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Taller Router y Sus Componentes
Taller Router y Sus Componentes
Taller Router y Sus Componentes
Router de acceso. Se utilizan para establecer la unión entre dos redes. Por lo general se conecta una
red doméstica con Internet. Son por tanto el dispositivo que suelen acompañar los proveedores de
servicios de telecomunicaciones para que el cliente pueda conectarse a la red del teleoperador.
Incorporan de forma habitual otras funciones como firewalls, proxys o conexión mediante WI-FI.
Router de distribución. Este tipo de router está pensado para conectar entre sí más de dos redes de
manera simultánea. Su función es por tanto la de transferir los paquetes de datos entre las diferentes
redes interconectadas. Son capaces de procesar mucha información en muy poco tiempo. Utilizan un
protocolo de enrutamiento que permite optimizar la mejor ruta para la transferencia de datos.
Tipos de routers
Según su antigüedad, sus características y el uso para el que están pensados tenemos a nuestra
disposición en el mercado una gran variedad de tipos de routers. Dentro de un mismo tipo incluso
podemos elegir entre diferentes alternativas según las prestaciones que ofrece, el fabricante, o el precio
al que se comercializa. Los principales tipos de router que hay en el mercado son los siguientes.
Router tradicional: Se trata de aquellos routers que utilizan conexión mediante cableado. Utilizan la
línea telefónica para conectar el dispositivo a la red el proveedor y su función es meramente convertir
las señales digitales en analógicas y viceversa. Los equipos y dispositivos se conectan a este tipo de
routers mediante cables Ethernet o conectores USB. No disponen por tanto de función inalámbrica y su
uso ya casi obsoleto está limitado a conexiones físicas de cierto tamaño.
Router WI-FI: Los router inalámbricos o Wi-Fi son los más extendidos actualmente y son estéticamente
muy fáciles de reconocer. Disponen de antenas (normalmente tres) que convierten los paquetes de datos
en señales de radio. Gracias a esto es posible establecer conexión sin necesidad de cables entre los
equipos y dispositivos de una determinada red e Internet. Aunque en principio, para establecer una red
inalámbrica, era necesario también un módem que sirviera como punto de acceso a Internet (al que el
router estaba conectado), en la actualidad es bastante común que los routers ya traigan un módem
incorporado. Para elegir el tipo de router más apropiado según las condiciones de nuestra red y nuestros
equipos debemos analizar qué tipo de conexión a Internet tenemos disponible además otros aspectos
como la fuerza de la señal o su velocidad.
Router USB: Cuando hablamos de router USB podemos estar refiriéndonos a dos tipos de dispositivos.
Por una parte, estarían aquellos que están diseñados para conectarse a equipos que no disponen de una
tarjeta de red que les permita establecer una conexión mediante cable Ethernet. El segundo caso, y
probablemente el más extendido, es cuando definimos un dispositivo que se conecta mediante una
conexión ad-hoc. Este tipo de router se conecta a un equipo que ya se encuentra conectado a Internet y
permite compartir esa conexión de manera inalámbrica con otros equipos que se encuentren dentro de su
alcance. La principal desventaja de este tipo de conexión es que el equipo principal deberá estar siempre
conectado para que el resto de la red funcione.