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Jesús y El Sábado
Jesús y El Sábado
Jesús y El Sábado
Introducción
IGLESIA BAUTISTA:
"No hay nada en las Escrituras que nos ordene guardar el domingo como
dia santo en lugar del sábado".
IGLESIA EPISCOPAL:
IGLESIA ANGLICANA:
¿Dónde se nos dice en las Escrituras que debemos guardar el primer día?
Se nos ordena guardar el séptimo; en ninguna parte se nos ordena guardar
el primero... la razón por la cual santificamos el primer día de la semana en
lugar del séptimo, es la misma por la cual observamos muchas otras
cosas, no porque lo diga la Biblia, sino porque la Iglesia lo ha ordenado".
IGLESIA PRESBITERIANA:
IGLESIA METODISTA:
Clodoveo Chappell, Ten Rules for Living, p.61 (Diez reglas de vida, pág. 61)
"La razón por la cual observamos el primer día en lugar del séptimo no se
basa en ningún mandamiento real. En vano buscaremos en las Escrituras la
autorización para cambiar el día séptimo por el primero".
Había un período especial de 24 horas bajo el sistema del Antiguo Testamento,
aunque – desde luego – no funcionaba precisamente de la forma en que se
calculaba el servicio de 24 horas en la tintorería. Me refiero, por supuesto, al día
sábado, el día de reposo.
Bajo la ley del Antiguo Testamento era obligatorio guardar el sábado. De hecho, la
celebración del día sábado era quizás la marca más visible que distinguía a los
israelitas de sus vecinos paganos. Al descansar el día séptimo, los israelitas
declaraban que pertenecían al Dios que había descansado después de seis
días de creación.
Esto lo aclaran varios pasajes, como por ejemplo, Exodo 31:16-17. Allí leemos:
“Los israelitas deberán observar el sábado. En todas las generaciones
futuras será para ellos un pacto perpetuo, una señal eterna entre ellos y
yo. ”
El sábado marcaba al pueblo de Israel como el pueblo del Señor.
Recordemos lo que dijo Jesucristo en Juan 5:39 acerca de las Escrituras del Antiguo
Testamento: “ellas son las que dan testimonio de mí”.
Podemos concluir, entonces, que la celebración del sábado también señala hacia
Jesucristo.
Esto lo confirma el apóstol Pablo en un pasaje muy importante. Leamos
Colosenses 2:16-17:”Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o
en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo, todo lo cual es
sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo.”
Observa lo que nos dice aquí el apóstol, bajo inspiración del Espíritu Santo. Nos
dice que las leyes de alimentación, las fiestas religiosas y los sábados – es decir, los
días de reposo – eran sombras de lo que estaba por venir. Esto significa que –
habiendo llegado la realidad – la sombra ya no cae sobre nosotros. Ya no estamos
bajo obligación de guardar el sábado.
Existe hoy en día mucha confusión acerca de este tema. Hay personas que te dirán
que todavía tienes que celebrar el día sábado. A un pastor se le acercó una de estas
personas y le dijo: “Le daré cien dólares si me puede mostrar dónde dice la Biblia
que el día sábado ha sido cambiado.” El predicador respondió: “No creo que haya
sido cambiado. El sábado sigue siendo sábado, el séptimo día de la semana.”
El que le había hecho la pregunta le dijo: “¿Por qué, entonces, no guarda usted el
día sábado, si no ha cambiado?” El pastor le respondió: “El día no ha cambiado,
pero yo he cambiado. He recibido una nueva naturaleza; he sido unido a Cristo.
Soy parte de su nueva creación. Celebro el primer día de la semana porque es el
día que El resucitó de la tumba.”
La celebración del día sábado era una señal del antiguo pacto entre Dios e Israel.
Nosotros vivimos ya bajo el nuevo pacto, y por ende, no tenemos la obligación de
guardar el sábado como día de descanso. Hoy tenemos como día especial el
domingo, pero no precisamente de la misma forma en que los judíos observaban el
sábado.
La Iglesia celebra el día domingo como su día de reunión para conmemorar la
resurrección de Jesús. Hebreos 10:25 nos dice que “no dejemos de
congregarnos”. Como creyentes, debemos de tener la costumbre de reunirnos
para adorar a Dios los domingos, pero no como reglamento de la ley.
¿Qué significado tiene para nosotros, entonces, la ley del sábado? Hemos dicho que
el sábado forma parte de la sombra que anunciaba la venida de Cristo. Si esto es
así, ¿qué nos enseña el sábado acerca de nuestro Señor? ¿Qué podemos aprender
del sábado que nos ayude a apreciar más a nuestro Salvador?
Consideremos tres puntos acerca del sábado.
I. El sábado: un día de reposo
En Génesis 2:2, leemos que “al llegar el séptimo día, Dios descansó porque
había terminado la obra que había emprendido”. Refiriéndose a esto, Moisés
instruyó a los israelitas, según Exodo 20:11: “Acuérdate de que en seis días
hizo el Señor los cielos y la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos, y que
descansó el séptimo día. Por eso el Señor bendijo y consagró el día de
reposo.”
Los israelitas debían trabajar seis días, pero el séptimo no se podía trabajar.
¿Alguna vez te ha tocado trabajar duro por muchos días seguidos, a tal grado que
lo único que te sostiene es saber que pronto tendrás un día libre? ¡Es tan delicioso
despertar ese día y saber que no hay que trabajar!
Así era el sábado – un día delicioso de reposo, de descanso, de recuperación. Es
algo que no hemos dejado de necesitar, a pesar de todos los aparatos que tenemos
para hacernos la vida más fácil. Me trae a la memoria la historia de los niños que le
compraron a su mamá una linda tarjeta para el día de las madres que decía: “En
paz descanse”.
El pastor le dijo: “Te los compro en dos dólares”. El niño – no muy buen vendedor –
le respondió: “Usted no quiere comprarme estos pájaros. ¡Ni siquiera saben cantar!
Son muy corrientes – no valen nada”. El pastor le insistió, hasta que por fin el niño
le entregó las aves, y se fue contento con sus dos dólares.
El pastor llevó la jaula a un lugar abierto y, desatando la puerta de la jaula, soltó
las aves. El domingo siguiente, al contar la historia, comentó: “El niño me dijo que
las aves no sabían cantar, pero me pareció oír que, al volar hacia el cielo,
cantaban: ¡Redimido! ¡Redimido!”
Cristo dio su vida en la cruz para abrir la puerta de la jaula de pecado que te tiene
prisionero. El vino para liberarte y darte una vida nueva. En El hay redención. No te
quedes en la jaula – vive la libertad que Cristo te vino a traer. No sigas viviendo
como prisionero del pecado.
III. El sábado: un día de refrigerio
El sábado, dentro de la fe de Israel, debía de ser un deleite, un gozo. Esto lo
descubrimos en Isaías 58:13-14; leámoslo:
58:13 Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día
santo, y lo llamares delicia, santo, glorioso de Jehová; y lo venerares, no
andando en tus propios caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus
propias palabras, 58:14 entonces te deleitarás en Jehová; y yo te haré
subir sobre las alturas de la tierra, y te daré a comer la heredad de Jacob
tu padre; porque la boca de Jehová lo ha hablado.
El sábado no era sólo un día para descansar y recuperarse; era un día para
celebrar y regocijarse.
La Biblia nos dice que, en Cristo, nos espera un refrigerio especial. Esto lo
descubrimos en Hebreos 4:9-11:
4:9 Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. 4:10 Porque el que
ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de
las suyas.4:11 Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que
ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia.
Aquí nos habla de un reposo especial, un sabático, que aún espera al pueblo de
Dios. No nos confundamos; no nos está hablando del descanso espiritual que
experimentamos ahora, y que mencionamos algunos minutos atrás.
Este es un tiempo especial de refrigerio que nos espera, si estamos en Cristo. Es el
deleite que será el cielo, nuestra morada eterna con Cristo. El mismo dijo que iba a
prepararnos una morada, y que nos llevaría a estar con El. Si estamos en Cristo,
nos espera un sábado especial cuando El regrese, un sábado que nunca se acabará.
Una de las mentiras que Satanás quiere que creas es que el cielo va a ser un lugar
aburrido, mientras que el infierno va a ser una fiesta constante. ¡No lo creas! El
cielo será un lugar de deleite, de refrigerio, de gozo constante y de alegría. El
infierno – bueno, el infierno será un lugar aburrido de sufrimiento interminable.
Imagina el momento más pesado que has vivido – quizás fue en alguna oficina de
gobierno, tratando de conseguir algún documento de manos de un oficial sádico. El
infierno será mil veces peor.
Todo lo bueno que representaba el sábado dentro del Antiguo Testamento ahora se
ha cumplido en Jesucristo. ¿Estás viviendo en el reposo que El te ofrece? ¿Conoces
su redención? ¿Esperas ese tiempo de refrigerio que El te ofrece? Mucho mejor que
un día de reposo es el reposo que encontrará en El tu corazón.
El que guarda el día Sábado esta en lo correcto, pero también el que guarda
cualquier otro día, pues en Romanos 14:5 dice “Uno hace diferencia entre día
y día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno este plenamente
convencido en su propia mente”. El guardar en Sábado o Domingo, o en
cualquier otro día, no nos hará mejores cristianos.
Los Adventistas del Séptimo Día y el Sábado
¿Fue el día de reposo ordenado por Dios desde la Creación?
El texto no dice que el hombre o los animales santificaron el día y que descansaron.
El texto establece la declaración simple y sencilla de que las obras creativas
inmediatas de Dios llegaron a un fin. El hecho de que Dios “reposó” es claramente
antropomórfico. Dios no necesita descansar.
4. Pero se menciona el séptimo día. ¿No prueba esto que es una ordenanza
creacionista?
Respuesta: No necesariamente. El nudismo y el vegetarianismo también son parte
de la historia de la Creación. En realidad, nadie tendría el descaro de reclamar que
estos elementos son mandamientos simplemente porque se mencionan en el texto.
5. ¿Pero no es Génesis 2:1-3 un patrón o un modelo para que nosotros lo
sigamos?
Respuesta: ¡Espero que no! Luego que Dios trabajó durante 6 días, descansó en el
séptimo día y continúa “descansando” hasta el presente (He. 4:10-11). Dios no
comenzó otro ciclo de 6 días de trabajo y uno de descanso. Por lo tanto, si los
hombres vamos a seguir el modelo, entonces tendríamos que trabajar 6 días en el
comienzo de nuestra carrera u oficio, ¡y luego descansar por el resto de nuestras
vidas! De todas maneras, para probar que guardar el sábado es un mandamiento
creacionista, debemos mostrar un ejemplo de un hombre guardándolo. Si esto es
cierto con respecto a otras ordenanzas de la Creación, ¿cuál es la razón para que la
observancia del sábado sea exenta de esta regla de fe?
Además, Adán nunca hubiera estado en condiciones de observar el sábado correcto
porque el séptimo día de Dios fue el segundo día de Adán, por lo cual el séptimo de
Adán fue el quinto de Dios. ¿Cuál de los dos séptimos días observaba Adán?
Adicionalmente, todos los pasajes bíblicos como Nehemías 9:5-38 (cf. vs. 13-14)
que dan un resumen de la historia redentiva, siempre ponen el comienzo de la
observancia del sábado junto a Moisés, no Adán. Si la observancia del sábado
hubiera comenzado al momento de la Creación, sin duda la Escritura lo hubiera
mencionado cuando se narra la historia del mundo, pero no lo hace.
No existe tampoco en la historia de la Creación en Génesis ninguna mención de una
semana de 7 días ordenada por Dios u observada por el hombre.
Ningún ejemplo, ningún mandamiento o precepto puede ser extraído de Génesis 1-
3. Si bien más adelante en la historia de la redención aparece la semana de 7 días,
no existe evidencia de que Adán o Eva usaban tal medida de tiempo.
(Hasta aquí el trabajo del Dr. Morey)
Concluímos que lo visto es suficiente para echar por tierra la columna vertebral del
argumento adventista que pretende conectar su distorsionada interpretación del
séptimo día con la historia de la Creación. En esta materia, los adventistas son
culpables de ver y pensar más allá de lo que está escrito (1 Co. 4:6). <>
EL SÁBADO (II)
EL SÁBADO ESPIRITUAL
Lea también SACERDOTE, PASCUA y VELO pues en el Estudio Bíblico del Sábado
Espiritual se alcanza la consumación del sacerdocio de todo discípulo que forma el
pueblo de Dios, el cumplimiento de lo que faltaba para la edificación de los que Le
aman en íntima y personal comunión con Dios, no por mandamiento de la Ley sino
por amor a Él.
TEXTOS BÍBLICOS COMENTADOS
GÉNESIS 2
2
Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de
toda la obra que hizo. 3Y bendijo Dios el día séptimo, y lo santificó,
porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.
Cuando alguien le ofrece a Dios su alma y su mente por los hermanos, está durante
ese día con la mente en aquéllas persona y el pensamiento y el sentimiento es para
esas personas que se ama en Espíritu. Es el amor de Dios fluyendo desde una
persona, ...y esta es la obra de Dios, que te conozcan a ti, el único Dios
verdadero y a tu hijo a quien has enviado... Y él hace que aprendamos a amar
como él ama.
Es por esto que los que le aman, aquellos que se ofrecen cada día por los
hermanos, reserven el Shabbat para el Señor, y cumplir así de una manera
verdaderamente espiritual el día de reposo, no ya por mandamiento de la ley sino
por amor a Dios.
ÉXODO 20 Y DEUTERONOMIO 5
12
Guardarás el día de reposo para santificarlo, como YHWH tu Dios te ha
mandado. 13Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; 14mas el séptimo día
es reposo a YHWH tu Dios; ninguna obra harás tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni
tu siervo, ni tu sierva, ni tu buey, ni tu asno, ni ningún animal tuyo, ni el
extranjero que está dentro de tus puertas, para que descanse tu siervo y
tu sierva como tú.15Acuérdate que fuiste siervo en tierra de Egipto, y que
YHWH tu Dios te sacó de allá con mano fuerte y brazo extendido; por lo
cual YHWH tu Dios te ha mandado que guardes el día de reposo.
ISAÍAS 58
13
Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día
santo, y lo llamares delicia, santo, glorioso de Yahweh; y lo venerares, no
andando en tus propios caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus
propias palabras, 14entonces te deleitarás en Yahweh; y yo te haré subir
sobre las alturas de la tierra, y te daré a comer la heredad de Jacob tu
padre; porque la boca de Yahweh lo ha hablado.
Y aquí toma forma la profecía, ...Elías hará volver el corazón de los padres
hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres...Mal. 4:6.
JEREMÍAS 17
19
Así me ha dicho Yahweh: Ve y ponte a la puerta de los hijos del pueblo,
por la cual entran y salen los reyes de Judá, y ponte en todas las puertas
de Jerusalén, 20y diles: Oíd la palabra de Yahweh, reyes de Judá, y todo
Judá y todos los moradores de Jerusalén que entráis por estas
puertas. 21Así ha dicho Yahweh: Guardaos por vuestra vida de llevar carga
en el día de reposo, y de meterla por las puertas de Jerusalén. 22Ni saquéis
carga de vuestras casas en el día de reposo, ni hagáis trabajo alguno, sino
santificad el día de reposo, como mandé a vuestros padres... ... 26Y vendrán
de las ciudades de Judá, de los alrededores de Jerusalén, de tierra de
Benjamín, de la Sefela, de los montes y del Neguev, trayendo holocausto y
sacrificio, y ofrenda e incienso, y trayendo sacrificio de alabanza a la casa
de Yahweh. 27Pero si no me oyereis para santificar el día de reposo, y para
no traer carga ni meterla por las puertas de Jerusalén en día de reposo, yo
haré descender fuego en sus puertas, y consumirá los palacios de
Jerusalén, y no se apagará.
Cuando uno toma su propia cruz, y se ofrece a Dios por los hermanos, está
llevando carga, porque estos hermanos, como todos nosotros, aun siguen teniendo
debilidades y falta de perfeccionamiento espiritual, y se dice; que se lleva carga por
este o por estos hermanos, porque en el pacto personal, cada uno, le pide a Dios
en el nombre de Jesucristo que pueda llevar la tristeza y las debilidades de sus
hermanos. Pero cuando se pone el alma por Jesucristo, ¿qué carga nos va Él a
mandar sino la suya emocional, la situación de Él, de estar sufriendo porque los
hombres no aman a Dios, ni a sus hermanos, ni al prójimo?, pero ninguna carga de
debilidad espiritual, ni de tentación carnal. Por esto al tomar la cruz por el Señor en
sábado, no se lleva carga a Dios sino que se le bendice por traerle la presencia de
nuestro amor espiritual, que ha sido convertido en amor de Dios, por pedirle
nosotros a Dios que a través de nuestro ofrecimiento, podamos llevar la tristeza
suya, y Él a cambio tenga amor de la esposa-iglesia-alma de cada uno en
particular.
...Y se cumple el mandamiento que dice curiosamente: no hagas obra tu, ni tu hijo,
ni tu hija...etc., pero no se menciona en Éxodo 20, en los DiezMandamientos,
ninguna orden de que nuestra esposa no haga ninguna obra. Como ya se ha
explicado en esta web en varias ocasiones, la esposa representa el alma del
hombre o mujer. A ésta sí se la deja hacer obra, obra del alma, obra espiritual de
sacerdocio en Sábado, para Cristo.
Yo creo que aquel sábado que el pueblo de Dios pongamos todos nuestrasalmas
como sacrificio a Dios por Él, y el amor de la Esposa suba al Esposo, ese día Él
vendrá y nos llevará a Si Mismo para la eternidad. ¿Y tu; amarás a tu Dios y le
traerás reposo el próximo sábado?
...El día de reposo fue hecho por causa del hombre, y no el hombre por
causa del día de reposo. Por tanto, el Hijo del Hombre es Señor aun del día
de reposo. Evangelio según San Marcos 2:27.
Viendo esta situación en la región espiritual, queda por lo tanto una reflexión o
revelación o apertura de la Escritura que a continuación se expone:
Así pues, como dice el mandamiento: en el Shabbat, no harás ninguna obra tu,
ni tu hijo... ni nadie de tu casa, a excepción de la esposa que no se menciona y
espiritualmente, la esposa es nuestra alma, la que se reserva para hacer la obra
espiritual del sacerdocio en la intercesión especial del Sábado que es el día ( o
nueva etapa de nuestra vida, ya que lo que busca Dios es que vivamos en Sábado
todos los días de nuestra vida, para que llevemos nuestra cruz con él, que
compartamos Su yugo), día, mejor dicho vida, que debemos dedicar a Dios, a
Cristo, para que él vea que:
Primero: hemos aceptado su sacrificio como la obra que había de hacerse, y por lo
tanto ya no debemos intentar hacer ninguna obra para buscar la salvación de
nuestras almas, pues como dice en mandamiento, no harás ninguna obra tu, ni tu
hijo ni nadie de tu casa. Esta es la interpretación espiritual de este mandamiento,
no se refiera a hacer obras de trabajo, sino obras de salvación, la salvación
pertenece al Salvador, a Yah-Shuah, la salvación de Yah.
Segundo: Que Él hace que seamos libres de la ley literal de religión, de la religión
perfecta dada por Dios a los hombres, no para que vivan por ella, sino para que
vean que la religión es esclavitud, y de la esclavitud en Egipto que simboliza el
mundo y el sistema de la sociedad gobernado por Satanás, ya que la carne no se
puede someter a la ley, y si alguno se considera perfecto, porque es rico en
espíritu, hágase pobre de espíritu, porque ante Dios, lo único que vale es amarle a
Él y ser humilde reconociendo la dependencia que tenemos de nuestro creador y
aceptando que Él ha venido al mundo y ha vencido a la muerte, y nos regala la
resurrección para vida eterna, ya que la muerte es la gran mentira con la que
Satanás nos engaña, ya que todos resucitarán, y también como dice la
escritura, ...no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden
matar, temed mas bien a Aquél que puede destruir el alma y el cuerpo en
el infierno. Mateo 10:28.
ÉXODO 20 Y DEUTERONOMIO 5
12
Guardarás el día de reposo para santificarlo, como YHWH tu Dios te ha
mandado. 13Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; 14mas el séptimo día
es reposo a YHWH tu Dios; ninguna obra harás tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni
tu siervo, ni tu sierva, ni tu buey, ni tu asno, ni ningún animal tuyo, ni el
extranjero que está dentro de tus puertas, para que descanse tu siervo y
tu sierva como tú.15Acuérdate que fuiste siervo en tierra de Egipto, y que
YHWH tu Dios te sacó de allá con mano fuerte y brazo extendido; por lo
cual YHWH tu Dios te ha mandado que guardes el día de reposo.
NÚMEROS 28
16
Pero en el mes primero, a los catorce días del mes, será la pascua
de Yahweh. 17Y a los quince días de este mes, la fiesta solemne; por siete
días se comerán panes sin levadura. 18El primer día será santa
convocación; ninguna obra de siervos haréis. 19Y ofreceréis como ofrenda
encendida en holocausto a Yahweh, dos becerros de la vacada, y un
carnero, y siete corderos de un año; serán sin defecto.20Y su ofrenda de
harina amasada con aceite: tres décimas con cada becerro, y dos décimas
con cada carnero; 21y con cada uno de los siete corderos ofreceréis una
décima. 22Y un macho cabrío por expiación, para reconciliaros. 23Esto
ofreceréis además del holocausto de la mañana, que es el holocausto
continuo.24Conforme a esto ofreceréis cada uno de los siete días, vianda y
ofrenda encendida en olor grato a Yahweh; se ofrecerá además del
holocausto continuo, con su libación. 25Y el séptimo día tendréis santa
convocación; ninguna obra de siervos haréis.
De este modo tenemos también el séptimo día de la fiesta que comienza con la
Pascua, también día de reposo, o Sábado, los panes sin levadura, que simbolizan el
día que hemos concluido espiritualmente un crecimiento de aprender a comer el
Pan del Cielo que es Cristo, ...sin levadura de malicia y de maldad, sino con panes
sin levadura, de sinceridad y de verdad... 1Co. 5:7, sin la levadura de la religión;
esto es, hemos aprendido en la Biblia a conocer al Hijo de Dios fuera de la tradición
y de las doctrinas y mandamientos de hombres para conocerle a Él y comenzar a
vivir una nueva vida de bendición, guiados por Él. Además tenemos el día de
reposo del mes séptimo y los dos sábados seguidos de la fiesta de
los TABERNÁCULOS. Tres fiestas principales y siete fiestas totales en las que los
días señalados son días de reposo en los que no se hará ninguna obra.
Siete días comerás panes sin levadura y el primer y séptimo día son Sábado, días
de reposo y gran solemnidad, y tendréis santa convocación. Y cuando entréis en la
tierra prometida guardaréis este rito: hoy la Santa Cena en los que han nacido de
nuevo: El primer día de la Pascua es cuando un hombre ha reconocido a Cristo
como el Cordero de Dios que ha sido ofrecido para pagar por este hombre, luego
durante un periodo de siete días o tiempos que tarda este hombre en comprender y
conocer a Dios en Cristo y por Cristo, como pan sin levadura, la famosa levadura de
los fariseos a los que se refiere Jesús cuando nos advierte, aquellos de toda religión
y secta que quieren dominar las almas sin mirar mas que su dominio sobre ellos.
Cristo entra en Jerusalén montado en el pollino de asna cuatro días (como manda
la Ley, escoger al cordero el día diez y guardarlo hasta su sacrificio) antes de la
Pascua para ser recibido como el cordero que va a ser ofrecido, como el Rey pero
Cordero de la Pascua y de la expiación al que los escribas y fariseos y los
sacerdotes de la Ley, interrogan y no pueden hallar en Él mancha alguna. Es ungido
seis días antes por María con el perfume de nardo puro de mucho precio, como
consagración de que es el cordero que se aparta, según la Ley, para ser sacrificado
como Pascua. Este es el día que marca la Ley: el Shabbat Hagadol, sábado semanal
anterior a la Pascua cuando se escoge al cordero de la Pascua y se aparta. Los
Judíos tuvieron fe y ataron corderos el sábado semanal anterior en sus casas
aunque los Egipcios consideraban a los corderos sus dioses, pero no pudieron
impedir que el pueblo de Dios obedeciera la señal.
Cristo es probado por los sacerdotes y hallado sin mancha ante ellos. Perfecto y sin
mancha como el cordero Pascual.
Cristo come los panes sin levadura de la Pascua el 14 de Nisan por la noche del 13.
Toma la Santa Cena. Él sería el cordero de aquella y última Pascua.
Todas estas profecías de Pascua son cumplidas por el Cordero de Dios que quita el
pecado del mundo.
MATEO 12
40
Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres
noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y
tres noches.
Cristo está 3 días y 3 noches muerto y resucita el primer día de la semana. Muere
el 14 Miércoles, 15 Jueves Sábado de gran solemnidad. 16 Viernes cuando las
mujeres compran las especias aromáticas para ungir el cuerpo de Jesús, 17 Sábado
de la semana, 18 Domingo o primer día por la mañana ya ha resucitado. 18 por la
tarde se aparece a los discípulos aun en la semana de la Pascua. Son tres noches la
del 15, 16 y 17 y tres días 15, 16 y 17. Cristo resucita el Sábado al final, el primer
día ya no está en el sepulcro. Cristo es el que cumple el Sábado Espiritual.
CONCLUSIÓN
El Sábado o día de reposo por lo tanto es la entrada del alma del hombre en el
descanso de su búsqueda, la cual Dios ha guiado hasta hallar el Camino a la Verdad
que es Su Hijo Jesucristo. Si vivimos en Sábado de santidad en el reposo de
nuestro corazón en Dios, en la confianza en Dios, en el reposo de nuestra alma en
la salvación que Cristo obtuvo en la Pascua que cumplió, si dejamos que nuestra
mente repose en la fe y en el conocimiento de Dios por la mente de Cristo, y si
vivimos en el reposo de nuestro espíritu nacido de nuevo al Espíritu Santo que nos
guía diariamente, celebrando en nuestro corazón la alabanza de su amor y
misericordia, entonces hermanos, cumplimos en verdad en Sábado espiritualmente.
Les animo por lo tanto a predicar el reposo espiritual a los santos hermanos que
conocen las Escrituras, no la letra, sino el Espíritu de la Biblia, la Palabra de Dios, el
Hijo de Dios vivo que resucitó en el momento de terminar el Sábado y comenzar la
mañana del primer día de la semana, la nueva semana, la nueva vida que nos dio
por Su obra eterna. Amen.
http://www.jesucristo.net/sabado.htm
El Sabado (III)
La Palabra de Dios es muy clara en que la observancia del Sabbath fue una señal
especial entre Dios e Israel: “Y Moisés subió a Dios; y Jehová lo llamó desde el
monte, diciendo: Así dirás a la casa de Jacob, y anunciarás a los hijos de Israel:
Vosotros visteis lo que hice a los egipcios, y cómo os tomé sobre alas de águilas y
os he traído a Mí. Ahora pues, si diereis oído a Mi voz, y guardareis Mi pacto,
vosotros seréis Mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque Mía es toda la
tierra.” (Éxodo 19:3-5)
“Guardarán, pues, el día de reposo los hijos de Israel, celebrándolo por sus
generaciones por pacto perpetuo. Señal es para siempre entre Mí y los hijos de
Israel; porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, y en el séptimo día
cesó y reposó.” (Éxodo 31:16-17)
Nótese las palabras “por lo cual” No fue la intención de Dios el dar a Israel el
Sabbath para que recordaran la creación, sino para que recordaran su esclavitud en
Egipto y la liberación del Señor. Nótense también los requerimientos para la
observancia del Sabbath: La persona que se encontraba bajo la ley del Sabbath, no
podía salir de su casa en Sabbath (Éxodo 16:29), no podía hacer un fuego (Éxodo
35:3), ni tampoco provocar que alguien más trabajara (Deuteronomio 5:14). La
persona que quebrantara la ley del Sabbath era condenada a muerte (Éxodo 31:15;
Números 15:32-35).
Una revisión de los pasajes del Nuevo Testamento nos muestran cuatro puntos
importantes; (1). Cuando Cristo se apareció en Su forma resucitada, (y el día es
mencionado), siempre se dice que es el primer día de la semana (Mateo 28:1, 9,
10; Marcos 16:9; Lucas 24; 1, 13, 15; Juan 20:19,26) (2). La única vez que es
mencionado el Sabbath desde el libro de Hechos hasta Apocalipsis, es por
propósitos evangelísticos hacia los judíos y usualmente el lugar es una sinagoga
(Hechos capítulos 13 –18) Pablo escribió, “Me he hecho a los judíos como judío,
para ganar a los judíos; a los que están sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a
la ley) como sujeto a la ley, para ganar a los que están sujetos a la ley..” (1
Corintios 9:20) Pablo no iba a la sinagoga a tener comañerismo y edificar a los
santos, sino para convencer y salvar a los perdidos. (3). A partir de que Pablo
declaró “...desde ahora me iré a los gentiles.” (Hechos 18:6), jamás volvió a
mencionarse el Sabbath. Y (4). En vez de sugerir adherirse a la observancia del
Sabbath, el recordatorio del Nuevo Testamento implica lo opuesto (incluyendo la
excepción del anterior punto 3, encontrado en Colosenses 2:16).
Examinando más de cerca el anterior punto 4, vemos que no hay obligación para el
creyente del Nuevo Testamento de guardar el Sabbath, y también nos muestra que
la idea de que el domingo sea “El Sabbath cristiano” tampoco es bíblico. Como
expusimos anteriormente, hay una ocasión en que el Sabbath es mencionado
después de que Pablo comenzó a enfocarse en los gentiles, “Por tanto, nadie os
juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de
reposo, todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo.”
(Colosenses 2:16-17) El Sabbath judío fue abolido en la cruz donde Cristo murió...
“anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria,
quitándola de en medio y clavándola en la cruz.” (Colosenses 2:14)
Esta idea es repetida más de una vez en el Nuevo Testamento; “Uno hace
diferencia entre día y día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté
plenamente convencido en su propia mente. El que hace caso del día, lo hace para
el Señor; y el que no hace caso del día, para el Señor no lo hace.” (Romanos 14:5-
6ª) “...mas ahora, conociendo a Dios, o más bien, siendo conocidos por Dios ¿Cómo
es que os volvéis de nuevo a los débiles y pobres rudimentos, a los cuales os
queréis volver a esclavizar? Guardáis los días, los meses, los tiempos y los años..”
(Gálatas 4:9-10)
Pero algunos argumentan que un mandato hecho por Constantino en el año 321 de
nuestra era “cambió” el Sabbath, de sábado a domingo. ¿En qué día se reunía la
iglesia primitiva para adorar? La Escritura nunca menciona una reunión de
creyentes en Sabbath (sábado) para adorar y tener compañerismo. Sin embargo,
hay pasajes muy claros que mencionan el primer día de la semana. Por ejemplo,
Hechos 20:7 dice que “El primer día de la semana, reunidos los discípulos para
partir el pan,...” En 1 Corintios 16:2 Pablo exhorta a los creyentes corintios “Cada
primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya
prosperado...” Puesto que Pablo designa esta ofrenda como “servicio” en 2
Corintios 9:12, esta colecta debe haber estado relacionada con la adoración del
servicio dominical en la asamblea cristiana. Históricamente el domingo, no el
sábado, era normalmente el día de reunión para los cristianos en la iglesia, y su
práctica data del primer siglo.
Fuente:
http://www.gotquestions.org/Espanol/sabbath-sabado-domingo.html
El Día del Señor – ¿Tiene Importancia?
Por John F. MacArthur, Jr.
Aquí estamos juntos otra vez, y es domingo. ¿Alguna vez se ha detenido a pensar
acerca de por qué no es Martes? ¿Por qué no adora la Iglesia en jueves? O ¿incluso
el sábado? ¿Por qué es que el modelo de los creyentes, literalmente todo el mundo,
en cada país y cada cultura, en donde Jesucristo es el Señor, es que la adoración se
lleva a cabo el domingo? He viajado por el mundo, y en todas partes a donde voy,
siempre la Iglesia se reúne el domingo – si estoy en Kazajistán, o en el Reino
Unido, o Belli (sp.), Rusia o India, o China, o las Filipinas, o Nueva Zelanda o
Australia, o Brasil, o Sudáfrica, o Israel, o el Ecuador, o en donde sea – este último
viaje en las últimas semanas en Francia y Alemania y Suiza – los creyentes siempre
se reunían en domingo – siempre. De hecho, ese fue claramente el patrón de todos
en el mundo occidental, pero no es limitado al mundo occidental – en cualquier
lugar y en todas partes del mundo donde los creyentes se reúnen. En particular el
mundo occidental y el mundo influido por el Oeste con el catolicismo y el
protestantismo han apartado este día en la cultura y la sociedad como un día de
adoración. Que sin duda es cierto en Estados Unidos hasta hace poco.
En mi infancia, y todo el tiempo hasta que vine a Grace Community Church en
1969, y durante algunos años después, el Domingo fue siempre reconocido como
un día de adoración. Incluso la nación misma reconoció el primer día de la semana
estaba apartado para la adoración cristiana. Cuando vine a la iglesia Grace y por
años transcurridos desde que vine aquí, todas las tiendas estaban cerradas el
domingo. No había ningún evento organizado, no había eventos deportivos
previstos para los niños o las familias en domingo, y había incluso leyes, a través
de América, en contra de cualquier intrusión en el día reservado para la adoración.
Siempre fue un día diferente al sábado.
El Sábado era cuando todas las tiendas estaban abiertas y todo el mundo hacía sus
compras y su trabajo en el patio, y participaba en todas las actividades deportivas,
junto con los viajes y la recreación y todo lo demás. Pero toda la nación, y
francamente, el mundo occidental, y todo el resto del mundo bajo la influencia del
cristianismo, reconocen básicamente el primer día de la semana como un día
dedicado al culto cristiano. Incluso puedo recordar el año en que aquí las leyes
locales se modificaron para permitir a las tiendas a abrir, y luego gradualmente
más y más actividades se han añadido, hasta el día de hoy, el domingo es
básicamente como cualquier otro día, y así lo ha sido, incluso en la Iglesia. Más y
más las iglesias están teniendo servicios los sábados porque es más cómodo para
algunas personas. Algunas iglesias tienen servicios el miércoles por la noche para
no entrometerse en las actividades planeadas de fines de semana.
Sin embargo, el domingo, como lo llamamos, siempre ha sido y lo es hoy, entre los
cristianos de todo el mundo, el día de adoración, y eso plantea la pregunta: “¿Por
qué?” ¿Es arbitrario? ¿Es tradicional? ¿Quién lo inició? ¿Cómo empezó? ¿Cómo nos
vamos a conducir el día de hoy?
Bueno, muchas iglesias hoy quieren darle a la gente gran parte del domingo tanto
sea posible para que ellos puedan hacer lo que quieren, por lo que han reducido el
culto dominical a una hora de duración, un tipo de experiencia no intrusiva que
pueda tener en su camino hacia la playa, o al juego de pelota. Es muy casual, es
una especie de “visita informal” para tratar de que no se inmiscuya – un tipo de
“intromisión” entre el “almuerzo” y la “playa”. Y, como ya he dicho, hay muchas
iglesias que ofrecen un servicio el sábado por la noche, porque es muy oscuro para
jugar de todos modos, y eso deja al Domingo completamente libre para los juegos
y la recreación y el centro comercial. ¿Tendrá importancia? Bueno, quiero mostrar
que yo creo que sí.
Ahora, sólo una breve reseña, hemos hablado ya sobre las observancias del
séptimo día en el Génesis y en Éxodo, y ya hemos mencionado que la Ley del
sábado, en el Pacto Mosaico ya no es más obligatorio. Colosenses 2:16-17, Pablo
dice, “Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de
fiesta, luna nueva o días de reposo, todo lo cual es sombra de lo que ha de venir;
pero el cuerpo es de Cristo.” No hay más Sábado. No hay más obligación a la ley
Sabática. Nosotros no estamos bajo la economía Mosaica, no hay más leyes de la
dieta, no hay más leyes del sábado, ya no es necesario observar las fiestas,
festividades, y las lunas nuevas, esto, de acuerdo con Colosenses, capítulo dos, y
Gálatas, capítulo cuatro.
Así hemos aprendido que no estamos bajo ninguna ley mosaica, no estamos bajo
ninguna Ley del sábado. Sin embargo, eso no significa que el séptimo día, el
sábado, es un día al que no le prestamos ninguna atención, en realidad, cuando
vamos a Génesis, capítulo dos, nos encontramos con que Dios bendijo el séptimo
día. Hemos aprendido en nuestro estudio sobre esto, que El lo ha bendecido en este
sentido, que cada séptimo día conmemora y nos recuerda que Dios creó el universo
entero, como existe ahora, en seis días. Dios descansó el séptimo día de todo lo
que había creado en seis días de 24 horas, y entonces bendijo el día, y en la
bendición Él simplemente dijo: “Cada vez venga un séptimo día, en el calendario,
es una buena oportunidad para que usted se detenga y glorifique a vuestro
Creador. La obra de Dios se terminó en seis días, Dios está satisfecho, Dios se
alegra. Él miró todo lo que Él había creado y dijo que era muy bueno, y así Él
bendijo el día. El elevó el día.
Ahora, permítanme recordarles, en Génesis, no se dice nada acerca del hombre
descansando – nada. No fue un día para el hombre diseñado para el reposo, el
hombre no necesitaba de un día para descansar, se encontraba en un estado
permanente de reposo, porque la “caída” no vino hasta el Génesis, capítulo tres.
Antes del pecado la vida del hombre era todo reposo, incluso cuidando el jardín era
una actividad agradable, y no existía nada que disipara la fuerza del hombre,
porque él poseía la vida eterna – No necesitaba un día de descanso. Sin embargo,
cada séptimo día que transcurría, en su permanente vida de reposo, se celebraba el
hecho de que Dios era un gran creador, que en seis días creó el universo entero.
Podemos disfrutar en ese sentido el séptimo día, y creo que como cristianos
podemos volver al séptimo día del Génesis, y cada vez que un séptimo día
transcurre tenemos que recordar el hecho de que Dios creó el universo en seis días,
y tenemos que darle gloria como nuestro Creador.
Tradicionalmente, en todo tipo de influencia cristiana en la historia, ha sido en
mucho la forma en que el Sábado ha sido tratado. Hemos desarrollado una semana
de cinco días de trabajo y tomamos el sábado, por lo general, como el día, cuando
disfrutamos de la creación. No es el día de adoración para nosotros, sino que es un
día de recreación. Es un día para disfrutar de la creación, para trabajar en el patio,
para salir, para hacer un viaje, o lo que sea – para deleitarse en el Dios Creador.
Para que podamos mantenerlo así, pero lejos de una ley del Sábado que se adjuntó
a la economía mosaica, todo eso ya pasó, todo eso terminó. El sábado sufrió un
golpe mortal en la ceremonia de la cruz de Jesucristo. El séptimo día no tiene lugar
en la enseñanza del Nuevo Pacto y no tiene lugar en la enseñanza del Nuevo
Testamento.
La ley del sábado estaba destinada a hacer que el hombre viera a Dios como juez,
para ver a Dios como el dador de la Ley, y para verse a sí mismo como un infractor
de la Ley de Dios. En el día de reposo, en virtud de la ley mosaica, no podía ir a
ninguna parte, usted no podía hacer ningún trabajo, simplemente se sentaba en su
casa, y contemplaba su condición, y su condición delante de Dios es la de un
pecador. Usted era recordado de la Ley de Dios. Era recordado que en el centro de
los Diez Mandamientos estaba el mandamiento: “Recuerda el día de reposo para
santificarlo”, y al buscar ese mandamiento, el número cuatro, y veía los tres de
arriba que había violado en contra de Dios, y los seis que había violado en contra
del hombre – recordando que el día de reposo era un día en el que básicamente se
centraba en Dios como dador de la Ley y juez, y de cómo usted había violado Su
ley – era un día de convicción de pecado. Realmente no era un día de celebración.
Era un día en que usted podía ver a Dios como Creador, pero también tenían que
darse cuenta de que su creación había sido marcada, empañada, manchada y
contaminada por el pecado, y que usted formaba parte de ella.
Por lo tanto, la Ley del sábado era un día para contemplar nuestro pecado. La ley
del sábado aplastaba al hombre. Usted apenas podía guardar la ley del Sábado, era
tan compleja, había tantas normas y reglamentos y rutinas por seguir. Pero cuando
Jesús vino y murió en la cruz Él nos sacó de estar bajo esclavitud de la Ley, rompió
la parte posterior de la opresión de la ley. Terminó la ceremonia del sábado, y el
ritual del sábado, y la naturaleza obligatoria de las leyes del sábado y nos libró de
todas esas cosas.
Así que nosotros no observamos el sábado Mosaico, aunque como ya he dicho,
cuando transcurría el Sábado podemos recordar que en seis días Dios creó los
cielos y la tierra para Su gloria, El es nuestro gran y glorioso Creador. Pero cuando
se trata del primer día, ese es nuestro día, porque ese es el día en que glorificamos
a Dios, no como creador, no como juez y Dador de la ley, sino que glorificamos a
Dios como Salvador –como Salvador.
El Nuevo Pacto, entonces, tiene su propio día – el primer día, y hay buenas razones
para ello, y quiero mostrarle esa razón. A su vez, en nuestras Biblias hasta el final
del Evangelio de Mateo, Mateo 28. Ahondaré un poco en esta mañana para
establecer en su mente la importancia de este primer día de la semana.
Mateo 28, “Pasado el día de reposo,” el cual es el séptimo día, como ustedes saben,
“al amanecer del primer día de la semana,” que es el domingo, “vinieron María
Magdalena y la otra María,(quien es la madre de Jacobo) a ver el sepulcro.” Esa es
la tumba de Jesús, Él murió el viernes, fue colocado en la cruz mientras todavía era
viernes. Él había estado todo el sábado, el día de reposo; y ahora es domingos por
la mañana.
Vinieron a ver la tumba. Estas mujeres estaban tan preocupadas por el cuerpo de
Jesús, y cómo fue tratado El, “Y hubo un gran terremoto,” versículo dos, “porque
un ángel del Señor, descendiendo del cielo y llegando, removió la piedra, y se
sentó sobre ella. Su aspecto era como un relámpago, y su vestido blanco como la
nieve”, y los guardias, que habían sido asignados a proteger el cuerpo, de modo
que nadie lo robaran y falsificara una resurrección, “Y de miedo de él los guardas
temblaron y se quedaron como muertos. Mas el ángel, respondiendo, dijo a las
mujeres: No temáis vosotras; porque yo sé que buscáis a Jesús, el que fue
crucificado. No está aquí, pues ha resucitado, como dijo. Venid, ved el lugar donde
fue puesto el Señor. E id pronto y decid a sus discípulos que ha resucitado de los
muertos, y he aquí va delante de vosotros a Galilea; allí le veréis. He aquí, os lo he
dicho. Entonces ellas, saliendo del sepulcro con temor y gran gozo, fueron
corriendo a dar las nuevas a sus discípulos. Y mientras iban a dar las nuevas a los
discípulos, he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: !!Salve! Y ellas,
acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron. Entonces Jesús les dijo: No temáis;
id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, y allí me verán.”
Por lo tanto, era la madrugada del domingo por la mañana, la mañana en que Jesús
resucitó y se apareció a María Magdalena y María la madre de Jacobo (y esto está
indicado en Mateo 27:56). Ellos literalmente, vieron a Jesús – Les apareció a ellos
(versículo 9), y los saludó, y ellos se acercaron y abrazaron Sus pies, y le adoraron.
Amigo, el primer servicio de adoración de era del Nuevo Pacto se celebró en una
mañana por domingo. Eso fue – el primer servicio de adoración Dominical.
Ahora, antes de que este domingo tiene absolutamente ninguna importancia en el
calendario judío. Hubo sólo un caso que se produjo el domingo, durante todo el
año, y voy a mencionar eso un poco más tarde. El domingo era un día como
cualquier otro en el calendario judío, otro día, no tenía especial importancia – hasta
que este evento, hasta la resurrección de Jesús. Dios decidió que Jesús debía
resucitar el domingo. Dios decidió que serían tres días en la tumba, no dos, no
cuatro, no seis, no cinco, y que cuando El saldría de la tumba sería un domingo.
A su vez, Lucas, capítulo 23, al final del capítulo, el último versículo. Una vez más,
hace referencia a estas mujeres que vinieron, y ellas estaban preparando algunas
especias y perfumes para ungir el cuerpo de Jesús, para tratar de retrasar el
deterioro natural, porque los Judíos no embalsaman cadáveres. Pero ellas no
vinieron en el día de reposo, el final del capítulo 23, versículo 56: “…y descansaron
el día de reposo, conforme al mandamiento.” Ellas aún seguían la Ley de sábado.
Sin embargo, en el capítulo 24, versículo uno, “El primer día de la semana, muy de
mañana, vinieron al sepulcro, trayendo las especias aromáticas que habían
preparado, y algunas otras mujeres con ellas. Y hallaron removida la piedra del
sepulcro; y entrando, no hallaron el cuerpo del Señor Jesús. Aconteció que estando
ellas perplejas por esto, he aquí se pararon junto a ellas dos varones con
vestiduras resplandecientes; y como tuvieron temor, y bajaron el rostro a tierra,
les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? No está aquí, sino que
ha resucitado”. Y he aquí de nuevo, la notación, a partir del capítulo, “el primer día
de la semana” – Jesús resucitó el primer día de la semana.
Por supuesto, el ángel les recordó que, “Acordaos de lo que os habló, cuando aún
estaba en Galilea, diciendo: Es necesario que el Hijo del Hombre sea entregado en
manos de hombres pecadores, y que sea crucificado, y resucite al tercer día.
Entonces ellas se acordaron de sus palabras, y volviendo del sepulcro, dieron
nuevas de todas estas cosas a los once, y a todos los demás. Eran María
Magdalena, y Juana, y María madre de Jacobo, y las demás con ellas, quienes
dijeron estas cosas a los apóstoles. Mas a ellos les parecían locura las palabras de
ellas, y no las creían. Pero levantándose Pedro, corrió al sepulcro; y cuando miró
dentro, vio los lienzos solos, y se fue a casa maravillándose de lo que había
sucedido”.
Una vez más, más información sobre la resurrección de que se produjo en domingo.
Era la madrugada del domingo, y el Señor había salido de la tumba. Había
resucitado, Él estaba vivo. Él se había resucitado para nuestra justificación. Había
conquistado el pecado y la muerte y el infierno. Él llevó nuestros pecados en su
propio cuerpo. Él se hizo pecado por nosotros, y salió triunfante de la tumba, y
resucitó una mañana del domingo. Por lo tanto, este se convierte entonces en el día
del Nuevo Pacto. El Sábado, el día de reposo, su cuerpo estaba muerto en la
tumba, y eso era la muerte, realmente, del sábado. Cuando Jesús murió, murió el
sábado. Cuando Jesús resucitó, amaneció un nuevo día – este es el día del Nuevo
Pacto.
Ahora, vamos a seguir el día. El primer servicio de adoración se celebró en la
mañana, como ya le he mencionado desde el relato en Mateo, pero vamos a ver
qué sucedió.
Es un poco más tarde en el día, después de ese primer servicio de adoración con
las mujeres adorándole. En el versículo 13 (Lucas 24:13), dos discípulos (no se
trata de uno de los “once”, como indica el versículo 18. Uno de ellos es el llamado
Cleofás. No sabemos el nombre del otro). Pero, “Y he aquí, dos de ellos iban el
mismo día a una aldea llamada Emaús, que estaba a sesenta estadios de
Jerusalén” (al norte y al oeste de Jerusalén). “E iban hablando entre sí de todas
aquellas cosas que habían acontecido. Sucedió que mientras hablaban y discutían
entre sí, Jesús mismo se acercó, y caminaba con ellos.” Y el versículo 16 dice, “Mas
los ojos de ellos estaban velados, para que no le conociesen” Ellos no sabían quién
era.
“Y les dijo: ¿Qué pláticas son estas que tenéis entre vosotros mientras camináis, y
por qué estáis tristes? Ellos hablaban acerca del hecho de que su Mesías estaba
muerto. “Respondiendo uno de ellos, que se llamaba Cleofas, le dijo: ¿Eres tú el
único forastero en Jerusalén que no has sabido las cosas que en ella han acontecido
en estos días?”¿Dónde has estado? Es decir, toda la ciudad de Jerusalén había
estado en un tumulto y un escándalo más sobre Jesús, y había sucedido un juicio, y
allí estaba toda la multitud, y demandaron Su sangre, y que lo llevaran hasta la
colina, y le ejecutaron – ¿dónde has estado, cuando sucedían todas estas cosas?
“Entonces él les dijo: ¿Qué cosas? Y ellos le dijeron: De Jesús nazareno, que fue
varón profeta, poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo;
y cómo le entregaron los principales sacerdotes y nuestros gobernantes a sentencia
de muerte, y le crucificaron.” Es decir, ellos no lo podían creer – ¿ni siquiera sabías
acerca de esto?
Versículo 21“Pero nosotros esperábamos que él era el que había de redimir a
Israel; y ahora, además de todo esto, hoy es ya el tercer día que esto ha
acontecido.” Aparentemente, se había corrido la voz en torno a que El había dicho
que resucitaría el tercer día, pero no habían oído hablar con seguridad de que
estaba vivo – no tenían idea. Versículo 22, “Aunque también nos han asombrado
unas mujeres de entre nosotros, las que antes del día fueron al sepulcro; y como
no hallaron su cuerpo, vinieron diciendo que también habían visto visión de
ángeles, quienes dijeron que él vive. Y fueron algunos de los nuestros al sepulcro, y
hallaron así como las mujeres habían dicho, pero a él no le vieron”(que serían
pedro y Juan). Así que todavía no estaban seguros de lo que está pasando aquí.
Y aquí tienen ustedes el “primer sermón” predicado en domingo, “Entonces él les
dijo: !!Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han
dicho! ¿No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su
gloria?” ¿No han leído detenidamente los profetas? ¿No han leído Isaías? ¿No se
han dado cuenta de lo que dicen los Salmos, de que el Mesías habría de morir, pero
su cuerpo no vería corrupción – que saldría de la tumba? ¿No saben que El sería
herido por sus transgresiones y molidos por vuestras iniquidades, y el castigo de su
paz fue con Él, y por sus llagas fuisteis curados, no han de leído todo eso? ¿No
recuerdan que el Mesías había de sufrir antes de que pudiera entrar en la gloria de
su reino?
(versículo 27) “Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les
declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían.” Esta es la primera vez que se
predicó un sermón el domingo, y es un sermón expositivo. Ahora, me alegro, me
alegro de ello. Y Jesús abre la Escritura y les explica la Escritura. Así que este es un
día maravilloso: en la mañana fue el primer servicio de adoración, ya que adoraron
a Cristo resucitado; poco más tarde en el día, nos encontramos ahora en la tarde,
es otro servicio y esta exposición cuenta con un sermón, por el Señor mismo,
establece el patrón para toda predicación aquí. ¡Qué maravilloso es este
momento¡ la madrugada del domingo, el Señor ha resucitado, el Señor está vivo, y
predica el sermón del primer domingo y es un sermón expositivo.
Versículo 28 dice: “Llegaron a la aldea adonde iban, y él hizo como que iba más
lejos. Mas ellos le obligaron a quedarse, diciendo: Quédate con nosotros, porque se
hace tarde, y el día ya ha declinado”. Usted no deseará ir a donde usted va, es un
largo camino. . . . No sé a donde estarían pensando que El iba, pero era un largo
camino a la próxima aldea, y estaban a siete millas de Jerusalén. “¿Por qué no te
quedas?” “Entró, pues, a quedarse con ellosY aconteció que estando sentado con
ellos a la mesa, tomó el pan y lo bendijo, lo partió, y les dio. Entonces les fueron
abiertos los ojos, y le reconocieron; mas él se desapareció de su vista. Y se decían
el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el
camino, y cuando nos abría las Escrituras?” Eso es lo que cada fiel predicador hace
– explicar las Escrituras.
Entonces aquí tiene un servicio increíble por la tarde. Tuvimos un culto por la
mañana y un servicio expositivo vespertino, pero eso no es todo, mire el versículo
33. Apenas Jesús los dejó, a pesar de que era la tarde del día, “Y levantándose en
la misma hora,” no iban a permanecer en Emaús, no después de haber visto a
Cristo resucitado, y teniendo todo el Antiguo Testamento muy en claro, “volvieron a
Jerusalén, y hallaron a los once reunidos . . .” Ellos volvieron a “los once y a los
que estaban con ellos, que decían: Ha resucitado el Señor verdaderamente, y ha
aparecido a Simón. Entonces ellos contaban las cosas que les habían acontecido en
el camino, y cómo le habían reconocido al partir el pan.” Versículo 36, “Mientras
ellos aún hablaban de estas cosas, Jesús se puso en medio de ellos”
Por ahora es de noche. Y los discípulos se reunieron, junto con otros, y Jesús se les
apareció. “Entonces, espantados y atemorizados”, versículo 37, “Entonces,
espantados y atemorizados, pensaban que veían espíritu. Pero él les dijo: ¿Por qué
estáis turbados, y vienen a vuestro corazón estos pensamientos? Mirad mis manos
y mis pies, que yo mismo soy; palpad, y ved; porque un espíritu no tiene carne ni
huesos, como veis que yo tengo.”
Versículo 40, un versículo controvertido, dice que “Y diciendo esto, les mostró las
manos y los pies”. Controvertido en el sentido de que no está en todos los
manuscritos antiguos, pero sin duda es un hecho – Se las mostró a ellos y tenían la
evidencia. “Y como todavía ellos, de gozo, no lo creían, y estaban maravillados, les
dijo: ¿Tenéis aquí algo de comer? Entonces le dieron parte de un pez asado, y un
panal de miel. Y él lo tomó, y comió delante de ellos.” Y eso demuestra
positivamente que Él no era un fantasma – El comió.
“Y les dijo: Estas son las palabras que os hablé, estando aún con vosotros: que era
necesario que se cumpliese todo lo que está escrito de mí en la ley de Moisés, en
los profetas y en los salmos.” El Antiguo Testamento estaba dividido en tres
secciones: la Ley de Moisés (el Pentateuco), los Profetas (todos los libros
proféticos), y los Escritos Sagrados (el Hagiographa, denominado a veces los
Salmos).
Así también, “Entonces les abrió el entendimiento, para que comprendiesen las
Escrituras” Y aquí usted tiene el servicio de la tarde del primer día del Señor, y otra
exposición de las Escrituras. Abrió sus mentes para comprender las Escrituras. “y
les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase
de los muertos al tercer día; y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y
el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén. Y
vosotros sois testigos de estas cosas. He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre
sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis
investidos de poder desde lo alto.”
¡Wow! ¿Sabe usted como terminó el primer domingo? Se inició con un servicio de
adoración en torno al Cristo resucitado, continuó en el camino de Emaús con el
primer sermón expositivo predicado, predicándoles Jesús a los dos discípulos, pero
continuó en el aposento alto esa noche, cuando Jesús se presentó, donde los once y
otros estaba reunidos, y abrió de nuevo las Escrituras y le dio a sus mentes la
comprensión de las Escrituras. Y no sólo eso, sino que también les dio la Gran
Comisión, para fueran y predicaran a todas las naciones el mensaje de que el
arrepentimiento para perdón de los pecados se encuentra disponible. Usted
comienza en Jerusalén, luego va al mundo, pero antes de que usted vaya, espere a
que el Espíritu Santo le de el poder para hacerlo.
Ahora, esto es un Domingo – ¿no es así? Este es el lanzamiento del día del Nuevo
Pacto. Fue la noche de aquel domingo, Jesús vino a los discípulos, Él les enseñó. Él
les comisionó; Él les prometió el Espíritu Santo.
Ahora, Marcos, a hay que excluirlo, pesa sobre toda esta escena – Marcos 16, el
último capítulo del evangelio de Marcos. Y de nuevo, versículo uno, de Marcos 16,
“Cuando pasó el día de reposo,[a] María Magdalena, María la madre de Jacobo, y
Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle.”
Y de nuevo, versículo dos, “Y muy de mañana, el primer día de la semana. . .” Cada
vez que hay una narrativa acerca de la resurrección, o sobre los eventos, siempre
se indica claramente que esto ocurrió el primer día de la semana. Por lo tanto,
“vinieron al sepulcro, ya salido el sol…”, y el relato inicia a partir de ahí, indicando
los mismos hechos que ya hemos descrito.
Una vez más, en el versículo nueve, “Habiendo, pues, resucitado Jesús por la
mañana, el primer día de la semana, apareció primeramente a María Magdalena”
Una vez más, es como si el Señor quisiera asegurarse de que tengamos en claro,
que este es el “primer día de la semana.” No sólo sigue siendo repetido y repetido y
repetido. El “primer día de la semana” tiene una gran importancia.
Ahora, vaya a Juan, capítulo 20. Juan, el escritor del cuarto evangelio, comienza el
capítulo 20 en el versículo uno: “El primer día de la semana, María Magdalena fue
de mañana, siendo aún oscuro, al sepulcro; y vio quitada la piedra del sepulcro.
Entonces corrió, y fue a Simón Pedro”, etcétera. Así que Juan relata la resurrección:
“el primer día de la semana” y se muestra el mismo en la historia y a Pedro,
llegando y corriendo a la tumba. Juan también relata la aparición de Jesús a María
Magdalena, “María estaba fuera llorando junto al sepulcro”, en el versículo once, “y
mientras lloraba, se inclinó para mirar dentro del sepulcro; y vio a dos ángeles con
vestiduras blancas, que estaban sentados el uno a la cabecera, y el otro a los pies,
donde el cuerpo de Jesús había sido puesto. Y le dijeron: Mujer, ¿por qué lloras?”
(Versículo 13) Ella dijo, “Porque se han llevado a mi Señor”. Eso indica lo que
primero se pensaba, que alguien había robado su cuerpo. “Y no sé dónde le han
puesto.” Cuando había dicho esto, ella se volteó (versículo 14), y vio a Jesús, de
pie, y no sabía que era Jesús. Jesús le dijo: “Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién
buscas? Ella, pensando que era el hortelano le dijo: Señor, si tú lo has llevado,
dime dónde lo has puesto, y yo lo llevaré.” Jesús le dijo: Jesús le dijo: !!María!
Volviéndose ella, le dijo: !!Raboni! (que quiere decir, Maestro). Jesús le dijo: No me
toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas ve a mis hermanos, y diles:
Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios. Fue entonces María
Magdalena para dar a los discípulos las nuevas de que había visto al Señor, y que
él le había dicho estas cosas.”
Y, a continuación, de nuevo, empezando en el versículo 19, Juan nos cuenta la
historia de esa noche del domingo “Cuando llegó la noche de aquel mismo día, el
primero de la semana”, versículo 19, una vez más “el primero de la semana,
estando las puertas cerradas en el lugar donde los discípulos estaban reunidos por
miedo de los judíos, vino Jesús, y puesto en medio”. ¡Vino a través de la pared! No
es de extrañar que “les dijo: Paz a vosotros.” ¡Debe haber sido un pánico
instantáneo! “Les mostró las manos y el costado”, – ¿recuerda eso?
Por cierto, una pequeña nota, versículo 24, “Pero Tomás, uno de los doce, llamado
Dídimo, no estaba con ellos cuando Jesús vino.” ¡Eso es lo que pasa a las personas
que no van a la iglesia el domingo por la noche!
Ahora, hay otro acontecimiento en los versículos 21 al 23, “Entonces Jesús les dijo
otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así también yo os envío.”Y aquí
tenemos la comisión que leemos en Lucas. “Y habiendo dicho esto, sopló, y les
dijo: Recibid el Espíritu Santo.” Algo simbólico, simbólicamente sopló sobre ellos,
“Recibid el Espíritu Santo.” Él les prometió al Espíritu Santo, por lo que aquí repite
lo mismo, El le estaba encargando de llevar el mensaje del evangelio del perdón a
todo el mundo, pero no antes de que el Espíritu Santo viniera, al soplar sobre ellos,
El les da algo simbólico del hecho de que el Espíritu habría de venir.
Versículo 23, “Ustedes van ser capaz de perdonar los pecados, van a ser capaz de
decirle a la gente que sus pecados son perdonados, o no perdonados por lo que
hacen con el Evangelio.” Este es un momento maravilloso. Aquí está la promesa del
Salvador y la promesa de que recibirían el Espíritu Santo en el futuro, un futuro
próximo. Y que serían capaces de declarar con valentía la certeza del perdón de los
pecadores por el hecho de si creyeren o no el Evangelio. Podrían decir al mundo
entero: todas las naciones, que el arrepentimiento para perdón de los pecados está
disponible, y si usted viene a Cristo y se arrepienten y lo aceptan como Salvador y
Señor, sus pecados serán perdonados; si no lo hacen sus pecados serán retenidos.
¿Qué domingo! ¿Qué lanzamiento del día del Nuevo Pacto fue este! Y que comenzó
temprano, mientras que todavía era oscuro, Jesús resucita de entre los muertos en
un domingo temprano, y él aparece en aquel domingo – por la mañana, al mediodía
y en la noche, es un día completo. Y el primer servicio de adoración se realiza
temprano en la mañana: Se muestra a sí mismo con vida a las mujeres en aquel
domingo, y tuvieron ese primer domingo de adoración. Y entonces se reunió con
dos discípulos en el mismo día, y partió el pan con ellos y se les reveló y
milagrosamente desapareció, pero no hasta que Él había predicado el primer
sermón expositivo nunca predicado en domingo. Luego esa noche se reunió con
once, menos Tomás, y dos veces pronunció la paz y comió con ellos para
mostrarles que él se encontraba físicamente vivo. Y Él les enseñó una vez más esa
noche, abriendo las Escrituras y dándoles entendimiento a sus mentes.
Fue en ese mismo domingo que Él dijo a sus discípulos que iban a ser enviados
para llevar el mensaje del perdón a todo el mundo, y que serías capaces de
anunciar a todos que se arrepientan, que había perdón de pecados por Dios,
siempre a través de la muerte de Jesucristo, y que estaba a disposición de todo el
mundo. Por lo tanto, en aquel domingo, El puso en marcha la misión de la
evangelización en todo el mundo, comisionando a los discípulos, y diciéndoles, que
ahora poseen la autoridad divina – literalmente para decirle a la gente que sus
pecados fueron perdonados, si ellos creen en el evangelio, se arrepienten y reciben
al Salvador. Fue en aquel domingo que Él prometió a sus discípulos que estaban
facultados para ello, al recibir el Espíritu Santo, que vendría sobre ellos.
Esto es el lanzamiento del Día del Nuevo Pacto, el gran Nuevo Pacto fue ratificado
el domingo. ¡Cuando Jesús murió y fue muerto y sepultado el sábado, fue el día de
reposo! Cuando Jesús salió de la tumba el domingo se creó un nuevo día – un
nuevo día – ¡que día! ¡Qué glorioso día!, iniciando, probablemente desde el
amanecer hasta la noche. El Nuevo Pacto fue ratificado plenamente en aquel
domingo, y con ese momento los domingos nunca, nunca serían lo mismo
de nuevo.
El domingo se convirtió en el día de resurrección del Nuevo Pacto en sus mentes, y
no era una tradición, y no fue por que ellos lo hayan escogido, ¡fue Dios
quien lo ordenó! Ahora eso no es todo.
Vaya a Juan, capítulo 20, versículo 26. Ahora recuerde Tomás no estaba allí el
primer domingo. Versículo 26, “Ocho días después, estaban otra vez sus discípulos
dentro…” Espere un minuto, ocho días desde el domingo ¡es domingo! Los Judíos
cuentan a partir de la fecha en que estaban, hasta el octavo día, sería el próximo
domingo. Aquí están, ocho días más tarde reunidos. ¿Indica esto que sobre la base
de lo que ocurrió el primer domingo, ese domingo se haya convertido ahora en su
día? Tal vez, pero lo que estaban pensando no es realmente la cuestión. Cuál es el
punto, era el domingo siguiente cuando estaban reunidos dentro, y Tomás estaba
allí y Jesús vino. El no lo había visto desde el último domingo. Jesús no vino un
martes, Él no vino en un miércoles, jueves o viernes, Él no vino un sábado – Esperó
ocho días, hasta el domingo siguiente antes de que reapareciera.
Una vez más, “Llegó Jesús, estando las puertas cerradas, y se puso en medio y les
dijo: Paz a vosotros. Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y
acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino
creyente. Entonces Tomás respondió y le dijo: !Señor mío, y Dios mío! Jesús le
dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y
creyeron.”Esto ocurrió en un domingo!
Ahora, si hay alguna pregunta del primer domingo, si fue ese día o no, esto pondría
fin a todo esto, porque no ven a Jesús nuevamente hasta el próximo domingo. No
sé si se hayan decidido que iban a tener una reunión extraordinaria el domingo o
no, pero el Señor decidió que El tendría su reunión con ellos el domingo. Fue una
elección soberana de aparecer en un segundo el domingo, y que debe haber
marcado sus mentes, indeleblemente, que ¡se trataba del día del Nuevo Pacto! No
tomaría mucho tiempo para que comprendieran que el sábado había dejado de ser
un problema – esto fue por elección divina y no por tradición humana. Es decir,
¿por cree que Juan se inspiró en decir “después de ocho días” si no fuera
importante? ¿Por qué decir que sucedió, si no fuera importante?
Creo que el Señor estaba dejando de lado completamente el Sábado, y
estableciendo un nuevo día, un día del Nuevo Pacto. Sí, todavía podemos ver todos
los sábados que pasan, y podemos alabar a Dios como Creador, porque en seis
días, Él creó el universo. Y podemos mirar al sábado, cuando pasa y dar gracias a
Dios que no estamos bajo la ley. Pero nuestro día es el primer día – ¡el día de la
resurrección! Y que hubo adoración y predicación, y comunión, y regocijo, y
alabanza a Cristo! No era el plan de los discípulos, de hecho se sorprendieron
cuando Jesús se presentó, pero fue Su plan.
Vamos a ir a Hechos, capítulo dos. Creo que esto es muy interesante, Hechos,
capítulo dos. Recuerde que Jesús prometió enviar al Espíritu Santo, y cuando vino
el Espíritu Santo fue fundada la Iglesia – la Iglesia se estableció. El Nuevo Pacto ya
había sido ratificado, el Nuevo Pacto ya está en su lugar – cuarenta días después,
Jesús sube al cielo, después de 40 días de enseñar a sus discípulos en relación a las
cosas del reino.
Entonces llegamos a lo que es muy familiar para cualquier estudiante de la Biblia, el
día de Pentecostés. Hechos 2:1, “Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos
unánimes juntos.” (120 discípulos reunidos en el aposento alto). “Y de repente vino
del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la
casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de
fuego, (literalmente pequeñas flamas) asentándose sobre cada uno de ellos”. Era
un símbolo milagroso del hecho de que el Espíritu invisible estaba entrando en
ellos. Dios les dio una señal visible de una realidad invisible.
Dice en el versículo 4, “Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a
hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen” Así que hubo un
montón de pruebas de que algo sobrenatural estaba sucediendo. El Espíritu Santo
había llegado, y fue indicado por las pequeñas flamas que estaban en las cabezas
de todos en el cuarto, y también indicaba, por su capacidad de hablar idiomas que
no conocían. Fue un momento milagroso la venida del Espíritu Santo, y ocurrió en
el día de Pentecostés.
Ahora, cuando esto ocurrió, la Iglesia nació. Cristo mediante el envío del Espíritu
crea la Iglesia, al enviar su Espíritu El crea Su único cuerpo, mediante el envío del
Espíritu trajo dones a la Iglesia, mediante el envío del Espíritu faculta a la Iglesia
para la evangelización mundial, “Recibiréis poder cuando haya venidos sobre
vosotros el Espíritu Santo.” Fue el mismo día en que nació la Iglesia, y comenzó a
crecer. Fue más tarde de ese mismo día, en el versículo 14, “Entonces Pedro,
poniéndose en pie con los once, alzó la voz y les habló diciendo…” Al final de su
sermón, en el versículo 41, dice: “y se añadieron aquel día como tres mil
personas.”¡Así que el día en que la Iglesia nació, la iglesia creció a tres mil! ¡Se
trataba de un monumental día!
Ahora, ¿por qué estoy hablando sobre el día de Pentecostés? ¿Alguna vez se ha
preguntado que día fue el día de Pentecostés? ¿Qué día de la semana? ¿Alguna vez
se ha preguntado? Bueno, tal vez nunca se haya hecho esa pregunta, y no es
necesario, porque yo voy a decirte.
Vaya a Levítico, capítulo 23, el versículo 16 existe un argumento sobre el día de
Pentecostés, y que dice esto, versículo 16, “Hasta el día siguiente del séptimo día
de reposo[e] contaréis cincuenta días” Comienza en un sábado; usted contar siete
días de reposo y, a continuación, el 50º día. Siete días de reposo son 49 días –
¿verdad? Siete veces siete son 49, así que si usted tenía siete días de reposo y, a
continuación, el 50º día de otoño qué día? ¡Domingo! ¿Verdad? La fiesta de las
Semanas estaba diseñada para dedicar las primicias de la cosecha de trigo,
generalmente alrededor de mayo y junio. Se llama Pentecostés, porque sucedía 50
días, “pente” es cinco. Cincuenta días después del sábado anterior a la fiesta de las
primicias. Tan simples cálculos indican que Pentecostés siempre, siempre, siempre
cayó en domingo – en domingo.
¡Fue un domingo de Pentecostés! Ahora ¿no es tan sorprendente? Esto es tan
consistente. El Espíritu Santo no estableció la Iglesia en un martes o un jueves o un
sábado – el Espíritu Santo estableció la Iglesia – ¡envió a su Espíritu Santo en un
domingo!
Ahora, ¿está captando el mensaje? Está muy claro – el Señor mismo ordenó un día:
los acontecimientos de la resurrección, los acontecimientos del nacimiento de la
Iglesia; la realización de la salvación, la venida del Espíritu Santo – ¡todo esto en
un domingo! El domingo es el Día de Nuevo Pacto.
Ahora, la otra cosa que es importante decir: no hay normas para el domingo, en
ningún lugar del Nuevo Testamento. No hay advertencias sobre la violación, sólo
Hebreos 10, que dice, “no dejando de congregarse…” – hacer que, cuando la Iglesia
se reúne – estar allí. No hay reglas, no hay reglamentos. No dice nada sobre el
trabajo; no dice nada acerca de jugar, pero no dice nada sobre lo que puede hacer
– lo que no se puede hacer – ¡nada! Porque el Nuevo Pacto es libertad de la
servidumbre; El Nuevo Pacto es la libertad de la Ley – esto no es el día de reposo.
Y los “Sabatistas” que quieren tomar el sábado del Antiguo Testamento traerlo e
imponerlo, de alguna manera, en el Día del Señor, están arrastrando los
rudimentos “débiles y pobres” de un pacto muerto en un pacto de vida.
Es muy claro para mí que el Señor identificó el día de hoy – Es Su día, El lo eligió,
le preocupaba, no algunas observancias externas, sino que se refería a la
naturaleza espiritual de ese día – ese sería un día en el que su pueblo celebra a
Dios como su Salvador.
No es igual en absoluto al día de reposo Mosaico, el cual era restrictivo y se
centraba en la limitación y en las violaciones y en la sentencia y en la ley y en el
castigo. Y era un día en el que usted no celebraba del todo, usted solo se agobiaba
tomando conciencia de que todo lo usted había hecho era romper la ley.
No, el domingo del Nuevo Pacto es mucho más que el séptimo día de Génesis dos,
es un día que Dios lo bendijo, es un día en el que se eleva como un día de honor,
un día de celebración, un día de alegría – no a Dios como Creador, sino a Dios
como Redentor y Salvador. Es el día en el que nos deleitamos en nuestro Salvador,
no con las reglamentaciones externas y no con las reglas y figuras. En Cristo, el
Edén perdido es encontrado; se recupera el Paraíso perdido – el alma se llena de
alegría, de paz, y deleite. Y el reino de Dios no es comer y beber; no algo externo –
es el gozo en el Espíritu Santo, dice Romanos. Es el día para recordar que la justicia
de Cristo le ha sido concedida a usted, es el día para recordar que sus pecados son
perdonados. La Ley del Sábado ya no tiene lugar – dice Gálatas 4, “los débiles y
pobres rudimentos”, las cosas elementales, y que han desaparecido – están
muertas y eliminados.
Por lo tanto, hay una razón por la cual nos reunimos el primer día – una buena
razón. Esto se convierte en el patrón de la iglesia primitiva, vea Hechos 20, un
pasaje muy interesante, un fascinante pasaje. Vamos a Troas con Pablo, la iglesia
gentil se ha establecido. Y vamos a Troas, versículo 7, dice esto, “El primer día de
la semana, reunidos los discípulos para partir el pan” Reunidos junto a la mesa del
Señor, muy probablemente, para tener el culto de la fiesta del amor. “El primer día
de la semana,” ahora ya es el patrón. Quiero decir, no podía ser cualquier otro día,
no hay absolutamente ninguna manera en que podría ser cualquier otro día, porque
el día de hoy es el día de la resurrección, el día de hoy es el día de la segunda
aparición de Cristo, este día es la día en que el Señor estableció la Iglesia y envió al
Espíritu Santo, y dotó a Su pueblo. ¡Este es el día!
Y se reunieron, y “Pablo les enseñaba, habiendo de salir al día siguiente; y alargó el
discurso hasta la medianoche.” Oh, ¡excelente! Así que había un servicio de noche.
“Y había muchas lámparas en el aposento alto donde estaban reunidos”, y se puso
realmente sofocante. Estaba caluroso y humeante y usted puede sentir el ambiente
sofocante. “y un joven llamado Eutico, que estaba sentado en la ventana, rendido
de un sueño profundo”. ¡Es también algo reconfortante saber que incluso al apóstol
Pablo se le dormía la gente! “…por cuanto Pablo disertaba largamente, vencido del
sueño cayó del tercer piso abajo, y fue levantado muerto. Entonces descendió
Pablo y se echó sobre él, y abrazándole, dijo: No os alarméis, pues está vivo.” ¡Él le
resucitó de los muertos! Tal vez podríamos pensar que fue porque no fue que aun
no terminaba la predicación y quería regresar arriba. Bueno, eso es lo que dice el
versículo 11, “Después de haber subido, y partido el pan y comido, habló
largamente hasta el alba; y así salió.” – ¡usted tiene que disfrutar eso! Suena como
Rusia. Versículo 12 “Y llevaron al joven vivo, y fueron grandemente consolados.”
Que historia podía contar el al llegar a casa. Reunidos en un domingo por la noche,
la iglesia en Troas – adorando el domingo.
Mire Primera Corintios 16 – no hay ninguna variación de esto, Pablo escribe a los
Corintios, y dice, “Voy a ir, y quiero algo de dinero para llevar a los santos pobres
en Jerusalén, que están teniendo un montón de luchas y ustedes hermanos, quiero
que consigan algo de dinero para poder llevarlo”. Así que él está hablando de la
colección para los santos, en el versículo uno. En el versículo dos, dice, “Cada
primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya
prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces
ofrendas.” En otras palabras, es decir, “cuando se reúnan el primer día de la
semana, den su dinero, almacénenlo, de modo que cuando yo vaya, no tenga que
tomar una ofrenda especial.” Una vez más, una indicación de que la Iglesia se
reunía el primer día de la semana. Allí es cuando se reunían para su culto, era
cuando se entregaban a un acto de adoración.
Ahora, no es un día el cual es más sagrado que los otros días, quiero decir que
todos los días son santos para el Señor. La vida del Nuevo Pacto es vivir para la
gloria de Cristo, las 24 horas del día, siete días a la semana, todos los días del mes,
todos los días del año, todos a por toda su vida. Nosotros no estamos diciendo que
hay leyes y restricciones, estamos hablando aquí del corazón. Me alegro de que
algunas personas trabajen en el Día del Señor. Odio a enfermarme e ir al hospital y
no encontrar a nadie allí. Algunas personas necesitan hacer eso. Hay algunas
personas que tal vez se ven obligadas a hacer ese tipo de cosas para apoyar a su
familia y por necesidad, pero si no hay necesidad, entonces tenemos que hacer un
verdadero examen de corazón acerca en que invertimos ese día.
Y no es que no pueda trabajar, y no es que no se pueda jugar, y no es que no se
pueda disfrutar de algún compañerismo y ciertas actividades recreativas – es que el
día especial del Señor, y que toda nuestra devoción debe ser levantada delante de
El en ese día.
De hecho, es muy lamentable que tengamos este ridículo nombre de “domingo” y
estoy seguro de que coincidirán conmigo en que ninguno de nosotros adora al sol.
Por lo tanto, prefiero el nombre bíblico – vea Apocalipsis uno, y esto es lo que dice;
Apocalipsis uno, es Juan el Apóstol en la isla de Patmos, donde ha sido exiliado
como preso por el testimonio de Cristo y de la Palabra de Dios. En el versículo 9,
Juan dice, “Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el
reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa
de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.” ¡Wow! Ahora de repente el día
de hoy tiene un nombre – es el día del Señor – Me encanta eso, así como siempre
lo llamo. No me refiero a él como el domingo, a menos que lo haga sin pensar, es
el día del Señor. ¿Qué significa eso? Es un Posesivo, que le pertenece a Él, es único
para El, es Su posesión, no mediante la Ley, sino para celebrar la gracia. Es el día
del Señor. No el culto al sol, sino que yo adoro al Señor. Es el día del Señor.
Por cierto, ese título, aunque está en los escritos cristianos primitivos y ha
continuado a través de todo el mundo hasta el día de hoy – el día del Señor. Puesto
que no adoramos al sol, les sugiero que siempre lo llamen el día del Señor. ¿No es
interesante que era en el día del Señor, que el Señor tuvo que darle una visión
sobre el día del Señor, Él podría haberle dado la visión en un miércoles, pero Él se
la dio a en el día del Señor, ¡y es una visión de la Iglesia! Es descrito como una
visión de la Iglesia en el versículo 20, “las siete estrellas que has visto en mi
diestra, y de los siete candeleros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las
siete iglesias, y los siete candeleros que has visto, son las siete iglesias.” En el
mensaje, la visión dada en el Libro del Apocalipsis, la visión sobre la Iglesia, se da
en el día especial de la Iglesia.
Fue en un día del Señor que Juan recibió su visión por parte del Señor de la Iglesia,
y el Señor de la Iglesia es visto en la visión que se desplazan entre el candelero –
esta en movimiento en su Iglesia. Ninguna de las visiones de Juan, y el Libro de
Apocalipsis está llena de visiones, ninguna de ellas está asociada con cualquier día
de la semana – solo esta.
Entonces, ¿quién creó el día del Señor? El Señor lo hizo. Y, por cierto, no es la
“hora” del Señor – no es ni siquiera la “mañana” del Señor – es Su día. No es el día
del mundo, no es el día de la familia, no es el día de los niños –es el día del Señor.
Supongo que hay una razón de por qué no tenemos un servicio de sábado por la
noche, no es ley, no es necesariamente malo. Usted podría tener un servicio cada
día o cada hora de cada día y estaría bien, pero Dios ordenó definitivamente un día
en que Cristo sería exaltado todo el tiempo. Un día que sería apartado para Él, y Él
no lo llenó con la ley, El sólo lo llenó con gracia. Y Él dijo que la medida de este día
no iba a ser lo que no usted no hace porque se le dice no hacerlo, la medida de
este día es donde está su corazón; la medida de su observancia de este día es el
honor que le da al Salvador en su corazón. Este es Su día, y mientras yo predique
va a ser su día – durante todo el día – por la mañana y en la noche. Me gusta el día
encerrar el día con adoración, el canto y la predicación. Siempre será su día –
mañana y noche, incluso si la gente se muere.
¿Qué es lo que Dios espera de nosotros? Bueno, todo lo que puedo decir es que no
hay reglas. No es legalista. No hay mandatos; la gracia no lo requiere, sin
embargo, menos que una ley – sólo requiere de todo su corazón. ¿Cuánto ama a
Cristo? ¿Cuánto desea adorarlo? ¿Cuánto desea honrarle? ¿Cuan agradecido está
por su salvación? No hay normas externas sobre usted, y cualquiera que arrastre
todo un montón de esa Ley del día de reposo y lo imponga, no entiende la gracia, y
no entiende la línea trazada entre los pactos que está muerto y el Nuevo Pacto.
Todo acerca del Nuevo Pacto es mejor que el Antiguo Pacto, incluyendo nuestros
días. Me gusta mejor nuestro día, ¿a usted no?
¿No sería más bien vivir en el gozo y la celebración del día del Señor que bajo la
presión de la ley mosaica del sábado? No necesito de un día completo de
reglamentos y de cosas que son elementales para las personas inmaduras. Yo no
quiero estar bajo un sistema de condenación. No quiero vivir en una sombra que
apunta a una realidad, he entrado en el reposo; tengo la realidad, tengo al
Salvador, el paraíso ha sido hallado, yo ya no estoy bajo la Ley, no estoy bajo
servidumbre, he sido puesto en libertad, pero eso no requiere menos de mí, me
exige más, y fuera de mi corazón debe ser despertado el amor y la adoración y la
alabanza que llena el día del Señor.
Por lo tanto, pregúntese: “¿Qué es lo que me pide mi amor por Cristo en el día del
Señor?” No es una cuestión de lo que está prohibido – nada está prohibido. Pero lo
más elevado que de su corazón al Señor en su día – se centra en la adoración, se
centra en los deleites, se centra en agradecimiento – busque en su corazón – ¿es
realmente Su día? Eso es lo El le ordena, y que privilegio es celebrarlo como
Salvador.
Padre, te damos gracias por lo que la Palabra nos enseña. Te damos las gracias de
que este día tan especial haya sido dado a Ti, y es un día en que no queremos
abandonar congregarnos, porque nos necesitamos el uno al otro para estimularnos
al amor y a las buenas obras. Te necesitamos adorarte y alabarte. Tenemos que
escuchar las Escrituras expuestas, de manera que nuestra mente pueda
comprender la verdad, y tenemos que pensar en ti, incluso cuando no estamos aquí
en el culto, y para deleitarnos en Ti. Y debe ser un día de alegría y felicidad y
celebración, y de gratitud. Podemos disfrutar de las maravillas de Tu gracia a
nosotros en Cristo, no es un día de esclavitud, no es un día de legalismo, sino un
día en el que realmente medimos la devoción de nuestros corazones. Te damos las
gracias por él, y podamos honrarlo para que Tu seas honrado, en el nombre de
Cristo. Amén.
Trascrito por: Tony Capoccia
Tomado de: www.biblebb.com y www.gospelgems.com
Traducido por: Armando Valdez
• visto aca
¿Sabía usted que Dios ha apartado un día especial para que usted pueda tener un contacto
valioso y duradero con él? Hace cerca de 6000 años, nuestro Creador declaró el
séptimo día de la semana, el sábado, como un día de reposo y comunión con él.
Por supuesto que muchos profesionales de la salud desean alargar nuestra vida y
hacerla más agradable. Pero sin importar lo competentes que éstos sean, no
pueden bregar eficazmente con la amplia gama de ansiedades e incertidumbres
humanas, además de nuestros problemas financieros, laborales y maritales.
Sin embargo nuestras sociedades modernas no han sido diseñadas para establecer,
desarrollar e implementar una relación adecuada con nuestro Creador. En vez de
esto, nuestra sociedad continuamente agranda la brecha entre Dios y nosotros,
alejándonos de la ayuda divina que todos necesitamos para enfrentarnos a la vida
en medio de un mundo que cada vez se vuelve más rápido y complejo.
Siempre nos parece que tenemos mucho que hacer y llegamos hasta el punto en
que no tenemos tiempo para mantener un contacto regular con nuestro Creador. El
mundo ha dejado prácticamente de lado las claves bíblicas que nos permitirían
abrirle la puerta a la presencia y ayuda de Dios en nuestra vida.
Como lo afirma el salmo: “Porque todos nuestros días declinan a causa de tu ira;
acabamos nuestros años como un pensamiento. Los días de nuestra edad son
setenta años; y si en los más robustos son ochenta años, con todo, su fortaleza es
molestia y trabajo, porque pronto pasan, y volamos” (vv. 9-10).
Nuestro Creador quiere que entendamos lo que implica el hecho de que no vamos a
vivir para siempre en la carne. Necesitamos aprender a utilizar nuestro tiempo
adecuadamente: “Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al
corazón sabiduría” (v. 12, énfasis añadido).
Nuestros pensamientos visionarios deben extenderse hasta una época futura más
allá de nuestras vidas físicas. Dios les ofrece el don de la vida eterna a aquellos que
cumplan sus condiciones y sometan sus voluntades a Él. Pero ahora tenemos que
tomar el tiempo necesario para pensar acerca del futuro real que tendremos en la
época que vendrá.
Comienza diciendo: “Habló el Eterno a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel
y diles: Las fiestas solemnes del Eterno, las cuales proclamaréis como santas
convocaciones, serán estas” (vv. 1-2). Dios es quien revela la verdad, y Moisés es
el portavoz que habla directamente con el pueblo de parte de Él. Estas son las
fiestas deDios, y Él es quien tiene los derechos exclusivos de ellas. Ellas le
pertenecen a Dios, no le pertenecen a nadie más”.
La palabra hebrea traducida aquí como “fiestas” es mo’edim, que significa “tiempos
señalados” (v. 4) o “citas”, como diríamos en lenguaje moderno.
La primera que se menciona es el sábado semanal –que debe celebrarse a partir del
atardecer del viernes hasta el atardecer del sábado. “Seis días se trabajará, mas el
séptimo día será de reposo, santa convocación; ningún trabajo haréis; día de
reposo [sábado] es del Eterno en dondequiera que habitéis” (v. 3).
El resto del capítulo está dedicado exclusivamente a los siete festivales anuales que
encierran los siete días santos (sábados anuales). Como lo establece el versículo 4:
“Estas son las Fiestas solemnes del Eterno, las convocaciones santas, a las cuales
convocaréis en sus tiempos”. La explicación detallada de su significado escapa a la
intención de este artículo. Para ayudarlos a entender más acerca de este tema, les
ofrecemos nuestro folleto gratuito: “Las fiestas santas de Dios: promesa para toda
la humanidad”. (Pueden solicitarlo a la dirección más cercana o si lo prefieren,
descargarlo de nuestro portal en Internet).
Ahora nos concentraremos en la cita que usted tiene con Dios, establecida para
cada séptimo día.
El compañerismo espiritual con otros del mismo modo de pensar es uno de los
elementos más estimulantes que pueden existir para la mente humana. ¡Todos lo
necesitamos! Por supuesto, esto solo puede ocurrir por medio de nuestro
compañerismo con Dios el Padre y su hijo Jesucristo (1 Juan 1:3). Las relaciones
exitosas, ya sea con Dios o con el prójimo, requieren tiempo de calidad.
Un día de descanso semanal nos permite utilizar los seis restantes de una manera
mucho más eficiente. Las personas que trabajan los siete días de la semana
generalmente se desmoronan tarde o temprano. Además de requerir un tiempo de
descanso físico y mental, también necesitamos un tiempo para meditar, pensando
acerca de las cosas importantes, aquellas que tienen un significado y propósito
divinos.
El sábado nos da un espacio y un lugar para que las familias, las parejas y los
amigos se mantengan unidos. Este séptimo día nos provee con un tiempo precioso
para la oración y para la lectura y el estudio de la Biblia, el libro que nos enseña
cómo podemos vivir de una forma positiva y edificante, llena de propósitos y
realizaciones. También es un momento para reunirnos con otros para adorar
colectivamente, como lo implica el término “convocación” en Levítico 23:3. Una
convocación es una orden de congregarnos (compare con Hebreos 10:24-25).
http://www.lasbuenasnoticias.org/archivos/2009/bn062009/cita.htm
¿En qué momento el domingo, el primer día de la semana, comenzó a verse como
el día que sustituye al séptimo día, el sábado ordenado en las Escrituras?
El cambio está relacionado parcialmente con la ola de anti-semitismo que inundó el
Imperio Romano como resultado de las guerras de los judíos, en el primer y
segundo siglos. En esa época, muchos entre los primeros cristianos que habían sido
dispersados, erróneamente se empezaron a distanciar de las prácticas bíblicas que
se consideraban comúnmente como judías. Entre estas se contaba el mandamiento
acerca del sábado de Dios.
En el tercer y cuarto siglos, a medida que la Iglesia Católica ganaba el favor del
Imperio Romano bajo el gobierno del emperador Constantino el Grande,
progresivamente incorporaba costumbres adaptadas de la adoración pagana (un
proceso que se llama sincretismo). Entre éstas se contaba la adoración del
domingo, el día dedicado a honrar al dios sol, una deidad adorada por Constantino
y muy popular entre las masas en el Imperio Romano.
Mientras tanto, aquellos que mantenían las enseñanzas originales de Cristo y los
apóstoles fueron perseguidos cada vez más intensamente. Para el año 365 d.C., un
edicto promulgado por los líderes católicos en el Concilio de Laodicea, declaraba:
“Los cristianos no podrán judaizar descansando el sábado, sino que deberán
trabajar en ese día, y en vez de ello honrar el día del Señor [que en este contexto
se refiere al domingo], y si ellos pueden, descansar en él como cristianos. Pero si
se descubre que alguien es judaizante, sea anatema de Cristo [i.e., excomulgado]”
(Nicene and Post-Nicene Fathers [Padres de Nicea y después de Nicea], vol. 19, p.
148, énfasis añadido).
Las Escrituras hacen énfasis en la observancia del sábado, un día que nunca hemos
santificado” (1917, p. 89, énfasis añadido)
• http://www.lasbuenasnoticias.org/archivos/2009/bn062009/sabadodomingo.htm
• Pablo Santomauro
• Pastor Tony Hancock , http://www.pastortony.net