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La Cerámica Tradicional Peruana - Sirley Ríos Acuña

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ensayo

Sirley Ríos Acuña1

La cerámica tradicional peruana

Los ceramistas tradicionales del Perú, a la tecnología prehispánica,


incorporaron durante la Colonia técnicas.
En la costa norte Simbilá y Chulucanas se ponen en práctica el paleteado,
el uso de labradoras y el negativo. Cajamarca era una importante región
de producción, queda en la memoria la elaboración de la pallama con
reminiscencias de las vasijas vidriadas del S. XVIII.
En Ayacucho sobresale el distrito de Quinua donde se continúan elaborando
las iglesias de techo. En esta región fue reconocido con un estilo propio
el ceramista Leoncio Tineo Ochoa.
En Puno, en Santiago de Pupuja y Pucará hay la producción de chuas
o chuwas que son platos vidriados, los famosos “Toritos de Pucará”,
las apajatas o jarras matrimoniales y las limitatas, incalimitas o botellas
ornamentales.
En Cusco, que desde la Colonia generó talleres artesanales de cerámica
vidriada y en la primera mitad del S. XIX se impulsó en el ámbito
campesino la elaboración de objetos bruñidos sin vidriar y de color
rojizo.En la Amazonía está la cerámica de los Shipibo-Conibo, que se
caracteriza por su decoración llamado kené y por una pasta muy fina.

1
Historiadora de Arte por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Ac-
tualmente conservadora, curadora e investigadora del Museo Nacional de la Cultu-
ra Peruana.

26
El arte de la cerámica es tes comunes en el quehacer co-
una actividad desarrollada des- tidiano del período precerámico.
de la antigüedad por el hombre La cerámica inicial adopta del
peruano que ha demostrado su mate decorado no sólo la forma
habilidad y creatividad en la sino la técnica del esgrafiado y
elaboración de formas y diseños burilado.
diversos. Hoy esta tradición cul-
tural, producto de sutiles trans- La tecnología cerámica en
formaciones a lo largo del tiem- la época prehispánica llegó a un
po y heredada por los ceramistas alto grado de desarrollo y, no
populares, continúa vigente. sólo eso, desplegó una variedad
de estilos e iconografías que hoy
Del antiguo Perú encontra- despierta una gran admiración a
mos objetos cerámicos de gran nivel mundial. En la Colonia se
belleza que reflejan el entorno incorporaron y fusionaron téc-
socio-geográfico del momento. nicas, formas y motivos, produ-
Los arqueólogos consideran que ciéndose un replanteamiento de
hacia 1850 a. C. se produjo el contenidos temáticos y funcio-
origen de la cerámica. También nes. Comenzó a usarse el torno
algunos investigadores infieren del alfarero occidental y se aplicó
que las formas primigenias de en los acabados el vidriado. Esta
los recipientes de arcilla cocida herencia tecnológica se continúa
se inspiraron en los mates o cala- empleando en las actuales po-
bazas (Lagenaria siceraria) que blaciones de ceramistas.
eran empleadas como recipien-

27
La trayectoria histórica Cerámica de Piura
de este arte tiene larga data y
da cuenta de épocas de floreci- Con la llegada de los espa-
miento y decaimiento, mientras ñoles a tierras del Perú, la costa
en algunas zonas se extingue la norte resultó siendo una de las
producción cerámica en otras primeras zonas cuyas tradiciones
florece y se expande. artesanales se vieron afectadas,
sobre todo, en la zona compren-
Las principales regiones de dida por la antigua cultura Chimú
producción cerámica son: ha- que en aquellos momentos for-
cia el norte Piura y Cajamarca, maba parte del Tahuantinsuyo.
al centro-sur Ayacucho, al sur De ahí que sea uno de los prime-
Puno y Cusco y en la Amazonía ros sitios donde aparece la técni-
la región de Ucayali. ca del vidriado en tono verde o
melado, de forma total o parcial,

Burrito Teresa, Yamunaque Piura

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cubriendo las vasijas locales y los pies. Una vez terminado este
de estilo Inca. Este experimento proceso, la arcilla es cortada en
se notó en recipientes silbado- trozos de diferentes dimensiones
res dobles que aún mantenían su según la pieza a elaborarse. En-
forma y función. Se originó un seguida se procede al paleteado
arte de transición. Este es el caso con una paleta de madera y un
del llamado “caballo andino” o canto rodado. La arcilla es ex-
“caballo chimú” que presenta tendida y formada a fuerza de
una técnica propia de la costa golpes para así eliminar las bur-
norte e iconografía compuesta bujas de aire y asegurar que sea
por un caballo español y un jine- compacta.
te con rasgos muy locales de tipo
norteño. La técnica del vidriado Mientras se mantiene húme-
de esta cerámica de transición da la arcilla, con la labradora de
enseguida quedó de lado en la cerámica se impresiona o sella
costa norte y más bien fue muy la vasija en la parte superior de
desarrollada en otras partes del su panza, en una o dos filas ho-
virreinato peruano como se verá rizontales (Spahni; 1966:25). El
más adelante. uso de labradoras data de tiem-
pos remotos como evidencian
En la costa norte Simbilá se las excavaciones arqueológicas
constituye en uno de los centros recientes. Cajamarca y Mórrope
alfareros que aún pone en prác- son lugares en donde la utiliza-
tica las técnicas ancestrales del ción de labradoras fue frecuen-
paleteado y aplicación de sellos te. Este sello es de forma elíp-
o labradoras para la decoración tica u ovalada que mide entre 9
por impresión. a 10 cm. por 7 cm. y 2 cm. de
espesor. En ambas caras lleva
Se emplea la arcilla mez- diseños incisos: una maceta del
clada con arena para preparar la cual surge una flor de tres hojas
masa que luego es colocada so- adheridas al tallo y en el rever-
bre un saco de yute para amasar- so va una flor junto a un tablero
la con las manos y con ayuda de que en realidad vendría a ser un

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sol y la representación de una la tinajita, además de maceteros
chacra (Idem: 22, 25), diseños (Idem: 28-32).
simbólicos parecidos a los que
aparecen grabados en las illas Otras zonas de Piura, tal es
puneñas. De acuerdo a Villegas el caso de Chulucanas, también
(2001) estos diseños variados emplean la técnica del paleteado
identificarían al artesano o a la y un sello con diseño geométri-
familia ceramista. Las labrado- co aplicado en la parte superior
ras que tienen el macetero se del cuerpo como generalmente
aplican a las vasijas. se dispone la decoración. Así
mismo, las vasijas pueden ser de
Aparte de estos sellos, las color negro, logrado por un hor-
decoraciones pueden hacerse no de reducción que consiste en
mediante incisiones geométri- mantener el oxígeno al interior y
cas (espirales, líneas y zig zag) al no ser liberado penetra las pa-
o por impresión de monedas y redes de la pasta cerámica hasta
huellas digitales (Idem; Spahni; ennegrecerlas. Al lado de objetos
1966:25) domésticos de dimensiones ma-
yores empleados en las famosas
Antes de la cocción se cu- chicherías norteñas se produje-
bre con un engobe ocre rojo para ron recipientes de menor dimen-
evitar que tengan un tono blan- sión como los utensilios para los
cuzco producto de la abundancia condimentos caseros, las minia-
de cal. turas y juguetes para niños.

Las vasijas comunes son: la Hoy la cerámica de Chulu-


olla con dos asas o “tetitas”, la canas es la que más se exporta
sancochera para la sopa, la sar- por su mayor producción y vis-
tén o cacerola, el perol, el agua- tosidad. Destacan las famosas
tero, el muco, el cántaro, el can- gorditas en todas sus variantes
tarito, la jarra, la cantarilla con cuya creación se debió a Gerá-
su tapón de barro cocido, la olla simo Sosa. Sin embargo, la ma-
de chichera, el tinajón, la tinaja y siva producción está generando

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una baja calidad artística, el em- retomado en el S. XVIII hasta
pleo de materiales inadecuados nuestros días donde se da muy
y la imitación de formas de va- esquemáticamente (1981: 62-
sijas foráneas. Entre las familias 63).
tradicionales que mantienen su
calidad artística sobresalen los Los distritos de Matará y
Sosa y los Yamunaqué. San Marcos cuentan con una ar-
cilla blanca que le da un toque
característico a sus jarras con
Cerámica de Cajamarca asas, garrafas, ollas y fuentes, las
cuales son engobadas de blanco
A esta región poco conocida y llevan decoración fitomorfa
por su manifestación cerámica en tono café, pardo o rojizo y a
corresponde un objeto singular: veces son levemente vidriados
la pallama que es un recipiente con almártaga verde (óxido de
aribaloide, reminiscencia de las plomo).
vasijas de ese tipo elaboradas
con la técnica vidriada en el S. La alfarería de Mollepampa
XVIII a solicitud de la élite in- es importante en la producción
caica del Cusco. Esta pallama de ollas y vajillas domésticas de
producida en época contemporá- larga tradición mediante el uso
nea en las alturas de Cajamarca de la técnica del modelado y pa-
en un poblado de olleros, ubica- leteado sobre una horma y del
do en Shudal, es de confección moldeado con moldes bivalvos
rústica y hecha con moldes bi- para piezas grandes. Últimamen-
valvos, técnica propia del norte te las mujeres han incursionado
del Perú. Presenta en el cuello en esta labor realizando juguetes
un rostro humanizado que, se- y piezas pequeñas como platos y
gún Stastny, estructuralmente fuentes destinados mayormente
apareció primero en las grandes al mercado turístico. Son pecu-
vasijas Pacheco de la cultura Ti- liares los jinetes a caballo, jine-
ahuanaco para dejar de ser usada tes guitarristas, toros de cuerpos
en el incario y nuevamente ser gruesos en forma de conopas

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decoradas con espigas en relie- de Ayacucho se halla en el dis-
ve, aves conopas, botellas con trito de Quinua. Son característi-
asa puente y figuras pequeñas, cas sus cerámicas por sus formas
diversas esculturas zoomorfas, peculiares, decoración y colorido
alcuzas, entre otras piezas. terroso. La alfarería era una activi-
dad dedicada exclusivamente por
Otras formas conocidas en los varones. Con el auge del turis-
Cajamarca son los pavos o toros mo y la comercialización en las
sahumadores. De los objetos uti- últimas décadas ha sufrido trans-
litarios resaltan los tiestos para formaciones de diversa índole.
tostar café, ollas y cántaros di-
versos, jarras y demás utensilios. Se dice que antiguamente
Es singular la producción del Quinua fue un pueblo habitado
“dibujo de techo” hecho por los por “olleros”. Actualmente los
tejeros para ser colocados en las objetos domésticos se elaboran
cumbreras al finalizar el techado en menor cantidad. Más bien
de las casas y que son obsequia- los de función ceremonial pro-
dos por familiares o vecinos de liferan. Según Roberto Villegas,
la comunidad. Se encuentran en es difícil señalar desde cuándo
formas de jinetes, yuntas de bue- se comenzaron a realizar piezas
yes, caballos y perros (Villegas; con esta función ceremonial.
2001). Este autor refiere de acuerdo con
la tradición oral de la zona que
Mangallpa es un caserío del fue el ceramista Otccochocco
distrito de San Pablo lugar de el iniciador, quien tuvo como
donde proceden los artesanos seguidores a Dionisio Lope y
golondrinos que trabajan su ce- Faustino Sánchez, apodado “Al
rámica en otras zonas. aire” por su fino trabajo.

Se distinguen dos tipos de


Cerámica de Ayacucho cerámica: la de carácter utilitario
y ceremonial. Entre los utilita-
El principal centro alfarero rios se encuentran vasijas de uso

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doméstico como cántaros, pla- no local son: chunchos, candela-
tos, papayas (especie de teteras) bros, crucifijos, buques, aviones,
y ollas. Dentro de las ceremo- carros, corte celestial, sirenas y
niales son evidentes las iglesias demás innovaciones.
de techo, los animales conopas
(representando venados, gallos, En cuanto al proceso de ela-
toros, carneros, otorongos, lla- boración, primero se obtienen
mas o loros) y los músicos. Otras las arcillas de los yacimientos
piezas destinadas a una clientela de los alrededores (Tantaniyoc,

Iglesia de Quinua Ayacucho

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Moya, Quituara y Huamanqui- cluido el modelado se procede
lla). A esta arcilla denominan al acabado con la definición de
llinco y presenta dos variedades los detalles (ojos, boca o cabe-
de color pardo. Luego, se mez- llo), el engobado total o parcial,
clan estas arcillas con una tercera el pintado de diseños y el pulido
denominada acco. Esta mezcla (Villegas; 2001).
es ejecutada con los pies sobre
una piedra plana, siendo ésta re- Para el engobe y la decora-
emplazada en la actualidad por ción emplean la arcilla llamada
el torno manual. Una vez con- ishma de tono ocre rojo y pardo

Sirena Quinua Ayacucho

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oscuro. Los pinceles lo constitu- casa posee ganado, los floreros
yen plumas de aves del corral. aluden a que es agricultor y la
figura de un músico si es instru-
El quemado de las piezas mentista.
se realiza en hornos rústicos
de adobe, empleando para la Las iglesias se representan
combustión la leña de chamizo con una o más torres rematadas
(osocco o chacco), cocción que en rosetones, con grandes relo-
dura de dos a tres horas. jes y cruces y a veces personajes
en el atrio dentro de escenas de
Los estilos decorativos matrimonio, bautizo o fiestas.
pueden ser: blanco sobre rojo Todas son diferentes.
(para tinajas y figuritas), rojo y
negro sobre blanco (para igle-
sias, tinajas y tachus) y negro Leoncio Tineo Ochoa
y blanco sobre la pasta para los
puyñus. Destacado ceramista Ayacu-
chano que compartió su arte con
Del conjunto de obras des- la agricultura y fue heredero de
tacan las famosas iglesias de la técnica y el oficio de su madre
Quinua con una variedad de María Ochoa quien elaboraba
tamaños, estilos y formas. Se pequeños silbatos con formas de
colocan en las cumbreras de toritos, gallos y campesinos, pin-
las casas después de culminado tados de carmín oscuro y amari-
el techado con fines de protec- llo. Amplió su mundo iconográ-
ción contra los malos espíritus. fico sobre la base de los silbatos.
Esto se realiza dentro de la ce- Al respecto Stastny refiere:
remonia de la safacasa. Estas
iglesias van acompañadas por “...Tineo empezó a hacer
los animales conopas o alguna variaciones cada vez más
jarra con flores. Si se pone una osadas sobre el tema del sil-
conopa toro, según señala Ville- bato. Era éste un campo en
gas, es señal de que el dueño de el cual el ceramista tenía li-
bertad de jugar con las for-

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Nacimiento Familia Tineo Ayacucho

mas. Ninguno de los otros puku, parejas merendando en-


géneros hubiera consentido tre otros personajes); así como
desviaciones pronunciadas una temática religiosa: iglesias,
de los prototipos estableci- santos (San Cristóbal, San Jorge
dos. Es por eso que aún las matando al dragón), cruces de
piezas más elaboradas y de la pasión, cristos nazarenos, na-
considerable tamaño crea- cimientos y la piedad. También
dos por Tineo posteriormen- incursionó en la temática histó-
te, como el San Jorge (...)
rica representando a Manco Ca-
no dejan de tener en algún
pac, Mama Ocllo y su séquito,
lugar oculto la boquilla
del instrumento infantil.” Manco Capac recién salido del
(1981:118). lago Titicaca, al general Sucre,
etc. Presentan sus piezas el color
El tema de la vida cotidia- natural de la arcilla, en ocasio-
na le interesó (mujeres cargando nes los colorea parcialmente con
a sus hijos, músicos de violín, tonos terrosos.
corneta, guitarrista y waqra-

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Sus obras demuestran siem- ámbitos como una labor com-
pre un sosiego expresivo y un plementaria de la agricultura y
estilo propio. Al margen de su la ganadería al igual que en otros
valor estético conserva un valor poblados.
antropológico al plasmar la vida
social de su entorno poblano. En Durante la Colonia en el S.
la década del 50 del S. XX se XVII, se formaron “fábricas” de
contactó con Alicia Bustamante cerámica sobre todo en los luga-
quien lo sacó del anonimato. Sus res, que desde la época prehispá-
creaciones se hallan en diferen- nica se especializaron en dicha
tes museos y colecciones priva- labor. Dichos talleres, según Ts-
das del Perú y el extranjero. chopik, se crearon en Santiago de
Pupuja y Pucará. Allí se enseña-
En 1994 le otorgaron el tí- ron las técnicas del vidriado y el
tulo de Gran Maestro de la Ar- uso del torno de alfarero europeo.
tesanía Peruana. Dos años des- A fines del S. XVII en Pupuja ya
pués, falleció el 25 de febrero de se producían objetos vidriados
1996, en un total abandono por comparados a los que se elabo-
parte de las autoridades como raban en Talavera de España. Así
ocurre con la mayoría de los ge- “...se adoptaron muchos mode-
nios del arte. los españoles incluyendo la rue-
da del alfarero, el horno de tipo
europeo, recipientes hechos en
Cerámica de Puno molde, formas españolas, moti-
vos españoles de diseños y de-
Puno también es otro de coración vidriadas” (Tschopik;
los pueblos alfareros actuales 1989: 166). Sin embargo, esta
de reconocido prestigio, sien- influencia española sobre las for-
do Santiago de Pupuja y Pucará mas y técnicas tradicionales de la
dos de las zonas productoras en cerámica local indígena no pare-
actividad. Desde tiempos remo- ce haberse dado plenamente en
tos la práctica tradicional de la áreas donde la producción alfare-
alfarería se ha afirmado en estos ra se destinaba básicamente para

37
el consumo indígena y donde no objetos artesanales, un sector de
existieron talleres como ocurrió la alfarería campesina asumió la
en Chucuito (Idem). técnica del vidriado colonial en
su versión cromática básica: ver-
Por lo general en los talleres de con ribetes ocres sobre fondo
coloniales trabajaban los cera- blanco amarillento o verdoso en
mistas indios bajo la dirección de platos o chuas (Idem: 13; Stast-
españoles o mestizos. Aparente- ny; 1981:101, 108) que hasta
mente, con el advenimiento de la hoy son producidos pero ya en
etapa Republicana estos centros menor cantidad. Estos utensilios
artesanales especializados en también son cambiados por ob-
cerámica vidriada aún pervivían jetos de plástico.
tal como se lee en la inscripción
de un lavatorio de la colec- Nos centraremos en esta
ción de Elvira Luza “ ‘Dic. 30 oportunidad en las chuas o
de 1839. Fabrica de la losería chuwas. Son platos que en el S.
Gutierrez de la Villa de Pucará. XVII, en el área de Chucuito, se
Soy del uso de D. Pedro Davila mantenían sin vidriar, según in-
Gutierrez’ ” (Stastny; 1986:6). formación de Bernabé Cobo. De
Como se nota las piezas salidas acuerdo al Vocabulario elabora-
de estos talleres estaban destina- do por Bertonio se consignaba
das a un consumo urbano de tipo en la zona de Juli el término chua
doméstico tanto para los grupos como “escudilla para comida”,
señoriales como populares. yura chua era “escudilla profun-
da” y pallalla chua se refería a
La alfarería campesina o del “un plato plano, ni profundo ni
ámbito rural del S. XIX se man- cóncavo” (Tschopik; 1989:166).
tenía con mayor autonomía. Sin Por lo visto, este término aludía
embargo, cuando se inició la de- a un plato con diversas dimen-
cadencia de la loza en el sector siones y para determinados ali-
urbano debido a la importación mentos. Al parecer, ya avanzado
de productos industriales que el S. XVII y quizá ya en el S.
remplazaban poco a poco a los XVIII aparecieron en Chucuito,

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un conjunto de chuas colonia- En la alfarería postcolonial
les vidriadas, de bases anilladas, de Chucuito se elaboraron tazo-
con decoración de diseños reti- nes medianos de dos tipos. El
culados, cursivas y florales en tazón ordinario llamado cuwa,
verde, marrón oscuro o amarillo de 15 a 17 cm. de diámetro por
(Idem: 167-168). Esto no impli- 7.5 cm. de alto, pintado en tonos
caba que eran originarios de allí rojos o blancos con diseños cur-
sino que podían ser expresión de sivos, era usado como plato para
intercambios con la región de la comida. Cuando se llenaba
Pucará y Pupuja. con grasa derretida y se colocaba

Simón Roque Checca Pupuja Puno

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una mecha era empleado como difiere de Chucuito en cuanto al
lámpara y en este caso se deno- uso del vidriado.
minaba meca cuwa. A veces se
usaron como tapas de jarrones Los platos de Pupuja y Puca-
e incensario cuando contenían rá “...son los únicos sobrevivien-
carbón e incienso (Idem: 169). tes de la antigua loza virreinal.
El otro tipo de tazón se conoce Conservan de aquellos tiempos
con el nombre de platillo o platil la misma gama cromática, la for-
cuwa el cual llevaba decoración ma y algunos diseños simplifica-
pintada en rojo y blanco y se em- dos, en todos los cuales recuer-
pleaba en ocasiones especiales dan vivamente a la cerámica de
como platos para la comida en la región de Teruel, en España.”
los matrimonios y otras fiestas e (Stastny; 1981: 121). Presentan
inclusive se señala que antigua- una decoración tricoma de ver-
mente los novios comían allí el des y ocres sobre fondo claro
timpu que simbolizaba su unión (blanco amarillento o verdoso)
(Idem). Tal parece que cuwa con representaciones vegetales
quiere decir chua o chuwa. Ha- o florales, geométricos (líneas,
cia la década del cincuenta del S. zigzag, círculos concéntricos,
XX su uso era común y hoy ha espirales, chevrones, etc.), sol y
decaído. A los motivos cursivos estrella con rostro humano, sire-
de antaño se añadieron en las na charanguista acompañada de
cerámicas otros diseños geomé- aves, caballo, en fin toda una va-
tricos y naturalistas como “...zig- riedad de motivos. Son constan-
zag, reticulados, flores, palomas, tes los peces autóctonos y sim-
gallinas, un pájaro del lago; viz- bólicos del lago Titicaca como
cachas, suches, estrellas, oca- el suche, rodeado por helechos y
sionalmente figuras humanas.” hojas, metiendo la cabeza dentro
(Idem: 172) de una flor, apareciendo solos
o en parejas; también se repre-
Vemos pues que la produc- sentan otras especies de peces
ción de chuas tal como se hacen del lago; asimismo los toros son
en Santiago de Pupuja y Pucará motivos repetitivos, dispuestos

40
de perfil y posados sobre dise- mentados con otros elementos
ños vegetales, con o sin bandera. propiciatorios significando fer-
Estos platos pueden llevar ins- tilidad, protección, fuerza, tran-
cripciones breves de dedicatoria, quilidad, etc. (Idem: 128).
año de elaboración o iniciales
del dueño. Pero no sólo son uti- La presencia del suche con-
litarios en el menaje doméstico vierte en simbólica a la chua ya
de las familias sino que cumplen que este pez conlleva ese sentido
una función simbólica, ritual y desde el prehispánico porque fue
ceremonial. Según Roberto Vi- ampliamente representado junto a
llegas, cuando a la chúa se le otras especies acuáticas en estelas
decora con un toro embanderado y monolitos sagrados de la fase
ésta se considera una illa. Mien- arcaica de Tiahuanaco y ocasio-
tras que si poseen determinadas nalmente en algunos mates coste-
figuras geométricas tienen “...el ños (Idem: 47-48). Es evidente la
poder de llevar la felicidad en el importancia de estos peces en las
seno del hogar” (Spahni; 1966: culturas precolombinas.
47). Al igual que los mates pre-
hispánicos contenían ofrendas Las técnicas empleadas en
de pago a la tierra, que cada dos su manufactura son: el torneado
de enero entregaban los lugare- y el modelado. En Checca Pu-
ños del altiplano, dejándolas en puja se usó un tipo de falso tor-
las ruinas arqueológicas cerca- no llamado “moldecito” (Idem;
nas como el templo incaico ubi- 1966: 43) o plato-torno, hoy
cado por la isla Amantaní (Idem: discontinuado. Servía para dar
172-128). Dichas ofrendas se la forma precisa a los platos. El
denominaban “mesa completa” torno traído por los europeos se
y presentaban una serie de figu- estableció en el espacio andino
ras simbólicas de plomo fundi- pero con ciertas variantes El vi-
do, representando: astros, ma- driado compuesto por un barniz
trimonios, animales domésticos brilloso resulta de la mezcla de
y salvajes, utensilios, muebles e plomo, estaño, escoria, sílex, pie-
instrumentos musicales comple- dra verde y piedra negra, todos

41
molidos y disueltos, obteniendo ma ya calcinados. Dura de dos
colores amarillo, blanco, verde a tres horas (Spahni; 1966:44).
o negro según las proporciones También se emplean hornos
usadas de estos elementos (Pare- construidos con adobes en forma
des; 1989:180). de botella. El combustible es la
leña. Se colocan las piezas unas
La cocción se realiza en un sobre otras, separadas por dis-
horno rústico cavado en la tie- cos de cerámica arenosa, y son
rra, rodeado por piedras que se cocidas entre tres o cuatro horas
levantan alrededor. Como com- (Idem: 64-65).
bustible se toman los excremen-
tos secos de la vaca y sobre éstos Puno igualmente se carac-
se colocan las piezas a cocer y teriza por producir los famosos
luego sobre ésta capa va otra “Toritos de Pucará” que en reali-
capa de excrementos de llama y dad fueron elaborados en Santia-
otra capa de excrementos de lla- go de Pupuja, luego en Pucará y

Torito de Pucará

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más tarde en diversas provincias o jarras matrimoniales asociadas,
haciéndose un uso indiscrimina- con una iconografía compleja, a
do de moldes que han deveni- la prosperidad y fertilidad de los
do en la baja de la calidad de las recién casados. A decir de Stast-
piezas. Stastny cree que el toro ny, serían asimismo, parte de un
“en su forma actual es el resul- sistema de reciprocidad andina
tado de una larga evolución de expresado en su uso:
cuyos antecedentes se conocen
bastantes etapas...” y que el toro “…son usados (...) para
actual “...es el que por los años contener los obsequios de
1940-50 se usaba en la zona. bodas que se entregan a una
Desde entonces se paralizó su pareja de recién casados.
evolución espontánea y el mode- Estos deberán guardar las
lo se repite o adultera para su en- jarras recibidas de parien-
tes y amigos, y llegado el
vío a la capital.” (1981:121). La
momento en que se case un
iconografía se vincula con la fies-
miembro de la familia que
ta mágico-religiosa del señalacuy lo obsequió, devolverán la
(marcación del ganado). En su apajata con un nuevo conte-
confección hacen uso de moldes- nido.” (Idem.).
sellos que representan rosetones
y que son impresos en pedazos de Las limitatas, incalimitas
barro para luego pegar al cuerpo o botellas ornamentales para
del toro. Para remarcar los ojos contener “licores fuertes” repre-
y otros detalles minuciosos del sentan a un hombre sentado be-
animal se emplean palillos. Los biendo, rodeado por animales y
toros de dimensiones mayores se rosetones. La tapa se ubica en la
hacen en 3 etapas: el cuerpo, la montera del personaje. A veces
cabeza y las patas. La cocción y se convierten en jinetes a caba-
el vidriado son las mismas que llo, de cuerpo entero o medio
para las chuas. cuerpo, estando muy decorado.
Estos jinetes escultóricos proli-
Otras piezas de uso tradicio- feran debido a la sugerencia de
nal y ceremonial son las apajatas los artistas indigenistas quie-

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nes se encaminaron a revalorar La tradición prehispánica
el arte tradicional. También se de objetos ceremoniales se man-
manufacturan ánforas, iglesias, tiene durante la colonia subte-
vidriadas completamente o sólo rráneamente asumiendo ropajes
engobadas, figuras de músicos nuevos, poco peligrosos para los
y danzantes, así como una va- intereses de los evangelizado-
riedad de miniaturas de anima- res.
les (toros, zorros, aves, perros,
alpacas, etc.) y de recipientes De la cerámica de tiempos
domésticos que hacen de ju- incas se conocen:
guetes. “Mantiene esta cerámi-
ca su característica decoración “…keros, arybalos, ollas,
con tonos pardos, verdes, ocre platos, vasijas de un solo
y marrón melado, muchas veces color o con decoración
con la típica roseta decorativa.” geométrica simple y repeti-
(Castañeda; 1977:12). da. También se hacían vasi-
jas policromas con asas en
forma de cabeza de felinos y
Son característicos en Acora
aunque en menor cantidad,
las imágenes escultóricas hechas
se han encontrado vasijas
con fines propiciatorios para la zoomorfas en forma de taru-
festividad de Santa Bárbara. cas, camélidos, lagartijas,
y otros animales, así como
plantas en los cuales están
Cerámica de Cusco modelados estos animales
en relieve. Los colores em-
La cerámica cusqueña nos pleados para realizar la
ofrece aspectos diferentes res- decoración eran el azul co-
pecto a la producción de Aya- balto logrado con azurita, el
cucho pero con características amarillo, con oro pimente,
similares a Puno en cuanto al así como el ocre, carmín y
empleo de técnicas y a las for- verde que se obtuvieron con
mas. zinabrita.” (De La Fuente;
1992:94)

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Con la irrupción europea un encuentro/ conflicto de cultu-
se produce un choque cultural ras que son más de transacción o
generando cambios en la vida y “negocio” entre ambas.
costumbres del hombre andino
que tuvo que asimilar las nue- La industria cusqueña de
vas formas y técnicas cerámicas cerámica vidriada expresada en
llegadas con los artesanos es- talleres artesanales, posiblemen-
pañoles. Encontramos en Cus- te se inició a fines del S. XVI,
co un reflejo de aquello en los teniendo semejanzas con la de
objetos llamados de transición: Lima en cuanto a su organiza-
técnica e iconografía autócto- ción gremial. El vidriado se apli-
na (andina) pero forma foránea có tempranamente en objetos de
(europea). Según Pablo Macera, tradición prehispánica a manera
estas piezas son el resultado de de ensayo (Stastny; 1986:7). En

Candelero Charamuray, Cusco

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la segunda mitad del S. XVIII se amaru andino (cara achatada,
produjo un renacimiento de for- melena serpenteada y círculos
mas y funciones prehispánicas concéntricos en el cuerpo). Así
de cerámicas cubiertas por un se difundían cultos secretos.
vidriado tricolor (verde, marrón Aparecieron también amarus sin
y amarillo sobre crema o amari- vidriar.
llo, o azul y marrón sobre crema)
hechas a pedido de la nobleza En la primera mitad del S.
incaica que seguramente mantu- XIX estas obras cerámicas se
vo oculto el uso de sus objetos retomaron en el ámbito campe-
rituales, inspirados en los ultis sino, las conopas en forma de
y conopas incaicas de piedra, alpacas y llamas poco a poco se
convertidos en nuevos huacos convertirían en toros conopas:
(Stastny; 1981:59). Surgen va-
sijas aribaloides decoradas con “Sin patas, con base plana
rostros figurados en el cuello, como la de los camélidos,
águilas bicéfalas, flores y ho- estas piezas poseen el vigor
jas pintadas en el cuerpo. Otras y la concisión volumétrica
piezas aribaloides se cubren con de esculturas prehistóricas.
“…ornamentación sincrética Quienes los modelaron es-
taba lejos de entender cómo
aplicada en relieve y colorea-
sintetizar en barro las for-
da en verde y amarillo. Leones,
mas anatómicas del animal.
delfines y sirenas del vocabula- Sobre las fórmulas conoci-
rio ornamental renacentista, se das de la alpaca se estable-
confunden con representaciones cen las correcciones necesa-
del Inca en vestimenta real re- rias para dar a entender el
cibiendo la ofrenda floral de la volumen inmenso, la fuerza
Ñusta y acompañado por llamas contenida, el poder oculto
y monos.” (Idem: 62). Aparecen de la bestia sojuzgada. Pero
figuras en forma de leones eu- pasarán aún muchas déca-
ropeos y transformados en otro das de esfuerzo, de errores y
ser por presentar características enmiendas, antes de que los
formales que coincidían con el toros alcancen la forma pre-
cisa y elegante de las piezas

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de Santiago de Pupuja.” también se manufacturan objetos
(Idem; 101). de uso doméstico: k’analla (tos-
tadora), kaka (porongo), manka
Por esta época dentro de la (olla), p’uku (plato), chato (va-
alfarería campesina la cerámica sija para preparar desayuno) y
bruñida sin vidriar y de color ro- tumin (porongo para transportar
jizo se hace común. chicha o agua) que es una va-
riante del aríbalo (Idem).
Las dimensiones de los ob-
jetos se reducen como para for- Hace poco se dio a conocer
mar parte de la mesa de ofrendas en el ámbito limeño la produc-
(Idem: 106). Las chuas o platos ción de cerámica vidriada de
también se produjeron en la zona la comunidad de Charamuray,
del Cusco debido a su estrecha ubicada en el distrito de Col-
vinculación con Puno. Desde el quemarca de la provincia de
incario estos recipientes, sin vi- Chumbivilcas. Principalmente
driar, se encontraban decorados se producen piezas utilitarias y
y pintados con el motivo suche en menor proporción piezas de-
o pez del lago, las realizadas ac- corativas y rituales. Las ollas o
tualmente son tan parecidas a las rumimankas, las jarras, platos,
puneñas tanto en técnica como tazas, tostadores, teteras, fuen-
en motivos. tes, peroles y cuartillas confor-
man el rubro utilitario (Roel;
Hoy en día se continúa con- 2009). Dentro de lo decorativo
feccionando en Sicuani piezas se encuentran unas vasijas ador-
ceremoniales para ritos de pago nadas con figuras de aves, flores
a la pachamama: las kochas o y personas; floreros simples con
pacchas en donde se echa la chi- dos colibríes a modo de asas;
cha de maíz, de maní o molle, florero mellizo compuesto por
llevan aplicaciones de culebras; dos vasijas unidas; candelabros
las conopas en forma de caméli- o candeleros con un individuo
dos o aves, son llenados con “li- sentado, aves con alas extendi-
cor fuerte” (Villegas; 2001). Así das o un picaflor en vuelo. Entre

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las piezas rituales destacan los cia. La mezcla es cernida y ama-
toros y figuras humanas que se sada con los pies y las manos.
emplean con fines protectores Luego se hacen tiras o rollos que
durante el wasichakuy o techado van colocando en espiral. A esta
de las casas. También se repre- técnica se llama “colombin”. El
senta el cóndor rachi que es el alisado se hace con un fragmen-
cóndor montado sobre el lomo to de una cerámica pulida, un
del toro (Idem.). trozo de calabazo una piedra de
río o con semillas grandes. La
cocción se realiza sobre unas ra-
Cerámica de la Amazonía mas de árbol y vasijas viejas, co-
locando las piezas boca abajo y
En la Amazonía son varios leña alrededor (Villegas; 2001).
los grupos étnicos dedicados a
la elaboración de cerámica, sien- Para barnizar las piezas em-
do los más representativos los plean el yomosho o resina de ár-
Shipibo-Conibo, asentados en la bol y ésta se aplica a las vasijas
región del Ucayali. calientes. El maosh o tierra blan-
ca y el mashinti o tierra colorada
Esta cerámica Shipibo- sirven para pintar las mocahuas,
Conibo se caracteriza por su callanas y otros objetos. Como
decoración llamado kené y por pinceles emplean la hoja de ce-
presentar una pasta muy fina. La bón, el pelo, la caña brava y al-
actividad está exclusivamente godón atado a un palito.
dedicada por las mujeres de la
comunidad. Las formas varían según
el uso: platos, cántaros, ollas,
Se usan diversos tipos de ar- cántaros antropomorfos, vasijas
cilla y principalmente del color en forma de cruz y con formas
azul grisáceo, obtenidas en las animales. El quempo o mocahua
lagunas. Ésta se mezcla con las sirve para tomar el masato, que
cenizas del árbol apacharama es el licor de la yuca fermentada.
para darle una mejor consisten- El shomo es una tinaja común y

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Joni Shomo Shipibo-Conibo Ucayali

se usa para almacenar y fermen- rácter simbólico y hacen referen-


tar el masato. Los joni shomo cia al agua, río, laguna y anima-
son los cántaros antropomorfos les míticos como la boa acuática
que por lo general están en pa- y el manatí, además de signos
reja. cósmicos y religiosos como la
cruz del sur. n
La decoración en las ollas se
realiza con incisiones y con en-
gobe para los cántaros, tinajas y
platos.

Las decoraciones son de ca-

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