Propuesta de Investigacion para El Cultivo de Tomate de RT
Propuesta de Investigacion para El Cultivo de Tomate de RT
Propuesta de Investigacion para El Cultivo de Tomate de RT
Normalmente, estamos más pendientes de lo que sucederá al cultivo cuando las temperaturas son
altas, pero no cuando son bajas.
Para que un fruto logre tener su óptimo de cuaje, se deben presentar condiciones favorables de
humedad y temperatura en el día y por las noches.
Para lograr un óptimo cuaje la temperatura mínima diaria debe alcanzar entre 17 y 19°C, pero la
temperatura óptima es de 23 a 25°C.
Clima nocturno
Las condiciones de clima de las noches también pueden afectar al cuaje de los frutos. Por ello es
importante equipar y manejar apropiadamente los invernaderos para lograr mejores resultados.
Tal vez porque el tema de temperatura acapara la atención, la humedad relativa (HR) es
injustamente ignorada. Sin embargo, este punto es tan importante en la agricultura como el
anterior relativo al manejo de la temperatura nocturna y diurna.
De hecho, muchos de los problemas de la agricultura están enfocados en la humedad relativa del
ambiente.
Cuando el cultivo sufre de una humedad relativa alta, se incrementan las condiciones para que se
desarrollen enfermedades en el cultivo. Además se presentan las situaciones siguientes:
Por el contrario, un cultivo que sufre de humedad relativa baja ve su polen secar antes de
germinar, disminuyendo el periodo de polinización. Además, se prestan las condiciones para el
desarrollo de oídium.
Por otra parte, cuando las altas temperaturas y la baja humedad relativa se combinan, esta
situación provoca en las plantas que la asimilación del calcio se dificulte, aumenta con ello el
porcentaje de Pudrición apical.
Un cultivo cuya temperatura está por debajo del mínimo requerido (17 a 19°C), va sufrir los
siguientes problemas fisiológicos:
El ovario se deforma.
Es común observar racimos de frutos muy grandes que
se bifurcan
El nitrógeno en exceso tiene un efecto contrario al producido por el calor (plantas se reduce en
crecimiento).
Si la temperatura baja a -2°C — el punto mínimo de resistencia — las plantas mueren, si ésta
permanece por dos horas continuas.
Las hojas de la planta se enrollan como medio de defensa contra las temperaturas extremas.
Cuando aumenta la temperatura por encima de 35°C se disminuye el número de granos de polen.
Cualquier floración en esos días disminuye drásticamente, su cuaje o polinización y esos racimos
se pierden o se obtienen sólo dos o tres tomates. Además:
Las flores en los racimos disminuyen, es muy común apreciar racimos muy raquíticos.
El tubo polínico (estilo), se alarga y por tal razón es imposible una fecundación natural.
El número de frutos bofos o huecos aumenta y la calidad en los mismos baja drásticamente.
En el caso de los tomates Roma o saladette, se nota un alargamiento del fruto — practicamente se
pierde su forma típica y en ocasiones se ponen puntiagudos.
Los tallos se alargan. El primer racimo sale muy alto y los espacios entre un racimo y otro son muy
largos. (No se asusten si van de calor a frío, pero si es de frío a calor tendrán problemas de
productividad).
Cuando se usa acolchado, deben monitorear las temperaturas del cuello de la raíz y no usen como
remedio dar más agua que la necesaria — supuestamente para enfriar — ya que las enfermedades
fungosas en el sistema radicular aumentan en estas condiciones.
El autor de este artículo, Marino Valerio, va a presentar en el Congreso Internacional de Tomate el
miercoles, 25 de julio, sobre la producción de plántulas, adaptación de variedades a su zona y
sistema de cultivo y manejo poscosecha.
La investigación permite concluir que los dos sistemas no influyen en la parte genética del cultivo
sin embargo es importante resaltar que los dos sistemas presentaron un alto porcentaje de
chumasquina producto del descuido técnico de los encargados. También se pudo determinar que
el cultivo se puede recuperar y alargar su vida productiva a través de la utilización de mertec y el
benlatec.
Se recomienda
realizar investigaciones con parcelas mas distanciadas y evaluar asi el efecto de cultivo trampa,
además de determinar el costo beneficio de la prolongación de la vida útil de la planta.
Descripción del área: El área de producción de hortalizas cuenta con un área aproximada de
761.28metros cuadrados, distribuidas en un solo lote de los cuales actualmente está distribuido
así: se utilizan 250metros cuadrados para la producción de tomate, habichuela y girasol. El cultivo
está constituido por 385 plantas de tomate en 220metros cuadrados, 114 plantas de habichuela
en 120metros cuadrados y 37 plantas de girasoles en 40metros cuadrados, con un tutorado para el
cultivo de tomate y habichuela estructurado en guadua, alambre liso y piola. El agua para el riego
esta siendo suministrada del sistema de acueducto por medio de regaderas y mangueras, ya que
no se ha podido implementar otro tipo de riego como el de gravedad proveniente de la acequia y
el de goteo que proviene del aljibe a través de motobomba.
MARCO CONCEPTUAL
Para un buen desarrollo del cultivo de tomate se ha tenido en cuenta la exigencia de un manejo
adecuado, garantizando una mayor producción limpia, sana y con una mejor aceptación en los
consumidores. Por esta razón en la investigación se han tenido en cuenta todos los aspectos que
de una u otra manera son indispensables para el desarrollo y producción del cultivo, por lo cual se
debe conocer, prevenir, controlar y aplicar en el momento determinado, ya que con tan solo la
ausencia de uno de estos se vera reflejada el mal manejo del mismo. 1.2.1. Requerimientos
edafoclimáticos: El manejo racional de los factores climáticos de forma conjunta es fundamental
para el funcionamiento adecuado del cultivo, ya que todos se encuentran estrechamente
relacionados y la actuación sobre uno de estos incide sobre el resto. 16 1.2.1.1. Temperatura: es
menos exigente en temperatura que la berenjena y el pimiento. La temperatura óptima de
desarrollo oscila entre 20 y 30º C durante el día y entre 1 y 17º C durante la noche; temperaturas
superiores a los 30-35º C afectan la fructificación, por mal desarrollo de óvulos y al desarrollo de la
planta en general y del sistema radicular en particular. Temperaturas inferiores a 12-15º C
también originan problemas en el desarrollo de la planta. A temperaturas superiores a 25º C e
inferiores a 12º C la fecundación es defectuosa o nula. 1.2.1.2. Humedad: la humedad relativa
óptima oscila entre un 60% y un 80%. Humedades relativas muy elevadas favorecen el desarrollo
de enfermedades aéreas y el agrietamiento del fruto y dificultan la fecundación, debido a que el
polen se compacta, abortando parte de las flores. El rajado del fruto igualmente puede tener su
origen en un exceso de humedad edáfica o riego abundante tras un período de estrés hídrico.
También una humedad relativa baja dificulta la fijación del polen al estigma de la flor. 1.2.1.3.
Luminosidad: valores reducidos de luminosidad pueden incidir de forma negativa sobre los
procesos de la floración, fecundación así como el desarrollo vegetativo de la planta. En los
momentos críticos durante el período vegetativo resulta crucial la interrelación existente entre la
temperatura diurna y nocturna y la luminosidad. 1.2.1.4. Suelo: la planta de tomate no es muy
exigente en cuanto a suelos, excepto en lo que se refiere al drenaje, aunque prefiere suelos
sueltos de textura silíceo-arcillosa y ricos en materia orgánica. No obstante se desarrolla
perfectamente en suelos arcillosos enarenados. En cuanto al pH, los suelos pueden ser desde
ligeramente ácidos hasta ligeramente alcalinos cuando están 17 enarenados. Es la especie
cultivada en invernadero que mejor tolera las condiciones de salinidad tanto del suelo como del
agua de riego. 1.2.2. Variedad: Las características del tomate chonto (hibrido Santa Clara) presenta
un excelente rendimiento en cuanto al desarrollo uniformidad y productividad con buen tamaño y
peso, buena precocidad, su estructura es firme y tolera las temperaturas bajas por lo cual se
adapta con facilidad a zonas de clima frió. Posee cierta resistencia al ataque de plagas y
enfermedades como: alternaría y nematodos. 1.2.3. Marco de plantación: El marco de plantación
se establece en función del porte de la planta, que a su vez dependerá de la variedad comercial
cultivada. El más frecuentemente empleado es de 1,5 metros entre líneas y 0,5 metros entre
plantas, aunque cuando se trata de plantas de porte medio es común aumentar la densidad de
plantación a 2 plantas por metro cuadrado con marcos de 1 m x 0,5 m. Cuando se tutoran las
plantas con perchas las líneas deben ser “pareadas” para poder pasar las plantas de una línea a
otra formando una cadena sin fin, dejando pasillos amplios para la bajada de perchas
(aproximadamente de 1,3 m) y una distancia entre líneas conjuntas de unos 70 cm. 1.2.4. Poda de
formación: Es una práctica imprescindible para las variedades de crecimiento indeterminado. Se
realiza a los 15-20 días del trasplante con la aparición de los primeros tallos laterales, que serán
eliminados, al igual que las hojas más viejas, mejorando así la aireación del cuello y facilitando la
realización del aporcado. Así mismo se determinará el número de brazos (tallos) a dejar por
planta. Son frecuentes las podas a 1 o 2 brazos, aunque en tomates de tipo Cherry suelen dejarse
3 y hasta 4 tallos. 18 raíces, y que consiste en cubrir la parte inferior de la planta con arena. El
rehundido es una variante del aporcado que se lleva a cabo doblando la planta, tras haber sido
ligeramente rascada, hasta que entre en contacto con la tierra, cubriéndola ligeramente con
arena, dejando fuera la yema terminal y un par de hojas. 1.2.6. Tutorado: Es una práctica
imprescindible para mantener la planta erguida y evitar que las hojas y sobre todo los frutos
toquen el suelo, mejorando así la aireación general de la planta y favoreciendo el
aprovechamiento de la radiación y la realización de las labores culturales (destallado, recolección,
etc.). Todo ello repercutirá en la producción final, calidad del fruto y control de las enfermedades.
El tutorado a realizarse será el sistema de espaldera o sistema de florida el cual consiste en una
espaldera con colocación de estacones de 2 metros de alto cada 3 o 4 metros; a partir del suelo, se
templan cuerdas de polietileno o alambres con puntillas de 2 pulgadas cada 40cm hacia arriba,
encajonando las plantas. Entre las estacadas se van acomodando las plantas que se mantienen
verticales, por medio de las cuerdas. Esta se va enrollando en espiral alrededor de los tallos a
medida que las plantas crecen. 1.2.7. Destallado: Consiste en la eliminación de brotes axilares para
mejorar el desarrollo del tallo principal. Debe realizarse con la mayor frecuencia posible
(semanalmente en verano-otoño y cada 10-15 días en invierno) para evitar la pérdida de biomasa
fotosintéticamente activa y la realización de heridas. Los cortes deben ser limpios para evitar la
posible entrada de enfermedades. En épocas de riesgo es aconsejable realizar un tratamiento
fitosanitario con algún fungicida-bactericida cicatrizante, como pueden ser los derivados del cobre.
1.2.8. Deshojado: Es recomendable tanto en las hojas senescentes, con objeto de facilitar la
aireación y mejorar el color de los frutos, como en hojas enfermas, que 19 deben sacarse
inmediatamente del invernadero, eliminando así la fuente de inóculo.
www.infoagro.com/hortalizas/tomate. 1.2.9. Riego: Es importante una disponibilidad suficiente de
agua para la germinación o recuperación de las plántulas en el transplante. Un crecimiento
temprano rápido es esencial para una buena producción, por lo tanto, en esta época es esencial
una irrigación óptima. Las necesidades de agua en las plantas aumentan a medida que crecen pero
el subministro de agua se debe eliminar durante la recolección. Los riegos se deben hacer en la
mañana para que las plantas se sequen antes de la noche. Es importante que no se presenten
fluctuaciones fuertes en los ríos, pues esto resulta en rajaduras de los frutos. Los periodos críticos
en cuanto a las necesidades de agua son: - Altas y después del transplante para asegurar que las
plantas peguen. - 3 ó 4 días después. - Durante el crecimiento la floración y fructificación. La
frecuencia dependerá de la época, se recomienda: - En invierno no regar. - En verano intenso 4 á 7
veces/semana. - En verano moderado 3 a 4 vez/semana. (Federación nacional de cafeteros.
Programa de desarrollo y diversificación de zonas cafeteras del 1979-1983. p 286.) 1.2.10.
Fertilizantes: Las necesidades de fertilizante dependen de la fertilidad del suelo el contenido de
materia orgánica, la humedad, la época del año, la variedad y producción esperada del cultivo. Por
esto, las aplicaciones estarán sujetas a resultados de análisis de suelo y a las experiencias locales.
20 Como parámetros generales, se debe tener en cuenta lo siguiente: - El tomate es una planta
exigente en nutrientes. Requiere de una alta disponibilidad de potasio y fósforo. - Aunque la
exigencia de nitrógeno es alta, un exceso de este elemento puede llevar a un desarrollo vegetativo
con bajo porcentaje de formación de fruta. - El fertilizante debe tener una relación NPK 1:2:1 Ó
1:3:1 con el fin de evitar deficiencias de fósforo. Este elemento, con su influencia en el crecimiento
de las raíces es básico para la absorción de de otros nutrientes y de agua. Además el fósforo
influye en el numero de flores formadas y en la calidad de la fruta. (El cultivo del tomate.
Federación de cafeteros, diseño de impresión quinta edición. P22). 1.2.11. Plagas: el monitoreo
para el control de plagas en el cultivo del tomate debe ser constante, por ello se recomienda que
la tomatera sea provista de aireación y luminosidad y en el caso del riego debe ser aplicado solo
cuando sea necesario para evitar el exceso de humedad y aparición enfermedades fúngicas. Se
considera una plaga a cualquier tipo de organismo que por su densidad de población perjudica los
cultivos, la salud y los bienes produciendo pérdidas masivas, la tabla 1 ilustra las plagas
presentadas en el cultivo, el daño producido y su posible control. Federación Nacional de
Cafeteros, El Cultivo de Tomate; Quinta Edición; Pág. 1.2.12. Enfermedades fisiológicas: se realiza
inicialmente un diagnostico y posteriormente un control de las enfermedades (patología) de las
plantas. Cubre el estudio de los agentes infecciosos que atacan plantas y desordenes abióticos o
enfermedades fisiológicas.
Federación Nacional de Cafeteros, El Cultivo de Tomate; Quinta Edición; Pág. 15. Enfermedades
producidas por bacterias (bacteriosis): chancro bacteriano del tomate (clavibacter
minchiganensis), mancha negra del tomate (Pseudomonas syringae p.v. tomato), roña o sarna
bacteriana (xanthomonas cmpestris p.v. vesicatoria), podredumbres blandas (erwinia carotovara
subsp. Carotovara), chancro bacteriano del tomate (clavibacter michiganensis subsp.
Michiganensis). Puede afectar a plántulas que presenten síntomas de marchites y muerte. En
plántulas adultas se marchitan las hojas inferiores. En tallo, en ocasiones se observan chancros
oscuros, longitudinales y abiertos que pueden exudar un liquido amarillo al realizar un corte
longitudinal al tallo. En frutos aparecen manchas en forma de ojo de pájaro de tres a seis
milímetros de diámetros, con el centro oscuro y circulo amarillo 1.2.13. Virosis en tomate: Virus
del bronceado del tomate: Produce enanismo y producción nula o escasa; a veces las plantas
mueren. Generalmente se producen en hojas bronceadas con puntos y manchas necróticas que a
veces afectan a los pecíolos y tallos; en frutos aparecen manchas, maduración irregular,
deformaciones y necrosis. La transmisión se produce mediante varias especies de trips. Virus del
mosaico del pepino: Debido a la gran variabilidad genética, los síntomas producidos por diferentes
cepas de virus pueden ser distintos. En tomate, las cepas comunes de CMV producen síntomas de
mosaicos foliares en forma de manchas de color verde claro-verde oscuro. La transmisión se
realiza por pulgones. 25 Virus del rizado amarillo del tomate: En plantas pequeñas se produce
parada del crecimiento; en planta desarrollada, los foliolos son de tamaño reducido. En los frutos
no se observan síntomas, solo una reducción de tamaño. Virus del mosaico del tomate: En las
hojas de tomate se observa un mosaico verde claro-verde oscuro. Los frutos aparecen con
deformaciones, manchas generalmente amarillas y a veces maduración irregular. La transmisión se
realiza por semillas y mecánicamente por contacto de manos, herramientas, etc. No se conocen
vectores específicos naturales. Virus Y de la patata: En tomate se producen suaves mosaicos
foliares en forma de manchas de color verde claro-verde oscuro; en ocasiones las plantas
presentan manchas necróticas foliares visibles por el haz y por el envés que a veces se extiende a
pecíolos y tallos. Se transmite por varias especies de pulgones. Virus del enanismo ramificado del
tomate: En las hojas apicales de tomate se observa un fuerte amarilleo a veces con necrosis que
pueden llegar hasta el pecíolo y tallo; otras veces las hojas aparecen de un fuerte color morado y
en los frutos se observa fuertes necrosis con zonas hundidas, manchas y deformaciones. No se
conocen vectores naturales. Se transmite por suelo y agua. Control de los virus del tomate:
Eliminación de plantas afectadas y malas hiervas de dentro y fuera del invernadero. Control de
insectos vectores: pulgones, mosca blanca y trips. Utilizar variedades resistentes. 26 2.
DESARROLLO Según los resultados obtenidos y con base en los parámetros medidos se noto que el
desarrollo en altura fue muy similar en ambos sistemas, diferenciándose en la cuarta quincena
(Figura. 2), en la cual en ambos sistemas de manejo se presentó la chumasquina pero en el
tratamiento evaluado se le realizó el control y por esa razón las plantas continuaron creciendo,
mientras el testigo culminó su etapa reproductiva.
En el desarrollo en cuanto a diámetro no se presentó gran diferencia entre los sistemas pero si se
notó que el periodo en el que se obtuvo mayor crecimiento con respecto a este parámetro fue
durante la primera quincena después del transplante como lo demuestra la figura 4. Dado que en
el desarrollo no se presento ninguna diferencia significativa entre ambos sistemas ya que los datos
registrados fueron muy similares como se puedo apreciar en las graficas anteriores se estima que
cualquiera de los sistemas puede ser utilizado
3.2 FITOSANIDAD Plagas: Los insectos parásitos presentados en la tabla son los siguientes: pasador
y cogollero, como se puede ver en la tabla donde la presencia de insectos plagas fueron similares,
sin embargo en el tomate el cogollero que para ambos tratamientos fueron 0, se puede explicar
que el causante de esta respuesta fue el cultivo de maíz utilizado en el tratamiento dos como
trampa , ya que este presento un 80% de incidencia y un 4.40% de severidad y que por su distancia
entre el tratamiento testigo no hubo diferencia por lo tanto le causo el mismo efecto.
Chumasquina: Se presentó tanto en fruto (Figura 6) como en follaje, en el fruto la severidad fue de
32.6% para el tratamiento y del 15% para el testigo; y para el follaje fue del 100% en ambos
sistemas pero la diferencia se presento en el porcentaje de severidad con un 60% para el
tratamiento y 40% para el testigo, esta diferencia posiblemente se deba a que en el sistema uno
fue surco individual que le permitía una mejor aireación al cultivo, mientras que en el tratamiento
dos la siembra fue de doble surco. Sin embargo el tomate del tratamiento dos se recupero en un
100% debido a que se hizo aplicación de mertec lográndose con ello prolongar la vida útil de la
planta.
Por lo tanto el comportamiento fitosanitario en los dos manejos fueron similares a excepción de la
chumasquina que presentó respuesta positiva al manejo. Lo cual se puede observar en la tabla 4 a
continuación.
En la producción total del tratamiento y el testigo los resultados indican que no existe diferencia
entre los sistemas, pero al observar la distribución por semana se presenta una variación en la cual
se puede apreciar que la mayor producción para el testigo de tomates buenos se concentro en la
quinta semana con un 43.125% y los tomates afectados en la cuarta semana con un 29.54%,
mientras que en el tratamiento se presento la mayor producción de tomates buenos en la cuarta
semana con un 36.19% y en los tomates afectados en la tercera semana con un 50.0%, ver figura
8.
Calidad de frutos: Aunque en el tratamiento se realizó un raleo floral con el propósito de mejorar
la calidad de los frutos en cuanto a peso la diferencia presentada no alcanzó gran diferencia lo cual
significa que en calidad por peso 0 5 1 0 1 5 2 0 2 5 3 0 3 5 4 0 4 5 5 0 porcecntaje
CUANTIFICACIÓN DE LA PRODUCCIÓN TESTIGO 1,25 17,813 8,75 22,813 43,125 3,125 3,125 0 0
ENFERMOS TESTIGOS 0 15,9 28,4 29,54 26,13 0 0 0 0 TRATAMIENTO 1,87 11,94 23,51 36,19 11,19
5,97 1,87 4,85 2,61 ENFERMOS TRATAMIENTO 0,0 23,4 50,0 23,4 3,1 0,0 0,0 0,0 0,0 1 2 3 4 5 6 7 8
9 39 cualquiera de los sistemas puede ser utilizado, posteriormente se mostrará una tabla en la
que se describe la calidad de los frutos en cuanto a peso para cada tratamiento; La tabla 5
presenta tres categorías diferentes de frutos, tipo a, b y c donde la mayor concentración fue para
los dos sistemas en el tipo b de 100 – 125 gr y el tipo a y c para los dos sistemas fueron muy
similares. Como se puede mirar tabla el porcentaje de peso de los frutos fueron parecidos lo que
quiere decir que los manejos no influyeron en las características genéticas de la variedad utilizada
COSTOS Los costos de producción para el testigo fueron de $6.815.409 con un ingreso $ 9.324.536
de y para el tratamiento los costos de producción fueron de $ 6.285.880 40 mientras que los
ingresos fueron $ 15.610.416, como se muestra en la siguiente tabla donde se determino la
rentabilidad de cada tratamiento. Tabla 6: Rentabilidad. Semestre A del 2009. SISTEMAS COSTOS
DE PRODUCCION INGRESOS POR HECTAREA UTILIDAD RENTA BILIDAD TESTIGO 6.815.409 Tomate-
--------8.499.166 1.683.757 0.24 TRATAMIENTO 6.285.880 Tomate--------14.597.916 Cilantro---------
---828.000 9324536 1.48 Maíz-------------------84.500 TOTAL 15.610.416 Rentabilidad: Como se
puede observar el sistema mas rentable es el tratamiento, teniendo en cuenta que se obtuvo una
rentabilidad del 1.48 mientras que para el testigo se obtuvo una rentabilidad de 0,24. Esta
diferencia se debe a la densidad de plantas por hectárea.
Pp.
tomate y lechuga. Colombia: grupo latino limitada, Edición 2003. 2-37 Pp.
/hortalizas/tomate. htm.
http://articulos.infojardin.com/huerto/cultivo-tomate-tomates.htm. 2002-2009.
agricultura/hortalizas/cultivotomate.html.
45
http://www.fintrac.com/docs/elsalvador/Manual_del_Cutivo_de_Tomate_WEB.pdf.
Agosto 2004.
Esto se logra en buena parte de la Sabana de Bogotá y enclima templado, pero pueden existir
diferencias importan-tes entre regiones. En la Sabana de Bogotá, las zonas demayor pluviosidad
corresponden a zonas de menor radia-ción. Para mantener el invernadero en buenas
condicionesde luminosidad, debe evitarse la acumulación de polvo yalgas encima de éste. Las
carreteras destapas y los árbolescerca al invernadero pueden incrementar la presencia deestos
elementos encima de la cubierta.La orientación del invernadero y la estabilidad del
mismodependerán de la velocidad y dirección predominante deviento. En sitios de vientos
fuertes, la estructura del inver-nadero tiene que ser reforzada, aunque esto incremente elcosto
del invernadero. En la Sabana de Bogotá el diseño dela estructura del invernadero le permite
resistir una cargade viento de aproximadamente 50 km por hora.La lluvia ayudará a tener el
agua suficiente para los riegos.Sin embargo, en regiones con muchas horas de lluvia lahumedad
relativa será elevada y existirá un mayor riesgode enfermedades. Si se quiere cultivar en una
región don-de existen riesgos de granizo, se debe de tener un progra-ma para la prevención de
daños.Factores topográficos y edáficosUn terreno plano o con una pendiente hasta del 20%
noserá problema para la instalación de un invernadero, el sis-tema de tutorado, las camas para
la producción y el siste-ma de riego. Cuando la pendiente del terreno ya supera el20%, se
recomienda instalar las camas de forma perpendi-cular a la pendiente, para evitar problemas
con el tutoradode la plantas y con la uniformidad en el riego por la cargay descarga de las líneas
de goteo.Las condiciones de fertilidad del suelo se puedenmodificar,pero a veces esto significa
costos elevados en enmiendas,fertilizantes químicos y orgánicos, la instalación de un siste-ma
de drenaje y, en un caso extremo, la instalación de unsistema hidropónico. Para evaluar las
condiciones del suelodebe analizarse la fertilidad química, física y biológica. El te-rreno debe
tener un buen drenaje y estar libre de enchar-camientos. Para la parte biológica, se recomienda
evaluarpatógenos como nematodos,Fusariumybacterias.Diseño del invernadero Para el diseño
del invernadero deben considerarse las con-diciones climáticas del exterior y las condiciones
climáticasideales para el cultivo, ambas mencionadas anteriormente.Para la orientación de las
naves del invernadero, se tomanen cuenta la topografía, la dirección predominante de
losvientos y el trayecto del Sol. Además, el invernadero debeproporcionar un buen desagüe de
las aguas lluvias.Existen muchos tipos de invernadero. Entre los inverna-deros “tradicionales”,
es decir, los invernaderos con aper-tura fija en la cumbrera y ventilación por ventanas latera-les,
existen diferentes tipos de estructura para el soportedel techo y las ventanas (foto 10). Entre los
invernaderostradicionales están los invernaderos de cercha, los inver-naderos sin cercha y con
un paral debajo de la cumbrera,y los invernaderos colgantes, en donde sólo hay unos pa-rales de
gran tamaño a los cuales se cuelga un sistema deguayas que soporta la cubierta y los canales. Se
detallaráun poco el diseño general de los invernaderos de cerchay con parales, ya que son
frecuentemente construidos porlos mismos productores. Los invernaderos colgantes y
losnuevos tipos de invernadero son construidos por empre-sas especializadas.Orientación del
invernaderoEn un terreno plano, se prefiere organizar las camas en elsentido oriente-occidente
y se construye el invernaderocon las naves en el mismo sentido. De esta forma se lograque parte
de la radiación directa del Sol pueda penetrarhasta el fondo del cultivo. A la vez, se deja la
apertura delas cumbreras en el sentido contrario al de los vientos pre-dominantes, para
prevenir que un viento fuerte levante eltecho.En el caso de un terreno con pendiente, se
recomienda de-jar el sentido de las camas y de las naves de forma perpen-dicular a la pendiente.
Para las camas, pueden construirseterrazas si la pendiente es fuerte, se mantiene la altura delos
diferentes parales igual y se juega con la forma de lascerchas para tener un buen desagüe. En
ningún momentose puede dejar la cercha con muy poca pendiente, ya queesto causará
formación de bolsas. En la figura 5 se observa
rreno plano y en un terreno con pendiente. Si la pendien-te es muy fuerte, puede construirse el
invernadero con unsolo techo en un solo sentido.Tanto en terreno plano como con pendiente,
las cana-les deben tener una pendiente suficiente para asegurarun buen desagüe. Esto se logra
dando una pendiente deaproximadamente 10%, variando la altura de los parales.La medida
estándar más común es 6,8 m de ancho paralas naves mientras que el ancho de los cuadros por
lo ge-neral es de 5 m.El clima “medio” es el hábitat “ideal” en cuanto a tempera-tura para el
cultivo del tomate. La temperatura ideal se es-tablece bien en esta zona climática en
invernaderos conmuy buena ventilación, que cambian en un mínimo latemperatura exterior y
en los que la ventilación tambiénayuda a bajar la humedad del aire. Para el cultivo del toma-te
bajo invernadero en la Sabana de Bogotá se requiereninvernaderos con ventilación suficiente
para evacuar la hu-medad en la mañana y prevenir excesos de temperatura,pero que a la vez
puedan mantener en la noche el caloracumulado durante el día.Características mínimas de un
invernadero de climamedioCuanto más alto sea el invernadero, más estable será el cli-ma
dentro de éste. Es recomendable que el invernaderotenga de 4,5 a 5,5 m de altura debajo de la
canal en el cen-tro del invernadero, alrededor de 3 m debajo de la canal enla fachada y ventanas
a todo su alrededor para permitir unamuy buena ventilación. En algunos sitios no se requiere
unacobertura plástica en los cerramientos laterales, ni tampocolas culatas y antepechos. A
veces, éstos se dejan abiertos, enotras ocasiones se reemplazan por una malla anti-insectos.
El largo total de las naves puede llegar hasta 60 m, pero serecomienda no hacer unidades
grandes para asegurar unbuen funcionamiento de las ventanas. La apertura fija en lacumbrera
puede ser de mínimo 40 cm en lugares frescos,mientras no haya problemas con excesos de
temperatura.En sitios de más calor se hacen aperturas hasta de un me-tro. Cuanto más grande
sea la apertura en la cumbrera delinvernadero y mejor esté funcionando la ventilación ceni-tal,
más grande puede ser el invernadero. Como regla ge-neral, se trata de no exceder 40 m para el
ancho del mismo.Características mínimas de un invernadero de climafríoEl largo total de las
naves puede llegar hasta 60 m, perose recomienda ventilar por las fachadas frontales. La aper-
tura fija en la cumbrera puede ser de 20 cm en la Sabanade Bogotá, mientras no haya problemas
con excesos detemperatura. Para mantener el calor durante las nochespueden instalarse
tubulares, ventanas móviles o pantallastérmicas.Construcción del invernadero Para llevar a cabo
la construcción exitosa del invernaderodeberán tenerse en cuenta algunos aspectos que se deta-
llan a continuación.Materiales de construcción para estructurasLas estructuras, al igual que cada
una de las diferentes par-tes del invernadero, deben reunir ciertas condiciones o ca-racterísticas
como: ser livianas, resistentes, de fácil mante-nimiento y/o cambio, luminosas y económicas. Si
el inver-nadero es de muy buena rigidez, parte de su estructurapuede ser utilizada como
estructura para el tutorado, peronormalmente se requiere de una estructura adicional paraeste
fin.Los materiales para las diferentes estructuras del inverna-dero varían según el diseño, la
zona donde se va a cons-truir y la inversión que se quiera hacer. Entre los invernade-ros
tradicionales, el más utilizado es el de cercha, seguidodel invernadero sin cercha con paral
debajo de la cumbre-ra. Los materiales para estos dos tipos de estructura se des-criben a
continuación.Los parales del invernadero pueden ser de madera inmu-nizada o madera normal
sobre mojones de concreto oenterrados directamente en el suelo. La longitud varía deacuerdo
con el diseño del invernadero, la topografía del te-rreno y el clima, ya que en clima cálido deben
construirseinvernaderos más altos.En los invernaderos de diseño tradicional con cercha seutiliza
usualmente madera inmunizada (repisas). La uniónde las repisas se hace con puntillas o en
algunos casos contornillos que, aunque elevan los costos, facilitan el mante-nimiento de las
mismas. En los invernaderos de diseño tra-dicional sin cercha se utilizan varas de corredor, cuya
longi-tud varía de acuerdo con el ancho de cada nave.Otro elemento necesario para la
construcción del inverna-dero es una estructura llamada “carevaca” (Figura 6). Ésta sefija a los
parales del invernadero y sirve como unión entredos cerchas; a la vez, soporta la canal que
recibirá el des-agüe de las cubiertas del invernadero. Usualmente, las ca-revacas están hechas
en ángulo metálico de 11/2 pulgadasy/o repisas de madera inmunizada.El anclaje del
invernadero y/o los puntos de apoyo late-rales están construidos en concreto, varillas y platinas.
Laestructura del invernadero se fija a los apoyos laterales me-diante alambres o guayas
metálicas.Cubiertas y característicasPara el material de cubierta para los invernaderos es nece-
sario conocer algunas propiedades del mismo en el mo-mento de su elección:Propiedades
ópticasSe refieren al comportamiento del material frente a las ra-diaciones. En este aspecto es
necesario evaluar la transmi-sión de luz del material.La luminosidad interviene en la
fotosíntesis, siendo así elfactor más importante para el crecimiento de las plantas,generando
aumentos o disminuciones en la producción ycalidad del tomate. En términos generales, los
materialesque son usados para cubrir un invernadero serán mejorescuanto más transparentes
sean a las radiaciones fotosinté-
ticamente activas. Sin embargo, al comparar la luminosidades preciso tener en cuenta no sólo el
material en sí, sinotambién la estructura que lo soporta, ya que ésta influyedirectamente en la
pérdida de luminosidad dentro del in-vernadero. De la misma forma, la pérdida de
luminosidadpuede deberse al envejecimiento del material o, lo que esmás importante, a la
acumulación de polvo y/o algas.Propiedades térmicasHay dos aspectos importantes a tener en
cuenta: el coefi-ciente de pérdidas de calor (K), el cual expresa las pérdidasdebidas a radiación
infrarroja larga o calorífica, conduccióny convección. Y el coeficiente de transmisión de la radia-
ción IR larga o calorífica. Cuanto menor sea este coeficien-te, mayor será el poder de
acumulación del material.Propiedades mecánicasEs importante que un buen material de
cubierta sopor-te esfuerzos como la tensión de instalación, los vientos,las lluvias, el movimiento
de la estructura y las labores demantenimiento del invernadero. Las deficiencias en la su-jeción
o instalación pueden ocasionar desgarros en el plás-tico, disminuyendo la vida útil del
material.Uno de los materiales más utilizados como cubierta de losinvernaderos en nuestro
medio, el cual reúne la mayoría delas condiciones anteriormente expuestas, es el polietileno
debaja densidad, estabilizado contra radiación ultravioleta. Loscalibres más utilizados son de 5 ó
6 milésimas de pulgada.En la instalación de las láminas de polietileno, es necesariotener en
cuenta ciertos aspectos como los siguientes: 1) Laestructura del invernadero debe estar libre de
bordes agu-dos, astillas, puntillas y alambres que puedan rayar o rom-per el plástico. 2) La
tensión ideal se da por la elongaciónmáxima del material con respecto a su longitud inicial;
éstano debe sobrepasar el 2%; por ejemplo, en naves de 70 mno debe estirarse más de 1,4 m. 3)
Es recomendable ha-cer la instalación del plástico en la mañana o en la tarde,cuando la
temperatura no sea muy alta. 4) La fijación delplástico debe hacerse de forma tal que se haga el
mínimode perforaciones.
Manejo del clima En términos generales, se quiere maximizar la radiaciónsolar, llegar a una
temperatura promedio entre 18 y 22 °Cy mantener la humedad relativa del aire entre 60 y
80%.Adicionalmente, las temperaturas dentro del invernaderono deberían bajar de 15 °C durante
la noche, ni exceder 30°C durante el día.En el trópico, las variaciones de temperatura en un
díapueden ser muy importantes, y junto con ello las varia-ciones en la humedad relativa del aire.
Por ello, es impor-tante la toma de datos confiables. En las primeras horasdel amanecer, la
temperatura del aire sube rápidamente,mientras que la temperatura del cultivo se demora en su-
bir. Esto causa una condensación de agua sobre el follajey los frutos, lo cual favorece el desarrollo
de hongos. Paraprevenir al máximo esta condensación, debe ventilarse elinvernadero; así, el aire
del invernadero se calienta de for-ma menos rápida y la condensación que se presenta seevacua
más rápido.Una vez superados los problemas con excesos de hume-dad, se ventila básicamente en
función de la temperatura.En condiciones de clima variable, con variaciones de tiem-po nublado y
luego mucha luminosidad, ocurren altera-ciones muy bruscas en la humedad relativa del aire. Es
en-tonces cuando debe ventilarse con cautela; es preferibleque la temperatura suba durante un
lapso corto de tiem-po que tener una baja brusca en la humedad del aire.Manejo de la ventilación
en clima fríoEn clima frío es difícil llegar a los promedios de tempera-tura ideales. En estas
condiciones, se ventila el invernade-ro con las cortinas laterales durante las primeras horas dela
mañana, para después mantenerlas cerradas sin llegar aexcesos de temperatura.Se inicia la
apertura de las cortinas entre media hora y unahora después del amanecer y durante unas tres
horas más.En la práctica esto significa que se abren las cortinas desdelas 6:30 ó 7:00 a.m. hasta las
9:00 ó 10:00 a.m. Así se previe-ne y evacua la condensación de agua sobre el cultivo y seseca la
cubierta del invernadero sobre la cual se condensóagua durante la noche.No hay necesidad de
hacer aperturas grandes en las cor-tinas laterales. Además, es preferible no generar viento so-bre
la primera hilera de plantas, lo que se logra con las cor-tinas que abren de arriba hacia abajo.A las
9:00 ó 10:00 a.m., y con el cultivo seco, se comienzaa ventilar en función de la temperatura. Se
mantienen lascortinas laterales cerradas sin que la temperatura del aireexceda los 28 °C.Durante
la noche se mantiene el invernadero cerrado; enel caso de tener tubulares, éstos se inflan para
también ce-rrar la cumbrera. En épocas de mucha humedad y cuandosurgen problemas sanitarios
conBotrytisoPhytophthora,puede optarse por ventilar durante más tiempo en las ma-ñanas. En
este caso, también es preferible no cerrar la cum-brera del invernadero durante la noche, ya que
esto ayudaa subir la humedad relativa del aire.Con las prácticas mencionadas se logra un
temperaturapromedio aproximadamente 2 °C superior a la del exterior,o sea, de 16 °C
aproximadamente. En un invernadero tra-dicional de buenas características, la temperatura
noctur-na está menos de 0,5 °C por encima de la temperatura delexterior, mientras que en el día
se logra una temperaturapromedio de 4 °C más elevada que la del exterior.En un invernadero con
tubulares que se activan durante lanoche, se logra una temperatura nocturna superior en 1 °Ca la
del exterior. De este modo, la temperatura promediodiaria 2,5 °C más que la del exterior. En un
invernadero tra-dicional con pantalla térmica se logra una diferencia noc-turna con el exterior de 2
a 3 °C (Coomanet al., 1999), estose refleja en una temperatura promedio diaria entre 3 y 3,5°C
superior a la del exterior, o sea, una temperatura prome-dio de 17 a 17,5 °C. Con el uso de
pantalla térmica se incre-menta el peligro de humedades muy elevadas durante lanoche, y
aumenta el riesgo de problemas fungosos.Manejo de la ventilación en clima templadoEn clima
templado, la temperatura exterior puede sermuy cercana a la temperatura ideal para el cultivo del
to-mate. En este caso, igualmente se debe ventilar en las ho-ras de la mañana para evacuar
humedad y el rocío sobrelas plantas.
El resto del día se ventila en función de la temperatura.En clima templado, a 1.500 msnm o menos,
se ventilarátodo el día para que la temperatura promedio no sea máselevada que en el exterior.
Pulido (2000) encontró que enGuayatá, en un invernadero con excelente ventilación, sepuede
lograr una temperatura parecida a la del exterior. Elpromedio del exterior fue de 20,3 °C, y bajo
invernadero20,6 °C. En este caso se trataba de un invernadero con to-das las laterales abiertas y
en un bloque de 2.600 m2.En zonas con clima entre frío y templado se ventilará paratratar de
llegar a una temperatura promedio entre 18 y 22°C, sin tener excesos de temperatura.Desórdenes
fisiológicos y condicio- nes de estrés Los desórdenes fisiológicos son alteraciones de la plantaque
pueden afectar algunos de sus órganos y que puedenser causadas por condiciones inadecuadas de
temperatu-ra, nutrición y agua. Se afectan principalmente los frutos,aunque también sufren las
hojas y flores. Algunas varieda-des son más susceptibles que otras a estos desórdenes.GrietasLas
grietas son provocadas por cambios bruscos en el po-tencial hídrico del fruto, ocasionado por
grandes variacio-nes de temperatura, cambios bruscos de humedad delsuelo o variaciones bruscas
en la conductividad eléctri-ca del suelo. Si después de un período de deficiencia deagua con alta
temperatura sucede un inesperado sumi-nistro de agua, la planta comienza a tomar agua rápida-
mente, a una velocidad mayor de la que es capaz de eli-minar por medio de la transpiración. Esto
hace que unaparte de esta agua vaya a los frutos, ocasionando unafuerte presión que produce el
agrietamiento de los mis-mos. Igualmente, si después de un período de alta sali-nidad en suelo se
hace un lavado del suelo con agua sinfertilizantes, los frutos pueden absorber agua muy rápida-
mente y agrietarse. La mejor forma de prevenir las grietasde los frutos es mantener un nivel de
humedad y de ferti-lizantes constante en el suelo y usar variedades tolerantes.Las grietas en los
frutos pueden ser de dos clases: radialesy concéntricas.Malformaciones (“cara de gato”)Son frutos
que presentan arrugamientos y protuberanciasentre las cuales a menudo se observan bandas de
tejidocorchoso. Las cavidades penetran profundamente den-tro del fruto. Estas malformaciones
son de tal magnitudque los frutos pierden cualquier valor comercial. La cau-sa de este desorden se
debe a una deficiente polinizacióny a factores ambientales, tales como bajas temperaturasy
elevadas humedades relativas que provocan un desa-rrollo anormal de algunas partes de las
flores. Tan prontocomo estos frutos sean identificados, deben eliminarse dela planta. Para evitar
ese problema, se recomienda hacer lapolinización mecánicamente vibrando el tallo del
racimofloral sin tocar las flores.Caída de las floresEste fenómeno es común cuando la humedad del
suelo esbaja y la planta está expuesta a vientos secos o a excesi-vas aplicaciones de nitrógeno.
Esto ocasiona un crecimien-to anormal del pistilo y muy pocas flores cuajan. Períodosrepentinos
de baja temperatura o lluvias fuertes tambiénafectam la polinización adecuada. Para el control de
la caí-da de flores se recomienda regular la humedad del suelo yevitar la aplicación excesiva de
nitrógeno cuando la plantaestá pequeña.ManchadoConsiste en coloraciones anormales e
irregulares en cual-quier parte de la piel de los frutos. El manchado varía deverde pálido hasta la
carencia de color. Este desorden estáasociado con la baja intensidad lumínica, temperaturasfrías,
alta humedad del suelo, exceso de nitrógeno y faltade potasio.Golpe de SolSe forman zonas
blanquecinas y blandas en la parte supe-rior del fruto alrededor de los hombros causadas por la
ex-posición directa de éstos a una radiación solar intensa. Sedebe evitar la eliminación de las hojas
que ofrecen sombraa los racimos
Las altas temperaturas, por su parte, modifican todas lasfunciones de la planta, llegando a impedir
la fotosíntesis.El daño en las estructuras reproductivas por altas tempera-turas tiene como
consecuencia deficiencias en el cuajadodel fruto y disminución en la producción.
Bibliografía
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