Chapter Text
Gakuho estaba recostado en su cama sobandose la frente mientras luchaba contra los repentinos cólicos que lo atacaban sin piedad alguna.
Ya lleva varias semanas luchando con los cólicos que aparecieron de la nada, su esposo menciona que su aroma estaba sufriendo cambios que no podía explicar con palabras.
Además su abdomen se había puesto duro, fue al médico y solo le dieron unas pastillas qué no ayudaban mucho, al contrario emporaron su dolor.
"Si la siguiente semana sigues con dolores volveremos al hospital" El Alfa le dijo trayendole una taza de manzanilla y su cojín térmico.
"Gracias Tadaomi" Se recostó para poder tomar su manzanilla y colocarse su cojín térmico qué ayudaba a disminuir el dolor.
Gakuho dejó caer su cabeza en el hombro de su esposo, por mucho que le duela admitirlo se siente débil, físicamente débil.
Necesitaba oler las feromonas de su esposo para recuperar algo de sus fuerza perdidas, por alguna razón su cuerpo exigía más comida y recibir el aroma de su marido.
"Mi aroma sigue raro?"
"Sigue cambiando, no puedo decifrar qué es pero no parece letal" Karasuma le explico oliendo las feromonas de su omega.
El refrescante aroma de menta habia sido reemplazo por una fragancia nueva, era un olor desconocido que no podía describir, era como si no oliera a nada pero a la vez debía de oler algo.
Su nariz estaba demasiada confundida, algo pasaba en el cuerpo de Gakuho.
Cuando el dolor paso lo primero que hizo el omega fue irse a preparar un pan con mermelada y atún.
"Critica mi comida y la cena de esta noche será esto" Gakuho le advirtió a su esposo que estaba listo para hablar sobre sus nuevos gustos.
"Yo... Sabe bien?" Karasuma le pregunto tratando de comprender la rara combinación de alimentos.
Gakuho le dio otro mordisco a su comida ignorando la pregunta por el bien de la cena.
Los siguientes meses los cólicos atacaron de manera aleatoria, su olor seguía cambiando constantemente y su abdomen se había puesto más duro.
Entonces un día todas las dolencias se juntaron, se encerró en el baño creyendo que era un ataque de diarrea o estreñimiento por el dolor que sentía al pujar.
Sus entrañas se estaban resgarrando mientras pujaba, el dolor era tan intenso que podía sentir como lágrimas se juntaban en la comisura de sus ojos.
No va llorar, no va llorar por una cosa tan insignificante, no lo ha hacer!
"Gakuho? Todo está bien?" Karasuma le pregunto del otro lado de la puerta al oír los quejidos de dolor.
Se aparto de un salto por el grito.
"No lo estoy!"
"Voy preparate algo de manzanilla"
"Hazlo!"
Sabe que esa agua hace sentir mejor a su esposo cuando tenía esos ataques de cólicos, aunque este sonaba mucho peor.
Gakuho siguió luchando con el dolor por media hora más, se mordió el labio para no gritar cuando paso por el mayor dolor de toda su vida, las lágrimas salieron contra su voluntad mientras oía el ruido de algo cayendo.
Se tomó unos segundos para minutos para calmarse antes de volver a sentir el dolor, su trasero dolía como el infierno.
Sangre? Eso explicaba porque le había dolido tanto, demasiada sangre.
Se subió los pantalones después de limpiarse adecuadamente, le echo un ojo a lo que había causado su dolor antes de tirar de la palanca.
"Umh?" Parpadeo al ver algo muy diferente.
Entre la marea de su propia sangre en el medio había un huevo, un huevo de gran tamaño....
Entonces ese dolor....
Mientras tanto Karasuma había terminado de preparar la manzanilla cuando escucho como su esposo lo llamaba.
La puerta del baño estaba abierta dándole el pase libre al interior, donde su esposo tenía una cara de calma aunque su aroma decía todo lo contrario.
"Gakuho?"
"Tadaomi puse un huevo"
"Qué?"
"Puse un huevo"
El alfa se acercó para ver lo que veía su esposo, sus ojos se abrieron al ver la sangre y el huevo de gran tamaño.
***
Fueron al hospital con el huevo ("Tadaomi no vamos a ir al veterinario, esa cosa salió de mi") donde explicaron la situación.
La omega ginecóloga le entrego un folleto alfa mientras enviaba a Gakuho a que lo revisaran para asegurarse de no tener daños internos, la doctora junto a su asistenta se llevaron el huevo para limpiarlo manera correcta.
Al parecer algunos omegas en vez de tener un embarazo común ponían huevos, no se podía saber de esa característica hasta que el huevo ya hubiera sido expulsado.
En una semana el huevo debía de eclosionar, en una semana serían padres, en una semana serían padres....
"Tenemos muchas compras qué hacer y esos analgésicos aún no hacen efecto" Gakuho se quejo mientras regresaba a casa, su ropa envolvía el huevo para darle calor.
"Gakuho vamos a ser padres" Karasuma no quitaba la vista del camino, debía de ir con cuidado.
"Técnicamente ya lo somos, aunque no sabemos si es niña o niño" El omega acarició el huevo qué dio ligeros movimientos.
"Seremos padres"
"Lo se Tadaomi" El omega sonrió al oler las feromonas de felicidad, no podía ver la sonrisa tiernamente aterradora pero sabe que lo está.
"Gakushuu o Gakumi también esta emocionada"
"Tan rápido le pusiste nombre?"
"Gakushuu si es niño y Gakumi si es niña"
"No podemos pensarlo con más calma en casa"
Gakuho abrazo el huevo como si su vida dependiera de ello cuando realizo un movimiento violento, sus ojos se abrieron con sorpresa, ni siquiera a nacido y ya muestra la sobre fuerza de su esposo.
"Eso es un no de nuestro huevo, Tadaomi no vamos a comer huevos por un buen tiempo"
"No tengo apetito de uno cuando se que mi hijo va salir de uno"
Al estar cerca de fin de año le habían dado vacaciones a Tadaomi, tiempo suficiente para armar de manera rápida una habitación para el bebé que llegaría, pintaron de un color amarillo la habitación y compraron ropa de color neutro.
El huevo estaba rodeado de sus prendas de ropa que contenían sus aromas de menta y medicina con romero, la doctora recomendo hacer eso para que se fuera familiazando con ellos y no perdiera calor.
Gakuho no se despegaba del huevo, le leía cuentos lo suficiente educativos qué pudiera entender, ("Gakuho ni siquiera a nacido" "Yo lo puse, yo le leo cuentos") se aseguraba qué ningún accidente pasará.
Karasuma hacia lo mismo hablándole en voz baja y contándole una que otra historia, se aseguraba que no perdiera el calor.
El 1 de enero el huevo se rompió, Gakuho estaba leyéndolo un nuevo cuento cuando pudo ver como unas grietas empezaban aparecer del huevo qué descansaba en su cama, llamo de inmediato a su esposo que se apresuró en aparecer.
El cascarón se fue rompiendo mostrando una manito regordeta antes de romperse por completo, en su interior estaba un bebé con mirada molesta y ojos llorosos por haber roto su hogar.
El bebé empezó a llorar cuando el frío lo golpeó, Gakuho se apresuró en cargarlo para darle de su calor.
Tadaomi le coloco una suave sabana que guardaría el calor.
"Entonces eres un niño, bienvenido a casa Gakushuu"
El omega le sonrió a su alfa qué miraba encantado a su bebé que dejaba de sollozar.
"Bienvenido a casa Gakushuu" Tadaomi susurro con una sonrisa cuando la pequeña mano atrapó su dedo.
Gakuho sonrió en silencio no mencionando la lagrima que recorrió el rostro de su esposo.
****
Gakuho extrañaba el tiempo que su hijo era un lindo bebé que solo dormía y balbuceaba, como avanza el tiempo.
Ahora su dulce cachorro ya no es uno, es un adulto casado (con Akabane Karma) que venía a contarles los repentinos cólicos qué estaba teniendo de manera repentina en momentos aleatorios durante esos meses.
Tadaomi y el se miraron al escuchar las dolencias de su hijo, su esposo lo miraba esperando que hablara.
"Gakushuu, vas poner un huevo" Fue director al grano.
"Qué?"
"Gakuho, se más claro por favor"
"Tadaomi lo va entender"
"Papá, otou-san?" Gakushuu miro a sus padres sin entender que pasaba, no le gusta ese sentimiento.
"Gakushuu, tú sabes como nacen los bebés?" Tadaomi le dijo lamentandose por no haberle dicho sobre eso antes.
"Otou-san estoy casado, se como se hace un bebé y por donde va salir"
"Lo que tu padre te trata de decir es que tú, saliste de un huevo que yo puse"
Gakushuu parpadeo esperando a que le dijera que era una broma, iba ser una larga explicación.
Unas horas después Karma llego a su hogar para recoger a su marido, marido que se encontraba recostado en la mesa con una mirada perpleja.
"Que le hicieron a mi esposo? Shuu, oye Shuu"
"Felicidades Karma, serás padre, nosotros abuelos y tu esposo pondrá un huevo"
"Que?"
Tadaomi miro con reproche a su esposo que parecía estar divirtiéndose con toda la situación.