Ernesto Sábato El Tunel
Ernesto Sábato El Tunel
Ernesto Sábato El Tunel
Ernesto Sábato
Ernesto Sábato se doctoró en física en la Universidad de la Plata
(1938) e inició una prometedora carrera como investigador científico
en París, donde había ido becado para trabajar en el célebre
Laboratorio Curie. Allí trabó amistad con los escritores y pintores del
movimiento surrealista, en especial con André Breton, quien alentó la
vocación literaria de Sábato y despertó su fascinación por los arcanos
del inconsciente, motivo que sería recurrente en su obra. En París
comenzó a escribir su primera novela, La fuente muda, de la que sólo
publicaría un fragmento en la revista Sur.
En 1940, de regreso en Argentina, comenzó a dictar clases en la
Universidad Nacional de La Plata, pero se vio obligado a abandonar la
enseñanza tras perder su cátedra a causa de unos artículos que
escribió contra Perón. Aquel mismo año publicó su ensayo Uno y el
Universo(1945), en el que criticaba el reduccionismo en el que
desemboca el enfoque científico y la deshumanización de la ciencia;
tales ideas y una honda crisis vocacional y existencial padecida dos
años antes lo orientaron definitivamente a la literatura. La obra
prefiguraba buena parte de los rasgos fundamentales de su
producción literaria y ensayística: brillantez expositiva, introspección,
psicologismo y cierta grandilocuencia retórica.
Su carrera literaria estuvo influida desde el principio por el
experimentalismo y por el alto contenido intelectual de sus obras,
marcadas por una problemática de raíz existencialista. Así, El
túnel (1948) ahonda en las contradicciones e imposibilidades del amor,
mientras que Sobre héroes y tumbas (1961) presenta una estructura más
compleja; los diversos niveles de la narración enlazan vivencias
personales del autor y episodios de la historia argentina en una
reflexión caracterizada por un creciente pesimismo. Ambas novelas
tuvieron gran repercusión y otorgaron a Sábato un puesto
prominente entre los grandes autores argentinos y latinoamericanos
del siglo.
Extraordinaria muestra de sus aptitudes para el relato de corte
psicológico, El túnel (1948) fue rápidamente traducida a diversos
idiomas y llevada al cine. La narración tiene indudable originalidad y
valores psicológicos relevantes: la confesión de Castel, que ha
cometido un crimen pasional, enfrenta al hombre de hoy con una
sociedad desquiciada y resalta los contrastes con pincel agudo y lleno
de color. El estilo está en consonancia con el tema, dentro de un
desequilibrado equilibrio.
Sintesis
La obra El Tunel, se inicia con Castel, quien se presenta a sí mismo como autor del
crimen que relatará. Luego narra cómo conoce a Maria en una exposición de pintura que
él expone y donde la muchacha es la única persona que se ha dado cuenta del detalle de
una ventana con una mujer frente al mar que aparece en uno de los cuadros. Castel se
obsesiona con esta chica y decide ir en busca de ella, fantaseando todas y cada una de las
posibilidades que tiene para encontrarla. Luego de encontrarla de manera casual, y
después de expresarle sus sentimientos hacia ella se inicia una relación tormentosa para
ambos.
Maria decide no seguir con la relación y hace un viaje al campo, a casa de su primo
Hunter, Castel la busca en su casa, pero lo atiende un hombre ciego, que se presenta
como Allende, esposo de Maria y le entrega una carta donde dice únicamente: “Yo
también pienso en usted”. Atormentado por la idea, Castel arma una serie de hipótesis
del por qué Maria no le había dicho que era casada, así que le escribe cartas a la estancia
y le pide que se comunique con él. Maria responde aceptando verse con el en cuanto
regrese a Buenos Aires.
Durante más de un mes mantienen una relación constante, perofrecuentemente Juan
Pablo se atormenta y atormenta a María con cuestionamientos sobre su vida privada, sus
relaciones, la manera en que reacciona, el “cariño de hermanos” que dice sentir por
Allende, etc., tales situaciones fueron llegando a extremos y un día Castel amenaza a
María con matarla si se entera de que lo engaña.
A través de una carta le explica a Maria su salida repentina de la estancia y agradece sus
atenciones, pero él no cree en ella porque no entiende como puede hablarle de amor a él
y a su marido y al mismo tiempo acostarse con Hunter y así se lo hace ver. Castel va a
buscar a Lartigue un amigo cercano a Hunter para preguntarle desde cuándo mantienen
relaciones María y su primo, ante la negativa de Lartigue y su nerviosismo, Castel sólo
confirma sus sospechas.
Maria regresa a Buenos Aires y queda en verse con Castel, pero no va a la cita, Castel
llama a casa de Maria y le dicen que ha regresado a la estancia. Castel también va y en las
afueras recuerda los momentos felices con María y la sueña niña corriendo en un caballo
con su cabello al viento: … en todo caso había un sólo túnel, oscuro y solitario: el mío, el
túnel en que había transcurrido mi infancia, mi juventud, toda mi vida reflexiona Castel;
ve a través de la ventana de la casa, que Maria y Hunter bajan las escaleras y se van del
brazo a dar un paseo por el parque, al volver a casa.
Castel se siente morir al notar que sólo se enciende una luz, la de la habitación central, y
más tarde la de la habitación de María. Juan Pablo con un cuchillo en mano, sube por el
balcón y aparece frente a la ventana de María quien le pregunta sobre lo que va a hacer,
Castel responde que tiene que matarla porque lo ha dejado solo y la mata. Sale de la casa
y muy temprano llama a casa de María y le dice a Allende que tiene que verlo.
El túnel es una novela de fácil lectura, y de una estructura sencilla: desde el comienzo ya se sabe
quién es la víctima y quién el victimario. El personaje de María Iribarne está envuelto en un gran
misterio; misterio éste que impulsa a Juan Pablo Castel a asesinarla. Por su parte, Castel, se obsesiona con
ella, porque cree ver en su víctima su propia salvación. Es una obra donde abunda el pesimismo en cada
diálogo o pensamiento de los personajes.
Sábato, en esta obra maneja el problema existencial del individuo Juan Pablo Castel es
incomprendido por la sociedad, marginado por ella, donde constantemente salta la pregunta ¿Es
marginado por la sociedad o él se margina por su actitud?. Se presenta lo oscuro del alma, la imposición
de su propia verdad. Sin embargo, en la novela y a través del personaje central, Sábato muestra una carga
de ironía cuando Castel se burla de todo lo que le rodea.
El tema de la novela es el amor obsesivo de Juan Pablo Castel hacia María Iribarne y los celos
por la falta de comunicación que lo llevaron a caer en la obsesión, al borde de la locura y cometer un
crimen. Castel pensaba que María lo engañaba con Hunter, esto desencadenó en él la desconfianza hacia
su amada, pues él pensaba que ella lo había traicionado y por eso se llevó a cabo el crimen pasional.
Personajes Principales
María Iribarne: es una persona manipuladora, le gustaba engañar a los hombres, como si le gustara
lastimarlos y disfrutara de esto. Era una persona difícil de entender, difícil de conocerla
Personajes secundarios
Allende: Esposo de María. Está ciego y conoce a Castel porque le entrega una carta que María le dejó
antes de partir por primera vez a la estancia de Hunter su primo. Al enterarse por boca de Castel de las
infidelidades de María y de su muerte, lo llama "insensato" y termina por suicidarse.
Hunter: Primo de Allende y al parecer amante o amigo cercano de María. Es bastante superficial
Mimi: es un personaje al parecer de origen francés, y utiliza esto para justificar su forma de ser, pedante,
siempre esta pronunciando las palabras en su idioma original.
Existe una relación entre el título "El Túnel" y el contenido de la obra: el título se refiere a la
oscuridad donde se encontraba Juan Pablo Castel, a la incomunicación, pues él decía que toda su vida la
había pasado en una difícil, amargada y solitaria oscuridad, pero cuando éste conoce a María llega a
Tiempo y espacio
Epocaaa
l siglo 20, es una época en la que se dan muchos cambios para la sociedad, ya que
aparecen nuevas ideologías que las personas aceptan y las cuales se ven reflejadas en la
literatura, el arte y en el modo de vivir de las personas. También se dan muchos cambios
en la sociedad, debido a que se da la guerra fría y esto lleva a que luego empiecen las
distintas dictaduras en Latinoamérica. Todo esto se ve reflejado en las obras de Sábato y
por esto “El Túnel” es una novela que se ve afectada por el pensamiento del Siglo XX.
Ernesto Sábato pertenece a la generación de 1920-1950 de escritores hispanoamericanos,
la cual está caracterizada por orientar sus obras a los conflictos del hombre de ciudad y al
realismo fantástico acudiendo a veces a formas de expresión que son verdaderos
experimentos lingüísticos. Ernesto Sábato se interesó acerca de las posibilidades que
ofrecería la literatura para analizar problemas existenciales, y el fruto fue la novela El túnel
(1948) en la que el narrador describe una historia de amor y muerte en la que muestra la
soledad del individuo contemporáneo. La escuela de este autor es la NOVELA URBANA
DE ORIENTACIÓN EXISTENCIAL, la cual está caracterizada por el periodo post segunda
guerra mundial con personajes que preguntan por la condición humana y el absurdo,
además temas como la angustia, la introspección, los problemas del hombre de la gran
ciudad, el hombre maza que fue incorporado a la novela hispanoamericana. EL
PERONISMO EN 1945 La pobreza y el trabajo continuo eran dos tópicos que Argentina
afrontaba en 1945. En un intento de eliminar este problema, Juan Domingo Perón llegó al
poder en 1946 e implementó un movimiento político conocido como Peronismo, también
conocido como "Justicialismo" (ya que su objetivo era la justicia social). Las bases del
partido se centraban en la justicia social, capitalismo y nacionalismo, pero sobre todo en
controlar la expansión de los emigrantes hacia la capital. Esta política influyó en la vida del
autor, es decir en la forma de cómo la veía y actuaba en ella, interactuando con las
personas que lo rodeaban, mostrándose siempre hacia a ellas como un participe del
existencialismo, y como tal era el tipo de personas que veía el mundo desde su propia
perspectiva
características
Elementos policiales.
Análisis de los sueños. Relacionar con el surrealismo.
Relación con el autor.
Temas y subtemas.
Personalidad del protagonista.
María y los personajes restantes.
La comunicación.
Elementos literarios.
Hay un enigma que es saber si María tiene otros amantes. Castel es el detective que a través de su
razonamiento trata de descubrir la verdad usando los indicios que ella y otros personajes le dan no
intencionalmente.
El surrealismo es un movimiento artístico con ausencia de todo control ejercido por la razón y de
toda preocupación por la estética y moral.
Hay influencia surrealista en la manera en la que se narran los hechos, de una manera
informal. A veces no los ordena cronológicamente.
Pareciese ser una narración espontánea, no se preocupa por hacerla perfecta. “No, ahora
que recuerdo, eso me lo preguntó después que bajamos.” Página 101
En relación a los sueños, el que correspondería a este movimiento sería el primero, acerca
de él convirtiéndose en un pájaro.
El protagonista al igual que el autor de esta novela era pintor, apasionado, pesimista por haber
sufrido a lo largo de su vida, estaba preocupado por las características del hombre y la sociedad
actual, estuvo tentado por el suicidio, entre otras características.
..... El Túnel es la novela de la soledad del hombre actual, expresada en la imposibilidad de comunicación
y en la vaciedad del amor. Construida con gran economía de medios, ya eran visibles en ella algunas
notas que en la última (i. e.Sobre Héroes y Tumbas), se han desarrollado y enajenado totalmente. Su
personaje mostraba una oscura ambigüedad, que luego sería la característica central de su concepción de
los personajes novelescos (6).
..... Ha visto bien el profesor de la Universidad de Cuyo cuál es el motivo central de la obra,
pero nosotros queremos ir más allá y observarlo en su dinámica composición, estudiar su
`motivación´.
..... Partimos de esas observaciones y de otras tan válidas como ésta de Iris J. Ludmer:
Sábato testimonia a Sábato; su pretensión de mostrar lo que sucede o sucedió resulta en la realidad sólo
mostración de su concepción del mundo, de lo que le sucede (7).
..... Creemos, con el Profesor Borello, que el `motivo´ central o dominante en El Túnel es la
soledad e incomunicabilidad básica del hombre, elementos centrales de la cosmovisión de
Sábato plasmada literalmente en la novela.
..... El motivo de la soledad, desamparo e incomunicabilidad del hombre ya frecuentemente
cultivado en la narrativa contemporánea y que aparece con notable persistencia en todas las
manifestaciones humanas (filosóficas, literarias, artísticas) de nuestro tiempo, alcanza su
desarrollo en una `composición´ tal que permite juzgar a El Túnel como una de las novelas más
representativas de la actualidad (8).
..... Welleck y Warren aclaran este concepto de `composición´:
Lo que en inglés se llama la `composición´ de la novela es lo que los alemanes y rusos llaman su
`motivación´. El término bien pudiera adoptarse en inglés por ser valioso precisamente por su doble
referencia a la composición estructural y narrativa y a la estructura interna de teoría psicológica, social o
filosófica de por qué los hombres se comportan como se comportan, o sea, en último término, una teoría
de la causalidad. (Teoría Literaria).
..... Es en este segundo aspecto en que insistiremos aquí: una observación del comportamiento
de los personajes de El Túnel, para desentrañar la razón última de ese obrar.
..... Motivación evidentemente existencialista, de raíz sartreana, es la que encontramos en el
comportamiento de Juan Pablo Castel, protagonista -y narrador- de la obra. Su afán de dominio
y posesión absoluta del ser amado y la destrucción por muerte de ésta, sólo se explica desde
esa perspectiva. El amor que siente por María Iribarne presenta todos los rasgos que para ese
sentimiento señala el autor de La Naúsea.
..... Sabido es que el tema de `el otro´- descubierto para la literatura sólo en nuestro tiempo,
según lo ha señalado Sábato- es una de las conquistas básicas de la filosofía existencial que lo
hizo centro de sus preocupaciones. La pasión por `el otro´ atormenta enormemente a Jasper y
a Scheller, por ejemplo. El existencialismo atendió con profundidad a la naturaleza de las
relaciones que unen una existencia con otra; consideró los peligros de la enajenación que
amenaza al existente cuando toma en cuenta sus relaciones con los otros hombres sólo en el
plano de la organización; vio el impacto que provoca en uno el contacto con el otro cuando este
contacto es solamente de contenidos exteriores y no de las esencias de los seres que se
relacionan. El existencialismo llega a concluir que entre los existentes hay abismos de soledad
e incomprensión. Para los cristianos -Gabriel Marcel, por ejemplo- existe la promesa de una
reconciliación; para los ateos, ese lazo de unión es conflictivo o de servidumbre y por ello
consideran que la existencia auténtica sólo puede llegar a obtenerse partiendo del desamparo
total.
..... Sartre ha sido quien ha llevado a cabo un análisis más detenido de la mala fortuna de la
comunicación y su pensamiento pareciera ser el que respalda como idea la imagen que Sábato
ha creado en El Túnel. Según Sartre, el esencial estado de solipsismo sólo puede evitarse en
la existencia humana gracias al logro de una relación de ser a ser, de sujeto a sujeto. Y esto es
justamente lo que intentará el personaje de la obra que ocupa nuestra atención: Juan Pablo
Castel -un cabal `existente´ según tendremos ocasión de comprobarlo- pretende lograr salir de
su soledad básica entrando en contacto con María, un ser tan existente como él. Su ansia de
ser entendido es absoluta, hay en él un afán imperioso de obtener una real comunicación.
..... El motivo que lleva a Juan Pablo Castel a escribir su historia es "la débil esperanza de que
alguna persona llegue a entenderme. AUNQUE SEA UNA SOLA PERSONA". Grito angustiado
que revela en el protagonista ese afán de comunicación a que aludíamos, su anhelo de ser
comprendido, anhelo que persiste en él, aun después de dar muerta a aquella con quien estuvo
más cerca de "comunicarse": conserva una esperanza, aunque sea débil.
..... María había aparecido en su vida cuando el pintor presenta en una exposición suya el
cuadro llamado "Maternidad". Los críticos de arte observan los méritos que según ellos
caracterízan la obra del artista; sin embargo, ninguno vio un pequeño detalle enormemente
sugestivo según Castel:
... Pero arriba, a la izquierda, a través de una ventanita, se veía una escena pequeña y remota: una playa
solitaria y una mujer que miraba el mar. Era una mujer que miraba esperando algo, quizá algún lamado
apagado y distante. La escena sugería, en mi opinión, una soledad ansiosa y absoluta.
..... Para el pintor, el cuadro era portador de un mensaje, levemente esbozado, pero lleno de
sugestión: la esencial soledad del hombre y su lucha ansiosa por lograr superarla. El cuadro
era como una concretización artística de la visión de la existencia de Juan Pablo Castel. La
escena a que alude no era, pues, ni secundaria ni decorativa. Sin embargo, hubo una sola
persona que comprendió la esencialidad de ese aparente "detalle".
..... Se trata de una muchacha desconocida que mira concentradamente lo que para el pintor
tenía tanta importancia: mientras tanto "él la observó todo el tiempo con ansiedad" (p 17).
Primer paso de las relaciones: lo que en ella le atrae es la posibilidad de encontrar lo que
siempre ha anhelado, alguien que lo `entienda´, alguien con quien llegar a la completa
"comunicación". Por eso, después que la muchacha desaparece, Castel queda vacilando "entre
un miedo invencible y un angustioso deseo de llamarla" (p. 17). El miedo nace del hecho que la
mujer se le presenta como la única escapatoria posible a su soledad vital. En simple imagen lo
expresa:
algo así como miedo de jugar todo el dinero que se dispone en la vida a un sólo número.
en que "el sólo número" es la única persona que podía comprenderlo y la fortuna puesta en
juego es su posibilidad del encuentro total.
..... Desde el instante en que la vio, "sólo pintó para ella", lo que en Castel viene a significar que
la muchacha se constituyó en el soporte de su existir. Por eso hará todo lo posible por
encontrarla y, cuando lo logra -despué de desesperantes semanas- ella necesariamente
despertará en Castel un amor, pues se le aparece como un "sujeto" con el que la relación es
posible. Pero ese amor tendrá características muy especiales, aquellas a las que aludíamos
líneas atrás: es un amor de índole existencial.
..... En efecto, dada la posibilidad de salida del estado de solipsismo por el camino de la
comunicación establecida entre sujeto y sujeto, está el peligro que uno avasalle al otro
transformándolo en "objeto". La salida radica en impedir esto venciando en la brega o llegando
con el otro al amor, que no es posesión sólo del cuerpo. Lo que se pretende, en una
concepción existencialista, es poseer "una libertad": e amor nace, pues, del deseo del otro
sujeto, del afán por que la libertad del otro quede como cautiva. Así pide Castel con respecto a
María una vez que la ha encontrado -encuentro fortuito y fuhaz el primero-; los sentimientos se
mezclan en Juan Pablo; al pensar que ella le había dicho que recordaba constantemente su
cuadro, Castel afirma:
mi corazón latía con violencia y sentí que se me abría una oscura pero vasta y poderosa perspectiva: intuí
que una gran fuerza, hasta ese momento dormida, se desencadenaría en mí (p. 41).
..... Ve a la mujer como una perspectiva, poderosa y vasta, de realización: sólo ella le brinda la
posibilidad de dar salida a la enorme fuerza que latía en él. Más aún: notando que el
reencuantro es imprescindible, se dice varias veces en voz alta: "eso es necesario, eso es
necesario".Al día siguiente vuelve a encontrarla y por intuir lo que la muchacha podría significar
en su vida, supera toda timidez e indecisión y obra con enrgía y entereza. Le dice, gritándole
casi brutalmente, que la necesita, sin saber responderle con claridad por qué: "hasta ese
momento no me había hecho la pregunta y más bien había obedecido a una especie de
instinto" (pp. 44-45). Le declara: "siento que usted será algo esencial para lo que tengo que
hacer, aunque todavía no me doy cuenta de la razón" (p. 46). Cree que hay una esencial
identidad entre ambos: "no sé lo que piensa y también sé lo que pienso yo, pero sé que piensa
como yo". Antes le había manifestado "mejor podría decirle que usted sientecomo yo" (p. 47). Y
eso es lo que él anda buscando ansiosa, desesperadamente: la persona que adopte ante la
existencia una postura análoga a la suya, lo cual le significará seguridad ante el caos, posible
entendimiento y superación de la soledad básica. Deseando ese encuentro absoluto, todo lo
que venga a postergarlo o a impedirlo definitivamente provoca en él estados de desesperación;
y todo detalle que en cierta forma le indicara su entrega lo llena de felicidad. Así, por ejemplo,
la primera carta que recibe de ella, está firmada simplemente "María", por lo que Juan Pablo
piensa: "esa simplicidad me daba una vaga idea de pertenencia, una vaga idea de que la
muchacha estaba ya en mi vida y de que, en cierto modo, me pertenecía" (p 62). Nótese los
términos a que alude su relación con ella: "pertenencia". Este afán de posesión lo conduce a
someter a María a enormes y complicados interrogatorios, pensando en hipotéticos engaños: le
pregunta sobre sus silencios, sus miradas, sus palabras perdidas, sus viajes, sus antiguos
amores, etc.
..... En algunos momentos él cree haber logrado esa ansiada posesión, lo que le permitía salir
de la soledad. Pues bien, él no pudo resignarse jamás a tenerla incompleta y menos por breves
instantes. Por eso dirá:
ahora que puedo analizar mis sentimientos con tranquilidad siento que, en cierto modo, estoy pagando la
insensatez de no haberme conformado con la parte de Maríaque me salvó (momentaneamente) de la
soledad (p. 155 )
En realidad esto no lo habría conformado nunca, ya que lo que él deseaba era la salvación
definitiva, posible sólo en la comunicación total. De allí ese deseo suyo creciente de "posesión
exclusiva" a que alude el mismo Castel.
..... Esta rápida revisión de momentos significativos de la obra nos hace ver la índole del amor
de Castel por María. Comprenderemos mejor su indudable raíz existencialista con una cita de
Mounier que resume el pensamiento de Sartre respecto al amor:
... El otro-objeto no es suficiente para despertar el amor; el amor sólo puede nacer del deseo del otro-
sujeto (María en la novela). Es preciso, (para obtener el triunfo) que la libertad del otro no sólo sea
encontrada, sino que se convierte en mi cautiva (...). Yo deseo, en efecto, que el otro venga a quedar
englutido en mi libertad y que lo haga libremente, puesto que quiero poseerle como libertad. Yo le pido,
pues, ser objeto queriéndole a la vez sujeto. Además, para aprehenderlo como sujeto es preciso que yo sea
objeto como él e incluso objeto fascinador. Pero instantáneamente yo (sujeto) dejo de aprehenderla como
proyectaba. La rabia de esta impotencia puede llevarme a tratarme furiosamente como objeto, como un
niño que se da manotazos o como el hombre que se injuria y se hunde en el fracaso; tal es la significación
del masoquismo(9).
..... Este pensamiento teórico, Sábato lo lleva a una plasmación literaria en su novela.
..... ¿Qué entiende Juan Pablo Castel por "verdadero amor"? Él mismo no lo sabe explicar:
¿Qué quería decir? ¿Un amor que incluyera la posesión física? Jamás me preocupó excesivamente. Quizá
lo buscaba en mi desesperación por comunicarme más firmemente con María (p. 77)
La unión física como probable medio de encuentro de dos personas que intentan comunicarse.
..... Esta es la concepción de Sartre:para el filósofo francés, una vez producida la frustración de
aprehender la libertad esencial del otro "como tal libertad", nace el deseo de adherirla a su
propia corporeidad y así atraparla. Para el exsistencialismo sartreano
la sexualidad no e una función contingente de mi cuerpo, sino una estructura necesaria de mi ser, un
proyecto fundamental de mi tipo de existencia (Mounier, ob. cit., p. 107).
..... Pero esa tentativa también conduce al fracaso: sólo se posee unos despojos y no al otro.
"En su florescencia, la carne del otro me patentiza al otro como inaccesible". Esto es
justamente lo que acontece a Castel con respecto a María:
... Yo tenía la certeza de que, en ciertas ocasiones, lográbamos comunicarnos, pero en forma tan sutil, tan
pasajera, tan tenue que luego quedaba más desesperadamente solo que antes, con esa imprecisa
satisfacción que experimentamos al querer reconstruir ciertos amores de un sueño (pp. 77-78).
... Sé que, de pronto, mirando un parque en la tarde o la salida de un carguero de nombre remoto,
lográbamos algunos momentos de comunión (p. 78).
ella está seguramente cansada por la esencial incomunicabilidad de esas fugaces bellezas (p. 78).
sólo lográbamos confirmar la imposibilidad de prolongarla o consolidarla mediante un acto material (p.
78).
..... Inténtase pues, según hemos ido observando, lo que podríamos llamar dos modos de
acceso al "otro"; el anímico o espiritual y el físico. Ambos son avasalladores y posesivos.
¿Cómo explicarnos esta pretensión de Juan Pablo Castel? Creemos que se nos aclara desde
una perspectiva existencialista.
..... Sartre se niega a concebir el ser-para-el otro de otra forma que no sea la usurpación, el
apoderamiento del bien y el avasallamiento de la persona (léese en La Náusea: "Nadie, para
nadie Antonio Roquentin existe"). El mal que impide la comunicación de los existentes estará
suscitando desde el propio "yo" que se encuentra ocupado consigo mismo, pues la angustia de
ver sus haberes abandonados al tiempo, lo repliega celosamente sobre ellos; el que éstos
puedan ser dilapidados o agotados al yo lo torna avaro de sí mismo; y es allí donde surgirá una
cosmovisión acaparadora, "avarienta".
.... Por ello creemos que está en lo cierto Iris J. Ludmer al hablar de "el fracaso del amor" en la
narrativa de Sábato. La ensayista ve como análogas la concepción de la mujer y la visión
trágica y pesimista del amor en las dos novelas del autor. Dice Iris Ludmer:
... Los amores que crea Sábato no sólo son imposibles, tan ficticios y extraordinarios, que están
condenados desde su nacimiento mismo (extraordinario también), sino que revelan una concepción del
mundo sin esperanza, una soledad sin salidas (ob. cit., p. 94).
... Generalmente, esa sensación de estar solo en el mundo aparece mezclada a un orgulloso sentimiento de
superioridad: desprecio a los hombres, los veo sucios, feos, incapaces, ávidos, groseros, mezquinos; mi
soledad no me asusta, es casi olímpica (p. 94).
Párrafo muy significativo, pues indica cómo en ese estado se considera más auténtico y
valioso.
..... María también se afirma en su básica soledad. La primera vez que fue Castel a la hacienda
de la mujer, oportunidad en que ella le lleva hasta un monte desde donde divisaron el mar y el
cielo que dice haber soñado siempre compartir con Juan Pablo, María hace que él pueda
pensar:
sentí que eras como yo y que también buscabas ciegamente a alguien, una especie de interlocutor mundo.
Son múltiples los pasajes análogos que se podrían traer a colación y que no habían sino
confirmar aún más lo que sostenemos: ambos seres viven en un desamparo total.
..... Pues bien, en la soledad ontológica, la comunicación directa anhelada es decididamente
imposible; un real encuentro, un efectivo intercambio traerían como consecuencia el cese de la
soledad fundamental. Eso es lo que sucede antre ambos personaje de la novela. Es Sartre
quien ha concluido que este `ser-con´ del que habla Heidegger se niega por su generalidad
misma: ésta dificulta toda relación concreta de dos seres personales concretos. Por ello la
ontología sartreana no llega a fundar una comunicación de sujeto a sujeto; para el
existencialista francés existe la mera posibilidad de un "nosotros-objeto" y no la de un
"nosotros-sujeto". En otras palabras, la unión de una multitud, por ejemplo, pero no de
individuos. En El Ser y la Nada sostiene "las subjetividades están fuera del alcance y
radicalmente separadas" y más adelante, "la esencia de las relaciones entre conciencias no es
el Mitsein, es el conflicto". Con ello afirma una básica "extrañeza" entre los hombres: la
solidaridad es de condenados, donde cada uno es extraño a cada uno de los demás como a sí
mismo.
..... Es entonces, por razones metafísicas, que el encuentro absoluto entre los personajes deEl
Túnel se imposibilita; no basta aquí la explicación psicológica; no se trata que entre ambos
haya una esencial diversidad. Por el contrario, la analogía es tan profunda que llega a la
identidad, de la cual Juan Pablo Castel tiene plena conciencia, pues afirma: "sentí lo que
muchas veces había sentido desde aquel momento del salón: que era un ser semejante a mí"
(p. 65). Si no pueden llegar a la comunión es porque "las subjetividades (...) están radicalmente
separadas", como dice Sartre.
..... Allí está entonces la explicación de lo que va sucediendo en el desarrollo de las relaciones
entre Castel y María Iribarne. De la segunda vez que se encuentran, cuando analizan la escena
del cuadro y concluyen que es un mensaje de desesperanza y de la conversación brota la
posibilidad de entendimiento, Juan Pablo recuerda:
Juan Pablo comienza, desde el primer momento en que está estableciéndose el anhelado
contacto, a dudar de su perdurabilidad. Pocos días después de iniciadas las relaciones, ella
sale de la ciudad sin avisarle, no acudiendo por ende a la cita de la cual Juan Pablo mucho
esperaba. Entonces comienza a germinar y manifestarse las dudas que le acuciarán durante
todas sus relaciones con la muchacha, las que aumentan cuando llega a darse cuenta de que
ella es casada. A él le desesperan los silencios de María y sus actos sin explicación lógica
posible, sus contradicciones.
..... Los encuentros del primer mes le aparecerán a Juan Pablo "maravillosos y horribles".
Pronto escasearán los momentos de ternura:
mis dudas y mis interrogatorios -confiesa Castel- fueron envolviéndolo todo, como una liana que fue
enredando y ahogando los árboles de un parque en una mostruosa trama (p. 80).
Estos crueles interrogatorios llegarán a su extremo cuando al preguntarle sobre sus relaciones
con su marido ciego, Pablo le dice -"vulgar y torpemente" según reconocerá-:
María ante ello levanta "el puente levadizo que a veces tendía entre nuestras almas "y pasa a
ser" la mirada dura de unos ojos impenetrables" (p. 92), cosa que acontece con frecuencia ante
el comportamiento de Castel. Vanas serán las humillaciones de éste y sus angustiosos
llamados: "Algo se había roto entre nosotros", concluye Juan Pablo (p. 93).
..... Ante esa ruptura él vuelve a casa "con la sensación de una absoluta soledad" (p. 94): no
pudo establecerse, pues, el contacto definitivo, la comunicación anhelada. De poco servirá que,
ante los ruegos de él, vuelvan a unirse, pues los encuentros serán siempre de duración
extremadamente limitada. Y Juan Pablo lo sabe. A veces con claridad absoluta. En cierta
ocasión recuerda que ella le había dicho que no tenían derecho a pensar en ellos solos, y que
la felicidad está rodeada de dolor:
en aquel instante -recuerda Castel- más que nunca sentí que jamás llegaría a unirme con ella en forma
total y que debía resignarme a frágiles momentos de comunión tan melancólicamente inasibles como el
recuerdo de ciertos sueños, o como la felicidad de algunos pasajes musicales (p. 116).
Cuando crea estar seguro que ella es amante de Hunter, la asesinará, alegando como razón:
"Tengo que matarte, María. Me has dejado solo".
..... Hemos ido viendo los diversos momentos de las relaciones entre Juan Pablo y María,
notando cómo la incomunicabilidad básica de ambos seres no pudo ser superada sino por
fugaces instantes, de modo que el desamparo preside sus vidas. Y hemos encontrado que la
explicación es la proporcionada por la concepción existencialista que tiene el autor de El Túnel.
..... Podemos seguir analizando otros aspectos de la obra que también nos conducirán a
interpretarla como novela existencial.
..... Piénsese, por ejemplo, en el rechazo que el protagonista hace de las formas superficiales
del vivir -actitud ética propiamente existencialista. Anhelando modos auténticos de existencia,
se considera que el hombre debe huir de todo refugio que pueda servir para cobijarse de los
problemas que le ahogan: el sistema, los usos, y costumbres cotidianas, lo que Kierkegaard
llama el universo de "lo inmediato", ya que todo esto sirve para vivir tranquilos, para eliminar la
angustia que emana de manera inexorable de las profundidades inquietas del ser. Según el
pensamiento de Heidegger, Jaspers, etc., cuando los hombres se entregan a las ficciones de
tranquilidad, hacen dejación de su ser de existentes. De allí que el primer paso de la filosofía
ha de consistir -según los existencialistas- en hacer volver al hombre con violencia de las
seducciones mundanas o íntimas, a su calidad de existentes, de seres que tropiezan con
misterios interiores y que se embarazan en ellos. Ahora bien, la conversión existencial está
constantemente comprometida por la caída en el mundo objetivo o en el vacío subjetivo; de allí
que Jasper hable de "tensión" incesante; es el suyo un concepto militante de la existencia.
..... Del mundo objetivo el existente rechaza sus organizaciones sistemáticas, que ahogan la
angustia que eleva (10). Juan Pablo Castel dirá:
detesto los grupos, las sectas, las cofradías, los gremios y en general esos conjuntos de bichos que se
reúnen por razones de profesión, de gusto o de manía semejante (p. 20).
¿Y qué e lo que detesta de ellos? El que sean `conglomerados´, esto es, organizaciones
donde no hay contacto personal, auténtica compañía y entendimiento mutuo entre los
individuos concretos que componen el conjunto, o donde es imposible la soledad conducente a
la autenticidad. Al existencialismo le interesa el hombre particular, de carne y hueso, único. En
cambio los reunidos en esas organizaciones tienen los grotescos atributos de "la repetición del
tipo", "la jerga", y "la vanidad de creerse superiores al resto de los hombres": son los términos
con que califica Castel (p. 20).
..... Insistentemente el pintor se referirá a su modo de concebir esos grupos: "siempre he
mirado con antipatía y hasta con asco a la gente, sobre todo a la gente amontonada" (p. 53).
..... Junto al peligro de la entrega a ese mundo objeto sistemáticamente organizado y al que por
el hecho de pertenecer el hombre arriesga su existencia auténtica, está el posible abandono a
la citidianeidad pequeña burguesa en la que el hombre se instala confiadamente, entre objetos
tranquilizadores que le ocultan su esencial desamparo. Los existencialistas se preocupan
básicamente por evitar el olvido de la muerte y de todas las situaciones angustiosas, las
situaciones-límites a las que alude Jaspers (11). Por eso que la vida elevada es vida estrecha
limitada por todos lados.
..... Entre estos límites, el primero radica en la condición misma del hombre y las otras se
experimentan en la muerte, el sufrimiento, el combate y la falta. Según los existencialistas, el
ser empírico que hay en todo hombre, el ser que acumula saber, sensaciones y ansias de vivir,
intenta escapar a esas situaciones-límites, pero siente una sorda inquietud.
..... La existencia corre peligro, entonces, de perderse. A la `existencia perdida´ han dedicado
muchas páginas los filósofos existencialistas, partiendo generalmente de las reflexiones
pascalianas sobre la diversión, lugar de las `indiferencias´ no del `mal´. Heidegger, por ejemplo
dice que el existente está siempre en la posibilidad de optar entre dos modos de vida: la
auténtica y la inauténtica, que es cotidianeidad que acapara. El hombre de existencia
inauténtica vive en el mundo del `se´ o del `impersonal´: culto de la medianía, de la moda, de la
irreponsabilidad. De ello logra quietud espiritual. Es un enajenarse en las cosas exteriores.
Ahora, hay posibilidad de pasar a la existencia auténtica, y para ello es necesario que el
existente se recupere y se arranque de la disposición del `se´. Se vive entonces en ese estado
de `tensión´ del que habla Jaspers.
..... El protagonista de El Túnel vive tensamente. Él también está muchas veces tentado a
entregarse a lo cotidiano, al `se´. En muchas ocasiones ahoga la angustia provocada por su
estado de total desamparo en los aspectos bajos de la existencia y acude al alcohol y las
prostitutas, como en esos días que precedieron a la muerte de María (véase pp. 127-128). Pero
la lucha, el combate es constante. Juan Pablo sabe que en el mundo hay dos modos posibles
de existencia -Gabriel Marcel ha dicho: Hay una cosa que se llama vivir y hay una cosa que se
llama existir: yo he elegido existir"-; Castel conoce la acción de dos fuerzas que se oponen, una
que conduce a la pérdida de la existencia y otra que sin fatiga llama a la reconciliación del
hombre consigo mismo; sabe que el mundo está separado en dos partes muy diversas, una de
las cuales pertenece a los que viven en una anchura sin límites y otra en la que viven los
hombres como en túneles. Los segundos son los auténticos existentes; los primeros llevan
existencia inauténtica. Juan Pablo ha creído encontrar en María un ser idéntico a él, de
existencia tan auténtica como la suya y con la cual lograría el encuentro:
era como si los dos hubiéramos estado viviendo en psadizos o túneles paralelos, sin saber que íbamos uno
al lado del otro, como almas semejantes en tiempos semejantes, para encontrarnos al fin de esos pasadizos
delante de una escena pintada por mí, como clave destinada a ella sola, como un secreto anuncio de que
yo estaba allí y que los pasadizos se habían por fin unido y que la hora del encuentro había llegado (p.
152).
Pero después considerará que ese encuentro y esa unión no han sido sino "una estúpida
ilusión", pues los pasadizos seguían como antes "aunque el muro fuera de vidrio" o a veces de
"piedra negra". Hasta llegó a concluir "que toda la historia de los pasadizos era una ridícula
invención o creencia mía y que en todo caso había un sólo túnel, oscuro y solitario: el mío, el
túnel en que había transcurrido mi infancia, mi juventud, toda mi vida" (p. 153). Y ese túnel en
el cual siempre ha vivido es el de su insalvable soledad. Frente a los que viven en el ancho
mundo, y que llevan "una vida normal, agitada (...), curiosa y absurda en que hay bailes y
fiestas y alegría y frivolidad" (id), está él como existente auténtico, replegado sobre sí,
angustiado por las paredes que lo limitan.
..... Por ello la concepción de la existencia humana que tiene Juan Pablo Castel es dramática.
Su posición es la de un existencialista ateo, ya que ve en la contingencia, en el límite, pura
irracionalidad y brutal absurdidad. El hombre es un hecho desnudo, ciego. Está ahí, sin razón
alguna. Es lo que Heidegger y Sartre llaman la `facticidad´ del hombre. Es como si lo hubiesen
arrojado por nada.
..... El cuadro "Maternidad" y específicamente la escena de la ventana, que ha pintado Castel,
según María, tiene que ver con la Humanidad en general:
... Es un planeta minúsculo, que corre hacia la nada desde millones de años, nacemos en medio de
dolores, crecemos, luchamos, nos enfermamos, sufrimos, hacemos sufrir, gritamos, morimos, mueren y
otros están naciendo para volver a empezar la comedia inútil (p. 48).
Castel, como María, reconoce que éste no es un mensaje elogiable. "pero lo que importa -dice-
es la verdad y esa escena es verdadera" (p. 49). De este mundo inútil y sin sentido y
despreciable, Castel sabe que forma parte y cuando en ocasiones toma conciencia plena de
ello, lo invade "una furia de aniquilación" y se deja "acariciar por la idea del suicidio, se
emborracha y busca a las prostitutas" (p. 94): las falsas salidas a la angustia provocada por la
situación-límite de la soledad a las que aludíamos líneas atrás.
..... Frecuentemente Castel medita sobre la posibilidad del suicidio; la muerte como liberación
de la pesadilla que es el vivir; la muerte como una especie de despertar. Pero, ¿despertar a
qué?
... Esa irresolución de arrojarse a la nada absoluta y eterna me ha detenido en todos los proyectos de
suicidio. A pesar de todo, el hombre tiene tanto apego a lo que existe, que prefiere finalmente soportar su
imperfección y el dolor que causa su fealdad, antes que aniquilar la fantasmagoría con un acto de propia
voluntad (p. 95).
Pero si no llega al suicidio, realiza en él una verdadera "castración": a eso equivale el asesinato
que comete el pintor, como ha observado agudamente la ensayista Iris J. Ludmer.
..... La de Castel es una filosofía del hombre herido, desesperado. Y el existencialismo, que
asume como postura vital, no es un "quietismo de la desdicha", sino, por el contrario, un arrojar
al hombre a esa su realidad, posición netamente antagónica al epicureísmo. Para Jaspers, el
hombre tiende hacia un más allá de la existencia humana para Heidegger sólo existe el mundo
del hombre, que es lo que resuelve ser, que se autodetermina en un actividad conducente de
su ser de `existente bruto´ (Seinde) a un `proyecto´.
..... Ahora, según Sartre y el mismo Heidegger, este movimiento del ser no es efecto de una
plenitud -según lo ha aclarado Mounier, ob.cit. passim- sino de una impotencia: la plenitud la
tendría el `existente bruto´, la existencia en lo que tiene de contingente y de absurdo. Pues
bien, esa plenitud es muerta, es una `plenitud de muerte´. De allí entonces que la existencia
toda sea primordialmente precaria, y que nada adquiera en forma definitiva (12). La existencia
así continuamente puesta en juego, haciéndose y rehaciéndose. Por un lado, fragilidad; por
otro energía. Las antinomias, las oposiciones, presiden la vida espiritual del existente y por ello
en él domina la angustia, que para Heidegger es el signo que indica la autenticidad; brota
cuando apercibimos nuestro desamparo de ser -en el- mundo y nuestra marcha inexorable
hacia la muerte: cuando creemos que somos "seres -para- la muerte" (Heidegger).
..... Contra la aceptación de ese hecho protesta Sartre.
..... Según el autor de El ser y la Nada, los esfuerzos que se hagan para integrar la muerte en
el ser mismo de la vida -la muerte como compañera de cada instante del vivir- son también un
esfuerzo inauténtico para reponer la muerte en lo humano y atenuar así su radical
contingencia. Sartre dice:
..... "Es un absurdo que hayamos nacido y es absurdo
que muramos", y por eso
la historia de una vida, sea cual fuera,
es la historia de un fracaso.
el fracaso es una realidad sin remedio ni recurso (13). Es clarísimo que este pensamiento
alienta tras las concepciones y las acciones de los personajes de El Túnel. María reconoce
estar "atraída por la muerte o la nada": a la muerte la sabe integrada en su vivir y por eso la
tendencia hacia ella; pero -como Sartre-, rechaza esta actitud de aceptación resignada como
válida: es algo contra lo cual según ella hay que luchar:
pero creo que uno no debe entregarse pasivamente a esos sentimientos (p. 85)
... El hombre de hoy vive a alta presión, ante el peligro de la aniquilación y de la muerte, de la tortura y de
la soledad. Es un hombre de situaciones extremas, ha llegado o está frente a los límites últimos de su
existencia. La literatura que lo describe e indaga no puede ser, pues sino una literatura de situaciones
excepcionales. Es el caso de Camus, Greene, Lagerkvist, Kafka, y cualquiera de los grandes escritores de
nuestros tiempos (El escritor y sus fantasmas).
... Y es el caso de sus propios personajes también. Creemos haber llegado a demostrar queEl
Túnel es una de esas novelas que se estructuran sobre la base de las situaciones-límites, vía
por la cual el autor intenta llegar a los estratos últimos del hombre, los que hacen de éste "una
persona"
Aspectos importantes
Capítulo I
1. ¿Quién será el protagonista de esta historia? Además de
protagonista, ¿qué
defnirías al personaje?
que Juan Pablo Castel siente un odio muy especial y ambiguo hacia la
humanidad.
Luego de que Juan Castel se encuentra con Maria por primera vez, el
lector es capaz de darse cuenta que Castel es un hombre muy tímido y
que además le cuesta mucho entablar una conversación.
Capítulo IV
1. El narrador, que vuelve a tratar sin ninguna consideración a sus
lectores («El
que quiera dejar de leer esta narración en este punto no tiene más que
hacerlo; de
una vez por todas le hago saber que cuenta con mi permiso más
absoluto», p. 16),
este capítulo?
Al final de este capítulo hay cuatro marcas de tiempo que producen una
impresión de velocidad y rapidez. El narrador utiliza estas marcas de
tiempo para mostrar lo rápido que esa hora había pasado. Era como si
estuviera pasando en cámara rápida.
Capítulo VIII
1. ¿Por qué resulta paradójico que el protagonista diga que «cuando
me pongo
novela?
El punto de contacto entre María y Juan Pablo es cuando ella dice: “¿Has
adivinado y pintado este recuerdo mio o has pintado el recuerdo de
muchos seres como vos y yo? Pero ahora tu figura se interpone: estas
entre el mar y yo. Mis ojos encuentran tus ojos. Estas quieto y un poco
desconsolado, me miras como pidiendo ayuda.” Y luego él dice: “y
solamente mia. << estas entre el mar y yo>>; allí no existía otro,
estábamos solo nosotros dos, como lo intuí desde el momento en que ella
miró la escena de la ventana”.
Estas dos citas son el punto de contacto entre ambos personajes ya que es
la primera vez que vemos una verdadera conexión entre ambos y la
primera vez que María habla sobre sus sentimientos referentes a Castel.
2. La esquizofrenia del protagonista es también la del narrador. ¿Con
qué conficto
Lo que le salva a Castel ante el lector es que el mismo puede ver no solo el
crimen que cometió y como lo cometió sino que también logra ver sus
penas y su forma de pensar ante las situaciones. También el lector cada
vez va conociendo la personalidad de Castel y su forma de ver las cosas,
hasta un punto que el lector empieza a sentir simpatía por él.
Capítulo XXI
1. Ernesto Sabato es el representante más importante del
existencialismo en la
se desarrolla aquí?
Mimí?
Un snob es una persona que se cree más sofisticada que el resto de las
personas, y por ende exageran sus comentarios y acciones para darles
más cultura y elegancia. Se podria decir que ambos, Mimi y Hunter son
snobs porque hablan sobre el arte y literatura con un aspecto de
superioridad y utilizan palabras extrajeras con los acentos apropiados
para sentirse aun mas superior.
2. El discurso de Hunter encierra una interesante reflexión
metaliteraria. ¿De qué
trata? ¿Cómo sería según el autor implícito el Quijote del siglo XX?
Los sentimientos que María despierta en Juan Pablo en este capítulo son
varios. Uno de estos sentimientos es que para Juan Pablo ahora es
indispensable estar con ella y siente que hay un vínculo secreto que los
une. A la misma vez, María crea un sentimiento de orgullo en Juan Pablo
porque siente que ella es un lujo para él. María crea en él sentimientos de
orgullo, la vanidad y la soberbia pero al mismo tiempo de ingratitud, y
desconocimiento. María para él es como una posesión que debe obtener.
Capítulo XXVII
1. En el capítulo XXVI María anuncia que «La felicidad está rodeada
de dolor». ¿De
En este capitulo Maria dice que leyó una novela de Sartr. Esto tiene
una posible relación con la producción de Ernesto Sabato ya que ambos
escritores comparten las ideas del existencialismo.
Capítulo XXIX
1. ¿A qué se deben las modificaciones que el pintor introduce en su
carta durante
el proceso de redacción?
está muy presente. ¿Entre qué dos polos se debate? Elige algún
fragmento en el
que se muestre este movimiento de péndulo.
Época y características
Sus obras son: los libros: Uno y el universo (1945), Antes del fin (1991).los
ensayosHombres y engranajes (1951), Heterodoxia (1953), El otro rostro del peronismo, El
caso Sábato, Torturas y libertad de prensa, Carta abierta al general Aramburu (1956), La
cultura en la encrucijada nacional (1976), El escritor y sus fantasmas (1963)
y Aproximación a la literatura de nuestro tiempo: Robbe-Grillet, Borges, Sartre (1968), las
novelas: El túnel(1948), Sobre héroes y tumbas (1961), considerada la mejor novela
argentina, y Abaddón y el exterminador (1974).
Este personaje, se desenvolvió durante la época del régimen de Perón, a quien atacó con
algunos de sus escritos.
Sábato fue físico y científico, pero se decepcionó de la ciencia por que en ella no encontró
la forma de analizar al ser humano por lo que busca la literatura tratando de averiguar así,
las posibilidades de analizar problemas existenciales, que él mismo, en una etapa de su
vida sintió, y el fruto de esto fue su obra El túnel en la que el narrador describe una
historia de amor y muerte, además muestra la soledad del individuo contemporáneo.
Durante su estadía en el viejo continente se dio cuenta que el hombre está solo, que los
políticos solo quieren ganar guerras y posición, y nadie se ocupa de la gente que sufre y
que está angustiada, que necesita una mano amiga que la entienda y comprenda su alma.
Ernesto Sábato forma parte de la generación de 1920-1950 de escritores
hispanoamericanos, caracterizada por orientar sus obras a conflictos del hombre
de ciudad y al realismo fantástico acudiendo a veces a formas de expresión que son
verdaderos experimentos lingüísticos.
Esta generación está marcada profundamente por el momento histórico que viven puesto
que su forma de escribir es innovadora, gracias a los cambios producidos en esa época.
Este autor es partidario de la novela urbana de orientación existencial, pues, se encuentra
afectado por el periodo post segunda guerra mundial. Algunas de sus obras hablan de la
condición humana y el absurdo, además temas como la angustia, la introspección, los
problemas del hombre, etc.
Ambiente y tiempo
Tiempo y espacio