Ensayo Sobre Las Emociones Negativas.

En el momento que nos asalta desprevenidos, una emoción de carácter
negativo, parece sacarnos toda la atención a lo que veníamos realizando. Un

pensamiento se dispara, desde esa emoción que nos altera. Una suspicacia,
una percepción, detona un cantaro de supuestos terribles que nos flagelan.
Son los motivos evidentes de nuestros peores miedos que se comienzan a
manifestar en forma de acusaciones.
En este caso hablare sobre los detestables celos y la sensación de traición,

que alimenta esos celos. Que sucede cuando percibo, que mi pareja por
ejemplo, estaría deseando a otro ser? O simplemente cuando percibo que su
atención esta en otro ser. Puede estar siendo magnetizada químicamente,
atraída físicamente, o meramente interesada por lo expresado por otro ser. Sea
cual fuera la situacion que genera esta percepción, y mucho mas, cuando
también percibo que del otro lado, también hay una correspondencia de este
carácter atractor, que sucede en este hecho de no pertenecer a lo intimo y
habitual entre nosotros. Que sucede internamente, que un enorme descalabro
emocional acontece? De que me estoy perdiendo? Aun sabiéndolo, doy lugar?
Percibiendo este acontecimiento, hago un berrinche? Que le pasa a mi sistema
que se desorganiza por la mera posibilidad, de que mi pareja desee a otro, en
vez de a mi? Y que me pasa cuando, percibo que a su vez, es muy entendible
que esto suceda? Veo una enorme contradicción entre el mundo mental, que
hace asociaciones, las contempla y las entiende. Y el mundo emocional que es
atravesado por incesantes voces y malestares que esto ocaciona. A que estan
atados estos síntomas emocionales, que luego se empiezan a notar en mi
cuerpo?
Puedo recorrer el hecho y percibir esta cronología de sucedos.
En primer lugar, registro desde lo sensorial, cuestiones vinculadas a gestos,

miradas, acercamientos, comentarios, y sugestivas situaciones nimias, que una
parte de la mente conecta y asocia desde cierto filtro personal y natural en mi.
Luego ante esta primer lectura sensorial, hay una corroboración con lo que
intuye otra parte y comienza una fase de confirmar o negar, lo que se esta
intuyendo y percibiendo. Desde socavar mas información, no solo de la parte
que uno observo en primera instancia, sino también del objetivo que estaba en
el otro sector de la escena. A saber, el objeto de deseo. Pudiendo ser este, una
persona, una situacion, una cosa. En este caso puntual, seria una persona. Lo
cual genera cierta reacción en mi sistema.
El próximo paso, es registrar a nivel emocional un torrente de alteraciones y

movimiento interno que no cesa. Todo lo contrario, comienza algo a moverse
con una velocidad desenfrenada, y comienza a asociarse lo mental a lo
emocional, y algo de este mundo emocional, comienza a sentir la sutil
sensación de estar siendo abandonado o desplazado como objeto de deseo
único. Ocurre un desalojo. Un principio de destierro. Una sensación de traición
de forma homeopática me recorre el pecho y el estomago. Hay un sector en
donde percibo mas movimiento y la concreta sensación de desorden.
Ahí es donde encuentro la conexión entre lo emocional que se torno negativo,
por la carga de las suposiciones y percepciones, y como lo corporal es
afectado por esto. Empiezo a sentir tensión en los hombros, una sensación de
tensión en el plexo solar y en el estomago. La nimia situacion hembrionaria, es
similar a estar atravesando cada fase de una traición de pareja. Se despliega
un cortometraje de todo lo que ocurriría en el momento de tal suceso. Es como
que el cuerpo estaría siendo sometido por las emociones y los pensamientos. Y
dependiendo este tipo de interaccion, la tensión aumenta o disminuye. El ritmo
cardiaco se acelera, la mirada se desvia. Los musculos faciales, no pueden
disimular cierto disgusto. Algo en mi quiere disimular lo que me esta
sucediendo. Como si fuera malo expresarlo. Como si fuera que debe reprimirse
a como de lugar. La compulsa entre expresar lo que se esta percibiendo, y
reprimirlo para que no se vea la inseguridad que ocasiono todo el hecho.
La percepción de que hay inseguridad es completamente real. Si mi estabilidad

de pareja, me organiza y me da seguridad en muchos campos, cualquier
agente modificador de esa estabilidad, cualquier cambio en este ámbito, es
desorganizante e inquietante. Generaría tensiones y desarmonías. Desde esta
óptica, perder terreno, no dejar de ser quien cumple los deseos y ser el objeto
de deseo del otro, me da la sensación de perder poder ante el otro. Perder
poder y control. Esto nada tiene de loable. Estoy recorriendo el camino de
como un vinculo establecido termina sometiéndonos a la mantención del
mismo. En un estado de impureza horrible. El cambio de estos estados es
natural y necesario. Es muy difícil que si nosotros nos encontramos en
dinamismo y movimiento, siendo modificados por la vida, por el tiempo y sus
circunstancias, nos mantengamos siempre iguales, como si fueramos bustos
de piedra, y asi esperar que nuestros vínculos mas estrechos, se mantengan
iguales, pese a nuestros cambios y transformaciones. Es evidente el miedo al
cambio. Es evidente el temor que emerge a perder algo o alguien en donde
depositamos nuestra identidad. “Mi” pareja. Al ser mia, es poseedor/a de mi
identidad. Todo lo que ella represente, me representa. Todo lo que le suceda,
me sucede. Aunque esto parezca no ser asi, en el fondo de nuestra psique,
parece no haber división. Somos un entramado vincular. y una parte de
nosotros, necesita dominar los factores que pueden estar en cambio constante.
Ante el registro limpio de que no podemos hacer nada para evitar que al otro, le
guste lo que una parte de mi, no quisiera que le guste, perdemos el control.
Perdemos poder sobre el deseo del otro. Que dejo de ser, lo que creíamos. O
sea nosotros. Esa perdida de poder, de control, esa incertidumbre que brota del
no saber si aun me confirman como objeto deseado, con el agregado de los
conceptos abrazados al “deber ser” de una pareja en nuestro constructo social,
el esta época, y en este lado del mundo, que asocia una monogamica relación
donde somos el uno para el otro, y todo lo que escape a eso, es contemplado
como una enorme traición, termina penetrando en la mente, en el campo
emocional y en ciertos sectores que se alteran de nuestro cuerpo.
Todo lo mencionado anteriormente, que sucede en segundos en una mesa

compartida, en una noche de encuentros y de reunión, en cualquier familia o
fiesta de amigos, se convierte en un portal que absorbe enormes cantidades de
energía y atención, de la cual ya carecemos, y nos descalabra el sistema.
Quedamos alterados, sobre todo emocionalmente, sin atención disponible para
considerar muchos otros factores, incluyendo a los actores que no somos
nosotros, y con muy poca energía disponible para realizar una observación
parte por parte, de todo nuestro aglomerado personal, en aras de armonizar la
situacion. La observación imparcial, generaría un balzamo desde la
consciencia, que pondría orden a lo acontecido. La respiración se regularía, y
el pulso cesaría de su exitacion. La bulla mental y el descontrol emocional,
retornaría a su centro. Pero para todo esto, es necesario disponer de energía,
de controlar las fugas de atención que constantemente nos suceden, para
poder des identificarnos de todo el trauma de una situacion que no ocurrio. Y
quizás, fuera de nuestra mente, jamas ocurra.
Y aquí es donde se ve lo complejo y sufriente del ser humano, en desarrollo.

Puede sufrir sin la necesidad de haber vivido concretamente, el evento que lo
podria hacer sufrir. Solo pensar y sentir en lo que pasaría, potencialmente, el
ser dispone todo su sistema, a la gimnasia del sufrimiento inútil. La situacion
terrible en la que el ser humano se encuentra actualmente, sin energía, sin
atención disponible, sin registro de su ser, sin la capacidad de observarse, y
mucho menos sin la capacidad de estar consciente de si mismo, lo deja
desvalido y desprotegido, ante el enorme cataclismo, del resto de su
entramado, que le genera, sufrimiento inútil, constante y perturbador. Al punto
tal, de ser lo único conocido por este ser. Y de volverse un atleta del
sufrimiento inútil. Mental, emocional y corportal. El ser no sabe. El ser no ES.
Este ser no comprende. Por ende todo lo que acontece en este ser-tiempo, es
terrible. Es conflictivo. Es violento. Es fragmentado. Me duele estar bajo tanta
opresión interna. Agradezco poder despegarme de la situacion, aunque sea
horas mas tarde. Pero no dejo de sufrir, por verlo. Quizás lo que estoy
intentando, con esta expresión escrita, es una descarga que invierta los polos
de mi sufrimiento. De sufrimiento inútil, a sufrimiento con sentido. A sufrimiento
consciente.

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negativo, parece sacarnos toda la atención a lo que veníamos realizando. Un

En este caso hablare sobre los detestables celos y la sensación de traición,

Puedo recorrer el hecho y percibir esta cronología de sucedos.

En primer lugar, registro desde lo sensorial, cuestiones vinculadas a gestos,

El próximo paso, es registrar a nivel emocional un torrente de alteraciones y

La percepción de que hay inseguridad es completamente real. Si mi estabilidad

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Y aquí es donde se ve lo complejo y sufriente del ser humano, en desarrollo.

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