Wellness">
Sexualidad: Origen de La Homosexualidad
Sexualidad: Origen de La Homosexualidad
Sexualidad: Origen de La Homosexualidad
El sexo: se refiere a las características físicas con las que nace un ser
humano por ejemplo si un bebe tiene genitales masculinos se entiende
que es un hombre, pero si nace con genitales femeninos se refieren a ella
como mujer.
Desde la visión de la vida sexual del ser humano como algo flexible,
cambiante y en permanente proceso de transformación, se capta en toda
su hondura la realidad del hecho sexual. La sexualidad no tiene una sola
función, ni es algo particular de un periodo de la vida del ser humano. No
es algo rígido desde que nacemos hasta nuestra muerte. Cada etapa de
nuestra vida tiene sus peculiaridades y la sexualidad no es ajena a esta
realidad. Por ello, una visión positiva, enriquecedora y responsable de las
bondades del sexo permite disfrutar de lo bueno de nuestra sexualidad en
cada uno de los periodos de la vida.
El ser humano nace con unas estructuras centrales activas que son
determinantes de la frecuencia, la forma y la orientación de la conducta
sexual. Estas estructuras se relacionan y adaptan a la realidad externa y
al sujeto.
El desarrollo sexual es fruto de la persona y de su modo de actuar, de la
relación con su medio y de las circunstancias que de él emanan.
En paralelo con los aspectos biológicos con los que nacemos, comienzan
a influirnos una serie de determinantes externos al sujeto y cambiantes
en el tiempo. Entre ellos podemos hablar de factores culturales,
religiosos, ideológicos y sociales. Se manifiestan a través de las pautas
de crianza y criterios educativos referidos al dimorfismo sexual (el hecho
de que en la especie animal humana hay dos sexos, el femenino y el
masculino), con una marcada influencia en la diferenciación psicosexual
entre niñas y niños. Por ello podemos considerar de un modo genérico
que el desarrollo sexual es consecuencia de la interacción del sujeto
(formado por su cuerpo y su psique), su medio socio-cultural y los
acontecimientos que vaya experimentando.
En esta etapa de la vida del niño y la niña hay una serie de cambios
fundamentales (motores e intelectuales) para su desarrollo en general y
que tendrán un significado especial para el desarrollo sexual.
La sexualidad en la adolescencia
Cambios psico-sexuales
Una duda que comparten adultos y jóvenes es cuándo se deben iniciar las
relaciones sexuales, más si éstas incluyen el coito, lo que implica riesgo
al embarazo y mayor peligro de contagio de enfermedades de transmisión
sexual. Preocupa en especial el cómo saber el momento adecuado para
iniciarse. Aunque, en realidad, los comienzos son muy paulatinos:
cogerse de la mano, un beso en la cara o en la boca, caricias... No
obstante, al final la duda se concreta en saber cuál es la edad buena para
empezar las relaciones sexuales completas. Lo ideal es que se llegue a
ese momento preparado psicológicamente y que tanto el protagonista
como sus progenitores y educadores lo interpreten como un acto de
responsabilidad y libertad. Por lo tanto, la respuesta a esa duda no se
puede reducir a ofrecer una edad para iniciarse, porque el criterio
cronológico no siempre se corresponde con la madurez afectiva. La
respuesta supone un análisis de la situación que comprende diferentes
factores.
Teoría neurológica
En 1991, el neurocientífico estadounidense Simon LeVay, publicó un artículo
llamado "“Una diferencia en la estructura hipotalámica entre hombres homosexuales
y heterosexuales"”. Se demostraba que el tercer núcleo intersticial del hipotálamo
anterior (INAH3) era, en promedio, dos veces más grande en los hombres
heterosexuales que en las mujeres heterosexuales. En los hombres homosexuales
el tamaño del INAH3 era similar al de las mujeres heterosexuales. El INAH3, por su
localización y conexiones es el equivalente humano del llamado núcleo
sexualmente di mórfico del área pre óptica (SDN-POA) de otros mamíferos
estudiados (ratas y ovejas) que se sabe está relacionado con la conducta sexual de
esos animales no humanos. En las ovejas se ha demostrado similar asociación
entre el tamaño del SDN-POA y la preferencia sexual: los carneros homosexuales
muestran un tamaño de esta estructura nerviosa menor que los heterosexuales y
similar al de las ovejas.24 El dimorfismo sexual cerebral en las ovejas se produce
antes del nacimiento e independientemente de la experiencia sexual. Otras
estructuras del sistema nervioso central humano (comisura del cuerpo calloso,
núcleo supraquiasmático, etc.) muestran igualmente diferencias de tamaño
vinculadas con la orientación sexual (el sexo mental) en vez de con el sexo genital
de la persona.
La epigenética, que no viene a ser otra cosa que la mezcla de ambas. La epigenética
se encarga de estudiar aquellos factores no genéticos (pero que se pueden heredar
y se heredan) que intervienen en la expresión de los genes y el desarrollo de los
individuos. Esta teoría viene a decir que hay una serie de marcas en el ADN que
regulan la sensibilidad a la testosterona que es una hormona sexual implicada en el
desarrollo.
FACTORES PSICODINAMICOS
Analizaremos a continuación las aportaciones de diversos autores de
orientación psicodinámica, comenzando por las tesis psicoanalíticas
postuladas por Freud.
Bien es sabido que la sexualidad ocupa un lugar preferencial en la obra
de Sigmund Freud y que sus planteamientos revolucionan y convulsionan
la concepción naturalista imperante a principios de este siglo. Cuatro
serían las razones en las que se apoya el autor para elaborar su teoría
sexual:
a) La existencia de una sexualidad infantil, hasta entonces impensable.
b) La ruptura de la barrera existente entre normalidad y anormalidad del
comportamiento sexual.
c) El comportamiento sexual del adulto es el resultado de cómo se
resuelven las vicisitudes del desarrollo individual.
d) La existencia de una estrecha relación entre motivaciones de tipo
sexual y comportamientos humanos.
FACTORES DE APRENDIZAJE
Vamos a considerar los distintos aspectos o enfoques referentes a la
teoría del aprendizaje, en la génesis del comportamiento homosexual.
El condicionamiento clásico como mecanismo productor de conductas
sexuales, este estudiado e ilustrado por diversos investigadores, tales
como Ford y Beach en 1978; Kinsey en 1949 y 1967 Y Masters y Johnson
en 1981. En síntesis se puede explicar este mecanismo
basado en la generación de respuestas condicionadas, a partir de
estímulos neutros, éstos pueden transformarse en estímulos
condicionados cargados de significación y valencia erótica, cuando se
asocian a experiencias eróticas estimulantes (Rachman, 1966). En la
génesis de conductas sexuales desviadas se ha postulado el factor de la
masturbación como hecho desencadenante de las mismas. Según esto,
se establecerla un proceso de condicionamiento (condicionamiento
masturbatorio) por el cual la excitación y el placer derivados de la
masturbación se asociarían a fantasías sexuales inapropiadas, de modo
que la masturbación reiterada asociada a estas fantasías eróticas
desviadas acabaría por condicionar la respuesta sexual del sujeto
(Katchadourian, 1983). Al igual que el primer acto sexual efectuado por el
individuo, se ha barajado como factor condicionante de su futura
sexualidad, sin embargo, esta posición ha sido ampliamente criticada
por diversos autores. Oyhenart-Perera (1984) critica que la primera
experiencia sexual sea el condicionante principal para explicar la futura
preferencia sexual, encontrando un mayor peso en los factores
socioculturales y el valor de la afectividad y la emotividad asociados a
esta experiencia primera. Farré (1983) se apoya en el papel del
polimorfismo sexual del niño y en la constatación de que determinadas
actividades no sexuales pueden producir estimulación genital en los niños
y que en la pubertad la respuesta sexual (por ejemplo, la erección en el
varón) tiende a darse con más frecuencia asociada a estímulos sexuales
específicos. En el caso de la homosexualidad la experiencia primera no
siempre está presente, ya que muchos homosexuales declaran ser así
antes de iniciar cualquier práctica homosexual, e incluso otros han
mantenido previamente relaciones heterosexuales. El papel del
condicionamiento operante o instrumental también ha sido estudiado
entre otros autores por Feldman y Mac Culloch (1980). El mecanismo de
acción se basaría en el moldeamiento inicial de la conducta sexual a partir
de conductas sociales o ligadas a la afectividad, por medio de
reforzadores que pueden ser tanto psicológicos como fisiológicos. En el
primer caso a partir del propio refuerzo que el sujeto se produce cuando
compara su comportamiento sexual con el modelo que previamente
estableció.
En el segundo caso por la obtención de placer a través de la excitación y
el orgasmo. Es de destacar dentro de este tipo de condicionamiento
el papel de los refuerzos externos de tipo verbal y no verbal,
proporcionados fundamentalmente por el compañero sexual; un ejemplo
sería el de las prácticas sexuales tempranas y la importancia de la
seducción en la génesis de la homosexualidad.
Otro tipo de aprendizaje estudiado es el llamado aprendizaje vicario, por
medio del cual se adquieren nuevos patrones de conducta sexual y
también se extinguen o potencian patrones ya preexistentes. (Bandura y
Walters, 1965;Ford y Beach, 1978). En este aprendizaje el experto es el
iniciador de la conducta y el participante (persona inexperta) imita la
conducta, además el experto modela la conducta de su partener. La
influencia del modelo puede darse también por ausencia o déficit, así en
un modelo masculino deficiente ofrecido por el padre determinaría la
necesidad homosexual del hijo.
Habría que mencionar también los estudios en relación a los efectos
producidos por la asignación de sexo por parte de los padres en sujetos
con diferentes anomalías que determinan un sexo genital externo
ambiguo. Money (1974) señala que el único factor determinante de la
orientación sexual es el sexo asignado por los padres antes de haber
cumplido los tres años de edad y en consecuencia de haber sido educados
como varones o mujeres. Según este autor la formación de la identidad
psicosexual y la adquisición de un rol genérico se produce paralelamente
a la adquisición del lenguaje y por tanto existiría
un período crítico en torno a los tres años. Posteriormente los cambios
producidos en la adolescencia completan la diferenciación psicosexual.
El estudio transcultural efectuado por Ross (1983), le lleva a promulgar
que el grado de género invertido que representa el homosexual depende
no sólo de su grado de homosexualidad, sino del nivel de tipificación
respecto al sexo de la sociedad en que vive y de las manifestaciones
homofóbicas de esa sociedad. En definitiva, los factores de aprendizaje
giran en torno a la idea central de que el comportamiento humano se
aprende y el proceso de aprendizaje tiene lugar en un contexto
sociocultural determinado. Actualmente la teoría del aprendizaje social se
emplea como modelo explicativo del comportamiento sexual humano y de
sus variantes considerando que las actitudes y preferencias sexuales y
por tanto la conducta, se aprende y perdura por la influencia de modelos
socioculturales.
Informe Kinsey
En el Informe Kinsey se establecen diversos grados de bisexualidad, se
indica en azul la proporción de prácticas homosexuales.
Así, con posterioridad, los estudios científicos realizados por Alfred C.
Kinsey, concluyeron que, analizados tanto el comportamiento como la
identidad, la mayor parte de la población parece tener por lo menos
alguna tendencia bisexual (atracción hacia personas tanto de uno como
de otro sexo), aunque ordinariamente se prefiere un sexo u otro. Kinsey
y sus estudiantes consideraron que sólo una minoría (del 5 al 10 %) es
completamente heterosexual o completamente homosexual. De la misma
manera, sólo una minoría aún más pequeña puede considerarse
completamente bisexual y se establecieron diversos grados de
bisexualidad. Estudios posteriores han querido demostrar que el informe
de Kinsey había exagerado la prevalencia de la bisexualidad en la
población; pero todavía su idea goza de una gran aceptación.
Teoría queer
Algunos pensadores en los estudios de género, como el filósofo francés
Michel Foucault (aunque algunos hayan argumentado que sus ideas en
este tema han sufrido distorsión) o la filósofa Judith Butler, atacan la idea
de que las identidades sexuales tales como la homosexualidad, la
heterosexualidad o la bisexualidad tengan cualquier existencia objetiva.
Dicen, en su lugar, que son construcciones sociales. Este punto de vista
teórico se llama teoría queer. Un argumento frecuente es que la
homosexualidad pre moderna era diferente de la homosexualidad
moderna, pues era estructurada por edad, por sexo o por clase, en vez
de igualitaria. Los críticos contestan que, aunque la homosexualidad de
épocas distintas haya tenido rasgos distintos, el fenómeno básico ha
existido siempre y no es una creación de la sociedad actual.
Referencias bibliográficas:
-W illiam H. Masters y Virginia E. Johnson (1967). Respuesta sexual
humana. Buenos Aires, editorial Intermédica.
-Estupinyá, Pere (2013, noviembre). Una aventura de sexo y ciencia: Una
mirada a la investigación científica de la sexualidad humana y sus
sorprendentes resultados. ¿Cómo ves?
-Barcia O. y Galiana M.(1982):Las alteraciones de la conducta sexual. En
Psiquiatria T.I1 Lopez Ibor,Ruiz Ogara, Barcia
Salorio.Ed.Toray.Barcelona.
-Beach y Ford (1978): Conducta sexual 3 ed. Barcelona Fontanella.
-Bene E. (1965): Sobre la génesis de la homosexualidad masculina: un
intento de clarifyng el papel de los padres. Britsh journal psicolgìa.
- Bieber I. et al (1962): Homosexualidad: un estudio de psicoanálisis de
hombres homosexuales. New York Basic Books.
- Money J.(1974):Oesviaci6n sexual aspectos psicológicos. En
Enciclopedia internacional de ciencias sociales,ed. A.Johnson y A.
Wallis.Aguilar.Madrid.
- Levay S. y Hamer O.H- (1994):Bases biológicas de la homosexualidad
masculina.
- Master W.H.;Johnson VE.(1979):Homosexualidad en perspectiva.
Buenos Aires .. Intermédica.
- Oyhenart-Perera M.F.(1984).La iniciación sexual de varones androtrópicos.
Revista de Psiquiatría y Psicología Médica.XVI 7, 469-490.
- Bandura A. Y Walters RW.(1965): Aprendizaje social y personalidad.Madrid
Alianza 1974.
-Freud S. (1916):La vida sexual humana. En Freud.Obras completas.Madris
Biblioteca Nueva.