Permitidme la siguiente redundancia: qué fácil es caer en lo fácil. Con esta frase me refiero a lo sencillo que resulta ver una película de la categoría de terror, entrar en Filmaffinity y ponerla a parir. Qué sencillo es venir aquí y escribir eso de.. "bah, es un cliché tras otro"... o "qué decepción, este género está en decadencia". Bueno, pues yo no pienso caer en tan trillados comentarios y sí voy a celebrar esos aspectos positivos que distinguen este buen film de terror de otros hermanos de su mismo apartado. Así, a diferencia de otras "películas de miedo", en Annabelle nos encontramos con que:

1. Guionistas y director se han encargado de no dejar cabos sueltos en la narración de la historia y en la explicación de los hechos. Todo tiene su sentido, sin incongruencias al más puro estilo paranormal activity.
2. Protagonistas y secundarios no aparecen como meras caricaturas humanas (como sí ocurre en otras cintas de esta clase) sino que por el contrario están dotados de unos caracteres lo suficientemente definidos como para empatizar con aquéllos.
3. Diferenciándose de la superficialidad de otras, esta película sí despliega los recursos necesarios para lograr una notable envoltura del espectador en la historia, de tal forma que resulta muy factible compartir los miedos y angustias de los personajes.

Por lo anterior, considero que esta es una buena opción para visionar en una sala de cine, y a ser posible en una sala llena de chicas asustadizas que contribuyan con sus gritos a dar ambientación a la película.

Posdata: me reitero en todo lo dicho a pesar de lo que se pueda leer en las críticas de esos nuevos pseudo entendidos del cine de terror.