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Manual Grumis 2016

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Misiones Salesianas

México – Guadalajara

Oaxaca 2016

“El perdón es una fuerza que resucita a una vida nueva e infunde el
valor para mirar el futuro con esperanza”.
S.S. Francisco
PLANEACIÓN DOMINGO DE RAMOS

Posibles actividades:
Oración mañana Desayuno Catequesis niños, jóvenes, adultos Visiteo Comida Juegos
Cantos Dinámicas Celebración bendición de ramos Eucaristía Rosario Cena
Evaluación Oración
HORA ACTIVIDAD RESPONSABLE MATERIAL OBSERVACIONES
PLANEACIÓN LUNES SANTO

Posibles actividades:
Oración Desayuno Catequesis niños, jóvenes, adultos Visiteo Comida Juegos
Cantos Dinámicas Eucaristía Rosario Preparar siguiente día Preparar celebración del jueves
Cena Evaluación Oración
HORA ACTIVIDAD RESPONSABLE MATERIAL OBSERVACIONES
Tema: Misericordiosos como el Padre en la Familia (Niños)
Objetivo: Que los niños comprendan que la familia es uno de los grandes regalos que nos ha dado
Dios, y que es precisamente nuestra familia la que nos permite estar cerca de Dios, por tal motivo tenemos
que cuidarla y respetarla, tenemos que vivir con misericordia dentro de ella.

Experiencia:
Se realizará una dinámica llamada el buen pastor. Para tal dinámica ocupamos que un misionero realice el
papel de buen Pastor, el cual se encargará de pastorear a las ovejas, las cuales serán todos los niños. Las
ovejas seguirán al buen pastor y harán lo que él les diga. También algunos misioneros fungirán de lobos,
los cuales después de un tiempo irán corriendo a atacar al rebaño.

Cuando los lobos ataquen las ovejas rodearán y agarrarán al pastor, estarán lo más cerca que se pueda
de él para no ser llevadas y devoradas por los lobos. Los lobos para comerse a las ovejas las tendrán que
apartar del grupo, y el pastor y las demás ovejas lo deben de impedir. La oveja apartada no podrá volver
al grupo.

Profundización:
Una vez terminada la dinámica se junta al grupo y se reflexión en conjunto la experiencia que se ha
realizado con ellos, lo podemos hacer ayudados de las siguientes preguntas. ¿Qué sucedió en la dinámica?
¿cómo me sentía cuando me encontraba cerca del pastor y los lobos atacaban? ¿qué sucedió con aquellos
que fueron alejados del rebaño? ¿qué significado podemos encontrar en tal dinámica? ¿Representa tal
dinámica algo de nuestra vida diaria?

En tal experiencia descubrimos que hay algo que une fuertemente a las ovejas y las mantiene organizadas
para su beneficio, en tal juego hay un centro de unidad que todas las ovejas comparten. Siempre y cuando
las ovejas se encuentren cerca del pastor, ellas estarán sanas, protegidas y felices de estar juntas, pero
sobretodo, regocijantes por estar con el pastor que las cuida y las ama.

Palabra de Dios:
(Para el siguiente momento, invitar a los participantes a tomar una posición adecuada y preparar el
ambiente de manera propicia para escuchar la Palabra de Dios; y como un signo más, pasa alguien a tomar
la Biblia como un atril, y otro sostiene una vela encendida) Juan 10 11 – 17, 1 Juan 4 16

Profundización:
¿Qué personajes son los más importantes en la lectura del evangelio? ¿Qué palabra de la que escuchamos
nos llamó más la atención? ¿Cuál crees que es el mensaje que Dios nos quiere transmitir con ésta lectura?
¿Qué relación existe entre la lectura y la dinámica del inicio?

El buen pastor en nuestra vida diaria se puede asemejar a nuestra familia, la cual siempre estará ahí
presente para nosotros buscando en cada momento lo mejor para nosotros. Si nosotros nos mantenemos
cerca de nuestra familia nos sentimos protegidos, amados, felices, etc. Si nos alejamos de ella nos
hayamos perdidos, tristes, desprotegidos, lejos de Dios, etc.

Contenido:
Dios es la razón por la que nos congregamos durante esta Semana, él es la razón por la que estamos
juntos, y es la razón de nuestra propia vida.

Dios es amor y quien permanece en el amor permanece en Dios. Nosotros nos encontramos con la
presencia divina por medio de nuestra familia, puesto que en nuestra familia vemos y palpamos a Dios que
nos ama incondicionalmente y que en cada instante busca lo mejor para nuestro desarrollo.
Dentro de las sagradas escrituras se nos dice que ¡cómo podemos decir que amamos a Dios a quien no
vemos y no amar a nuestros hermanos a quien sí vemos! Una forma muy concreta de amar a Dios y de
permanecer unido a él es amando a nuestra familia. Si queremos permanecer unidos con Dios fuertemente,
se debe de manifestar un gran cariño primeramente con quienes están a nuestro lado en cualquier
circunstancia, la familia.

Si permanecemos con Jesús, necesariamente nos encontraremos en unidad con nuestra familia, si
permanecemos con Jesús tendremos vida en abundancia, si queremos estar siempre al lado de Jesús
debemos de ser misericordiosos con nuestra familia.

La misericordia como perdón de las ofensas es la otra cara del amor divino. Si la misericordia como
compromiso construye la fraternidad, el perdón mutuo reconstruye y consolida la fraternidad. Evita que la
división y el rencor que producen las ofensas paralicen a la familia. ¿Qué es la reconciliación cristiana? La
reconciliación es la vuelta a la amistad o a la fraternidad entre personas o familias, llamados a ser hermanos
que han roto esa fraternidad o esta amistad. La reconciliación es más grande que la “conciliación” (que es
un acuerdo, más o menos provisional entre las partes): es la restauración de la fraternidad destruida. Por
eso la reconciliación adquiere la forma de un “regreso”, de una reconstrucción, de un reencuentro

Es una experiencia que nos hace encontrarnos con el rostro misericordioso de Cristo.

Actualización:
En ciertas cosas nos hemos alejado de nuestra familia por medio de las ofensas o de los disgustos que le
hacemos pasar. Tales ofensas nos apartan de Dios, lo cual nos hace sentirnos indefensos, en peligro,
tristes, etc. Todos sin duda en más de alguna otra ocasión hemos realizado actos que han ofendido a
nuestra familia, y frente a tales circunstancias es muy importante el ser misericordiosos como el padre es
misericordioso, es decir, hay que ir a buscar el perdón de nuestros actos.

Cada niño trae a la mente los momentos en los que ha hecho algo que ha ofendido a su familia, y por
consiguiente se ha alejado de ella y al alejarse de la familia se aleja de Dios, estando a merced del mal.

Respuesta:
A cada niño se le da una hoja, en la cual escribirá una carta y realizará un bonito dibujo pidiendo perdón a
su familia por las veces en las que la ha ofendido o se ha apartado de ella. Una vez terminada la carta se
llevarán el compromiso de entregarla a su familia y darles un fuerte abrazo, como signo de que la quiere y
la reconoce como un gran regalo de Dios.

Oración:
Padre Santo y misericordioso, envía tu Espíritu de amor hacia nosotros reunidos en tu nombre y perdona
nuestros muchos pecados, purifícanos, sánanos, restáuranos, renuévanos con la Sangre Redentora de tu
Hijo; ayúdanos a tener un corazón misericordioso como el suyo, un corazón humilde y generoso capaz de
amar, capaz de perdonar y pedir perdón, arranca de nosotros el corazón de piedra y danos un corazón de
carne para amar infinitamente a la familia que me has otorgado, y en la cual me puedo encontrar contigo.
Amén.
Tema: Misericordiosos como el Padre en la Familia (Jóvenes)
Objetivo: Que el joven se reconozca a sí mismo como parte de un núcleo familiar, conociendo las
características de la familia cristiana y se comprometa a seguir el ejemplo de misericordia que Cristo nos
deja dentro de su familia.

Experiencia:
Realizar algunas de las dos dinámicas propuestas:

- Árbol genealógico familiar: El animador pide a cada joven realizar un árbol genealógico de su
familia (desde sus bisabuelos, si es posible), después lo expone frente al grupo. Los trabajos
pueden pegarse después a la vista para que sirvan de ambientación durante el tema.

- Escudo de armas familiar: Todo escudo representa algo. Cada joven realizará un escudo para
representar a su familia, evidenciando sus costumbres y características propias que la definen.
Ejemplo, en la antigüedad, una familia guerrera era representada por una espada o un águila en
su escudo.

Profundización:
Una vez que se compartieron los trabajos de cada uno, se realiza una pequeña reflexión apoyado de las
siguientes preguntas. ¿Qué personas forman mi familia? ¿Cuáles son las características de mi familia?
¿Existen las familias perfectas? ¿Por qué? ¿Hay problemas en mi familia? ¿Cuáles? ¿Ayudo a mi familia?
¿Cómo?

Palabra de Dios:
(Para el siguiente momento, invitar a los participantes a tomar una posición adecuada, y como signo que
pase alguien a tomar la Biblia como un atril, y otro a que sostenga una vela encendida) Lucas 15 11 – 32

Profundización:
¿Me sentí identificado con algún personaje? ¿Por qué? ¿He actuado como el hijo pródigo? ¿Cuándo?

Jóvenes, cuántos de nosotros vivimos como este hijo pródigo que no quiere convivir con sus hermanos, su
padre, sus amigos y se hunde en una soledad total. Pensemos por un momento cuántos estamos presos
por nuestras acciones y vamos por las calles sin sentido. Ya basta. Hoy te invitamos a que a través de esta
lectura llena de misericordia puedas entender la grandeza del amor de Jesús. Ese amor que Él llevó hasta
su Pasión en un Jueves Santo desbordando regalos para nosotros. Acércate hoy a Jesús y pídele perdón
por todo eso que te ha mantenido preso, por esas malas acciones que te tienen muerto en vida, dile como
el hijo pródigo “Padre, he pecado contra el cielo y contra ti” y experimenta su misericordia, te aseguro que
Él está ahí listo para ti y con los brazos abiertos te dará la dignidad una vez más.

Contenido:
Dios eligió nacer en una familia humana, que formó él mismo. La formó en un perdido pueblo de la periferia
y no en una gran ciudad. Incluso los evangelios manifiestan que el lugar en donde nació Jesús no tenía
fama ni importancia, decían: ¿De Nazaret puede venir algo bueno? Pues bien, precisamente desde allí,
desde esa periferia comenzó la historia más santa y más buena, la de Jesús entre los hombres.

Cada familia cristiana – como hicieron María y José – puede ante todo acoger a Jesús, escucharlo, hablar
con él, custodiarlo, protegerlo, crecer en él; y así mejorar el mundo. Hagamos espacio en nuestro corazón
y en nuestras jornadas al Señor. Así hicieron también María y José, y no fue fácil: ¡cuántas dificultades
debieron superar! No era una familia fingida, irreal.
La familia de Nazaret nos compromete a redescubrir la vocación y la misión de la familia, de toda familia.
Y, como sucedió en esos treinta años en Nazaret, así puede suceder también para nosotros: hacer volverse
normal el amor y no el odio, hacer cotidiano la ayuda mutua, la generosidad y no la indiferencia o la
enemistad.

Actualización:
Realizar la siguiente dinámica. “apóyate en mí”
Se formarán equipos de 4 integrantes, de los cuales uno llevará los ojos vendados, otro, con ambas manos
atadas a la espalda, un tercero con un pie doblado de tal forma que sólo pueda usar el otro pie y el último
no podrá hablar en ningún momento. El objetivo del juego es que unidos como equipo recorran un camino
con obstáculos y lleguen a la meta. Deberán ser guiados por el mudo.

Una vez realizada la actividad, se realizan las siguientes preguntas: ¿Te fue fácil recorrer el camino? ¿Qué
hicieron como equipo para lograr su objetivo? ¿Cuál fue la mayor dificultad con la que te encontraste? ¿Las
familias también tienen que pasar por obstáculos?

Respuesta:
Todos nosotros formamos parte de una familia. Toda familia pasa por momentos difíciles, como en la
dinámica. Y todos tenemos nuestros propios defectos y limitaciones. Al igual que en el recorrido, hay
algunos que son mudos, ciegos, cojos, etc. Y nos corresponde estar ahí para apoyarnos y salir adelante.
No se vale distanciarse de la familia. Se trata de ser misericordiosos, que consiste en sentir las necesidades
del otro, sentir su sufrimiento y ayudarlo de corazón, sin esperar nada a cambio, sin actuar por interés o
por conveniencia, para atravesar juntos cualquier obstáculo.

Compromiso:
Se invita a los jóvenes a que cada uno haga un compromiso. ¿Cómo voy a apoyar a mi familia a partir de
ahora? ¿Qué actitud o qué forma de ser voy a cambiar?

Oración:
Ahora, expresemos a Dios nuestra respuesta, nuestro deseo de cambiar tanto exterior como interiormente.
Hagamos un momento de oración en donde le expresemos este anhelo de nuestro corazón, aunque él ya
sepa lo que nosotros deseamos arduamente.
Tema: Misericordiosos como el Padre en la Familia (Adultos)
Objetivo: Que los padres de familia logren descubrir las características de una auténtica misericordia
por medio del documento de apertura del año conciliar “Misericordie vultus”, para que puedan reconocer
que en la familia está el primer terreno para aprender y vivir la misericordia, como un estilo de vida y como
primer santuario donde se experimenta el amor.

Experiencia:
En una cartulina hacer una división de dos columnas, una la nombraremos “hay misericordia” y la otra “no
hay misericordia. Se les invita a los papás que, por medio de una lluvia de ideas, vayan llenando los
recuadros, poniendo acciones familiares en las cuales no habría misericordia, y otras en las que sí se
actuaría con misericordia.

Profundización:
Una vez que tenemos la cartulina llena de acciones misericordiosas y otras no misericordiosas en la familia,
los invitamos a reflexionar lo que han dicho por medio de las siguientes preguntas. ¿Por qué tal acción no
es misericordiosa? ¿Por qué en ocasiones no actuamos con misericordia? ¿Cómo podría modificar una
acción para que sea misericordiosa? ¿Cómo es más fácil actuar en la familia, con misericordia o sin
misericordia? ¿Por qué?

Palabra de Dios:
Se escucha con atención y reverencia la siguiente parábola del hijo pródigo. Lucas 15 11 – 32

Profundización:
Se reflexiona la lectura del Evangelio ayudado del siguiente recuadro, en el cual comparamos la lectura
con las obras de misericordia y nos hacemos la siguiente pregunta, ¿En qué se parece su paternidad a la
del padre misericordioso?

Obras de
Parábola Reflexión Reflexión
misericordia
Dame la parte de la Pedir la herencia Cuántas veces
herencia que me antes de la muerte del Sufrir con paciencia ustedes papás han
corresponde. Y él les padre era la ofensa los defectos del otro experimentado ésta
repartió la herencia más grande parte del Texto bíblico

¿Con qué frecuencia


Estando él todavía
esperan con paciencia
lejos, le vio su padre
Mantener una actitud Dar asilo al necesitado que los hijos se den
y, conmovido, corrió,
de espera y sin rencor Perdonar las injurias cuenta de su error?
se echó a su cuello y
¿Perdonan a los hijos
le besó efusivamente
cuando piden perdón?

¿Durante cuánto
Traer aprisa el mejor La generosidad en el tiempo vives dando
Dar de comer al
vestido y vestirlo, amor y el respeto estas acciones de
hambriento
ponerle un anillo en ante la decisión amor a tus hijos?
Dar de beber al
su mano y unas tomada por el hijo, no ¿Dejo ir a mis hijos
sediento
sandalias en los pies hay juicio, solo amor. cuando ya han
madurado?
Contenido:
La misericordia en las familias es el acto de amor más grande que dignifica a las personas y que fortalece
a cada una en el ejercicio constante de ponerse en el zapato del otro, la misericordia es el acto de reconocer
que somos seres perfectibles y que estamos en un constante proceso de ir siendo mejor persona, y ésta
se realiza mediante la vivencia de las obras de misericordia.

Las obras de misericordia que más se viven en la Familia son las espirituales, por lo tanto, la educación y
el acompañamiento que se haga a estas 7 acciones espirituales es el resultado de vivir las obras de
misericordia corporales. Las obras de Misericordia espirituales son en efecto el sostén y el cimiento de una
casa, se vienen asemejando a las columnas que sujetan el techo, el cual viene siendo las obras de
misericordia corporal.

“La Misericordia es la viga maestra que sostiene la vida de la Iglesia y las Familias”.

Actualización:
En parejas comparten lo que significa misericordia, y cómo lo viven en su familia o cómo lo pueden empezar
a vivir.

Compromiso:
Se les invita a tomar la actitud del padre que escuchamos en la parábola, hay que ser misericordiosos
como nuestro padre celestial es misericordioso.

Oración:
Señor, Dios nuestro, tu nos has elegido paras ser tus santos y tus predilectos. Revístenos de
sentimientos de misericordia de bondad, de humildad, de dulzura, de paciencia.

Ayúdanos a comprendernos mutuamente cuando tenemos algún motivo de queja lo mismo que tú
Señor, nos has perdonado.

Sobre todo, danos esa caridad, que es vínculo de perfección. Que la paz de Cristo brille en nuestros
corazones. Esa paz que debe reinar en la unidad de tu cuerpo místico.

Que todo cuando hagamos en palabras o en obras sea en nombre del Señor Jesús por quien sean dadas
las gracias a ti Dios Padre y Señor Nuestro. Amén.
EVALUACIÓN LUNES SANTO
Se sugiere dejar un tiempo para contestar a nivel personal, y posteriormente compartir
cómo se evalúan como grupo, y de igual manera, cómo evalúan la participación de la
comunidad.

I. Catequesis

II. Celebraciones y oraciones

III. Visiteo

IV. Juegos, cantos y dinámicas

V. Trato y relaciones como equipo

VI. Otro

VII. Compromiso o aspecto a mejorar para mañana


PLANEACIÓN MARTES SANTO

Posibles actividades:
Oración Desayuno Catequesis niños, jóvenes, adultos Visiteo Comida Juegos
Cantos Dinámicas Eucaristía Rosario Preparar siguiente día Preparar celebración del viernes
Cena Evaluación Oración
HORA ACTIVIDAD RESPONSABLE MATERIAL OBSERVACIONES
Tema: Misericordiosos como el Padre con los Amigos (Niños)
Objetivo: Que el niño descubra que solamente cuando se encuentra y comparte la vida con los
verdaderos amigos, es el momento en el que surge el amor misericordioso, y cuando hay amor no solo se
piensa en sí mismo, sino que se ve por el bienestar del otro.

Experiencia:
En hojas blancas se dibuja un corazón, en el cual se escribirá la frase “Nadie tiene amor más grande que
el que da la vida por sus amigos”. Después lo cortamos en cuatro partes en forma de rompecabezas y se
esconden las piezas alrededor del lugar de las catequesis, debe haber una pieza por niño. A continuación,
se les da la indicación a los niños de que deben de buscar sólo una parte de un rompecabezas escondido,
y una vez encontrada, deben juntarse con tres amigos más, con la finalidad de poder armar el
rompecabezas y descubrir la frase que viene oculta en él.

Profundización:
Después de que cada grupo haya completado el corazón y leído la frase que venía en él inscrito se les
invita a reflexionar con las siguientes preguntas ¿Qué significa la frase en el corazón? ¿Había escuchado
esa frase antes? ¿Cómo me sentí al completar el corazón? ¿Qué significado puedo encontrar a la actividad
que acabo de realizar?

Todos anhelamos un mejor amigo que nos acompañe de manera incondicional en los momentos de
dificultad, y también en los momentos de gran alegría. Todos tenemos la necesidad de compartir la vida,
todos deseamos tener amigos con quienes compartir el amor, y encontrar esos amigos para toda la vida
no es algo que se logra de un momento a otro, implica ciertamente una búsqueda, pero una búsqueda que
vale la pena cual al fin logro embonar con alguien. En la dinámica nos pusimos en búsqueda para encontrar
a nuestros amigos, y una vez encontrados pudimos descubrir el mensaje de amor, pudimos encontrar el
gran tesoro de la amistad.

Palabra de Dios:
Se lee con dignidad y respeto la siguiente cita bíblica. Juan 13 33 – 35

Profundización:
¿De qué trato la lectura del evangelio? ¿Qué me llamó la atención de las palabras de Jesús? ¿Cuál es el
mandamiento que nos da Jesús? ¿Por qué será importante el mandamiento nuevo de Jesús? ¿Cómo se
relaciona las palabras de Jesús con la dinámica del inicio?

Jesús nos invita a vivir en el amor, nos invita a que compartamos entre nosotros el más grande regalo que
nos ha dado, el regalo del amor misericordioso, el regalo de poder compartir la vida con las personas que
quiero. Los amigos son un gran tesoro que Dios pone en nuestro camino para compartir la vida con alegría,
para transmitir el amor con el que Dios nos ama.

¿Jesús puede ser nuestro mejor amigo? ¿Qué hace Jesús para tener nuestra amistad? Ciertamente dio
su vida por nosotros, y es por ello que podemos decir con toda seguridad que Jesucristo es nuestro mejor
amigo, el único que fue capaz de dar su vida por nosotros, siendo aún pecadores. El amor no debe ser
fingido, éste debe ser sincero, sin hipocresías. De ahí que el fruto del amor es la verdadera amistad.

Contenido:
Se escribirán letreros con las siguientes necesidades: (Necesito un abrazo, Necesito una sonrisa, Necesito
hablar contigo, Necesito cosquillas, Necesito que me hagas reír, Necesito cariño, Necesito que te
preocupes por mí, Necesito una palmada en el hombro, Necesito compañía).
Se les pide a los niños que formen un círculo y en la espalda se les irá colocando el letrero con alguna
necesidad, una vez que todos lo tienen se les pide que lean en el otro la necesidad y traten de solucionarla,
todo será en completo silencio, al final tendrán que descubrir cuál es su necesidad.

Cuando se tiene un amigo se comparte lo más fundamental en la persona del hombre, se comparte el
amor, y no se trata sólo de recibir, sino también de compartir todo ese amor que recibo de Dios y de las
personas que me rodean.

Actualización:
El tener un amigo conlleva un gran compromiso por nuestra parte, el cual consiste en compartir con ellos
el cariño que me brindan todas las personas a mi alrededor. Tener un corazón misericordioso no significa
tener un corazón débil, quien desea ser misericordioso necesita un corazón firme, fuerte, etc. pero sobre
todo un corazón abierto a Dios para recibir amor.

Dios nos ha dado un corazón fuerte para amar a nuestros amigos con un amor semejante al del Padre, nos
ha dado un gran corazón para poder compartir la vida con ellos, y así vivir en comunión continua, comunión
como la del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

Se es amigo no de palabra, sino de acciones concretas, acciones que realmente demuestren la gran
amistad que le tengo a mi prójimo, y tales acciones son tan sencillas y hermosas que van desde dar un
abrazo, manifestar una sonrisa, dar una palmada al hombro, perdonar a quien me ofendió, etc.

Oración:
En el lugar designado para la oración, colocamos un crucifijo y a su lado un gran corazón, que representará
el corazón de Cristo, el cual se encuentra lastimado por las veces en que lo hemos ofendido, ofendiendo a
nuestros amigos (Dentro del corazón se escribirán frases que lo hayan lastimado. Ejemplo. Ofender a un
amigo, pelear con mis compañeros, mentir a mi mejor amigo, etc.) Se harán varios curitas pequeños que
se colocarán cerca del corazón.

Estamos reunidos con Jesús herido y lastimado, su cuerpo quedó lleno de heridas. Y en cada herida, quiere
curar las de todos los niños que sufren injustamente. ¿Te imaginas todo lo que podríamos curar si todos
estuvieran dispuestos a ayudar? Aquí hay algunos curitas, quien quiera, puede levantarse, tomar uno,
pedirle perdón por lo malo que hemos hecho y ponerlo en las heridas de Jesús, para que las heridas sanen".
Tema: Misericordiosos como el Padre con los Amigos (Jóvenes)
Objetivo: Que el joven conozca lo que significa ser misericordioso como el Padre es misericordioso,
para que conociéndolo y comprendiéndolo pueda actuar a semejanza del Padre con sus amigos con
quienes convive.

Experiencia:
Realizar la siguiente dinámica

- Tiro al blanco: Se colocan tres recipientes a una distancia considerable y se le dará un valor
diferente a cada uno. El reto será que por equipos se lancen objetos (piedras, pelotas, etc.) a dichos
recipientes con el afán de obtener la mayor puntuación posible.

Profundización:
Una vez que se ha concluido con la actividad se reflexiona ayudado de las siguientes preguntas. ¿Cómo
me sentí cuando atiné al recipiente? ¿Qué pasaba cuando fallaba? ¿Por qué incluso después de fallar
seguía intentando? ¿Cómo me sentí al trabajar en equipo? ¿Cómo se sintió el equipo ganador?

¿Qué entiendes por misericordia? Una vez que hayan respondido, se les comenta lo siguiente: "La
misericordia es el amor que se esfuerza por aliviar la miseria de otro. Es un amor activo, derramado sobre
otros para sanar, consolar, confortar, perdonar y quitar el sufrimiento. Es el amor que Dios nos ofrece y es
el amor que él exige de cada uno de nosotros hacia el prójimo”. Dios nos otorga su misericordia, su perdón
y amor de manera incondicional, no importa las veces que nos equivoquemos o nos alejemos de él, él
siempre está ahí para nosotros.

Palabra de Dios:
Se lee con dignidad y respeto la siguiente parábola. Mateo 18 21 – 35

Profundización:
¿Qué situación sucede en la parábola que narra Jesús? ¿Cuál será la enseñanza principal que quiere
manifestar? ¿Algo en particular que me haya llamado la atención?

Solamente dando misericordia o siendo misericordiosos con quienes convivimos, podemos esperar recibir
misericordia. Al final de nuestra vida seremos juzgados según nuestras acciones misericordiosas, seremos
juzgados según nuestra capacidad de perdonar y de amar a nuestro prójimo, a nuestros amigos.
Bienaventurados los misericordioso porque alcanzarán misericordia.

Contenido:
¡Nos hace tanto bien volver a Él cuando nos hemos perdido! Insisto una vez más: Dios no se cansa nunca
de perdonar, somos nosotros los que nos cansamos de acudir a su misericordia. Aquel que nos invitó a
perdonar «setenta veces siete» nos da ejemplo: Él perdona setenta veces siete. Nos vuelve a cargar sobre
sus hombros una y otra vez. Nadie podrá quitarnos la dignidad que nos otorga este amor infinito e
inquebrantable. (S.S. Francisco)

Aprendamos a ser misericordiosos como el Padre del cielo es misericordioso, aprendamos a amar y a
perdonar a las personas con las que más tiempo convivimos y compartimos la vida, aprendamos a ser
buenos amigos entre nosotros y a solucionar los conflictos que se nos presenten durante nuestra vida.
Vivamos siempre cercanos a Dios, y la forma más concreta de hacerlo, es vivir amándonos los unos a los
otros como Jesús nos ama.
Actualización:
Se formarán grupos de 4 integrantes, y a cada uno se le dará una frase tomada de la Biblia, la cual tendrán
que leer atentamente para que la puedan entender, y después pensarán una acción concreta durante su
vida para poderla poner en práctica. Al finalizar comparten lo reflexionado con el grupo.
- “Les doy un mandamiento nuevo, que se amen los unos a los otros como yo los he amado” (Juan
13, 34)
- “Sean compasivos, como su Padre es compasivo" (Lucas 6, 36)
- “Ciertamente Él perdonará nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a quienes nos
ofenden” (Mateo 6, 12-14)
- “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia” (Mateo 5, 7)
- “El juicio será sin misericordia para el que no ha tenido misericordia" (Santiago 2, 13)

Respuesta:
Durante esta semana tenemos la gracia de acercarnos nuevamente a nuestro Padre que tanto nos ama y
que nos espera con los brazos abiertos para que vayamos a su encuentro. Acerquémonos a él imitando su
ejemplo, siendo misericordiosos, viviendo siempre en consonancia con el amor que él nos manifiesta.

En el centro de una cartulina se escribirá la frase “Ser misericordioso con mis amigos” y cada joven se irá
acercando a escribir un compromiso palpable, es decir, que pueda cumplir durante la semana, para ser
mejor amigo, para perdonar y amar como Jesús. La cartulina con el compromiso se colocará bajo el altar,
como signo de que nos comprometemos con Dios a vivir siempre en el amor, especialmente con nuestros
amigos.

Oración:
Tú conoces, Señor, mi corazón y sabes que todo cuanto me llegues a dar, deseo emplearlo en provecho
de mis amigos y por ellos consumirlo. Yo mismo me gastaré de buena gana por ellos. Que así sea, Señor
mío, que así se haga. Mis sentidos y mis palabras, mi descanso y mi trabajo, mis actividades, mi muerte,
mi vida, mi salud, mi enfermedad; todo cuanto soy, mi vivir, sentir y pensar, todo lo gastaré por ellos, todo
lo entregaré para ellos, por quienes Tú mismo te entregaste. Tú, Dios nuestro, misericordioso, escucha mis
ruegos en favor de aquellos a quienes amo, y dame la gracia de poder ser misericordioso como tú, dame
la gracia de poder amar y perdonar como tú nos has enseñando. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Tema: Misericordiosos como el Padre con los Amigos (Adultos)

Objetivo: Que los adultos logren reconocer que la vivencia de la misericordia también se puede dar
entre los amigos de diferentes maneras, y reconozcan la importancia de una verdadera amistad
misericordiosa para juntos orientarse por el buen camino y apoyarse en los diferentes obstáculos que la
vida nos presente.

Experiencia:
En un breve momento de silencio pedirles a los adultos que traigan a la mente a su mejor amigo y revivan
los mejores acontecimientos que han vivido juntos, haciendo énfasis en los momentos alegres, difíciles, en
los que se han apoyado, etc.

En un segundo momento decir que compartan tal experiencia tan gratificante con quien tengan al lado.

Profundización:
Cuando haya finalizado el tiempo de compartir hacer una reflexión ayudado por las siguientes preguntas:
¿Fue fácil traer a la mente los recuerdos de mi amigo? ¿Qué fue lo que más me gustó al momento de
pensar en él? ¿Al momento de compartir, la experiencia de amistad del otro es semejante a la mía? ¿Por
qué es importante el tener amigos?

La misericordia como un amor incondicional hacia los demás no solamente es una actitud que se puede
vivir dentro de la familia, la misericordia es un amor que se desborda por su inmensidad hacia toda la
humanidad, y al ser así, Dios mismo nos llama a que compartamos y vivamos el amor, no limitándonos
únicamente a nuestro núcleo familiar, sino que ésta se expanda hacia los más posibles, y los amigos es
una tierra fértil en donde puede germinar y crecer la misericordia. Seamos misericordiosos como el padre
con nuestros amigos, con mi amigo.

Palabra de Dios:
Se lee con dignidad y respeto la siguiente cita bíblica. Mateo 22 36 – 40

Profundización:
¿Qué nos llamó la atención de la lectura del evangelio? ¿Resulta fácil el cumplir las palabras que nos pide
Jesús? ¿Qué implicaciones tiene el amar al prójimo? ¿Cómo puedo amar a mis amigos, en que acciones
concretas lo puedo demostrar?

Contenido:
El más grande mandamiento que nos puede manifestar Jesús sin duda es el amor, puesto que es una
actitud constante que él mismo vive en cada momento para con nosotros. Dios es misericordioso, es amor
y quien permanece en el amor permanece en Dios y Dios en él.

“La misericordia es en realidad el núcleo central del mensaje evangélico de Jesús de Nazaret, la
misericordia es el mismo nombre de Dios, el rostro con el que Él se reveló en la antigua Alianza y
plenamente en Jesucristo, encarnación del amor creador y redentor. Este amor de misericordia ilumina
también el rostro de la Iglesia y se manifiesta tanto mediante los sacramentos, en concreto, aquel de la
reconciliación, como con las obras de caridad, comunitarias e individuales. Todo lo que la Iglesia dice y
hace manifiesta la misericordia que Dios siente por el hombre”. (S.S. Francisco)

Misericordia es el nombre de Dios, vivir la misericordia con nuestro prójimo, y aún más con nuestros amigos
es el tema central del evangelio, seamos misericordiosos con las personas que queremos y que por ellos
están presentes a nuestro alrededor.
El Papa Francisco nos decía que la misericordia se puede manifestar concretamente en las obras de
misericordia en general, pero particularmente, se manifiesta de forma admirable en aquella que se refiere
a dar un buen consejo al necesitado.

Quien ama no se busca sólo a sí mismo, sino que busca el bien para las demás personas y aún más para
sus amigos, y es precisamente de ese amor de donde nace la necesidad de aconsejar sabiamente a
nuestros amigos, aconsejar porque somos misericordiosos como nuestro Dios.

Todos somos buenos para dar consejos a los demás, sobre todo cuando nos los piden. Pero la obra de
misericordia dar buen consejo al que lo necesita se trata de algo diverso.

Primero que nada, hay que tener presente que se trata una obra de misericordia; es decir, es la obra de
alguien que es capaz de compadecer con otro, con todo el corazón, y así consolar y fortalecer a uno que
sufre o que está en necesidad. Para poder dar consejo al que lo necesita hay que tener esa actitud. No se
trata de dar consejo al que no lo necesita, aunque yo crea que tenga necesidad; tampoco se trata de dar
consejo al quien no lo está pidiendo, aunque a veces las circunstancias lo requieran.

Dar buen consejo al que lo necesita es sobre todo una actitud del corazón; es querer ayudar, consolar,
estimular, fortalecer con un corazón bueno y magnánimo, buscando el auténtico bien de esa persona. De
allí tiene que nacer el consejo; pues cuando nace del amor y del interés por el otro, será bien recibido y al
mismo tiempo hará maravillas a la persona que busca una ayuda.

Dar consejo, sobre todo, implica ser capaces de dar y eso no siempre es fácil. Significa hacer memoria de
nuestra misma vida y experiencia, de nuestro sufrimiento, necesidad, incapacidad y limitaciones. Hacer
memoria no con tristeza, lamentaciones y hasta amargura, sino con gran confianza; reconociendo que Dios
estaba presente también en esos momentos de nuestra vida. Recordar que él nos acompañaba y nos
decía: estoy aquí y te amo.

Aconsejar es echar mano de esta sabiduría vivida, haciéndolo con humildad y sencillez. Es ofrecer y no
imponer, es compartir y no pontificar. Se trata, a fin de cuentas, de llevar a otros a tener la seguridad de
que Dios está cerca y Él será su luz y fortaleza siempre. En la oscuridad y confusión de una tempestad
sobre el mar, como en el brillo de un amanecer de paz y serenidad, Dios está presente.

Es saber que yo no tengo todas las respuestas, pero Dios sí.

Compromiso:
En silencio pensamos en uno de nuestros amigos que necesite un consejo o que veamos que está pasando
por alguna necesidad y pensamos en qué podríamos decirle o hacer para intentar ayudarlo, dejándonos
guiar siempre por la misericordia de Dios.

Oración:
Señor Jesucristo, tú nos has enseñado a ser misericordiosos como el Padre del cielo, y nos has dicho que
quien te ve, lo ve también a Él. Muéstranos tu rostro y obtendremos la salvación.

Tu mirada llena de amor liberó a Zaqueo y a Mateo de la esclavitud del dinero; a la adúltera y a la
Magdalena de buscar la felicidad solamente en una creatura; hizo llorar a Pedro luego de la traición, y
aseguró el Paraíso al ladrón arrepentido. Haz que cada uno de nosotros escuche como propia la palabra
que dijiste a la samaritana: ¡Si conocieras el don de Dios!
Tú eres el rostro visible del Padre invisible, del Dios que manifiesta su omnipotencia sobre todo con el
perdón y la misericordia: haz que, en el mundo, la Iglesia sea el rostro visible de Ti, su Señor, resucitado y
glorioso.

Manda tu Espíritu y conságranos a todos con su unción para que el Jubileo de la Misericordia sea un año
de gracia del Señor y tu Iglesia pueda, con renovado entusiasmo, llevar la Buena Nueva a los
pobres proclamar la libertad a los prisioneros y oprimidos y restituir la vista a los ciegos.

Te lo pedimos por intercesión de María, Madre de la Misericordia, a ti que vives y reinas con el Padre y el
Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén.
EVALUACIÓN MARTES SANTO
Se sugiere dejar un tiempo para contestar a nivel personal, y posteriormente compartir
cómo se evalúan como grupo, y de igual manera, cómo evalúan la participación de la
comunidad.

I. Catequesis

II. Celebraciones y oraciones

III. Visiteo

IV. Juegos, cantos y dinámicas

V. Trato y relaciones como equipo

VI. Otro

VII. Compromiso o aspecto a mejorar para mañana


PLANEACIÓN MIÉRCOLES SANTO

Posibles actividades:
Oración Desayuno Catequesis niños, jóvenes, adultos Visiteo Comida Juegos
Cantos Dinámicas Eucaristía Rosario Preparar siguiente día Preparar celebración del viernes
Cena Evaluación Oración
HORA ACTIVIDAD RESPONSABLE MATERIAL OBSERVACIONES
Tema: Misericordiosos como el Padre en la Comunidad (Niños)
Objetivo: Cultiva en los niños el hábito de ayudar al prójimo por más mínima que sea su necesidad
(emocional, física, económica o espiritual) para poder ser misericordiosos como nuestro Dios, y así ser
llamados dignamente hijos suyos.

Experiencia:
Se formarán equipos de 5 personas, los cuales tendrán que andar por un área delimitada buscando a algún
misionero que necesita de su ayuda. (enfermo o lastimado, triste, perdido, hambriento, analfabeta,
deshidratado, etc.) Al encontrar al misionero el equipo tendrá que observarlo con detenimiento para poder
saber qué necesidad está pasado, y que hacer para poder remediar su mal. Una vez que hayan atinado y
remediado la necesidad del misionero, éste les dará un dulce o algún premio semejante.

(En un lugar determinado se colocarán diferentes objetos que los niños utilizarán para solucionar la
necesidad del misionero. Ejemplo: agua, pan, mapa, venda, hojas para hacer un corazón, libreta, lápiz,
etc.)

Profundización:
Una vez que se ha concluido con la actividad se reflexiona ayudado de las siguientes preguntas.

¿Cómo me sentí cuando encontré al misionero necesitado? ¿Qué tuve que hace para poder remediar su
necesidad? ¿Cómo me sentí cuando lo ayudé? ¿Fue fácil o difícil el ayudar al misionero? ¿Alguna vez he
hecho algo semejante? ¿A qué personas he ayudado durante éste año?

La misericordia es el amor que se esfuerza por sanar las necesidades del otro, es el amor que se comparte
con el necesitado. La misericordia es el gran amor con que Dios nos ama en cada momento de nuestra
vida

¿Qué entiendes por misericordia? Una vez que hayan respondido, se les comenta lo siguiente: "La
misericordia es el amor que se esfuerza por aliviar la miseria de otro. Es un amor activo, derramado sobre
otros para sanar, consolar, confortar, perdonar y quitar el sufrimiento. Es el amor que Dios nos ofrece y es
el amor que él exige de cada uno de nosotros hacia el prójimo”. Dios nos otorga su misericordia, su perdón
y amor de manera incondicional, no importa las veces que nos equivoquemos o nos alejemos de él, él
siempre está ahí para nosotros.

Palabra de Dios:
Se lee con dignidad y respeto la siguiente cita bíblica. Mateo 25, 31 – 40

Profundización:
¿Qué sucede en la narración del Evangelio? ¿Qué buenas obras hicieron los de la lectura? ¿Por qué dice
Jesús que las buenas obras las hicieron con él? ¿Cuál será la enseñanza principal que Jesús quiere dar?
¿Algo en particular que me haya llamado la atención?

¿Qué tienen en común dar de comer, dar de beber, dar de vestir, acoger, visitar al necesitado? Todas son
obras de caridad, todas son obras de misericordia, todas son obras de amor. Y sobre ellas es lo que el
Señor nos va a preguntar el último día, si las cumplimos o no.

Lo que nos va a preguntar es: “¿cuánto has amado, con cuánta misericordia has vivido en tu vida, cuánta
caridad ha habido en tu corazón?” El último día, el Señor nos evaluará en el amor. ¿Cuánto has amado?
Contenido:
Somos un cuerpo, somos un cuerpo en Cristo. Por eso es que todo lo que le hacemos a un miembro, se lo
hacemos al cuerpo entero. Por eso, cuando ayudamos a uno de los miembros más frágiles, que más sufren,
más necesitados, se lo hacemos al mismo Cristo. Que no nos baste entonces no hacerle el mal a los
demás. Que Dios nos encuentre a nosotros con las manos llenas, llenas de obras de amor. Que este tiempo
del año de la misericordia sea un momento especial, privilegiado para que nos esforcemos por vivir la
caridad con el hermano, con la comunidad. Que podamos amar a los demás como Cristo nos ha amado a
nosotros.

Dirigir la mirada a Dios, Padre misericordioso, y a los hermanos necesitados significa dirigir la atención al
contenido esencial del Evangelio, es decir, a Jesucristo, la Misericordia hecha carne, que hace visible el
gran misterio del Amor trinitario de Dios.

Actualización:
Vendar a los niños con paliacates, y decirles que se encontraron con una sorpresa pero que solo pueden
escuchar, que es una persona que les quiere hablar de algo y se llama Jesús. Después hacer una reflexión
sobre lo que Jesús les dice, se les pregunta ¿cómo se sienten? ¿qué harán ahora?

Carta: Hola pequeño, ¿Cómo estás?, vengo el día de hoy a pedirte un favor muy importante, necesito
encargarte una misión, tú vas a ser a partir de hoy un agente especial del cielo, tu misión es muy sencilla,
pero lo complicado es que es una misión de por vida, el favor que te quiero pedir, es que siempre ayudes
a tu prójimo, empezando en tu casa con tu mamá, tu papá y tu familia, ayudándoles a lavar los platos, a
recoger tus cosas, a hacerles caso a tus papás, y a apoyarlos cuando te necesiten, también puedes
empezar con tus amigos y con todos los niños del pueblo, si están tristes, hazlos sonreír, si están cansados
ayúdales, si están solos acompáñalos, y después puedes ayudarles a toda la gente que te necesite en el
pueblo y a donde vayas, eso me hará muy feliz, y estoy seguro de que a todos ellos y a ti también. Ahora
debo irme a decirles su misión a los demás niños, pero nunca los dejaré solos porque los amo. Su buen
amigo Jesús.

Respuesta:
Cada niño va a pensar en un compromiso a realizar para ser misericordioso y amar como nuestro Padre
Dios ama. Lo escribirá o dibujará en un papelito, los cuales serán depositados en un recipiente al cual se
le prenderá fuego, haciendo referencia que con ello se está sellando una alianza con Dios, la cual no
podemos romper.

Oración:
- Con las manos levantadas:
Querido Jesús: Yo también quiero ser compasivo y ayudar a los que sufren. Quiero ser como el buen
samaritano, que se hizo prójimo de quien estaba tirado en el camino y necesitaba una mano.
- Con las manos juntas:
Dame valor para acercarme a todos los que necesitan apoyo, compañía y ayuda de cualquier tipo. Empapa
mi corazón del espíritu del buen samaritano para que ofrezca siempre mis manos abiertas a los demás.
- Con las manos extendidas:
Que nunca pase de largo ante el dolor de mis hermanos, que no sea indiferente a su dolor.
- Con las manos en el corazón:
Dame fuerzas Jesús para vivir ayudando a todos. Amén.
Tema: Misericordiosos como el Padre en la Comunidad (Jóvenes)
Objetivo: Que los jóvenes puedan adentrarse en el camino de la misericordia, tomando como
principal motor los sentidos del hombre; para que, viendo la necesidad del prójimo y su comunidad,
actúen de manera certera y encuentren en este camino la vía que une a Dios y al hombre.

Material:
Vendas, artículos con diferentes texturas y formas, comidas de diferentes sabores (picantes, sosas,
agrias, saladas, dulces), cucharas desechables, 3 mesas, hilo de tejer, vasos desechables, galones
de agua, artículos del diario (jarrón, bola, termo, cuadro, abanico), paños de limpiar, papel de
construcción, tape, palillos de dientes, frutas u otro alimento, ropa, papel de maquinilla, lápiz, Biblia,
imagen de Jesús o cruz.

Oración inicial:
¡Oh Jesús, tendido sobre la cruz te ruego me concedas siempre y donde quiera que me encuentre,
la gracia de cumplir fielmente la Santa Voluntad de tu Padre! Aun cuando esto me sea penoso y
difícil, te imploro Jesús, que de tus llagas hagas fluir la fuerza y el poder necesarios, y mis labios
repitan sin cesar: “Señor que se haga tu voluntad”. ¡Oh redentor del género humano, que nos ha
amado hasta morir por nuestra salvación y que, en los sufrimientos y tormentos de la agonía,
olvidaste todo para pensar solo en la salvación de nuestras almas!

¡Misericordioso Jesús, concédeme la gracia de olvidarme de mí mismo, y vivir para los demás,
ayudándote así en la Obra de la Redención según la santísima voluntad de tu Padre celestial! Amén.

Experiencia:
El animador dividirá a los participantes en grupos de diez personas. Al tenerlos ya divididos les
explicará las instrucciones. Se prepararán 6 estaciones ubicadas en el área designada por el
animador, en cada una de estas estaciones habrá un líder para explicar lo que tienen que realizar
en ella.

Es importante que todos participen y deben llevar por lo menos una Biblia por grupo. Al llegar a la
estación leerán la cita bíblica dada, les explicarán lo que deben realizar y tendrán 7 minutos para
completarla. Al completarlas, irán hacia la estación que le quede a su derecha y así sucesivamente
hasta terminar.

Al terminar cada estación se va haciendo una reflexión sobre lo que se realizó.


Bases Cita bíblica Explicación Material
2 Corintios 10, 7 – “Ustedes Los jóvenes se acomodarán en una fila hacia atrás. Al primero se le Vendas, variedad
misericordiosos

solo miran las apariencias. vendarán los ojos y tendrá que adivinar el artículo que se le coloque de artículos con
Si alguno se enorgullece de en las manos. formas y texturas
1. Ojos

ser cristiano, piense de una Luego que el joven adivine pasará el otro y sucesivamente hasta que diferentes.
vez que, tanto como él, lo todos hayan identificado el artículo que le tocó a cada uno. Los
somos también nosotros” artículos deben ser diferentes para cada uno.

Proverbios 14, 21 – “El que Los jóvenes se colocarán en un círculo. A uno de los jóvenes se le Papel con la
desprecia a su prójimo peca, contará en el oído una historia que va a constar de palabras y historia escrita en
dichoso el que se apiada de sonidos. Luego el joven tiene que pasar el mensaje idéntico al joven ella.
misericordiosos

los pobres.” de su lado y así sucesivamente hasta el último. Cuando el mensaje


llegue al último, éste lo dirá en voz alta para ver si el mensaje llegó
2. Oídos

exacto o tuvo variaciones en el camino.


Un ejemplo de la historia: Cuando iba caminando por el bosque
escuchaba los (sonidos de pájaros) y llegué a la orilla del (sonido de
río). Luego crucé el (sonido de río) y me monté en mi (sonido de
caballo). Mi caballo (sonido de galopar) por todo el bosque hasta que
me encontré con una casa.

Proverbios 18, 21 – “Muerte Los jóvenes harán un círculo alrededor de una mesa. En la mesa Mesa, comidas de
y vida dependen de la habrá varios envases con diferentes alimentos, no identificados y diferentes sabores
misericordiosa

lengua, según se elija, así se respectivamente tapados para que el joven no pueda adivinar lo que (picantes, sosas,
3. Lengua

recibirá.” contiene. Cada joven debe escoger un envase. El encargado de la agrias, saladas,
estación le dará una cuchara y el joven debe probar la comida del dulces), cucharas
envase que eligió. No debe olerla, solo tomarla y rápido comérsela. desechables
Para garantizar esto, el mismo encargado deberá facilitarle la comida.
Tener cerca un poco de agua porque los sabores varían.

Eclesiastés 9, 10 – “Todo lo Los jóvenes se acomodarán en una línea hombro con hombro. Se Hilo de tejer, vasos
que encuentres a mano, unirán los jóvenes atando sus manos a las del compañero que está desechables,
hazlo con empeño, porque no a su lado (la mano izquierda del primero con la mano derecha del galones de agua,
hay obra, ni razón ni ciencia joven del lado y así sucesivamente). Quedan atados en la misma artículos del diario
misericordiosas

ni sabiduría en el abismo a línea. Luego que cada uno esté atado realizarán una tarea dada por (jarrón, bola, termo,
dónde vas.”
4. Manos

el encargado de la estación sin soltarse. Para poder realizarla, ellos cuadro, abanico),
tendrán que ponerse de acuerdo de cómo la van a ejecutar. Las paños de limpiar
tareas pueden ser limpiar los siguientes artículos; jarrón, bola de
baloncesto o voleibol, termo, cuadro y abanico, hacer una torre de
vasos y pasar un galón de agua de principio a fin. La torre de vasos
y pasar el galón lo hace el grupo entero y limpiar los artículos cada
dos jóvenes. Los artículos deben estar a diferentes alturas cada uno
en fila para hacer más difícil la tarea
Lucas 10, 30-35 – “Jesús le respondió: «Un Los jóvenes tendrán que buscar y hallar 26 Papel de
hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, y cayó en huellas con tamaños diferentes que estarán construcción, tape,
manos de unos asaltantes que, después de pegadas alrededor del lugar donde esté la imagen de Jesús o
despojarlo y golpearlo sin piedad, se alejaron estación. cruz
dejándolo medio muerto. Un sacerdote bajaba
misericordiosos

casualmente, por aquel camino y, al verlo, se Luego, con ellas, hacer un camino hacia el lugar
desvió y pasó de largo. Igualmente, un levita que que el animador escoja, ya sea hacia una cruz
5. Pies

pasó por aquel lugar, al verlo, se desvió y pasó de o una imagen de Jesús.
largo. Pero un samaritano que iba de viaje, al llegar
junto a él y verlo, sintió lástima. Se acercó, y le
vendó las heridas después de habérselas limpiado
con aceite y vino; luego lo montó en su
cabalgadura, lo llevó a una posada y cuidó de él.
Al día siguiente, sacó unas monedas y se las dio al
encargado, diciendo: "Cuida de él, y lo que gastes
de más te lo pagaré a mi regreso»"

1 Corintios 12, 26 – “Si un Los jóvenes harán un círculo alrededor de una mesa. Se le dará un Palillos de dientes,
miembro sufre, todos los palillo de diente que colocarán con cuidado en su boca. En la mesa frutas u otro
misericordioso

miembros sufren con él. Si un habrá pedazos de diferentes frutas u otro alimento que escojan. Los alimento, mesa
6. Corazón

miembro recibe honores, jóvenes tienen que, sin utilizar las manos, transportar todos los
todos los miembros pedazos de frutas a otra mesa que estará a cierta distancia.
comparten su alegría.”

Contenido:
1. Ojos Misericordiosos ¿Qué hicieron en esta estación? Cada uno tuvo que adivinar lo que tenía en las
manos sin verlo. Se habrá hecho difícil o fácil dependiendo el objeto que le tocó. Algunos habrán acertado
de la primera, pero otros habrán hecho un juicio erróneo sobre lo que era. Eso pasó porque no veían, sin
embargo, cuando estamos viendo hacemos lo mismo.
Observando, haciendo uso de nuestros ojos emitimos juicio sobre los demás, nos dejamos llevar por las
apariencias que el mundo nos enseña a seguir, por lo que vemos a simple vista. Vivimos de apariencias,
vivimos viendo en el prójimo lo malo, y si vemos lo bueno no lo fomentamos, sino que también encontramos
una manera de juzgar. No nos gusta que nos lo hagan, ¿por qué lo hacemos? Utilizamos nuestros ojos de
mala manera, y Jesús nos enseñó a mirar al prójimo con ojos solidarios, amorosos, compasivos y atentos.
Tomemos y hagamos nuestro ese ejemplo. Busquemos en el prójimo lo bello que posee, de lo que está
hecho, las virtudes que tiene, los valores y el valor que tiene como ser humano. Que pongamos como
prioridad el mirar con atención a los demás; así los conoceremos con transparencia. Pero para eso
necesitamos tiempo, y voluntad. Pero, ¿qué difícil es cuando me lo exige algo que para mí no es importante
y relevante? Invertimos mucho de nuestro tiempo en cosas que no lo merecen y no nos cuesta hacerlo, al
contrario, nos gusta y nos “llenan”. Nos satisfacen momentáneamente. Por otro lado, lo que nos va a llenar
para siempre es mirar con detenimiento a los demás, no vivir con prisa. Esto nos hará aprender de ellos,
imitar lo bueno y poder en algún momento difícil socorrerle sin dudar porque veo en el prójimo, en su rostro,
el rostro de Cristo.

2. Oídos Misericordiosos ¿Qué hicieron en esta estación? Había que pasarse el mensaje de la historia
sin cambiarla, ¿lo lograron? Para lograrlo había que estar bien pendientes de cada palabra y sonido. Había
que prestar mucha atención, poner de nuestra parte. Así mismo tenemos que hacer con nuestro prójimo,
poner toda nuestra atención, nuestros sentidos, nuestra mente y corazón para escuchar, percibir y hacer
nuestras sus necesidades. En la medida en que las hago mías soy consciente de ellas. El peso del otro se
hace más ligero. No vivimos solos en el mundo así que todo lo que me rodea me afecta. El cómo se sientan
las personas repercute en mi vida, en mi estado de ánimo porque somos uno. Cada uno forma parte
fundamental del cuerpo de Cristo y cuando alguna parte no está bien todo el cuerpo se afecta. Si algún
miembro del cuerpo está afectado tenemos que ver y estar dispuestos a atender esas necesidades como
nos gustaría que hicieran con nosotros. Si cuando tenemos alguna necesidad nos gusta que nos atiendan,
ser los primeros, debemos considerar los demás una prioridad para nosotros. Además, tenemos que tener
en cuenta que cuando alguien sufre, su situación requiere atención prioritaria, aunque para nosotros no
resulte tan urgente. El dolor se vive diferente y debemos poseer la capacidad para no menospreciar el dolor
que el prójimo siente. Debido a eso seamos prudentes al escuchar, analizar y sobre todo seamos abiertos
al don de la escucha hacia nuestros hermanos, para que al ver su necesidad acudamos a él y no seamos
indiferentes: indiferentes al dolor, sentimientos y experiencias que hayan marcado a esa persona. Es
importante que el prójimo sea nuestro número uno, aunque nos cueste, porque las palabras de un hermano
son las palabras de Cristo.

3. Lengua Misericordiosa ¿Qué hicieron en esta estación? ¿Les gustó lo que probaron? A algunos sí, a
otros no, me imagino. ¿Qué sabores había? Había amargos, dulces, salados, sin sabor, agrios, entre otros.
Con la lengua pudieron percibir el sabor que escogieron. ¿Cómo podemos asimilar esto al uso de la lengua?
Lo asimilamos porque con nuestra lengua podemos decir palabras agrias, amargas, saladas, que duelen y
mortifican al prójimo. Por otro lado, podemos pronunciar palabras dulces que sirvan de consuelo o
simplemente no decir nada y pecar tal vez de omisión como lo que no tenía sabor. Abundando más, nuestra
lengua, es un órgano pequeño, que puede convertirse en medio de condena para el prójimo ya que
juzgamos, criticamos, insultamos y peleamos. Causamos daño al corazón y vida del prójimo. No sabemos
lo que hay en su corazón, en su mente y podemos con una sola palabra desencadenar una serie de
emociones y acciones negativas. En ocasiones, llegamos a hacer mucho daño con nuestra lengua de modo
intencional; otras veces, podríamos llegar a ocasionarlo hasta sin darnos cuenta. Además, podría
convertirse en medio de condena para nosotros mismos porque pecamos cada vez que la utilizamos mal,
nos condenamos, y deberíamos recurrir al sacramento de la reconciliación. Pero, no debemos pensar “pues
si peco voy y me confieso” porque estaríamos utilizando a nuestra conveniencia el sacramento y eso es
pecado, sería abusar de la misericordia de Dios. Tenemos que controlarnos y domar nuestra lengua. Por
otro lado, de nuestra boca pueden salir palabras dulces, de consuelo, de perdón, palabras que edifican,
aman, perdonan, piden perdón, creando un impacto positivo tanto en el prójimo, como en nosotros mismos.
El prójimo se siente amado y creamos conciencia sobre su dolor y vamos desarrollando el don de la palabra,
al cual le daremos uso con las palabras que Dios nos ponga en la boca si somos dóciles a él. También
podríamos llegar a pecar de omisión cuando mi deber como cristiano me debería mover a denunciar lo que
está mal, corregir al que se encuentra en el error y, por el contrario, preferimos callar. Reflexionemos lo
siguiente: “con ella bendecimos al Señor y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, hechos a
semejanza a Dios” (Santiago 3,9). ¿Eso tiene sentido? De la misma boca salen bendición y maldición y no
debe ser así. Si no lo habían pensado les invito a hacerlo, ¿para qué utilizamos nuestra lengua? ¿Para
agradar a Dios o para pecar? Cada uno se conoce: preguntémonos cómo estamos haciendo uso de la
lengua y tomemos un camino, el camino de Dios y expresemos palabras de amor como las de Cristo.

4. Manos Misericordiosas ¿Qué hicieron en esta estación? Estaban atados unos a otros y las tareas no
eran muy fáciles de realizar en conjunto. ¿Qué nos quiere decir esto? Las manos son una parte importante
de nuestro cuerpo, con las cuales podemos hacer o deshacer. En la estación, tal vez se les cayó con un
mal movimiento tumbaron alguna cosa; o quizá de la primera lo hicieron bien. Las utilizamos para mucho
en nuestro diario vivir. Ellas pueden ser entes de destrucción maltratando, señalando y no haciendo buen
uso de recursos. Podemos hacer mucho daño si nos lo proponemos. Pero no todo es malo. Con ellas
también podemos construir y es en lo que nos debemos enfocar. Enfocarnos en que ellas sean entes de
creación, llenas de buenas obras, y con ánimo de ayudar. Con ellas damos vida cuando las utilizamos para
saludar, abrazar, acariciar. Damos ejemplo cuando decidimos cargar con las tareas difíciles y más penosas
del otro. Debemos mostrarnos disponibles para realizar aquel trabajo costoso, porque cuando la tarea es
de dos o más, aunque sea difícil se hace ligera y más llevadera. Compartir solo en las alegrías y ayudar a
realizar las tareas difíciles no conllevan el mismo mérito que, por el contrario, asumir con espíritu cristiano
las penas y dificultades del hermano. No pensemos en el qué dirán y sí pensemos en el alivio, empatía,
solidaridad y amor que transmitimos al prójimo cuando somos personas dadas al servicio del necesitado.
Y cuando hablamos de necesitado no solo nos referimos al enfermo, al de la calle, al anciano, etc., sino
también al servicio del que se encuentra en nuestra casa, parroquia, trabajo, colegio, universidad, etc.
Nuestras manos pueden crear vida cuando las ponemos a disposición del hermano, al servicio de Dios.
Que ellas de ahora en adelante sean solo de él y que con ellas todo lo que realice sea según el actuar de
Cristo.

5. Pies Misericordiosos ¿Qué hicieron en esta estación? En grupo tuvieron que buscar todas las huellas,
parearlas y formar un camino hacia el lugar indicado. Ese camino podemos asimilarlo al de nuestras vidas
que al ver necesidad en el otro unas veces, nos quedamos mirando y después de un tiempo salimos a su
encuentro, pero a paso de tortuga, y otras, salimos a ayudar con prontitud sin esperar nada. En este
momento nos podemos cuestionar del siguiente modo: ¿he reaccionado indiferente ante la necesidad del
prójimo? Si por el contrario le atendí ¿cómo presté esa ayuda? Ya tenemos la respuesta, ahora debemos
tomar la decisión de reaccionar con prontitud y salir al encuentro del prójimo rápidamente cuando
identifiquemos su necesidad. Nuestros pies deben apresurarse a socorrer al hermano. Tenemos que
demostrarle que nos importa, es decir, que es una prioridad para nosotros. Somos conscientes que a veces
somos víctimas del cansancio y de las preocupaciones, pero, para cuando nos necesiten tenemos que
procurar vencer ese cansancio, esa fatiga del día, olvidarnos de eso y actuar. Tenemos que invertir de
nuestro tiempo en el otro, no solo cuando nos sobre. Tal vez pensemos que no habrá recompensa, pero
estamos seguros de que sí la tendrás sobre todo en el cielo. También tendrás la gratificación al contemplar
el rostro lleno de alegría y satisfacción del hermano que socorriste; será el rostro de quien se sabe
importante para alguien, para ti. El cansancio luego, tal vez, será mayor pero lleno de satisfacción porque
brindaste ayuda, brindaste a Cristo en tus pies al salir al encuentro del necesitado. Que nuestros pies sean
de él y lo que realicemos sea como lo hizo Cristo.

6. Corazón Misericordioso ¿Qué hicieron en esta estación? Con el palillo de diente transportaron las
frutas a la otra mesa. ¿Qué esto tiene que ver con adquirir un corazón misericordioso? Supongamos que
el pedazo de fruta es el corazón del prójimo y que el palillo de dientes son nuestros pecados. Ahora bien,
así como al atravesar el pedazo de fruta con el palillo tuvimos que ejercer presión y al sacarlo quedó un
hueco, del mismo modo con nuestro pecado, no solo traspasamos el corazón del hermano, sino que,
dejamos una herida en él. Por este motivo, nuestro corazón debe acercarse al corazón del prójimo, para
sentir sus sufrimientos y vendar sus heridas. Debemos ser empáticos ante el dolor ajeno. Cuando
practicamos la empatía el dolor se hace más llevadero y ligero. En ese momento el prójimo siente que no
está solo, que hay alguien que se interesa y lo considera importante en su vida. Cuando se asume el dolor
de otro como propio se es solidario y se vive la auténtica comunión. El Papa Francisco dijo que un corazón
pequeño es egoísta e incapaz de ser misericordioso. Por lo tanto, aspiremos a tener un corazón grande y
humilde; un corazón capaz de encarnar el amor y la misericordia divina, porque, por el contrario, nos
estaremos perdiendo de muchas bendiciones en la vida. Estaremos llenos de tristezas, soledad y faltos de
amor. Se vivirá enajenado espiritual y emocionalmente del que nos rodea. Tengamos un corazón grande,
porque éste no condena, sino que perdona. Este corazón olvida porque Dios ha olvidado mi pecado. Este
corazón estará lleno de paz, tranquilidad, perdón, amor, sabiduría, fe y solidaridad. Será un corazón feliz y
con muchas ganas de transmitir todo lo que en él habita. Un corazón que perdona se asemeja al de Cristo,
que a pesar de todo lo que le hicieron perdonó, porque “amó hasta el extremo. Los hombres y mujeres con
un corazón grande siempre excusan a los demás y recuerdan su propio pecado. Seamos estos hombres y
mujeres que se reconocen pecadores, no acusan al prójimo por sus pecados y acuden al sacramento del
perdón a los pies de Jesús para crecer espiritualmente y seguir llevando a Cristo a los demás. ¡Qué nuestro
corazón sea siempre uno semejante al de Jesús y siempre manifieste en él su amor, porque en el corazón
del prójimo también se encuentra Cristo! Conclusión: La última estación en la cual trabajaron como cuerpo
entero la asimilamos a la oración de que tu misericordia repose dentro de mí. Cuando reposa dentro de
nosotros la podemos llevar a los demás como se hizo en la dinámica. Llevaron una obra de misericordia
corporal al vestirlo, y una espiritual al transmitirle palabra, al enseñarle. La misericordia de Dios habita en
cada uno de nosotros. Somos cuerpo y alma, somos nuestras actitudes y comportamientos, somos nuestra
fe, somos Jesucristo para nuestro prójimo. Si queremos que la misericordia de Dios repose en nosotros
debemos comportarnos y cuidarnos porque eso es practicar la misericordia. La practicamos con el prójimo
y con nosotros mismos también. Vemos la misericordia de Dios cuando se quedó en un pedazo de pan y
vino. No tenía que hacerlo, pero lo hizo por amor. Y cada vez que comulgamos contemplamos esa
misericordia, su amor. Por eso joven te comunicamos que el prójimo tiene necesidades físicas y
espirituales, pero la necesidad primordial es de ti, tiene ansia de ti. El mundo y Dios tienen necesidad de ti,
de que actúes, hables, no te quedes callado, que seas un ente constructivo, oigas al necesitado, realices
obras de amor y por amor. Y para lograr estas cosas debemos desear transformarnos todo en su
misericordia, sin embargo, esa decisión es tuya no de más nadie. Toma la decisión y decide por Cristo.

Oración:
“Oh Señor, deseo transformarme todo en tu misericordia y ser un vivo reflejo de ti. Que este supremo
atributo de Dios, es decir su insondable misericordia, pase a través de mi corazón al prójimo.

Ayúdame, oh Señor, a que mis ojos sean misericordiosos, para que yo jamás recele o juzgue según las
apariencias, sino que busque lo bello en el alma de mi prójimo y acuda a ayudarla.

Ayúdame, oh Señor, a que mis oídos sean misericordiosos para que tome en cuenta las necesidades de
mi prójimo y no sea indiferente a sus penas y gemidos.

Ayúdame, oh Señor, a que mi lengua sea misericordiosa para que jamás hable negativamente de mis
prójimos, sino que tenga una palabra de consuelo y perdón para todos.

Ayúdame, oh Señor, a que mis manos sean misericordiosas y llenas de buenas obras para que sepa hacer
solo el bien a mi prójimo y cargue sobre mí las tareas más difíciles y más penosas.

Ayúdame, oh Señor, a que mis pies sean misericordiosos para que siempre me apresure a socorrer a mi
prójimo, dominando mi propia fatiga y mi cansancio.

Ayúdame, oh Señor, a que mi corazón sea misericordioso para que yo sienta todos los sufrimientos de mi
prójimo. Que tu misericordia, oh Señor mío, repose dentro de mí. Amén.
Tema: Misericordiosos como el Padre en la Comunidad (Adultos)

Objetivo: Que los adultos se den cuenta que la misericordia al ser extensiva no queda sólo con la
familia o con los amigos, sino que se dirige hacia todo aquel que es mi prójimo, no se puede poner límite a
la inmensidad del amor misericordioso.

Experiencia:
Llevar una imagen de un sol grande y reflexionar sobre las características que tiene y la importancia de
éste para nuestra vida cotidiana.

Profundización:
¿Qué pasaría si un día no sale el sol? ¿Qué proporciona el sol? ¿El sol para quienes sale, para los buenos
y misericordiosos solamente? ¿Nos podemos librar del calor del sol?

El sol sale para todos, nada se librea de su calor, envuelve a ricos y pobres, a buenos y malos, a toda la
tierra alcanza sus rayos, no hace discriminación alguna. Semejante es la misericordia de Dios, no conoce
límites y no discrimina, se dirige hacia todas las personas que están dispuestas a aceptarla, se dirige hacia
todo aquel que se reconoce como pecador y necesitado de Dios.

Palabra de Dios:
Se lee con dignidad y respeto la siguiente cita bíblica. Juan 8, 1 – 11

Profundización:
¿Qué sucede en la narración del Evangelio? ¿Por qué intentaban matar a la mujer? ¿Cuál fue la reacción
de Jesús? ¿Por qué no condenaron a la mujer? ¿Cuál crees que es la razón por la que Jesús perdona a la
mujer?

La misericordia de Dios se extiende para todos, no son los sanos quienes necesitan al doctor, sino los
enfermos, Jesús viene a liberar a todos del error y del pecado, pero especialmente viene por los más
alejados de Dios, viene por aquellos que se han apartado del redil, en este caso, los pecadores y los que
lo han ofendido, ofendiendo a algún hermano suyo.

Imitemos a Jesús en esa actitud de misericordia, compartiendo nuestro amor no solo a los que conocemos
y a los que nos aman de igual manera, sino que compartamos y hagamos extensible nuestro amor hacia
aquellos que no conocemos mucho o con los que no nos llevamos bien. Extendamos nuestra misericordia
con toda nuestra comunidad, con todas las personas que la conforman.

Contenido:
Una forma de extender nuestra misericordia con toda nuestra comunidad es conociendo y viviendo como
hábito las obras de misericordia.
Obras de misericordia espirituales.

1. Enseñar al que no sabe. Es importante que cooperemos con nuestros hermanos, pero es más
importante enseñarles a realizar por ellos mismos aquello que no saben. Por ello, enseñémosle a orar, a
perdonar, a perdonarse, a compartir, etc.

2. Dar buen consejo al que lo necesita. Para dar buen consejo es necesario que nosotros mismos
hayamos sido aconsejados por un director espiritual, que nos ayude a orar a Dios Padre, para que nos
envíe su Santo Espíritu y nos regale el don de consejo. Así, bajo la guía del Señor, tanto nuestras palabras
como nuestro actuar, serán un constante aconsejar a los que lo necesitan.
3. Corregir al que se equivoca. Muchas veces nos enojamos o reímos cuando vemos a algún hermano
equivocarse, olvidándosenos que no somos perfectos e inevitablemente nos equivocaremos también.
Pensemos, ¿nos gustaría que se rieran de nosotros?, definitivamente no, así que, cuando alguien se
equivoque corrijámoslo con amor fraternal para que no lo vuelva a hacer.

4. Perdonar al que nos ofende. ¡Qué difícil!, tanto que Jesús nos dice que debemos perdonar 70 veces
7, es decir, siempre. Además, en el padre nuestro, nos pone la condición de perdonar nuestras ofensas,
como nosotros perdonamos a los que nos ofenden. Así que, a perdonar

5. Consolar al triste. Jesús nos ha dicho: "Dichosos los que lloran porque serán consolados". El consuelo
de Dios, por medio de su Espíritu Santo, nos consuela. Pero, además, Dios se vale de nosotros para
consolar a los demás. No se trata de decir: no llore, sino de buscar en las Escrituras, las palabras que mejor
se adecúen a la situación. En los salmos podremos encontrar esa palabra de consuelo que requerimos,
por eso, es conveniente recitarlos y meditarlos constantemente.

6. Sufrir con paciencia los defectos del prójimo. ¡Qué fácil es ver la paja en el ojo del prójimo y no vemos
la viga en el nuestro! Cuando seamos capaces de disimular los defectos de nuestro hermano, estaremos
colaborando en la construcción del Reino del Señor. Tengamos paciencia con los ancianos, los niños, el
vecino, el compañero de trabajo y ellos la tendrán con nosotros, en nuestros defectos.

7. Rogar a Dios por los vivos y los difuntos. Cuando escucho a mis hijos orar pidiendo a Dios por
nosotros, por sus hermanos, por sus compañeros de escuela y por sus abuelitos ya fallecidos, me siento
agradecido de saber que muchos elevan una oración al Creador por mí y por mis familiares o amigos que
se me adelantaron a la casa del Padre. Cada oración es una intercesión, y el Señor nos pide que oremos
unos por otros para mantenernos firmes en la fe, así como él oró por Pedro para que una vez confirmado,
les ayudara a sus hermanos.

Actualización:
A manera de elenco, los adultos dirán ejemplos concretos en su vida ordinaria, sobre la manera en la que
pueden vivir o poner en práctica las obras de misericordia espirituales.

Oración:
Oh Dios, que revelas tu omnipotencia sobre todo con la misericordia y el perdón, dónanos vivir un año de
gracia, tiempo propicio para amarte a Ti y a los hermanos en la alegría del Evangelio. Sigue derramando
sobre nosotros tu Santo Espíritu, para que no nos cansemos de dirigir con confianza la mirada a aquel que
hemos traspasado, a tu Hijo hecho hombre, rostro resplandeciente de tu infinita misericordia, refugio seguro
para todos nosotros pecadores, necesitados de perdón y de paz, de la verdad que libera y salva.

Él es la Puerta, a través de la cual venimos a ti, manantial de consolación para todos, belleza que no conoce
ocaso, alegría perfecta en la vida sin fin. Interceda por nosotros la Virgen Inmaculada, primer y
resplandeciente fruto de la victoria pascual, aurora luminosa de los cielos nuevos y de la tierra nueva,
puerto feliz de nuestra peregrinación terrenal. A ti, Padre Santo, a tu Hijo, nuestro Redentor, al Espíritu
Santo, el Consolador, todo honor y gloria en los siglos de los siglos. Amén.
EVALUACIÓN MIÉRCOLES SANTO
Se sugiere dejar un tiempo para contestar a nivel personal, y posteriormente compartir
cómo se evalúan como grupo, y de igual manera, cómo evalúan la participación de la
comunidad.

I. Catequesis

II. Celebraciones y oraciones

III. Visiteo

IV. Juegos, cantos y dinámicas

V. Trato y relaciones como equipo

VI. Otro

VII. Compromiso o aspecto a mejorar para mañana


PLANEACIÓN JUEVES SANTO

Posibles actividades:
Oración Desayuno Limpieza y adorno del templo Preparar celebración Ensayo de celebración
Visiteo Comida Celebración de la última cena Procesión del Santísimo Adoración Rosario
Cena Evaluación Oración
HORA ACTIVIDAD RESPONSABLE MATERIAL OBSERVACIONES
EVALUACIÓN JUEVES SANTO
Se sugiere dejar un tiempo para contestar a nivel personal, y posteriormente compartir
cómo se evalúan como grupo, y de igual manera, cómo evalúan la participación de la
comunidad.

I. Preparación de la celebración

II. Celebraciones y oraciones

III. Visiteo

IV. Juegos, cantos y dinámicas

V. Trato y relaciones como equipo

VI. Otro

VII. Compromiso o aspecto a mejorar para mañana


PLANEACIÓN VIERNES SANTO

Posibles actividades:
Oración Desayuno Limpieza y adorno del templo Preparar celebración Ensayo de celebración
Viacrucis Visiteo Comida Celebración Rosario del pésame Cena Evaluación
Oración
HORA ACTIVIDAD RESPONSABLE MATERIAL OBSERVACIONES
EVALUACIÓN VIERNES SANTO
Se sugiere dejar un tiempo para contestar a nivel personal, y posteriormente compartir
cómo se evalúan como grupo, y de igual manera, cómo evalúan la participación de la
comunidad.

I. Preparación de la celebración

II. Celebraciones y oraciones

III. Visiteo

IV. Juegos, cantos y dinámicas

V. Trato y relaciones como equipo

VI. Otro

VII. Compromiso o aspecto a mejorar para mañana


PLANEACIÓN SÁBADO SANTO

Posibles actividades:
Oración Desayuno Limpieza y adorno del templo Preparar celebración Ensayo de celebración
Visiteo Comida Celebración Cena Evaluación Regreso

HORA ACTIVIDAD RESPONSABLE MATERIAL OBSERVACIONES


EVALUACIÓN SÁBADO SANTO
Se sugiere dejar un tiempo para contestar a nivel personal, y posteriormente compartir
cómo se evalúan como grupo, y de igual manera, cómo evalúan la participación de la
comunidad.

I. Preparación de la celebración

II. Celebraciones y oraciones

III. Visiteo

IV. Juegos, cantos y dinámicas

V. Trato y relaciones como equipo

VI. Otro

VII. Compromiso o aspecto a mejorar para mañana


REPORTE DE COMUNIDAD

AÑO: ____________

DATOS GENERALES
I. Nombre completo de la comunidad:
______________________________________________________________
II. Nombre del sacerdote:
_______________________________________________________________
III. Cantidad de misioneros: ____________
IV. Colegio que atendió: _______________
V. Ubicación del pueblo:

Cómo llegar (ruta y transporte) Costos

Pueblos cercanos

Observaciones

VI. Estadísticas:

Familias en el pueblo: _________________________________________


Familias católicas: _________________ Templos protestantes: ________
Cantidad de niños: _________________ Cantidad de jóvenes: _________
Cantidad de adultos: _______________
DATOS ESPECÍFICOS
VII. Nombre del auxiliar:
_______________________________________________________________
VIII. Nombre de catequistas o personas significativas:
_______________________________________________________________
_______________________________________________________________
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IX. Asistencia y horario de las catequesis:

Niños: _______________ Horario: _______________


Jóvenes: _____________ Horario: _______________
Adultos: ______________ Horario: _______________

X. Asistencia y horario de las celebraciones:

Domingo de ramos: _____________ Horario: _______________


Jueves santo: _________________ Horario: _______________
Viernes santo: _________________ Horario: _______________
Sábado santo: _________________ Horario: _______________

XI. Observaciones:
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