de cualquier asignatura se siente cada vez más intimidados al momento de
expresar algo o afirmarlo, porque inmediatamente después de decirlo, un grupo de sus
“inquietos” e “informados” estudiantes lo evaluarán a la luz de lo que diga Google o
Wikipedia. La tecnología y la accesibilidad han cambiado la investigación para siempre. Con
un solo click somos capaces de ir a lugares y documentos que muchos de nuestros profesores
solo habían escuchado que existían. Sin embargo, a pesar de estar en la generación Google29,
pareciera que la práctica de la verdadera investigación comienza a desaparecer, tomando su
lugar una de “hobbie” que sabe de todo, pero no lo sabe con certeza. La investigación en la
que nos enfocaremos en esta clase no es la contemporánea y básica que todos hacemos a
través de nuestro teléfono, sino la científica y metodológica que obliga al estudiante a la
responsabilidad, a la disciplina y a la evaluación.

Desarrollaremos esta clase en dos encabezados principales: I. Dando Una Mirada Panorámica
⎯ en donde evaluaremos los aspectos generales de la investigación, a saber: su definición,
beneficios y meta principal); y, II. Buscando Un Enfoque Más Específico ⎯ en donde
consideraremos los movimientos de la investigación y la forma práctica de aplicarlo.

I. Dando Una Mirada Panorámica

A. Investigación: Su Definición

La investigación ha sido y es una parte muy importante de nuestras vidas prácticas. En un


sentido general, una investigación es tanto lo que hace un niño que recorre una habitación
en la que nunca antes ha estado tratando de buscar algunas respuestas sencillas de su
curiosidad, así como el trabajo científico de un académico que ha invertido muchas horas en
un laboratorio o biblioteca. Por esa razón, hablando en un sentido muy general, una

29No puedo dejar de mencionar aquí algo que viene a mi mente al reflexionar en esto. Así como la ignorancia
es peligrosa, la información sin responsabilidad también lo es. En vez de embellecer el alma y humillarse por la
bondad recibida (muy superior en muchos sentidos a lo que otros recibieron en sus generaciones), esta juventud
ha pervertido su alma en la arrogancia y la falta de disposición para aprender. Es oportuno recordar que la
información sin humildad y sin disposición de aprender es un desperdicio y un cuadro horrendo de despilfarro.
Sigue habiendo esperanza a los pies de la cruz, en donde la sabiduría del mundo es destruida por el evangelio
de la gracia, que es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree.

33
investigación es “dar respuesta a una pregunta a través de obtener información”.30 Sin embargo,
en nuestro estudio, la definición de investigación es más específica y podríamos presentarla
de la siguiente manera:

La investigación es un proceso sistemático de búsqueda con el propósito de responder


un asunto que no solo busca ser resuelto por el investigador, sino por otras personas
también.31

De esta breve definición podemos sacar las siguientes conclusiones:

(1) La investigación debe ser vista como un proceso sistemático, lo cual demanda una planeación
formal; esto es, la consideración de pasos y etapas detalladas con el propósito de hacer una
indagación satisfactoria y productiva.

(2) Debido a que el objeto de la investigación es una duda que otros están interesados en
responder también, un verdadero investigador debe compartir sus descubrimientos y
conclusiones con otros, lo cual demuestra que el proceso de investigación no solo incluye
descubrir aspectos importantes sobre un asunto en particular, sino también la presentación de
conclusiones al respecto.

Entonces, la investigación es un proceso sistemático de búsqueda que requiere una planeación


formal y que concluye con la presentación de conclusiones por parte del investigador.

B. Investigación: Sus Beneficios

Una de las motivaciones más grandes para hacer algo es pensar en la utilidad que tendrá
para nosotros o para otros. Por ejemplo, es una excelente motivación para una tarea o trabajo
escrito en una de nuestras clases el que pensemos que en algún momento podremos usarlo
para una clase de escuela dominical o una predicación en nuestra iglesia. De la misma
manera, no hay nada que traiga más desánimo al corazón que tener la terea de hacer algo
que pensamos que no tendrá ningún valor o utilidad real. Este es uno de los asuntos cruciales
al momento de considerar la investigación y la expresión escrita de nuestros hallazgos y
conclusiones. La pregunta fundamental que ha detenido mucho de nuestro
desenvolvimiento como investigadores y escritores es: ¿qué podría mi pequeña investigación
añadir al inmenso mundo del conocimiento?

(1) Una investigación bien hecha añade mucho a tu habilidad de investigar. Al igual que en
muchos otros campos, la única manera de aprender a investigar es haciéndolo. Aun los
mejores investigadores, un día fueron investigadores inexpertos que llegaron a perfeccionar
sus habilidades a través de la práctica y el esfuerzo. El estudiante debe procurar una
disciplina esforzada sostenida por la esperanza. Cuando se realiza una investigación

30 Turabian. Kate L.; “A Manual for Writers of Research Papers, Theses, and Dissertations” 9th Edition (Chicago,
IL; The University of Chicago Press, 2018), pg.5.
31 Ibid.

34
adecuadamente, abrimos la puerta a un nuevo mundo, uno que nunca se acaba y es imposible
de conocerlo completamente. Un autor te lleva a otro, un libro te conecta con otro, un
momento de la historia te obliga a buscar sobre otro, y así sucesivamente. Mientras más
investigamos, nuestra habilidad mejora.

(2) Una investigación bien hecha añade mucho a tu conocimiento y habilidad para
comunicar tu conocimiento. Uno de los beneficios más grandes y, al mismo tiempo, más
evidentes al investigar es que tu conocimiento crece. Mientras más investigas, tu mente
conocerá más fuentes fuentes y conexiones que te servirán para no perderte del camino. Pero
esto no es lo único. De la misma manera en que la lectura sirve para aprender de otros como
escribir, la investigación añade a tu habilidad para comunicar tus ideas a otros. Cuando
tomas el trabajo de alguien más y examinas las fuentes de su investigación, la forma de
argumentar a favor de su tesis y la estructura general que utilizó para la presentación de los
resultados de su investigación, tu aprendes. No necesariamente tienes que estar de acuerdo
con sus resultados para asombrarte de sus razonamientos y la hermosa coherencia de su
presentación. Este paso va mucho más allá de una simple lectura, es considerar al autor como
un igual que utilizó su razonamiento y sus habilidades para cumplir con la responsabilidad
que se propuso en su trabajo. Esta visión más “humanizada” del autor es lo que hace la
diferencia entre un lector y un investigador. El lector tiende a poner al autor en una condición
lejana y superior y, por esta razón, no ve en él a un modelo de algo “reproducible”, sino un
fenómeno irrepetible al que se debe admirar. El investigador, sin dejar de exaltar la
genialidad de un autor, la contempla desde un campo de imitación, como un modelo del que
se puede aprender. Un estudiante de teología debe leer y estudiar desde el campo de la
investigación.

(3) Una investigación bien hecha añade mucho a tu habilidad de utilizar y juzgar el trabajo
de otros. Naturalmente, mientras más se investiga más crece nuestro conocimiento, el cual
nos da las herramientas necesarias para juzgar de una manera más adecuada los trabajos
escritos que estemos considerando. Si lo único que conoces sobre un tema es el trabajo escrito
que tienes en tus manos, es casi imposible tener un criterio apropiado sobre el valor de ese
trabajo; pero cuando has investigado más trabajos sobre el mismo tema, tu capacidad de
juzgar será mayor y más precisa. En la práctica, este es un error muy común en el contexto
teológico. Cuando descubrimos un autor o teólogo que admiramos, nuestra tendencia es a
tomar todo lo que viene con él. Este “matrimonio” teológico sumado a la falta de
investigación hace que nuestro juicio de valor sea tan pequeño que no somos capaces de
evaluar apropiadamente, sencillamente porque no tenemos contra qué compararlo. Hay una
ecuación inequívoca en lo que respecta a eso: El que menos sabe (consecuencia de que
investiga menos) es más intolerante y tendrá menos compasión por los demás. El que más
sabe (consecuencia de que investiga más) trata con gracia la imprecisión de otros mientras
sostiene con firmeza sus convicciones. Mientras más sabemos, nuestro criterio es más preciso

35
y más realista. Bien se ha dicho que este es un trabajo que uno hace mejor después de que
aprendemos como otros juzgan nuestro trabajo.32

(4) Una investigación bien hecha es de mucha ayuda para otras personas. Aunque he
mencionado todos los beneficios que inevitablemente traerá el desarrollar una investigación
bien hecha, no podemos dejar de lado una de la metas principales de la investigación la cual
es ayudar a otras personas. Debido a la gran carencia de este tipo de investigación en nuestro
contorno, la probabilidad de que tu investigación sea de ayuda para otras personas es muy
alta. Quiero grabar este principio en tu mente y quiero motivarte a que lo consideres
seriamente. Esta clase tiene el propósito de darte las herramientas básicas que necesitas para
que esto sea una realidad en tus estudios teológicos. Escribe pensando que hay muchos otros
anhelando saber la respuesta que acabas de encontrar, por eso debes hacerlo bien. Escribe
confiando en que si eres fiel a la Escritura, a pesar de ti, Dios utilizará tu insignificante aporte
para la gloria de Su nombre y la edificación de Su iglesia.

Salmo 90:16-17 [LBLA] Manifiéstese tu obra a tus siervos, y tu majestad a sus hijos, y
sea la gracia del Señor nuestro Dios sobre nosotros. Confirma, pues, sobre nosotros la obra
de nuestras manos; sí, la obra de nuestras manos confirma. énfasis añadido

C. Investigación: Su Meta

¿Cuál es la meta de una investigación? Presentar una tesis clara que pueda ser fácilmente
demostrada al seguir el orden de nuestros argumentos, los cuales deben estar sólidamente
defendidos. O, dicho en otras palabras:

Tus lectores deben ser capaces de seguir tu razonamiento desde la evidencia que ellos
aceptan [como válida] hasta la afirmación que haces a partir de ella. Entonces, tu éxito
como investigador no dependen solamente sobre lo bien que juntaste y analizaste la
información, sino también sobre que tan claramente reportas tu razonamiento de
manera que tus lectores pueden probarlo y juzgarlo antes de que hagan de tus
afirmaciones una parte de su conocimiento y entendimiento.33

Más adelante buscaremos contestar las preguntas relacionadas a cómo alcanzar esta meta, por
ahora es suficiente entender que la meta de nuestra investigación es guiar a otros a ver las
cosas desde nuestra perspectiva exponiéndolos a los argumentos que nos llevaron a nosotros
mismos a esa conclusión.

II. Buscando Un Enfoque Más Específico

Ahora es tiempo de considerar más específicamente algunas de los aspecto de la


investigación.

32 Turabian; pg. 6
33 Ibid.

36
A. Los Movimientos de la Investigación: Su Descripción

El campo para investigar es tan amplio que se requiere más que simplemente una búsqueda
de información, se requiere saber qué es lo que se está buscando. Debido a esta realidad, un
proceso efectivo de investigación nunca es rígido, sino que tiene movimiento. Empieza con
el cuadro de un gran campo lleno de miles de flores y plantas, y se mueve hacia un tipo
específico de flor, en un lugar específico de este campo. Si pudiéramos ilustrarlo, este
movimiento sería el de una circunferencia que se mueve de afuera hacia “adentro”. Para
hablar de una manera más específica sobre la investigación, necesitamos entender este
movimiento, el cual tiene dos sentidos: de lo general a lo específico, y de lo personal a lo colectivo.

De lo general a lo específico

Ignorar este movimiento es uno de los grandes errores en el campo de la investigación. Una
investigación que no se enfoca en lo específico está destinada a la ambigüedad y a la
inefectividad. Por definición, la investigación tiene el propósito de contestar una pregunta
que surge en la mente del investigador, lo cual implica que hay un asunto específico que debe
ser resuelto. Lo general es necesario para entender el marco de referencia en donde se
encuentra el asunto a ser investigado, pero siempre debe moverse hacia lo específico. En la
mente del investigador esto debe ser una regla inquebrantable. Entre los trabajos escritos
requeridos por un seminario o instituto bíblico es común encontrar que cuando se asigna un
trabajo sobre los Atributos de Dios, los estudiantes nunca salen de lo general. Por esta razón,
sus trabajos nunca llegan a ser más que una repetición escrita de lo que ya conocían. Sus
trabajos nunca representan un desafío o una oportunidad para profundizar por la sencilla
razón de que hay tanto en ese campo que lo mejor que se puede hacer es dejarlo como una
foto panorámica sin detalles ni relieves. El que quiere aprender y anhela ver la investigación
como una oportunidad de crecimiento, debe pasar de la foto panorámica a los relieves y

37
detalles que solo pueden ser vistos cuando te acercas lo suficiente y consideras cosas
específicas.

De lo personal a lo colectivo

Hay un segundo sentido en el movimiento de la investigación, el cual ⎯de la misma forma


que el que acabamos de considerar⎯ debe estar en la mente de un investigador. Este
movimiento va de lo personal a lo colectivo. Como mencionamos al principio, todos
empezamos una investigación con el deseo de contestar una pregunta, sin embargo, una
investigación en el sentido completo de la palabra implica una pregunta que va más allá de
la inquietud del investigador y se convierte en una inquietud colectiva. Un investigador que
pretende hacer una aportación siempre debe considerar esto en su mente al momento de
buscar el enfoque principal de su investigación. Uno de los patrones repetidos en algunas de
las introducciones de libros que han llegado a ser importantes, es que éstos surgieron de la
motivación de lectores o personas que escucharon una serie de sermones o enseñanzas y le
pidieron a su autor que lo pusiera por escrito por causa del beneficio que podría traer para
otros. Normalmente una predicación elaborada con mucho amor y esfuerzo movido por la
necesidad de una iglesia local específica, se convierten en algo que trae mucho beneficio para
otras iglesias locales. Todo pastor−teólogo requiere una mente que va de lo personal a lo
colectivo.

B. Los Movimientos de la Investigación: Su Aplicación

En un sentido práctico, ¿cómo interactúan estos movimientos dentro de la investigación?


Para entenderlo apropiadamente necesitamos verlo en forma de tres pasos o niveles que nos
llevan de lo general/personal a lo específico/colectivo, desde el nivel 3 (círculo periférico)
pasando por el nivel 2 (círculo mediano) hacia el nivel 1 (centro de la investigación).

a. El Tema, b. La Pregunta, y c. La Importancia.

Estoy trabajando en X (el tema)


porque quiero descubrir Y (la pregunta)
porque así puedo ayudar a otros a entender Z (la importancia)34

34 Esquema presentado por Turabian, pg. 6.

38
Ejemplos:

X ⎯ Tema: El Confesionalismo
Y ⎯ Pregunta: ¿Cuáles son las razones por las que las iglesia bíblicas han abrazado el
confesionalismo a lo largo de la historia?
Z ⎯ Importancia: El impacto directo y los beneficios de una Confesión de Fe en una
iglesia local. (“Razones por las que tu iglesia debería tener una confesión de fe”)

X ⎯ Tema: Métodos de Evangelismo


Y ⎯ Pregunta: ¿En qué momento de la historia se comenzaron a utilizar los métodos
no−bíblicos que actualmente se enseñan como parte del Evangelismo?
Z ⎯ Importancia: La mayor necesidad de una iglesia bíblica es volver al Evangelio
bíblico, porque el evangelio deficiente y artificial que heredamos es la raíz de la
problemática en la cultura cristiana contemporánea: iglesias antropocéntricas,
alabanza de entretenimiento, programación informal, dinámica e interactiva,
ambigüedad en la predicación, el inclusivismo pecaminoso, etc.

Ahora, tomando estos ejemplos, hagamos una descripción de cada una de estas etapas:

3era Etapa: TEMA ⎯ “Estoy trabajando en X…”: Es muy común para el investigador
inexperto fracasar en esta etapa quedándose en ella y haciendo del enfoque de su
investigación uno tan amplio que deja al lector o a quien lo escucha con un sentido de
incertidumbre. Tomemos nuestro ejemplo #1: El Confesionalismo. Este tema es como una casa
inmensa que tiene muchas habitaciones. Si te quedas en esta etapa te sucederá lo mismo que
cuando uno mira una casa preciosa desde la calle; somos capaces de apreciar su belleza,

39
grandeza y arquitectura; pero, aunque en un sentido tenemos toda la casa delante de
nosotros, realmente no sabemos nada de ella. La razón por la cual esta etapa es fundamental
es porque constituye el marco de referencia o terreno sobre el que estableceremos nuestra
investigación. Para llegar a resolver la pregunta que tenemos, necesitamos meternos en el
contexto en el que ella está. Esta etapa no es donde debemos enfocar nuestra investigación,
sino donde debemos empezarla.

2da Etapa: PREGUNTA ⎯ “porque quiero descubrir Y…”: Aunque algunos empiezan su
investigación desde una pregunta clave que quieren resolver, hemos puesto la pregunta clave
como la segunda etapa en el proceso de investigación. La pregunta clave es lo que guiará al
investigador a saber cual es la información que debe guardar y cual no, así como qué puertas
tiene que abrir y que partes de la casa tiene que recorrer y que partes no (usando nuestra
ilustración de la casa otra vez). La pregunta clave se levanta en el contexto del tema en el que
se está investigando y tiene la característica de que es de interés colectivo. En nuestro
ejemplo, la pregunta es: ¿Cuáles son las razones por las que las iglesia bíblicas han abrazado el
confesionalismo a lo largo de la historia? Esta pregunta apela a la historia y trata de buscar
razones concretas, lo cual dibuja un camino claro para el investigador con respecto a lo que
debe buscar y donde debe buscarlo. En su trabajo, el investigador tiene la responsabilidad de
probar sus conclusiones con evidencia histórica correctamente citada y presentada, de
manera que el lector tenga la oportunidad de considerarla y, si ese fuera el caso, ser
convencido por el peso de la evidencia.

1era Etapa: IMPORTANCIA ⎯ “porque así puedo ayudar a otros a entender Z…”: Un
investigador precavido sabe que sus lectores no solo quieren encontrar un argumento sólido
que demuestre lo que se está planteando, sino que pueda responder la pregunta: ¿y qué con
eso? Es decir, ¿cuál es la importancia práctica para mi vida el que se haya demostrado eso?
En nuestro ejemplo, el razonamiento sería: ¿cuál es la importancia práctica para mi vida el
que hayamos encontrado las razones por las que las iglesia bíblicas han abrazado el
confesionalismo a lo largo de la historia? ¡Los lectores requieren una respuesta a esta
pregunta! Uno puede comenzar su investigación haciendo esta pregunta, pero no puede
terminar su trabajo sin darle una respuesta concreta y práctica. En nuestro caso, la respuesta
sería esta: El impacto directo y los beneficios de una Confesión de Fe en una iglesia local. El
razonamiento sería algo así: “Si los creyentes han luchado en la historia con las mismas cosas
con las que hoy luchamos en nuestras iglesias (falsos maestros, olvido de la doctrina,
desbalances pecaminosos, etc.), sus razones para abrazar el confesionalismo deberían ser las
mismas que nos lleven a nosotros a considerar su importancia y beneficios para nuestras
iglesias hoy”. Sabiamente sea ha dicho que: “tu respuesta al ¿y que con eso?, es lo que hace
que tu investigación tenga importancia para otros”.35

35 Turabian, pg.7.

40
3. ¿Cómo definir un proyecto de investigación?
Introducción

Una de las cosas más importantes en la investigación es definir el proyecto en el que vamos a
trabajar. Mientras uno es estudiante, este asunto puede ser muy sencillo porque los
profesores nos orientan en la definición y elaboración de los proyectos que tenemos que
desarrollar en nuestra preparación académica. Sin embargo, la importancia de aprender bien
todos estos principios tiene que ver con que la investigación y la producción de escritos debe
ser parte constante de la vida de un estudiante de teología, que empieza cuando inician sus
estudios teológicos, pero nunca termina. La falencia en saber escoger un proyecto no solo te
lleva a ser infructífero en tu investigación, sino que puede frustrarte y causar un desanimo
constante en tu responsabilidad de hacerlo. En esta clase, daremos una mirada mucho más
cercana y práctica al cómo de las cosas que hemos considerado al analizar lo que es una
investigación.

Antes de comenzar, permíteme ilustrarte la forma en la que consideraremos este tema. Dios
nos ha regalado un país lleno de maravillas de la creación provenientes de Su poderosa
mano. Entre ellas, la hermosa cadena de montañas que atraviesan nuestro país de norte a sur.
El Chimborazo, uno de los símbolos más representativos de nuestro país, es el volcán y la
montaña más alta en el Ecuador, y el punto más alejado del centro de la Tierra. Sus 6263,47
msnm, hacen de esta montaña un atractivo para andinistas de todas partes del mundo que
vienen a conocerlo con el propósito de conquistar su cima. Una de las cosas interesantes con
respecto a este tipo de montañas es la construcción de refugios a cierta altitud como una ayuda
fundamental para todos aquellos que las visitan. Son construidos con el propósito de brindar
alimentos, bebidas calientes y un lugar de descanso para que los visitantes. En el campo de
la investigación, podemos comparar al investigador con un andinista que tiene un gran
desafío por delante para lo cual necesita establecer una ruta que está marcada con refugios en
los que tiene que descansar sus pasos a medida que avanza. El investigador necesita
establecer su ruta de tal manera que tenga claridad sobre cada uno de los pasos que tiene que
dar. Si fuera posible, el camino debería ser establecido como una línea recta que lo lleve a su
destino, sin embargo, así como cuando uno escala una montaña, el proceso de investigación
nunca es “una línea recta”. A medida que se avanza uno es movido a seguir diferentes
caminos y curvas; y, a pesar de no poder ir en línea recta, el investigador necesita volver a
encontrar el camino al mirar los refugios hacia los que tiene que caminar, los cuales son el
sendero que lo lleva a la meta. En esta clase analizaremos la ruta del investigador hacia la
elaboración de su proyecto de investigación, a través de la ayuda de cuatro refugios que
servirán como una guía de su camino y un lugar seguro en el cual descansar. El no perder de
vista estos refugios nos ayudará a sumergirnos en la inmensa caminata a través de la
montaña sin perder nuestro camino hacia la meta.

41
La Ruta del Investigador:

Primer Refugio – Encontrando el Tema


Segundo Refugio – Buscando la Importancia
Tercer Refugio – Estableciendo la Hipótesis
Cuarto Refugio – Organizando la Estructura

PRIMER REFUGIO – ENCONTRAR EL TEMA

Cuando consideramos los movimientos de la investigación, vimos que para elaborar


correctamente el enfoque en una investigación es necesario tener que encaminar nuestras
ideas en forma de tres pasos o niveles que nos llevan de lo general/personal a lo
específico/colectivo. El esquema que utilizamos fue:

Estoy trabajando en X (el tema)


porque quiero descubrir Y (la pregunta)
porque así puedo ayudar a otros a entender Z (la importancia)36

Al utilizarlo, podemos centrarnos en un asunto específico sobre el que haremos nuestra


investigación conectándolo con el gran cuadro de referencia (tema) en el cual este se
desenvuelve, por causa de una pregunta que necesitamos responder para nuestro beneficio
y el de otras personas y, todo esto, debido de la importancia que este tiene. En este primer
refugio profundizaremos en el tema (X) y la pregunta (Y), y en el refugio siguiente trataremos
la importancia (Z).

Encontrar un tema o asunto específico es el punto más importante de una investigación, es


el punto de partida. Como ya hemos advertido antes, el error más común y que produce más
frustración al momento de hacer una investigación es uno tener un tema específico en el cual
enfocarnos. Un enfoque general te lleva a tener una mirada panorámica carente de
profundidad. Si no sabes qué quieres saber, nunca encontrarás el cómo saberlo, ni dónde
buscarlo. Nunca encontrarás lo que estás buscando, si no sabes lo que buscas. Consideremos
tres cosas fundamentales que debemos conocer al buscar el tema o asunto específico sobre el
que haremos nuestra investigación.

A. Su Diversidad Natural – “diferentes maneras”

La primera cosa que debemos saber es que no existe una sola manera de encontrar el asunto
específico sobre el cual investigaremos. En primer lugar, esto se debe a que somos distintos y
nuestras ideas se conectan y mueven de maneras diferentes. En segundo lugar, se debe a que
no todas las investigaciones nacen bajo las mismas circunstancias, pues algunas nacen de
forma natural y otras por responsabilidades recibidas. Entre las diferentes formas, la más
común es encontrar un tema por preguntas que queremos contestar de cosas que encontramos

36 Ver clase: ¿Qué es una Investigación?

42
en nuestra vida. Otra forma es por simple curiosidad. Otros, teniendo ya un tema general
escogido, lo encuentran al hacerle preguntas importantes a su tema general, lo cual los lleva a
asuntos más específicos. En el campo de la investigación teológica, cada una de estas formas
tiene su lugar. Hay momentos en los que un pastor−teólogo naturalmente se encuentra con
cosas que tiene que descubrir por causa de su propia necesidad o la de su congregación. Pero,
hay otras ocasiones en los que el deber nos impone la responsabilidad de investigar sobre
cosas que tenemos que enfrentar y encontrar una respuesta bíblica para ellas −por ejemplo,
movimientos dentro de las iglesias como el evangelio de la prosperidad, el carismatismo, el
movimiento de la justicia social, etc.−.

B. Su Elemento Indispensable – Desarrollar una mente que busca respuestas.

El elemento indispensable en la búsqueda de un tema específico para nuestra investigación


es el desarrollo de una mente que busca respuestas. Nosotros, por naturaleza, tendemos a
acostumbrarnos a lo que vemos. ¿No te ha pasado que cuando vas a otros lugares de visita
la gente que vive allí no se maravilla de las cosas asombrosas que tienen porque están
acostumbradas a ellas? Cuando voy al mar, no puede dejar de verlo o escucharlo y trato de
no perderme el atardecer o el amanecer de los días que estoy ahí. Sin embargo, las personas
que viven allí están tan acostumbradas que ya ni siquiera notan su majestuosidad (estoy
seguro de que eso le pasa a otros cuando vienen a nuestra ciudad y ven la vegetación y las
montañas que nos rodean). Somos propensos a acostumbrarnos, a perder la capacidad de
reflexión y de maravillarnos con las cosas que hay a nuestro alrededor. En la vida de la
investigación también es así. ¿Quiénes son los que investigan? Los que se toman el tiempo
de contemplar el mundo (en todos sus ámbitos) y se preguntan por qué es así, por qué las
cosas funcionan así y quien las ordenó de esa manera. No en vano hemos notado que una de
las etapas de mayor aprendizaje de la vida de un niño es cuando comienzan los “¿por qué?”.
Quieren saber cómo funciona todo y por qué es así. De alguna manera, esa etapa de ¿por qué?
nunca termina en la vida de una persona, pero a medida que comenzamos a crecer
comienzan a ser remplazados por los “porque sí”. La mente de un investigador requiere
volver a agudizar los ¿por qué? de manera que pueda buscar respuestas a preguntas
específicas. Por lo tanto, en ese sentido, el investigador no tiene una mente pasiva que se
acostumbra a respuestas simples, sino una que vive inquieta buscando respuestas a sus
interrogantes.

C. Su Manera Práctica:

Ahora, consideremos algunas ayudas prácticas que nos servirán en la búsqueda de un tema
específico sobre el cual enfocar nuestra investigación.

43
1. Haz la búsqueda en base a tus intereses37

Aun cuando la investigación sea una responsabilidad asignada (como en el caso de un deber
del seminario o escuela teológica), por el hecho de que tendrás una relación de larga duración
con tu tema, es necesario que lo busques en base a tus intereses. Hay momentos donde la
investigación se hace lenta e incluso difícil de sobrellevar por diferentes motivos –i.e.
demasiadas postergaciones, no encuentras lo que estás buscando, o simplemente
aburrimiento–; cuando eso sucede, lo único que salvará esa “relación” es el hecho de que
estás interesado en tu tema. Las siguientes preguntas pueden ayudarte a hacer una búsqueda
en base a tus intereses:

− ¿Cuáles son las cosas que más te interesan?


− ¿Cuáles son los temas de discusión que más te llaman la atención en las redes sociales
o en foros?
− ¿Has tomado una posición con respecto a una controversia con otras personas que
crees que no tienes los argumentos necesarios o buenas razones para defenderla?
− ¿Cuáles son aquellas convicciones que tienes que crees que están siendo mal
interpretadas por los que no las tienen?
− ¿Hay algo que hayas leído que te causa intriga?
− De todos los libros que tienes en tu biblioteca, ¿de qué tratan la mayoría?

Después de haber encontrado temas de tu interés, debes escoger lo más prominentes (pueden
ser dos o tres) con el propósito de ver su potencial de investigación, es decir: que tan amplio
es el tema y que tantos recursos tienes a tu disposición.

Con el propósito de ver este potencial puedes buscar libros que muestran los temas y
subtemas del campo que escogiste. La idea es tratar de tener una visión panorámica para
focalizarte en algún punto específico que llame tu atención. Es decir, buscar el asunto más
interesante del tema más interesante para ti. En nuestro contexto de investigación teológica,
un buen punto de referencia para esta visión panorámica es una teología sistemática. Por
ejemplo, si el asunto que más te llama la atención es la Eclesiología, es clave que antes de
escoger un tema específico tengas una visión panorámica de toda la Eclesiología. Con la
ayuda de algunas teologías sistemáticas puede tener una visión bastante precisa de todo este
campo de estudio. Desde esta perspectiva, puedes notar que tan vasto es el campo; cuales
son sus subtemas, las controversias y las partes claves. Haciendo esta investigación
preliminar es que tu mente podrá contemplar áreas de esta rama que nunca antes habrías
considerado.

Este punto es mi desarrollo, ampliación y aplicación al campo de la teología del punto 2.1.1 de Turabian,
37

pg.12.

44
Finalmente, es muy recomendable que puedas considerar lo que otros han escrito y aportado
en esta área. Esto se puede a través de internet o buscando en las revistas especializadas sobre
el tema. Esto puede ser una excelente forma de abrir los ojos a nuevas posibilidades y temas.

Considera el siguiente ejemplo:

Título: COMUNIÓN EN LA CENA DEL SEÑOR – 1 Corintios 10:16 en su Contexto


Exegético y Confesional
Autor: Richard C. Barcellos38

Este es un artículo escrito por el Dr. Barcellos para la Revista del Instituto de Estudios Bautistas
Reformados del año 2014. Al igual que los otros artículos que se encuentran en revistas
teológicas como estás, este artículo parte de un tema general y se enfoca en algo específico.
Su título es la “Comunión en la Cena del Señor”, el cual parte de un tema general y se enfoca
en algo específico capaz de ser tratado en un escrito de casi 20 páginas. La Cena del Señor es
parte de los Medios de Gracia los cuales están conectados con la Teología del Pacto y su
aplicación práctica es parte de la Eclesiología. El asunto de la Comunión con el Señor en
(durante/a través) de la Cena del Señor ha sido un tema inmensamente polémico que causa
fragmentaciones aun en los reformadores. El catolicismo romano se dice que la comunión
con el Señor en la Cena es una comunión física, pues el vino y el pan se convierten en la
sangre y cuerpo del Señor, de manera que quien come del pan y bebe del vino tiene una
comunión real con el Señor. Ante la necesidad fundamental de entender la Cena como una
conexión real de comunión con el Señor, los Luteranos enseñaron que en la Cena, aunque el
cuerpo y la sangre no estaban físicamente presente, ésta seguía siendo una comunión real
con el Señor porque sus cuerpo se encontraba presente en un sentido espiritual. Los
reformados de la línea de Zwinglio rechazaron la postura de Lutero por causa de seguir
afirmando que el sacrificio de Cristo, aun cuando se diga que es de forma espiritual o mística,
se seguía efectuando y eso contradecía completamente la enseñanza de que ese sacrificio fue
hecho “una vez y para siempre”. Por lo tanto, la pregunta es: ¿Existe una comunión
verdadera con el Señor cuando celebramos la Cena del Señor o es simplemente un
recordatorio de nuestra parte? El Dr. Barcellos enfoca su investigación en la interpretación
de 1 Corintios 10:16 desde una perspectiva exegética y confesional con el propósito de
demostrar que − aunque ningún sacrificio se está realizando al celebrar la Cena del Señor (ni
espiritual ni físicamente) − existe una comunión verdadera con el Señor durante la Cena del
Señor a través de la obra del Espíritu Santo quien trae a nuestra alma las riquezas que Cristo
logró a nuestro favor y nos llena de esperanza de la gloria venidera.

Barcellos, Richard C. “COMMUNION AT THE LORD’S SUPPER: 1 Corinthians 10:16 in its Exegetical and
38

Confessional Context” Journal of the Institute of Reformed Baptist Studies (2014), pg. 7−25.

45
2. Haz de tu tema algo manejable39

Antes de empezar tu investigación, es necesario que puedas limitar el enfoque del tema de
tu trabajo para que tu búsqueda se convierta en algo concreto y posible y, de esta manera,
seas capaz de manejarla. Aunque siempre hay un límite en el enfoque de tu investigación −es
decir, nunca puede quedarse en la generalidad o en un enfoque tan amplio que haga que ella
pierda su naturaleza−, hablando de manera específica, el enfoque siempre depende del tipo
de trabajo que estamos por realizar. Dependiendo de la extensión del trabajo se debe buscar
el enfoque del tema. Mientras más breve, tienes que abarcar cosas más específicas; si es más
extenso (como una tesis o una disertación), puede enfocarte en cosas que abarquen otras más
específicas. Esto puede ser entendido con claridad cuando pensamos en un libro y cada uno
de sus capítulos. Todo libro está enfocado en algún tema en particular que es desarrollado a
medida que sus capítulos avanzan. El enfoque de un trabajo corto debe ser como uno de los
capítulos de ese libro, el cual trata con un asunto muy específico dentro del tema general que
se está tratando en el libro. El enfoque de un trabajo más extenso debe ser como cuando se
escoge el tema y los asuntos que abarcará el libro a través de sus diferentes capítulos.

Por ejemplo, el Profesor Michael A. G. Haykin junto


a Mark Jones fueron los editores de un libro que se
llamó “Esbozos en la Controversia: La Diversidad
Teológica Reformada y los Debates en el Puritanismo
Inglés del Siglo XVII”.40 Este libro contiene 12
capítulos en los que se tratan diferentes
controversias. En el capítulo 1, Richard A. Muller
trata con “La Diversidad en la Teología Reformada:
Una Introducción Historiográfica”. En el capítulo 2,
Alan D. Strange trata con “La Imputación de la
Obediencia Activa de Cristo en la Asamblea de
Westminster”. En el capítulo 3, Hunter Powell
escribe sobre “Octubre de 1643: Los Hermanos
Disidentes y el Proton Diktikon”. En el capítulo 4,
Crawford Gribben trata con “El Milenialismo”. En
el capítulo 5, John V. Fesko trata con “La Diversidad
Lapsariana en el Sínodo de Dort”. En el capítulo 6,
Jonathan D. Moore trata con “La Extensión de la
Expiación: El Hipotético Inglés contra la Redención Particular”. En el capítulo 7, Mark A.
Herzer trata con “La Recompensa de Adán: ¿Cielo o Tierra?”. En el capítulo 8, Mark Jones

Ver: Turabian, pg. 13−14.


39

Drawn Into Controversie: Reformed Theological Diversity and Debates Within Seventeenth–Century British
40

Puritanism.

46
trata con “El Antiguo Pacto”. En el capítulo 9, Carl R. Trueman trata con “La Necesidad de
la Expiación”. En el capítulo 10, Robert J. McKelvey “La Justificación Eterna – Aquel error y
fundamento del Antinomianismo”. En el capítulo 11, Joel R. Beeke trata con “El Debate de la
Seguridad: Seis Preguntas Claves”. En el capítulo 12, Michael A. G. Haykin y Jeffrey
Robinson tratan con “Debates Bautistas Particulares con respecto a la Comunión y el Canto
de Himnos”. El libro tiene un enfoque específico, el cual es: Las Controversias entre los
Puritanos del Siglo XVII. Cada uno de los capítulos se encarga de profundizar en uno de los
aspecto de este tema. Como un todo, el libro necesita un enfoque específico, pero amplio.
Pero, cuando consideramos sus capítulos de manera particular, podemos notar que el
enfoque deja de ser amplio y se centra en cosas más específicas. Por ejemplo, en el capítulo
12 de este libro, el autor habla de una controversia específica y, esta es: el debate entre los
bautistas particulares. El contenido de ese capítulo es el siguiente:

Introducción
La Controversia con respecto a la Comunión de los años 1670 y 1680.
La Controversia con respecto al Canto de Himnos de los años 1690.
Isaac Marlow y sus oposiciones al Canto de Himnos.
Benjamin Keach y el Reclamo de una Antigua Ordenanza.
El Resultado.

Mira el progreso de enfoque en este libro:

▪ Tema en la Enciclopedia: Historia de la Iglesia


▪ Tema General: Los Puritanos del Siglo XVII
▪ Tema Específico (Enfoque del Libro): Las Controversias entre los Puritanos del Siglo XVII
▪ Tema Más Específico (Enfoque del Capítulo): Los Debates entre los Bautistas Particulares
▪ Temas Todavía más Específico: La Controversia con respecto al Canto de Himnos de los
años 1690.
En base a este proceso, mientras más arriba centres tu investigación más general es tu tema.
La meta es tratar de enfocar más y más de manera que puedas llegar hasta ser lo más
específico que puedas. Entonces, para mantener tu tema manejable necesitas enfocar en algo
específico lo cual depende de la extensión del trabajo que quieres hacer.

3. Usa preguntas para encontrar tu tema y para mantenerte enfocado en él.

Una vez que hemos escogido un tema específico, con el propósito de mantenernos enfocados
y saber dónde empezar nuestra búsqueda y con qué recursos quedarnos, necesitamos hacerle
preguntas a nuestro tema. Si nuestro plan es hacer una investigación productiva que nos
permita encontrar la respuesta que estamos buscando, no debemos empezarla sin una
planificación adecuada, y esta va conectada con las preguntas claves que le hicimos a nuestro
tema. No podemos investigador todos los aspectos de nuestro tema, por eso necesitamos
orientar nuestra búsqueda hacia lo que queremos encontrar.

47
Analicemos esto tomando como ejemplo el libro “La Confesión de Fe de Westminster y la
Cesación de la Revelación Especial” escrito por Garnet Howard Milne.41 En este excelente
trabajo, el autor centra su enfoque de investigación en un tema específico. El proceso de
enfoque para la búsqueda de este tema podría describirse así:

Tema: Historia de la Iglesia


Tema: Historia de la Reforma y la Post-Reforma
Tema: La Confesión de Westminster
Tema: La Confesión de Westminster y la Doctrina de la Palabra
Tema: La Confesión de Westminster y la Cesación de la
Revelación Especial
En el prefacio de su libro, el autor nos muestra el proceso que lo llevó a la búsqueda de este
tema específico:

En el capítulo que abre la Confesión, los miembros de la asamblea de Westminster


incluyeron una clausula que implica que ya no hay más revelación de parte de Dios
para mostrarle a la humanidad el camino de la salvación. Los medios a través de los
cuales una vez comunicó Su divina voluntad con respecto a la salvación, tales como
sueños, visiones y los dones milagrosos del Espíritu, se dice que ya no son aplicables.
Sin embargo, muchos de los autores de la CFW aceptaron la continuación de la
“profecía” en su tiempo, y algunos de ellos aparentemente creían que la revelación de
la voluntad de Dios a través de sueños, visiones y comunicaciones angelicales
permanecían como una posibilidad. ¿Cómo debería ser leída la cláusula cesacionista
de la Confesión de Fe de Westminster a la luz de estos hechos? ¿Fue escrita como una
negación estricta de la posibilidad de que cualquier revelación sobrenatural para el
propósito de la salvación tuviera lugar después del periodo apostólico, o –como
muchos eruditos modernos han argumentado– sus autores dieron la posibilidad a un
punto de vista más flexible, en el que tal revelación divina a través de medios
extraordinarios todavía puede tener lugar?42

El autor fue llevado a este tema específico por causa de un hecho histórico. Aunque la
Confesión de Westminster presenta una clara descripción de la cesación de los dones de
revelación, una parte de los que fueron parte de la elaboración de la Confesión creían en un
tipo de continuación de dones de revelación. La pregunta que naturalmente surge es: ¿Cómo
se relaciona la Confesión de Westminster con la cesación de la revelación? Es una pregunta
importante que requiere una respuesta basada en argumentos comprobables.

41 Milne, Garnet Howard; The Westminster Confession of Faith and the Cessation of Special Revelation: The Majority
Puritan Viewpoint on Whether Extra-Biblical Prophecy is Still Possible (Eugene, Oregon; Wipf and Stock Publishers,
2007).
42 Ibid, pg. xv, xvi.

48
Ahora que el tema ha sido definido, es necesario hacerle preguntas al tema para encontrar
un plan para la investigación. Una vez más, a manera de ilustración práctica, consideremos
el capítulo 1 de este mismo libro para observar cómo las preguntas claves llevaron al autor a
investigar sobre cosas específicos. Las preguntas que consideraremos son mi intento de
reconstruir como fue posiblemente la búsqueda y elaboración de su investigación.

Tema: LA ASAMBLEA DE WESTMINSTER Y LOS DONES DE REVELACIÓN

Preguntas Claves al Tema:

¿Habría alguna razón por la que la Confesión de Fe de Westminster haya tenido la intención
de ser inclusiva o permita un punto de vista “más flexible” sobre alguno de sus temas? ¿Hay
entre la tradición puritana representada en los miembros de la Asamblea de Westminster una
línea de continuacionismo?
Esta pregunta clave, te encamina hacia la investigación del contexto histórico y la
razón por la que fue establecida la Asamblea de Westminster, así como las fuentes de
donde tomaron su teología. Al plantearse esta pregunta, el autor se libra de buscar en
lugares innecesarios sino exclusivamente en lo que responderá satisfactoriamente sus
preguntas al respecto. El resultado de la investigación que el autor hizo al respecto se
encuentra en el capítulo uno.

Capítulo 1: La Asamblea de Westminster: Contexto, Herencia y Constitución


Religiosa y Socio−Política.43

1.1 Introducción
1.2 Contexto Socio−Político y Religioso
1.2.1 Contexto Europeo
1.2.2 Contexto Inglés
1.2.3 Los Eventos Ingleses y Escoceses en su Contexto Británico
1.2.4 Fervor Escatológico y el Interés en la Profecía
1.2.5 Desafíos con respecto a las Variantes Teológicas
1.3 Herencia Teológica
1.3.1 Agustín
1.3.2 Tomas de Aquino
1.3.3 Juan Calvino
1.4 Los Predecesores Inmediatos de la Asamblea
1.4.1 William Perkins
1.5 Fuentes Conocidas de la Teología de Westminster
1.5.1 William Whitaker
1.5.2 James Usher

43 Milne, pg. ix.

49
1.5.3 John Ball
1.6 Evaluación de las Contribuciones de los Miembros de la Asamblea de
Westminster.
1.7 Conclusión
Siguiendo el mismo ejemplo, podríamos hacer una reconstrucción de las preguntas
que llevaron a la investigación del autor que dio como resultado los otros capítulos de
este libro.

Capítulo 2: La Necesidad y Centralidad de la Revelación Especial


Capítulo 3: Lo Obsoleto de las Modos Anteriores de Revelación Especial
Capítulo 4: Aclarando el Reclamo de Continuacionismo
Capítulo 5: La Profecía y los Miembros de la Asamblea de Westminster
Capítulo 6: La Profecía y los Escoses
Capítulo 7: La Subscripción y la Confesión de Fe de Westminster

Las preguntas nos permiten enfocarnos un tema más específico y, al mismo tiempo, nos
ayudan a tratar la ruta de nuestra investigación. Hay una premisa importante que debemos
considerar siempre: “los mejores temas promueven buenas preguntas, los malos ya vienen
con respuestas hechas de antemano”.44

SEGUNDO REFUGIO – BUSCANDO LA IMPORTANCIA

En medio de nuestra caminata buscando la cima de esta montaña, necesitamos ir del primer
refugio al segundo. Después de haber enfocado nuestra mente en un tema en particular,
buscando que este sea lo suficientemente específico como para convertir nuestra
investigación en una hazaña posible, ahora necesitamos buscar la importancia del tema
escogido. La importancia tiene que ver con el efecto directo que las conclusiones de tu trabajo
traen sobre tu vida y la de otras personas. Como dijimos anteriormente, “tu respuesta al ¿y
que con eso?, es lo que hace que tu investigación tenga importancia para otros”.45 Por eso,
desde el mismo punto de partida, es necesario escoger un tema desde una perspectiva
colectiva, porque un trabajo de investigación es más que simplemente el intento por contestar
una pregunta, es encontrar una solución real para problemas reales. Entonces, la importancia
de un trabajo de investigación tiene que ver con su efectividad para resolver problemas.

A. Un Factor Esencial – “El Problema”

El término problema puede ser un poco confuso para algunos porque en nuestro día a día los
problemas son cosas de las que tratamos de huir. Sin embargo, en el mundo de la
investigación un problema es algo que buscamos intencionalmente. Esto es tan importante que
incluso podemos que cuando no hay problemas que resolver, la investigación deja de ser una

44 Turabian, pg. 12.


45 Turabian, pg.7.

50
necesidad. Por lo tanto, toda investigación debe estar enfocada en un problema al que busca
resolver a través de su trabajo para su beneficio y el de otras personas. Esto lo vemos en las
cosas más cotidianas. Por ejemplo, cuando una enfermedad amenaza a un sector de la
población, los científicos comienzan una investigación con el propósito de encontrar una
cura. Esto es verdad también en otros campos como la agricultura donde la investigación es
el resultado de una necesidad o dificultad que algún cultivo enfrenta. Lo mismo pasa en
nuestro campo de investigación teológica. Hay problemas que necesitan ser resueltos y son
estos los que deberían impulsar nuestro trabajo de investigación. Citamos algunos ejemplos.

Los profesores Hendrick F. Stander y Johannes P. Louw escribieron un libro llamado “El
Bautismo en la Iglesia Primitiva”46 con el propósito de resolver un problema relacionado al
uso de la historia como parte de los argumentos a favor del bautismo de infantes. Esto es lo
que ellos explican al respecto:

En la historia de la iglesia cristiana el rito del bautismo ha sido un asunto contencioso


por muchos siglos. En nuestros días, y especialmente durante las décadas pasadas, el
bautismo se ha llegado a ser un asunto de debate acalorado. Las preguntas centrales
en este debate tienen que ver con los recipientes del acto del bautismo (infantes o
creyentes) y con el modo del bautismo (rociamiento o inmersión). Estos dos temas
principales nos lleva a otras preguntas concernientes al pacto (especialmente al pacto
Abrahámico y la circuncisión), y en última instancia también al rebautismo. Los que
debaten, independientemente del punto de vista que sostengan, están naturalmente
convencidos de que sus interpretaciones con respecto al bautismo están basadas en la
Escritura. Además, también se ha convertido en algún común en este debate el apelar
a la historia de la iglesia primitiva. Los eruditos a menudo son guiados por sus
presuposiciones cuando afirman que la historia respalda su punto de vista en
particular. Todas las diferentes perspectivas con respecto al bautismo han sido
“provistas” por citas de los escritores de la iglesia primitiva. En consecuencia, la gente
de hoy tiene una imagen muy perpleja de la práctica del bautismo en la iglesia
primitiva. Esto puede llevar a la gente a concluir que los cristianos primitivos
estuvieron grandemente confundidos. La verdad es que los autores de hoy
malinterpretan y a veces representan incorrectamente las afirmaciones de los Padres
de la Iglesia.47

¿Cuál es el problema que tratan de resolver los autores de este libro? El uso incorrecto de la
historia cómo un argumento a favor del paedobautismo.

46 Stander, Hendrick F. y Louw Johannes P., “Baptism In The Early Church” (Leeds, Inglaterra: Reformation
Today Trust, 2004).
47 Stander, Hendrick F. y Louw Johannes P., “Baptism In The Early Church” (Leeds, Inglaterra: Reformation

Today Trust, 2004), pg. 15, 16.

51
B. Una Distinción Importante

Introduciéndonos aún más en nuestra consideración del problema, necesitamos hacer una
distinción importante. Hay dos tipos de problemas: prácticos y conceptuales. A la investigación
que busca resolver los problemas prácticos se le llama investigación aplicada. A la que busca
resolver los problemas conceptuales, se le llama investigación pura. Aunque en el campo de la
investigación teológica conservamos esta distinción, nuestra concepción de unidad entre
ellas es diferente a la forma en que la concibe la investigación no−teológica. Turabian expresa
adecuadamente la forma en la que el campo de la investigación general concibe esta
diferencia:

Lo que diferencia a los problemas prácticos de los conceptuales es la naturaleza de las


condiciones y costo/consecuencias. La condición de un problema práctico puede ser
cualquier tipo de asuntos en el mundo que enfrentas o, mejor aún, que tus lectores
enfrentan: problemas de tráfico, competencia extranjera, una enfermedad que no
podemos tratar efectivamente. El costo de un problema práctico es siempre algún
efecto tangible que no queremos: inconveniente, gasto de dinero, dolor, incluso la
muerte… La condición de un problema conceptual es siempre algún tipo de
ignorancia o falta entendimiento de algo. Un problema conceptual no tiene un costo
tangible sino una consecuencia. Esta consecuencia es un tipo particular de ignorancia:
una falta de entendimiento que no nos permite comprender una cosa que es incluso
más importante. Dicho de otra manera, por el hecho de que no hemos respondido una
pregunta, no podremos responder otra pregunta que es más importante. De forma
concisa, los problemas prácticos tienen que ver con lo que debemos hacer; los
problemas conceptuales tienen que ver con lo que deberíamos pensar. Los problemas
prácticos son más comunes en el mundo profesional, los problemas conceptuales son
más comunes en la academia.48

Esta diferencia, a la luz de la visión general de la investigación, es adecuada debido a la


separación posible entre lo práctico y lo conceptual. Por ejemplo, un asunto teórico
relacionado con supuestos de la física cuántica es un asunto conceptual que no tiene una
repercusión directa en los asuntos cotidianos de la vida, no así el problema de tráfico de una
ciudad que es el motivo de la investigación de un ingeniero civil busca resolverlo a través de
la construcción de túneles. Aunque están conectados, hay una separación natural práctica
dentro del campo de la investigación no−teológica. Sin embargo, en el campo de la
investigación teológica, la conexión entre los problemas prácticos y conceptuales están
mucho más conectados y caminan en una armonía más perfecta. Los asuntos investigados
por la teología siempre afectan la vida práctica. Con esto no estoy diciendo que no haya

48 Turabian, pg. 18.

52
asuntos “puramente” conceptuales que deben ser atendidos e investigados, sino que estoy
afirmando que el centro de la investigación teológica tiene un resultado práctico inevitable.

Por ejemplo, no existen asuntos conceptuales más profundos y misteriosos que los
relacionados a Dios y Su naturaleza. Me refiero a temas relacionados con el orden en Sus
decretos eternos (la discusión infra y supralapsariana), la eterna relación intratrinitaria (como
la procedencia y la subordinación del Hijo), o aspecto incomprensibles de Su esencia (como
Su impasibilidad). Aunque estos asuntos están basados en conceptos profundos que fluyen
de la revelación de Dios en Su Palabra, todos estos asuntos “puros” tienen una realidad
práctica de suma importancia. Convicciones con respecto al orden de Sus decretos llevó a
que hombres en la historia negaran la gracia común y la libre oferta del Evangelio al mundo.
El feminismo y muchos de los puntos de vista errados sobre la familia y la relación entre el
hombre y la mujer nacen de un mal entendimiento de la relación intratrinitaria. El
entendimiento de una doctrina tan importante como la impasibilidad es lo que protege al
creyente común de ver a Dios desde una perspectiva desfigurada, o como un Dios que
cambia y, por lo tanto, no podemos saber que esperar de Él mañana, o como un Dios
insensible con el que no tenemos una relación verdadera.

En el libro “Dios sin Pasiones”49, el Dr. Samuel Renihan después de exponer teológicamente
la Impasibilidad de Dios, concluye su presentación con “Aplicaciones Personales e
Implicaciones Pastorales”. Él dice:

En este capítulo trataremos las aplicaciones personales y las implicaciones pastorales


de la Impasibilidad Divina. Algunos han dicho que esta doctrina es simplemente un
ejercicio teórico abstracto de teología especulativa y que no tiene conexiones prácticas
o pastorales con la realidad. Mi opinión es diferente, y confío que al finalizar este
capítulo tu puedas ver los maravillosos beneficios que vienen del conocimiento de las
perfecciones del Dios al que adoramos.50

Lo que quiero demostrar con estos ejemplos es que, aunque existe todo un campo de
investigación pura en la teología, toda problemática que nos lleve a una investigación teológica
tiene un aspecto práctico importante.

Entonces, una parte fundamental al momento de saber si el tema que escogimos para nuestra
investigación es apropiado, es cuando consideramos el problema que trata y el efecto que
tendrá si lo resolvemos; tanto en nuestras vidas como en la de los demás.

49 Renihan, Samuel; “God without Passions: A Primer – A Practical and Pastoral Study of the Divine
Impassibility” (Palmdale, CA: Reformed Baptist Academic Press, 2015).
50 Ibid, pg. 84.

53
TERCERO REFUGIO – ESTABLECIENDO LA HIPÓTESIS

La cima se ve cada vez más cerca, pero si queremos llegar a ella, no podemos dejar de ver los
refugios que nos sirven como puntos de referencia para no perdernos mientras procuramos
cumplir nuestra misión. Después de haber escogido un tema y haber evaluado su
importancia a través de analizar el problema que aborda, ahora necesitamos establecer una
hipótesis sobre la que basaremos nuestro investigación.

A. La Definición e Importancia de una Hipótesis

El Diccionario de la Lengua Española define una hipótesis como “aquello que se establece
provisionalmente como base de una investigación que puede confirmar o negar la validez de
aquella”. En otras palabras, es una suposición hecha a partir de ciertos datos que sirve de
base para iniciar una investigación o una argumentación, y que tiene que ser confirmada o
negada en base a los resultados.

Entonces, una hipótesis es el punto de partida de una investigación. Muchos se niegan a empezar
estableciendo una hipótesis porque piensan que es una traición al sentido de descubrimiento
que guía a una investigación. En otras palabras, si desde el principio das la respuesta a la
pregunta que supuestamente quieres responder con tu trabajo, entonces es cómo si se hicieras
un trabajo en base a algo que ya sabes, lo cual técnicamente no es una investigación, sino una
exposición de algo que ya conocías. Sin embargo, es importante entender que una hipótesis
no es la respuesta final a tu trabajo, sino una afirmación que necesita ser comprobada o refutada.
Nuestro trabajo de investigación se enfoca apropiadamente cuando centramos nuestro
esfuerzo en descubrir si la respuesta que dimos a una pregunta es verdadera o no. Eso
significa que la hipótesis con la que empiezas un trabajo puede ser confirmada o negada por
la evidencia.

Tenemos muchos ejemplos de personas que empezaron sus trabajos de investigación desde
una hipótesis incorrecta, la cual fue refutada al compararla con la evidencia recopilada.51 Por
ejemplo, la experiencia de Josh MacDowell es muy ilustrativa. Siendo un joven agnóstico que
se había propuesto estudiar leyes para hacer carrera en la política, comenzó sus estudios en
la preparatoria Kellogg College en Míchigan. Mientras cursaba sus estudios, decidió preparar
una tesis con el propósito de examinar la evidencia histórica de la fe cristiana con la finalidad
de refutarla. Sin embargo, en medio de su investigación, por causa de la evidencia que
encontró, terminó convirtiéndose al cristianismo. Una historia muy parecida es la de Lee
Strobel, quien trabajaba como periodista de investigación para el Chicago Tribune, y cuando
su esposa se convirtió al cristianismo, comenzó una investigación con el propósito de probar

51Es importante que consideremos estos dos ejemplos desde la perspectiva de lo que estamos estudiando, es
decir, que uno puede empezar con una hipótesis incorrecta, pero a medida que su investigación progresa, su
hipótesis cambia por causa de la evidencia. Aunque es evidente la obra de Dios en la vida de los hermanos Josh
MacDowell y Lee Strobel, no recomiendo sus obras ni su teología.

54
que Jesús no había resucitado. Al revisar la evidencia, su hipótesis cambió y Strobel fue
convertido por el Señor.

La hipótesis es fundamental en nuestra investigación, no solo porque nos sirve como una
guía al momento de buscar las fuentes para nuestro trabajo, sino porque se convierte en un
seleccionador de la información que hemos recopilado. Es decir, las preguntas: ¿qué cosas debo
buscar?, ¿dónde debo buscar? y ¿cuál es la información qué debo conservar?, no pueden ser
contestadas sin una hipótesis.

B. La Forma de Establecer una Hipótesis

Una vez que hemos establecido nuestro tema y la pregunta que queremos contestar, debemos
plantear una respuesta inicial. Es necesario hacerlo, aun cuando pensemos que esta pudiera
ser apresurada o muy especulativa, porque lo más importante en esta parte del trabajo es
establecer una solución que esté dentro de las posibles soluciones al problema que
enfrentamos en nuestra investigación. No se requiere que esta respuesta inicial sea la
correcta, recuerda que la meta de todo tu trabajo será encontrar si lo es o no.

Entonces, consideremos algunos consejos prácticos que te ayudarán a establecer y


relacionarte adecuadamente con una hipótesis.

(1) Haz las preguntas claves – ¿Cuáles son las posibles respuestas a mi pregunta? ¿Por cuál de
ellas me inclino como una posible respuesta correcta?

La pregunta de investigación:
¿Por qué la gran mayoría de los bautistas contemporáneos tienen un entendimiento de la
doctrina de la salvación tan distinto al de los primeros bautistas que llegaron a Norteamérica?

Posibles respuestas:
• Por falta de instrucción teológica en las iglesias.
• Por el avance del pragmatismo evangélico de principios del siglo XX.
• Por el énfasis que el fundamentalismo puso sobre otras doctrinas.
• Por la conquista del Dispensacionalismo Clásico en Norteamérica, el cual era
claramente arminiano.
A veces, la respuesta correcta podría ser más de una hipótesis, pero tienes que partir de una.
Otras veces, la respuesta puede ser un simple si o no.

La pregunta de investigación:
¿Debería una iglesia utilizar la Confesión Bautista de Fe de 1689 cómo su Declaración
Doctrinal?52

52De hecho, esta pregunta llevó a Shawn Wright a escribir un artículo para la revista digital del ministerio IX
Marcas. La conclusión de su artículo fue que la Confesión Bautista de Fe de 1689 no debería usarse como una
declaración de fe para una iglesia local. Estas son sus palabras: “Aunque la Confesión de Londres de 1689
(también conocida como la Segunda Confesión de Londres para distinguirla de la 1644, o la Primera Confesión

55
Posibles Respuestas:
• Si
• No

(2) No tomes una decisión final antes de terminar tu investigación – No debes apresurarte en
establecer tu hipótesis como una afirmación final. Recuerda que las hipótesis siempre tienen
que estar escritas con lápiz (i.e., que se pueden borrar o pueden ser cambiadas), porque el
propósito de tu trabajo es descubrir si es correcta o no. Al hacer esto, corres el peligro de que
tu investigación sea simplemente una excusa (i.e., algo que haces para defender lo que crees
y no con el afán de encontrar una respuesta basada en los hallazgos y resultados de tu
investigación).

Creo que un ejemplo de este error puede ser ilustrado en la serie de seis sermones que el
Pastor John MacArthur predicó en su iglesia entre marzo y mayo de 2007. El título de la serie
fue: “Por qué todo Calvinista debe ser Premilenialista”. Entre muchas otras declaraciones, él
dice:

Ya sea que estés hablando de la iglesia como los elegidos de Dios, o de Israel como los
elegidos de Dios, ambos son elegidos por Dios. Y nuevamente, digo, su elección es
divina, unilateral, incondicional e irrevocable. Entonces, les dije a los pastores estando
en la conferencia, el título de esta charla es: “¿Por qué todo calvinista que se respete a
sí mismo debe ser premilenialista?”. Porque si crees en la elección divina soberana,
entonces tienes que creer que Dios será fiel a Sus promesas a Su iglesia, y también será
fiel a Sus promesas a Su nación elegida, Israel. Ahora, francamente, es demasiado
tarde para que Juan Calvino arregle su obra, aunque ahora mismo es un
premilenialista en el cielo. Si tan solo pudiera enviar un mensaje, sería este. Pero, ya
sabes, de todos las personas en el planeta que deberían ser premilenialistas, deberían
serlo aquellos que creen en la elección soberana de Dios. [Pero] los arminianos… eso

Bautista de Londres) es una declaración maravillosa de la fe bautista calvinista, no debe usarse como una
declaración de fe de la iglesia local.” Su conclusión se sostiene en tres argumentos. La Confesión Bautista de Fe
de 1689 no puede ser usada porque: (1) Fue escrita en un contexto específico. (2) Las iglesias son las que deben
decidir sobre el propósito de la declaración de fe de su congregación local. (3) Esta confesión de fe es demasiado
específica doctrinalmente en algunos lugares como para servir como una declaración de fe de una iglesia local.
Puedes leer el artículo en: https://www.9marks.org/article/should-you-use-1689-london-confession-your-
church/.
En forma de una respuesta escrita y formal a este artículo, el Dr. Samuel Waldron ha respondido esta misma
pregunta pero de forma afirmativa. Sus argumentos son cinco. La Confesión Bautista de Fe de 1689: (1) No vela
(disipa, oculta, ni disimula) las diferencias doctrinales importantes.(2) Es un depósito de las grandes doctrinas
de la ortodoxia cristiana, en relación con las Escrituras, la Trinidad, y la persona de Cristo. (3) Sus distintivos
son bíblicos. (4) Identifica los verdaderos orígenes históricos de la mayoría de los bautistas. (5) Provee un
estándar adecuado para la membresía de la iglesia, así como una maravillosa herramienta para la instrucción.
Puedes leer el artículo en: https://www.9marks.org/article/why-and-how-your-church-should-hold-1689-
confession/.

56
es diferente; aquellos que siguen a Arminio no creen en la elección. Arminio no creía
en la elección. Aquellos que le siguen no creen en la elección, los cuales son una gran
parte del cristianismo evangélico, el movimiento wesleyano, el movimiento
carismático, los Metodistas… muchos Bautistas. Ellos creen que Dios no elige a nadie
para la salvación. Creen que la salvación se puede ganar y perder. Usted puede creer
y ser salvo, y luego perder su salvación. Ahora, ellos son perfectos amilenialistas. Este
es un escenario perfecto para ellos...53

Aunque no compartimos la posición dispensacionalista del Pastor MacArthur, al citar este


caso particular aquí no estamos preguntando si sus convicciones son igual a las nuestras, sino
si su afirmación en esta serie de sermones es una hipótesis que fue ratificada por la evidencia,
o una que fue afirmada antes de hacer una investigación. Cuando hacemos esto, convertimos
nuestro trabajo en una defensa subjetiva de algo que abrazamos sin argumentos y que, al fin
de cuentas, no estamos dispuestos a cuestionarlo. Los argumentos de MacArthur no están
sustentados en evidencia verdadera, sino en reflexiones incorrecta de la gracia soberana y la
elección, y la naturaleza de la fe amilenial, así como en la pretensión de que la inmensa
mayoría de los creyentes en la historia de la iglesia estuvieron equivocados en este punto.54

(3) Plantea algo concreto, claro y en forma de una afirmación – La hipótesis debe ser una respuesta
que busca responder la pregunta principal de tu investigación, por esa razón no puede ser
algo ambiguo.

CUARTO REFUGIO – ORGANIZANDO LA ESTRUCTURA

¡Estamos cerca! La cima queda a unos pocos kilómetros. Es interesante lo que sucede a esta
altura de nuestra travesía. A medida que avanzamos, el camino se hace más claro y
comenzamos a sentir que sabemos a dónde vamos; pero, al mismo tiempo, el viento y la
neblina hacen casi imposible la visión. Afortunadamente, todavía tenemos un refugio en el
cual podemos pasar la noche y retomar fuerzas. Después de haber escogido un tema y haber
evaluado su importancia a través de analizar el problema que aborda, y habiendo establecido
una hipótesis sobre la que basaremos nuestro investigación, ahora necesitamos organizar la
estructura de nuestro trabajo.

La estructura es la forma en la que organizamos nuestro trabajo escrito con el propósito de


que nuestros argumentos puedan ser seguidos ordenada y lógicamente por nuestros lectores,
de manera que a través de la presentación de nuestras evidencias puedan llegar a entender
nuestras conclusiones y juzgarlas como verdaderas o no.

53 MacAthur, John; “Why every Calvinist should be Premillennialist – Part 1” (GRACIA A VOSOTROS),
transcripción en: https://www.gty.org/library/sermons-library/90-334/why-every-calvinist-should-be-a-
premillennialist-part-1
54 Para un análisis más detallado ver: Waldron, Samuel E., El Manifiesto Milenial de MacArthur: Una Respuesta

Amigable (Santo Domingo, Ecuador: Legado Bautista Confesional, 2020).

57
A. El Uso Apropiado del Bosquejo

¿Qué es lo primero que viene a tu mente cuanto tienes que organizar algo de manera lógica
para presentarlo delante de otros? ¡Un bosquejo! Los pastores y predicadores están
familiarizados con esta herramienta útil que sirve para exponer una idea a través de
organizarla en base a sus líneas o argumentos principales. A pesar de su inmensa
importancia, el bosquejo debe ser utilizado para el propósito y momento apropiados.
Durante la fase de investigación de tu trabajo, tratar de organizar tus ideas a través de un
bosquejo podría convertirse en algo que te fuerce a especificar y plantar cosas demasiado
rápido antes de terminar tu investigación y desarrollar el máximo potencial de tu análisis.
Como hemos dicho, la investigación nunca es algo estático, sino que a medida que se
desarrolla se sufre una cantidad de cambios que nos mueven de la posición inicial o de lo
que pensábamos antes de empezar. Por esta razón, el bosquejo debe ser usado para organizar
la información después de que la investigación haya avanzado lo suficiente como para que
hayas encontrado tus argumentos.

B. Una Herramienta Eficiente

Debido a esta “deficiencia” del bosquejo durante


la investigación, se sugiere una herramienta útil
que te ayuda a conectar tus descubrimientos de
una manera que puedas agruparlos al momento
de formular tus argumentos. Esta herramienta es
el storyboard o guion gráfico. El storyboard
consiste en una secuencia de fotografías o
imágenes que permiten tener una idea
conceptual de la estructura de una historia.
Típicamente, ha sido usado en el mundo audiovisual para previsualizar una animación o
planificar la estructura de una película. En el mundo académico, esta herramienta es usada
para planificar y guiar las ideas de un trabajo. Es como si fuera un bosquejo dispersado en
algunas páginas o cuadros, los cuales tienen espacio para escribir información e ideas. A
diferencia del bosquejo, su estructura no es “rígida” sino que puede moverse y adaptarse
según se requiera, abriendo la oportunidad de que en el camino aparezcan mejores maneras
de organizar la información. De manera práctica, hay diferentes formas en las que puedes
establecer tu storyboard. Algunos han optado por usar una pared de la casa u oficina 55; otros,
utilizan una pizarra o cuadro de corcho. La ventaja es que podemos crear el nuestro de la
forma en la que sea más conveniente para nosotros. El storyboard puede ser usado en todas

55Es muy típico ver esto en una película de detectives en donde el investigador está siguiendo la pista. En la
escena se ve una pared llena de papeles y líneas de conexión a través de lo cual está tratando de entender la
coartada al revisar cuidadosamente toda la información que tiene.

58
las etapas de la investigación porque te ayuda a planificar tu investigación, a desarrollar tu
argumento y a organizar tu presentación escrita.

¿Cómo utilizar un storyboard?

Primero, debes colocar la pregunta que buscas responder con tu trabajo seguido por tu
hipótesis inicial en el centro del storyboard. Segundo, alrededor de la hipótesis central,
organiza la información que vas adquiriendo en tu investigación con el propósito de
agruparla para la formación de tus argumentos. Tercero, haz un bosquejo sobre el tipo de
evidencia que crees que deberías buscar (i.e.: citas, observaciones, hechos históricos,
imágenes, etc.). Cuarto, constantemente mira “el todo” en tu storyboard con el propósito de
afirmar la conexión entre los argumentos y la hipótesis, entre tu trabajo de investigación y lo
que necesitas buscar, etc.

Recuerda que el storyboard no es tu trabajo final, sino una herramienta que guía tu
pensamiento y te ayuda a organizar lo que vas encontrando en tu investigación. No importa
cual sea la herramienta que uses, al final de cuentas, la creatividad y la capacidad de
razonamiento son cosas irremplazables en el trabajo de investigación y de escritura.

Consideremos el siguiente ejemplo:

Título: “Los Bautistas Particulares y la Cesación de la Revelación Especial”.

La pregunta que busca ser respondida en este trabajo de investigación es: ¿La cesación
de la revelación especial (y por ende de todos los dones de revelación) era una convicción
uniforme en la vida de los Bautistas Particulares del siglo XVII?

El contexto de la pregunta es la siguiente: Dado que se ha comprobado que algunos


de los miembros de la Asamblea de Westminster eran continuista y que, por esta
razón, la cláusula del Capítulo 1 párrafo 1 de la Confesión de Westminster
probablemente tuvo una tendencia inclusivista y flexible más que determinante y
rígida entre los paedobautistas; y puesto que la Confesión Bautista de Fe de 1689 fue
basada en la estructura de la Confesión de Westminster, entonces es probable que la
misma cláusula en la Confesión Bautista haya tenido la misma connotación
inclusivista, dando la posibilidad de que la cesación de la revelación especial no haya
sido una convicción uniforme en los bautistas particulares que se subscribieron
originalmente a la confesión de fe en 1689.

Hipótesis: Si, la cesación de la revelación especial era una convicción uniforme en los bautistas
particulares del siglo XVII.

Este es un storyboard de un proyecto recién comenzado. El tema y la pregunta clave están


en el centro, así cómo la hipótesis. Alrededor están los diferentes argumentos y algunas de
las ideas o lugares en donde buscar. En la parte superior izquierda está una pequeña lista de

59
dos libros para leer. A medida que avanza la investigación, el storyboard se convierte en un
cuadro panorámico de tu investigación y tus hallazgos.

C. Una Práctica Necesaria

Finalmente, busca personas que escuchen tus argumento con el propósito de desafiarlos, de
manera que esto pueda seguir orientando tu búsqueda.

CONCLUSIÓN

Empezamos esta clase diciendo que una de las cosas más importantes en la investigación es
definir el proyecto en el que vamos a trabajar, porque no hacerlo te lleva a ser infructífero en
tu investigación llegando incluso a frustrarte y a causar desánimo en la responsabilidad de
hacerlo. En esta clase analizamos la forma apropiada de encontrar un tema para tu trabajo,
cómo buscar su importancia, la necesidad de establecer una hipótesis y cómo organizar su
estructura. Al igual que para alguien que escala una montaña, el tener refugios no hace de
una caminata algo menos esforzado, pero si la convierte en algo más seguro.

60
4. ¿Cuáles son las diferentes fuentes de una investigación?
Introducción

Es imposible hacer una investigación sin fuentes de información desde las cuales hacer el
trabajo de descubrimiento y análisis. Hasta ahora hemos centrado nuestro estudio en
aprender a descubrir el qué de nuestra investigación ⎯es decir, el tema específico, la pregunta
que queremos responder⎯, en esta lección nuestro propósito será responder el dónde de
nuestra información ⎯es decir, la fuente en la que buscaremos nuestra respuesta. Como ya
lo hemos visto, es fundamental hacer bien nuestro trabajo de buscar el qué para que podamos
saber el dónde. Si nuestra investigación no tiene un objetivo específico y claro, nuestra
búsqueda será infructífera.

Tener la información correctas es una parte fundamental para una investigación. No importa
que tan bien puedas procesar algo o estructurarlo, si no es la información correcta, tu trabajo
carece de todo valor. En otras palabras, la credibilidad de tu trabajo de investigación tiene
mucho que ver con la información que utilizaste para llegar a tus conclusiones. Sin embargo,
el éxito de un trabajo de investigación no descansa solo en tener las fuentes de información
correctas, sino en procesarlas adecuadamente y hacer de ellas una puerta para encontrar más
preguntas y más respuestas. La investigación nunca es algo estático, mientras más investigas,
más encuentras; y, mientras más encuentras, más investigas. Por esa razón, es importante
saber lo que buscas y saber que lo estás buscando en el lugar correcto, no sea que después de
cavar un hoyo profundo, descubras que esa no era la mina que tenías que trabajar.

A. Definición

Normalmente, las fuentes pueden ser divididas en tres: primarias, secundarias y terciarias. O,
fuente de primera, segunda o tercera mano. Consideremos (A) la definición de cada una de
ellas, (B) la forma en la que interactúan entre ellas y (C) el beneficios que traerá para tu
investigación aprender a diferenciarlas correctamente.

Fuentes Primarias

Son aquello a lo que podemos llamar material “original” o fuentes de primera mano. Se trata de
aquellas fuentes básicas desde donde parten todas las derivaciones de un tema a investigar.
Por ejemplo, si estás investigando sobre acontecimientos o discusiones específicas que
acontecieron en la Asamblea General de los bautistas particulares en los años 1689 a 1694, lo
más básico a lo que puedes recurrir es a las minutas de la asamblea y el testimonio escrito de
testigos presenciales de las asambleas. En este caso, esa sería la fuente primaria.56

56 El Dr. James M. Renihan compiló algunas de las fuentes primarias más importantes de los bautistas
particulares del siglo XVII, tales como: las minutas de la Asamblea General de las iglesias y los documentos que
resultaron de esas asambleas o que fueron públicamente confesados como la confesión bautista de fe de 1689,
el catecismo bautista y un escrito sobre el sostenimiento de los pastores. El trabajo del Dr. Renihan está en su

61
Si tu investigación es en historia, las fuentes primarias son artefactos o documentos que
vienen directamente de el periodo de tiempo que estás estudiando: cartas, diarios, objetos,
mapas, incluso ropa57. Por ejemplo: En mi biblioteca tenga un libro que se llama “Viaje al
Nuevo Mundo – El Diario de Recuerdos de Patience Whipple”58, el cual consiste en una
publicación de las memorias de una mujer llamada Patience Whipple quien viajó desde
Europa hacia Norte América en el barco Mayflower y cuenta su travesía desde alta mar hasta
establecerse en un asentamiento que hicieron los peregrino en Plymouth. Estas entradas en
su diario van desde el 1 de octubre de 1620 al 10 de noviembre de 1621. ¡Es fascinante! Este
libro es la transcripción de una valiosa fuente primaria para hacer una investigación sobre el
Mayflower y el clima emocional y espiritual de su tripulación.

Si tu investigación es en literatura o filosofía (un escrito en particular o el pensamiento de


alguien), las fuentes primarias son los escritos que plasman el pensamiento que quieres
investigar o el documento específico sobre el que estás estudiando. Por ejemplo, si tu
investigación es sobre el pensamiento escatológico entre las iglesias reformadas en el siglo
XVII, es esencial que tu búsqueda sea hecha en lo que los pastores y teólogos escribieron en
este tiempo tocante a los eventos futuros, como el caso del tratado “Babilonia Mística
Conquistada”59 por Hanserd Knollys escrito en 1679, en el cual el autor expone las razones
detrás de la creencia contemporánea de ver a Roma como Babilonia y al papa como el
anticristo. Su interpretación futurística de Apocalipsis y su conexión con los eventos que se
vivían en Inglaterra en esos días hace de este tratado una buena fuente primaria para tu
investigación.

Siguiendo el mismo razonamiento, dependiendo del escenario en el que se encuentre tu


investigación, debes buscar la fuente primaria tratando de llegar hasta la fuente misma desde
donde todo comienza.

Fuentes Secundarias

Este tipo de fuentes tiene dos características principales: están basadas en las fuentes
primarias ⎯es decir, describe, interpreta, analiza y evalúa las fuentes primarias⎯ y,
normalmente, están dirigidas a una audiencia profesional o académica. Este tipo de fuentes
puede presentarse en forma de compilaciones, resúmenes, enciclopedias/diccionarios, y
listados de referencias sobre fuentes primarias. Las revistas especializadas y los trabajos
académicos (tesis, críticas y ensayos) son parte de este tipo de fuentes. Estas fuentes son

libro “Fe y Vida para los Bautistas” (Santo Domingo, Ecuador: Legado Bautista Confesional, 2020). Título
original en inglés: “Faith and Life for Baptist” (Palmdale, CA: Reformed Baptist Academic Press, 2016).
57 Turrebian, pg. 26.

58 Lasky, Kathryn; “A Journey to the New World – The Diary of Remember Patience Whipple” (New York, NY:

Scholastic Inc., 1996).


59 Puedes encontrar una transcripción desde el original en el libro “The Collected Works of HANSERD

KNOLLYS” editado por William L. Pitts Jr. y Rady Roldán−Figueroa (Macon, Georgia: Mercer University Press,
2017).

62
evidencia de segunda mano producto del análisis, investigación y conclusiones de otros, y
tienen un lugar importante en nuestro trabajo de investigación.

Un ejemplo muy didáctico de una fuente secundaria es el libro “El Debate del Canon”.60 Este
libro tiene un enfoque académico y es evidenciado por el hecho de que 31 profesores y
eruditos en el tema estuvieron involucrados en su elaboración. En la introducción del libro,
los editores dicen lo siguiente:

Nuestra meta en este proyecto ha sido hacer avanzar el estudio de los orígenes del
canon bíblico y tratar directamente con los temas importantes que se han levantado a
través de la investigación contemporánea. No hemos tratado de tomar ninguna
posición [en particular], aunque cada uno de los contribuidores tienen la suya, como
lo verá el lector. Por el contrario, hemos querido que el lector pueda ver cuan diverso
y complejo son los temas y puntos de visto sobre la formación del canon. Por supuesto,
la esperanza es que el lector sea capaz de hacer uso de la investigación mas actualizada
sobre este tema y adelante nuestro entendimiento del proceso canónico que produjo
la Biblia.61

El libro está dividido en tres partes y consta de 32 capítulos. También incluye un apéndice
detallado que está conformado por cuatro partes:

A. Fuentes Primarias para el Estudio de la Biblia Hebrea/Antiguo Testamento


B. Fuentes Primarias para el Estudio del Canon del Nuevo Testamento
C. Listas y Catálogos de Colecciones del Antiguo Testamento
D. Listas y Catálogos de Colecciones del Nuevo Testamento62

El apéndice de este libro es una forma de seguir guiando el paso para la investigación de
aquellos que recurran a esta fuente secundaria.

Aunque muchos artículos están dentro de la categoría de fuentes terciarias, el artículo


“‘Buenas y Necesarias Consecuencias’ o ‘Necesariamente Contenidas’: Un Método Bautista
Particular de Teología” del Dr. James M. Renihan63 es un excelente ejemplo de fuente
secundaria, y la razón es porque en este artículo se hace una interacción con un tema que
requiere del análisis de las fuentes primarias ⎯en este caso, evidencia escrita del
pensamiento paedobautista y bautista particular⎯ sobre el uso de las cosas contenidas en la
Escritura. Este artículo tiene conclusiones y análisis que todo aquel que está haciendo una

60 McDonald, Lee M; Sanders, James A. (editors); “The Canon Debate” (Peabody, Massachusetts: Hendrickson
Publishers, Inc., 2002).
61 Ibid, pg. 17.

62 Ibid, pg. vii.

63 Este artículo ha sido publicado como el Capítulo 8 de edición del año 2012 de la revista teológica Southern

California Reformed Baptist Pastor´s Conference Papers [Revista de la Conferencia de Pastores Bautistas Reformados
del Sur de California], Volumen I – 2012 (Palmdale, CA; Reformed Baptist Academic Press, 2012).

63
investigación sobre la diferencia hermenéutica entre presbiterianos y bautistas a la luz de la
historia tiene que leerlo. Por supuesto, después de leer el artículo, el investigador deberá ir a
las fuentes originales para comprobar lo que se ha dicho, sin embargo, analizar la interacción
que se ha hecho sobre este asunto enriquecerá su lectura.

Las tesis son otra forma de fuente secundaria muy importante. Este tipo de escrito demanda
una medida de investigación superior a cualquier otro tipo de escrito, sobre todo cuando se
trata de una tesis doctoral. Uno de los libros más grandes que tengo en mi oficina es la tesis
doctoral del Dr. Curt Daniel, la cual lleva por título: “El Hipercalvinismo y John Gill”64. Tuve
el privilegio de tenerlo como profesor hace unos años atrás. Durante una de sus clases, fue
asombroso escucharlo decir que a lo largo de sus años de investigación, leyó todos los libros
de John Gill y la gran mayoría de los que se han escrito sobre él. Literalmente, no hay nadie
en el mundo que sepa más de John Gill y sobre la historia del Calvinismo que él. Su tesis
tiene 912 páginas y es producto de una investigación de muchos años. En su apéndice,
contiene algunos documentos que constituyen fuentes primarias que no están disponibles en
ningún otro libro o publicación.

Fuentes Terciarias

Son aquellas que sintetizan las fuentes secundarias con el propósito de hacerlas accesible a
un público más general.65 Las encontramos en forma de libros de textos, enciclopedias, libros
introductorios y revistas que tienen como enfoque un público más amplio. Veamos algunos
ejemplos:

El artículo: “¿Qué es el Calvinismo?”66 escrito por Ian Hamilton y publicado en la Revista


Estandarte de la Verdad [The Banner of Truth magazine] en su edición de Octubre de 2018, es
un buen ejemplo de fuente terciaria. Esta revista tiene una alta reputación entre pastores
reformados por el excelente contenido que ha proporcionado desde el día que hizo su
aparición. Esta revista contiene reseñas hechas algunos pastores y teólogos sobre algunos
libros y diferentes artículos sobre temas doctrinales. Aunque los artículos tienen una
excelente calidad, el enfoque de la revista es a los miembros de la iglesia de Cristo, es decir,
no es una revista académica. Si tu fueras un hombre que empieza sus estudios teológicos y
tuvieras la responsabilidad de hacer un trabajo sobre “La Historia del Calvinismo” (sin nunca
haber escuchado ni siquiera el término), este es el tipo de artículos que debes leer primero.
Te darán una visión panorámica desde una fuente segura que te dará la oportunidad de ver
la silueta del camino que tendrás que recorrer si quieres hacer una investigación apropiada.

64 Daniel, Curt; “Hyper−Calvinism and John Gill” (University of Edinburgh, Scotland; 1983).
65 Esta es la misma definición dada tanto por Turabian (A Manual for Writers, pg. 28) como por el libro “The
Craft of Research” de Wayne C. Booth, Gregory G. Colomb y Joseph H. Williams (University of Chicago, 2008,
pg. 69).
66 Hamilton, Ian; “WHAT IS CALVINISM?”, The Banner of Truth magazine (Octubre 2018), pg. 1−4.

64
El libro “Dios sin Pasiones – Una Introducción”67 del Dr. Samuel Renihan es un buen ejemplo
de este tipo de fuente. Aún con toda la capacidad de hacer un tratado académico, el autor
decidió abordar un asunto tan profundo como la Impasibilidad de Dios (en medio de un
tiempo de mucho conflicto) desde una perspectiva pastoral. En el prefacio, el autor dice:

Esta introducción tiene el propósito de dar una sencilla, clara y práctica presentación
de la doctrina de la impasibilidad de Dios para todos desde el púlpito a las bancas de
la iglesia. De hecho, este material fue originalmente presentado en forma de seis
sermones a la Trinity Reformed Baptist Church [Iglesia Bautista Reformada de la
Trinidad] donde soy uno de los pastores.68

Este pequeño libro ofrece una mirada panorámica y, al mismo tiempo, profunda de la
doctrina de la impasibilidad divina desde una perspectiva muy práctica. Definitivamente, si
alguien tiene la necesidad de hacer una investigación sobre la impasibilidad, este es uno de
los primeros libros que debe leer.

Otro formato en el que aparecen las fuentes terciarias es el de manual o “handbook” que
algunos autores hacen con el propósito de guiar a estudiantes, pastores y hermanos en
general sobre un tema en particular. Por ejemplo, Denis R. Janz, profesor de Historia del
Cristianismo en Loyola University en New Orleans, hizo un “handbook” sobre Martín
Lutero69. En este libro, el autor ofrece tres cosas fundamentales. Primero, una cronología de
la vida de Lutero con una referencia a los escritos más importantes, la cual empieza en 1483
con el nacimiento del gran reformador y termina en 1546 con su muerte y funeral en la iglesia
castillo de Wittenberg. Segundo, una lista de 58 artículos en los que el autor explica la forma
en la que Lutero entendió y expresó en sus escritos cosas como los ángeles, la apócrifa, la
ascensión, el bautismo, los credos, la muerte, el decálogo, el diablo, la escatología, el mal, la
extremaunción, la fe, el libre albedrío, el evangelio, el infierno, la ley, la cena del Señor, el
matrimonio, María, la ordenación, la sexualidad, el pecado, la teología, la trinidad, la guerra,
la mujer, la adoración, entre otras. Tercero, también se incluyen una lista con sugerencia para
estudios posteriores o para profundizar en la vida de Lutero.

B. Relación mutua

Con el propósito de entender mejor cómo diferenciar estas tres fuentes, es importante ver
como se relacionan entre ellas. Imagínate a una familia que está programando sus vacaciones.
El papá, en base a su presupuesto, escoge la ciudad en la que le gustaría pasar una semana
con su familia e invierte todo el tiempo libre que tiene en revisar las diferentes actividades
que se pueden realizar en esa ciudad. De pronto, mientras ve la lista de lugares para comer,

67 Renihan, Samuel; “God Without Passions – A Primer” (Palmdale, CA: Reformed Baptist Academic Press,
2015.
68 Ibid, pg. 17.

69 Janz, Denis R.; “The Westminster Handbook to Martin Luther” (Louisville, KY: Westminster John Knox Press,

2010)

65
se da cuenta de la existencia de un restaurante de comida italiana ⎯la comida favorita de su
familia⎯. Sin dudarlo, comienza a buscar en internet qué es lo que dicen sobre el restaurante
aquellos que ya han estado allí. Mientras revisa, encuentra que hay una opinión compartida,
algunos tienen el más alto concepto de la comida, pero otros visiblemente mostraban en sus
palabras el descontento por el ruido del lugar y el mal servicio. Debido a la inmensa cantidad
de comentarios, el papá de la familia decide ir a una página donde un grupo de personas
⎯en base a los comentarios en internet⎯ presenta de manera resumida si un restaurant es
recomendable o no. Aunque según esta página el restaurante italiano no es recomendable,
aun así el papá decide que cuando empiecen sus vacaciones, lo primero que harán es ir a
comprobarlo por ellos mismos.

En esta ilustración, el investigador es el padre de familia el cual tiene una pregunta que debe
tratar de resolver (¿debo llevar a mi familia a ese restaurante italiano?). Hay tres fuentes en
las que puede basar su investigación: (a) la página de internet que dice si el restaurante es o
no recomendable basado en los comentarios de aquellos que han ido a ese restaurante, (b)
los comentarios de los que han ido a ese restaurante y (c) el restaurante mismo. La opción (a)
es una fuente terciaria. Está basada en la opción (b) y tiene el propósito de simplificar el
trabajo de viajeros y familias que quieren tener una respuesta rápida sobre si deben o no ir a
un restaurante. La opción (b) es una fuente secundaria, está basada en la experiencia de
aquellos que han ido al restaurante. Estos comentarios son tantos y tan diversos, que requiere
de tiempo y discernimiento para hacer un balance. Al escuchar todos estos comentarios, aun
cuando algunos podrían ser desbalanceados e incluso un poco groseros, siempre hay algo
que aprender y hay detalles que salen a la luz que nos permiten mirar de manera un poco
más objetiva la realidad. Finalmente, la opción (c) es la fuente primaria de esta ilustración.
La mejor y más completa forma de hacer una investigación sobre el restaurante es ir al
restaurante mismo. Al sentarte en una de las mesas podrás ver si realmente la atención es
buena o mala, si hay ruido o no y, sobre todo, si la comida es exquisita o no. Estar en el
restaurante hará que puedas valorar la precisión o exageración de cada uno de los
comentarios y podrás hacer los tuyos a la luz de los que ves y experimentas estando allí.

Permíteme analizar un poco más nuestra ilustración. ¿Podríamos decir que la página de
internet para viajeros que hace conclusiones en base a los comentarios en internet es una
fuente sin ningún valor para la investigación de este padre de familia? Por supuesto que no.
Esta página tiene su valor y su lugar (de hecho, cada día hay más páginas como estas y las
más conocidas cómo tripadvisor.com se ha convertido en una herramienta imprescindible para
todo viajero). Uno recurre a la fuentes terciarias cuando no sabe nada sobre un tema y quiere
ver las cosas de la manera más general con el propósito de tener una perspectiva que le
permita descubrir de qué se trata y qué es lo que hay que saber. Aplicándolo a nuestro campo
teológico, imaginemos que se te asigna un trabajo escrito de investigación sobre Criticismo
Textual. Estás emocionado al respecto, pero hay un solo problema: ¡no sabes nada sobre
criticismo textual! ¿Qué harías? En un caso como este, una excelente manera de comenzar tu

66
camino es ir a una fuente terciaria que te explique las cosas esenciales sobre el criticismo
textual y “te ponga al día” sobre algunas de las discusiones que hay al respecto. Luego, es
fundamental que, después de tener un panorama general, te muevas hacia las fuentes
secundarias con el propósito de ahondar aspectos mucho más específicos. Conocer dos
perspectivas sobre uno de los temas de debate te permitirá tener una visión más completa.

C. Beneficios

Aprender a identificar correctamente cada fuente nos permitirá tomar el máximo beneficio
de cada una de ellas. Como hemos visto, cada una tiene su lugar y su importancia dentro de
nuestra investigación, todo depende de saber lo que estamos buscando. Si tu trabajo de
investigación tiene un enfoque general en algún tema, entonces bien puedes tomar algunos
libros introductorios y leerlos para bosquejar una idea panorámica en tu mente. A ese nivel,
eso sería suficiente, pero a medida que avanza la profundidad del enfoque de tu trabajo,
puedes comenzar leyendo fuentes terciarias con el propósito de introducirte adecuadamente
al tema en el que estás trabajando para hacer tu investigación sobre fuentes secundarias o
primarias. Permíteme sintetizar la utilidad o los beneficios de cada una de estas fuentes de la
siguiente manera:

Con respecto a las Fuentes Terciarias – Son ideales para introducirte en un tema poco o nada
conocido. Son apropiadas cuando se utilizan como una base sobre la que empezarás tu
verdadera investigación de un tema. Todos los teólogos, pastores y estudiantes de la Biblia
deben leer constantemente este tipo de libros como una forma de mantener su mente en
conexión con temas que no hacen parte de las cosas con las que no está familiarizado.

Con respecto a las Fuentes Secundarias – Son las fuentes a las que debemos recurrir cuando
estamos especializándonos en un tema. Este tipo de fuentes nos mantienen actualizados en
los temas de discusión y posturas sobre aspectos específicos de un tema. También, nos
ayudan a encontrar otros puntos de vista, no solo a saber que existen sino a considerar sus
argumentos y evaluarlos. Como dice Turabian: “Una buena investigación no está completa
hasta que el investigador reconoce y responde al punto de vista que otros tienen y a las
preguntas y desacuerdos que predice que sus lectores tendrán. Tu puedes encontrar mucho
de los puntos de vista que otros tienen en fuentes secundarias”.70 Además, uno de los grandes
beneficios de las fuentes secundarias es que te ofrecen la oportunidad de encontrar tu propio
modelo o forma de investigación al considerar los modelos de otros. En otras palabras, no
solo es una ventana para ver el contenido de la investigación de otros (el qué), sino de analizar
la forma en que llevaron a cabo ese proceso (el cómo). Entonces, una fuente secundaria es un
modelo de como otros hicieron su investigación y como desarrollaron su análisis conceptual.
Por eso, cuando leas una tesis o cualquier otra fuente secundaria, mira como el autor

70 Turabin, pg. 27.

67
investigó, procesó la información y la presentó, ver como otros utilizan la lógica y la forma
en la que presentan sus argumentos puede ser algo muy refrescante.

Con respecto a las Fuentes Primarias – Son la base esencial o el fundamento de donde nace una
investigación.

5. ¿Cómo debo presentar mis trabajos escritos?


Esta clase la llevaremos a cabo considerando el documento «Normas para la presentación de
trabajos escritos».

I. Del formato de hoja

a. Tamaño de Hoja – A4.


b. Márgenes – Normal.
c. Tipo y Tamaño de Letra – Times New Roman, pt.12.
d. Espaciado (entre párrafos) – 6 pt.
e. Interlineado (entre renglones) – 1,5.

II. De las partes de un ensayo

a. Hoja de presentación – Debe incluir el Nombre de la Escuela, de la materia, del Estudiante,


nombre del profesor, fecha y ciudad.

b. Hoja de introducción – Debe ser breve y producir interés en el tema que está por
exponerse.

c. Hoja de objetivos – Debe incluir de manera clara el propósito del documento. Los objetivos
pudieran ser varios. Es importante ser específico. Las preguntas claves en esto son: ¿Qué
quiero probar por medio de este estudio? ¿Qué quiero lograr en el lector al exponer sobre
esto?

d. Cuerpo del documento – Debe estar justificado. Los puntos y subpuntos deben estar
correctamente diferenciados.

e. Conclusión – Debe contener conclusiones sobre el tema expuesto. Se puede citar a un autor
e incluso muchas veces se usan estrofas de himnos o versículos bíblicos, sin embargo, lo que
debe ser resaltado son las palabras finales del autor del documento en las cuales expone sus
conclusiones en base a lo expuesto. Puede tener un tono aplicativo y práctico.

d. Bibliografía – Los libros consultados deben estar incluidos en una lista. Esto es aparte de
las referencias al pie de página. Muchas veces se consultan libros sin necesariamente de
tomar párrafos ni oraciones de él. Se utiliza también para recomendar libros que exponen el
tema tratado en el documento de una manera apropiada y que pueden ser usados para
profundizar más sobre él.

68
IV. Del formato para citas

a. Citas de otro autor o libro

Cuando se cita a algún autor o libro, debe haber una clara diferencia entre lo original y lo que
se cita del autor citado. La forma correcta de hacerlo es:

“Si el comentario es breve, debe estar entre comillas y debe ponerse al final una nota de
página donde se cite detalladamente la cita”71.

Si el contenido del comentario es más largo, es decir, de más de una oración o un


párrafo, debe estar separado del escrito, en un párrafo diferenciado del margen del
documento y debe contener su correspondiente pie de página. No hace falta comillas. 72

La forma de escribir un pie de página debe seguir el siguiente formato:

Apellido, Nombre del autor. “Nombre del Libro”: el cual debe estar completo (Ciudad de
Edición o Impresión, Editorial, año de publicación), número de página del libro de donde se
tomó la información.

b. Citas de la Biblia.

1. Cuando se cita la Escritura en medio del escrito, como una referencia o una cita directa de
un versículo o pasaje, se debe usar el siguiente formato:

“Yo soy el camino, la verdad y la vida” (Jn. 14:6).

Es decir, entre comillas y poniendo el punto al final de la referencia. Es importante


utilizar la abreviatura correcta del libro de la Biblia al que se hace referencia.

2. Cuando se cita un pasaje de la Escritura que tiene más de tres líneas, debe ser puesto en
forma de un párrafo separado. Nota: NO agregues puntos a la cita de la Escritura sino que
debe ser puesto tal y como aparece en el texto. No se debe poner comillas ni ninguna otra
puntuación extra al texto.

La forma correcta de abreviar que debe ser usada en referencia a los diferentes libros debe
ser la siguiente (Nota – algunos nombres cortos no son abreviados):

71Smith, Morton H. “El Caso de la Subscripción Completa,” en la práctica de la Subcripción Confesional, editado
por David W. Hall (Oak Ridge, TN: The Covenant Foundation, 1995), 32.
72 Murray, Iain. ¿Pentecostés hoy?: La Base bíblica para el entendimiento de un avivamiento (Carlisle, PA:

Estandarte de la Verdad, 1998), 61.

69
Genesis – Gen. Éxodo – Ex. Levítico – Lev.
Números – Num. Deuteronomio – Dt. Josué – Jos.
Jueces – Jue. Rut – Rut 1 Samuel – 1 Sam.
2 Samuel – 2 Sam. 1 Reyes –1 Rey. 2 Reyes – 2 Rey.
1 Crónicas –1 Cro. 2 Crónicas – 2 Cro. Esdras – Esd.
Nehemias – Neh. Ester – Est. Job – Job
Salmos – Sal. Proverbios – Prov. Eclesiastés – Ecl.
Cantar de los cantares – Cant. Isaías – Is. Jeremías – Jer.
Lamentaciones – Lam. Ezequiel – Eze. Daniel – Dan.
Oseas – Os. Joel – Joel Amos – Amos
Abdias – Ab. Jonas – Jon. Miqueas – Miq.
Nahum – Nah. Habacuc – Hab. Sofonías – Sof.
Hageo – Hag. Zacarías – Zac. Malaquías – Mal.
Mateo – Mat. Marcos – Mr. Lucas – Luc.
Juan – Jn. Hechos – Hch. Romanos – Rom.
1 Corintios – 1 Cor. 2 Corintios – 2 Cor. Gálatas – Gal.
Efesios – Ef. Filipenses – Fil. Colosenses – Col.
1 Tesalonisenses – 1 Tes. 2 Tesalonisenses – 2 Tes. 1 Timoteo – 1 Tim.
2 Timoteo – 2 Tim. Tito – Tit. Filemón – Flm.
Hebros – Heb. Santiago – Stg. 1 Pedro – 1 Ped.
2 Pedro – 2 Ped. 1 Juan – 1 Jn. 2 Juan – 2 Jn.
3 Juan – 3 Jn. Judas – Jud. Apocalipsis – Apo.

70
III. La Piedad del Estudiante de Teología
El llamado de Cristo a los hombres fieles
INTRODUCCIÓN

I. El lugar y propósito de este curso en el plan de estudios

A. Servir como una preparación para los otros cursos

B. Proporcionar una perspectiva sobre la educación teológica

II. Una nota sobre la toma de notas

PARTE 1: EL LLAMADO A SER HOMBRES FIELES

SECCIÓN 1: EL EVANGELIO QUE PERMANECE DE GENERACIÓN EN GENERACIÓN


(2 TIM. 2:1-13)

I. Preservado a través de la gracia que da poder (v. 1)

A. La fuerza que Dios suministra

B. La dependencia que necesitamos

II. Preservado al confiar el Evangelio a hombres fieles (v. 2)

A. Parte de la vocación del ministerio evangélico es formar a otros ministros del


Evangelio

B. Este trabajo requiere soportar dificultades y sufrimientos

III. Preservado a través del estímulo de la Palabra de Dios (vv. 3-13)

A. Medite en estas ilustraciones instructivas

1. El buen soldado

2. El atleta

3. El agricultor

B. Recuerde estos ejemplos esenciales

1. El ejemplo de Jesucristo

2. El ejemplo de Pablo

C. Recuerda esta «palabra fiel»

71
SECCIÓN 2: LAS CUALIDADES DE LOS HOMBRES FIELES (1 TIM. 3:1-13)

I. La posición privilegiada

A. Una buena obra por la naturaleza de la tarea

B. Una buena obra porque es una «palabra fiel»

C. Una buena obra porque es digna de nuestras aspiraciones y deseos

II. Las principales cualificaciones

A. Cualificaciones relativas a la vida familiar

B. Cualificaciones relativas a la vida personal

C. Cualificaciones relativas a la vida y a las capacidades espirituales

III. La obra primaria

Conclusiones y aplicaciones:

72
PARTE 2: CULTIVANDO UN CARÁCTER A LA SEMEJANZA DE CRISTO

SECCIÓN 1: LOS POBRES EN ESPÍRITU (MATEO 5:3)

I. Quiénes NO son los «pobres en espíritu»

A. No son necesariamente los que son pobres financieramente

B. No son necesariamente los que tienen una «personalidad pobre»

C. No son los que tienen una falsa humildad

D. Ni siquiera lo son todos aquellos que son espiritualmente pobres

II. Quiénes son los «pobres en espíritu»

A. Los que tienen un punto de visto correcto de sí mismos ante el Dios Trino

B. Ejemplos de esta pobreza en espíritu a lo largo de la Escritura

C. Los pobres en espíritu dependen completamente de Dios para su salvación

III. La bendición de los pobres en espíritu

A. Tienes esta bendición

B. ¡Posees el Reino de los Cielos!

Conclusiones y aplicaciones:

73
SECCIÓN 2: EL LLANTO ESPIRITUAL (MAT. 5:4)

I. Lo que NO es esta gracia sobrenatural del llanto

A. NO es el llanto que se produce por ser atrapado en el pecado

B. NO es el llanto que se produce por no poder cumplir tus deseos

C. NO es tener un pesimismo natural

D. NO es el dolor por causa del duelo - la muerte de un ser querido

II. Lo que es esta gracia sobrenatural del llanto

A. Es un llanto por el pecado centrado en Dios

B. Es un llanto por nuestro propio pecado

C. Es un llanto por los pecados de los demás

III. El consuelo que Cristo da a los que lloran espiritualmente

A. La paradoja del Reino de los Cielos

B. El anticipo del consuelo que tenemos ahora

C. La plenitud del consuelo que vendrá después

Conclusiones y aplicaciones:

74
SECCIÓN 3: EL PODER DE LA MANSEDUMBRE (MAT. 5:5)

I. Conceptos erróneos sobre la mansedumbre

A. Dos razones por las que la mansedumbre no se valora hoy en día

1. Vivimos en un mundo que cree en el poder de la fuerza humana

2. Muchas personas asocian erróneamente la mansedumbre con debilidad

B. La mansedumbre NO es un rasgo de personalidad de alguien tímido o indeciso

C. La mansedumbre NO es simplemente alguien que es agradable o fácil de tratar

D. La mansedumbre NO es alguien que cobarde y débil que se deja pisotear por otros

II. El significado bíblico de la mansedumbre

A. El uso de la palabra

B. ¿Cómo se ve en la práctica?

C. Ejemplos de la Escritura

III. Motivos para crecer en la gracia de la mansedumbre

A. El llamado a crecer en gracia

B. Las bendiciones de la mansedumbre que tenemos ahora

C. La bendición de la mansedumbre que vendrá después

Conclusiones y aplicaciones:

75
SECCIÓN 4: CULTIVANDO EL HAMBRE ESPIRITUAL (MAT. 5:6)

I. Un apetito terrenal (lo que NO es tener hambre y sed de justicia)

A. El apetito terrenal vive para las posesiones pasajeras de este mundo

B. El apetito terrenal considera la rectitud como algo «extra opcional»

C. El apetito terrenal desea una justicia meramente externa

II. Un apetito celestial (el significado de hambre y sed de justicia)

A. El significado de «justicia»

B. ¿Cómo se ve en la práctica?

C. En última instancia es CRISTO lo que anhelamos: ser UNO con Él

III. La verdadera satisfacción (lo que Cristo da a las almas hambrientas de justicia)

A. La paradoja

B. El anticipo de la satisfacción que tenemos ahora

C. La plenitud de la satisfacción que vendrá después

Conclusiones y aplicaciones:

76
SECCIÓN 5: CULTIVANDO UN CORAZÓN MISERICORDIOSO (MAT. 5:7)

I. Los principios de la misericordia (¿Qué es la misericordia?)

A. Su objetivo principal

B. Su fundamento apropiado

II. La práctica de la misericordia

A. Involucra a la persona en su conjunto

B. Implica a la Iglesia en su conjunto

C. Se extiende a CUALQUIER persona que se encuentre en una situación de necesidad

III. La promesa de la misericordia

A. Interpretación errónea de esta promesa

B. La bendición de recibir misericordia en este tiempo

C. La bendición de recibir misericordia en el día postrero

Conclusiones y aplicaciones:

77
SECCIÓN 6: PUREZA DE CORAZÓN (MAT. 5:8)

I. La condición necesaria (¿Qué quiere decir Jesús con «limpio de corazón»?)

A. Es la Pureza Integral que comienza en nuestro «hombre interior» (puro de corazón)

B. Es una Pureza descrita como Limpieza Moral y Compromiso Singular

C. ¿Cómo podemos llegar a esto?

II. La visión gloriosa (¿Qué quiere decir Jesús con «verán a Dios»?)

A. Una aclaración

B. Una percepción presente: Ver a Dios ahora

C. La visión beatífica: Ver a Dios en la gloria

Conclusiones y aplicaciones:

78
SECCIÓN 7: SIENDO PACIFICADORES (MAT. 5:9)

I. Lo que NO son los pacificadores

A. No son simples amantes de la paz

B. No son fabricantes de una paz falsa

C. No son los rompedores de la paz

D. No son los perfeccionadores de la paz

II. Lo que son los pacificadores

A. Aquellos que participan de la verdadera paz con Dios

B. Aquellos que proclaman el Evangelio de la Paz

C. Aquellos que persiguen la gracia de la paz en todos los ámbitos de la vida

D. Aquellos que pagan el precio de la paz

III. La bendición pronunciada sobre los pacificadores

Conclusiones y aplicaciones:

79
SECCIÓN 8: DISPUESTOS A SUFRIR POR LA CAUSA DE CRISTO (MAT. 5:10-12)

I. La realidad de la persecución

A. Es una realidad a la que se enfrenta todo verdadero cristiano

B. Es una realidad que se presenta de diversas formas

C. Es una realidad que proviene de varias fuentes

II. Los motivos de la persecución

A. Razones en aquel que es perseguido

B. Razones en aquel que persigue

III. La respuesta a la persecución

A. La respuesta adecuada: ¡Alégrense y gócense!

B. Las razones adecuadas

Conclusiones y aplicaciones:

80
PARTE 3: PRESIONANDO HACIA LA META

SECCIÓN 1: LA META DE LA MADUREZ EN CRISTO (COL. 1:24-29)

El apóstol Pablo ejemplificó un corazón maduro en Cristo...

I. Un corazón dispuesto a sufrir alegremente por Cristo y su Iglesia (v. 24)

A. Pablo no fue ajeno al sufrimiento en su trabajo como plantador de iglesias

B. Pablo sufrió por la Iglesia de Cristo

C. Pablo sufrió por causa de Cristo

II. Un corazón dispuesto a proclamar fielmente el Evangelio de Cristo (vv. 25-28a)

A. Pablo, ministro del Evangelio

B. El mensaje que proclamó Pablo

III. Un corazón dispuesto a trabajar incesantemente por la madurez del pueblo de Dios (vv.
28b-29)

Conclusiones y aplicaciones:

81
SECCIÓN 2: LA META DE LA GLORIA DE DIOS EN LOS CIELOS NUEVOS Y LA TIERRA
NUEVA (AP. 21:1-8)

Trabajamos con esperanza, sabiendo que nuestro trabajo no es en vano, pues nuestra
esperanza es segura.

I. La esperanza de una nueva creación (v. 1a)

II. La esperanza de una morada santa (v. 1b-3)

III. La esperanza de la consumación eterna (v. 2-3)

IV. La esperanza de un tierno consuelo (v. 4)

V. La esperanza de una realización segura (vv. 5-6a)

VI. La esperanza de una salvación satisfactoria para el alma (v. 6b-7)

VII. La esperanza de una separación segura (v. 8)

Conclusiones y aplicaciones:

82

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