PERFILES

HISTORIA
Miyu Matsuda Cumpleaos: 22 de junio Cncer Tipo de Sangre: B Su hijo ama el rap gngster. Ella est segura de que no es bueno para su educacin.

ILUSTRACIN
Yukariko Jissohji Cumpleaos: 19 de marzo Piscis Tipo de Sangre: A Sin importar lo vieja que se ponga, est decidida a vivir una vida cruda y salvaje (risas).

Captulo 1
n su habitacin, mir el reflejo de su delgada figura en el espejo de cuerpo entero. Su cabello, delgado y caf ceniza estaba acicalado hacia atrs con gel. Los dos botones superiores de su camisa blanca estaban desabrochados. Su corbata amarilla y negra con rayas estaba anudada holgadamente. Una chaqueta pareca demasiado formal, as que se puso un cmodo crdigan en reemplazo. Desliz un cinturn a travs de las presillas de sus pantalones grises. Sus calcetines eran de un delicado negro. Luego de ponerse sus lentes verde oscuro, la imagen de un chico comn de secundaria estaba completa. De frente al espejo, Shiina respir profundo varias veces, lentamente. Todo estara bien. Luca igual que ayer. Para enfrentar a su enemigo, primero tena que lucir fuerte en el exterior. Sus ojos negros brillaban por detrs de sus lentes, los que estaban ah slo por propsitos cosmticos. Sus ojos proyectaban ingenio y dulzura. Shiina ech un largo y duro vistazo a su reflejo. Sin importar lo que hubiera pasado, no se acobardara. No derramara ninguna lgrima. Llevara a cabo esto. Si no poda, el mundo no sera nada ms que oscuridad. Sus delgados labios se apretaron mientras mentalmente se preparaba para el largo y duro da que se avecinaba. Cumplira 18 en un ao. Slo quedaban unos pocos meses para graduarse de la secundaria. Slo un poquito ms.

Cada difcil da y noche que sobreviva significaba que ese momento se acercaba a velocidad constante. Eso era lo que lo animaba a seguir; era su nica esperanza, adems del hecho de que an segua con vida. Abandonando su habitacin, baj las escaleras. Entrando a la sala de estar, vio a su hermano, quien era dos aos menor que l, sentado en la mesa tomando el desayuno en el comedor contiguo. Su padre estaba frente al joven chico, de espaldas a Shiina. Hayato. Tambin cmete las verduras, su madre advirti, parada en el fregadero, mientras se tomaba un descanso de lavar los platos. Al tiempo que Hayato pinch las verduras que quedaban en su bol de ensalada con el tenedor, un ceo se expandi en su rostro espinillento. Qu? llorique. Sabes que no me gustan las cosas verdes. Tienes que comer una dieta balanceada. Verdad, pap? Al escuchar las palabras de su esposa, su padre dobl el peridico que estaba extendido sobre la mesa. S. Si comes bien y trabajas duro, crecers mucho y sers fuerte. Era una escena matutina que uno poda ver en cualquier parte. Slo Shiina no encajaba en ella. Cunto tiempo haba sido as? Cunto tiempo su familia lo haba excluido a l, el hijo mayor? No se parecan en nada. Su hermano menor era estudioso y amaba el bsquetbol; tena un bronceado durante todo el ao. Toda la atencin y amor de sus padres estaba dirigida hacia Hayato. No es que Shiina haya hecho algo para hacer que lo odiaran.

Estaba acostumbrado a que ellos lo descuidaran; que su presencia fuese ignorada se haba vuelto algo normal para l. Shiina estaba atrapado en esta caja de casa y no era nada ms que un compaero de cuarto para ellos. Eran una familia, pero aun as no lo eran. La sangre de sus padres corra por l, pero incluso era ms desconocido para ellos que un extrao. Para bien o para mal, tena un rostro que haba heredado la buena apariencia de su padre y de su madre; algo que lo haba hecho vanidoso, incluso cuando todos a su alrededor lo molestaban por ello. La autocompasin era imperdonable. As que nunca le confes a nadie lo mal que su familia lo haba tratado. Mientras pona algo de caf, Shiina se comenz a marear al ver la imagen de familia perfecta. Por supuesto, su madre nunca le preparaba comidas; se lo dejaba todo a Shiina. Se lo haba expresado claramente muchas veces antes, pero ella nunca haba reaccionado. Lo nico que Shiina poda hacer en estas circunstancias era slo tratar de acostumbrarse a este ambiente anormal lo ms pronto posible. Haba una gigante brecha entre l su familia. Slo aceptando ese hecho se podra proteger. Shiina incluso sacaba la basura. Escuch una vez decir a su madre que los vecinos la haban felicitado por ello. Se haba esforzado en escuchar lo que les haba contestado, Nuestra casa tiene una poltica laissez-faire(1), as que los hemos educado para que sean responsables de s mismos . Al escuchar esto, todo su cuerpo se haba petrificado de la rabia y su puo cerrado haba comenzado a agitarse. Desde
( ) La frase laissez faire, laissez passer es una expresin francesa que significa dejad hacer, dejad pasar, refirindose a una completa libertad en la economa: libre mercado, libre manufactura, bajos o nulos impuestos, libre mercado laboral, y mnima intervencin de los gobiernos. Fue usada por primera vez por Jean-Claude Mari Vicent de Gournay, fisicrata del siglo XVIII, contra el intervencionismo del gobierno en la economa. De forma completa, la frase es: Laissez faire et laissez passer, le monde va de lui mme; Dejad hacer, dejad pasar, el mundo va solo.
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entonces, comenz a detestar a su madre de piel gruesa(2) desde el fondo de su corazn. El nombre de pila de Shiina era Jun, escrito con caracteres que significan volver. Sus padres lo haban llamado as con la esperanza de que la felicidad volviera a l una y otra vez. Sin embargo, no lo haban llamado por ese nombre durante mucho, mucho tiempo.

Oyeeee, Shiina-kun. Nnmmm? Incluso cuando la fina voz de la chica interrumpi su siesta, la conciencia de Shiina fue inducida cada vez ms a un profundo sueo. Sabes que ahora tenemos Matemticas! Si Sasagawa te pilla durmiendo, definitivamente te va a hacer pasar adelante en clases, as que es mejor que despiertes pronto! Finalmente conmovido por el gentil tono de su voz, Shiina record que estaba sentado en la sala de clases. El ruido a su alrededor comenz a aclararse, arrastrando su adormecida mente de vuelta a la realidad. Ahoh, gracias . Haba puesto su cabeza sobre sus brazos cruzados, sobre su pupitre y, en algn punto, sus lentes debieron haberse torcido. Empujndolos con sus dedos hacia arriba, agradeci a la chica.

( ) Con esta frase quiere decir que su madre era de corazn duro con l y que con una piel gruesa (como lo indica la escritora) es difcil de penetrar. (N del C)

Estaba sentada en el asiento de al lado del de Shiina y aparentemente haba estado mirndolo fijamente. Cuando sus ojos se encontraron, ella sonri, nerviosa. Uhoh, de nada . Se sonroj ligeramente, sacudiendo su cabeza. Su sonrisa femenina y tmida era linda. Shiina se ri entre dientes, con una suave expresin en su rostro. Quiz estaba estimulada por eso, porque incluso cuando no haban realmente hablado, a menos que fuese absolutamente necesario, comenz a hablar con una voz eufrica. Sasagawa es muy injusto, verdad? Te reclamar incluso si te quedas dormido slo un momento. l ya me ha despertado antes. Adems, su abrigo blanco es tan sucio, incluso de cerca! Creo que slo lo usa para poder sacudir el polvo de la tiza sobre l. De verdad? respondi, fingiendo inters. Le lanz una sonrisa vaga. Incluso cuando no tena razn para ello, sac su celular del bolsillo de su pantaln y fingi revisar algo, para evitarla. Si se encerraba en su propio mundo, nadie podra seguirlo. Shiina alejaba a las personas a propsito, probablemente para parecer insensible. Ai estaba acostumbrada a la fra actitud de Shiina. No slo no se enoj con l por cortar la conversacin, sino que se torci para estar de frente a la chica en el asiento detrs de ella y balbuce con emocin, Viste eso? Se ri! Se ve muuuy atractivo de cerca! No es justo, Ai! T te sientas cerca de l! una voz de desaprobacin vino desde el asiento detrs de Ai. Despus de eso, el chico sentado directamente detrs de Shiina lanz un suspiro irritante. Los chicos en la clase

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siempre se enojaban cuando las chicas se emocionaban as por l. Siempre haba sido as. En la escuela primaria, escuela de ciclo medio y escuela secundaria, las chicas siempre estaban locas por l, y siempre lo llamaban aparte y las chicas le confesaban sus sentimientos. Sin importar quin era, siempre las haba rechazado y se haba echado a correr un rumor a lo largo de la escuela de que l no saldra con nadie, pero incluso as, cada chica pensaba que era diferente y estaba decidida a asumir el desafo. Se volvi tan molesta la situacin, que dej de ir a los lugares donde las chicas lo citaban para reunirse. Hasta que al final, las solicitudes fueron menos frecuentes. Era slo que no estaba interesado en las chicas de su edad, pero aun as, no estaba tratando de ser frio a propsito. Haba rumores crueles sobre l, y las miradas celosas nunca desaparecieron. Shiina estaba solo en todas partes: en la escuela y en su casa. Oh, as que eres muuuy atractivo de cerca, no? Con ese tono peyorativo, Shiina levant la mirada. Un hombre estaba parado al lado del podio, vistiendo un abrigo blanco que pareca como si nunca lo hubiese lavado. Era el profesor de Matemticas, Sasagawa. El asiento de Shiina era el segundo de adelante, as que pareca como si Sasagawa hubiese escuchado la conversacin mientras entraba en la sala. La mirada fija y aguda del profesor no se enfoc en Ai, sino en Shiina. Estoy celoso. Ojal alguien dijera eso de m , dijo. Quiz debido a su enojo porque todos estaban haciendo ruido despus de que son la campana, la voz de

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Sasagawa son extraamente infantil, y si alguien imaginaba que estaba hablando en serio, sonaba verdaderamente ridcula. Por qu eres el nico que sonre? demand. Lo siento . Shiina dej deslizar una sonrisa.

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Sasagawa le lanz una mirada furiosa de reojo. Shiina sigui sonriendo abiertamente, escondiendo su boca con su mano. Con slo nueve aos ms que l, Sasagawa vesta unas sandalias caf que haban pasado de moda hace aos. Dio grandes zancadas y lleg al podio, luego abri el libro de asistencia. Comenz a nombrar rpidamente a los estudiantes, en un tono de voz bajo y molesto. Shiina descansaba una mejilla en su mano y miraba fijamente al profesor con el rabillo del ojo. Sasagawa meda cerca de 1, 80 metros, y tena una complexin slida. Puede que l sea el que se ve ms atractivo de cerca, no yo, pens Shiina. Justo como Ai haba dicho, Sasagawa usaba un abrigo blanco que estaba muy sucio todo el ao. No tena una muy buena reputacin entre los estudiantes. Sin embargo, no era feo. Tena doble prpado, y su pelo negro mojado y reluciente estaba acicalado hacia atrs, lo que complementaba sus rasgos duros y bien formados. El puente de su nariz era poco notorio. La comisura de sus labios apareca dndole una mirada arrogante. Si se cuidara ms, de seguro las estudiantes femeninas se agruparan frente a l. Shiina se dio cuenta de que estaba lanzando una mirada de lstima a Sasagawa, la que no era bienvenida. Sonri a s mismo con arrepentimiento. Saba muy bien cmo l no apreciaba a las chicas y ni siquiera le gustaba que coquetearan con l. Sasagawa probablemente era igual, y no pensaba en las chicas de secundaria de una forma sexual. Tal y como Shiina.

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Al darse cuenta de esto, Shiina baj la vista tristemente. Incluso si poda decir lo mismo acerca de ambos, sus razones seran completamente diferentes. Estir sus brazos y dej salir un largo suspiro. Volteando, se dio cuenta de que la mirada fija y ferviente de Ai estaba una vez ms enfocada en l. Si daba cualquier seal de que reconoca su mirada, toda la clase se dara cuenta. Estaba harto de la insistencia de sus acosadoras, pero podran pensar que era engredo, as que vacil. Se pregunt cmo se vea en los fros ojos de Sasagawa. Mientras copiaba la frmula del pizarrn, la duda comenz a crecer dentro de l. Haba pensado que l y Sasagawa tenan la misma mente, pero se dio cuenta de que probablemente el profesor era completamente indiferente a l. Para Sasagawa, l era un estudiante tranquilo, el cual era difcil de tratar. Eso era lo que probablemente pensaba el profesor de Shiina. Slo el hecho de levantar la mirada lo haca parecer como si se sintiera culpable de algo. Pero an tena que mirar hacia adelante. Lanz un suspiro. De todas formas, qu haba estado esperando? Cuando tienes expectativas, te traicionan. Un sentimiento familiar de decepcin comenz a subir a la superficie de su mente. Nunca quera experimentar ese dolor nuevamente. Si confiabas en ti mismo, no necesitabas a nadie ms. Nunca te lastimaran. Y si tomabas la decisin equivocada, al nico que podras culpar es a ti. Por lo tanto, nunca abrira su corazn a nadie. Grab esas palabras muy dentro de l, y una vez ms asumi su expresin fra. Su mirada se encontr con la de Sasagawa, pero no estaba seguro de cunto tiempo su

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profesor lo haba estado mirando. Sinti una distancia insuperable entre l y esa mirada penetrante. Finalmente, con una expresin nerviosa en su rostro, Shiina desvi sus ojos.

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Captulo 2
n la estacin de trenes caa una llovizna. Era cerca de las 4 de la tarde. Shiina se sent en una banca, mirando distradamente a la gente ir y venir. Excluy los ruidos del mundo exterior alrededor de l con la fuerte msica proveniente de sus audfonos. Cuando haca esto, pareca como si todo en el mundo alrededor de l fuese falso. La msica que viajaba por sus odos serva como msica de fondo mientras contemplaba a los peatones en frente de l. Lo que estaba viendo estaba realmente pasando, sin embargo, algo de ello pareca extraamente irreal. Haba mucha gente que viva en esa existencia irreal. Pero en su lado del mundo real, Shiina estaba solo. Se pregunt si esa era la razn, incluso cuando pensaba que estaba acostumbrado a estar solo, de por qu a veces an deseaba mucho la calidez de otros. Un auto volte en el crculo de trfico y su bocina lanz un corto bip bip! Levantando la mirada, vio un Mercedes Benz detenindose en la estacin. La luz de los focos delanteros lo ceg al tiempo que gir hacia l, iluminando las gotas de lluvia. Jun-kun! Bajando hasta la mitad el vidrio del conductor, una hermosa mujer le hizo una seal, pidindole que entrara al auto. Sus manos agarraban el volante, y pudo ver que sus uas estaban pintadas con un elegante color rosado que

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combinaba con su traje. En uno de sus delgados dedos llevaba un anillo de diamantes que se vea pesado, mientras un reloj Frank Muller brillaba en su delgado brazo. Se vea muy femenina, desde el perfume que usaba hasta la forma en que se maquillaba. Lo siento. Esperaste mucho rato? La mujer volte para encontrarse con Shiina, quien fue a sentarse en el asiento del copiloto, hablando suavemente como para ver con qu nimos andaba. Los asientos eran ms suaves que los de un auto domstico, y se hundi ms en ellos, disfrutando del lujo. Shiina sonri. No, no en verdad , respondi. Desde que era pequeo, lo molestaban por ser un nio bonito, pero cuando de verdad sonrea, era un bombn. Como lo esperaba, la mujer contuvo su respiracin y lo contempl con una mirada hipnotizada en su rostro. Los autos detrs de ellos se haban aglomerado. Shiina estimul con una voz deliberadamente suave, Kanako-san, vmonos. Oh, tienes razn. Lo siento. Rpidamente, Kanako gir el volante y ech marcha atrs hacia la va de trnsito . Justo cuando me iba, recib una llamada de mi marido. Me dio pnico y me pregunt qu hara si deca que ya se iba a casa , dijo con una voz resentida, mientras miraba por fuera del parabrisas. Shiina apoy su codo en la ventana del lado del pasajero y, sin mirarla, pregunt, Entonces, qu pas? Oh, slo llam para decirme que no llegara a casa hasta la medianoche, otra vez. Supongo que ha estado muy ocupado ltimamente. Siempre es as.

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 Qu hay de tus hijas? Estn bien solas? Est bien, ambas estn en una escuela preparatoria. La mayor est a punto de dar su examen para entrar a la secundaria, y mi esposo insiste en que vaya a una escuela privada, as que est estudiando como loca todos los das. Ni siquiera puedo soportar ver eso ms . Kanako lo mir de reojo, con una mirada en sus ojos que rogaba compasin. Se pregunt cmo poda quejarse de las acciones de su esposo cuando ella misma lo estaba traicionando de la peor manera al tener una aventura. Shiina la mir despectivamente, pero ella no pareci notarlo. Qu mujer tan sinvergenza. Quiz esa es la razn de por qu era tan perfecta para l. Sonri ligeramente y volvi a mirar hacia afuera de la ventana. Atrapado por una luz roja, el auto se detuvo en una interseccin. Desde ambos lados, los autos que pasaban hacan fuertes ruidos salpicadores cuando sus llantas hacan contacto con el agua de lluvia que cubra el suelo. Esperaron a que cambiara la luz. Shiina estaba en trance por el sonido de la lluvia, pero Kanako rompi el silencio al partir sus labios rojos y brillantes diciendo, Oye, Jun-kun. S que ests ocupado con la escuela y tu trabajo, pero crees que podras hacer un poco ms de tiempo para m? Hmmm lo pensar. De hecho, haba sido despedido de su trabajo de medio tiempo y an no haba encontrado otro, pero era mucho dolor decirle eso. Mir su perfil, y pudo deducir que ella entenda perfectamente que l no tena intencin de hacerlo. No obstante, continuaba desesperada. Incluso si trabajaras todos los das, es slo por unas pocas horas, no es

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as? Si no ests ganando mucho dinero, puedo pagarte lo que quieras. Qu?! De ninguna manera. Si haces eso, ser como si fueras mi mamita rica o algo as . Shiina ri como un nio chico, mostrando sus dientes. Aparentemente aliviado de que su mirada fija haya regresado a ella, Kanako dijo con una voz coqueta, Por qu? No es eso lo que ya soy? Su delgada mano avanz lentamente por el resto de la parte superior del muslo de Shiina. Con sus uas rosadas brillantes, puso su mano dentro de sus jeans. No estamos siendo un poco obscenos, Kanako-san? Le lanz una mirada de reojo, con una sonrisa traviesa tirando de la comisura de sus labios. Pero lo he querido por tanto tiempo. Slo djame tocarlo hasta que lleguemos al hotel . Contrario a su dulce tono de voz, movi sus manos de una forma obscena e insistente. Hasta que lleguemos al hotel? Como si pararas una vez que lleguemos dijo Shiina, con una expresin bromista en su rostro. Kanako solt una risita coqueta.

Tres horas despus, Shiina estaba de pie solo, mirando cmo parta el Mercedes, que se diriga al centro del pueblo. Percibi a Kanako mirando repetidamente por su espejo retrovisor, probablemente revisando si an l estaba ah. No pudo relajarse hasta que el auto de Kanako desapareci de su vista. No era porque estaba preocupado por ella, sino porque el que lo vieran as lo haca sentir incmodo.

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Junto con los otros autos que iban y venan, su vista del Mercedes pronto fue obstruida por un edificio. Hizo un gesto arisco y se sac el lpiz labial rojo brillante con la parte posterior de su mano. Demonios, esa mujer es persistente en todos los sentidos, pens amargamente, luego volte. Incluso despus de tomar una ducha, la sensacin de sus brazos y piernas enroscndose alrededor de l como una serpiente simplemente no se iba. No saba si era porque su esposo no le prestaba atencin, o si era slo por lujuria, pero Kanako lo utilizaba para liberar su estrs cuando quera. Pero para Shiina, era ms una molestia que cualquier otra cosa. Se dirigi hacia la estacin de trenes y revis los horarios de salida con una mirada an desagradable en su rostro. Haba estudiantes de secundaria sentados en las bancas en frente de las pequeas tiendas y quioscos, algunos de ellos vestan uniforme escolar, otros no. Algunos llevaban bolsos deportivos; probablemente iban a sus casas despus de asistir a sus actividades del club. Pareca que algunos de ellos eran pareja. Ciertamente, tambin haba hombres de negocios que lucan cansados y tambin gente mayor, pero su presencia era abrumada por los ruidosos jvenes que los rodeaban. Esta no era una lnea de trenes principal, pero estaba cerca de algunas escuelas especialmente prestigiosas, as que era utilizada principalmente por estudiantes que se sumergan en sus estudios y no eran especialmente de apariencia fuerte. La estacin era infame por estos tipos de estudiantes obligados a renunciar a su dinero por las hienas que emergan despus de la escuela. Las hienas eran principalmente estudiantes delincuentes de escuelas secundarias tcnicas cercanas, escuelas idiotas, o las

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conocidas escuelas secundarias privadas. Si esos chicos no tuvieran a los estudiantes intelectuales para robarles, probablemente robaran a cualquiera, as que los adultos por lo general ignoraban su comportamiento. Shiina revis los horarios del tren mientras observaba por el rabillo del ojo a un chico que claramente era una hiena. Qu debera hacer ahora? dijo entre dientes para s, apoyando su espalda adolorida con una mano. Gracias a Kanako-san, su billetera, que estaba en su bolsillo trasero, era mucho ms gruesa. Pas media hora hasta que lleg el prximo tren. Su casa estaba a slo dos estaciones. Podra ser ms rpido caminar a casa, pens. Adems, las bancas estn llenas de hienas. Era difcil pedir ayuda, porque las hienas casi siempre buscaban gente que estuviera sola. La probabilidad de que pudiera ser su vctima hoy se ve bastante alta Despus de un poquito de preocupacin, Shiina se dej caer en una banca dentro de una sala de espera con la mayor cantidad de gente que pudo encontrar. Confiaba en su fuerza fsica, pero ya que recin lo haba hecho dos veces con Kanako-san, probablemente no durara mucho en una pelea. Todo lo que quera era descansar un poco. Lanz un agobiante suspiro. Su mirada se fij en un hombre de aspecto arrogante que estaba en cuclillas y con su espalda apoyada en la pared. Su gorra de beisbol estaba inclinada por sobre uno de sus ojos y vesta una camiseta negra de manga corta sobre otra de manga larga. La hebilla de su cinturn brillaba desde la cadera de sus pantalones de camuflaje, y vesta unas botas Timberland. Haba un aura de peligro que pareca deslizarse por su mirada fruncida. Las

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chicas que esperaban el tren tambin estaban al tanto de la presencia del chico. De repente, sus ojos se encontraron con los de Shiina. Su corazn comenz a latir ms rpido de lo normal. En silencio rog para que el hombre mirara hacia otro lugar, pero el chico no mostraba signos de apartar su mirada. Sigui clavado en Shiina, como si estuviera perforndole un hoyo. Como si estuviera jugando con l. A estas alturas, Shiina casi se sinti molesto de tener que ser l el que desviara sus ojos, as que tambin lo mir fija e intensamente. Incluso cuando eran completamente extraos, se sinti curiosamente cercano al hombre. En ese momento, sinti por detrs una palmada amistosa en su hombro. Hola, amigo Shiina volte en direccin a la voz. Un chico teido de rubio que estaba parado al lado de su hombro derecho, rindose burlonamente. Una hiena. Shiina arque sus cejas en un gesto de molestia. Un chico de pelo negro rpidamente se par en frente de l. Unos pocos chicos ms se sentaron en la banca ubicada a su izquierda, as que ahora Shiina no tena por dnde escapar. Puedes prestarnos algo de dinero? El Pachinko Parlor(3) de all nos dej sin nada. No tenemos suficiente para subir a los trenes. Nuestras casas estn demasiado lejos, as
( ) El pachinko es un sistema de juegos muy similar al de los flippers. Estas combinan un moderno sistema de video con el clsico pinball. Estos Pachinko estn distribuidos por Japn en unas pachinkoparlors y son un sistema de juegos de casino totalmente legales.
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que estamos jodidos dijo el chico rubio, mostrando sus torcidos dientes. Acerc su rostro al de Shiina. Al parecer, esta era una estrategia para tratar de hacerle sentir ms miedo. Hmm por qu no le preguntan al polica que est en la cabina afuera de la estacin? Probablemente les preste dijo Shiina descuidadamente, manteniendo su mirada en el chico. Desde luego, slo accederan a esa peticin si de verdad se haban quedado sin dinero. Shiina se asegur de que su sarcasmo les llegara. Las expresiones de los dos chicos cambiaron en respuesta a la mirada desafiante de Shiina. Sus labios se apretaron y una mirada drstica brill en sus ojos. Intercambiaron miradas y uno de ellos dijo con una mirada siniestra en su rostro, La verdad es que no nos llevamos muy bien con los policas. Qu tal si vienes con nosotros y le preguntas? Shiina los recorri con la mirada. Como si de verdad fueran a la polica. Probablemente slo me llevarn a algn lugar desierto y me robarn mi billetera. Despreocupadamente, evalu el tamao de los dos chicos. Al menos eran cinco centmetros ms altos que sus 1,70 metros. Pero bajo su ropa holgada, probablemente no tenan muchos msculos. No saba si era por los efectos de fumar mucho o de consumir mucha droga, pero sus rostros lucan enfermizos y plidos. No puedo pensar en ninguna razn de por qu no puedo soportarlos. Podra derrotar a estos chicos. Se decidi y los mir intensamente, parndose lentamente de la banca. El chico rubio sonri burlonamente y dijo, Gracias, amigo.

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Agarraron a Shiina con ambos brazos y comenzaron a llevarlo fuera de la estacin. La gente de alrededor lo miraba de reojo con compasin, pero ninguno de ellos hizo algn movimiento para ayudarlo. La mayora slo lo miraba rpidamente, asegurndose de no hacer contacto visual. Para hacerlos sentir incluso ms culpables, Shiina miraba hacia abajo dcilmente, haciendo el papel de vctima a la perfeccin. Al salir de la estacin de trenes, los chicos no caminaron en direccin a la cabina del polica, sino en direccin al estacionamiento de bicicletas. Justo como Shiina lo haba pensado, iban a tratar de amenazarlo con violencia para obtener su dinero. Oigan, la cabina del polica no est hacia el otro lado, chicos? pregunt, incluso cuando saba cules eran sus intenciones. Su voz se agit mientras intentaba esconder su risa y los chicos claramente tomaron eso como una seal de temor. Uno de ellos habl y dijo con voz amable Es muy complicado ir para all. Si nos puedes dar algo de dinero, estaremos bien. Somos chicos buenos, as que si nos pasas el dinero amablemente, no te patearemos el trasero. Est bien? El chico de pelo negro afirm entusisticamente con su cabeza la sugerencia del chico rubio. As que el rubio es el lder y el de pelo negro es su subalterno, no? Sin importar cuntas veces sumes debilidad ms debilidad, nunca dar como resultado fortaleza Shiina los haba evaluado correctamente, pero segua la corriente para que no se dieran cuenta.

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 Vamos, entrganos tu billetera demand arrogantemente el de pelo negro, incluso cuando no se atreva a hacer nada. Estir su mano, una mano que probablemente nunca haba conocido la adversidad, pero que haba sido malcriada. Shiina inhal silenciosamente, plant sus pies en el suelo y apret sus puos. Oigan, aprtense! una voz arrogante llam de repente. He escuchado esa voz antes en algn lugar Shiina volte para ver quin haba intervenido. En frente de l estaba parado el chico fuerte y de mirada salvaje que haba visto en la sala de espera. Una chica, que vesta uniforme de escuela y pareca estar en la escuela intermedia, estaba detrs del chico. Tena una expresin nerviosa en su rostro. Molesto por esta interrupcin, el chico rubio chasque su lengua. Estamos ocupados. Pirdanse. El hombre lo mir duramente. Dije, ustedes cabrones estn en mi camino! Trato de sacar una bicicleta. Si van a asaltar a alguien, hganlo en otra parte , dijo en una voz calmada, pero aun as amenazante. Avanz un paso y empuj el hombro del chico. El chico rubio tambale y cay. Estir sus manos hacia arriba exageradamente, y sus enredadas piernas finalmente lograron pararse nuevamente. Casi se haba cado dentro de la lnea de bicicletas y fue tan torpe que Shiina no pudo evitar rer. Volte y se cubri la boca con sus manos, pero era demasiado tarde. El chico rubio lo haba visto. Volte en crculo, mirndolo, slo para ver que su amigo tambin se

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morda sus labios para sostener la risa. La vergenza que tuvo que soportar por esto era demasiada para el aspirante a punk, por lo que se puso rojo. T, cabrn! Quieres pelear? chill con reproche, y agarr el cuello de la camisa del hombre. No, no quiero pelear. Sera demasiado fcil , dijo el hombre con una expresin cruel en su rostro. Qu dijiste, hijo de puta? En el momento en que el chico acerc su rostro, el hombre le dio un cabezazo y un corto quejido escap de la boca del chico. Levant su cabeza, dejando su cuerpo completamente abierto. El hombre lo pate violentamente en el estmago. El chico cay de rodillas y las bicicletas a cada uno de sus lados cayeron como un domin, emitiendo una secuencia de choques fortsimos. La mano del chico busc a tientas algo que lo ayudara a pararse, pero el hombre lo pisote con una expresin indiferente en su rostro. Las bicicletas estaban amontonadas en una pila detrs de l y una de las manos del chico estaba atrapada entre uno de los rayos de una rueda. Incluso era doloroso mirarlo. Shiina desvi su rostro al tiempo que escuchaba a la chica lanzar un grito agudo; al parecer haba visto lo mismo. Una chica joven como sta no debera estar viendo algo as. Justo cuando Shiina pens esto se dio cuenta de que el hombre, que era mucho mayor que l, an golpeaba al nio. El sonido de l golpeando al chico se mezclaba con sollozos apagados.

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Desconcertado, el chico de pelo negro corri a toda velocidad hacia la calle principal. Le haba chupado mucho las medias a su amigo, pero cuando importaba, era un intil. Esta es la razn de por qu no confo en la gente, pens Shiina mientras observaba framente como el chico hua. Lamento que se hayan cado. Cul es la tuya? el hombre pregunt a la chica. Viendo su oportunidad, el chico rubio trat de tambalearse. Al intuir esto, el hombre comenz a abrir su boca en forma amenazante. Shiina rpidamente agarr su brazo. Djalo ir. Brevemente hicieron contacto visual, pero luego l desvi su mirada. Estoy seguro de que conozco a este tipo Incluso cuando estaba seguro de eso, el no poder pensar en quin era el hombre lo pona enfermo. Pens en todos los que conoca que tenan los mismos rasgos que l. Finalmente, todo se resumi y Shiina abri completamente sus ojos con sorpresa. El hombre se qued mirndolo fijo, elev las comisuras de sus labios y sonri. Su expresin pareca decir Entonces, finalmente te diste cuenta?. Cul es tu bicicleta? le repiti a la chica, quien pareca estar congelada. Umm ehhh... la que est en frente tuyo, esa bicicleta roja. Esa es la ma. El hombre sac la bicicleta de la pila y se la entreg, y la chica le agradeci con ahnco una y otra vez. Shiina y los chicos haban estado bloqueando el estacionamiento de bicicletas, as que probablemente ella le haba pedido ayuda. Y, desafortunadamente, ese hombre

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haba resultado ser peor persona que los delincuentes que ella haba estado tratando de evitar. Se vea tan penosa. Sus ojos estaban llenos de miedo y no encontraron la mirada del hombre. Pareca como si no pudiese decirle que quera ir a casa. Hacindose el listo, Shiina le dijo en una voz confortante, Lo siento, no pudiste sacar tu bicicleta porque yo estaba en medio, no? Ya que tuviste que esperar, probablemente llegars un poco tarde. Ten cuidado camino a casa, de acuerdo? En respuesta a su sonrisa amable y alentadora, la chica tmidamente mir a Shiina y asinti. Luego, se subi a su bicicleta y comenz a pedalear. Shiina la vio irse y al lado de l, el hombre se agach y se sent sobre el cemento. Sospechoso de lo que podra hacer ahora, Shiina mir hacia abajo. El hombre sac una caja de cigarrillos del bolsillo delantero de su camisa. Te ves mejor sin lentes, Shiina , dijo en voz baja, sosteniendo un cigarrillo en su boca y luego prendindolo. Shiina claramente vio que sus nudillos eran planos. Sensei. Qu est haciendo aqu? Shiina demand con un tono de voz brusco. Sasagawa volvi su mirada atrs hacia l con una expresin de aburrimiento. Oh. Trato de prevenir el crimen. Todos los profesores estn haciendo turnos en la estacin. No quera hacerlo, pero si no me presentaba, la gente de la estacin se lo dira al director, as que tuve que venir. Su rostro estaba escondido bajo la sombra del ala de su sombrero, as que Shiina no pudo ver su expresin. Sensei, qu le pas a su mano? Indiscrecin juvenil. Qu ridculo, no?

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Sasagawa no dijo nada ms, as que Shiina decidi no seguir presionndolo. Shiina se haba involucrado en muchas peleas con chicos que haban estado celosos de l, pero nunca haba tenido que defenderse a s mismo hasta tal punto. Haba querido tomar clases de karate o algn otro tipo de arte marcial, pero su familia no quera escuchar acerca de sus logros o aspiraciones, as que no tuvo ms opcin que pedirle a un grupo de vecinos delincuentes, quienes haban sido sus amigos en la infancia. Quiz era porque tenan dos aos ms que l, pero estaban ms que dispuestos a ensearle todo tipo de tcnicas. Uno de aquellos delincuentes tena los nudillos planos como Sasagawa. Saba que slo obtenan eso por muchas peleas a puetazos, o por romper tablas en las artes marciales. En otras palabras, Sasagawa una vez haba sido como aquellos chicos. Parado con sus brazos cruzados, Shiina mir hacia abajo. Sasagawa pareca tener un aire spero sobre l. As que por eso pudo desafiar a las hienas tan calmadamente. Para l, vencer a ese nio fue como quitarle el dulce a un beb. Sintiendo los ojos sobre l, Sasagawa encontr la mirada de Shiina. Su similitud pareca crecer mientras pasaban tiempo juntos sin otros estudiantes alrededor. En la sala de clases, su mirada siempre pareca fra, pero ahora era de alguna forma agradable. Se ve completamente diferente a como es en la escuela, as que me sorprend , coment Shiina. Con esto, una expresin resentida se extendi por el rostro de Sasagawa.

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Incluso cuando Shiina era muy orgulloso, tambin era un poco cobarde por el hecho de que actuaba framente para que otros no se acercaran a l. Haca eso para evitar salir herido. Pero Sasagawa era diferente al tmido Shiina y era probablemente fuerte por dentro y por fuera. La fiereza y el peligro parecan emanar de Sasagawa, creando un aura negativo definido en l. Probablemente vesta ese sucio abrigo para mantener a los estudiantes a una distancia para borrar eso, y para ocultar su verdadera personalidad. Shiina comenz a desarrollar un fuerte inters en su misterioso profesor. Quiz Sasagawa era incluso ms como l. Un sentimiento de esperanza comenz lentamente a brotar dentro de l. Sacudiendo su mirada fija, Sasagawa se levant. Tir su cigarro al asfalto y lo aplast con el taco de su bota. Shiina lo observaba silenciosamente, incapaz de quitarle los ojos de encima. No se dio cuenta de que Sasagawa lo estaba mirando hasta que sus ojos volvieron a encontrarse. Algunas veces hacan contacto visual en clases, pero esta noche pareca como si fueran muy cercanos, no poda soportarlo. Sasagawa empuj su larga mano hacia adelante, con una mirada fra en su rostro. Sin entender, Shiina la mir fijamente. Sasagawa hizo un gesto cautivante con la punta de sus dedos, como diciendo Aprate!. Pareca que quera algo. Shiina lade su cabeza. Qu? pregunt. An no me has agradecido por cuidarte de esos chicos , dijo Sasagawa con una cara seria. Shiina estaba sin palabras. Ciertamente Sasagawa lo haba ayudado, pero confiaba en que an habra estado bien si Sasagawa no hubiese intervenido. Pero incluso si lo

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deca, a estas alturas, slo sonara como si estuviese inventando excusas. No tengo dinero. Ests loco? Shiina escupi, frunciendo el entrecejo. Ciertamente, no tena la intencin de darle ningn tipo de recompensa. Sin embargo, Sasagawa gilmente arranc la billetera del bolsillo posterior de Shiina y sac un billete de 10.000 yens. En verdad eres profesor? pregunt Shiina dudosamente mientras recuperaba su billetera. Qu hay de ti? De verdad ests en la escuela secundaria? Qu estudiante de secundaria lleva tanto dinero? Sasagawa frunci las cejas, sonriendo con un ojo cerrado. La billetera de Shiina estaba llena con el dinero que Kanako le haba dado por tener sexo. Sin decir una palabra, Sasagawa se haba dado cuenta de que era dinero sucio y Shiina percibi que haba una posibilidad de que le preguntara de dnde lo obtuvo. Sin embargo, Sasagawa en silencio dobl el dinero y lo coloc en su bolsillo delantero. Shiina pudo deducir que era serio en un 100%; no haba una pizca de broma en sus acciones. Mientras observaba con una mirada atnita en su rostro, Sasagawa de repente cambi el tema. Ah, s. Te irs en el prximo tren? Eh s , respondi Shiina tranquilamente y mir detrs de l. No vio a ningn pasajero alineado en la plataforma. Pareca que an haba ms tiempo. Mir nuevamente hacia adelante. Esta vez, los ojos de Sasagawa estaban entrecerrados, y sigui la mirada del hombre. Hacia dnde? incit Sasagawa.

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 Hacia el sur , respondi Shiina. Sasagawa dirigi su mirada desde la plataforma hacia Shiina. Quiz era porque no pestaeaba mucho, pero los ojos de Sasagawa tenan el poder de silenciar a la gente. Cuando lo miraba as, Shiina senta como si fuera algn tipo de juego de cacera. Comenz a sentirse atrapado y la atmsfera se volvi sofocante. Tratando de aguantar la extraa atmsfera, Shiina mir hacia abajo. An poda sentir los ojos penetrantes de Sasagawa sobre l. Shiina. Me acompaaras hasta que llegue el tren? En esta sugerencia de hacer tiempo, incluso cuando la voz de Sasagawa era baja, haba algo que tambin era corts. Shiina elev su mentn y mir hacia arriba a partir de los flequillos de su cabello caf. No es eso lo que estoy haciendo? No, me refiero a que de verdad me acompaes. Shiina no tena idea de lo que Sasagawa quiso decir con esto, o de sus intenciones. Inclin su cabeza y mir a Sasagawa en silencio. Se sinti dominado por la mirada firme de Sasagawa y sinti tambin que dejaba de pestaear frecuentemente. Incluso cuando reconoca el rostro de Sasagawa, el hombre definitivamente no pareca su profesor. Ya que no haban pasado tanto tiempo juntos, no saba mucho acerca de la personalidad de Sasagawa. No saba lo que el hombre estaba pensando y eso lo haca sentirse incmodo. No saba qu hacer, lo que haca incluso ms difcil apartar su mirada de la de Sasagawa. Se estaba concentrando tanto que no se dio cuenta de que haba sido capturado por Sasagawa.

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 Estoy harto de esperar a las hienas , dijo Sasagawa. Es aburrido. Adems, t eres mucho mejor que esos chicos sucios de antes. As que, hars algn tiempo conmigo hasta que venga el prximo tren? Supongo que s pero, qu quieres que haga? le pregunt al alto Sasagawa. Es un secreto , respondi el profesor con una sonrisa burlona. Esto es una estupidez , Shiina escupi framente. Sasagawa haba sido tan persistente que Shiina haba dicho que s, pero al parecer el hombre slo se estaba burlando de l. Shiina rpidamente volte y comenz a caminar hacia la estacin. Ignorando la voz que lo llamaba, continu hacia el silencio. Espera! le grit Sasagawa, su voz mezclada con risa. Como Shiina an no volteaba, Sasagawa agarr su brazo y lo oblig a darse vuelta. Eres terco, verdad? Qu? pregunt Shiina en un tono aburrido, mirando a Sasagawa. Si me acompaas, no te har pasar adelante en clases por una semana. Qu tal eso? Sasagawa estaba tratando de negociar con Shiina, pero su voz calmada y ojos penetrantes parecan serios. Por qu est siendo tan persistente? Qu quiere que haga? Incluso cuando Sasagawa no se lo deca, Shiina sinti un poco de incomodidad, pero fue persuadido un poco por la

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oferta de Sasagawa. Lo pens por un rato corto y luego estableci sus trminos. Agrega que est bien si duermo durante la clase. Slo as ser un trato. Obteniendo el consentimiento de Shiina, Sasagawa sonri abiertamente y Shiina mir hacia adelante. Yndose del estacionamiento de bicicletas, entraron a los terrenos de la estacin de trenes. Ya que Sasagawa las haba ahuyentado, no pareca haber ms hienas a la redonda. Todos los pasajeros restantes tenan las mismas expresiones calmadas en sus rostros. En medio del ruido a su alrededor, Shiina sigui a Sasagawa hacia donde lo estaba guiando. Sasagawa se sac su gorra y la puso en el bolsillo de sus pantalones de camuflaje, luego abri la puerta de un bao de hombres en una parte aislada de los terrenos de la estacin de trenes. Entra , le orden con voz arrogante. Shiina se par al lado de la puerta, mir a Sasagawa y luego entr. l slo usaba esta estacin de trenes para volver a casa despus de ver a Kanako, por lo que nunca haba estado en este bao. Los graffitis en la pared llamaron su atencin. Haba basura y revistas tiradas por todos lados. Mientras miraba a su alrededor, Sasagawa repentinamente agarr su hombro. Shiina ni siquiera tuvo tiempo para sorprenderse. Golpe fuertemente la pared escrita con graffiti. Nngh! El dolor corra por su espalda y un sonido escap desde la parte de atrs de su garganta. Era el mismo sonido que el chico-hiena haba hecho cuando Sasagawa lo hiri. Mir hacia arriba y vio los ojos amenazantes de Sasagawa y no pudo apartar la vista. A su derecha haba dos retretes, a su izquierda dos urinarios en fila y en frente de ellos

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un casillero, aparentemente usado para los artculos de limpieza. El espacio era tan angosto que no haba lugar para escapar. Sasagawa haba clavado efectivamente a su presa a la pared. En clases, siempre me miras o no, Shiina? Tanto te gusto? susurr gentilmente en el odo de Shiina. Ya que no tenan mucha diferencia de altura, sus rostros estaban muy cerca el uno del otro. Una sonrisa morbosa se expandi sobre el rostro de Sasagawa. Sus largos dedos tocaron el lbulo de la oreja de Shiina. Luego, viajaron lenta y provocativamente hacia su nuca. Jug con el suave cabello de Shiina. Su rostro se tens en respuesta al toque desconocido de otro hombre. No quera dejar que Sasagawa viera esta confusin, as que trat de permanecer inexpresivo, pero no poda continuar en esta extraa situacin. Sasagawa mantena su mirada furiosa y slida, con lo que los puos apretados de Shiina se humedecieron con sudor. No poda mover sus piernas, que resistan firmemente sobre el suelo cubierto de baldosa. Shiina trag saliva en respuesta a la mirada de lujuria en los ojos de Sasagawa. Finalmente lo entendi. Siempre haba pensado que Sasagawa mostraba poco inters en las estudiantes femeninas, pero nunca habra pensado que se convertira en el objetivo de los afectos de Sasagawa. Siempre haba mirado a Sasagawa con curiosidad, pero quiz el hombre haba entendido mal el significado detrs de ello. Pero incluso si l s tena sentimientos por Sasagawa, como profesor l debera reprochar y rechazar a Shiina. Pero este tipo de provocacin y bullying(4) era la peor forma de
( ) El acoso escolar (tambin conocido como hostigamiento escolar, matonaje escolar o por su trmino ingls bullying) es cualquier forma de maltrato psicolgico, verbal o fsico producido entre escolares de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado.
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tratarlo. No le gustaba ese comportamiento perverso. Era detestable. Shiina mir a Sasagawa con disgusto. No eres t el que gusta de m? La nica razn por la que te miro en clases es para escucharte explicar los problemas. No hay otros sentimientos detrs de ello. Slo las chicas me ponen duro, soy un tipo comn. Si an tienes esos sentimientos, quiz deberas ir al hospital a que te revisen , dijo framente. Incluso cuando Shiina lleg as de lejos, Sasagawa no pareca estar enojado. De hecho, sonri y dijo, Escuchar palabras rudas como esas salir de una boca tan linda como la tuya no puede hacerme enojar. Al parecer Sasagawa no iba a aflojar. Al parecer nada de lo que Shiina dijera ahora hara alguna diferencia. Shiina arrug su cara. Todo lo que poda hacer era estar sorprendido por el exceso de confianza de Sasagawa. Sasagawa an sostena sus dos hombros. Atrajo su cuerpo ms cerca del de Shiina. Escalofros recorrieron el cuerpo de Shiina, y justo cuando abri su boca para protestar, Sasagawa le rob un beso. Mmmmnnph! Shiina cerr sus ojos en un acto reflejo. Sasagawa lo bes a la fuerza, codiciosamente. Shiina desesperadamente trat de alejar su rostro, pero Sasagawa sigui igual de persistente. Shiina jade, tratando de respirar, y Sasagawa rpidamente empuj su lengua dentro de la boca de Shiina, como si hubiese estado esperando ese momento. Como la cabeza de Shiina estaba clavada en la pared, no poda levantarla. Trat de inclinar su cabeza hacia abajo para escapar, pero Sasagawa agarr su mentn.

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No tena idea de que ser violado por alguien era tan doloroso. Sinti una sensacin opresiva de disgusto bien arriba en la boca de su estmago. Incluso cuando su estmago estaba vaco, se sinti tan enfermo que pens que vomitara. Incluso cuando Sasagawa vio lo plido que se haba vuelto el rostro de Shiina, no mostr seal de aflojar, pero suaviz su expresin y continu disfrutando el beso. Ciertamente, Shiina no se atreva a criticarlo. De todas formas, no poda escapar de la situacin, ni poda respirar. Trat de empujarlo con sus manos. Incluso trat de patear las pantorrillas de Sasagawa, pero el fuerte agarre de sus dos hombros no se aflojaba. Cuando se mova, Sasagawa tambin lo haca, y cuando no se mova, el cuerpo de Sasagawa apretaba con ms fuerza su pecho contra el suyo. Con una mirada vaca en sus ojos, Shiina se volvi hacia Sasagawa. Estaba exhausto por haber tenido sexo con Kanako, as que sin importar las veces que trataba de escapar, no poda. Sin importar lo mucho que se quejaba, era silenciado. No haba nada que pudiese hacer. Despus de que Sasagawa haba explorado cada rincn de la boca de Shiina con su lengua, finalmente alej sus labios. Al ver la expresin silenciosa de Shiina, Sasagawa ri ligeramente. El odio se apoder de Shiina por esta actitud calmada y compuesta. Mirando hacia otro lado, vio la silueta de alguien ms all del vidrio esmerilado de la puerta del bao. La persona pareca estar hablando con alguien cerca de l, ya que poda or sus voces bajas. Era un hombre con una complexin robusta que vesta una chaqueta y un sombrero. Un empleado de la estacin de trenes.

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Shiina respir profundo, pegndose a la poca luz que repentinamente entr en la oscura habitacin. Permanece en silencio . La larga mano de Sasagawa cubri su boca. Desviando su vista de la puerta del bao, Shiina lo mir furiosamente, con resentimiento. Sasagawa agarr su mentn y mir fijamente a Shiina. Si eres un hombre, cumples tus promesas, verdad? Incluso si eres un estudiante, no perdonar a alguien que no cumple su promesa. A la amenaza de violencia, Shiina sinti una completa desesperacin. Sasagawa haba golpeado incesantemente al chico de antes y poda hacer lo mismo con Shiina. Despus de un rato, la silueta de la persona se desvaneci de su campo de visin. Cerrando sus ojos, Shiina dej salir un fuerte suspiro en la palma de Sasagawa. Tena que hacer algo para sobrevivir. Sasagawa lentamente sac su mano de la boca de Shiina. Lo mir furiosa e intensamente, como advirtindole, y luego revis su reloj. An quedan 10 minutos antes de que llegue el tren hacia el sur. Terminar antes de que llegue a la plataforma. Entonces me ests diciendo que aguante hasta entonces? pregunt Shiina calmadamente, pero an enojado. Qu hombre tan egosta. Sasagawa dijo despreocupadamente, No importa lo que pienses. Mientras me dejes tocarte donde yo quiera, estar satisfecho.

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Shiina se qued sin palabras con esta declaracin ambiciosa y enrgica. Su rostro se paraliz, desconcertado. Ya no poda ser amable. Haba tenido suficiente. Es una maldita broma? Cuntas veces tengo que decirte, no estoy interesado en un profesor pervertido como t? Djame ir! dijo, alzando su voz. Sus piernas eran la nica parte de su cuerpo que permaneca libre, por lo que golpe los muslos y pantorrillas de Sasagawa desenfrenadamente. No eres muy obediente, verdad? Los ojos de Sasagawa desbordaban furia. Shiina no pudo evitar sobresaltarse por el repentino cambio en la expresin de Sasagawa. No poda comparar al hombre con una hiena. Era un hombre verdaderamente peligroso. Si no paras, le dir al Director y al Comit de la escuela , amenaz Shiina, tratando de esconder su miedo. Si Sasagawa decidi llegar tan lejos, Shiina no se retractara tampoco. Tena que hacerle ver eso. Al escuchar esto, Sasagawa levant la comisura de sus labios, como si hubiese escuchado una ridiculez. Respondi con una voz baja, Adelante. Pero, tienes el coraje de decir: Fui vctima de un profesor pervertido? Quieres que la gente te mire as? Estars incluso ms solo. Bueno, supongo que siempre te ha gustado estar solo, as que quiz no te importe? Se haba sacado la mscara serena y calmada que normalmente utilizaba, y las palabras que deca ahora eran demasiado crueles. Se haba aferrado a la ms profunda debilidad de Shiina.

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Shiina se puso plido. Silenciosamente, continu mirando fijo a Sasagawa, no porque quisiera, sino porque no poda parar. Clavado entre Sasagawa y la pared, su cerebro haba olvidado cmo mover su cuerpo. Sabes, Shiina? Un solitario es excluido del grupo y no tiene ms opcin que vivir por s mismo, en soledad. Es una existencia miserable. No hay nada de tranquilidad acerca de ello. Suena exactamente como t, no? Sasagawa dijo fra y sarcsticamente. Por qu tienes que decir cosas como sa? la voz seca y tensa de Shiina confirmaba lo que Sasagawa haba estado adivinando. Eres muy estpido , se burl Sasagawa. Crees que no me he dado cuenta? Eres demasiado lindo para tu propio bien. Esa es la razn por la cual te destacas tanto. Por eso rara vez hablas con otros estudiantes, por eso te distancias durante el descanso, por eso siempre ests solo. Pero el tipo de gente que hace eso a propsito, quienes quieren hacerlo, quienes lo hacen porque quieren caminar por su propia senda, no se ven tan solos como t cuando estn solos. Me equivoco? Shiina no pudo responder. Entonces, qu tipo de mirada tena en sus ojos ahora? Sasagawa pens que poda entender a alguien como Shiina, quien estaba avergonzado, deplorable y al borde de las lgrimas? Las duras palabras de Sasagawa hacan eco en su cabeza, y Shiina no poda hablar. Se cubri su rostro. Incluso si era ridiculizado por usar este escape, era mejor que Sasagawa y su adivinanza de lo que senta. Se mordi sus labios y trat de soportar esto.

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 No te quedes ah, di algo . Sasagawa agarr su mentn, obligando a Shiina a mirarlo. Esto le permiti a Sasagawa mirar profundamente a los ojos de Shiina. Este espacio tenso, angosto. Shiina apret su puo fuertemente. Trat de recobrar su compostura, frotando sus dedos sudados. Alguien tan atractivo como Sasagawa poda tener a quien quisiera, entonces, por qu tendra que esforzarse tanto en molestar a un estudiante fuera de clases? Shiina no entenda, y eso lo asustaba. Estaba tan asustado que las lgrimas que estaban a punto de salir slo se detuvieron por sus pestaas, por lo tanto tena miedo hasta de pestaear. Sasagawa mir fijamente a los ojos mojados de Shiina, pero no lo molest. Si te quedas quieto, ser gentil. Shiina fingi considerar esto, y luego los labios de Sasagawa encontraron los suyos. Mmmph. Sasagawa se abri camino entre el suave chaquetn negro de Shiina, y trep lentamente por debajo de su camiseta gris. Shiina tembl y se le puso la piel de gallina al sentir las manos de Sasagawa sobre l. Estaba molesto porque su corazn haba sido expuesto, pero ahora su cuerpo tambin lo estara? La lengua mojada de Sasagawa invadi nuevamente su boca. La resistencia de Shiina se volvi apata, y su decepcin se volvi desesperacin. La presin que sinti en su pecho se hizo ms y ms pesada. Los labios de Sasagawa se desviaron hacia su mandbula, luego hacia su cuello. Los prpados parcialmente cerrados de Shiina comenzaron a temblar. Nhmf.

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Sasagawa subi la camisa de Shiina hasta su cuello, exponiendo su pecho. Comenz a lamerlo con una lengua resbaladiza. Shiina no pudo aguantar ms esta sensacin de incomodidad, por lo que cerr sus ojos. Sasagawa continu persistentemente, y la punta de su lengua rodeaba la tetilla de Shiina. Una vez que se endureci, la tom con su mano, mordiendo y succionndola, y luego repiti el proceso. No soy una chica! Shiina protest con dificultad, pero Sasagawa no quera escucharlo. Era difcil soportar la sensacin de los dedos de Sasagawa sobre l. Una sensacin cosquillosa, horrorosa e incmoda permaneca en su piel. Cerr sus ojos, apretndolos fuertemente, para ignorar esta situacin. Lo nico que lo mantena era esperar el sonido del tren chirriando camino a la plataforma. Ansiaba escucharlo, pero pareca que nunca llegaba. Los 10 minutos que haba mencionado Sasagawa parecan extremadamente largos. Sin embargo, Sasagawa no desperdiciaba ni un segundo. Sus labios dejaron el pecho de Shiina y buscaron algo ms, empujando su cuello. Siguiendo su bien formado maxilar, finalmente descansaron nuevamente en sus labios. Con este beso ertico, Shiina se dio cuenta de las verdaderas intenciones de Sasagawa. No poda escapar, as que slo tuvo que aceptarlo. Una de las manos de Sasagawa recorra su pecho hacia abajo, mientras que la otra le desabrochaba el cinturn, revelando los huesos de la cadera de Shiina. Sus manos bajaron ms y con la punta de los dedos sacaron el miembro de Shiina. Ow! Un dolor agudo recorri el lugar que Sasagawa haba tocado y Shiina no pudo evitar chillar.

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 Hm? Alejando sus labios, Sasagawa mir el rostro de Shiina. Si deca alguna excusa, estara avergonzado despus, as que supuso que podra bien decir la verdad. Shiina mir hacia abajo con ansias y luego dijo lentamente, Hace un rato me corr, as que duele. Con quin? No esperaba que le preguntaran tanto detalle, pero no tena intencin de desobedecer a Sasagawa. As que Shiina revel su relacin con Kanako lo ms bruscamente posible. Una seora rica. Me da 10.000 yens si lo hago con ella, as que nos reunimos ocasionalmente. Por favor no me preguntes ms, pens desesperadamente. Estaba molesto porque no tena las agallas de decirlo en voz alta. Hmmm bueno, entonces supongo que no debera hacer que te corras , dijo Sasagawa. Shiina sinti alivio por la forma en que Sasagawa se lo tom tan casualmente. Sin embargo, los dedos de Sasagawa treparon hacia la parte trasera de sus pantalones, y Shiina abri sus ojos con sorpresa y agarr el brazo de Sasagawa. Oye, qu ests haciendo? chill. Los dedos de Sasagawa estaban acariciando el rea cercana a su trasero de una manera provocativa. Bueno, dijiste que no podras ponerte duro. No me queda mucho tiempo, as que esta es la nica forma que queda con la que puedo disfrutar . Las puntas fras de sus dedos subieron.

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Shiina tembl y tens su trasero para tratar de bloquear los movimientos de Sasagawa. Dej salir un corto suspiro y mir hacia arriba. Vio el rostro de Sasagawa mirndolo con ojos de serpiente. Las comisuras de sus labios estaban hacia arriba de forma perversa, y sac su dedo del medio, mostrndoselo a Shiina. Luego lo lami, cubrindolo con saliva. La mano que haba estado descansando en su trasero atrajo a Shiina hacia Sasagawa. Con pnico, Shiina mir hacia abajo. Esta vez, el dedo mojado se estaba abriendo camino dentro de sus pantalones. Ah mnnfh! La sensacin hmeda provoc el lugar que los dedos de Sasagawa recin haban estado tocando. Shiina levant su rostro con una mirada angustiada y descans su mentn sobre el hombro de Sasagawa. Se sinti enfermo por la sensacin de un dedo entrando en l. El dedo de Sasagawa se retorca gentilmente dentro de l, como si estuviese relajando la vagina de una mujer. Ah ahhh ahhh!! Incluso cuando se supona que fuese incmodo, Sasagawa estaba empujando justo en la zona ergena de Shiina, y una voz excitada se le haba escapado. Ese sonido lleno de lujuria hizo que un sentimiento acalorado estallara dentro de l. Al escuchar esto, las manos de Sasagawa no pararon, sino que trataron de sacarle ms placer. Sasagawa era diferente a otros profesores. Haba sido interesante. sa es la nica razn por la cual Shiina siempre lo miraba. Shiina haba sido malentendido, pero, qu haba hecho para merecer esto? Senta lstima de s mismo.

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Mientras Sasagawa lo sostena, los hombros de Shiina comenzaron a temblar. Qu, ests llorando? Qu lindo! Sasagawa haba sentido el cambio en Shiina. Liber un poco su cuerpo para ver su rostro. Shiina mir hacia arriba, sus ojos mojados y su pelo desarreglado. El silencio emocional continu. Sasagawa entorn sus ojos, como si acabase de ver algo que no hubiese querido ver. No era mi intencin llegar tan lejos . Respir pesadamente y sac su dedo. Shiina percibi sus palabras como una disculpa, pero estaba muy equivocado. Qu qu? dijo jadeando mientras Sasagawa desabrochaba sus pantalones y le sacaba su ropa interior. Shiina estaba impactado. Sasagawa lo agarr, elevndolo. Sasagawa sostuvo una pierna en la pared y sent a Shiina en uno de sus muslos. Shiina no saba qu estaba pasando. An se resista. Sasagawa vio esto, y con manos impacientes abri sus propios pantalones y expuso la prueba de su lujuria hirviente. Exprimi un lquido claro desde la cabeza de su pene, esparcindolo sobre este. Lo acarici un par de veces y Shiina se congel ante esta terrible escena de Sasagawa preparndose para el sexo. P para! exclam Shiina. Qu crees que ests haciendo?! Con esto, los ojos de Sasagawa le lanzaron dardos. Jal los pantalones de Shiina y su ropa interior hasta sus rodillas, elevndolo ms alto en su muslo, para que se viera su trasero. Shiina verdaderamente se haba convertido en la vctima de su profesor.

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 T oww jade Shiina. El miembro mojado de Sasagawa comenz a entrar en su cuerpo. La situacin iba ms all de lo terrible, y todo lo que Shiina poda hacer era cerrar sus ojos para escapar de la realidad. Pero Sasagawa comenz a ir ms y ms profundo dentro de l. Las paredes internas de Shiina se expandieron adaptndose a la forma de Sasagawa. Despus de que Sasagawa pasara por el lugar ms doloroso, todo lo que quedaba era aguantar el dolor de lo largo que era. Nnn ahh, ahh! Sasagawa empuj lo ms profundo que pudo, y un gran pnico retumb en el cerebro de Shiina. Sasagawa se sali y luego se meti nuevamente. Shiina respiraba con dificultad por el dolor de sus acciones. S que no quieres, pero si no te agarras fuerte de m, te caers al suelo sobre tu trasero , Sasagawa dijo con calma. Tmidamente, Shiina abri sus ojos y vio la mirada de Sasagawa penetrndolo. Incluso cuando Sasagawa se estaba entregando a su propio placer, estaba sorpresivamente calmado. Shiina estaba sorprendido y a la vez enojado por la actitud de Sasagawa. l era el que abra su boca y haca ruidos cada vez que Sasagawa entraba en l; l era el nico que reaccionaba. Tan pronto como se dio cuenta de esto, sus mejillas se sonrojaron. Estaba muy avergonzado por las lgrimas que se haban juntado en los rabillos de sus ojos, no lo poda soportar. Baj su cabeza avergonzado y se aferr a los brazos de Sasagawa, volteando su cabeza hacia otro lado.

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Sasagawa envolvi sus brazos alrededor de la parte trasera de las rodillas de Shiina, sostenindolo fuertemente. Estaban en una posicin frente a frente, y se esforz una y otra vez para que siguieran as. Nnn aahh ah haaa ughh Sin importar lo mucho que Shiina tratara de reprimir los sonidos que escapaban de sus labios, las vibraciones provocadas cuando Sasagawa entraba en l lo obligaban a abrir su boca. En su cabeza no poda entender este comportamiento anormal, pero a medida que se acostumbraba, las brasas de calor dentro de l volvieron a despertar. No, no puedo! Trat de reprimirse, pero su cuerpo continuaba buscando el placer que le daba el miembro de Sasagawa. Si se sostena lo suficientemente fuerte, sus paredes internas se contraeran, dejando salir ms estimulacin. Ah nnnhaa

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La friccin sobre el lugar que quera creci, con lo que emiti un sonido excitado. Los empujes de Sasagawa se volvieron ms estrechos y violentos, y Shiina se aferraba desesperadamente a l, enterrando su rostro en el pecho de Sasagawa. Entremedio de sus piernas, su miembro, que haba sido doloroso de tocar, comenz a producir un nctar empapado y claro. Cada vez que inhalaba desesperadamente, el deseo de eyacular brotaba en su abdomen. Haba pasado el punto sin retorno, pero Sasagawa no mostraba seales de salirse de dentro de l ahora que l haba aflojado. Shiina se impacient e intensific el agarre de sus manos que se aferraban alrededor del cuello de Sasagawa. Acerc su mejilla caliente al cuello de Sasagawa. Ah aaaaahhh! Arranc la tela de su camisa y justo cuando pens, No voy a durar, eyacul con su nebuloso pene sobre el abdomen de Sasagawa. El calor de su cuerpo comenz a disminuir. Shiina se qued mirando la escena con una mirada vaca. Se haba dejado llevar. Era demasiado tarde para inventar excusas ahora. Haba sido violado por otro hombre, su profesor, y era torturado por el hecho de que se haba dejado llevar. La humillacin era demasiado para l para soportar, por lo que comenz a sollozar. Sasagawa puso un brazo alrededor de sus hombros, y susurr gentilmente en su odo, Si te sientes demasiado solitario estando solo, siempre puedes confiar en m. Mis brazos siempre estarn abiertos. Shiina lentamente abri sus ojos mojados. No haba forma de que pudiese confiar en Sasagawa. Los intereses ocultos del hombre eran probablemente provocarlo para

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obtener placer, llevarlo a un pseudoamor para poder controlar y jugar con las emociones de Shiina. Por eso no poda caer. No era tan estpido como para caer y ser la carnada en su trampa. Su cabeza le deca que fuera cuidadoso, pero su corazn se senta atrado por Sasagawa. Shiina estaba indignado con su propia debilidad. Cun dbil puedes ser?, se rega a s mismo, deprimido. Shiina . Se mordi su labio al escuchar el sonido de la dulce voz que alcanz sus odos. La ignor. Los labios calientes de Sasagawa empujaron suavemente la piel expuesta que sala del cuello de su chaquetn. Puedo salvarte Sasagawa hablaba como si l fuera la nica salida. El tren que Shiina haba estado esperando lleg a la plataforma. Al mismo tiempo que fue anunciado, Sasagawa liber su cuerpo, justo como lo haba prometido. Sin mostrar una pizca de arrepentimiento, Sasagawa abri la puerta y se fue. El bao se sinti extraamente silencioso con nadie ms all, y la parpadeante luz fluorescente sobre su cabeza era molesta. Shiina estaba en estupor. Apoy su espalda contra la pared, incapaz de moverse. Sus manos cayeron flojamente a sus lados y la sensacin del cuerpo de alguien ms dentro del suyo permaneca.

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Captulo 3
irando a sus compaeros de clase saludarse como cada maana por el rabillo de su ojo, Shiina se sent en su silla. Sus anteojos se resbalaban por la fuerza que haca mirando hacia abajo. Sin arreglarlos, suspir profundamente y se ech sobre su escritorio. Cruz sus brazos y se sinti a gusto, con la oscuridad por dentro. Haba querido quedarse en su casa ese da. Se senta muy incmodo por forzarse a ver el rostro de Sasagawa, eso lo enojaba mucho. Sus cuerpos se haban unido en un bao de una estacin de trenes y de alguna forma Sasagawa lo haba obligado. No poda entender por qu haba mostrado tanto de s mismo a Sasagawa. Matemticas era una asignatura troncal y se dictaba diariamente. Si no se presentaba, Sasagawa seguramente lo ridiculizara. Shiina no tena agallas, era un debilucho. Con eso haba recriminado a Shiina. Shiina tena muchas ganas de escapar, pero no tena la suficiente paciencia para soportar ms recriminaciones. Por esa razn se haba presentado como era de suponerse. Luego de que los primeros dos periodos haban terminado, era hora de la clase de Matemticas. Ni siquiera se pona as de nervioso para los exmenes finales. Con el sonido del timbre, su corazn comenz a latir salvajemente.

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La puerta corredera que daba a la sala de clases se abri con un chirrido, y Sasagawa entr, luciendo como siempre. Vesta el abrigo blanco sucio y pantalones gris oscuro. En sus pies tena un par de sandalias caf. Shiina no poda levantar su rostro, pero senta la presencia de Sasagawa en la sala. Sasagawa se par en la plataforma y comenz a pasar lista. Si alguien responda, normalmente no levantaba la mirada. Por lo tanto, todos los estudiantes que nombraba daban respuestas desanimadas. Shiina , llam con una voz baja. El corazn de Shiina salt dentro de su pecho. Aqu , respondi, mirando hacia el lado. Est bien, slo acta normal. Trat de consolarse. Se agarr sus manos fuertemente por debajo de su escritorio. No te escucho , la voz aguda de Sasagawa haca eco en la sala de clases. Estaba mintiendo. Shiina haba respondido como siempre lo haca. Shiina levant su rostro malhumoradamente y vio los ojos de Sasagawa mirando justo hacia donde estaba l. El cabello negro de Sasagawa estaba peinado hacia atrs y sus cejas estaban levantadas. Para colmo, de todos los estudiantes en la sala, la mirada slida de Sasagawa estaba enfocada nicamente en l. Sasagawa era el que lo haba besado muchas veces la noche anterior, l era el que le haba trado ese calor. Tambin l era la nica persona que se haba dado cuenta de la oscuridad que haba en el fondo de su corazn.

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 No puedo escucharte cuando hablas entre dientes rega Sasagawa con voz arrogante. La forma en que se movan sus labios era extraamente obscena. Shiina conservaba una expresin fra y se disculp con una voz ms fuerte. Lo siento. Sasagawa continu mirando fijamente a Shiina, como si se estuviese burlando de l. Sus ojos lo estaban desafiando. A su lado, Shiina sinti la mirada de Ai. Sintiendo los ojos de ambos sobre l, Shiina comenz a sentirse incmodo. Tembl ligeramente, con nerviosismo. Ni siquiera poda respirar cmodamente. Finga ser fro para esconder su tierno corazn, pero incluso eso haba sido expuesto y no saba cmo arreglarlo. Su incomodidad creci, porque ni siquiera tena la respuesta. Sasagawa volvi su atencin hacia el libro de asistencia y nombr al siguiente estudiante. Luego de unas pocas personas ms, Shiina relaj sus hombros y ech su cabello hacia atrs. Desde la ventana de la sala de clases, el cielo pareca alto e incluso cuando los rboles que rodeaban el edificio ya se estaban volviendo amarillos, comenz a sudar. Sasagawa les dijo que sacaran sus libros de texto, y todos lo hicieron con un murmullo. Shiina se concentr tanto en las acciones de Sasagawa durante la clase, que no aprendi nada.

Frunci el ceo al equipo de atletismo que armaba jaleo al otro lado de la acera. Shiina, quien no participaba en actividades de clubs, iba camino a casa, y normalmente

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pasaba de largo por los grupos de la escuela intermedia a esa hora. Su horario pareca ser el mismo. A diferencia de los estudiantes de secundaria que usaban sus uniformes como ellos queran, los nios de la escuela intermedia an obedecan las reglas de la escuela y de los profesores. Sus ordenadas apariencias eran refrescantes. El solo mirarlos revelaba su sentido de la disciplina. Ow! Algo golpe a Shiina por atrs. Volte. Pareca como si un bolso deportivo o algo lo hubiese golpeado. Oh, lo siento! La alta voz de un joven que an no pasaba por la pubertad se escuch al lado de Shiina. Pudo deducir a simple vista que el chico no lo lamentaba en lo absoluto, pero no iba a enojarse por algo tan banal, as que lo dej pasar. El chico cogi el paso con sus dos amigos, y cuando Shiina los pas, exclam, Hayato! Shiina apenas hablaba con su hermano menor en casa. Ahora lo recorri con la mirada. El rostro bronceado de Hayato estaba lleno de desprecio. Sus dos amigos miraron a ambos extraamente, luego uno de ellos dijo, Oh! y comenz a hablar emocionadamente. Oye, t eres el hermano mayor de Hayato, del cual hemos escuchado tanto hablar? Wow! Eres demasiado genial! Sus ojos se ampliaron mientras miraba fijamente a Shiina.

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Los ojos de Shiina se entrecerraron cuando dijo Qu han escuchado de m? Oh, bueno, mi hermana es una estudiante de primer ao de secundaria y desde la escuela intermedia que dice lo genial que eres y lo popular que eres con las chicas respondi el chico. Mi hermana tambin! aadi el otro chico. Incluso cuando de verdad es fea, siempre habla de lo mucho que quiere que la abraces! Hayato apret fuertemente su boca al ver la alegre conversacin de sus dos amigos. Tener un hermano jovial y lleno de vida como esos dos sera divertido, pens Shiina. Su pureza y nimo lo relajaban, por lo que sonri ampliamente. Es suficiente. Vamos , dijo Hayato con un tono de voz autoritario. No estaba entretenido por como sus amigos se agrupaban alrededor de la persona que ms odiaba. Alguna vez podramos ir a tu casa cuando est tu hermano, Hayato? sugiri uno de sus amigos. Quiz pueda ensearnos cmo ser igual de genial que l! S, yo tambin, yo tambin! intervino el otro amigo. Ambos levantaron sus manos, acercndose a Shiina con rostros serios. Eran tan infantiles definitivamente nios de escuela intermedia. Bueno, no estoy mucho en casa , dijo Shiina, rechazndolos con una ligera sonrisa. Los rostros de los chicos se entristecieron. De verdad? Oh, qu mal! gritaron.

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 Pero pueden ir a jugar con Hayato! Pueden ir las veces que quieran, de acuerdo? Una sonrisa inocente se expandi por el rostro de Shiina. Los dos chicos lo miraron hacia arriba como si estuviesen adorando a un dios. Levantando su rostro de los nios insistentes, sus ojos encontraron los de su hermano. Los ojos de Hayato estaban llenos de nada ms que odio.

Qu crees que ests haciendo, tratando de actuar como mi hermano? grit Hayato. No me hables nunca ms en pblico usando ese uniforme de escuela para idiotas! Lo siento, no lo volver a hacer prometi Shiina. Incluso cuando los dos se dirigan al mismo lado, Hayato de alguna forma haba llegado a casa antes que Shiina, y haba estado esperndolo en la entrada, con cara de desprecio. Sin importar cun duro entrenara con el equipo de bisbol, en una pelea real Shiina lo vencera. Sin embargo, Hayato no lo admitira, pero saba que sin importar lo mucho que detestara a Shiina o lo molestara, Shiina nunca le levantara la mano. Por eso l poda decir esas cosas a su hermano. Tambin, este fin de semana los tres iremos a visitar a la abuela a Nagoya , afirm Hayato. Esa cantidad de gente dejaba a Shiina afuera. Qu infantil. De verdad? Divirtanse Shiina dijo calmadamente.

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Esto pareci enojar an ms a Hayato. Su rostro se enrojeci y grit, Dije que dejaras de actuar como si fueras mi hermano! Eres estpido? Tu CI (5) debe ser igual a cero! No te avergenza ir a esa escuela secundaria para idiotas? Shiina estaba molesto por la forma en que Hayato trataba de ofenderlo a propsito. Cmo quera Hayato que reaccionara? Shiina lo corrigi, diciendo, Idiotas? De hecho, es una escuela secundaria de nivel normal. Ciertamente, no es tan buena como a la que t quieres ir. Hayato lo mir con una cara que deca, An tratas de continuar con esta estpida conversacin?. Se mordi sus labios y torci su rostro con angustia. Olvdalo, slo cllate! Fuera de mi vista! Shiina no saba si era slo porque Hayato estaba siendo un mal perdedor o estaba tratando de decir la ltima palabra, pero Shiina definitivamente saba que no era algo que un hermano menor dira a su hermano mayor. Haba dejado que todo pasara ligeramente hasta este punto, pero de pronto no pudo aguantarlo ms. Levantando su mentn, encar a Hayato con ojos destellantes. Avanz con un golpe. Hayato! Tu amigo est al telfono! la voz animada de su madre lo llamaba desde la sala de estar. Bueno, mam! Ya voy! respondi Hayato, cambiando completamente su actitud. Shiina estall en risa. Hayato reflexivamente levant su rostro, como si fuese a quejarse nuevamente.
( ) CI : coeficiente intelectual.
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Shiina no poda aguantar la risa, por lo que cubri su boca con su mano. Dijo arrogantemente, Tienes 15 y an la llamas mam? Qu asqueroso! Ests seguro de que ya no le succionas las mamas? Hayato no poda creer que acababa de ser insultado por su hermano, quien ellos haban dejado fuera de la familia. Indignantemente, tom el cuello de Shiina. Crash! Un sonido fuerte retumb a travs de la entrada. Su madre apareci nerviosamente desde la sala de estar. Hayato? Algo anda mal? Qu pas? Hayato agarr su codo e hizo una expresin de dolor. T eres el idiota que se cay, no es mi culpa. Shiina mir framente a su hermano, quien se acurrucaba cerca de su madre. Por qu le hiciste algo tan cruel a tu hermano? Jun, respndeme! La voz acusatoria de su madre era extremadamente calmada. Alguien con una cara tan fea no es ningn hermano mo Shiina se burl. Entonces qu, ahora actuars como mi madre? Estaba sorprendido. Era incluso molesto hablar con ellos despus de tanto tiempo. Dio media vuelta y se dirigi a su habitacin en el segundo piso. Su madre elev su voz, tratando de detenerlo. Jun! Cmo puedes decir tal cosa? Detente ah mismo! Disclpate con Hayato en este instante! Por qu? pregunt Shiina framente.

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 Porque es tu hermano! Abraz fuertemente a su hijo de 15 aos con una mirada prohibitiva en su rostro. Levant la vista y lo observ con los ojos de un extrao. No Hayato. T. Qu derecho tienes para regaarme? Eres una madre terrible! dijo Shiina, sus ojos llenos de resentimiento. Su madre no se sobresalt ante estas duras palabras. Shiina se irrit an ms y corri por las escaleras, aislndose en su habitacin. Rpidamente cerr con llave la puerta y se coloc sus audfonos. Desde el otro lado de la msica que flua por sus odos, poda or la voz de su madre gritndole. Suspirando, se apoy contra la puerta y la golpe lo ms fuerte que pudo con su cuerpo. Dentro de poco, la voz de su madre se apag. Normalmente, ella nunca le prestaba mucha atencin, pero cuando lastimaban a Hayato siempre exageraba as. En casos como stos, brotaba mucha furia dentro de l que ni siquiera saba de dnde provena. Sentndose en su cama, desesperadamente trat de concentrarse en la meloda que flua por sus odos. Quera sumergirse en su propio mundo, al cual pudiese escapar libremente. Quiz era porque no se poda calmar, pero no poda sentirse completamente solo. Casualmente chasqueaba su lengua, tratando de librarse. La inseguridad se prolongaba a partir de esa sensacin, por lo que pas su mojada lengua una vez ms a lo largo de su boca. Slo esta pequea accin traa a su memoria los acontecimientos inmorales que haban tenido lugar en la estacin de trenes. Todo su cuerpo comenz a temblar. Sasagawa haba agarrado cada parte de su cuerpo. En ese momento, cuando esas lgrimas patticas rodaban por sus mejillas,

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Sasagawa lo haba sostenido y dicho que lo salvara. Si crea esas palabras, podra escapar de esta oscuridad opresiva y sofocante? Su respiracin se detuvo al pensar en el semblante ceudo de Sasagawa. Shiina agarr el cable que colgaba en su pecho y se sac los audfonos de sus odos.

Era un da soleado durante un almuerzo tranquilo. Shiina estaba esperando la clase de Matemticas del quinto periodo. Haba llevado pan y una bebida deportiva de su tienda de costumbre y comenz a caminar sin rumbo hacia el techo, cuando una chica lo llam con un tono agudo de voz. Lo siento, Shiina-kun. Puedo hablar contigo? Volte para ver a la chica que se sentaba detrs de Ai. Rara vez le haba hablado, pero como eran compaeros de clase y sus asientos estaban de alguna forma cerca, recordaba el nombre. Morishita-san? Morishita llevaba unos aros que brillaban a la luz y sus mejillas estaban ligeramente matizadas con un color rosa. Incluso cuando su rostro se vea ingenuo, la forma en que se par con sus brazos cruzados y sus piernas se asomaban por su corta falda, era provocativa. A solicitud de Morishita, fue con ella a la parte norte de la escuela y se escondieron en el rellano del primer piso. Esta escalera era comnmente utilizada slo para ir a las salas de

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clase, por lo que los estudiantes rara vez pasaban por ah durante el almuerzo. Jugando con su largo cabello, excesivamente decolorado y con aspecto daado, Morishita habl sin hacer contacto visual. Um, se trata de Ai. S? impuls Shiina. No crees que est actuando como una presumida ltimamente? balbuce Morishita. Es tan molesto. Puede que no lo sepas, pero ella cree que es demasiado genial porque se sienta al lado tuyo. Nos dice las cosas que observa de ti todos los das y a veces se pega. Es como, Quin te crees que eres? Sabes? De verdad me irrita. Haba estado hablando normalmente con Ai antes del almuerzo. Las chicas daban miedo. Fcilmente podan esconder tal hostilidad. Shiina comnmente estableca un exterior frio, pero Morishita tena una personalidad dividida genuina. S, entonces qu quieres que haga al respecto? Mir a Morishita, ladeando su cabeza con una expresin de aburrimiento en su rostro. Incluso cuando senta que l no estara de acuerdo, respondi rpidamente Ignora a Ai. Apenas saban los nombres del otro y aun as ella lo estaba mandando. Incluso si era una chica, no lo aguantara. Shiina se rasc la parte posterior de su cabeza y ri dbilmente. Mir a Morishita. Incluso cuando de todas formas no tenga ninguna intencin de ser amigable con ella? No es eso un poco difcil?

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 Por qu? Todo lo que tienes que hacer es ignorarla si te habla. Slo eso. No es fcil? Morishita pregunt de forma petulante. No puedo ser fro con alguien sin ninguna razn dijo Shiina. Yo tengo una razn. Es porque me gustas, Shiina-kun confes, apretando la comisura de sus labios. Shiina se call cuando Morishita aada con una mirada de furia en su rostro Por eso es que Ai me pone los nervios de punta. Si ella encontraba que su amiga era tan desagradable por esto, sera una amistad muy corta. Sinti pena por Ai, quien no tena idea de que esto estaba pasando. Morishita probablemente pensaba que era mejor para Shiina que Ai. Perdona, pero yo no siento lo mismo dijo Shiina framente. Tir la botella de plstico que sostena en una mano con un golpe fuerte, y con la otra mano se refreg la punta de su nariz. Si tuviese que elegir, sera a ella, porque Nishida-san es ms linda . Nishida era el apellido de Ai. Shiina ri sarcsticamente. Morishita lo mir con ojos hmedos. verdaderamente fro, Shiina-kun dijo. Eres

Lo siento, siempre he sido as. Adems, no salgo con una chica a la que no amo dijo, rechazndola completamente y mantenindola a distancia. Si le daba una respuesta poco entusiasta, no entendera. Incluso cuando ella actuaba como si estuviese convencida, luca como si fuese a decir, No me rendir! y

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luego luca como si fuese demasiado problemtico. Olvdalo, entiendo dijo. Su rostro estaba cubierto con rastros de mscara y se sorba la nariz ruidosamente. Su actuacin era muy convincente, pero a Shiina no le provocaba ningn efecto. Eso es cruel. Shiina est escondido all haciendo llorar a una chica dijo de pronto una voz desde arriba de ellos, y ambos miraron al mismo tiempo. Inclinado sobre la reja, con una sonrisa maliciosa sobre su rostro, estaba su profesor de Matemticas. Oye, no es asunto tuyo, Sasagawa! Ve a otro lugar! Morishita sec sus lgrimas con las mangas largas de su chaqueta, ahuyentndolo exageradamente. No haba duda de que estaba enojada l la haba visto siendo rechazada despus de haber confesado sus sentimientos al chico que le gustaba. Shiina silenciosamente mir a Sasagawa, y su profesor lo mir de vuelta burlonamente. Sasagawa comenz a bajar las escaleras. Sin titubear, se par al lado de Shiina. No le hagas caso, Morishita dijo. No est interesado en chicas agradables como Nishida o chicas sexys como t. Le interesan otras cosas pervertidas. Morishita estaba sin palabras. T eres el pervertido. Shiina lo mir furiosamente, pero Sasagawa lo ignor. Mir a Morishita, como si disfrutara de su reaccin. Qu sabes, Sasagawa? De todas formas, quin dijo que podas escuchar a escondidas? No puedo creerte! Los ojos de Morishita estaban cubiertos de lgrimas.

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 No me vengas con esa! respondi Sasagawa. Tu voz es tan alta que se oye por todos lados. Hubiese escuchado aunque no lo quisiera! Como sea! Slo vete! Lo empuj hacia el final de las escaleras. Mientras empujaba el frente del abrigo blanco de Sasagawa, alz su voz rindose. Tena la peor personalidad antes vista. Slo mirarlo enojaba a Shiina. Era pattico que haya confiado en este hombre incluso por un segundo. Shiina. Sasagawa agarr su brazo y susurr eso en su odo. Shiina abri ampliamente sus ojos y mir hacia arriba a Sasagawa, pero l ya haba bajado las escaleras. Shiina permaneci pegado hasta que la vista de su profesor se desvaneci. Escuch la voz de Morishita entre sollozos decir desde detrs de l, Pero, hablo en serio. De verdad me gustas, Shiina-kun! A la vista del rostro fnebre de Morishita, pudo deducir que s hablaba en serio. Incluso cuando lo saba, lo que lo captur no fueron sus pesadas palabras, sino el sonido de la voz de Sasagawa susurrando y que haca eco una y otra vez en sus odos.

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Captulo 4
hiina no era bueno para esperar a la gente. Levant sus dos manos de sus rodillas y las puso sobre la mesa, suspirando fuertemente. Mir alrededor de la tienda, en la que flua msica de piano como fondo. Cerca del noventa por ciento de los clientes eran mujeres; el otro diez por ciento probablemente eran sus novios. En otras palabras, de seguro el nico chico que haba ido all por eleccin propia era l. Sonri de una forma humilde y comenz a arrepentirse un poco de su decisin. Inclin el vaso de agua fra que el joven vendedor de la tienda le haba dado, los cubos de hielo tintineando dentro de la copa. Lo lamento! estall repentinamente una mujer, acercndose a l. Estabas esperando hace mucho? Soy Misaki, la duea. Esta era la mujer a la que haba estado esperando; rpidamente baj el vaso. Lamento molestarte en un momento tan ajetreado. Mi nombre es Shiina . Inclin su cabeza y luego mir nuevamente a la duea de la tienda. Quiz era porque esta era una pastelera, pero su cuerpo redondo pareca como si hubiese comido demasiados carbohidratos. O quiz el abrigo de jefa que vesta la haca ver incluso ms grande. La duea sac una silla y se sent encarando a Shiina. Empuj sus lentes hacia arriba de su nariz con sus dedos pulgar e ndice y comenz a hablar. Shiina-kun, ahora ests en la secundaria, verdad?

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 S, soy estudiante de segundo ao. Puedes decirme por qu quieres trabajar en mi tienda? Con sus gordos dedos agarr un lado de su codo y lo mir interrogativamente. Sus ojos eran tan angostos, que era difcil distinguir si estaban abiertos o cerrados. Shiina mantuvo contacto visual con ella y respondi gilmente. Porque me queda cerca de la escuela . No pudo decirle que quera a propsito elegir un lugar en el que saba que se juntaran muchas chicas, para poder tratar de corregir su inclinacin a ser una persona mala. Sin embargo, ella pareca engaada por su simple mentira, y asinti entusiastamente. Ya veo. Me parece bien esa razn. Vers, casi todas los que vienen a entrevista para trabajar en nuestra tienda son chicas Entonces puedo tener el trabajo? una mirada confundida cruz su rostro y se pregunt si debera irse. La duea sigui sonriendo y dijo calmadamente, Oh, no me refera a eso. Slo pienso que es bueno para variar, de verdad! Puede que sea un poco duro que yo lo diga, pero eres muy guapo y creo que las clientas volvern slo para verte. Si no tienes ningn problema con eso, puedes tener el trabajo. Shiina ya haba esperado que lo pudieran dejar en el puesto para atraer a la clientela. En el bar donde haba trabajado hasta el mes pasado, pas lo mismo. Excepto que esa vez las otras trabajadoras haban intentado competir por su afecto y provocado problemas. Al final, le pidieron a Shiina que se fuera, ya que era el que haba estado por menos tiempo.

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Pero esta duea de tienda de apariencia amistosa probablemente no hara algo tan irracional. Incluso si su objetivo era que l diera vueltas y tocara a un montn de chicas, no le importara. Shiina levant su rostro y con una mirada fija dijo, Oh, no me molesta para nada. Puedo comenzar en cualquier momento. Muchas gracias. Inclin su cabeza profundamente. La duea rpidamente inclin la suya de vuelta. Le dijo que le explicara las particularidades del trabajo ms tarde, pero que primero le mostrara los alrededores de la tienda y le explicara las reglas. Su primer turno sera la noche siguiente. Ella se despidi amablemente y l se dirigi a la estacin de trenes. El viento nocturno de otoo enfriaba su piel por debajo de su camisa blanca, bajo su chaqueta. Si no hubiese pasado de casualidad por la pastelera y visto el letrero de Se necesita ayudante en la ventana, no estara trabajando maana. Haba entrado a la tienda seguido por un impulso. Una de las razones de tal repentina accin de su parte fue que tuvo que renunciar a su anterior trabajo, por lo que tena mucho tiempo libre. Y debido al incidente del otro da con Hayato, se sinti incluso ms deprimido cuando tuvo que irse a casa. Pero, ante todo, quera terminar las cosas con Kanako para que Sasagawa no se enterara de nada ms sobre ellos. Sasagawa probablemente pensaba que estaba durmiendo con una mujer mayor slo para obtener dinero. Pero eso era lo que Shiina quera que l creyera. Apret sus labios y camin por el pueblo, que haba sido coloreado por el sol poniente. Kanako era una figura de madre para l y cuando estaba con ella, el placer reemplazaba la presin en su pecho y el sexo saciaba el hambre de afecto que tena.

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Nunca quiso que Sasagawa descubriera que su sucia vida sexual era una forma de mantener su balance mental. Se baj del tren en una estacin cercana y camin hacia su casa. Era una construccin de panel barata que su padre haba realizado en la esquina de un rea residencial. Desde el pilar hasta el patio, cada espacio posible estaba llen con flores estacionales que su madre haba plantado, y todas parecan estar teidas de naranjo debido a la puesta de sol. Se par en la entrada. La placa con el nombre pareca sacada de un cuento de hadas; era nauseabunda. Pequeas plantas en macetas rodeaban a Shiina. Incluso cuando estaba casi oscuro afuera, no haba ni una sola luz dentro de la casa. En el silencio mortal, comenz a recordar lo que Hayato le haba dicho. Este fin de semana, los tres iremos a visitar a la abuela a Nagoya! Hoy era viernes. Su padre probablemente haba llegado temprano a casa del trabajo y todos se haban ido alegremente juntos. Haban cerrado toda la casa y, como es usual, no le haban mencionado ninguna palabra. No era raro que algo como eso sucediera. Incluso cuando eran familia, no tenan nada que ver con Shiina. Ninguno de ellos tratara de animarlo, nadie tratara de entrometerse en su vida tampoco. Desliz su mochila por uno de sus hombros y busc en el bolsillo delantero desganadamente. Sin embargo, no haba nada ah. All era donde normalmente dejaba la llave de su casa, pero no recordaba haberlo hecho esta maana. Su madre an haba estado ah, por lo que no se preocup de echar llave a la puerta. Con pnico, sac su billetera del bolsillo de su uniforme escolar. Revisando por dentro, vio que todo lo que le

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quedaba eran 5.000 yens. El resto del dinero que haba recibido de Kanako ya estaba en el banco. No necesitaba ese dinero para la escuela y no quera andar trayendo tanta cantidad, en caso de que fuera acosado nuevamente por las hienas, as que tambin dej su tarjeta de dbito en la habitacin. En otras palabras, con la cantidad de dinero que le quedaba en su billetera, no sera capaz de sobrevivir hasta que volvieran a casa. Se senta desolado, y comenz a sentirse deprimido cuando pens en tener que ir a trabajar maana. Dnde dormira? No tena ni un solo amigo a quien pedirle alojamiento. Dej su mochila en el prtico embaldosado de rojo ladrillo. Tambin se sent y suspir profundo. Despej el cabello de su rostro y se sac sus lentes toscamente. Pens en romper el vidrio y entrar de esa forma, pero rpidamente desech la idea. Incluso cuando nadie pensara siquiera en tratar de robar este tipo de casa, su madre tena instalado un sistema de seguridad. Se enviara una seal a la compaa de seguridad y no estaba seguro de si le creeran que era un miembro de la familia. Ni siquiera poda confiar en que su madre lo avalara si llegaban a contactarla, despus del ltimo incidente con Hayato. La nica persona en la que poda pensar y quien podra prestarle dinero con tan poca anticipacin era Kanako. Dobl sus anteojos. Se sinti pattico por ser ella la primera persona en la que pens. Shiina mir hacia un lado con una expresin melanclica en su rostro. Recin haba obtenido un nuevo trabajo, as que tambin podra tener una excusa para terminar su relacin. Qu irnico. Estaba a punto de arruinar su plan. Comenz a deprimirse. Sin embargo, antes de que lo supiera estaba marcando su nmero en su

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celular. Su llamada no puede ser completada. La persona que est tratando de contactar se encuentra actualmente fuera del rea de cobertura Colg en la mitad del simple anuncio. Kanako tena su propia familia. Probablemente estaba ocupada. Renunci a la idea. Pero, a quin ms le podra preguntar? No haba forma de que fingiera no tener casa y quedarse en la estacin de trenes o en el parque. Quiz en una estacin ms calurosa, pero no haba forma de soportar las fras maanas slo con su uniforme escolar puesto. Abri su libreta de direcciones que apenas estaba llena y vio una escritura que se vea seria. En este punto, no tena opcin. Sintindose lamentable, marc el nmero de su secundaria. Um, disculpe. Habla Shiina de la clase 2-F. Est Nakahara-sensei an en la escuela? La joven mujer al final de la lnea le pidi que esperara, y Shiina as lo hizo, escuchando la msica de fondo que vena del telfono. Al? Qu pasa? La voz de este profesor de aula calm su nerviosismo. Respirando profundo, pidi el primer favor de su vida. Sensei lamento mucho pedir esto, pero podra prestarme algo de dinero?

Camino de vuelta a la escuela, saba que Nakaharasensei y el director eran los nicos an all. Haba oscurecido por completo y la luz proveniente de adentro de la sala de staff era brillante.

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Nakahara estaba sentado cerca de la ventana, lejos del escritorio del director, y hablaba en voz baja. Puedo prestarte algo de dinero, pero ests seguro de que estars bien en un hotel hasta que tu familia vuelva a casa? Cruz sus brazos y se reclin sobre su silla. Le indic con su mano a Shiina que se sentara en una silla cercana, pero Shiina permaneci de pie. Nakahara era el profesor de ciencias, as que l tambin usaba un abrigo blanco. El de Sasagawa estaba sucio, pero ya que Nakahara era casado, el suyo siempre estaba como recin lavado y limpio. De cerca, la diferencia era evidente. Su abrigo blanco estaba bien planchado y tena un aroma agradable. Manteniendo su rostro sin expresin alguna, Shiina dijo De todas formas, siempre cuido de m mismo. Estar bien. No es eso a lo que me refera... oh, hablaste por telfono con tus padres? pregunt Nakahara. No no an dijo Shiina misteriosamente, y pareca que Nakahara lo haba malentendido. Si su profesor segua preguntando, de verdad estara en problemas. Bueno, qu tal si los contactamos, slo para estar seguros? Aunque no es que no te crea dijo Nakahara cuidadosamente, y volvi a echarse atrs en su silla. Shiina no saba quin ms pedira dinero prestado a un profesor a no ser que de verdad lo necesitara. Pero supuso que probablemente haba algunos estudiantes que hacan ese tipo de peticin. Desde el punto de vista de su profesor, Shiina no podra decir que las opciones eran iguales a cero. Debido a que Shiina era muy tmido, la gente normalmente lo malentenda.

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 Qu sucede? pregunt Nakahara. No me s los nmeros de celular de mi mam o de mi pap nuestra familia no es muy cercana dijo titubeante, y mir hacia abajo. Lo dijo porque no quera que Nakahara interfiriera en su vida familiar anormal. Pero Nakahara continu con un rostro calmado. Pero tu hermano menor fue de viaje con ellos, verdad? No es eso lo que me dijiste antes? Lo que dijo era cierto. Sin embargo, Shiina no poda contarle el resto de la historia, que su familia lo haba olvidado. Shiina apret su puo con humillacin y arrug su frente. Trat de recobrar la compostura cerrando lentamente sus ojos. Nakahara probablemente se dio cuenta de que su comportamiento era diferente de lo comn, as que se le ocurri un compromiso. Estoy casi seguro de que aqu tenemos sus nmeros de contacto. Tan pronto hable con ellos, te prestar el dinero. Bien? dijo gentilmente, y le dio a Shiina una palmada en el hombro. Probablemente era para tranquilizarlo, pero Shiina comenz a temblar con nerviosismo en respuesta al toque desconocido de un hombre. Oh, lo siento susurr Nakahara, y retir su mano con una mirada sorprendida en su rostro, sus ojos completamente abiertos. Tom la carpeta de Shiina de su cajn del escritorio y luego tom el auricular del telfono. Todo lo que Shiina pudo hacer fue lamentar la reaccin que tuvo frente al toque de Nakahara. Hola, habla el profesor del aula de Jun-kun, de la secundaria Futaba. Mi nombre es Nakahara. S. S.

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Shiina se preguntaba si Nakahara estaba hablando con su madre o su padre. La sensacin que dej el toque de Nakahara en su piel le trajo horribles recuerdos, y Shiina suspir, mirando hacia abajo. S, y entiendo eso, Sra. Shiina, pero S . Repentinamente el tono de voz de Nakahara cambi y Shiina volvi a la realidad. Mir fijamente el rostro serio pero a la vez amargo del profesor. Entiendo. De todos modos, no volvern por una semana? Entiendo. Entonces, yo mismo cuidar de Jun-kun. S. S, adis . Nakahara luca un poco hastiado cuando colg el auricular y enfrent a Shiina. Al parecer tu hermano contrajo apendicitis y est hospitalizado en Nagoya, as que no volvern por un buen tiempo. Dicen que tomar ms o menos una semana que los medicamentos hagan efecto, y tu madre cuidar de l. Tu padre se fue de ah para ir a un viaje de negocios. Est bien . Shiina recibi la noticia con una mirada desinteresada en su rostro. Saba que esa no era la historia completa; pudo deducirlo por la mirada de Nakahara. Su madre probablemente tena la misma actitud de siempre. Seguramente hizo sentir a Nakahara incmodo. Comenz a detestar a su madre incluso ms por tratar mal a todo el que tuviera que ver con Shiina. Se sinti miserable y comenz a sentir arrepentimiento hacia Nakahara. Cerr sus ojos con una expresin de dolor en su rostro y lo cubri con una mano. Tu familia? comenz a preguntar Nakahara, paus y luego renunci completamente a su pregunta. Suspir. Shiina nerviosamente se puso en guardia, pero en vez de eso Nakahara dijo con una voz ms animada, Oye, Shiina, te quieres quedar en mi casa?

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 Qu? Los ojos de Shiina se abrieron completamente en respuesta a esta sugerencia repentina. Nakahara cruz ambos brazos y se inclin sobre sus rodillas mientras continuaba. Ahora, mi esposa tiene nueve meses de embarazo. Se acerca la fecha del parto. Es nuestro primer hijo, as que es obvio que quiero estar ms con ella, pero a partir de maana tengo que ensear lecciones suplementarias despus de clases. Estara bien si pasas un poco de tu tiempo libre con ella? Qu te parece eso? Por supuesto, puedes quedarte hasta que tu familia vuelva a casa. Shiina mir fijamente los ojos serios de Nakahara. Estaba feliz con su propuesta, pero no estaba acostumbrado a que alguien ms lo cuidara, as que le fue difcil acceder. Mir hacia abajo, puso una mano en su mentn y escuch continuar a Nakahara. Mi esposa era chef, as que hace comidas muy buenas! Puede hacer cualquier cosa . Los ojos de Nakahara se arrugaron cuando sonri. Probablemente tena ms o menos la misma edad de Sasagawa. Era una sonrisa amigable. Comida, eh? Creo que aceptar eso Shiina sonri tmidamente, inclinando su cabeza hacia un lado. Pronto se dio cuenta de que Nakahara no le estaba pidiendo que se quedara en su casa por obligacin. No era del tipo que hace algo con malas intenciones. Tomando la sonrisa de Shiina como signo de consenso, Nakahara se levant de su silla. Bien, entonces est decidido! Tus cosas bueno, supongo que no las puedes sacar si no puedes entrar a tu casa, verdad? Si hay algo que necesites, podemos comprarlo en el camino . Empuj la silla debajo del escritorio y junt sus cosas.

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Shiina observ a su profesor cuando se inclin y pregunt, Sensei, dnde vive? En la parte norte de Futaba. Bien, eso quiere decir que est en el vecindario. An puedo llegar fcilmente al trabajo. Por primera vez en mucho tiempo, record la calidez de la generosidad de alguien ms.

Eran cerca de las 8 cuando finalmente llegaron al departamento de Nakahara. Incluso cuando haba escuchado que los profesores no ganaban mucho dinero, era un edificio nuevo y agradable. Las paredes eran de concreto y haba muchos edificios idnticos alineados a lo largo del camino. Pequeos arbustos rodeaban las paredes y bajo la escalera de emergencia haba una parrilla de bicicletas. Haba muchas de ellas, pertenecientes a los nios, alineadas en forma desordenada. Probablemente este lugar estaba diseado para las familias. Pudo ver los juguetes de los nios esparcidos por aqu y por all en las terrazas y en el patio en el primer piso. Shiina se senta fuera de lugar en este tipo de situacin; incluso cuando tena una familia, estaba acostumbrado a estar solo. Nakahara lo dirigi hacia el centro del edificio del sur, y comenzaron a subir las escaleras, detenindose en una habitacin en el segundo piso. Toc el timbre y escuch una voz muy dulce de una mujer joven contestar, Bienvenido a casa! desde el otro lado de la puerta, que se abri con un chirrido. Los grandes ojos de la joven descansaron en Shiina, quien estaba de pie detrs de Nakahara.

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Luca como si an estuviera en sus veintes. La esposa de Nakahara tena una sorprendente cara de inocencia. Era tan linda, que si no estuviese embarazada, probablemente trataran de abordarla donde quiera que fuera. Mami-chan, este es el estudiante del que te habl por telfono. Se quedar con nosotros por un tiempo, as que cudalo bien, si? Nakahara le advirti con una sonrisa. Shiina se tranquiliz y comenz a presentarse, Um, soy Sin embargo, el rostro de la esposa de Nakahara, a quien l haba llamado Mami-chan, se ilumin y lo interrumpi con un chillido. Qu? Dios mo! Es tan lindo! As que este es el tipo de nios a los que les enseas, Yuukun? Yuukun? Shiina mir a su profesor y Nakahara lo mir de vuelta, avergonzado. Mi primer nombre es Yuuichi. Como sea Le indic a Shiina que entrara. Shiina lo hizo, entrando a la sala de estar y haciendo una reverencia. Era ms pequea que la casa de Shiina, pero estaba decorada con colores clidos y pareca muy cmoda. Mami sostuvo su gran estmago con ambas manos y se sent lentamente en el sof. Me puedes decir tu nombre una vez ms? Su rostro se vea incluso ms lindo cuando sonrea tan inocentemente. Ah, mi nombre es incomodarla, Sra. Nakahara. Shiina. Shiina Jun. Siento

Oh, no te preocupes por eso! Est bien! La habitacin de nuestro beb an est vaca. Es una nia, as

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que est decorada un poco cursi, pero espero que no te moleste. Yuu-kun te traer un futn luego . Se acarici tiernamente su gran estmago. Nakahara se sent a su lado. Shiina pudo sentir que se preocupaban mucho el uno del otro y que anticipaban con mucho entusiasmo su primer hijo. Dese haber podido nacer en una familia como la de ellos en vez de una con una mam imprudente y un pap aptico. Sintiendo que el dolor se le hinchaba en su pecho, Shiina mir a ambos y dijo, Estn seguros de que est bien si me quedo en la habitacin de su beb? En respuesta a su voz insegura, Mami sonri ampliamente. Oh, est bien! Estoy segura de que quieres algo de privacidad, en especial para llamar a tu novia o algo! dijo en tono de broma, lo que lo relaj. La personalidad amistosa de Mami era agradable. Estaba seguro de que esta era una de las cosas que atraa a Nakahara hacia ella. Mami ri, pero luego su rostro se volvi repentinamente serio. Oh, a propsito, Jun-kun no me molesta si llamas a Yuu-kun Sensei, pero quiero que me llames por mi primer nombre. Que me llames Sra. Nakahara me hace sentir vieja! Est bien, Mami san? Inclin su cabeza, lo que hizo que el rostro de Mami se iluminara nuevamente. Llmame Mami-chan! Oye, ahora! Nakahara reprendi a Mami. Su expresin era gentil, y Shiina pudo deducir que estaba loco por ella. Shiina ri entre dientes y repiti sus palabras. Mamichan.

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Mami, que haba sido llamada como lo haba pedido, sonri felizmente. Oh, Dios mo, escuchar a un nio tan lindo llamarme as me hace tan feliz! Lo siento, Yuu-kun, pero me hace sper feliz! Con su risa, Shiina se dio cuenta de que Nakahara lo estaba mirando. Pareca como si lo estuviese observando actuar como nunca lo vio en la escuela. Cuando sus ojos se encontraron, Nakahara le sonri gentilmente. Bueno, cenemos. Jun-kun, hay alguna comida que no te guste? Mami se levant y su vientre redondo luca dolorosamente pesado. Olvidando que Nakahara estaba justo ah, Shiina se levant protectoramente. La mir mientras caminaba hacia la cocina, con una expresin de preocupacin en su rostro. Um, no, no hay ninguna, respondi. Qu buen nio! Incluso cuando Yuu-kun es profesor, es muy exigente! Ojal l pudiese aprender de estudiantes como t! Mami comenz a balancearse hacia la cocina, luciendo fuera de equilibrio. Djeme ayudarla! Voltendose, Mami mir su rostro y estall de la risa. De verdad te ves preocupado! Pero las mujeres embarazadas podemos hacer los quehaceres de la casa sin problemas. Sin ningn tipo de ejercicio moderado, engordars innecesariamente. Oye, estoy bien, as que vuelve a tu asiento. Si un chico genial como t est al lado mo todo el tiempo, puede que me desmaye! dijo, rechazndolo gentilmente.

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Con desnimo, Shiina volvi a sentarse en el sof. Intercambi miradas con Nakahara, quien lo miraba admirablemente. Shiina, no tena idea de que fueras tan amable, dijo su profesor. Eres verdaderamente bueno cuidando a las personas. Siempre actas tan fro en clases, no lo puedo creer. Shiina se arrepinti de haber mostrado su verdadera naturaleza, pero ya que estaba en frente de Nakahara sinti un poco de alivio. Nakahara no actuara como Sasagawa, quien se comportara violentamente y luego tratara de lamer sus heridas. Alej su mirada y puso ambas manos en sus rodillas. De verdad? Nunca nadie ha dicho que soy amable o que soy bueno cuidando a la gente, as que no lo s. Bueno, tienes un hermano menor, verdad? Probablemente es por eso, dijo Nakahara en un tono convincente. Esto hizo que Shiina recordara cuando Hayato era pequeo. Era un chico problemtico y lloraba durante toda la noche. Shiina record que su madre haba estado muy ocupada con su hermano menor. Ni siquiera poda quitarle los ojos de encima hasta que aprendi a caminar. Nunca sabas lo que hara. Su familia lo haba mimado en cada etapa de su desarrollo. Y ahora, evitaba a Shiina y le hablaba con mucho odio. Hayato lo olvidaba, lo evitaba. Sin embargo, Shiina se senta protector con Mami y con los menores. Tena un sentimiento de tutela. Si no poda obtener todo lo que quera, al menos quera que los dems estuviesen satisfechos. Si eso era debido a Hayato, era una irona.

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La comida que prepar Mami estaba efectivamente deliciosa, tal como Nakahara lo haba dicho. Despus de eso, Shiina tom un bao y le dio las gracias a Mami, quien estaba tejiendo en la sala de estar. Pareca que Nakahara ya se haba ido a la cama, ya que Shiina no lo vio por ninguna parte. Shiina le dio las buenas noches a Mami y estaba a punto de irse cuando Mami dijo, Tienes ropa sucia? Shiina no saba si se refera a si tena que lavarla l, o qu. Oh, siempre lavo la ma en la lavandera dijo sin pensar. Siempre? Mami hizo un gesto extrao y mir a Shiina. Sonri vagamente y dej de lado el asunto con una risa. Oh, mi ropa para lavar tiende a acumularse Tan pronto como lo dijo, se sinti culpable. Mami y Nakahara confiaban en l y lo estaban dejando quedarse en su casa, sin embargo l haba dicho una mentira estpida como esa. Bueno, entonces hagmoslo antes de que se acumule. Psamela. Su mano femenina le hizo un gesto para que le entregara la ropa que sostena. El anillo de matrimonio que usaba en su mano izquierda brillaba bajo las luces. No poda dejar que la esposa de Nakahara hiciera tal cosa. Shiina trat de rehusarse, y dijo, No, est bien. Yo lo har. No te preocupes por eso! Es totalmente automtico, ya sabes. Tu ropa no aade mucho ms a lo que ya tengo.

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Oh! O te avergenza que vea tu ropa interior? Era hermosa incluso sin maquillaje. No, no es eso protest Shiina. Entonces dmela! Aprovech la oportunidad y le quit la ropa de sus manos. Refunfu y comenz a caminar hacia el bao. Shiina seriamente le grit desde atrs, Gracias, Mamichan! Con su cabello largo y crespo fluyendo detrs de ella, Mami repentinamente volte su cabeza. Vaya. Acabas de hacer que se me paralice el corazn dijo con un rostro serio. Luego sonri amablemente. Shiina sonri y la vio alejarse.

Las hojas de la fila de rboles Gingko que pudo ver desde la sala de clases estaban a la mitad de volverse rojas. El equipo de bisbol pas con sus uniformes blancos. Shiina vio a otros estudiantes caminar alrededor del campus, alistndose para ir a casa. Vio al equipo de atletismo. Colocando su mano sobre el marco de la ventana, se inclin. Estaba matando el tiempo mirando por la ventana. Incluso si tomaba en cuenta el tiempo que le tomara llegar a casa y cambiarse, an era demasiado temprano para ir a trabajar. El cielo despejado se vea demasiado alto. Era un da de otoo claro y placentero. De pronto no poda creer que estuviese parado ah apreciando el cambio de las estaciones. Despus de su primer da de trabajo, haba quedado

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exhausto. Haba vuelto a la casa de Nakahara. Mami lo haba estado esperando y lo escuch con inters mientras l le contaba todo sobre su da. Pens para s mismo cmo debera sentirse una familia. Un sentimiento clido haba comenzado a brotar dentro de l y se haba quedado rpidamente dormido en el futn que ola como si hubiese estado afuera al sol. Pero ahora senta que slo era una carga para la familia Nakahara, que todo era slo un juego de fantasa. Cada vez que eran amables con l se deprima ms. De todas formas, qu quiero? se susurr a s mismo mientras observaba las parejas pasar. Anhelaba la calidez de una familia como la de ellos? O quera volver con su verdadera familia, incluso cuando era fra? O slo quera a alguien que lo amara como Nakahara amaba a Mami? No tena nada, as que ni siquiera saba qu opcin quera. Dej salir un largo suspiro y mientras se volteaba en la vaca sala de clases, se dio cuenta de que estaba solo. Sasagawa estaba de pie apoyado en la entrada, al lado del podio. Debiste haber ido a mi casa, dijo. Sus brazos estaban cruzados sobre su pecho y mir fijamente a Shiina sin pestaear. Su pelo negro estaba peinado hacia atrs y el sol que se filtraba desde el pasillo haca que su abrigo se viera de un deslumbrante color blanco. Qu? pregunt sospechosa en su rostro. Shiina con una mirada

Te ests quedando con Nakahara, verdad? Oh, s, eso fue lo que pas.

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Sasagawa se descruz de brazos. Shiina sinti una sensacin de peligro y rpidamente se alej de la ventana. Si era acorralado, no saba lo que Sasagawa hara. Incluso cuando Sasagawa saba que era su estudiante, aun as lo habra forzado a hacer tal terrible cosa. Qu profesor tan inhumano. Shiina trat de expresar calma y busc una salida. Cmo podra defenderse? Tan pronto como pens en que debera escapar rpidamente, Sasagawa entr a la sala. Sobresaltado, Shiina se acobard. Observ mientras el abrigo blanco se acercaba a l. Sus piernas automticamente se retrajeron, preparndose para escapar. Shiina. Retrocedi cuando Sasagawa dijo su nombre, y su muslo choc contra un escritorio detrs de l. Por eso, fue desviado de su ruta de escape, y no haba tiempo de corregirla. Sasagawa se acerc an ms a l mientras luchaba por recobrar su postura. Shiina saba que la nica opcin era escapar. Comenz a correr hacia la entrada de la sala de clases, pero Sasagawa lo persigui, abrindose paso entre las filas de escritorios. Justo cuando Shiina estaba casi fuera de la puerta, Sasagawa agarr su brazo. Qu? Estamos jugando a atraparnos? Shiina dijo enojado. Sasagawa lo volte duramente y lo tom en sus brazos, los cuales acariciaron la espalda de Shiina. Luego apres sus hombros. Shiina trat de mirar hacia otro lado, pero la mano de Sasagawa agarr su mentn. Fummph!

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Sasagawa presion sus labios contra los de Shiina una y otra vez. Los dientes de Shiina debieron haber estado cerrados para impedir su entrada, pero automticamente se separaron, permitindole a Sasagawa empujar su lengua hacia dentro. Los ojos de Shiina se entrecerraron vergonzosamente y su pecho se llen de un sentimiento de incomodidad. Sonidos hmedos provenan desde el interior de su boca, tal y como haba sucedido la otra noche. La lengua de Sasagawa explor cada rincn de su boca. Esa tcnica tampoco haba cambiado. Por qu amaba tales besos agresivos? Presionando su cuerpo, Sasagawa sumergi profundamente su lengua hasta la parte de atrs de la garganta de Shiina, a quien le fue difcil respirar y pens que se sofocara. Arrug su rostro y trat de empujar el pecho caliente de Sasagawa una y otra vez, pero el hombre no ceda. Se sinti abrumado y, finalmente, Sasagawa lo solt. Aturdido, Shiina luca como si estuviese a punto de colapsar. Sasagawa lo sostuvo con su brazo. Incluso cuando no quera, Shiina lo dej hacer esto para recobrar el equilibrio. Baj su cabeza con vergenza. Lentamente elev su rostro y mir el rostro de Sasagawa. Su expresin era masculina y cariosa. Lo estaba mirando fijamente. Quiz era porque respiraba con dificultad, pero Shiina sinti como si su corazn fuese a estallar. Jadeando, mir nuevamente hacia abajo. Odiaba ese sentimiento incmodo. Trat de alejar la mano de Sasagawa y afortunadamente no hubo objecin. Dejaste de mirarme en clases incit Sasagawa.

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Shiina lo mir y dijo sarcsticamente S, porque hubo un extrao malentendido con un chico. Hmmm? Sasagawa meti ambas manos en los bolsillos de su abrigo blanco y se sent sobre un escritorio detrs de l. Pareca como si se fuese a quedar ah. Eso es todo. No tengo nada ms que decirte dijo Shiina, mirndolo ferozmente. Sin embargo, eso no borr la sonrisa empastada en el rostro de Sasagawa. Te dije antes que si te sentas solo, podas confiar en m dijo. Estaba preocupado de si t lo estabas o no considerando seriamente. Shiina alej sus ojos de la mirada fija de Sasagawa. Sasagawa haba dicho lo mismo otra vez, entonces, quiz lo deca en serio? Su expresin era extraamente sincera, y Shiina no vio ninguna pista de que fuese alguna broma o mentira. No saba cmo actuar. Debera ignorarlo? Haba una parte de l que quera confiar en Sasagawa, si eso implicaba escaparse de la oscuridad que resida dentro de l. Pero los brazos que estaban extendidos en frente de l tambin tenan un sentimiento definido de peligro. Adems, cuando Nakahara o Mami lo trataron tan bien, se distanci de ellos, por lo que no haba mucha posibilidad de que pudiese confiar en Sasagawa, quien era demasiado duro. Slo se convertira en un objeto de lstima. No importa lo solitario que me sienta, nunca confiar en ti, dijo con una voz desafiante, pero a la vez dbil. Los ojos de Sasagawa se entrecerraron. Por qu no? Porque no puedo confiar en ti.

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 Por qu no? demand Sasagawa nuevamente, de forma tosca. Shiina supuso que sin importar lo que respondiera, Sasagawa no quedara satisfecho. No hasta que Shiina asintiera con su cabeza y estuviera de acuerdo con su propuesta. Por qu no lo piensas mejor? Shiina dijo sarcsticamente. Si an te queda conciencia o moral, creo que sabrs por qu. Sasagawa se par del escritorio con un estrpito y dijo, Es porque tengo una conciencia que no puede dejarte solo . Se acerc y se par ante Shiina. Continu en voz baja Entiendo lo que es no encajar. Pero a diferencia tuya, no crec siendo excesivamente sensible. Es as como puedo sobrevivir. Shiina en silencio desvi sus ojos de los de Sasagawa. Si al hombre no le importaba escuchar su opinin, de todas formas no importara cmo reaccionara. As de terco era. Los ojos de Sasagawa eran sinceros. Shiina sinti el peligro y su atractivo al mismo tiempo. El tipo de soledad que sientes slo puede ser llenado con una cosa dijo Sasagawa. Pero si no es algo que puede ser encontrado en un da, entonces tienes que esforzarte para obtenerlo, verdad? Mientras ms intentes esconder tu dolor, ms difcil ser para m cuidarte. Entonces, en otras palabras, me tienes lstima? pregunt Shiina framente. Sasagawa cruz sus brazos y lo mir, riendo. Crees que tendra lstima por ti? No soy un tipo tan agradable. He

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sido tu profesor desde la primavera, verdad? Mientras sigo pensando en una razn de por qu mis ojos siempre deambulaban alrededor tuyo, finalmente me di cuenta. A diferencia de otros estudiantes, siento algo especial hacia ti dijo, como si estuviese hablando consigo mismo. Shiina lo mir, tratando de decidir si estaba o no diciendo la verdad. Suspir profundamente. Justo cuando pens que Sasagawa haba terminado de molestarlo, esta vez estaba intentando conquistarlo? Al darse cuenta de que las palabras de Sasagawa haban influenciado un poco su corazn, se burl y mir hacia abajo. Si crea todo lo que este tipo estaba diciendo, sera su prdida. Entonces, quieres ayudarme? Eres bastante presumido, no? No creo que tengas esa clase de poder dijo desagradablemente. Pero Sasagawa no se rindi tan fcilmente. Incluso si no tengo ese poder, tengo brazos que pueden sostenerte afirm seriamente. Eso no es suficiente dijo Shiina tercamente. Shiina. Sasagawa calm a su estudiante llamndolo por su nombre. Su llamativa mirada luca extraamente ardiente, sofocante. Este tipo de atmsfera entre un profesor y un estudiante era definitivamente extraa. Shiina estaba confundido. Ests tratando de decirme que me amas y que haras lo que fuera por m? Eso es mentira. Slo quieres hacer cualquier mierda bizarra que quieras conmigo. Es ridculo. Podras dejarme solo? Eres un profesor, no tienes mejores cosas que hacer?

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Sasagawa estuvo tranquilo por un rato. Alej su mirada. Luego dijo Te estuve esperando esa noche. Desde que te bajaste de ese Mercedes plateado. Por qu le estaba diciendo a Shiina la verdad ahora? Shiina lo mir fijamente. Las palabras de Sasagawa se repetan en su cabeza una y otra vez.

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Captulo 5
a pastelera estaba abierta hasta las ocho de la noche, as que Shiina normalmente no volva a la casa de Nakahara hasta casi las nueve. Subi las escaleras grises y toc el timbre del departamento. Desde adentro vino la voz alegre de Mami, quien abri la puerta. Jun-kun, bienvenido a casa! Estoy de vuelta! Incluso cuando sta era una familia falsa, su genuina sonrisa lo haca verdaderamente feliz. Oh, Mami-chan, esto es de parte de la duea. Los dulces de su trabajo eran localmente famosos. Ya que haba de muchos tipos, con frecuencia sobraban, y la duea permita que los empleados se los llevaran a casa. Mami exclam felizmente y tom la pequea caja blanca de las manos de Shiina. Esta era la segunda vez que haba trado algo a casa, sin embargo ella an estaba tan feliz como si fuese la primera vez. Los tres se sentaron alrededor de la mesa del comedor. Mami ya haba comido, as que comenz a escarbar el pastel, y Nakahara estaba disfrutando una bebida de sobremesa. Se sentaron con Shiina mientras l cenaba. Haban pasado cuatro das desde que se haba estado quedando con ellos, pero esta era la primera vez que Nakahara estaba aqu a esta hora. Segn Mami, los coordinadores del club tenan que volver a casa cerca de las siete.

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 Sensei, no tiene que exterminar hienas en la estacin de trenes? pregunt Shiina mientras llevaba una cuchara llena de pollo guisado a su boca. Exterminar hienas? Qu es eso? pregunt Nakahara con la mirada vaca. Shiina trat de explicar. Bueno, escuch que los profesores hombres estaban haciendo turnos para vigilar a los ladrones en la estacin de trenes. Qu tipo de escuela hara eso? Quien quiera que sea, de seguro tiene agallas. Cada vez que veo a esos chicos, me da mucho miedo y quiero escapar! dijo Nakahara con una sonrisa humilde. Shiina baj la voz y pregunt Entonces qu hay de nuestra escuela? No lo creo respondi Nakahara. Pero el nico que podra ser capaz de enfrentar a esas hienas es probablemente Sasagawa, no lo crees? Sola ser un completo delincuente, o as lo escuch. Cada vez que salimos a beber con colegas, siempre aparece algn miembro de una yakuza y le habla. Atemorizante, no? pregunt con una risa. De verdad Shiina sonri dbilmente y actu como si estuviese mirando los platos alineados en la mesa. Un sentimiento oscuro de desasosiego comenz a brotar desde su pecho. Esa historia que Sasagawa le cont el otro da en la estacin de trenes haba sido una completa mentira. l no haba estado ah para alejar a las hienas. Tal y como lo dijo la otra vez despus de clases, haba estado esperando a Shiina todo

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el tiempo. Y como incluso saba el color del Mercedes, debi haber estado all por un buen rato. Shiina haba contactado a Kanako justo despus de la escuela, as que quiz Sasagawa de alguna forma haba escuchado sin querer su conversacin. Shiina se congel al pensar en el deseo avasallador de Sasagawa. Su cuerpo se paraliz en la mesa del comedor. Incluso cuando Sasagawa no estaba all, sinti como si lo estuviera acariciando una mano invisible. Tembl. Jun-kun? Mami llev el tenedor con dulce de pastel a sus labios y lo mir extraamente. Hmm? Sonri, devolvindole la mirada. No quera sentirse as. Quera olvidar lo que haba pasado. Detrs de su sonrisa animada estaba lamentndose. El calor que haba olvidado lentamente comenz a palpitar y doler dentro de los lugares donde Sasagawa haba estado.

Shiina se coloc su chaqueta sobre su camisa recin planchada, y le dijo a Mami, Ahora me voy! Est bien, ten cuidado! Se despidi alegremente. Su estmago se sala de su vestido, que le llegaba hasta el tobillo. Incluso cuando su beb no lo apreciara tanto, Shiina dese que estos das pudiesen continuar eternamente. Justo cuando lleg al primer piso, se detuvo y apuradamente volvi sobre sus pasos. Haba olvidado su hoja de repaso y su libro de texto de matemticas. Lo siento, olvid algo! Jadeando, empuj la puerta y vio a Mami parada en la entrada, con una mirada atnita

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en su rostro. Sus ojos eran anchos como los de una mueca, no pestaeaban. Claramente algo andaba mal. Mami-chan? Shiina mir hacia abajo y vio un charco de agua alrededor de los pies de Mami. Oh, no. Romp fuentes susurr.

Nakahara expres su agradecimiento con una voz de alivio. Me alegra mucho de que estuvieras con ella! Supongo que no esperaba que se rompiera su fuente de esa forma. Le haba dicho que si eso pasaba que llamara al hospital, pero supongo que entr en pnico. Me alegra que no estuviera sola! Slo haba unas pocas personas en la sala de staff a la hora de almuerzo, pero nadie ms estaba alrededor del escritorio al lado de la ventana adems de l y Shiina. Despus de que haba encontrado as a Mami, Shiina record que el nmero del hospital estaba anotado en un tabln de anuncios en la sala de estar, y llam inmediatamente. Pidi hablar con una enfermera y le pas el telfono a Mami. No haba seal de su normal disposicin alegre. Probablemente estaba en estado de shock; por eso Shiina tuvo que ayudarla. Estaba tan indefensa, que la acompa al hospital y no se fue hasta que lleg Nakahara. No se preocupe. Estn bien Mami-chan y el beb? pregunt Shiina con preocupacin. Nakahara sonri. S, es una nia sana.

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Abri su telfono celular y le mostr una imagen de Mami sosteniendo un pequeo beb y haciendo la seal de paz. Al ver su sonrisa animada y amable, Shiina se sinti inmediatamente aliviado. Mientras miraba la imagen, Nakahara comenz a tener una mirada de arrepentimiento en su rostro. Coloc sus codos en el escritorio, cambiando de posicin. Su silla rechin fuertemente. De todas formas, de verdad lo siento, pero Mami tiene que permanecer en el hospital un tiempo. Me quedar con mis padres en su casa, que queda cerca. Pero en cuanto a ti S? Shiina grab la imagen de la sonrisa de Mami en su mente. No saba si la vera nuevamente algn da. Devolvi el telfono a Nakahara. Sinti que su profesor ya haba hecho planes para l. Bueno, me estuve atormentando sobre qu hacer mientras estaba en la sala de staff cuando Sasagawa se ofreci a ayudar dijo Nakahara. Vive solo en un departamento y dijo que estara feliz de que te quedaras con l. Qu? Shiina exclam con incredulidad. Los estudiantes y profesores que estaban cerca de ellos voltearon a mirar, sorprendidos. No, de alguna forma puedo arreglrmelas solo. De todas maneras, mis padres volvern a casa en pocos das y puedo quedarme en un hotel, as que por favor no haga que me vaya a casa de Sasagawa. No le agrado, y si voy a su casa, quin sabe lo que me har! Shiina implor desesperadamente.

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Profundas arrugas se formaron en los lagrimales de Nakahara. Eso es ridculo. Pero si usted mismo me dijo que l era peligroso, o no? dijo Shiina. En el momento en que pens que probablemente no debera hablar tan alto de esas cosas, fue interrumpido por otra voz. Shiina. Justo frente a sus ojos, de pie al lado de Nakahara estaba Sasagawa, como siempre vistiendo su sucio abrigo blanco. Cuando sus ojos se encontraron, Sasagawa se burl de l. Shiina lo mir de vuelta feroz y malhumoradamente. Nakahara se volte hacia Sasagawa y sonri animosamente. Sasagawa! Muchas gracias. Por favor, cudalo. Seguro que s asinti Sasagawa, tratando de actuar como una persona agradable. El Nakahara serio no vea las intenciones del comportamiento de su colega. Quedarse en casa de Sasagawa slo significaba una cosa. Shiina elev impacientemente su voz. Devulvame los 10.000 yens que me sac. Luego podr quedarme en un hotel . Estir sus manos. De qu ests hablando? pregunt Nakahara, ignorante. Mir a Shiina, luego a Sasagawa. Sasagawa levant su cabeza y puso una mano en su mentn. No tengo idea dijo sin rodeos. Shiina no pudo pasar por alto el desdn que se estaba formando en las comisuras de sus labios.

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Probablemente debido a que estaba preocupado por Mami, Nakahara abandon la sala apenas termin la clase. Y con eso, la ltima persona que le prestara dinero a Shiina desapareci. Sasagawa le dijo a Shiina que se lo llevara a casa y que no se ira sin l, pero Shiina lo ignor y volvi al departamento de Nakahara. Us una llave de repuesto que Nakahara le haba dado y junt las pocas cosas que tena ah. Contempl alrededor de la sala de estar y lo invadi la melancola. Incluso cuando slo era un parsito, ambos lo haban tratado demasiado bien. Incluso cuando saba que no poda quedarse ah eternamente, sinti pena por no poder agradecerles apropiadamente. Aquellos das calmados ahora haban pasado, y lo que ms le dola era que haba comenzado a confiar en ellos. No podra volver all de nuevo, pero no haba nada que pudiese hacer. Definitivamente era cmodo, pero tampoco perteneca all. Rega a su yo dbil, cerrando la puerta principal detrs de l. No tena la valenta suficiente como para pedir un prstamo en el trabajo que recin haba comenzado, as que se retir a tiempo como siempre. Estaba oscuro, y el fro viento de la noche lo congelaba hasta los huesos. A excepcin de su chaqueta, no tena nada ms para evitar el fro. Coloc ambas manos muy dentro de sus bolsillos y trat de prepararse para el fro. De todos modos, comenz a dirigirse a la estacin de trenes ms cercana. Era diferente a la que frecuentaban las hienas. Era una estacin pequea, mayormente abandonada, que utilizaban los estudiantes de

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la escuela secundaria Futaba. Debido a esto, los edificios all eran simples y pequeos, as que en realidad no haba lugar para l en donde dormir. Si se quedaba dormido, de seguro se enfermara. Tampoco pareca como si pudiese quedarse ah. Volviendo al camino por el que haba venido, medit hacia dnde ir. Dnde ms podra ir? Esta rea no le era familiar. No pareca haber casas o parques cerca. Camin sin rumbo y una rabia sin razn hacia Sasagawa comenz a brotar dentro de l. Por qu Sasagawa no lo detuvo cuando vio a Shiina irse despus de la escuela? Shiina no poda quedarse con el hombre que lo viol. Pero incluso as, Sasagawa no lo haba contactado en absoluto. Incluso cuando Sasagawa le haba dicho tercamente a Shiina que poda confiar en l, Shiina no poda creer que su profesor no estuviese preocupado por dnde estaba. Shiina quera reclamar sobre esta terrible situacin. Sac su celular del bolsillo. Si Sasagawa contestaba, Shiina lo maldecira y luego colgara. Se qued mirando fijamente la pantalla del telfono y vio el nmero de Sasagawa que Nakahara le haba forzado a marcar.

Cuando contest el telfono, Sasagawa dijo en un tono molesto que no podra haberse comunicado con Shiina incluso si hubiese querido, porque no saba su nmero. Con impaciencia, pregunt dnde estaba Shiina y dentro de pocos minutos se present en la estacin. Imprudentemente, condujo su Nissan blanco perla hacia el lado de la calle y se baj desde el asiento del conductor.

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Su vestimenta no era nada parecida a la que usaba en la escuela. Tena puesta una sudadera negra sobre una remera blanca y calzado Nike. Definitivamente vesta casual, pero haba algo encantador y a la vez vulgar en ello. Shiina lo mir silenciosamente y lo esper en la calle. Probablemente no has comido. Qu quieres? fue lo primero que Sasagawa pregunt. Shiina se cuestion si Sasagawa ya haba comido. No pudo deducirlo de su voz. Quiz an no, porque lo estaba esperando. Lo que sea dijo Shiina suavemente, mirando sus zapatillas deportivas mientras caminaba por el asfalto negro. Si no quera dormir en la casa de Sasagawa, por qu no escap despus de colgar el telfono? Era su culpa. Sigui all porque ya haba sido preparado para Sasagawa, para tener sexo con l. Lo hizo recordar esa noche. Su cuerpo hambriento haba aceptado a Sasagawa. Record cmo se sinti cuando Sasagawa haba estado dentro de l. Nerviosamente, mantuvo su rostro rgido. Pero Sasagawa habl como si todo fuese normal. Hay un restaurant familiar por aqu cerca, est bien? Encontr los ojos de Shiina por breves instantes y se sorprendi por la mirada en ellos. Shiina no saba si Sasagawa haba sentido o no lo que estaba pensando. Luch por mantener un rostro inexpresivo y dijo Est bien, pero seguir usando mi uniforme escolar... Decidi no terminar su oracin con Y si ambos vamos all y comemos juntos, no llamar demasiado la atencin? Record que Sasagawa era el tipo de hombre al cual no le importaba para nada lo que los otros pensaran de l.

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 Qu? Las dos manos de Sasagawa estaban metidas en su sudadera, y luca como si pensara que se estaban burlando de l. Sin querer ser molestado por la ms mnima cosa, Shiina cerr su boca. Despus de todo, terminaron comiendo en un restaurant, Shiina an con su uniforme escolar. La gente los miraba fijamente, pensando en definitiva que no eran un profesor y un estudiante. Cuando entraron a la tienda, el ambiente cambi. Todos los hombres del lugar parecan celosos y todas las mujeres lucan coquetas. Todos sus ojos estaban puestos en Sasagawa. Incluso la mesera que los atendi pareca hipnotizada por l. Um, tan pronto decidan lo que quieran ordenar, por favor presionen este botn dijo la joven mientras los miraba fijamente. Obviamente estaba tratando de deducir su relacin. Est bien respondi Sasagawa, sin desviar la mirada del men. La chica se inclin incmodamente y volvi al mostrador. Parece que eres muy popular, Sensei dijo Shiina mientras miraba alrededor del restaurant. An sin mirar hacia arriba, Sasagawa dijo arrogantemente y sin un indicio de risa, S, bueno, nunca he escuchado alguna queja . Cerr el men ruidosamente. En serio? dijo Shiina con una mirada aburrida. Al ver esto, Sasagawa comenz a hablar en un tono desagradable. A nadie le agrado en la escuela, pero t eres bastante popular, verdad? El otro da se te confesaron, no?

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Shiina devolvi la mirada fija a Sasagawa. Vio que el profesor tena cara de desprecio y bsicamente estaba actuando como si la confesin que sucedi en la escuela fuese de mentira. Shiina dijo framente S... pero no es en serio. Si comparamos, tu motivo fue mucho ms claro, Sensei. Motivo? repiti Sasagawa, mientras revolva alrededor de los bolsillos de su sudadera y sacaba algo. Shiina observ mientras un paquete de cigarrillos Mild Seven y un encendedor barato eran puestos en la mesa, y luego dirigi su mirada fija hacia Sasagawa. Esa chica mesera, las chicas sentadas a nuestro lado... todas te miraron de manera muy provocativa dijo. Jajaj! Sasagawa ligeramente golpe el borde de la caja y coloc un cigarrillo en su boca, sonriendo. Probablemente tambin haba notado las miradas fijas de las mujeres. Si l era el tipo de persona que poda darse cuenta de eso, poda hacer que cualquier mujer que quisiera se enamorara de l. Shiina mir hacia un lado con una expresin asombrada en su rostro y descans su mentn en sus manos. Si eres tan popular, por qu me deseas a m? solt. Lo que quiero saber es por qu no te gustan las nias de tu edad? Te acuestas con alguna mujer mayor, verdad? Es por las ganancias? interrumpi Sasagawa. Shiina cerr su boca y lo mir enfurecido, pero Sasagawa ya estaba con su mirada hacia abajo, hacia su cigarrillo encendido, el cual haba dejado sobre el cenicero. S, por las ganancias repiti Shiina, pensando en alguna excusa. Despus de haberse acostado con una mujer

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como Kanako, no haba tenido inters en chicas de su edad. Esa pareca la respuesta ms adecuada. Oh, est bien. Entiendo. Ya veo se burl Sasagawa. Shiina permaneci en silencio y Sasagawa se inclin en su silla, fumando su cigarrillo. Mir fijamente a Shiina con una mirada determinada, examinadora. A Shiina no le gust esta atmsfera. Levant la mirada y hostig a Sasagawa para que continuara. Qu? Lnzalo! Quieres que lo diga incluso si te hace dao? pregunt Sasagawa. No me har dao nada que tengas que decir Shiina lanz de vuelta. Sasagawa mir brevemente a Shiina y luego desvi su mirada fija hacia abajo. Sostuvo su cigarrillo entre sus dedos y dijo con una sonrisa en su rostro, Tienes el complejo de Edipo. Los msculos de la cara de Shiina se contrajeron con estas palabras inesperadas. Te ests burlando de m? No s de lo que ests hablando. Odio a mi familia! neg framente, pero Sasagawa no se retract. Se cuestion si Sasagawa iba a preguntarle por qu odiaba a su familia. En lugar de tu madre, tienes a esa mujer abrazndote cuando ests desnudo? O te gusta que te griten y restrinjan? De un modo o de otro, no es bueno dijo Sasagawa, rindose. Por un momento el rostro de Shiina revel que Sasagawa haba visto correctamente a travs de l. Torci su expresin para mostrar desprecio. Era esto por venganza debido a

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que Sasagawa lo deseaba y no poda tenerlo? Justo en medio de la conversacin, su profesor haba entrado profundamente en el corazn de Shiina y sacado a la luz el secreto ms oscuro que tanto haba tratado de esconder. Sasagawa lo haba arrancado y expuesto as nada ms. Shiina no poda perdonar tales horribles acciones. El desagrado en su pecho comenz a brotar ms y ms. Sise en voz baja, Ya te lo dije, ests equivocado. En qu? replic Sasagawa. Explcame para poder entender. El humo blanco que exhal se desplaz por el aire. El rostro de Sasagawa mostraba que estaba disfrutando lo que pasaba. Estaba tratando de provocar a Shiina. Si Shiina dejaba que Sasagawa llegara a l, slo se hara ms dao. Shiina aguant en silencio, apretando los puos que descansaban sobre sus rodillas, tratando de escapar de este sentimiento de peligro. Sasagawa lo mir derechamente y dijo, A tu edad slo puedes follar con mujeres mayores, no? Es tan pattico que me da risa. Los dedos de Shiina agarraron sus pantalones y tembl. Por qu Sasagawa tena que decirle esas cosas? A pesar de su rostro fro, la rabia creci dentro de l. Volte su mirada fija hacia Sasagawa. Ni siquiera vala la pena hablar con el hombre. Me voy dijo framente. A dnde? dijo Sasagawa, rindose. Sonaba tan desagradable que Shiina quera cubrir sus odos. El odio se expandi sobre su hermoso rostro.

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 A un lugar donde no tenga que verte! dijo, ponindose de pie y golpeando la mesa. Sasagawa puso una de sus manos sobre la de Shiina, contemplando la mirada sorprendida en el rostro del joven. Has estado solo demasiado tiempo observ Sasagawa. No tienes a dnde ir. No te presiones! De todas formas, Nakahara me pidi que te cuidara. En mi casa tengo comida, una baera y sexo. Qu ms podras querer? Fue terco hasta el final, lo que molestaba an ms a Shiina. Sin importar cunto tratara de sacar su mano, era intil. Enojadsimo, pudo sentir que Sasagawa estaba disfrutando esta situacin cada vez ms. Hay muchos lugares abiertos las veinticuatro horas. Matar el tiempo all. No te necesito dijo Shiina con indiferencia, frunciendo el ceo. Se forz lo ms que pudo por contener su rabia. Sin embargo, Sasagawa arruin firmemente sus planes, No me interesa si me necesitas o no. Pero sin importar qu, te llevar a mi departamento . Con calma, apag su cigarrillo a medio fumar en el cenicero. Shiina estaba en silencio y Sasagawa finalmente lo mir. Le dijo a Shiina con sus ojos que no lo dejara escapar. Permteme orden Sasagawa en voz baja. A Shiina le doli el estmago. Arrug su rostro y se rehus. No. Quiero hacerlo! insisti Sasagawa. No! dijo Shiina, elevando la voz. Todos a su alrededor voltearon a ver lo que estaba pasando. Ignor sus ojeadas curiosas y mir a Sasagawa.

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Sasagawa respir profundamente y concentr su mirada fija y aguda en Shiina. Se inclin sobre su silla y mir a Shiina con arrogancia. No tengo muchas oportunidades para hablarte fuera de clases. Sin importar lo tonto que fue, quera estar cerca de ti, as que te segu. Pero cuando te vi juntarte con una extraa mujer, me enoj, sabes? La persona que tanto deseaba estaba justo frente a m, pero no poda tenerlo por muchas razones. Y no poda evitar que se acostara con alguien ms. Mientras observaba que te ibas, me deprim. Pens que debera haberte violado o haber hecho algo antes, y me arrepent de pensar eso, pero no poda parar. As que me tendiste una emboscada. Qu tipo de...? Al ver que la comisura de los labios de Sasagawa se torca, Shiina decidi detenerse. Pudo deducir que el hombre iba a ser tan arrogante como siempre. Pero no te alegra de que lo haya hecho? Porque incluso cuando slo tuviste sexo con esa mujer, quedaste bastante bien, no? Sasagawa se burl. El rostro de Shiina se torci con humillacin. No ir a casa contigo. Te obligar. Shiina odiaba a Sasagawa por dar esa respuesta tan segura. Su mirada fija mostraba su aborrecimiento. No ir. Acabo de decir que s! Por qu Sasagawa estaba siendo tan dominante? Su voz era incluso ms autoritaria que la de Shiina. Shiina detuvo este intercambio intil y qued en silencio. Oye.

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Escuch a Sasagawa, pero lo ignor y mordi sus labios. La voz de Sasagawa se volvi misteriosamente seria. Si sigues siendo as de desobediente, voy a derribarte, arrastrarte fuera de aqu y desnudarte. As que iba a recurrir a la violencia, tal y como lo hizo en el bao de la estacin de trenes. Shiina saba, sin mirar, la cara que Sasagawa haba puesto cuando dijo eso. Haz lo que quieras dijo con desprecio, y liber su mano. En ese mismo momento, Sasagawa se levant. Pas por el lado de su silla y avanz. Un fuerte ruido hizo eco en la habitacin. Todos en el restaurant los miraron. La gente estaba mirando la mejilla izquierda de Shiina, la cual Sasagawa haba golpeado. La piel de Shiina palpitaba y se senta caliente. Volte su mirada fija hacia Sasagawa; sus ojos brillaban de rabia. Shiina no recordaba haber hecho algo malo. El culpable era Sasagawa. Su cabello desordenado colgaba sobre sus mejillas, y se levant an con asombro. Justo entonces, una mesera que haba permanecido de pie en el mostrador se acerc rpidamente con una mirada ansiosa. Se-seor! Lo siento. Nos vamos,dijo Sasagawa, pero no prest atencin a la mesera; en vez de eso, mir directamente a Shiina.

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La van color blanco de Sasagawa estaba ubicada en medio del estacionamiento. Era grande y luca tosca, muy parecida a su dueo. La primera y tercera lnea de asientos estaban intactos, pero la segunda lnea estaba presionada hacia abajo. En ese espacio, se poda escuchar una respiracin jadeante. Quiz por lo violento que Sasagawa haba sido, el delgado cabello de Shiina estaba desparramado por todos lados. No poda arreglar sus lentes, los que se haban resbalado hasta llegar a la punta de su nariz. Incluso su chaqueta y camisa mostraban pruebas de crueldad debido a los botones arrancados. El pecho de Shiina estaba expuesto. Ambas manos estaban sobre su cabeza, atadas fuertemente a ella con la corbata de su uniforme. Contener. Rechazar. Luchar. Haba intentado lo mejor que pudo hacer estas tres, pero fue intil. Sin nada ms que se interpusiera en el camino, no pudo negar ms las caricias de Sasagawa y se prepar para perderse en ellas. Volte su cabeza y exhal gentilmente. Vio que Sasagawa se arrodillaba ante l, enterrando el rostro entre sus piernas. Sus manos agarraron la parte posterior de las rodillas desnudas de Shiina. Hizo ruidos obscenos mientras volteaba su cabeza hacia un lado y hacia el otro. Su lengua se arrastr hacia abajo, y tena un dedo dentro de Shiina. Llev a Shiina hacia su boca y lo dirigi lentamente. Incapaz de soportar el placer, las piernas de Shiina temblaron. Si se mova incluso un poco, la corbata que lo tena amarrado afectara bruscamente sus muecas. Tena una mirada de angustia, pero su voz dilucidaba un poco de placer.

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 Mmnn...ahh...uh...nhhm...para... Cerr sus ojos y sacudi su cabeza. Si no haca eso, tena miedo de que Sasagawa viera que sus ojos estaban hmedos por la pasin. Ya senta el calor abrasador expandindose a lo largo de su cuerpo. Ya saba qu buscar, en qu lugar le dara el mayor de los placeres. No se atrevera a decirlo en voz alta, pero por dentro rogaba para que Sasagawa no sacara su dedo del lugar donde lo haba metido tan profundamente. Su interior se contrajo por la friccin. Sasagawa estimul esto e introdujo an ms profundamente su dedo dentro de Shiina. Mmm...ahhh...mmm... Lgrimas salan de los ojos de Shiina, y enterr su rostro en su brazo. Sus piernas, que estaban desnudas a excepcin de sus calcetines, subieron por el asiento. A este ritmo se correra antes de lo que realmente quera. Su rostro mostraba seales de incomodidad. No...no...para...espera... No quera correrse an. Sus ojos, llenos de lgrimas, miraron a la nica persona que lo poda liberar. Con esto, Sasagawa dej de moverse. Mir hacia arriba, alejando sus labios, y sac su dedo. Se levant del asiento, y se apoy en las piernas de Shiina. Quieres ir a casa? Qu? Los ojos mojados de Shiina se abrieron ampliamente por debajo de su cabello desordenado. El auto es demasiado estrecho para violarte. Hagmoslo en la cama dijo cruelmente Sasagawa. Abri la puerta lateral y se meti al asiento del conductor.

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Shiina comenz a comprender la situacin. Sasagawa iba a dejarlo as. Incluso cuando el calor recorra su cuerpo, su mente estaba sorprendentemente fra. El largo dedo de Sasagawa ya no estaba dentro de l. Su hbil boca ya no estaba succionndolo. Haba sido atado, as que tampoco poda masturbarse. El departamento de Sasagawa estaba slo a 10 minutos del restaurant, pero ese tiempo fue un infierno para Shiina, sentado en el asiento trasero de la van. No haba muchas tiendas abiertas a esa hora alrededor de esta rea, as que no haba mucha gente dando vueltas. Shiina se pona extremadamente nervioso cada vez que un gran camin o bus pasaba por la ventana. Incluso cuando saba que nadie poda ver hacia dentro a travs de los vidrios polarizados, la vista de l semidesnudo con sus piernas abiertas era definitivamente anormal. Tambin estaba mojado desde su trasero hasta sus muslos. La gran estabilidad de la van no permita a Shiina sentir muchos de los baches del camino, pero an se senta torturado. Consider gritar Por favor haz algo sobre esto!, pero las palabras no salieron de su boca. Mir hacia abajo y enterr su rostro en el lado de su brazo. Sus mejillas sonrojadas estaban calientes. Odiaba su cuerpo por sentir ese deseo ardiente de que Sasagawa entrara en l. Finalmente volte sus ojos, mojados por la lujuria, hacia el espejo retrovisor. Sasagawa estaba calmadamente fumando un cigarrillo. Soplaba el humo hacia afuera de la ventana para que no llegara donde Shiina estaba. La ventana estaba slo un poco abajo y el aire fro trepaba a travs de la van. Si estaba siendo as de considerado, por qu no enfriaba este calor

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proveniente de dentro de l? Shiina mir a Sasagawa con resentimiento. Lo vio mirando al espejo. Ya casi llegamos, aguanta dijo Sasagawa en un tono de burla. Shiina sinti crecer su rabia, pero no admitira que tambin se senta aliviado. Unos minutos despus, la van se estacion junto a un grupo de departamentos. Shiina slo pudo contemplar el escenario distradamente. Sasagawa se detuvo en un lugar que debi haber sido el estacionamiento, pero Shiina no sinti que sera liberado pronto. Sasagawa sali del auto, abri la puerta y se meti a la parte trasera de la van. La luz se encendi automticamente, iluminado las regiones inferiores empapadas de Shiina. Mirando hacia abajo, Sasagawa sonri y dijo Me preguntaba esto desde antes, pero por qu te mojas tanto? Nunca he visto a una mujer mojarse como t brome mientras agarraba una caja de pauelos desde el asiento delantero. Djame solo susurr Shiina, y desvi su rostro. Al advertir las manos de Sasagawa secando la humedad de entre sus piernas, sinti una nueva estimulacin. Se haba ablandado durante el viaje, pero sinti que estaba comenzando a ponerse duro nuevamente. Shiina se haba afrontado a una vergenza incluso mayor. Muy dentro de l, comenz a palpitar. Sasagawa limpi la cabeza de su pene, y con esto comenz a exudar ms nctar transparente. Mmm... Reaccionando a su suspiro, Sasagawa mir hacia arriba. Shiina haba bajado la guardia, y Sasagawa vio la mirada de placer en su rostro. No pudo aguantar la mirada fija de Sasagawa. Mordi su labio bruscamente.

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 Si no puedes esperar a llegar a la habitacin, puedo hacerlo aqu dijo Sasagawa, mirndolo con una expresin de humor en su rostro. Shiina estaba en silencio. Volte hacia un lado, evitando la mirada fija de Sasagawa. Sasagawa liber sus manos y junt su ropa interior y sus pantalones. El cuerpo de Shiina an estaba adormecido por haber estado en la misma posicin por mucho tiempo. Empuj su duro miembro dentro de sus bxers y se coloc sus pantalones. Sus manos palparon a tientas el cierre, e incluso se coloc su cinturn. Se levant y sali del auto. Exhal y cerr sus ojos. Sin embargo, no tena la energa para mantenerse en pie y tuvo que apoyarse en el auto. Puedes caminar? pregunt Sasagawa. Shiina cruz sus brazos y sacudi su cabeza hacia la derecha y hacia la izquierda. Saba que poda esperar a que el calor en su cuerpo disminuyera, o dejar que lo enfriara este hombre injusto. No quera elegir, por lo que se qued congelado. Oh, bueno. Vamos, entonces. Sasagawa agarr su brazo y lo ayud a caminar. No... Sultame! Shiina enterr sus talones, pero no fue capaz de competir contra la fuerza de Sasagawa. Sasagawa lo llev hacia dentro del departamento en el segundo piso del edificio adyacente al estacionamiento. Sin ninguna luz encendida, Shiina no saba dnde ir. Finalmente cuando entraron a la habitacin, haba algo de luz indirecta. No tuvo tiempo para relajarse, ya que Sasagawa lo empuj bruscamente hacia la cama doble. Sus dos brazos estaban clavados sobre la cama, y Sasagawa se tir encima de l.

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Sasagawa le sac los lentes a Shiina y rpidamente se sac su sudadera, tirndola al suelo. Se sac su remera y revel un cuerpo bien musculoso, el cual Shiina nunca hubiese imaginado que estuviese debajo de ese abrigo sucio. No slo estaban claramente definidos los pectorales y abdominales de Sasagawa, tambin qued claro que se ejercitaba regularmente. Probablemente fue a un gimnasio y bebi batidos de protena o algo as. Con ese rostro y ese cuerpo, las mujeres se lo comeran entero. Supondran que eso significaba que era bueno en el sexo, y una vez que se acostaran con l, nunca lo olvidaran. Ese es el tipo de esencia de salvajismo intenso que mostraba Sasagawa. Shiina. Al escuchar su nombre, la mirada fija de Shiina vacil. Qu tan diferentes a l eran las mujeres que obtendran placer al tener sexo con Sasagawa? Aclar su garganta patticamente y esper al hombre en frente de l. Estaba seguro de que su calor abrasador slo Sasagawa poda enfriarlo. Pero probablemente eso era lo que pensaba todo el que compartiera cama con Sasagawa. Incluso si era una persona especial, Sasagawa quiz no pensaba lo mismo. Incluso si Sasagawa le deca a Shiina que lo amaba y que quera ayudarlo, probablemente era slo de la boca para fuera. Esto es, si Sasagawa tena una segunda intencin de tener sexo con uno de sus estudiantes. Si Shiina se permita creer las dulces palabras de Sasagawa y era traicionado, no le quedara nada. Record las fras miradas de su familia y la negra oscuridad. No...no...no!

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Lo llen la ansiedad, y trat de escapar de los fuertes brazos de Sasagawa. Pero sin importar cunto luchara, Sasagawa no lo dejara ir. Precipitadamente sacudi su cabeza de atrs para adelante, y las lgrimas se derramaron por sus ojos. Sasagawa chasque su lengua y agarr las muecas de Shiina, las que an estaban rojas por haber estado atadas, y lo inmoviliz nuevamente a la cama. Mirando hacia arriba, Shiina vio la mirada fija y aguda de Sasagawa avanzando amenazadoramente sobre l. No te amaricones ahora rega Sasagawa en voz baja, acercando su rostro al de Shiina. Sus ojos penetrantes amenazaban a Shiina directamente. Me deseas, no es as? Entonces no actes como la vctima . Con sus piernas, abri las de Shiina y le tom una mano. Alcanz sus pantalones y sac la prueba de su excitacin. Mralo. Quieres esto, por eso lloras, verdad? dijo con una voz gentil pero a la vez provocadora. Jade bruscamente y con emocin. Esto despert la lujuria dentro de Shiina una vez ms, y un autodesprecio comenz a brotar dentro de l nuevamente. Sacudi su cabeza, negndolo desesperadamente. Aprovechando esta oportunidad, Sasagawa meti violentamente su caliente miembro dentro de Shiina. Ah...ah...ahhh! Se mezcl un sonido de placer y uno de angustia. Shiina arque su espalda en la cama y apret fuertemente la mano de Sasagawa.

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Despus de estar completamente dentro, Sasagawa exhal y ri ligeramente. Shiina abri sus ojos con vacilacin y encontr la mirada fija y caliente de Sasagawa. Sasagawa presion sus labios contra los de l. El beso fue brusco y apasionado. Mnnm... Shiina gimi, su boca llena de la lengua de Sasagawa. Al pestaear repetidamente, record que sus pestaas estaban hmedas por las lgrimas. Si no hubiese llamado a Sasagawa para decirle dnde estaba, la persona que yaca en la cama ahora podra no haber sido l. Sasagawa podra haber estado sosteniendo a alguien ms, gimiendo con alguien ms. El corazn de alguien ms pudo haber sido robado en vez del suyo. Sin importar quin fuera, habra sido lo mismo. Sasagawa se haba decidido por l, lo haba vigilado. Y tan pronto como Shiina se percat de ello, no caba duda de que ahora estaba bajo el control de este hombre. La cama rechin cuando Sasagawa se sent y alej sus labios. Shiina lo observ con una expresin de incomodidad, pero Sasagawa lo mir amablemente. Se sinti como si el corazn de Shiina fuese aplastado cuando un terrible dolor recorri su pecho. Recuper su aliento y alej la mirada amargamente. Si no confiaba en algo, nunca estara satisfecho. Sasagawa estaba empujando el corazn vaco y solitario de Shiina hacia l. No tena la fuerza de voluntad suficiente como para frenar esto, entonces por qu se rehusaba? Si se abra nuevamente, todo lo que tena que hacer era estar preparado para ahogarse. Ah...ahhh...ahhhh...

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Coincidiendo con el movimiento tipo pistn que Sasagawa haba comenzado, el cuerpo de Shiina tembl violentamente. Lgrimas rodaron por su rostro; lgrimas que no podan ser por la alegra de este placer. No conozco a nadie ms que pudiese poner una cara tan ertica como esa... dijo Sasagawa, pareciendo contento. Luego inclin un poco su cabeza y sonri. Tratando de aguantar la dura y profunda presin de Sasagawa sobre l, Shiina apret fuertemente su mano. Comenz a jadear. Se sinti como si aquellos sonidos ya no proviniesen de l. Era como si l fuese una perra ladrando con gozo al ser jodida por un semental. Era simplemente un animal. Levant su mentn y grit Nnn... ahhh... haaa... Sensei... Sensei... Se rindi ante las vibraciones, y esto hizo que Sasagawa presionara an ms duramente. Puso ms de su peso en la mano de Shiina y presion sobre la cama, y mientras jalaba y empujaba bruscamente, a veces un leve gemido se escapaba de sus labios. Al escuchar esto, Shiina estaba tan excitado que no pudo aguantar ms. Ambos actuaban de forma tan indecente, que el placer que obtena se volvi la realidad. Los sonidos de sus jadeos eran animales. El sonido mojado de ellos unindose se mezcl con los gemidos pasionales de Shiina, y la temperatura en la habitacin pareca elevarse. Ah...ahh...ahhh! Ahhh!

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Desvergonzadamente elev su voz y arque su cuerpo sonrojado. Su cabello suave, castao cenizo, estaba despeinado y pegado a sus hmedas mejillas. Sasagawa se sent ms derecho para poder entrar ms profundamente en l. Cuando hizo esto liber la mano de Shiina, pero l rog entre lgrimas que no la soltara. Los dedos de Sasagawa se entrelazaron nuevamente con los suyos y apretaron su mano fuertemente. Sin importar lo que pase, nunca te abandonar. Quiero cada parte de ti, sin importar lo sucia o dbil que est. Porque amo cada parte de ti dijo Sasagawa entre empujes, y sus palabras se escuchaban serias y verdaderas. Shiina abri sus ojos. El salvador que lo iba a rescatar de su solitaria oscuridad haba aparecido delante de sus ojos. El pecho de Sasagawa estaba sudoroso. Su cabello negro caa desordenadamente sobre su frente con una sensualidad masculina. Todo sobre l anonadaba a Shiina. Y si a eso se le aada la sensacin de peligro, se senta como si Sasagawa lo pudiera llevar a algn lugar diferente. Era una salida o un nuevo mundo de esperanza? An no estaba seguro, pero si poda hacerlo realidad, deseara que Sasagawa nunca liberara su mano. Los empujes de Sasagawa comenzaron a volverse ms cortos y la forma en que su dureza se introduca en Shiina lo llev casi al clmax. Shiina no pudo evitar hacer un sonido ms animal y grit Sen...sei! La sensacin en su estmago haba estado esperando ese momento. De entre sus piernas temblorosas se dispar un lquido clido. Su abundante y espeso semen se derram sobre su estmago. Un poco ms tarde, Sasagawa empuj ms duramente dentro del

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apretado agujero de Shiina y lo inund con un lquido clido. Ese lquido era prueba de que Sasagawa haba llegado al clmax. Shiina jade, intoxicado por el sentimiento resbaladizo dentro de l. Shiina. Sus ojos se encontraron. El sentimiento de placer abrumador luego de que se corri, el sentimiento de satisfaccin... Shiina nunca antes haba experimentado algo parecido a esto. Era ms profundo que cualquier cosa que haya sentido antes. Sus prpados se sintieron pesados y no pudo mantener su mirada fija en Sasagawa por mucho tiempo. Jadeando, mir hacia abajo. Su cabello estaba mojado con sudor, as que Sasagawa gentilmente lo retir de sus ojos por l. No lo olvides. Soy el nico que te entiende. La voz que susurraba dentro de su odo no tena rastro de presin en ella. Arrastrado por el placer del sexo, Shiina se perdi ante la fuerte voluntad de Sasagawa. Quera sentirse mal por ello, pero no ayudara en nada. La cabeza de Shiina estaba contra el codo de Sasagawa. Besos ligeros caan sobre sus labios. Mientras la presin de los besos aumentaba sinti el miembro de Sasagawa, que an estaba dentro de l, comenzar a estremecerse. Shiina se aferr al cuello de Sasagawa. Tuvieron sexo una segunda vez, y cuando sus cuerpos rogaban por una tercera vez, Shiina estaba exhausto. Hicieron el amor por horas y su cuerpo se volvi posesin de Sasagawa. Tambin pens que podra dar su corazn a Sasagawa. Era una tentacin que brotaba dentro de l y de la que no poda librarse.

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Al final, Shiina se qued dormido. Cuando despert, mir a su alrededor. La luz solar que se filtraba a travs de las cortinas era suave. Debi haber sido temprano en la maana. La habitacin an estaba oscura. Levantando su cabeza, el brazo de Sasagawa, que haba estado sostenindolo, caa dbilmente sobre la cama. Shiina supuso que se haban quedado dormidos de esa forma. Ambos estaban completamente desnudos, pero no estaba seguro de si se haba quedado dormido o se haba desmayado. Sin embargo, estaba claro que en algn momento Sasagawa lo haba limpiado. No haba huella de la incmoda pegajosidad de antes. Levantndose sobre un hombro, toc suavemente el hombro de Sasagawa, mirndolo fijamente. Durante el sexo, Sasagawa era brusco y salvaje, pero su rostro dormido luca muy infantil. Shiina trat de levantarse, pero Sasagawa, medio dormido, agarr su brazo. Mnnn... Los gruidos inconscientes de Sasagawa parecan estar regandolo para que no se fuera. Presion sobre la clida piel de Sasagawa.

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Captulo 6

-Y

as es como se resuelve eso. Est bien, siguiente problema.

A-hem! Shiina despert con un sobresalto por el lindo sonido de una chica aclarando su garganta. Pareca que se haba quedado dormido. Su brazo izquierdo haba sido estirado sobre su escritorio, pero su cabeza descansaba en su brazo derecho, el cual ahora estaba dormido. Jal ambos brazos hacia l y se levant de su escritorio sobre su libro de texto, que an estaba abierto. Salud con la cabeza a Ai, quien estaba sentada a su lado, y volte su mirada fija e indiferente hacia el podio. Sasagawa estaba de pie con su abrigo blanco puesto y pareca estar buscando a alguien en la sala, para llamarlo adelante. Sus ojos se encontraron y Sasagawa sonri con arrogancia. Haban estado juntos hasta esta maana. Y de quin era la culpa de que tuviera tanto sueo? Shiina pens mientras se le pona la piel de gallina. Shiina. La clara voz de Sasagawa haca eco a lo largo de la sala de clases. Shiina dej caer sus hombros y baj su cabeza. Haba estado durmiendo todo este rato, as que no haba forma de que pudiese resolver el problema. De hecho, ni siquiera saba en qu problema iban. Shiina se levant de su silla con un ruido y dijo suavemente, Lo siento, no lo s. Qu parte no sabes? dijo Sasagawa framente,

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sosteniendo su libro de texto con una mano. Shiina se call, y luego sinti que alguien ms lo estaba mirando. Era Ai. Sigilosamente, le estaba mostrando su cuaderno. Shiina lo mir y volte hacia Sasagawa. 2X-1 dijo rpidamente. Bien, tu respuesta es correcta, pero cmo lo resolviste? Sasagawa nunca haca preguntas con tanto detalle. Lo estaba intimidando a propsito. No lo sabes, verdad? Porque estabas durmiendo. Est bien. Nishida-san, si pudiste decirle la respuesta correcta, entonces es obvio que sabes cmo resolverlo. Ve a la pizarra y escribe la frmula. Est bieeeen... Ai se levant con una mirada de desagrado en su rostro. Shiina le lanz una mirada a Sasagawa y luego susurr Lo siento, Nishida-san. Con una mirada encantadora en su rostro, Ai sacudi su cabeza nerviosamente como diciendo Est bien. Sobre ellos, Sasagawa observaba su intercambio desde el podio, con una mirada aguda en su rostro. Cuando la clase de matemticas haba terminado, era la hora de almuerzo. Antes de dirigirse a la azotea, Shiina necesitaba comprar el almuerzo. Se levant y abandon la ruidosa sala. Un grupo de estudiantes se haba reunido en la fila de compras en la cafetera. Tan pronto como la seora de mediana edad del almuerzo vio a Shiina, supo exactamente lo que l quera. Se lo entreg inmediatamente. Normalmente, a un estudiante hombre no le

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gustara este tipo de trato especial, pero en comparacin a cmo lo trataban las otras chicas, estaba de acuerdo con su buena voluntad. Tom su billetera del bolsillo de sus pantalones. La abri inocentemente y no pudo creer lo que vean sus ojos cuando no haba casi nada de dinero en ella. Ayer haba tenido al menos unos pocos miles de yens en su billetera. Sin embargo, ahora slo le quedaban cuatro o cinco monedas! Las sac todas y juntndolas ni siquiera sumaban 100 yens. Cerr el compartimiento de monedas de su billetera. ...Me enga. Esa maana le haba dicho a Sasagawa que no necesitaba dinero cuando el hombre haba tratado de ofrecrselo. Le haba dicho que l pagara su almuerzo y que poda manejarse con el dinero que tena. Al parecer, Sasagawa haba tomado el dinero tan pronto Shiina haba dejado la habitacin. En otras palabras, quera que Shiina tambin dependiera de l en lo que respecta al dinero. Shiina no tuvo ms opcin que salir de la fila de compras. Suspir y camin hacia la sala de staff. Pas a travs de la puerta abierta. Los escritorios de acero estaban arreglados en forma de U alrededor del escritorio del director. Vio a unos pocos estudiantes y profesores alrededor, pero no vio ese sucio abrigo blanco. Disculpe. Ha visto a Sasagawa-sensei? le pregunt a la profesora de msica, quien estaba sentada cerca de la puerta. Era una mujer joven y bella, y sonri amablemente. No. Quiz est en el laboratorio de matemticas? . Dijo laboratorio de matemticas, pero esa sala era ms un depsito. Ah se guardaban varios materiales de enseanza y otras cosas. Ya que era una habitacin bastante privada, era

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donde se llevaban a cabo las reuniones individuales de los padres con los profesores. Estaba en el tercer piso de la parte norte del edificio escolar. En el rellano de en frente fue donde Morishita se le haba confesado a Shiina, as que Sasagawa probablemente haba estado en el laboratorio de matemticas en ese momento tambin. La sala de staff estaba en el primer piso de la parte sur del edificio. Era doloroso caminar todo ese trayecto hacia el laboratorio, y cuando volviera, no quedara mucho tiempo para comprar el almuerzo. Qu hay de Nakahara-sensei? pregunt Shiina, mirando a la profesora de msica con unos ojos que rogaban. Nakahara era su ltima esperanza. Oh, Nakahara-sensei siempre va al hospital durante el almuerzo. Quiere ver a su esposa y a su hija beb, as que se va inmediatamente ri nerviosamente la profesora. Tal y como Shiina lo haba temido, tena que caminar todo ese trayecto hacia el laboratorio de matemticas. A quin le importa el almuerzo, a este paso ni siquiera podr ir a trabajar! Shiina abandon la sala de staff con pasos lentos y se dirigi hacia la parte norte del edificio. Arrastraba sus pies, cansado por la falta de sueo y por el sexo que haba tenido toda la noche. Finalmente logr llegar al oscuro tercer piso. Si Sasagawa no estaba ah, se enojara de verdad. Puso una cara de amargura y abri la puerta del laboratorio sin golpear. Te he estado esperando. Sasagawa mir a Shiina con una sonrisa burlona y se

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puso de pie en frente de las cortinas, que estaban amarillentas por el sol. Se sent ligeramente sobre un escritorio con sus brazos cruzados. Tena puesto un reloj, que Shiina haba visto antes, en una de sus muecas que se asomaba por su abrigo sucio. Shiina silenciosamente estir su mano, y Sasagawa volte y tom una bolsa de papel. Qu es eso? pregunt Shiina. Lo que me sobr del almuerzo dijo Sasagawa, tirndole la bolsa. Shiina la agarr de manera refleja. Qu hay del dinero de mi billetera? pregunt, mirando hacia arriba. Sasagawa se levant del escritorio y escarb los bolsillos de su abrigo. No s. Era una estpida mentira de alguien que infantilmente guardaba rencor porque Shiina no aceptara su dinero. Shiina puso una cara de malhumor acorde ms tiempo perda. Sasagawa prendi un cigarrillo que haba sacado de su bolsillo. Shiina lo observ sin pestaear. Cada una de las acciones de Sasagawa pareca lujuriosa y le dio vergenza. No poda quitarle los ojos de encima. Deja de mirarme y sintate dijo Sasagawa. Shiina volvi a la realidad y dijo Siempre como en el techo. Puedes drmelo ms tarde o algo as, pero si no tengo dinero, no puedo ir a trabajar. As que devulveme el dinero que me sacaste de mi billetera. Coloc su mano en el pomo de la puerta. Repentinamente, Sasagawa lo abraz fuertemente por detrs.

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 Aqu? Shiina chill. Qu estaba pensando Sasagawa? Pero Shiina no pudo decir la segunda parte en voz alta. No tena derecho. Porque l tambin haba estado mirando a Sasagawa de manera provocativa. Sasagawa parti el cabello de la parte trasera del cuello de Shiina con sus labios, besndolo suavemente. Sus labios se movieron hacia su odo. Shiina dio un profundo suspiro. Sinti la calidez de Sasagawa en su cuello. Una vez que decidi ceder ante el toque de Sasagawa, supo que no haba vuelta atrs. Mmm Su cuerpo se relaj y cerr sus ojos. Los dedos de Sasagawa treparon el espacio entre su chaqueta y su camisa, acaricindolo. Haban tenido sexo hasta la madrugada, por lo que Shiina estaba sensible en extremo. Al tocar su miembro estaba delicado, pero los nudillos de Sasagawa lo frotaron gentilmente hasta que nuevamente se endureci. Shiina, susurr Sasagawa con una voz tierna. Shiina comenz a jadear. No actes tan amistoso con Nishida frente mo... Sus labios tocaron un lbulo de su oreja y se sintieron calientes. An sostena a Shiina por detrs. Shiina volte su rostro para enterrar su frente en la curva del cuello de Sasagawa, arqueando su espalda. Sasagawa lo bes por todos lados. Pasaron juntos todo el tiempo que pudieron. Cuando quedaban cerca de 10 minutos del almuerzo, Sasagawa dej la habitacin para ir a comer. Con su rostro an enrojecido y una mirada aturdida en su rostro, Shiina abri la puerta del laboratorio de matemticas.

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 Oh! Nakahara lo esquiv, y luego mir el rostro ruborizado de Shiina. Shiina? Nunca te haba visto aqu antes . Pareca interesado en la mirada en el rostro de Shiina, y lo estudi cuidadosamente. Oh...um, tena una pregunta sobre nuestra tarea, as que vine aqu... contest Shiina vagamente. No poda encontrar las palabras para preguntar animosamente sobre Mami y el beb. Dijo que no haba almorzado an, as que se disculp y sigui su camino hacia el techo. Normalmente coma en la parte sur del edificio, pero no tena tiempo para volver ahora. ste era el lugar ms cercano al laboratorio de matemticas. Empuj la puerta que daba al techo y vio el cielo nublado. Camin sobre el cemento, que estaba un poco mojado por la lluvia. Se sent en un lugar que pareca bueno y abri la bolsa de papel. Dentro de ella haba el mismo tipo de bebida energtica y de pan que Shiina siempre coma en el almuerzo. Sasagawa haba se haba desviado para comprarle esto a Shiina? Lo haba visto sosteniendo las mismas cosas ese da en el rellano con Morishita y lo haba recordado? En cualquier caso, estaba claro que no era coincidencia. Shiina estaba un poco impresionado. Sac los contenidos de la bolsa. Quedaba algo en el fondo. Shiina sospech y sac eso tambin. Era un papel inservible doblado. Al abrirlo, encontr cerca de 13.000 yens. En la mitad del papel estaba escrito: Era tu dinero, as que te lo devuelvo. Era la misma letra que haba visto en el pizarrn en la clase de matemticas.

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Los 10.000 yens restantes que no haban estado en su billetera ayer probablemente eran los que Sasagawa le haba sacado a cambio de exterminar a las hienas. Mirando sus manos, Shiina sonri repentinamente. Bajo el cielo gris, su cabello caf cenizo ondulaba con la brisa de otoo.

Ese da despus del trabajo se dirigi directamente a la casa de Sasagawa. Camin por la ciudad en la noche con la ayuda de los faroles y las luces brillantes provenientes de las casas en el camino. Pudo or los sonidos de los perros ladrando en los patios traseros. Antes, cuando caminaba solo como ahora, siempre tena puestos sus audfonos. En parte era porque siempre le haba gustado la msica, pero tambin haba necesitado el sonido de la voz de alguien ms para ayudarle a combatir la soledad. Pero ahora era diferente. En vez de algo que pudiese comprar con dinero, la presente sensacin de alguien tomando sus manos era ms importante. Ya no quera tener que proteger su corazn. Tena a alguien que lo tomara en sus brazos y ese hecho lo haca muy feliz. Mientras iba camino al trabajo, Sasagawa lo haba llamado preguntndole a qu hora estara en casa. Podra haberlo llamado nuevamente mientras estaba trabajando. Lleno de esperanza, abri su telfono. Haba dos llamadas perdidas. Sonriendo, revis el registro de llamadas. Mirando los nombres, sinti la decepcin brotar en su pecho. Una era de un nmero que no conoca. La otra era de Kanako, a quien no haba podido localizar el otro da. Tena

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dos mensajes de voz y los escuch con una mirada triste en su rostro. El primero era de su madre. Deca que estaban en casa y que lo dejara entrar maana. Al parecer, haba alguna razn para que no lo dejara ir a casa hoy. Siguiendo con los mensajes, reprodujo el de Kanako: Hola, soy yo. Siento no haber contestado tu llamada el otro da. En estos momentos estoy sola en el hotel donde vamos siempre: el Hotel Lakeside. Quiero hablarte de algo, as que por favor contctame hoy. Puedes llamar a mi celular o a la recepcin. Fin del mensaje. Shiina cerr su celular y, mientras segua caminando, se perdi en sus pensamientos. La voz de Kanako era extraamente gentil, pero tena un poco de impaciencia. Hasta ahora, por lo general era l quien la llamaba, y si no contestaba, lo intentaba al da siguiente. Era raro que tuviese tiempo libre en un da como este. No era el tipo de mujer que tena suficiente tiempo libre como para ir a un hotel sin razn aparente. Entr a un callejn angosto. Haba enredaderas marchitas torcidas alrededor de la base de un poste telefnico frente a l. Era justamente como su pasin por Kanako se haba marchitado. Shiina mir fijamente las enredaderas de aspecto desagradable y abri su celular una vez ms. Luego de sonar tres veces, Sasagawa contest. Hola, soy yo. Surgi algo y puede que llegue un poco ms tarde. S. Pero tengo que volver a casa maana, as que esta ser nuestra ltima noche juntos. As que prometo que volver a casa, a ti , dijo Shiina firmemente. Si fuera por l, se ira directamente al departamento. Pero quera aclarar las cosas con Kanako; de lo contrario, estara pensando en eso en todo momento. Haba estado usando a Kanako por sexo. Sonaba cruel, pero ella ya no tena nada

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que ofrecerle. No poda slo ser su amigo, y su deseo sexual por ella ya no exista. As que tena que aclararlo de una vez por todas. Era lo correcto, y Kanako se lo mereca. Despus de que Sasagawa le diera permiso, contact a Kanako. Sinti crecer su rabia al escuchar su animada voz. Se dirigi al hotel.

Se baj del taxi que ella llam para l y pas por la elegante entrada del hotel. Cuando vesta ropa comn y corriente, la persona de la recepcin por lo general lo ignoraba. Pero esta noche la mirada fija de esa persona se sinti casi dolorosa. Shiina puso su expresin fra de siempre y se dirigi al ascensor. La puerta se abri y una alfombra oscura se extendi ante l. Cuntas veces haba visto esta misma escena con Kanako? Pas las puertas color caoba que tenan nmeros dorados grabados en ellas. Finalmente se detuvo frente a una de ellas. Era la Habitacin 1305, habitacin en donde estaba Kanako. Al tocar el timbre, escuch pasos rpidos desde adentro. Odiaba permanecer en el pasillo solo, as que volte hacia un lado. Si la puerta se abra y alguien ms lo vea con Kanako, adivinaran inmediatamente su relacin. Cuando se dio cuenta de eso, se deprimi. Jun-kun! La puerta frente a l se abri. Kanako tena una mirada atnita en su rostro cuando vio a Shiina de pie en el pasillo. Haba predicho que podra reaccionar de esta manera. Claramente vio la mirada de descontento en el rostro de ella.

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Saba por qu Kanako tena esa expresin: an vesta su uniforme escolar. Lo haca ms real el que l no fuera slo un estudiante de escuela secundaria acostndose con una mujer mayor, sino que ella fuera una madre con dos hijos que se acostaba con un chico de 17 aos. l siempre se haba cambiado su uniforme antes de reunirse con ella. No haba duda en su mente de que en ese momento ella lo haba mirado como lo hara una madre. Sin embargo, esto debi haber despertado incluso ms sus deseos, ya que su mirada era provocativa y hmeda. Shiina se sac sus lentes con una mano y movi su cabello del camino. Kanako pareca hipnotizada por sus acciones. Empuj sus angostos hombros y la forz a entrar. Kanako-san, yo tambin tengo algo que hablar contigo . Le fue difcil incluso hablarle. Sin embargo, ella no pareca notar su mirada fija fra y arrogante. Mir hacia arriba y dijo con voz infantil, Quee? Se arrim a l, pero l quera quitrsela de encima. Ni siquiera tena ganas de forzar una sonrisa. En vez de eso, dijo rpidamente, Te lo dir despus. Primero dime de qu estabas hablando en tu mensaje. Los ojos de Kanako se dilataron y sonri gentilmente. Sus labios rojos se tensaron y dijo, Oh, eso. De verdad no es tan importante . Tir de su brazo para acercarlo, acaricindolo con su nariz. Desde este ngulo, poda ver la parte superior de su cabeza. Haban avanzado slo un paso dentro de la habitacin. Shiina se estremeci y dijo, Kanako-san, hoy no

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puedo. No vine aqu por eso. Por qu no? Por qu importa por lo que viniste? Ests enojado porque no te devolv la llamada el otro da? Tir con sus manos del cinturn de Shiina. Sus uas estaban pintadas de un rojo brillante. Claramente estaba concentrada en una sola cosa. No estoy enojado, pero no puedo. Evidentemente, Kanako no quera escucharlo. Se alej de l y mir hacia arriba con ojos que parecan demandar Por qu no? Shiina mir hacia abajo y explic directamente con sus ojos medio cerrados, Kanako-san, tuve sexo durante toda la noche y tambin esta maana. Es probable que no pueda endurecerme nuevamente. Kanako lo mir sorprendida y luego sus temblorosos labios forzaron una sonrisa. Oye, Jun-kun, quin es ella? Es de tu escuela? O ella...? Estaba tratando de actuar como una adulta, pero Shiina sinti lstima por ella mientras observaba sus labios temblar. Con calma, la interrumpi y dijo De todas formas, creo que amo a esa persona. As que no puedo... No! lo cort en voz baja. Su personalidad intencionada estaba mostrando sus verdaderos colores. Este no era el rostro que l sola ver, y Shiina estaba casi celoso de que Kanako pudiese abandonar su respeto por s misma y ser as de insistente. Incluso si dices que no, no cambiar de opinin , declar con firmeza, pero Kanako no pareca haber aceptado esto.

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 Dije que no! Me importas demasiado! Cmo pudiste darme la espalda y ser tan fro? Slo lo hiciste por el dinero? Lo siento dijo Shiina, y decidi dejarlo as, lo que la silenci. Sus zapatos negros de charol pisaban muy fuerte el alfombrado impecable color vainilla. Vesta una falda chifln a la rodilla, lo que revelaba sus piernas largas y delgadas. Siempre usaba prendas de ropa interior blancas o negras con muchos lazos. Cuntas veces ella haba estirado sus brazos y lo haba consolado? Lo siento, Kanako-san. Su cuerpo delgado le recordaba a su madre. Nunca ms volvera a ella. Mir fija y sostenidamente su rostro. Sus labios se movieron cruelmente y luego dijo, Adis. El rostro de Kanako luca triste. Arrug su rostro, probablemente para retener las lgrimas. l pens que era extrao que se sintiera tan aptico al hacer esto. No haba dejado que esta persona entrara en su corazn, as que sin importar lo que dijera, no era su problema. Mientras pensaba eso, repentinamente se dio cuenta de algo. La situacin era la misma con su madre. Haba alejado a Shiina y no lo volvera a acercar. Ella tambin le haba cerrado la puerta. Volte hacia la puerta, provocando que su mochila diera un giro brusco. Vacil en el pomo de la puerta. Kanako lo sigui. Espera! Puede que me divorcie! Qu tiene eso que ver conmigo? pregunt sin voltear.

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Kanako no reaccion ante el desprecio en su voz. Mi esposo dijo que haba estado trabajando horas extra, pero que efectivamente estaba teniendo una aventura. Ciertamente, eso nos hace dos, pero no hay forma de arreglar nuestra relacin. Shiina dijo con un bufido. No me digas que quieres aceptarme. Es una broma, verdad? Mientras intentaba distanciarse de ella, Kanako elev su voz hasta ponerse histrica. Eso no es lo que estoy diciendo! Entonces, qu? pregunt molesto. Volte para encararla. Kanako permaneci en silencio por un rato y luego comenz a hablar. Es slo que estoy un poco solitaria. Cuando estoy contigo, puedo olvidarme de todas las cosas malas. Y ya que estoy teniendo una aventura, tambin pens que podra ser capaz de perdonar a mi esposo. Shiina estaba en silencio. Siento haber sido tan egosta. Si quieres terminar, podemos hacerlo. Pero a cambio, quiero que te quedes conmigo esta noche dijo Kanako seriamente. Ella haba sido abandonada por su esposo y estaba a punto de ser abandonada tambin por su amante. La compasin brot dentro de Shiina. Pero no puedo hoy dijo, encontrando su mirada fija. No poda soportar ver su rostro lamentable. Estabas conmigo porque tambin te sentas solo, verdad? Si dejas que termine as, ambos terminaremos solos, lamiendo nuestras heridas. Ya no puedo aguantar ms eso! dijo con voz llorosa.

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Mir al techo, suspir y luego abraz su delgado cuerpo. Tienes razn. Siempre estuve solo, y siempre era muy solitario. Cuando quera afecto, te llamaba. Tambin te llamaba cuando todo pareca ir mal. Eras la nica que poda satisfacerme y confiaba al tener sexo contigo. Kanako respir ruidosamente y en silencio inclin su cabeza hacia abajo. Puede que ella sea mi ltima mujer, pens mientras la sostena cerca de l y juraba no volver a tocarla de nuevo. Sin embargo, no se arrepenta de dejarla ir. Dio golpecitos en su cabeza gentilmente, y Kanako acarici su mejilla con su nariz. l la haba usado en reemplazo de su madre. Ella lo haba usado para huir de las obligaciones para con su esposo. Ambos eran solitarios y no estaban satisfechos, por lo que se haban usado mutuamente. Ambos haban necesitado el uno del otro. Luego de que el llanto de Kanako se haba detenido, Shiina dijo No me arrepiento del tiempo que estuvimos juntos. Pero t no eres la persona que quiero. Slo dormir con esa persona se lo jur a s mismo y a Kanako. Tantola amas? pregunt en voz baja. Sinti lstima por ella, porque eso era lo nico que poda preguntar. An no tengo la confianza para decrselo, pero algn da lo har respondi con firmeza. Pareca que Kanako haba sido finalmente convencida. Llorando, le mostr una sonrisa que indicaba que se haba dado por vencida.

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 Shiina Sasagawa llam desde la cama doble. Shiina se meti a la cama a su lado, y sta rechin por el peso de los dos hombres. Mir alrededor de la habitacin de Sasagawa. El piso no tena nada encima. Las paredes blancas de yeso mate, el marco de ventana negro, el clset y la cmoda le daban a la habitacin una sensacin de simpleza. Era lo suficientemente grande para que viviera slo una persona. Haba fotografas de gente que Shiina no conoca pegadas en una divisin ubicada al lado de la cama. Haba algunos chicos de mirada violenta, quienes probablemente eran los amigos delincuentes del pasado de Sasagawa. Haba algunas chicas lindas y tambin haba algunas chicas bellas que miraban framente a la cmara. Algunas fotografas tenan comentarios escritos en ellas. Una deca, Novia de Tetsu-kun, escrito con letra femenina. Otra deca, Te casaras conmigo? Esta maana las haba mirado antes de irse a la escuela y haba adivinado que el primer nombre de Sasagawa era Tetsuya. Esto confirmaba sus sospechas. Tambin vio cuntos amigos tena Sasagawa. Incluso cuando l haba dicho que no le gustaban los grupos, estas fotografas eran la prueba de que mucha gente era atrada por su personalidad. Luces cansado, as que te dejar descansar esta noche . El fuerte brazo que acercaba ms a Shiina ola al mismo jabn que l us. Cerr sus ojos y se sinti envuelto en un nuevo sentimiento de comodidad. Sasagawa haba dicho que la nica forma de terminar con la soledad que estaba sintiendo era llenarla con lo que estaba buscando. Shiina pens que lo que estaba buscando era el amor de su madre y de su familia. No pensaba que poda obtener eso, pero ahora no senta esa oscuridad

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familiar y solitaria. Sasagawa sostena fuertemente su mano. Estaba lo suficientemente contento para creer en l. Sensei. Era un poco ms tarde de lo que haba esperado, pero pudo dormir al lado de Sasagawa hasta la maana. Shiina intent desesperadamente vencer el sueo, queriendo permanecer en esta cmoda atmsfera. Hmm? La voz proveniente de arriba sonaba feliz e hizo a Shiina sentir que no estaba solo. Enterr su rostro en el clido pecho de Sasagawa, como un nio. Esto se siente bien. Di eso de nuevo cuando lo estemos haciendo se quej Sasagawa, alegremente, y Shiina sonri. Sasagawa levant su cabeza y con la punta de sus dedos jug con el delgado cabello de Shiina. Incluso cuando no estaban desnudos, Shiina an poda sentir la calidez del cuerpo de Sasagawa contra el suyo. Nunca se haba enamorado antes, as que no saba si estara bien decirle a Sasagawa que lo amaba. Pero saba con certeza que Sasagawa era la persona ms importante en su vida. Ese era un gran paso para l. Antes de que Sasagawa ganara el corazn de Shiina, l no saba la angustia y los conflictos por los que Shiina haba pasado. Ahora se dej llevar por los sentimientos de comodidad ms que por la pasin de hacer el amor. Shiina se qued dormido con pensamientos felices.

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Sasagawa le haba dicho que poda quedarse todo el tiempo que quisiera y Shiina se lo haba agradecido, pero rechaz la oferta y abandon el departamento. Ciertamente haba querido quedarse, pero senta que si no se iba a casa hoy, no volvera all nunca ms. Todas las camisetas que Mami le haba lavado ya estaban sucias. Haba pedido prestada una a Nakahara, pero estaba en la lavandera. Tambin necesitaba sacar algo de dinero del banco. Al pensar en todas esas cosas, estaba agobiado cuando lleg a la puerta principal. Pudo deducir que alguien estaba all, por lo que se sinti aliviado. Se sac sus zapatillas deportivas y entr, y su madre apareci en la sala de estar cuando son la puerta. Normalmente Shiina era el que apartaba la vista cuando sus ojos se encontraban. A veces la miraba con desprecio. A veces reprima lo que quera decir y escapaba. Quiz era porque tena miedo de salir herido por lo que ella podra decir. Pero slo por hoy... Bienvenida a casa dijo, sus palabras saliendo naturalmente de sus labios. Su madre lo mir sorprendida. Quiz poda actuar as porque an senta la presencia de Sasagawa. Incluso si no poda verlo o abrazarlo, sus corazones estaban conectados. Shiina estaba seguro de eso. Su madre evadi su mirada fija y regres a la sala de estar, pero l pudo deducir por la mirada en sus ojos que estaba confundida. Shiina permaneci solo en la entrada. Luego inclin su cabeza y sonri por la reaccin de su madre. Luego, se dirigi a su habitacin. Haba estado demasiado distanciado hasta ahora. Sin importar cmo lo trataran, an eran una familia. No eran

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extraos. Por lo tanto, Shiina finalmente se dio cuenta de que no tena que estar nervioso al halarles. l poda decir lo mismo sobre sus padres y Hayato. Eran una familia, por lo que no deberan tratarlo as. Compartan la misma sangre, eso no quera decir que deberan amarlo sin importar qu? Quiz no tenan intenciones de llegar a un arreglo? Si as fuera, qu debera hacer? La respuesta era simple. Tratara de ser flexible y no tomarse las cosas tan en serio. En otras palabras, necesitaba dejar de buscar tanto y aprender a desentenderse. An no haba podido ser capaz de actuar as. Tena miedo de perder a su familia por completo. Pero todo estara bien ahora. Tena a alguien que lo aceptaba. De eso estaba seguro. Se cambi su camisa y junt sus cosas para la escuela. Despus de agonizar un poco sobre eso se sac sus lentes, los que siempre haba usado para ayudarse a escapar de la realidad. Cerr la puerta de su habitacin y baj las escaleras. Su rostro brillaba, como si recin se le hubiese exorcizado un demonio.

Justo despus de que comenzara el almuerzo, Ai le habl desde el asiento de al lado, Shiina-kun, te ves estupendo con lentes, pero te ves mucho mejor sin ellos. Te ves muy genial! Shiina haba sentido que ella lo estaba mirando por toda la sala, as que supuso que le dira algo. Se sent y encar a Ai. Una sonrisa gentil flot naturalmente sobre su rostro, y Ai pareca estar consternada por la emocin. Antes, si alguien le hablaba, intentara evadir a esa

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persona manteniendo sus respuestas cortas. Pero Ai siempre se haba comportado muy animada con l. Shiina haba creado una barrera para tratar de evitar que ella y otros compaeros de curso le hablaran. Pero Ai la haba derribado y siembre le hablaba. Al tratar de hacerse invisible, no haba podido experimentar la calidez y amabilidad de otros. Una vez que lo supo, finalmente se dio cuenta de cun arrogante haba sido. Esta maana los pis accidentalmente. Pero mis ojos no estn tan mal como para usar lentes de contacto, as que estoy bien sin ellos. Debo verme raro, verdad? Mir directamente a sus ojos mientras hablaba. Ai sacudi su cabeza con nerviosismo, con su largo y liso cabello movindose en todas direcciones. Sus acciones eran tan desesperadamente lindas que sonri, sus ojos entrecerrndose. Si tuviese ms tiempo, habra querido hablar ms con ella, pero primero quera satisfacer sus deseos. Shiina se levant y se disculp, saliendo de la habitacin. Se dirigi a la parte norte de la escuela. Luego de haber llegado al tercer piso, pudo ver la puerta del depsito. Al lado de ella estaba el laboratorio. Shiina camin lentamente hacia all. Si Sasagawa no estaba ah, simplemente almorzara en el techo. Casualmente abri la puerta y vio el gran cuerpo de su profesor, quien vesta su abrigo blanco de costumbre. Sasagawa estaba sentado en una silla con sus largas piernas estiradas en frente de l. Pareca como si hubiese estado calificando ensayos. Dej su lpiz rojo sobre el escritorio y se torci para encarar a Shiina. Dnde estn tus lentes? Se rompieron dijo simplemente Shiina. Era la misma

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mentira que le haba dicho a Ai. T los rompiste? Sasagawa empuj la silla hacia atrs y se puso de pie. El sonido de sus tacones caminando por el piso se acerc ms a Shiina. Sus ojos se encontraron y Sasagawa lo acerc. Todo acerca de Sasagawa era tan masculino que haca que el corazn de Shiina se acelerara. Por eso no detuvo los brazos que se extendieron hacia l. Sasagawa lo mantuvo muy cerca de su pecho, lo que lo puso en un estado de mente soador. Shiina suspir profundamente, finalmente liberando la ternura dentro de l. Sus prpados le pesaban, como si de repente le hubiese dado sueo. Haban estado juntos hasta esa maana, pero estas pocas horas separados haban parecido extraas. No era suficiente slo presionar sus cuerpos el uno contra el otro. Quera estrecharlo ms profundamente. Lanz un gemido, y Sasagawa relaj sus brazos alrededor de l. De qu te res? pregunt Sasagawa suavemente mientras acercaba su mentn hacia el odo de Shiina. De nada respondi Shiina. Incluso cuando Sasagawa poda ser violento, era extraamente amable. Fsicamente era un adulto, pero algo sobre l pareca infantil. Shiina adoraba ese desequilibrio ilgico y extrao. Ya no te abrazar ms! amenaz Sasagawa en un tono de broma.

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Shiina levant su rostro del pecho de Sasagawa. Le gustaba cuando se comportaban as de tontos. No! dijo tmidamente. Sus ojos se encontraron. Besos ligeros caan sobre el nacimiento de su cabello, sobre su frente, sus prpados, luego finalmente sobre sus mejillas. Los labios de Sasagawa eran clidos y hmedos. Shiina repentinamente mir en todas direcciones. No era bueno en este tipo de situaciones. Sasagawa ignor su posicin como profesor y lo estaba besando despreocupadamente en terreno escolar. Se sinti culpable, como estudiante, por estar dejando que Sasagawa se saliera con la suya. No poda soportarlo. Alej su mejilla, pero los labios de Sasagawa no lo dejaron escapar y seguan presionando sobre los suyos. Mmm El beso de Sasagawa repercuti a lo largo de todo el cuerpo de Shiina, lo que lo relaj, incluso cuando se senta incmodo. La bolsa de papel con el almuerzo que traa cay al suelo. Ambos haban ido all porque queran estar juntos y a solas. Sus labios se devoraban el uno al otro, incitando su lujuria. Shiina se excit por los sonidos de su respiracin forzada. Abraz la espalda de Sasagawa con ambas manos, y el agarre que Sasagawa tena sobre l se estrech ms.

Pudo aguantarlo hasta la noche siguiente. Era sbado y, despus del trabajo, Shiina corri hacia la

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abarrotera ms cercana. La brillante luz proveniente de la tienda iluminaba los autos estacionados en el aparcamiento. Al caminar hacia la tienda, Shiina vio el Nissan blanco de Sasagawa estacionado en una esquina lejana, al lado de la mquina expendedora de cigarrillos. Sasagawa tuvo que ir a la escuela esa tarde a ensear lecciones suplementarias y Shiina tena que trabajar en la noche. Sasagawa haba ido a recoger a Shiina cerca de donde trabajaba, para que pudieran pasar el mayor tiempo posible juntos. Sin poder respirar, Shiina pas por las pesadas puertas de vidrio en frente de l. Un joven le dijo desde el mostrador, Bienvenido... con una voz montona. Shiina examin la tienda. Vio a una joven y un hombre alto conversando animadamente en la seccin de bebidas. El cabello castao de la chica estaba flojamente atado al lado bajo una oreja. Vesta un uniforme escolar, pero no pareca estudiante de escuela secundaria. Su falda era corta y vesta calcetines negros a la rodilla, tal como las chicas de escuela secundaria de aqu, pero ella se vea demasiado pura para ser tan mayor. Sin embargo, el hombre de pie al lado de la extraa chica era definitivamente Sasagawa. Se pregunt si de algn modo se conocan de la escuela. Shiina los mir sospechosamente y avanz un paso. Ensuciaste mi falda el otro da! se quejaba la chica. Trat de limpiarla, pero no sala, y mam tuvo que mandarla a la lavandera! Me dio tanta vergenza! Lo sabe todo! Sasagawa puso una mano en su cadera en respuesta al

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tono de voz enojado de la chica. Hoy vesta una remera gris bajo una camiseta roja de franela, con unos pantalones envejecidos. Slo alguien con tan buena apariencia poda lucir esa vestimenta. Shiina estaba un poco celoso. Oye, eso no era mo, era tuyo dijo Sasagawa. De todas formas, estaba usando un... No, era tuyo! interrumpi la chica. Pareca una pareja discutiendo. Una incomodidad que Shiina nunca antes haba experimentado presionaba desde adentro. Sigui caminando para pararse ms cerca de ellos. Al sentir la presencia de alguien, Sasagawa volte y mir por sobre los hombros de la chica. Ella tambin volte para ver qu estaba mirando, y Sasagawa cort la conversacin para caminar hacia Shiina. Lo siento, te ver ms tarde le dijo a la chica. Qu? Ya te vas? dijo con una mirada de decepcin en su rostro. Luca incluso ms infantil de cerca. Tena que estar en la escuela secundaria intermedia. Sin embargo, sus ojos negros osados parecan esconder una loca diablura de nio. Los nios deberan irse a casa ahora dijo Sasagawa, alzando su voz mientras volteaba y colocaba una mano en el hombro de Shiina. No quiero! Incluso si voy a casa, nadie estar ah! dijo ella bruscamente, antes de irse enojada. Sasagawa dijo que iba a comprar cigarrillos, as que Shiina lo acompa a la caja. Delante de ellos haba un hombre que vesta un traje y que pareca haber comprado

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toda la tienda. El joven de antes escane los cdigos de barra con una mirada de molestia en su rostro. El sentimiento de tristeza en el pecho de Shiina creci ms y ms mientras esperaban en la fila. Quin era ella? pregunt a Sasagawa, de pie a su lado. Quera saberlo tanto que no poda soportarlo. Pero fingi ser casual sobre el tema. Sasagawa no pareci notarlo. Tom su billetera del bolsillo de sus pantalones. Revis su interior y dijo simplemente, Oh, esa nia? Su nombre es Mizuho. Sus padres estn divorciados y su mam vive en mi barrio. De verdad se siente sola sin su padre y hermanos, as que a veces va a mi casa. Hmm...Cuntos Shiina inocentemente. aos tiene? pregunt

Catorce, quiz? Creo que dijo que era estudiante de segundo ao de la escuela secundaria intermedia. La persona delante de ellos junt todas sus bolsas de compra y dej la tienda. Uh, puedes darme una cajetilla de Mild Stevens? pidi Sasagawa en el mostrador. El joven a cargo mir hacia la direccin que Sasagawa apuntaba y dijo Est bien, quiere una sola cajetilla? S. La traer. Ya vuelvo. Observaron cmo el joven volva a la tienda, la chica de antes avanz. El brazo de Shiina instintivamente se endureci. Mizuho toc ligeramente el brazo de Sasagawa y, luego de ver a Shiina observndola, sonri contenta y

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abandon la tienda.

Shiina se dio cuenta de que las llamas del deseo haban comenzado a arder nuevamente cuando llegaron al departamento. Sasagawa entr primero y movi el interruptor de luz con sus largos dedos. Tir sus llaves sobre la mesa. Shiina lo observ silenciosamente desde atrs. Qu pasa? pregunt Sasagawa, voltendose. Shiina no tuvo la valenta de mirarlo a la cara. Sinti su piel excitada, su cuerpo estaba palpitando. Nunca haba sentido esta lujuria cuando haba tenido sexo con Kanako. Su cabeza nadaba en un sentimiento de calor intenso. Probablemente deseaba demasiado a Sasagawa porque haba visto la forma en la que lo haba tocado esa chica. Era como si algo desagradable estuviera tratando de robar algo que l apreciaba justo en frente de l. De todos modos, el fuerte sentimiento en su pecho era opresivo, y no poda aguantarlo. No poda negar que senta algo de celos por la forma en la que ella haba actuado. Pero ni siquiera Sasagawa estara interesado en una nia de escuela secundaria intermedia, verdad? Pero al pensar en el momento en el que estaban en el restaurant, la forma en que la mesera y las otras mujeres miraban a Sasagawa era exactamente la misma en que Mizuho lo haba mirado. Shiina no poda sacar de su cabeza la visin de su toque sugerente. Puedo tomar una ducha? pregunt Shiina. Quera estar solo por un rato. Con el sonido de su voz ronca, Sasagawa lo mir hacia arriba desde su posicin estirada en

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el sof. Ahora? Sasagawa elev la comisura de sus labios sugerentemente mientras miraba fijamente a Shiina. Tom un cigarrillo de su bolsillo delantero. El rostro de Shiina enrojeci. No para eso. Hmm? pregunt Sasagawa en voz baja mientras encenda su cigarrillo. Al parecer Shiina haba entendido mal el significado detrs de Ahora? Era un malentendido vergonzoso. Su rostro se sinti como si estuviera en llamas. l pens que Sasagawa estaba diciendo Ahora quieres que tengamos sexo, por eso quieres tomar una ducha? Pero al parecer eso no era lo que l quera decir. Shiina. Sasagawa estir su larga mano hacia l, pero Shiina mir hacia otro lado. La mano toc su mejilla y luego agarr su cuello por detrs. Sasagawa enroll el cabello de Shiina alrededor de un dedo y susurr a sus odos Me gustas ms as, no recin baado. Todo el cuerpo de Shiina tembl por el sonido agridulce de la voz de Sasagawa. Sasagawa lo abraz fuerte y lo bes lentamente. Shiina se impacient por los largos besos. Los ojos de Sasagawa se entrecerraron. Ah...ahhh... Sasagawa alej sus labios y agarr la remera de Shiina por el cuello, subindola. Empuj la dureza de Shiina que se asomaba por debajo de su camiseta. Shiina no pudo aguantar cuando Sasagawa la tom bruscamente. Trat de controlar la sensacin de temblor que provena de su interior. Gimi como una mujer.

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Sasagawa sac el cinturn de Shiina y coloc sus manos dentro de su ropa interior. Por este movimiento, los pantalones de Shiina cayeron hasta sus rodillas. Sasagawa estimul su ereccin con la punta de una lengua caliente. Guau...incluso ests mojado entre tus piernas. Shiina sinti la humedad entre sus piernas. Su respiracin se volvi spera. Levant su mentn y dej escapar un gemido de placer con sus ojos cerrados. Sasagawa humedeci su dedo con el lquido preeyaculatorio de Shiina y penetr el lugar al que Shiina le gustaba ms. Nnmmm...ahhh...ohhh...ohhh! El dedo de Sasagawa se mova erticamente y sigui metindolo y sacndolo. Su mano izquierda estaba en el trasero de Shiina, mientras que su mano derecha haca crculos alrededor de los pezones de Shiina. Shiina no pudo aguantar ms estar de pie. Enterr su cabeza en el pecho de Sasagawa, inclinndose hacia l. Detente...ahhh...ahh...me correr... Shiina grit desesperadamente, su pene duro presionado contra las caderas de Sasagawa, temblando. Buscando liberacin, agarr ms fuerte los hombros de Sasagawa. Nmm...mmmm...ohhhhh... Los dedos de Sasagawa no se detuvieron ni por un segundo, y manoseaba y acariciaba a Shiina. Shiina eyacul y su semen baj por sus pantalones. Con sus ojos borrosos mir a Sasagawa. Lo bes insaciablemente con una pasin carnal. Sasagawa se sent en el piso y tir de Shiina para que se sentara frente a l. Haba sacado su dedo y lo

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haba reemplazado con algo mucho ms largo. Te amo, Shiina. La voz de Sasagawa era seria y a la vez ertica. Finalmente Sasagawa estaba dentro de Shiina. Shiina dej escapar gemidos intermitentes y trat de relajar sus partes internas para que Sasagawa penetrara ms. ...Uhhh...ahhh... Shiina no pudo esconder la mirada de dolor en su rostro. Lo presion contra el pecho de Sasagawa y las lgrimas comenzaron a caer por los rabillos de sus ojos. Esta era la primera vez que Sasagawa lo haba dejado montarlo as. Sasagawa penetr completamente hasta la base de su pene. Pero la presin no fue tan dolorosa como Shiina pensaba. Sasagawa no estaba siendo duro con l, como era de costumbre. Shiina. Sasagawa lo bes alentadoramente, y las cadenas alrededor del corazn de Shiina se cortaron. Mientras su miembro duro y tenso chocaba violentamente contra el punto sensible de Shiina, Sasagawa coloc sus manos sobre la parte baja de la espalda de Shiina. Soport el peso de Shiina mientras l se colocaba por detrs y pona sus manos sobre las pantorrillas de Sasagawa, elevando su cuerpo. Las clidas manos de Sasagawa estimulaban a Shiina. Al principio tembl ligeramente, pero luego se volvi cada vez ms violento. Mmm...Sensei Sensei! Shiina cerr sus ojos en xtasis, intoxicado por las bruscas vibraciones. Ambos jadeaban. El semen de Shiina

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chorre hacia abajo, humedecindolos a ambos. Hicieron ruidos obscenos mientras Sasagawa se mova hacia dentro y hacia fuera de Shiina. Shiina empujaba su cuerpo hacia el de Sasagawa en una suave armona. Espera...espera Shiina la voz de Sasagawa dijo desesperadamente. Sus manos agarraron la parte de atrs de la remera de Shiina, intentando contener su violento temblor. Shiina mir fijamente a su compaero. Quera hacerlo temblar ms. Quera que Sasagawa sintiera su presencia en lo ms profundo. Ambos estaban sorprendidos por los movimientos de Shiina y por su lujuria insaciable.

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Captulo 7
Nakahara lo llam un da despus de la escuela con su rostro serio de costumbre. Hmm? Salieron de la sala ruidosa y Shiina sigui al abrigo limpio y recin almidonado en frente de l. Probablemente habra sido obra de Mami. Nakahara lo llev a la oficina del orientador, ubicada en la esquina de la parte sur del edificio escolar. Estaba decorada igual que el depsito. Estaba llena, rellena de guas sobre universidades nacionales y escuelas vocacionales. Haba un gran escritorio de acero en la mitad de la habitacin, rodeado de cuatro sillas, pero Nakahara las pas y se ubic al lado de la ventana. An haba luz afuera y se vea el claro cielo de otoo. Shiina lo sigui hacia dentro de la habitacin y observ a Nakahara desde atrs. Incluso cuando Nakahara y Sasagawa usaban el mismo abrigo, Nakahara haca arder el pecho de Shiina. Con tal simple distincin, Shiina estaba ms que consciente de sus sentimientos de amor. Incluso cuando tenan el mismo abrigo, Sasagawa no estaba aqu. Incluso cuando ese era un hecho obvio, an buscaba la figura de Sasagawa. Su mano se senta sola sin el sentimiento de calidez en ella. Finalmente, Nakahara volte. Shiina haba estado soando despierto con Sasagawa, por lo que

-S

hiina, tienes un minuto?

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inmediatamente volvi a la realidad. Nakahara cambi su mirada fija sobre Shiina y con vacilacin rompi el hielo. He estado pensando...en que quiz debera hablar con tu madre. Los ojos de Shiina se agrandaron con sorpresa frente a este repentino tema. Qu? Por qu? De nuevo? Ahh, no le ha agradecido an por dejarme quedarme con usted? A qu tipo de persona le falta el sentido comn para llamar al profesor de su hijo y agradecerle? Desvi su mirada fija hacia el piso con una mirada de arrepentimiento en su rostro, frotndose la parte de atrs de su cabeza. Nakahara levant la voz animadamente. Oh, no. Me llam. Tambin me mand algunos dulces a la sala de staff. Oh, slo eso? Lo siento . Debi haberle agradecido en persona. Le avergonzaba una madre que no tena decencia. Los ojos de Nakahara se arrugaron, sonri y se inclin hacia la ventana detrs de l. Probablemente estaba tratando de calmar a Shiina con su amable gesto. No, no es sobre eso. Dijiste que tenas problemas con tu familia, verdad? Al parecer ests atorado. Todo este tiempo he estado pensando en qu puedo hacer para ayudar. Quiz sea una intromisin de mi parte, pero siento que tu madre fue diferente ese da cuando habl con ella por telfono. Quiz podamos hablar ahora con ms calma? Con esas palabras, la oscuridad que Shiina pensaba haber olvidado, repentinamente se asom un poco a la superficie. Pero, quiz debido a que Sasagawa lo haba llenado, ya no senta el dolor agudo en la boca de su estmago. Estaba confundido por este tema.

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 Pero...estoy bien como estoy dijo con ojos tristes. Nakahara trat de animarlo diciendo inteligentemente, Pero no tienes que estarlo! Algunas veces las madres encuentran ms fcil hablar con completos extraos. Pareca que Nakahara ya se haba decidido a enfrentar a su madre. El bondadoso profesor era todo lo que un profesor debera ser. Su disposicin le haca imposible ignorar a alguien como Shiina. Shiina permaneci en silencio, sin saber cmo enfrentar la situacin. Tendra que exponer el hecho de que era la oveja negra de la familia en frente de Nakahara, en quien confiaba mucho? Estaba ms molesto por eso que por el hecho de enfrentar a su madre. Al final, Nakahara se sali con la suya y Shiina termin en el auto de su profesor, camino a casa. Nakahara no estall de la risa al ver la casa tipo cuento de hadas; en vez de eso, con calma toc el timbre. Cuando Shiina llegaba a casa, nunca lo haca, por lo que su madre probablemente saba que era una visita. Slo un momento dijo animadamente desde adentro, y abri la puerta principal. Nakahara hizo una reverencia. Buenas tardes. Lamento haber venido de improviso. Mi nombre es Nakahara, profesor de Jun-kun en la escuela secundaria Futaba. Por un momento, la madre de Shiina qued sin habla al ver a Shiina parado ah con Nakahara. Ah...muchas gracias por lo del otro da. Soy la madre de Jun . Su voz cambi completamente, volvindose triste.

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Shiina no pudo escapar de la atmsfera incmoda, as que baj su cabeza. Lo nico en su campo de visin era el piso embaldosado rojo. Lo nico que poda escuchar era la voz de Nakahara diciendo, Sra. Shiina, me gustara hablar con usted acerca de Jun-kun. Podra quitarle un poco de su tiempo? Su madre lanz un suspiro. El silencio continu hasta que accedi. Est bien. Pase, por favor. Gracias dijo Nakahara, entrando a la casa. Shiina cerr la puerta y se sac sus zapatos, luego parti directamente a su habitacin. Jun, t tambin ven orden su madre duramente mientras permaneca en la puerta que daba a la sala de estar. Todo lo que Nakahara pudo hacer fue mirarlo fijamente. Antes le haba dicho a Shiina que estaba bien si l hablaba con su madre a solas, pero, despus de todo, no poda ir en contra de los deseos de la madre de Shiina. Shiina se prepar. Se dio vuelta y entr a la sala de estar. Sintese, por favor invit la madre de Shiina. Gracias. Lamento molestarla . Nakahara hizo una reverencia mientras la madre de Shiina le entregaba una pequea taza de t, utilizada para las visitas. Shiina se sent al lado de l, y ella le entreg el mismo tipo de taza. Su madre se sent frente a ellos en el sof. Ahora, de qu quiere hablarme, Sensei? Nakahara apenas haba probado el t cuando comenz a hablar. Oh, s. El otro da Jun-kun mencion que las cosas no estaban muy bien en casa.

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Como su profesor, me preocup bastante, as que pens que hablara con usted sobre el tema. Lamento no haberla contactado antes. S que es grosero que lo pregunte, pero cundo comenz el problema con su familia? Cruz sus brazos al preguntar, enfocando su mirada ms seria en la madre de Shiina. Se conmovera su madre por la sinceridad en las palabras de su profesor? Mir fijamente a Nakahara por un rato, luego mir hacia abajo. Ms o menos en el tiempo en que mi hijo menor, Hayato, tena 12 aos y que luego de su ceremonia de graduacin de escuela primaria, camino a casa le confesara sus sentimientos a una nia que le gustaba. S? Nakahara pregunt. Siempre se ha esforzado en los deportes desde que era pequeo continu la madre de Shiina. Era un nio seguro y probablemente pens que su primer amor sentira lo mismo. Sin embargo, ella lo rechaz. Al parecer ella le dijo que no era tan guapo como su hermano. Adems de eso, le dijo que no le hablara en la escuela intermedia y se burl de cada parte de su aspecto, una por una. Lleg a casa al borde de las lgrimas. Ah? Al escuchar esto, Shiina se burl sin querer. Hayato, quien slo saba cmo despreciar a otros, haba sido herido tanto por alguien? Cuando Shiina imagin cmo debi haberse visto Hayato cuando volvi a casa llorndole a su madre, pareca lamentable. Su madre lo mir con su expresin severa de siempre, y luego mir nuevamente a Nakahara. Su cabello amarrado hacia atrs la haca ver incluso ms estricta. Sensei, estoy

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segura de que usted entiende. Como madre, no debera decir esto, pero a diferencia de Hayato, desde que Jun era beb, todo el que lo vea deca lo hermoso que era y lo mimaba. Al estar acostumbrado a ese ambiente, dijo algunas cosas crueles a su hermano que le hicieron mucho dao. Me han ignorado por eso? Shiina olvid que Nakahara estaba ah. No poda creer lo que escuchaban sus odos, esta simple y ridcula razn. Haba sido sa la raz de su oscuridad? La madre de Shiina lo mir. A qu te refieres con por eso? Hayato es un nio bueno. Es inteligente y bueno para los deportes. Pero los que no lo conocen no admiten estas cosas. Cuando l est con Jun, no tiene ms opcin que hacerlo fracasar. Ciertamente, di luz a ambos, pero Hayato ha estado siendo discriminado y me siento muy mal por l. No tiene idea de cunto le han dolido las palabras de Jun y cun inferior lo han hecho sentir. As que decid que sin importar lo que digan, l sera mi primera prioridad en casa. Lo hice para que Hayato pudiese salir adelante despus de ese sensible momento de su vida y para que pudiese recuperar su orgullo. Y lo hice para que Jun viera la ingenuidad y el error en su forma de actuar dijo calmadamente, luego se qued callada. Entonces, qu pas? pregunt Nakahara. La madre de Shiina suspir y luca como si estuviese sumida en sus pensamientos. Shiina lamentaba el hecho de que fuese tan exaltada y terca. Hayato desarroll un complejo de superioridad y comenz a mirar en menos a su hermano admiti al fin. As volvi su orgullo. Incluso cuando yo saba que esa era una forma retorcida de hacer las cosas, no lo detuve. Slo

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cuando me sent mal porque Jun era ignorado por toda su familia, l comenz a ser terco. Y luego debido a eso comenc a preocuparme cada vez menos por l. Shiina saba que era ms difcil para ella hablar de sus sentimientos de lo que l pudiese saber. Su rostro desgastado le deca eso. Prosigui. Ignorbamos a Jun tal y como siempre lo hacamos. Pero el da despus de que regresamos de nuestro viaje, me dijo Bienvenida a casa. No pude decir nada. Incluso cuando lo haba apartado, reaccion de una manera completamente opuesta a la que haba esperado. Despus de eso, pens algunas cosas y me di cuenta de algo. Me di cuenta de que no slo puedes concentrarte en las partes negativas de tu familia. Pero temo mostrarle a Hayato lo pattica que he sido, y no s cmo ser amable con Jun nuevamente. De verdad soy una madre terrible . Intentando retener las lgrimas, mantuvo sus ojos bien abiertos. Mordi sus labios temblorosos. Sus manos que descansaban sobre sus rodillas no se movieron ni un centmetro. A diferencia de las lgrimas de cocodrilo, esto era muy convincente. Shiina permaneci en silencio e inspir profundamente. Mir a Nakahara, quien lo mir amablemente. Tratando de estimularlo, Nakahara apret su mano brevemente. Esa calidez dur slo un segundo, y luego Nakahara comenz a hablar con la madre de Shiina en un tono calmado. Sra. Shiina, puede que sea arrogante de mi parte decir esto, ya que mi hija es slo un beb, pero por favor no se enoje. Esccheme, por favor. Creo que es muy difcil criar hijos sin tener un favorito. Una cosa es que sean del sexo opuesto, pero si son del mismo sexo siempre sern comparados por la gente a su alrededor. De hecho, tengo un hermano mayor, y hubo un tiempo en el que no me trataba de forma amable. Y ciertamente a veces

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tambin era al revs. Hubo un tiempo en el que me preocupaba sobre a quin amaba ms nuestra madre. Si le pregunta a una mujer, probablemente le diga que era un complejo de Edipo, pero no era eso. A veces uno slo pierde el espritu de lucha y quiere que alguien lo apoye. Una familia debera hacer eso, sin importar qu. Bsicamente, los chicos son de hecho sentimentales. En respuesta al tono amistoso de la voz de Nakahara, el rostro duro de la madre de Shiina se relaj. Shiina saba que esta era la forma indirecta de Nakahara para referirse a l. Entiendo lo que siente, Sra. Shiina continu Nakahara. Pero pronto su hijo menor estar en la escuela secundaria y despus de eso ser un adulto. Por supuesto que Jun-kun tambin lo ser. Existen muchos ms obstculos para ellos que vencer. Pero usted no puede adelantrseles y eliminar esos obstculos. Entonces, no cree que debera reconsiderar sus acciones con el tiempo que le queda con ellos? Despus de que hable con nosotros, creo que cambiar su opinin con respecto a Jun-kun. l es bondadoso por naturaleza. Estoy seguro de que entender. Nakahara encontr los ojos de Shiina. Shiina asinti. Volte y mir seriamente a su madre. S. Creo que he sido demasiado insensible. Nunca supe que Hayato haba desarrollado un complejo de inferioridad por m. Lo siento, mam, es mi culpa. As que era un castigo entendible . Puso sus manos sobre sus rodillas, cerr sus ojos y dej salir un suspiro. Pudo disculparse porque de verdad lo senta. Haba construido una muralla porque era demasiado sensible en cuanto a ser herido, lo que lo haca rechazar la amabilidad de otras personas.

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Haba sido muy caradura. No, no hay razn para que te disculpes, Jun dijo su madre llena de lgrimas. Intentaba controlar sus emociones lo ms que poda. Pareca como si todo lo que Shiina haca ltimamente era provocar que las chicas lloraran. Lamentaba eso. Mir hacia un lado. Es slo que no s qu hacer dijo su madre, dando golpecitos a los rabillos de sus ojos. Nakahara respondi con voz calmada, No se presione. Trate de no abandonarlos. Aydelos cuando lo necesiten. Y si alguna vez se tranca, siempre puede recurrir a m por un consejo. Gracias dijo la madre de Shiina. Mi esposo siempre est en el trabajo, as que es indiferente sobre las cosas que suceden aqu. Siempre est de acuerdo con lo que yo quiero. Shiina se sinti demasiado miserable observaba a su madre agradecer a Nakahara. mientras

La mala voluntad que l tena hacia ella n o se haba borrado del todo, pero era menor. Los sentimientos retorcidos de apego que senta por ella ya no existan. La oscuridad que siempre haba sentido se haba aclarado y todo lo que quedaba donde estaba era un agujero enorme. Pero algn da podra llenarlo. Con la ayuda de Sasagawa. Algn da. De hecho, en un momento como este tena muchas ansias de ver a Sasagawa. Quera que Sasagawa viera lo puro que se estaba volviendo. Quera abrazar a Sasagawa. l estaba en la sala de estar de su familia en espritu, pero no en la mente. Se

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sinti mal por ser tan egosta como su madre dijo que era. Trat de decirse a s mismo que dejara de suprimir el deseo que brotaba dentro de l. Bebi lo ltimo que quedaba de su t verde.

A la maana siguiente, su madre le prepar el desayuno. Le confi esto a Nakahara, quien dio golpecitos en su cabeza con una sonrisa y dijo Bien por ti! Un toque ligero, clido. Shiina no estaba acostumbrado a ello, lo que lo hizo querer ms. Pens que Nakahara debi haberlo notado. Sin incluir el sexo, raramente tena contacto fsico con alguien, y era por eso que incluso slo un simple toque llegaba hasta su corazn. Estaban hablando afuera de la sala de staff, y Shiina vio a Sasagawa caminar hacia ellos. Luego de la siguiente clase, sera la hora de almuerzo. Una vez que estuvieron solos, quera decirle a Sasagawa lo que haba pasado ayer. Quera ser tocado. Descansando en las esperanzas de su plan, Shiina esper acercarse el sonido de las pisadas de Sasagawa. De lo nico que necesitaba preocuparse era de dnde estaba mirando. Sasagawa tena un sentimiento salvaje acerca de l. Llevaba en su mano sus libros de texto. Vesta su abrigo sucio blanco. El objeto de afecto de Shiina estaba justo ah. Su mirada fija impaciente finalmente descans en Sasagawa.

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En ese momento, el corazn de Shiina salt y lati violentamente dentro de su pecho. Sin embargo, su mirada caliente fue devuelta por Sasagawa con una fra. Shiina no pudo aguantarlo. l estaba sorprendido. Sasagawa entr a la sala de staff. Qu pasa? pregunt Nakahara. Shiina sacudi su cabeza y sonri, haciendo caso omiso de la pregunta. De todos modos, podra ver a Sasagawa en el almuerzo. Sin embargo, cuando lleg el momento, no haba nadie en el laboratorio de matemticas. Hice algo para que se enojara? se pregunt a s mismo. Haba un olor rstico en la silenciosa sala. Entr de todas formas. El sol se filtraba a travs de las cortinas, llenando la pequea habitacin con luz clida. Si tan slo Sasagawa estuviese all, todo sera normal. La decepcin brot dentro de l. Haba corrido por las escaleras, por lo que le era difcil respirar. No haba razn para estar tan emocionado. Trat de aguantar su propia estupidez. Sac la silla en la que siempre se sentaba Sasagawa. Se sent y coloc una mejilla sobre el escritorio. Sinti como si pudiese oler a Sasagawa. Sus brazos caan flojamente a sus lados. Su cabello caa sobre su rostro. Observ la puerta por entre las hebras de su delgado cabello. Son la campana y finalmente alguien abri la puerta. Apareci Sasagawa. Shiina, eres t? S la voz de Shiina era oscura por el sonido de la voz indiferente de Sasagawa. Sasagawa sac una silla y dijo sin hacer contacto visual, La clase va a comenzar . Recin ayer sus ojos derramaban amor por Shiina, pero hoy ni siquiera lo miraban. Trataba a Shiina como lo hara un profesor comn.

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 Ya voy. Desalentado, Shiina se levant y volte. No poda hacerse el nimo de preguntar por qu Sasagawa estaba siendo tan fro con el hoy. Shiina dijo Sasagawa mientras l colocaba su mano en el pomo de la puerta. Shiina tercamente no se dio vuelta. Se sinti envolver desde atrs en los brazos de Sasagawa. Lamento ser infantil. Lo siento se disculp Sasagawa, enterrando su rostro en el hombro de Sasagawa. Shiina trat de mirar hacia arriba para ver su expresin, pero sus rostros estaban demasiado cerca. Sensei? Sus labios tocaban la mejilla de Sasagawa mientras hablaba. Sasagawa lo sostuvo fuertemente, y un ligero gemido escap de sus labios. Sinti como si sus brazos fuesen a quebrarse. Mantuvieron sus rostros cerca por mucho tiempo ms. Luego Sasagawa dijo Cuando te veo con un chico agradable como Nakahara, me hace sentir muy incmodo. Tienes una personalidad muy pura, quiz te acercas naturalmente a Nakahara, pero no puedo soportarlo . Sus brazos se estrecharon nuevamente alrededor de Shiina. Shiina no poda hablar, pensando en que Sasagawa deba amarlo ms de lo que l pensaba. A su profesor slo no le gustaba la forma en que l y Nakahara haban sido tan amigables el uno hacia el otro. Estaba celoso, as que lo haba ignorado. Te hice hacer cosas cuando todo lo que queras hacer era lo correcto dijo Sasagawa. No es esa una tctica sucia?

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Las palabras que escuchaba Shiina eran tan lamentables que casi no crea que provenan de la boca de Sasagawa. Te amo, Shiina. Quiero que seas mo para siempre aadi Sasagawa. Pero Shiina no poda hacer eco de sus palabras. Ambos podan anhelarse mutuamente, pero el amor de Sasagawa claramente estaba en un grado diferente. Mientras miraba fijamente los dedos que se aferraban a su chaqueta, intent ser lo ms honesto que pudo. Sensei. Ayer tuve una conversacin seria con mi madre por primera vez en mucho tiempo. Creo que el da en el que mi familia puede ser normal de nuevo de verdad est cerca. Incluso en un momento como este, lo nico en lo que poda pensar era cunto quera verte, cunto quera hablar contigo. Eso era lo nico en lo que poda pensar, incluso cuando mi mam estaba llorando . No saba qu hacer despus, por lo que slo acerc su rostro al de Sasagawa. Sasagawa sonri tristemente y dijo De verdad? Shiina saba que an no poda lanzar una mirada a Sasagawa que transmitiera el mismo amor que su profesor senta. El sentimiento de calidez dentro de los brazos de Sasagawa se senta muy natural, pero no era como si no tuviese algunas dudas acerca de aceptarlo o no. Estaba consciente de eso, pero finga no verlo. Mordi sus labios. No saba qu ms hacer. Son la campana para el quinto periodo, haciendo eco a lo largo de la pequea habitacin. A tientas buscaba una forma de hacer feliz a Sasagawa, pero no poda pensar en nada. Era porque no saba qu tan profundo poda ser el amor.

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Record que se le haba acabado su gel favorito, as que pas a la farmacia cercana a la pastelera. Tena un poco de tiempo libre antes de que comenzara su turno. Escuchaba con sus audfonos, los cuales ya no eran utilizados para ayudarlo a escapar de la oscuridad, mientras pasaba a travs de las puertas automticas. Se pase por el pasillo de cuidado del cabello y tom su gel. Sin embargo, sigui en la tienda. Ya no senta amargura cuando vea a las madres tomadas de las manos de sus hijos. Probablemente eso era debido a la forma en que Nakahara lo haba ayudado. Los motivos de su profesor eran completamente distintos a los de Sasagawa. Aunque Shiina nunca haba pensado que las cadenas de Sasagawa eran una carga. Al contrario, lo hacan feliz. Sasagawa haba visto todo de l y era la nica persona a la que Shiina le haba mostrado todo. Pero por qu no tenan el mismo tipo de amor gentil que compartan Nakahara y Mami? Eran del mismo sexo. Profesor y estudiante. Su diferencia de edad era grande. Sus ambientes eran completamente distintos. Tenan que cruzar muchas barreras. Haba ignorado el hecho de que quiz esa era la razn de su atraccin mutua. Sinceramente, slo se irritaba cuando vea a parejas capaces de hablar libremente de su amor. No estaba celoso. Les faltaba algo? Tenan demasiado de algo? Era por algn tipo de desequilibrio? Su relacin era slo demasiado nueva?

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Mientras Shiina pensaba sobre estas cosas, deambulaba distradamente hasta que vio una figura familiar. La chica que vesta uniforme escolar volte al sentir el sonido de pasos detrs de ella. Hola. Era Mizuho, la chica que haba sido tan amistosa con Sasagawa en la abarrotera el otro da. Buenas noches . Shiina sonri tristemente y se sac sus audfonos. Mizuho haba estado inclinada mirando varios tipos de anticonceptivos. No era extrao que alguien de su edad los tomara, pero el hecho de verla a ella en frente a esas cosas haca la escena muy real. Oye, cul de stos es mejor? Soy una chica, as que no lo s. Mizuho no mostraba seales de timidez mientras sostena dos cajas de condones. Sus pestaas eran gruesas como las de un extranjero y sus ojos que no parpadeaban lo miraban firmemente. Shiina se sinti como un tonto por ser el que estaba avergonzado. Um, de hecho, tampoco lo s. Los otros clientes los estaban mirando y Shiina no tuvo ms opcin que acercarse a Mizuho. Normalmente compro los de la abarrotera, pero s que duele si no se ajustan bien. La ltima vez se nos olvid por completo comprarlos, as que tuvimos que usar los del hotel, y se irrit y enrojeci. Segua diciendo Ow, ow! en la ducha y me sent tan mal por l dijo Mizuho mientras comparaba las dos cajas con una mirada seria en su rostro, como si estuviese eligiendo cosmticos. Shiina tena tanta vergenza de estar en esta situacin que enterr su rostro en su codo y baj su cabeza. No poda entender cmo ella poda estar tan serena.

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Mizuho continu Pero los de tamao grande no traen muchos en la caja y de verdad son muy caros. Gastara toda mi mesada en una sola caja! Entonces tu novio los compra por ti? Shiina logr preguntar. Mizuho asinti. El rostro de Shiina se haba enfriado, as que lo levant, pero decidi ignorar el resto de su historia. Aunque me alegra que est de acuerdo en usarlos dijo Mizuho. La tasa de xito es alta, as que le rogu que se los pusiera. Dijo que estaba bien incluso si yo no era virgen, pero finalmente Tetsu-kun dijo que los usara. Pero ltimamente no juega conmigo. As que pens que ira yo misma para all. Al escuchar las palabras de Mizuho, Shiina levant lentamente su rostro. Tetsu-kun? Te refieres a Sasagawasensei? Pareca que las palabras que salan de su boca las estuviera diciendo alguien ms. Desesperadamente trat de mantenerse fro, pero el color se dren de su rostro. Los sonidos a su alrededor parecan venir de otro mundo. Dnde recordar. estaba l? Vagamente comenz a

Despus de que Mizuho lo mirara con sus ojos negros, separ sus labios brillantes y dijo S, por qu?

No tena idea de cmo lleg al trabajo, ni siquiera cmo lleg a casa esa noche.

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Cerca de la medianoche, estaba abrumado por un sentimiento de vrtigo, as que corri a la taza del bao. Vomit, colapsando al lado de ella. Ya no le quedaba nada en su estmago, pero las nuseas seguan brotando por dentro. Se llenaron sus ojos de lgrimas. Bruscamente sac la baba de su rostro. Estaba cubierto de un sudor fro. Una vez que pas el ataque de nusea trat de ponerse de pie, pero luego vino la siguiente ola, as que no abandon el bao. Intentando calmarse, respir profundamente, pero volvi a vomitar. Esto sucedi una y otra vez hasta que finalmente se sinti un poco mejor. Los ojos de Mizuho estaban ms grabados en su memoria que los de Sasagawa. l amaba a Sasagawa. Quera estar con l. Quera hacerle el amor. Estos eran sentimientos naturales para alguien enamorado. Pero quiz Sasagawa haba estado buscando algo mucho ms intenso que lo que Shiina poda dar, probablemente una pasin que lo hara evitar a otros. Mizuho ya tena esto, pero Shiina no posea ese tipo de pasin. Cuando se dio cuenta de eso, Mizuho lo aterroriz.

Al da siguiente, su madre le dijo a Shiina que sera mejor si coma algo liviano para su estmago, as que le prepar papilla de arroz para el almuerzo. Tom una bebida con electrolitos con su comida. Luego lentamente se dirigi hacia las escaleras de la azotea sur. Si segua caminando a este paso, la campana sonara pronto. Abri la

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puerta. Con qu tipo de cara lo saludara Sasagawa? Lo abrazara con esos mismos brazos con los que haba abrazado a una chica la noche anterior? Sonrindole a su martirio, camin por las escaleras de la parte norte. Haba estado tan estresado pensando en la traicin de Sasagawa, que estuvo enfermo toda la noche. No haba duda de que se senta amargo. Antes, cuando colocaba su mano en el pomo de la puerta su corazn se aceleraba, pero hoy no sinti eso. Sin inmutarse, abri la puerta del laboratorio de matemticas y vio que Sasagawa se haba quedado dormido en su silla. Estaba encorvado con su cabeza sobre sus brazos. Shiina cerr la puerta silenciosamente y observ el rostro dormido de Sasagawa. Sus rasgos eran agudos, su rostro proporcionado. Shiina se imaginaba que no habra fin para la mujer que trataba de seducir a Sasagawa. Incluso si Sasagawa le haba dicho a Shiina que lo amaba, se supona que Shiina simplemente perdonara a Sasagawa por engaarlo y por acostarse con alguien ms? No tena ese tipo de benevolencia. Shiina continu mirando a Sasagawa con una mirada triste en su rostro. Si pudiera, quisiera que Sasagawa lo abrazara y durmiera con l. Quera eliminar todas las cargas entre ellos y quera que se sostuvieran el uno al otro, cosechando el fruto de su amor. Le angustiaba un deseo que no poda hacerse realidad. Mir hacia abajo y desvi su rostro. Quiz al or su suspiro, Sasagawa lentamente despert. Incluso cuando saba que Sasagawa lo estaba mirando, Shiina no pudo encontrar su mirada fija. Supongo que ests bastante cansado dijo Shiina con una sonrisa dbil.

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 S, y no pude dormir anoche porque estaba pensando en ti . Sasagawa pareca serio. Se par de la silla y llev su mano al rostro de Shiina. Las puntas de sus dedos jugaban suavemente con el cabello de Shiina. Era una accin amable. Eso hizo que el pensamiento de su traicin fuera an ms doloroso. S, claro. La verdad es que ests muy cansado porque lo hiciste con una estudiante de escuela secundaria intermedia que se present en tu casa con condones dijo Shiina suavemente, preparndose psicolgicamente. Sasagawa no pareca desconcertado. Su expresin luca normal. Te encontraste con Mizuho? pregunt, sonriendo. Shiina no poda creer que Sasagawa sonriera en un momento como este. Levant su rostro y lo mir. Qu tipo de profesor eres? Qu te pasa que has puesto la mano encima de una nia de escuela secundaria intermedia? Pero Sasagawa no pareca agitado. No se sobresalt, No se disculp. En vez de eso, puso una cara y dijo Qu quieres decir con eso? No es la gran cosa. Sabes, algunas chicas de escuela secundaria intermedia en estos das trabajan a escondidas en bares. Saben que es posible que los clientes les hagan algo, e incluso hay algunos chicos que les ofrecen dinero a cambio de sexo. El mundo no es tan ingenuo como crees se burl, como si Shiina fuera un nio desorientado. Shiina no saba si estaba demasiado sensible o si Sasagawa era demasiado insensible. No poda comprender esto. Por qu no lo haces con alguien ms? dijo Shiina con angustia. Si sus ojos se encontraban, Sasagawa

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vera a travs de ellos. Le tema a eso, as que desvi la mirada. Slo tiene 14 aos. Es demasiado joven para tener a hombres jugando con ella. Adems... Las mujeres normales no me satisfacen interrumpi framente Sasagawa. Shiina haba estado a punto de decir Slo no lo hagas con Mizuho. Contuvo la respiracin y sus ojos se entrecerraron. Sasagawa continu. Incluso si no las quiero, ellas vienen a m. Me canso de estar con ellas. Incluso si es un poco raro, todas son lo mismo para m. No tiene valor hacer algo con alguien a menos que pueda tocar mi corazn. Valor? Qu significaba eso? Shiina mir hacia arriba. La actitud arrogante de Sasagawa al parecer estaba en sus palabras. Haba escogido a Shiina porque pareca solitario. No tena a nadie en quin confiar. Probablemente pareca un blanco fcil. Haba cumplido con los requisitos de Sasagawa. Haba cado justo en su trampa. Sasagawa le dijo antes que l quera salvarlo. Qu indignante. Quera arrinconarlo en un lugar incluso ms oscuro que el anterior. Shiina arrug su rostro y cerr sus ojos, arrepintindose de todo lo que haba hecho. Luego, abri sus ojos, que ahora estaban llenos de rabia y desprecio. Estoy harto. Ya no me importa dijo con ira. Entonces, ve a jugar con ella . Su voz sala con una indiferencia forzada. Con ella? Te refieres a Mizuho? O a alguna otra chica? Sasagawa levant su mentn y mir hacia abajo a Shiina mientras hablaba. Eres estpido? Me acostar con quien yo quiera.

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Sin importar lo mucho que Shiina amara a alguien, no poda aguantar este tipo de comportamiento. No te puedo soportar! dijo, exhausto. Haba sido forzado a ir al mismo paso de Sasagawa. Nunca se habra imaginado que al compartir su verdadera personalidad terminara siendo as de miserable. Mir hacia abajo y suspir, peinando su cabello hacia arriba. Sasagawa estaba de pie ante l con sus brazos cruzados. Son la campana, haciendo eco a travs del pasillo. Shiina silenciosamente se jur a s mismo que nunca ms volvera aqu, mientras se daba vuelta para retirarse. Justo cuando estaba por salir, la voz de Sasagawa grit Espera! y una mano agarr su brazo. Shiina la sacudi cruelmente. No me toques! Su furiosa voz retumb a lo largo de la pequea habitacin. El lugar que Sasagawa toc ardi, lo que lo trajo de vuelta a la realidad y lo asust.

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Su cuerpo haba rechazado a Sasagawa. Termin, pens. Tambin me ensuciars! dijo la voz forzada de Shiina. Estaba muy cerca del llanto. Sasagawa no intent detenerlo esta vez. Shiina sinti la mirada fija y aguda sobre l. Encontraba muy difcil perdonar, y pate el muslo de Sasagawa. Sasagawa agarr su pierna y le dio la espalda. Nunca deb haber confiado en ti! Senta rabia hacia la persona que lo haba traicionado, arrepentimiento hacia l mismo. Sus palabras contenan todos esos sentimientos. Abandon furiosamente la habitacin.

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Captulo 8
hiina alej su mirada a propsito. Sasagawa lo estaba observando. Cuando se haba volteado del pizarrn, sus ojos casi se encontraron, pero Shiina lo evit. Antes, normalmente estara impaciente o se emocionara cuando Sasagawa lo miraba. Pero desde aquel da, el hecho de que Sasagawa lo mirara se volvi aburrido y poco interesante. Harada-san, cmo resuelves el siguiente problema? pregunt Sasagawa con su expresin de arrogancia de siempre. El chico al que le haba hablado luca molesto, pero le contest. Desde el lado de Shiina, Ai cubri su boca con su libro de texto y susurr No te ha llamado adelante ltimamente. Cuando Sasagawa haba estado interesado en el cuerpo de Shiina, lo haba llamado adelante muchas veces. Ai se haba dado cuenta de esto? Descansando su mentn en sus manos, Shiina sonri ampliamente. S, pero incluso si lo hiciera, igual te preguntara a ti las respuestas. Soy muy malo para las matemticas. Oye! dijo Ai en tono de broma, claramente feliz por el tono de voz gentil de Shiina. Desde que se haba quitado sus anteojos, haba comenzado a sentirse ms cmodo al hablar con las chicas en clase, exceptuando Morishita; las cosas an estaban raras entre ellos.

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Shiina senta que Sasagawa an lo estaba mirando. Si no le gustaba que Shiina se apegara mucho emocionalmente a alguien, por qu no simplemente sigui adelante? Cuando termin de hablar con Ai, Shiina mir nuevamente hacia abajo. Copi el problema de su libro de texto y mir la pizarra para confirmar la respuesta que Harada haba dado. Como no haba estado poniendo atencin, no poda ver dnde estaba escrita la respuesta, por lo que escane el pizarrn. Luego de copiar la respuesta, mir nuevamente hacia arriba y lo pillaron desprevenido. Sasagawa lo miraba fijamente desde la parte delantera de la sala. Su rostro era lgubre, pero sus ojos ardan de pasin. Su mirada pareca decir, Te deseo como nunca, no puedo soportarlo. Shiina trag y cubri su rostro con sus manos. Cerr sus ojos apretndolos. Su corazn lata violentamente. Estaba temblando debido a que haba incertidumbre en su corazn. Si no le importaba volver a salir herido, debera simplemente perdonar la inmoralidad de Sasagawa y volver a sus sucios brazos. Si no poda hacer eso, se alejaran cada vez ms. An no se sumerga en su cerebro la idea de que los sentimientos de anhelo que tena eran peligrosos. Sus manos temblaban. No pudo aguantar la sensacin de los ojos de Sasagawa sobre l. El hombre simplemente estaba tratando de confundirlo nuevamente. Los motivos de Sasagawa no haban cambiado. Por esa razn Shiina no poda cometer el mismo error dos veces. Permaneci aturdido hasta que son la campana que indicaba el final de la case. Afuera, las hojas amarillas del Gingko bailaban con el viento. Eran recin las cuatro de la tarde, pero ya se estaba oscureciendo. Entre los estudiantes que iban camino a sus

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casas, Shiina iba solo, sintiendo que su espalda le dola por la presin de su mochila. Sinti una palmada amistosa en su hombro. Te ves deprimido. Ocurri algo en casa? Al voltearse, vio a Nakahara. Su profesor lo miraba preocupado, su expresin era gentil; totalmente diferente a la de Sasagawa. Shiina sonri y dijo con voz amable No. Gracias a usted, ahora puedo hablarle a mi madre, y de a poco estoy comenzando a abrirme con mi familia. Nada ms pas. El rostro de Nakahara se endureci. Coloc una mano en su cadera y dijo Si ests preocupado por algo que no sea tu familia, puedes contrmelo. Eres el tipo de persona que guarda sus emociones, por eso me preocupo por ti. Shiina sinti como si hubiese escuchado esto antes en algn lugar. De verdad me veo tan dbil? pregunt. Siempre haba tratado de preservar ese exterior frio, pero ahora slo pareca ridculo. Nakahara estuvo en silencio por un rato. Se rasc su cuello tmidamente. De hecho, eso fue lo que me dijo Sasagawa. Podras pensar que no le agradas t o los otros estudiantes, pero de verdad los vigila. Es realmente perspicaz. Le ped consejo sobre el asunto con tu madre y de verdad me ayud. Es grandioso. Slo haba hablado con tu madre dos o tres veces, pero an as entenda completamente su personalidad. Probablemente debido a que, a diferencia de m que he llevado una vida bastante seria, l ha experimentado todo tipo de cosas. Ah? dijo Shiina tranquilamente. La mirada de admiracin hacia Sasagawa sobre el rostro de Nakahara era

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limitante. Si Nakahara hubiese hecho algo similar por cualquier otro estudiante, Shiina probablemente le habra credo. Pero Nakahara no le dio ningn otro ejemplo. Shiina sinti como si no pudiese escapar de la tenacidad de Sasagawa cuando escuch que el hombre haba estado interfiriendo con su vida en casa detrs de escena. Tanto as lo amaba Sasagawa? Una fuerte sensacin de sentirse atrapado presion a Shiina y se le hizo difcil respirar. No podra perdonar a Sasagawa por acostarse con alguien ms. Pero quiz haba algo fundamentalmente errneo con este profesor. Sasagawa amaba a las mujeres y su buena facha ciertamente no daaba eso. Era entendible que se comprometiera en tal comportamiento indecente. Shiina tena una mirada melanclica. Nakahara dijo con alegra Oye, quiz hacer esto te animar. Mirando el material impreso que Nakahara le pas, Shiina pregunt Qu es eso? Hojas de ejercicio para mis estudiantes de primer ao respondi Nakahara. Tengo cuatro clases, as que necesitar 120, no, 130 copias. Puedes ir a la oficina y sacar algunas para m? Por favor? Hay algo que necesito hacer ahora. Qu cosa? pregunt Shiina. Llamar a Mami-chan dijo Nakahara, sonriendo ampliamente. Nakahara saba que Mami era la debilidad de Shiina. Es muy complicado. Paso . Trat de devolver los papeles.

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Pero Nakahara rpidamente coloc ambas manos dentro de sus bolsillos para evitarlo. An tendrs algo de tiempo antes del trabajo, verdad? Slo te tomar unos 10 minutos. Shiina se encontr con esta extraa tarea mientras observaba el abrigo blanco de Nakahara alejarse rpidamente. Incluso aunque sus profesores usaran lo mismo, no senta la misma sensacin agridulce que senta al ver a Sasagawa. Suspirando, se dirigi al pasillo en direccin a la oficina, con los papeles en su mano. La ventana de la oficina estaba abierta hasta la mitad y una brisa placentera soplaba adentro. A diferencia del laboratorio de matemticas en el que se haba reunido con Sasagawa, las cortinas blancas en la oficina estaban completamente abiertas, permitiendo que entrara el sol occidental. Todos los trabajadores de la oficina normalmente iban a la sala de staff despus de clases, as que no haba nadie ms ah con l. Cruz sus brazos, sac su i-Pod de su bolsillo y lo encendi. Se coloc sus audfonos y se perdi en la msica que flua a travs de ellos. Nunca en verdad le haba gustado la msica popular. Senta que aquellas personas slo se volvan populares por su apariencia. l quera algo ms real. Dentro de su cabeza, el mundo real que haba creado cobraba vida. En el que haba confiado demasiado para que lo ayudara a escapar de la oscuridad. Al recordar esos tiempos, suspir. Slo era un mundo que haba creado para su propia conveniencia. Tena el mismo sentimiento de alivio cuando estaba en los brazos de Sasagawa. Cuando Sasagawa sostena sus manos, ayudaba a llenar la soledad. El calor que le entregaba le ense a Shiina el significado del xtasis. Y tal como un sueo pasajero, haba desaparecido.

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 Eh? Parpade para tratar de controlar las lgrimas que amenazaban con fluir y levant su mandbula. Pero no sirvi de nada. Las lgrimas llenaron sus prpados cerrados. Ya no saba lo que quera. No saba si rendirse ante Sasagawa significaba que sera degradado o salvado. No poda pedirle consejo a Nakahara sobre este asunto. Repentinamente, la atmsfera en la habitacin cambi. Cuando volte hacia la oscura entrada, vio a Sasagawa, mirando directamente hacia l. Sasagawa lentamente entr a la habitacin. Se par al lado de Shiina y le sac sus audfonos. Shiina lo mir por hacer algo tan arrogante, pero una mirada an ms dolorosa le lleg en respuesta. Se dio cuenta de que era porque Sasagawa vio las lgrimas que bajaban por sus mejillas. Le levant su rostro. Shiina. No soy lo suficiente bueno para ti? La voz de Sasagawa sonaba depresiva, como si de verdad lamentara lo del otro da, y hacerlo llorar. Por qu me preguntas eso ahora? Shiina sec sus lgrimas con la manga de su chaqueta. Las cejas de Sasagawa se fruncieron mientras lo miraba hacia abajo. Termin lo que tena con Mizuho confes. Juro desde lo profundo de mi alma que nunca ms me acostar con nadie ms que t. Lo prometo. Quiz era porque estaba tratando de atrapar nuevas lgrimas, pero los labios de Shiina comenzaron a temblar. Sasagawa ya haba visto que su rostro estaba mojado por las lgrimas. Levant su codo, escondi su cara en su brazo y trat de empujar a Sasagawa con la otra mano. Quera empujarlo hacia afuera de la habitacin.

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 Shiina Sasagawa dijo con impaciencia. Acerc a Shiina hacia l, logrando que no se pudiese mover. Pero esto no era el laboratorio de matemticas. Alguien podra entrar en cualquier momento. Sultame! Shiina grit. Te lo dije, no me acostar con nadie ms que contigo! Sasagawa mantena su agarre firme. Shiina lo mir hacia arriba y grit No hay forma de que crea una promesa que sale de tu boca! Si pudieses creerme, me perdonaras? pregunt Sasagawa. Su enojado tono de voz aadi ms presin al pecho de Shiina. La mirada honesta de Sasagawa lo silenci. Su semblante ceudo desapareci de a poco. Cundo se volvi tan frgil? Un dolor punzante se apoder de su garganta y todas sus lgrimas se derramaron al mismo tiempo. Sinti una sensacin clida en sus labios apretados. Un sentimiento de nostalgia arras a Shiina. Incluso cuando haba sido llenado con desprecio despus de lo que le haba hecho Sasagawa, no senta nada poco placentero sobre estar sobre los brazos de este hombre. Slo ah, se dio cuenta de que lo que haba apreciado finalmente haba vuelto a l, y estaba intoxicado por el sentimiento agridulce. Shiina finalmente devolvi el beso y sus brazos se relajaron, cayendo a los lados. Incluso cuando cualquiera podra entrar y descubrirlos, Sasagawa continu, al parecer sin importarle. Shiina dej salir un corto suspiro y alej sus labios. Volte su rostro para esconder la pasin reflejada en sus ojos.

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 Shiina. Sasagawa lo sostuvo fuertemente una vez ms, levantndolo ligeramente del suelo. Te amo. Los odos de Shiina se quemaron por la cercana de sus labios. Su deseo de soltarse de Sasagawa lentamente desapareci. Sinti como si su corazn se hubiese recin despertado. Ignor la voz racional dentro de su cabeza, que le adverta que se soltara. Te amo la voz ronca de Sasagawa repiti. Justo cuando las cosas se estaban calentando, unos pasos se detuvieron afuera de la puerta, Sasagawa? Qu ests haciendo? reclam Nakahara. Un silencio incmodo se sinti en la habitacin. Shiina escondi su rostro con una mano. Sasagawa lo solt con una mirada fra. Se volte hacia Nakahara. No me interrumpas! dijo con voz seria, pero molesta. Nakahara no se dio cuenta. Debi haber pensado de Sasagawa haba tratado de abrazar a Shiina como broma. Dijo con una risa, Oye, ahora, no te le insines a Shiina! A diferencia de ti, l es sensible . Dio una palmadita en el hombro de Shiina, hacindolo saltar. Mir a Sasagawa animadamente. La fra expresin de Sasagawa esconda la hirviente rabia que senta dentro. No lo hago su voz baja y celosa gru.

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Shiina se asust por su tono de voz. Ests seguro? Oye! Hiciste un gran trabajo, Shiina. Muchas gracias! Nakahara alegremente sac las copias de la mquina. Todo estaba bien hasta ahora. Mientras Sasagawa se fuera, sera como si nada hubiese pasado. El rostro de Shiina se paraliz cuando sinti que Nakahara animosamente le daba palmaditas en su cabeza. El sonriente profesor se par en frente de l. Shiina inmediatamente sinti que una sensacin de peligro brot en la habitacin. Es verdad. Me le insinu. Muchas veces dijo Sasagawa despreocupadamente, llevando sus manos a los bolsillos de su sucio abrigo. Qu? dijo boquiabierto. Nakahara-sensei, debo irme ahora Shiina comenz a caminar hacia la entrada. Pero Sasagawa lo agarr del brazo para detenerlo. Lo jal hacia su pecho y frot sus manos por todo su cuerpo, en frente de Nakahara. Ya sabes, sexo. He estado teniendo sexo con tu estudiante. Nakahara se congel por el tono cortante en la voz de Sasagawa. No pudo entender lo que quiso decir Sasagawa al principio, y slo permaneci all con sus ojos bien abiertos. Lo penetr, una y otra vez en mi cama, y l grit eso se siente muy bien! Sasagawa sonri ferozmente. Enterr su rostro en el cuello de Shiina. Shiina no poda hablar. La realidad se haba lanzado sobre l.

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 De qu ests hablando? dijo Nakahara con voz vaca, seca, que hizo que Shiina se congelara. Y despus de correrse, ama cuando se lo meto como si fuera un pistn. Me mira con ojos erticos y grita, Sensei, Sensei! una y otra vez. Cierto, Shiina? Las palabras sin disculpa de Sasagawa eran la verdad. Pero Shiina, que an permanencia en el pecho de Sasagawa, sacudi su cabeza incmodamente. La primera vez, lo hicimos en el bao de una estacin de trenes continu Sasagawa. Pero la segunda vez fue realmente buena. Fue el primer da en mi casa despus de que se qued contigo. Lo hicimos hasta la maana. Me corr dentro de l y luego l se corri justo en la mitad de todo. Luego lo llen nuevamente. Lo hicimos tantas veces que qued exhausto. Nakahara permaneci en silencio por un rato y luego mir a Shiina. Realmente hiciste eso con Sasagawa? Sus ojos eran acusadores y puales que apuntaban a Shiina. Su escrupulosidad de siempre fue reemplazada por disgusto. N-no, yo Shiina balbuce. La mirada de Nakahara estaba llena de desprecio y culpa. Pareca como si estuviese diciendo, Y yo que te trat como mi familia! Yo Shiina no poda encontrar las palabras. El color se le fue de su rostro. Nakahara finalmente abandon la habitacin con una mirada oscura que Shiina nunca haba visto en su rostro antes. Lo siento Sasagawa se disculp. Shiina se sent con su espalda apoyada en la pared. El rostro de Sasagawa

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no tena seales de arrepentimiento. Pero hasta que seas mo, tengo que destruir todas tus rutas de escape . As que haba eliminado las barreras. Mientras Shiina miraba a Sasagawa, quien estaba en cuclillas a su lado, estaba convencido de la crueldad de este hombre. Por qu debera confiar en ti? Por qu me hiciste algo tan terrible? objet, mirando al suelo. El viento aument, haciendo sonar el marco de la ventana. Sasagawa se puso de pie y cerr la ventana de un golpe, lo que hizo que la cortina dejara de moverse. Sasagawa suspir y mir a Shiina. Slo le dije la verdad. Eso slo te muestra el tipo de hombre que es realmente Nakahara. Sasagawa le lanz una mirada penetrante, pero tambin sonri tristemente. Shiina no entenda el significado detrs de esa expresin. Enterr su rostro en sus rodillas y discuti, abro mis piernas para ti, me haces completamente tuyo y no tengo dnde ir, pero qu voy a hacer cuando te canses de m? Sin importar cunto resentimiento pusiera en su voz, Sasagawa nunca se echara para atrs. Ya lo saba, pero simplemente ya no poda soportarlo. No me cansar de ti dijo Sasagawa con firmeza. Siempre te amar, lo prometo. Shiina se enrojeci con estas seguras palabras. Elev su voz diciendo, No hay forma de que puedas! Los sentimientos de la gente cambian! Mira a Nakahara-sensei! Haba sido muy agradable conmigo, pero

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 Mis sentimientos no cambiarn contest Sasagawa igualmente, sin sacarle los ojos de encima. No haba una nube de duda en su ojo. Mientras ms trataba Shiina de apartar los sentimientos de Sasagawa, ms senta que estaba haciendo algo mal. Pero no se renda, segua presionando. Ests mintiendo! No puedo confiar en ti! Incluso si no puedes confiar en m, estoy seguro de ello respondi Sasagawa. Ni siquiera ser capaz de amar a alguien ms que a ti. Te amar por el resto de mi vida. Eso no es posible! Los nicos que podan decir cosas tan poco reales eran los nios a su primer amor. Eso es en todo lo que Shiina poda pensar. Los ojos de Sasagawa se llenaron de compasin y dijo con voz sobreprotectora Slo ests diciendo eso porque sabes que hay una opcin de que tus sentimientos cambien. Pero yo soy diferente. Soy diferente a ti y a todos los dems. Shiina no poda pensar en nada que decir, as que mordi sus labios. Sasagawa haba tenido muchas relaciones, por lo que sus palabras tenan peso. Pero si Shiina admita esto, sera como decidir que el amor que senta por Sasagawa no tena fin. Eres todo lo que tengo, Shiina. Y yo soy todo lo que t tienes. El brillo bien definido en los ojos de Sasagawa hizo olvidar a Shiina lo que iba a decir. Shiina lo mir con desaliento.

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Sasagawa desorden su cabello caf ceniza con mayor delicadeza que Nakahara, y aadi As que mejor te preparas.

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Captulo 9

En medio de la ruidosa sala de clases, Ai volte para ver a Shiina, con el libro de asistencia en sus manos. La silueta de su delgado cuerpo sobresala en la oscura sala. Su cabello caf almendra que flua en sus hombros, era liso y hermoso. Vas a devolver eso a la sala de staff? Yo lo llevar. De todas formas, ir para all . Shiina lanz su mejor sonrisa matadora y estir su mano. Ai lo miraba fijamente, pero la mirada de l estaba enfocada en el libro de asistencia que cargaba en sus manos. En verdad, no tena una razn para ir a la sala de staff. Pero si obtena el libro de asistencia, tena una excusa para ir all. Con afn, Ai le pas el libro. Gracias! Incluso cuando Nakahara es nuestro profesor, siempre olvida cosas! dijo con una sonrisa inocente. Tomando el libro, Shiina devolvi la sonrisa. Pens distradamente que Nakahara tambin le haba sonredo as una vez. Exceptuando en invierno, la puerta de la sala de staff normalmente se dejaba abierta. Shiina la atraves sin vacilacin y camin hacia el escritorio que estaba cerca de la ventana en la parte posterior de la habitacin. Nakahara estaba al telfono, inmerso en una conversacin con su sonrisa habitual en su rostro. No sinti la presencia de Shiina.

-N

ishida-san.

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 Olvid esto . Shiina coloc el libro de asistencia gentilmente sobre su escritorio. Nakahara dio un salto y sonri incmoda y forzadamente. Ah gracias dijo, alejando el auricular un poco y agradecindole sin hacer contacto visual. Su perfil se vea serio. Ignorando a Shiina, volvi a su conversacin telefnica. Aula, clase de ciencias. Cuando se cruzaron, Nakahara ignor a Shiina. Ni siquiera poda mirarlo a los ojos. Shiina retrocedi medio paso y mir cansadamente la silla al lado de l. No haba nadie. Sac la silla y se sent. Esper a que Nakahara dejara el telfono, pero Nakahara no pudo esconder su disgusto. Puso una cara que mostraba que Shiina lo estaba molestando, y continu hablando por telfono, quiz a Miami. En otras palabras, la presencia de Shiina era problemtica. Shiina coloc ambos codos sobre el escritorio de Nakahara y mir fija y amargamente a su profesor. En verdad, Nakahara no tena razn para culpar la actitud de Shiina. Era una reaccin normal y esperada. El placer que obtuvo por tener sexo con otro hombre no poda ser entendido por una persona comn. Nakahara probablemente haba imaginado todas las cosas que Sasagawa haba expuesto sobre su relacin. Shiina lo llam una voz baja. Shiina mir por sobre su hombro y vio a Sasagawa. Vesta su abrigo sucio como de costumbre. Sus ojos se entornaron y lanz una mirada peligrosa a Shiina, probablemente porque lo vio esperando hablar con Nakahara.

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Shiina se ri entre dientes y volvi a mirar a Nakahara. Sasagawa camin hacia l. Nakahara ciertamente haba decidido ignorarlo. No mostraba seales de estar cerca de terminar su conversacin telefnica. Shiina se rindi y se separ de la silla, intercambiando miradas con Sasagawa. Sasagawa haba destruido todas las rutas de escape de Shiina y haba impulsado a Shiina a depender slo de l. Era un truco infantil e imprudente. Debido a ese tipo de personalidad, si Shiina declaraba sus sentimientos en un lugar como este, era seguro que Sasagawa lo entendera. Para ser leal a su deseo, tena que probar que no le estaba mintiendo a su corazn. De una forma, era muy inocente. Sin desviar sus ojos, sera honesto acerca de lo que quera. Incluso cuando sera revitalizador, no poda decirlo tan directamente como Sasagawa lo haba hecho con Nakahara. Quiero ir a tu casa, Sensei dijo Shiina en voz baja. Sasagawa no fue el nico que reaccion ante el susurro de Shiina. La espalda de Nakahara se endureci. Mantenindolo en su visin perifrica, Shiina puso toda su emocin en su voz y dijo Quiero que me penetres hasta que sienta que voy a morir. Shiina reclamaba sexo de una manera directa. Sasagawa respondi seriamente Entonces supongo que no lo sacar en un buen tiempo . No haba rastro de su sonrisa arrogante de costumbre. Quedaban muchos otros profesores y estudiantes en la sala de staff. Pareca que como profesor, Nakahara no poda ignorar este intercambio obsceno que ocurra frente a l. Sasagawa le orden a Shiina que se encontraran en el estacionamiento en 10 minutos, y Shiina volvi a la sala de clases a buscar sus cosas. Cuando

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estaba a punto de bajar las escaleras, su brazo fue agarrado repentinamente. Te sientes bien siendo su presa? Nakahara dijo, jadeando. Tena una mirada de angustia en su rostro. Probablemente estaba en conflicto con el ser compasivo con un estudiante y estar asqueado por sus actos. Su presa? repiti Shiina. Si lo miraba de un modo objetivo, podra parecer de esa forma. Al principio, lo haba pensado as. Pero la actitud de Sasagawa haba sido consistente. Sasagawa le haba dicho a Shiina que lo salvara, que quera el cuerpo y el alma de Shiina y le haba abierto desesperadamente sus brazos. No creo que haya nadie que me desee ms que l, as que estoy bien con eso . Haba traicionado a Nakahara, quien claramente quera arreglar su comportamiento. Con gusto lo dejar que me coma. Nakahara se call ante la declaracin de Shiina con una mirada de angustia en su rostro. Mir hacia abajo, y Shiina sinti un dolor dentro de su pecho. Se liber de Nakahara, quien permaneca como una estatua, y continu bajando las oscuras escaleras. Los estudiantes que iban a casa pasaban por el lado de Shiina, y cuando mir hacia atrs vio que Nakahara an estaba parado en el mismo lugar. Un estudiante lo salud y l devolvi el saludo animadamente. As es como deba ser. Nakahara debera estar con estudiantes regulares de secundaria, no con alguien como Shiina. Se sinti un poco triste, pero alej la mirada. En silencio dijo adis al Nakahara de buen corazn. Sacudi su cabeza e inhal. Se prepar para tomar la mano de Sasagawa. En silencio comenz a caminar.

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Tan pronto como llegaron al departamento, Sasagawa lo levant y puso en la cama. Shiina comenz a sacarse la ropa. Aprate aprate, Shiina. Quiero metrtelo dijo Sasagawa, a tientas tratando de sacarse la remera y los pantalones. Sus ojos estaban llenos de deseo. Shiina devolvi su mirada. No podan esperar hasta la noche. Desnudos, se abrazaron, entregndose a los labios del otro. Las cortinas cerradas estaban teidas con el color del sol poniente, y fuera de la ventana podan escuchar los ruidos de nios rindose. Mmmahh Sasagawa alej sus labios y comenz a acariciar las tetillas de Shiina con sus dedos. Shiina comenz a jadear. Su cuerpo se arque hacia atrs por la tormenta de besos que Sasagawa le daba en su cuello, clavcula y pecho. Su mano derecha estaba estirada sobre las sbanas, y entrelaz sus dedos con los de Sasagawa y lo abraz fuertemente. Mmmmmm. Sasagawa estimul las tetillas de Shiina con la punta de su lengua hasta que se endurecieron. Con su mano derecha, las pellizc y luego acarici la piel de Shiina, bajando lentamente hasta que agarr su miembro excitado. Shiina se qued sin aliento y cerr sus ojos, girando su cabeza. Tembl con placer.

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An sosteniendo su mano, Sasagawa se sent. Acarici a Shiina y apret el nctar que se haba estado formando dentro. La humedad de Shiina se increment. Sasagawa lo agarr con su mano mientras lo masturbaba hacia arriba y hacia abajo, haciendo un ruido hmedo. Shiina levant sus piernas, arqueando su espalda, y su lquido pre eyaculatorio viaj hasta su trasero. Oh, lo quieres ah? pregunt Sasagawa con una sonrisa masculina. Quit sus manos del miembro de Shiina y empuj un dedo hacia dentro de l. Los ojos de Shiina permanecan cerrados. Estaba rendido ante la emocin y comenz a sollozar. Ahhahhhhoh, ohh! Clav sus uas en la mano de Sasagawa, elevando su voz con pasin. Sasagawa empuj su dedo entero, lo que hizo que Shiina vibrara. Finalmente Shiina levant sus caderas y el placer se arremeti dentro de l como una ola. Cuando lo golpe directamente, pens que se iba a desmayar. Trat de aferrarse a algo, lo que tens sus msculos de abajo. Djame introducir mi pene Sasagawa dijo gentilmente. Rpidamente sac su dedo. En su lugar, empuj algo mucho ms clido y largo. Te amo, Shiina Su voz era apasionada. Se expandi dentro de Shiina. Enrgicamente empuj su pene hacia arriba. Mmmmaahhhohhh, ohhh. Shiina apret sus dientes, pero relaj sus piernas para permitir que Sasagawa llegara lo ms profundo que pudiese.

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Con lgrimas en sus ojos, mir a Sasagawa mientras sus cuerpos se vinculaban. Su respiracin era spera. Sus ojos se encontraron, lo que destruy la mirada llana de Sasagawa. Shiinaaaa dej salir con una voz que sonaba conmovedora. Bes a Shiina y empuj su lengua dentro de su boca. Lo bes tan ferozmente que Shiina sinti como si lo fuera a tragar completo. Shiina lo mir a travs de unos ojos nebulosos. La apariencia grosera e imprudente de Sasagawa era completamente diferente a su actitud demasiado confiada de siempre. Shiina saba que nadie ms haba visto as a Sasagawa. Mir a Sasagawa con amor derramndose por sus ojos, y Sasagawa alej su rostro, con una mirada de vergenza. Ahhh, ahh, Sensei! Estaba encantado con la sensacin del miembro de Sasagawa empujando bruscamente, tan fuerte como poda, tan profundo como poda. Liber su mano y gimi obscenamente mientras se aferraba a la gran espalda de Sasagawa. La primera vez que tuvieron sexo, Sasagawa haba dicho que lo salvara. Pero ahora era lo opuesto. Si l no salvaba a Sasagawa, estara arruinado. Mmm, ahhh, ahhh, Shiinaaaa! Sasagawa sudaba por todas partes. Su cabello negro caa sobre su frente de forma cautivadora. La temperatura de su cuerpo era abrasadora, estaba casi hiperventilndose. Incluso el aire alrededor de ellos pareca sucio. Nunca te dejar jur Shiina, apretando sus ojos hasta cerrarlos. Gimi con los besos que Sasagawa plantaba

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en su cuello. La respiracin sobre su oreja era spera. Los movimientos bruscos aumentaron de velocidad. Shiina, te amo. Shiina Shiina El rostro de Sasagawa se torci del dolor, y mantuvo a Shiina cerca de su pecho. Esta era la pasin que tena por su estudiante, quien era nueve aos menor que l. Sasagawa se vea frgil, como si se perdiera. Se aferr fuertemente a Shiina. Al verlo as, Shiina lo am. Lo amaba tanto que no poda soportarlo. Finalmente perteneca a Sasagawa, y no lo cambiara por nada. Mmmm, Sensei! Ya no poda controlar el calor abrasador que se estaba formando en su abdomen. Lleg al clmax, con todo su cuerpo y su alma. Sus jadeos se convirtieron en gemidos y su pecho se elev y cay violentamente. Sasagawa sec el sudor de la frente de Shiina con su mano. Mir apasionado el gesto. Los ojos de Sasagawa slo lo miraban a l. Permanezcamos juntos siempre. Shiina asinti en respuesta a las palabras de Sasagawa, y rob un beso apasionado de su profesor. Sus labios comenzaron a temblar y elev nuevamente su voz. Sasagawa se sent ms derechamente y agarr las rodillas de Shiina, dirigiendo su pene, metindolo bruscamente dentro de Shiina. Ahhh, ahhh, ahh! Shiina cerr sus ojos. Me correr! Ahhh, Shiina! Haaa, haaa, ahhh ahhh!

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Todo el cuerpo de Sasagawa se tens mientras dejaba salir un gemido masculino y ertico a su aire. Mmmm, ahhh ahhh! Shiina sinti un lquido clido y precipitado llenar su interior. Sasagawa dej salir un largo jadeo. Pareca exhausto. Cay, y Shiina atrap su gran cuerpo y lo acerc a l. Esperaron a que sus respiraciones se calmaran y volvieran a la normalidad. Sostuvo a Sasagawa en sus brazos y le mostr nada ms que amor. Abrindose ante l, vio la oscuridad. La oscuridad extendida y sin fin del xtasis. Nunca se librara de este calor.

Fin

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Palabras de la Autora
Hola a todos. Soy Matsuda Miyu. Cmo estn? En estos momentos, estoy en el hospital tomando suplementos de hierro diarios. Siempre he sido bastante anmica. Lo hered de mi padre! (Jajaj). De todas formas, esta vez escrib sobre el emparejamiento estndar de un profesor y su estudiante. El tema es el mismo que en los ttulos Oscuridad y Compasin. Alguien que est tratando de salvar a alguien ms termina siendo salvado. Para Shiina, Sasagawa es su salvador, y para Sasagawa, Shiina es su Virgen Mara. Nakahara es bueno, no todos los chicos que fueron criados para bien actan como l? (Jajaj). l slo era un papel secundario, as que no tengo muchos sentimientos hacia l, pero es un profesor serio, as que entiende lo que puede hacer para ayudar a otros. Jissohji-sensei hizo las ilustraciones. Lamento haberte hecho pasar por tanto problema! Al principio, mi editor pregunt si tena alguna ilustradora en mente con quien quisiera trabajar, y Jissohji-sensei fue la primera persona en la que pens! Qued sorprendida por la calidad vaga pero a la vez detallada de sus ilustraciones, y estoy muy agradecida de cmo result. Muchas gracias. Amo la forma en que dibuj el hermoso rostro de Shiina. Tambin amo la forma en que dibuj a Sasagawa hacindole esto y aquello! Tambin me gustara agradecer a mi editor. Gracias por ayudarme siempre. Lamento haber estado presionando

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el manuscrito ms y ms! Gracias por escuchar mi terquedad. Duermo muy bien cada noche. Finalmente, me gustara agradecer a los lectores. Escrib un final feliz y revitalizante esta vez, pero les gust? Me encantara escuchar sus opiniones. Espero ansiosa encontrarnos otra vez!

Matsuda Miyu

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-Belle-Belle- / Gaby Ayari / Gaby Ayari / Haref

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