La comparencia parlamentaria de las autoridades del Ministerio de Salud Pública (MSP) por la situación del Casmu no estuvo exenta de conflictos, incluso entre dirigentes oficialistas. El cruce ocurrió entre el senador nacionalista Sergio Botana, crítico con la intimación, quien deslizó que exdirigentes de Casmu aspiraban ahora a intervenir la tercera mutualista con más afiliados del país.

Botana apuntó que "varios de los actores que hoy proponen la intervención de Casmu son los mismos que participaron de una directiva o de cargos gerenciales en una institución respondiendo a una directiva que perdió un par de elecciones con la actual directiva del Casmu”. E insistió: "No me parece de muy buen gusto que esa gente que perdió elecciones con la actual directiva sea ahora la que esté interviniendo, amparada en su nueva función".

El legislador blanco, férreo opositor a la solución del gobierno ante la extinta mutualista Casa de Galicia, dijo que varios “balances de las pérdidas” de Casmu “están firmados por alguno de esos actores o por alguno de los que pasaron por la Junta Nacional de la Salud. Y además recordó que durante el proceso de Casa de Galicia uno de los implicados ahora "tiene un puesto muy lindo que se ha creado en el área de salud del Banco de Previsión Social”, aludiendo a Alberto Yagoda, extitular de Junasa.

“Firma el contador Yagoda y la contadora Porcelli es la cofirmante del balance y hoy integra el Fondo Nacional de Recursos designada por este equipo del ministerio. Me parece que allí tenemos otro problema”, agregó Botana, quien también sugirió que la intimación se definió en un breve lapso de tiempo, que las autoridades desestimaron fuera motivada por un motivo particular.

Tras las críticas de Botana, Rando retrucó: "Que se dude de mi honestidad moral, que se piense que estoy haciendo una tramoya a propósito para que se funda Casmu, que se dude de la gente con la que estoy trabajando y a la que he puesto a trabajar, como lo ha hecho el senador Botana –si bien es cierto que lo ha hecho con mucho respeto; es verdad, y agradezco que lo haya hecho así–, realmente me parece una falta de respeto”.

También respondió a las acusaciones contra Porcelli y Yagoda. “La contadora Porcelli no trabaja en el Ministerio de Salud Pública, no tiene nada que ver con este expediente ni con esto que estamos trabajando”, dijo en referencia a la actual titular del Fondo Nacional de Recursos (FNR). El contador Yagoda no tiene nada que ver con nosotros; yo no he trabajado con él. Mi equipo de trabajo no ha trabajado en contra de esta administración de Casmu y tampoco tiene animosidad de hacerlo”.

Lo cierto es que las respuestas no quedaron solo en Rando. Alicia Rossi, al frente de la Junasa, retrucó: "Me siento sumamente agraviada por las declaraciones reiteradas ya en oportunidad de los temas de Casa de Galicia, como ahora con respecto a Casmu, sobre mi supuesta vinculación o que estoy haciendo los deberes para un equipo que estuvo antes en Casmu y que ahora está en el ministerio, de los cuales no hay ninguna de las personas que él nombra. Yo ingresé hace cuarenta y dos años por un llamado al Ministerio de Salud Pública (...) siempre trabajé en forma técnica, nunca con vínculos políticos (...)".

"Es la primera vez que me plantean dudas de mi honestidad y profesionalismo. Realmente, me ofenden. Quiero dejar en claro que no tenemos absolutamente nada que ver con ningún equipo del Casmu y que no somos mandaderos de nadie", enfatizó.

Quien también respondió a Botana fue su correligionario, el nacionalista José Luis Satdjian, subsecretario del MSP. “Quisiera agregar que nos solidarizamos con los técnicos y profesionales del Ministerio de Salud Pública que fueron aludidos y mancillado su honor, porque creo que cuando se hace una acusación de este tenor hay que tener pruebas y hay que presentarlas en coincidencia; acá, en el Senado de la República o la justicia, no en la pulpería”, lanzó.

“Me parece que es una gran irresponsabilidad, al borde de la difamación –repito–, al borde de la difamación, que se hable de un funcionario público o de técnicos con esa liviandad o tratando de implementar un manto de duda sobre el actuar de los trabajadores, en este caso, del Ministerio de Salud Pública, que estuvieron antes y están ahora”, agregó Satdjian.

El número dos de Salud Pública remarcó que se dio US$ 28 millones en varias medidas, descartando que se haya “asfixiado” a Casmu, como planteó Botana. “Estamos dando muestras claras de que al Casmu se lo viene ayudando para que pueda salir adelante, me parece que es una gran irresponsabilidad” sus dichos, insistió.

Lo cierto es que Botana luego respondió. “Creo que falta de respeto es venir al Senado de la República a no aceptar las preguntas y los cuestionamientos y pretender no responderlos escondiéndose en supuestas alusiones", dijo.