Venecia atrae a los visitantes con la belleza de sus canales, su arquitectura y sus obras de arte. Seduce con sus magníficos artesanos y encanta por su comida y bebida, disponibles en locales tan deliciosos como Versus Meridianem, All'Arco e Impronta Cafè.
Compuesta por centenares de islas ubicadas en la laguna de Venecia, la ciudad solo puede ser recorrida a pie o en barco. Venecia cuenta con una atmósfera pacífica que permite a los visitantes concentrarse en disfrutar de sus vistas y atractivos, como la basílica de San Marcos, el Arsenal o la Torre dell'Orologio.
Venecia es una ciudad para los amantes, con sus íntimas góndolas y sus rincones románticos, como el Puente de los Suspiros. Si te interesan el arte, el cine, la música o la arquitectura, o simplemente quieres ser seducido por un destino mágico, adorarás Venecia.
¿Qué puede ser más romántico que deslizarse en góndola bajo los puentes del Gran Canal con la persona amada? Venecia siempre se ha asociado a los amantes, desde los días de Casanova.
Venecia es una de las ciudades más fascinantes de Europa. Durante siglos dominó el Mediterráneo, desarrollando una cultura sofisticada y creando obras maestras arquitectónicas.
Si te gusta el arte, te encantará Venecia. Descubre espectaculares obras maestras como la Asunción de la Virgen de Tiziano en la iglesia de Santa María dei Frari, los frescos de Tiepolo en Santa María de la Piedad y la Bienal de Arte o la de Arquitectura, además del Festival Internacional de Cine de Venecia.
Venecia es deliciosa al paladar y a los ojos. Los restaurantes venecianos, como la Trattoria Dalla Marisa, te fascinarán. Acompaña tus comidas con Prosecco, una de las especialidades locales de la región del Véneto, y remátalas con un Bellini, cóctel originario de la ciudad.
Venecia es a la música clásica como Milán a la moda. En cualquier época del año puedes disfrutar de conciertos. También es posible hacer coincidir tu viaje con el Festival de Cine de Venecia, uno de los certámenes más prestigiosos del mundo.
Símbolo de la riqueza veneciana, esta plaza legendaria acoge la alta torre del Campanile, la basílica de San Marcos y el Palacio Ducal. Este último ofrece un fascinante recorrido.
El Gran Canal es la avenida "acuática" principal de Venecia. Un espectáculo permanente en el que los barcos públicos denominados vaporetti cruzan los muelles privados de palacios opulentos, como el Ca' d'Oro, con paradas directas en los museos como las Gallerie dell'Accademia y Peggy Guggenheim, sede de obras maestras internacionales.
La joya del Gran Canal es el Puente de Rialto, uno de los 400 conectores necesarios para cruzar las interminables vías fluviales de Venecia. Construido en el siglo XVI para dar acceso al mercado del mismo nombre, sus escalones de piedra presentan puestos que ofrecen baratijas, joyas y máscaras venecianas. Desde la parte más alta, las vistas del Gran Canal son estupendas y muy fotogénicas.
Lejos de San Marcos y Rialto se encuentran Burano, Murano y Torcello. Burano, el centro de la fabricación de encajes, es muy popular por sus casas de colores brillantes al borde del agua. La famosa Murano destaca por el soplado de vidrio impecable, aunque quizás la encuentres abarrotada. Torcello es el enclave más alejado de los tres, cuya antigua iglesia con mosaicos es uno de los asentamientos más antiguos de la laguna.
Tres veces resucitado de entre las cenizas, este escenario de ópera sigue conservando toda su reputación. La Fenice es uno de los muchos lugares que programan conciertos y espectáculos musicales en la ciudad. Si alguna vez quieres escuchar a Verdi o Vivaldi en directo, ¡hazlo en Venecia!
Símbolo de la riqueza veneciana, esta plaza legendaria acoge la alta torre del Campanile, la basílica de San Marcos y el Palacio Ducal. Este último ofrece un fascinante recorrido.
El Gran Canal es la avenida "acuática" principal de Venecia. Un espectáculo permanente en el que los barcos públicos denominados vaporetti cruzan los muelles privados de palacios opulentos, como el Ca' d'Oro, con paradas directas en los museos como las Gallerie dell'Accademia y Peggy Guggenheim, sede de obras maestras internacionales.
La joya del Gran Canal es el Puente de Rialto, uno de los 400 conectores necesarios para cruzar las interminables vías fluviales de Venecia. Construido en el siglo XVI para dar acceso al mercado del mismo nombre, sus escalones de piedra presentan puestos que ofrecen baratijas, joyas y máscaras venecianas. Desde la parte más alta, las vistas del Gran Canal son estupendas y muy fotogénicas.
Lejos de San Marcos y Rialto se encuentran Burano, Murano y Torcello. Burano, el centro de la fabricación de encajes, es muy popular por sus casas de colores brillantes al borde del agua. La famosa Murano destaca por el soplado de vidrio impecable, aunque quizás la encuentres abarrotada. Torcello es el enclave más alejado de los tres, cuya antigua iglesia con mosaicos es uno de los asentamientos más antiguos de la laguna.
Tres veces resucitado de entre las cenizas, este escenario de ópera sigue conservando toda su reputación. La Fenice es uno de los muchos lugares que programan conciertos y espectáculos musicales en la ciudad. Si alguna vez quieres escuchar a Verdi o Vivaldi en directo, ¡hazlo en Venecia!
Entre los mejores restaurantes italianos de la ciudad figuran Antico Martini y La Caravella, cerca de San Marcos. En Castello, Trattoria alla Rampa sirve pescado fresquísimo, Le Spighe platos vegetarianos y Trattoria dalla Marisa un conejo asado excelente. Los almuerzos suelen costar 20 EUR y las cenas unos 30 EUR por persona. En la calle, los llamados bares cicchetti ofrecen pequeñas porciones de comida por solo 2 EUR.
Si quieres disfrutar de Venecia con mayor tranquilidad, visítala en otoño o a principios de la primavera. Septiembre y octubre son cálidos, lo mismo que abril y mayo. En verano el sol abrasa, las máximas alcanzan los 28 ºC y hay mucha gente, por lo que hacer reservas puede resultar complicado.
El aeropuerto Marco Polo (VCE) de Venecia está ubicado a unos 13 kilómetros del centro histórico de la ciudad. Para trasladarse a la ciudad, una opción es tomar el taxi acuático Alilaguna, que tarda alrededor de una hora y cuesta 15 EUR. Otra posibilidad es tomar el autobús número 5, que cuesta 8 EUR y tarda una media hora en llegar al Piazzale Roma.
Se puede llegar fácilmente en tren desde otras ciudades italianas o europeas. Por ejemplo, adquirir un billete desde París a Venecia, operado por Trenitalia, vale 118 EUR. La estación principal, Santa Lucía, se localiza en el norte de la ciudad, pero tiene excelentes conexiones de autobuses acuáticos.
Aunque conducir por el centro de Venecia no es una opción, llegar en coche hasta Venecia sí es posible. Para ello, deberás circular a través de la E70 desde Milán y de la A13 desde Florencia. Además, existen aparcamientos en la parte continental, desde la que se puede viajar en barco hasta la propia Venecia.
Los autobuses son una forma popular de llegar a Venecia. Entre las compañías que prestan servicios hasta a la ciudad figuran Baltour y FlixBus, que ofrecen conexiones con Milán, Florencia, Roma y capitales europeas como Berlín y París. La principal estación de autobuses está en Piazzale Roma, donde comienza el Gran Canal. Un viaje de ida desde París cuesta desde 98 EUR.
1. El Sestieri es el corazón de Venecia, donde se ubican sus barrios principales: San Marcos y Santa Cruz. Aquí encontrarás los principales edificios religiosos de Venecia, como la basílica de San Marcos, el Puente de los Suspiros y el Gran Canal. Para alojarte en esta zona, Palazzo Selvadego, el Hotel ai do Mori y el lujoso Hotel San Gallo son idóneos.
2. Murano es un grupo de islas situadas al norte del centro de Venecia, que alberga la comunidad de maestros vidrieros. Junto a hermosas iglesias, los restaurantes como Osteria al Duomo, La Perla Ai Bisatei o B Restaurant alla Vecchia Pescheria, y las tiendas familiares la convierten en un destino especial. Recuerda comprar adornos de vidrio de fabricación local y visitar el Museo del Vidrio.
3. Giudecca, al sur de Sestieri, es una zona exclusiva y menos turística que se caracteriza por sus pequeñas galerías de arte, salas de exposición de telas como Fortuny y los pequeños quioscos de comida rápida localizados en Fondamenta. Si te encantan las boutiques, Giudecca es un magnífico destino.
La movilidad en Venecia depende de los autobuses acuáticos. Conocidos como vaporetti, navegan por los canales de la ciudad y cuestan 7 EUR por viaje. Además, existen tarjetas turísticas a 20 EUR por día o 60 EUR por semana. Fuera de las islas, el precio de los autobuses terrestres asciende a 1,50 EUR por trayecto y los abonos de 10 viajes a 14 EUR.
Los taxis convencionales no son útiles en Venecia, pero sí su equivalente acuático: las góndolas. El coste oficial de los paseos en góndola es 80 EUR por cada 40 minutos y 40 EUR por cada 20 minutos adicionales, pero los gondoleros pueden cobrar extra por los servicios suplementarios. También los taxis acuáticos motorizados son útiles, pero sus tarifas son altas: unos 70 EUR por un corto desplazamiento.
Aunque conducir por el centro de Venecia no es posible, los visitantes pueden alquilar un vehículo para explorar la región del Véneto. Avis, Sixt y Europcar tienen sucursales en Venecia con tarifas de alquiler desde 12 EUR por día.
Venecia posee una gran variedad de lugares para comprar. Si buscas joyas y adornos de cristal, Murano es ideal. El Mercatino dell'Antiquariato es el principal mercado de antigüedades, mientras que zapateros como Mori & Bozzi se encuentran en Cannaregio. San Marcos es una buena zona para adquirir accesorios de cuero en tiendas como Raggio Veneziano, mientras que Atelier Marega ofrece exclusivas máscaras autóctonas.
Venecia cuenta con supermercados como Coops y Conad. El Mercado de Rialto es un buen lugar para conseguir pescado, carne y productos frescos los viernes y sábados. A título orientativo, medio litro de cerveza, en un supermercado, te costará 1 EUR.