11 Los 4 Caminos1
11 Los 4 Caminos1
11 Los 4 Caminos1
La realización, la inmortalización, no es una propiedad con la que nacen los seres, pero
sí pueden conquistarla. Los caminos son explicados de esta manera: 1º El Camino del
Fakir 2º El Camino del Monje 3º El Camino del Yogui. y 4º El Camino Recto.
Todo el camino del Fakir está hecho de ejercicios físicos increíblemente penosos. Se
mantienen de pie en la misma posición, sin movimiento alguno, durante horas, días,
meses o años; o bien, sentados sobre una piedra desnuda bajo un Sol implacable, bajo la
lluvia, en la nieve, etc., mantienen los brazos extendidos tiempo indefinido o bien se
torturan con fuego o con un hormiguero en el que ponen sus piernas desnudas, y así
sucesivamente.
En 1902 el Fakir Agastiya de Bengala, India alzó un brazo en forma recta por encima de
su cabeza. Agastiya era un hindú para quien todos los placeres y dolores del cuerpo eran
Maya, una mera ilusión, Agastiya adoptó esa postura peculiar –para la mente
occidental– partiendo de una convicción religiosa.
Durante los tres primeros meses después de haber adoptado esa postura, se
experimentan dolores terribles, a menos que uno verdaderamente sea un maestro del
poder de la mente sobre la materia. Después de tres meses sin embargo, mantener el
brazo levantado es, en comparación, un juego de niños; ya para entonces el miembro
está absolutamente rígido, con muy poca o ninguna circulación sanguínea.
Otro Fakir se había mantenido día y noche, durante 20 años, sobre la punta de los dedos
de las manos y pies. Ya no podía enderezarse ni desplazarse, sus discípulos lo
transportaban y lo llevaban al río, donde lo lavaban como a un objeto. Si el Fakir no se
enferma o muere, desarrolla en él lo que puede llamarse voluntad física, pero esto no
significa la creación del cuerpo de la Voluntad Consciente o Cuerpo Causal.
Bien vale la pena, además, comentar lo que al respecto dice el Bhagavad Gita, el Canto
del Señor, libro sagrado indostánico: “Los hombres que practican severas austeridades
no recomendadas por las Escrituras, sólo por ostentación o egoísmo, esos apegados y
concupiscentes, desprovistos de sensatez, torturan a todos los órganos del cuerpo, y a
Mí también que moro dentro del cuerpo. ¡Conócelos, son de propósitos demoníacos!”.
En cuanto al camino del monje se refiere, éstos desarrollan la voluntad sobre sus
emociones, pero sus demás facultades pueden quedar sin desarrollo. Para que la fe sea
un puente seguro hacia la liberación, deben también cultivarse las capacidades físicas e
intelectuales, lo que se realizará a base de nuevos sacrificios y austeridades. “Un monje
tiene que llegar a ser un yogui y un Fakir”.
Son muy escasos los monjes que llegan lejos, más escasos aun los que triunfan sobre
todas las dificultades que impone el Real Camino; pues la Iniciación la da la diosa Isis
Por la naturaleza de las prácticas empleadas por los yoguis no hay duda de que se
desarrollen ciertos poderes psíquicos como relajación mental, concentración (es muy
sabido el poder de la telequinesia, es decir, mover objetos a distancia con la fuerza
mental), telepatía, poderes hipnóticos, etc. Pero si se olvidan de la Doctrina de los
Muchos Yoes, esto puede conducir a la paranoia o delirios de grandeza; sienten que han
alcanzado la auténtica maestría, más esto sólo conduce al desarrollo de siddhis o
poderes inferiores.
EL CUARTO CAMINO.
El Cuarto Camino es la Senda del Matrimonio Perfecto, la vía del ser inteligente, del
que estudia la Kábala y la Alquimia empleándolas en la realización armoniosa de todas
sus infinitas posibilidades, quedando sintetizadas en el despertar de la conciencia,
basado en la desintegración del “yo psicológico”.
Este camino no exige que la persona se retire del mundo, o que abandone todo contacto
con los seres, las cosas y los eventos, sino que requiere una preparación adquirida en el
gimnasio psicológico de la vida práctica. Esta vía comienza mucho más lejos que la del
yogui. Su centro de gravedad reside directamente en la conciencia o esencia anímica. Es
necesario estar preparado para entrar al Cuarto Camino.
El hombre que quiere seguir este sendero tiene que reunir en su vida condiciones
favorables al trabajo, o por lo menos aquellas que no lo hagan imposible; porque es
necesario convencerse de que tanto en la vida exterior como en la interior, ciertas
condiciones pueden constituir barreras infranqueables para el Cuarto Camino. Este
Camino es mucho menos conocido que los otros tres tradicionales. El Cuarto Camino es
muy exacto y mucho más perfecto que los otros tres.
Y hemos llegado a un punto crítico, difícil, en esta plática que damos aquí. Gurdjieff,
Ouspensky, Nicoll, y muchos otros autores de la Cuarta Vía, –gnósticos también como
nosotros porque nosotros somos de la Cuarta Vía o Cuarto Camino–, pensaron que
podía desintegrarse, cualquier “agregado psíquico inhumano”, es decir, cualquier
defecto, cualquier “yo” a través de la simple comprensión creadora, y nada más.
Gurdjieff cometió un error imperdonable, por el cual, naturalmente, se echó un grave
Karma encima, y fue haberse pronunciado contra la Divina Madre Kundalini. ¿Qué lo
hizo por ignorancia? No lo niego, eso es así. Pero de todas maneras, la ignorancia de la
Ley no excluye su cumplimiento. Confundió a la Serpiente Sagrada Kundalini con el
abominable Órgano Kundartiguador y le atribuyó a Devi Kundalini los defectos
izquierdos y tenebrosos del abominable Organo Kundartiguador.
"La escuela Gnóstica del cuarto camino es muy antigua: viene de los tiempos
arcaicos, es el fundamento de los grandes misterios, se encuentra viva en el Gnosticismo
de los egipcios, fenicios, caldeos, etcétera, y también entre los atlantes y los lemures".
"Hay que recorrer la senda de ese cuarto camino; nosotros tenemos que marchar
equilibradamente con la ciencia, la filosofía, el arte y la religión, que son las cuatro
columnas sobre las cuales se apoyan las escuelas gnósticas".
Nosotros los Gnósticos recorremos el cuarto camino a plena conciencia. Durante el acto
sexual transmutamos los instintos brutales del cuerpo físico a voluntad, las emociones
pasionales del astral en amor, los impulsos mentales en comprensión; y nosotros como
espíritus realizamos la GRAN OBRA. Así recorremos los cuatro caminos en la práctica.
No necesitamos hacernos fakires para el primer sendero, ni monjes para el segundo, ni
eruditos para el tercero.
Quien la despierta y la hace subir por su médula espinal recibe la espada flamígera y
entra entonces al EDEN. En la Serpiente se halla la redención del hombre, pero
debemos estar en guardia contra la astucia de la serpiente. Se debe contemplar la fruta
prohibida y aspirar su aroma, pero recordad lo que dijo el SEÑOR JEHOVA: "SI
COMIERES DE ESE FRUTO MORIREIS". Debemos gozar la dicha del amor y adorar
a la mujer. Un buen cuadro nos arroba, una bella pieza de música no lleva hasta el
éxtasis, pero una bella mujer adorable nos da ganas de poseerla en el acto. Ella es la
viva representación de DIOS MADRE. El acto sexual con la adorado tiene sus delicias
indiscutibles.
Los Grandes sacerdotes habían jurado SILENCIO, y la llave del ARCA de la ciencia se
ocultaba a los ojos del pueblo. LA MAGIA SEXUAL SOLO LA CONOCIAN Y
PRACTICABAN LOS GRANDES SACERDOTES. LA SABIDURIA DE LA
SERPIENTE es la base de los grandes MISTERIOS. Esta se cultivó en las ESCUELAS
DE MISTERIOS de Egipto, Grecia, Roma, India, Persia, Troya, México Azteca, Perú
Incaico, etc., etc.
Los viejos Sabios del Egipto Sagrado grabaron en sus muros milenarios el símbolo
divino de la Culebra Sexual. El Secreto de la MAGIA SEXUAL era incomunicable. Ese
es el GRAN ARCANO. Aquellos infelices que divulgaban el secreto INDECIBLE, eran
condenados a pena de muerte. Se les llevaba a un patio empedrado, y ante un muro
milenario cubierto de pieles de cocodrilo y jeroglíficos indescifrables, se les cortaba la
cabeza, se les arrancaba el corazón y sus cenizas malditas eran arrojadas a los cuatro
vientos. Nos vienen ahora a la memoria, CAZOTE, el gran poeta francés que murió en
la guillotina durante la Revolución Francesa. Este hombre profetizó en célebre banquete