GONZÁLEZ DE CARDEDAL, Olegario, Cristología, Madrid, BAC,

2001.
UNIDAD N° 2

PERSPECTIVA BIBLICA- GLORIFICACIÓN

GLORIFICACIÓN
La historia de Cristo en un sentido es anulada por la muerte, y en otro,
recomienza nueva e innovadora con la resurrección, es la muerte de alguien que,
crucificado por los hombres, fue resucitado por Dios. El NT es el presupuesto de todos
los relatos históricos, de todas las confesiones de fe, de todo el anuncio a los paganos,
de todas las discusiones con los judíos, de su relectura de AT, dela propia existencia de
la iglesia y de su acción misionera.
Ella revela a Dios como Dios de vivos y al hombre como creatura destinada a
compartir su vida eterna.
a) Los hechos del origen
¿Qué hecho o experticias dieron origen a la fe en la resurrección de Jesús? Todos los
testimonios afirman el hito existente entre el final de la vida de Jeus y el comienzo
comienzo de la fe en el Resucitado. Los discípulos huyeron tras el prendimiento; solo
mujeres asistieron a la crucifixión u ninguno de los apóstoles estuvieron prcente en ella.
Ni los Evangelios ni libros algunos del NT describen la resurrección, porque no es un
acontecimiento verificable como los propios de nuestro mundo. Hablan de apariciones
del resucitado.
Como resultado de estas apariciones, y tras la comprobación de que el sepulcro está
vacío, llegan a la convicción, de que Jesús está vivo, de que ha resucitado, de que Dios
ha acreditado y afirmado otorgándole la parte en su propia vida.
Las fuentes. Hechos y signos.
Confesión de fe: kerigmas de Pedro y Pablo en hechos. (hechos. 2,14-36)
Textos narrativos de criatofonias personales (Mt 28,9-10)
Las apariciones del resucitado
La confesión fundamental es la de 1 Cor 15,3-8 es la mas antigua que tenemos de la
resurreccion. La recoge Pablo de la primera comunidad de Damasco. Contienen por un
lado tres hechos que fundad la fe, que Cristo murió, que resucitó, que se apareció. Junto
a los hechos esta la interpretación de sus sentido.
En forma pasiva: «Cristo fue visto por Pedro».
— Como un pasivo divino: «Él fue hecho visible a Pedro», lo
que equivale a decir que Dios hizo posible a Pedro que le viera; Dios
le dio o concedió ver a Cristo.
Una de las fórmulas más ricas de Hechos (10,40-41) suma ambos
aspectos: la iniciativa de Dios y la efectuación de Jesús.
El sujeto o el primer protagonista es el propio Jesús. Se trata de su autor revelación
El hecho es percibido no como una gestación del sujeto que lo vive sino como
resultado de un encuentro, por tanto como realidad objetiva que le llega de fuera, que
tiene a Jesús por contenido personal
Jesus se hace presente como viniendo de la vida propia de Dios y realizando al máximo
los encuentros de amistad, acogida y perdón.
Los destinatarios de las apariciones son personas concretas ( Pedo, Santiago, Pablo).
Las apariciones tienen una dimensión comunitaria y una intencionalidad misionera.

Las interpretaciones según las escrituras. Por nuestro pecados. Al tercer día.
Los hechos de la muerte (la sepultura no aparecen como hechos salvíficos sino como
refrendo de aquella) es el presupuesto para afirmar la resurreccion. La muerte real y
vivificadora, da soporte al anuncio de una resurreccion real; esta no fue la reavivación
de un sujeto medio muerto, porque esta resurreccion esta vista como parte y culmen de
un plan de Dios.
La muerte de Jesús trasciende a su persona para incluirnos a nosotros.
La resurreccion es un acontecimiento escatológico, que trasciende el tiempo. Pertenece
al mundo que viene y no puede ser dentro de las coordenadas de nuestro tiempo y lugar,
como situamos odas las demás cosas del mundo. Muerte y resurreccion de Jesús son un
acto doble, no dos actos sucesivos.
La resurrección se hace transparente y comprensible a la luz de la Escritura y a luz de la
resurrección. Sobre esto se dice que tuvo lugar al tercer día de la semana (Mc. 8,31). En
un sentido cronológico es difícil de fijar, pero puede tener mas bien un sentido
teológico. indica la pronta intervención de Dios en favor del justo.
Las apariciones fueron entendidas como:
Revelación de Jesús y encuentro con jesus.
Trasformación de los discípulos en hombres nuevos, capaces de comprender lo anterior
y comenzar un futuro nuevo.
Renacimiento del pueblo de la alianza, como pueblo rehecho por Jesús su Mesías.
Surgimiento de la Iglesia.
Comienzo de la misión, primero a los judíos y luego a todos.
Tumba vacía
La ausencia del cadáver es un signo que, en la luz de anteriores y posteriores
experiencia del encuentro con el Jesús vivo, recibe un peso propio.
La resurrección de Jesús es la afirmación que Dios hace de todo lo que ha sido y todo lo
que él es ya, a la vez que muestra lo que el ha de ser todavía para el mundo. La
resurrección de Jesús fue una resurrección corporal.
La resurrección: historia apologética, teológica
Son muchas las tesis que hablan sobre este acontecimiento de la resurrección de Jesús, y
como mantenían el recuerdo los discípulos del Jesús prepascual. Algunos como
Bulmann afirma que Jesús resucito en el Kerigma; Marxen que la resurrección significa
sencillamente que el asunto de Jesús seguía valido y debía perdurar; Schillebeeckx la
explica como un proceso de conversión vivida como gracia y expuesta como aparición;
R. Pesch considera al Jesús terreno fundador de la resurrección. Entre otros tantos que
niega de una la resurrección de Jesus como ser G. Ludemann, para èl la fe esta y cae con
el Jesús de la historia y no con el Cristo de la resurrección, por lo cual ni las apariciones,
ni la tumba vacía tienen importancia alguna.
Dos comprensiones falsas de la resurrección:
Una material biologicista, lo ve como la simple vuelta a la vid biológica. Como la de la
hija de Jairo y la del hijo de la viuda de Nain.
 Otra es la interpretación idealizadora o desmitificadora, que la considera como
continuación en el tiempo de la memoria y de la causa de Jesus, o como eternidad del
alma sola, pudiendo permanecer su cuerpo descompuesto en el sepulcro.
Frente a esto está la comprensión teológica que la comprende como un accionar de
Dios, que recae sobre la entera persona de Jesús, sustrayéndolo a poder de la muerte y
haciéndolo participe de la divinidad. La resurrección es personal y, por lo tanto,
corporal.
El resucitado es la explosión y el primer exponente del mundo futuro; es una realidad
escatológica que toca a este mundo, verificable en sus efectos; es real e histórica pero no
con la historicidad mundana propia de quienes somos tiempo, mundo y mortalidad.
Interés apologético que reduce a un milagro como los demás milagros de Jesús. Este
sería el máximo milagro que prueba definitivamente el cristianismo. Pero antes que
milagro es “misterio” porque en ella pasamos de este mundo a otro. No es cualquiera el
que ha resucitado sino alguien que ha propuesto un mensaje sobre Dios y ha muerto una
muerte como servicio y sacrificio por los hombres. El Resucitado ha suscitado una
experiencia de transformación neumática y desencadenado una comunidad misionera
que perdura hasta hoy.
Contexto, escatológico y apocalíptico

La reflexión se elabora partiendo de la memoria del que habían conocido de la

experiencia de su actuación en la iglesia y de los textos de AT. La suma de todo esto
puso en primer plano la coordenada escatológica. La resurrección se entiende con la
espera del fin del mundo con la consiguiente revelación del sentido de la historia que
los judíos encontraban en la literatura apocalíptica de su tiempo. La apocalíptica es la
matriz de la cristología primero y la madre de toda la teología después. En la persona
de Jesus tiene lugar la irrupción de ese final como acción reconciliadora de Dios respeto
de su creación. La resurrección identifica a Jesús como Juez escatológico se desprende
su condición de Señor, que ejerce su soberanía salvífica en la Iglesia. la resurrección
constituye a Jesús en testigo escatológico de los hombres y juez de su Reino.
El lenguaje: constelaciones simbólicas
Tres ámbitos simbólicos:
a- Es una acción que se ejerce sobre un muerto.
b- Es una transferencia al universo de Dios.
c- Es la constitución de forma de realidad nueva en Cristo, con su consiguiente acción
sobre el mundo, por participación en la soberanía de Dios.
Una de las expresiones más primitiva anastasis, resurrección, expresa la idea de levantar
de la muerte, como despertar a alguien de un sueño. Los verbos correspondientes a la
acción divina son: suscitar, despertar, hacer surgir, sustraer arrancar, resucitar
Otra expresión deriva de los términos gloria o glorificación. Se acentúa la victoria de
Cristo sobre la muerte y su participación en la vida y poder de Dios, donde toda
mortalidad ha desaparecido.
Otro momento es el termino exaltación, expresan la acción exaltadora de Dios con la
humillación de quien en la pasión y en la muerte realizo el destino del servidor paciente
y descendió a la muerte para gustarla por todos.
Otro modelo es la de la resurrección como VIVIFICACION por acceso de Jesús a la
vida de Dios
La formulación mas simple, pero que es parte de la confesión de fe, es la que declara a
Jesús KYRIOS, que se le otorga a partir de la resurrección.
 Y una última expresión de esta acción de Dios sobre Jesús es la de instalación o
CONSTITUCION EN HIJO DE DIOS. Dios por la fuerza del espíritu santo ha
manifestado la verdadera identidad de Jesús.

Contenido teológico
Toda la obra de Jesús se la debe ver referida a Dios quien primero actúa en Jesús
mediante los signos y milagros que lo acreditan; luego por medio de los judíos y
paganos realiza su plan de salvación en la muerte y finalmente lo acredita y justifica
ante los hombres por la resurrección. El objetivo de la confesión cristológica es que
Dios ha actuado en Jesús atrayéndolo a su vida e invirtiendo así la acción de los
hombres que le dieron muerte.
Aparece la continuidad ente predicación de Jesús y comunidad pospascual. Siempre es
Dios quien actúa en Jesús para la salvación del hombre.

Contenido cristológico
Constitutivo:
Su contenido es constitutivo del ser encarnado de Jesús porque mediante ella Dios lleva
a su hijo definitiva constitución encarnativa. En el NT se puede decir que Jesús por la
resurrección fue constituido: Mesías, Señor, Hijo.
Acreditativa:
La resurrección es el juicio por el que Dios da razón a Jesús frente a sus jueces.
Hermenéutica:
Jesús no ha fundamentado su mensaje en la interpretación del AT como los rabinos,
pero se ha referido a él y ha tomado postura ente la tradición que lo fue aplicada en la
vida diaria.
Epifanio:
La resurrección, mediante las apariciones y la presencia permanente de Jesús en la
Iglesia, desvela a la conciencia de los apóstoles su identidad.

Contenido apostólico
La resurrección deja de ser un escándalo para los apóstoles y un hecho exterior de la
historia pasada, para convertirse en principio divino de sentido, transformador también
de la vida de los apóstoles.

Contenido soteriológico.
La resurrección es percibida y propuesta como inicio de la resurrección universal, ya
que con ella ha comenzado el fin de los tiempos. Jesús es primicia de los muertos tras
quien resurgirían todos. Cristo primogénito de la nueva creación.

Contenido eclesiológico.
La resurreccion fue el principio genético del cristianismo, de la Iglesia y del NT.

El acceso actual a Cristo resucitado.

Las apariciones de Cristo en el inicio fueron fuente de fe y de Iglesia. Todo
conocimiento posterior es referido a aquel originario.

Desde dentro de la Iglesia.

1. La Eucaristía: casi toda la cristofonia del NT van asociadas a contextos litúrgicos. La
fracción del pan es el lugar por antonomasia para el encuentro con el Resucitado.
2. El seguimiento: quien vivió según el evangelios percibe los frutos de conocimiento
 Los existenciales cristianos, fe, esperanza, amor
La fe, la esperanza y el amor son los existenciales de la vid divina: de los que se parte
como don de Dios, otorgado en el bautismo, y con los que se llega al reconocimiento
pleno de las realidades cristianas. En la fe el cristiano se apoyara, sobre todo en el
testimonio inaugural y fundador de una resurrección que constituye las primicias de la
suya. En la caridad vivirá sobre todo la ortodoxia de su fe porque, el Señor resucitado le
ha dicho que el mundo y su juez lo reconocerán en este signo. En la esperanza
finalmente él aguardara sobre todo el advenimiento escatológico de la resurrección
prometida por Dios como el establecimiento de la tierra nueva y de los cielos nuevos.

Desde experiencias humanas

1. Via trascendental: la esperanza en cuanto anhelo de sentido y de plenitud. Esperar es
por definición esperar desde la vida contra la muerte.
2. Via personal: el amor. El amor personal, cuando no es mero efecto posesivo que se
apropia del otro para saciar sus necesidades afectivas o sexuales, implica su afirmación
incondicional y una esperanza para él.
3. Via histórica: la justicia humana es una historia de dolor y de injusticia.

El resucitado revelador del Padre, donador del Espíritu y suscitador de la Iglesia.

La resurrección lleva consigo la efusión plena del Espíritu de Dios en e mundo, primero
sobre la humanidad de Jesús; luego desde ella y por ella en los apóstoles, la Iglesia y el
cosmos.
El Espíritu, el Mesías, el Hijo.
El Mesías recibe la unción del Espíritu, y aquel sobre quien se vea descender el Espíritu,
ese es el Mesías. Esta conexionista especialmente acentuada en el NT por Lucas y Juan.
Jesús impulsado, transformado y emisor del Espíritu.
Jesús es suscitado por el Espíritu en las entrañas de María, por el Espíritu es llevado al
desierto después de haber descendido sobre él en el bautismo, por su fuerza arroja los
demonios y con ellos muestra que el Reino de Dios está operando en el mundo y
animado por el Espíritu eterno se entregó al Padre ofrenda sin mancha por muchos.
La acción del Espíritu sobre la humanidad de Jesús comenzó en la encarnación y se
consuma en la resurrección, se encarnó por el Espíritu santo y resucito por el Espíritu
Santo.
Triple relación entre el Espíritu y Jesús: Jesús es portado por el Espíritu, Jesús es
transformado por el Espíritu, Jesús es, a partir de la resurrección, el donador del
Espíritu.

De la Pascua a la Trinidad.
Con la resurrección de cristo, Señor y con la efusión del Espíritu se consuma la
revelación Trinitaria. La resurrección acredita y manifiesta a Jesús como Hijo al que el
Padre no abandona, al que declaro justo ante los justos.
La resurrección así es la culminación de la revelación de Dios como creador y origen de
la vida, de la revelación de Cristo como Hijo, del Espíritu como principio de unión y
amor para los hombres. La resurrección de Cristo como resurrección universal es lo
último del proyecto creador de Dios.
La Trinidad es constituida así en la historia, como resultado de acto de los hombres
crucificado a Jesús y del abandono de Jesús por Dios. Dios es capaz de pasividad y
pasión absoluta “por nosotros”.

Carácter Escatológico y universalidad salvífica de la muerte-resurrección de Cristo.

El centro de la predica de Jesús era la cercanía del Reino de Dios a la historia en su
palabra e en su persona, la llegada de su potencia transformadora en los milagros, la
oferta de reconciliación que Dios hace en un nuevo tiempo de gracia en que la vieja
creación es citada a juicio, pero no a un juicio de condenación sino a un juicio de perdón
y recreación.
El centro de la predicación apostólica es que Jesús, llevado a la muerte por los poderes
del mundo, ha sido resucitado por el poder de Dios, que la muerte no ha sido superior a
su palabra, ni el sepulcro lo ha podido retener. Se anuncia de esta forma que la victoria
de Jesus ha sido total, no quedo dominación ni poder en este mundo que no haya sido
sometido por Dios a Cristo.

Explicitación topográfica y cronológica de esa universalidad: subida al cielo, descenso

a los infiernos, consumación final de la historia en gloria y juicio.
Cristo despliega su eficacia y como nosotros podemos conocerlo y participar en él.
Aparece como el que ha reunido definitivamente al hombre con Dios (ascensión), ha
visitado a los muertos para anunciar y ofrecer su victoria a todos liberándolos, ha
compartido el estado de muerte para vencerla definitivamente (bajada a los hombres).
Ahí reconocemos a Jesús al que pertenece al ser de Dios como hijo eterno y por eso
Creador con él del mundo (preexistencia y constitución cristológica del mundo) y
consiguientemente como el que en su revelación final consumara el mundo por la
justicia que ofrece y con ella el juicio que realiza (parusía).