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Bosquejo Salmo 1

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Salmo 1 - Cultivando el corazón.

Introducción

¿En dónde se encuentra nuestra felicidad? ¿Qué es lo que amamos? ¿Cómo tener una
relación con Dios? ¿Qué nos motiva a obedecer y relacionarnos con él?

¿Nos acercamos a Dios por un sentimiento de deleite, de dependencia en donde reconozco


que sin Dios no puedo hacer nada? ¿O por un sentimiento de independencia en donde me
percibo como alguien autosuficiente? Examinemos nuestro corazón porque nuestro corazón
es engañoso (Jeremías 17:9-10).

Cuando hablamos de amar a Dios, se trata de entregarle nuestro corazón a Él, nuestros
anhelos, nuestro deleite.

Contexto

Se dice que los Salmos son como una anatomía (estudios de las partes del cuerpo) del
alma porque los salmos expresan todos los sentimientos y emociones humanos que no
estén expresados en otra parte de la Biblia, hay duda, tristeza, enojo, alegría, esperanza,
todas las expresiones que agitan y mueven nuestro corazón.

Lo interesante de los Salmos es que no vemos la censura de Dios para reprimir o silenciar
estos sentimientos. Las emociones y sentimientos son permitidos y podemos expresarlo
delante de Dios. Pero aparte de ser un desahogo de emociones, los Salmos son una
declaración de que a pesar de las por las situaciones que estamos pasando, en donde
nuestras emociones afloran, seguimos confiando en Dios, en sus promesas, en su carácter.

Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante
guerra, Yo estaré confiado. Salmo 27:3

El primer salmo es la puerta de entrada a todos los salmos. En este salmo se presenta un
claro contraste entre los justos y los malvados. ¿Dónde está la diferencia entre el justo y el
malvado? El Salmo nos lleva al lugar donde radica esa diferencia, que es en el corazón. El
cambio siempre es de adentro hacia afuera. Si tu quieres cambiar tu vida, tu forma de
pensar, tu forma de actuar, debes cambiar tu corazón -recuerden que en la Biblia mente y
corazón están unidos.

Desarrollo

1.- La diferencia entre alguien que ama Dios (justo) y alguien que no lo ama (malvados)

v.1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en


camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;

Bienaventurado el varón
La primera palabra es bienaventurado, significa literalmente feliz, dichoso, alegre y es usada
para referirse al justo. Hay alegría para quien vive para Dios, hay bienaventuranza, hay
felicidad. Podemos suponer primero que existe la felicidad para el hombre, no la felicidad
que nos muestra la sociedad, sino una felicidad bíblica.

Hay alegría para quienes aman a Dios. Acá viene el contraste:

“no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de


escarnecedores se ha sentado;”

El orden de los verbos parecen indicar un estilo de vida al mal que va empeorando, en el
que uno primero anda en el consejo de los malos, luego se detiene en el camino y
finalmente establece su lugar permanente en compañía de los malvados, se sienta en la
silla de los escarnecedores.

a) “Alguien que camina en consejo de malos”: Comamos y bebamos que mañana


moriremos. El consejo es el plan, el pensamiento, las ideas. ¿Es la voz de Dios nuestra
mayor influencia para tomar decisiones?

b) “Estar en el camino de pecadores”: Quien ya es dominado por un pensamiento que se


opone a Dios, va por el camino de la perdición, toma decisiones en base a pensamientos
personales, creyendo en su propio criterio acerca de cómo vivir, no escuchando la voz de
Dios. Alguien que no comete un pecado aislado, sino que vive una vida dominada y
moldeada por ese pecado. El pecado no solo ha pasado de ser un pensamiento sino una
conducta.

c) “Ni en silla de escarnecedores se ha sentado”: Porque ha seguido el consejo, el


pensamiento y ha estado en el camino de pecadores, entonces toma el estilo de vida, se
sienta en la silla de escarnecedores quiere decir que su identidad es la de un pecador que
no reconoce a Cristo. Esta persona ya ha adoptado un estilo de vida pecaminoso y va
menospreciando a los justos. Alguien que rechaza la instrucción o corrección. Se sienta, se
establece, se compromete con este sistema.. La conducta nos lleva a una identidad.

Esto describe la vida inmersa en el pecado, porque el pecado va de a poco en la vida hasta
destruirnos o dominarnos por completo. Empieza con un pensamiento y termina con un
estilo de vida alejado de Dios

v.2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia,

Por un lado, así vivíamos todos nosotros antes de conocer a Dios. Ahora veamos cómo vive
el hombre bienaventurado. La diferencia básica entonces entre estos el justo y el malvado,
está en aquello que cautiva su corazón, aquello que consideramos precioso.

En esto consiste la vida cristiana, en vivir deleitado en Dios, Salmo 27:4 Una cosa he
demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi
vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo.
Cuando busco deleitarse en Dios por consecuencia evitaremos la caída, la tentación. No
podemos reducir la vida cristiana a evitar caer en el pecado, evitar. Cuando te deleitas en el
Señor, evitarás el pecado. Si vamos a hacer algo que sea amar a Dios con todo el corazón,
alma y fuerzas.

v.2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia,

Feliz el hombre que no ha seguido estos consejos ni ha estado en estos caminos ni ha


adoptado esta identidad, sino que se deleita en conocer a Dios, en tener una relación con
él, su corazón anhela estar con Dios de día y de noche.

No se trata de una cuestión de comportamiento sino que del corazón, porque su corazón
está en deleitarse en el Señor entonces su vida es marcada por seguir el consejo de Dios,
andar en sus caminos y tener una identidad marcada por Cristo.

Necesitas transformar tu corazón por medio del evangelio, no solo para salvarte sino que
para cambiar toda tu vida. Entregando nuestro corazón a Dios, búscale y lo hallarás porque
Él está disponible ahora. Para deleitarte en Dios necesitamos nutrir nuestro conocimiento,
llenarnos de Cristo disciplinar nuestro corazón y esto cambiará automáticamente nuestra
forma de andar, nuestra forma de vivir.

está su delicia, contentamiento, voluntad, querer, placer, deseo, una cosa valiosa,
una cuestión.

¿Está Dios tu placer mayor, está tu corazón deseando conocerle y amarle más?

Y en su ley medita de día y de noche. El verbo acá literalmente significa emitir un sonido,
como ese sonido que uno hace cuando lee en voz baja, pero también quiere decir
reflexionar. Bienaventurado el hombre que busca la guía de Dios para su vida.

Cuántos meditamos en su palabra, no una meditación para vaciar nuestra mente y ponerla
en blanco, sino para llenar la mente de Cristo, de sus palabras, recordarlo y recordarlo y
recordarlo, de día y de noche.

Diagrama para nutrir el corazón o alimentar nuestra relación con Dios, lo básico:

v. 3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su


tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará.

Esta metáfora no es de un árbol que por casualidad nació al lado de un río o corrientes de
agua, sino que de alguien que intencionalmente lo plantó y lo cercó de fuentes de agua para
que su nutrición no falte.

a) Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas: La imagen de un árbol


plantado junto a corrientes de aguas es hermosa. Cuando nos deleitamos en Dios, cuando
nos alimentamos de su palabra cada día, cuando somos llenos del evangelio, este
evangelio echará raíces en nuestro corazón y será firme como un árbol plantado junto a
corrientes de agua,
Corrientes. Como el árbol bebe de la corriente de agua, el justo bebe de la palabra del
Señor.

En la vida cristiana somos plantados por Dios mismo como nuestro labrador, la gracia, el
perdón, la misericordia no faltarán, serán como corrientes de agua. Nunca dependes de tus
propios esfuerzos para permanecer en el Señor, nunca se trata de tu propia voluntad.

b) Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae: Espera en Dios, no será de inmediato


el resultado, no es instantáneo, express, no es como calentar la comida en el microonda,
requiere de tiempo, como leer una receta, comprar los ingredientes de buena calidad, y
preparar con calma y amor la comida para luego disfrutar. “Encomienda al Señor todo
cuanto haces, confía en que él te ayudará a realizarlo, y él lo hará.” Salmo. 37:5

Hay transformación para tu corazón, la conducta no viene antes del corazón cautivado es el
corazón cautivado y después vienen los frutos. Aferrados a Él nuestras vidas cambiarán, así
como los frutos toman su tiempo, es de forma paulatina. No te frustres si no ves los cambios
rápidos, si eres árbol plantado por Él vas a producir frutos en su tiempo. Sigue buscando
más que cambiar, deleitarte en el Señor, ten paciencia.

Si somos árbol plantados por Él, vamos a cambiar, un corazón que se deleita en el Señor
prosperará.

c) Y todo lo que hace, prosperará. Y todo lo que hace, prosperará: Dios es nuestro
labrador, así que veremos resultados sí o sí, Dios no nos dejará como estamos, él nos
santifica, él nos transforma nuestra vida será firme y nuestra vida estará enraizada en el
evangelio, tendremos raíces fuertes que nos permitirán soportar las pruebas, vencer la
tentación, vivir una vida comprometida con nuestro Señor.

No se trata de recibir bendiciones, millones, se trata de lo que dice el Salmista, -deléitate así
mismo en el Señor y él concederá las peticiones de tu corazón, porque un corazón deleitado
en el Señor va a pedir y desear cosas que son de la voluntad de Dios.

San Agustín dijo “ama al Señor y haz lo que quieras”, porque amando a Dios vas a hacer lo
que Él desea, amar lo que Él ama, es tu corazón el que debe cambiar. Esto nos llevará a
ser un esposo fiel que sirve a su esposa, un padre que conduce con amor a sus hijos para
que puedan ver el evangelio influenciando sus decisiones.

¿Hoy vas a ser alguien que se deleita en Dios, que depende de Él, o vas a ser o eres
alguien autosuficiente que no necesita de nadie para vivir, que cree saberlas todas, que
jamás pide perdón, que no reconoce su condición de una persona necesitada -
Bienaventurados los pobres de espíritu, que no se arrepiente? ¿O quieres ser alguien que
depende de Cristo?

Ven a Cristo, cree en el evangelio, llénate de Él. Gustad, y ved que es bueno Jehová;
Dichoso el hombre que confía en él. Salmo 34:8
Y que los malvados que desprecian a Dios, aunque parezcan felices por un tiempo, al final
llegarán a una miserable destrucción. (Ver versículos 5-6)

Enseñanzas:

1.- ¿Quiénes nos están influenciando? ¿De dónde nos estamos alimentando, quiénes nos
están encaminando para tomar decisiones?

2.- El amor a Dios, el deleite en Él, es lo que perdurará. Arraiga tu vida en Dios, Él debe ser
tu único anhelo, no desperdicies tu vida.

3.- El pecado solo te roba la alegría, no te prospera, solo te secuestra la oportunidad de


estar satisfecho en Él. Cuando el amor de Dios está en tu corazón expulsará cualquier tipo
distorsionado de amor, que Dios nos ayude a buscar solo una cosa: deleitarnos en Él
Señor, porque será como árbol plantado junto a corrientes de agua. Espara en Dios.

Dios nos ayude.

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