Psychology">
Cartas
Cartas
Cartas
De ti no guardo más que cariño y dulzura. Has sido la mejor madre del mundo y yo soy el que
te pierdo, pero mi acto no es derrota. Tengo todas las de ganar, porque estoy convencido de
que no me queda otra salida. Nací con la muerte adentro y lo único que hago es sacármela
para dejar de pensar y quedar tranquilo.
Acuérdate solamente de mí. Yo muero porque ya para cumplir 24 años soy un anacronismo y
un sinsentido, y porque desde que cumplí 21 vengo sin entender el mundo. Soy incapaz ante
las relaciones de dinero y las relaciones de influencias, y no puedo resistir el amor: es algo
mucho más fuerte que todas mis fuerzas, y me las ha desbaratado.
Dejo algo de obra y muero tranquilo. Este acto ya estaba premeditado. Tú premedita tu muerte
también.
Madrecita querida, de no haber sido por ti, yo ya habría muerto hace ya muchos años. Esta
idea la tengo desde mi uso de razón. Ahora mi razón está extraviada, y lo que hago es
solamente para parar el sufrimiento.