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PROYECTO FINAL DE CRIMINOLOGIA

TITULO

NARCOTRAFICO EN MEXICO DESDE UN ENFOQUE TEORICO Y


METODOLOGICO

MAESTRA

NAHILA MANCERA

ALUMNA

CINTHIA BELEM RAMOS MARTINEZ

PLANTEL

NIÑOS HEROES 188

MAESTRIA EN INVESTIGACION CRIMINAL


NARCOTRÁFICO EN MEXICO: NARCO-CULTURA

INTRODUCCIÓN

Las actuales problemáticas sociales de México se encuentran integradas


por una serie de fenómenos de corte económico, político, social y jurídico que
permean en las áreas de desarrollo gubernamental y social; pero uno de los más
preocupantes y que se ha ponderado como el pilar que soporta todo un sistema de
organización económica y de tráfico de sustancias ilegales, del cual a su vez, se
derivan delitos como el secuestro, homicidio, feminicidio entre otros.

Sin embargo, este trabajo de investigación no estará abocado al estudio del


narcotráfico desde su aspecto jurídico, tampoco pretende estudiar las causas,
consecuencias ni la forma en que el Estado enfrenta las repercusiones de dicho
fenómeno; sino que en adelante se describirá y analizará el enfoque socio- cultural
que deriva del narcotráfico.

Hoy en día el tema del narcotráfico ha rebasado sus fines organizacionales


de tráfico de drogas para añadir a su actividad una teleología cultural que se ha
impregnado en la epidermis del tejido social de nuestro país. La población, y en
especial los habitantes de regiones que se encuentran cerca de esta actividad
delictiva presentan una dualidad de percepción de la misma, gran parte de ellos
abraza ha elevado al narcotráfico a un nivel cultural, considerándolo un rito y
modelo de vida prometedor y aspiracional, otra parte de los ciudadanos, son
golpeados en su integridad emocional y física por los estragos que este fenómeno
ha producido en sus vidas.

En este texto, se analizan los dos anteriores enfoques y se deducen


conclusiones acerca del desarrollo del narcotráfico como un tema cultural y como
un actual ritual de la vida de ciertas regiones de México.

Las fiestas, convivencias, coexistencia y modus vivendi de las personas


cercanas a actividades delictivas como el narcotráfico se llevan a cabo por las

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comunidades y se pueden definir como una práctica casi religiosa, un acto-ritual
donde un grupo o un individuo procura alejar el mal y conseguir la prosperidad,
esto según lo dicho por Gregorio Serafino (2015).

El estudio de los rituales para agradecer, venerar y rendir respeto y


admiración a los entes del narcotráfico representan la prosperidad, a través de una
forma muy particular de percibir la situación, ayuda a reflexionar sobre la
relevancia fundamental de los detalles de un ritual mexicano para entender el
punto de vista década uno de los que participan en la práctica de sus
“ceremonias”. Cada ritual conforma una construcción en la cual todo está cargado
de sentido y de eficacia mágica: las palabras, los gestos, los objetos, los
ingredientes y los colores y la música (Dehouve 2013).

En este ensayo se pretende describir de manera breve cuales son los


puntos de relevancia que adquiere “el ritual” de la cultura del narcotráfico como
una forma de expresión única entre los integrantes de una comunidad.

ENFOQUE TEÓRICO Y METODOLÓGICO DE LA PROBLEMÁTICA

La antropología social y criminológica como enfoque teórico

El enfoque teórico es abordado desde la perspectiva antropológica social,


Podemos afirmar que la narco cultura y los partícipes en la misma aparecen como
un sistema de prácticas y creencias, con ciertas connotaciones religiosas muy
relacionadas con los ritmos y la música, representando el principal eje simbólico
relativo a su cosmovisión.

Los ritos y los datos etnográficos que se presentan contribuyen a delimitar


aspectos y características de una forma de entender el mundo, o sea, una
cosmovisión violenta y con representación de poder muy arraigada, puesto que
mediante todos los bailes, ceremonias, palabras sacramentales y rituales se
renueva un fuerte vínculo con el ciclo de la vida y lo que se quiere llegar a ser.

Es precisamente esta influencia sobre los actos y costumbres que los


individuos adquieren como habito derivado de su región como una raíz ideológica,

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de la que determinaremos su importancia dentro del desarrollo y el
comportamiento de los fenómenos sociales derivados del narcotráfico y que se
presentan actualmente.

Método deductivo histórico – tradicionalista como marco de referencia de la


problemática

La cosmovisión de estos grupos y de sus seguidores se debe explicar


desde un punto de vista tradicionalmente cultural, el cual está integrado por la
historia común y las historias locales de los pueblos en conjunto con las nuevas
tendencias en la producción, comercialización y distribución de sustancias
ilegales. Es por ello que las cosmovisiones expresan una dinámica social y
espiritual basada en un movimiento entre la expresión de fuerzas representativas
de poder y la interacción con los aspectos fenomenológicos codificados, creando
un orden transitorio, que cambia la cualidad, día a día, de los sujetos.

Esta referencia cosmológica da sentido al comportamiento económico y


social, se trata de un instrumento que explica el lugar, la función y la cualidad de
los humanos en el universo, el origen y la configuración de su persona en la tierra.

La vida de las sociedades se encuentra marcada por fiestas, tradiciones,


formas y medios de subsistencia y algunas actividades impuestas que tienen el
carácter de obligación y que cambian cada día, cada mes, cada año, etcétera. Se
trata de una dinámica social que cada individuo está obligado a cumplir en favor
de un bien común, o del bien común de su familia, comunidad o región. Marca el
existir de la sociedad con el objetivo de mantener un equilibrio y movimiento del
cosmos con un móvil político (Alcántara, 2018).

Prácticas de canto y baile con escenografías y consumo de sustancias


específicas para cada una de las fiestas no requieren un entrenamiento formal
para garantizar el conocimiento del usuario para crear vínculo único entre la
práctica, el espectáculo y la destreza física para la manipulación de armas.
Existiendo sanciones para aquellos que no ejecutaran su papel de una manera

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óptima, sanciones que son ejecutadas de manera interna por los líderes de estas
organizaciones delictivas.

Existen diferentes ritmos, letras e interpretaciones musicales para cada uno


de los líderes del narcotráfico lo cual ha ayudado a expandir de manera
intempestiva sus historias de vida y orígenes dentro del nicho ilegal de las
sustancias, provocando la creación de personajes idealizados formales, hechos
por placer, por orgullo, por aprendizaje y por veneración.

Como mencionan Báez y Gómez (2000), su cosmovisión integra las


diversas expresiones del imaginario colectivo y las vincula con la vida material y
las relaciones sociales. Conciben el mundo a partir de su propia imagen social.

La importancia de todo este conglomerado de rituales, mitología y, en


suma, la cosmovisión de los narcotraficantes radica en diferentes ámbitos del
desarrollo de actividades sociales y la interacción de los individuos entre ellos
mismos y entre sus gobernantes para el mantenimiento de la identidad, identidad
aceptada y bien recibida por los habitantes de ciertos estados de la república,
especialmente en el norte del país.

La participación de los integrantes de un grupo comunitario en el


narcotráfico y sus derivados “culturales” tradicionales determina su desempeño en
el ámbito laboral, en el intercambio mercantil, en su aprendizaje, la propiedad
agraria, podía influir en la determinación de sus relaciones de parentesco, la visita
de sitios sagrados, entre muchos otros focos sociales.

En su ámbito el hombre no se explica como individuo aislado, sino como


parte articulada a la naturaleza (al universo en su acepción de entidad sagrada y a
la comunidad) (ídem). De ahí que se genere un fuerte sentido de pertenencia a
estos grupos delictivos.

El narcotráfico, como medio constitutivo de la tradición y de la cosmovisión


de los estados, repercute de diversas maneras en la vida y desarrollo de
actividades individuales que se pueden expresar de distintas formas dependiendo

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del objetivo de un determinado conjunto de movimientos y actos religiosos,
políticos, espirituales y artísticos.

No se debe dejar de lado su importancia histórica, ya que todo el conjunto


de vestigios y costumbres provienen de una ascendencia milenaria que nos ayuda
a comprender la manera en que este tipo de comportamientos influían en el actuar
diario de los individuos, en la toma de decisiones políticas, espirituales y sociales;
cada manifestación de poder por parte de estos grupos delictivos determina un
aspecto de importancia variable dentro del desarrollo comunitario de procesos
vitales para la convivencia e imposición y posicionamiento de estos grupos en la
comunidad.

Actualmente, los derivados de esos vestigios de los orígenes del


narcotráfico hoy vuelven a surgir en formas de manifestación más violentas y
estereotipadas siguen dejando huella en la forma de vida y los hábitos de aquellas
personas que aun rigen sus creencias y decisiones en base a un espectro amplio
de influencia musical, tradición, ritual y política trascendentalmente típica de sus
comunidades.

Como parte de sus tradiciones, las comunidades mantienen una tendencia


a seguir llevando a cabo actividades endémicas y propias de su cultura milenaria,
llevar a cabo bailes y festividades, donde consumir bebidas alcohólicas, los juegos
de azar y las dinámicas en nombre de sus líderes criminales y antepasados, entre
muchas otras, son estas expresiones que se vuelven de gran relevancia cuando,
sin este aspecto, la comunidad, sus personas y los individuos dejan a un lado su
carácter digno y pasan a ser un ente de aparente tradición y sin identidad propia.
El respeto a este tipo de tradiciones y el aceptar que algunas prácticas, aunque
pudiesen considerarse rudimentarias e ilegales, forman una esfera de coexistencia
que deben es protegida por sus mismos habitantes por su relevancia cultural y
social.

DESCRIPCIÓN SITUACIONAL E INSTITUCIONAL

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Ciudad Juárez es conocida como la cabecera del Municipio de Juárez,
mismo que geográficamente se ubica en el Estado de Chihuahua, que forma parte
integrante de la República Mexicana y es conocida como la zona más peligrosa de
todo el mundo, lo anterior debido a la violencia y temor generados por la operación
de poderosos cárteles dedicados al narcotráfico, toda vez que como es bien
sabido, a diario se ha visto un incremento notable en la tasa de homicidios de su
población, debiendo hacerse hincapié en el hecho de que esta misma se conforma
principalmente de jóvenes adultos.

Situación anterior hace pared con la zona fronteriza hacia Estados Unidos,
las víctimas a muerte del otro lado de éste, por lo general, es gente que por
necesidad, rebeldía u obsesión con el poder (a manera de imitación con la figura
denominada “narcotraficante”, quien es la cabeza del cártel) se prestan a servirles
bajo la figura reconocida como sicario; cabe destacar que desde el año 2007,
aproximadamente, ha existido una terrible y peligrosa guerra o lucha de poder
entre los cárteles de Juárez y Sinaloa.

Cabe destacar que una de las principales actividades que llevan a cabo los
cárteles, es el lucro en modalidad de tráfico de drogas, mismas que serían
distribuidas en todo el país, pero, con ambición a su envió hacia los Estados
Unidos de América; lamentablemente el equipo de este grupo delictivo es
incalculable, al grado que ha rebasado al número de elementos policiacos, lo que
posiblemente ha obligado que dentro de la Autoridad competente los servidores
públicos tengan que verse obligados a decidir entre efectuar con ética, dedicación
y valor el encargo encomendado profesionalmente, o se presten a la facilitación
del desarrollo de los citados actos delictivos, puesto que parte de las víctimas
fatales de estos grupos también lo han integrado elementos policiales, peritos y de
investigación criminal.

La violencia en Juárez y Sinaloa han llegado al grado de llevarse a cabo


homicidios en hospitales, centros de rehabilitación, cárceles e incluso fuera de los
domicilios particulares de las mismas víctimas, aún frente a la población, para
ellos no existen los límites, ni el más mínimo temor a la Ley.

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Se cree que los cárteles mexicanos tienen a su manejo cantidades
exorbitantes de drogas ilegales, dinero, armas de fuego (aún de mayor calibre
que las de las Autoridades policiales) e influencias de índole política, ante la
preocupación emanada de esto, México y Estados Unidos han decidido coadyuvar
para combatir a estos grupos delictivos.

Ahora bien, históricamente hablando, se señala como responsable del


incremento en la violencia en México al ex presidente Felipe Calderón Hinojosa,
quien tuvo la dirección del país en el periodo comprendido entre los años 2006 y
2012, puesto que se considera que tras ordenar la ofensiva contra el narcotráfico,
se ha tenido que elevar el número de elementos militares y policiacos federales
para combatir al crimen organizado.

Por su parte, los funcionarios de policía norteamericanos ha implementado


mecanismos de investigación y persecución criminal que les ha permitido capturar
a importantes líderes criminales de nacionalidad mexicana, es decir, presuntos
narcotraficantes ligados a grupos delictivos numerosos y muy peligrosos.

Se considera que uno de los más graves errores del citado ex mandatario
de México fue el romper con el pacto de complicidad, en el que la autoridad no
interfería en las actividades de la delincuencia y viceversa, ya que el dramático
cambio de estrategia y la ausencia de recursos que sirvieran de reemplazo o
protector a la respuesta de los grupos delictivos, posicionó a Ciudad Juárez como
una de las más peligrosas de todo el país, además de que también se nombra en
listados internacionales. Si se pretendía implementar un sistema de persecución
incansable, primero debieron valorarse de manera ética a sus elementos, porque
si bien es cierto que se dio a conocer de manera pública, a lo largo de la última
década, que muchos de los funcionarios públicos asistían e incluso participaban
en proyectos de carácter ilegal, también lo es que existieron (porque el crimen se
encargó de acabar con sus vidas) elementos eficientes y comprometidos con su
labor para con la sociedad.

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Entre elementos de cárteles de la droga rivales se ha sumado una cantidad
preocupante de homicidios, repuntando a México como uno de los países más
violentos del mundo, pese al masivo despliegue de elementos policiales y
militares, debiendo precisarse que en lo que respecta a Estados Unidos, en la
zona fronteriza con nuestro país, se ha reducido la tasa de crímenes.

La reconocida “narco cultura” ha sido el gancho de cientos de jóvenes para


ofrecer sus servicios en la práctica del narcotráfico, años que anteceden era muy
común que en secreto a voces se señalara el desarrollo de fiestas clandestinas,
mismas en las que participaban tanto hombres, como mujeres de corta edad de
vida; en el país la figura del “narcotraficante” es considerada como una autoridad
más, embestida de poder, impunidad y lujos, por lo que atendiendo a lo anterior y
ante la participación de la autoridad estadounidense.

Se considera que las personas que ejercen el tráfico ilegal de drogas y


armas, se hayan visto obligados a bajar su perfil, respecto al tránsito por el país,
puesto que no hacen uso de camionetas de lujo para su andar, sino que, se
asegura que aparentan ser civiles promedio, no obstante a ello, continúan los
asesinatos, tanto en Culiacán, Sinaloa, Ciudad Juárez y El Paso, Texas.

El Gobierno de México insiste en que la lucha contra los cárteles y que el


aumento en la violencia es una señal de debilidad por su parte, además, ha dado
a conocer que hará un filtro policial, para así estar en condiciones de erradicar la
práctica que todo el mundo considera costumbre en nuestro país, es decir, la
coadyuvancia de funcionarios públicos con elementos criminales desde el temor
por su integridad y la de sus familias.

Pero, desde el punto de vista personal, se considera un círculo vicioso e


inevitable el eco de que al día de la fecha se permita la práctica del género
musical denominado “narco-corrido”, ya que analizadas las letras, se advierte una
clara romanización de la conducta delictiva, donde el premio será el poder, la
impunidad, el placer, riqueza, reconocimiento y respeto; no olvidemos que la
sociedad mexicana sintió pena por el procesado penal Pablo Escobar tras ser

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capturado por autoridades representantes de los Estados Unidos, tristemente la
circulación de temas musicales de este estilo, fomenta a las nuevas generaciones
para contender por un puesto en la participación en los mismos grupos delictivos y
a su vez, que pierdan su identidad, valores y principios.

ABORDAJE ANÁLITICO DE LA PROBLEMÁTICA DESDE EL ENFOQUE


TEÓRICO Y METODOLÓGICO CRIMINOLÓGICO

Después de haber observado el material video documental, se deduce a


través de su análisis un concepto que se encuentra fuertemente vinculado con el
fenómeno en cuestión y que a su vez, determina desde un análisis criminológico,
perfiles sociales que comparten ciertas características. Nos referimos al concepto
de “poder”, el cual puede ser interpretado de múltiples maneras, sin embargo para
efectos de las dinámicas que se viven dentro de la estructura organizacional del
narcotráfico, e incluso de la interacción entre autoridad gubernamental con estos
grupos la lucha de poder se impone al territorio, causando efectos nocivos y daños
colaterales a la población civil y a los mismos elementos que integran la fuerza
pública del estado.

Por ello y en relación con el concepto de Poder, según (Byung-Chul Han,


2016) Para unos, poder significa opresión; para otros es un elemento constructivo
de la comunicación. Las respectivas nociones jurídica, política y sociológica de
poder se contraponen irreconciliables. Sin embargo, el poder suele entenderse
como una relación causal: el poder del yo es la causa que ocasiona en el otro una
determinada conducta contra su voluntad. El poder capacita al yo para imponer
sus decisiones sin necesidad de tener en consideración al otro.

Otra definición la encontramos en la aportación de (Castells Manuel, 2013)


quien dice que el poder es el proceso fundamental de la sociedad, puesto que ésta
se define en torno a valores e instituciones, y lo que se valora e institucionaliza
está definido por relaciones de poder. El poder es la capacidad racional que
permite a un actor social influir de forma asimétrica en las decisiones de otros

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actores sociales de modo que se favorezcan la voluntad, los intereses y los
valores del actor que tiene el poder.

Como podemos observar en las definiciones anteriores el poder integra


características que evidentemente observamos en el comportamiento de los
grupos delictivos y de la sociedad que los integra a su convivencia humana
adoptando sus costumbres y estereotipos que los caracterizan.

(Antonio Cruz, 2013) coincide con ello, y explica brevemente como se da


este vínculo de influencia social: El concepto de poder en las relaciones sociales
en su ámbito más general, apunta a la influencia de ciertos actores sobre otros
para lograr los propósitos de los primeros. Hemos señalado anteriormente que
todo control social sugiere un sistema de dominación, incluso el que se ejerce
dentro un ámbito de legitimación, por lo que toda dominación tiene como referente
alguna forma de poder, entendido como una manifestación condicionada a algún
aparato de dominio o un atributo de ciertos individuos para influir a otros en la
consecución de determinados fines.

Como se ha visto en las definiciones anteriores, las definiciones de la


palabra poder son distintas dependiendo del enfoque desde el cual se analice el
concepto, así mismo son múltiples las áreas del conocimiento en que la palabra
poder tiene cabida, y como ya se dijo, existe una connotación diferente para cada
una.

La antropología, la sociología, la ciencia política, el derecho, la


administración, e incluso ciencias como la biología, química y física, son ciencias
que hacen uso concreto de la palabra dándole un fin acorde a el contexto de la
ciencia misma.

Sim embargo, en general, el poder posee en todas ellas un rasgo


semejante, y es la capacidad de influir. Es decir; el concepto de poder tiene por
naturaleza misma el poder de influir en comportamientos, actos o hechos que se
provocan para obtener una reacción u obtener otro comportamiento, acto o hecho
deseado, esto a veces voluntario o involuntario.

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Por otro lado, en las ciencias criminológicas el concepto de poder es muy
recurrido, las estructuras sociales y perfiles psico -sociales están determinados por
esta definición, que puede tener varias connotaciones. El poder desde en aspecto
de control y vinculación como medio coactivo, el poder social desde el enfoque de
influencia de las masas y el poder político. El poder en los perfiles criminológicos,
refiere a un elemento que coacciona para que se obtenga un resultado, o
refiriéndose también a la capacidad para realizar algo.

La doctrina escrita que gira en torno al concepto de poder es vasta, muchos


autores han abordado el concepto desde sus diferentes enfoques según el área de
su competencia, muchos de ellos coinciden en que el poder es un proceso en el
cual intervienen la toma de decisiones, y quién o quienes toman las decisiones, y
porque se elige una o unas alternativas sobre otras interviniendo también
elementos como personas las cuales se encuentran estructuralmente
posicionadas en diagramas piramidales de jerarquía.

Lo anterior es relacionado con la capacidad para influir dentro de ese


diagrama jerárquico de factores y personas. Actualmente el poder como concepto
que refiere de manera general a la capacidad de influir sobre las decisiones de
personas o elementos coactivos de la sociedad es una palabra que se encuentra y
seguirá presente en la misma, por el solo hecho de ser parte de las estructuras
sociales; ello no implica que tenga una connotación negativa, sino por el contrario,
el concepto de poder puede llevar al desarrollo exponencial de las sociedades y
gobiernos si éste se utiliza de manera adecuada. Sin embargo, como observamos
en el documental, este poder se canaliza a conductas delictivas que son
aceptadas, imitadas y veneradas por el resto de la población, produciendo una
magnificación de aquellos personajes, lo cual a su vez, a partir de la psicología
criminal podría corromper a nuevas generaciones, adoptando conductas
antisociales desde edades muy tempranas.

La historia y sus acontecimientos, desde los más antiguos hasta los


contemporáneos ha sido evidencia de la presencia del poder en todos los
aspectos de la vida humana, desde las relaciones sociales hasta en los gobiernos

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de las naciones, pasando por los hechos de la naturaleza, que incluso por sus
repercusiones físicas se le atribuye también como un elemento de poder.

CONLCUSIONES

Desde un enfoque deontológico podemos afirmar que este fenómeno viene


a influir en el comportamiento humano, modificando patrones éticos de conducta,
que muchas veces llegan al lumbral de creación de perfiles criminales; los
diversos estudios sobre el conocimiento ético, han revelado que éste no posee
una naturaleza absoluta y estática, sino fluctuante y dependiente de factores
psico- sociales, políticos, y jurídicos externos.

Se puede asegurar que la crisis por la que atraviesa México, se ha debido a


diversos factores que pudieran enfatizarse a manera de resumen, que van desde
el historial de actividades ilegales que desde muchos años atrás se desarrollaban
de manera libre y hasta un tanto segura para los perpetradores, la condición de la
frontera, las condiciones económicas (una visible diferencia entre el poder
adquisitivo de unos cuántos ante una Ciudad que cuenta con un número
considerable de habitantes, la implementación de “guerra” desde la violencia).

Sin que se mal entienda esta última frase, puesto que se considera que
hubo una falla por parte de nuestros representantes a efecto de prestar atención e
idear estrategias policiales y militares que lograran la exposición de la sociedad en
general en los altercados tras las persecuciones que pudieran suscitarse), puesto
que muchas de las vidas perdidas, también correspondían a infantes que
lamentablemente se encontraron en el lugar y momento inapropiados para llevar
a cabo sus actividades recreativas y el incentivo para el empleo de un estilo de
música que permitiera idealizar las prácticas ilegales, lo anterior en lugares
establecidos como bares.

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BIBLIOGRAFÍA

-YouTube, Narcotráfico en México- Narco cultura. Disponible en:


https://www.youtube.com/watch?v=Nv5q_uvvGxA Fecha de consulta: 19 agosto
2022.

- Serafino, Gregorio (2015). La fiesta de san Miguel en La Montana de Guerrero


Cuicuilco. Escuela Nacional de Antropología e Historia Distrito Federal, México.
vol. 22, núm. 63, mayo-agosto, 2015, pp. 207-227 URL:
https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=35141196009

Castells, Manuel (2013) Comunicación y poder. Disponible en:


https://books.google.com.mx/books?hl=es&lr=&id=rvKkDwAAQBAJ&oi=fnd&pg=P
T20&dq=poder&ots=kyHKFLiXpl&sig=y_Hlnbq9gBaWs-fC4-
afI7sv8Ds&redir_esc=y#v=onepage&q=poder&f=false Fecha de consulta: 18
agosto del 2022.

Michel Foucault (1988) El sujeto y el Poder. Disponible en:


https://www.colibri.udelar.edu.uy/jspui/bitstream/20.500.12008/6800/1/RCS_Fouca
ult_1996n12.pdf Fecha de consulta: 18 agosto del 2022.

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