Anatomía e Histología de La Mama
Anatomía e Histología de La Mama
Anatomía e Histología de La Mama
El epitelio y el estroma lobular responden al estímulo hormonal. Durante el embarazo hay una
marcada proliferación de ductulos que produce un agrandamiento de los lóbulos y las células
epiteliales muestran abundante citoplasma lleno de vacuolas secretoras.1
Las glándulas dentro de las mamas se clasifican como glándulas tubuloalveolares compuestas y
consisten en 15 a 20 lóbulos que se irradian desde el pezón y se separan entre sí por tejidos
adiposos y conectivo colagenoso. Cada lóbulo es drenado por su conducto lactífero propio que
lleva directamente al pezón, y antes de llegar al pezón cada uno se dilata para formar un seno
lactífero y a continuación se estrecha antes de desembocar en el pezón. El epitelio escamoso
queratinizado de la piel supraadyacente se hunde en los orificios del pezón y después se
transforman en un epitelio cúbico de doble capa que tapiza los conductos. Los conductos y
lobulillos están tapizados por dos tipos de células. Las mioepiteliales contráctiles con
miofilamentos que se disponen como una malla sobre la membrana basal y las células epiteliales
luminales que se superponen a las células mioepiteliales. Se postula que una célula madre
comprometida en el conducto terminal puede dar lugar a las células tanto luminales como
mioepiteliales. También existen dos tipos de estroma mamario. El estroma interlobulillar, que
corresponde a un tejido conjuntivo fibroso denso mezclado con tejido adiposo. Y el estroma
intralobulillar que rodea a los acinos de los lobulillos y está constituido por células similares a los
fibroblastos con respuesta hormonal. Las glándulas mamarias son glándulas sudoríparas
modificadas que se sitúan sobre la fascia superficial, anteriores a la musculatura pectoral y a la
pared torácica anterior. Cerca de 80 a 85% de a mama normal es tejido adiposo. Los tejidos
mamarios están unidos a la piel que los recubre y al tejido subcutáneo mediante bandas fibrosas o
aponeuróticas llamadas ligamentos de Cooper, que sostienen a la mama en posición erecta sobre
la pared torácica.2
Bibliografía