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Lecturas Norte de America

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Texto: Maldwyn A.

Jones, Historia de Estados Unidos 1607-1992

Capitulo XVII
Sociedad y cultura en la era industrial, 1860 – 1910

Tendencias Poblacionales
El texto habla sobre cómo cambió la población en los Estados Unidos entre 1860 y 1910.
En ese período, la población casi se triplicó, pero la tasa de crecimiento fue
disminuyendo. La cantidad de bebés nacidos disminuyó porque más personas
comenzaron a usar anticonceptivos, a pesar de las restricciones religiosas y legales.
A pesar de tener menos bebés, la cantidad de personas que morían disminuyó aún más,
gracias a los avances médicos y mejores cuidados de salud. Esto llevó a un crecimiento
general de la población.
Sin embargo, este crecimiento no fue igual en todo el país. Algunos estados del Oeste,
como Washington, Texas, Oklahoma y California, crecieron mucho más rápido que el
promedio nacional. Pero la mayoría de la población seguía viviendo en el norte del río
Ohio y al este del río Misisipi, porque allí estaban las ciudades que más crecían.
Crecimiento Urbano
Aborda el crecimiento urbano en Estados Unidos a lo largo del siglo XIX. En 1860,
aproximadamente uno de cada seis estadounidenses vivía en áreas urbanas, y ciudades
como Nueva York y Filadelfia ya eran notables en tamaño. Sin embargo, fue después de
la Guerra Civil que las ciudades comenzaron a destacar aún más debido al impacto de los
ferrocarriles, la industria y los avances tecnológicos.
El crecimiento urbano en Estados Unidos fue asombroso. Para el año 1900, alrededor de
un tercio de la población ya vivía en áreas urbanas, y más de cuarenta ciudades tenían
más de 100,000 habitantes. Nueva York experimentó un aumento significativo en su
población, pasando de un poco más de un millón en 1860 a tres millones y medio en
1900. Chicago, a pesar de haber sido devastada por un incendio en 1871, se convirtió en
la segunda ciudad más grande con una población que creció de 100,000 a 1,700,000
habitantes.
Otros ejemplos notables de rápido crecimiento urbano incluyen Minneapolis, Denver y Los
Ángeles. La influencia de la ciudad en la vida nacional se hizo cada vez más evidente,
convirtiéndose en el epicentro del industrialismo, la ciencia, la tecnología y las artes
creativas. Además, las ciudades mostraron las crecientes desigualdades de riqueza en la
sociedad y dieron lugar a nuevas necesidades sociales y actividades gubernamentales.
El éxodo de las áreas rurales también fue un componente importante de este crecimiento
urbano. A pesar de que muchas regiones del este de Estados Unidos experimentaron una
disminución en la población rural, fue especialmente pronunciado en los estados del
Atlántico norte, como Nueva Inglaterra. La competencia de las tierras vírgenes del oeste
llevó a la desaparición de granjas, edificios en ruinas y pueblos abandonados. Las
ciudades cercanas se beneficiaron de esta despoblación rural, ya que ofrecían empleo y
oportunidades, y también atraían a inmigrantes europeos en busca de mejores
condiciones de vida.
La Nueva Inmigración
El texto aborda la inmigración en los Estados Unidos en el período posterior a la Guerra
Civil. En ese lapso de tiempo, se produjo una gran ola de inmigración, con más de treinta
y seis millones de personas llegando al país, lo que fue cinco veces mayor que en los
cincuenta años anteriores y tres veces mayor que en los dos siglos y medio anteriores.
Inicialmente, la mayoría de los inmigrantes procedían del norte y oeste de Europa, pero a
partir de 1880, hubo un aumento significativo de inmigrantes del sur y este de Europa,
particularmente de Austria-Hungría, Italia y Rusia. Esta ola de inmigración se conoció
como la "nueva inmigración" y trajo una diversidad sorprendente de grupos étnicos a los
Estados Unidos, como polacos, checos, húngaros, judíos rusos, portugueses, italianos,
turcos, armenios, sirios y libaneses, entre otros.
Estos inmigrantes llegaron debido a factores económicos, como el crecimiento masivo de
la población en Europa, la transformación de la agricultura y la revolución industrial, así
como para evitar el servicio militar obligatorio y escapar de la persecución religiosa, como
los pogroms zaristas que afectaron a los judíos rusos.
La transición de los barcos de vela a los de vapor facilitó el viaje transatlántico, aunque las
compañías navieras no atraían a los inmigrantes con ofertas de trabajo bien remunerado
en América. Se estima que entre el 40 y el 65% de los inmigrantes viajaban con boletos
pagados por amigos y parientes en Estados Unidos.
Estos nuevos inmigrantes se establecieron principalmente en las ciudades industriales, ya
que buscaron empleo en fábricas, minas e industrias, donde podían ganar salarios más
altos en comparación con la agricultura. Esto dio a las ciudades estadounidenses un
carácter marcadamente extranjero, con una gran proporción de la población compuesta
por inmigrantes y sus descendientes.
Cada grupo étnico de inmigrantes tendió a especializarse en diferentes industrias, como la
minería, la industria pesada, el comercio de ropa, la construcción y la industria textil.
Muchos de ellos realizaban trabajos difíciles y peligrosos y enfrentaban explotación y
condiciones laborales precarias. Las condiciones de trabajo en la industria de la
confección eran particularmente notorias y llevaron a la intervención legislativa después
del trágico incendio del Triangle en 1911.
En el período analizado, la pobreza fue un factor determinante que llevó a la mayoría de
los inmigrantes a residir en barrios bajos en las grandes ciudades estadounidenses. Un
ejemplo destacado de esta concentración étnica se encontraba en el Lower East Side de
Nueva York, donde irlandeses, alemanes, judíos e italianos se agrupaban en un mosaico
de barrios étnicos. Las condiciones de vida eran a menudo precarias, como lo reflejó el
novelista Frank Norris al describir las difíciles circunstancias de los mineros polacos en las
regiones de antracita durante la huelga de 1902.
A pesar de la masiva llegada de inmigrantes, su proporción en la población total de los
Estados Unidos solo aumentó ligeramente, de 13.2% en 1860 a 14.7% en 1910. Sin
embargo, esta inmigración generó un creciente sentimiento de incomodidad y temor en la
sociedad estadounidense. La diversidad de lenguas, costumbres y orígenes de los nuevos
inmigrantes llevó a preocupaciones sobre la asimilación y el cambio en la sociedad.
La hostilidad nacionalista y el temor se intensificaron debido a la percepción de que los
inmigrantes provenían de regiones menos desarrolladas de Europa, eran más pobres,
menos educados y a menudo analfabetos. La creciente influencia de la Iglesia Católica en
la inmigración también generó preocupaciones y prejuicios, y se vio un aumento en el
anticatolicismo.
El movimiento para restringir la inmigración no buscaba ponerle fin, sino establecer
controles selectivos para excluir a los considerados "indeseables". Esto incluía pruebas de
alfabetización como medio de exclusión propuesto por la Liga para Restringir la
Inmigración. A pesar de la resistencia de una minoría liberal que defendía la tradición de
asilo, las leyes migratorias se volvieron más restrictivas a partir de la década de 1880. Se
excluyó a diversas categorías, desde convictos hasta personas con enfermedades
contagiosas y anarquistas.
La isla de Ellis en Nueva York se convirtió en un punto de entrada importante para los
inmigrantes, donde se sometían a interrogatorios y escrutinio, y solo un pequeño
porcentaje resultaba inadmisible y era devuelto a Europa. En resumen, el período estuvo
marcado por una creciente preocupación sobre la inmigración y una serie de medidas
restrictivas adoptadas para abordar estas preocupaciones.
Problemas del Transporte, la seguridad y la salud pública.
El tráfico congestionado fue un problema acuciante debido al crecimiento urbano. La
pavimentación con adoquines y asfalto en la década de 1880 ayudó a aliviar la
congestión, al igual que la construcción de puentes sobre vías fluviales. La apertura del
Puente de Brooklyn en 1883 mejoró el acceso a Nueva York, pero la construcción del
Puente de Williamsburg en 1903 hizo que entrar o salir de Manhattan fuera tolerable.
El transporte público era inadecuado, con líneas de omnibuses tiradas por caballos
pequeñas y lentas. La introducción del ferrocarril a vapor elevado en la década de 1870 y
los tranvías tirados por cable en la década de 1880 mejoraron la situación. Sin embargo,
el avance real llegó con el trolebús eléctrico, más barato y eficiente.
La iluminación urbana mejoró con la adopción de lámparas de arco eléctricas, lo que hizo
que las calles fueran más seguras y permitió un funcionamiento más extenso de fábricas,
tiendas, teatros y restaurantes.
En cuanto a la salud pública, las ciudades enfrentaron desafíos en cuanto al alcantarillado
y el suministro de agua potable. La mayoría de las ciudades seguían utilizando métodos
de saneamiento rurales en la década de 1870, lo que resultó en la contaminación de ríos
y mares. Se amplió el suministro de agua, pero se prestó poca atención a la calidad del
agua, lo que condujo a problemas de contaminación. Solo cuando se vinculó el agua
contaminada con epidemias de tifus, las ciudades comenzaron a abordar estos problemas
con mayor interés, aunque aún lo hicieron lentamente.
Venta al pormenor y anuncios
habla sobre cómo el transporte mejorado cambió la forma en que las personas
compraban. Las tiendas en el centro de las ciudades ofrecían más opciones y precios
más bajos que las antiguas tiendas rurales. Aparecieron grandes tiendas como Macy's en
Nueva York y Marshall Field's en Chicago, que tuvieron éxito debido a su publicidad
llamativa y atrajeron a las compradoras.
También se menciona la popularidad de las ventas por correo, donde empresas como
Montgomery Ward y Sears vendían una variedad de productos directamente a los
consumidores. Las cadenas de tiendas, como la Great Atlantic and Pacific Tea Company
y F.W. Woolworth Co., se expandieron rápidamente y se hicieron populares,
especialmente en las ciudades pequeñas.
La publicidad desempeñó un papel importante en la distribución de productos en todo el
país, y el gasto en anuncios aumentó significativamente. Los anuncios se volvieron
persuasivos y comenzaron a influir en los gustos y valores sociales de las personas.
Arquitectura urbana y planificación
Se destaca la concentración de empresas en áreas céntricas de las ciudades, lo que llevó
a la creación de rascacielos como una solución para economizar espacio. La construcción
de rascacielos se vio impulsada por avances tecnológicos como estructuras de acero,
ascensores, teléfono, luz eléctrica y materiales resistentes al fuego. Chicago fue un lugar
pionero en la construcción de rascacielos, liderado por arquitectos como Louis H. Sullivan
y Dankmar Adler.
Nueva York también se convirtió en un centro de rascacielos, con edificios emblemáticos
como el Flatiron Building, el Singer Building y el Woolworth Building. Además, el texto
menciona la influencia de Frederic Law Olmsted en la creación de parques públicos en las
ciudades, como el Central Park de Nueva York.
La planificación urbana en un sentido más amplio no era común antes de 1900, lo que
llevó a un crecimiento urbano caótico y una mezcla de estilos arquitectónicos en las
ciudades estadounidenses.
El problema de los barrios pobres
La afluencia de inmigrantes a las ciudades portuarias del Este de los Estados Unidos
condujo a la conversión de viejas mansiones en viviendas de alquiler y a la construcción
de edificios provisionales en espacios reducidos, lo que empeoró las condiciones de vida.
Se mencionan las "casas de pesas," que eran edificios insalubres y oscuros, repletos de
habitaciones pequeñas, con falta de luz y saneamiento, que albergaban a numerosas
familias y tenían altas tasas de mortalidad. A pesar de los esfuerzos de reformadores
como Jacob Ris y la creación de la Comisión de Casas de Vecindad en 1900, las mejoras
en los barrios pobres eran lentas debido a la oposición de intereses establecidos.
Estos barrios pobres eran considerados viveros del delito, y bandas criminales se
originaban en ellos, incluso con la participación de jóvenes estadounidenses. Las tasas de
criminalidad, incluyendo asesinatos, aumentaron significativamente en ese período, en
contraste con Europa, donde disminuyeron. La corrupción y la falta de aplicación de la ley
en la administración policial agravaron el problema.
Para abordar estos problemas, reformadores de la clase media, especialmente mujeres
con educación, establecieron casas de acogida en zonas pobres para proporcionar
servicios sociales, guía y dirección, y para reducir la brecha entre las diferentes clases
sociales. Jane Addams y Hull House en Chicago, junto con otras casas de acogida,
desempeñaron un papel crucial en la mejora de las condiciones de vida, la regulación de
fábricas explotadoras y la abolición del trabajo infantil.
División de Clases y movilidad social
Se menciona que la sociedad estaba polarizándose, con una clase obrera compuesta en
su mayoría por inmigrantes y una nueva aristocracia corporativa. En 1892, el 9% de las
familias estadounidenses poseía el 71% de la riqueza del país. El texto también menciona
la apariencia física de las grandes ciudades, con barrios pobres de inmigrantes
contrastando con magníficas mansiones de la élite.
Se habla de la exclusividad social simbolizada por lugares como Newport y la aparición de
clubes de campo exclusivos y academias privadas. La etiqueta social se vuelve
importante, y se menciona la creación de sociedades patrióticas y hereditarias exclusivas.
Además, se destaca el culto al "hombre hecho a sí mismo" promovido por novelas
populares, aunque los estudios revelan que muchos líderes empresariales nacieron en
riqueza y privilegio.
La investigación sobre la movilidad social muestra que la estructura social se estaba
volviendo más rígida. Los trabajadores de cuello azul y sus hijos tenían pocas
oportunidades de ascenso, y la movilidad laboral se limitaba en su mayoría a pasar de
trabajos no cualificados a semicalificados o cualificados. Los trabajadores nativos blancos
tenían más oportunidades de movilidad que los inmigrantes, mientras que los
afroamericanos estaban en una posición desventajosa en términos de movilidad social.
Mujeres, matrimonio y divorcio
Las mujeres en Estados Unidos ganaron más independencia en el siglo XIX y principios
del XX. Se les otorgaron más derechos sobre su propiedad y ganancias. La
industrialización les brindó más oportunidades de trabajo. Como resultado, menos
mujeres se casaban a una edad temprana y más optaban por quedarse solteras.
El texto también menciona que hubo un aumento en las tasas de divorcio. Esto se debió
en parte a que era más beneficioso socialmente para las mujeres ser las que pedían el
divorcio. Sin embargo, esto también generó preocupaciones sobre la estabilidad familiar.
En resumen, el texto se centra en cómo las mujeres ganaron independencia y cómo eso
afectó el matrimonio y el divorcio en ese período.
El impacto de la tecnología en la vida cotidiana
Describe cómo la ciencia y la tecnología transformaron la vida de las personas al
simplificar las comunicaciones, hacer que los viajes sean menos peligrosos, mejorar los
niveles de vida y liberar a las personas de trabajos laboriosos. Además, destaca el papel
de la tecnología en la alimentación, la refrigeración, el transporte y el entretenimiento,
mencionando inventos como la "nevera," el vagón frigorífico, la luz eléctrica, el teléfono, la
máquina de coser, el fonógrafo, la pluma estilográfica y la maquinilla de afeitar. Un
enfoque importante es la popularización de la cámara Kodak, que simplificó la fotografía y
la convirtió en una actividad de masas. En general, el texto resalta cómo la tecnología
mejoró la comodidad y el estilo de vida de los estadounidenses en esa época.
Entretenimiento, deporte y ocio
Comienza mencionando el aumento de las diversiones de masas en ese período,
destacando el circo ambulante y la llegada del Show del Oeste Salvaje de Buffalo Bill en
1883. Se mencionan compañías de repertorio, actores famosos, y la inclinación del
público hacia el melodrama y la farsa en lugar del realismo en las representaciones
teatrales.
Luego, el texto se adentra en el mundo del cine, señalando la introducción de las películas
en la década de 1890, con la invención de dispositivos como el cinetoscopio de Edison y
el proyector de Thomas Armat. Menciona la popularidad creciente de las películas en los
mickelodeons y la consolidación de Hollywood como centro de la industria
cinematográfica.
En el ámbito de la música, se destaca la influencia de Theodore Thomas en el desarrollo
de la música orquestal en Estados Unidos, así como la fundación de orquestas sinfónicas
en varias ciudades. La ópera también se menciona, aunque su atractivo se relacionaba
más con la posición social que con la música en sí.
El texto aborda la música popular, como la opereta en inglés y la comedia musical, con
ejemplos de producciones exitosas. Se menciona la popularidad del béisbol como deporte
nacional y la evolución del boxeo hacia una forma más regulada y respetable. También se
habla de las carreras de caballos y su regulación.
Finalmente, el texto menciona la creciente popularidad del golf, el tenis y el ciclismo, así
como la revolución social que marcó el automóvil, especialmente con la aparición del
modelo T de Ford y la introducción de la técnica de ensamblaje en cadena en la
producción de automóviles.
Desafío a la Religión
A pesar de que las iglesias estaban llenas y crecían en número de seguidores, se
enfrentaban a problemas importantes.
Por un lado, la creencia en la Biblia como una verdad literal se vio amenazada por la
teoría de la evolución de Darwin y el análisis crítico de la Biblia. Además, la
industrialización generó preguntas difíciles para la fe tradicional.
Hubo un conflicto entre la ciencia y la religión, donde algunos líderes religiosos adaptaron
la teoría de la evolución a la creencia cristiana, pero otros, llamados fundamentalistas, se
mantuvieron firmes en la interpretación literal de la Biblia.
La ética social también se volvió importante, con algunos ministros buscando adaptar la fe
cristiana para abordar los problemas sociales en la sociedad industrializada.
Además, se mencionan otras organizaciones religiosas que combinaron servicios sociales
y espirituales, como la Asociación de Jóvenes Cristianos y el Ejército de Salvación.
La Ciencia Cristiana, fundada por Mary Baker Eddy, también tuvo un atractivo especial
entre la clase media urbana.
La Iglesia católica creció mucho debido a la inmigración, pero los inmigrantes de
diferentes culturas a menudo lucharon por obtener sus propias parroquias y sacerdotes. A
pesar de los desafíos, la Iglesia católica mantuvo a la mayoría de sus seguidores.
El texto también destaca la necesidad de que la religión se adaptara a la industrialización,
con algunos líderes católicos mostrando simpatía hacia los trabajadores y tratando de
mejorar la relación entre la Iglesia y ellos.
El Avance Educativo
Se destaca la expansión de la educación en todos los niveles, con la idea de educación
gratuita universal que se convirtió en realidad, especialmente en la educación elemental.
Se menciona que la duración del curso escolar aumentó, y la tasa de analfabetismo
disminuyó. También hubo un aumento significativo en el número de escuelas secundarias
públicas.
Sin embargo, se señalan disparidades regionales en la calidad de la educación, con
estados como Nueva York y Massachusetts respaldando mejor sus sistemas escolares en
comparación con otras regiones. Además, se menciona que la educación rural a menudo
era deficiente, y los maestros estaban mal remunerados, lo que llevó a un cambio hacia
maestras en lugar de maestros.
En el ámbito de la educación superior, se destaca la Ley Morrill de 1862 que apoyó a las
universidades que enseñaban agricultura y artes mecánicas. Esto condujo a la creación
de numerosas universidades. La educación superior para mujeres también experimentó
avances, con la apertura de universidades femeninas y la admisión de mujeres en
muchas instituciones.
El texto menciona que, a pesar de la expansión de las universidades, no todas eran
instituciones de aprendizaje superior de alta calidad, y a menudo se daba prioridad a los
deportes, como el fútbol universitario. Se discuten las críticas a las universidades por
diversas deficiencias, pero se destaca la labor de rectores universitarios que
implementaron reformas significativas, como el sistema optativo y la promoción de la
investigación.
Finalmente, se menciona el movimiento Chautauqua, que se convirtió en una
organización nacional para la educación de adultos, ofreciendo cursos por
correspondencia y conferencias itinerantes de personalidades como Mark Twain y William
James.
Bibliotecas y Prensa
Al finalizar el siglo XIX y principios del siglo XX. En ese período, se observó un notable
aumento en la cantidad de bibliotecas públicas financiadas por impuestos, en gran parte
gracias a donaciones de figuras como Andrew Carnegie. Destacan la creación de la
Biblioteca Pública de Nueva York, así como las bibliotecas públicas de Boston y Chicago.
En cuanto a la prensa, se menciona que para el año 1900, los Estados Unidos tenían una
gran cantidad de periódicos y semanarios, superando al resto del mundo. El desarrollo de
tecnologías como la linotipia y la colaboración de agencias de noticias como Associated
Press permitieron una mayor producción y cobertura periodística, aunque a veces a
expensas de la homogeneización de contenidos.
Además, se destaca el cambio en la dirección del periodismo, pasando de grandes
propietarios-editores a empresarios preocupados por el lucro y la atención de la audiencia
alfabetizada reciente. Ejemplos notables son Joseph Pulitzer y su enfoque en llegar a la
"masa acrítica y sin instrucción de lectores," utilizando sensacionalismo y contenido
popular para aumentar la circulación de sus periódicos.
El texto también hace referencia al auge de las revistas, tanto literarias dirigidas a la clase
media culta como publicaciones de masas. Estas revistas, como McClure's y
Cosmopolitan, se vendían a precios más bajos que los periódicos tradicionales y ganaron
popularidad al exponer casos de corrupción política y otros abusos. Además, ayudaron a
promover la escritura de historias cortas y presentaron obras de ficción destacadas en
entregas.
Literatura y Artes
Ofrece una visión general de la evolución de la literatura y las artes en los Estados Unidos
después de la Guerra Civil. Se menciona cómo las figuras literarias prominentes, como
Whitman, Hawthorne, Thoreau y Melville, tuvieron diferentes destinos después del
conflicto. Se destaca el cambio gradual hacia el realismo literario a partir de 1870 y la
aparición de una escuela de novelistas "naturalistas."
El texto también destaca a escritores que se centraron en la "colorista local," describiendo
la vida en regiones rurales y costumbres locales. Se mencionan figuras importantes como
Mark Twain y su influencia en la literatura estadounidense. Se aborda la importancia de
escritores como Henry James, William Dean Howells y otros "naturalistas" que exploraron
aspectos crudos y desagradables de la experiencia humana.
En cuanto a las artes visuales, se mencionan pintores realistas notables como Thomas
Eakins y Winslow Homer, así como artistas estadounidenses que trabajaron en el
extranjero. El texto también menciona la creciente apreciación del arte y la cultura en los
Estados Unidos a pesar de las críticas sobre el materialismo y la vulgaridad de la época.
En resumen, el texto ofrece una visión general de la evolución de la literatura y las artes
en los Estados Unidos después de la Guerra Civil, destacando las influencias, tendencias
y figuras prominentes de la época.
Texto: Martin Sklar, Capitalismo y liberalismo corporativos

El texto se centra en el período de 1890 a 1916 en la historia de Estados Unidos,


conocido como la era progresista. Durante este tiempo, hubo reformas significativas y un
auge del capitalismo corporativo en el país. Este período marcó la formación de las
instituciones básicas, las relaciones sociales y las divisiones políticas en la sociedad
estadounidense, que tendrían un impacto duradero en las décadas siguientes.
La interacción entre las reformas y el surgimiento del capitalismo corporativo se convirtió
en un tema central en la política nacional de la época, conocido como el "asunto de los
trusts", que se centraba en el poder y la influencia de las grandes corporaciones. Las
interpretaciones de la era progresista varían, algunas consideran las reformas como un
elemento modernizador relacionado con el surgimiento de las grandes empresas,
mientras que otras las ven como un mecanismo para limitar el poder corporativo en
beneficio del pueblo.
El texto también destaca la importancia de comprender el capitalismo en un sentido
amplio, no solo como un cambio económico, sino como un cambio en las relaciones
sociales que afecta a todos los aspectos de la sociedad, incluyendo lo político, lo legal, lo
intelectual y lo cultural, además de lo económico.
El texto analiza la transición del capitalismo estadounidense de su etapa competitiva a la
etapa corporativa, centrándose en la importancia de comprender el capitalismo y la clase
capitalista como formaciones sociales en constante evolución. Se argumenta que ambas
etapas no son "naturales" ni "políticas", sino parte del desarrollo histórico.
El estudio se enfoca en los trusts y los debates antitrust como elementos clave en esta
transformación, examinando discursos críticos en campos económicos, legales y políticos.
Se exploran las implicaciones históricas de la emergencia del capitalismo corporativo y se
analiza el pensamiento de presidentes progresistas, como Theodore Roosevelt, William
Howard Taft y Woodrow Wilson, cuyas perspectivas influyeron en la sociedad.
Se destaca la interconexión entre el discurso económico, legal y político en una sociedad
donde las relaciones de mercado y la propiedad capitalista eran fundamentales. El texto
avanza desde la metamorfosis de la propiedad y el mercado hacia la legislación y
jurisprudencia relacionadas con la competencia y la restricción del comercio. Finalmente,
aborda temas más amplios como los derechos de propiedad, la eficiencia económica, la
relación entre gobierno y mercado, y las cuestiones generales de capitalismo, socialismo
y democracia en la sociedad estadounidense de finales del siglo XIX y principios del XX.
Modo de producción y movimientos sociales
El texto se enfoca en la reorganización corporativa de la industria en Estados Unidos que
ocurrió a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, específicamente entre 1898 y
1904. Este proceso marcó un cambio fundamental en el sistema económico y social de
Estados Unidos.
Transición del Capitalismo: El texto señala que este período marcó una transición en el
capitalismo estadounidense. Inicialmente, el capitalismo en Estados Unidos se
caracterizaba por propietarios competitivos, es decir, muchas pequeñas empresas
competían en el mercado. Sin embargo, se produjo un cambio hacia un modelo de
corporaciones administradas, donde empresas más grandes y centralizadas tomaron el
control.
Reconstrucción Corporativa: El término "reconstrucción" se utiliza para describir este
cambio profundo. Esto no se limitó solo a la economía, sino que afectó a múltiples
aspectos de la sociedad y la política. Implicó transformaciones en la política
gubernamental, la cultura, el pensamiento intelectual, la educación, y las relaciones entre
diferentes clases sociales.
Impacto en la Sociedad: La reorganización corporativa no solo se quedó en el ámbito
económico. Cambió la dinámica de poder entre diferentes grupos en la sociedad, influyó
en la legislación y en la política partidista, y tuvo efectos en la escena internacional.
También transformó la forma en que las personas pensaban sobre la sociedad y la
economía.
Perspectiva de los Líderes Políticos: Los líderes políticos de la época, como Theodore
Roosevelt, William Taft y Woodrow Wilson, abogaron por reformas legales y cambios
institucionales para adaptarse a esta evolución del capitalismo. Creían que estas reformas
eran necesarias para mantener el progreso de la nación.
El Capitalismo como Sistema de Relaciones Sociales: El texto propone una visión más
amplia del capitalismo. No se trata solo de un sistema económico, sino de un conjunto de
relaciones sociales que afectan la estructura de clases, las jerarquías de autoridad y las
relaciones de poder en la sociedad. El capitalismo se convierte en un elemento
fundamental de la sociedad.
Diferenciación de Otros Sistemas Sociales: El texto también sugiere que el capitalismo
puede diferenciarse de otros sistemas sociales, como las sociedades tribales, esclavistas,
feudales o socialistas, debido a sus características y dinámicas particulares.
En resumen, este texto describe cómo la reorganización corporativa en Estados Unidos
en las décadas de 1898-1904 cambió el panorama económico y social de la nación,
afectando diversos aspectos de la sociedad y la política. Los líderes de la época abogaron
por reformas para adaptarse a esta evolución y asegurar el progreso de la nación.
También plantea la idea de que el capitalismo es más que un sistema económico y que
influye profundamente en la sociedad en su conjunto.
Amplitud del Capitalismo: Se destaca que el capitalismo no se limita a la economía, sino
que abarca una amplia gama de aspectos de la sociedad. Esto incluye relaciones de clase
(diferencias entre empleadores y empleados), relaciones de propiedad (quiénes poseen
qué), valores, ideas, ley y conciencia (las creencias y valores que influyen en el
comportamiento de las personas).
Sistema de Producción de la Propiedad: Se propone la idea de visualizar al capitalismo
como un sistema de producción de la propiedad. Esto significa que no solo se trata de la
producción y distribución de bienes, sino de cómo se organiza la sociedad en términos de
propiedad y poder en un período histórico particular.
Relaciones Sociales y Formas de Conciencia: El texto subraya que el capitalismo es un
sistema complejo de relaciones sociales y formas de conciencia. Esto implica que las
relaciones de propiedad y las actividades económicas están estrechamente relacionadas
con la política, la moralidad y las creencias de las personas.
Interconexión entre Economía, Política y Sociedad: Se enfatiza que el capitalismo no
puede separarse de la política y la sociedad. Las actividades empresariales, como
comprar, vender, emplear y dirigir empresas, están relacionadas con la capacidad de
movilizar recursos de la sociedad para alcanzar objetivos, lo que implica un compromiso
público general. Esto es una manifestación del "poder en un sentido político" en la
sociedad.
Impacto en la Vida Cotidiana: El texto también destaca que las actividades empresariales
afectan la vida cotidiana de las personas. Esto incluye dónde viven, sus relaciones
sociales, su participación en actividades cívicas y políticas, así como su educación y la
crianza de sus hijos.
Capitalismo como un Sistema Complejo: El capitalismo no es simplemente un sistema
económico, sino un sistema de relaciones de propiedad, clase, leyes, ideología y
gobierno. Influye en gran medida en la forma en que las sociedades funcionan y en cómo
las personas se relacionan entre sí en diversos aspectos de la vida.
En resumen, el texto argumenta que el capitalismo es mucho más que una cuestión
económica, y que influye en una amplia variedad de aspectos en la vida de las personas y
en la estructura de la sociedad.

En resumen, el texto analiza cómo los líderes y las corporaciones justificaron la transición
al capitalismo corporativo en Estados Unidos, basándose en la idea de que este cambio
era una evolución natural y necesaria, influenciada por diversas fuentes de pensamiento y
cambios en la sociedad.
Justificación del cambio: Los líderes y las corporaciones argumentaron que el cambio
hacia el capitalismo corporativo no era una decisión consciente, sino más bien una
adaptación necesaria a las leyes económicas en evolución. Esta adaptación incluyó no
solo aspectos económicos, sino también cambios en el pensamiento, los hábitos y las
expectativas de la sociedad.
Cuatro fuentes de pensamiento: Se mencionan cuatro influencias fundamentales en la
justificación de esta transición. Estas fuentes de pensamiento incluyen:
a. La idea de la predestinación: Se relaciona con la creencia en un plan providencial o
leyes naturales que guían el desarrollo económico.
b. Principios de la economía política clásica: Se argumenta que las leyes económicas
operan independientemente de la voluntad humana y están alineadas con las leyes
naturales.
c. Gobierno de leyes en lugar de personas: Se compara un gobierno justo con un
mercado que funciona según leyes naturales en lugar de decisiones humanas.
d. Teoría de la evolución por selección natural: Se aplica la idea de desarrollo acumulativo
y progresivo al mundo económico, similar a la evolución en la naturaleza.
Cambio en el pensamiento: A medida que el capitalismo estadounidense transitaba de la
etapa competitiva a la corporativa, los líderes empezaron a enfocarse en nuevas leyes
económicas, como los ciclos de negocios, las crisis y los mercados corporativos
administrados. Estos líderes dejaron de enfatizar la competencia feroz y comenzaron a
abogar por la cooperación y la gestión de los mercados como una alternativa más
evolucionada.
Influencia social y pensamiento: El texto sugiere que la transición al capitalismo
corporativo no se debió solo a leyes económicas sobrenaturales, sino también a cambios
en la sociedad y el pensamiento. Estos cambios involucraron a la clase burguesa en
ascenso, así como movimientos políticos y sociales que promovieron la cooperación y la
gestión de mercado como medios de supervivencia.

El texto habla sobre la historia del capitalismo y cómo está relacionada con la economía,
la política y los movimientos sociales. Nos dice que no podemos entender el capitalismo
solo mirando números como el crecimiento económico o las ganancias, sino que debemos
mirar las relaciones entre diferentes clases sociales y cómo la gente actúa.
El cambio del capitalismo competitivo al corporativo no ocurrió solo porque las leyes
económicas lo dictaran, sino que fue el resultado de movimientos políticos y sociales que
reorganizaron la propiedad y el mercado. Es importante entender que los cambios en la
economía no son respuestas automáticas a condiciones objetivas, sino que están
influenciados por las acciones de las personas, incluyendo los capitalistas.
Debemos pensar en los capitalistas como una clase social que participa en movimientos
sociales, y las decisiones sobre la propiedad y el mercado son el resultado de las
acciones humanas. Además, las reformas en áreas como la ley, la política y el gobierno
son parte importante de los cambios en la economía capitalista y deben considerarse
como parte de la historia de los movimientos sociales.
Se enfatiza que tanto el industrialismo como su reorganización corporativa deben
entenderse como movimientos sociales, al igual que el populismo, el sindicalismo y otros,
y se señala la importancia de no limitar el estudio de los capitalistas a intereses
económicos, sino considerarlos como parte de movimientos sociales más amplios
relacionados con sus relaciones de propiedad.
Etapas Ascendentes y en declinación del capitalismo
El texto se centra en el período de 1890-1916 en los Estados Unidos, que se denomina
como la "época de reconstrucción corporativa del capitalismo". Este período estuvo
marcado por conflictos entre diferentes movimientos económicos y políticos que
representaban las formas ascendentes y en declinación del sistema capitalista de
propiedad y producción.
Durante este tiempo, se produjo un desajuste significativo entre los componentes clave
del sistema de poder gubernamental y legal y los cambios que estaban teniendo lugar en
el sistema de propiedad y producción capitalista, así como en las ideas que lo
sustentaban.
Los movimientos de reconstrucción corporativa buscaban fortalecer el poder de las
corporaciones capitalistas, y lo hacían a través de cambios en el orden legal y en el
sistema político en general. Este proceso involucraba diferentes aspectos, como
relaciones de propiedad, leyes, política partidista, gobierno, legislación, política exterior y
pensamiento intelectual.
Estos esfuerzos se llevaron a cabo a través de una variedad de formas organizativas, que
incluían asociaciones comerciales, clubes de reformadores, publicaciones, conferencias y
convenciones. En resumen, se trataba de una transformación amplia y profunda destinada
a consolidar el sistema de autoridad corporativa capitalista emergente.
Es importante destacar que el capitalismo corporativo no se estableció de manera abrupta
ni eliminó por completo las formas de pensamiento y los movimientos políticos asociados
con los pequeños productores y propietarios. Estos grupos seguían siendo influyentes en
diferentes niveles del gobierno, desde el Congreso hasta las cortes y el gobierno local.
Las grandes corporaciones y los mercados corporativos también enfrentaron resistencia y
desafíos de una parte de la población y de sus representantes políticos, ya que no tenían
una legitimación plena para todos.
Además, el texto señala que el capitalismo corporativo adaptó algunas características de
la época anterior, como la influencia de líderes carismáticos conocidos como "capitanes
de la industria" o "capitanes de las finanzas". Sin embargo, a medida que estas
corporaciones crecían en poder, también preparaban su propia declinación al instituir
estructuras burocráticas más complejas.
Por último, se menciona que durante este período, hubo un conflicto constante entre las
perspectivas corporativas y las de los propietarios individuales, lo que se reflejó en
organizaciones comerciales y cívicas. Estas diferencias surgieron en temas como la
expansión internacional, la regulación gubernamental, reformas bancarias, relaciones
laborales y bienestar social, e incluso dentro de las mismas empresas y corporaciones.
Esto ilustra la complejidad de este período de reconstrucción corporativa en los Estados
Unidos.

El texto se centra en el conflicto que surgió durante la transición del capitalismo


competitivo al capitalismo corporativo en los Estados Unidos. En esta evolución, se
observa un cambio en los patrones de consenso que definían los conflictos económicos y
políticos de la época. Antes de entrar en detalles, es importante entender qué se entiende
por capitalismo competitivo y corporativo.
El capitalismo competitivo se caracteriza por un mercado en el que múltiples propietarios
compiten entre sí. Este tipo de mercado se basa en la idea de la libre competencia, donde
las empresas buscan ganar ventajas a través de la innovación y la eficiencia, y los precios
se determinan principalmente por la oferta y la demanda.
Por otro lado, el capitalismo corporativo se refiere a un mercado en el que las empresas
más grandes y poderosas han consolidado su influencia y control. En este contexto, la
competencia es menos intensa, y las grandes corporaciones pueden ejercer un dominio
considerable en sus respectivos sectores. La regulación del mercado se convierte en un
tema crucial.
El texto menciona que, a medida que el capitalismo corporativo se desarrollaba, surgieron
conflictos relacionados con la regulación del mercado. Estos conflictos involucraron a una
variedad de actores, desde fabricantes y banqueros hasta agricultores, trabajadores y
reformadores. Cada uno de estos grupos tenía sus propias perspectivas y preocupaciones
sobre cómo debía regularse el mercado.
Además, se estableció un consenso anticompetitivo que influenció las discusiones sobre
los propósitos, el carácter y los métodos de regulación. Un punto importante en este
debate era hasta qué punto la regulación debería ser responsabilidad del sector privado o
del gobierno. Algunas agrupaciones corporativas, cooperativas agrícolas y sindicatos se
convirtieron en tendencias reguladoras dentro del sector privado.
El texto también señala que la regulación no fue un proceso sencillo ni uniforme. A pesar
de las incongruencias, las leyes regulatorias y las prácticas administrativas se orientaron
hacia la legitimación del nuevo orden corporativo, que incluía una forma diferente de
propiedad y suponía cambios fundamentales en la estructura de la sociedad y la
economía.
En resumen, el conflicto en torno a la regulación del mercado durante la transición del
capitalismo competitivo al corporativo involucró a una amplia gama de actores con
diversas perspectivas y preocupaciones. Este conflicto influyó en la creación de leyes y
regulaciones que buscaban establecer y legitimar el nuevo orden económico, que se
conoce como el "liberalismo corporativo". Sin embargo, este resultado no se dio por
sentado y debe ser explorado y explicado en detalle para comprender completamente
esta evolución en la historia económica y política de los Estados Unidos.
Metamorfosis de la clase y reconstrucción corporativa
El autor argumenta que la transición pacífica al capitalismo corporativo se debió a varios
factores. En primer lugar, señala que la vida política no fue completamente pacífica, ya
que hubo negación del sufragio y supresión de derechos ciudadanos, lo que limitó la
democracia política y debilitó a las fuerzas populistas o anticorporativistas.
En segundo lugar, la década de 1890 presenció el debilitamiento del sindicalismo
industrial debido a factores como la depresión económica y la violencia contra los
huelguistas. Esto debilitó el poder de los trabajadores industriales y preparó el terreno
para la reorganización corporativa del capitalismo.
En tercer lugar, la guerra con España y la posterior guerra de conquista en Filipinas
contribuyeron a un ambiente político favorable para la reorganización corporativa, ya que
generaron una expansión económica interna y un sentimiento nacionalista.
A pesar de estos desafíos, la reorganización corporativa del capitalismo en Estados
Unidos fue relativamente pacífica en comparación con eventos históricos anteriores, como
la Guerra Civil. La crisis de la década de 1890 se resolvió dentro del sistema político
existente, sin necesidad de una guerra civil o revolución. Esto se debió a la fluidez de
intereses y la diversidad de condiciones dentro de las clases y estratos sociales, lo que
permitió compromisos y alianzas en lugar de conflictos destructivos. En resumen, la
transición hacia el capitalismo corporativo en esa época se caracterizó por su adaptación
y reorganización económica y política en lugar de una lucha violenta.

Este texto aborda la evolución del capitalismo en el contexto de la década de 1890. Se


menciona que el capitalismo competitivo y el populismo político tuvieron efectos
desintegradores en la sociedad, mientras que el capitalismo en gran escala y el
movimiento pro-corporativo fueron reintegradores. El capitalismo corporativo se
caracteriza por su capacidad para incluir y adaptarse a diversos intereses, desde
pequeños productores hasta profesionales y clases medias. También promovió la
estabilidad laboral y oportunidades de ascenso para los trabajadores. Además, el texto
destaca cómo la transformación hacia el capitalismo corporativo involucró cambios en las
relaciones de propiedad y mercado, creando un liderazgo político orientado hacia este
modelo económico. Este liderazgo bipartidista se consolidó a finales del siglo XIX y
desplazó al liderazgo anterior orientado al capitalismo competitivo. El texto menciona
eventos políticos y figuras clave que influyeron en este proceso, como la Convención
Nacional del Partido Republicano en 1896 y la Convención del Partido Demócrata del Oro
en Chicago en el mismo año. También se señala la importancia de la Convención
Monetarista de Indianápolis en las reformas bancarias y monetarias, así como en la
transformación de la clase capitalista hacia el sector corporativo.
El sector emergente de la clase capitalista estaba compuesto por capitalistas de las
principales regiones del país, vinculados a ferrocarriles, nuevas corporaciones industriales
y la banca de inversiones. Estos capitalistas se unieron en asociaciones como la
Comisión de Indianápolis para promover reformas políticas y la reorganización corporativa
de la economía.
La gran corporación desempeñó un papel central en esta transición al alinear a la
pequeña y mediana burguesía con las empresas corporativas de gran escala. Ofreció
nuevas oportunidades de empleo e ingresos, y unió el capital de la gran ciudad con el de
las poblaciones del interior. La corporación se convirtió en una nueva frontera de
oportunidades para las clases medias, democratizando las capas jerárquicas y ofreciendo
nuevas vías de enriquecimiento y ascenso social.
Además, las grandes corporaciones se convirtieron en centros de planificación del
desarrollo, abarcando desde la producción y distribución hasta la planificación urbana.
Esto implicaba una perspectiva de desarrollo a largo plazo y un enfoque en intereses
nacionales e internacionales. La riqueza familiar se trasladó de empresas propietarias a
valores corporativos negociables, lo que amplió la base del ingreso y socializó los riesgos.
La regulación gubernamental se volvió importante para garantizar la coexistencia en el
mercado y un juego justo.
El Capitalismo corporativo y el liberalismo estadounidense

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