El hilo Rojo.

El Hilo rojo
Por: Víctor Paúl Wierwille.
Universidad “El Camino” Emporia, 12 de Marzo de 1978.

Tomen sus Biblias y vayan a Colosenses capitulo 1. Esta noche quisiera abrir
la Palabra con ustedes. Y, si tuviera que darle un tema o un titulo a esto que
tengo en mi corazón para compartir con ustedes, lo llamaría “El Hilo Rojo”.
Usted lo puede conseguir por todas partes en la Palabra.

Ha sido la conciencia del pecado más la condenación lo que le ha robado al

cristiano en el pasado de sus creencias. Le ha robado al cristiano en el pasado
de su sentido de validez ante Dios. Le ha robado al cristiano en el pasado del
gozo de la filiación. Nosotros, como creyentes, no hemos sido enseñados, y
consecuentemente y subsecuentemente no sabíamos, sobre la justicia de Dios
en Cristo Jesús. No sabíamos que éramos mas que vencedores por medio de
aquel que nos amo y por aquel que se entrego a si mismo por nosotros. No
sabíamos que todo lo podemos en Cristo que nos fortalece. No sabíamos que
estamos sentados en los lugares celestiales ahora. Gente, simplemente no
sabíamos. Porque nadie nos enseño. En Colosenses capitulo 1, en el versículo
13, leemos:

Colosenses 1:13 “el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y

trasladado al reino de su amado Hijo”

Hoy en día, en nuestro ministerio El Camino alrededor del mundo, nosotros los
creyentes creemos que estamos en Cristo, y actuamos como es verdad. El nos
ha librado, en pasado, del poder de las tinieblas. Y clase, si hemos sido
liberados del poder de las tinieblas entonces hemos sido liberados. Esto es, la
verdad o es una mentira. Bueno, nosotros creemos que esto es la verdad de la
Palabra de Dios, que Dios en Cristo Jesús nos ha liberado del poder de las
tinieblas.

Y que El nos ha dado ciudadanía legal- derechos filiales en esa ciudadanía- en

Su reino, en el reino de Dios, por el trabajo de Su querido Hijo. Las
necesidades básicas del hombre a través de los años, al igual que la necesidad
básica del hombre en este momento en particular, es Justicia.
Cada ser humano que sinceramente desea hacer su vida mas significativa
mientras esta en esta tierra tiene un anhelo interno, un deseo interno, una
ansiedad interna en la parte mas profunda de su ser, de querer ser justo.

En Romanos Capitulo 3, y en el versículo 20 leemos:

Romanos 3:20 “ya que por las obras de la ley ningún ser humano será
justificado delante de el; porque por medio de la ley es el conocimiento
del pecado”

Versículo 21 “Pero [en contraste] ahora [Ahora mismo. No cuando muera,

no algún día talvez sino ahora mismo.], aparte de la ley se ha manifestado
la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas”.

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Versículo 22 léalo cuidadosamente. “la justicia de Dios [¿La justicia de

quien? La justicia de Dios] por medio de [esto es la palabra griega dia,
que significa “por causa de” lo que hizo Jesucristo. La justicia de Dios
por causa de…] la fe en Jesucristo, para todos [¿Qué hacen que?] los que
creen en el. Porque no hay diferencia”

La mente humana no puede comprenderlo. Pero el hombre espiritual si puede

absorberlo, utilizarlo, creerlo, caminar en ello, y traer la grandeza de esta
verdad en manifestación. ¡La justicia de Dios! Bueno, ¿que tan justo es Dios?
¡El es justo! Y toda esa justicia de Dios - gracias a Jesucristo y por lo que el
hizo por cada creyente renacido - esa justicia de Dios esta en todos y cada uno
de los que hacen una sola cosa, y eso es creer. Así que cuando usted cree en
el Señor Jesucristo, usted tiene la justicia de Dios – la cual es Cristo en usted la
esperanza de gloria. La justicia de Dios.

Y si el hombre tiene esa justicia, ¿Por qué querría él vivir por debajo de eso?
¿Por qué querría caminar en los negativos? ¿Por qué andar en miedos,
preocupaciones, ansiedades, y frustraciones cuando tenemos lo que la Palabra
de Dios dice que tenemos, cuando somos lo que la Palabra de Dios dice que
somos? Y dice que cada creyente – para todos los que creen- debido al trabajo
de Jesucristo, recibe la justicia de Dios individualmente. “…Para todos los que
creen…”

“…porque no hay diferencia”.

No hay diferencia entre el hombre y la mujer. No hay diferencia si el es el

gobernador del estado o el presidente, o si el es el repartidor de la leche. No
hay diferencia entre si es una ama de casa o es una hermosa jovencita, no hay
diferencia. No hay diferencia si el es blanco, negro o rojo – no hay diferencia.
Pero la gran diferencia que El establece aquí es la diferencia entre los judíos y
los Gentiles. Y ahora El dice, que no hay diferencia entre los judíos y Gentiles.

Versículo 23 “por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria

de [¿Quién?] Dios”

Todos habíamos pecado – hombre, mujer, blanco, negro- no hay diferencia.

Todos habíamos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios. Así que las
necesidades básicas del hombre, sus necesidades básicas están en la
categoría de la justicia. Y, una vez que los hombres y mujeres reciben a Cristo
dentro de ellos, ellos tienen la justicia de Dios. ¡No es esa una verdad
fantástica!

Vera, Jesucristo se encargo de la raíz de los problemas del hombre. El se

encargo del pecado. El se encargo de ello. Y la raíz de la injusticia del hombre
es el pecado. Jesucristo se encargo de la raíz – el “problema que es el
pecado”. Por consecuencia, hoy en día no existe mas el “problema del pecado”,
sino el “problema del pecador” ¿Acaso el individuo, quien no ha aceptado al
Señor Jesucristo, acaso el quiere creer? ¿Acaso el quiere recibir la grandeza
de lo que Dios ha hecho disponible en Cristo Jesús? Dios se encargo de ello en

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Cristo Jesús. Acabo con ello. Ahora es una cuestión de la creencia individual
para recibir lo que Dios hizo disponible en Cristo Jesús. Es por eso que es un
“problema del pecador”. Y cuando el creyente individual confiesa con su boca
al Señor Jesucristo, cree que Dios le levanto de entre los muertos, el es salvo.
Romanos 10:9. Porque con el corazón se cree para justicia, con su boca
confiesa para salvación. Romanos 9:10 ò 10. Bueno, cualquiera que sea. Es
Romanos 10:9 y 10, yo creo. Algún día trabajare la Palabra acerca de esto,
solo para ver, Dios los bendiga.

Vean en Romanos 4: 25. Que habla de Jesucristo

Versículo 25 “el cual fue entregado por nuestras transgresiones,… el texto

antiguo dice “por nuestros pecados”

El fue entregado por nuestros pecados. Damas y caballeros, es tan fácil y

sencillo. Todo lo que requiere es creencia. El fue entregado por nuestros
pecados, Isaías dice, en el 53:4 creo, que el llevo nuestras enfermedades,
nuestros pecados. Digamos que esta plataforma representara al Señor
Jesucristo y lo que hizo. El cargo con nuestros pecados. Allí es donde los
pecados recaen, recaen en el. Una vez que están en el, ¿siguen ellos en mi?
¿Siguen ellos en usted? No. Vaya, que cosa tan maravillosa la Palabra de Dios
le hace saber a las personas que quieren saber de la voluntad de Dios. Y
damas y caballeros, debemos regresar a la Palabra de Dios si queremos saber
la voluntad de Dios. No se puede ir por lo que alguien dijo o por lo que el
mundo dice – porque somos condicionados por las circunstancias, no somos
condicionados por el mundo, no somos condicionados por las tradiciones de los
hombres. Somos condicionados por la Palabra. Tiene que volver a la Palabra
de Dios si quiere saber la voluntad de Dios.

Y dice que Jesucristo fue “entregado por nuestras transgresiones, resucitado

para justificación”. Creo que fueron Conybeare y Howson quienes tradujeron
esto “y resucitado cuando fuimos justificados”. ¡Vaya que realidad! ¡Esta es la
verdad de este versículo! El fue entregado, entregado, por nuestros pecados. Y
fue resucitado, Dios lo resucito cuando fuimos justificados. Mire el versículo 1
del capitulo 5.

Romanos 5:1 “Justificados, pues, por la fe [por la creencia, por las

acciones,], tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor
Jesucristo”

Recibimos la justicia de Dios cuando renacemos. Usted no pudo recibir la

justicia de Dios sin que Dios lo hubiera justificado previamente. Y El lo justifico
con la muerte y la resurrección del Señor Jesucristo. Y cuando El lo resucito de
entre los muertos, fuimos justificados. Fuimos hechos justos. Por lo tanto
justificados por la fe – la fe de Jesucristo, la creencia en lo que el hizo –
tenemos paz.

Todo el mundo parece estar buscando Paz, pero no en el lugar correcto. Usted
no obtiene paz por legislación. Usted recibe la paz por medio de recibir al
Señor Jesucristo, el príncipe de paz. Usted no recibe paz por medio de

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empezar una guerra. Usted no recibe paz de ninguna otra parte que no sea el
autor de la paz quien es Dios a través de Jesucristo, damas y caballeros. Usted
no puede legislar la paz. Usted cree por ella. Porque esta disponible para cada
creyente el renacer de nuevo, y no solo tener la justicia de Dios, sino también
ser justificados, y el estar en paz. Damas y caballeros, todos estos sitios donde
venden esas cosas que usted toma para poder dormir, todas se irían a la
bancarrota si empezamos a creer en la Palabra de Dios. ¿Sabe por que?
Porque no necesitamos un sedante para poder dormir en las noches. La razón
por la cual necesita un sedante es porque esta muy alterado dentro de usted,
usted no tiene paz. Damas y caballeros, ¡¡nosotros tenemos paz!! ¡Nosotros la
tenemos! No tenemos que mordernos nuestras uñas hasta llegar a los nudillos.
No tenemos porque quedarnos tendidos en la cama contando ovejas.
Solamente podemos creer en el pastor, y seguir adelante. Lo ve. Ya la
tenemos, tenemos paz. No es algo por lo que usted ora. No es algo que usted
pide a Dios. Lo tenemos. Ya viene incluido en el paquete espiritual de Cristo en
usted, la esperanza de gloria. ¡Vaya, ya esta allí! ¡Ya lo tenemos, gente! Cada
creyente lo tiene. Paz. Paz. ¡Paz con Dios! ¡Paz con Dios! No tenemos afrenta
contra Dios. Dios no esta enojado con nosotros. No estamos enemistados con
El. Tenemos paz con Dios. Vaya, que tremendo empuje para el alma de
cualquier hombre o mujer, cuando llega el día en el que se de cuenta que esta
en paz con Dios. Todas esas pequeñas cosas malignas que estaban allí, todos
esos problemas se evaporan; como lo hace el rocío de la mañana cuando el sol
brilla sobre el. Solo se evapora. ¡Que tremenda realidad! Mire en 2º Corintios
Capitulo 5, Versículo 17.

2º Corintios 5:17- 18 “De modo que si alguno esta en Cristo, nueva

criatura es [El texto es: nueva creación, usted es una nueva creación, con
Cristo en usted la esperanza de gloria. Al punto que usted esta Cristo]; las
cosas viejas [cosas viejas, ¿viejas que? Cosas viejas; todos los miedos, esas
preocupaciones, esas ansiedades, esas frustraciones, todos esos negativos
que han estado creciendo en su vida por la exposición a este mundo o a los
individuos. Todas estas cosas] pasaron; he aquí todas son hechas [¿Qué?]
nuevas”.

Versículo 18 “Y todo esto [¿Qué todo esto? Todas las cosas nuevas]
proviene de Dios, quien nos reconcilio [en tiempo pasado] consigo mismo
por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación”

El nos ha dado, en tiempo pasado, no solamente la justicia, la justificación –

todo lo que esta disponible – sino que también nos reconcilio. Eso que
separaba al hombre de Dios ha sido reconciliado, unido. Es como si se
rompiera la línea del teléfono, y los reparadores fueran allí y la reconectaran. O
cuando se rompe la línea de electricidad, y los técnicos van allí y la reconcilian.
Esta es la palabra reconciliar, la cual literalmente significa “volver a unir eso
que fue separado”.

Ese hombre en Cristo, en esa nueva creación, todas las cosas viejas pasaron.
No tienes que estar preocupado acerca de un pecado que cometió hace 25
años atrás. ¿Las cosas viejas que? Pasaron. No debe estar preocupado por
como trato a su familia pasado, y todos los problemas que tuvo con su esposo

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o esposa, o con sus hijos. ¿Las cosas viejas que? Pasaron. Es un nuevo dia,
un nuevo tiempo, es un nuevo momento en la vida de un hombre o mujer. Las
cosas viejas pasaron y todas son hechas que? Nuevas. Vera, cuando usted es
renacido del espíritu de Dios, teniendo a Cristo en usted la esperanza de gloria,
esto es todo que va a obtener espiritualmente. ¡Es todo lo que necesita! Eso es
una casa llena, un full house. Así que lo que necesita trabajar es en poner su
mente a la par con el espíritu de Cristo en usted, alinearlo y armonizarlo. Tener
la mente y el espíritu en comunión, eso es la mente renovada – para renovar la
mente de acuerdo a la revelación dada en la Palabra de Dios. Y es por eso que
en Romanos 8 le habla tan alto al hombre o mujer que tiene oídos para oír.

Romanos 8: 1 “Ahora, [ahora significa ahora. Usted no necesita un diccionario

para saber que significa esta palabra. No dentro de un día o 2 o dentro de un
año. No cuando termine todas sus oraciones sino ahora. ¡No, no, no. Ahora!]
Pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús…”

No hay ninguna condenación espiritual. E incluso un hombre puede tener a

Cristo en el la esperanza de gloria, y vivir muy inferior a eso. Hemos visto que
esto pasa miles de veces en nuestro país y el mundo, tal vez hasta millones.
Son creyentes renacidos, pero por su andar ellos hasta podrían ser incrédulos
y no se notaria la diferencia. Porque su andar no indica el fruto del espíritu, no
indica que Jesucristo vino para que tuvieran vida y para que la tuvieran en
abundancia. Porque la mayoría de las veces usted encontrara a los cristianos
tan negativos, tan llenos de miedo, tan llenos de ansiedad y tan enfermos como
los incrédulos. ¿Por qué? Tiene que haber una razón. Porque para causa hay
un efecto y para cada efecto hay una causa. La causa es que ese individuo –
quien tiene a Cristo en el, es un renacido – no se le ha enseñado lo que esta
disponible, o no ha creído que estaba disponible. Es por eso que tiene que
poner su mente en comunión con su espíritu, lo cual es Cristo en usted, y eso
es mente renovada.

El salmista dijo:

Salmo 18:33 “Quien hace mis pies como de ciervas, y me hace estar firme
sobre mis alturas”

La cierva madre coloca sus patas delanteras en las rocas para probarlas en las
pendientes, en las colinas, en las montañas. Y luego la madre cierva coloca
sus patas traseras exactamente en el mismo sitio que coloco sus patas
delanteras. Solamente cuando se domestica a los animales es que sus patas
traseras no siguen a sus patas delanteras.

“Quien hace mis pies como de ciervas, y me hace estar firme sobre mis
alturas”. Esa cierva madre nunca podría escalar esas alturas y tampoco su
cervato (Hijo de la cierva). Por cierto, el bebe ciervo pisa con sus patitas
pequeñitas exactamente donde su mama piso. La mama sube, y prueba las
rocas, luego el pequeño ciervo viene detrás de ella. “Quien hace mis pies como
de ciervas, y me hace estar firme sobre mis alturas”.

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Ahora, pues, ninguna condenación. Ninguna condenación. Vaya este es un

nuevo día en la vida de un hombre y una mujer. Y tiene que poner su mente en
armonía con el espíritu de Dios en Cristo en usted, la esperanza de gloria.

Romanos 8:1 “…los que no andan según la carne, sino conforme al

[¿Qué?] Espíritu”

Saben, mi gente, hubo un tiempo en que estábamos ciegos, pero ahora

podemos ver. Hubo un tiempo en que no estábamos salvos, pero ahora
estamos salvos. Hubo un tiempo en el que estábamos tanteando y esperando,
pero ahora sabemos y creemos. Ya no estamos mas bajo la merced del
enemigo.

Romanos 8:17 dice: “Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y

coherederos con Cristo…”

Ya no estamos bajo la misericordia del enemigo. Somos hijos en la maravillosa

casa de Dios, somos Su familia. Coherederos con Jesucristo, y un coheredero
es uno que comparte plenamente de esa herencia. ¡Que realidad tan fantástica!
En estos tiempos en los que usted y yo vivimos, para nosotros – para la
mayoría de nosotros, al menos – es una nueva era de conocimiento de lo que
somos en Cristo Jesús. Romanos 8:26 dice.

Romanos 8:26 “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra

debilidad [La palabra “debilidad” en el texto es singular. La “debilidad” con la
que el nos ayuda viene en la siguiente frase] pues [o porque] que hemos de
pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo [el Espíritu
mismo] intercede por nosotros con gemidos indecibles”.

Esto es Cristo en usted, la esperanza de gloria, la plenitud del poder de Dios

desde lo alto, Su espíritu santo, Su don, Cristo en usted. Y ese espíritu de Dios
en usted – quien es Cristo en usted – ese espíritu intercede por usted. El esta
intercediendo por usted en este momento. El esta intercediendo por todas las
personas que están operando los principios de la Palabra de Dios de acuerdo a
la mente renovada. El intercede con “gemidos” – esa palabra significa “con todo
lo que el es” – los cuales no pueden ser expresados, “indecibles”.

Versículo 27 “Mas el que escudriña los corazones sabe que cual es la

intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede
por los santos”

El intercede por los santos. Un santo es un creyente renacido. No es alguien

que ha estado muerto miles de años y alguien dice que debemos “santificarlos”.
La llegada de Jesucristo te hace un santo. Usted es un santo ahora (usted
nunca llegara a ser un ángel, así que deje ya de preocuparse). El es el que
intercede por los santos. ¡Hombre, que agradecido estoy por eso! Yo no se
cuantas veces usted haya pensado en esto, algunos de ustedes, hombres y
mujeres mayores, pero yo he pensado en esto miles de veces en años
pasados. Yo he pensado por que mi santa madre – quien fue una gran mujer
de Dios quien murió antes de que yo entrara en el ministerio – si ella fuera lo

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que se me ha enseñado, erróneamente en mi experiencia cristiana – si ella ya

estuviera allá arriba en el cielo cerca de Dios con Jesucristo, ¿por que no
estaba ella haciendo mas por mi acá abajo? Así es, yo pensaba, hombre, si yo
estuviera allá arriba yo haría algo por mis hermanos y hermanas. Y yo conocía
a mi mama, y la gran mujer que ella era. Yo sabia que, de alguna manera u
otra, tenía que haber algo más de lo que se me había enseñado. Porque, si yo
estaba allá en el cielo, yo trabajaría para usted. Si tuviera una entrevista con
Jesús yo intercedería y le diría: “Oye, envía alguito para (Inserte nombre de su
ciudad), ellos lo necesitan allá abajo”. Así es. Pero luego descubrí un día en la
Palabra de Dios y la integridad de ella, que los muertos están muertos hasta el
retorno de Jesucristo. Eso fue un alivio en mi corazón y mente, y un gran
entendimiento. Y luego descubrí que hay algo allá arriba que es mucho mejor
que mi madre, y eso es Jesucristo.

¡Vaya, vaya! El esta sentado a la mano derecha de Dios, y el intercede por los
santos de acuerdo a la voluntad de Dios. Hombre, y el no holgazanea en el
trabajo. El esta allá arriba aportando en su defensa, trabajando para usted.
Todo lo que le queda por hacer a usted es estar aquí abajo y trabajar un poco
por si mismo. ¡Creer en la Palabra de Dios! ¡Empezar a caminar según ella!
¡Bueno, ustedes saben! ¡Dios los bendiga!

Versículo 27-28 “… porque conforme a la voluntad de [¿de quien?] Dios

intercede por los santos.
Y sabemos [sin ninguna duda, sin los “que tal si, tal vez, o peros”. “Sabemos”]
que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a
los que conforme a su propósito [el de Dios] son llamados”

La palabra “propósito” es la palabra “voluntad”, conforme a Su voluntad. Damas

y caballeros, mi voluntad nunca fue el estar sobre esta tierra. Mi madre y mi
padre tomaron esa decisión por mí. Así es, y en cuanto se trata de mi voluntad,
no fue nunca de mi voluntad el ser un hijo de Dios. Yo solamente oí la Palabra
de Dios y la creí. Así fue como llegue a ser un hijo de Dios. Mire lo que dice
aquí: “…son llamados”. Dios llamo. Yo escuche ese llamado y respondí a el. Lo
oí por medio de la revelación de la Palabra. Apocalipsis 3:20 dice:

Apocalipsis 3:20 “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi

voz y abre la puerta, entrare a el, y cenare con el, y el conmigo”.

Si alguno oye y abre la puerta. Tenemos que abrir la puerta. Tenemos que
creer la Palabra de Dios. Tenemos que actuar, entonces Dios actuara, porque
Dios ya actuó por medio de Cristo Jesús. Ahora es su turno y el mío de actuar.
Luego es el turno de Dios para actuar.

Romanos 8:29-37 “Porque a los que antes conoció, también los

predestino para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo,
para que el [Su Hijo] sea el primogénito entre muchos hermanos.

Y a los que predestino, a estos también llamo; y a los que llamo, a estos
también [¿Qué?] justifico; y a los que justifico, a estos también [¿Qué?]
glorifico.

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¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros ¿quién contra

nosotros? [NADIE]

El que no escatimo ni a su propio Hijo, sino que lo entrego por todos

nosotros, ¿cómo no nos dará [Libremente] también con el todas las
cosas?

¿Quién acusara a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.

¿Quién es el que condenara? Cristo es el que murió; mas aun, el que

también resucito, el que además esta a la diestra de Dios, el que también
intercede por nosotros

¿Quién nos separara del amor de Dios? ¿Tribulación, o angustia, o

persecución, o de hambre, o desnudez, o peligro, o espada?

Como esta escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos
contados como ovejas de matadero. [¡No!] ¡No, nell, nell, no!

Antes, en todas estas cosas somos mas que [¿Qué?] vencedores [y las
palabras “mas que” es la palabra “súper”; esto es mas grande que Superman,
esto es Súper Vencedores. “súper vencedores”] por medio de aquel que nos
amo”.

Lea el versículo 38. Es electrizante, gente.

Versículo 38 y 39 “Por lo cual estoy seguro [y el estar seguro es no tener ni
una pizca de duda, estar persuadido de que estas convencido de que estas
persuadido, saber que sabes que sabes que sabes. “Por lo cual estoy seguro”]
de que ni la muerte, ni la vida, ni Ángeles, ni principados, ni potestades, ni
lo presente, ni lo porvenir.

Ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar

del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”.

¡Nada nos puede separar del amor de Dios, que en Cristo Jesús Señor nuestro!
Mi gente, la luz se ha levantado. Y esta llegando hasta la altura de lo sumo de
su brillantez entre nosotros hoy en día. ¿Por qué? Porque es el Camino, es por
eso que es nuestro camino. El es la Verdad, y esta es nuestra verdad. El es la
Luz, y, esta es nuestra luz. El es la luz de nuestra vida, gente. El es, por
consecuencia nosotros somos.

En Génesis el es la simiente prometida de la mujer.

En Éxodo el es el cordero de la Pascua.
En Levítico el es el Alto Sacerdote.
En Números el es la estrella que se levanta de Judá.
En Deuteronomio el es las dos leyes: Ama a Dios y ama a tu prójimo.
En Josue el es el capitán de las huestes del Señor.
En Jueces el es el ángel del pacto llamado “Maravilloso”.
En Rut el es el pariente redentor.

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En Samuel el es la raíz y el vástago de David.

En Reyes el es mayor que el templo.
En Crónicas el es el hijo del Rey.
En Esdras - Nehemías el es el reconstructor.
En Esther el es el salvador de la gente de Dios.
En Job el es el arbitro.
En Salmos el es la canción.
En Proverbios el es la sabiduría de Dios.
En Eclesiastés el es el elegido entre miles.
En Cantares el es el novio de la novia.
En Isaías el es la viña de Judá.
En Jeremías el es nuestra justicia.
En Lamentaciones el es juicio de los incrédulos.
En Ezequiel el es el pastor verdadero.
En Daniel el es la piedra que se convertio en la piedra angular.
En Ósea el es el derramamiento del espíritu. (“La lluvia tardía”)
En Joel el es la morada de Dios en Zion.
En Amos el es el constructor del tabernáculo de David.
En Abdias el es libertador del Monte de Zion.
En Jonás el es nuestra Salvación.
En Miqueas el es Señor de los reyes.
En Nahum el es nuestra fortaleza en el tiempo de problemas.
En Habacuc el es nuestra alegría y confianza.
En Sofonias el es nuestro poderoso Señor.
En Hageo el es el deseo de las naciones.
En Zacarías el es nuestro sirviente La vid- La viña.
En Malaquías el es el hijo de la Justicia.

Esta es la conexión, es el hilo rojo. Usted lo encuentra en todas partes a lo

largo de la Palabra.

En Mateo el es el Mesías de Jehová.

En Marcos el es el siervo de Jehová.
En Lucas el es el hombre de Jehová.
En Juan el es el Hijo de Jehová.
En Hechos el es el don del espíritu santo.
En Romanos el es la justificación del creyente.
En Corintios el es la santificación del creyente.
En Gálatas el es la justificación del creyente.
En Efesios el es la posición celestial del creyente.
En Filipenses el es la auto- suficiencia del creyente.
En Colosenses el es la plenitud del creyente.
En Tesalonicenses el es la pronta glorificación del creyente.
En Timoteo el es el leal.
En Tito el es el colaborador.
En Filemón el es el amor de un creyente.
En Hebreos el es el Alto Sacerdote para pecado.
En Santiago el es la ley real.
En Pedro el es el pastor.
En Juan el es como nosotros somos.

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En Judas el es el amado.
Y en Apocalipsis el es el Rey de reyes y Señor de señores.

¿Quién es este Jesucristo? Sí, ¿Quién es este Jesucristo? El es el Hilo Rojo

que une a todo la Palabra desde Génesis al Apocalipsis.

El es la destrucción del Adversario como lo promete Génesis 3:15 y logrado en

Apocalipsis 20, versículo 10. El es el “No habrá allí mas noche” de Apocalipsis
22:5, de la cual Génesis 1:1 es la noche. El es la luz de Apocalipsis 21:13, de la
cual Génesis 1:16 y 17 es el sol y la luna. El es el “y ya no habrá muerte, ni
habrá mas llanto, ni clamor, ni dolor” de Apocalipsis 21:4, del cual Génesis 3:16
y 17 es dolores, sufrimiento y muerte. El es el “no habrá mas maldición” de
Apocalipsis 22:3, del cual Génesis 3:17 es la maldición. El es la bienvenida a
casa en el paraíso de Apocalipsis 22:2, del cual Génesis 3:22 al 24 es el
destierro del paraíso.

¿Quién es Jesucristo? El es el sacrificio de Abel, el carnero de Abraham. El es

el bienestar de Isaac. El es la escalera de Jacob (Génesis 28: 12). ¿Quién es
este Jesucristo? El es el cetro de Judá, la vara de Moisés, la trompeta de
carnero de Josue, el cuerno de aceite de Samuel, la pequeña resortera de
David, el reloj de sol de Ezequías, el mato de Elías (1 Reyes 19:19-21) y el
báculo de Eliseo. ¿Quién es Jesucristo? El es la oración de Job, el árbol de
higos de Isaías, la rueda de Ezequiel, la ventana de Jerusalén de Daniel, el
monstruo marino de Jonás y el depósito de Malaquías.

¿Quién es Jesucristo? El es la sombra de Pedro, los paños y delantal de Pablo.

El es el lirio de los valles y la rosa de Saron en la vida del desierto. El es la
perla de gran valor. El es la roca del refugio contra el turbión. El es la
justificación del creyente. El es la justicia del creyente. El es la santificación del
creyente. El es la redención del creyente. El es el conocimiento del creyente. El
es la sabiduría del creyente. El es el todo de todo en todo del creyente. El es el
completamente absolutamente completo del creyente. ¿Quién es Jesucristo? El
es la estrella de la mañana, y el es mi Señor y Salvador.

Gracias Padre, por el maravilloso gozo de conocer a tu maravilloso Hijo nuestro

Señor y Salvador. Gracias, por el gran hilo rojo de la presencia del Señor
Jesucristo, que pasa por toda la Palabra de Dios, y lo encontramos en todas
partes en la Palabra. Y te agradezco esta noche por la grandeza de Tu amor, y
misericordia, y gracia, y en la grandeza de esa Palabra que nos libera. Gracias
Padre, en el maravilloso nombre de nuestro Señor y Salvador viviente,
Jesucristo. Amen.

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