El Hombre de Las Ratas
El Hombre de Las Ratas
El Hombre de Las Ratas
a. Introducción al tratamiento
Tiene un amigo a quien acude a él siempre que lo asedia un impulso criminal. Su amigo lo
apoya. Antes de este amigo otra persona ejerció un parecido influjo un estudiante que tenia
19 años cuando él tenia 14. Este estudiante fue luego su preceptor hogareño y de pronto lo
comienza a tratar como un idiota. Por ultimo se da cuenta en que se interesaba por una de sus
hermanas y solo trabo relación con él para acceder a la casa. Esta fue la 1er conmoción de su
vida.
b. La sexualidad infantil
Su vida sexual empezó muy temprano. En su casa había una joven gobernanta, la señorita
Peter. Un día estaba sobre el sofá leyendo, y le toca los genitales y el vientre. A los 6 años, en
su casa trabajaba otra señorita (Srta.Lina), quien tenía abcesos (granos) en las nalgas y él la
observaba cuando se los estrujaba por las noches. A veces dormía con Lina, pero casi siempre
dormía con los padres.
A los 7 años escucha una conversación de las muchachas en la cual Lina dice “con el pequeño
es claro que lo podría hacer pero con Paul es demasiado torpe, seguro que no acertaría”
Paul no entendió con claridad a que se referían pero se sintió menospreciado.
A los 6 años padecía de erecciones y durante esa época tuvo la idea enfermiza de que los
padres sabían sus pensamientos. Había muchachas que le gustaban mucho y tenia el deseo de
verlas desnudas. Pero a raiz de ese desear tenía un sentimiento ominoso, como si por fuerza
habría de suceder algo si lo pensaba por ende debía hacer toda clase de cosas para impedirlo
Al preguntarle sobre que temores tenía dice por ejemplo que su padre moriría.
Su padre por quien se inquietan sus temores obsesivos de hoy, ha muerto hace ya varios años.
Freud dirá que Paul, por lo que ha contado, ya a los 6 o 7 años tenía una neurosis obsesiva
completa y no sólo el comienzo de la misma. El componente pulsional sexual en Paul es ver
mujeres desnudas. Y cada vez que piensa algo así, lo invaden temores de que ocurra algo
terrible (como la muerte de su padre). Y entonces debe llevar a cabo acciones obsesivas para
que aquello terrible no suceda. Es decir que, si tiene el deseo de ver desnuda a una mujer,
tiene que morir su padre.
El inventario de la neurosis está completo al existir una pulsión erótica (el deseo de ver
mujeres desnudas) y una sublevación contra ese deseo (el temor de que pase algo malo); un
afecto penoso y un esfuerzo hacia acciones de defensa. Y aun hay presente otra cosa una
suerte de delirio o formación delirante los padres sabrían sus pensamientos porque él los
habría declarado sin oírlos él mismo.
¿Qué querrá decir que el padre tiene que morir si en el niño se mueve aquel deseo?
Freud dice que los factores constitutivos de la psiconeurosis no deben buscarse en la vida
sexual adulta sino en la infantil. Y en Paul, ya antes del 6º año sobrevinieron vivencias
traumáticas, conflictos y represiones que, si bien cayeron bajo la amnesia, dejaron como
residuo ese contenido del temor obsesivo. La amnesia infantil de Paul termina a los 6 años.
Paul cuenta que, haciendo maniobras militares en agosto, en una marcha, perdió sus quevedos
(anteojos). Luego charló con unos oficiales, uno que le parecía que era cruel debido a distintas
razones. Este Capitán “cruel” contó sobre una tortura que se hacía en Oriente, que consistía en
atar al condenado y colocarle sobre el trasero una lata por la que luego hacían entrar ratas
(Raten) que penetraban en su ano.
Freud dice que Paul contaba esto con una expresión que podría entenderse como de “horror
ante su placer, ignorado por él mismo”.
Paul dice que mientras le contaban esa tortura, lo asaltó el pensamiento de que eso mismo le
ocurría a una persona que él quería (a la dama amada y a su padre). Y para que aquello no
ocurriera, Paul debió realizar en su momento una acción obsesiva que consistía en pronunciar
un “pero” seguido de un movimiento de las manos. Este temor obsesivo es curiosamente más
disparatado al tener en cuenta que el padre de Paul ya había muerto.
Al día siguiente, el mismo capitán le alcanzo un paquete con el correo y le dijo “el teniente A
pago el rembolso por ti. Debes devolvérselo a él”. El paquete contenía los quevedos. En ese
momento se le ocurrió a Paul que debía devolver ese dinero a ese teniente o que de lo
contrario ocurriría esa escena de la tortura de las ratas con su padre y con la dama amada. El
Capitán Cruel se había equivocado y en realidad no era al teniente a quien debía devolverle el
dinero Paul (sino a la empleada de la estafeta postal); pero Paul ya se había hecho el
juramento de que debía devolverle a ese teniente el dinero para que no ocurriera aquello
terrible, así que dio una serie de vueltas confusas para finalmente poder terminar dándole el
dinero a ese teniente y no a otro.
El padre de Paul había muerto hacía 9 años de enfisema pulmonar y Paul no había estado allí
para presenciar su muerte. Y una enfermera encima dijo que lo había nombrado. Un año y
medio después de esa muerte, fue que surgió en Paul el sentimiento de sentirse casi un
criminal por no haber estado allí. En este sentido se puede hablar de una “mesalliance” (es
decir de un enlace falso), dado que la magnitud del reproche (sentirse un criminal) es
exagerado para lo ocurrido (dado que él simplemente no estuvo en ese momento). Este
concepto de enlace falso implicaría que ese sentimiento de ser un criminal en realidad
corresponde a otra representación, alguna que es inconsciente y se desconoce, y que ha
ocurrido un desplazamiento.
Paul cuenta que a los doce años amaba a una niñita, con un amor no sensual, pero que ella lo
ignoraba, y que a él se le ocurrió que ella podría amarlo si le ocurría una desgracia como la
muerte del padre. También año y medio antes de la muerte real del padre a Paul se le cruzó
por la cabeza la idea de que si este moría entonces heredaría como para casarse con la dama
que amaba. Al parecer, estas ideas nos hablarían de un deseo inconsciente en Paul de que su
padre muriera.
Paul dice a Freud que amaba intensamente a su padre, pero Freud responde que justamente
ese amor intenso podría estar indicando la existencia de un odio reprimido (por formación
reactiva).
Para Freud, debió ser antes del 6º año de vida que se le instalara a Paul la idea (ahora
inconsciente) de eliminar a su padre (a quien sentía como perturbador, prohibidor del goce).
Paul cuenta la escena ocurrida a los 8 años, donde a su hermano menor le colocó una escopeta
de juguete y presionó el gatillo. No le hizo nada, pero quiso hacerlo. Y esto lo perturbó porque
lo llevó a cuestionarse “¿Cómo había podido hacer tal cosa?!”. Para Freud, esto implicaba que,
justamente, Paul habría sido capaz antes de aquello de hacer algo similar (o haberlo deseado)
hacia su padre.
Las representaciones obsesivas aparecen como inmotivadas, sin embargo, se las debe traducir
EJEMPLOS:
Impulso suicida: Es muy frecuente en Paul. Cierta vez su dama había partido a cuidar a su
abuela enferma. Paul estudiaba y lo invadió la idea de cortarse el cuello con una navaja. Tomó
la navaja y, enseguida lo detuvo otra idea, la de viajar y matar a la abuela de su amada. Aquí el
impulso suicida habría surgido como una forma de autocastigo, puesto que inconscientemente
deseó matar a la abuela de su amada porque por culpa de esa mujer, por haber enfermado, su
amada había viajado lejos para cuidarla y no estaba con él.
(Aquí observamos una secuencia invertida: primero se le representa la idea de matarse y luego
la de matar a la anciana, pero inconscientemente es al revés).
La idea de adelgazar: Paul recuerda que por el verano le vino la idea de que estaba gordo
(gordo en alemán es: DICK). Entonces salió a correr y a trepar por montes. Y en uno de ellos le
vino la idea de saltar al vació. Esto se relaciona con el hecho de que su dama también estaba
en aquel lugar de veraneo, pero en compañía de un primo llamado Ricardo y a quien le decían
justamente “Dick”. Esto indica que en realidad Paul al querer adelgazar, sacarse la gordura,
sacarse lo “dick”, en realidad estaba deseando eliminar a Dick. (Tanto la abuela como Dick le
robaban la presencia de la dama).
Compulsión protectora: Paul también había tenido una compulsión protectora, de proteger
a su dama y constreñirla (esto ocurrió cierta vez que viajaban en barco) deseando que no le
pasara nada.
Quitar y colocar la piedra: Cierta vez encontró en la calle una piedra y debió retirarla
porque pensó que el carruaje de su amada pasaría por allí y podía accidentarse. Más tarde
pensó que era ridículo y llevó nuevamente la piedra hasta allí y la colocó otra vez. Esto de
colocar la piedra nuevamente tiene que ver con deshacer el acto de amor, colocando la piedra
como para que ahora sí se haga daño (inconscientemente en Paul por supuesto). Esto nos
habla de ambivalencia hacia su amada.
La compulsión a comprender: Paul tenía la compulsión a preguntar “¿qué?” cada vez que
alguien decía algo, preocupado por haber entendido mal. Y esto se relaciona con el hecho de
que su dama, cierta vez, tras un entredicho lo hizo sentir muy desdichado y luego le dijo que la
había entendido mal. Esta compulsión a comprender se relacionaba con esto y manifiesta
fundamentalmente una duda en cuanto al amor de ella para con él.
Todas estas acciones obsesivas tienen dos tiempos (el segundo anula al primero). Y este
mecanismo de anulación es típico de la neurosis obsesiva.
Paul tenía, a modo de sueños diurnos, fantasías de venganza tiene una actitud vengativa.
Por ejemplo: cuando enferma la dama y él le desea que “se quede yacente” o cuando desea
que se muera la abuela de la dama.
g. El ocasionamiento de la enfermedad
Paul cuenta un episodio fundamental, aunque para él no tenía gran importancia. Esto se debe
a que, en la neurosis obsesiva, en lugar de olvidar el trauma se le sustrae la investidura de
afecto. El episodio es el siguiente: La madre de Paul era de familia rica y el padre se casó con
ella mejorando su propia situación económica. Antes de casarse con la madre de Paul, el padre
tenía otra novia bella, pero pobre, y prefirió casarse con quien era rica. Tras la muerte del
padre, la madre le dijo a Paul que le pensaban presentar una joven rica para que se case
cuando terminara los estudios. Paul entonces estaría en un conflicto entre casarse con esa
joven rica y casarse con la bella dama que ama, es decir que el conflicto estaría entre hacer la
que habría sido la voluntad del padre (si viviera) o quedarse con la joven que ama. Y este
conflicto Paul lo resolvió enfermando. Gracias a esta enfermedad sus estudios cada vez se
retrasan más y por lo tanto no puede casarse con esa joven que le imponen. Mientras esté
enfermo, entonces, se evita tener que decidir entre la disyuntiva de casarse con la rica (como
quiere su familia) o con la pobre. En este episodio vemos cual ha sido el ocasionamiento de la
enfermedad de Paul. Digamos que el plan de la familia de casarlo con la joven rica fue lo que le
encendió el conflicto. Además, Paul le contó a Freud acerca de una joven que vio en la escalera
de su consultorio, la que creyó hija de Freud. Paul pensó que Freud esperaba que él se casara
con ella, tal como lo esperaría su padre respecto a la otra joven. Incluso Paul soñó con esa
chica con dos parches de excremento en los ojos (el excremento significa dinero). Aquí se ve
que Paul hizo una transferencia de aquella situación conflictiva sobre la relación con Freud.
El padre de Paul, antes de casarse, había sido soldado. Y era de tener un carácter fuerte.
Habría aquí una similitud entre el capitán cruel y su padre. A Paul y a sus hermanos, de
pequeños, muchas veces les dio una reprimenda. En lo relacionado a la sexualidad algo se
interponía entre padre e hijo. El padre habría estado en oposición con el erotismo del hijo.
Recordemos que, de pequeño, una vez pensó que cierta niña se le acercaría si él sufría una
desgracia como la muerte del padre.
Cuando de mayor Paul tuvo su primer coito, se le ocurrió la idea “¡esto es grandioso! A cambio
de esto uno podría matar a su padre”. Paul no desarrollo onanismo en la pubertad, sí en
cambio a partir de los 21 años (poco tiempo después de la muerte del padre). Paul tenía una
conducta extraña: Entre las 12 de la noche y la 1 de la mañana preparaba sus cosas de estudio
y abría la puerta del zaguán. Luego contemplaba en el espejo del vestíbulo su pene desnudo.
(Por entonces jugaba con la fantasía de que su padre muerto podía regresar). Es decir que
esperaba la visita del padre a la hora de los espectros (el padre se alegraría si lo veía
estudiando). Y respecto a observar su pene desnudo, diremos que con esto desafiaba al padre.
Aquí hablamos de ambivalencia hacia el padre (la misma ambivalencia que demostró con la
dama amada quitaba la piedra, la colocaba de nuevo).
Freud dice que a los 6 años debió llevar a cabo cierto acto relacionado con el onanismo y que
debió haber recibido de su padre una seria reprimenda, que esto debió fijar para siempre el
papel del padre como perturbador del goce, como prohibidor del goce. Paul, en relación a
esto, contó que su madre le decía algo que él no recordaba, relacionado con cierta vez en que
debió haber hecho algo malo pues su padre le pegó. Y entonces el niño Paul, preso de ira,
comenzó a insultar a su padre como podía (no sabía malas palabras). Lo insultaba usando
palabras comunes (plato, pañuelo, etc.). Al padre esto le debió impactar pues nunca más lo
golpeó. Y dijo “este chico será un gran hombre o un gran criminal”. Paul hizo una transferencia
hacia Freud: Al respecto decimos que Paul en sus fantasías diurnas y sueños pensaba en
insultar a Freud y a sus familiares de manera grosera. Y durante la comunicación de tales
fantasías a Freud, se comportaba nervioso paseándose por la habitación (Paul dijo luego que
se alejaba de él al contarle esto por angustia de que le pegara, lo que también confirma la
transferencia de la relación del padre a Freud).
Un enigma es por qué el cuento de la tortura de las rastas y su reclamo de devolver el dinero al
teniente le provocaban reacciones patológicas violentas. Ya dijimos que había una
identificación inconsciente entre ese capitán cruel y su padre (también soldado y de carácter
fuerte). Y Paul contó que una vez, su padre, siendo suboficial, perdió una suma de dinero en el
juego y pidió plata prestada a un camarada. Su padre –dijo Paul– había sido un jugador
empedernido (spielratte) la traducción del alemán que significa “rata de juego”, de aquí la
asociación con el relato del Capitán cruel. Paul contó que luego su padre buscó a ese camarada
para devolverle el dinero y nunca mas lo encontró la deuda quedó impaga. Y en relación a esto
podríamos pensar que las palabras del teniente a Paul: “tienes que devolver este dinero al
teniente” le sonaron como una alusión a aquella deuda impaga del padre para con su
camarada. En realidad, quien había pagado el reembolso era la empleada de la estafeta postal
(era a ella a quien debía devolverle el dinero). Y ella estaba interesada en Paul. Y cerca de esa
estafeta postal estaba la hija de un posadero que también se interesaba en él. Y podemos decir
que, como el padre antes de casarse, él también podía vacilar entre esas dos jóvenes. La
situación entonces también lo remitía a su padre. Y al parecer, la atracción por viajar hacia
aquel lugar de la estafeta postal era, según creía Paul, porque hacia podría devolver el dinero
al teniente. En realidad, el objeto de su añoranza era la empleada de la estafeta que se hallaba
en el mismo sitio y el teniente no era más que un buen sustituto.
Agregado sobre el hombre de las ratas: (distintos significados que adquirieron las ratas)
Las ratas, en el lapso entre el relato del capitán y su reclamo de devolver el dinero, habían
cobrado una serie de significados. El castigo de las ratas despabiló sobre todo el erotismo anal,
que en su infancia había desempeñado considerable papel y se había mantenido durante años
por un estímulo constante debido a gusanos intestinales
Las ratas se asociaban al casamiento con su amada Rata (ratten) / casarse (beiraten)
(Recordamos que su amada no podía tener hijos y que esa era una de las razones que pesaba
para no casarse con ella).