10 Fabulas Cortas Etc
10 Fabulas Cortas Etc
10 Fabulas Cortas Etc
La madre contestó:
- No te extrañes, hija mía: esas mujeres no lloran lágrimas, sino dinero. Nunca olvides que las
monedas son las lágrimas del rico.
MORALEJA
EL CABALLO VIEJO
Ahora viéndose en esta situación en la que pasaba sus días atado y dando vueltas a dicho molino, se
arrepentía de aquella actitud que había tenido cuando era poderoso:
"Después de las grandiosas vueltas que en mi juventud di en las carreras, mira a que vueltas me veo reducido
ahora. Este es un justo castigo por burlarme de aquellos que veía más débiles e inferiores"
MORALEJA
Mejor ser humilde cuando tienes poder, porque un día u otro lo has de perder
LA MUJER INTRATABLE
- No te lo vas a creer querido mío, pero los encargados del ganado apartaban la vista cuando pasaba por su
lado.
- Pues, si estos que tan solo te veían una vez al día no querían cruzar su mirada con la tuya-dijo su marido
midiendo muy bien sus palabras-, no puedo ni imaginar que es lo que harían los que tenían que estar contigo
permanentemente.
MORALEJA
Permanece atento a las menores señales, ya que son las que nos revelan los secretos más ocultos.
Al ver donde se había metido su ansiada presa, el lobo le grito muy fuerte para que le escuchara, que si
alguno de los sacerdotes del templo lo encontraban, iba a ser la próxima víctima ofrecida a los dioses.
- ¡Mucho mejor! – le gritó el cordero- me es mucho más grato pensar en honrar con mi cuerpo a un dios, que
acabar mi corta existencia en el interior de tu boca.
MORALEJA
Si tienes que sacrificado en alguna ocasión, que sea con el mayor reconocimiento posible
LA MOSCA Y LA CACEROLA DE CARNE
Había una vez un cocinero muy entusiasta que planeo preparar una
rica y deliciosa salsa de pura carne, en una cacerola especial.
“oh! que rico comí, bebí y hasta me bañe así que si en estos instantes me muero ya nada me importaría
después de todo el gusto que me dí en esa cacerola de carne“.
MORALEJA
LA CORNEJA FUGITIVA
Tan emocionada estaba por recobrar su libertad, que al posarse sobre su árbol, el hilo que colgaba de una de
sus patas se enredó terriblemente en varias ramas. Al darse cuenta de la situación, comenzó a aletear con
todas sus fuerzas, enredándose cada vez más. Prisionera en el lugar que tanto añoraba, dijo con resignación:
-¡Que tonta he sido! Por culpa de mis deseos de vivir de nuevo en libertad, voy a terminar mis días en el árbol
que me vio nacer.
MORALEJA
Cuanto más grande sea lo que deseamos, mayores son los riesgos
El adivino
-Oye, amigo, tú que te vanaglorias de prever lo que ocurrirá a los otros, ¿por qué no has previsto lo que te
sucedería a ti?
Moraleja: no hay que fiarse de aquellos que dicen que pueden adivinar el futuro de los demás. Tan sólo
pretenden estafarnos y quitarnos nuestro dinero.
Pero en la noche, buscando el pastor su provisión de carne para el día siguiente, tomó al lobo creyendo que
era un cordero y lo sacrificó al instante.
La bruja
Érase una vez una bruja que se ganaba la vida vendiendo encantamientos y
fórmulas para calmar la cólera de los dioses.
Pero un día fue acusada de ir contra las leyes y la llevaron ante los jueces
supremos del país.
Viéndola salir de la sala del juicio, una de las personas presentes le dijo:
- Bruj a, tú que decías poder desviar la cólera de los dioses, ¿Cómo no has podido persuadir a los hombres?
Moraleja: hay que ser precavido con quienes prometen solucionar todo problema que tengas a cambio de
dinero pero son incapaces de arreglar los suyos.
Las ranitas y el tronco tallado
Un cierto día, en que se desató una terrible tormenta, el tronco cayo al lago y en ese momento las ranitas
pudieron ver con claridad, que era solo un tronco tallado que ningún daño podía hacerles. Se rieron mucho de
los temores por los que habían pasado y comenzaron a jugar con él y usarlo de trampolín para sus zambullidas
en el lago.
REFRANES
Fenómenos naturales