El documento describe la importancia de la dirección espiritual para discernir el proyecto de Dios y seguir su voluntad. Francisco y Clara son ejemplos de guías espirituales que ayudaron a otros a caminar por el sendero de la santidad a través de la oración, el ejemplo de vida y el acompañamiento espiritual. La dirección espiritual requiere experiencia, preparación y discreción para orientar a otros a descubrir el camino trazado por Dios.
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El documento describe la importancia de la dirección espiritual para discernir el proyecto de Dios y seguir su voluntad. Francisco y Clara son ejemplos de guías espirituales que ayudaron a otros a caminar por el sendero de la santidad a través de la oración, el ejemplo de vida y el acompañamiento espiritual. La dirección espiritual requiere experiencia, preparación y discreción para orientar a otros a descubrir el camino trazado por Dios.
El documento describe la importancia de la dirección espiritual para discernir el proyecto de Dios y seguir su voluntad. Francisco y Clara son ejemplos de guías espirituales que ayudaron a otros a caminar por el sendero de la santidad a través de la oración, el ejemplo de vida y el acompañamiento espiritual. La dirección espiritual requiere experiencia, preparación y discreción para orientar a otros a descubrir el camino trazado por Dios.
El documento describe la importancia de la dirección espiritual para discernir el proyecto de Dios y seguir su voluntad. Francisco y Clara son ejemplos de guías espirituales que ayudaron a otros a caminar por el sendero de la santidad a través de la oración, el ejemplo de vida y el acompañamiento espiritual. La dirección espiritual requiere experiencia, preparación y discreción para orientar a otros a descubrir el camino trazado por Dios.
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DISCERNIR EN EL PROYECTO DE DIOS
El ejemplo de Francisco y de Clara
DIRECCIÓN ESPIRITUAL: es la modalidad por medio de la cual el creyente adquiere la capacidad de comprender el proyecto divino. Para un buen discernimiento es importante, además de la oración, de la biblia y los sacramentos, la ayuda de una persona experta en el camino espiritual. Requiere la experiencia en los dos caminos: del Espíritu y la familiaridad con la oración 1. COMO MEDIACIÓN PARA EL PROYECTO DE DIOS La congregación para el clero
Consiste en ayudar a discernir la voluntad de Dios. Es necesario tener en cuenta el
“carisma” peculiar de la vocación personal o de la comunidad en la cual vive el que pide o recibe el consejo y hacer presente confidencialmente la situación que se quiere aclarar. Sin el deseo verdadero de la santidad, se perderá el objetivo principal de la dirección espiritual. La santidad es un objetivo inherente al proceso de fe, esperanza y caridad que debe ser orientado según los signos de la voluntad de Dios en armonía con los carismas recibidos. Juan Pablo II. La dirección espiritual es un don del Espíritu, y los directores espirituales son puntos de referencia precisos, porque miran con el amor que Dios nos mira. Quien es Padre según el espíritu no hará que otros sean iguales a él, sino ayudará a encontrar el camino del reino de Dios, (0rientale lumen 13 Roma 1995). El Papa Benedicto XVI. Es importante el estudio de la espiritualidad cristiana, pues prepara, vuelve idóneo, capacita para enseñar esta disciplina; puesto que la dirección espiritual es una delicada tarea. Su práctica es recomendada para los que quieren seguir al Señor y todos los cristianos que quieran vivir con responsabilidad su fe y de forma especial los que siguen la llamada divina a un seguimiento de cerca, (Benedicto XVI, Discurso a la comunidad de la Pontificia Facultad Teológica, Roma 2011). 2. DE LA DOCILIDAD A LA CAPACIDAD PARA DIRIGIR El director espiritual antes de guiar el camino de un hermano; está llamado a ser sincero y dócil en el dejarse dirigir en su recorrido. Requisitos fundamentales: La experiencia espiritual, la preparación específica, la discreción. La experiencia espiritual: Se refiere no solo al hacer, sino al mismo ser del director. Debe haber experimentado un itinerario significativo para poder servir a otros. Se trata de un saber de la propia experiencia vital y la capacidad para reconocer los signos y las mociones procedentes del Espíritu para la realización de un camino de santidad. Entrenar al que se
Hna. Adriana Sarahí Jarquín OSC Cap
guía para que pueda caminar por sus propias piernas, buscando buenas soluciones por medio del discernimiento. La preparación científica: Debe tener conocimientos básicos de teología espiritual y de psicología. Estar siempre atento a la discreción: consiste en mantener reservadas las informaciones que recibe en los diálogos. Debe saber acoger y escuchar, iluminar y discernir, sostener y hacer crecer, dar consejos al que acompaña, y apoyar, que principalmente se da en la oración. 3. FRANCISCO, MAESTRO DE LA VIDA ESPIRITUAL Francisco valioso guía espiritual para sus hermanos, para Clara y sus hermanas, y para cuantos encuentra a lo largo del camino. Enseña el camino de la desapropiación para poner en el centro de su vida al Señor. Llamado a ser por Dios signo de su amor misericordioso y guía en la llamada y en la voluntad divina. En esto se manifiesta su acompañar espiritual a los hermanos. Exhorta a recorrer la vía de la penitencia que consiste en el vaciarse de toda mundanidad y distracción y dejar espacio solo a Cristo. Es el que les trasmite el deseo de amar y de servir a Jesús por encima de todo, según un estilo pobre y humilde. Francisco guía a sus frailes por un camino de ascesis y contemplación. La dimensión penitencial nos hace libres para donarse a Dios de forma cada vez más totalizante. En su testamento nos indica que en la humanidad y en la pobreza de Cristo, los puntos de referencia de la vida espiritual, son asimilados en el misterio Eucarístico. En la regla no bulada insiste en la vigilancia para no apartar del Señor nuestra mente y corazón; servir con mente y corazón limpio. En las admoniciones presenta cómo un itinerario penitencial puede orientar los dones que un hombre posee sin caer en la trampa del orgullo, poniéndolos al servicio de los hermanos y del proyecto divino. La entrega confiada al Señor ayuda a superar la soberbia y la afirmación personal. Cuando el Espíritu Santo actúa en el corazón, el religioso es humilde, pequeño, pues acoge cuanto Dios le da. La búsqueda de la presencia y la voluntad de Dios se obtiene por la constante contemplación: descubrir la presencia de Dios en los acontecimientos, en la experiencia vivida del ser humano. Como lo podemos ver en Francisco y Clara; la atrajo a tal punto de querer vivir la propia experiencia para su propia edificación y ponerse en la escucha de Dios.
4. CLARA, GUÍA EN EL CAMINO DE LA FE
Con sus escritos, con su palabra, con su ejemplo, indicaba a sus hermanas el camino. Ella es un punto de referencia y una mediación de la voluntad divina. Clara se convierte en una excelente acompañadora espiritual caracterizada por la oración, por el discernimiento y por la contemplación. Demuestra estar siempre bien anclada a los valores evangélicos, sobre todo al recomendar la observancia de la pobreza que representa el corazón del seguimiento de Cristo. Es referencia importante para el discernimiento de Francisco. No es solo plantita
Hna. Adriana Sarahí Jarquín OSC Cap
de Francisco, sino también ayuda en su camino de discernimiento en momento de prueba y de duda. Francisco sabe que puede contar con la virtud de su oración y de su capacidad de comprender los proyectos divinos. Concluyo que Francisco y Clara demuestran ser guías espirituales tanto para los hermanos y hermanas que comparten el mismo itinerario de vida, como para cuantos se dirigen a ellos para tener luces que iluminen su propio camino de conversión. La fuerza de los dos santos está representada por el ejemplo de su vida evangélica. Ellos experimentan la presencia amorosa y transformante de Dios en su vida espiritual y transmiten todo su valor.