HISTORIA (Samaniego lopez Exar Jhetly, Gutierrez Perez Jhosep Alfredo y Lachos Briones Altair)

Aproximadamente entre los siglos V y XV. Fue un periodo muy influido tanto por la teología cristiana como por la filosofía
clásica griega y romana, podemos dividirla, basados en los puntos y acontecimientos más importantes, de la siguiente manera:
1. Filosofía cristiana primitiva (siglos V-VII) Las raíces de la filosofía medieval se remontan a los primeros pensadores
cristianos, como Agustín de Hipona y Boecio. Agustín, en particular, ejerció una profunda influencia en el pensamiento
medieval, haciendo hincapié en la compatibilidad de la fe y la razón. Este periodo se caracterizó por los esfuerzos de los
primeros pensadores cristianos por integrar la filosofía clásica, en particular las obras de Platón y Aristóteles, con la teología
cristiana. San Agustín de Hipona es una figura destacada de esta época. Sus escritos, como "Confesiones" y "Ciudad de Dios",
subrayaban la importancia de que la fe y la razón coexistieran en armonía. Agustín también introdujo la idea del pecado
original y del libre albedrío en el pensamiento cristiano.

2. Renacimiento carolingio (siglos VIII-IX) Durante el Imperio carolingio, eruditos como Alcuino de York desempeñaron un
importante papel en la conservación y transmisión de obras clásicas de filosofía y literatura. Este periodo sentó las bases de la
posterior tradición escolástica. En este periodo, durante el reinado de Carlomagno y sus sucesores, se produjo un renacimiento
del saber en Europa. Eruditos como Alcuino de York desempeñaron un papel crucial en la recopilación y conservación de
textos clásicos, que se habían perdido o descuidado durante el tumultuoso periodo altomedieval. Este renacimiento del saber
sentó las bases para el desarrollo de la filosofía medieval.

3. El nacimiento de la escolástica (siglos XI-XII) El escolasticismo surgió como el enfoque filosófico y teológico dominante.
Figuras destacadas como Anselmo de Canterbury y Pedro Abelardo trataron de conciliar fe y razón. Anselmo es conocido por
su argumento ontológico a favor de la existencia de Dios, mientras que Abelardo contribuyó al desarrollo del razonamiento
dialéctico. La escolástica surgió como un destacado movimiento intelectual en los siglos XI y XII. Los filósofos escolásticos
trataron de sistematizar y racionalizar la teología cristiana utilizando las herramientas de la filosofía. Anselmo de Canterbury
es conocido por su argumento ontológico, un argumento filosófico a favor de la existencia de Dios basado en el concepto de
un ser perfecto. Pedro Abelardo, por su parte, hizo hincapié en el razonamiento dialéctico y contribuyó a la ética y la
epistemología.

4. Influencia islámica y judía Los filósofos europeos medievales estuvieron expuestos a las obras de filósofos islámicos y
judíos como Avicena (Ibn Sina), Averroes (Ibn Rushd) y Maimónides (Rambam). Sus ideas, especialmente las de Avicena y
Averroes, tuvieron un impacto significativo en el pensamiento europeo, incluyendo discusiones sobre la relación entre fe y
razón, especialmente las relacionadas con Aristóteles, influyeron en el desarrollo de la Escolástica.

5. Tomás de Aquino y la cima escolástica (siglo XIII) Tomás de Aquino, fraile dominico, es uno de los filósofos medievales
más famosos. Su Suma Teológica es una obra monumental que sintetizó la teología cristiana con la filosofía aristotélica.
Aquino defendió la armonía entre la fe y la razón e hizo aportaciones sustanciales a la metafísica, la ética y la epistemología.
Tomás de Aquino, fraile dominico, es considerado a menudo como la cumbre del pensamiento escolástico. Su principal obra,
la "Summa Theologica", pretendía sintetizar la teología cristiana con la filosofía aristotélica. Aquino sostenía que la fe y la
razón eran compatibles y que la razón podía conducir a una mejor comprensión de la creación de Dios. Sus escritos tuvieron
un impacto profundo y duradero tanto en la teología cristiana como en la filosofía.

6. La filosofía bajomedieval (siglos XIV-XV) florecieron diversas escuelas filosóficas, como el nominalismo de Guillermo
de Ockham y el humanismo de figuras como Petrarca y Erasmo. La navaja de Ockham, que sugiere que son preferibles las
explicaciones más simples, sigue siendo influyente. En el periodo medieval tardío, el pensamiento filosófico se diversificó.
Guillermo de Ockham, conocido por la navaja de Ockham (el principio de que las explicaciones más simples son preferibles),
defendió el nominalismo, una posición filosófica que desafiaba algunas de las opiniones escolásticas predominantes. Además,
figuras como Petrarca y Erasmo, aunque no eran principalmente filósofos, contribuyeron al movimiento humanista, que
enfatizaba el estudio de los textos clásicos y un enfoque en la experiencia humana individual.

7. El final de la Edad Media dio paso gradualmente al Renacimiento, un movimiento cultural e intelectual caracterizado por
un renovado interés por la Antigüedad clásica y el humanismo. Esta transición marcó el final de la Edad Media y sentó las
bases para el desarrollo de la filosofía moderna.

TEMAS/TÓPICOS QUE ABARCABA: (Díaz Vargas Jhon Heysen, Bances Bereche Carlos David y Saucedo Pisfil
Juan Carlos)
Metafísica. La base metafísica común de la filosofía medieval sostiene que, en el nivel más general, la realidad puede
dividirse en sustancias y accidentes. Las sustancias -Sócrates y el asno Browny son los ejemplos más comunes- son existencias
independientes y, por tanto, ontológicamente fundamentales. Las sustancias corpóreas (y quizá también ciertas sustancias
incorpóreas) se constituyen a partir de la materia y la forma. La materia, que en sí misma carece por completo de estructura, es
el sustrato de la forma. La forma proporciona la estructura u organización de una sustancia, convirtiéndola en el tipo de cosa
que es. El alma de Sócrates, por ejemplo, es la forma que da estructura a la materia de Sócrates, constituyéndola como la carne
y la sangre vivas de un cuerpo humano y haciendo de Sócrates un ser humano particular. Los accidentes -la altura de Sócrates,
por ejemplo, o el color de Browny- son también un tipo de forma, pero toman como sustrato no la materia como tal, sino una
sustancia: Sócrates o Browny. Los accidentes dependen para su existencia de las sustancias y dan cuenta de las características
ontológicamente derivadas de las sustancias.

Filosofía natural. Los filósofos medievales creían que una explicación completa de la realidad debía incluir una explicación
de los constituyentes y principios fundamentales del reino natural. Sus primeras reflexiones sobre estas cuestiones se
inspiraron principalmente en dos relatos antiguos sobre los orígenes y la naturaleza del universo: el relato bíblico de la
creación (en el Génesis) y el relato de Platón sobre la formación del mundo por el Demiurgo. La confluencia de estas fuentes
antiguas dio lugar a una tradición medieval de pensamiento cosmológico especulativo expresado paradigmáticamente en los
debates sobre los seis días de la creación. Este tema en particular dio a los filósofos medievales la oportunidad de reflexionar
sobre la naturaleza del contenido del universo y los principios que rigen el reino creado.

Ética. Los filósofos medievales comparten un marco genéricamente griego de teoría ética, ampliado y modificado para dar
cabida al cristianismo. Las cosas son buenas en la medida en que tienen ser. El mal o lo malo no es una característica
ontológica positiva de las cosas, sino una privación o falta de ser en algún aspecto relevante. El bien humano último o la meta
de la existencia humana es la felicidad o la beatitud, cuya perfección la mayoría de los filósofos medievales identificaban con
la unión sobrenatural con Dios después de esta vida. El bien humano último se alcanza tanto mediante el cultivo de las virtudes
morales como mediante la gracia divina en forma de estados y disposiciones infundidos sobrenaturalmente, como la fe, la
esperanza y la caridad, las llamadas virtudes teologales.
En este marco, los filósofos medievales debatieron si la bienaventuranza humana es esencialmente un estado afectivo (una
especie de amor a Dios) o un estado cognitivo (una especie de conocimiento o visión de Dios), y si las virtudes son
estrictamente necesarias para alcanzar la bienaventuranza. También debatieron si lo correcto o incorrecto de algunas acciones
depende únicamente de la voluntad de Dios. Contrariamente a las caricaturas de la ética medieval, nadie apoyó
inequívocamente una teoría del mandato divino según la cual la rectitud (o rectitud) moral de todos los actos consiste
únicamente en que Dios los apruebe (o desapruebe).

Lógica y lenguaje. Los filósofos medievales dedican una enorme atención -quizás más atención que los filósofos de cualquier
otro periodo de la historia de la filosofía aparte del siglo XX- a la lógica y a la filosofía del lenguaje. Este fenómeno se explica
principalmente por el papel singularmente importante que desempeñó la lógica de Aristóteles en el desarrollo del pensamiento
medieval. Hasta principios del siglo XII, el conocimiento que los filósofos medievales tenían de la filosofía griega se limitaba
a unos pocos textos de lógica aristotélica y, por defecto, esos textos marcaban en gran medida la agenda de la discusión
filosófica.

CARACTERÍSTICAS E IMPORTANCIA (DAMIÁN RAMIREZ AMY KARLA Y ERREA TORRES CARLO

ANTONIO)
La filosofía medieval hace mucho hincapié en lo teológico. Con las posibles excepciones de Avicena y Averroes, los
pensadores medievales no se consideraban filósofos en absoluto: para ellos, los filósofos eran los antiguos escritores paganos
como Platón y Aristóteles. Sin embargo, su teología utilizaba los métodos y las técnicas lógicas de los antiguos filósofos para
abordar cuestiones teológicas y puntos de doctrina difíciles. Tomás de Aquino, siguiendo a Pedro Damián, sostenía que la
filosofía es la sierva de la teología (ancilla theologiae). A pesar de esta visión de la filosofía como sierva de la teología, esto no
impidió que los medievales desarrollaran filosofías originales e innovadoras con el telón de fondo de sus proyectos teológicos.
Por ejemplo, pensadores como Agustín de Hipona y Tomás de Aquino realizaron avances monumentales en la filosofía de la
temporalidad y la metafísica, respectivamente.

Los principios que subyacen en toda la obra de los filósofos medievales son:

 El uso de la lógica, la dialéctica y el análisis para descubrir la verdad.

 El respeto por las ideas de los filósofos antiguos, en particular Aristóteles, y la deferencia a su autoridad (auctoritas).
 La obligación de coordinar las ideas de la filosofía con la enseñanza teológica y la revelación (concordia).

Uno de los temas más debatidos de la época fue el de la fe frente a la razón. Avicena y Averroes se inclinaban más por el lado
de la razón. Agustín afirmó que nunca permitiría que sus investigaciones filosóficas fueran más allá de la autoridad de Dios.
Anselmo intentó defenderse de lo que consideraba en parte un asalto a la fe, con un enfoque que permitía tanto la fe como la
razón. La solución agustiniana al problema fe/razón es (1) creer, y luego (2) tratar de comprender (fides quaerens intellectum).

IMPORTANCIA E IMPACTO :
La Filosofía Medieval es importante porque es la combinación de las filosofías de los filósofos antiguos, especialmente de
Platón y Aristóteles, con las ideas y conocimientos filosóficos de los filósofos medievales (por ejemplo, Avicena, Averroes,
Dionisio, Anselmo, Alberto Magno, Tomás de Aquino, Duns Escoto y muchos otros), lo que demuestra la existencia de Dios y
su relación con el hombre y el cosmos. Apoyó en gran medida al cristianismo (cada filósofo tiene sus propios puntos de vista).
Sigue siendo relevante hoy en día porque, aparte de la teología, las doctrinas de la Iglesia y los dogmas, la filosofía medieval
fortaleció los cimientos del cristianismo. Como la gente de la Edad Media era crítica y racional, no creía inmediatamente en
Dios y en el cristianismo. Para ellos, creer significa "renunciar a su libertad intelectual". Su línea de pensamiento es la
siguiente: "Si creo, es posible que lo que creo no sea verdad, no sea racional. Prefiero elegir lo que es racional". Debido a esto,
los filósofos medievales trataron por todos los medios de defender y explicar el cristianismo a través de la razón
(entendimiento que busca la fe). En aquellos tiempos, podemos ver cómo la razón apoyaría las cuestiones sobre la fe.
Con todos los avances del mundo actual, y con la existencia de muchos cuerpos de conocimiento (por ejemplo, Teología,
Ecología, Antropología, Cosmología, etc.), se puede decir que la filosofía medieval sigue siendo relevante. Sin ella, nos
limitaríamos a creer sin ni siquiera conocer algunas razones detrás de aquello en lo que creemos (Dios, el cristianismo). Por
supuesto, no todo en la fe puede apoyarse en la razón. A veces, donde la razón se detiene, comienza la fe, pero también hay
cuestiones de fe que pueden apoyarse en la razón. Por citar algunos ejemplos: "Dios como ser" y "Los cinco caminos de
Tomás para probar la existencia de Dios". Aunque ahora estemos en un mundo en el que el lenguaje es el centro de la filosofía,
y en el que la tecnología se actualiza para mejorar el mundo, no podemos abandonar la filosofía medieval por la razón de que
contribuyó tanto al cristianismo. Abandonar la filosofía medieval es abandonar la armonía de la razón y la fe, especialmente a
la hora de explicar a Dios.