China">
Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

Los Guerreros de Terracota (Trabajo Final) Arán Barrero Flórez

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 15

LOS GUERREROS DE

TERRACOTA

Arán Barrero Flórez


Estudios de Asia Oriental
Índice
1. Introducción y justificación del tema elegido………………………………….3
2. Contexto histórico……………………………………………………………...4
2.1. Dinastía Qin…………………………………………………………….....4
2.2. El primer Emperador: Qin Shi Huang…………………………………….6
3. El mausoleo del primer Emperador…………….……………………………...7
3.1. Los Guerreros de terracota………………………………………………..7
3.1.1. Descubrimiento………………………………………………...…....7
3.1.2. Fabricación………………………………………………………….10
3.2. La tumba del Emperador…………………………………………...…….11
4. Posible conexión con la Antigua Grecia……………………………..……….12
5. Conclusiones………………………………………………………………….13
1.Introducción y justificación del tema elegido
Los Guerreros de terracota son un ejército de más de 8.000 figuras de arcilla, entre las que se
incluyen guerreros, caballos y carruajes, y que forman parte del Mausoleo de Qin Shi Huang,
rey del estado de Qin y que posteriormente pasa a la historia como el primer Emperador de la
China unificada (221 a.C - 207 a.C).

Aunque su imagen ha variado con el transcurso de los años, antiguamente su mandato era
recordado por su tiranía, autoritarismo y brutalidad. Qin Shi Huang era un hombre
supersticioso, obsesionado con la inmortalidad y con su posible asesinato.

Es precisamente esta obsesión con la inmortalidad lo que lleva al primer Emperador a ordenar
la construcción de esta necrópolis del tamaño de una gran ciudad antigua, y que cuenta con la
vigilancia de miles de guerreros en formación.

Son muchos los enigmas que a día de hoy aún giran en torno a la tumba del Emperador, pues
esta aún permanece sellada. No obstante, las figuras de arcilla de tamaño real que
salvaguardan el mausoleo sí han sido objeto de estudio, convirtiéndose en una de las más
impresionantes muestras de la grandeza de la antigua China.

Lo extraordinario de estos guerreros es su método de fabricación pues se estima que fue


necesaria la mano de obra de 700.000 trabajadores durante casi 40 años. Además, llama
especialmente la atención la unicidad de cada una de esas figuras, pues no existen dos rostros
idénticos entre los miles de soldados de arcilla.

A continuación, en este trabajo monográfico entraré en detalle respecto al descubrimiento y


fabricación de las figuras, así como respecto a la historia que envuelve el mausoleo y al
Emperador, para justificar la importancia arqueológica del hallazgo de los Guerreros de
terracota.
2. Contexto histórico
2.1. Dinastía Qin (221 a.C - 207 a.C)
Los famosos Guerreros de terracota de Xian datan de finales del siglo III a.C., por lo que su
fabricación tuvo lugar en tiempos de la dinastía Qin, primera dinastía imperial china.

Durante el periodo de los Reinos Combatientes, a pesar de ser un país pobre y relativamente
atrasado, en el reino de Qin se dieron las condiciones favorables para la aplicación de las
reformas radicales que lo convertirán en un estado poderoso y totalmente distinto de la
nobleza antigua. Su localización geográfica en la cuenca del río Wei supuso una gran ventaja,
pues favoreció la prosperidad agrícola y convirtió a Qin en un estado aislado y bien protegido
contra los ataques del exterior.

El auge de Qin comienza con las reformas legistas de Shang Yang, cuyo objetivo era
enriquecer el estado y reforzar el ejército a través de un nuevo sistema de impuestos. Shang
Yang fue un fiel defensor del sistema de premios y castigos, y aunque terminó siendo
ejecutado por el rey Huiwen, dejó asentadas las bases de un reino muy poderoso capaz de
someter al resto de los estados combatientes.

Entre mediados y finales del siglo


III a.C, el reino de Qin lleva a cabo
una serie de conquistas que
terminan con los otros seis estados
combatientes, unificando China.
Cabe destacar que la China
unificada de entonces fue llamada
Estado de Qin, ya que el nombre
“China” no se usó hasta principios
del siglo XX.

En el 221 a.C, una vez cae el reino de Qi, último estado chino independiente, el rey Zheng
solidifica su posición como único gobernante con la abdicación del primer ministro, Lu
Buwei.
Se concede a sí mismo entonces el título de ​Shi Huangdi o primer Emperador, título
compuesto a partir de alusiones a los legendarios soberanos ​Huang y​ al dios supremo de los
Shang, ​Di​, anteponiéndole el ordinal “shi”. Además, designó que el siguiente sería el segundo
Emperador, al que le sucedería el tercer Emperador, y así durante las diez mil generaciones
que se suponía que duraría su dinastía en el poder, pues para los chinos diez mil equivalía a
decir “para siempre”.

A pesar de que la dinastía Qin duró apenas 15 años, deja como legado un estado centralizado
y un sistema burocrático con un profundo impacto en dinastías sucesivas. El primer
Emperador junto a su primer ministro Li si, tomando como referente las reformas legistas de
Shang Yang, pone en marcha la abolición del feudalismo, la persecución del confucianismo y
una fuerte centralización del Estado.

La unificación no fue meramente territorial, pues mediante la estandarización de la moneda,


de los pesos, las medidas, la escritura, el sistema legal e incluso la longitud de los ejes de los
carros, Qin Shi Huang y Li Si lograron también unificar China económicamente.

También tuvo lugar el desarrollo de una extensa red de carreteras y canales, conectando las
distintas provincias para acelerar el comercio entre ellas y facilitar los desplazamientos
militares, asegurando así un control efectivo del territorio.

Gracias al empleo de mano de obra esclava se erigieron gigantescas infraestructuras durante


este periodo, como el Sistema de irrigación de Dujiangyan o la Gran Muralla China, siendo
esta última fruto de la unificación de las diversas fortificaciones construidas por los Reinos
Combatientes para repeler las invasiones de los pueblos nómadas.

Entre los proyectos de obras públicas más importantes se encuentra el extravagante mausoleo
del Emperador, junto a su ejército de Guerreros de terracota, que abarca una superficie de
2,13 ​km² que se convierten en una extensión de 60 ​km² si se incluyen el resto de tumbas que
completan el complejo funerario.

Esta dinastía se caracteriza por ser un periodo de tiranía y extrema crueldad, lo cual generó un
gran odio y descontento que se materializó en numerosas revueltas por toda China tres años
después del fallecimiento del primer Emperador, quien había sido capaz de mantener la
estabilidad gracias a su firme control en cada aspecto de la vida de sus súbditos.
A Qin Shi Huang le sucedió su segundo hijo, Huhai, quien no fue ni de lejos tan capaz como
su padre. A partir del 207 a.C las fuerzas de Qin ya no pudieron contener a los grupos
rebeldes bajo el control del comandante Liu Bang, quien finalmente se declara emperador
Gaozu e inaugura la nueva dinastía Han (202 a.C - 220 d.C).

2.1. El primer Emperador: Qin Shi Huang


El que posteriormente pasaría a la historia como el primer Emperador nació bajo el nombre
de Zheng, en la ciudad de Handan alrededor del 260 a.C. Su padre era un príncipe de la casa
real de Qin, rehén en el estado enemigo de Zhao para garantizar el armisticio entre ambos
estados, y que más tarde consigue volver al estado de Qin con la ayuda de un rico mercader
llamado Lu Buwei, quien se convierte en primer ministro una vez este asciende al trono de
Qin.

Según las ​Memorias históricas de Sima Qian, Qin Shi Huang no era hijo del príncipe, sino
que en realidad era hijo de Lu Buwei, pues su madre había sido originalmente la concubina
del mercader y esta ya había quedado encinta antes de casarse con el príncipe. No obstante, a
pesar de que esta historia ha contribuido tradicionalmente a reforzar la mala imagen del
Emperador, hoy en día los historiadores ponen en duda la veracidad de esta teoría.

Zheng hereda el trono de Qin en el 247 a.C., con 12 años de edad, y tuvo un regente a su
lado hasta los 21, cuando toma el poder por un golpe de Estado. Posteriormente, a sus 38
años de edad, habiendo logrado el control de toda China y ansioso por mostrar que ya no era
otro simple rey como sus predecesores se autoproclama “Huangdi” o Emperador.

Sus contemporáneos se referían a él como ​Shi Huangdi


( traducido normalmente por “primer Emperador”),
pero el cambio de dinastía implicó que ya no podía ser
llamado el “primer Emperador”, por lo que surgió el
hábito de preceder su nombre con el de su dinastía, Qin.
Además, ​Huangdi f​ ue acortado para mantener un
nombre de tres ideogramas como es costumbre en la
tradición china, de manera que hoy en día se conoce
como Qin Shi Huang.
Las brutalidad de su mandato generó un gran odio y descontento entre la población
esclavizada - forzada a trabajar en proyectos como la primera Gran Muralla- y los nobles de
las antiguas casas reales de los estados conquistados, que habían perdido su poder y además
habían sido obligados a trasladarse a la capital para poder ser vigilados de cerca.

Por tanto, no es de extrañar que la represión, el absolutismo y la poca simpatía que despertaba
el Emperador entre sus súbditos tuvieran como consecuencia varios intentos de asesinato, que
terminaron por convertirlo en un paranoico y obseso de la inmortalidad. Esto le llevó a
contratar a sirvientes para que le trasladasen cada noche a diferentes estancias dentro del
palacio, e incluso a realizar numerosos viajes en busca de la inmortalidad.

Qin Shi Huang fallece precisamente en uno de estos viajes en el año 210 a.C., en la prefectura
de Shaqiu, a dos meses de distancia de la capital. Su primer ministro Li Si, por temor a que la
noticia de la muerte del Emperador pudiera desencadenar un levantamiento, decide ocultar su
muerte y ordena llevar dos carros de pescado inmediatamente antes y después de la diligencia
del emperador, ocultando así el olor del cadáver en descomposición.

Finalmente, una vez la corte imperial regresa a Xiangyang, por fin se anuncia su muerte y es
enterrado en el gigantesco recinto funerario que había ordenado construir, custodiado por
todo un ejército de guerreros de arcilla.

3. El mausoleo del primer Emperador


3.1. Los Guerreros de terracota
3.1.1. Descubrimiento

En 1974 unos granjeros que se encontraban excavando un pozo a aproximadamente 1,5 km


de la tumba del primer Emperador dan por casualidad con unas piezas de cerámica,
incluyendo una cabeza de cerámica perfectamente esculpida. Aquello llamó la atención de los
arqueólogos, y el lugar pronto se convirtió en un hormiguero humano de actividad, del cual
finalmente un ejército entero de guerreros de cerámica fue desenterrado.

A pesar de todos sus esfuerzos por alcanzar la inmortalidad, el primer Emperador logró al
parecer conservar el suficiente sentido de la realidad como para ordenar la construcción de su
propio sepulcro, cerca de lo que hoy en día es la ciudad de Xian, provincia de Shaanxi.
En la China de hace 3,000 años creían en la vida después de la muerte, por lo que cuando un
rey o un noble moría se les solía enterrar junto a sus sirvientes. Al ordenar la fabricación de
este ejército de cerámica, el Emperador creía que las tropas seguirían bajo su mando en la
otra vida, y que estas guardarían el sepulcro. No obstante, sí que tuvieron lugar sacrificios
humanos, pues al oeste de la tumba se han encontrado cementerios masivos para los
trabajadores que, obligados, construyeron esta necrópolis.

El plano del mausoleo evoca la disposición de una ciudad imperial, cuya parte interior
representaría la “ciudad prohibida”, reservada al emperador, y la parte exterior, la periferia.

Cuatro secciones subterráneas de


entre 4 y 8 metros de profundidad,
designadas fosas 1 a 4, han sido
excavadas, siendo la fosa 1 la
mayor pues contiene más de 6,000
figuras en formación de batalla.

​ lano del complejo sepulcral


(Izquierda) P
de Qin Shi Huang:

1. Túmulo
2. Muro interior
3. Muro exterior
4. Fosa 1
5. Fosa 2
6. Fosa 3

La fosa 2, descubierta en 1976, es más reducida y alberga más de 1.400 carros y jinetes.
Dentro de esta se han clasificado cuatro unidades básicas: una vanguardia de arqueros a pie,
sin armadura; dos unidades de caballería y carros; y una unidad más de caballería y carros
repartida en ocho corredores.
Al año siguiente se excavó una tercera fosa, un pequeño espacio irregular equivalente a la
séptima parte de la fosa 1. Sus figuras parecen representar un grupo de mando de élite, con
oficiales de alto rango y un antiguo carro de guerra.

Posteriormente se descubrió una cuarta fosa


vacía, de la que se deduce un abandono
prematuro del trabajo, tal vez a causa de la
súbdita muerte de Qin Shi Huang y la
subsiguiente caída de la dinastía.

A juzgar por la disposición de las fosas,


semejante a la de los campamentos militares,
los guerreros de arcilla representaban las tropas
estacionadas fuera de la ciudad, pues estos se
encuentran orientados al este, donde se encontraban los estados enemigos conquistados por el
Emperador. Se considera que la fosa 1 representa la división de infantería del ala derecha, la
fosa 2 la división de caballería del ala izquierda, la fosa 4 la fuerza central y por último la
fosa 3 la unidad de mando.

Se estima que el ejército cuenta con un total de más de 8.000 guerreros, 130 carruajes y 150
caballos preparados para la batalla, además de otras figuras no militares como oficiales,
acróbatas, forzudos y músicos, encontradas en fosas a las afueras de los muros que rodean el
montículo de la tumba del Emperador.

Los expertos distinguen tres categorías o rangos principales entre las figuras: infantería,
caballería y aurigas. Incluso dentro de estas categorías podemos hacer distinciones entre
oficiales de alto y bajo rango, pues la peculiaridad de este ejército de arcilla es que no existen
dos guerreros de Terracota iguales, cada figura tiene sus rasgos distintivos que la hacen única.
Cada guerrero difiere del resto por su rostro, vestimenta y peinado, acorde con el rango que le
corresponde.
3.1.2. Fabricación

Los guerreros reciben su famoso nombre de un término alfarero que designa la arcilla
modelada y endurecida en el horno. No obstante, lo realmente peculiar de este ejército de
terracota es que no fue producido en serie ni mediante la utilización de moldes, sino que cada
figura fue modelada individualmente.

Se cree que la cabeza y los brazos eran modelados a parte y posteriormente unidos al cuerpo
con tiras de arcilla, al igual que otras piezas adicionales como las orejas, la barba o la
armadura. Mientras que los detalles del rostro y de la vestimenta se labraban sobre una fina
capa adicional de arcilla. Finalmente, las figuras se horneaban a elevadas temperaturas y eran
unidas a la peana, también previamente horneada.

De esta manera cada guerrero posee un estilo propio, y esto ha permitido descubrir entre ellos
representantes de minorías nacionales de los más alejados rincones del Imperio, lo que da
idea de la gran capacidad de reclutamiento del ejército del primer Emperador.

Los estudios clasifican los rostros en alrededor de ocho tipos atendiendo a la forma. Sin
embargo, existen diversos rasgos que los
diferencian -además de la variedad étnica,
anteriormente mencionada- como la edad, o
incluso el uniforme, que nos informa acerca
del rango militar de cada uno de los
guerreros.

Originalmente, guerreros y caballos estaban


pintados con brillantes colores, que no han
se han conservado debido a la exposición al
aire, pero que seguramente habrían dado a
las figuras una sensación de realismo aún
mayor. Por esta razón los arqueólogos han
decidido posponer la excavación de más
figuras hasta encontrar una técnica que
permita conservar la policromía.
Este ejército de estatuas de cerámica de en torno a 1.8 metros de altura y de imponente
presencia da la sensación, a quien lo contempla, de que va a ponerse en marcha en cualquier
momento. Además, cabe destacar que la mayoría portaban armas, lo que habría aumentado
aún más su realismo.

La falta de estas armas, junto con los indicios de que el recinto de madera que cubría las
figuras fue incendiado y destruido, son evidencia de que la tumba fue saqueada poco después
de la caída de la dinastía Qin. A pesar de esto, se han podido recuperar más de 40.000
elementos de armamento de bronce, entre los que se incluyen espadas, dagas, lanzas, hachas,
escudos, ballestas, etc.

3.2. La tumba del Emperador


De todo el gigantesco complejo que constituye el mausoleo de Qin Shi Huang solamente se
ha excavado una parte, por lo que aún quedan hallazgos muy importantes pendientes por
desenterrar.

La cámara funeraria, situada en el centro del palacio subterráneo que hay en el mausoleo, aún
no ha sido abierta y por tanto, tampoco la tumba del Emperador. Sima Qian en sus ​Memorias
históricas​ afirma que esta se encuentra rodeada por ríos de mercurio.

Estudios científicos recientes han demostrado que el suelo de la zona contiene


concentraciones inusualmente altas de mercurio. Por tanto, si Sima Qian está en lo cierto,
sería muy peligroso entrar, pues en su descripción de la cámara funeraria también se
mencionan ballestas mecánicas que resguardan entradas y pasillos.

Por otro lado, varios académicos a partir de 1976 han propuesto explorar el palacio
subterráneo alegando que el mausoleo se encuentra en una zona sísmica, y es importante
desenterrar las reliquias para asegurar su protección y además evitar posibles robos.

Los opositores a tales excavaciones sostienen que la actual tecnología con la que cuentan los
arqueólogos no es suficiente para poder desenterrar y preservar las reliquias con éxito, pues
en el caso de los Guerreros de terracota los arqueólogos no lograron preservar la capa de
pintura que originalmente recubría las estatuas. Finalmente, la Administración Nacional del
Patrimonio Cultural de China decretó que debía de desarrollarse un plan de protección para el
palacio subterráneo y rechazó la propuesta.
4. Posible conexión con la antigua grecia
Hoy en día los secretos de la tumba de Qin Shi Huang continúan siendo un misterio
inquietante. No obstante, el ejército de guerreros que lo custodia es objeto de varias
especulaciones, entre ellas destaca la posible influencia de artesanos griegos en la creación de
las figuras.

Un fiel defensor de esta teoría es el historiador británico Dan Snow, quien revela sus
hallazgos y toda evidencia sobre la importación de técnicas e ideas provenientes del mundo
occidental durante ese periodo en el documental ​La mayor tumba en La Tierra: secretos de la
antigua China​. Según Snow, en las esculturas de los acróbatas halladas cerca de las fosas
principales los rasgos propios del arte griego son muy marcados, y estas figuras son
diferentes al resto de guerreros.

En la historia de China no hay evidencia de figuras humanas de este tamaño previas a los
Guerreros de terracota. Las esculturas fabricadas anteriormente solían medir alrededor de 20
centímetros, y no existen pruebas de una evolución artística que las conecte con el Ejército de
Terracota. Por lo que resulta increíble el nivel de sofisticación alcanzado por los artesanos
chinos, al no contar con ningún tipo de referente.

La influencia proveniente del extranjero parecer ser la respuesta más simple y probable.
Además, se ha hallado a varios kilómetros del mausoleo una tumba colectiva cuyos restos
posiblemente pertenecen a trabajadores que participaron en la construcción del mismo. En
concreto, se descubrió un cráneo distinto a los cráneos típicos de los habitantes de la zona,
que aunque no era europeo, tampoco era chino. Esto demuestra la presencia de extranjeros en
la zona por aquel entonces.

Por otro lado, según otros expertos, en aquella época el mundo mediterráneo y el Este de Asia
no eran mundos tan aislados como se podría pensar, pues el mundo griego había extendido
sus fronteras hasta lo que hoy en día se conoce como la India. Por lo que, aunque sí que
pueden haber existido transferencias culturales, estos expertos afirman que los Guerreros de
terracota son eminentemente chinos.

Sin embargo, esta falta de consenso entre historiadores hace que la cuestión de si los antiguos
griegos tuvieron algo que ver en
la construcción de estas figuras
continúe siendo hoy en día una incógnita, y convierte al Ejército de Guerreros de terracota en
uno de los más grandes misterios del país asiático.

Desde el año 1987 están


considerados Patrimonio
de la Humanidad por la
Unesco, y su apabullante
popularidad ha llevado a
los guerreros por museos
de todo el mundo. En
septiembre de 2007 se
exhibieron en el Museo
Británico de Londres,
atrayendo a más de
850.000 visitantes, cifra
que solo ha sido superada hasta la fecha por los Tesoros de Tutankamón en 1972.

5. Conclusiones
No cabe duda de que este ejército de guerreros de arcilla representa uno de los
descubrimientos arqueológicos más importantes del siglo XX, pues no se trata de un
descubrimiento cuyo impacto haya afectado únicamente a la historia y arqueología de China,
sino que se trata de algo único en la historia de la humanidad.

Es interesante cómo los guerreros de Terracota forman parte de nuestra cultura general, pues
si lo pensamos detenidamente se trata de una construcción de la China de la dinastía Qin y
nosotros somos como españoles del siglo XXI - incluso podríamos generalizar aún más y
referirnos a nosotros mismo como europeos del siglo XXI- probablemente hayamos oído
hablar de ellos en algún momento.

Hoy en día nuestra situación actual no da lugar a dudas, vivimos en un mundo globalizado y
todo lo que ocurre en cualquier punto del planeta nos termina afectando al conjunto de la
humanidad, en mayor o menor medida, tarde o temprano. Sin embargo, no hace falta vivir
una pandemia para darse cuenta de algo tan evidente.
Volviendo al campo de la arqueología, en España se encuentra el conjunto de restos humanos
más antiguos y numerosos de Europa, cuyo descubrimiento ha tenido una enorme
repercusión científica. Se trata del yacimiento de Atapuerca, que al igual que los Guerreros de
terracota de Xian está considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Ambos son hallazgos de relevancia para la comunidad científica a nivel internacional, pues
en el caso del hombre de Atapuerca, este revolucionó las teorías sobre el primer poblador de
Europa. No obstante, por alguna razón si preguntamos a personas de distinta edad, sexo o
nacionalidad, es muy probable que la mayoría hayan oído hablar antes de los Guerreros de
terracota que del hombre de Atapuerca.

Sencillamente, la importancia social en ambos casos no es la misma, lo cual no influye para


nada en la importancia que hayan podido tener en el mundo científico, de la misma manera
que poco tienen que ver los restos del ​Homo antecessor e​ ncontrados en la provincia de
Burgos con unas figuras de guerreros de arcilla halladas en la provincia de Xian.

El ejército de Terracota es, al igual que la Gran Muralla, una maravilla si tenemos en cuenta
la tecnología y recursos de la época, no es de extrañar que su construcción se prolongase
durante casi 40 años. Además, cabe destacar que la historia tras estos guerreros es una
historia de grandeza, pues son fruto de la tiranía de un emperador obsesionado con lograr la
inmortalidad.

Qin Shi Huang es un personaje célebre dentro de la historia de China, entre otras razones por
ser el primero en autoproclamarse emperador, pero también tiene cierta relevancia en todo el
mundo, pues ha dejado un legado que resulta difícil de pasar por alto. Su actual fama a nivel
internacional se debe principalmente gracias al grandioso ejército que lo acompaña y protege
en el más allá.

Desde luego, resulta impresionante para cualquiera visitar las fosas donde se encuentran estos
guerreros, y más aún pensar en cómo y cuándo se fabricaron, pues fueron fabricadas una a
una meticulosamente. Lo que el primer Emperador nunca supo fue que sus numerosos viajes
en busca de la inmortalidad realmente habrían sido innecesarios, pues finalmente logró ser
inmortalizado, aunque tal vez no de la forma que él esperaba.
Bibliografía
● Jacques, G. (1972). ​Le monde chinois.​ Capítulo V, El imperio conquistador (págs.
107-126). París: Armand Colin Éditeur.
● Goepper, R. (1988). ​Historia y cultura del Imperio del Centro​. (Págs 63-71). Múnich:
Editorial Bertelsmann
● Elvin, M. y Blunden, C. ​China, gigante milenario.​ Volumen I (págs. 80- 87).
Ediciones del Prado.
● R. (2016, octubre 18). ¿Ayudaron los griegos a esculpir los Guerreros de Terracota de
China? La teoría que puede cambiar la Historia. Recuperado de
https://www.bbc.com/mundo/noticias-37691150
● Glancey, J. (2017, mayo 5). ¿Por qué nunca se ha abierto la tumba que vigilan los
famosos Guerreros de Terracota en China? Recuperado de
https://www.bbc.com/mundo/vert-cul-39635995
● Diaz, L. (2017, octubre 31). Los guerreros de terracota: un ejército eterno.
Recuperado de ​https://guerrerosdelahistoria.com/guerreros-de-terracota/
● Tang, C. (2019, octubre 21). The Terracotta Army, Xi’an — All You Want to Know.
Recuperado de ​https://www.chinahighlights.com/xian/terracotta-army/
● colaboradores de Wikipedia. (2020, marzo 9). Qin Shi Huang. Recuperado de
https://es.wikipedia.org/wiki/Qin_Shi_Huang
● Wikipedia contributors. (2020, abril 27). Mausoleum of the First Qin Emperor.
Recuperado de ​https://en.wikipedia.org/wiki/Mausoleum_of_the_First_Qin_Emperor

También podría gustarte