Microorganismos para Mejorar La Nutricion y Desarrollo en Trigo y Maiz PDF
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ndice de Contenidos
PRLOGO
CAPTULO 1
REVISIN DEL USO DE Azospirillum brasilense COMO PROMOTOR DEL CRECIMENTO EN
TRIGO Y MAZ EN ARGENTINA.
Puente, Mariana L. y Garca, Julia E.
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CAPTULO 2
LAS PSEUDOMONAS: UN GRUPO HETEROGNEO CON DIVERSOS MECANISMOS
PROMOTORES DEL DESARROLLO VEGETAL.
Valverde, Claudio y Ferraris, Gustavo
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CAPTULO 3
BACTERIAS PROMOTORAS DEL CRECIMIENTO VEGETAL PERTENECIENTES AL GNERO
Bacillus Y OTROS MUY RELACIONADOS.
Benintende, Graciela B.
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CAPTULO 4
LAS MICORRIZAS ARBUSCULARES COMO BIOINOCULANTES.
Godeas, Alicia.
60
CAPTULO 5
EMPLEO DE Azotobacter COMO INOCULANTE EN CULTIVOS EXTENSIVOS.
Rubio, Esteban J. y Perticari, Alejandro.
66
CAPTULO 6
EL FUTURO DE LOS INOCULANTES: HACIA EL DESARROLLO DE CONSORCIOS
MICROBIANOS PARA UNA AGRICULTURA SUSTENTABLE.
Fischer, Sonia y Jofr, Edgardo.
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CONSIDERACIONES FINALES
Perticari, Alejandro; Puente, Mariana L. y Garca, Julia E.
Prlogo
Si hacemos una revisin de lo ocurrido en los ltimos aos en el agro podemos observar un marcado crecimiento en la adopcin de nuevas tecnologas de produccin en busca de reduccin de
la contaminacin ambiental y de los costos de produccin en sistemas agropecuarios sustentables. Ante esta necesidad surgen los inoculantes o biofertilizantes como herramientas alternativas de fertilizacin. La aplicacin correcta de estos microorganismos complementa a la fertilizacin convencional apuntando a una reduccin de las dosis de fertilizantes qumicos.
El uso de inoculantes en base a microorganismos benficos denominados PGPM (Plant growth
promoting microorganism) tiene como objetivo favorecer el desarrollo de las plantas, aumentando la cantidad de nutrientes asimilables para el cultivo, entre otros procesos. Dentro de los microorganismos PGPM ms estudiados podemos citar a Azotobacter, Azospirillum, Azorhizobium,
Mesorhizobium,
Sinorhizobium,
Bradyrhizobium,
Rhizobium,
Pseudomonas,
Gluconacetobacter, Burkholderia, Bacillus y Micorrizas.
Sin embargo, hay ciertas pautas que se deben tener en cuenta a la hora de su uso para que los
efectos benficos que estos microorganismos nos aportan puedan ser logrados. Caractersticas de
su formulacin y el adecuado manejo del inoculante en el almacenamiento y aplicacin son claves.
Un soporte adecuado es un componente de vital importancia para los inoculantes biolgicos de
inters comercial. Tanto es as que, a diferencia de lo que ocurre con otros agroqumicos como
fertilizantes o plaguicidas, no se puede considerar a un inoculante formulado sobre la base de un
microorganismo como un producto "genrico" o un "commodity", sino que es el conjunto indisoluble del microorganismo y el soporte que lo contiene. De este modo, el soporte utilizado es el
punto en el que podemos encontrar mayor variacin entre inoculantes y, en muchos casos, el
aspecto que permite la diferenciacin de marcas comerciales, constituyndose sin duda alguna
en un factor de calidad. Una formulacin apropiada debe ser estril, libre de todo contaminante
e inocua para el microorganismo y el ser humano que lo va a manipular. Debe proteger a la bacteria, especialmente cuando es expuesta a situaciones adversas como las altas temperaturas.
En cuanto a sus caractersticas fsicas, debera ser fcil de aplicar y dosificar, adherirse de manera apropiada a las semillas, evitando aglomeraciones en el fondo del cajn sembrador para no
obstruir el pasaje de la semilla. Es importante que modifique en el menor grado posible la fluidez de la semilla a travs del dosificador, para no provocar cambios sustanciales en la densidad
de siembra.
El objetivo de esta publicacin es revisar las principales caractersticas de Azotobacter,
Azospirillum, Bacillus, Pseudomonas y Micorrizas, dar a conocer los beneficios obtenidos cuando son utilizados a campo y las consideraciones a tener en cuenta al momento de trabajar con
estos microorganismos.
Mariana Puente; Julia Garca y Gustavo Ferraris
Captulo 1
Dedicamos este captulo a los Ing. Agr. Silder Barrios y Enrique Rodrguez Cceres quienes,
durante la dcada de los ochenta en el ex Instituto de Microbiologa Agrcola del INTA, lideraron
el grupo de trabajo dedicado al estudio de diaztrofos en gramneas. Estos investigadores efectuaron aislamientos de Azospirillum en las diferentes zonas del pas. La caracterizacin bacteriolgica de dichos aislamientos proporcion la identificacin de 35 cepas. Con stas y otras incorporadas desde instituciones extranjeras se form la coleccin perteneciente al INTA IMYZA
hallndose cepas tanto de la especie A. brasilense como de A. lipoferum. Simultneamente
Rodrguez Cceres (1982) desarroll un mtodo con rojo Congo como colorante diferencial que
facilit el reconocimiento para aislar colonias de Azospirillum (figura 1).
INTRODUCCION
El gnero Azospirillum est conformado
por bacterias diazotrficas de vida libre con
capacidad de colonizar los tejidos internos y
externos de las races (Bashan and Levanony,
1990). Este es uno de los gneros ms estudiados por su capacidad de mejorar el crecimiento y desarrollo as como el rendimiento de
numerosas especies cultivables (Dardanelli et
al., 2008). Presenta una amplia distribucin
geogrfica alrededor del mundo y ha sido aislada de la superficie de la raz de una amplia
variedad de plantas y de su rizsfera, incluyendo cereales, pastos forrajeros, cactceas, etc.
(Steenhoudt and Vanderleyden, 2000).
Tarrand et al. (1978), fueron los primeros que
describieron el gnero Azospirillum con dos
especies, A. lipoferum y A. brasilense.
Actualmente, el gnero est compuesto por
10
11
Tabla I. Ensayos a campo en el cultivo de maz y trigo en la Repblica Argentina revisados por Okon y Labandera, 1994.
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Tabla II. Datos de los ensayos realizados en el cultivo de trigo por Rodrguez Cceres y Di Ciocco, 2003.
13
14
Aires). En la primera campaa el rinde promedio fue de 19.7%, mientras que en la segunda
campaa el incremento fue de 16.5%, ambos
datos respecto al testigo sin inocular.
Durante la campaa 99/00, Ventimiglia et
al. (2000), realizaron un ensayo en maz utilizando la cepa de A. brasilense Cd. El lote, ubicado en la Localidad de 9 de Julio, fue fertilizado previo a la siembra con N (115 kgha-1),
pentxido de fsforo (100 kgha-1), potasio
(18 kgha-1) azufre (18 kgha-1) y magnesio
(4.6 kgha-1), aplicando tambin N lquido (64
kgha-1), y la siembra se realiz con el hbrido
DK 696. Los tratamientos inoculados obtuvieron una diferencia con respecto a los testigos
de 6.3% (730 kgha-1).
Puente et al. (2005b) durante la campaa
04/05, registraron en 23 sitios de la regin
pampeana, incrementos en los rendimientos
debido a la inoculacin del 6,5%
La respuesta a la inoculacin con Azospirillum
sobre el rendimiento de maz (PANAR 6148)
obtenida por Funaro y Quiroga (2005) campaa
04/05 en INTA Anguil fue de 4% tanto como
para los tratamientos fertilizados con FDA como
los no fertilizados. Sin embargo, aquellos tratamientos fertilizados los rendimientos absolutos
obtenidos fueron mayores.
Incrementos del rendimiento del 27% fueron
obtenidos por Mousegne et al. (2005), en la
localidad de San Antonio de Areco cuando se
inocul con A. brasilense. El hbrido utilizado
fue Albion MG. Todos los tratamientos fueron
fertilizados con PMA a la siembra y urea en V6.
En el Valle Medio del Ro Chubut, en donde
el clima es rido y los suelos son pobres en
materia orgnica y nitrgeno, Rimoldi et al.
(2001), evaluaron el efecto de la inoculacin
con Azospirillum y la fertilizacin con NPKS
en un cultivo de maz (SPS 2702). El ensayo se
llev a cabo sobre tierras clasificadas como
aptas para la agricultura y bajo riego. Se
encontr efecto significativo para la fertiliza-
1) Determinacin de pH
Se mide directamente del producto con
pehachmetro digital.
2) Ingrediente activo
Se utiliza el Medio de crecimiento selectivo
RC (Rodrguez Cceres, 1982) para bacterias
del gnero Azospirillum. Este medio presenta en su formulacin rojo Congo como colorante diferencial que permite el fcil reconocimiento de colonias de Azospirillum. Para
esta determinacin se realiza un estriado por
agotamiento en la caja de Petri. Una vez sembradas las cajas de Petri se incuban invertidas
en una estufa a una temperatura de 35C
durante 4-5 das.
15
CONCLUSIONES
Existen controversias al momento de explicar la variabilidad de la respuesta a la inoculacin observada en los ensayos a campo.
Fages (1994), indica que estos problemas
pueden deberse a diversas razones entre las
cuales menciona el clima (lluvias, sequas, etc.),
ausencia de limitantes nutricionales permitiendo a la planta expresar todo su potencial y por
lo tanto minimizando el efecto promotor debido a la inoculacin, problemas en la tcnica
Tabla III. Valores sugeridos por nuestro Laboratorio para las pruebas de calidad arriba descriptas.
7) Identificacin molecular
Se utilizan tcnicas moleculares de REP-PCR y
BOX-PCR para la caracterizacin de la o las
cepa/s utilizada en el producto. Estas tcnicas
nos permiten identificar y caracterizar a las
bacterias, dndonos un patrn distintivo para
cada cepa. Una vez obtenidos los perfiles se
los comparan con los patrones de las cepas
pertenecientes a la Coleccin Azospirillum del
INTA IMYZA, corroborando que el patrn de
la cepa/producto concuerde con el patrn de
la cepa/coleccin.
16
efectos de promocin se producen principalmente en las etapas tempranas del crecimiento de los cultivos y no necesariamente se traducen en incrementos en el rendimiento.
Dentro de los efectos pre-rendimiento pueden incluirse mejoramiento de la emergencia
de la semilla, del stand final, mayor vigor
vegetativo, altura de planta, biomasa de races y tallos, contenido de nutrientes en el tejido vegetal, etc.
Otros autores (Okon y Labandera, 1994;
Rodriguez Cceres y Di Ciocco, 2003) indican
que existe respuesta a la inoculacin cuando el
ambiente presenta limitaciones; mientras que
otros investigadores (Daz Zorita et al., 2008;
Gonzlez Montaner et al., 2008) detectaron
que los aumentos en los rendimientos fueron
ms consistentes en sitios con rendimientos
alcanzables de trigo superiores a los 2000 kg
ha-1 y en ambientes con mejores condiciones
de fertilidad potencial.
17
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Captulo 2
Dedicamos este captulo al Dr. Norberto J. Palleroni, en reconocimiento de su significativo aporte a la diferenciacin taxonmica de las pseudomonas y la introduccin de enfoques moleculares
en la taxonoma procaritica, por lo que ha sido reconocido en la comunidad cientfica internacional. El Dr. Palleroni, nacido en Buenos Aires, se gradu de Ing. Agrnomo en la UBA (1945),
fue becario de Rotary International, becario Guggenheim y becario del CONICET. Se desempe
como Profesor Titular de Microbiologa y de Qumica Biolgica de la Universidad Nacional de
Cuyo (entre 1949 y 1965), como Profesor de Microbiologa de la New York University Medical
Center (desde 1987) y como Profesor de Investigacin del Instituto Ag-Biotech de la Universidad
de Rutgers (desde 1992). Ha publicado ms de 130 trabajos de investigacin y es autor de dos
libros de Microbiologa. En 1993 fue distinguido con el Premio Konex en Bioqumica y
Microbiologa. Ha sido nombrado Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional de Cuyo y
por la Universidad de Buenos Aires, y Associate Member of the Bergeys Trust. En su honor, en
el ao 2005 se acu el nuevo gnero de alfa-proteobacterias Palleronia spp.
INTRODUCCION
Si hay un gnero con una taxonoma complicada y cambiante, ese es el gnero
Pseudomonas. De hecho, debido a las importantes contribuciones de los estudios taxonmicos efectuados sobre este grupo de microorganismos, el propio Norberto Palleroni ha
propuesto la existencia de dos eras en la taxonoma microbiolgica moderna: la etapa BP
("before Pseudomonas") y la etapa AP ("after
Pseudomonas") (Palleroni, 2003). No es nuestra intencin dedicar un espacio exagerado a
la clasificacin del grupo ya que la taxonoma
est lejos de haber cristalizado el agrupamiento de este conjunto heterogneo de microorganismos. Por otra parte, este captulo (y esta
compilacin) pretende poner en discusin qu
otros microorganismos cultivables habitantes
del suelo, adems de los tecnolgicamente
aceptados rizobios, pueden ser aprovechados
por sus propiedades promotoras como estimulantes directos o indirectos del desarrollo y/o
sanidad vegetal. Sin embargo, creemos pertinente comentar brevemente de qu estamos
hablando al referirnos a las pseudomonas (s,
23
sin itlicas ni mayscula, lo que sera un hispanismo del trmino ingls "pseudomonads").
Segn describe el Manual Bergey de
Microbiologa Determinativa (Holt et al.,
1994), las pseudomonas son bacilos Gram
negativos rectos o levemente curvos, de 0.5-10 m de dimetro y 1.5-5.0 m de largo. Son
capaces de desplazarse en medios lquidos as
como sobre superficies con cierto grado de
humedad por el movimiento rotatorio de sus
flagelos de localizacin polar. No son capaces
de generar clulas en letargo (esporos). Para
obtener energa, oxidan compuestos orgnicos
con un metabolismo respiratorio, generalmente aerbico (oxgeno). Son muy verstiles en
cuanto a la capacidad de utilizar sustratos
como fuente de carbono y no requieren vitaminas, lo que explica en gran parte su culturabilidad en una variedad de medios de cultivo mnimos y definidos. Son incapaces de crecer a pH
<5.0. Contina el Manual Bergey afirmando
que "el gnero est ampliamente distribuido
en la naturaleza" y que "comprende especies
patgenas para humanos, plantas o animales".
Y finaliza la introduccin con la (quizs poco
feliz) frase "la especie tipo es Pseudomonas
aeruginosa". Ahora se entender la sensacin
que provoca la sola mencin de las pseudomonas como posibles insumos agrobiotecnolgicos de liberacin masiva. Dado que generalizar
es, sin duda, simplificar, pero a la vez perder
detalle y particularidades, veamos qu otros
interesantes microorganismos tenemos a disposicin dentro de las pseudomonas.
Las pseudomonas fueron clasificadas en primer trmino mediante propiedades morfolgicas, de cultivo y fisiolgicas. En los 70's, los
estudios de hibridacin ARNr-ADN sentaron las
bases de la visin actual del grupo. Palleroni
defini entonces cinco grupos de ARNr (I a V).
El advenimiento del anlisis comparativo de la
secuencia del ARNr 16S dio lugar a la reclasificacin de los grupos II-V en diferentes sub-grupos de lo que hoy se conoce como - o -proteobacterias, incluso con nombres genricos
24
BENEFICIOS POTENCIALES
Existe un importante nmero de reportes y
estudios cientficos sobre aislamientos de
pseudomonas con diferentes capacidades de
mejorar el desarrollo vegetal. La mayora de
estos aislamientos han sido testeados en condiciones controladas de laboratorio o invernadero y, en algunos casos, se han observado
efectos positivos de la inoculacin en condiciones de campo (Tabla I). A pesar del comportamiento prometedor in vitro, la informacin
disponible sobre la eficacia a campo de la
mayora de estos aislamientos es escasa en
Europa y EEUU, en gran parte debido a las exigentes regulaciones de eficiencia y riesgo sanitario vigentes. En otros casos los resultados a
campo han sido inconsistentes posiblemente a
causa de cuestiones tcnicas como formulacin, empaque y modo de aplicacin inapropiados que afectan la viabilidad y persistencia
de las cepas (Gerhardson, 2002) o simplemente debido a que los mecanismos de accin son
influenciados por variables an no identificadas como tipo de suelo y variedad de cultivo
(Mark et al., 2006). Debido a ste tipo de restricciones, algunos autores (Gerhardson,
2002) han pronosticado que muchas cepas de
pseudomonas probiticas que tienen excelentes propiedades desde el punto de vista cientfico, nunca podrn ser explotadas biotecnolgicamente. Sin embargo, es posible que el
panorama no sea tan pesimista. ver tabla I.
Cuando se analiza comparativamente una
lista de productos comerciales disponibles a
base de pseudomonas (Tabla II), se advierte
claramente que el nmero de inoculantes en el
mercado internacional es relativamente limitado, y que est orientado principalmente a biocontrol de fitopatgenos de plantas ornamentales y frutales en invernaderos y post-cosecha.
No se comercializan inoculantes con pseudomonas para cultivos extensivos, con la excepcin de Cedomon y Cerall, a base de P.
chlororaphis, que es proclamado como exitoso y est aprobado en varios pases de la UE.
25
26
1 Se consigna el mecanismo principal al cul se atribuye el efecto probitico de la cepa. AIA, cido indol actico (auxina); RSI, resistencia sistmica inducida. desconocido. (n.i.), no se informa.
Tabla I. Aislamientos de Pseudomonas spp. descriptos en la bibliografa con capacidad de promover el crecimiento vegetal y/o prevenir enfermedades.
27
Tabla II. Productos del mercado internacional y nacional que declaran contener Pseudomonas spp. como principio activo.
28
(n.i.), no se informa. 1 Denominacin comercial del producto. 2 Empresa productora. 3 Cepas declaradas como ingrediente del producto. (n.d.), no se
declara la cepa utilizada. 4 RSI, resistencia sistmica adquirida. 5 Segn recomendaciones de uso del fabricante.
29
Una relacin entre el rendimiento de los tratamientos -testigos e inoculados- con un ndice
ambiental expresado por el rendimiento medio
del sitio nos permite evaluar la interaccin existente entre respuesta y rendimiento (Figura 2).
Los tratamientos inoculados superaron a los
testigos en todo el rango de rendimientos evaluados. Los parmetros de los modelos ajustados para ambos tratamientos -pendiente y
ordenada al origen- no difirieron entre s
(P>0,10), aunque la pendiente >1 para los rendimientos de los inoculados estara expresando
un ligero incremento de la diferencia sobre los
testigos a niveles ms altos de produccin.
30
Figura 2. Relacin entre los rendimientos del tratamiento y la media del sitio experimental. Evaluacin de la respuesta a Pseudomonas fluorescens en trigo, aos 2002 a 2007.
31
Figura 3. Respuesta absoluta a la inoculacin con Pseudomonas fluorescens (Rabs) y su asociacin positiva con
los rendimientos medios del sitio (Rmedio) y negativa con las lluvias (lluvias) durante el perodo junio-diciembre.
Figura 4. Eficiencia de uso de a) fsforo (P) y b) nitrgeno (N) en tratamientos testigos e inoculados con
Pseudomonas fluorescens en Trigo. Cada columna es media de diez experimentos realizados entre los aos 2002
y 2007 en el centro-norte de Buenos Aires y Sur de Santa Fe.
a)
32
b)
rencias son constantes en una amplia ventana de rendimientos, como la abarcada por
esta serie de experimentos (Figura 6). La respuesta no estuvo asociada a la dosis de fertilizante aplicado y, en algunos casos, se relacion de manera inversa con el nivel de P en
suelo. Este tipo de relaciones fueron observadas por Satorre (2007). En un grupo de siete
experiencias a campo distribuidas en una
amplia zona geogrfica, este autor observ
respuestas positivas a pseudomonas en sitios
con bajo nivel de P en suelo y respuesta a su
agregado mediante fertilizacin. En cambio,
no logr determinar efectos positivos del inoculante en sitios que no respondan a P. En el
trabajo presentados en la Figura 6 se observ
adems, un incremento en la eficiencia de
uso de los nutrientes. Esta fue de 516 y 552
kg maz kg P-1 y de 148 y 159 kg maz kg N-1
para los tratamientos testigos e inoculados,
respectivamente.
33
Figura 5. Rendimiento (kgha-1) de tratamientos testigo e inoculados con Pseudomonas fluorescens en maz
entre las campaas 2004/05 y 2007/08 en el centro-norte de Buenos Aires. Las abreviaturas representan localidades Junn (Junn, Buenos Aires), Perg (Pergamino, Buenos Aires), Arrec (Arrecifes, Buenos Aires).
Figura 6. Relacin entre los rendimientos del tratamiento y la media del sitio experimental. Evaluacin de la respuesta a Pseudomonas fluorescens en maz, sitios agrcolas 2004/05 a 2007/08.
34
INOCUIDAD
Una caracterstica deseada para un microorganismo que se propone como ingrediente de
un producto de uso agronmico es que sea inocuo, ya sea para otros organismos presentes en
el ambiente dnde se introduce como tambin
para los operarios que producen y manipulan el
microorganismo a densidades celulares elevadas (>109 UFC/mL). Si bien se han aislado y
caracterizado cepas de P. aeruginosa (Kumar
et al., 2005) y Burkholderia cepacia (Blaha et
al., 2006) con propiedades probiticas promisorias, estas especies engloban subespecies rizosfricas as como cepas patgenas oportunistas
de humanos (Stockwell and Stack, 2007), clasificadas como de grupo de riesgo 2. Est claro
que el registro de insumos agrobiotecnolgicos
formulados con este tipo de especies es, a priori, impracticable.
Qu sabemos sobre la inocuidad del
(inagotable?) resto de las pseudomonas? Tal
como se mencion en la Introduccin, el gnero Pseudomonas es muy heterogneo con una
distribucin primariamente ambiental, de
manera que en entornos complejos como el
suelo co-existen especies patgenas oportunistas en humanos como P. aeruginosa, especies
fitopatgenas como P. syringae, especies
entomopatgenas (P. entomophila), especies
comensalistas, y ciertamente especies probiticas (Tabla 1).
Segn
la
Coleccin
Alemana
de
Microorganismos y Cultivos Celulares (DSMZ),
varias cepas de P. fluorescens, P. putida y P.
chlororaphis estn catalogadas como especies de grupo de riesgo 1. Esto quiere decir
que no son patgenos naturales de humanos
que gozan de buen estado de salud.
Habitualmente, P. fluorescens y P. putida, no
crecen a 37-42 C, por lo que existe una barrera trmica natural para su proliferacin en
humanos. Sin embargo, en ciertas situaciones
particulares con compromiso inmunolgico
35
ESTABILIDAD GENTICA
Es importante reconocer que el genoma de
una bacteria es intrnsicamente inestable y
dinmico. Por lo tanto en un cultivo puro desarrollado en ptimas condiciones, siempre
existir una poblacin mayoritariamente "salvaje" y un conjunto de variantes "mutantes"
con fenotipos indetectables o silenciosos, o
eventualmente con fenotipos notables pero
en muy baja proporcin. En tanto no afecten
las propiedades PGPR caractersticas de la
cepa, no es motivo de preocupacin. Para evitar la acumulacin y enriquecimiento progresivo de mutantes con caractersticas indeseables, es recomendable evitar el subcultivo
peridico de las cepas utilizadas como fuente
de inculos para la produccin a escala, y recurrir en cambio a la recuperacin de material
conservado por mtodos que aseguren la
estabilidad gentica como la liofilizacin o
36
TRAZABILIDAD
Cmo seguir el rastro de un microorganismo en el ambiente en que se lo libera? Para las
pseudomonas no se dispone de procedimientos establecidos. Los mtodos microbiolgicos
no son indicados dada la ubicuidad y diversidad de pseudomonas que se encuentra en
ambientes naturales. De esta forma, las herramientas moleculares son una alternativa viable. Para ello, habra que determinar marcadores moleculares especficos de cada cepa utilizada en un inoculante (Montesinos, 2003).
Esta tarea a priori no es sencilla y requerira la
obtencin de patrones de "huella molecular"
caractersticos basados en la amplificacin por
PCR de fragmentos de ADN, en lo posible
generados con distintos protocolos complementarios (REP, ERIC, BOX, RFLP de espaciador
16S-23S; McSpadden-Gardener et al., 2000).
As, ante la necesidad de identificar un aislamiento obtenido de diferentes fuentes se
podra recurrir al banco de datos de huellas
moleculares, pero sera poco prctico para
intentar cuantificar la carga de una cepa determinada en muestras vegetales o de suelo. En
este sentido, la secuenciacin de fragmentos
37
FORMULADO
Para su comercializacin, un agroinsumo biolgico basado en pseudomonas requiere la produccin de biomasa a escala industrial y una formulacin adecuada que permita su depsito,
distribucin, aplicacin sencilla y persistencia,
con la menor prdida de actividad biolgica
posible (Montesinos, 2003). Una de las desventajas que se atribuyen a las cepas de pseudomonas fluorescentes que contribuyeron notablemente al entendimiento de los mecanismos probiticos, es su prdida de viabilidad durante el
almacenamiento (Haas and Dfago, 2005;
Walsh et al., 2001), lo que fuerza a cargar los
productos con altos ttulos para proveer suficientes clulas viables al momento de aplicacin.
La tecnologa de la formulacin es probablemente una de las reas de desarrollo de agroinsumos que requiere mayor esfuerzo de investigacin para aumentar la eficacia (Stockwell and
Stack, 2007). Este punto se ilustra con la escasa
literatura disponible sobre estudios bsicos de
formulacin de pseudomonas que se han utilizado como modelo de mecanismos probiticos
(Moenne-Loccoz et al., 1999; Russo et al., 1996;
2001), y constituye uno de los principales desafos en el desarrollo de nuevos productos basados en pseudomonas.
CONCLUSIONES
De la mano de una creciente demanda de
productos biolgicos y el reconocimiento de
las potenciales actividades probiticas de las
pseudomonas, la industria de inoculantes ha
tomado la delantera en la produccin y
comercializacin de inoculantes que se formulan con cepas que no se encuentran disponibles en bancos pblicos y de las cules se des-
38
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43
Captulo 3
INTRODUCCION
Las bacterias promotoras del crecimiento
vegetal, conocidas como PGPR (promoting
growth plant rhizobacteria), han sido definidas como aquellas bacterias de vida libre, habitantes del suelo, rizosfera, rizoplano y filosfera,
que bajo ciertas condiciones resultan benficas
para las plantas (Bashan y Bashan, 2005).
Entre ellas, ciertas especies del gnero Bacillus
son de crecimiento frecuente en los suelos, en
forma libre y tambin asociadas a las races.
Aunque no constituyen la flora ms abundante,
numerosos estudios indican su presencia en la
rizosfera de plantas tanto leosas como herbceas, lo que condujo a pensar que podran jugar
un papel clave en el mantenimiento de una
microflora acompaante del sistema radical permitiendo el crecimiento vigoroso de las plantas
y el mantenimiento de una fisiologa saludable.
Los primeros estudios de estas PGPR fueron
focalizados sobre algunas especies biocontroladoras, entre ellas Bacillus subtilis, un efectivo antagonista de patgenos del suelo
(Kloepper et al., 1989).
Diferentes especies del taxn bacteriano considerado en este Captulo, que incluye los gneros
Bacillus, Paenibacillus, Brevibacillus, Virgibacillus,
Alicyclobacillus and Aneurinibacillus, fueron
reportadas como promotoras del crecimiento de
una gran cantidad de plantas (De Freitas et al.,
1997; Kokalis-Burelle et al., 2002).
45
DESARROLLO
Bacterias aerbicas esporuladas
El gnero Bacillus, un grupo extenso y muy
heterogneo que abarcaba ms de 80 especies de bacterias (Euzeby, 2008), permaneci
intacto hasta el ao 2004, cuando fue dividido en varias familias y gneros en base a
estudios del RNA de cadena simple
(Blackwood et al., 2004).
Previamente, mediante anlisis filogenticos algunas especies del gnero haban sido
reclasificadas en nuevos gneros incluyendo
a Paenibacillus, Brevibacillus y Geobacillus
(Dong and Cote, 2003).
Con el propsito de dar una mnima definicin, al referir a este grupo de microorganismos, se hace alusin a aquellas bacterias
Gram+, que forman endosporas y que crecen
en presencia de O2 y se las designa bsicamente como "bacterias aerbicas esporuladas".
Figura. 1. Visualizacin de clulas vegetativas 10.000x (A), esporangio 12.000x (B) y espora 13.000x (C), de
Bacillus sp. al microscopio electrnico.
A)
B)
C)
46
Identificacin
La ubicuidad que presentan estas bacterias
queda demostrada por la posibilidad de aislarlas desde los ms diversos ambientes, posiblemente a raz de la dispersin area de sus
esporas. Sus capacidades metablicas son muy
diversas y han atrado el inters debido a su
participacin en numerosas interacciones que
permiten su aprovechamiento. Una gran cantidad de especies intervienen en procesos de
degradacin de diversos sustratos animales o
vegetales (celulosa, almidn, protenas, pectinas, hidrocarburos, etc.), en la produccin de
antibiticos y en el biocontrol de plagas y
enfermedades entre otros.
BC= biocontrolador; AZO= diaztrofo; FH= productor de fitohormonas y PSB= solubilizador de fsforo.
Produccin de fitohormonas
Algunas de las especies del grupo bacteriano
considerado en este captulo, son capaces de
47
producir ciertos compuestos que regulan el crecimiento vegetal. El efecto de ellos sobre las
plantas puede ser directo mejorando su crecimiento o indirecto, favoreciendo la nutricin de
la planta promoviendo un mayor desarrollo
radicular y resulta muy dificultoso distinguir
entre ellos (Fuentes-Ramirez and CaballeroMellado, 2005). Un gran nmero de ensayos ha
demostrado que la actividad bacteriana eleva
los niveles de fitohormonas en las plantas, ya
sea por la misma sntesis bacteriana, como
mediante la induccin ejercida por las bacterias
para que las plantas sinteticen dichas sustancias.
Paenibacillus polymyxa es generadora de
algunas fitohormonas como las auxinas y citokininas (Lebuhn et al., 1997; Timmusk, et al.,
1999). Bacillus pumilus y B. licheniformis
pareceran ser las responsables de promover el
crecimiento de plantas mediante la produccin
de giberelinas (Gutirrez Manero et al., 2001).
Solubilizadores de Fsforo
Las bacterias solubilizadoras de fsforo pueden aumentar el contenido de este nutriente
en los tejidos vegetales, por lo que han sido
clasificadas como PGPR (Toro et al., 1997). La
accin bacteriana solubiliza las principales formas minerales de aquel elemento presentes
en el suelo escasamente solubles o insolubles
(Igual et al., 2001).
Entre las bacterias solubilizadoras de fsforo
ms conocidas, se encuentran especies pertenecientes al gnero Bacillus: B. amyloliquefaciens, B. licheniformis, B. megaterium, B.
pulvifaciens, B. circulans y P. polymyxa
(Rojas et al., 2001).
Algunas han sido aplicadas como inoculantes para aumentar la productividad de cultivos. Su efectividad vara con el tipo de suelo,
contenido de P, etc. (Khan et al., 2007).
Se han desarrollado inoculantes comerciales
usando cultivos mixtos de bacterias. Algunos
48
Diaztrofos
Entre las especies bacterianas del grupo,
Paenibacillus macerans y P. polymyxa son
descriptos como fijadoras de nitrgeno. P.
macerans es una especie bastante abundante
en suelos y material vegetal en degradacin.
Su capacidad fijadora de nitrgeno se mantiene slo bajo condiciones anaerbicas, ya que
no posee ningn mecanismo de proteccin de
la enzima nitrogenasa frente al oxgeno.
Paenibacillus polymyxa tambin ha sido
relacionado por su habilidad fijadora de N2
(Vessey, 2003). Otros autores (Cakmakci et al.,
2007) demostraron que la inoculacin de cebada con P. polymyxa entre otras especies de
Bacillus sp., tena una efecto positivo en el crecimiento de las plantas, el cual no correlacionaba solamente con la habilidad fijadora de nitrgeno de las bacterias; debindose a una suma
de factores, sumndose al anterior la capacidad
solubilizadora de fsforo y la produccin de
hormonas ejercida por las especies aplicadas.
Otros investigadores sealan que el principal
rol en el que intervendra P. polymyxa, est
fuertemente ligado a su alta capacidad productora de compuestos antibiticos y exopoli-
Biocontroladoras
La promocin indirecta del crecimiento
vegetal ocurre cuando las PGPR previenen o
disminuyen el efecto deletreo de microorganismos fitopatgenos.
Diferentes especies del grupo Bacillus juegan
un rol activo en la supresin de microorganismos
fitopatgenos. Bsicamente dicho mecanismo de
supresin est mediado por la secrecin de metabolitos extracelulares que resultan inhibitorios de
los agentes patgenos an a bajas concentraciones. Un detallado estudio de dichos compuestos
puede encontrarse en Fernando et al., 2005.
Otros mecanismos detectados tambin en
especies del gnero, involucran procesos relacionados a la induccin de la resistencia de la planta. Siddiqui (2005) realiz un detallado compilado de los efectos ocasionados por numerosas
especies de PGPR, sobre enfermedades bacterianas, virales y fngicas vegetales. La mayora de
las experiencias demuestran la habilidad de las
distintas especies para el biocontrol de dichas
enfermedades indicando un alto potencial para
su empleo. Sin embargo, en la mayora de los
casos se considera necesario un mayor nmero
de ensayos conducidos bajo condiciones naturales, antes de proceder a su desarrollo y recomendacin como productos de biocontrol.
Datos ms contundentes y definitivos se
encuentran sobre varias formulaciones a base de
B. subtilis, que han sido empleadas en numerosos cultivos hortcolas, ornamentales y extensivos,
resultando en una significativa induccin de la
resistencia ante diferentes fitopatgenos. Entre
el 60 y 75% del cultivo de algodn en los EEUU es
tratado con esta bacteria, as como otros cultivos
como man, soja y maz (Nakkeeran et al., 2005).
Datos similares han sido mencionados para
otras especies como B. amyloliquefaciens, B.
pasteurii, B. cereus, B. pumilus, B. mycoides, y
CONLUSIONES
La produccin agropecuaria est en permanentes cambios, que involucran entre otras, la
necesidad de herramientas alternativas de proteccin y fertilizacin. Los inoculantes (biofertilizantes) y biocontroladores estn siendo explorados mundialmente como medida contra la contaminacin ambiental y reduccin de los costos
de produccin, en sistemas agropecuarios sustentables. Paralelamente, la produccin orgnica requiere de nuevas herramientas de proteccin contra plagas y enfermedades, as como
para el adecuado suministro de nutrientes.
Las bacterias que ocasionan o promueven el desarrollo vegetal han sido reunidas en un grupo llamado "bacterias promotoras del crecimiento vegetal",
o ms abreviadamente con las siglas PGPR.
Diferentes especies del taxn bacteriano considerado en este Captulo, que incluye los gneros
Bacillus, Paenibacillus, Brevibacillus, Virgibacillus,
Alicyclobacillus and Aneurinibacillus, fueron
reportadas como promotoras del crecimiento de
una gran cantidad de plantas. Ellas presentan varios
mecanismos para promover dicho desarrollo vegetal y son frecuentemente reportadas como fijadoras
de Nitrgeno atmosfrico, productoras de fitohormonas (giberelinas, auxinas, citocininas, etileno,
cido indol-3-cetico), solubilizadoras del fsforo y
productoras de metabolitos antimicrobianos.
Sin embargo, se sabe poco sobre su actividad
reguladora del crecimiento vegetal, con excepcin de la produccin de algunos compuestos
antifngicos. En trminos generales el efecto
benfico que ocasionan es resultado de la suma
de diferentes procesos que estas bacterias llevan
a cabo. El accionar como agente biocontrolador
de fitopatgenos fngicos ha sido extensamente
detallado y demostrado para varias especies.
49
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51
Captulo 4
INTRODUCCION
La mayora de las plantas terrestres tienen
en sus races una asociacin simbitica con las
Glomerales, un grupo de hongos filamentosos
presente en el suelo. Estos organismos se
encuentran formando parte de la microflora
de un determinado sitio, en dos formas infectivas, como esporas (Fig 1 a, b) y como hifas
(Fig 1 c, d). Constituye una asociacin benfica para el crecimiento y salud vegetal. Cuando
se produce la simbiosis, la planta aporta fotosintatos y el hongo, nutrientes insolubles tales
como fsforo (P), cobre (Cu) y zinc (Zn).
Figura 1. Estructuras caractersticas de races de trbol colonizadas por Glomus sp. (A) Esporas 400x. (B)
Esporas con micelio 100x. (C) Micelio externo 100x.
(D) Detalle de la colonizacin 400x.
A)
C)
B)
D)
53
54
IMPACTO EN LA AGRICULTURA
Como las plantas colonizadas son capaces
de obtener nutrientes del suelo y poseen una
mayor resistencia al stress ambiental, esta
simbiosis fngica tiene caractersticas de biofertilizante y protector de los cultivos. El
aumento de la absorcin de los nutrientes
hace pensar en la reduccin de la aplicacin
de fertilizantes qumicos, y la proteccin ante
las enfermedades, en la reduccin de pesticidas alcanzndose en ambos casos un nivel
similar de productividad.
Adems, con un apropiado manejo de las
micorrizas es posible tambin mantener la calidad del suelo y la sustentabilidad mientras se
protege el ambiente a largo plazo disminuyendo la contaminacin de las aguas superficiales
por reduccin de los qumicos y se reducen los
costos de produccin al disminuir los costos de
las labores agrcolas, mientras se mantienen
los campos a su ms alto nivel.
Un germoplasma micorrcico de alta calidad
es necesario para soportar y acelerar el uso
de micorrizas como biofertilizante en la agricultura.
55
Tabla I. Algunos de los inoculantes micorrcicos producidos, ordenados segn pas. Nombre del producto y caractersticas de los mismos de acuerdo con la informacin disponible en internet.
56
RESPUESTA AGRONMICA
Existen plantas con diferente dependencia
micorrcica. Familias como las leguminosas,
compuestas y las gramneas, sobre todo aquellas cultivadas, son dependientes en menor o
mayor grado de la simbiosis (Al Karaki et al.,
2004). Familias de plantas como las crucferas,
amarantceas, ciperceas entre otras, no son
colonizadas por las micorrizas arbusculares. El
xito de la inoculacin en trminos de respues-
ta de la planta depende de la cepa introducida y las caractersticas del suelo siendo los
niveles de fsforo el factor determinante
(Johnson et al., 1992). Niveles de fsforo por
encima de 20 ppm reduce el nmero de esporas y la colonizacin de la raz no observndose respuesta.
La complejidad del ambiente biolgico del
suelo dada por artrpodos fungvoros y microflora del suelo modula esta respuesta. Las condiciones fsico qumicas del suelo dadas por el
pH, temperatura y textura gobiernan tambin
el efecto de la inoculacin.
La dependencia micorrcica est relacionada
con la especie de planta y los niveles de P presentes en el suelo.
TRAZABILIDAD MICROBIOLGICA
Las micorrizas arbusculares son habitantes
normales del suelo, solo es posible la trazabilidad microbiolgica de la cepa incorporada utilizando mtodos de biologa molecular que
permiten caracterizar con precisin la especie
incorporada y seguirla posteriormente en la
raz y en el suelo (Di Bonito et al., 1995,
Daniell et al., 2001, Anderson and Cairney,
2004, Saito et al., 2004).
CONCLUSIONES
La aplicacin de las micorrizas arbusculares
en cultivos extensivos es an muy difcil por
lo complicado de su reproduccin en medios
axnicos, ms cercano se encuentra la incorporacin de esta tecnologa a cultivos que
tienen un perodo de invernadero, ya sea
como plantines de semilla (Saggin and
Ribeiro da Silva, 2006) o como estacas
(Marin, 2006). En estos casos los cultivos
salen del invernadero con una colonizacin
alta que les permite adaptarse mejor a las
condiciones de campo. La micorriza nativa
57
masiva de inoculantes que llevar a una reduccin de los costos ya que esto constituye uno
de los obstculos mayores de su aplicacin
(Adholeya et al., 2005).
La permanencia en el suelo en general es
baja, siendo este reemplazado por la poblacin micorrcica existente. Hasta donde se
sabe no existen trabajos generalizados de
seguimiento del inoculante.
El costo de la produccin de inculo es un
serio problema porque muchas veces no es
competitivo en precio con la fertilizacin fosforada. Si bien los productores entienden la
importancia de los sistemas agrcolas sustentable la reduccin de agregado de P por el uso
AM inculo fngico esto no justifica su uso en
trminos econmicos excepto en los casos de
cultivos de alto valor (Saito and Marumoto,
2002).
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59
Captulo 5
INTRODUCCION
Azotobacter es uno de los primeros microorganismos que ha sido empleado en la inoculacin de los cultivos como promotor de crecimiento. En la ex-Unin Sovitica se desarroll
un extenso programa de inoculacin con
Azotobacter durante las dcadas del 30, 40 y
50 (Mishustin y Naumova, 1962). Luego, debido a la inconsistencia en los resultados, su
empleo como inoculante disminuy. Sin
embargo, algunos pases tales como Egipto,
Pakistn, Cuba e India continuaron estudiando y promoviendo su uso.
B)
61
coccum, A. vinelandii, A. beijerinckii, A paspali, A. armeniacus, A. nigricans y A salinestris. La especie aislada con mayor frecuencia
de los suelos es A. chroococcum. Rubio et al.,
(2007), aislaron cepas pertenecientes a las
especies A. chroococcum, A. salinestris y, en
menor proporcin A. armeniacus, de suelos de
diferentes regiones de la Repblica Argentina.
La capacidad de Azotobacter de estimular
el crecimiento de las plantas ha sido comprobada por numerosos investigadores. Adems
de la fijacin de nitrgeno, otras propiedades
tales como la capacidad de solubilizar fosfatos, la produccin de reguladores del crecimiento, vitaminas, siderforos y sustancias
antifngicas son considerados como responsables del efecto positivo sobre los vegetales.
Algunos autores postulan que la produccin
de auxinas y otros reguladores del crecimiento vegetal podran ser el mecanismo principal
que explicara los efectos beneficiosos de
Azotobacter (Zahir et al., 2005). Sin embargo,
de manera similar a lo que ocurre con otras
bacterias PGPR, la promocin del crecimiento
sera consecuencia de la accin sinrgica de
varios mecanismos (Behl et al., 2006).
62
Patogenicidad
Desde el descubrimiento del gnero
Azotobacter, hace ya ms de 100 aos, no
63
Tabla I. Ensayos a campo de cultivos extensivos inoculados con Azotobacter. *la fertilizacin se aplic a todos los tratamientos **nd: dato no disponible ***s: incremento estadsticamente significativo, ns: incremento estadsticamente no significativo.
Formulaciones comerciales
No existen actualmente productos comerciales registrados en el SENASA que tengan en su
formulacin Azotobacter. En otros pases
existen formulaciones tanto slidas (en turba,
vermiculita, compost, lignita) como lquidas.
Los inoculantes lquidos, ms comunes en los
ltimos aos, se basan en la capacidad de
Azotobacter de producir quistes, propiedad
que permite una mayor sobrevivencia de la
bacteria en el tiempo.
Control de calidad
No se pueden establecer hasta no contar con
cepas y formulados. De todas maneras, el control de calidad de los inoculantes en base a
Azotobacter en otros pases es similar al realizado con otros inoculantes bacterianos, tales
como los formulados con Azospirillum. La utilizacin de tcnicas moleculares como el anlisis de restriccin del gen ribosomal 16S amplificado por PCR (ARDRA) y el BOX-PCR permiten
la identificacin a nivel de especie y cepa respectivamente. (Rubio et al., 2007).
Es importante destacar que los controles de
la efectividad dependern del mecanismo de
promocin del crecimiento a travs del cual
fue seleccionada la cepa. Por lo tanto, es til
medir fijacin de N, solubilizacin de fosfatos,
estimulacin del crecimiento radicular, produccin de cido indolactico, etc. A manera de
ejemplo, se presentan en la Tabla II, los parmetros de calidad fijados por el Indian
Standards Institution (ISI) para Azotobacter
en la India.
64
CONCLUSIONES
El empleo de esta bacteria en Argentina
est en pleno proceso de investigacin
tanto en estudios bsicos como aplicados.
Se destaca su importancia como fijador de
N2 en el suelo, como productor de fitohormonas y por su capacidad de solubilizar
fosfatos.
De la informacin documentada se observa
que la inoculacin de cultivos extensivos con
Azotobacter, bajo ciertas condiciones, produce incrementos en los rendimientos de cultivos
de trigo y maz. No hay suficiente evidencia
reportada en las condiciones de cultivo en
Argentina.
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65
Captulo 6
EL FUTURO DE LOS INOCULANTES: HACIA EL DESARROLLO DE CONSORCIOS MICROBIANOS PARA UNA AGRICULTURA SUSTENTABLE.
Fischer, Sonia1 y Jofr, Edgardo1*
1Facultad de Ciencias Exactas, Fsico-Qumicas y Naturales, Universidad Nacional de Ro Cuarto. Docentes de la
e-mail: ejofre@exa.unrc.edu.ar
INTRODUCCION
67
68
69
70
La completa coexistencia de una cepa bacteriana con otra es definida como "la capacidad
de una cepa de alcanzar el mismo tamao de
TRAZABILIDAD MICROBIOLGICA
Todas las cepas tienen una huella genmica
que la distingue de otras; de manera que, una
vez liberados los microorganismos del consorcio
al suelo, stos pueden ser recuperados y distinguidos de la microflora nativa. Una manera
rpida y que no genera mayores inconvenientes es la generacin de perfiles de ADN,
mediante amplificaciones por PCR utilizando
cebadores BOX, ERIC, o REP (correspondientes
a elementos de DNA repetitivos presentes en
localizaciones caractersticas en el genoma de
procariotas), esto genera perfiles genticos
reproducibles y altamente especficos para cada
cepa (De Bruijn, 1992). Una de las grandes ventajas de este mtodo es que los fingerprints
pueden ser generados no slo de ADN purificado sino tambin directamente de lisados crudos, cultivos lquidos o colonias de placas como
as tambin, por ejemplo, de ndulos radicales
(Radermaker and Bruijn, 1996). Otra tcnica
que se puede utilizar es AFLP (Amplified
Fragment Lenght Polymorphisms) que combina
el uso de enzimas de restriccin, para generar
fragmentos genmicos caractersticos, con
amplificaciones mediante PCR de subconjunto
de aquellos fragmentos, generando un perfil
de ADN complejo; sin embargo esta tcnica es
ms costosa y compleja (Jansen et al., 1996;
Vos et al., 1995).
RESPUESTA AGRONMICA A LA
COINOCULACIN
Algunos estudios agronmicos han sido llevados a cabo en cereales para evaluar la efectividad de los inoculantes mixtos. As por ejemplo,
la inoculacin de trigo con un consorcio de A.
brasilense Sp245 y Rhizobium leguminosarum bv Trifolii demostr que la inoculacin
dual fue superior a la individual, ms an cuando se agreg 50 Kg de Nha-1. Esta mezcla bacteriana produjo un aumento en la materia seca
de la parte area y del grano del 33% y 22%,
respectivamente, comparado con plantas sin
inocular (Galal et al., 2001). La efectividad de
esta coinoculacin, es probablemente, debido
a la produccin de auxinas por parte de
Azospirillum que altera la morfologa radical y
a la capacidad de R. leguminosarum de ingresar a travs de los sitios donde emergen las races laterales, a plantas trigo por un mecanismo
denominado "crack entry", como previamente
haba sido demostrado para trigo arroz y maz
por Webster et al. (1997).
Por otro lado, la inoculacin de trigo con
una mezcla de Azospirillum lipoferum y
Bacillus megaterium (cepas solubilizadoras
de fosfato) aument el peso seco areo y la
produccin de nitrgeno total. Adems, el
contenido de fsforo en la parte area increment en un 53% y 37% comparado con las
plantas sin inocular y las inoculadas slo con
A. lipoferum, respectivamente. La respuesta
de la planta a la inoculacin con Azospirillum
probablemente se deba no a uno, sino a
varios mecanismos, incluidos la fijacin de
nitrgeno, la produccin de hormonas, la actividad nitrato reductasa, etc (El-Komy, 2005).
En Argentina, se han llevado a cabo experimentos a campo que avalan la efectividad de
las coinoculaciones. As por ejemplo, la inoculacin de semillas de maz con P. fluorescens
(bacteria solubilizadoras de fsforo) y A. brasilense, produjo un aumento en el contenido
de fsforo de las plantas, esta mayor concen-
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75
Consideraciones Finales
Perticari, A.; Puente, M. y Garca, J.
Ingenieros Agrnomos. Laboratorio de Bacterias Promotoras del Crecimiento Vegetal (BPCV), IMYZA, CNIA, INTA Castelar,
Buenos Aires, Argentina. Los Reseros y Las Cabaas s/n (1712), Castelar.
e-mail: aperticari@cnia.inta.gov.ar
77
NORMATIVA VIGENTE
Actualmente no existe una normativa especfica donde se describan los requisitos para
microorganismos utilizados en la elaboracin
de inoculantes distintos a rizobios, sea el caso
de Azospirillum, Pseudomonas, micorrizas,
78
microorganismos en el producto, etc.), son prioritarios en este momento los aspectos normativos para consensuar a nivel nacional y
regional estndares de trazabilidad y mejor
control de calidad de los productos existentes
(ms all de las exigencias que ya hayan implementando por iniciativa de las empresas productoras), en particular para productos diferentes a
los elaborados en base a rizobios.
AVANCES INTERNACIONALES
La suma de condicionamientos econmicos y
ambientales internacionales crea un marco de
alto requerimiento del uso de tecnologas amigables y de bajo costo. Esto se refleja en el creciente y permanente inters en el empleo de
microorganismos para mejorar la productividad de todo tipo de cultivos en todos los continentes, en particular Asia y Amrica Latina.
En los ltimos aos se ha incrementado en
forma significativa la edicin de libros, la realizacin de congresos y la publicacin de investigaciones cientficas sobre este tema. En estos
estudios se aplican todas las tecnologas o
herramientas de investigacin disponibles
(biologa molecular, bioinformtica, metagenmica, etc.). Esto permite que conozcamos
cada vez con ms detalle que est pasando
PERSPECTIVAS A FUTURO
En un contexto de necesidad de aumentar la
productividad con altos costos de fertilizacin
qumica, el empleo de microorganismos promotores del crecimiento vegetal adquiere relevancia y tiene amplias posibilidades de insertarse en el sistema de produccin de maz y
trigo actual y futuro. Para que su empleo
tenga credibilidad en el sector productivo no
deberan acelerarse los tiempos de desarrollo
y de evaluacin de los inoculantes elaborados
con microorganismos solos o combinados.
Esto implica:
1. La generacin de inoculantes a partir de
cepas seleccionadas por su eficacia en su capacidad promotora en las condiciones de
empleo.
2. La obtencin de formulados que permitan
mantener un adecuado nivel poblacional de la
cepa selecta tanto en el almacenamiento, como
en el sitio de aplicacin, sea suelo y/o semilla.
3. Desarrollar protocolos de control de calidad para la trazabilidad permanente del producto inoculante.
79
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