Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

Monografia Generalidades

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 23

MONOGRAFÍA Prof.

Juan Lipiante

Esta guía recoge pautas aceptadas por una gran cantidad de investigadores sobre el método
monográfico. Su seguimiento facilitará la lectura y comprensión de los trabajos que son
sometidos a la corrección del facilitador, a la atención del crítico y del lector que le interesa el
tema. Se trata de familiarizar a los activadores con algunas convenciones usuales en el campo de
la literatura científica y que son útiles para la presentación de investigaciones pequeñas que
requieren de un plan de trabajo. Como metodología puede orientar al activador en la estructura
que desee darle a su monografía.

¿Qué es una monografía?

Podríamos decir que se trata de un documento de extensión variable elaborado sobre un tema
determinado desde una perspectiva que respeta las convenciones de la disciplina que se trata y
siguiendo en lo posible los pasos de la actividad científica.

El “trabajo monográfico posee las siguientes características:

 Un solo asunto

 No exige originalidad (excepto para el caso de la tesis)

 Trabajo escrito, sistemático y completo

 Tema específico o particular de una ciencia

 Tratamiento exhaustivo y profundo

 Rigor en el uso del método científico

 Contribución importante, original y personal para la ciencia

(Alvarenga y Rosa, 1991:11).

Sólo que no hay que confundir monografía y tesis. Tesis quiere decir `posición´; el que escribe
asume una postura, toma una actitud. La monografía, en cambio, es más humilde, se trata de un
"escrito sobre una sola cosa" y esa cosa es el tema. Resumir, aclarar o desarrollar: eso es lo que
propiamente se llama monografía.

Pero no se trata de hacer una presentación de citas textuales; la cita debe confirmar o sustentar
lo dicho. Luego hay que explicar con palabras propias lo que el autor considerado explica o quiere
transmitir.
No será por tanto monografía –concluye Aramburu- una recopilación de lo escrito, sino que se
pretende que sea en esencia un trabajo de análisis que puede ser que:

 Agregue algo a lo ya escrito

 Llene un vacío no considerado en la bibliografía

 Argumente la postura contraria de la que surja de otros comentarios

 Aplique un enfoque ya publicado a una nueva situación.

1. La elección del tema

La elección del tema supone considerar algunas pautas según el criterio que utilicemos para
elegir el tema:

 Delimitación. La primera condición es elegir un tema que sea delimitable, por ejemplo, evitar
temas como “la contaminación de la Tierra”. Cuanto más delimitado sea el objeto de estudio
elegido, mejor circunscripta estará la bibliografía y más concretas serán las cuestiones que se nos
presenten a resolver; por lo mismo, mayores serán las posibilidades de conseguirlo.

 Realista. El tema debe ser realista en función de la bibliografía disponible le y al alcance del
interesado; a la vez por ubicación física y por limitaciones en la complejidad o en el idioma en
que viene dada.

 Interesante. Aunque parezca obvio para algunos o novedoso para otros, el tema debe interesar
y agradar al autor: no se trata de cumplir un castigo sino de hacer un trabajo, y no son
antagónicos los términos de trabajo e interesante.

 Focalización. La monografía debería analizar un tema específico, con sus aspectos particulares
y su concatenación que pueden sacarse de artículos publicados en revistas especializadas o,
inclusive, de los artículos periodísticos que reflejan la realidad. También se pueden consultar
páginas web especializadas.

 Dominio metodológico. El autor debe estar en condiciones de dominar la metodología propia


del tema a tratar. Sería inútil hacer un trabajo sobre un tema donde no se conocen las técnicas
elementales, y que sean propio de las ciencias sociales, por ejemplo .

2. El plan de trabajo

Consiste en definir los pasos para hacer la monografía sobre el tema elegido, y será la principal
referencia que orientará el quehacer investigativo, siendo necesario algunos pasos:

 Hacer la investigación preliminar y confeccionar la bibliografía que sobre el tema escogido


existe-te.
 Luego de hecha esta constatación, dividirla entre la que está disponible para realizar la
monografía y la que no es fácil de obtener, es decir, tomar conciencia de los libros que puedo
alcanzar y de los que no puedo.

 En función de los pasos anteriores, diseñar el plan de trabajo que ha de seguirse en adelante.

 Concretar el plan para llevar a buen fin la elaboración de la monografía.

 Finalmente, escribir la monografía .

El plan de trabajo que se proponga individualmente o en grupo, constituye el primer trabajo


práctico desarrollado por los activadores. Aunque ningún plan es perfecto (y por lo mismo su
seguimiento debe contemplar el apartarse de él cuando no se adecue a lo que se pretende que
solucione), una buena planificación permite trabajar con mayor rapidez evitando las
desviaciones que impiden perder de vista la unidad que la monografía exige y sirve para una
mejor comunicación con quienes supervisan la monografía o están dispuestos a dar una mano
en su confección (o hacen ambas cosas a la vez).

El plan debe ser una guía (como su nombre lo indica) para el trabajo que se va a desarrollar, de
modo que es importante tenerlo bien presente desde el momento mismo en que nos ponemos a
trabajar. Un plan bien diseñado y seguido con cuidado, hace que el trabajo que uno emprende
rinda mucho más de lo que rendiría el buscar las cosas sin seguir un hilo conductor. Básicamente,
el plan de la monografía es la estructura que hayamos elegido darle a nuestro trabajo. A ella debe
agregársele antes un pequeño párrafo que establezca: 1) la cuestión principal, 2) la importancia
que le asignamos al tema, 3) las hipó-tesis desde las que se es parte. Luego, la bibliografía que se
piensa utilizar.

3. La estructura de la monografía

El trabajo que estamos considerando, debería consistir en un análisis actual de la temática; por
lo que su estructura debería ser adecuada al tema o el método. En principio, algo dividido en tres
partes formales, con una introducción, que debe conseguir captar la atención del lector, indicar
la tesis y delinear la organización del trabajo. El cuerpo debe presentar los capítulos o partes que
a su vez, estarán divididos en secciones o subsecciones si es necesario, en los cuales lo más
importante sea el análisis actual, que es distinto de la información histórica o de fondo. Por
último, la conclusión o parte final, es un resumen de los puntos principales e indicación de la
importancia de los hallazgos o conclusiones parciales.

La estructura, entonces, debe responder a la lógica de lo que se quiere decir sobre el tema, aunque
también puede admitir algunas variantes en la estructura, ésta no debiera entorpecer el objetivo
de la monografía. A continuación revisaremos algunos núcleos importantes:

3.1. Etapas de producción del trabajo monográfico


El estudiante debería contemplar algunas fases en la realización de un trabajo monográfico,
según Abreu Gonçalves (2004:18-22), éstas son:

 Selección y definición del tema. Es decir, lo que se quiere investigar, su contribución para el
área en que se inserta y de lo que se trata específicamente.

 Delimitación del tema. Responde al interés temático, en qué consiste, su delimitación temporal
y espacial, como se realizará y si existen suficientes fuentes de consulta.

 Realización de la investigación bibliográfica. Interesa la referencia teórica, lo que ha de ser


prio-rizada en las lecturas y cómo será fichado el material revisado.

 Realización de la investigación de campo, documental o experimental. Lo que será investigado,


los instrumentos que serán elaborados para la investigación y la recolección de datos, las técnicas
o métodos y cómo serán abordados los problemas en la investigación.

 Elaboración del plan de trabajo. La distribución en capítulos o partes, la secuencia lógica o


cronológica del asunto.

 Determinación del perfil esquemático del trabajo. Los tópicos que serán desarrollados, las
subdivisiones que tendrán los capítulos o partes, secciones o subsecciones.

 Redacción previa del trabajo. Lo que debe contener, como redactar la primera versión, lo que
debería ser considerado en el primer momento o el segundo momento.

 Revisión del contenido y la forma . La corrección del vocabulario, la ortografía y la


concordancia. El texto posee un estilo, la organización lógica de la argumentación debe ser clara.
Existencia de coherencia entre los capítulos o las partes y las secciones o subsecciones.

3.2. Organización del texto

Toda monografía debería considerar los siguientes componentes:

 Introducción Es la parte inicial del texto, en la cual el asunto abordado es presentado junta-
mente con sus objetivos, problema de la investigación, hipótesis y su situación en el contexto en
que se encuentra descrito en la justificación de selección, relevancia y contribución para el área
en que se inserta. También son presentados los procedimientos metodológicos (métodos,
técnicas, instrumentos de recolección de datos, etc.) e informadas de forma sintética las partes
que componen el trabajo.

 Desarrollo (revisión de la bibliografía y resultados) Representa los capítulos del trabajo y sus
títulos, subtítulos, ítems o subí temes creados por el autor, debiendo mantener una relación
directa con el tema y lógica entre sí. Debe contener la exposición ordenada y pormenorizada del
asunto. Se divide en secciones y subsecciones que varían en función de la forma de abordar del
tema. Puede contener el material explicativo e ilustrativo (cuadros, gráficos, tablas, fotos, etc.)

 Conclusión Parte final del texto, en la cual se presentan las conclusiones alcanzadas por el
autor, los objetivos correspondientes y las hipótesis comprobadas.
 Anexos Los anexos que sean necesarios; entre ellos, tablas, estadísticas, tabulaciones de da-
tos y otros que sirvan de respaldo.

 Bibliografía La bibliografía utilizada se puede clasificar en principales y complementarias,


según la importancia de las fuentes o las referencias consultadas.

3.3. Redacción del texto

Todo trabajo debe observar las reglas gramaticales específicas en la redacción. En ese sentido la
objetividad pasa a ser una característica del texto, así como el uso de frases cortas y simples,
empleando vocabulario adecuado, con lenguaje impersonal y denotativa, esto es, cada palabra
debe tener su significado propio, no dando margen a interpretaciones diversas. En la elaboración
del texto deben evitarse expresiones como “yo pienso” “en mi investigación” “yo deduzco” “en mi
opinión” “yo hago” y debieran ser sustituidas de preferencia por “esta investigación” “este
trabajo” “el estudio en cuestión” “se verificó” “se concluyó de ahí que” o sea, deben utilizarse
verbos en las formas que tienden al lenguaje impersonal. También es importante adoptar estilos
simples, evitando términos de argot o jeringonza, expresiones no elegantes, subjetividades,
excesos de retórica, términos eruditos o en desuso (Abreu Gonçalves, 2004:20).

Para la sustentación de las ideas contenidas en el texto, y con la finalidad de ejemplificar,


esclarecer, confirmar o documentar, se deben utilizar técnicas de citas, que pueden ser hecha en
forma textual (cita directa) o interpretada (cita indirecta).

Conviene considerar la necesidad de la postura científica mediante la producción del


conocimiento, debiendo existir el cuidado de afirmar o negar algo sin que las premisas estén bien
fundamentadas en cuanto a referencia teórica o empírica, con bases en estudios o investigaciones
anteriores de terceros o, en observaciones e investigaciones realizadas por el propio autor, dentro
del contexto en que se encuentran.

3.4. Algunas consideraciones para la selección y delimitación del tema

 Selección del título

 Definición del objetivo o problema a estudiar

Un buen tema es aquel que posee fuentes para la recolección de datos y la consulta, debiendo ser
relevante y tener un cuadro metodológico que posibilite su desarrollo, con áreas que puedan ser
exploradas, teniendo en consideración la preferencia del autor, de acuerdo con las propias
i nclinaciones y posibilidades, tratando de descubrir con objetividad un problema que merezca
una investigación científica “y tenga condiciones de formulado técnicamente en función de la
investigación (Salomón, 2001:271)”.

La delimitación del tema debe guardar una relación espacio -tiempo, especificando su campo de
conocimiento, situando la investigación en el espacio geográfico donde se realiza y en el tiempo
cronológico, o sea, en el período que se analiza, la que debería reflejarse desde el primer
momento, por ejemplo:

El título debe guardar una relación directa con el asunto sobre el cual discurre, pudiendo
diferenciarse entre título general (que destaca genéricamente o la teoría del trabajo) y el subtítulo
(que indica la temática a estudiar).

El problema debe ser formulado a manera de pregunta o proposición interrogativa, pudiendo ser
elaborado “en función de la contraposición o simplemente en contradicción con el conocimiento
anterior (o el que tenemos até el surgimiento del problema (Salomón, 2001:281)”. En términos
metodológicos debiera traducirse en:

 Delimitar el tema para ser convertido en un tópico y en seguida en un problema con sus
dimensiones más específicas

 Para cada pregunta o proposición interrogativa se deben esbozar posibles respuestas

Por último, hay que hacer la diferencia entre monografía, disertación y tesis para entender el
proceso que implica un trabajo monográfico como bien lo precisa Abreu Gonçalves (2004:25):

 La monografía representa el estudio fundado sobre un sólo asunto, siendo un término de


origen griego, que en su sentido etimológico significa mono (uno sólo) y graphein (escribir). En
general entonces, es apenas un trabajo de iniciación científica en que el estudiante hace su
primera aproximación con el tema, en término del curso o unidad del programa de una
disciplina, como parte de la actividad de evaluación final. Tiene su origen en el trabajo de
Federico Le Play (1806-1882), Les ouvriers européens en forma de 57 monografías que tratan
del género de vida de los operarios y del presupuesto de una familia-tipo de aquella clase. Ese
estudio caracterizó la monografía en la forma en que se conoce hoy, representada por la
especificación o la reducción del abordaje a un solo asunto, a un solo problema (Salomón,
2001:254).

 La disertación, que en el sentido etimológico de origen griego significa dis (prefijo indicador
de separación y apartamiento) y sertare (adjuntar, ligar, entrelazar) y designa a “un estudio
teórico, de naturaleza reflexiva, que consiste en una ordenación de ideas sobre un determinado
tema. Exige, por eso, la capacidad de sistematización de datos recolectados, su ordenación e
interpretación (Salvador, 1980:35). En ella, es realizado un amplio levantamiento de referencias
disponibles, observando el rigor científico y el estudio fundado y exhaustivo sobre un
determinado asunto, con la exigencia de originalidad y de ineditismo. Sin embargo, la
originalidad no significa que un tema no haya sido estudiado antes, por el contrario, se debe
observar dentro de lo ya escrito o algo de lo que no se haya dicho aún, apareciendo así su sentido
de inédito.

 La tesis, en el sentido etimológico de origen griego determinada por la tesis (acción de por, de
colocar) es originaria de la Edad Media (siglo XIII) con el surgimiento de las primeras
universidades europeas, época en que los que aspiraban ocupar un cargo de docencia en alguna
facultad de Filosofía o Teología debían presentar una tesis, una nueva idea, doctrina o teoría a
ser defendida ante una banca examinadora (antítesis) –método reconocido por la norma de la
disputatio (sucesor de la mayéutica socrática y de la dialéctica platónica) académico. El que salía
victorioso, conseguía el título de doctor, sabio o maestro y pasaba a integrar la vida universitaria
(Salomón, 1999; D´Onofrio, 1999).

4. Extensión y tiempo

La extensión de la monografía no es fija. En el caso de las escolares se suele asignar un número


mínimo de hojas para que los alumnos no se sientan tentados de escribir menos que el mínimo
revelador de un cierto esfuerzo y preocupación sobre el tema. En general, la extensión viene dada
por éste y por lo que queremos decir de él; con variaciones que son condicionadas por la
bibliografía existente, la disponible, etc.

El tiempo en que debe ser hecha es variable y depende también de otros factores; pero más
directa-mente de la voluntad del autor (o su falta de ella). En este caso hay un plazo cierto de
entrega, sin con-templarse su prórroga. En consecuencia, la buena administración de aquél por
parte del alumno redundará en su exclusivo beneficio. A la vez, el contemplar en la planificación
que todos los días no son iguales para ponerse a trabajar y que todo tema se amplía, hacen al
mejor método de trabajo.

5. Evaluación de la monografía

La evaluación plantea al menos dos aspectos importantes a considerar:

5.1. Del dominio teórico del tema monográfico

En términos de evaluación significa, para el alumno, el cumplimiento de algunas funciones


básicas como la eficacia de su esfuerzo, el apoyo en su estudio y la retroalimentación para futuras
decisiones; motivarlo en el qué, cómo y cuándo de su estudio; y fijar y clarificar lo aprendido. En
esta etapa se puede comprobar si se han conseguido o no los objetivos propuestos, y en qué
grado. En segundo lugar, debe servir para: aportar los datos necesarios con vistas a la toma de
decisiones sobre métodos, programas, orientaciones, etc. Además, debiera aportar elementos
para evaluar los métodos didácticos; identificar áreas problema; y facilitar la comunicación entre
facilitador y activador.
5.2. Presentación, puesta en común, síntesis y conclusiones del trabajo de grupos.

En esta etapa se discutirán, caso por caso, todos los temas trabajados con el método monográfico,
con la participación activa de todos los grupos en una sesión conjunta o plenario. El profesor
debe incentivar que sean los alumnos los que planteen las soluciones y discutan sobre las
alternativas. Su papel ideal será el de moderador y árbitro, participando sobre todo en el
esclarecimiento de las dudas que puedan surgir y en la identificación de las ventajas e
inconvenientes de cada enfoque que se plantee.

Se fomentará, e incluso se premiará, la exposición razonada de los puntos de vista. Además,


deberá responsabilizarse de efectuar, al final de la sesión, una síntesis general de los temas
estudiados y de las conclusiones que se obtengan de cada caso planteado. Si fuera necesario,
planteará opciones que no hayan surgido durante la discusión.

Bibliografía

 Abreu Gonçalves, Hortensia de : 2004. Manual de monografía, dissertação etese. AVERCAMP


Editora, São Paulo.

 Alvarenga, Amalia y Rosa, María Virginia : 1999. Apontamentos para a ciencia e técnicas de
re-dação científica . Sérgio Antônio Fabio editora, PortoAlegre.

 Aramburu, Enrique : Guía para la confección de la monografía exigible por la Cátedra


www.adinet.com.uy

 Salomon, Delcio Vieira : 2001. Como fazer uma monografía. 10. ed.

 Martins Fontes, São Paulo. Universidad Externado de Colombia : 1987. Metodología y técnica
de la investigación bibliográfica. Depto. de preseminarios, seminarios y prácticas de la Universi-
dad, Bogotá.
¿Qué es una monografía?

La palabra monografía es empleada con distintos alcances; Umberto Eco, por ejemplo, en Cómo
se hace una monografía se refiere a textos de 100 a 400 páginas redactados durante una carrera
por una o varias personas, sobre un tema referido a los estudios en que debe doctorarse. Luego
de rendir todos los exámenes correspondientes a la carrera el estudiante presenta la tesis frente
a un tribunal como un requisito necesario para obtener el título de licenciado o doctor.

En las páginas siguientes se usará el término monografía, en un sentido amplio, para denominar
los textos de trama argumentativa y función informativa que organizan, en forma analítica y
crítica, datos sobre un tema recogidos en diferentes fuentes.

En nuestro medio, por ejemplo, muchos profesores piden a sus alumnos que realicen una
monografía sobre un tema específico mientras que algunas escuelas la exigen como cierre de una
etapa o ciclo. Si bien las situaciones son distintas, hay reglas, tradiciones, particularidades, que
resultan comunes.

Estos trabajos menos pretenciosos, sirven para evaluar la capacidad del autor para trabajar
científica-mente en forma independiente y, como se verá, cumplen los requisitos de las
monografías de doctorado, aunque son más breves y sencillos.

Al realizar una monografía, entre otros saberes, se aprende a:

 delimitar un problema,

 descubrir y reunir información adecuada,

 clasificar los materiales,

 establecer contactos con personalidades e instituciones,

 acceder a la información y ejercitar el espíritu crítico,

 comunicar los resultados por escrito y expresarse oralmente frente un auditorio.

Una monografía se considera científica si cumple con las siguientes pautas:

 Trata un objeto de estudio (tema) de manera tal que pueda ser reconocible para los de-más;
 La investigación dice cosas sobre ese objeto que no se han dicho antes o lo aborda desde una
óptica distinta de la ya difundida;

 Es útil a los demás;

 Proporciona elementos que permitan confirmar o refutar las hipótesis que presenta, de
manera tal que otros puedan continuar el trabajo o ponerlo en tela de juicio.

Tipos de monografía

Los tipos y formas de monografías on variados como lo son las ciencias y sus métodos
particulares; por ejemplo, una temática relacionada con lo jurídico diferirá en su tratamiento de
otra cercana a la matemática.

En general, se pueden diferenciar tres tipos diferentes:

 Monografía de compilación: el alumno, después de elegir el tema, analiza y redacta una


presentación crítica de la bibliografía que hay al respecto. Es importante tener buen nivel de
comprensión y “ojo crítico” para referirse a los diferentes puntos de vista y exponer la opinión
personal tras una revisión exhaustiva.

 Monografía de investigación: se aborda un tema nuevo o poco explorado y se realiza la


investigación original; para eso hay que conocer lo ya se ha dicho y aportar algo novedoso.

 Monografía de análisis de experiencias: es frecuente que se emplee este tipo de monografía en


las carreras que implica una práctica, por ejemplo, en Medicina durante la época de residencia,
o bien en el ejercicio profesional, se analizan experiencias, se sacan conclusiones, se compara
con otras semejantes, etc.

Pasos para realizar una monografía

Consideraremos a continuación las principales etapas para la realización de una monografía:

 Aparición de la idea o asignación del tema.

 Búsqueda de información, primeras lecturas exploratorias y consulta a personas expertas en


la materia.
 Presentación del objeto en aproximadamente en quince líneas. Este momento es muy
importan-te porque consiste en la escritura del enunciado y la delimitación del tema.

 Elección definitiva del tema y lecturas complementarias. En este paso aumenta el compromiso
del autor con el objeto de estudio.

 Plan operativo: consiste en definir concretamente las tareas por realizar, planificar el trabajo,
controlar el desarrollo, plantear las dificultades, etc.

 Realización de las tareas previstas y redacción del primer borrador.

 Evaluación intermedia: a partir de una relectura detallada, se pueden hacer los ajustes
necesarios. También, se puede consultar nuevamente a las personas idóneas (frecuentemente
hay un tutor o director de tesis que orienta el trabajo). Si es necesario, modificar la planificación
inicial.

 Plan de redacción definitivo: para exponer el trabajo, se ajustan los títulos, párrafos, cantidad
de páginas, gráficos, etc.

A continuación, se desarrollan en detalle algunos de estos pasos.

Elección del tema

Los temas pueden ser numerosos y diversos; en caso de ser asignados por el profesor, sólo habrá
que reflexionar sobre cómo presentarlos y no alejarse del asunto por tratar. Cuando es el alumno
el que elige, conviene tener en cuenta las reglas que cita Umberto Eco en la obra antes
mencionada:

 Que el tema responda a los intereses del autor.

 Que las fuentes a as que recurra sean asequibles, es decir, al alcance físico del alumno, ya que
debe pensar en el tiempo disponible y en los recursos con que se cuenta.

 Que las fuentes sean manejables, es decir, al alcance cultural e intelectual del alumno,

 Que el autor esté en condiciones de dominar la metodología que ha decidido emplear.

Es conveniente preguntarse antes de la elección definitiva del tema:

 ¿Es posible desarrollarlo en el tiempo y con la bibliografía disponible?

 ¿No es demasiado amplio, abarcativo, vago o impreciso?

 ¿Existe algún libro o artículo de lectura imprescindible?

 ¿Por dónde empezar?


 El tema que deseo tratar, ¿es posible?

A veces, después de estas reflexiones, es necesario desechar el tema; otras, es suficiente con
modificarlo o cambiar la perspectiva para abordarlo.

Si se elige un tema muy abarcativo, por ejemplo, la mujer en la literatura, se corre el riesgo de no
poder tratarlo con detenimiento; en cambio, un tema preciso, la influencia de Alfonsina Storni
en la literatura argentina de comienzos de siglo, restringe el campo y facilita el trabajo.

En el momento de la elección del tema, se debe considerar, además, la situación particular del
autor—monografía—investigador, reconocer las propias limitaciones, los intereses personales, la
disponibilidad de tiempo, la posibilidad de consulta de documentos o libros, el manejo de
idiomas para el acceso a determinado material, etc.

La búsqueda del material

Una vez definido el objeto de estudio o tema de la monografía, es necesario valerse de fuentes,
es decir, libros, documentos (estadísticas, entrevistas, grabaciones, fotografías, etc.), artículos de
diarios o revistas que hagan verificable el trabajo y, a la vez, permitan a los lectores profundizar
el tema.

Para la elaboración de la monografía hay que estar al tanto del “estado de la cuestión”, esto quiere
decir, por un lado, conocer los trabajos realizados sobre el tema, y por otro, consultar las obras
de síntesis relacionadas con el contexto temático que enmarca la tesis. Por ejemplo, si el tema
por investigar fuera la necesidad de asistencia psicológica a los jugadores de las divisiones
inferiores de los clubes de fútbol, habrá que acudir a textos sobre dinámica grupal, psicología
social, liderazgo, psicología evolutiva, etc.

Ya nos hemos referido a la búsqueda de información en bibliotecas e Internet y al uso de fichas


y fiche-ros en este mismo libro.

Ampliar las referencias bibliográficas del material consultado, conviene no cometer los
siguientes erro-res, que suelen ser muy frecuentes:

 Colocar sólo la inicial del nombre del autor; esto suele producir confusión, por ejemplo,
Álvarez, J. Puede hacer referencia a >José el pintor argentino que utilizó el seudónimo Fray
Mocho (1858-1903), o a Juan Álvarez (1790-1867), político mexicano.

 Colocar el lugar de impresión y no el lugar de edición; para evitar esto se debe recurrir al
reverso de la portada donde está el Copyright y no al colofón.
 Colocar el lugar de edición y no el nombre de l editorial. En Madrid se publican infinidad de
obras, por lo tanto, hay que mencionar la editorial responsable.

Plan operativo

Es conveniente una vez definido el tema y realizada una primera búsqueda de materiales,
organizar un plan de trabajo tentativo. Este será breve y se irá completando, transformando y
afinando sobre la marcha. Puede indicar la posible división en capítulo y esbozar un índice
provisional.

Plan de redacción

Este plan muestra la forma definitiva de la monografía, es detallado; contiene todos los títulos y
en lo posible el de cada párrafo. Prevé, además, el número aproximado de páginas para cada
capítulo, (aun-que puede variar luego es útil saber que extensión y profundidad tendrá cada
tema).

Primer borrador

Vale recordar aquí que la escritura es un proceso. Nadie escribe “de un tirón”, ni “de una vez y
para siempre”. Es necesario, pues, revisar, corregir y encontrar la expresión más adecuada para
cada situación. Mucho ha facilitado esta tarea el uso de los procesadores de texto: cambiar un
párrafo de lugar, agregar o quitar oraciones, precisar el léxico empleado resultan tareas sencillas.
Pero ponerse en la piel del lector al que va dirigido el texto en cuestión ya implica un esfuerzo
mayor. Hay que imaginar cuánto sabe del tema, qué debe explicarse y qué no, qué referencias
acerca del contexto en que se eligió el tema hay que brindarle, qué menciones a la bibliografía se
deben consignar, cuánto recuerda del capítulo-lo anterior y cuánto debe ser reiterado, qué
distancia tomar respecto del escrito (por ejemplo, mantener la forma impersonal se cree, se ha
probado o incluirse a través e la primera persona del plural: creemos, hemos afirmado, etc.).
Todas estas son decisiones que debe tomar el que escribe la monografía sin que ningún
procesador pueda ayudarlo. Y son estas decisiones las que contribuirán en buena medida a
conseguir la eficacia del texto; por eso deben ser tenidas en cuenta desde la primera versión que
se haga del trabajo y ajustarse y controlarse en las sucesivas reescrituras.

Aunque se haya leído mucho sobre el tema y se sepa que decir, la hoja en blanco suele producir
cierta parálisis. Por lo tanto, conviene empezar a escribir, aunque sea en forma desordenada a
partir de lo se vaya presentado ante cada título y no buscar inmediatamente una forma definitiva.
Revisar, releer y corregir serán las herramientas indispensables en esta etapa de redacción.

Si fuera posible, también ese puede señalar en este punto del trabajo, las imágenes o cuadros que
se podrían incluir más adelante.
Conviene esbozar, además, la introducción y la conclusión para la monografía, aunque en
sucesivas revisiones haya que hacer modificaciones. De esta manera, se tendrá una versión
completa y una visión de conjunto de lo producido hasta el momento.

Redacción definitiva

Es indudable que no existe la posibilidad de dar indicaciones que aseguren el éxito de la escritura.
También en esta tarea hay mucho de práctica, de borradores que se descartan, de comentarios
de los lecto-res, de aprendizaje que se hace con la escritura misma.

Oraciones y párrafos

En lo posible, se trata de no escribir párrafos ni oraciones muy largos. Si en el borrador se han


dejado fluir las ideas, esta es la hora de acotarlas, separarlas y evitar la profusión de pronombres
y subordina-das.

Es conveniente releer varias veces y desde le principio el escrito para comprobar su cohesión y
mantener la unidad temática.

Por ejemplo, es preferible repetir un sujeto, antes que no saber de quién se habla si se emplea un
pronombre. Otras veces, es necesario reordenar las ideas porque se comprueba que algunas se
desvían del tema y deben formar parte de otro capítulo.

La subdivisión en párrafos y la inclusión de subtítulos, en general, facilita la comprensión. Al


elegir títulos y subtítulos debe pensarse que sean a la vez significativos respecto del contenido
del texto y atractivos para el lector. Un título sugerente invita a la lectura, y es posible imaginar
versiones más interesantes que la sola enunciación del contenido disciplinar.

La puntuación es, sin duda, garantía de comprensión, pero no pueden darse reglas ‘particulares
para la redacción de una monografía. La única indicación posible es que no deben usarse puntos
suspensivos (salvo en las citas en que se ha omitido algún fragmento), ni signos de exclamación.
Para los demás casos. Se puede consultar algún libro de gramática o diccionario que incluya las
reglas generales.

Citas y notas al pie

Una monografía se nutre de gran variedad de materiales escritos que deben ser citados según las
normas en uso. En líneas generales, los textos consultados se pueden parafrasear, es decir,
explicar o ampliar. También en este caso debe citarse la fuente. Toda vez que se transmite
literalmente una frase de otro autor, debe consignarse la correspondiente referencia
bibliográfica. Si la cita fuera breve, puede aparecer a lo largo del texto entre comillas, en caso de
citas textuales, conviene destacarlas de alguna manera, por ejemplo, usando un margen
izquierdo más amplio o mediante bastardillas.

En cuanto al uso de las notas, conviene recordar las más frecuentes:

 Indican la referencia bibliográfica de una cita. Aunque hemos señalado que hay otras maneras
de dar esta indicación dentro del texto, es conveniente que figuren a pie de página o al final del
capítulo para que el lector ubique rápidamente los datos que le interesen.

 Agregan datos sobre bibliografía complementaria. También conviene registrarla a pie de


página.

 Remiten a otras partes del trabajo. Cuando es necesario consultar otro capítulo una otra
sección del mismo capítulo, el señalamiento se hace mediante una nota al pie.

 Amplían una información. Para no recargar el texto con explicaciones o argumentos


secundarios, se los desarrolla a pie de página.

En todos los casos, las notas no deberán ser extensas porque de otra manera se constituirían en
apéndices, es decir, textos que, en forma de anexos relacionados con el tema central, se
desarrollan al final de un capítulo.

La bibliografía

La bibliografía está compuesta por la referencia bibliográfica de los libros, artículos, documentos,
etc. consultados al elaborar la monografía, hayan sido citados a lo largo del texto o no. Si no es
muy extensa, puede ubicarse al final del trabajo. Cuando se trata de monografías de mayor
envergadura, suele consignarse, además, la bibliografía correspondiente al final de cada capítulo.

La forma de organizarla varía según las necesidades puede hacerse por orden alfabético,
ordenando de esta manera los apellidos de los autores, dividirla por temas, determinando cuáles
son los fundamenta-les y agrupando por orden alfabético a los autores de cada uno; o bien,
clasificarlas por tipos de documentos; libros, artículos, cartas, leyes, etc.

Aspectos gráficos

Cuando se ja releído la monografía completa varias veces, y se han corregido oraciones, párrafos
y hasta capítulos enteros; cuando todo parece estar controlado, revisado y terminado, aún falta
poner a punto el diseño de las páginas, la reorganización de la información en forma de gráficos,
la inclusión de imágenes, la elaboración del índice, es decir, la presentación general.
En lo que se refiere a títulos y subtítulos. Es necesario destacarlos de alguna manera, aunque
manteniendo el criterio para cada categoría (por ejemplo, los títulos se escriben en negrita y
subrayados y los subtítulos sólo se subrayan.) Ambos se colocan junto al margen.)

La sangría, al comenzar cada párrafo puede ser de dos o tres espacios. También debe tenerse en
cuenta qué se subraya a lo largo del texto:

 Las expresiones extranjeras que no sean de uso común.

 Los nombres científicos.

 Los términos técnicos. Los títulos de libros, películas, diarios, poemas, cuadros.

 Las frases (no demasiado largas) que presenten una tesis o su demostración.

Otro de los asuntos por considerar, en esta puesta a punto, es el de las imágenes y gráficos
incluidos. Cada vez que aparezca un mapa, una fotografía, etc. será necesario acompañada del
epígrafe correspondiente, es decir, la leyenda que indique de qué se trata y cuál es la por fuente
de la que procede.

Además, habrá que evaluar qué información puede ser presentada en forma de cuadro,
infografía, red conceptual, etc. y proceder a diagramar la página en consecuencia.

El índice

El índice debe contener todos los títulos y subtítulos de la monografía con las mismas palabras y
la indicación de la página en donde se encuentran. Suele ubicarse al principio o al final del
trabajo, pero es más cómodo de consultar si está al comienzo.

Relectura del original

El control de detalles finales debe ser exhaustivo.

Resulta indispensable hacer una lectura de corrido del texto para evaluar la coherencia global, la
relación entre las ideas, las repeticiones, la necesidad de agregar conectores y todos los aspectos
de la cohesión.

Algunos puntos débiles del texto que conviene revisar especialmente son:

 La relación de los títulos y subtítulos (se advierte con una lectura de corrido).

 Las conexiones entre los párrafos y los capítulos entre sí.


 La numeración de capítulos y parágrafos debe ser correlativa.

 La precisión de notas y referencias bibliográficas.

 La corrección de la ortografía y la puntuación,

 Las palabras repetidas.

Apéndice

Elementos técnicos

El acopio de información

Es indudable que cualquier trabajo académico requiere de la integración y producción


personales, a través de síntesis, comentarios y resúmenes de los textos que nos proporcionan las
fuentes de información, para que nuestro documento contenga; alguna porción de originalidad.

Para aquellos que se inician en estas disciplinas, recomendamos leer primero la información
requerida y después expresarla con palabras propias. Ejemplo:

La idea de fundación de la Casa del Obrero Mundial partió de los líderes españoles Juan
Francisco Moncaleano y Eloy Armental, en cuyo derredor se agruparon Rosendo Sala-zar;
Celestino Gasca, Antonio Díaz Soto y Gama, Lázaro Gutiérrez de Lara, Manuel Sa-rabia, Rafael
Pérez Taylor, etcétera. El fin de los fundadores fue crear un órgano orientador de las masas
obreras que empezaban a sindicarse y a luchar por la unificación del movimiento obrero.

Interpretación del texto:

Con objeto de crear un órgano que orientara a las incipientes masas obreras que luchaban por la
unificación de la clase trabajadora, los líderes españoles Juan Francisco Moncaleano y otros
concibieron la idea de fundar la Casa del Obrero Mundial

De más está recordar que es conveniente conocer el significado de las palabras que transcribamos
y utilicemos.

Citas textuales
No obstante, las consideraciones anteriores, en ocasiones se hace necesario observar ciertas
formalidades para evitar confusiones e imprecisiones.

En principio, toda cita textual debe proporcionar los datos de la fuente donde se extrajo la
información, ya sea que se mencione en el texto o en una nota a pie de página.

Cita Mixta

Se hace cuando sea necesario agregar o anteponer a una síntesis, comentario o resumen, las
palabras textuales del autor, como complemento o evidencia.

Ejemplo:

Con respecto al caso específico de la pintura mural desarrollada durante esos veinticinco años
(1950—1975), dice Xavier Moyssén que: "La labor de los maestros adictos a una pintura de
expresión monumental con un sentido político—social, se mantuvo con gran actividad en un
considerable número de murales, ejecutados bajo las más diversas y discutibles técnicas [...]".

Cita Textual

En ella se recogen exclusivamente fragmentos o párrafos completos del texto original, debido a
que sea difícil resumir o sintetizar, o para probar lo asentado por un autor, o para apoyar o
criticar un comentario. Es la que presenta más variables. (Se debe evitar el exceso de esta clase
de citas, ya que como antes dijimos —la finalidad de cualquier trabajo académico requiere de la
integración y producción personales.) La transcripción debe ser correcta y estar entrecomillada
al principio y al final.

Cuando se desee resaltar un párrafo o una palabra, se subrayan éstos y se indica, al final de la
nota correspondiente, que el subrayado es nuestro:
"[...] Pero lo significativo es el hecho de que la pintura, en sus manifestaciones tradicionales,
mural o cuadro de caballete, continúa siendo la forma, más representativa del arte de México
[...]"

Toda observación personal debe ir entre corchetes: [ ]. En los trabajos de investigación, los
corchetes tienen la función de encerrar comentarios o aclaraciones en las citas textuales para
darle sentido a un fragmento.

Aunque son parecidos, no debemos sustituirlos por paréntesis:

"[...] Se mantuvo con gran actividad en un considerable número de murales, ejecutados bajo las
más diversas y discutidas técnicas durante los [veinticinco] años que aquí se estudian".

Si el texto transcrito presenta un error significativo o una incongruencia, se respetan


escrupulosamente éstos y se coloca la palabra latina sic (= así, de esta manera) entre corchetes,
para indicar que el error no es nuestro:

"En relación con el arte de la pintada [sic] es necesario anticipar que éste encontró un amplio
campo de desarrollo tanto en la práctica de la obra mural como en la del cuadro de caballete [...
]".

Si, no obstante el error o incongruencia, estamos en posibilidad de ilustrar al lector, en este caso
insertamos las abreviaturas i. e. (id est= esto es), e inmediatamente después la corrección, todo
esto también entre corchetes:

"En relación con el arte de la pintada [i. e. pintura] es necesario anticipar que éste encontró un
amplio campo de desarrollo tanto en la práctica de la obra mural como en la del cuadro del
caballete [...]"

Cuando nuestra transcripción omita palabras o párrafos para hacer más clara la idea que se desea
expresar, se indica lo anterior con tres puntos suspensivos, entre corchetes, de la manera
siguiente:

"[...] el cuadro de caballete [...] compitió con la pintura ejecutada en las superficies de los muros
[...] ventajosamente; [...]"

Cuando la transcripción lleve una palabra o una frase entrecomillada, esta última usará sólo una
comilla, o comillas francesas:
"Al parecer, los artistas mexicanos 'se la han jugado' al aceptar conscientemente una tradición
renovada".

Una punteada indica la supresión de uno o varios párrafos en una transcripción continua:

"Artículo 22. La aceptación podrá ser retirada si su retiro llega al oferente antes que la aceptación
haya surtido efecto en ese momento.

"Artículo 24. El contrato se perfeccionará en el momento de surtir efecto la oferta conforme a lo


dispuesto en la presente Convención. "Toda transcripción que exceda de cinco renglones será
separada del texto con dos cambios, se le suprimirán las comillas e irá con un margen equivalente
a la sangría.

Ejemplo: Entre las normas del procedimiento, y a partir de su introducción, se anunciaban las
expectativas del Acuerdo: Si estos principios son desarrollados, el resultado será la estabilización
del mercado mundial fuera del mercado interior de los Estados Unidos [...] Para hacer efectivo
lo antedicho, será necesario que los grupos adopten una política uniforme, lo cual en cada país
productor deberá considerarse separadamente, de acuerdo con las condiciones existentes en los
mismos. Sin embargo, estos postulados no satisficieron a muchos de los representantes
extranjeros.

Es redundancia explicar en el texto algún tópico y después repetirlo en una cita textual, ya que
éstos deben estar íntimamente ligados, incluso con la puntuación:

Con relación a los monopolios, en el artículo 28 constitucional se dice que: "Artículo 28. En los
Estados Unidos Mejicanos quedan prohibidos los monopolios, las prácticas monopolices [...]"

Lo correcto es:

Con relación a los monopolios, en el artículo 28 constitucional se dice que "[...] En los Estados
Unidos Mexicanos quedan prohibidos los monopolios, las prácticas monopólicas [...]"

La bibliografía
La bibliografía es una lista en la cual se describen las características editoriales de cada una de
las fuentes consultadas por el autor sobre determinada materia. Las fichas se ordenan
alfabéticamente por apellidos de autor, sin numerar. El encabezamiento se destaca por medio
del párrafo francés, el cual consiste en que la primera línea queda afuera de la ficha:

LASTRA LASTRA, José Manuel, Fundamentos de derecho, México, McGraw—Hill, 1994, 356 pp.

A fin de evitar repeticiones en una bibliografía en la que el mismo nombre de un autor se sucede
dos o más veces, éste se sustituye poniendo rayas:

FIX—ZAMUDIO, Héctor, Ensayos sobre el derecho de amparo, México, UNAM, Instituto de


Investiga-ciones Jurídicas, 1993, 515 pp.

y OVALLE FAVELA, José, Derecho procesal, México, UNAM, 1991, 145 pp.

Ficha Bibliográfica

En ella se consignan las partes esenciales de un libro.

Los datos para elaborarla deben extraerse de las páginas interiores(portada interior y página de
dere-chos de autor). Los principales son:

 Nombre del autor, empezando por sus apellidos

 Título y subtítulo del libro, subrayado

 Número de edición

 Lugar de impresión

 Nombre de la editorial

 Año de publicación

 Tomo y volumen

 Número de páginas

Si en general aprendemos una forma con los datos básicos:

GONZÁLEZ CASANOVA, Pablo, La democracia en México, México, Era, 1962, 261 pp

Ficha Hemerográfica

Cuando se consigna un artículo contenido en una obra de referencia general, en un periódico o


en una revista, los datos se arreglan de la manera siguiente:
Artículos de diccionarios y enciclopedias

Si el artículo o ensayo están firmados por un autor, la ficha se arregla de esta forma:

 Nombre del autor, empezando por sus apellidos

 Título del artículo, entre comillas

 Nombre del diccionario o enciclopedia, subrayado

 Número de volumen

 Lugar de impresión

 Nombre de la editorial

 Año de publicación

 Número de páginas entre las que se encuentra el artículo

GARAMENDIA, Pedro, "Víctor Hugo", Enciclopedia universal ilustrada, vol. 28, Madrid,
Espasa—Calpe, 1975, pp. 612—616.

Si el artículo no está firmado, la ficha se encabeza por el título de aquél.

Artículos de revistas

Cuando tomamos un artículo de una revista, la ficha se hace de la manera siguiente:

 Nombre del autor, empezando por sus apellidos

 Título del artículo, entre comillas

 Nombre de la revista, subrayado

 Lugar de impresión

 Tomo, volumen o año

 Número de la revista

 Periodo que abarca la revista

 Año de publicación

 Número de páginas entre las que se encuentra el artículo


WITKER, Jorge, "Hacia un régimen jurídico de las materias primas", Boletín Mexicano de
Derecho Com-parado, México, año XVII, núm. 51, septiembre—diciembre de 1984, pp. 915—939.

En las fichas hemerográficas no se acostumbra asentar el nombre de la editorial.

Artículos de periódicos

Cuando la ficha corresponde a un artículo firmado por una persona, el modelo es igual al de una
revista, con sus modalidades:

 Nombre del autor, empezando por sus apellidos

 Título del artículo, entre comillas

 Nombre del periódico, subrayado

 País

 Fecha (día, mes y año)

 Páginas y sección donde se encuentra el artículo

MIRO QUEZADA, Francisco, "La hora de la armonía", Excélsior, México, 15 de julio de 1985, p.
6—A.

Cuando son informaciones impersonales dadas por el periódico, la ficha se encabeza por el título
del artículo.

Piantanida, Graciela y Rojo, Mónica C. de. El texto instrumental. Buenos Aires, Kapelusz, s/f,
pág. 84-91

También podría gustarte