Hora Santa Madres
Hora Santa Madres
Hora Santa Madres
DIRECTOR
Cmo pudiramos descubrir con palabras de Fe, que es una Madre?, la
respuesta la encontramos con el ltimo verso de proverbios, en las Sagradas
Escrituras:
Una mujer de carcter Dnde hallarla? Es mucho ms preciosa que una
perla (Versculo 10), le reporta felicidad sin altibajos, durante todos los das
de su vida (Versculo12).
Ella ha conseguido lana y lino, porque trabaja con manos hacendosas
(Versculo 13)
Se levanta cuando an es de noche, para dar de comer a los de su casa
(Versculo 15), se pone con ardor a trabajar porque tiene en sus brazos el
vigor (Versculo 17).
Va irradiando salud y dignidad mira con optimismo el porvenir, lo que dice
siempre es muy juicioso, tiene siempre el arte de transmitir la piedad atenta a
las actividades del mundo, no es de aquellas que comen sin trabajo, sus hijos
quisieron felicitarla, su marido es el primero en alabarla:
Las mujeres valientes son incontables, pero t a todas has superado.
Reconozcan el trabajo de sus manos: Un pblico homenaje, merecen sus
obras. (Proverbios 31- 10,31).
Eso es una madre, que vive de cara a Dios, una maternidad divina.
LECTOR TRES
Tu nombre mujer es Mam.
Hay una mujer que tiene algo de Dios, por la inmensidad de su AMOR, y mucho
ngel, por la incansable solicitud de sus cuidados. Una mujer que siendo joven
tiene la reflexin de una anciana, y en la vejez, trabaja con el vigor de la
juventud.
Una mujer que si es ignorante, descubre todos los secretos de la vida, con ms
acierto que un sabio, y si es instruida, se acomoda a la simplicidad de los
nios.
Una mujer que siendo pobre, se satisface con la felicidad de los que ama, y
siendo rica dara con gusto su tesoro por no sufrir en su corazn la herida de la
ingratitud.
Una mujer que siendo vigorosa se estremece con el llanto de un nio, y siendo
dbil, se reviste a veces con la brava de un len, una mujer que mientras vive,
no la sabemos estimar, porque a su lado todos los dolores se olvidan, pero
despus de muerta, daramos todo lo que somos y todo lo que tenemos por
mirarla de nuevo un solo instante, por recibir de ella un solo abrazo, por
escuchar un solo acento de sus labios. De esa mujer no me exijan el nombre,
sino quieren que empape con lgrimas vuestro da, porque ya la vi pasar en mi
camino.
Esa mujer es mi madre.
DIRECTOR
Mil veces se ha hablado del amor maternal, y su carcter heroico e infinito. Y
cada quien, en algn momento habr pensado para s que es cierto, que no
hay cosa ms sublime, que ese calor tan dulce que hay en los brazos de una
mam.
Hay una frase sobre las madres que dice as: A la que nos am, aun sin
conocernos. La cual se podra corregir para dar el tamao real del amor,
maternal: A la que nos ama, aun conocindonos
Cuntas madres has conocido t como protagonistas de un acto heroico
extraordinario? Pocas, muy pocas. Y, sin embargo, madres heroicas,
verdaderamente heroicas, que no aparecen como figuras de nada
espectacular, que nunca sern noticia, t y yo conocemos muchas: Viven
negndose a toda hora, recortando con alegra sus propios gustos y aflicciones,
su tiempo, sus posibilidades de afirmacin o de xito, para alfombrar de
felicidad los das de sus hijos. (San Josemara Escriv de Balaguer, Amigos de
Dios, 134)
LECTOR CUATRO
En tiempos recientes se fund el da de las Madres, para celebrar a las que
gastan su vida, en las tareas del hogar, construyendo por medio de sus
sacrificios y de su cario, lo mejor de nuestro mundo, colaborando en la
educacin de los hijos, y en la tarea de construir un hogar armonioso y feliz,
permitiendo con su trabajo diario, la formacin de los hijos, capaces de servir a
Dios, en medio del mundo, haciendo as del hogar, un lugar luminoso, y lleno
de fe.
Aquella madre santamente apasionada, como todas las madres- a su hijo
pequeo le llamaba: su prncipe, su rey, su tesoro, su sol.
Yo pens en ti y entend - Qu padre no lleva en las entraas, algo maternal?que no era ponderacin el decir de la madre buena: T eres ms que un
tesoro, vales ms que el sol; toda la Sangre de Cristo! Cmo no voy a tomar
tu alma oro puro- para meterla en forja, y trabajarla con el fuego y el martillo,
hasta hacer, de ese oro nativo una joya esplendida que ofrecer a mi Dios, a tu
Dios? (San Josemara, Forja #0)
El Seor Jess a travs de la maternidad y con las pruebas de cada da, nos
quiere purificar.
LECTOR CINCO
El misterio del sacrificio silencioso de las madres. No hay verdadero amor sin
pasar por el dolor; dicen que el amor ms parecido o que se asemeja a Dios, es
el amor de una madre; cuantas madres hay, que pasan da a da,
sacrificndose, ayudando, desvelndose, trabajando, cuidando, haciendo
labores poco remuneradas, dando todo de s mismas, por el bienestar de sus
hijos As vemos madres valientes, que muy a pesar de los pesares, entre
desvelos, preocupaciones y ocupaciones, alientan a llevar una vida de santidad
a travs de la maternidad
He aqu algunos ejemplos de madres, llenas de fortaleza:
La madre soltera:
Que queriendo formar un hogar tuvo un hijo en ausencia del ser amado, y con
fortaleza y sacrificio ama a su hijo y sale adelante, solo por llenar la alegra en
el interior del alma de su hijo tan deseado.
La madre ama de casa:
Mujer que como salario recibe la alegra con el bienestar de su familia, todos
sus quehaceres, cocinar, limpiar, lavar, hogar armonioso y seguro; llena de
piedad solo recibe la caricia, el alago de sus hijos y esposo.
La madre trabajadora:
Apoya a la familia en la economa de su hogar, ofrece su salario, para el
bienestar de sus hijos, con el nico afn de ver crecer y educar a sus hijos en el
bien de Dios.
La madre separada:
Que llena de amor de Dios, con fortaleza y la gua del Espritu Santo, con
piedad y alegra, ayuda a sus hijos a salir adelante; quien habiendo anhelado
una familia total y completa , en verdadero amor conyugal, tuvo que aceptar la
ruptura en su matrimonio, poniendo su confianza y abandono en Dios para dar
luz y cario a sus hijos y as recibir la paz en su hogar, a pesar de la falta del
amor del padre, es ella, la madre, quien llena de Dios, ama y se entrega a sus
hijos totalmente en fidelidad y amor a Dios crece da a da.
La madre de un hijo adicto:
Quien sufre entre llantos y tristezas, procura da a da, ayudar con su vida de
oracin, con obras poniendo los medios necesarios, con la ayuda de Dios,
asume su responsabilidad como madre y procura la ayuda que se requiera para
la rehabilitacin de su hijo.
La madre viuda:
Que perdi a su marido, continua piadosa, y como pilar de su familia, llena de
fe y esperanza, de amor, y fortaleza a sus hijos, llenos de ternura y confianza,
ayudan a su madre, unidos, con trabajo y estudio a salir adelante, formando
un hogar luminoso.
La madre del hijo especial:
Quien apoyando a su Hijo, siempre en sus necesidades, fsicas, y emocionales,
que se requieran, sus desvelos, desgaste, compromiso, va, mucho ms all del
amor comprometido, de la fuerza del amor. Dios la bendice da a da por su
generosidad y entrega a su hijo especial para Dios, ternura de madre
amorosa, infinita.
La madre perseverante:
Quien anhela la unidad de su familia, encuentra dificultades para convivir en
armona, sin embargo unida siempre a Dios, mantenindose fiel al matrimonio,
con Fe persevera da con da en su camino queriendo llevar a Dios, la santidad
de su familia.
La madre que sufre, a ejemplo de Mara, la Virgen Dolorosa:
Quien sabe lo que es perder a un hijo, madre errante llena de dolor, pero
tambin llena de abandono en Dios, quien es TODO PODEROSO, y El, quien
todo lo puede, perseverando en oracin y trabajo interior, da con da, lograra,
reencontrarse con l, con su hijo querido, all en el cielo. Esperanza bendita de
una madre que perdi aqu en la tierra, a su hijo tan amado. Esperanza de los
Cristianos. La vida eterna.
La madre evangelizadora:
Quien a tiempo y a destiempo, como dice San Pablo, en la Sagradas Escrituras,
proclama la Buena Nueva de Cristo Resucitado, Aleluya.
DIRECTOR
Cmo se comportan un hijo o una hija normales con su madre? De mil
maneras, pero siempre, con cario y con confianza. Con un cario que
discurrir en cada caso por cauces determinados, nacidos, de la vida misma,
que no son nunca algo fro, sino costumbres entraables de hogar, pequeos
detalles diarios, que el hijo necesita tener con su madre y que la madre echa
de menos si el hijo alguna vez los olvida: un beso, o una caricia al salir o al
volver a casa, un pequeo obsequio, una palabras expresivas. (Es Cristo que
pasa, San Josemara Escriv #142)
ISAIAS 49,15-16
Pero, puede una mujer olvidarse del nio que cra, o dejar de querer al hijo
de sus entraas? Pues bien aunque alguna lo olvidase, yo nunca me olvidare
de ti. Mira, como te tengo grabada en la palma de mis manos. Y nunca deje de
pensar en tus murallas
Quieres ser una verdadera madre a los ojos divinos de Dios?
Cumple entonces con la Voluntad de Dios en tu vida. Nuestro Seor Jesucristo
nos dice en las Sagradas Escrituras: Pero l les respondi, les dijo: mi madre y
mis hermanos son los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen (Lucas,
8,21).
Busquemos pues, el Amor de Dios en nuestro corazn maternal, tratemos a
Dios, conozcmosle a l, y El quien es todo nos ayudara a ser, eso que l desea
de nosotras, ser unas buenas madres de familia en su voluntad divina.
FELIZ DIA DE LAS MADRES!