Biblical Magi">
Nothing Special   »   [go: up one dir, main page]

0% encontró este documento útil (0 votos)
253 vistas8 páginas

Reyes Magos

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1/ 8

Reyes Magos

Ir a la navegaciónIr a la búsqueda

Reyes Magos de Oriente

Adoración de los Reyes Magos, retablo mayor de la Seo o Catedral


del Salvador de Zaragoza, España.

Información personal

Apodo Santos Reyes


Magos de Oriente
Sabios de Oriente
Reyes Magos

Información profesional

Información religiosa

Festividad noche del 5 al 6 de enero

Atributos Representados normalmente


con oro, incienso y mirra en las manos.

Venerado en Iglesia católica,1 Iglesia ortodoxa,2 Iglesias


antiguas orientales3

Patronazgo  Los Reyes, La Paz y Pueblo de Los


Reyes, Tlalnepantla de Baz.
Estado de México.

Los Reyes Magos de Oriente (o simplemente Reyes Magos) es el nombre por el que


la tradición cristiana denomina a los «magos» —denominación que recibían
los sacerdotes eruditos en el Antiguo Oriente—4 que, según el evangelio de Mateo, tras
el nacimiento de Jesús de Nazaret, acudieron desde Oriente para rendirle homenaje y
entregarle regalos de gran riqueza simbólica: oro, incienso y mirra.56
En los evangelios canónicos solo el Evangelio de Mateo habla de estos «magos», sin
precisar sus nombres, ni que fuesen reyes, ni que fueran tres. Fue en el siglo III d. C.
cuando se estableció que pudieran ser reyes, ya que hasta entonces, por sus regalos y
las iconografías que los representaban, tan solo se consideraba que eran personas
pudientes. Fue también en ese siglo cuando se estableció su número en tres, uno por
regalo, ya que hasta entonces había dibujos con dos, tres o cuatro magos, e incluso
la Iglesia ortodoxa siria y la Iglesia apostólica armenia aseguraban que eran doce,
como los apóstoles y las doce tribus de Israel.7
Los nombres actuales de los tres reyes magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, aparecen
por primera vez en el conocido mosaico de San Apolinar el Nuevo (Rávena) que data
del siglo VI d. C., en el que se distingue a los tres magos ataviados al modo persa con
sus nombres escritos encima y representando distintas edades. Aún tendrían que pasar
varios siglos, hasta el siglo XV d. C., para que el rey Baltasar aparezca con la tez negra
y los tres reyes, además de representar las edades, representen las tres razas de la
Edad Media. Melchor encarnará a los europeos, Gaspar a los asiáticos y Baltasar a
los africanos.7
En España a partir del siglo XIX se inició la tradición de convertir la noche de Reyes
(noche anterior a la Epifanía) en una fiesta infantil con regalos para los niños, a
imitación de lo que se hacía en otros países el día de Navidad, en homenaje al santo
oriental San Nicolás. Fue en 1866 cuando se celebró la primera cabalgata de Reyes
Magos en Alcoy, tradición que se extendió al resto del país y posteriormente a otros
países, especialmente a países de cultura hispana. 78
La palabra «mago», proviene del persa ma-gu-u-sha, que significa sacerdote. Llegó
al griego como μάγος (magos, plural: μάγοι, magoi), refiriéndose a
una casta de sacerdotes persas o babilonios, que estudiaban las estrellas en su deseo
de buscar a Dios.4 Del griego pasó al latín como magus, plural magi, /mágui/ de donde
llegó al español mago.

Índice

 1Mención en la Biblia
o 1.1Otras interpretaciones
 2Historia y leyenda
 3Los nombres y número de los Reyes Magos
 4Festividad
o 4.1Costumbres relacionadas con los Reyes Magos
o 4.2Otras costumbres del día 6 de enero
 5Arte
o 5.1Monumentos dedicados a los Reyes Magos
 6Nombres de personas relacionados con los Reyes Magos
 7Véase también
 8Notas
 9Bibliografía adicional
 10Enlaces externos

Mención en la Biblia
Las referencias de este artículo no tienen un formato correcto. Puedes colaborar
editándolas como se indica en esta página.
También puedes avisar en su página de discusión a quien las añadió pegando lo
siguiente:  {{subst:Aviso formato de referencias|Reyes Magos}}
~~~~ Este aviso fue puesto el 11 de diciembre de 2019.

La adoración de los magos. vitral o vidriera policromada, Alemania, hacia 1400. Actualmente en el Museo del
Louvre.

La figura católica de los Reyes Magos tiene su origen en los relatos


del nacimiento de Jesús, algunos, fueron integrados de los evangelios canónicos que
hoy conforman el Nuevo Testamento de la Biblia. Concretamente el Evangelio de
Mateo es la única fuente bíblica que menciona a unos magos (aunque no especifica los
nombres, el número ni el título de reyes) quienes, tras seguir una estrella, buscan al
«rey de los judíos que ha nacido» en Jerusalén, guiándoles dicha estrella hasta Jesús
nacido en Belén, y a quien presentan ofrendas de oro, incienso y mirra.
Nacido, pues, Jesús en Belén de Judá en los días del rey Herodes, llegaron del Oriente a Jerusalén unos
magos diciendo: «¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer?».
Evangelio de Mateo (2, 1-2), versión Reina-Valera, 1960
Y al entrar en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose, lo adoraron; y abriendo sus tesoros,
le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra.
Evangelio de Mateo (2, 11), versión Reina-Valera, 1960

Si bien parece contradictorio que practicantes de la magia (severamente amonestada


tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento) sean admitidos como adoradores
de Jesús, hay que tener en cuenta que el término griego magós no era utilizado
únicamente para referirse a los hechiceros. Se utiliza, en este caso, para referirse a
‘hombres sabios’ (así se los llama en diversas versiones de la Biblia en inglés) o, más
específicamente, hombres de ciencia. De hecho, también poseían conocimiento de las
Escrituras9 y, desde antiguo se ha sostenido que pertenecían al mazdeísmo.10
Mateo no explicita que sean astrólogos que conocieran con precisión el movimiento de
alguna estrella (2:7) a pesar de ser esta la creencia general. Aunque bien
intencionados, su visita es causa de turbación general y despierta la desconfianza
de Herodes (2:3), pues veía al nuevo Mesías como un rival. A pesar de ser anciano y
de haber reinado ya por más de treinta años, Herodes les ruega que averigüen el sitio
preciso del nacimiento del Mesías (2:8) con el fin de poder, así, acabar con su potencial
competidor. Los sabios, que no sospechan eso, encuentran al Niño, lo adoran y
obsequian oro, incienso y mirra (2:11). Un ángel previene a los magos de las
intenciones que Herodes guardaba (2:12), así que no regresan donde él. Iracundo, el
rey manda a matar a todos los niños menores de dos años. Para entonces, José ha
sido avisado en sueños (2:13) de que debe huir a Egipto con los suyos.
A partir de ese relato, se han ido elaborando numerosas leyendas sobre los hechos y la
personalidad de estas tres figuras.

Escudo de armas otorgado por el rey Carlos I de España en 1537 a la ciudad de Lima, fundada como Ciudad
de los Reyes el 18 de enero de 1535, doce días después de la fiesta de la Epifanía. El blasón lleva tres
coronas bajo la estrella de Belén y en la orla la frase en latín Hoc signum vere regum est, (Traducido al
español, "Este es el verdadero signo de los Reyes")

Otras interpretaciones
Según la interpretación de José Luis Sicre,[cita  requerida] en el tiempo en que fue escrito
el Evangelio de Mateo se estaba produciendo un incremento de conversiones paganas
al cristianismo frente a las de los propios judíos. La incursión de estos fragmentos
sobre los magos de Oriente en el Evangelio de Mateo subraya este hecho y lo utiliza
como argumento de conversión: si los de fuera vienen y lo adoran (se convierten)
¿cómo no os dais cuenta los que lo tenéis entre vosotros?.
También existen otras[cita  requerida] interpretaciones astrológicas y cabalísticas sobre la
figura de los Reyes Magos.
Según la interpretación ofrecida por Eric Rodríguez, 11 se tiene lo siguiente:
Ya el término griego μάγος (literalmente “magos”) había caído en un uso peyorativo o
deteriorado desde al menos el siglo III a. C. (cf. versión Septuaginta) por la extracción
de su origen y contexto cultural, y que es como se usa aún en la época del Nuevo
Testamento (cf. Hechos de los apóstoles, 8:9, 13:6, 19:13). No obstante, en el texto
original koiné (griego bíblico) de Mateo 2:1 dice:
“… ἰδοὺ μάγοι ἀπὸ ἀνατολῶν παρεγένοντο εἰς Ἱεροσόλυμα”. “… y he aquí (unos) magos desde Oriente se
encontraban por Jerusalén”.
Mateo (2:1)

A diferencia de los magos que ya se encontraban dispersos en tierra de Israel y todo el


mundo helénico, el énfasis que se emplea al decir “de Oriente”, marca un cambio de
connotación: el autor busca traer a la mente un personaje asociado con el Oriente,
diferente a los sabios convencionales de Israel (rabinos), que conociera además las
profecías mesiánicas y que fuera autoridad bíblica para el lector judío (ya que se
acepta a nivel general que el Evangelio de Mateo fue escrito para hebreos y aún en
lengua hebrea según el testimonio de casi todos los padres de la Iglesia).
Hay que tener en cuenta, además, que Oriente puede designar la región de Babilonia, y
por lo tanto, para algunos autores, los magos, podrían corresponder a los llamados
en arameo ‫( מדנחאי‬Medinja’ey, “doctores babilónicos de la tradición oral”) cuya escuela
perduraría hasta entrado el siglo octavo de nuestra era12 en Babilonia, y quienes
conociendo la interpretación de lo dicho en Números 24:17 (cf. tárgum de
Onqlós/Onkelos sobre este pasaje), habrían sido guiados por Dios hasta el Mesías. En
este caso la estrella simbolizaría al mismo Mesías según el
lenguaje midrásico contemporáneo.

Año 1962. Las tradiciones se comercializan y los Magos de oriente descienden de su avión en el aeropuerto
de Barajas (Madrid, España).

Las tradiciones antiguas que no fueron recogidas en la Biblia ―como por ejemplo el


llamado Evangelio del Pseudo Tomás, o Evangelio de la infancia, del siglo II― son sin
embargo más ricas en detalles. En ese mismo evangelio apócrifo se dice que tenían
algún vínculo familiar, y también que llegaron con tres legiones de soldados: una
de Persia, otra de Babilonia y otra de Asia (sic).
En el último libro escrito por el papa Benedicto XVI sobre Jesús de Nazaret, «La
infancia de Jesús», se menciona de tal modo a los Reyes Magos que algunos han
sostenido que probablemente no venían de Oriente, sino de Tartessos, una zona que
los historiadores ubican entre Huelva, Cádiz y Sevilla (Andalucía, España). El texto, sin
embargo, dice: «Así como la tradición de la Iglesia ha leído con toda naturalidad el
relato de la Navidad sobre el trasfondo de Isaías 1:3, y de este modo llegaron al
pesebre el buey y el asno, así también ha leído la historia de los Magos a la luz
del Salmo 72:10 e Isaías 60. Y, de esta manera, los hombres sabios de Oriente se han
convertido en reyes, y con ellos han entrado en el pesebre los camellos y los
dromedarios». Eso relata Benedicto XVI y continúa: «La promesa contenida en estos
textos extiende la proveniencia de estos hombres hasta el extremo Occidente
(Tarsis, Tartessos en España), pero la tradición ha desarrollado ulteriormente este
anuncio de la universalidad de los reinos de aquellos soberanos, interpretándolos como
reyes de los tres continentes entonces conocidos: África, Asia y Europa».13 Al respecto,
el secretario general de la Conferencia Episcopal, monseñor Juan Antonio Martínez
Camino, recordó que en ningún momento el Santo Padre dice que «los Reyes Magos
fueran andaluces, lo que explica el Papa es que los magos no eran otra cosa que
buscadores de la verdad. Representaban a todos los hombres buscadores de Dios de
todos los tiempos y de todos los lugares y eso incluía a todo el mundo hasta entonces
conocido y cuyo límite occidental era Tartessos, en la península ibérica», explica. Al
mencionar a Tartessos, Benedicto XVI se refiere a este límite geográfico que tenía el
mundo en el siglo I a. C, «los Magos son de Oriente pero que en esa inquietud por
buscar a Dios están representados los hombres buscadores de Dios de todos los
lugares y de todos los tiempos».14

Historia y leyenda

La Adoración de los Reyes Magos por El Greco, 1568.

La historia narrada en el Evangelio de Mateo, cuenta que los magos vinieron de Oriente
guiándose por una estrella, la cual los condujo hasta Belén (de ahí el nombre
de estrella de Belén).
Antes de llegar, visitaron al rey Herodes el Grande en la ciudad de Jerusalén, a quien
interrogaron por el nacimiento del «Rey de los judíos». El monarca, después de
consultar a los escribas versados en la Biblia, les aseguró que el niño debía nacer en la
pequeña ciudad de Belén, como establecía la profecìa de Miqueas. Agregó,
astutamente que, de regreso, hablaran con él para darle noticia del sitio exacto donde
se encontraba dicho niño y, así, poder ir él también a adorarle. En realidad, según el
relato bíblico, su intención era darle muerte.
En Belén, los magos volvieron a ver la estrella, hallaron a Jesús recién nacido y lo
adoraron; ofreciéndole oro (representando su naturaleza real, como presente conferido
a los reyes), incienso (que representa su naturaleza divina, empleado en el culto ) y
mirra (un compuesto embalsamador para los muertos, representando el sufrimiento y
muerte futura de Jesús). Parece ser que por el hecho de traer tres dones, se dio por
sentado que eran tres los personajes que los traían. Aunque también en algún
momento las distintas tradiciones han señalado que eran cuatro, siete y hasta doce
magos. Como antecedente, Seleuco I Nicátor ofrendó oro, incienso y mirra a Apolo en
su santuario de Dídima, en el 288 a. C.15
Al regreso, advertidos los magos por un sueño de las intenciones del rey, no volvieron
a Jerusalén. Herodes, entonces, ordenó dar muerte a todos los niños menores de dos
años residentes en Belén, episodio conocido como la matanza de los inocentes. Un
nuevo mensaje celestial, advirtió a José de la amenaza y este, llevando a María y a
Jesús, huyó a Egipto.
La primera vez que surge el nombre con que hoy conocemos a los Reyes Magos es en
la iglesia de San Apolinar Nuovo, en Rávena (Italia). El friso de la imagen está
decorado con mosaicos de mediados del siglo VI que representan la procesión de las
Vírgenes. Esta procesión está conducida por tres personajes vestidos a la moda persa,
tocados con un gorro frigio y su actitud es la de ir a ofrecer lo que llevan en las manos a
la Virgen que está sentada en un trono y tiene al Niño en la rodilla izquierda. Encima de
sus cabezas se pueden leer tres nombres, de derecha a izquierda: Gaspar, Melchior,
Balthassar...

Mosaico de San Apolinar Nuovo (Rávena, Italia).

Poco a poco la tradición ha ido añadiendo otros detalles a modo de simbología: se les
ha hecho representantes de las tres razas conocidas en la antigüedad, representantes
de las tres edades del hombre y representantes de los tres continentes (Asia, África y
Europa).
La llegada de los Reyes Magos es un tema tratado también en los evangelios
apócrifos. Según la tradición esotérica aplicada al cristianismo, estos personajes
procedían del lugar donde se encontraba el Preste Juan.
Otra leyenda cuenta que, después de la resurrección de Jesús, el apóstol Tomás los
halló en el reino de Saba, donde fueron por él bautizados y consagrados obispos.
Después fueron martirizados en el año 70 y depositados en el mismo sarcófago. Allá
fue Santa Elena a buscarlos, y halló tres cuerpos coronados, dando por sentado que se
trataría de los Reyes Magos, por lo que los trasladó a Constantinopla.
Posteriormente, Federico I Barbarroja, en el siglo XII, los trasladó a Colonia, Alemania,
donde hoy reposan con las coronas que supuestamente llevaron durante su existencia
(según la tradición, los relicarios con sus presentes se hallan en el monasterio de San
Pablo del Monte Athos). Miles de peregrinos empezaron a llegar a Colonia, lo que
propició que en 1248 se iniciara la construcción de la catedral de Colonia, que llevaría
más de 600 años terminarla. Hoy día es uno de los monumentos góticos más
impresionantes de Europa. Colonia se ha convertido junto con Roma y

También podría gustarte