IO DEL OOCENTE ¥ LA EVALUACION ofl con lo cnccosoe sve sree eager y moses ila imposible la valoracién cualitativa, es probable que se esté eval : : do sélo un aspecto del rendimiento: aquél que se limita a ae ios ren confor ln nies cién valorativa con la que podriamos favorecer nuevos: ae perio a sl c dspecses eo eae on promedio que dé cuenta del progres de LOS PORTAFOLIOS Una propuesta diferente puede ser le produccién de un portafo- tio. Los portafolios constituyen una manera de presentar los traba~ jos de los estudiantes con el objeto de fevorecer la evaluacidn, Se trata de un registro de tos rendizajes en tanto reine materiales que se elaboran en el proceso del aprender. También constituye una coleccién ordenada de evidencias que presenta las praducciones Que se fueron organizando para los diferentes proyectos llevados a cabo en el aula. En los portafolios se incluyen las mejores produc Giones de los estudiantes luego de sus procesos de elaboracién Todos los portafolios no son iguales: algunos docenies los utilizan s6lo para el registro evaluative y otros los utilizan como parte de la estrategia de ensefianza, aun cuando finalmente también puedan uiilizartos para la evaluacién, Los folios ne constituyen las hojas de Una carpeta de registros; los estudiantes seleccionan sus mejores trabajos, que son el resultado de proyectos y no de las actividades, diarias que se realizan. Cada trabajo conforma un folio; cada folio ha side confeccionado, revisado, actualizado, corregido, recoge suge- rencias para el mejoramiento por parte de los docentes y da cuenta del progreso que puede realizar el estudiarte, Por tltimo, hay folios que pueden ser el fruto de una produccién colectiva, mientras que las carpetas de trabajos siempre dan cuenta de producciones indivi- duales, Los portafolios pueden ser construicias on torno 2 problemas, grandes ideas, temas en controversia, biagratias, propuestas de accién, etc, Dependeran de ta asignatura y de la concepcién de aprendizaje que contemple el diseno de las propuestas y los ejes que posibilitarén la organizacién del portafolio. Los docentes que traba- jen con portatolios ponen especial cuidado en la produccién de los estudiantes, entendiendo que los procesos de comprensién segura- mente implican diferentes propuesias de elaboracién de proyectos, de solucién de problemas o de trabajos en relacién con temas, ideas © preguntas relevantes. Cada una de las propuestas demanda tiem- Pe: los folios se hacen y rehacen o se completan paulatinamente, No s¢ trata de evaluaciones que se pueden reelizar en un plazo breve sino de trabajos que demandan un tiempo considerable. Los benefi- OFICIO DE ENSERAREL OFICIO DEL OOCENTE VLA EVALUACION 8 cios tienen que ver con las producciones sostenidas que favorecen mejores procesos de construccién del conocimiento. El contenido de un portafolio dependerd de la asignatura y de las caracteristicas de los proyectos que se elaboren. En ciencias socia- les un portafolio puede contener folios que se integren por trabajos que reconstruyan una biogratfa, presenten una carta, un ensayo, el analisis de una fuente o de una representacién pictérica de la época estudiada, la confeccién de un quién, entrevistas y su correspon- diente analisis, etc Los portatolios contienen mas de un producto y cada producto, 2 su vez, demandé un trabajo diferente de produccién y sistematiza- cién, Se confeccioné durante un cierto tiempo y probablemente necesitS de borradores y propuestas parciales. Demandé ts critica del docente y finalizé mediante un acuerdo entre el docente y el estudiante acerca del estado final de la produccién que permite que pase @ ntegrar uno de los folios, Sin embargo, aun cuando reconocemos el valor de trabajar con portafoios, difcilmente encontremos una propuesta para la evalua- cidn que nos asegure que su implementacién es siempre provecho- say productiva. En las escuelas no se deberia actuar pensando que hay une sola manera posible de evaluar. Una buena evaluacién debe otorgar confianza y generar. contrariamente at clima habitual que se instala con las evaluaciones, un espacio para permitir que los aprendizajes fluyan y se expresen con naturalidad. Posibilita recono- cor nuestros limites, reirnos de nuestras propias exigencias y recui- perar el sentido de lo humano en el acto de aprender. Desde esta perspectiva, la evaluacién es proveedora de seguridad, protege a los estudiantes y, por tanto, se imbrica en la buena ensefianza. Finalmente, entendemos que el anélisis de las précticas de eva- luacién no puede reducirse a la bésqueda del instrumento mas cer- tero. Las buenas practicas posibilitan evaluaciones en circunstan- cias no previstas donde una respuesta oportuna del estudiante o una buena pregunta que da cuenta de su proceso del pensar permite reconocer mejor los conocimientos adquiridos o el nivel de reflexion que posee, De esa manera, no sélo se evalian productos sino que se analizan 0 se reconocen procesos y se adoptan tanto los procedi ‘mientos formalizados como los que no lo son para obtener no sélo ingicios sino también apreciaciones valiosas en torno al conocimien- to adquirido, En todos los casos les opiniones de los estudiantes res~ pecto de las apreciaciones de los docentes deben ser contempladas, Las interpretaciones que cada uno de los actores genera en relacién con sus actos en los que se compromete el pensar de unos y otros no son patrimonio de alguno y si son frute de las circunstancias complejas del aprender, tanto de los estudiantes como de los prote- sores en el acto de evaluar, LA EVALUACION SOMETIDA A JUICIO. Desde hace muchos afos, en el sistema educativo argentino solemos calificar de 0 a 10 las pruebas, los cuestionarios, los dife- rentes trabajos o producciones de los estudiantes. Estas calificacio- nes suelen promediarse, volcarse en boletines, carpetas 0 cuader- nos y constituir la expresién de los conocimientos adquiridos por los alumnos. La comparacién que los alumnos hacen de sus pruebas entre si y las experiencias construidas afio tres afio por el docente brindan una suerte de seguridad al efectuar lz practica de calificar. Lo que en general no se contempla es que las evaluaciones crean y modifican la autoimagen que el nifio tiene de si y la representacién que de él construyen su familia, sus compafieros, los docentes que se sucederan en su vida escolar, Es probable que las evaluaciones negatives tengon un mayor efecty, al colocar al nino en el lugar det mal alumno impidiendo mejores rendimientos Reconocemos también que para algunos cocentes el resultado de una evaluacién puede mostrarle la dificultad de algiin tema, su incomprensién total o parcial, permitiéndole Ln conocimiento aca- bado que puede conducir a nuevas explicaciones, actividades de ensefianza o atencién a algin problema que desconocia. Cabria pre- guntarse si no existen métodos més naturales para alcanzar este conocimiento aun reconocido el caracter controversial de las practi- cas evaluativas, ELOFICIO DE ENSERAR &