Adoración Al Sagrado Corazón de Jesús
Adoración Al Sagrado Corazón de Jesús
Adoración Al Sagrado Corazón de Jesús
Canto:
Cantemos al Amor de los Amores
Cantemos al Seor,
Dios est aqu, venid adoradores,
adoremos, a Cristo Redentor!
Gloria a Cristo Jess,
cielos y tierra, bendecid al seor
honor y gloria a Ti, rey de la gloria
amor por siempre a Ti
Dios del Amor!
Unamos nuestra voz a los cantares
del Coro Celestial,
Dios est aqu, al Dios de los Altares
alabemos con gozo angelical.
Saludo: En el nombre del Padre, Del Hijo y del Espritu santo. Amn.
*V/ Bendito alabado y adorado sea Jess en el Santsimo Sacramento del Altar.
R/ Sea para siempre bendito y alabado.
*V/ Mi Jess sacramentado mi dulce amor y mi consuelo.
R/ Quien te amara tanto que de amor muriera.
Introduccin.
Todos hemos escuchado alguna vez, sobre la devocin al Sagrado Corazn de
Jess. Todas las devociones aprobadas por la Iglesia y estas son ACTOS DE
RELIGIN QUE BUSCAN DAR CULTO ADIS.
- Y por qu damos culto a Dios? Porque Dios nos cre y nos ha dado todos los
bienes que tenemos, y por eso es digno de que nosotros sus hijos, por bautismo
lo adoremos.
De dnde nace esta devocin? LA HISTORIA DE SANTA MARGARITA DE
ALACOQUE
- Margarita era una nia que desde pequea rezaba mucho y quera mucho a la
Santsima Virgen. Margarita senta claramente que Jess la llamaba a la vida
religiosa.
- En 1671, cuando tena 24 aos, se convirti en religiosa de las "Hijas de Santa
Mara".
No adoris a nadie,
a nadie ms que a l.
No adoris a nadie,
a nadie ms que a l.
No miris a nadie,
a nadie ms que a l.
No miris a nadie,
a nadie ms que a l.
Porque solo el te puede sostener
Porque solo el te puede sostener
No adoris a nadie, a nadie ms
No adoris a nadie , a nadie ms que a l.
Espritu de Fortaleza, vigoriza nuestra alma en tiempo de prueba y adversidad; danos lealtad y
confianza.
Espritu de Ciencia, aydanos a distinguir entre el bien y el mal; ensanos a proceder con rectitud en la
presencia de Dios; danos clara visin y decisin firme.
Espritu de Piedad, toma posesin de nuestro corazn; inclnalo a creer con sinceridad en Ti, a amarte
santamente, Dios mo, para que con toda nuestra alma podamos buscarte a Ti, que eres nuestro Padre,
el mejor y ms verdadero gozo.
Espritu de Santo Temor, penetra lo ms ntimo de nuestro corazn para siempre recordar tu presencia;
haznos huir del pecado y concdenos profundo respeto para con Dios y ante los dems, creados a
imagen de Dios.
Pausa
Juntos digamos: Envanos Seor tu Espritu
> Para recordarnos tu gran amor.
> Para transformar nuestros corazones.
> Para completar en nosotros tu obra.
> Para hacernos dignos hijos tuyos.
> Para ensearnos a orar.
> Para que nuestra unidad sea perfecta.
CANTO
Espritu de Dios, llena mi vida,
Llena mi alma, llena mi ser.
Llename, llname con tu presencia,
Llname, llname con tu poder,
Llname, llname con tu bondad.
Gua 1- Perdn
Oh, Sagrado Corazn de Jess, que te revelaste a Santa Margarita Mara dndole a conocer las
riquezas inagotables del amor de tu Corazn traspasado, pero al mismo tiempo te quejaste por los
innumerables desprecios, ultrajes e indiferencias, con los que continuamente eres ofendido, te pedimos
perdn y te ofrecemos tu propio Corazn, vivo y palpitante de amor en la Eucarista, en reparacin por
todas las veces que los hombres entre ellos nosotros mismos- olvidan tu presencia en el Santsimo
Sacramento del altar y te posponen por diversiones o pasatiempos, que comparadas a Ti son menos
que la nada y el polvo. Oh Sagrado Corazn de Jess no tengas en cuenta estos ultrajes y ofensas con
las que te agraviamos constantemente, mira ms bien lo que te ofrecemos y acepta el grito de
expiacin, que un pesar sincero arranca de nuestros corazones afligidos, ellos te piden piedad.
Pausa
Gua 2: Adoracin
Para reflexionar: Romanos 8, 31-40
Ante todo esto qu diremos? Si Dios est por nosotros quin contra nosotros? quin acusar a los
elegidos de Dios?. Dios es quien justifica quin condenar?Quin nos separar del Amor de Cristo?
la tribulacin? la angustia? la persecucin? el hambre? la desnudez? los peligros? la
espada?. Pero en todo esto salimos vencedores gracias a Aquel que nos am. Pues estoy seguro de
que ni la muerte, ni la vida, ni los ngeles, ni los principados, ni lo presente, ni lo futuro, ni la altura, ni la
profundidad, ni otra criatura alguna podr separarnos del amor de Dios manifestado en Cristo Jess
Seor nuestro.
Palabra de Dios. Te alabamos Seor
Pausa
La finalidad de nuestra vida Cristiana , consiste en descubrir que Dios nos ama y nos salva. No porque
nosotros seamos buenos o porque honremos su nombre. Nos ama porque l es infinitamente bueno y
nos ha dado la vida hacindonos hijos suyos. Pero a los hombres no nos resulta fcil aceptar esta
verdad que nos salva.
Es frecuente que personas muy buenas y versadas en la fe cristiana, digan que lo nuclear del Evangelio
consiste en amar a Dios por encima de todas las cosas y al prjimo como a nosotros mismos. De esta
manera confunden el Evangelio con el primer mandamiento del cristiano y olvidan que en la relacin
entre Dios y el hombre, es Dios quien va por delante. Y antes de hablarnos de mandamientos nos
proclama la Buena Noticia del Amor de Dios al hombre. Dios nos ama y nos ama primero.
2.- Tal es el sentido de la Fiesta del Sagrado Corazn de Jess, que celebramos hoy con toda la Iglesia.
El corazn es un smbolo que evoca lo ms profundo del Seor: su amor incondicional a todos los
hombres. Un amor que le impuls a crear al hombre y a la mujer y a crear los cielos y la tierra, a
embellecerlos con toda clase de animales y de plantas y a hacer a todos nosotros hijos suyos,
creados a su imagen y semejanza.
Este amor se nos ha manifestado en Jesucristo, que se hizo hombre verdadero para mostrarnos el
rostro amoroso de su Padre. Jess tiene un corazn grande y misericordioso, que quiso compartir
nuestra existencia y pas por el mundo haciendo el bien. Se acerc a los pobres, a los pisoteados, a los
leprosos y a todos los excluidos. Y rubric con su muerte en la Cruz este amor incondicional a Dios
Padre y a todos los hombres, sus hijos.
3.- En el captulo 8 de la Carta a los Romanos, hablando de su propia experiencia, San Pablo concluye
con un himno apasionado y optimista; y nos dice que Dios nos ama, y si Dios est con nosotros, todo lo
dems ser pura consecuencia. San Pablo quiere resaltar en este cntico al amor de Dios que no hay
nada capaz de separar al cristiano del amor de Cristo, ni siquiera los poderes que entonces se tenan
por ms fuertes.
Quin nos separar del amor de Cristo? Dios que nos ama, har que salgamos victoriosos de todas las
pruebas. Y estoy seguro de que ni muerte, ni vida, ni ngeles, ni otras fuerzas sobrenaturales, ni lo
presente, ni lo futuro, ni poderes de cualquier clase, ni lo de arriba, ni lo de abajo, ni cualquier otra
criatura, podr separarnos del amor de Dios, manifestado en Jesucristo, Seor nuestro. (Rom 8, 37
ss.).
Y San Juan, en su primera Carta,
En esto se manifest el amor que Dios nos tiene: en que Dios envi al mundo a su Hijo Unignito para
que vivamos por medio de l. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino
que l nos am y envi a su Hijo como propiciacin por nuestros pecados Nosotros hemos conocido el
amor que Dios nos tiene y hemos credo en l Quien no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es
amor. En esto se manifest el amor que Dios nos tiene: en que Dios envi al mundo a su Hijo nico
para que vivamos por l. En esto consiste el Amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en
que l nos am y nos envi a su Hijo para perdonar nuestros pecados. Si Dios nos am de esta manera,
tambin nosotros debemos amarnos mutuamente. Ese es el compromiso dejarnos amar por Dios, y
amar a nuestro prjimo.
Pausa
Respondemos: Corazn de Jess, en ti confiamos
* En los momentos de amargura.
* En los das de soledad.
* En los momentos de vacilacin e incertidumbre.
* En las horas de hasto y de cansancio.
*En las ocasiones tan frecuentes de olvido de nosotros mismos.
* En los das de desaliento en tu servicio.
* En las horas de fragilidad y de cada.
* En los momentos de duda peligrosa o de temible ilusin.
* En los das de enfermedad y en los peligros de muerte.
* En nuestros postreros instantes, en las convulsiones de la suprema agona.
CANTO.
Oh, buen Jess! Yo creo firmemente
que por mi bien ests en el altar,
que das tu cuerpo y sangre juntamente
al alma fiel en celestial manjar,
al alma fiel en celestial manjar.
Indigno soy, confieso avergonzado,
de recibir la santa Comunin;
Jess que ves mi nada y mi pecado,
/prepara T mi pobre corazn./ (bis)
Pequ Seor, ingrato te he ofendido;
infiel te fui, confieso mi maldad;
me pesa ya; perdn, Seor, te pido,
/eres mi Dios, apelo a tu bondad./ (bis)
Espero en Ti, piadoso Jess mo;
oigo tu voz que dice ven a m,
porque eres fiel, por eso en Ti confo;