UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MEXICO
PROGRAMA DE MAESTRÍA Y DOCTORADO EN GEOGRAFÍA
DETERMINANTES SOCIOECONÓMICOS Y AMBIENTALES DE LA SALUD DE LA POBLACIÓN DEL
MUNICIPIO DE LOLOTLA, HIDALGO, 2000-2013.
TESIS
QUE PARA OPTAR POR EL GRADO DE:
MAESTRO EN GEOGRAFÍA
PRESENTA:
GERARDO VELASCO HERNÁNDEZ
DIRECTORA DE TESIS
MARÍA DEL CARMEN JUÁREZ GUTIÉRREZ
INSTITUTO DE GEOGRAFÍA, UNAM.
CIUDAD UNIVERSITARIA, MAYO DE 2021.
A los desarrapados del mundo
y a quienes,
descubriéndose en ellos,
con ellos sufren
y con ellos luchan
Paulo Freire.
Agradecimientos
A la Universidad Nacional Autónoma de México, a la cual debo mi formación académica y
autorrealización profesional. Al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) por
el apoyo económico brindado durante mis estudios, gracias al cual fue posible la realización
del presente trabajo de investigación.
A la Dra. Carmen Juárez Gutiérrez, por asesorarme, por la motivación para continuar mis
estudios y por las oportunidades brindadas en el Instituto de Geografía que me han permitido
un crecimiento académico y personal. A la Dra. Virginia Santana Juárez, por sus oportunas
recomendaciones y alentadores comentarios. Al Dr. Enrique Propín, quien, a través de sus
diversos seminarios de tesis me han permitido desarrollar habilidades investigativas. A la Dra.
Elda Luyando, por sus recomendaciones para mejorar este trabajo; y al Mtro. Carlos Alberto
Ruiz Abad, por su invaluable apoyo al final de este proceso para la obtención del grado.
A cada una de las personas del municipio de Lolotla quienes de manera atenta respondieron
el cuestionario sobre la situación socioeconómica y de salud. En el mismo sentido, a las
autoridades del municipio de Lolotla por extender las cartas de notificación a los delegados
de cada localidad con el visto bueno para el levantamiento de las encuestas.
A mis padres Roberta y Sabás, por facilitarme en todo momento las condiciones
indispensables para seguir con mis estudios. Gracias por su ejemplo de superación, por
confiarme todo su esfuerzo para que lograra mis objetivos profesionales, lo cual a su vez es
mi motivación. A mi hermana Cris, por cuidarme y apoyarme en todos los ámbitos, incluido
el levantamiento de encuestas del presente trabajo. ¡Infinitas gracias!
A mis amigos. A Santa y Penélope, con quienes he compartido nueve años de trayectoria
académica y otros tantos de hermosa amistad. A Gloria, con quien cursar la licenciatura y
maestría en Geografía fue un proceso ameno y divertido. A Carlos, por compartir buenos
momentos, una constante retroalimentación en Geografía de la salud y finalmente por leer
este trabajo como sinodal. A Sandy Meléndez, por tu inigualable y atenta forma de enseñarme.
A Yoalli, por tu apoyo, por esas frases “sanará” y “estará bien” que alimentaron mi alma. Para
Antonio Huerta, muchas gracias por esas las innumerables tardes de comida y compartirme
tu valiosa experiencia. A Juan Aguirre, gracias por tu comprensión y apoyo en la Sierra de
Guadalupe ¡te admiro! A Gloria, Lupita, Miri, Chucho ya que trabajar con ustedes es una grata
experiencia. Desde luego, J. Alfredo P., por tu característico humor.
Al Geóg. Leonardo Barragán Guerrero, por abrirme las puertas en el ANP “Sierra de
Guadalupe” y “La Armella”, gracias al tiempo en ese maravilloso lugar me di cabida a
terminar esta tesis.
Para J. Alfredo López Trujillo, por recordarme el “aquí y el ahora”. Te aprendí mucho.
A Dios, a la vida, por darme la oportunidad de finalmente terminar esta investigación, ya que
cuando la daba por concluida me condujo a una serie de circunstancias laborales, de estudio
y personales que prolongaron su culminación y a la vez me permitieron madurar algunas ideas
en el ámbito de la desigualdad social, de justicia social y distributiva que al tiempo
alimentaron el contenido de esta tesis.
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
Pág.
I
CAPÍTULO I
DETERMINANTES SOCIOECONÓMICOS Y AMBIENTALES
EN LA GEOGRAFÍA DE LA SALUD.
1.1. Aproximaciones teóricas en la Geografía de la salud.
1.1.1. Concepto y etapas de consolidación de la Geografía de la salud.
1.1.2. Enfoques teóricos en Geografía de la salud.
01
02
12
1.2. Determinantes Sociales de la Salud.
1.2.1. La determinación y la causalidad en la salud.
1.2.2. Concepto de los Determinantes Sociales de la Salud (DSS).
1.2.3. Modelos explicativos en los Determinantes Sociales en Salud.
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21
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1.3. Justicia social. Consideraciones en el ámbito de la salud
1.3.1. Teoría de la Justicia y la Justicia Social.
1.3.2. Justicia espacial en salud.
42
42
49
CAPÍTULO II
CONTEXTO ESPACIAL Y TEMPORAL DEL MUNICIPIO DE LOLOTLA, HIDALGO.
2.1. Medio físico
2.2. Conformación geohistórica
2.3. Situación social y económica
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CAPÍTULO III
HACIA UNA EQUITATIVA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES Y DE SALUD PARA EL BIENESTAR EN
EL MUNICIPIO DE LOLOTLA.
3.1. Estrategia metodológica
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3.2. Contexto de la salud en el marco social, económico y ambiental.
3.2.1. Transformaciones en las condiciones de vida.
3.2.2. Algunas condiciones de vida y de salud en los hogares de las localidades del municipio
de Lolotla
3.2.3. Configuración espacial de las características sociales y de vivienda
3.2.4. Acceso a los servicios de salud
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3.3. Vínculos entre la salud de la población y su contexto social, y ambiental.
3.3.1. Principales causas de mortalidad.
3.3.2. Asociaciones entre el contexto social y la salud
3.3.3. La exposición al manganeso (Mn) y sus efectos sociales y en la salud.
3.3.4. Distribución espacial de los bienes sociales en el municipio de Lolotla.
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194
CONCLUSIONES
BIBLIOGRAFÍA
ANEXOS
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206
216
167
167
ÍNDICE DE FIGURAS
CAPÍTULO I.- DETERMINANTES SOCIOECONÓMICOS Y AMBIENTALES
EN LA GEOGRAFÍA DE LA SALUD.
Figura 1.1.
Figura 1.2.
Figura 1.3.
Figura 1.4.
Figura 1.5.
Figura 1.6.
Figura 1.7.
Figura 1.8.
Figura 1.9.
Figura 1.10.
Figura 1.11.
Figura 1.12.
Figura 1.13.
Esquema de la construcción de la Geografía de la salud.
Esquema de los temas de investigación de artículos indexados de SCI/SSCI en
“Medical and Health Geography” durante el periodo 2000-2014.
Listado de palabras clave de investigación de artículos indexados de SCI/SSCI en
“Medical and Health Geography” durante el periodo 2000-2014.
Distribución espacial y temporal de la búsqueda mundial de “Medical Geography” y
“Health geography” en Google de 2004 a 2019*.
Distribución espacial y temporal de la búsqueda mundial de “Health and Place” y
“Health geography” en Google de 2004 a 2019.
Distribución espacial y temporal de la búsqueda mundial de “Social Determinants of
Health” y “Determinantes Sociales de la Salud” en Google de 2004 a 2019.
Esquema de acciones de una familia en el espacio-tiempo.
Esquema sobre las múltiples dimensiones para el estado de salud en el espaciotiempo.
Esquema de los modelos epidemiológicos de causalidad.
Diagrama, funciones cíclicas.
Difusión del concepto de Determinantes Sociales de la Salud.
Diagramas de los modelos explicativos de los Determinantes sociales de la salud.
Diagrama sobre la justicia social y el mérito en el ámbito espacial.
Pág.
3
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CAPÍTULO II.- CONTEXTO ESPACIAL Y TEMPORAL DEL MUNICIPIO DE LOLOTLA, HIDALGO.
Figura 2.1.
Figura 2.2.
Figura 2.3.
Figura 2.4.
Figura 2.5.
Figura 2.6.
Figura 2.7.
Figura 2.8.
Figura 2.9.
Figura 2.10
Figura 2.11
Figura 2.12
Figura 2.13
Figura 2.14
Figura 2.15
Figura 2.16
Figura 2.17
Figura 2.18
Figura 2.19
Figura 2.20
Figura 2.21
Localización geográfica del municipio de Lolotla, Hidalgo.
Esquema de la columna estratigráfica generalizada en la región Molango
Características geológicas del municipio de Lolotla.
Altimetría del municipio de Lolotla.
Características hidrográficas del municipio de Lolotla.
Características climáticas del municipio de Lolotla.
Uso de suelo y vegetación del municipio de Lolotla.
Glifo altépetl de Lolotla.
Territorio del norte de la Intendencia de México, Virreinato de la Nueva España,
1782.
Territorio del norte de la Intendencia de México, Virreinato de la Nueva España,
1803.
Cambios en la delimitación territorial de Lolotla entre 1869 y 1875.
División municipal del Estado de Hidalgo, 1895. (Segmento norte).
Esquema de las puntuaciones de compacidad con el método Bolsby-Popper.
Esquema de los municipios de México con menor y máxima puntuación de
compactación con el método Bolsby-Popper.
Evolución de la cantidad de localidades y población en Lolotla de 1900-2010.
Dinámica territorial y temporal del crecimiento de las localidades y de la población
en el municipio de Lolotla de 1910 a 1950.
Dinámica territorial y temporal del crecimiento de las localidades y de la población
en el municipio de Lolotla de 1960 a 2010.
Mapa de localidades en Lolotla, 2010.
Distribución de localidades de Lolotla según cantidad de población en 2010.
Cantidad de población por localidad en el municipio de Lolotla, 2010.
Densidad de población en el municipio de Lolotla, 2010.
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Figura 2.22
Figura 2.23
Figura 2.24
Figura 2.25
Figura 2.26
Figura 2.27
Figura 2.28
Figura 2.29
Figura 2.30
Figura 2.31
Figura 2.32
Figura 2.33
Crecimiento de la población en las localidades del municipio de Lolotla en 1990,
2000 y 2010.
Estructura de la población por edad y sexo en el municipio de Lolotla en 1990, 2000
y 2010.
Población por tres grandes grupos de edad en el municipio de Lolotla, 2010.
Emigración intermunicipal desde el municipio de Lolotla en 2005 – 2010.
Inmigración intermunicipal hacia el municipio de Lolotla en 2005 - 2010.
Años promedio de educación en las localidades del municipio de Lolotla, 2010.
Población hablante de alguna lengua indígena en las localidades del municipio de
Lolotla, 2010.
Situación de derechohabiencia por localidad en el municipio de Lolotla, 2010.
Situación de la vivienda en las localidades del municipio de Lolotla, 2010.
Conglomerados de la situación de la vivienda, por localidad en el municipio de
Lolotla, 2010.
Orientación sectorial de la economía en el Estado de Hidalgo.
Grado de marginación social de las localidades del municipio de Lolotla, 2010.
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CAPÍTULO III.- HACIA UNA EQUITATIVA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES Y DE SALUD PARA EL
BIENESTAR EN EL MUNICIPIO DE LOLOTLA.
Figura 3.1.
Figura 3.2.
Figura 3.3.
Figura 3.4.
Figura 3.5.
Figura 3.6.
Figura 3.7.
Figura 3.8.
Figura 3.9.
Figura 3.10
Figura 3.11
Figura 3.12
Figura 3.13
Figura 3.14
Figura 3.15
Figura 3.16
Figura 3.17
Figura 3.18
Figura 3.19
Figura 3.20
Figura 3.21
Figura 3.22
Figura 3.23
Figura 3.24
Figura 3.25
Figura 3.26
Figura 3.27
Figura 3.28
Figura 3.29
Figura 3.30
Figura 3.31
Figura 3.32
Figura 3.33
Figura 3.34
Figura 3.35
Esquema de tipos de vecindad
Esquema de distribución de dispersión y de clúster en el espacio.
Diagrama de dispersión del I de Moran
Cobertura de cartas topográficas 1:50,000 para el municipio de Lolotla.
Dinámica de las condiciones de vida en el municipio de Lolotla, 2000-2010.
Parroquia de Santa Catarina
Iglesia de San Juan Bautista
Delegación municipal de Xuchipantla
Capilla de San Pedro
Iglesia en la Comunidad de El Barco
Vivienda rural
Puente en la Comunidad de Santiago
Otros tipos de construcción rural
Cocina con combustible de leña
Caballo pastando
Vaca
Vista a la Zona Industrial de la Minera Autlán
Desarrollo turístico en la comunidad de El Barco.
Cargapalitos (Familia Psychidae)
Barbarindio (Automeris metzli).
Rana manchada (Género Lithobates)
Pie de Gallo de la Montaña (Tillandsia)
Paisaje predominante al sur del municipio de Lolotla.
Cantidad de encuestas levantadas en algunas localidades del municipio de Lolotla.
Distribución de los jefes del hogar por edad y sexo de las encuestas levantadas
Distribución de los jefes del hogar por sexo y escolaridad
Cantidad de habitantes por hogar.
Condición de actividad laboral.
Sector de ocupación de población laboralmente activa.
Niveles de ingresos económicos de los jefes del hogar.
Percepción de otros ingresos económicos.
Situación de tenencia de la vivienda
Distribución porcentual de los grupos de configuración de las viviendas.
Cantidad de hogares con una habitación destinada a la cocina.
Cantidad de habitaciones destinadas como dormitorios
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Figura 3.36
Figura 3.37
Figura 3.38
Figura 3.39
Figura 3.40
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Figura 3.68
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Figura 3.70
Figura 3.71
Figura 3.72
Figura 3.73
Figura 3.74
Figura 3.75
Cantidad de hogares con energía eléctrica.
Combustible empleado
Formas de acceso al agua en los hogares
Cantidad de días en que se proporciona agua en la red hídrica.
Tiempo de recorrido para aproximarse a una fuente natural de abastecimiento de
agua.
Cantidad de hogares con excusado
Formas de descargas de los desechos del hogar
Disposición de residuos sólidos
Bienes y servicios en el hogar
Convivencia con animales
Consumo de alimentos, bebidas y utilización de transporte público en la semana.
Niveles de ingresos y consumo de alimentos en algunas localidades del municipio de
Lolotla.
Institución de atención médica en caso de enfermedad.
Afiliación a servicios de salud
Motivo de afiliación a servicios de salud.
Población con alguna morbilidad
Diagrama sobre las percepciones del servicio de atención médica de la población que
presentó algún caso de morbilidad.
Diagrama sobre las percepciones del servicio de atención de hospitalización.
Situación y causas de discapacidad, en hogares encuestados en algunas localidades
de Lolotla.
Situación y causas de enfermedades crónicas, en hogares encuestados en algunas
localidades de Lolotla.
Satisfacción de la población encuestada respecto a su contexto inmediato
Estructura de conectividad entre localidades del municipio de Lolotla, Hidalgo.
Autocorrelación espacial de aspectos socioeconómicos de las localidades del
municipio de Lolotla, 2010.
I. de Moran de la autocorrelación espacial de aspectos socioeconómicos de las
localidades del municipio de Lolotla.
Unidades de atención médica en la Jurisdicción Sanitaria IX Molango, 2016.
Infraestructura vial en Lolotla, 2015.
Flujos de asistencia de la población de las localidades de Lolotla a la unidad de
hospitalización Tlanchinol. 2000-2013.
Desplazamiento intermunicipal desde Lolotla para recibir servicios de salud de
segundo y tercer nivel de atención de 2000 a 2013.
Cinco principales causas de mortalidad, en Lolotla, 2000-2013.
Distribución por edad y sexo de las cinco principales causas de mortalidad en
Lolotla, 2000-2013.
Distribución de las principales causas de mortalidad por tres grandes grupos de edad
en Lolotla, 2000-2013.
Principales causas de muerte en México de 1990 a 2012.
(Tasas por cada 100,000 habitantes).
Principales causas de mortalidad por localidad en Lolotla, 2000-2013.
Diagramas de dispersión de las condiciones sociales y las principales tasas de
mortalidad del municipio de Lolotla, Hidalgo.
Unidades de Gestión Ambiental (UGA) en el municipio de Lolotla, conforme al
Ordenamiento Ecológico Territorial del Estado de Hidalgo.
Localización de la actividad minera en el municipio de Lolotla.
Diagrama de la dinámica investigativa de la Exposición a Mn en el Distrito Minero
de Molango.
Distribución espacial de las oficinas regionales del IDRC.
Centros de adscripción de investigadores
Cantidad de investigaciones sobre la exposición a Mn en el distrito minero Molango
de 1999 a 2015.
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Figura 3.76
Figura 3.77
Figura 3.78
Figura 3.79
Figura 3.80
Figura 3.81
Figura 3.82
Origen del financiamiento de investigaciones sobre la exposición a Mn
en el distrito minero Molango.
Diagrama de las fases del Mn en el organismo humano.
Distribución de concentraciones de Mn en agua y polvo en las proximidades de la
minera Autlán, Lolotla.
Áreas propuestas por la Compañía Minera Autlán para la exploración y explotación
de Mn, en la Sierra Alta de Hidalgo.
Publicación en Facebook que de acuerdo con informantes de Chiconcoac-Tolago,
hace referencia a los hechos ocurridos el 20 de diciembre de 2017 en las
inmediaciones Tuscalago.
Dendrograma de las agrupaciones de las condiciones de vida en las localidades de
Lolotla.
Configuración de localidades de Lolotla para la distribución de recursos.
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ÍNDICE DE CUADROS
CAPÍTULO I.- DETERMINANTES SOCIOECONÓMICOS Y AMBIENTALES
EN LA GEOGRAFÍA DE LA SALUD.
Cuadro 1.1.
Cuadro 1.2.
Cuadro 1.3.
Cuadro 1.4.
Países con mayor número de artículos y citas en SCI/SSCI sobre “Medical and
Health Geography” de 2000 a 2014.
Ajuste de las etapas de la transición demográfica, alimentaria, amenazas a la salud y
epidemiológica desde la prehistoria hasta el Siglo XXI.
Consideraciones de Nussbaum sobre las necesidades.
Consideraciones de salud en la Declaración Universal de Derechos Humanos y en la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
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8
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48
CAPÍTULO II.- CONTEXTO ESPACIAL Y TEMPORAL DEL MUNICIPIO DE LOLOTLA, HIDALGO.
Cuadro 2.1.
Cuadro 2.2.
Cuadro 2.3.
Cuadro 2.4.
Cuadro 2.5.
Cuadro 2.6.
Cuadro 2.7.
Cuadro 2.8.
Cuadro 2.9.
Cuadro 2.10.
Ponderación cualitativa de los recursos naturales para su uso económico en el
municipio de Lolotla.
Metztitlán: cantidad de población en los siglos XVI y XVII.
Presidentes municipales en Lolotla de 1964 a 2020.
Categoría política de las localidades y población en Lolotla de 1910 a 2010.
Orientación sectorial de la economía
Región económica Molango: orientación Sectorial de la economía.
Sector económico (valor de producción en miles de pesos).
Producción por sector económico en Lolotla, 2009.
Sector económico (valor de producción en miles de pesos).
Localidades con producción de manufactura artesanal en Lolotla.
Índice de marginación. Esquema conceptual del indicador de la intensidad global de
la marginación socioeconómica.
Principales condiciones sociales y económicas del municipio de Lolotla
en 2000 y 2010
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CAPÍTULO III.- HACIA UNA EQUITATIVA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES Y DE SALUD PARA EL
BIENESTAR EN EL MUNICIPIO DE LOLOTLA.
Cuadro 3.1.
Cuadro 3.2.
Cuadro 3.3.
Cuadro 3.4.
Cuadro 3.5.
Cuadro 3.6.
Cuadro 3.7.
Cuadro 3.8.
Cuadro 3.9.
Cuadro 3.10.
Cuadro 3.11.
Cuadro 3.12.
Cuadro 3.13.
Cuadro 3.14.
Cuadro 3.15.
Cuadro 3.16.
Cuadro 3.17.
Cuadro 3.18.
Cuadro 3.19.
Secciones de encuesta
Variables consideradas para la asignación de recursos.
Identificación tipo de variables.
Situación de alfabetismo y lengua por sexo, de los jefes del hogar.
Grupos de configuraciones de la vivienda por materiales predominantes en la pared,
techo y piso.
Causas de morbilidad en los hogares encuestados.
Lineamientos de equipamiento en salud.
Distancias entre las localidades del municipio de Lolotla y las unidades de atención
en salud de primer nivel en la Jurisdicción Sanitaria IX “Molango”.
Unidades de salud en Lolotla, 2015.
Asistencia a unidades médicas de tercer nivel, 2000-2013.
Factores asociados al desarrollo de las principales causas de mortalidad en el
municipio de Lolotla.
Tasa de incidencia de las principales causas de mortalidad
por cada 10,000 hab.
Correlación de Pearson entre variables socioeconómicas y tasas de las principales
causas de mortalidad en las localidades del municipio de Lolotla.
Producción investigativa sobre la exposición a Mn en el Distrito Minero Molango.
Editorial y revista científica de las publicaciones sobre exposición a Mn en el Distrito
Minero de Molango.
Nota periodística del 21 de diciembre de 2017.
Criterios de distribución de los bienes sociales
Algunas consideraciones en las que basar la distribución, considerando la equitativa
igualdad de oportunidades.
Condiciones de vida en las localidades del municipio de Lolotla consideradas para
establecer la distribución de bienes.
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INTRODUCCIÓN
A nivel mundial ciertas causas de mortalidad pueden prevenirse, si la calidad de vida presenta las
condiciones óptimas para su desarrollo. Entre las consideraciones que contribuyen a prolongar la
esperanza de vida se encuentran: la satisfacción de las necesidades básicas y la adopción de
hábitos para el cuidado de la salud. En contraste, cuando se carece de lo indispensable en la vida,
se tiene como resultado estados de enfermedad y una muerte prematura; ambos contextos pueden
ser evaluados a través del estudio de las condiciones sociales, económicas y ambientales. Por
tales consideraciones, se analiza la distribución de los bienes materiales y acceso a los servicios
básicos que posibilitan el desarrollo de capacidades para mantener un buen estado de salud.
La presente investigación se concentra en el municipio de Lolotla, el cual, se localiza al
norte del estado de Hidalgo, en la región denominada Sierra Alta, caracterizada por un alto y muy
alto grado de marginación social; las necesidades básicas en la región se encuentran satisfechas
de manera heterogénea, condición que incide en el estado de salud. En el escenario económico y
ambiental, el actual territorio del estado de Hidalgo desde la época virreinal ha contado con una
activa participación en la producción minera. Recientemente, desde la segunda mitad del siglo
XX, la Compañía Minera Autlán inició operaciones al suroeste del municipio de Lolotla, con la
extracción de un depósito de manganeso, el de mayor volumen y de reservas probadas en
Norteamérica. Así mismo, dicho depósito contribuye con la mayor producción en tonelaje y valor
monetario en el grupo de minerales metálicos a nivel estatal. Sin embargo, el estado de buena
salud de la población de las localidades próximas se reduce por la emisión de polvo de
manganeso a la atmósfera.
El cúmulo de aspectos de la vida cotidiana que guardan una relación con el estado de la
salud es denominado “Determinantes Sociales de la Salud”, en esta construcción conceptual se
incorpora, por ejemplo: las condiciones de satisfacción de los servicios básicos en el ámbito de la
vivienda, la educación, los servicios de salud e ingreso económico; así como, la situación
medioambiental. Por tales consideraciones, se analizan las condiciones que se presentan en el
espacio geográfico a fin de plantear aspectos que beneficien a la sociedad a través de la justicia
social en el ámbito territorial, para la distribución de las necesidades básicas. De esta manera, la
presente investigación se guía a través de la siguiente pregunta: ¿cómo inciden los determinantes
sociales, económicos y ambientales en la salud de la población del Municipio de Lolotla,
Hidalgo? En tanto que, se plantea una hipótesis que refiere que: la satisfacción de las necesidades
I
básicas, la situación medioambiental y la infraestructura de los servicios de salud, englobados
bajo el concepto de los Determinantes Sociales de la Salud están asociados a la condición de
salud de la población del municipio de Lolotla. Con estos aspectos se establecen los objetivos
siguientes:
Objetivo general
Identificar asociaciones entre los condiciones sociales, económicas y ambientales presentes en las
en el municipio de Lolotla, Hidalgo y las principales causas de mortalidad de la población de
2010 a 2013.
Objetivos particulares
Contrastar las aproximaciones teóricas empleadas en la Geografía de la salud.
Describir los elementos conceptuales de los Determinantes Sociales de la Salud.
Exponer los fundamentos de la justicia distributiva.
Reconocer las características físicas y sociales del municipio de Lolotla.
Distinguir los cambios en las condiciones sociales del municipio de Lolotla.
Identificar las principales causas de mortalidad en el municipio de Lolotla.
Reconocer asociaciones entre el contexto socioeconómico, ambiental y la mortalidad en el
municipio de Lolotla, Hidalgo.
Para conseguir los objetivos planteados, este trabajo se integra de tres capítulos en los
cuales despliegan los aspectos teóricos de la Geografía de la salud, el espacio físico de Lolotla en
su dimensión social e histórica y finalmente, un panorama del contexto socioeconómico y
ambiental con relación a las principales causas de mortalidad de la población del municipio de
Lolotla. Para ello, en el Capítulo I, “Determinantes socioeconómicos y ambientales en la
Geografía de la salud”, se esboza la conformación de una línea de investigación que tiene interés
en la cuestión de la salud y el bienestar humano distribuido en el espacio geográfico. De entre los
enfoques teóricos que se refieren y consciente de las limitaciones para abarcar la totalidad de
procesos que actúan sobre los individuos y que configuran espacios con buena salud o de
enfermedad, se tomó como enfoque de referencia el de la estructuración social, propuesto por
Anthony Giddens, ya que conjunta la estructura del sistema que se retroalimenta de manera
constante por las motivaciones de los agentes par la realización de sus acciones.
II
Posteriormente, se expone la revisión del concepto de los Determinantes Sociales en la
Salud (DSS), las connotaciones e implicaciones que este tiene y posibles consecuencias de su
aplicación. Debido al amplio espectro de condiciones de la realidad social que el concepto de los
DSS puede adoptar, esta investigación se restringe a la revisión de la dimensión socioeconómica
y ambiental. En el rubro social, se analiza la caracterización demográfica, la situación de la
vivienda y la educación; de la dimensión económica se toma el ingreso; de lo ambiental, la
situación de contaminación por la actividad minera. Las desigualdades pueden explicarse por
diversidad de elementos presentes en el territorio, en primer lugar, por tratarse de diferentes
sitios, con sus propias características que le dan otorgan una singularidad, así como por la
composición de circunstancias sociales, económicos y ambientales en la salud.
Para el cierre de este capítulo se hace referencia a la justicia social y a la justicia
distributiva desde un enfoque espacial, a fin de comprender la distribución de bienes y servicios
socialmente reconocidos como necesidades básicas que inciden en la condición de salud. Al
mismo tiempo, este aspecto se liga con el subcapítulo 1, estableciendo vínculos entre la teoría de
la estructuración y la justicia distributiva para comprender cómo es que se dotan ciertos espacios
en mayor o menor medida debido a la agencia de los individuos que retroalimenta este círculo
político y social.
En el capítulo II, denominado “Contexto espacio – temporal del municipio de Lolotla,
Hidalgo” en primera instancia aborda el medio físico del municipio de Lolotla, el cual posibilita
la realización de actividades económicas como la agricultura, la ganadería, la minería y el
turismo, los cuales generan posibilidades en su condición económica y de salud. Las condiciones
físicas también despliegan las necesidades de inversión en infraestructura para mejorar la
comunicación entre los habitantes de Lolotla. Posteriormente, se presenta una reseña histórica del
contexto territorial bajo estudio, en la época precolombina, durante el virreinato de la Nueva
España, la configuración de los límites políticos administrativos del municipio de Lolotla durante
el siglo XIX y la dinámica poblacional acontecida en el siglo XX y XXI. Finalmente, para este
capítulo, se desglosan las condiciones sociales y económicas que prevalecen en Lolotla, las
cuales tienen relación con el estado de salud de la población que se desglosa en el capítulo III.
En tanto que, para el último capítulo denominado “Determinantes en la salud del
municipio de Lolotla” se describe la estrategia metodológica a seguir, la dinámica de condiciones
de vida de la población que quedó registrada a través de los censos de población y vivienda de los
III
años 2000 y 2010. Así como también el concentrado gráfico de una serie de preguntas que se
levantaron a través de una encuesta realizada en algunos hogares de las localidades del municipio
de Lolotla y que ofrecen una perspectiva de los mecanismos que la población usa para mantener
su estado de salud. Se exponen las principales causas de mortalidad y su configuración espacial
en las localidades Al contar con dichas asociaciones en el marco de los DSS basándose en la
justicia social desde un enfoque espacial se proponen alternativas para la distribución de los
bienes necesarios para que la población del municipio de Lolotla cuente con una calidad de vida
que le permita desarrollar sus capacidades, mismo que se refleje en un óptimo estado de salud.
IV
CAPÍTULO I.
DETERMINANTES SOCIOECONÓMICOS Y
AMBIENTALES EN LA GEOGRAFÍA DE LA SALUD.
El mundo está detenido ante el hambre que asola a los pueblos. Mientras haya
desequilibrio económico, el mundo no piensa. Yo lo tengo visto. Van dos hombres
por la orilla de un río. Uno es rico, otro es pobre. Uno lleva la barriga llena, y el otro
pone sucio el aire con sus bostezos. Y el rico dice: “¡Oh, qué barca más linda se ve
por el agua! Mire, mire usted el lirio que florece en la orilla”. Y el pobre reza: “Tengo
hambre, no veo nada. Tengo hambre, mucha hambre”. Natural. El día que el
hambre desaparezca, va a producirse en el mundo la explosión espiritual más
grande que jamás conoció la humanidad. Nunca jamás se podrán figurar los
hombres la alegría que estallará el día de la gran revolución. Federico García
Lorca.
Este capítulo presenta las aproximaciones teóricas empleadas en la Geografía de la salud. La
adopción de alguna posición tiene un vínculo con el sujeto, contexto y escala espacial de
investigación. También, se aborda el concepto de los Determinantes Sociales de la Salud con
énfasis en cómo la distribución espacial del grado de cobertura de las necesidades básicas y la
situación medioambiental, aspectos que inciden en el estado de salud de la población de manera
diferenciada. Tomando como premisa la distribución desigual de los bienes sociales para el
óptimo estado de salud se expone la teoría de la justicia distributiva como medio de
redistribución de los bienes socialmente asignados.
1.1
Aproximaciones teóricas en la Geografía de la salud.
Para la segunda mitad del siglo XX, la Geografía incorporó a su corpus diferentes líneas de
pensamiento en teoría social, las cuales, favorecieron que la Geografía de la salud consolide el
abordaje teórico desde diversas perspectivas. En este contexto, también se presentaron avances
técnicos y metodológicos en los Sistemas de Información Geográfica (SIG) y la Percepción
Remota que complementaron e impulsaron el estudio de la salud desde el ámbito espacial
tecnológico. Los hechos históricos que vinculan a la salud y la Geografía datan de la
conformación de las primeras ciudades, hasta la consolidación de una línea de investigación que
toma como base el espacio geográfico en el siglo XX, denominada Geografía de la salud; la cual
reflexiona sobre las necesidades por atender en el espacio para la buena salud humana.
1
1.1.1. Concepto y etapas de consolidación de la Geografía de la salud.
El estudio de la salud desde la perspectiva espacial en un primer momento resulta de la
comprensión humana de los estados morbosos y su asociación con las propiedades físicas de los
lugares; para el siglo XVIII a través de los aspectos sociales y económicos; y en el XIX con las
condiciones políticas. En el siglo XX, toda la experiencia recabada se conjunta y se combina con
el abordaje teórico social y con el uso de las tecnologías de los SIG. Con la oficialización de la
Geografía médica y posteriormente con la Geografía de la salud, como línea que engloba los
aspectos de servicios de salud y a la Geografía médica se desarrollaron varios conceptos de lo
que es la Geografía de la salud, resultado también, de la complejidad de las múltiples conexiones
de la sociedad, y el cómo aprehender la realidad.
De esta manera entre las propuestas desarrolladas está la de Johnston (Johnston et al.,
2000, en Curto, 2008: 9) que la define como “…la aplicación de las perspectivas y métodos
geográficos al estudio de la salud de las poblaciones, la salud de los individuos y todas aquellas
actividades relacionadas con la salud.”, En tanto que, Picheral, la define “… como el estudio
espacial de la calidad de salud de las poblaciones, de sus comportamientos y de los factores de su
entorno (environnement) que contribuyen a la promoción o a la degradación de su salud”.
(Picheral, 1989 en Trifiró, s/a: 3). Para Vigneron (1991), “… la Geografía de la Salud debe
entenderse como el análisis espacial de las disparidades de los niveles de salud de las poblaciones
y de los factores medio ambientales que contribuyen a explicar esas desigualdades. (Vigneron,
1991 en Trifiró, s/a: 3).
Estas tres conceptualizaciones abordan como punto en común la utilización del método
geográfico con fines de calidad en la salud humana. A ello, ha de sumarse que la Geografía de la
salud comprende dos líneas de investigación: la ecología de las enfermedades y la organización
de los sistemas de cuidado a la salud (Johnston et al., 2000 en Curto, 2008). Ante este panorama
Ana Olivera (1993) propone la integración de ambas líneas ya que: (Figura 1.1.).
Difícilmente se puede hacer una planificación en servicios médicos si no conocemos
los patrones de morbilidad de una población y de poco sirven unos equipamientos
sanitarios abundantes y subutilizados si el problema radica en los riesgos ambientales
de efecto no agudo (Olivera, 1993:12).
Los vínculos que preceden a la Geografía de la salud refieren que, en un primer estadio se
estableció la integración de salud con los elementos esenciales de la naturaleza: el fuego, la tierra,
2
Figura 1.1. Esquema de la construcción de la Geografía de la salud.
Fuente: modificado de Velasco, 2014.
3
el agua y el aire. Este planteamiento esencialmente animista atribuyó a los fenómenos de la
naturaleza un principio vital, regulador del cosmos y del cuerpo humano. Los cambios en los
elementos esenciales de la naturaleza se percibían como productores de un desequilibrio en los
elementos del cuerpo y la salud. Este paradigma se mantuvo vigente en la antigua Grecia entre el
siglo VII y VI a. C., con médicos y filósofos entre los que destacan Tales de Mileto,
Anaximandro, Anaxímenes, Diógenes de Apolonia, Filolao de Tarento, Heráclito de Éfeso,
Pitágoras de Samos y Empédocles de Agrigento.
A finales del siglo V a. C. se presentó un cambio en el paradigma médico, con la obra De
las aguas, los aires y los lugares, desarrollada por Hipócrates de Cos (Figura 1.1.), esta obra
reconoce los efectos de las estaciones del año, de los vientos dominantes, el agua, el suelo y los
hábitos en la salud de cada poblado. El conocimiento del lugar y de los hábitos de su población
proporcionó a Hipócrates la capacidad de prever el tipo de enfermedades que se presentan en
cada estación del año (Hipócrates en López, 1997). Adicionalmente, Hipócrates desarrolló la
teoría de los humores la cual se fundamenta en la existencia de cuatro humores en el organismo,
del equilibrio de ellos dependía el buen estado de la salud. La importancia de este paradigma es
tal, que marcó el devenir de la ciencia médica hasta el Siglo XVII.
En el siglo I d. C, Galeno de Pérgamo integró los cuatro elementos básicos a la teoría de
los humores (Pérez, 1997). El paradigma hipocrático-galeno supuso una teoría ambiental de base
fisiológica, donde los agentes del medio físico condicionan el equilibrio de los humores. En el
siglo XVII, Thomas Sydenham realizó investigaciones que dieron origen a la corriente neohipocrática conjuntando el medio físico y la condición social como causa de enfermedad (Figura
1.1.). A esta corriente, se integraron los estudios de las topografías médicas (Jori, 2013). De esta
época destaca el aporte del médico John Snow, que en 1854 realizó una cartografía de los brotes
de cólera en del distrito de Soho, Inglaterra. A través del trabajo de Snow se identificó que el
origen de la epidemia tenía como punto de infección una bomba de agua con presencia de
elementos residuales que difundieron el cólera. Este evento es considerado pionero en la
implementación de la cartografía y la descripción de una epidemia (CIESAS, 2013), no obstante,
se tienen precedentes de la aplicación de la cartografía en aspectos de salud y enfermedad desde
finales del Siglo XVII en Bari Italia (Figura 1.1).
Para el siglo XIX, se presentó la institucionalización de la Geografía y se recuperó el
4
ambientalismo hipocrático, durante este periodo las topografías médicas comenzaron a
denominarse “Geografías Médicas” (Figura 1.1.), el primero en utilizar el término fue J.C.
Boudin que, en 1843 publicó Geografía Médica, ensayo que concentra su atención en la
variabilidad de la enfermedad y la muerte respecto del clima y el suelo (Lacaz, 1972 en Carvalho,
2003). Al respecto, Urteaga (1980) precisa que el término de topografía médica se empleó para
denominar a aquellos trabajos con unidades espaciales de carácter local y Geografía médica para
las unidades regionales. La abundancia de las topografías médicas se redujo en el siglo XX,
debido a la crisis del paradigma higienista, así mismo la industrialización promovió el cambio de
interés de la influencia del medio en el hombre por el medio humanizado, específicamente, centró
el interés a las fábricas, la vivienda obrera y las enfermedades profesionales (Olivera, 1993).
A comienzos del siglo XX, las investigaciones en Geografía médica tuvieron como
principal exponente a Max Sorre, quien publicó Fundamentos biológicos de la Geografía
Humana obra donde se desarrolla el concepto de “complejos patógenos” definidos como una
serie de relaciones entre el medio físico, biológico y social que generan la enfermedad (Sorre,
1955). Para finales de la década de 1950, Jaques May conceptualizó a la Geografía médica como:
“el estudio sistemático de las correlaciones existentes entre las enfermedades de la tierra y las
enfermedades de la población.” (Olivera, 1993:10). Así mismo, J. May dio continuidad a los
complejos patógenos y denominó geogens a los elementos de carácter físico (geología,
hidrología, suelo, clima) que intervienen en el proceso de enfermedad y patogens a los elementos
biológicos (microorganismos y vectores) (May, 1958).
En 1948, la Organización Mundial de la Salud redefinió el concepto de salud e integró el
bienestar físico, mental y social (OMS, 2006). Este suceso propició que en el Congreso
Internacional de Geografía, celebrado en Lisboa en 1949, se oficializara el reconocimiento de la
línea de la Geografía médica (Olivera, 1993). Para la década de 1970, en el contexto económico
neoliberal, se incorporó a los estudios de Geografía médica el acceso y el equipamiento médico
como medios para restablecer la salud; esta cuestión condujo a que la Comisión de Geografía
Médica de la Unión Geográfica Internacional, reformulara la denominación del campo de estudio
por el de Geografía de la salud, en el marco del Congreso de Moscú en 1978 (Olivera, 1993).
5
Geografía de la salud en el Siglo XXI.
En la primera década del Siglo XXI, los tópicos en Geografía de la salud se centraron en dos
líneas de investigación, una de ellas, enfocada a la salud de la población que incluye: la
distribución del estado de salud, los recursos para la atención médica, la accesibilidad a los
servicios, cuestiones de género y distribución equitativa de la salud. El otro punto de interés es la
salud y el medio ambiente (Figura 1.2.), grupo que se subdivide en dos aspectos: a) el estudio de
la toxicología de los metales pesados y contaminantes orgánicos; y b) la contaminación y los
cambios ambientales, con énfasis en el uso de los SIG y la teledetección aplicados en el
monitoreo y la simulación de los procesos de enfermedad (Yang, et al., 2017).
Figura 1.2. Esquema de los temas de investigación de artículos indexados de SCI/SSCI en
“Medical and Health Geography” durante el periodo 2000-2014.
Fuente: Yang, et al. 2017: 457.
6
Los dos conjuntos expuestos anteriormente son el resultado de la investigación Medical
and Geography por Yang, et al., 2017, en el cual se analizaron 20,891 artículos indexados en
Science Citation Index (SCI) y Social Science Citation Index (SSCI). Los artículos se encontraron
en 598 revistas de carácter internacional durante el periodo del 2000 al 2014 y se les aplicó un
análisis de conglomerados (Figura 1.2).
Figura 1.3. Listado de palabras clave de investigación de artículos indexados de SCI/SSCI
en “Medical and Health Geography” durante el periodo 2000-2014.
Fuente: Yang, et al. 2017: 457
7
Otro hallazgo son los principales temas trabajados por países y regiones, de esta manera
en Canadá y Estados Unidos de América (EE. UU.) las investigaciones han puesto énfasis en las
enfermedades crónicas y el estilo de vida, así como en los efectos en la salud de los cambios
globales y de los contaminantes a nivel mundial; en América del Sur y África se enfocan en las
enfermedades tropicales e infecciosas; en China, se han concentrado en el estudio de la
toxicología, la exposición y los riesgos en la salud derivados de la contaminación ambiental. En
tanto que, en India y Bangladesh se ha prestado atención al envenenamiento por la concentración
de arsénico en el agua potable. Respecto a la utilización de palabras clave en los artículos
indexados en revistas internacionales de 2000 a 21013 (Figura 1.3) predominan los estudios de:
ecosistema y el medio ambiente; compuestos orgánicos persistentes; biodisponibilidad y
toxicidad; metales pesados y trazas de elementos; y tecnologías y modelado.
Posición
Cuadro 1.1. Países con mayor número de artículos y citas en SCI/SSCI sobre “Medical and
Health Geography” de 2000 a 2014.
1
2
3
País
Mundial
EE. UU.
China
No. de artículos
2000- 20052004
2009
3,002
6,369
1,049
1,918
95
418
358
588
831
Frecuencia de citación
200020052004
2009
Mundial
138,139 176,425
EE. UU.
56,385
58,724
Reino
19,963
18,079
Unido
China
3,152
10,081
238
102
73
57
81
112
50
29
473
225
192
184
171
185
115
130
708
479
392
391
336
318
265
203
Canadá
Australia
Francia
España
Italia
Alemania
Suiza
India
8,832
5,184
2,571
1,982
2,596
5,513
2,936
1,787
12,764
8,062
4,627
4,228
5,169
6,057
5,882
2,370
4,036
3,162
2,602
2,335
2,158
2,038
1,555
1,209
2,651
3,055
1,184
4,562
1,295
3,655
3,475
1,085
1,053
20102014
11,520
2,973
1,403
País
4
5
6
7
8
9
10
11
Reino
Unido
Canadá
Australia
Francia
España
Italia
Alemania
India
Taiwán
12
Brasil
39
92
194
13
14
Suecia
Japón
71
68
124
125
184
183
Países
Bajos
Suecia
Bélgica
15
9
44
171
Japón
3,375
2,605
48
115
160
Taiwán
1,273
17
18
19
Corea del
Sur
Países
Bajos
Portugal
Suiza
Bélgica
18
56
37
65
106
88
154
152
139
Brasil
Dinamarca
Noruega
20
Dinamarca
37
63
84
21
Otros
Países
375
948
1,800
16
Fuente: Yang, et al. 2017.
8
Nueva
Zelanda
Otros
Países
20102014
71,730
21,482
7,773
6,825
No. de artículos altamente citados
País
2000- 2005- 20102004
2009
2014
Mundial
393
513
601
EE. UU.
157
191
202
Reino
59
63
70
Unido
China
8
34
58
Canadá
Australia
España
Francia
Alemania
Italia
Suiza
Países
Bajos
Bélgica
28
19
7
8
15
10
6
10
41
24
9
11
22
20
7
11
28
25
22
18
16
16
16
13
3
3
8
2
0
3
3
8
8
918
Noruega
Corea del
Sur
Japón
9
5
7
2,608
851
Suecia
19
11
6
1,177
1,756
777
1,529
1,674
1,390
749
660
599
4
4
2
7
7
7
6
5
5
900
2,238
468
India
Taiwán
Nueva
Zelanda
Dinamarca
3
5
5
9,472
18,153
8,988
20
29
59
Otros
Países
Otro elemento que se consideró, fue el origen de la producción de artículos indexados
sobre “Medical and Health Geography” durante el periodo de 2000 al 2014, los cuales proceden
de principalmente de EE. UU., seguido de China, Reino Unido, Canadá y Australia (Yang, et al.,
2017); son estos mismos cinco países los que debido a su alta producción mantienen mayor
influencia mundial, debido a que cuentan con una posición similar en la frecuencia de citación y
se colocan dentro del grupo de los artículos altamente citados (Cuadro 1.1.).
Figura 1.4. Distribución espacial y temporal de la búsqueda mundial de “Medical
Geography” y “Health geography” en Google de 2004 a 2019*.
Interés de búsqueda mundial de “Medical geography” y “Health geography” de 2004 a 2019. **
Búsqueda de “Medical geography” y “Health geography” de 2004 a 2019. ***
Fuente: Google Trends, 2019.
*El periodo de estudio de 2004 a 2019, está definido por los resultados arrojados por las tendencias de búsqueda en
Google en un periodo de 15 años.
**Interés a lo largo del tiempo. - Los números representan el interés de búsqueda en relación con el valor máximo de
la lista correspondiente a la región y el período especificados. El valor 100 indica la popularidad máxima del
término, 50 implica la mitad de popularidad, y 0 significa que no hubo suficientes datos para este término.
***Se muestran las zonas en las que ese término es popular, La popularidad del término de búsqueda está
relacionada con el número total de búsquedas realizadas en Google durante un periodo y una ubicación concretos.
9
En los primeros quince años del Siglo XXI la Geografía de la salud ha presentado una
expansión en las temáticas de estudio frente a la tradicional Geografía médica desarrollada
durante el siglo XX. En los estudios de la distribución espacial de la salud y enfermedad por los
cambios ambientales y las capacidades humanas se han aplicado nuevos conceptos, métodos y
enfoques teóricos en geografía humana. Las temáticas abordadas son: comportamientos,
accesibilidad, grupos vulnerables, minorías, riesgo, vulnerabilidad, cambio climático y desastres,
SIG y teledetección, simulación de modelos, tecnología genética, impacto de la contaminación
ambiental, de los cambios ambientales y socioeconómicos en la salud; la prevalencia de las
enfermedades a nivel mundial, nacional y regional (Yang, et al., 2017).
Figura 1.5. Distribución espacial y temporal de la búsqueda mundial de “Health and Place”
y “Health geography” en Google de 2004 a 2019.
Búsqueda de los términos “Health and Place” y “Health Geography” de 2004 a 2019.
Búsqueda de “Health and place” de 2004 a 2019.
Fuente: Google trends, 2019.
Por otra parte, de acuerdo con la herramienta Google Trends en el periodo comprendido
entre 2004 y 2019, a nivel internacional el interés de la búsqueda de “Medical geography” y
10
“Health geography” presenta una tendencia descendente (Figura 1.4.). En el lapso referido, la
mayor búsqueda de “Medical geography” fue en enero de 2004; y de “Health geography” en
marzo de 2004 y septiembre de 2005, años donde se observa una caída de la búsqueda de
“Medical geography”. En el mismo sentido, la búsqueda de “Health geography” se encuentra por
encima de “Medical geography” (Figura 1.4.).
La búsqueda de “Medical geography” está encabezada por los países de Ghana, Nigeria,
Jamaica, Canadá, India, Filipinas, Reino Unido y EE. UU; en cambio “Health geography” se
buscó principalmente en Reino Unido, Canadá, EE. UU. e India. De manera asociada, el término
“Health and Place” presenta una dinámica de búsqueda mayor durante el primer lustro del Siglo
XXI. La búsqueda de “Health and Place” se encuentra por encima de “Health geography”, y los
principales países donde se realizó la búsqueda son: Australia, Sudáfrica, Irlanda, Filipinas, EE.
UU., Reino Unido, Canadá e India (Figura 1.5.).
Figura 1.6. Distribución espacial y temporal de la búsqueda mundial de “Social
Determinants of Health” y “Determinantes Sociales de la Salud” en Google de 2004 a 2019.
Búsqueda comparativa del interés de la búsqueda de los términos
“Social Determinants of Helth”
y “Determinantes Sociales de la Salud” de 2004 a 2019.
Búsqueda comparativa por países de “Social Determinants of Health” y
“Determinantes Sociales de la Salud” de 2004 a 2009.
Fuente: Google trends, 2019.
11
En el ámbito social, el concepto de “Social Determinants of Health” presenta un
interés creciente de búsqueda principalmente en los países de Australia, Canadá, Nueva
Zelanda, Kenia e Irlanda. La búsqueda en español “Determinantes sociales de la salud” es
realizada esencialmente en Colombia, Chile, Perú, Uruguay y República Dominicana (Figura
1.6.).
1.1.2 Enfoques teóricos en Geografía de la salud.
En la ciencia, toda investigación presenta una carga teórica de manera implícita o explícita. La
Geografía de la Salud cuenta con un desarrollo influido principalmente por la teoría funcionalista
(Litva y Eyles, 1995), y vinculada en mayor medida con la ciencia natural, la economía y la
informática. Por dicha cuestión, presenta similitud una con los contenidos y temáticas de estudio
de la epidemiología, sin embargo, la Geografía de la salud presenta dos elementos distintivos que
la constituyen: la Geografía médica o ecología de las enfermedades y la organización de los
sistemas de cuidado a la salud.
La Geografía médica centra su atención en la distribución de la enfermedad y las
asociaciones medioambientales, políticas y económicas que la generan. Es descriptiva para dar
respuesta a los eventos de salud distribuidos en el espacio geográfico considerando el ¿qué?, ¿a
quiénes?, ¿cómo?, ¿cuándo? y ¿dónde ocurre? Es también analítica, e implementa modelos para
predecir si una persona o población resultará afectada. Por otra parte, la Geografía de los
servicios de salud aborda el estudio de la ubicación, la accesibilidad y la utilización de la
infraestructura, empleando la teoría de la localización y técnicas de diseño cualitativo y
cuantitativo como insumo para identificar el comportamiento de los usuarios que acceden a la
atención médica (Litva y Eyles, 1995).
Otra singularidad de la Geografía de la salud corresponde a los principios metodológicos
que atiende, propios de la Geografía y que corresponden a la localización, la generalización, la
causalidad, la relación o conexión y de evolución. En cambio, la epidemiología, se sustenta en el
principio metodológico de causalidad; si bien la Geografía médica y la epidemiología confluyen
en el objeto de estudio, su aproximación difiere en los principios metodológicos.
Por otra parte, las posturas filosóficas y metodológicas que guían las investigaciones en
Geografía de la salud y las “bondades” que cada una presenta se contrastan a continuación.
12
a) Enfoque neopositivista.
En el siglo XIX la población europea se sitúa en un estado de cambio, de progreso, impulsado
por un sentimiento de crisis, de desorden, dadas las intenciones napoleónicas por imponer un
imperio, así, surge en los pensadores la necesidad por realizar un cambio en el orden social, en
este contexto aparece la formulación teórica de Charles Darwin de El origen de las especies. Con
esta propuesta no sólo el hombre cuenta con historia, también la tienen todos los seres vivos que
habitan el planeta, la misma Tierra y el Universo cuentan con historia y evolución. Se desarrolla
el historicismo que concibe al “hombre como ser que se hace”, el centro vuelca en el hombre, y
una corriente de la reducción del todo a la parte y la totalización de esa parte (Xirau, 2010).
El positivismo tiene como elemento distintivo el momento histórico en el cual se
desarrolló, ya que de apegarse a los rasgos formales que lo definen, algunos de ellos están
presentes en doctrinas filosóficas previas, como en el escepticismo de la antigüedad o en la
Ilustración. El positivismo está ligado a su contexto histórico y se entiende como aquel que
deriva de la escuela fundada por Augusto Comte como formulación teórica de la ciencia y
transformación en la sociedad y en la religión (Ferreter, 1975d).
Los principios de la filosofía positiva de A. Comte quedan enmarcados en el Curso de
filosofía positiva y en el Sistema de política positiva. Entre las tesis que definen el positivismo se
encuentran que, el conocimiento sólo puede adquirirse a través de hechos constatables por la
observación y de la experimentación de las regularidades que muestran; de esta manera, a través
del conocimiento es posible la predicción, fuente de control sobre el acontecer natural y del orden
social, así la ciencia está sujeta al servicio del bienestar.
La propuesta de Comte refiere que, en el empirismo se presentan los hechos como
sensaciones individuales que afectan el modo de pensar; en tanto que, la ciencia experimental
parte de hechos particulares y los generaliza. Comte propone la “Ley de los tres estados” donde la
historia acabará de producir un estado perfecto de las cosas, el “estado positivo”, para ello, la
humanidad ha de transcurrir por tres etapas: la teológica, la metafísica y la positiva dominada por
una visión racional. La etapa positiva ha de lograrse por una educación que prescinda de la
religión, las humanidades, las artes, así, al suprimirse la cultura occidental se llega al mundo
exacto, preciso. Esta nueva conducta ha de lograrse a través de la sociología, como principal
entre las ciencias humanas, la física social, física orgánica, como complemento de la física
inorgánica, aquella que se ocupa de las ciencias naturales (Xirau, 2010).
13
Heredera del pensamiento positivista la postura neopositivista, se caracteriza por la
aplicación del método científico característico de las ciencias naturales a los fenómenos sociales
(Kitchin, 2015). La aplicación del enfoque neopositivista en la Geografía de la salud usualmente
tiene como objeto identificar el o los factores de carácter físico, biológico, político o económico
que presentan mayor asociación a la distribución espacial de la enfermedad. Aunado a la cuestión
anterior resulta imprescindible la elaboración de modelos que pronostiquen la difusión de la
enfermedad de tipo infectocontagioso o del incremento de la distribución de las enfermedades
crónicas degenerativas según su contexto psico-social y económico (Gatrell y Elliot, 2009). Los
modelos predictivos usualmente resultan un medio para la solución de problemas de salud en el
ámbito espacial. (Valerio y Salvador, 2009).
En este enfoque se estudian los hechos sociales, conceptualizados como “… cosas por
derecho propio sui generis objetivamente reales y externas al individuo y que pueden dar forma a
la conducta humana y al pensamiento. Se derivan de la sociedad y no del individuo” (Litva y
Eyles, 1995: 7). A causa de concebir el comportamiento humano como modelable por los hechos
sociales, los seres humanos se consideran predecibles y sus acciones controlables a través de la
ingeniería social, la cual se implementa en este rubro con la aplicación de políticas preventivas,
que mantengan el óptimo estado de salud. El uso de la modelización descansa en el
funcionalismo estructural, fundamentado en las obras de Auguste Comte, Herbert Spencer y
Émile Durkheim (Litva y Eyles, 1995).
Para comprender la relación de los hechos sociales y el comportamiento humano resulta
necesario realizar la parcelación del sistema, debido a que los elementos de la estructura aportan
una relación causal. El trabajo de É. Durkheim condujo a los investigadores sociales a
implementar la objetividad en la observación e interpretación de la sociedad, centrándose en las
características externas. En este contexto, las características individuales no son consideradas
relevantes, se apremia lo colectivo para la comprensión de los hechos sociales con ello se busca
la generalización (Litva y Eyles, 1995).
El neopositivismo emplea una metodología “objetiva” para la obtención de información,
con el fin de incorporar una explicación probabilística en las relaciones de la sociedad (Litva y
Eyles, 1995). Este enfoque se ha aplicado a la Geografía médica a través de la recolección de
datos estadísticos de morbilidad o mortalidad y la correlación espacial con elementos
14
socioambientales. Con el análisis estadístico se incorpora una muestra para la aplicación de
generalizaciones. A ello, se suma la elaboración de material cartográfico, indispensable en la
identificación de la distribución aleatoria o de concentración espacial de la morbilidad o
mortalidad. La disposición espacial permite en primera instancia la elaboración de pruebas de
hipótesis sobre el factor social, económico o ambiental en la incidencia de los procesos de
morbilidad (Gatrell y Elliot, 2009).
Para conocer la distribución espacial del estado de salud de una población usualmente se
emplea el SIG, que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) facilita a los
responsables de la formulación de políticas públicas visualizar los problemas en salud y así
orientar los recursos de manera efectiva. El SIG es una plataforma ideal para la convergencia de
información específica de enfermedades y sus análisis en relación con los servicios salud
circundantes y el entorno natural. Al analizar datos epidemiológicos referenciados en el espacio
se revelan tendencias e interrelaciones que serían difíciles de reconocer en formato tabular
(Davenhall y Kinabrew, 2012). Con la utilización del SIG exponen rasgos de la biología humana,
estilos de vida y elementos en el medio que inciden en el estado de salud donde la gente
desarrolla sus actividades diarias y que le ocasionan enfermedad.
En tanto que, en la Geografía de los servicios de salud la ubicación es la variable clave
para el estudio del acceso y cómo proporcionar el servicio de salud, para ello, se identifican sitios
óptimos para la localización de servicios de atención médica desde un planteamiento utilitarista.
En este sentido usualmente se emplea el modelo de R. Anderson y J. Newman (1973), que
emplea tres aspectos para la utilización de los servicios, los cuales son: a) los factores
demográficos y sociales de la población (edad, sexo, estado civil); b) los elementos que favorecen
que el uso se produzca (ingreso, transporte) y; c) los elementos que estimulan la necesidad
(estado de salud) (Litva y Eyles, 1995). En contraste, el enfoque posmoderno cuestiona el
paradigma orientado a lo “científico”, de esta manera Paul Claval (2010) refiere que:
Actualmente ya no se cree que el progreso forzosamente conduzca a la felicidad: [el
progreso] alarga la vida humana, controla las epidemias, triunfa cada vez más sobre las
enfermedades, hace desaparecer el hambre, pero vuelve los armamentos más terribles y
los conflictos más sangrientos. ¿Acaso las ideologías pretendientemente científicas no
avalaron ni facilitaron ciertas empresas dudosas de la civilización occidental, su
expansión imperialista en particular? ¿No son acaso responsables de los totalitarismos
nazis o comunistas, que cobraron tantos millones de víctimas? (Claval, 2010:70).
15
Lo posmoderno enfatiza la necesidad de la deconstrucción, en el cuestionamiento de
nociones que nadie duda. La crítica a la modernidad se sostiene en: la importancia otorgada a la
historia como medio para la explicación de la realidad social, condición que reduce la
importancia del espacio (Jameson, 1984 en Claval, 2010); y en la primacía de la verdad científica
frente a las formas empíricas de conocimiento; y a la constitución de un pensamiento occidental
represivo y coercitivo (Foucault, 1989 en Claval, 2010). A través del posmodernismo, P. Claval
(2010) considera que la Geografía deja su sitio como ciencia subalterna en las ciencias sociales,
para aportar nuevos puntos de vista sobre lo humano.
b) Enfoque del interaccionismo social.
Desde el interaccionismo social se otorga valor a la comprensión subjetiva de la realidad,
utilizando una escala de análisis local. El interés se enfoca en el individuo y en la estructura
social inmediata en la que interactúa (Litva y Eyles, 1995). Los estudios se concentran en
comunidades, barrios o un pequeño grupo de personas. La experiencia del lugar resulta
primordial, más que el registro en diversos lugares o el encasillamiento de una población grande
en un área delimitada (Gatrell y Elliot, 2009). La teoría de la interacción social deriva del trabajo
La presentación de la persona en la vida cotidiana del sociólogo Erving Goffman publicado en
1959. Este enfoque ocasionalmente es referido como humanista por considerar las creencias
humanas, valores, significados e intenciones.
En el campo del interaccionismo social, la apreciación de la salud de la población no se
abordada a través de la revisión de estadísticas agregadas de cuerpos enfermos o de individuos
como receptores pasivos de su salud y de atención sanitaria; en todo caso, se aborda como la
continua construcción del conocimiento de las personas sobre su estado de salud que permiten la
compresión de los significados de salud y enfermedad que les atribuyen (Gatrell y Elliot, 2009).
La labor en el interaccionismo social es descubrir e interpretar los significados racionales
en las formas de actuar. Por ejemplo, la situación de un niño que aún no ha recibido vacunación
no es comprensible por parte de un profesional de la salud, mientras que sus padres tienen
elementos lógicos para no vacunarlo. (Litva y Eyles, 1995). Los supuestos que conducen el
interaccionismo social son: a) las personas actúan hacia las cosas basadas en el sentido de lo que
estas cosas representan para ellas; b) los significados surgen y se modifican a partir de las
16
relaciones sociales; c) las personas asignan significados a las situaciones, personas y cosas y a
ellos mismos a través de la interpretación (Blumer, 1969 en Taylor y Bogdan, 1994).
La asignación de importancia de los significados sociales que la población o el individuo
construye sobre sí mismo utilizando las interacciones que tiene con los elementos que lo rodean
(Blumer, 1969 en Taylor y Bogdan, 1994). Así, a partir de las interacciones se asume que la
población desarrolla la percepción sobre su estado de salud. El estado de salud genera una
“etiqueta” en las personas, que influye en su comportamiento. El etiquetado comúnmente
conduce a la estigmatización del individuo o comunidad, en vista que la buena salud se considera
algo moralmente digno (Litva y Eyles, 1995; Gatrell y Elliot, 2009).
Adicionalmente, el riesgo en el ámbito de la salud ambiental desde este enfoque es el
resultado de una construcción social. La evaluación y gestión del riesgo se abordan en función de
la organización social y de sus valores subyacentes; las evaluaciones sometidas al riesgo permiten
identificar lo que la organización social valora. Los conceptos salud y riesgo no son estáticos ni
estables, están sometidos en función de cada individuo y al contexto en que se encuentra (Litva y
Eyles, 1995). El interaccionismo social capta la visión de los actores sociales mediante métodos
cualitativos como: entrevistas, grupos focales y observación participante para la recolección de
datos, métodos con la capacidad de obtener la información extensa y compleja proporcionada por
los participantes (Litva y Eyles, 1995).
c) Enfoque marxista
Este enfoque toma como referencia el pensamiento y obra de Karl Marx, el cual se configuró en
varias etapas. En un primer momento, Marx se aproximó al idealismo de Hegel, posteriormente,
lo consideró especulativo y prefirió decantarse por lo concreto de los hechos históricos, de las
leyes, de la política y de la economía. No obstante, se ha considerado a Marx como un hegeliano
positivista. La lectura de Feuerbach lo situó en una significación de lo concreto, en vez de
explicar la historia por el “espíritu” que ocultaba la “verdadera realidad histórica”, fue así que se
orientó al análisis del materialismo histórico, aplicable mediante leyes de los propios hechos
históricos, leyes de una evolución que no se repite, cuyo motor son los conflictos sociales y la
fuerza de estos la economía que se refiere a la “condición material de la vida humana” (Ferreter,
1975c).
17
Karl Marx centra su atención en la economía, en la comprensión de las clases sociales: de
los poseedores y opresores, de los desposeídos y oprimidos, dicotomías que se extienden a otros
ámbitos como el espiritual, el político y el social como resultado de la forma en la cual operan las
relaciones económicas. Pese a ello, se tiene la esperanza del triunfo de los desposeídos, que dará
paso a la supresión de las clases sociales y con ello se llegará a un punto de libertad, el triunfo
sobre la opresión (Ferreter, 1975c). Por dicha situación una generalización para este enfoque
considera que, las estructuras económicas sustentan todas las áreas de actividad humana
incluyendo la salud y el acceso a la atención médica.
La condición económica presenta un papel fundamental en la salud, al ser la desigualdad
la principal causa de mala salud. Además ha de considerarse que en todos los contextos
geográficos se realizan más acciones en el campo de la medicina curativa que en la preventiva, en
gran medida debido a que la labor del médico produce una mercancía con su habilidad, con un
valor de cambio con aquellos que pueden pagar un tratamiento (Ferguson,1979 en Gatrell y
Elliot, 2009). Para Federico Engels (1984), la enfermedad y muerte prematura de la clase
trabajadora reside en la forma de producción económica y en el entorno social. La contaminación
ambiental, la condición de la vivienda, la nutrición, la seguridad en el trabajo son elementos
generadores de la mala salud. (Gatrell y Elliot, 2009).
En el campo de la Geografía médica, el estudio de los patrones de difusión de las
enfermedades se analiza fundamentalmente a partir del colonialismo, contexto donde la fricción
de las distancias se desvanece, las rutas comerciales y los medios de comunicación concurrieron
en la propagación de microorganismos y vectores transmitieron la enfermedad a comunidades
humanas antes aisladas. Recientemente, desde este enfoque se analiza la rápida difusión del Virus
de Inmunodeficiencia Humana (VIH), que se considera una pandemia a nivel mundial. La
difusión del VIH tiene entre sus causas el sistema económico capitalista, con la práctica del
turismo sexual en países en desarrollo. Un paciente con VIH en situación de pobreza afronta con
mayor dificultad la vida “los pobres, en su sabiduría popular, de hecho, saben mucho más que
cualquier economista. O más bien, conocen de otra manera, con mucha más profundidad”
(Farmer, 1992: 262-263 en Gatrell y Elliot, 2009: 3).
18
d) Enfoque estructuracionista
La teoría de la estructuración es propuesta por el sociólogo Anthony Giddens y parte de la
premisa de la dualidad del obrar humano y la estructura; en este sentido, la existencia de
sociedades con una específica configuración depende de las transacciones de ciertas formas de
conducta. Los elementos constitutivos de la teoría de la estructuración son: agente, poder,
estructura y formas de la institución. El agente humano, elemento central de esta teoría,
reflexiona de manera parcial, pues su capacidad de conocer como agente es llevada en la
conciencia práctica. Giddens distingue esta actividad en tres sectores: registro reflexivo,
racionalización y motivación de la acción.
El registro reflexivo, es un rasgo que toma en cuenta la propia actividad de las acciones
cotidianas y la de otros, así como también se registra por rutina los aspectos físicos y sociales del
contexto donde el agente se desarrolla. La racionalización de la acción por rutina corresponde a
una comprensión teórica sobre los fundamentos de su actividad. Si bien, las razones denotan los
fundamentos de la acción, los motivos denotan los deseos que mueven al agente. Una motivación
es un potencial de acción e inconsciente como rasgo expresivo de la conducta humana. En tanto
que, obrar no denota las intenciones de los agentes, obrar define la capacidad de hacer cosas.
La teoría de la estructuración no sólo se encauza en las formas de experiencia individual o
de la comprensión de la totalidad social, la estructuración tiene como campo de estudio las
prácticas sociales ordenadas en el tiempo y espacio y con ello la identificación de la convergencia
de contextos, por ello Giddens destaca la importancia de conocer escenarios de interacción y de
la adopción de técnicas de los geógrafos, específicamente de la geografía histórica. De esta
manera se retoman facetas de la realidad geográfica histórica de Torsten Hägerstand, que
expresan los ejes materiales de la existencia humana siguientes: (Giddens, 2015: 146).
i)
ii)
iii)
iv)
Indivivisibilidad del cuerpo humano, y otras entidades vivas e inorgánicas, en
los medios de la existencia humana. La corporeidad impone limitaciones
estrictas a las capacidades de movimiento y de percepción del agente humano.
La finitud del lapso de vida de agente humano como ser para la muerte. Este
elemento esencial de la condición humana origina ciertos parámetros
demográficos ineluctables de interacción en un tiempo-espacio. Por esta razón,
aunque no hubiera otra, el tiempo es un recurso escaso para el actor individual.
La capacidad limitada de los seres humanos de participar en más de una tarea
al mismo tiempo, sumada al hecho de que cada tarea tiene una duración.
El hecho de que un movimiento en el espacio es también un movimiento en el
tiempo.
19
v)
La limitada capacidad de envase de un espacio-tiempo. Dos cuerpos humanos
no pueden ocupar el mismo espacio al mismo tiempo; también los objetos
físicos tienen esta característica. En consecuencia, cualquier zona del espaciotiempo se puede analizar en función de restricciones que pesen sobre los dos
tipos de objetos susceptibles de ser acomodados en su interior.
Derivado de lo anterior el geógrafo sueco Schærstrom expone cómo la salud varía
dependiendo del tiempo de exposición a factores ambientales y tensiones sociales. Ciertas
actividades sólo pueden realizarse en horarios y lugares específicos, acciones que dan lugar a las
estructuras sociales. De esta manera, los horarios de apertura de los centros de atención en salud
y los horarios laborales en conjunto conforman la estructura de la atención médica que limitan la
agencia del individuo para realizar prácticas saludables. También, puede considerarse la
capacidad de la agencia para modificar la estructura del sistema de salud.
Figura 1.7. Esquema de acciones de una familia en el espacio-tiempo.
Fuente: Schærstrom, A., 1996 en Gatrell y Elliot, 2015:51
20
La Figura 1.7. expresa la condición de espacio-tiempo de una familia en sus actividades
diarias, en ella se describe como un miembro de la familia lleva a un hijo a la guardería, después
se dirige a su trabajo, posteriormente, previo a recoger al hijo realiza las compras y finalmente, se
dirige a su hogar. Su participación en diversas actividades le consume tiempo en distintos lugares
y tiempo de exposición. A manera de conclusión en este caso, Gatrell y Elliot parafraseando a
Karl Marx sobre la manera en que los hombres construyen su historia, pero aplicándolo al ámbito
de la salud, enuncian “Al final, los seres humanos construyen su propia salud, pero no en las
condiciones de su elección” (Gatrell y Elliot, 2009).
1.2
Los Determinantes Sociales de la Salud.
La salud de la población presenta cierta distribución espacial vinculada al contexto económico,
político y cultural donde la población vive y desarrolla sus actividades. Recientemente, se ha
reconsiderado la importancia del propio individuo en la construcción de su estado de salud; la
agencia que los individuos toman sobre su propia salud está sujeta a las posibilidades que puede
adquirir en su contexto inmediato, sin que ello sea limitativo. No obstante, se ha de esperar que
los elevados niveles de agencia estén asociados con espacios donde las necesidades básicas se
satisfacen, se cuenta con infraestructura en educación, en salud y de oportunidades de trabajo.
Los Determinantes Sociales de la Salud pretenden identificar aquellas diferencias detonantes de
la desigualdad social.
1.2.1. La determinación y la causalidad en la salud.
El concepto de determinación cuenta con una amplia tradición en el campo de la filosofía, no
obstante, la aplicación de éste en el ámbito humano, específicamente en la ciencia médica y
geográfica implica tomar consideraciones que deben advertirse en su aplicación las cuales son las
siguientes:
a) El concepto de salud y la reconsideración de Norman Daniels.
Hacia 1946, en el Preámbulo de la Constitución de la Organización Mundial de la Salud, la
salud fue definida como el “estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente
la ausencia de afecciones o enfermedades” esta definición fue adoptada por la Conferencia
Sanitaria Internacional, celebrada en Nueva York. La Constitución se firmó por 61 representantes
21
de Estados, y entró en vigor el 7 de abril de 1948 y desde ese año la definición no se ha
modificado.
Otro aspecto de interés que refiere dicha Constitución, son los principios que refieren la
salud como “uno de los derechos fundamentales de todo ser humano sin distinción de raza,
religión, ideología política o condición económica o social.”; que es “una condición fundamental
para lograr la paz y la seguridad”; que depende de “la cooperación entre personas y Estados”; que
“la desigualdad en lo relativo al fomento de la salud y el control de las enfermedades, constituye
un peligro común”; y que “los gobiernos tienen la responsabilidad de garantizar la salud mediante
la adopción de medidas sanitarias y sociales adecuadas” (OMS, 2006: 1).
La definición de salud ha perdurado por siete décadas no obstante, Norman Daniels la
considera reducida y lo ejemplifica cuando una persona acumula toxinas en el medio que habita y
no lo sabe, esta no se considera enferma a pesar de que tiene problemas de salud, por ello, la
define como la ausencia de una patología, y esta última es descrita como “cualquier desviación
típica con respecto a la organización funcional típica de una especie” (Daniels en Dieterlen, 2015:
77). De esta manera, es posible explicar la salud a través de una desviación estadística de hechos
biológicos, excluyendo los juicios de valor.
En la búsqueda de identificar la organización funcional típica de la especie, Daniels
considera dos complicaciones; la primera, reconocer cuál es esa organización típica que permita
perseguir metas biológicas y que incluya la calidad de animal social. Una segunda, centrada en el
estudio de la salud mental con una construcción teórica menos desarrollada sobre qué es lo típico
en la especie humana (Dieterlen, 2015).
Durante la última mitad del siglo XX, la salud ha presentado invariablemente tres
componentes que permiten identificar la salud como: a) la capacidad de realizar; b) la posibilidad
de realización individual, en la búsqueda de valores, necesidades y aspiraciones; y c) el potencial
para negociar de manera efectiva las demandas del entorno social (Tarlov, 1996). La salud, tiene
un significado amplio pues es la capacidad, en relación con el potencial y las aspiraciones, para
vivir plenamente en el entorno social, a pesar de su importancia se distribuye de manera
heterogénea en el espacio, por la desigual distribución de los medios para alcanzarla.
Otra revisión conceptual que es pertinente abordar es sobre la determinación y causalidad,
las cuales favorecen la comprensión de los Determinantes Sociales de la Salud. En este sentido,
22
las acepciones que presentan estos conceptos pueden conducir a una incorrecta comprensión del
término y finalmente a la inadecuada ejecución de prácticas en la salud (Lip y Rocabado, 2005).
b) La determinación en filosofía.
El concepto de “determinante” ocupa una plaza fundamental en la presente investigación por lo
cual requiere identificar las posibles acepciones que el término presenta. Determinación se ha
usado con al menos con tres connotaciones que Bunge identifica como:
a. Propiedad o característica definida de algo en forma inequívoca, como antónimo se
presenta lo vago e impreciso
b. Conexión constante y unívoca entre cosas o acontecimientos o entre estados o
cualidades de las cosas, esta connotación se refiere a la conexión necesaria que se da
en un proceso que pasa por etapas sucesivas que siguen una a otra inmutablemente sin
variación. Sobre esta base es posible realizar predicciones cuantitativas.
c. Modo de devenir, en que un objeto adquiere una propiedad. Bunge (1978:15 en Lip y
Rocabado, 2005: 15) lo enuncia como: “… los acontecimientos ocurren en una o más
formas definidas determinadas, Que tales formas de devenir no son arbitradas, sino
legales; y que los procesos a través de los cuales todo objeto adquiere características se
desarrolla a partir de condiciones preexistentes.”
Los principios de esta hipótesis son dos: legalidad y productividad. La legalidad en el
devenir está determinada por un conjunto de leyes objetivas se conozcan o no. La
productividad o principio genético formula que los objetos adquieren sus
características a través de condiciones preexistentes. Con estos dos principios en el
determinismo, nada surge de la nada, y nada surge de manera irregular o de forma
arbitraria. (Bunge 1978: 19-21 en Lip y Rocabado, 2005: 14-15).
Desde la perspectiva del determinismo “cada uno de los acontecimientos del universo
están sometidos a leyes naturales. Estas leyes son de carácter causal” (Ferreter, 1975: 431b). De la
afirmación anterior es importante resaltar el aspecto “causal” debido a que, en otro contexto se
situaría en el ámbito de lo teleológico, y a la noción de destino y predestinación. Bergson
propone que, en el campo de lo causal y el teleológico el encadenamiento de fenómenos limita la
opción de creación y de libertad, mientras que para Kant el determinismo sólo se aplica al mundo
de los fenómenos más no al neumónico, de la libertad. Una posición radical extiende la
determinación hasta el rubro de las actividades humanas, donde los motivos son considerados
como causas suficientes (Ferreter, 1975b).
La determinación es una extensión de “la realidad” del modo como se entiende la
mecánica clásica, que “rigen un sistema en relación con una cierta clase (definida) de
propiedades” (Ferreter, 1975: 432b). Un sistema determinista se constituye de al menos las
23
condiciones siguientes: 1) debe ser “cerrado” no puede admitir elementos o acontecimientos
externos; 2) debe contener elementos del mismo sistema ontológico; 3) debe incluir secuencias
temporales y evitar las reducciones de tendencias funcionales; 4) el sistema debe poseer un
conjunto de condiciones iniciales, no debe estar él mismo determinado, de contar con condiciones
externas se inserta el sistema en otro.” (Ferreter, 1975b).
La principal oposición al determinismo proviene del campo ético, antropológico y
filosófico porque con él se anula el libre albedrío, ya que la libertad es una condición ontológica
necesaria, que no es comparable con aspectos del medio natural y, por lo tanto, no es posible la
aplicación de las mismas categorías. (Ferreter, 1975b). En contraste, a los modelos
epidemiológicos de asociaciones causales con factores determinantes en la salud, Breilh (2011)
propone ahondar en los procesos históricos, en los determinantes estructurales de carácter político
y económico que configuran la distribución espacial del estado de salud de la población.
c)
La determinación en Geografía.
El empleo del concepto de determinación en la disciplina geográfica se remonta hasta el siglo
XIX, cuyo principal exponente es Federico Ratzel con la obra Antropogeografía, la cual centra su
atención en tres cuestiones esenciales para la Geografía como ciencia moderna. En primer lugar,
Ratzel propone explicar a través de la cartografía, la distribución y la agrupación de la población
humana en la Tierra; en segundo término, proporciona una explicación de esa distribución a lo
largo de la historia; y finalmente, los efectos del medio físico en el individuo y en la sociedad.
Es precisamente la última cuestión la que contó con mayor repercusión en la Geografía,
cuyo discurso impulsó la relación entre naturaleza y sociedad, con fundamento en la cohesión del
suelo y el pueblo que lo habita, dotando al suelo de una función y dimensión explicativa de la
organización social y política (Ortega, 2000). A su vez, el suelo tiene como base a la geología, y
se presenta una concatenación de asociaciones con la flora, la fauna y la historia de cada país. De
esta forma, se logra “entender al hombre como un producto de su medio” (Ortega, 2000: 152). La
disciplina geográfica en Antropogeografía se perfiló como una “ciencia cuya principal función
consistió en poner de manifiesto las variaciones locales de la interacción del hombre en la
sociedad y de su medio” (Makinder, 1887: en Ortega, 2000: 152).
Este concepto se formuló cuando la Geografía estaba en proceso de articulación como
ciencia moderna, de manera paralela a las disputas del reparto colonial. En este marco los
24
argumentos de la determinación resultaron útiles para los fines de expansión de las potencias. No
obstante, Lucien Febvre reconoció lo endeble de dichos postulados enmarcados en la tradición de
“la influencia”, los cuales se constituyen en el marco del lenguaje precientífico, por dotar al suelo
de una capacidad productora de las formas sociales. La ideología decimonónica de influencia
medio → hombre decantó en un proyecto positivista de la geografía (Ortega, 2000).
La denuncia principal de Lucien Febvre se concentra en la simplicidad de los postulados
deterministas llevados al orden de principios universales; en tanto que, propone una alternativa
“el posibilismo”. Para L. Febvre la naturaleza no es una independiente del contacto humana, es
una naturaleza modificada y transformada por el hombre, deja de lado las relaciones entre
hombre y naturaleza y se concentra en el grado de acción del hombre, situándose en primer plano
como agente, transformador de la configuración del espacio (Ortega, 2000).
De esta manera, se establece un nuevo discurso que transitó del establecimiento de las
relaciones del medio sobre el hombre, a las relaciones medio y hombre, para el siglo XX esta
reconfiguración es expresada por el geógrafo Pierre Deffontaines, de la manera siguiente:
La geografía humana no trata de estudiar influencias, sino relaciones. Con esta precisión
queremos dejar bien sentado que en la geografía no hay determinismo. Ninguna fuerza
cósmica, ni siquiera esa tan incontrastable que incluimos dentro del amplio concepto de
clima, obra sobre el hombre con una fuerza excluyente de cualquier otra... El hombre no
representa un papel de mera pasividad. Se adapta activamente. Y al adaptarse con su
actividad crea otra forma de relaciones entre las condiciones físicas y su vida social. Se pasa
del concepto de necesidad al de posibilidad (Deffontaines, 1960 en Ortega, 2000: 171).
Para el siglo XXI, autores como Buzai y Santana Juárez, respecto a estos planteamientos
se han pronunciado con la propuesta Condicionantes socioespaciales de la salud (CSS): bases y
alcance conceptual, en el marco de la geografía señalan “La geografía no determina la vida de los
individuos, aunque no podemos negar que tiene influencia en mayor o menor medida según sea el
caso.” (Buzai y Santana Juárez, 2018: 167). Este artículo investigativo considera aspectos
extremos e intermedios de la determinación, con tres posibles escenarios: 1) la determinación
total, con predicciones perfectas; 2) un rubro intermedio, de predicción parcialmente
determinada, y que los autores consideran es el ámbito donde se desarrolla el análisis espacial en
salud; y finalmente 3) la indeterminación, donde no se permite realizar predicciones (Buzai y
Santana, 2018).
25
En la búsqueda de causalidad en el análisis espacial es que se propone el término de
condicionante, estableciendo un determinismo parcial debido a que su operación se establece a
través de un modelo de regresión simple y=f(x1,x2,x3,….xn)+ ε, donde se calcula el valor de la
variable dependiente en este caso la salud (y) a través de los factores (x) que se tiene evidencia
presentan una implicación en la relación causal, a esto se añade una variable denominada error
(ε), que explica la variabilidad en “y” que no se puede explicada mediante una relación lineal
entre “x” y “y” ajustando los valores para establecer la determinación. Con la determinación
parcial se modera la aplicación del concepto de los Determinantes Sociales de la Salud (Buzai y
Santana, 2018). Con ello, se identifica los alcances de la delimitación y del establecimiento de un
concepto y de sus implicaciones que esto tiene en la concepción del funcionamiento de la
sociedad.
Un matiz distinto que trata la cuestión de la determinación desde el ámbito de la
epidemiología social se observa en ¿Determinación social o determinantes sociales? Diferencias
conceptuales e implicaciones praxiológicas, desarrollada por Morales-Borrero et. al, (2013), en
cuyo trabajo se precisa una distinción entre la determinación social, implícita en la Comisión de
los DSS, la cual deriva de un marco de la epidemiología anglosajona, donde se considera a la
sociedad como una suma de individuos, bajo una perspectiva funcionalista. Desde esta postura se
desliga lo subjetivo del individuo, de su historia y se entienden las condiciones de vida como
factores de riesgo, delimitando la estratificación social y con ello la determinación en salud
mediante de la estadística y probabilidad.
Los resultados en salud vinculados con el contexto social y la posición del individuo
resultan en la vulnerabilidad diferencial, que evidencia la distribución de las inequidades sin
denunciar las relaciones de poder en la sociedad. Así mismo, con los resultados en salud se
evidencian las causas de las enfermedades como factores de riesgo, tiempos y niveles de
exposición. Desde esta línea de la “determinación social” las implicaciones praxeológicas
conducentes están orientadas en el fortalecimiento de políticas y programas sociales sin que ello
resulte en el cuestionamiento de las relaciones de poder implícitas. La política de salud se orienta
a la igualdad, la libertad y acciones en el campo de la justicia distributiva, victimiza a los
enfermos para de esta manera acceder a la política pública. Desde la postura de la justicia liberal
redistributiva, el individuo desarrolla capacidades que influyen en sus elecciones sobre su salud o
enfermedad. Con la política pública se compensa y favorece la recuperación de las libertades del
26
individuo, lo cual conduce a la aceptación de los subsidios para la corrección de comportamientos
individuales.
La postura de algunos investigadores latinoamericanos sobre los Determinantes Sociales
en Salud considera a la sociedad como totalidad, con una perspectiva conflictual y en una
jerarquía donde se sitúa lo social sobre lo biológico. Identifica en los procesos de producción y
reproducción social la génesis de las desigualdades e inequidades. En esta perspectiva se revelan
las relaciones de poder y como la acumulación de capital favorece el entendimiento del estado de
salud, su propósito es la acción y la transformación social. Las implicaciones praxeológicas,
consideran la participación de los sujetos en las relaciones de poder esenciales para la
transformación de la calidad de vida, esta vía posibilita eliminar la inequidad resultado de las
relaciones de poder que enajenan al individuo en sus posibilidades de realización.
El presente trabajo, considera que el devenir humano no puede ser determinado, debido a
la capacidad de agencia de los individuos y a su obrar transformador de la naturaleza, así como
una infinidad de relaciones y sucesos posibles, los cuales generan múltiples alternativas en el
motor de la historia.
d) Determinación y causalidad en el ámbito de la salud.
En el plano de la biología humana, la determinación en la salud está dada por cuestiones de
causalidad donde uno o varios factores de diversa índole generan un efecto en el estado de salud
poblacional. Este estado de salud puede presentar varios escenarios, dependiendo de los efectos
de la causalidad epidemiológica, de las condiciones del espacio geográfico habilitado por el
hombre y de las transformaciones que se realicen en este espacio a corto, mediano y largo plazo
(Figura 1.8.). De la combinación de estas tres consideraciones pueden obtenerse varias
posibilidades, donde los factores de causalidad pueden mantenerse estables y prolongarse en el
tiempo y espacio, así como diversos grados de variaciones en las tres dimensiones consideradas.
Por otra parte, la causalidad de la que se ha hecho referencia supone “la imputación a
alguien o algo” (Ferreter, 1975: 270a), pero también la producción de algo. La causa permite la
producción de cierto efecto. “La noción de causa es una de las nociones más discutidas en las
historias de los pensamientos filosóficos tanto occidentales como orientales” (Deutsch y
Brontekoe, 1999; Kalumpahana; 1975 en Vallverdú: 97). La causalidad presenta controversias
27
tanto en el ámbito científico y filosófico. Las acepciones de la causalidad presentan al menos tres
sentidos:
a. categoría de un nexo causal en el sentido de causa efecto;
b. principio, ley de causación. Galileo la definió como “la condición necesaria y
suficiente para la aparición de algo” (Lip y Rocabado, 2005:10) y;
c. como una “…doctrina que sostiene la validez universal del principio causal
excluyendo las demás formas de determinación”. (Bunge, 1978:15 en Lip y
Rocabado, 2005: 9).
Figura. 1.8. Esquema sobre las múltiples dimensiones para el estado de salud en el espaciotiempo.
Fuente: elaboración con base en Pickenhayn, 2009.
En relación con la segunda acepción de la causalidad, el ámbito de la salud presenta
modelos que explican las condiciones para identificar la etiología de una enfermedad y estos son:
el unicausal, el multicausal y la indeterminación. El modelo unicausal presentó una construcción
con el descubrimiento de los microorganismos, estableciendo la presencia de un microorganismo
como causante de una enfermedad, en el sentido direccional causa efecto (Figura 1.9.). Sin
embargo, estudios biomédicos han identificado que reducidas son las enfermedades que presenta
una relación uno a uno (Parascandola y Webb, 2001:907 en Lip y Rocabado, 2005).
Ante la falta de enfermedades que presenten una relación unicausal se presenta otra vía, el
modelo multicausal. Este modelo propone al menos tres variantes. La primera, expresa una
28
relación de varios factores que contribuyen a la enfermedad, este tipo de modelo se ha
implementado para abordar enfermedades crónicas y accidentes. Una segunda variante
corresponde al modelo multicausa multiefecto, en la cual un conglomerado de causas produce
diferentes efectos (enfermedad), este modelo es esencial para la comprensión de enfermedades y
la asociación con el medio ambiente. Los factores implicados en la causa usualmente se les
denomina factores de riesgo. Desde esta perspectiva se enfatiza sobre el riesgo al que cada
individuo está expuesto de manera diferenciada.
Dentro del grupo multicausal se sitúa el modelo “causa componente suficiente”, en él se
considera que se requiere de un conjunto o grupo de factores en condiciones que se acumularan y
confluyen en un punto mínimo que detone la enfermedad. A diferencia de los modelos
multicausales anteriores el de “causa componente suficiente” otorga una preeminencia a la
variable temporal, considerado óptima para estudios individuales (Lip y Rocabado, 2005).
En otro ámbito se presenta el modelo sistémico, basado en la teoría de la complejidad que
“…entiende los problemas epidemiológicos como sistemas dinámicos altamente inestables, que
repiten sus atributos en diferentes escalas…” (Pickenhayn, 2009:18). El carácter causal de la
epidemiología brinda una explicación del estado de salud, en tanto, desde la Geografía, este
abordaje permite identificar los elementos que interaccionan en el espacio que definen el estado
de salud de la población.
Figura 1.9. Esquema de los modelos epidemiológicos de causalidad.
Fuente: elaborado con base a Lip y Rocabado, 2005; Pickenhayn, 2009.
29
Finalmente, debe advertirse que la causa para algunos autores está asociada con la noción
de condición. Para otros, causa y condición son distintos, la causa tiene un sentido positivo, por
lo cual algo sucede; en tanto que, condición cuenta con un sentido negativo, sin lo cual algo no
sucedería. Por otra parte, Ferreter (1975a), expone que para algunos autores no hay posibilidad de
distinción entre causa y condición. Tomando la noción de causa en el sentido positivo para su
establecimiento deben tomarse las tres consideraciones siguientes:
a) Precedencia temporal, con ello se demuestra que la causa sucedió antes del efecto, una
ejemplificación de esta situación se observa en funciones cíclicas de la economía como la
inflación y el desempleo, lo cual se observa en el esquema siguiente:
Figura 1.10. Diagrama, funciones cíclicas.
Inflación
Desempleo
Fuente: Tromich, 2020.
b) Covariación de la causa y efecto, esquematizada para ejemplificar de manera binaria
si X, entonces Y
si no X, entonces no Y.
Ya que cuando se observa que X está presente Y también se presenta; y siempre que Y está
ausente X también lo está, de esta manera se demuestra la relación X - Y.
c) No plausibilidad de explicaciones alternativas. Para ello se tiene que descartar explicaciones
alternativas. Ya que es posible la presencia de otra variable que esté causando el resultado y
no se esté considerado, a ello se conoce como la tercera variable o la variable faltante y esta
aporta explicación para contar con la debida validez interna (Tromich, 2020).
Con las referidas consideraciones se puede establecer los escenarios siguientes: a) la
evidencia es suficiente para inferir una relación causal; b) la evidencia es sugestiva pero no
suficiente para inferir una relación causal; c) la evidencia es inadecuada para inferir la presencia o
ausencia de una relación causal (que engloba evidencia escasa, de mala calidad o conflictiva) y d)
la evidencia sugiere una relación no causal (CDC, s/f).
30
1.2.2. Concepto de los Determinantes Sociales de la Salud (DSS).
Las estructuras del sistema económico y político generan una distribución desigual de la salud.
La igualdad en salud implica que “idealmente cada persona debería tener una oportunidad justa
para alcanzar su potencial completo de salud, y más pragmáticamente, que nadie debería estar en
desventaja para alcanzar su potencial de salud, siempre y cuando esta desventaja pueda evitarse”
(OMS, 1986 en Bolívar y Daponte, 2009:12). Las desigualdades potencialmente remediables son
denominados Determinantes Sociales de la Salud (DSS), en la condición de salud subyacen
elementos socioeconómicos y de equidad (Daponte, Bolívar y Moya, 2009). Los Determinantes
“interfieren en la distribución de la salud y de la enfermedad dentro de la sociedad” (Akerman, et
al, 2010:2) y son definidos por la Organización Mundial de la Salud como:
…las circunstancias en que las personas nacen crecen, viven, trabajan y envejecen,
incluido el sistema de salud. Esas circunstancias son el resultado de la distribución del
dinero, el poder y los recursos a nivel mundial, nacional y local, que depende a su vez
de las políticas adoptadas. Los determinantes sociales de la salud explican la mayor
parte de las inequidades sanitarias, esto es, de las diferencias injustas y evitables
observadas en y entre los países en lo que respecta a la situación sanitaria. (OMS,
2020a).
En el mundo la población socialmente desfavorecida tiene un acceso limitado a los
recursos sanitarios, esta situación de desventaja conlleva a la muerte prematura. Como elemento
esencial para la comprensión de la situación sanitaria de un país no se considera la riqueza total
del país, pero sí, la distribución de esa riqueza, debido a la ausencia de una correlación entre
macro indicadores de riqueza e indicadores de salud (Akerman, et al, 2010).
A mitad del siglo XX, se presentó una reducción de muertes atribuidas a enfermedades
infecciosas, este entusiasmo se tradujo en el concepto de transición epidemiológica, que a su vez
se desprendió del de transición demográfica. Así, Omran, en 1967 postuló la teoría de la
transición epidemiológica, cuya premisa refiere a las causas mortalidad como factor fundamental
de la dinámica de la población. El Cuadro 1.2. engloba las etapas de transición demográfica,
donde se ajustan los procesos en la dinámica poblacional, no obstante, las transiciones pueden
variar de una población a otra, dependiendo de su desarrollo histórico que define el motor de esos
cambios que no sólo se limitan a los correspondientes patrones alimenticios, posibles amenazas a
la salud para la definición de las etapas epidemiológicas.
31
Cuadro 1.2. Ajuste de las etapas de la transición demográfica, alimentaria, amenazas a la
salud y epidemiológica desde la prehistoria hasta el Siglo XXI.
Pirámide de
población
Fase 1. Pre- industrial
En aumento de hasta 40
nacimientos por cada
1,000 hab.
Transición demográfica
Natalidad
Patrones alimentarios
Fase 2
Índices de mortalidad y natalidad
altos y fluctuantes
Mortalidad
Decrece a 15 defunciones
por cada 1,000 hab.
Dinámica de
crecimiento
de la
población
Crecimiento de la población del 1 por
ciento y decrecimiento del 1 por ciento
o mayor en épocas de guerra, epidemia
o hambruna.
Crecimiento moderado
del 2.5 por ciento anual
debido a al inicio de la
industrialización
Crecimiento
natural
Estable o de bajo crecimiento
Rápido crecimiento
Etapa →
Recolección
de alimentos
Disminución de las
hambrunas
Tipo de
dieta
Alta en fibra
y carbohidratos,
baja en
grasa.
Origen de
alimentos
Caza y
recolección
32
Hambrunas
Alimentación menos
variada debido al
desarrollo de la
agricultura
Desarrollo de
agricultura y sujeta a
periodos de extrema
escasez de alimentos
Se incrementa el consumo
de frutas, verduras y
productos de origen
animal, se reducen el
consumo de almidones.
Alimentación asociada
con la estratificación
social.
Rotación de cultivos y
uso de fertilizantes
Fase 3.
Intermedia
Desciende de 40 a
25 nacimientos por
cada 1,000 hab.
Fase 4
Fase 5
Disminución a 10
nacimientos por
cada 1,000 hab.
Decrece a 10
defunciones por
cada
1,000 hab.
Se mantiene baja,
a 10 defunciones
por cada 1,000
hab.
Menor a 10
nacimientos por
cada 1,000 hab.
Aumenta por el
envejecimiento
poblacional hasta
15 defunciones
por cada 1,000
hab.
Presenta los valores
más acusados entre
natalidad y
mortalidad con un
crecimiento
vegetativo mayor al
3 por ciento.
Crecimiento lento
Predominio de las
enfermedades
crónicodegenerativas
Alto contenido de
grasa total,
colesterol,
carbohidratos
refinados y
cantidades reducidas
de ácidos grasos poli
saturados y fibra.
Alimentación
asociada con la
estratificación
social.
Desarrollo de
servicios de
alimentos rápidos.
El crecimiento de
la población se
desacelera al 1 por
ciento anual.
Decrecimiento
demográfico del
-0.5 por ciento
anual
El crecimiento
Estable o bajo
disminuye y
crecimiento
posteriormente se
estabiliza
Cambio conductual
Adopción de dietas y niveles de
actividad física similares a la etapa de
“recolección de alimentos”.
Alimentación asociada con la
estratificación social.
Cuadro 1.2. Ajuste de las etapas de la transición demográfica, alimentaria, amenazas a la
salud y epidemiológica desde la prehistoria hasta el Siglo XXI. (Continuación)
Era de la
salud →
Amenazas a
la salud
Amenazas a la salud
Manifestaci
ón
Objetivo de
la salud
Estrategias
de
producción
de salud
Medida de
la salud
Era
Enfermedades infecciosas
Sobrevivenc
ia de la tribu
Reproducció
n
Domesticaci
ón de granos
y ganado.
Abrigo y
fuego
Evitar la epidemia
Supervivencia a través
de las
generaciones
Muerte durante las epidemias
Agua y comida insalubres.
Hacinamiento
Plagas y epidemias
Saneamiento, educación,
antibióticos, tratamientos
sintomáticos para la
deshidratación y la fiebre.
Estadística
Sanitaria
(primera
mitad siglo
XIX)
Miasma;
toxicidad por
emanaciones
de tierra, aire
y agua
Paradigma
Eras epidemiológicas
Privación
física
Falta de
comida,
protección y
ropa
Inanición y
exposición
Aproximaci
ón analítica
Demostrar el
conglomerado
de morbilidad
y mortalidad
Aproximaci
ón
preventiva
Introduce
drenaje,
alcantarillado,
saneamiento
Enfermedades
crónicas
Abundancia
Ocio
Estilo de vida
nocivo
Enfermedades del
corazón, cáncer y
derrame cerebral
Curar las
enfermedades y
control de
síntomas
Atención médica:
antisepsia,
anestesiología,
cirugía, productos
farmacéuticos,
sustitución y
reemplazo de
órganos,
manipulación de
genes, prevención
de enfermedades
Tasas de
morbilidad y
mortalidad y la
esperanza de vida
Enfermedad
infecciosa (finales
siglo XIX y 1.a
mitad siglo XX)
Determinantes socio-ecológicos
Epidemiología de la
enfermedad crónica
(2.a mitad siglo XX)
Eco- epidemiología (siglo XXI)
Teoría de los
gérmenes; agentes
únicos se
relacionan
unívocamente con
las enfermedades
Caja negra;
exposición
relacionada con las
consecuencias, sin
necesidad de
factores de
intervención o
patogénesis
Razón de riesgos de
exposición de
resultados a nivel
individual en
poblaciones
Cajas chinas; relaciones tanto internas
como compartidas entre estructuras
localizadas en jerarquías de niveles
Aislamiento en
laboratorio y
cultivo de los
causantes de las
enfermedades,
transmisión
experimental y
reproducción de
lesiones
Interrumpir
transmisión
(vacunas,
aislamiento de los
afectados
mediante
cuarentenas,
antibióticos)
Vulnerabilidad diferenciada basada en la estratificación social:
educación, vivienda, trabajo, ingresos.
Deterioro de las capacidades funcionales y el bienestar.
Muerte prematura
Mejorar la calidad de vida
Tasas de morbilidad y mortalidad y esperanza de vida
Años de vida sin discapacidad.
Funcionamiento y bienestar.
Controlar los
factores de riesgo
modificando el
estilo de vida, los
agentes o el
ambiente
Análisis de determinantes a diferentes
niveles de organización; entre y a
través de contextos (utilizando nuevos
sistemas informacionales) y en
profundidad (recurriendo a nuevas
técnicas biomédicas)
Aplicar al mismo tiempo información y
tecnología biomédica con tal de
localizar influencias a niveles eficaces,
tanto contextuales como moleculares
Fuente: elaborado con base a Tarlov, 1996 :122; Vera (2000); Partida (2005).
Además de esta propuesta de ajuste en la transición epidemiológica, demográfica,
alimentaria y de amenazas a la salud, se presenta la integración de tecnología en la agricultura,
33
que mejoró la nutrición y la resistencia a las enfermedades infecciosas; cambios en la educación,
la medicina y adelantos tecnológicos después de las dos Guerras Mundiales; el desarrollo del
Estado Moderno y proporcionó servicios públicos como: el agua potable, la vacunación, el
control de epidemias y la implementación de medidas de salud pública. Otros aspectos que
contribuyeron son: la elevación del ingreso, el desarrollo de infraestructura y el comercio, así
como periodos de paz y el establecimiento del orden público que redujo las muertes por violencia
(Souto, 2015).
Construcción y difusión del concepto de los Determinantes Sociales de la Salud.
Las primeras formulaciones de la desigualdad y la salud se sitúan a finales del Siglo XVIII. De
esta manera, se cuenta con el planteamiento de Johann Peter Frank médico y filósofo alemán que
publicó System einer vollsttindigen medizinischen Polizei en seis volúmenes, de los cuales el
primer volumen lo destina al estudio del embarazo y el parto; el segundo se concentra en las
enfermedades venéreas, muy difundidas en la época. El tercer volumen publicado en 1783
presenta temas destinados a la nutrición, el vestido y la vivienda, con énfasis en las normas de
nutrición y protección contra el frío. En el cuarto y quinto volumen se aborda cómo las
instituciones de seguridad afectan en la salud pública y en el sexto está destinado a el “arte de
curar y su influencia en el bienestar de la sociedad”. Peter Frank es reconocido por identificar a la
miseria del pueblo como la madre de las enfermedades (Sigeris, 2006).
A comienzos del siglo XIX, en Francia otro pionero que reconoció la enfermedad como
producto de las condiciones sociales fue Louis René Villermé, de profesión médico, en 1822,
realizó una crítica a una topografía médica de París, realizada por Lachaise denominada La
mortalidad está en relación directa a la estrechez de la calle, la elevación casa y
amontonamiento de los hogares pues identificó que la topografía encubría las condiciones de
miseria de la población, proponiendo que la condición social es un componente de la enfermedad.
Para 1829, Villermé participó en la fundación de Annales d’Hygiène Publique et de Médecine
Légale (Julia y Valleron, 2011). En este contexto de afinidad por los aspectos sociales y la salud
en 1847 en Alemania, Rodolf Vichow recomendó condiciones de prosperidad, educación y
libertad para los trabajadores, lo anterior como resultado de una epidemia acontecida en el distrito
industrial de Silesia, (Terris, 1999 en Lip y Rocabado, 2005).
34
Hacia la mitad del siglo XIX, los avances en el campo de la medicina social presentaron
una desaceleración debido a los novedosos descubrimientos de Pasteur y Kotch, que incentivaron
el estudio de las enfermedades infecciosas, aspecto que devino en el enfoque causal que dio un
giro hegemónico al estudio de la salud (Lip y Rocabado, 2005). Situación por la cual fue hasta el
siglo XX, cuando la medicina social se retomaría, específicamente hasta 1970. En tanto, durante
las primeras décadas del siglo XX la apuesta por el conocimiento científico (positivista), la crisis
económica, las dos Guerras Mundiales, la propuesta de un Estado basado en el bienestar
encabezado por los EE. UU.; y más tarde, la conformación de un bloque comunista y capitalista
tuvo un impacto en la propuesta de la Organización Mundial de la Salud, como resultado durante
las décadas posteriores no se ahondó en el carácter social de la salud (Souto, 2015).
En este contexto, Souto refiere que, para la década de 1950 y ’60 se independizan algunas
colonias de África, las cuales mantuvieron como legado en el sector salud, instituciones que
proporcionaron servicio únicamente en áreas urbanas con un mercado destinado a las élites. Por
otra parte, a nivel internacional los programas en salud pública se focalizaron en la erradicación
de enfermedades como la viruela, la malaria y la tuberculosis. Para 1970 y ’80 se retomó el
estudio de la condición genética, biológica y social en EE. UU. a través de una evaluación de los
resultados de los programas de salud pública para la reducción de la enfermedad cardiovascular.
Los resultados, se inclinaron en reducir los factores de riesgo relacionados, en tanto que, la crítica
apuntó al abordaje social (Souto, 2015).
Para 1974, el Informe Lalonde elaborado por el Ministerio Nacional de Salud y Bienestar
de Canadá, cuyo objetivo fue implementar una política de atención sanitaria concentrada en
cuatro determinantes de la salud: la biología, los servicios de salud, el medio ambiente y los
estilos de vida. Para 1980, en Reino Unido el Black Report realizado por el secretario de Estado
de Servicios Sociales de Reino Unido recopiló información de las desigualdades en salud y las
clases sociales. El reporte no tuvo trascendencia en la implementación de política pública,
durante la administración de Margaret Tacher, no así en el ámbito científico, donde el reporte
contó con trascendencia (Souto, 2015).
En 1976, Halfadan Mahler, Director General de la OMS, refirió “salud para todos en el
año 2000” que implicaba la “eliminación de obstáculos a la salud, que es lo mismo que decir, la
eliminación de la malnutrición, la ignorancia, el beber agua contaminada y malas condiciones de
35
vivienda, mucho más allá que resolver problemas estrictamente médicos.” (Mahler, 1976 en
Souto). Posteriormente 1978, se celebró en Alma-Ata la Conferencia Internacional en la Atención
Primaria de Salud (APS), con la estrategia de satisfacer las necesidades básicas. No obstante,
pronto surgió el Modelo de Atención Primaria de Salud Selectiva (APSS) como medida
financiera que favorecía a las economías en desarrollo y al mismo tiempo las restringía de un
sistema de atención global. El nuevo modelo se centraba en cuatro líneas de fácil monitorización
y evaluación, estas fueron: a) el monitoreo del crecimiento de la población (con medidas de
planificación familiar), b) tratamiento de rehidratación oral, c) lactancia materna y d) la
inmunización (Souto, 2015).
Figura 1.11 Difusión del concepto de Determinantes Sociales de la Salud.
Fuente: elaborado con base en Souto, 2015.
Hacia la década de 1980, se presentó la liberalización de los mercados, con la finalidad de
generar un crecimiento económico a través de los actores del mercado. De la adopción de
medidas apoyadas en limitar el gasto público y mantener una eficiencia de los fondos destinados
al sector público, fue el caso del sistema de salud. Previo al siglo XXI, en 1966 Tarlov acuña el
36
término Determinantes Sociales de la Salud, que posteriormente diversos investigadores
adoptaron para dar respuesta a las preguntas “¿Cómo se trasladan las condiciones sociales en las
experiencias individuales de salud?, ¿Puede la desigualdad económica y social comprometer el
estatus de salud de todos los miembros de una sociedad?, ¿Cuáles son los caminos de [la]
causalidad?” (Souto, 2012:34). La respuesta a dichas interrogantes refiere Souto no es simple,
pues traspasan los límites de la comprensión unicausal y multicausal, que evidentemente
resultaron útiles en la construcción de la comprensión del proceso salud-enfermedad. Los
requerimientos exigen comprender de manera integral la complejidad de diversos ámbitos en la
salud.
Entre 1995 y 1998 la OMS impulsó la “equidad y salud: aspectos claves” con medidas
destinadas a conseguir el buen estado de salud a partir de determinantes clave, entre ellos, la
educación y el nivel de ingreso. Con el ánimo de revitalizar el objetivo de carácter intersectorial
en salud pública en 1997, en Halifax, Nueva Escocia, Canadá, se otorgó el reconocimiento a los
determinantes sociales y medio ambientales de la salud, especialmente en los países en desarrollo
(Souto, 2015).
Desde América Latina también se han realizado aportes en la construcción de los
Determinantes Sociales de la Salud (Figura 1.11), de esta manera, desde la década de 1970 el
concepto ha estado presente en la agenda de trabajo de la Asociación Latinoamericana de
Medicina Social (ALAMES), con la integración de categorías como: sistema económico, trabajo
y clase social, categorías apartadas de la epidemiología durante el siglo XX, producto del modelo
funcionalista que incorporó la triada ecológica de Leavell y Clarck y la multicausalidad de
MacMahon (Breilh, 2011). Aspecto por lo cual las investigaciones en epidemiología
permanecieron situadas entre demandas y valores opuestos “…transformada, subordinada,
transfigurada y algunas veces irreconocible de las reacciones de poder de una sociedad”
(Bordieu, 1989: 15 en Breilh, 2011: 46). Considerando que son las relaciones de poder las que
permiten explicar los disensos científicos en los paradigmas investigativos.
Los Determinantes Sociales de la Salud son un terreno de oposición, donde “se pugna por
definir el campo de la salud colectiva; su contenido y su práctica. Para contrastar las perspectivas
divergentes sobre la determinación social de la salud…” (Breilh, 2011:46). Razón por la cual
Breilh refiere que, enfocarse únicamente a los factores determinantes de la salud, refleja una
37
distorsión de la realidad; de una realidad de conexiones constantes, una reducción científica
auspiciada bajo el principio de causalidad. Las implicaciones sociales de esta cuestión teórica
presentan “…implicaciones prácticas de repetir el modus operandi del causalismo: actuar sobre
los factores y no sobre el cambio de procesos estructurales, invisibilizando las relaciones de
dominación subyacentes” (Breilh, 2011:51-52).
De este modo, en el contexto económico neoliberal se configuró una epidemiología
especial, la del riesgo. Epidemiología focalizada en fragmentos de la realidad, de interpretaciones
probabilísticas unificadas bajo “factores de riesgo” para una focalización en elementos
manejables cuantitativamente según niveles de exposición (Ayres, 1997 en Breilh, 2011). En el
proceso de aislar de los factores que originan la enfermedad, estos se desprenden de su dimensión
histórica (López, Escudero y Carmona, 2008) y geográfica limitando la comprensión de la
configuración social y su estado de salud.
La propuesta de la ALAMES respecto a los Determinantes Sociales de la Salud es
profundizar en los determinantes estructurales, no únicamente en la distribución de los bienes y
servicios básicos e integrar una reflexión sobre el sistema económico, donde imperan procesos
que afectan al planeta y al estado de salud de la población ocasionados por guerras, genocidios,
manipulación de transnacionales farmacéuticas y agroalimentarias como causa de sufrimiento y
de mortalidad (López, Escudero y Carmona, 2008).
1.2.3. Modelos explicativos en los Determinantes Sociales en Salud.
Para identificar cómo el conjunto de los determinantes sociales actúa sobre la salud, se
han construido modelos teóricos que esquematizan las relaciones entre el individuo y su ambiente
físico y social. Los modelos, parten de la interacción de elementos a los que se les otorga una
ponderación específica en el impacto a la salud. De esta manera, a finales del siglo XX, el primer
modelo propuesto en el ámbito de los Determinantes Sociales en Salud es desarrollado por
Dahlgren y Whitehead en el año 1992. Este modelo explica la interacción entre el individuo, la
comunidad y las políticas a nivel nacional. El modelo está organizado en capas y en el centro se
sitúa el individuo; con sus características genéticas, sexo y edad (Figura 1.10.).
38
Figura 1.12. Diagramas de los modelos explicativos de los Determinantes sociales de la salud.
Fuente: elaborado con base a Souto, 2015.
39
En el siguiente anillo se ubican los hábitos del individuo. El tercer anillo considera a la
comunidad, con implicaciones en el comportamiento del nivel inferior; el siguiente nivel
comprende las condiciones de vivienda, trabajo y servicios. Finalmente, el modelo engloba las
condiciones culturales, económicas y ambientales que influyen a todo el sistema, al tiempo que se
retroalimenta a los niveles inferiores.
En 2001, Diderichsen, Evans y Whitehead, proponen el modelo de “estratificación y
construcción social de la enfermedad”. Este modelo reconoce “cuatro mecanismos principales
que juegan un papel importante a la hora de generar desigualdades en salud: la estratificación
social, la exposición diferencial, la vulnerabilidad diferencial y las consecuencias diferenciales”
(Diderichsen, Evans y Whitehead, 2001:14 en Souto, 2012:43). Diderichsen, Evans y Whitehead,
concluyen que la estratificación social genera una desigual exposición y vulnerabilidad que afecta
a la salud. La exposición a riesgos puede ser de carácter biológico y social en tanto que, la
vulnerabilidad únicamente estará influenciada por las condiciones sociales, mediante las cuales
un individuo es capaz de hacer frente a la exposición de determinado riesgo.
Otra propuesta corresponde al modelo de “selección y causalidad” de Mackenbach, Van
de Mheen y Stronks, expuesto en 1994, que revela la relación de la posición socioeconómica en
la infancia y los problemas de salud en la edad adulta. En este sentido, la causalidad tiene como
punto de partida la posición social que establece el estilo de vida, el entorno y los factores
psicosociales. En 1998, en Reino Unido se propuso el modelo de “múltiples influencias a lo largo
de la vida”. La exposición diferencial relaciona el aspecto social con la enfermedad. Los
principales tipos de la exposición son: aquellos relacionados con los bienes materiales
(condiciones de vivienda); de tipo psicológico (entorno social y estrés); y los relacionados con los
hábitos de vida. Es necesario reconocer que este modelo identifica la carga genética y los factores
culturales con un peso en la salud durante la primera infancia.
Los modelos propuestos referidos recibieron diversas críticas en su construcción,
fundamentalmente aquellos donde se identifica un determinismo social y no consideran la
posibilidad de reversión en la posición socioeconómica. Por ello, en 2007, la OMS elaboró una
propuesta a través de la Comisión sobre Determinantes Sociales de Salud, que retoma elementos
de los modelos anteriores e integra el contexto social y político (Figura 1.10). Además,
categorizan los determinantes sociales de la salud en estructurales e intermedios (Souto, 2015).
40
1.3
Justicia social. Consideraciones en el ámbito de la salud.
La Comisión de los Determinantes Sociales en Salud (CDSS), considera que la desigualdad
social explica las diferencias de la expectativa de vida en distintos espacios. Como medida para la
reducción de la desigualdad la Comisión propone la aplicación de un marco de justicia social para
la corrección de las diferencias susceptibles a solución, al interior de cada país y entre países. La
reducción de las desigualdades implica un imperativo ético, dado que la injusticia social conduce
a la mortalidad de un gran número de personas. (OMS, 2015).
La equitativa distribución espacial de los bienes conduce a prácticas que contribuyen a la
reducción de la desigualdad social, favorecen en el individuo el ser y el hacer, una vez que se
satisfacen los aspectos esenciales para el funcionamiento del ser humano; para alcanzar este
estado óptimo la condición de salud contribuye significativamente. La Geografía de la Salud
emplea el conocimiento, método y técnicas de la Geografía para la mitigación de las
enfermedades. Por ello, la Geografía de la Salud se incorpora en la llamada Geografía de
bienestar, aproximación que David M. Smith considera debe impregnar a toda la Geografía
Humana (Verhasselt, 1993 en Jori, 2003).
Desde la perspectiva de la Comisión de los Determinantes Sociales de la Salud los
principios que rigen son los siguientes:
i.Mejorar las condiciones de vida, es decir, las circunstancias en las que las personas nacen
crecen, viven, trabajan y envejecen.
ii.Luchar contra la distribución desigual del poder, el dinero y los recursos -es decir, los
factores estructurales de los que dependen las condiciones de vida- en el plano mundial,
nacional y local.
iii.Definir la magnitud del problema, evaluar las intervenciones, ampliar la base de
conocimientos, dotarse de personal capacitado en materia de determinantes sociales de la
salud y sensibilizar a la opinión pública acerca de los determinantes sociales de la salud
(OMS, 2015: 26).
Para alcanzar una equitativa distribución espacial de bienes para el bienestar, se revisa la
teoría de la justicia y de la justicia social como medio de asignación.
1.3.1 Teoría de la Justicia y la Justicia Social.
La noción de justicia usualmente está asociada a un aspecto legal, a la condición de inocencia o
de culpa, tomando como referencia la ley. Sin embargo, la justicia tiene un enfoque mayor al
antes mencionado y en el ámbito social expande sus límites más allá de la ley para examinar los
41
principios de equidad, democracia, derechos y responsabilidades al formar parte de la sociedad.
Abordar la justicia y específicamente la justicia social supone un ejercicio normativo, de lo que
debería ser, y por aquello que vale la pena luchar. Profundizar el estudio de la justicia social con
una visión normativa, científica y crítica conduce a entablar debates sobre la condición de la
democracia y de los derechos humanos (Soja, 2010).
El concepto de justicia tiene como precedente remoto el planteamiento del filósofo Platón,
que su obra la República lo define como: “ayudar a los amigos y dañar a los enemigos”
Posteriormente, replantea la idea de justicia y lo vincula con el Estado el cual debe basarse en
cuatro virtudes, las llamadas cardinales de la filosofía moral clásica, estas son: la prudencia, la
fortaleza, la templanza y la justicia. Aristóteles toma como referencia a Platón y plantea el
concepto de justicia y en específico la justicia distributiva en la Ética Nicomaquéa como “dar a
cada uno lo que le corresponde; en proporción a su contribución a la sociedad, sus necesidades y
sus méritos personales"
Los objetivos de la economía y la justicia social presentan puntos de inflexión debido a
que, en la economía capitalista, el mercado funciona a través de la escasez, la cual se produce y
organiza a fin de mantener el funcionamiento del mercado mediante el sistema de precios. Para
lograr lo anterior se controlan los medios, el sistema y la distribución de la producción, al
mantener un régimen de esta naturaleza se conduce a la preservación de la privación, la
apropiación y la explotación. Espacialmente, esta dinámica tiene su traducción en territorios
explotadores y otros explotados (Harvey, 1977).
Algunos campos basados en la escasez son: el laboral, el inmobiliario, la industria
alimenticia; en un contexto, existen demasiadas cosas por hacerse, vastas extensiones de territorio
vacías y el pago a productores de alimentos para que reduzcan la cantidad de producción. La
escasez es producida y controlada. La justicia social no debe dejarse en manos del mercado,
debido a que éste se encuentra en la oposición al compromiso social de la población (Harvey,
1977).
Adam Smith, en su obra Sobre la naturaleza y causa de la riqueza de las naciones,
expone que, entre las principales características del ser humano está el egoísmo y, por tanto, el
desinterés del hombre al bien común o en su caso la subordinación de éste al interés individual.
Para Smith, la mejor vía para alcanzar el bien común es facilitando que los individuos busquen su
42
propio beneficio, misma que no se alcanzaría con la injerencia del Estado, sino por el mercado,
esta es la propuesta de la economía clásica. Para el siglo XX, con la Economía del Bienestar se
expuso que, si bien el mercado resulta un mecanismo de asignación, también la distribución
heterogénea del ingreso requiere la intervención del Estado. Con ello, se sacrifica eficiencia en el
mercado en pro de la distribución de recursos para el bienestar social. (Lomelí, 2008).
En el ámbito del título de este subcapítulo, una aproximación de la justicia social se
encuentra en la obra de John Rawls La Teoría de la Justicia, en ella, se recupera la idea del
contrato social, tradición donde el poder del Estado recae en la voluntad de las personas y no en
la voluntad divina o de una ley natural. También, apuesta por vincular dos ideas incompatibles en
filosofía política: la libertad y la igualdad. La oposición de estas surge debido a que, desde el
liberalismo, la libertad tiene implicaciones en lo individual y en lo económico. En contraste, la
igualdad como derivación del socialismo restringe las libertades individuales (Dieterlen, 2015).
Amartya Sen, realiza observaciones a las aportaciones de John Rawls, con los conceptos
de libertad e igualdad. Para Sen, la libertad, comprende libertad de oportunidades y procesos, la
primera consiste no sólo en el acceso a una gama de alternativas también de oportunidades
ofrecidas. La libertad en los procesos incluye la autonomía de las elecciones de los individuos y
la inmunidad de la interferencia de los demás (Sen, 1997 en Dieterlen, 2015). El mercado no
presenta dificultades en reconocer la libertad de procesos, pero si, en la de oportunidades. Sobre
la cuestión de la igualdad, ésta debe estar enfocada en desarrollar capacidades y funcionamientos,
las capacidades son “la libertad que cada ser tiene para elegir entre diferentes formas de vida” y
los funcionamientos “los elementos constitutivos de una vida. Un funcionamiento es un logro de
una persona, lo que puede hacer y ser” (Dieterlen, 2015).
Los bienes primarios han sido considerados por Amartya Sen como medios sujetos a un
criterio de distribución. Desde esta perspectiva, surgen dos cuestiones en apariencia conflictivas.
La primera, es la construcción de un escenario con una población homogénea, pues las personas
receptoras de los bienes tienen necesidades distintas; las variaciones tienen origen en su
condición biológica, psicológica y en su localización geográfica. Poseer los bienes no es
indicativo de convertirlos en capacidades reales, para ello, el sujeto requiere de la reflexión que lo
conduce al ser, este sentido conduce a la segunda cuestión, los bienes primarios únicamente
43
presentan un carácter instrumental, considerarlos un fin representaría tratarlos como un fetiche
(Dieterlen, 2015).
Por otra parte, han de considerarse también las necesidades básicas que implican algo
realmente necesario para una persona y no una fuente de deseo adquisitivo. Una necesidad
implica, por ejemplo, un consumo mínimo de calorías necesarias para asegurar la supervivencia
del cuerpo. Las necesidades humanas son físicas, mentales y psicológicas.
Cuadro 1.3. Consideraciones de Nussbaum sobre las necesidades.
Necesidades
Supervivencia
Tener buena salud
Estar suficientemente alimentado
Seguridad ante
el medio
Tener alojamiento y libertad de movimiento
Pertenencia y
amor
Relaciones con personas y cosas fuera de
nosotros mismos
Amar a quienes nos aman y se preocupan por
nosotros. Sentir penas por su ausencia
Vivir con y para otros seres humanos
Comprometerse en varias formas de
interacción familiar y social
Vivir preocupado por animales, plantas y el
mundo de la naturaleza
Tener experiencias placenteras
Reconocimiento
Capacidades
Poder vivir hasta el final de una vida humana
completa
Evitar el dolor innecesario y perjudicial
Usar los cinco sentidos, imaginar, pensar y
razonar
Formarse una concepción del bien y
comprometerse a una reflexión crítica acerca
de la planificación de la propia vida
Imaginar pensar y razonar
Reír, jugar, disfrutar de actividades recreativas
Vivir la propia vida y la de nadie más en el
Autorrealización
propio entorno y contexto
Fuente: elaborado con base a Gough, 2007.
Una forma de categorizar las necesidades humanas es a través de la disposición jerárquica
de Maslow, en esta jerarquía en el nivel inferior se encuentran las necesidades de supervivencia
que implican la lucha por el mantenimiento de la vida para la obtención de comida vestido
abrigo, son las necesidades más primitivas. En un segundo escalón, se encuentra la necesidad de
seguridad, que implica la seguridad ante el medio ambiente y la protección contra el peligro
físico o la catástrofe. En un tercer nivel, están las necesidades de pertenencia y de amor
caracterizadas por la necesidad de afecto, de relaciones interpersonales satisfactorias, de
conformidad a las normas del grupo.
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En un cuarto lugar están las de necesidad de estima o de reconocimiento, de prestigio, de
posición social y finalmente están las de autorrealización definidas por el deseo de satisfacerse,
asimismo, de ser todo lo que uno es capaz de ser. (Smith, D., 1980). Con base en lo anterior, se
presenta el Cuadro 1.3 que expone las necesidades consideradas y las capacidades vinculadas,
mostrando las capacidades que se derivan de la satisfacción de las necesidades y que en su
conjunto favorecen un estado satisfactorio en la vida humana.
a) Aspectos esenciales en la Justicia distributiva.
“Para lograr una distribución justa” título del apartado de Justicia social y sistemas espaciales de
David Harvey (1977), en primer lugar, que se debe tener en cuenta la estructura básica del
sistema político y económico. El pensamiento liberal apunta a la democracia constitucional como
la medida más eficaz para la distribución, en tanto, desde la postura de Karl Marx en un sistema
socialmente justo, los problemas de la distribución se solucionarían por la dinámica interna del
sistema. Desde el ámbito geográfico se debe resolver el cómo una organización espacial
maximiza las posibilidades de aquellas regiones menos afortunadas con un medio socialmente
justo para asignar los recursos (Harvey, 1977), actuado conforme al principio de la diferencia,
donde el mayor beneficio sea para los menos favorecidos de la sociedad (Rawls, 2015). Hasta el
momento, las implicaciones de la teoría de la localización han interferido en la incorporación de
la justicia social al marco metodológico de análisis geográfico, se ha buscado la maximización y
eficiencia, dejando de lado la igualdad equitativa de oportunidades para el bienestar en la
población.
Al abordar la justicia distributiva las preguntas introductorias son ¿qué se está
distribuyendo? usualmente la respuesta apunta a beneficios de la cooperación social. Los
beneficios por distribuir son diversos y considerados recursos escasos en la sociedad (Titmuss,
1962 en Harvey, 1977). Por otra parte, importa ¿entre quiénes se distribuye? la unidad mínima a
considerar es el individuo, y en el ámbito geográfico se considera el territorio o la región. Al
respecto, se debe advertir sobre la falacia ecológica para alcanzar la justicia social, debido a que
en diferentes escalas la distribución no puede ser igualmente justa entre los individuos. Sobre la
cuestión anterior, Amartya Sen añade la importancia de no homogeneizar los individuos, puesto
que cada uno en función de su edad, estado salud, condiciones climáticas, localización, situación
45
laboral y temperamento tiene requerimientos diferentes. La justicia social debe valorar la
diversidad de las personas y de su entorno.
Debe añadirse también, ¿quién o quiénes tienen la obligación de proporcionar los bienes?,
la distribución de los bienes sociales se realiza a partir de las instituciones de acuerdo con las
bases y lineamientos establecidas en los programas de cada política pública. Dichos lineamientos
son elaborados por alguien o un grupo de expertos en la materia. En este sentido, tomando como
referencia a Aristóteles quien tiene la función para establecer dichos criterios ejerce el cargo de
juez o “mediador” dado que busca el punto medio entre las partes desiguales. (Aristóteles, 2016).
Para complementar, es esencial conocer ¿cuáles son los criterios a través de los que se asignan los
recursos? usualmente la respuesta se enuncia como: de acuerdo con… y según sus…, para adoptar
un criterio según las circunstancias (Dieterlen, 2015).
Otro aspecto que facilita la comprensión de la justicia social en el ámbito de la salud es
¿qué obligaciones sociales tienen unos con otros para promover y proteger la salud de toda la
población? La respuesta tiene un alcance amplio y está encaminada a la actividad que cada
individuo realiza y cuyo impacto afecta la salud del otro, como la contaminación, malas
condiciones de trabajo, medidas, reglamentos y políticas en salud que nos debemos los unos a los
otros. Para Norman Daniels “…la salud es un bien natural, pero su distribución está socialmente
determinada.” (Daniels en Dieterlen, 2015).
b) La justicia social en el ámbito de la salud.
En este rubro el filósofo político Norman Daniels es un referente en cuanto al tema de justicia
social en salud, este autor analiza la justicia social desde las necesidades. Por ello, trata de
responder tres cuestiones fundamentales: ¿la salud tiene una importancia moral mayor que
cualquier otro bien?, ¿cuándo son injustas las desigualdades en salud?, ¿cómo satisfacer las
necesidades en salud si los recursos son limitados? Para la primera interrogante N. Daniels,
refiere que, con el cuidado de la salud se promueve el funcionamiento normal del individuo, al
tiempo que se contribuye a la protección de las oportunidades, al comprometerse estas, se puede
afirmar que la teoría de la justicia concede especial importancia al cuidado de la salud (Dieterlen,
2013).
46
Para el segundo caso, se considera que desde hace al menos 150 años, la situación de
posición en clase social, etnia, raza o género han determinado el acceso a la salud y definido las
oportunidades de vida o muerte. La respuesta intuitiva que Dieterlen (2013) considera que
Daniels da a esta segunda cuestión está relacionada con La Teoría de la Justicia donde Rawls
propone que con el contrato social se garantiza la equidad, asegurando la igualdad de
oportunidades y limitando la desigualdad. En esta simplificación se asume que quienes celebran
el contrato son plenamente funcionales. Para Rawls no es racional que aquellos que participan
promuevan la igualdad, cuando esto implique que sus condiciones de vida disminuyan. Por ello,
promoverán el principio de la diferencia, “que permite desigualdades siempre y cuando
favorezcan a los que están en peores condiciones (Dieterlen, 2013:91). De esta manera a través de
la equitativa igualdad de oportunidades se identifica que desigualdades en salud son injustas y
evitables y que las desigualdades son justas sólo cuando establezcan los principios de justicia
como equidad (Dieterlen, 2013).
Para la tercera pregunta, reconociendo que la salud tiene una importancia especial por la
gama de posibilidades a las cuales se puede acceder, de haber un proceso de distribución de
recursos escasos se generan individuos y espacios ganadores y perdedores. Una de las opciones
es el mercado, sin embargo, por este medio desde una valoración moral no es posible equiparar el
valor de una vida plena con el dinero, al asignarles un costo. Un segundo mecanismo en la
decisión de recursos escasos en salud es la “regla de la mayoría” como método democrático en la
solución de conflictos, donde se cuentan los intereses de todos por votación y el resultado es una
agregación de las preferencias de los votantes, sin embargo, existe la posibilidad de que la
decisión adoptada sea incorrecta. Por último, se consideran las medidas cuantitativas de años de
vida ajustados por salud. En todas las opciones de redistribución Daniels encuentra dificultades y
propone el método de “la responsabilidad para la razonabilidad” donde personas con amplio
criterio deciden a quien dar cuidados en salud al tener recursos limitados (Dieterlen, 2015).
Por otra parte, en el marco normativo, la necesidad básica de la salud y se encuentra
estipulada en la Declaración Universal de Derechos Humanos, así como para el caso de México
en la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos (Ver cuadro 1.4.). Los derechos humanos
universales pueden entenderse vinculados a una posición y esta se encuentra vinculada a la virtud
de ser un ser humano, con esta noción, es que se tiene un corolario de derechos por el sólo hecho
de la dignidad de la naturaleza humana (Searle, 2014).
47
Pero las obligaciones son la contrapartida a los derechos. Tomando en cuenta la
correlación que sólo pueden denominarse derechos a aquellos que generan obligaciones, sobre
esta cuestión hay un espectro de posiciones, entre ellas: i) que los derechos a las libertades son
universales, mientras estas no dañen a terceros; ii) aquellos que proponen incluir necesidades
básicas a un esquema de derechos de bienestar como la salud y que posibilita el desarrollo de la
autonomía personal; y finalmente, iii) un grupo que identifican dificultades en proporcionar los
derechos de bienestar y las obligaciones conducentes (Dieterlen, 2013).
Cuadro 1.4. Consideraciones de salud en la Declaración Universal de Derechos Humanos y
en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Derechos humanos
Artículo 1 Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de
razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
Artículo 3 Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.
Artículo 22 Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social, y a obtener,
mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la organización y los recursos
de cada Estado, la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables a su dignidad
y al libre desarrollo de su personalidad.
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos
Artículo 1o. En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos
reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así
como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos
y bajo las condiciones que esta Constitución establece. Las normas relativas a los derechos humanos se
interpretarán de conformidad con esta Constitución y con los tratados internacionales de la materia
favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia.
Artículo 4o.- La mujer y el hombre son iguales ante la ley. Ésta protegerá la organización y el desarrollo de la
familia. […]
-Toda persona tiene derecho a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad. El Estado lo garantizará.
-Toda persona tiene derecho a la protección de la salud. La Ley definirá las bases y modalidades para el acceso
a los servicios de salud y establecerá la concurrencia de la Federación y las entidades federativas en materia de
salubridad general, conforme a lo que dispone la fracción XVI del artículo 73 de esta Constitución.
-Toda persona tiene derecho a un medio ambiente sano para su desarrollo y bienestar. El Estado garantizará el
respeto a este derecho. El daño y deterioro ambiental generará responsabilidad para quien lo provoque en
términos de lo dispuesto por la ley.
-Toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico
en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible. El Estado garantizará este derecho y la ley definirá las
bases, apoyos y modalidades para el acceso y uso equitativo y sustentable de los recursos hídricos,
estableciendo la participación de la Federación, las entidades federativas y los municipios, así como la
participación de la ciudadanía para la consecución de dichos fines.
-Toda familia tiene derecho a disfrutar de vivienda digna y decorosa. La Ley establecerá los instrumentos y
apoyos necesarios a fin de alcanzar tal objetivo.
Fuente: UN, 2020 y Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 2019.
48
De acuerdo con el filósofo Joel Feinberg, derecho es “algo que puede ser demandado y
exigido contra otras personas o contra el Estado” (Dieterlen, 2013: 93). Para Feinberg, las
necesidades básicas merecen atención, pero no tratadas como derechos que imponen deberes.
Para Griffin, las necesidades básicas pueden ser fuente de obligaciones al satisfacer bienes
indispensables; cuanto más fácilmente se satisface una necesidad se le proporciona poca
importancia y fácilmente desaparece, en tanto que, de percibirse la ausencia de satisfacción,
debería promoverse la contraparte, con la obligación de satisfacerla (Dieterlen, 2013).
1.3.2. Justicia espacial en salud.
Para alcanzar una distribución justa pueden abordarse diversos criterios, de los cuales J. Rawls
(1969, 1971 en Harvey, 1977) identifica al menos ocho, entre ellos: a) todos los individuos tienen
igual derecho sobre los beneficios; b) establecer una relación de la oferta y la demanda; c) la
necesidad, que tiende a una distribución desigual; d) los derechos heredados; e) el mérito, basado
en el grado de dificultad del trabajo para contribuir a la producción; f) la contribución al bien
común, desarrollada por aquellos individuos que realizan actividades que benefician a una gran
cantidad de gente; g) la contribución productiva real, que incluye a los individuos con alta
producción; y h) por esfuerzos y sacrificios mayores a su capacidad innata.
Harvey, siguiendo la opinión de Runciman (1966 en Harvey, 1977) adopta sólo tres
criterios esenciales para la justicia social. En el ámbito de una justicia social de carácter territorial
sitúa como criterio más importante la necesidad, posteriormente ubica a la contribución al bien
común y en tercer lugar al mérito, no obstante, la prioridad de estos se adecua según el bien por
distribuir y el contexto, los criterios deben variar.
Sobre la necesidad. Para Harvey “La necesidad es un concepto relativo. Las necesidades
no son constantes, ya que son categorías de la conciencia humana y al cambiar de sociedad se
transforma la conciencia de la necesidad.” (Harvey, 1977:103). La satisfacción de la necesidad es
variable en su dimensión espacial y temporal, en cambio el origen de estas se mantiene constante
con las enlistadas a continuación: comida, vivienda, salud, educación, transporte, bienes de
consumo, diversión y servicios sociales y ambientales (Harvey, 1977).
Con el objetivo de obtener las medidas que satisfagan las necesidades de la población, la
distribución basada en el criterio de la necesidad, se presentan al menos cuatro posicionamientos
49
desde la demanda, los cuales se han establecido aun cuando la población carece del
reconocimiento de la ausencia de la necesidad. (Harvey, 1977). Uno de los posicionamientos se
basa en la “demanda del mercado” este tipo de indicador puede conducir a estimar la necesidad
de manera socialmente injusta. Debido a que aun cuando los servicios están funcionando al
máximo de su capacidad siempre se encontrará un grupo sin la satisfacción de su necesidad.
Se cuenta también con la “demanda latente, la cual es calculada a partir de reconocer la
escasez y la escasez relativa, ésta última se determina cuando un grupo social toma como
referencia a otro grupo y con base a este mide sus aspiraciones. De esta manera la demanda
latente se constituye porque: 1) los individuos no cuentan con el servicio; 2) ven que otra gente lo
recibe; 3) lo quieren; 4) consideran factible recibirlo. El defecto de esta consideración se
encuentra cuando grupos desprovistos de servicios, cuentan con un nivel bajo de necesidad
sentida.
En otro rubro se encuentra el posicionamiento de la “demanda potencial” que, en un
análisis de las condiciones en el ámbito de la salud, ésta depende de la cantidad de habitantes y de
sus características como edad, trabajo, migración, aspectos sociológicos y culturales. Pueden
también estar asociadas con las características locales del medio ambiente. El conocimiento de
ambos contextos y de sus complejas interrelaciones facilita identificar las necesidades del
territorio. Este medio requiere de formas y de niveles en respuesta a la demanda, situación que
usualmente conduce a la elaboración de modelos donde se tiene presente una cantidad definida de
recursos a distribuir.
En tanto que, para la “demanda estimada a través de la consulta a expertos” usualmente
determina las necesidades tomando en consideración los recursos disponibles. En este rubro
destacan aquellos que han vivido en campo las necesidades de la población, con la experiencia de
haber estado en contacto con los problemas y la capacidad de emitir un juicio como indicador de
las necesidades. La desventaja de este criterio consiste en que los expertos han sido seleccionados
partiendo de criterios socialmente injustos.
De las posibilidades anteriores, D. Harvey, en el contexto de la salud opta por el método
de la demanda latente siempre y cuando sean manifestadas de manera legítima las variaciones en
las necesidades, derivadas de una situación socialmente injusta, de la ignorancia o de la falsa
conciencia. La necesidad es un concepto fundamental para lograr un medio socialmente justo, por
50
ello, es fundamental establecer una definición y sistema de medición, para aplicar el sistema el
principio de justicia en la distribución geográfica.
Sobre la contribución al bien común. Al respecto se parte con la intención de conocer
cómo la asignación de recursos a un territorio afecta las condiciones de otro. Una técnica es a
través del análisis multiplicador interregional, los polos de crecimientos y los efectos de
propagación espacial (Rothenberg, 1967 en Harvey, 1977). En condiciones de desequilibrio las
acciones a ejecutar son mejorar las asignaciones de bienes en el territorio o reorganizar el sistema
espacial (Harvey, 1977).
Sobre el mérito. Trasladar este concepto al ámbito geográfico puede entenderse como el
grado de dificultad del medio físico para la actividad humana, con fenómenos como las sequías,
inundaciones, terremotos o por circunstancia sociales, delitos, revueltas, incendios. Existen
asentamientos que contribuyen al bien común localizados en las zonas de riesgo, entonces y sólo
entonces se justifica asignar recursos suplementarios para contrarrestar los efectos. Cuando no
existe necesidad de localizarse ahí y no se presenta una contribución, no hay elementos que
justifiquen la compensación. Sin embargo, también se presentan asentamientos que no presentan
una contribución al bien común y son las circunstancias del sistema las que los obligan a vivir
ahí.
Figura.1.13. Diagrama sobre la justicia social y el mérito en el ámbito espacial.
Fuente: elaborado con base en Harvey, 1979.
51
De esta manera el mérito se traslada al ámbito espacial con el objetivo de
contrarrestar las dificultades del medio a través de la asignación de recursos adicionales a los
individuos que requieren un sentido de protección en su actividad que contribuye al bien común
(Figura 1.13). Hasta el momento se han examinado los criterios para alcanzar una justicia
distributiva a fin de reducir las desigualdades sociales que inciden en el estado de salud. En el
presente capítulo también se incorpora pertinente una revisión de la justicia ambiental, a fin de
promover la revisión de elementos que aseguren la calidad de vida de la población para el
desarrollo efectivo de sus libertades.
Justicia ambiental.
Las argumentaciones de la justicia social se encaminan fundamentalmente en la redistribución de
los bienes socialmente reconocidos como necesarios, teniendo la consideración de que, sí existe
una desigualdad ésta debe actuar dotando de estos bienes a los menos favorecidos. En otro
ámbito, se encuentra la justicia ambiental, la cual contribuye al equilibrio de las condiciones
biológicas del humano, surgida del derecho a la salud y a un medio ambiente sano, a manera de
reivindicación social que busca la distribución de los impactos ambientales en el territorio
(Ramírez, et al, 2015).
Los orígenes de la justicia ambiental tienen su precedente próximo en Estados Unidos en
la década de 1980 por un movimiento de resistencia a la instalación de un vertedero de
policlorobifenilos en Warren, Carolina del Norte. La provincia habitada principalmente por
afroamericanos se movilizó de manera pacífica para que se respetara su derecho a la salud y a un
medio ambiente sano. Este suceso dio paso a otros movimientos en Los Ángeles, Nueva York y
Chicago, con la participación de población afroamericana e hispanas (Ramírez, et al, 2015).
Es así como se inicia la concreción del concepto de justicia ambiental, entendida como “la
reivindicación de derechos por actividades contaminantes, en virtud de que se había evidenciado
que en las comunidades de bajos ingresos existía un desproporcionado riesgo ambiental y en
salud” (Eckerd y Keeler 2012; Esnard, Gelobter y Morales, 2004; Grineski y Collins, 2008;
Mohai y Saha, 2006; Wu y Heberling, 2013; Zaferatos, 2006, en Ramírez, et al, 2015: 228).
Como resultado se tiene los postulados de la justicia ambiental plasmados en 17 principios de la
justicia ambiental emitidos en la Cumbre de Liderazgo Ambiental de la Gente de Color en 1991
(Ramírez, et al, 2015).
52
La justicia ambiental comprende aspectos sociales y medioambientales, desde la justicia
ambiental se reconoce la desigualdad espacial y social, en esta heterogeneidad son los grupos
menos favorecidos los que sufren la mayor carga de impactos ambientales. Autores como Towers
y Wenz, consideran a la justicia ambiental dentro de la justicia distributiva puesto que los
impactos ambientales deberían estar repartidos equitativamente, con la debida participación
social en torno a la repartición de estos y en la toma de decisiones. Debido a las circunstancias
que se presentan en las poblaciones afectadas por el deterioro ambiental y a fin de eliminar las
disparidades, se propone la participación de la población en la formulación de legislación,
reglamentos, normas políticas y lineamientos de manera que se ordenen las actividades que
actúan en detrimento de la salud. Otra propuesta, es la sustentabilidad, esta contempla la
explotación de los recursos de manera racional estipulando la afectación en el ambiente y en la
población (Millner, 2011, en Ramírez, et al, 2015).
53
Capítulo II.
CONTEXTO ESPACIO - TEMPORAL
DEL MUNICIPIO DE LOLOTLA, HIDALGO.
Me gusta ser hombre, ser persona, porque sé que mi paso por el mundo no es algo
predeterminado, prestablecido. Que mi "destino" no es un dato sino algo que necesita ser
hecho y de cuya responsabilidad no puedo escapar. Me gusta ser persona porque la
Historia en que me hago con los otros y de cuya hechura participo es un tiempo de
posibilidades y no de determinismo. eso explica que insista tanto en la problematización del
futuro y que rechace su inexorabilidad.
Me gusta ser persona, inacabado, sé que soy un ser condicionado, pero, consciente del
inacabamiento, se que puedo superarlo. Ésta es la diferencia profunda entre el ser
condicionado y el ser determinado. La diferencia entre el inacabado que no se sabe cómo
tal y el inacabado que histórica y socialmente logró la posibilidad de saberse inacabado.
Paulo Freire
Los DSS hacen referencia a las condiciones estructurales del espectro social, político y
económico con posibles efectos en la salud. En la Geografía de la salud, los efectos de los DSS se
identifican a través de agrupaciones o clusters que engloban la condición de salud o enfermedad
de una población dentro de los límites políticos administrativos. Por ello, en el presente capítulo
se aborda el contexto socioeconómico que contribuye de manera explicativa en la condición de
salud. Así mismo, se presentan los elementos de carácter físico-natural del municipio de Lolotla
que facilitan la comprensión de las actividades económicas y el acceso a servicios básicos.
La distribución de servicios está relacionada con la habilitación del espacio geográfico por
ello, a través de un recuento histórico del territorio se recopila información sobre los
asentamientos precolombinos, la dinámica social durante el Virreinato de la Nueva España, la
conformación municipal en el México independiente y los principales acontecimientos en el siglo
XX y XXI, que permiten entender la situación actual de Lolotla, y de su análisis para alcanzar los
objetivos de la justicia social y distributiva.
2.1
Medio físico
Localización geográfica.
El municipio de Lolotla es uno de los ochenta y cuatro municipios que conforma el estado de
Hidalgo, situado al Norte de la entidad (Figura 2.1) se localiza entre las coordenadas extremas
54
siguientes: al norte a los -98°44’27.3” de longitud y 21°11’33.6” de latitud; al este a los 98°37’33” de longitud y 20°54’21” de latitud; al sur a los -98°42’8” de longitud y 20°49’27.4” de
latitud y al oeste las coordenadas de -98°47’1.5” de longitud y 21°4’21” de latitud. La cabecera
municipal de Lolotla se ubica en los 20°50’32” de latitud y -98°43”00” longitud, a una altitud de
1,560 m.s.n.m. (INEGI, 2015). Lolotla cuenta con una superficie de 175.64 km2 colinda al norte
con el municipio de Tamazunchale perteneciente al estado de San Luis Potosí, al este con el
municipio de Tlanchinol, al sureste con el municipio de Canalí, al sur con el municipio de
Xochicoatlán, al suroeste con el municipio de Molango y al noroeste con el municipio de
Tepehuacán de Guerrero.
Figura 2.1. Localización geográfica del municipio de Lolotla, Hidalgo.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2015.
55
Geología.
Respecto de la geología, el municipio de Lolotla está localizado dentro de la formación anticlinal
Huayacocotla. La extensión de la Formación abarca los estados de Hidalgo, Puebla y Veracruz.
Las primeras investigaciones de la geología de
la región se realizaron en 1958, por Harold
von Kuegelgen, que identificó una unidad de
Figura 2.2. Esquema de la columna
estratigráfica generalizada en la región
Molango.
lechos rojos bajo la Formación Huayacocotla
y
la
denominó
Formación
Huizachal.
Posteriormente, en 1962, Jesús MartínezPérez expuso por primera vez la presencia de
sedimentos del Paleozoico de la Formación
Guacamaya y lechos rojos del Triásico como
capas inferiores a la Formación Huayacocotla
(Figura 2.2) (Ochoa-Camarillo, et al., 1998).
La Formación Huayacocotla en el Jurásico
inferior presenta tres miembros estratigráficos.
El
miembro
inferior,
consiste
en
conglomerados, el gran tamaño de los clastos
sugiere el transporte con una alta energía y de
un sitio de origen cercano al depósito;
adicionalmente, presenta arenisca roja, indicio
de un posible ambiente continental. El
miembro intermedio contiene fósiles de
amonites y bivalvos, condición que expresa
Fuente: Maynard et al, 1990: 19
un ambiente marino, próximo a la costa. Finalmente, el miembro superior se constituye de
arenisca, lutita y limolita con flora continental, sugiriendo un ambiente fluvial.
Del Jurásico medio, se identifican dos formaciones, la Cahuasas y la Tepéxic. La
Formación Cahuasas descansa en discordancia con la Formación Huayacocotla, observable en el
tramo carretero Ixtlahuaco-Calnali y cubierta concordantemente por la Formación Tepéxic. El
ambiente de la Formación Cahuasas probablemente se constituyó entre depósitos de abanicos
56
aluviales, semejanza presentada por Ochoa (1996) basándose en las observaciones de Michalzik
(1987), debido a que la Formación Cahuasas tiene una equivalencia litológica con la Formación
La Joya, ubicada en el anticlinorio Huizachal-Peregrina. La Formación Tepéxic se localiza entre
los poblados de Acayuca-Cuxhuacán, Acoxcatlán-Tepehuacán y Acuimantla. En la parte superior
la Formación presenta una forma concordante con la Formación Santiago y de igual forma en
contacto con la Formación Chipoco. El ambiente del depósito sugiere una plataforma cercana a la
costa, por la presencia de ostreidos y trigónidos (Figura 2.3.).
Figura 2.3. Características geológicas del municipio de Lolotla.
Fuente: elaborado con base a datos.gob (s/f).
57
Del Jurásico superior se encuentran las Formaciones Santiago, Chipoco y Pimienta. Estas
formaciones han sido aprovechadas debido a los recursos manganesíferos que contienen. La
Formación Santiago fue definida en el año 1971 por Cantú-Chapa y se constituye por limolita
negra y caliza negra. La parte superior cuenta con abundantes concreciones calcáreas, que
contienen amonites del género Reineckeia. La parte intermedia carece de fósiles y en la inferior
contiene amonites y ostreidos. La Formación en el área de Huiznopala descansa
concordantemente sobre el Gneis Huiznopala (Figura 2.3). La edad asignada es del CalovianoOxfordiano por los amonites estudiados por Cantú-Chapa en 1971.
Sobre la Formación Santiago descansa la Chipoco, la localidad tipo se localiza en
Tetzintla y al respecto Ochoa y Camarillo distinguieron cuatro unidades litológicas: la primera
constituida por caliza manganesífera; el segundo miembro se constituye por arenisca calcárea con
intercalaciones de lutita calcárea arenosa; el tercer miembro presenta limolita y lutita calcárea con
intercalaciones de caliza arcillosa; en el cuarto miembro se presenta una secuencia de caliza
interestratificada con lutita negra. La edad asignada a la Formación es del Kimerigdiano
temprano-Tinoniano temprano, el ambiente del depósito de la Formación presenta tres
propuestas: Aguayo-Camargo (1977) proponen un ambiente marino y somero de plataforma;
Maynard et al. (1990) un depósito de facies de talud; Ochoa-Camarillo concluyen en el depósito
de un ambiente de cuenca e interpretan la presencia de manganeso como un cambio brusco en las
características físicas y químicas de agua, asociando una posible comunicación de la fosa
Huayacocotla y el proto-Golfo de México. Finalmente, del Jurásico se tiene la Formación
Pimienta, definida desde 1926, por Arnold Heim como caliza con capas de pedernal negra. La
localidad tipo se sitúa a un kilómetro de la localidad La Pimienta. La formación descansa
directamente sobre el basamento en la localidad de Ixtlapatla. El ambiente de depósito es
pelágico y sobre ella descansa la Formación Tamaulipas del Cretácico Inferior.
Relieve e hidrología.
Las elevaciones del municipio corresponden al sistema montañoso de la Sierra Madre Oriental,
esta Sierra corre en una dirección noreste - sureste desde Texas hasta su contacto con la
Cordillera Neovolcánica en el Cofre de Perote, Veracruz (Sánchez, 1970). La elevación en el
municipio de Lolotla varía de norte a sur; con una altitud máxima a 1,941 msnm localizada al
sureste, en tanto que, la altitud mínima es de 137 msnm y se ubica en el cauce del río Claro al
58
norte. La altitud promedio es de 1,036.54 msnm con una desviación estándar de 519.11 msnm.
Entre las principales elevaciones que se sitúan al sur del municipio destacan: el Pilatlan con 1,777
msnm, el Texico con 1,745 msnm y el Carrizo con 1,646 msnm.; al norte del municipio las
elevaciones de referencia son: Tecamachal con 619 msnm, Los Otates con 490 msnm, y el
Nahualatl con 416 msnm (Figura 2.4).
Figura 2.4. Altimetría del municipio de Lolotla.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2015.
Asociado a las características altimétricas y climáticas del municipio, se presentan las
corrientes fluviales. El municipio de Lolotla se sitúa entre dos subcuencas hidrológicas, la
RH26Ds del río Amajac y la RH26Dx del río Hules, ambas pertenecen a la Región Hidrológica
del Pánuco. La mayor proporción territorial del municipio se encuentra en la subcuenca del
59
Amajac a esta pertenece el 71.05 por ciento del municipio, el 28.95 por ciento corresponde a la
subcuenca del Río Hules (Figura 2.5.). Los principales cuerpos fluviales perennes de la
subcuenca del Amajac son: el río Claro, que bordea el municipio al oeste y fija los límites
municipales con Tepehuacán de Guerrero y Tlanchinol. Al suroeste se encuentran los ríos Pilapa,
Agua Salada, Xogu y Xaltetla, todos tributarios del río Claro. Respecto a los ríos pertenecientes a
la subcuenca del río Hules, al sur del municipio fluye el río Huaxcatla, límite entre Lolotla y el
municipio de Xochicoatlán. Al sureste se presentan los ríos Chachala, Tetitla y Quetzalzongo y al
este del municipio fluye el arroyo Cuate (INEGI, 2015).
Figura 2.5. Características hidrográficas del municipio de Lolotla.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012.
60
El principal empleo de los recursos fluviales es el uso doméstico. Adicionalmente, se
cuenta con diversos manantiales que proveen de agua a las localidades. La carta topográfica de
2015 (INEGI, 2015) presenta la existencia de manantiales que en ciertas localidades superan la
unidad (INAFED; 2017). El sistema hídrico se encuentra contaminado por el arrastre de
sedimentos de la actividad minera, desde el suroeste del municipio, conducidos a través del río
Pilapa hasta el río Claro y de ahí son transportados por el curso del río hasta el norte del
municipio (Figura 2.5).
Clima
Situado en la ladera oeste de la Sierra Madre Oriental, el municipio de Lolotla está
influido por los vientos alisios, vientos con carga de humedad, con dirección noreste a suroeste,
que durante el verano ocasionan las lluvias. En tanto, por régimen de temperatura el municipio de
Lolotla presenta los subgrupos semicálidos y templados. Los grupos, subgrupos y tipos
climáticos se distribuyen de norte a sur de la manera siguiente: Al norte se distribuye un clima
semicálido húmedo con lluvias todo el año, al centro se distribuye un clima templado húmedo
con lluvias todo el año y finalmente el templado húmedo con abundantes lluvias en verano
(Figura 2.6).
Servicios ambientales
Dadas las condiciones físicas, en el municipio de Lolotla se distribuye el bosque mesófilo de
montaña (Figura 2.9). La vegetación está caracterizada por árboles de diversos estratos, helechos
y epífitas, estos bosques son el refugio de diversas especies animales dados los cambios
climáticos globales acontecidos durante los últimos miles de años (CONABIO, s/f). En 2006, se
realizó un estudio florístico (Ponce Vargas et al.), donde se identificó a 359 especies de las cuales
11 están clasificadas en alguna categoría de riesgo de la NOM-059-SEMARNAT-2010. También,
se cuenta con comunidades forestales de pino (Pinus sp.), pino-encino, encino-pino, encino
(Quercus sp.) y al norte del municipio la selva alta perennifolia.
Por su situación el territorio que comprende el municipio de Lolotla, presta un cúmulo de
servicios ecosistémicos entre los cuales se pueden enlistar: los servicios de provisión, a través de
bienes tangibles que la población obtiene, como: alimentos, agua, madera y plantas medicinales.
Se cuenta con servicios de regulación, los cuales son beneficios de los procesos de los
ecosistemas así se presentan los de la regulación del clima, la captura y almacén de carbono, la
61
absorción de contaminantes, la recarga de agua subterránea, que favorece la cantidad, calidad y
temporalidad de agua, la regulación de la erosión, la polinización, y el apoyo en el control de
plagas y enfermedades (SMA, 2017).
Figura 2.6. Características climáticas del municipio de Lolotla.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2015.
Se encuentran los servicios culturales, con beneficios estéticos y psicológicos de carácter
inmaterial que la población obtiene del contacto de los ecosistemas, tales como la herencia
cultural, la recreación y el ecoturismo, la belleza escénica, recursos investigativos geológicos, de
flora y fauna, los cuales brindan una sensación de bienestar (SMA, 2017). Otros servicios son los
de soporte, indispensables para el hábitat para los organismos, en el cual se incluyen los
62
humanos, la biodiversidad, formación y retención del suelo y la regulación de los ciclos
biogeoquímicos. Pese a la importancia del bosque de mesófilo este ha sido modificado para la
realización de actividades agropecuarias (Figura 2.7), destinando los espacios al cultivo de café, maíz,
frijol, cítricos, la formación de potreros y extracción de madera (Vargas et al., 2006).
Figura 2.7. Uso de suelo y vegetación del municipio de Lolotla.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2015.
Los aspectos revisados del marco físico y natural favorecen la comprensión del espacio
natural cotidiano donde la población vive, esto en el marco de los Determinantes Sociales de la
Salud. En el ámbito productivo, la configuración física es únicamente potencial, pues, para su
compresión esta se apoya del desarrollo histórico de cada espacio al respecto, Pierre George, en
Geografía Económica, expone que, en el sector primario, el cual presenta mayor tradición en la
humanidad, las desventajas pueden ser corregidas en tanto que “La fecundidad de un terreno no
63
genera por sí sola una agricultura de gran rendimiento. De modo que las condiciones de
producción poseen tan sólo un valor relativo…” (sic) (Pierre George, 1977:15).
Tras considerar los aspectos físicos del municipio, en el trabajo de investigación titulado
Minería y desarrollo Regional: El caso de explotación de manganeso en el norte de Hidalgo
(Huerta, 2001), donde se propone la valoración de los recursos naturales para su uso económico
por sector de actividad, de esta manera, se pondera por actividad económica las condiciones de:
geología, lo plano o montañoso del relieve, la abundancia o escasez de los recursos hídricos, el
tipo de clima, la temperatura, la cantidad de precipitación, el tipo de suelo y de vegetación. Los
resultados arrojados para el municipio de Lolotla son los siguientes:
Niveles de
aptitud
Geología
Clima
Temperatura
Precipitación
Uso de suelo
Promedio
Ponderación
Suelo
Agricultura
Ganadería
Silvicultura
Acuacultura
Minería
Turismo
Hidrología
Sector
económico/
aspecto físico
Relieve
Cuadro. 2.1. Ponderación cualitativa de los recursos naturales para su uso económico
en el municipio de Lolotla.
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
3
3
3
3
3
3
3
3
3
1
3
3
3
3
3
3
3
3
3
3
2
2
2
2
2
3
2
3
1
3
3
1
2.38
2.25
2.25
2.50
2.63
2.50
Medio
Alta
Medio
Medio
Medio
Media
1 Bajo
2 Medio
3 Alto
Fuente: Huerta, 2001, pp. 45-46.
La ponderación cualitativa de los recursos naturales para seis actividades económicas
según su nivel de aptitud, sitúa al municipio con un potencial predominantemente medio (Cuadro
2.1.). Por sector otorga una puntuación media en el rubro de agricultura, silvicultura, acuicultura,
minería y turismo; en tanto que para la actividad de la ganadería le otorga una calificación alta
(Huerta, 2001).
64
2.2 Conformación geohistórica.
La dinámica demográfica y la configuración territorial del municipio de Lolotla favorece el
reconocimiento de las actuales condiciones de la población. Las circunstancias acontecidas
durante el siglo XIX y XX han mantenido al municipio en una condición de bajo desarrollo
social, por ello, una perspectiva de las variaciones espacio temporal se presentan condensadas en
las etapas siguientes.
I.- Los asentamientos toltecas, el Señorío de Metztitlán y la confederación Metza (hasta el 600 al
1524).
Hallazgos recientes han identificado como los primeros asentamientos en la Sierra Alta de
Hidalgo a poblaciones perteneciente de la cultura olmeca, probablemente de carácter periférico
(Menes, 2013). En tanto que, entre los siglos II y VI d. C., el territorio estuvo bajo el área de
influencia de la cultura teotihuacana. Posteriormente, con el declive de Teotihuacán se desarrolló
la cultura Tolteca, que hacia el siglo VII d. C., en el clásico mesoamericano se asentó en la región
norte, centro y occidental del territorio del actual estado de Hidalgo, de esta manera fundaron
Xochicoatlán en el año 608, once años después se extienden hasta Ixtachuexotla (Huejutla) y en
el 645 llegan a Tulancingo. En el 661, los toltecas se desplazan hacia Mameuhí (Tula), ocupando
el territorio habitado por población ñähñu y nonoalca; en el 674, toman Ixmiquilpan y en el 700
fundan Lolotla (Manzano, 1922).
Se consideran como principales bienes culturales de los toltecas: el asentamiento en zonas
lacustres y fluviales, la utilización del riego como introducción tecnológica en la agricultura, el
uso de vestimenta de algodón, la construcción de viviendas de cal y cantos, las manufacturas de
cerámica, joyería, orfebrería, plumaria y la escritura en soporte de códices (Navarrete, 2011). La
cultura tolteca declinó entre el siglo XII-XIII, este contexto posibilitó el ingreso de grupos
chichimecas al territorio hidalguense por la frontera este y noroeste, periodo que Carmen Lorenzo
considera de “fragmentación política y dispersión de la población” (Lorenzo, 2001: 23).
En este mismo contexto en los Anales de Cuauhtitlán se recoge que en el año de 1325 el
señorío de Azcapotzalco encabezado por Tezozomoc extendió sus fronteras hasta Xaltocán,
situación por la cual, los habitantes del Valle del Mezquital emigraron hacia el noreste, a
Metztitlán y a Tlaxacallan, este último sitio actualmente es Tutotepec, en el estado de Veracruz
(Menes, 2013).
65
Durante la época prehispánica, Metztitlán junto con Tutotepec se consolidaron como
señoríos independientes, debido a su capacidad de negociación en confrontaciones militares.
(Meade, 1982 en Menes, 2013). Su población se constituyó de manera pluriétnica, conformada
por chichimecas, población de ascendencia totonaca, totopanecas de origen tepehua, población
olmeca xicalanca y ñähñu proveniente de Xaltocán. Con un territorio cuyos límites se fijan al
noroeste hasta Tlahuiltepa y al Sureste hasta Metzquititlán (Ruíz de la Barrera, 2011); al noreste,
estaban delimitados por la población huasteca, pese a ello, no se descarta la integración de ésta a
la federación Metza como consecuencia de la proximidad territorial (Meade 1982, en Menes,
2013) y por la actividad comercial con un punto de redistribución en Huehutla, con un corredor
comercial que se prolongaba hacia Molango, Xochicoatlán, Metztitlán, Metzquitlán y hasta el
noroeste de Pachuca. La economía se basó en la actividad agrícola, con la plantación de algodón
en la zona de La Vega, y la explotación de caolín en Zacualtipán (Ruíz de la Barrera, 2011), sitio
que no figuró como lugar con población permanente durante la época prehispánica pese a su
proximidad a los yacimientos de obsidiana, objeto de disputa entre la Federación Metzca y la
Triple Alianza (Fernández y Garza, 2006).
Entre el siglo XIII y XV, el Señorío hizo frente al intento de conquista efectuada por el
gobernante chichimeca Tlalcatecatzin en 1324, el resultado, una batalla de cuarenta días de
duración y desfavorable para los grupos de Metztitlán y Tutotepec, como consecuencia se exigió
la muerte de los gobernantes de los grupos vencidos a cambio de ser eximidos del pago de
tributos. Similar situación se presentó en 1350. En 1325, con la expansión de Azcapotzalco la
configuración de Metztitlán comprendía las provincias de Malila, Tlanchinol, Huazalingo,
Xochicoatlán Yahualica y Tianguistengo (Meade 1982, en Menes, 2013).
A finales del siglo XV, el territorio del estado de Hidalgo presentó un elevado porcentaje
de ocupación territorial de grupos mexicas. En 1482, Tizoc planeó una expedición con fines de
conquista organizando los ejércitos de Itzmiquilpan, Actopan y Atotonilco el Grande. De esta
empresa, sólo obtuvo cuarenta prisioneros, este hecho consolidó la autonomía de Metztitlán y
Tutotepec (Meade 1982, en Menes, 2013).
De manera específica, sobre el topónimo de Lolotla, el nombre geográfico deriva de la
agrupación en mexicano (náhuatl) de telolotlan donde, telolotli hace referencia a “canto rodado,
piedra de río o piedra boluda” y tlan a “lugar de o donde abunda”, por lo que se sugiere el
66
significado de Lolotla como: “Lugar de cantos rodados” o “Lugar de lomas” (Figura 2.8). Esta
condición se observa en la parte superior del glifo, que se incorpora al difrasismo del altépetl atl,
agua, + tepetl, cerro = poblado, mismo que hace referencia de manera simbólica a los elementos
que una población requiere para su instalación como los son: territorio y recursos hídricos.
Figura. 2.8. Glifo altépetl de Lolotla.
Encabezado del
Altépetl en forma de
Telolotli
Monte sagrado,
Espacio donde se
realizan los
movimientos de
las criaturas en el
ciclo de la vida y
muerte.
Aguas subyacentes
Fuente: modificado de INAFED, 2010; López Austin, 2018.
López Austin ha atribuido al tepetl las características de: eje cósmico y centro del mundo
para cada comunidad, punto de salida y entrada de los astros, reserva subterránea de riquezas,
refugio de flora y fauna frente de la actividad humana, morada del dios patrono, lugar de origen
de los hombres, fuente de orden social y mundo de los muertos (López Austin y López Luján,
2009 en Dehouve, 2016).
II.- La Encomienda de Metztitlán (1524-1827).
Tras la conquista de México-Tenochtitlán, el Señorío de Metztitlán envió a H. Cortés una
embajada de paz, con motivo de establecer una relación de vasallaje con la Corona española, esto
queda referido en la Cuarta Carta-Relación con fecha de 15 de octubre de 1524. Sin embargo,
tras los malos tratos de Cristóbal Tapia, el Señorío de Metztitlán inició una sublevación y en
consecuencia Cortés envió una región militar para disolver la resistencia (Lorenzo, 2001).
67
Para 1573, se estima que Metztitlán contaba con más de 120 asentamientos dependientes,
de estos, la Relación Geográfica de 1570, sólo menciona 74, entre ellos: Malila, con varios
pueblos sujetos. Para 1571, Malila pierde importancia en la escala regional por no adecuarse al
ideal urbano ibérico. En tanto que, Lolotla por razones de localización y topografía cubría las
necesidades de comercio, situación por la cual se le adjudicó la función de cabecera, así como el
territorio situado al norte de Malila. Otras cabeceras que figuraban son: Molango, Tianguistengo,
Tlanchinol y Cuimatlan, ahora Acuimantla (Fernández y Garza, 2006).
En los primeros años del Virreinato de la Nueva España la región de Molango y Malila fue
asignada en encomienda a Gerónimo Aguilar, conquistador que naufragó por la península de
Yucatán. Años después, Aguilar murió y la encomienda pasó a la Corona en el año de 1531. En el
siglo XVI, la encomienda suponía sólo la entrega de tributos y servicios personales; así, la lista
de tributos que registra la región es: “algodón, tanto en motas como en ropa, maíz, frijol, chile,
trigo, miel, cera, azúcar, gallinas, semillas de seda y pescado” (Lorenzo, 2001: 47). La entrega de
tributo tenía una periodicidad diaria, cada sesenta, ochenta, noventa, o cada ciento veinte días, al
año y cada dos años. Entre los servicios personales están: el trabajo en la casa del encomendero
en sus tierras y huertas, como tamemes (cargadores) y enviados a las minas de Pachuca (Lorenzo,
2001).
Durante el siglo XVI y XVII, la región de Metztitlán presentó una reducción del 87.8 por
ciento de la población indígena (Cuadro 1.2). Esta caída es atribuida a las epidemias, malas
condiciones de vida y por maltrato (Peter, 1986 en Lorenzo, 2001), no obstante que la Corona en
las Leyes Nuevas de Indias de 1542 extiende su protección a la población indígena, al ser estos
súbditos del Rey.
Cuadro 2.2. Metztitlán: cantidad de población en los siglos XVI y XVII.
Fecha
1560
1570
Final del siglo XVI
1643
1688
Cantidad de población
17,900
15,800
12,750
3,570
2,190
Fuente: elaborado con base en Peter, 1986 en Lorenzo, 2001.
68
En el ámbito espiritual la evangelización en la zona recayó en la orden de los agustinos
llegados en 1533. Los agustinos ocuparon los vacíos territoriales que dejaron en el centro del
Virreinato, los franciscanos y dominicos, de esta manera Antonio de la Roa arribó a Lolotla en
1538 e indicó la construcción del Templo de Santa Catarina. Si bien, además de la
evangelización, la labor de los frailes estaba encaminada en la protección indígena, en la región,
los frailes pronto se hicieron dependientes del tributo, para sostenimiento alimenticio y
construcción de templos (Gibson, 1980 en Lorenzo, 2001). Los agustinos, además de beneficiarse
de “…limosnas, donaciones, cajas de comunidad, y cofradías, rentas de tierras y de sus propios
negocios…” (Lorenzo, 2001: 40), mantuvieron una constante intervención en la vida cultural,
social y política de la población indígena.
Hacia finales del Virreinato, con el cambio dinástico de los Habsburgo a los Borbón en el
trono de España se presentó una reforma a mediados del siglo XVIII que organizó el territorio en
intendencias. De esta manera, el territorio de Lolotla se sitúa en la Intendencia de México. La
cartografía de final del siglo XVIII sugiere que la región contaba con una importancia en el paso
hacia el Atlántico (Figuras 2.9 y 2.10). Posteriormente, Lolotla (en los mapas aparece como
Loiotla) no se observa en la cartografía durante el siglo XIX y reaparece en las primeras décadas
del siglo XX.
III.- Configuración territorial municipal de Lolotla en el siglo XIX.
Con el inicio de México como un Estado independiente, en la Primera Memoria de Gobierno del
Estado de México de 1826, el actual territorio de Hidalgo estaba integrado al Estado de México.
En tanto que, el poblado de Lolotla se encontraba bajo el Ayuntamiento del Partido de
Zacualtipán, perteneciente a la Prefectura de Huejutla. Posteriormente, hacia el II Imperio
Mexicano en 1865, se encuentra una referencia que sitúa a Lolotla en la lista de demarcaciones,
pueblos y haciendas del Departamento de Tulancingo (Menes, 2007).
En 1870, se delimita y crea el Estado de Hidalgo, con Antonio Tagle como primer
gobernador y Lolotla recibe la categoría de municipio. En 1871, Lolotla se incluye en el efímero
Distrito de Molango y para 1880 aparece nuevamente incluido dentro del Distrito de Zacualtipán.
Para 1920, se restituye la condición de Molango como cabecera de Distrito Electoral y Lolotla se
vuelve a incluir en este (Menes, 2007).
69
Figura 2.9. Territorio del norte de la Intendencia de México, Virreinato de la Nueva
España, 1782.
Fuente: davidrumsey.com, 2019. Título: Carte d'une partie de l'Amerique Septentrionale: qui contient partie de la
Nle. Espagne, et de la Louisiane, pour servir aux voyages au tour Monde et vers les deux Poles, faits par M. de
Pages, por: Pierre Marie François. Publicado en 1782, París.
Figura 2.10. Territorio del norte de la Intendencia de México, Virreinato de la Nueva
España, 1803.
Fuente: davidrumsey.com, 2019. Título: Chart Of The West Indies And Spanish Dominions In North America. By A.
Arrowsmith, 1803. Jones Smith & Co. sc. Beaufort Buildgs. Publicado el 1 de junio de 1803, Londres.
70
Hasta 1869, Lolotla presentaba sus límites hacia el noroeste ocupando el territorio del
actual Tepehuacán de Guerrero, hacia el sur - sureste se extendía hasta las localidades de Tula,
Epopulco y Michumitla del actual Municipio de Calnali. En tanto que, hacia el oeste las
localidades que delimitaban el municipio eran: Acatepec y Huiznopala pertenecientes a Molango.
Figura 2.11. Cambios en la delimitación territorial de Lolotla entre 1869 y 1875.
Fuente: elaborado con base en Menes, 2007.
En el lustro que va de 1870 a 1875 el municipio presenta una profunda reconfiguración.
En primer lugar, en 1870, en el suroeste se amplía el territorio hacia Acatepec y Huiznopala. En
tanto que al sureste se reduce, debido a que el pueblo de Tula para a formar parte del Partido de
Zacualtipán. Cuatro años después los límites para Lolotla se retraen al sur y sureste cuando
71
Michumitla y Epopulco pasan a formar parte de Xochicoatlán. Para 1875, se erige el municipio
de Guerrero con Tepehuacán como cabecera, este hecho supuso un drástico cambio en la
extensión territorial, que se expone mantiene hasta la actualidad (Figura 2.11). Para 1895, el
municipio de Lolotla presenta la delimitación con la forma política que lo caracteriza, esto de
acuerdo con Cambios a la nomenclatura y evolución de la población de los municipios de la
República Mexicana, 1895-2000. (Commons, et. al., 2008), donde a Lolotla se le asigna la clave
de identificación del número 30 (Figura 2.12).
Figura 2.12. División municipal del Estado de Hidalgo, 1895. (Segmento norte).
Fuente: Commons, et. al., 2008.
IV.- La Configuración territorial municipal de Lolotla en el siglo XIX. La compacidad del territorio
de Lolotla.
La forma de los objetos ha llamado interés de la humanidad. En la Geografía, diversos objetos han
recibido el nombre de su forma distintiva, siendo esto útil para su descripción y clasificación
(Boyce y Clarck, 1964). La forma está dada por los elementos que la componen o por la superficie
que la limita. Su estudio es útil para la identificación de patrones. Desde la Geografía los
fenómenos se han analizado a través de la representación cartográfica, no obstante, el estudio de las
formas no es suficiente para la totalidad de relaciones complejas intrincadas en la forma, pero es
suficiente para destacar aspectos particulares y su clasificación (Frolov, 1975).
72
En la literatura Geográfica, Boyce y Clarck (1964) identifican desde 1920 hasta la fecha de su
publicación The concept of shape in Geography, el empleo de términos relacionados con la forma,
particularmente en cuatro ámbitos: el físico, el político, el urbano, y el comercial. De estos cuatro
grupos, las formas en geografía física se utilizan como medio de clasificación rigurosa y analítica.
Las áreas políticas, ocasionalmente se destinan a la descripción de las formas ya sean estas
compactas, alargadas, perforadas o fragmentadas. A través de la identificación de las áreas políticas
se construyen argumentos sobre los efectos de la forma.
La forma urbana, se ha empleado principalmente por los efectos visuales de la forma externa,
insertando las formas en grupos más aparentes que reales. Las formas urbanas internas, explican la
configuración del distrito central de negocios, empleando fundamentalmente formas geométricas
(Davis, 1926 en Boyce y Clarck, 1964), posteriormente, en 1933, Christaller propone la forma
hexagonal, forma integral para la teoría del lugar central (Boyce y Clarck, 1964)
Las formas políticas de los territorios han sido ampliamente utilizadas en la Geografía
electoral, para la construcción de “buenos” distritos electorales. En este sentido, los distritos
electorales deben presentar una forma compacta, derivada de los supuestos de una organización
espacial de intereses políticos. Los distritos, representan una concentración intereses políticos
comunes de la población, definidos territorialmente (Belanger y Eagles, 2001). En la práctica
cartográfica las implicaciones de las medidas de compacidad necesitan una revaloración. La
elaboración de cartografía coroplética, que presenta valores distribuidos de manera uniforme en una
unidad espacial, por la forma en la que están construidos los territorios, las unidades espaciales
pueden estar en mayor concordancia con las unidades próximas que con aquella en donde se está
agrupada. La forma del territorio entre menos compacidad presente puede presentar variaciones que
disten de una distribución uniforme (Maceachren, 1985).
De entre las medidas para la valoración de la forma de un territorio se cuenta con las
medidas de compacidad del método de Bolsby-Popper, la cual se calcula a través de la fórmula:
, donde: c= compacidad; a= área; y p= perímetro. El empleo de esta fórmula radica en su
simplicidad y su similitud de resultados respectos de otros índices. Los resultados de la
implementación de esta fórmula arrojan valores que van de 0 a 1 (Figura 2.13), siendo que 0
formas que carecen de compacidad y valores de 1 formas compactas (Azavea, 2009).
73
Figura 2.13. Esquema de las puntuaciones de compacidad con el método Bolsby-Popper.
Mayor
compacidad
Menor
compacidad
Fuente: Azavea, 2009: 7.
Al implementar el método de Bolsby-Popper en el marco geoestadístico de México del 2012 del
INEGI, de los 2,456 municipios, aquellos con una menor puntuación en su compacidad fueron
Matías Romero Avedaño, San Carlos Yautepec y Mihuatlán de Porfirio Díaz, todos ellos
localizados en el estado de Oaxaca, de este listado, el municipio de Lolotla ocupa la posición
número 8, de menor compacidad, con un valor de 0.079 (Figura 2.14.).
Figura 2.14. Esquema de los municipios de México con menor y máxima puntuación de
compactación con el método Bolsby-Popper.
Fuente: elaborado con base en Azavea, 2009; INEGI, 2015.
74
Por otra parte, el municipio con mayor compacidad en México para el año 2010 fue el de San
Francisco Nuxaño localizado en el estado de Oaxaca (Figura 2.14). Para el estado de Hidalgo, el
Lolotla se ubica como el municipio con menor puntuación de compacidad, seguido de San Agustín
Tlaxiaca y Zacualtipán de Ángeles con un valor de 0.13 y 0.135 respectivamente.
V. Desarrollo político y demográfico durante el siglo XX-XXI.
En el ámbito político, al inicio del siglo XX, referencias historiográficas sobre la situación
de la Sierra Alta de Hidalgo señalan que la región se encontró bajo el cacicazgo del Gral.
Estanislao Olguín (partidario de Venustiano Carranza), hasta 1925, cuando fue asesinado en
Molango. Con este acontecimiento, se inicia un nuevo cacicazgo, el de la familia Austria-Torres,
dicha relación se establece cuando Melinda Torres originaria de Tlanchinol, emparentó con
Honorato Austria cacique de Tepehuacán. En este contexto, Gustavo Torres, cabeza de la familia
Torres, ascendió en el ámbito político auspiciado por su cuñado H. Austria (Dirección de Cultura
y Recreación y Secretaría General Municipal de Tlanchinol, 2010).
Gustavo Torres tuvo una relación de enemistad con Rodolfo Pando, este último de
condición próxima Javier Rojo Gómez, Gobernador del Estado de Hidalgo. Al respecto, la
Dirección de Cultura y Recreación y Secretaría General Municipal de Tlanchinol (2010),
menciona los sucesos que se narran a continuación. En 1924 Rodolfo Pando tendió una
emboscada a Gustavo, no obstante, quien resultó muerto fue Manuel Medina, quien se
desempeñaba como presidente municipal de Tlanchinol. En 1946, G. Torres planeó una
emboscada y con apoyo de un destacamento militar, condujeron a R. Pando al sótano de la cárcel
de Chiconcoac (localidad de Lolotla), junto con Salomón Camargo, Alfredo Martínez y otros
acompañantes. Posteriormente, estos tres personajes fueron apuñalados con el fin de ser arrojados
desde una gruta, sin embargo, Salomón y Alfredo sobrevivieron, en tanto que, Rodolfo estuvo
desangrándose durante ocho días y finalmente fue muerto por pistoleros hacia julio de 1946.
Por tal hecho, la familia de Rodolfo Pando presentó las quejas correspondientes en
Pachuca, y como respuesta se envió un destacamento militar a Chiconcoac, donde encontraron
osamentas. Para 1948, Gustavo Torres se disgustó con su primo Donustano Torres a quien ordenó
asesinar. Como respuesta, Eligio hijo de Donustano dirigió una emboscada para acribillar a su
tío. Posteriormente, los hermanos de G. Torres mandaron asesinar a Eligio. Con estos hechos se
reduce la influencia de los Austria- Torres. Para 1958, cuando se encontraba en funciones
75
Honorio Medina como Presidente Municipal de Tlanchinol, este tuvo la iniciativa de cortar la
comunicación telefónica con el Municipio de Tepehuacán. Francisco Austria en combinación con
los Torres enviaron una emboscada a Honorio, quien murió el 18 de agosto de 1958. De acuerdo
con la Dirección de Cultura (2010), estos hechos al menos tuvieron el impacto positivo de cortar
el dominio de los Austria de Tlanchinol. Para el caso de Lolotla después de la década de 1960 se
identifica que el municipio ha estado gobernado por una facción de los Bustos-Melo-Vargas
(Cuadro 2.3).
Cuadro. 2.3. Presidentes municipales en Lolotla de 1964 a 2020.
Presidente
Filigonio Marin H.
Sabás Najera Bustos
Alfonso Hernández M.
Ildelfonso Vargas Montiel
Julio Filogonio Marin Hernández
Sabas Najera Bustos
Venancio Mendoza B
Elfego Melo Escudero
Dimno García C.
Periodo
1964-1967
1967-1970
1970-1973
1973-1976
1976-1979
1979-1982
1982-1985
1985-1988
1988-1991
Presidente
Octavio Austria R.
Leonardo Escudero C.
Alfonso Martínez S.
Magdaleno Barrera
Miguel Ángel Vargas Martínez
Rogelio Melo Vargas
Osvaldo Bustos Vargas
Sabulón Melo Vargas
Jorge Bustos Bautista
Periodo
1991-1994
1994-1997
1997-2000
2000-2003
2003-2006
2006-2009
2009-2012
2012-2016
2016-2020
Fuente: elaborado con base en INAFED, 2010.
Después de la primera mitad del siglo XX, el desarrollo en la región se favoreció por la
actividad de la Compañía Minera Autlán, con ello, se introdujerón los servicios de energía
eléctrica, servicio telefónico y correo. Hacia 1960, se inició una comunicación vial hacia la
capital del Estado, la cual tenía como punto de conexión la cabecera municipal de Tlanchinol
donde se instaló la línea de autobuses Líneas Unidas, que posteriormente se denominó,
Autotransportes La Flecha, así como Autotransportes Estrella Blanca, con un recorrido diario
hacia la Cd. De Pachuca. Hacia 1968, con la finalidad, de apertura de vialidades que posibilitan la
extracción de manganeso se abrió la carretera hacia Chipoco y la zona industrial Otongo
(Dirección de Cultura y Recreación y Secretaría General Municipal de Tlanchinol, 2010), con lo
cual se beneficiaron las localidades de Chiconcoac y Tolago del municipio de Lolotla.
En el ámbito demográfico el municipio de Lolotla presentó incrementos en la cantidad de
población especialmente en las décadas de 1910, 1930, 1960 y 2000. Un factor asociado a este
fenómeno es la creación de nuevas localidades, debido a que ambas cuestiones exponen un patrón
76
similar para la década de 1910, 1930 y 2000, de manera estadística esta asociación presenta una
correlación del 0.84 (Figura 2.15).
Figura 2.15. Evolución de la cantidad de localidades y población en Lolotla de 1900-2010.
55
60
40
7500
30
2010
2000
1990
1980
1970
1960
0
1950
4500
1940
10
1930
5500
1921
20
1910
6500
Número de localidades
Localidades
8500
1900
Cantidad de población
50
Cantidad de localidades
Población
9500
50
y = 0.0048x - 0.7422
R² = 0.84879
45
40
35
30
25
20
15
4500
6500
8500
Cantidad de población
10500
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
Del período de 1900 a 2010, el mayor número de habitantes se registró en el año de 2010,
con 9,843 habitantes; en contraste, la menor cantidad de población fue en 1900 con 4,910
habitantes (Figura 2.15). En el año de 1900, de acuerdo con el Archivo Histórico de Localidades
del INEGI hubo 21 localidades que corresponden a las siguientes: Lolotla (cabecera municipal),
Acatepec, Amecaco, El Barco, Comontla, Contepec, Chalma, Chiconcuac, Chiquitla, Huiznopala,
Ixtacuatla, Ixtlahuaco, Mazahuacán, Ocotlán, Quimixtla, Santiago, Tetlapaya, Tlacozintla,
Tlaltepingo, Xalcuatla, Xuchitlán. De estas, Amecaco ha presentado una continua reducción en la
cantidad de población hasta llegar a dos habitantes en el año 2010 (Cuadro 2.4).
Por otra parte, hasta la década de 1980 las localidades presentaron la categoría política de
pueblo, rancho o ranchería 1, entre 1990 y 2000 su situación política fue indefinida y en 2010 se
les designa como comunidades, en esta categoría se encuentran 29 localidades en un rango de
población que va desde 31 hasta 1,222 habitantes. En una condición política de indefinida, están
20 localidades de las cuales tres contaron con un rango de entre 11 y 22 habitantes; y 17 con entre
1 y 10 habitantes. También se registran seis localidades deshabitadas (Cuadro 2.1).
_____________________
Sobre la clasificación de poblados en áreas rurales el Instituto Nacional de Estadística y Geografía ofrece las
definiciones siguientes:
Pueblo: Conjunto de viviendas que definen un lugar.
Rancho: Lugar fuera del poblado donde se albergan diversas familias o personas.
Ranchería: Población con un mínimo de 90 habitantes que laboran agropecuariamente en las fincas de la región o en
las suyas propias. (INEGI, 2012b)
77
Figura 2.16. Dinámica territorial y temporal del crecimiento de las localidades y de la
población en el municipio de Lolotla de 1910 a 1950.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
78
Figura 2.17. Dinámica territorial y temporal del crecimiento de las localidades y de la
población en el municipio de Lolotla de 1960 a 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
79
Cuadro. 2.4. Categoría política de las localidades y población en Lolotla de 1910 a 2010.
*Cambio de nombre. | **Hasta el año 2000 la población se contaba dentro de la localidad de Chiconcoac. |
***En 1910 se anexa a la cabecera municipal.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
80
En la dinámica de población destacan la cabecera municipal que hasta la década de 1960
presentó un continuo crecimiento y posteriormente una caída con una ligera tendencia a la
recuperación en 2010; aun cuando esta localidad es la cabecera municipal se encuentra por
debajo de la localidad de Ixtlahuaco, Tolago, Xalcuatla, Xuchitlán y Chantasco. Ixtlahuaco se
caracteriza por un continuo crecimiento desde 1950. Otro caso de interés es la dinámica de
Xuchitlán, que al empezar el siglo XX contó con 195 habitantes, una década después se observa
una reducción hasta 73 habitantes y para el Censo de 1921 la población se reduce a más de la
mitad probablemente a causa del movimiento de la Revolución mexicana. De manera espacial se
observa que las localidades creadas a partir de 1990 se localizan principalmente al noroeste del
municipio de Lolotla (Figura 2.16 y 2.17).
81
2.3. Situación social y económica
El reconocimiento del panorama demográfico, social y económico de las localidades del
municipio de Lolotla, favorece la comprensión de las condiciones bajo las cuales la población
desarrolla sus actividades cotidianas, que en la presente investigación se abordan bajo el concepto
de los Determinantes Sociales de la Salud. De esta manera, se hace referencia a la distribución de
las localidades, la cantidad de población, el nivel educativo, el acceso a servicios de salud a
través de la derechohabiencia, los servicios dentro de la vivienda; en el ámbito económico la
orientación de la economía y la condición de marginación. En este subcapítulo también se hace
referencia a las principales transformaciones en el ámbito social entre el 2000 y 2010.
Figura 2.18. Localidades en el municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
82
Localidades y cantidad de población en el municipio de Lolotla, Hidalgo
En 2010, México contó con una población total de 112’336,538 habitantes, de estos 2’665,018 se
encontraban en el estado de Hidalgo que representaban el 2.37 por ciento de la población
nacional. En el mismo periodo el municipio de Lolotla contó con 9,843 habitantes, esto lo colocó
en el sitio 1,390 por su cantidad de población respecto de 2,456 municipios que conforman a
México. La población se constituyó de 5,012 mujeres y de 4,831 hombres, que porcentualmente
se distribuyen con el 50.92 por ciento y el 49.08 por ciento respectivamente. De acuerdo con el
Censo de Población y Vivienda 2010, se reconocieron 49 localidades (Figura 2.18), las cuales se
distribuyen en el territorio del municipio de Lolotla con tendencia hacia la uniformidad.
Las cinco localidades con mayor número de habitantes fueron Ixtlahuaco con 1,222
personas, Tolago con 783, Xalcuatla con 778, Xuchitlán con 765 y Chantasco con 730, la
cabecera municipal ocupó el sexto lugar con 703 habitantes. Se registró un total de seis
localidades con menos de cinco habitantes las cuales son: Tlaxcango, Chicazapa, Las Adjuntas,
Antonio Apolonio Campoy, Amecaco y La Pahua. En el municipio alrededor del 75.0 por ciento
de las comunidades cuentan con un tamaño de población de 300 habitantes o menos. La localidad
con el valor de población extremo corresponde a Ixtlahuaco (Figura 2.19.).
Figura 2.19. Distribución de localidades de Lolotla según cantidad de población en 2010.
Cantidad de población (2010).
Ixtlahuaco
Tolago, Xalcuatla
Xuchitlán, Chantasco
Q3 (75 %)
Mediana (50 %)
Q1 (75 %)
Localidades
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
83
Figura 2.20. Cantidad de población por localidad en el municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
En tanto que, de la relación entre cantidad de población y extensión territorial para el
municipio de Lolotla en 2010, se calcula un valor de densidad de población de 56 habitantes por
kilómetro cuadrado, en ese mismo año, la densidad de población en el estado de Hidalgo
correspondió a 137 hab./km2. Debido a la ausencia cartográfica de la superficie ocupada por las
poblaciones en localidades rurales, la densidad de población en el presente trabajo se calculó a
través de la construcción de una retícula con la extensión de 1 km2 x 1 km2, con fines de estimar
la distribución de la población en el territorio del municipio. Como resultado, se obtuvo que el
territorio mayoritariamente presenta celdas con ausencia de población (Figura 2.21). Se presentan
84
siete celdas de concentración de población con más de 500 hab/km2, con celdas circundantes con
una densidad menor a 250 hab/km2.
Figura 2.21. Densidad de población en el municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base a INEGI, 2012b.
Respecto a la distribución de las localidades, basándose en el índice de dispersión de
Clark-Evans (Palacio), el municipio presenta un puntaje de 1.34, denotando que las localidades se
encuentran distribuidas aleatoriamente con una ligera tendencia hacia la uniformidad
Índice de Clark-Evans
;
85
2 1.26617
Dónde:
49
;
145.63
1.3375828888051;
1.34
d=distancia promedio de cada asentamiento respecto al más próximo
s=superficie del municipio
n=número de localidades
Rn=índice de dispersión de Clark-Evans
Crecimiento de la población
De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda de 1990, 2000 y 2010, la cantidad de
población en el municipio fue de 9,123 personas en 1990, de 9,867 en el año 2000 y de 9,843 en
el año 2010. El municipio presentó un crecimiento de 0.78 por ciento entre 1990 y 2000 y una
disminución de la población del -0.02 por ciento del año 2000 a 2010. La tasa de crecimiento es
calculada por la expresión siguiente:
1 ∗ 100
Dónde: r= tasa de crecimiento
Px= población en el año x (final)
Po= población en el año o (inicial)
t= tiempo transcurrido entre el momento de referencia de la población inicial y la población final.
El cálculo corresponde a los criterios del INEGI, que considera un el modelo geométrico
como el mejor ajuste a la dinámica demográfica del país. En este contexto las localidades
ubicadas al norte del municipio Chalchocotipa, Chantasco, El Barco, Tentla, Xalcuatla y
Xuchipantla presentan una disminución continua de población de 1990 a 2000 y de 2000 a 2010
(Figura 2.22.). Similar situación se presenta, algunos kilómetros al sur en el conjunto de
localidades de Amecaco, Cuatitlanapa, El Chalahuite, El Vergel, Los Otates, y Quimixtla, así
como al sur del municipio en la localidad de Apolonio Campoy, Contepec, Ixtlahuaco, la
cabecera municipal, y Tlaxcango. De manera intercalada con el grupo de localidades que presenta
una reducción en la cantidad de población se localizan aquellas que presenta un crecimiento
continuo como las siguientes: Chalma, Comontla, Huitznopala, Mazahuacán, Ocotlán, Santiago,
Texacal y Tlacozintla.
86
Figura 2.22. Crecimiento de la población en las localidades del municipio de Lolotla en 1990,
2000 y 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
Composición de la población por edad y sexo
Referente a la estructura de la población del municipio de Lolotla se identifica una reducción en
la base de la pirámide desde el año 2000, ya que, en 1990 se contaba con una base amplia en los
primeros tres grupos quinquenales (de 0 a 14 años). Para el 2000, el ancho de la población se
observa fundamentalmente en el grupo quinquenal de 10 a 14 años, tanto en hombres como en
mujeres. Posteriormente se observa una tendencia en la reducción de los grupos de población
hasta alcanzar la punta de la pirámide que comprende la población de 75 años y más (Figura
2.23).
87
En 2010, el grupo de edad con mayor población correspondió al de 5 a 9 años. En tanto
que, el cuerpo de la pirámide presenta una tendencia al estancamiento de la composición de la
población, condición que sugiere movimientos migratorios debido a que, el grupo de población
de 10 a 14 años predominante en 2000, no se observa para 2010, en el grupo que va de los 20 a
24 años, de ser así, esta reducción es notable fundamentalmente en la barra de los hombres de 25
a 29. Respecto a la población adulta, se denota un ensanchamiento en la cúspide de la pirámide,
probablemente relacionada a factores como el envejecimiento de dicha población, el incremento
en la esperanza de vida y el retorno de la población migrante al municipio.
Figura 2.23. Estructura de la población por edad y sexo en el municipio de Lolotla en 1990,
2000 y 2010.
2000
Hombres
De 75 y más
De 70 a 74
De 65 a 69
De 60 a 64
De 55 a 59
De 50 a 54
De 45 a 49
De 40 a 44
De 35 a 39
De 30 a 34
De 25 a 29
De 20 a 24
De 15 a 19
De 10 a 14
De 5 a 9
De 0 a 4
Mujeres
Grupos de edad
Grupos de edad
1990
1,000
500
0
500
Hombres
De 75 y más
De 70 a 74
De 65 a 69
De 60 a 64
De 55 a 59
De 50 a 54
De 45 a 49
De 40 a 44
De 35 a 39
De 30 a 34
De 25 a 29
De 20 a 24
De 15 a 19
De 10 a 14
De 5 a 9
De 0 a 4
1,000
Mujeres
1,000
Cantidad de población (cientos de personas)
500
0
500
1,000
Cantidad de población (cientos de personas)
Grupos de edad
2010
Hombres
De 75 y más
De 70 a 74
De 65 a 69
De 60 a 64
De 55 a 59
De 50 a 54
De 45 a 49
De 40 a 44
De 35 a 39
De 30 a 34
De 25 a 29
De 20 a 24
De 15 a 19
De 10 a 14
De 5 a 9
De 0 a 4
1,000
Mujeres
500
0
500
1,000
Cantidad de población (cientos de personas)
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
Al agregar a la población en tres grandes grupos; niños y adolescentes (de 0 a 13 años),
jóvenes y adultos (de 15 a 64 años) y adultos mayores (de 65 y más años), en el municipio de
88
Lolotla predomina el segundo grupo, seguido por el grupo de niños y finalmente el de adultos
mayores. El menor porcentaje de niños y adolescentes se presenta en las localidades de: Ocotlán
(16.1 %), Comontla (22.6 %) y Chalma (24.6 %); en contraste, las localidades con mayor
población infantil son: Las Puentes (45.5 %), Tentla (44.9 %) y El Barco (40.2 %) (Figura 2.24).
Figura 2.24. Población por tres grandes grupos de edad en el municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
Para el gran grupo etario de jóvenes y adultos, las localidades con menor porcentaje
fueron Tlacozintla (43.5 %), Ocotlán (48.4) y Tentla (48.8 %); en cambio este grupo de población
predominó en las localidades de Quimixtla (67.1 %), Comontla (67.0 %) y La Pimienta (66.7 %).
Finalmente, el grupo compuesto por la población mayor de 65 años presentaba menor proporción
89
en las localidades de Las Puentes (0 %), Xuchipantla (3.1 %) y El Barco (5.2 %) y se distribuyó
en mayor proporción en Ocotlán (35.5 %), Huitznopala (25.1 %) y Tlacozintla (22.6 %).
Espacialmente la población en edad infantil se distribuye principalmente en el norte y sureste; la
población en edad adulta en la parte central; en tanto que, la población adulta mayor se concentra
en el sur, sureste y suroeste del municipio.
Movimientos migratorios.
La migración es un fenómeno complejo realizado especialmente para la satisfacción de las
necesidades, entre las motivaciones para la migración, movilidad o relocalización están la
económica para la elevar la condición de bienestar, fundamentalmente para el acceso a bienes y
servicios (Castillo, 2015). De acuerdo con la información estimada de los movimientos
migratorios intermunicipales elaborado por la Comisión Nacional de Población (CONAPO,
2005) con base en la población asentada en 2010 y que en el año 2005 se encontraba asentada en
otro municipio se tiene que, en el periodo de 2005 a 2010 la población de Lolotla se dirige
fundamentalmente hacia siete estados de la República, los cuales son: Coahuila, Distrito Federal,
Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Nuevo León y San Luis Potosí.
La emigración se realiza fundamentalmente en el propio estado de Hidalgo, con el registro
de 289 personas. Los flujos de población se dirigen en mayor medida al municipio de Mineral de
la Reforma, localizado en el Área Metropolitana de Pachuca, con un flujo de 114 personas en el
periodo establecido de 2005 a 2010. Enseguida, los flujos se dirigen hacia el municipio de
Zacualtipán con 40 personas y hacia Molango con un total de 33 personas. El siguiente estado al
cual se dirige la población de Lolotla es a Nuevo León, hacia ese estado se presentó un flujo de
106 personas. Los municipios de destino corresponden a los localizados en el Área Metropolitana
de Monterrey, con 80 personas que se asentaron en el municipio de Gral. Escobedo, 20 personas
en el municipio de Monterrey y 6 en San Pedro Garza García. La tercera entidad hacia donde más
se dirigen los flujos de población es al Distrito Federal (ahora Ciudad de México) con 65
personas, de las cuales 55 se establecieron en la delegación (ahora alcaldía) Gustavo A. Madero y
10 en Cuajimalpa de Morelos (Figura 2.25.).
Considerando el destino de la población de Lolotla hacia las área metropolitanas de
México, y estableciendo áreas de influencia arbitrarias se observa que, la emigración es mayor
dentro de los primeros 100 km, hacia los 250 km se presenta una mayor diversificación de los
90
destinos, entre los 250 y 500 kilómetros la cantidad de población emigrante es baja, como
principal destino se tiene el municipio de Tamasopo en San Luis Potosí y se incrementa
nuevamente entre los 500 y 1,000 km cuyo destino principal es el AM de Monterrey.
Figura 2.25. Emigración intermunicipal desde el municipio de Lolotla en 2005 – 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b; CONAPO, 2015.
En tanto que, la población que ingresa al municipio procede en esencialmente de la misma
entidad (219 personas), del estado de Nuevo León (117 personas) y el Estado de México (101).
Las entidades restantes de las cuales ingresa población son: San Luis Potosí, Distrito Federal,
Tamaulipas, Coahuila, Jalisco, Sinaloa, Morelos y Guerrero, estos últimos ocho estados aportan
91
una cantidad de población al municipio de 70 personas. La población que emigra presenta
desplazamiento que van desde los 1,000 y los más próximos menos de 50 km (Figura 2.26.).
Figura 2.26. Inmigración intermunicipal hacia el municipio de Lolotla en 2005 - 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b; CONAPO, 2015.
Educación y población hablante de lenguas indígenas.
El grado promedio de escolaridad en el municipio en 2010, fue de 6.4 años, equivalente a cubrir
la educación primaria. Tomando el mismo rubro a nivel localidad, la cabecera municipal cubre la
educación básica alcanzando en promedio 9.4 grados aprobados, otras localidades que superan el
promedio municipal son Xuchipantla, Xuchitlán y Tolago, con 6.5 grados de escolaridad
92
Contepec (6.6 grados), La Pimienta (6.8 grados), Chalma(6.9 grados), Comontla (7.1 grados),
Quimixtla(7.3 grados), Las Puentes (7.5 grados) e Ixtlahuaco (8.0 grados). En tanto que, las
localidades que presentan el menor promedio de grados aprobados son: Chalchocotipa,
Calputitlán, y Chiquitla con 2.4, 3.6 y 4.1 grados aprobados respectivamente (Figura 2.27.). De
estas localidades destaca que su población es baja, en Chalchocotipa tan solo se presentan 11
habitantes, en Calputitlán 34 habitantes y en Chiquitla 328 habitantes. Las localidades con un
dato no disponible respecto a la escolaridad alcanzada cuentan con una población menor igual o
menor a 11 habitantes
Figura 2.27. Años promedio de educación en las localidades del municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
93
En lo referente a la población hablante de lenguas indígenas, para el municipio de Lolotla la
lengua que se presenta es el náhuatl o también denominado en esta área como mexicano, que en
el 2010 era hablada por un total de 2,057 personas, lo que significó un 20.89 por ciento de la
población total del municipio. De esta población hablante de lengua indígena el 47.6 por ciento
son mujeres y el 52.4 por ciento son hombres, así mismo del total de población hablante del
náhuatl sólo el 10.8 por ciento no habla el español.
Figura 2.28. Población hablante de alguna lengua indígena en las localidades del municipio
de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
94
La población hablante del náhuatl se distribuye específicamente en las localidades del norte del
municipio, en Xalcuatla (94.7 %), Chalchocotipa (90.9 %), El Barco (87 %), Chantasco (83.5 %),
Xuchipantla (81.6 %) y Tentla (60.9 %). Otras localidades con un porcentaje considerable de
población hablante de lengua indígena son: La Florida (28.29 %) y Las Puentes (26.3 %). En
otras localidades donde se presenta esta característica el porcentaje es menor al 4 por ciento
(Figura 2.28.).
Afiliación a servicios de salud.
En un balance general de la situación de la población con derechohabiencia, para el año 2000, se
contó con un 85.3 por ciento de la población afiliada a algún sistema de salud. De esta población,
el Seguro Popular cubría 79.9 por ciento, seguido del IMSS con el 14.4 por ciento y el ISSSTE
con el 5.5 por ciento. El Seguro popular cubre significativamente las localidades del municipio de
Lolotla, no obstante, destacan las localidades situadas al norte del municipio por contar
predominantemente con derechohabiencia al IMSS. Las localidades con esta situación son:
Tentla (96.4 %), El Barco (93.7 %), La Unión (85.2 %), La Pimienta (93.9 %) y Quimixtla con el
(78.9 %). Al sur de la entidad destaca la localidad de Acatepec con un 49.3 por ciento de
población afiliada al IMSS, y la cabecera municipal con el 45.5 por ciento afiliada al ISSSTE
(Figura 2.29).
Servicios en el ámbito de la vivienda.
De manera general los servicios de agua entubada, luz eléctrica, drenaje y sanitario con los cuales
están provistas las viviendas del municipio de Lolotla, se distribuyen de la manera siguiente: al
norte del municipio se tienen localidades con servicios de agua y drenaje deficientes. En el centro
y sur los servicios están prácticamente cubiertos y se presentan localidades al sur del municipio
con baja cantidad de población que cuentan con los servicios satisfechos de manera parcial. De
manera específica, las localidades de Ocotlán y Xuchitlán cuentan con el servicio de agua
entubada al 100 por ciento. El servicio de luz eléctrica se encuentra satisfecho al 100 por ciento
en las localidades de Comontla, Cuatitlanapa, Chalchocotipa, La Pimienta y Las Puentes. Cabe
mencionar que este servicio presenta mayor cobertura, puesto que se presenta entre el 81 y 100
por ciento, con excepción de la localidad de Mecapala, donde este servicio se encuentra cubierto
al 33 por ciento.
95
Figura 2.29. Situación de derechohabiencia por localidad en el municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b; CONAPO, 2015.
El servicio de drenaje y la característica de contar con sanitario se encuentra satisfecho al
100 por ciento en las localidades de Tlacozintla, Capultitlán, Las Puentes, Mecapala, Santiago,
Ocotlán y Tetlapaya. En función de los porcentajes de distribución de los servicios en las
viviendas que se exponen en la Figura 2.30. Se presenta la Figura 2.31., que muestra a las
localidades del municipio de Lolotla agrupadas bajo conglomerados y su correspondiente nivel
de similitud en la caja de simbología. De las condiciones presentes se optó por realizar el corte al
dendrograma para establecer la agrupación final en cinco grupos que muestran de manera general
la situación de las viviendas, las cuales se describen a continuación:
96
Grupo I. Este grupo se caracteriza por contar con el servicio de energía eléctrica y
sanitario cubiertos. En tanto que, carecen de los servicios de agua potable y drenaje. Las
localidades que pertenecen a este grupo se distribuyen principalmente en el norte del municipio.
Figura 2.30. Situación de la vivienda en las localidades del municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012.
Grupo II. Este grupo se caracteriza por contar con el servicio de energía eléctrica y
sanitario cubiertos. Mientras que, los valores porcentuales de agua potable son mínimos y los de
97
drenaje son inferiores al 50 por ciento. Las localidades de este grupo se distribuyen de manera
intercalada al norte del municipio con localidades del grupo I.
Grupo III. Este grupo se caracteriza por contar con el servicio de energía eléctrica y
sanitario cubiertos. Mientras que los valores porcentuales de agua potable son menores al 50 por
ciento y el drenaje prácticamente se encuentra cubierto. La distribución territorial de las
localidades de este grupo es al sur y sureste del municipio.
Figura 2.31. Conglomerados de la situación de la vivienda, por localidad en el municipio de
Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
98
Grupo IV. Este grupo se caracteriza por contar con el servicio de agua, energía eléctrica y
de contar con sanitario cubiertos. En tanto que, el servicio de drenaje es nulo. En este grupo se
incluyen localidades situadas al norte del municipio.
Grupo V. Este grupo presenta los servicios de agua, energía eléctrica, drenaje y de
sanitario cubiertos. Las localidades que se consideran en este grupo se distribuyen del centro al
sur del municipio.
Con base a lo anterior se identifica una dotación radial de los servicios en el ámbito de la
vivienda, las cuales tienen como centro el sur del municipio, probablemente asociado a la
cabecera municipal y de ahí se distribuyen al sur y centro del territorio, en tanto que las
localidades del norte presentan las condiciones menos favorecidas.
Contexto económico
El contexto económico territorial tiene implicaciones en la condición socioeconómica de la
población, fundamentalmente en la adquisición de bienes para la satisfacción de las necesidades
básicas. En este rubro se revisan la orientación económica elaborada a través de la cantidad
monetaria generada de las actividades económicas
Orientación sectorial de la economía. El estado de Hidalgo se encuentra dividido en
catorce regiones económicas, de estas, Lolotla pertenece a la región económica “XIV Molango”,
la cual está conformada por los municipios de Calnali, Huazalingo, Molango de Escamilla,
Tepehuacán de Guerrero y Tlanchinol. La región “Molango” presenta una diversificación interna
a nivel municipal respecto a la orientación sectorial (Cuadro 2.6.). De esta manera, el municipio
de Lolotla y Huazalingo presentan una alta especialización en actividades primarias con el 93.1 y
88.0 por ciento del valor de su producción en el sector económico primario respectivamente. En
el mismo sector, Tlanchinol y Calnali presentan una moderada especialización, Tlanchinol
concentra el 54.9 por ciento en la actividad primaria y el otro sector de importancia es el terciario
con el 40.3 por ciento. Respecto al municipio de Calnali el 57.1 por ciento del valor de
producción se concentra en su sector primario frente al 34.9 por ciento obtenido de actividades
terciarias.
Con una orientación de alta especialización secundaria se encuentra el municipio de
Tepehuacán de Guerrero, concentrando en este el 86.6 por ciento del valor de su producción. En
99
tanto que Molango de Escamilla presenta moderada especialización terciaria con el 43.7 por
ciento del valor de producción en el sector primario y el 50.1 por ciento en el sector secundario
(Cuadro 2.6.).
Cuadro 2.5. Orientación sectorial de la economía.
Código
Orientación económica
Ia
Alta especialización primaria
Moderada especialización
primaria
Alta especialización secundaria
IIb
IIa
Moderada especialización
secundaria
Alta especialización terciaria
IIb
IIIa
Moderada especialización
terciaria
Alta diversificación
IIIb
IVa
Código
Orientación económica
IVb1
Moderada diversificación con
predominio primario/terciario
IVb2
Moderada diversificación con
predominio primario
IVb3
Moderada diversificación con
predominio primario/secundario
IVb4
Moderada diversificación con
predominio secundario
IVb5
Moderada diversificación con
predominio secundario/terciario
IVb6
Moderada diversificación con
predominio terciario
Fuente: Palacio-Prieto, et.al., 2004.
Cuadro 2.6. Región económica Molango: orientación Sectorial de la economía. Sector
económico (valor de producción en miles de pesos).
Municipio
Primario
%
Secundario
%
Terciario
%
Calnali
Lolotla
Huazalingo
Molango de Escamilla
Tepehuacán de
Guerrero
Tlanchinol
Total, región Molango
35,226.5
27,550.3
46,115.0
42,620.9
46,742.2
57.1
93.1
88.0
43.7
12.1
4,979.0
1,090.0
452.0
5,986.0
334,885.0
8.1
3.7
0.9
6.1
86.6
21,507.0
959.0
5,837.0
48,841.0
5,202.0
34.9
3.2
11.1
50.1
1.3
Total,
municipal
61,712.5
29,599.3
52,404.0
97,447.9
386,829.2
50,104.1
248,358.9
54.9
34.5
4,450.0
351,842.0
4.9
48.9
36,791.0
119,137.0
40.3
16.6
91,345.1
719,337.9
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2009; SAGARPA, 2015.
Con base en la información disponible en el Censo Económico de 2009 y del Sistema de
Información Agroalimentario y Pesquero, el municipio de Lolotla es tipificado con una alta
especialización primaria. En el ámbito agrícola el principal producto es el maíz, con un valor de
producción de $ 1’556,160 pesos; en el rubro de pecuario el valor máximo corresponde al bovino
con $ 16’153,700.00 pesos. En el sector secundario sobresale, la generación, transmisión y
distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final con
un monto de $ 860,000 mil pesos. Finalmente, en el sector servicios, el comercio al por menor,
100
con 11 unidades registradas en 2009, presentó un valor de producción de $ 661,000 mil pesos
(Cuadro 2.7).
Cuadro 2.7. Producción por sector económico en Lolotla, 2009.
Sector económico (valor de producción en miles de pesos).
Cultivo
Primario
Valor de Ganado/
producción Producto
Arvejón
12.00
Bovino
Chile
verde
Frijol
negro
81.00
Aves
67.50
Guajolotes
Maíz
blanco
1,556.16
Valor de
producción
($)*
16,153.70
2,771.60
959.20
Porcino
1,806.70
Ovino
Leche,
Huevo
Miel, Lana
269.10
3,360.40
Secundario
Sector
Valor de
producció
n ($)*
Energía
860.00
eléctrica,
agua y gas
Manufact
219.00
ura
Minería
11.00
512.90
Subtot
1,716.66
25,833.60
al
Total
27,550.26
del
sector*
*
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2009; SAGARPA, 2015.
*Valor de producción del sector en miles de pesos.
** Se exceptúan actividades gubernamentales.
Terciario
Sector
Comercio al
por menor
Inmobiliarios
y de alquiler
Alojamiento
temporal;
alimentos y
bebidas
Otros
servicios*
1,090.00
Valor de
producción
($)*
661.00
55.00
142.00
101.00
959.00
La orientación económica del municipio propone que la población que se ocupa en
actividades del sector pecuario fundamentalmente de ganado bovino. Por otra parte, se tiene
referencia a la producción de artículos es de manufactura artesanal (Cuadro 2.8.).
Cuadro 2.8. Localidades con producción de manufactura artesanal en Lolotla.
Localidad de producción
Comontla
Chalma
Huiznopala
Lolotla (cabecera municipal)
Xuchitlán
Manufactura
Bateas de madera y huaraches
Artículos de carpintería
Adornos de papel y bordados
Artículos de carpintería
Mortero para café, bateas de madera, canastas de bejuco, ollas y
comales de barro
Fuente: elaborado con base en Lorenzo, 2001.
101
Figura 2.32. Orientación sectorial de la economía en el Estado de Hidalgo.
Fuente: elaborado con base en Palacio et al. 2004; INEGI, 2009; SAGARPA, 2015.
Grado de Marginación.
En relación con el grado de marginación misma que está definida como “Fenómeno estructural
múltiple que valora dimensiones, formas e intensidades de exclusión en el proceso de desarrollo y
disfrute de sus beneficios.” (Conapo, 2015: 12), mismo que dificulta la propagación del progreso
en la sociedad con efectos en la estructura productiva, fenómeno que se expresa a través de
desigualdades territoriales. (Conapo, 2012, en Conapo, 2015). Las dimensiones socioeconómicas
que emplea este indicador son la educación, la vivienda, la distribución de la población y los
ingresos monetarios. La conformación de este índice se desglosa en el Cuadro 2.9.
102
Cuadro. 2.9. Índice de marginación. Esquema conceptual del indicador de la intensidad
global de la marginación socioeconómica.
Dimensiones
socioeconómicas
Formas de exclusión
Analfabetismo
Educación
Vivienda
Distribución de la
población
Ingresos
monetarios
Población sin primaria
completa
Viviendas particulares
sin drenaje ni servicio
sanitario
Viviendas particulares
sin energía eléctrica
Viviendas particulares
sin agua entubada
Viviendas particulares
con algún nivel
de hacinamiento
Viviendas particulares
con piso de tierra
Localidades con menos
de 5 000 habitantes
Población ocupada que
percibe hasta dos
salarios.
Indicador para medir la intensidad
de la exclusión
Porcentaje de población analfabeta de 15 años
o más.
Porcentaje de población sin primaria completa
de 15 años o más.
Porcentaje de ocupantes en viviendas sin
drenaje ni servicio sanitario.
Porcentaje de ocupantes en viviendas sin
energía eléctrica.
Porcentaje de ocupantes en viviendas sin agua
entubada.
Porcentaje de viviendas con algún nivel de
hacinamiento.
Porcentaje de ocupantes en viviendas con piso
de tierra.
Porcentaje de población en localidades con
menos de 5 mil habitantes.
Porcentaje de población ocupada con ingresos
de hasta 2 salarios mínimos.
Fuente: modificado de CONAPO, 2015: 12.
El grado de marginación en el municipio es predominantemente alto, de un total de 49
localidades, 17 (34.7 %) no cuentan con la información suficiente para la elaboración de un
índice de desarrollo social que indique el grado de marginación. En un grado de marginación bajo
se encuentra la cabecera municipal, con un grado de marginación medio está la localidad de
Ixtlahuaco, con un nivel de marginación alto se cuentan 29 localidades y con un grado muy alto
de marginación la localidad de Chalchocotipa (Figura 2.33.).
La distribución espacial del grado de marginación presenta las condiciones más bajas de
marginación al sur y suroeste del municipio, en tanto el resto del municipio presenta un grado
alto, las localidades que no cuentan con un grado de marginación por la insuficiencia de datos
para su elaboración, presentan en su cantidad total de población como máximo 11 habitantes.
La situación social de Lolotla entre el 2000 y 2010.
Estableciendo una comparativa de las condiciones sociales y económicas presentadas entre el
2000 y el 2010, se identificaron mejoras significativas para la población, de esta manera en el
103
ámbito educativo se presenta un incremento de 1.4 grados aprobados, lo que implica en términos
relativos que en promedio la población del municipio de Lolotla al menos cuenta con la
educación primaria finalizada. En el aspecto de salud para el 2000 el porcentaje de
derechohabiencia tan solo era del 7.2 por ciento en tanto que para el 2010 este se incrementó al
85.3 por ciento fundamentalmente por el seguro popular, el cual se implementó en México desde
2004.
Figura 2.33. Grado de marginación social de las localidades del municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b.
En el ámbito del porcentaje de la población ocupada en 2010 se presentó un decremento
de 2 puntos porcentuales respecto del año 2000, para este año la población se empleaba
especialmente en el sector primario, seguido del terciario y el secundario. Para el 2010, esta
104
información no se presenta en los Principales Resultados por Localidad (ITER) del Censo de
Población y Vivienda 2010. Un panorama del cómo se comportaron los sectores económicos en
el municipio de Lolotla en el 2010, se expone a través del cuadro 2.7 sobre la orientación
sectorial de la economía, donde la actividad con mayor porcentaje por valor de producción en
miles de pesos es el sector primario con 93.1 por ciento, el secundario con 3.7 por ciento y el
terciario con el 3.2 por ciento.
Cuadro 2.10. Principales condiciones sociales y económicas del municipio de Lolotla en 2000
y 2010.
Condición
Población total
Grado promedio de escolaridad
Población derechohabiente a servicios de salud
IMSS
ISSSTE
ISSSTE Estatal
Seguro Popular
Población ocupada
Sector primario
Sector secundario
Sector Terciario
Ingresos (en salarios mínimos/mes)
> de 1
Entre 1 y 2
Entre 2 y 5
Entre 5 y 10
Más de 10
Total de viviendas particulares habitadas
Viviendas con luz eléctrica
Viviendas con agua entubada
Viviendas con drenaje
Viviendas con los 3 servicios
2000
9,867
5
709
263
431
3,025
1,673
472
819
1,210
525
310
47
5
2,068
1,214
1,054
1,682
789
2010
2000 (%) 2010 (%)
9,843
6.4
8,401
7.2
85.3
1,212
2.7
12.3
453
4.4
4.6
8
0.1
6,711
68.2
2,757
30.7
28.0
17.0
4.8
8.3
12.3
5.3
3.1
0.5
0.1
2,436
2,298
1,751
1,652
1,330
58.7
51.0
81.3
38.2
94.3
71.9
67.8
54.6
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2020.
En el ámbito de los ingresos para el 2000, la variable población ocupada que recibe menos
de un salario mínimo mensual de ingreso por trabajo ocupa el mayor porcentaje en este rubro,
seguida de aquellos que tienen como ingreso entre 1 y 2 salarios mínimos. Referente a la
condición de la vivienda se presentó una mejora en las condiciones de energía eléctrica y de agua
entubada, en tanto que para el rubro de viviendas particulares habitadas que disponen de drenaje
105
se de acuerdo con la información estadística del ITER se observa una disminución. En tanto que,
en el ámbito de la vivienda la conjunción de estas las tres variables, luz eléctrica, agua entubada y
drenaje pasó del 38.2 por ciento al 54.6 por ciento.
106
Capítulo III.
HACIA UNA EQUITATIVA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES Y DE SALUD
PARA EL BIENESTAR EN EL MUNICIPIO DE LOLOTLA.
Es justo suponer que los parisinos no habrían asaltado la Bastilla, Gandhi no habría
desafiado al imperio en el que no se ponía el Sol y Martin Luther King no habría
combatido la supremacía blanca en «la tierra de los libre y el hogar de los
valientes» si su conciencia de que las injusticias manifiestas podían superarse.
Ellos no trataban de alcanzar un mundo perfectamente justo (incluso si hubiera un
consenso de cómo sería ese mundo) sino que querían eliminar justicias notorias en
la medida de sus capacidades. Amartya Sen.
En el presente capítulo se revisan la dinámica de las transformaciones sociales, ambientales y en
la salud de la población de Lolotla, para con ello identificar los principales elementos de la vida
cotidiana de la población bajo estudio a fin de exponer las disparidades sociales que pueden
ocasionar la muerte prematura. Los sectores analizados en el capítulo se limitan a la información
estadística del Censo de Población y Vivienda de 2000 y 2010 INEGI que posibilitan la
elaboración de una propuesta de los ámbitos a fortalecer en el aspecto social para contribuir a las
condiciones de bienestar de la población.
3.1 Estrategia metodológica.
Para alcanzar el objetivo de la investigación el presente capítulo siguió una estrategia
metodológica que se concentra en las etapas que se enlistan a continuación:
I.- Revisión bibliográfica, orientada a identificar los aspectos que generan las
desigualdades en la distribución de los bienes sociales en la salud de la población, así mismo, se
expone elementos de cómo actúa la exposición a Mn en la salud de la población.
II.- Revisión de información estadística, a fin de exponer el estado de satisfacción de las
necesidades básicas de la población en el periodo comprendido entre el 2000 y el 2013 se realizó
una revisión estadística de las condiciones recabadas en el sector demográfico, de vivienda y en
el aspecto económico de las localidades del municipio. Se consideraron los resultados arrojados
en el Censo Nacional de Población y Vivienda de 2000 y 2010, así mismo, se consideró la
Encuesta Intercensal de 2005. En el rubro de salud, se revisaron los egresos hospitalarios y la
mortalidad acontecida entre 2000 y 2013, mismos que se tomaron del Sistema Nacional de
Información de Salud, (SINAIS) de la Secretaría de Salud.
107
III.- Análisis espacial. Este rubro se realizó a través del software GeoDa. Para ello, en
primer lugar, se estableció el peso espacial, el cual hace referencia a la estructura de vecindad
entre las observaciones, sistematizadas en una matriz de pesos de dimensiones
elementos
, en la que los
de la matriz son los pesos espaciales
Matriz de pesos
⋮
…
…
⋮ ⋱ ⋮
⋯
Los pesos espaciales de
Donde:
W =es la matriz de pesos
=peso de cada una de las
observaciones espaciales
son distintos a 0 cuando i, j son vecinos y cero de no ser así;
por convención se excluye el auto vecino. De esta manera la matriz de pesos expresa la relación
de vecindad de manera binaria con los pesos 1 y 0. Los análisis de pesos en GeoDa, se realizan en
valores estandarizados, salvo en algunas excepciones. La estandarización de filas dadas por los
pesos de
, los cuales se dividen por la suma de las filas
∑
Como resultado se tiene que la suma de los pesos estandarizados por fila es igual a 1. En
tanto que, la suma de todos los pesos es igual a n, que hace referencia al número total de
observaciones. La contigüidad espacial significa que dos unidades espaciales comparten un borde
común de longitud distinta a 0. Operativamente se pueden distinguir estas contigüidades a través
de la analogía con los movimientos de torre o reina de un tablero de ajedrez (Figura 3.1).
Figura 3.1. Esquema de tipos de vecindad
Vecindad criterio torre
Fuente: CEPAL (2014).
108
Vecindad criterio reina
El criterio de torre se define por la presencia de vecindad de un lado o arista en común; el
criterio tipo reina se define por la vecindad a un lado o un vértice en común. Para la elaboración
de las construcciones de las ponderaciones espaciales a partir de las geometrías se emplearon las
estructuras espaciales de las localidades, empleando el criterio de contigüidad tipo reina en el
software GeoDa (Figura 3.57). Posteriormente, empleado el mismo software se calculó la
autocorrelación espacial (I de Moran), el cual fue propuesto por Luc Anselin, con el propósito de
identificar los clústeres locales y los valores atípicos espaciales. El valor del I de Moran oscila
entre -1 y 1, cuanto más cercano sea el valor a 1 mayor será la autocorrelación espacial (Figura
3.2), los valores cercanos a 0 indican la ausencia de correlación espacial entre los valores de
análisis (CEPAL, 2014). Como resultado de esta operación se obtiene: a) un mapa de
significación (valor p o p-value, que hacen referencia a la distribución por debajo de la curva), b)
el mapa de clúster y c) el diagrama de dispersión de Moran.
En el cálculo de I de Moran, el software realiza la operación
siguiente:
∑
∑
∑
,
Donde:
I = es el estadístico de autocorrelación espacial
n= es igual al número total de características
, = es el peso espacial entre la característica i, j.
=es la desviación de un atributo para la característica i de su
media (
).
= es el agregado de los valores espaciales
,
Fuente: Esri, (2020).
Figura 3.2. Esquema de distribución de dispersión y de cluster en el espacio.
Fuente: Esri, (2018).
109
La herramienta de autocorrelación espacial de I de Moran pertenece a una estadística
deductiva, es un indicador de autocorrelación espacial global, desarrollado por Moran en 1948 y
popularizado por Cliff y Ord en 1973 (GeoDa, 2020). A través del mapa de significación se
valida las hipótesis de trabajo. Los resultados se interpretan en el contexto de la hipótesis nula
(
), que establece que los atributos espaciales son resultados de procesos espaciales aleatorios
en el área de estudio. Cuando el valor p es estadísticamente significativo se rechaza la hipótesis
nula y se acepta la hipótesis alternativa (
), que responde a una distribución de autocorrelación
espacial y en consecuencia los valores espaciales no se distribuyen aleatoriamente en el espacio
geográfico (Hernández-Hernández, 2015).
El I de Moran es un indicador de autocorrelación global, por ello para estimar
estadísticamente resultados locales se requiere de otros indicadores para la estimación de los
agrupamientos, para ello se emplea los indicadores locales de asociación espacial (LISA por sus
siglas en inglés local indicators of spatial association), y con ellos se identifica la
autocorrelación o heterogeneidad a nivel local de estudio mediante la fórmula siguiente:
̅
̅
Otro componente arrojado en el análisis de autocorrelación espacial es el diagrama de
dispersión de Moran, delimitado por primera vez por Luc Anselin en 1996, el cual consiste en la
representación de la variable analizada en un eje cartesiano, en valor estandarizado. Este
diagrama se complementa con la recta de regresión, cuya pendiente es igual al valor del I de
Moran, cuanto mayor sea la inclinación de la recta, mayor es el valor de la autocorrelación
espacial (Hernández-Hernández, 2015). Este gráfico, clasifica la autocorrelación en cuatro
categorías (Figura 3.3). Su interpretación tomando como referencia la media (0), refiere que los
puntos situados a la derecha de la media tienen una
tienen
0, y todos los puntos a la izquierda
0, estos valores son referidos usualmente como altos y bajos, con respecto a la media.
De igual manera se clasifican los valores para “y” por encima y debajo de la media como altos y
bajos.
En la gráfica de dispersión del cuadrante superior derecho e inferior izquierdo
corresponden a la autocorrelación alta-alta y bajo-bajo respectivamente; en tanto que, el
110
cuadrante inferior derecho y el superior izquierdo corresponden a la autocorrelación espacial altabaja y baja- alta (Figura 3.3).
Figura 3.3. Diagrama de dispersión del I de Moran
Fuente: Rodríguez-Licea, et. al. (2016).
De manera específica los conglomerados espaciales, por cuadrante se interpretan de la manera
siguiente:
Cuadrante I, alto-alto: una unidad territorial con un valor de análisis por encima del
promedio, rodeada significativamente por áreas vecinas que también se encuentran por
sobre la media con respecto a la variable de interés. Estas unidades territoriales
corresponden a los denominados conglomerados calientes (hot spots);
Cuadrante II, bajo-bajo: una unidad territorial con un valor de análisis inferior al
promedio, rodeada por áreas vecinas que también se encuentran bajo la media en
relación con la variable de interés. Estas unidades territoriales corresponden a los
denominados conglomerados fríos (cold spots);
Cuadrante III, bajo-alto: presencia de una unidad territorial con un valor de análisis bajo,
rodeada significativamente por áreas vecinas con valores que se encuentran por sobre la
media de la variable de interés;
Cuadrante IV, alto-bajo: presencia de una unidad territorial con un valor de análisis alto,
rodeada significativamente por áreas vecinas con valores que se encuentran bajo la
media de la variable de interés (CEPAL, 2014).
111
IV.- Levantamiento de encuesta enfocada a recopilar información sobre la situación
socioeconómica, la utilización de los servicios de salud y la satisfacción de los elementos de su
entorno. En julio de 2017, se levantó un total de 196 encuestas en algunos hogares de las
localidades siguientes: Acatepec, Chalma, Chantasco, Chiconcoac, Contepec, El Barco,
Ixtlahuaco, Ocotlán, Santiago, Tolago, Xalcuatla y Xuchipantla.
El contenido de la encuesta incluyó seis secciones sobre aspectos de los hogares que se
exponen en Cuadro 3.1 y de manera extensa en el ANEXO I y cuyo levantamiento fue aprobado
por las autoridades correspondientes del Municipio de Lolotla de acuerdo con el ANEXO II. Los
principales resultados obtenidos, son presentados a través de cuadros y gráficos que concentran la
información recabada.
Cuadro 3.1. Secciones de encuesta
Sección
I.
Características
sociodemográficas
II.
Ingreso
III.
Características de
la vivienda
Bienes en la
vivienda
IV.
V.
Salud
VI.
Percepción del
entorno
Elementos comprendidos
Integrantes del hogar, sexo, escolaridad, lengua indígena,
ocupación.
Cantidad de ingreso económico y transferencias institucionales
del programa PROSPERA.
Materiales y servicios en la vivienda.
Propiedad de la vivienda bienes y servicios consumidos en la
vivienda.
Derechohabiencia y uso de los servicios de salud, morbilidad,
acceso y calidad a servicios de salud, discapacidad,
enfermedades crónicas.
Satisfacción con los elementos disponibles en la localidad en el
ámbito de la alimentación, educación, salud, empleo,
transporte, comunicaciones.
Fuente: elaborado tomando como referencia la encuesta de ENSANUT, 2012.
V. Cálculo de distancias a los centros de atención médica. Derivado de la distribución de
servicios que satisfacen las necesidades básicas, se calculó la distancia entre las localidades de
Lolotla a las unidades de atención médica de primer nivel. Para ello, se empleó el Sistema de
Información Geográfica QGis [versión 2.18.13 Las Palmas] y de este software la extensión para
el cálculo de las distancias Complemento de grafos de rutas (ANEXO III). Adicionalmente, se
emplearon como insumos el shapefile de vías de comunicación de cuatro cartas topográficas a
escala 1:50, 000 del INEGI, de estas tres cubren el territorio de Lolotla, la F14D41
112
(Chapulhuacán), F14D51 (Molango), F14D52 (Calnali) y se integró la información vectorial de
la carta F14D42 (Huejutla) con la finalidad de estructurar las vías de comunicación regionales
(Figura 3.4).
Figura. 3.4. Cobertura de cartas topográficas 1:50,000 para el municipio de Lolotla.
Fuente: elaborado con base en CONABIO, 2012, INEGI, 2015.
También, se empleó la base cartográfica Sistema para la Consulta de Información Censal,
2010, (SCINCE) de INEGI para establecer la ubicación de las localidades del municipio de
Lolotla y el catálogo de Clave Única de Establecimientos de Salud (CLUES) de la Secretaría de
113
Salud. En cuanto al marco normativo entre las localidades y los centros de salud se consideraron
los parámetros establecidos por el Sistema Normativo de Equipamiento que en su tomo II está
destinado al rubro de salud y asistencia pública, el cual indica que las unidades deben de cubrir
un radio de 5 a 15 kilómetros en las zonas rurales. Los resultados de estos cálculos se muestran
en el apartado 3.2.3. que expone la utilización de los servicios de salud del primer nivel de
atención.
VI.- Procesamiento de información de los egresos hospitalarios y las defunciones
registradas en la base de datos del Sistema Nacional de Información en Salud (SINAIS), en el
periodo 2000 al 2013, a fin de conocer el comportamiento de las principales causas de ingreso
hospitalario, los movimientos que realiza la población hacia otros municipios para la satisfacción
de sus necesidades en materia de salud y las causas de mortalidad por edad y sexo. Se retoman las
variables de carácter social expuestas en el capítulo dos, para la generación de una propuesta que
permita distribuir los bienes socialmente valorados para mejorar las condiciones de vida y de
salud. Las variables seleccionadas y el grupo de determinantes al que se integran se presentan el
cuadro 3.2.
Cuadro 3.2. Variables consideradas para la asignación de recursos.
N
Variable
Porcentaje de viviendas que cuentan con los servicios básicos dentro de la
1-4
vivienda (Agua, luz, sanitario y drenaje)
5
Grado promedio de escolaridad
6
Porcentaje de población con algún tipo de derechohabiencia
7
Población Económicamente activa
8
Distancia entre localidades y vías de comunicación
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012a.
Condición
Beneficio
Beneficio
Beneficio
Beneficio
Costo
Las variables seleccionadas se estandarizaron a través del puntaje Omega a través de la
fórmula siguiente:
Ω
114
Donde: Ω Puntaje omega estandarización de la variable
Valor de la variable para cada unidad espacial
Valor máximo de la serie de datos
x
Valor mínimo de la serie de datos
Las variables de acuerdo se clasificaron en tres grupos (Cuadro 3.3) beneficio, costo y
objetivo (Buzai y Baxendale, 2012: 98).
Cuadro 3.3. Identificación tipo de variables.
Tipo de variable
Variables de
beneficio:
Variables de costo
Variables de objetivo
Característica
En sus máximos valores
expresan una situación de
máxima favoralidad.
En sus máximos valores
expresan una situación de
máxima desfavoralidad.
Cálculo de indicador
Puntaje de beneficio (PB)
Ω ∗ 100
Aquellas en las que se
puede definir un valor
óptimo como ideal para ser
logrado.
Puntaje de objetivo (PO)
100 |
∗
100
|
|
Donde:
valor de la variable en cada unidad
espacial
valor objetivo
unidad de ajuste
valor más distante hacia el valor
objetivo.
Puntaje de costo (PC)
1 Ω ∗ 100
Fuente: Buzai y Baxendale, 2012: 98-99.
En este aspecto también se integró la elaboración de Conglomerados. Respecto a las
condiciones que se presentan en las localidades se pretende identificar puntos en común dentro de
estas, de manera que las recomendaciones están encaminadas a mejorar las condiciones de vida
de la población de acuerdo con las similitudes que se presentan.
115
3.2. Contexto de la salud en el marco social, económico y ambiental.
Las condiciones sociales presentan transformaciones que conducen a estados de bienestar, este
supuesto puede acelerarse cuando las limitantes para la población son subsanadas. Por tal motivo
en este apartado se revisa la dinámica de las principales condiciones en las viviendas de la
población del municipio de Lolotla entre el 2000 y el 2015.
3.2.1. Transformaciones en las condiciones de vida.
Las condiciones sociales de la población del municipio de Lolotla entre 2000 y 2010 presentan
una dinámica de mejoramiento en las condiciones de vida, así lo exponen algunos indicadores
seleccionados de los censos de población y vivienda realizados en 2000 y 2010 y la encuesta
intercensal de 2005 (Figura 3.5). En el ámbito de la población total del municipio en este periodo
de 10 años, se presentó una tasa de crecimiento de -0.02 por ciento, de esta manera entre el 2000
y el 2010 se presentó un decremento de 2 personas por cada 1,000 habitantes. De manera
específica las localidades que presentaron un incremento de población fueron: Contepec (2.65
%), Tentla (2.14 %), Cuatitlanapa (1.48 %), Tetlapaya (1.21 %) y La Unión (1.18 %). En este
rubro destaca Tolago cuyo crecimiento es de 2.32 por ciento, considerando un periodo de 5 años
entre 2005 y 2010. En tanto que, el mayor decremento se presenta en Chiconcoac (-8.47)
localidad que hasta el año 2000 contabilizaba la cantidad de población de Tolago de manera
conjunta. Otras localidades que presentan una tasa de crecimiento negativa son: Tlacozintla (5.77 %), Mazahuacán (-4.48 %), Capultitlán (-3.19 %) y Acatepec (2.2 %).
En el rubro de educación para el año 2000, la población del municipio de Lolotla contaba
con al menos 5 años promedio de estudios, para 2005 se contó con el 5.9 y para 2010 con el 6.4,
en estos diez años se observa que apenas se ha alcanzado a cubrir la educación primaria. A nivel
localidad la mayor cantidad de grados aprobados lo alcanza la cabecera municipal con 8 años en
el 2000, de 9.1 grados en 2005 y 9.4 grados para el año 2010. En el ámbito de la población que
habla la lengua náhuatl y que no habla español, la población es fluctuante ya que entre el 2000 y
el 2005 se presenta una reducción del -53.08 por ciento a nivel municipal, mientras que, del 2005
al 2010 se presenta un aumento del 62.77 por ciento.
En el ámbito de la salud, la derechohabiencia ha sido uno de los rubros con mayor
crecimiento, la cobertura de la derechohabiencia de 2000 a 2005 incrementó un 291.58 por ciento
y para 2010 el incremento es de 103.41 por ciento, En tanto que, entre el 2000 y el 2010 se
116
presenta una disminución de -2.73 por ciento de la población económicamente activa (PEA).
Mientras que las condiciones de la vivienda se incrementan en el ámbito del agua entubada, el
drenaje y la energía eléctrica. Por otra parte, una reducción favorable se presentó en las viviendas
que cuentan con piso de tierra.
Figura 3.5. Dinámica de las situaciones de vida en el municipio de Lolotla de 2000 a
2010.
4.00
2.00
0.00
-2.00
-4.00
-6.00
-8.00
-10.00
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla (Cerro…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Tasa de crecimiento
Tasa de crecimiento de población en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
Localidades
Condición de derechohabiencia de la población de las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
2005
2010
100
75
50
25
0
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Pob. derechohabiente (%)
2000
Localidades
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012a.
117
118
2005
Localidades
2005
2010
2010
Figura 3.5. Dinámica de las situaciones de vida en el municipio de Lolotla de 2000 a
2010. (Continuación)
2000
2000
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Población mayor de 3 años hablante de alguna lengua indígena en las localidades del municipio de Lolotla
de 2000 a 2010.
Pob. de lengua indígena (%)
25
20
15
10
5
0
8
10
6
4
2
Localidades
2010
PEA en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
2000
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Grados promedio de estudios en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
Grado promedio de estudios
50
40
30
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
20
10
Localidades
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012a.
PEA en %
2005
2010
2010
Figura 3.5. Dinámica de las situaciones de vida en el municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
(Continuación)
2000
Localidades
2005
2010
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Cantidad de viviendas particulares habitadas en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
Cantidad de viviendas
350
300
250
200
150
100
50
0
2000
Localidades
2005
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Viviendas particulares habitadas con piso de tierra en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
Viviendas en piso de tierra
(%)
100
80
60
40
20
0
2000
119
Viviendas particulares habitadas con agua entubada en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
100
75
50
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
25
0
Localidades
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012a.
Viviendas con agua (%)
Figura 3.5. Dinámica de las situaciones de vida en el municipio de Lolotla de 2000 a
2010. (Continuación)
Viviendas particulares habitadas con drenaje en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
2005
2010
100
75
50
25
0
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Viviendas con drenaje (%)
2000
Localidades
Viviendas particulares habitadas con energía eléctrica en las localidades del municipio de Lolotla de 2000 a 2010.
2005
2010
100
75
50
25
0
Lolotla
Acatepec
El Barco
Capultitlán
Comontla
Contepec
Cuatitlanapa
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla…
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
La Unión
Tolago
Viviendas con electricidad
(%)
2000
Localidades
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012a.
Aun cuando las condiciones de vida expresan una mejoría, la situación de educación, y los
materiales de la vivienda son las que han situado a estas localidades en un grado muy alto, alto y
medio de marginación. Por otra parte, cabe referir el contexto espacial donde se presentan las
características referidas capturadas a través de una serie de fotografías (Figura 3.6 a la Figura
3.23) tomadas durante el levantamiento de encuestas en julio de 2017 las cuales exponen la
caracterización de la Región de la Sierra Alta de Hidalgo cuya topografía presenta elevaciones
variables donde se distribuye el bosque mesófilo de montaña. También, se muestran las
principales características arquitectónicas y las actividades productivas. Finalmente, se expone
parte de la biodiversidad encontrada en un transecto carretero.
120
Arquitectura
Figura 3.6.
Parroquia
de Santa
Catarina
Ubicada en
la cabecera
del
municipio
de Lolotla,
su
construcción
se realizó
por encargo
fray Antonio
de Roa, de
la orden
religiosa de
los
agustinos en
1538.
121
Figura 3.7. Iglesia de San Juan
Bautista
Iglesia de San Juan Bautista en
Chiconcoac, adornada con motivo de las
festividades del 24 de junio.
Figura 3.8. Delegación municipal de
Xuchipantla. En la misma fotografía
una sección de la iglesia de la localidad,
dedicada a El Sagrado Corazón de
Jesús.
Figura 3.9 Capilla de San Pedro.
Construida en el siglo XVI, en la
localidad de Ocotlán. Esta capilla es
considerada Monumento Histórico por
el INAH. A la izquierda, se observan
panteones. En esta localidad, en 2010
contó con un total de 32 habitantes.
Figura 3.10 Iglesia en la Comunidad de El Barco.
122
Figura 3.11.
Vivienda rural
Vivienda con
techo a dos aguas
en la comunidad
de Ixcotla. Dadas
las condiciones
del régimen de
lluvias y la
humedad en la
zona se requiere
de este tipo de
construcción
debido a las
constantes
precipitaciones.
Figura 3.12.
Puente en la
Comunidad de
Santiago
Localizado en
uno de los
caminos que
conecta a la
Comunidad de
Santiago. Durante
la temporada de
estiaje el agua
llega estancarse
generando un
criadero para
mosquitos.
123
Figura 3.13. Otros
tipos de construcción
rural. Este tipo de
construcciones se
observa al norte del
municipio de Lolotla.
La temperatura y la
humedad son altas, por
lo cual los materiales
empleados
proporcionan un
confort térmico a sus
habitantes. Se
identificó que este tipo
de construcciones es
destinado como espacio
equivalente al de
cocina comedor.
Figura 3.14. Cocina
con combustible de
leña. Es usual
encontrar espacios
reservados para la
cocina de leña, en
instalaciones separadas
de la vivienda
principal. Se identificó
en diversas viviendas el
uso compartido de
estufas de gas y de
leña. En la imagen una
mujer sumerge un
guajolote en agua
hirviendo para quitarle
las plumas, en la
localidad de
Chiconcoac.
124
Actividad pecuaria
Figura 3.15
Caballo
pastando. La
actividad
pecuaria
extensiva.
Observable
con mayor
intensidad en
las
comunidades
situadas al sur
del municipio
de Lolotla, en,
Acatepec y
Chalma
Contepec. La
baja densidad
de población y
el respectivo
desmonte del
bosque
mesófilo de
montaña
permite el
establecimient
o de potreros
para llevar a
cabo esta
actividad.
Figura 3.16.
Vaca.
125
Minería
3.17. Vista a la
Zona Industrial de
la Minera Autlán
desde la Comunidad
de Chiconcoac.
Desde esta Zona es
que se da
aprovechamiento a
los recursos
geológicos a través
de la extracción de
manganeso.
Representa también
una fuente de trabajo
para población de
Chiconcoac y
Tolago.
Turismo
Figura 3.18
Desarrollo turístico
en la comunidad de
El Barco. Esta
propuesta en 2017 se
encontraba en obras
de construcción dado
que cuenta con el
recurso del río Claro
que atraviesa la
localidad. La orilla
de este río se
encuentra
aprovisionado con
palapas. La
temporada de
afluencia turística es
durante Semana
Santa. Además, la
población le da un
aprovechamiento al
río, a través del
acarreo de agua para
uso doméstico y
también se baña en
él.
126
Biodiversidad
En el tramo carretero que inicia desde la
Carretera Pachuca-Tempoal y la Carretera a
Calnali, donde se ubican las localidades de
Chalma y Contepec se identificaron algunas
especies animales y vegetales que se
exponen a continuación.
Figura 3.19. Cargapalitos (Familia
Psychidae)
3.20. Barbarindio (Automeris metzli).
Observado en el tramo de la Carretera a
Calnali.
127
Figura 3.21. Rana manchada (Género
Lithobates)
Figura 3.22. Pie de Gallo de la Montaña
(Tillandsia)
Figura 3.23. Paisaje
predominante al
sur del municipio
de Lolotla.
caracterizado por la
presencia de
nubosidad la mayor
parte del año dadas
las condiciones de
bosque mesófilo de
montaña.
128
3.2.2. Algunas situaciones de vida y de salud en los hogares de las localidades del
municipio de Lolotla.
Durante el mes de julio de 2017 se realizó el levantamiento de 196 encuestas en algunos hogares
de las localidades del municipio de Lolotla. Se buscó incluir las condiciones de vida de las
localidades situadas al norte, en el centro y al sur del municipio, de esta manera las encuestas se
levantaron en las localidades siguientes: Acatepec, Chalma, Chantasco, Chiconcoac, Contepec, El
Barco, Ixtlahuaco, Ocotlán, Santiago, Tolago, Xalcuatla, Xuchipantla (Figura 3.24).
Número de encuestas levantadas
Figura 3.24. Cantidad de encuestas levantadas en algunas localidades del municipio de
Lolotla.
40
35
30
25
20
15
10
5
0
37
26
16
16
19
21
25
15
10
3
3
5
Localidades
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
De las encuestas levantadas, se obtuvo que el 26.02 por ciento tiene como jefe del hogar a
población femenina y el 73.98 por ciento están encabezadas por población masculina. Por otra
parte, con relación a la edad la mayor proporción de jefes del hogar cuentan con una edad de
entre 30 y 59 años, con la distribución porcentual por grupos quinquenales de la manera
siguiente: de 30 a 34 años 10.71 por ciento, de 35 a 39 años con el 7.14 por ciento, de 40 a 44
años con el 11.73 por ciento, de 45 a 49 años con 10.2 por ciento, de 50 a 54 años con el 13.78
por ciento y de 55 a 59 con 13.27 por ciento. Los quinquenios restantes presentan valores
inferiores al 7 por ciento (Figura 3.25). Con relación a la escolaridad, estos jefes del hogar
presentan un nivel escolaridad predominantemente de educación secundaria, tanto para la
población femenina como para la masculina. La población con grado de estudios de bachillerato
y licenciatura está poco representada en el municipio de Lolotla (Figura 3.26).
129
Otro elemento recolectado es la cantidad de miembros que constituyen los hogares,
conforme a las encuestas levantadas se identificó que estas pueden constituirse desde 1 hasta 12
personas (Figura 3.27), siendo lo más frecuente encontrar hogares con 4 miembros (27.08 %).
Figura 3.26. Distribución de los jefes del
hogar por sexo y escolaridad.
Hombre
90 a 94
85 a 89
80 a 84
75 a 79
70 a 74
65 a 69
60 a 64
55 a 59
50 a 54
45 a 49
40 a 44
35 a 39
30 a 34
25 a 29
20 a 24
15 a 19
Mujer
Mujer
Cantidad de personas
Grupos de edad
Figura 3.25. Distribución de los jefes del
hogar por edad y sexo de las encuestas
levantadas.
40
24
15
20
15
5
5
15
Cantidad de personas
18
15
11
4
2
1
0
Ninguno
25
56
50
60
Hombre
Secundaria
Licenciatura
Escolaridad
25
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Figura 3. 27. Cantidad de habitantes por hogar.
Cantidad de hogares
60
52
50
35
40
33
31
30
20
14
13
8
10
8
1
1
9
12
0
1
2
3
4
5
6
7
8
Número de habitantes por hogar
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Tomando la situación de alfabetización de los jefes del hogar se tiene que el 85.71 por
ciento es alfabeta y el 14. 29 por ciento es analfabeta. Adicionalmente, considerando la
característica de lengua indígena y que también habla español, se obtuvo que la mayor proporción
130
de los hogares encuestados (18.37 %) cuyo jefe del hogar es del sexo femenino, es alfabeta, no
habla alguna lengua indígena y habla español; en tanto que, para la población masculina jefes del
hogar con las mismas especificaciones representan un porcentaje de 44.39 por ciento (Cuadro
3.4).
Cuadro 3.4. Situación de alfabetismo y lengua por sexo, de los jefes del hogar.
Condición de
alfabetismo
Sexo
Habla alguna
lengua indígena
No
Analfabeta
Sí*
Femenino
No
Sí*
No
Alfabeta
Analfabeta
Sí*
Masculino
No
Sí*
Alfabeta
Habla
español
Sí
Sí
No
Sí
Sí
Sí
Sí
No
Sí
No
Cantidad de
población
7
1
2
36
5
6
1
11
87
40
%
3.57
0.51
1.02
18.37
2.55
3.06
0.51
5.61
44.39
20.41
*La lengua indígena es el náhuatl.
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
De los jefes del hogar encuestados, se les preguntó que, si durante los últimos 15 días
habían trabajado, de los cuales se obtuvo que el 22.4 por ciento no realizó actividades, en tanto
que el restante 77.6 por ciento sí laboró (Figura 3.28). La población que estuvo laboralmente
activa se empleó principalmente en la agricultura (52 %), seguido de los servicios (19.3 %)
(Figura 3.29).
160
140
120
100
80
60
40
20
0
Figura. 3.29. Sector de ocupación de población
laboralmente activo
152
120
Cantidad de personas
ocupadas
Cantidad de jefes del hogar
Figura 3.28. Condición de
actividad laboral.
44
102
100
80
60
46
38
40
20
5
4
0
No
Si
No trabajó Agricultura Minería
Trabajó
1
Industría Educación Servicios
Actividad de ocupación
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
131
Respecto a los ingresos de los hogares encuestados, estos refirieron que sus percepciones
son principalmente menores a $ 1,000.00 pesos (37.7 %), le siguen un nivel de ingresos que va
desde los $ 1,000.00 hasta los $ 1,999.00 pesos (30.6 %); y en tercer lugar, desde los $ 2,000.00 a
los $ 2,999.00 pesos, con el 11.7 por ciento (Figura 3.30). Una importante percepción de ingresos
económicos en los hogares encuestados es a través de las transferencias económicas del programa
PROSPERA, cuyo beneficio es obtenido por el 69.3 por ciento de los hogares que se encuestó
(Figura 3.31).
Cantidad de jefes del hogar
Figura. 3.30. Niveles de ingresos económicos de los jefes del hogar.
74
80
60
60
40
20
23
16
11
6
4
1
No recibe Menos de $ Entre $
Entre $
Entre $
Entre $
Entre $
Entre $
1,000.00 1,000.00 y $ 2,000.00 y $ 3,000.00 y $ 4,000.00 y $ 5,000.00 y $ 10,000.00 y
1,999.00
2,999.00
3,999.00
4,999.00
9,999.00 $ 14,999.00
Ingresos
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Cantidad de jefes del hogar
Figura 3.31. Percepción de otros ingresos económicos.
160
140
120
100
80
60
40
20
0
136
58
2
No recibe otros ingresos
Otros
Programas de Gobierno
Recepción de otros ingresos económicos
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
132
1
0
No sabe
En el contexto de la vivienda, con relación a la tenencia de esta se obtuvo que un 79.6 por
ciento de los jefes del hogar son propietarios, en menor proporción la vivienda que habitan es
prestada (15.3 %), y el 4 por ciento no contestó la relación de propiedad que guarda con la
vivienda que ocupa y únicamente el 1.1 por ciento la renta (Figura 3.32). En cuanto a los
materiales de construcción de la vivienda (paredes, techo y piso), se obtuvieron 14
combinaciones, de estas, aquella caracterización de la vivienda más frecuente presenta paredes de
tabique, ladrillo o piedra, losa y piso de cemento. La configuración anterior, queda expuesta en el
cuadro 3.5 y la Figura 3.33, con la letra L la cual representa el 57.6 por ciento, de las viviendas
encuestadas.
Figura 3.32. Situación de tenencia de la vivienda.
Cantidad de viviendas
200
160
156
120
80
30
40
8
2
0
Es propietario
La renta
Prestada
No contestó
Situación de tenencia de la vivienda
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Cuadro 3.5 Grupos de configuraciones de la vivienda por materiales predominantes en la
pared, techo y piso.
Grupo
A
B
C
D
E
F
G
H
I
J
Pared
Techo
Lámina de
Lámina de asbesto o metálica
asbesto o metálica
Lámina de asbesto o metálica
Madera
Tabique, ladrillo,
piedra
Lámina de cartón
Losa de concreto
Palma o paja
Lámina de asbesto o metálica
Lámina de cartón
Piso
Cemento o firme
Cantidad de
viviendas
1
Cemento o firme
Tierra
Cemento o firme
Cemento o firme
Cemento o firme
Cemento o firme
Tierra
Cemento o firme
Mosaico u otro
4
1
1
1
2
43
6
6
1
133
K
L
M
Losa de concreto
N
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
recubrimiento
Tierra
Cemento o firme
Mosaico u otro
recubrimiento
Tierra
2
113
5
10
Además de los elementos que constituyen la estructura de la vivienda, se recolectó
información sobre los espacios interiores y los bienes materiales que los habitantes poseen y usan
en su vida cotidiana. De esta manera, se tiene que el 92.3 por ciento cuenta con un espacio
destinado a la cocina (Figura 3.34); por otra parte, el 74.4 por ciento cuenta con 1 o 2
habitaciones destinadas para dormitorio (Figura 3.35).
Figura 3.33. Distribución porcentual de los grupos de configuración de las viviendas.
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Los hogares que se encuestaron cuentan mayoritariamente con el servicio de energía
eléctrica (97.9 %) (Figura 3.36); en tanto que, el principal material empleado como combustible
para cocinar es la leña (56.1 %), seguido de una combinación del uso entre el gas y la leña (22.4
%); y, en tercer lugar, se sitúa únicamente el uso del gas como combustible (21.5 %) (Figura
3.37).
134
Figura 3.35. Cantidad de habitaciones
destinadas como dormitorios
181
200
150
100
50
15
0
Sí
No
Cantidad de viviendas
Cantidad de viviendas
Figura 3.34. Hogares con una habitación
destinada a la cocina.
80
Figura 3.36. Cantidad de hogares con
energía eléctrica.
20
100
50
4
0
No
Cuentan con energía eléctrica
4
1
1
2
3
4
5
6
Número de habitaciones utilizadas como
dormitorio
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
Figura 3.37. Combustible empleado.
110
120
150
6
0
192
Sí
39
40
Cantidad de hogares
Cantidad de viviendas
200
73
60
Cuenta con una habitación especial para la
cocina
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
73
100
80
60
44
42
40
20
0
Gas de cilindro
Leña
Gas de cilindro
y leña
Tipo de combustibleempleado
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
2017.
Los hogares encuestados presentan diversas formas de acceso al recurso hídrico (Figura
3.38), entre las posibilidades se encuentra el acceso al agua entubada dentro de la vivienda, la
cual resulta la forma más habitual (70.91 %), otros hogares acceden al agua a través del
suministro que proporciona una llave pública (4.08 %) y a partir de pozos o el río (3.5 %). De
aquellos hogares que cuentan con el servicio de agua entubada, la frecuencia de la dotación es
variable desde 1 hasta 7 veces en la semana, predominando 2 días en la semana (37.7 %) (Figura
3.39). Por otra parte, cuando el acceso al agua requiere del desplazamiento para su obtención, de
135
acuerdo con lo referido por la población encuestada, las fuentes naturales de agua se encuentran
localizadas a una distancia tal que los pobladores llegan a ellas en un tiempo de entre 5 y 10
minutos (Figura 3.40).
Cantidad de viviendas
Figura 3.38. Formas de acceso al agua en los hogares.
160
138
120
80
32
40
10
8
7
0
Agua entubada Agua entubada Agua entubada Acarrea agua Agua de pozo,
dentro de la
fuera de la
de la llave
río, lago, arroyo
vivienda
vivienda pero
pública
dentro del
terreno
1
Otro terreno
Acceso al recurso hidríco
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
74
80
57
60
36
40
20
Figura 3.40. Tiempo de recorrido para
aproximarse a una fuente natural de
abastecimiento de agua.
11
0
1
2
3
7
Número de días con dotación de agua en la
semana
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
Número de viviendas
Cantidad de viviendas
Figura 3.39. Cantidad de días en que se
proporciona agua en la red hídrica.
20
17
15
10
5
2
0
De 5 a 10 minutos
De 16 a 30 minutos
Distancia a los cuerpos de agua
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
En el rubro de saneamiento, el 96.4 por ciento de los hogares cuentan con excusado
(Figura 3.41). En tanto que, el 75.5 por ciento de los hogares cuenta con una conexión a la red
pública (Figura 3.42), en seguida se tiene que como destino de la descarga de desechos a una fosa
136
séptica (21.4 %). Respecto a la forma en la cual la población se deshace de los residuos sólidos,
la principal vía es a través de la recolección realizada por un camión o carrito de la basura (41.3
%); una segunda forma, es a través de la quema de la basura (28.5 %); y, en tercer lugar, a través
la combinación de métodos que incluye la quema y la recolección (15.8 %) (Figura 4.43).
250
200
191
150
100
50
5
0
Sí
No
Cuenta con
excusado
Figura 3.42. Formas de descargas de los desechos del hogar
Cantidad de viviendas
Cantidad de viviendas
Figura 3.41. Cantidad de
hogares con excusado
160
148
120
80
42
40
3
3
0
La red pública
Fosa séptica
Tubería que da No tiene drenaje
hacia una
barranca
Descargas de desechos
Fuente: elaborado con base en Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
trabajo de campo, 2017.
En cuanto a la tenencia de bienes en el hogar (Figura 4.44), el artículo que se presentó con
mayor frecuencia es la licuadora (85.71 %), seguido de la televisión (82.14 %), el refrigerador
(64.8) y la estufa (64.3 %). Respecto a los servicios, las telecomunicaciones son realizadas
principalmente a través de la telefonía celular (Figura 3.44), el porcentaje de hogares con este
bien es de (37.76 %) y como medio de entretenimiento se tiene el servicio de televisión de paga
(36.22 %). Los servicios de telefonía alámbrica (8.16 %) e internet (0.5 %) son inferiores al 10
por ciento.
Para el caso de los bienes y medios para el almacenamiento de agua se tiene
principalmente tinacos (40.31 %) y en menor medida cisternas (6.63 %). Mientras que, los bienes
empleados para el desplazamiento están representados por el automóvil (11.22 %). Otro rubro
recabado es la convivencia en el hogar con otras especies animales, al respecto, se obtuvo que en
los hogares encuestados el 76 por ciento convive con al menos un animal (Figura 3.45), los
cuales son esencialmente perros (42 %), seguido de aves de corral (35 %) y gatos (23 %).
137
Cantidad de hogares
Figura 3.43. Disposición de residuos sólidos.
100
81
80
56
60
31
40
20
17
5
La entierra
4
1
1
0
La quema La quema y La recoge el La recoge un La tira en un La tira en un La tira en
la entierra camión y la camión o
basurero
terreno una barranca
quema carrito de la público
baldío
basura
Método de disposición de los residuos sólidos
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Bienes y servicios en el hogar
Figura 3.44. Bienes y servicios en el hogar.
Estufa
Refrigerador
Licuadora
Horno
Lavadora
Boiler
Computadora
Linea telefónica
Internet
Celular
TV
TVdepaga
Radio
Tinaco
Cisterna
Automovil
Moto
Lancha
0%
20%
40%
60%
80%
Porcentaje de hogares con el bien
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
138
100%
Si
No
Figura 3.45. Convivencia con animales.
No
24%
Gatos
23%
Si
76%
Aves
35%
Perros
42%
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Además de la caracterización de los jefes del hogar, de sus viviendas, de los bienes y
servicios que estos cuentan, se preguntó sobre los alimentos que se consumen durante la semana.
De manera visual en las gráficas de caja (Figura 3.46) se observa que la frutas son ingeridas en el
50 por ciento de los hogares al menos 2 veces a la semana; en cuanto al consumo de verduras la
mediana es de 3 veces a la semana.El consumo de frutas muestra una concentración de consumo
entre 1 (Q1) y 4 (Q3) días, en contraste el consumo de verduras presenta mayor variabilidad con
1 (Q1) y hasta 7 (Q3) días.
El consumo de tortillas es generalizado con 7 días a la semana; en cuanto al consumo de
pan y de cereales-leguminosas su ingesta presenta una mediana de consumo de 4 y 3 días en la
semana respectivamente. El consumo de aceite y azúcar es generalmente de 7 días a la semana,
con algunas excepciones. Dentro de los alimentos de origen animal, aquellos que muestran menor
ingesta son los relativos a las carnes de pollo, de res y pescado, con una mediana de 1 día de
consumo; en tanto que, el huevo presenta una mediana de consumo de 2 días. Del consumo de
lácteos la mediana se ubica en 3 días a la semana con una amplitud variable de entre 1 (Q1) y 7
(Q3) días. Una situación similar muestra el consumo de agua embotellada cuya mediana se ubica
en 0 veces a la semana. El consumo de botanas es esencialmente bajo, con algunos casos atípicos
dentro de la distribución. Respecto al consumo de refrescos, el gráfico muestra que el máximo se
ubica en 2 días a la semana con una mediana de 0 días y el tercer cuartil (Q3) se ubica en un 1
día. Finalmente, respecto al consumo de bebidas alcohólicas y el uso del transporte público se
recabó que su ingesta y uso son respectivamente bajos.
139
Figura 3.46. Consumo de alimentos, bebidas y utilización de transporte público en la
semana.
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
140
Figura 3.46. Consumo de alimentos, bebidas y utilización de transporte público en la
semana. (Continuación).
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Con relación entre el consumo de alimentos y los ingresos económicos percibidos en los
hogares se observa que el acceso a algunos productos se da de manera diferenciada (Figura 3.47).
De esta manera, para el caso del consumo de frutas la variación del valor de la mediana de los
hogares que, no saben su ingreso, no reciben, y aquellos que tienen ingresos menores a $2,999.00
pesos, el consumo es hasta 2 días a la semana; mientras que, los hogares con ingresos de
$3,000.00 y hasta $ 9,999.00 pesos mensuales la ingesta de frutas incrementa en 1 día.
En cuanto a las verduras, la mediana de aquellos hogares que no reciben ingresos su
consumo es de 1 vez a la semana, mientras que la mediana de aquellos hogares que perciben un
ingreso de entre $ 3,000.00 y $ 3,999.00 pesos es de 4 días. Para el caso del consumo de tortillas
su consumo se encuentra generalizado con 7 días a la semana, independientemente del nivel de
ingresos. Del consumo de pan, destaca que en los hogares que tienen un ingreso de entre $
1,000.00 y $ 3,999.00 pesos la mediana de su ingesta se sitúa en 7 días. La mediana del consumo
de cereales y leguminosas se ubica en 3 días en aquellos hogares que refirieron no saber su
ingreso, los que no reciben, los que reciben menos de $ 1,000.00 pesos y de en aquellos que su
ingreso es de entre $ 3,000.00 y $ 9,999.00 pesos; en cuanto a la población que recibe entre $
1,000.00 y $ 2,999.00 pesos presentan el valor de la mediana con 4 días de consumo. En el rubro
de consumo de aceite y azúcar su consumo es de 7 días a la semana con algunas excepciones que
los consumen con menor frecuencia entre los hogares que no perciben ingresos y hasta $ 2,999.00
pesos.
141
Figura 3.47. Niveles de ingresos y consumo de alimentos en algunas localidades del
municipio de Lolotla.
Consumo de frutas e ingresos
Consumo de verduras e ingresos
Consumo de tortillas e ingresos
Consumo de pan e ingresos
Consumo de cereales y leguminasas e ingresos
Consumo de aceite, azúcar e ingresos
Fuente: encuestas realizadas en 2017.
142
Figura 3.47. Niveles de ingresos y consumo de alimentos en algunas localidades del
municipio de Lolotla. (Continuación)
Consumo de carnes e ingresos
Consumo de huevo e ingresos
Consumo de lácteos e ingresos
Consumo de botanas e ingresos
Consumo de agua embotellada e ingresos
Consumo de refrescos e ingresos
Fuente: encuestas realizadas en 2017.
143
Figura 3.47. Niveles de ingresos y consumo de alimentos en algunas localidades del
municipio de Lolotla. (Continuación)
Consumo de bebidas alcohólicas e ingresos
Utilización de servicios de transporte
público e ingresos
Fuente: encuestas realizadas en 2017.
En cuanto al consumo de alimentos de origen animal, para el caso de la carne aquellos
hogares que no reciben ingresos, los que reciben menos de $1,000.00 pesos, los que reciben de
entre $1,000.00 y $1,999.00 pesos, así como entre $3,000.00 y $4,999.00 pesos el valor de la
mediana se ubica en 1 día a la semana. En tanto que, aquellos hogares que perciben entre
$2,000.00 y $2,999.00 pesos, y entre 5,000 y 14,999, el consumo de carne de pollo, res o pescado
se eleva en un día más en la semana. En este rubro los máximos de consumo se presentan en
aquellos hogares que tienen ingresos entre $1,000.00 y $ 9,999.00 con el valor de 3 días a la
semana, mientras que en aquellos que reciben menos de $1,000.00 pesos mensuales su consumo
máximo es de 2 días y de los que no reciben ingresos el consumo máximo es de 1 día en la
semana.
En cuanto al consumo de huevo, su consumo conforme a la ubicación de la mediana va de
2 a 4 veces a la semana según el nivel de ingresos. Para el caso de los lácteos el Q2 o mediana se
sitúa en 7 veces a la semana en aquellos hogares que reciben entre $1,000.00 y $14,999.00 pesos.
Mientras que los hogares que no reciben ingresos y en aquellos que tienen un ingreso menor a
$1,000.00 pesos su consumo de acuerdo con el valor de la mediana es de 1 día a la semana. Para
el consumo de botanas su ingesta se observa hasta en 1 día a la semana en los hogares que tienen
un ingreso entre $ 3,000.00 y $3,999.00 pesos.
144
Del consumo de agua embotellada su acceso presenta una variabilidad entre los diferentes
niveles de ingreso, la mediana se sitúa en 7 días en aquellos hogares que perciben entre $2,000.00
y $3,999.00 pesos, y en aquellos hogares donde su ingreso es de $10,000.00 y $ 14,999.00. Para
el consumo de refrescos su consumo se observa mayoritariamente en los hogares que tienen
ingresos entre $5,000.00 y $9,999.00 pesos, con máximos que alcanzan hasta los 7 días a la
semana, mientras que los grupos cuyos ingresos son menores su máximo se sitúa hasta en 2 veces
a la semana. El consumo de bebidas alcohólicas es bajo, de hasta 1 vez en la semana. En cuanto a
la utilización de servicios de transporte público su utilización frecuentemente es de hasta 1 día a
la semana, y de acuerdo con la población encuestada estos viajes se hacen principalmente para
acudir a las plazas (mercados) que se instalan en las cabeceras municipales de Tlanchinol y
Tamazunchale, así como en la localidad de Ixtlahuaco, perteneciente al municipio de Lolotla, con
el fin de abastecerse de bienes que se consumirán en la semana.
De los hogares encuestados cuando algún miembro presenta problemas de salud acude
principalmente a un Centro de salud de la Secretaría de Salud (83.2 %); en segundo lugar, la
población accede a las instalaciones de Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en su
modalidad Oportunidades (6.1 %); en tercer lugar, se accede mayoritariamente a servicios de
salud propiciado por instituciones privadas (4.6 %). El 5.1 por ciento restante se distribuye entre
las instituciones siguientes: IMSS, Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los
Trabajadores del Estado (ISSSTE), e ISSSTE Estatal, Otro (Servicio médico de la Compañía
Minera Autlán); mientras que, el 1 por ciento se automedica (Figura 3.48).
En cuanto a la situación de derechohabiencia en los hogares encuestados estos se
encuentran afiliados principalmente al Seguro Popular (91.3 %), en tanto que, el restante 7.7 por
ciento de la población está afiliada al IMSS Oportunidades, IMSS, ISSSTE, en otras instituciones
y el 1 por ciento no está afiliada (Figura 3.49). Las situaciones por la cual la población se
encuentra afiliada a las respectivas instituciones son: por campaña de afiliación (89.3 %), por una
prestación del trabajo (5.6 %) y por contratación propia (5.1 %) (Figura 3.50). Se les preguntó a
los jefes del hogar si él o alguno de sus miembros presentó algún cuadro de enfermedad en el
lapso de 15 días previos al levantamiento de la encuesta, de ellos, el 77 por ciento refirió que no
estuvo enfermo y el 23 por ciento que sí (Figura 3.51). Las principales causas de enfermedad
presentadas fueron: tos, catarro, dolor de garganta con 10 casos (22.2 %), por infecciones
respiratorias con 6 casos (13.3 %) y a causa de accidentes (11.1 %) (Cuadro 3.6).
145
Figura 3.49. Afiliación a servicios de salud.
Cantidad de personas
Otro
ISSSTE
Estatal
Médico
privado
Se automedica
ISSSTE
IMSS
200
150
100
50
0
Centro de
salud (SSA)
IMSS
Oportunidades
Cantidad de personas
Figura 3.48. Institución de atención médica
en caso de enfermedad.
200
150
100
50
0
Seguro IMSS Op. IMSS
Popular
Institución
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
200
150
100
50
0
Campaña de
afiliación
Contratación Prestación del
propia
trabajo
Motivo de afiliación
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
Otra No está
institución afiliado
Institución
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
Figura 3.51. Población con alguna
morbilidad.
Cantidad de población
Cantidad de población
Figura 3.50. Motivo de afiliación a servicios
de salud.
ISSSTE
200
150
100
50
0
No
Sí
Presentó alguna enfermed
en los últimos 15 días
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo,
2017.
Cuadro 3.6. Causas de morbilidad en los hogares encuestados.
Enfermedad
Casos
Enfermedad
Accidente
5
Fractura
Artritis
1
Hipertensión
Asma
1
Infección intestinal
Diabetes y Parkinson
1
Infecciones respiratorias
Dolor de brazo
1
No sabe
Dolor de cabeza
2
Otro
Dolor de espalda
1
Parálisis
Dolor de huesos
1
Parkinson
Dolor en la columna
1
Pie hinchado
Enfermedad de corazón
1
Reflujo
Fiebre
2
Tos, catarro, dolor de garganta
Fiebre reumática
1
Varicela
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
146
Casos
1
2
1
6
1
1
1
1
1
1
10
1
La atención a la salud se desarrolla en el marco de preferencias de la población y del
medio construido, el cual ofrece las posibilidades para mantener un estado de salud. Las
decisiones que la población toma sobre su estado de salud comienzan desde que considera
oportuno atender sus afecciones, de los jefes del hogar que refirieron que él o alguno de los
miembros de su hogar presentó alguna enfermedad en los 15 días previos al levantamiento de la
encuesta se obtuvo que, la enfermedad había iniciado en un periodo menos de 15 días (31.8 %);
otro grupo había presentado afecciones a su salud hace más de un año hasta el momento en que
se atendió (25 %); y en tercer lugar, un grupo de población refirió que presentó un desequilibrio
de su salud de entre 15 días a 1 mes previo a su atención (Figura 3.52).
La percepción de la gravedad de la enfermedad fue especialmente considerada como leve
(38.6 %), en seguida se consideró como moderada (36.4 %), y en tercer lugar como grave (20.5
%). De la población enferma el 90.9 por ciento recibió atención médica y el 9.1 por ciento no,
este último grupo acudió con un familiar y con un curandero. En tanto que, de la población que
recibió atención médica el personal de salud que la proporcionó fue un médico general (71.1 %).
Del grupo que se atendió sólo el 21.1 por ciento agendó una cita, al respecto el tiempo que
transcurrió entre que se agendó y hasta la fecha de la consulta les pareció a los usuarios
principalmente corto (50 %). En cuanto a los desplazamientos realizados para la obtención de una
consulta estos en su mayoría van desde 5 hasta 30 minutos (63.2 %), tiempo que los usuarios de
los servicios de salud consideraron como de regular (34.2 %) a corto (31.6 %) y que con relación
a su casa está cerca (39.5 %); mientras que para llegar a estos servicios mayoritariamente no se
generó un costo (63.2 %). Derivado de la consulta, la calidad de atención proporcionada se
considerada principalmente como buena (75.7 %). De la población que asistió a un servicio
médico el 84.2 por ciento no pagó la consulta médica, debido a su condición de derechohabiente.
Así mismo, después de la consulta la salud de los usuarios mejoró (75.7 %), para un 13.5 por
ciento no cambió y un 10.8 por ciento consideró que mejoró mucho. De entre las causas por las
cuales la población asistió a determinado servicio de salud, las principales causas son la afiliación
(37.8 %) y por la proximidad del centro de atención (29.7 %). Con relación a, si regresara al sitio
de atención médica en caso de otra enfermedad el 21.2 por ciento refirió que no tiene otra opción,
el 21.2 por ciento si regresara porque lo tratan bien, el 18.2 por ciento porque está cerca de su
casa y el 15.2 por ciento porque no tiene que pagar. Mientras que aquella población que no
regresaría a atenderse las causas es, porque lo trataron mal y porqué no mejoró.
147
Figura 3.52. Diagrama sobre las percepciones del servicio de atención médica de la población que presentó algún caso de morbilidad.
0
Moderado Grave Muy grave
20
10
0
No
Percepción
25
20
15
10
5
0
Muy bueno
Programó cita
Bueno
Cantidad de personas
Cantidad de personas
3
2
1
A
0
10
0
No
Cantidad de pacientes
Cantidad de pacientes
10
0
15
10
5
0
Mejoró
No cambió
4
3
2
1
0
La (lo) tratan mal
No mejoró
Causas
101 a 1001 a 2001 a
1000 2000 3000
30
20
10
0
5 a 30 31 a 60 61 a
120
Pesos 00/100 MN
El tiempo de traslado hasta el sitio de atención
médica le pareció
15
10
5
0
Muy corto Corto
Regular
Largo Muy largo
121 a
180
181 a
240
241 a
480
Minutos
Con referencia a su casa el lugar de atención
médica esta
Percepción de tiempo
20
15
10
5
0
Muy
cerca de
su casa
Cerca
Regular
Lejos
Muy lejos
Percepción de distancia
Fuente: elaborado con base
en trabajo de campo, 2017.
Por que sí regresaría
Cantidad de personas
Cantidad de personas
Otro
Lo atienden
rápido
0
5
51 a
100
Sí
20
Por qué no regresaría
5
Conoce al
médico/curand
ero
20
5 a 50
Largo Muy largo
Tiempo de traslado hasta el sitio de atención
médica
30
0
Regular
Percepción del tiempo
Pagó hasta el sitio de atención médica
Percepción
10
Es barato/no
cuesta
20
25
Mejoró mucho
15
Está cerca
Muy corto Corto
30
Corto
Motivo de utilización del servicio médico
Tiene afiliación
0
Cobro
Percepción del tiempo
Cantidad de personas
5
14
12
10
8
6
4
2
0
Minutos
Después de la consulta médica su salud
4
Causas
30
Calidad
5
Largo
40
Regular
Cómo le pareció el tiempo de la cita
Demasiado largo
No. de consultas
Familiar
30
Sí
10
Minutos
Cantidad de personas
Leve
30
15
Cantidad de personas
5
40
240
20
El tiempo de espera le pareció
Cantidad de personas
10
3 a 30 31 a
60
Cantidad de personas
15
10
Tiempo de espera para recibir la consulta
Cobro de la consulta
La calidad del servicio fue
Cantidad de personas
20
20
Tipo de personal de salud
Programó cita
Cantidad de personas
Cantidad de personas
Percepción de la enfermedad
30
0
Cantidad de personas
Tiempo de inicio de la enfermedad
Muy leve
Sí
Recibió
atención
Curandero
No
Enfermera
Menos De 15 De 1 a 3 De 3 a 6 De 6 Más de
de 15 días a 1 meses meses meses a 1 año
días
mes
1 año
0
Médico
especialista
0
10
Médico
general
5
20
Promotor/auxili
ar de salud
10
50
40
30
20
10
0
40
30
Cantidad de personal
15
Duración de la consulta
Personal que lo atendió
Recibió atención
médica
Personas
Cantidad de personas
Tiempo del episodio de la enfermedad
8
4
0
No tiene otra
opción
La (lo) tratan La (lo) atienden No tiene que Queda cerca de
bien
bien
pagar
sus casa
Le atienden
rápido
Le dieron los El medico le
medicamentos explico bien la
enfermedad y
tratamiento
Causa
148
Figura 3.52. Diagrama sobre las percepciones del servicio de atención médica de la población que presentó algún caso de morbilidad. (Continuación).
A
Consiguó los medicamentos
15
10
5
0
2
3
4
5
30
20
10
0
6
No
Cantidad de medicamentos
En el mismo lugar de la En otra unidad de la
consulta
misma institución
Sólo algunos
25
20
15
10
5
0
Sí
12
10
8
6
4
2
Dónde se realizó los exámenes
6
4
2
0
En otra unidad de la
misma institución
Realización de exámenes
Sitio de realización
No
Le solicitarón exámenes de laboratorio.
8
Sí
0
En una farmacia
particular
Lugar donde consiguió los medicamentos
Realizó los exámenes de laboratorio
Cantidad de personas
Cantidad de personas
30
25
20
15
10
5
0
Situación de acceso a los medicamentos
Exámen de laboratorio
No
Si, todos
Cantidad de personas
1
40
Dónde consiguio los medicamentos
Cantidad de población
20
Cantidad de personas
Cantidad de personas
Número de medicamentos recetados
En la misma unidad
En otro lugar
Fuente: elaborado con base en trabajo de campo, 2017.
Cantidad de personas
Estado de las instalaciones de salud
30
25
20
15
10
5
0
Muy buenas
Buenas
Regulares
Muy malas
Percepción de la situación de las instalaciones
149
Figura 3.53. Diagrama sobre las percepciones del servicio de atención de hospitalización.
16
14
12
10
8
6
4
2
0
cantidad de personas
Cantidad de personas
Cirugía
Enfermedad
Accidente
Parto
Examén o
chequeo
Sí
Hospitalizaciones en el último año
Centro de
IMSS
Médico privado
salud u
Oportunidades
Hospital de
SSA
Defensa o
marina
Otro
Cantidad de personas
ISSSTE
Mala
Causa de satisfacción
25
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Seguro Social
(IMSS)
Buena
Calidad
Institución de hospitalización
Cantidad de personas
Muy buena
Motivo de hospitalización
Requirió de hospitalización
20
15
10
5
0
1
2
3
15
Número de hospitalizaciones
Institución
8
7
6
5
4
3
2
1
0
El personal está El personal tiene
Recibió
Lo trataron bien Medicamento, La operación o
Buenos
bien preparado experiencia
orientación y
materia y equipo trtamiento resultados en su
apoyo del gestor
suficiente y de estuvo bien
salud
de servicios de
buena calidad
salud
Motivo de satisfacción
Gastos generados por hospitalizaciones
Financiamiento del seguro popular
14
Cantidad de personas
25
Cantidad de personas
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
Cantidad de personas
Cantidad de personas
180
160
140
120
100
80
60
40
20
0
No
Calidad del servicio de hospitalización
Causa de la hospitalización
Hospitalización en el último año
20
15
10
5
12
10
8
6
4
2
0
0
No
Sí
Financiado por SP
Ahorros, cuentas
bancarias, tanda
Venta de
propiedades
Prestamos
Otro
Recursos empleados para financiamiento
Fuente: elaborado con base
en trabajo de campo, 2017.
150
Figura 3.54. Situación y causas de discapacidad, en hogares encuestados en algunas
localidades de Lolotla.
Discapacidades
Situación de la discapacidad
120
100
80
60
40
20
20
18
16
14
12
10
8
6
4
2
0
20
Sin
Con alguna
discapacidad discapacidad
física y mental
140
18
14
12
10
8
6
4
Oir, aún
usando
aparato
auditivo
Poner
Aprender a
atención para hacer cosas
aprender
como otras
cosas
personas de la
sencillas
misma edad
0
Por una
Por un
Por edad
enfermedad accidente avanzada
Tipo de discapacidad
Situación
Otro
Salud
Educación
Empleo
Comunicación
Transporte
Grado de satisfacción
Muy satisfecho
Satisfecho
Insatisfecho
Muy insatisfecho
No sabe
0
50
100
150
Cantidad de personas
0
50
100
Cantidad de personas
150
0
50
100
Cantidad de personas
150
0
50
100
Cantidad de personas
150
0
Convulsiones
1
80
Depresión
1
60
Depresión, gastritis
1
Derrame cerebral
1
40
Diabetes
50
100
Cantidad de personas
150
0
Con enf.
crónica
Situación
Figura 3.56. Satisfacción de la población encuestada respecto a su contexto inmediato
Alimentación
3
Sin enf.
crónica
Causa
50
100
150
4
Colitis
100
0
Así nació
Personas
con la
enfermedad
7
20
2
Enfermedad
crónica/
Enf. crón. y
comorbilidades
Artritis
Asma
120
16
Caminar,
Ver, aún
Hablar,
moverse, subir usando lentes comunicarse o
o bajar
conversar
0
Situación de enf. crónica
Cantidad de persoanas
Cantidad de personas
140
Causa de la discapacidad
Cantidad de personas
160
Cantidad de personas
Figura 3.55. Situación y causas de enfermedades crónicas, en hogares encuestados en
algunas localidades de Lolotla.
12
Diabetes y gastritis
1
Gastritis
4
Gastritis, colitis
2
Hipertensión
15
Hipertensión, asma,
colitis, gastritis
Hipertensión, asma,
diabetes
Hipertensión, colitis
1
Hipertensión, colitis,
diabetes, gastritis
Hipertensión, colitis,
gastritis
Hipertensión,
depresión
Hipertensión, diabetes
1
Hipertensión,
diabetes, Parkinson
Hipertensión,
enfermedad del
corazón
Hipertensión, gastritis
1
Presión baja, colitis,
gastritis
Presión baja, gastritis
1
1
1
3
1
7
2
1
1
Cantidad de personas
Fuente: elaborado con base
en trabajo de campo, 2017.
151
De la población atendida, se le recetó principalmente hasta 1 medicamento (44.7 %), los
cuales pudo conseguir (91.1 %), en el mismo sitio donde se le proporcionó la consulta (72.2 %) y
en farmacias particulares (25 %) (Figura 3. 52. Continuación). Otro aspecto que se recabó fue la
recomendación de realizarse exámenes de laboratorio, de la población que asistió a un servicio
médico, de acuerdo con la valoración médica al 42.1 por ciento se le solicitó exámenes de
laboratorio, y de esta población sólo el 68.8 por ciento se los realizó. El lugar donde se realizó los
exámenes fue en la misma unidad médica (63. 6 %).
Se recabó información referente a si en los hogares el jefe del hogar o algún miembro de
la familia fue hospitalizado en el último año (Figura 3.53), al respecto se obtuvo que el 13.8 por
ciento tuvo una hospitalización, la principal causa fue por una enfermedad (51.9 %), para la
realización de una cirugía (25.9 %) y por parto (11.1 %). Las hospitalizaciones fueron realizadas
mayoritariamente en alguna unidad perteneciente a la Secretaría de Salud (59.3 %). La cantidad
de veces hospitalizadas en el último año de acuerdo con la población encuestada fue de una vez
en el año (81.5 %), presentándose una persona que utilizó de los servicios hospitalarios hasta en
15 ocasiones. El costo por los servicios recibidos fue cubierto por el Seguro Popular (81.5 %), no
obstante, un sector de la población empleo sus ahorros o cuentas bancarias para cubrir los costos
generados por las hospitalizaciones. Por los servicios recibidos de hospitalización la población
considera que la calidad de atención fue buena (59.3 %), muy buena (33.3 %) y un para un 7.4
por ciento la atención fue mala, las causas de satisfacción son referidas como que el personal está
bien preparado (28 %), lo trataron bien (20 %) y porque la operación estuvo bien (20 %).
En cuanto a la condición de discapacidad, un 24.5 por ciento de los hogares refirió contar
con algún miembro que tiene algún tipo (Figura 3.54), de este grupo se recabó que la más común
son aquellas relacionadas con el sentido de la vista (39.6 %) y aquellas para lograr un
desplazamiento, como caminar o moverse (35.4 %). Las causas de las discapacidades son
atribuidas a la edad avanzada (39.6 %) y por enfermedades (37.5 %). En cuanto a la situación de
las enfermedades crónicas, el 62.8 por ciento presenta alguna de estas, la más común es la
hipertensión, esta puede encontrarse asociada con una y hasta tres comorbilidades (Figura 3.55).
Una segunda afección en salud presente es la diabetes. Finalmente, la última sección de la
encuesta consideró el grado de satisfacción de las condiciones de vida (Figura 3.56), de manera
general la población está satisfecha en el rubro de alimentación (70.4 %), salud (61.7 %),
152
educación (74 %), comunicación (61.7 %) y transporte (63.3 %), el único rubro que cuenta con
una insatisfacción es el empleo (54.1 %).
3.2.3. Configuración espacial de las características sociales y de vivienda.
Figura 3.57. Estructura de
conectividad entre localidades del
municipio de Lolotla, Hidalgo.
El presente apartado aborda la distribución de las
características sociales y de vivienda en 2010,
analizando si la configuración espacial responde a un
arreglo aleatorio o por el contrario a la formación de
clusters. Si bien las localidades no se encuentran
colindantes, para ello, GeoDa realiza una estructura de
conectividad entre las localidades a modo de red como
se muestra en la Figura 3.57.
De esta manera, (Figura 3.58), se identificó una
configuración de clústeres significativa, de la población
derechohabiente al norte del municipio con valores altoalto en las localidades de: Quimixtla (100 %),
Fuente: elaborado con GeoDa.
Cuatitlanapa (94.5 %) y La Pimienta (86.11 %) (Figura
3.58). En contraste, en sur del municipio las localidades que muestran valores bajo-bajo son:
Ocotlán (67.74 %), Huitznopala (70.96 %), Acatepec (83.05 %), y Lolotla (83.07 %).
Respecto a la característica de la población mayor de 3 años que habla alguna lengua
indígena, esta se concentra al norte del municipio en: Chalchocotipa (90.9 %), El Barco (98.71
%), Xalcuatla (97.3 %), Xuchipantla (94.90 %), Chantasco (64.79 %), y Tentla (51.9 %). Un
clúster de valores bajos-bajos se configura por las localidades ubicadas al sur del municipio con
un porcentaje de población indígena predominantemente nulo. El gráfico de I Moran respecto a
esta característica muestra una autocorrelación espacial positiva del 0.9 (Figura 3.59).
En lo concerniente al grado promedio de estudios, conforme al análisis espacial se
reconoce un arreglo significativo de valores alto-alto que incluye a las localidades de Chalma
(6.85) y Tlacozintla (6.42). Por otra parte, al norte del municipio se encuentra un clúster alto-bajo
conformado por las localidades de Xuchipantla (6.48) y Chantasco (6.39), las cuales se
encuentran rodeadas de localidades con valores bajos en cuanto a grado promedio de estudios.
153
En cuanto a la Población Económicamente Activa, el valor del Índice de Moran de la
autocorrelación espacial es negativa con un valor de -0.004, en este rubro las localidades que
configuran un clúster de valores altos-altos son las localidades Xalcuatla (32.39 %), Xuchipantla
(32.15 %) y Chantasco (27.53 %). Si bien los valores del porcentaje de la PEA del clúster altoalto son relativamente bajos, el porcentaje más alto de PEA es de 45.45 por ciento
correspondiente a la localidad de Chalchocotipa situada al norte del municipio y cuyo vecino más
próximo es la localidad de Chantasco.
En el rubro de viviendas con piso de tierra, sobresale Tentla (26.78 %) localidad
representada en la Figura 3.58 como un cluster alto-alto, al respecto, entre sus vecinos más
próximos se encuentra Chalchocotipa con el valor porcentual más alto de piso de tierra en el
municipio (75 %). En tanto que, el clúster de valores bajo-bajo se situa en la localidad de
Chiconcoac cuyo porcentaje de piso de tierra es del 7.75 por ciento, esta localidad tiene como
vecinas más cercanas a Mecapala y Tolago con el 0 por ciento y el 6.02 por ciento de piso de
tierra respectivamente. La característica de viviendas con agua potable expuesta en la Figura
3.58, refiere a la localidad de Tentla como clúster bajo-bajo, cuyo valor se encuentra en el
cuadrante I, al extremo inferior izquierdo (Figura 3.59). En tanto que, en un clúster alto-bajo
están las localidades de Xalcuatla (98.7 %) y La Unión (86.95 %), situadas en la parte inferior del
cuadrante IV, que refiere a valores altos rodeados de bajos.
Para el caso de las viviendas con drenaje, se observa una autocorrelación espacial positiva
con un valor de 0.721 (Figura 3.59). En este sentido se presentan dos cluster que diferencian esta
característica, uno de ellos situado en 10 localidades ubicadas al norte del municipio con valores
bajo-bajo; y el otro, al sur y suroeste con los valores porcentuales más altos de viviendas que
disponen de drenaje. Finalmente, para la cuestión de viviendas con energía eléctrica se presenta
un clúster de valores alto-alto al noreste del municipio, en tanto que, al centro del municipio se
presentan localidades que conforman un clúster alto-bajo, que refiere a localidades con valores
altos (Chiconcoac, Tolago y Huitznopala) rodeadas de valores porcentuales bajos de energía
eléctrica en la vivienda. Derivado del análisis de autocorrelación, conforme al I de Moran,
algunos de los valores más significativos en el arreglo espacial se encuentran en las
características de la población hablante de una lengua indígena con 0.901, las viviendas con
drenaje de 0.721 y la derechohabiencia presenta una autocorrelación del 0.315.
154
Figura. 3.58. Autocorrelación espacial de aspectos socioeconómicos de las localidades
del municipio de Lolotla, 2010.
Fuente: análisis realizado a través del Software GeoDA con información estadística del INEGI, 2012a.
155
Figura 3.58. Autocorrelación espacial de aspectos socioeconómicos de las localidades
del municipio de Lolotla, 2010. (Continuación)
Fuente: análisis realizado a través del Software GeoDA con información estadística del INEGI, 2012a.
156
Figura 3.58. Autocorrelación espacial de aspectos socioeconómicos de las localidades
del municipio de Lolotla, 2010. (Continuación)
Fuente: análisis realizado a través del Software GeoDA con información estadística del INEGI, 2012a.
157
Figura 3.59. I. de Moran de la autocorrelación espacial de aspectos socioeconómicos
de las localidades del municipio de Lolotla.
Derechohabiencia
Población indígena
Grado Promedio de estudios
PEA
Viviendas con piso de tierra
Viviendas con agua potable
Fuente: análisis realizado a través del Software GeoDA con información estadística del INEGI, 2012 a.
158
Figura 3.59. I. de Moran de la autocorrelación espacial de aspectos socioeconómicos
de las localidades del municipio de Lolotla. (Continuación)
Viviendas con drenaje
Viviendas con energía eléctrica
Fuente: análisis realizado a través del Software GeoDA con información estadística del INEGI, 2012 a.
3.2.4. Acceso a los servicios de salud.
La ubicación, distribución y acceso a los servicios de salud en cada localidad supone una
diferencia que facilita o genera fricción a su acceso. El emplazamiento de unidades médicas está
condicionado a las características del entorno físico y del núcleo de población. De esta manera
del medio físico se considera la orografía, con el objetivo de establecer unidades libres de
obstáculos que favorezcan el acceso al centro de atención en salud; la cuestión climática e
hidrológica a fin de asegurar la operación y seguridad de la infraestructura la cual puede ser
afectada por fenómenos de carácter hidrometeorológico. Por otra parte, la existencia de Reservas
Naturales restringe su instalación, ya que estas tienen el propósito de limitar el crecimiento
poblacional y urbano (Secretaría de Salud, 2016).
De la cuestión poblacional los elementos considerados son, la composición por edad y
sexo, su distribución geográfica, densidad, la dinámica de natalidad, esperanza de vida y
mortalidad, estratos socioeconómicos, condición laboral, movimientos migratorios y los flujos
producidos por las localidades expulsoras y receptoras. En tanto que, el análisis epidemiológico
está centrado en identificar los requerimientos de la población en función de la prevalencia,
incidencia, mortalidad, egresos hospitalarios e indicadores de la demanda no satisfecha. Otros
aspectos considerados del núcleo poblacional son: la disponibilidad de infraestructura para el
transporte de tipo: terrestre, aéreo y marino. La presencia de sistemas de comunicación como
teléfono, telégrafo, correo, satélite, repetidoras radiofónicas e internet; aspectos relacionados con
159
los mínimos de bienestar como energía eléctrica, agua potable, drenaje, escuelas. Por último y de
importancia están el Plan Nacional de Desarrollo, Estatal, Regional y Municipal en el ámbito de
la salud, los programas de desarrollo urbano y de uso de suelo (Secretaría de Salud, 2016). En
este sentido, se cuenta con lineamientos establecidos por la SEDESOL (s/f), de acuerdo con el
tipo emplazamiento, por institución y especificaciones del equipamiento de las cuales en este
trabajo sólo se recuperan tres, la cantidad de población receptora del servicio, la distancia
recomendada y la unidad básica de servicio (Cuadro 3.7).
Cuadro 3.7. Lineamientos de equipamiento en salud.
Equipamiento
Centro de salud
Centro de salud
Hospital general
Localización
Subsistema de
salud
Rango de
población en las
localidades
receptoras
Radio de
servicio
regional/tiempo
recomendable
Rural
Urbano
Regional
Unidad básica
de servicio
Secretaría de Salud Secretaría de Salud
Unidad de
Medicina
Familiar
Regional
Instituto Mexicano
del Seguro Social
10,001 a 50,000
50,001 a 100,000
100,001 a 500,000
más de 500,001
5,0001 a 10,000
2,500 a 5,000
10,001 a 50,000
2,500 a 5,000
5,0001 a 10,000
10,001 a 50,000
Secretaría de Salud
10,001 a 50,000
50,001 a 100,000
100,001 a 500,000
más de 500,001
5 a 15 km
60 minutos
5 a 15 km
30 minutos
60 km
2 horas (máximo)
15 kilómetros
20 minutos
Consultorio
Cama de
hospitalización
Consultorio de
medicina familiar
Consultorio
Fuente: elaborado con base en SEDESOL, sf.
El municipio de Lolotla está comprendido en de la IX Jurisdicción Sanitaria “Molango”
(Figura 3.60.), hasta el año 2016 la jurisdicción contó con un total de 89 unidades de atención
médica, las cuales estaban distribuidas en los seis municipios que la conforman, los cuales son:
Calnali, Huazalingo, Lolotla, Molango, Tepehuacán y Tlanchinol. En la jurisdicción se ofrecen
servicios de tres instituciones de salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en
conjunto con el programa de inclusión social PROSPERA; el Instituto de Seguridad y Servicios
Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE); y la Secretaría de Salud (SS).
Cabe mencionar que considerando un área de influencia de 5 km conforme al Cuadro 3.7,
se cubren las localidades de la Jurisdicción Sanitaria de Molango en un 99 por ciento (Figura
3.61.). Por otra parte, las vías de comunicación facilitan el desplazamiento a los centros de
atención en salud, en este sentido, las localidades del municipio de Lolotla están conectadas a
160
través de caminos de terracería, calles y carreteras, (Figura 3.61) a no más de 250 metros de
distancia de algún tipo de una vía de comunicación, a excepción de la localidad El Coyol situada
a 900 metros de la vialidad más próxima.
Figura 3.60. Unidades de atención médica en la Jurisdicción Sanitaria IX Molango,
2016.
Fuente: elaborado con base en DGIS, 2017; CLUES 2015a
Al tomar como referencia y punto de partida de una ruta el centroide de cada localidad del
municipio de Lolotla hasta las coordenadas de ubicación de las unidades de atención en salud
más próxima (Cuadro 3.8) las distancias entre ambas son las siguientes:
161
Cuadro 3.8. Distancias entre las localidades del municipio de Lolotla y las unidades de
atención en salud de primer nivel en la Jurisdicción Sanitaria IX “Molango”.
Localidad
Localidad destino
Acatepec
En la misma localidad
Capultitlán
Chalma
Chalchocotipa Xuchipantla
Chalma
En la misma localidad
Chantasco
En la misma localidad
Chiconcoac
En la misma localidad
Chiquitla
Ahuacatlán (Calnali)
Comontla
Xuchitlán
Contepec
Chalma
Cuatitlanapa
Xuchitlán
El Barco
Xuchipantla
Huitznopala
En la misma localidad
Ixtacuatla
Xuchitlán
Ixtlahuaco
En la misma localidad
La Florida
Jalpa (Tlanchinol)
La Pimienta
Jalpa (Tlanchinol)
La Unión
Xuchitlán
Las Puentes
Acatepec
Lolotla
En la misma localidad
Mazahuacán
Ixtlahuaco
Mecapala
Chiconcoac
Ocotlán
Lolotla
Quimixtla
Xuchitlán
Santiago
Lolotla
Tentla
Chantasco
Tetlapaya
Aquilastec (Tepehuacán)
Tlacozintla
Ixtlahuaco
Tlaltepingo
Huitznopala
Tolago
Chiconcoac
Xalcuatla
Chantasco
Xuchipantla
En la misma localidad
Xuchitlán
En la misma localidad
Fuente: calculado en QGIS con base en DGIS e INEGI a.
CLUES
HGIMO002294
HGSSA001870
HGIMO000935
HGSSA001870
HGSSA001882
HGSSA016611
HGIMO000281
HGIMO000940
HGSSA001870
HGIMO000940
HGIMO000935
HGIMO000911
HGIMO000940
HGIMO000923
HGSSA003830
HGSSA003830
HGIMO000940
HGIMO002294
HGSSA001865
HGIMO000923
HGSSA016611
HGSSA001865
HGIMO000940
HGSSA001865
HGSSA001882
HGSSA003270
HGIMO000923
HGIMO000911
HGSSA016611
HGSSA001882
HGIMO000935
HGIMO000940
Distancia (km)
0
6.729
3.35
0
0
0
1.543
2.708
2.704
3.81
2.233
0
8.408
0
6.828
6.713
8.34
2
0
7.305
5.859
4.196
5.541
2.472
7.179
4.245
2.253
5.251
1.339
3.274
0
0
De manera específica las unidades médicas y el acceso por nivel de atención se describen
a continuación: Unidades de primer nivel de atención. El municipio de Lolotla cuenta con diez
unidades de atención de primer nivel (Cuadro 3.9). De estas unidades, 6 pertenecen al IMSS en
162
colaboración con el programa de inclusión social PROSPERA (DGIS, 2017). Las unidades
proporcionan el servicio de atención médico a la población que carece de afiliación a un sistema
de seguridad social y que se encuentran dentro del padrón de beneficiarios del programa
PROSPERA. Los recursos provienen del subsidio federal a través del Ramo 19 “Aportaciones a
Seguridad Social” y de la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (CNPSS), órgano
descentralizado de la Secretaría de Salud encargada de proporcionar el componente de Salud
dentro del programa de PROPERA (DOF, 2016).
Figura. 3.61. Infraestructura vial en Lolotla, 2015.
Fuente: elaborado con base en INEGI, 2012b; INEGI, 2015.
163
Entre los servicios que proporciona el IMSS-PROSPERA, están las consultas generales,
vacunación, atención al niño y madre, planificación familiar y orientación adolescente y
nutricional (IMSS, 2016). Cabe mencionar que en la localidad de Acatepec cuenta con una
brigada de salud que, con base a lo expuesto en el Diario Oficial de la Federación publicado el 22
diciembre de 2016, la brigada está integrada por una enfermera y un técnico de promoción y
educación para la salud, responsables de proporcionar los cuidados en su área de especialización,
así como de la entrega de medicamentos en aquellas poblaciones distanciadas del área de
influencia del programa, bajo una ruta preestablecida. (DOF, 2016). En tanto que, Lolotla,
Chalma, Chantasco y Chiconcoac cuentan con unidades de tipo rural de 1 núcleo básico de la
Secretaría de Salud.
Cuadro 3.9. Unidades de salud en Lolotla, 2015.
Institución
Tipología
IMSSPROSPERA
Unidad Médica Rural
Brigadas de Salud
Secretaría
de Salud
Rural de 01 Núcleo Básico
CLUES
HGIMO000906
HGIMO000911
HGIMO000923
HGIMO000935
HGIMO000940
HGIMO002294
HGSSA001865
HGSSA001870
HGSSA001882
HGSSA001894
Localidad
Acatepec
Huitznopala
Ixtlahuaco
Xuchipantla
Xuchitlán
Acatepec
Lolotla (Cab. mpal.)
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Fuente: elaborado con base en DGIS, 2017
Unidades de segundo y tercer nivel de atención. Para el acceso al segundo nivel de
atención se realizan desplazamientos principalmente al municipio de Tlanchinol donde se
encuentra el Hospital Integral de Tlanchinol “Ilusión” (Figura 3.62). Hasta el 2013 la cantidad de
hospitalizaciones en esta unidad de población procedente de Lolotla fue de 1,514
fundamentalmente para la atención del embarazo y parto. Los principales flujos a la unidad
hospitalaria de Tlanchinol tienen como origen las localidades de Chiconcoac, Xuchitlán,
Ixtlahuaco y la cabecera municipal de Lolotla.
Las unidades de tercer nivel que recibieron mayor población procedente del municipio de
Lolotla están ubicadas en la Ciudad de México (Figura 3.63) como el Instituto Nacional de
Cancerología (31.3 %), seguido del Hospital General de México y el Hospital Juárez de México;
en tanto que en la propia entidad de Hidalgo la población asistió al Hospital Obstétrico de
164
Pachuca (12.0 %), finalmente otras unidades suman el 24.1 por ciento. Espacialmente la
población tiene que desplazarse hacia la ciudad de México para la obtención de los tratamientos
requeridos, y en menor proporción hacia la capital de Hidalgo, San Luis Potosí, Jalisco y
Monterrey. (Cuadro 3.10).
Figura 3.62. Flujos de asistencia de la población de las localidades de Lolotla a la unidad de
hospitalización Tlanchinol. 2000-2013.
Fuente: elaborado con base en SINAIS, 2015a.
Cuadro 3.10. Asistencia a unidades médicas de tercer nivel, 2000-2013.
CLUES
DFSSA004043
DFSSA003973
DFSSA003944
Nombre
Instituto Nacional de Cancerología
Hospital General de México
Hospital Juárez de México
No. de egresos
26
15
12
%
31.3
18.1
14.5
165
HGSSA002425
DFSSA004084
DFSSA004014
DFSSA004096
Hospital Obstétrico Pachuca
Hospital Infantil de México Federico Gómez
Instituto Nacional de Pediatría
Instituto Nacional de Perinatología Isidro Espinosa De
Los Reyes
DFSSA003961
Hospital General Dr. Manuel Gea González
SPSSA001102
Hospital Central Dr. Ignacio Morones Prieto
DFSSA001296
Hospital Pediátrico Iztacalco
JCSSA002195
Hospital Civil de Guadalajara Fray Antonio Alcalde
MNSSA001874 Hospital Infantil Eva Samáno De López Mateos
Total
Fuente: elaborado con base a SINAIS, 2015 a.
10
7
3
3
12.0
8.4
3.6
3.6
2
2.4
2
2.4
1
1.2
1
1.2
1
1.2
83 100.0
Figura 3.63. Desplazamiento intermunicipal desde Lolotla para recibir servicios de salud de
segundo y tercer nivel de atención de 2000 a 2013.
Fuente: elaborado con base en SINAIS, 2015 a.
166
3.3. Vínculos entre la salud de la población y su contexto social y ambiental.
3.3.1. Principales causas de mortalidad.
Los determinantes sociales de la salud concentran su atención en identificar la condición de
mortalidad de la población esencialmente en aquellas derivadas de las desigualdades, que
ocasionan una muerte prematura. En el periodo comprendido entre 2000 y 2013, en el municipio
de Lolotla las principales causas de mortalidad corresponden a las de tipo crónico degenerativo.
En este sentido, la principal causa de muerte es ocasionada por la enfermedad cardíaca
isquémica, con la mayor proporción de casos de muerte en el periodo de estudio, la segunda
afección que causa mortalidad es la diabetes mellitus, seguida de las enfermedades de la
circulación cerebral, en cuarto lugar, se presentan la mortalidad derivada de enfermedades
crónicas respiratorias y en quinto lugar las hepáticas (Figura 3.64).
Figura 3.64. Cinco principales causas de mortalidad, en Lolotla, 2000-2013.
20
Enfermedad cardíaca isquémica
Cantidad de defunciones
Diabetes mellitus
15
Enfermedades de la circulación cerebral
Enfermedades crónicas de las vías respiratorias
Enfermedades hepáticas
10
5
0
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
Años
Fuente: elaborado con base en SINAIS, 2015b.
Por la condición de tratarse de enfermedades crónico-degenerativa las principales causas
de mortalidad se registran principalmente en el grupo etarios de los adultos mayores, también
cabe destacar que estas se presentan principalmente en la población femenina, y que de las cinco
causas de mortalidad referidas, únicamente las enfermedades hepáticas se presentan con mayor
proporción en los hombres (Figura 3.65). Cabe mencionar que, sin diferenciar entre hombres y
mujeres, para el 2010, de acuerdo con la “Dinámica demográfica 1990-2010”, y las
167
“Proyecciones de población 2010-2030” elaboradas por el Consejo Nacional de Población
(CONAPO), la esperanza de vida para el estado de Hidalgo en 2010 se fijó en 73.6 años
(CONAPO en INEGI, 2020).
Figura 3.65. Distribución por edad y sexo de las cinco principales causas de mortalidad en
Lolotla, 2000-2013.
Enfermedad cardíaca isquémica
Hombre
105 a 109
100 a 104
95 a 99
90 a 94
85 a 89
80 a 84
75 a 79
70 a 74
65 a 69
60 a 64
55 a 59
50 a 54
45 a 49
40 a 44
35 a 39
30 a 34
25 a 29
20 a 24
15 a 19
10 a 14
5a9
1a4
Menores 1 año
Hombre
105 a 109
Mujer
Mujer
100 a 104
95 a 99
90 a 94
85 a 89
80 a 84
75 a 79
70 a 74
Edad (años)
Edad (años)
Distribución por edad de todas las causas de
mortalidad presentadas en Lolotla.
65 a 69
60 a 64
55 a 59
50 a 54
45 a 49
40 a 44
35 a 39
30 a 34
25 a 29
20 a 24
15 a 19
60
40
20
0
20
40
60
20
Cantidad de defunciones
10
20
Enfermedades de la circulación cerebral
Hombre
105 a 109
90 a 94
90 a 94
85 a 89
85 a 89
80 a 84
80 a 84
75 a 79
75 a 79
70 a 74
70 a 74
Edad (años)
95 a 99
60 a 64
55 a 59
65 a 69
60 a 64
55 a 59
50 a 54
50 a 54
45 a 49
45 a 49
40 a 44
40 a 44
35 a 39
35 a 39
30 a 34
30 a 34
25 a 29
25 a 29
20 a 24
20 a 24
15 a 19
Mujer
100 a 104
95 a 99
65 a 69
Hombre
105 a 109
Mujer
100 a 104
Edad (años)
0
Cantidad de defunciones
Diabetes mellitus
15 a 19
20
10
0
10
20
Cantidad de defunciones
------------Esperanza de vida para el Estado de Hidalgo
Fuente: elaborado con base en SINAIS, 2015b.
168
10
20
10
0
10
Cantidad de defunciones
20
Figura 3.65. Lolotla: distribución por edad y sexo de las cinco principales causas de
mortalidad. (Continuación)
Enfermedades crónicas de las vías
respiratorias
Hombre
105 a 109
90 a 94
90 a 94
85 a 89
85 a 89
80 a 84
80 a 84
75 a 79
75 a 79
70 a 74
70 a 74
Edad (años)
95 a 99
60 a 64
55 a 59
65 a 69
60 a 64
55 a 59
50 a 54
50 a 54
45 a 49
45 a 49
40 a 44
40 a 44
35 a 39
35 a 39
30 a 34
30 a 34
25 a 29
25 a 29
20 a 24
20 a 24
15 a 19
Mujer
100 a 104
95 a 99
65 a 69
Hombre
105 a 109
Mujer
100 a 104
Edad (años)
Enfermedades hepáticas
15 a 19
20
10
0
10
20
20
Cantidad de defunciones
10
0
10
20
Cantidad de defunciones
------------Esperanza de vida para el Estado de Hidalgo
Fuente: elaborado con base en SINAIS, 2015 b.
Entre los aspectos considerados como factores de riesgo para el desarrollo de las principales
causas de mortalidad se encuentran las consideraciones presentadas en el Cuadro 3.11:
Cuadro 3.11. Factores asociados al desarrollo de las principales causas de mortalidad en el
municipio de Lolotla.
E. Cardíaca
Isquémica*.
Herencia
genética
Edad
Sexo
Personas con
antecedentes
familiares
En adultos
mayores.
En hombres, se
presenta
tempranamente y
en mujeres en una
edad más tardía
E. de la
circulación
cerebral
Factores no modificables
Personas con
Personas con
antecedentes
antecedentes
familiares
familiares
Diabetes
mellitus
Más de 45 años
Mayor
prevalencia en
mujeres que en
hombres.
Más de 60 años
Similar entre
hombres y
mujeres.
E. crónicas de
las vías
respiratorias*
Deficiencia de
alfa-1 antitripsina
E. hepáticas
Personas con
antecedentes
familiares
Más de 40 años
Más frecuente en
hombres
En mujeres se
incrementa el
riesgo de h.
alcohólica
debido a que el
procesamiento
de sustancias
alcohólicas en el
hígado.
169
Cuadro 3.11. Factores asociados al desarrollo de las principales causas de mortalidad en el
municipio de Lolotla. (Continuación).
E. Cardíaca
Isquémica*.
Estilos de
vida, ingesta
de alimentos
o sustancias
Comorbilidades
E. de la
circulación
cerebral
Factores modificables
Diabetes
mellitus
E. crónicas de
las vías
respiratorias*
Sedentarismo,
tabaquismo,
alcoholismo
Sedentarismo, y
dietas con alta
ingesta de
calorías,
carbohidratos y
grasas saturadas.
Tabaquismo,
sedentarismo
Tabaquismo,
exposición al
humo del tabaco
(tabaquismo
pasivo),
exposición
ocupacional a
polvos y
sustancias
químicas. Quema
de combustibles
de biomasa y
contaminación
atmosférica.
Dislipidemia,
obesidad,
hipertensión
arterial, diabets
mellitus
Niveles altos de
triglicéridos,
Enfermedades del
corazón o
accidentes
cardiovasculares,
depresión,
síndrome de
ovario
poliquístico.
Sobrepeso y
obesidad
Hipertensión,
obesidad,
dislipidemias
Asma
E. hepáticas
Consumo
excesivo de
alcohol.
Obesidad,
diabetes tipo 2
*Se consideraron los factores asociados al EPOC.
Fuente: elaborado con base en Palacios et al, (2012); Cisneros Sánchez et al, (2013); Berenguer et al,
(2016); OMS (2020).
Las gráficas expuestas en la Figura 3.65 empleadas para identificar los quinquenios y el
sexo en los cuales se presentan con mayor frecuencia las cinco primeras causas de mortalidad en
el municipio de Lolotla, y que para el caso específico de las defunciones por enfermedad crónica
de las vías respiratorias contrasta con la información del Cuadro 3.11 que refiere que la
mortalidad es mayor en hombres que en mujeres, no obstante, por una cuestión de actividad
ocupacional ha de suponerse que en el proceso de la preparación de alimentos en el cual se
emplea fundamentalmente como combustible la leña se generán afectaciones a las vías
respiratorias con la inhalación del humo generado de la combustión.
En tanto que, considerando tres grandes grupos de edad, de niños y adolescentes (0 a 14
años), de jóvenes y adultos (15 a 64 años) y de adultos mayores (65 y más años). En el periodo de
170
Grupo de 65 y más años.
Tumores malignos del tejido
linfático, de los órganos
hematopoyéticos y de tejidos…
Anormalidades cromosómicas
no clasificadas en otras partes
Número de defunciones
25
Grupo de 15 a 64 años
Tumores malignos de los
órganos digestivos
20
Exposición accidental a otros
factores y a los no especificados
15
Enfermedad cardíaca isquémica
10
Causas de mortalidad
Enfermedades hepáticas
5
0
Diabetes mellitus
Enfermedad hipertensiva
171
2000 a 2010, las principales causas de mortalidad son para el primer grupo las enfermedades
Enfermedades congénitas del
sistema nervioso
respiratorias y cardíacas durante el período perinatal; para el segundo grupo, la diabetes mellitus;
100
Enfermedades crónicas de las
vías respiratorias
75
Diabetes mellitus
50
Causas de mortalidad
Enfermedades de la
circulación cerebral
25
0
Enfermedad cardíaca
isquémica
Grupo de 0 a 14 años
Causas de mortalidad
Número de defunciones
Enfermedades congenitas de la
ojos, orejas, cara y cuello
y finalmente, en el tercer grupo la mortalidad por enfermedad cardíaca isquémica (Figura 3.66).
8
6
4
2
0
Enfermedades respiratorias y
cardíacas durante el período
perinatal
Figura 3.66. Distribución de las principales causas de mortalidad por tres grandes grupos de
edad en Lolotla, 2000-2013.
Fuente: elaborado con base en SINAIS, 2015 b.
Número de defunciones
Las causas de mortalidad de Lolotla presentan una similitud con el panorama de
mortalidad nacional en 2010 (Figura 3.67), donde las causas registradas refieren como principal a
la diabetes mellitus, seguida de enfermedades isquémicas del corazón, enfermedad
cerebrovascular, cirrosis y otras enfermedades crónicas del hígado, en quinto lugar se sitúan las
agresiones (homicidios) y en el sexto sitio se ubica a la Enfermedad Pulmonar Obstructiva
(EPOC).
Figura 3.67. Principales causas de muerte en México de 1990 a 2012.
(Tasas por cada 100,000 habitantes).
Fuente: Martínez y Murayama, 2016: p. 38.
Debido a que la principal causa de mortalidad es por la enfermedad cardiaca isquémica,
su distribución espacial encabeza el número de defunciones en las localidades del municipio
(Figura 3.68). En el mismo ámbito la segunda afección, la diabetes mellitus, destaca su cantidad
en las localidades de Tolago e Ixtlahuaco al centro y sur del municipio respectivamente. Causas
de mortalidad no referidas previamente por la elevada cantidad a nivel municipal pero que
destacan a nivel local son causadas por enfermedades nutricionales, específicamente, la
172
desnutrición (E43) en la localidad de Xuchipantla, con 2 defunciones; otra es la causada por
agresiones con objetos sin filo (Y00) y por medios no especificados (Y09) en Tetlapaya con un
caso para cada tipo de agresión y por agresiones con objetos cortantes (X99) con un caso en
Ocotlán. Por exposición accidental a otros factores y a los no especificados (X59) en La Unión
con dos defunciones, esto al norte del municipio; y de trastornos mentales debidos al consumo de
alcohol y psicótropos, específicamente trastornos mentales y del comportamiento debidos al
consumo de alcohol (F10) en la localidad de Cuatitlanapa con 1 defunción.
Figura 3.68. Principales causas de mortalidad por localidad en Lolotla, 2000-2013.
Fuente: elaborado con base a SINAIS, 2015 b.
173
Respecto a la tasa de incidencia acumulada por cada 10,000 habitantes de las 5 principales
enfermedades referidas las tasas más altas en cuanto a enfermedad cardiaca isquémica se
presentan en las localidades de Lolotla e Ixtlahuaco (10.9/10,000 hab.) (Cuadro 3.12); la tasa más
alta de diabetes y de enfermedades de la circulación cerebral se localiza en la localidad de
Ixtlahuaco con 10.9 y 7 7.7 por cada 10,000 habitantes, para cada enfermedad respectivamente.
Para el caso de las enfermedades crónicas de las vías respiratorias el valor más alto se encuentra
en la localidad de Chiconcoac (7.7/10,000 hab.); mientras que, de las enfermedades hepáticas la
mayor tasa de incidencia se sitúa en la localidad de Lolotla (5.5/10,000 hab.).
Lolotla
Acatepec
Santa Cruz
Ayotetla
El Barco
Comontla
Chalma
Chantasco
Chiconcoac
Chiquitla
La Florida
Huitznopala
Ixtacuatla
Ixtlahuaco
Mazahuacán
Ocotlán
La Pimienta
Quimixtla
Santiago
Tentla (Cerro
Blanco)
Tetlapaya
Tlacozintla
Tlaltepingo
Xalcuatla
Xuchipantla
Xuchitlán
Aquixquitla
Las Puentes
Tlaxcango
Tolago
E. hepáticas
E. crónicas
de las
vías
respiratorias
10.9
5.5
5.5
2.2
2.2
2.2
6.6
4.4
5.5
1.1
0
1.1
1.1
8.8
9.8
8.8
4.4
0
3.3
3.3
10.9
3.3
0
1.1
0
1.1
0
0
0
7.7
0
3.3
5.5
1.1
1.1
1.1
10.9
0
0
0
1.1
0
0
0
1.1
3.3
2.2
6.6
4.4
1.1
3.3
2.2
7.7
0
1.1
0
0
2.2
1.1
0
0
3.3
2.2
7.7
4.4
1.1
0
0
1.1
0
0
0
0
0
0
0
0
1.1
2.2
2.2
3.3
0
0
0
3.3
0
1.1
0
0
1.1
1.1
0
2.2
3.3
3.3
0
5.5
1.1
0
3.3
1.1
1.1
0
1.1
2.2
0
0
2.2
0
0
2.2
2.2
0
1.1
0
4.4
0
0
4.4
1.1
1.1
0
0
0
0
0
3.3
1.1
1.1
3.3
0
0
0
1.1
1.1
0
0
0
1.1
1.1
1.1
0
0
0
2.2
Fuente: tasas calculadas con base a SINAIS, 2015 b.
174
E. de la
circulación
cerebral
Diabetes
mellitus
Localidad
E. cardíaca
isquémica
Cuadro 3.12. Tasa de incidencia de las principales causas de mortalidad
por cada 10,000 hab.
3.3.2. Asociaciones entre el contexto y la salud.
En el proceso de identificar aquellas características presentes en las condiciones de vida de la
población como su situación de derechohabiencia, el grado promedio de estudios, el hablar una
lengua indígena, el contar con los servicios de agua, energía eléctrica y drenaje en la vivienda así
como su condición de población económicamente activa y las principales causas de mortalidad se
realizó una correlación de Pearson. Conforme a los conjuntos de datos correlacionados y
expuestos en el Cuadro 3.12, se obtuvo lo siguiente:
i) Correlación entre las variables socioeconómicas y causas de mortalidad: de este grupo
destaca la correlación negativa entre las variables socioeconómicas y la condición de
hablar una lengua indígena, en este sentido, cuando una variable incrementa la otra
presenta un decremento, de esta manera a mayor porcentaje de población indígena se
presenta menor es la tasa de incidencia por las cinco principales causas de mortalidad,
pese a la destacada relación entre estas dos variables, el valor de significación es mayor a
0.05, lo cual es no significativo. La forma gráfica de estas correlaciones se observa en el
Cuadro 3.13.
Los valores restantes entre las condiciones socioeconómicas y las tasas de incidencia de
las causas de mortalidad principales son positivas y significativas. De esta manera la
cuestión de derechohabiencia y las tasas de mortalidad por enfermedad isquémica,
diabetes, de la circulación cerebral y crónico respiratorias son bajas, y únicamente alta
respecto a las enfermedades hepáticas.
De la correlación entre el grado promedio de estudios y las cinco principales causas el
valor de la correlación es moderado. Para el caso de la PEA, se presenta una panorama
igual al de la derechohabiencia, con una correlación baja para las cuatro primeras causas y
moderada para la enfermedades hepáticas. Con relación a las viviendas que disponen de
agua y las tasas de mortalidad se presenta una correlación moderada en todos los casos.
La correlación entre estar conectado al drenaje público y las enfermedades de la
circulación cerebral es alta, es moderada con la diabetes, las enfermedades crónicas
respiratorias y las hepáticas, y bajas con la enfermedad cardíaca isquémica. Para el caso
de las viviendas que disponen de energía eléctrica y la enfermedad cardíaca isquémica, las
enfermedades de la circulación cerebral y las hepáticas la correlación es moderada,
175
mientras que, para la diabetes mellitus y las enfermedades crónicas respiratorias la
correlación es baja.
ECR
.958**
.341*
.920**
.912**
.552**
.589**
1
.386**
.125
.407**
.361*
.405**
.363*
.431**
1
.313*
-.145
.423**
.323*
.414**
.458**
.382**
.598**
1
.346*
-.151
.454**
.366**
.529**
.628**
.431**
.601**
.555**
1
.322*
.016
.419**
.373**
.435**
.427**
.363*
.643**
.700**
.646**
1
EH
ECC
DRENAJE
.544**
-.248
.633**
.492**
.634**
1
DM
.541**
-.012
.564**
.436**
1
ECI
.896**
.403**
.854**
1
AGUA
.930**
.215
1
PEA
.381**
1
i) correlación entre c. socioeconómicas y t.
de incidencia de mortalidad.
LUZ
1
ESTUDIOS
DERECHO
INDIGENA
ESTUDIOS
PEA
AGUA
DRENAJE
LUZ
ECI
DM
ECC
ECR
EH
INDIGENA
ii) correla.
entre c.
socioeconómicas
DERECHO
Cuadro 3.13. Correlación de Pearson entre variables socioeconómicas y tasas de las
principales causas de mortalidad en las localidades del municipio de Lolotla.
.412**
.149
.527**
.477**
.455**
.440**
.431**
.488**
.617**
.540**
.743**
1
**. La correlación es significativa en el nivel 0,01 (2 colas).
*. La correlación es significativa en el nivel 0,05 (2 colas).
iii) correlación entre t. de incidencia de
mortalidad.
Variable
DERECHO
INDIGENA
ESTUDIOS
PEA
AGUA
DRENAJE
LUZ
ECI
DM
ECC
ECR
EH
176
Descripción de la variable
Porcentaje de población derechohabiente
Porcentaje de población mayor de 3 años
que habla una lengua indígena
Grado promedio de estudios
Porcentaje de población económicamente
activa
Porcentaje de viviendas particulares
habitadas que disponen de agua potable
Porcentaje de viviendas particulares
habitadas que disponen de drenaje
Porcentaje de viviendas particulares
habitadas que disponen de energía
eléctrica
Tasa de mortalidad por enfermedad
cardiaca isquémica
Tasa de mortalidad por diabetes mellitus
Tasa de mortalidad por enfermedad de la
circulación cerebral
Tasa de mortalidad por enfermedad
crónicas respiratorias
Tasa de mortalidad por enfermedad
hepática
De las correlaciones anteriormente
referidas
Intervalo
1
0.8 0.99
0.6 0.79
0.4 0.59
0.2 0.39
0.01 0.19
0
Grado de la correlación
Perfecta
Muy alta
Alta
Moderada
Baja
Muy baja
Nula
ii) Correlación entre las variables socioeconómicas: en este grupo se incluyen siete aspectos
de la población en el municipio de Lolotla. Al respecto, la derechohabiencia se
correlaciona en una dirección positiva, con las otras seis variables. De manera específica,
con el grado promedio de estudios, la PEA y el servicio de energía eléctrica, el grado de
correlación es muy alta. La derechohabiencia se correlaciona con un grado moderado con
las viviendas que cuentan con agua y drenaje; y una correlación baja con la condición de
hablar una lengua indígena.
En cuanto a la condición de hablar una lengua indígena se presenta una correlación
moderada respecto a la PEA y baja con la situación de acceso a energía eléctrica. Se
observa una asociación baja, no significativa con el grado promedio de estudios; y en una
dirección negativa y no significativa con grado muy bajo y bajo respecto de las viviendas
que cuentan con agua entubada y drenaje.
Respecto al grado promedio de estudios se tiene una correlación muy alta con la PEA y el
contar con energía eléctrica, una correlación alta con las viviendas que disponen de
drenaje y moderada con las viviendas que disponen de agua potable. En tanto que, la PEA
se correlaciona con un grado muy alto con las viviendas que disponen de energía eléctrica
y se relaciona de manera moderada con las viviendas que disponen de agua y drenaje.
Mientras que, las viviendas que cuentan con agua se correlacionan de manera alta y
moderada con aquellas que disponen de drenaje y energía eléctrica. Finalmente, para este
grupo de correlaciones cabe referir que las viviendas que cuentan con drenaje se
correlacionan con un grado moderado con aquellas que tienen energía eléctrica.
iii) Correlación entre las tasas de incidencia de las principales cinco causas de mortalidad:
conforme a los valores obtenidos de las tasas de incidencia y su correlación se observan
altos grados de asociación entre las enfermedades crónicas respiratorias y las otras cuatro
causas de mortalidad, así como también de las enfermedades hepáticas con las tasas de
diabetes, enfermedades crónicas respiratorias. Otra alta correlación se presenta entre las
tasas de enfermedad cardíaca isquémica y la enfermedad de la circulación cerebral. Las
restantes combinaciones se encuentran en grados de correlación moderados. Las altas
correlaciones entre enfermedades posiblemente esté asociado a los factores que
intervienen en su desencadenamiento los cuales son similares conforme al Cuadro 3.11.
177
178
Figura. 3.69. Diagramas de dispersión de las condiciones sociales y las principales tasas de mortalidad del municipio de
Lolotla, Hidalgo.
**. La correlación es significativa en el nivel 0,01 (2 colas).
*. La correlación es significativa en el nivel 0,05 (2 colas).
3.3.3. La exposición al manganeso (Mn) y sus efectos sociales y en la salud.
Referente al desarrollo de la actividad minera en el municipio resulta útil la revisión al Programa
de Ordenamiento Ecológico del Estado de Hidalgo. Al respecto, las disposiciones aplicables en el
territorio del municipio de Lolotla se encuentran establecidas bajo las Unidades de Gestión
Ambiental (UGA), XIV que se distribuye desde el norte, centro y suroeste; y de la UGA XV, al
sureste del municipio (Figura 3.70). La caracterización de las unidades se concentra en el
ANEXO IV.
Figura 3.70. Unidades de Gestión Ambiental (UGA) en el municipio de Lolotla, conforme al
Ordenamiento Ecológico Territorial del Estado de Hidalgo.
Fuente: elaborado con base en GEH, 2001.
179
El Programa de Ordenamiento con referencia a la actividad minera (Mi) para las UGA
XIV considera las disposiciones 1, 5, 6, 7 y para la UGA XV (ANEXO IV), que exponen lo
siguiente:
1. Se prohíbe la exploración y extracción minera.
2. Solo se permite la extracción de material para el autoconsumo de las comunidades, previo
acuerdo con las autoridades locales y evaluación en materia de impacto ambiental.
5. Las instalaciones ya existentes para extracción de minerales con fines comerciales podrán
continuar mediante una Manifestación de Impacto Ambiental.
6. Se deberán rehabilitar los caminos de acceso al área existentes y se prohíbe abrir nuevos
caminos.
7. Es necesario que se establezca un sistema de disposición de desechos sólidos y líquidos
producidos en los campamentos de residencia. No deberán asentarse plantas de beneficio de
mineral ni presas de jales. Las áreas explotadas deberán ser rehabilitadas a través de acciones de
conservación de suelo y agua (GEH, 2001).
La realización de la actividad minera para ambas UGA se encuentra condicionado lo cual
implica que:
…el uso del suelo o actividad actual que tiene una Unidad de Gestión Ambiental, que por su
incompatibilidad con las condiciones físicas y bióticas del terreno donde se localiza, deberá de
limitarse con criterios ecológicos que restrinjan su crecimiento e incentiven su modificación para
evitar el deterioro de los recursos naturales. Uso del suelo o actividad actual que se encuentra
desarrollándose en forma incompatible con las características y diagnóstico ambiental de la
unidad territorial. Uso del suelo o actividad de apoyo al predominante que requiere regulaciones
estrictas especiales (GEH, 2001).
La localización de la actividad minera en la UGA XIV se sitúa próxima a las localidades
de Chiconcoac y Tolago, localidades que se encuentran en el Ejido de Chiconcuac, cuya dotación
se encuentra en el Diario Oficial de la Federación con fecha de 29 de julio de 1966, donde se
resuelve que: derivado de la solicitud de los vecinos de Chiconcoac al Gobernador del Estado de
Hidalgo, la cual fue ingresada con fecha de 24 de junio de 1930, donde se expone la necesidad de
dotación por carecer de lo indispensable para satisfacer sus necesidades económicas. Como
resolutivo se tiene la dotación de los vecinos del poblado de Chiconcuac con una superficie de
1,026 Ha, a un total de 125 capacitados en materia agraria, los cuales han poseído la tierra de
forma quieta, pública y pacífica desde ya varios años. Aplicándose el artículo 58° del Código
Agrario vigente al momento de la resolución refiere “…Los núcleos de población indígena
tendrán preferencia para ser dotados con las tierras y aguas que hayan venido poseyendo…”
(DOF, 1966: 42). Otra localidad situada en este ejido de Chiconcuac es Tolago, ambos
localizados a una distancia que no supera los 2 Km. (Figura 3.71). Por dicha proximidad se han
180
elaborado estudios en al menos tres grupos temáticos que definen los efectos por la exposición a
Manganeso.
Figura 3.71. Localización de la actividad minera en el municipio de Lolotla.
A
A
Fuente: elaborado con base en RAN (2020).
En 2010, la minería reemplazó al turismo como el cuarto generador de ingresos en
México, esto en un ranking que está encabezado por la industria automotriz, la extracción
petrolera y el ingreso de remesas de población migrante. Si bien esta actividad genera ingresos
económicos, también trae consigo conflictos sociales y repercusiones en el medio ambiente
(Catalán-Vázquez et. al., 2014). De manera específica la extracción del mineral de Mn en el
181
distrito minero “Molango” ubicado en la Sierra Alta del estado de Hidalgo es operado por la
compañía Minera Autlán en los municipios de Lolotla, Molango, Tepehuacán, Tlanchinol y
Xochicoatlán. Este distrito minero contiene reservas probadas que lo ubican como el mayor
yacimiento en América Latina y el quinto a nivel mundial (Catalán-Vázquez et. al., 2014).
Previo al inicio de operaciones de la minera Autlán, la región de la Sierra Alta de Hidalgo
se caracterizaba por estar incomunicada y habitada por población dedicada a la agricultura de
subsistencia. El arribo de la minera implicó la posibilidad de trabajo asalariado, la construcción
de carreteras, medios de transporte, la electrificación y escuelas, se dinamizó el comercio con lo
cual algunos campesinos se capitalizaron y pudieron mejorar sus viviendas o adquirir ganado. El
panorama político desde 1920 estuvo fuertemente influido por las figuras de caciques que
reclutaban a la población masculina para que realizaran trabajos sin pago alguno, en tanto que
posterior a 1960 se instauraron las relaciones capitalistas de producción, lo cual redujo el poder
de los caciques al no poder coexistir el cacicazgo y la organización minera con el dominio de la
fuerza de trabajo y del territorio (Paz, 2008).
Las operaciones iniciadas por la compañía datan de 1960 (Catalán-Vázquez et. al., 2014).
Posteriormente, se inició la exploración en cielo abierto y subterráneo en la localidad de Chipoco,
perteneciente al municipio de Tlanchinol. En 1964 se inició la construcción de la primera unidad
industrial de transformación u horno de nodulación, en Ayotetla, Lolotla; al mismo tiempo se
realizó la explotación a cielo abierto de bióxido de manganeso en la localidad de Nonoalco,
perteneciente al municipio de Xochicoatlán, en 1999 se construyó en esta localidad una planta
procesadora para generar bióxido de manganeso grado batería. Las operaciones de la empresa
minera iniciaron en una etapa que el estado mexicano requería de la modernización, y los
recursos extraídos eran insumo fundamental en la producción de acero de la paraestatal Altos
Hornos de México S.A., por tal, la empresa recibió una concesión (CMA, 2005 en Paz, 2008).
Para 1980 las comunidades próximas a las operaciones de extracción de Mn realizaron el
cierre de carreteras como medida para que el Gobierno del Estado abordará la contaminación
ambiental. La atención por parte del Estado de Hidalgo es hasta 1995, fecha en la cual se crea el
Grupo Intersectorial de Gestión Ambiental para el Distrito Minero de Molango. El grupo quedó
conformado por la participación de los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal),
representantes de las comunidades, la compañía Minera Autlán y el sector académico (Catalán-
182
Vázquez et. al., 2014). María Fernanda Paz (2008) refiere que, el territorio nunca ha sido tema de
disputa entre las localidades y la empresa minera puesto que el uso de territorio se realizó a través
de contratos que estipulaban productos y servicios, así como la venta de este.
Para 1997, el Gobierno del Estado de Hidalgo solicitó al Instituto de Salud, Medio
Ambiente y Trabajo la realización de un estudio para evaluar los riesgos derivados de la
exposición a Mn, desde ese momento y hasta la fecha han continuado los estudios respecto al
tema (Figura 3.72). Los resultados del primer estudio concluyeron la presencia de altos niveles de
Mn en la sangre (7.5 a 88 mg/L) de la población objetivo (ANEXO V). En tanto que, las
concentraciones de Mn en aire fueron 2 a 3 veces más altas que las registradas en zonas urbanas
(Catalán-Vázquez et. al., 2014).
Figura 3.72. Diagrama de la dinámica investigativa de la Exposición a Mn en el
Distrito Minero de Molango.
Fuente: modificado de Riojas H. s/f.
La producción investigativa sobre exposición a Mn. Ambiente y salud que abordan el área
de interés identificada comprende 12 artículos y dos tesis de licenciatura entre el periodo de 1999
a 2015 (Cuadro 3.13). De los investigadores participantes en estos artículos destaca la
183
participación de M Catalán-Vázquez, quien encabeza las investigaciones catalogadas en este
trabajo como de tipo social. Por otra parte, destaca la participación de Horacio Riojas-Rodríguez,
quien colaboró en 9 de 14 investigaciones identificadas.
Las investigaciones publicadas durante este lapso no superan las 2 unidades por año, con
ausencia de estas en los años 2000, 2002-2003, 2005 y 2007 (Figura 3.74). El financiamiento que
ha permitido la realización de estas investigaciones es especialmente a través del Institute
Development Research Center of Canada, (Figura 3.75) el cual se define en su portal web como
un centro que invierte en conocimiento, innovación y soluciones para generar cambios en la
población de países en desarrollo, a través de las investigaciones que respaldan se busca la
ruptura de círculos de pobreza, la reducción de la desigualdad, la vulnerabilidad para una vida
sana y sostenible. En su acervo se encuentra casi 2 millares de proyectos apoyados. El IDRC
cuenta con una sede central en Ottawa, con cinco oficinas regionales en India, Jordania, Kenia,
Senegal y Uruguay (Figura 3.73).
Figura 3.73. Distribución espacial de las oficinas regionales del IDRC.
Fuente: IDCR, 2020.
Complementariamente, las investigaciones son financiadas por el Consejo Nacional de
Ciencia y Tecnología (CONACyT). Los recursos se han ejercido a través de investigadores que
se encuentran adscritos principalmente en el Instituto Nacional de Salud Pública, en el Instituto
Nacional de Neurología y Neurocirugía, así como del Instituto de Salud Ambiente y Trabajo
(Figura 3.73). De manera general se distinguen tres temáticas de estudio:
184
Cuadro 3.14. Producción investigativa sobre la exposición a Mn en el Distrito Minero Molango.
Título de la investigación
Autor/Año de publicación
Alamo-Hernández U. 12
Alatorre Eden-Wynter R. 8
Alcaraz-Zubeldia M. 11
Aldape F. 10
Arechiga-Serrano R. 13
Cano-Valle F. 1
Catalán-Vázquez M. 9
Cortez-Lugo M. 12
Cruz J. 2
Drucker-Colín R. 5
Flores J. 10
Guarneros M. 5
Hernández-Bonilla D. 12
Hernández-Méndez B. 10
Hudson R. 7
Mercado L. 13
Miranda J. 4
Montes S. 11
Olvera L. 2
Ortiz-Romo N. 5
Pelcastre-Villafuerte B. 12
Rangel P. 2
Riojas-Rodríguez H. 12
Ríos C. 11
Rodríguez S. 12
Rodríguez-Agudelo Y. 11
Rosas I. 3
Sabido Pedraza E. 8
Santos-Burgoa. C. 8
Schilmann A. 12
Siebe C. 6
Solís-Vivanco R. 11
Texcalac J. 8
Torres-Agustín R. 11
Villa-Barragan J. 8
I.
Mangane
se survey
in
airborne
particulat
e matter
from a
mining
area at
Hidalgo
State,
Mexico.
1999
Autor principal
III. Motor
alteration
s
associate
d with
exposure
to
manganes
e in the
environm
ent in
Mexico
2001
2004
2006
IV. Cognitive
impairment
in an adult
Mexican
population
nonoccupationall
y exposed to
manganese
V. Exposición a
manganeso por
resuspensión de
partículas en
caminos de
terracería en el
distrito minero
de Molango,
Estado de
Hidalgo.
VI.
Intellectual
Function in
Mexican
Children
Living in a
Mining Area
and
Environment
ally Exposed
to
Manganese
VII.
Perceived
Health
Risks of
Mangane
se in the
Molango
Mining
District,
Mexico
2009
2009
2010
2010
VIII.
Environm
ental
exposure
to
manganes
e and
motor
function
of
children
in
Mexico
2011
IX. Risk
perception and
social
participation
among women
exposed to
manganese in the
mining district of
the state of
Hidalgo,
Mexico.
X. Effect of
environmenta
l manganese
exposure on
verbal
learning and
memory in
Mexican
children
2012
2013
XI.
Nonoccupati
onal
Environment
al Exposure
to
Manganese is
Linked to
Deficits in
Peripheral
and Central
Olfactory
Function
2013
XII. Risk: For
Whom?
Representations of
Mining Activity by
Different Social
Actors in the
Molango Manganese
District of Hidalgo,
Mexico
2014
XIII.
Modeling
and
estimating
manganese
concentration
s in rural
households in
the mining
district of
Molango,
Mexico
2015
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
X
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
x
CEEGEH
Financiamiento
II. Exposure
to
Manganese:
Health
Effects on the
General
Population, a
Pilot Study in
Central
Mexico
II.
Movilización
del
Manganeso
por erosión
hídrica en el
Distrito
Minero de
Molango,
Estado de
Hidalgo.
GEH
IDRC, ISAT,
PUMA
Temática
IDRC,
CEEGEH
IDRC
IDRC
Concentraciones ambientales de
Mn
IDRC,
CONACYT
IDRC
IDRC
Asociación de la exposición a Mn
y la salud
IDRC
IDRC,
CONACYT
CONACYT
IDRC
N
o
de
pa
rti
ci
pa
ci
on
es
1
1
1
1
1
1
3
2
1
1
1
1
1
1
1
1
1
5
1
1
2
1
9
6
3
6
3
1
2
4
1
4
2
1
1
IDRC,
CONACYT
Aspectos sociales de la
concentración de Mn en el
ambiente y la población
185
Figura 3.75. Cantidad de investigaciones sobre la exposición a Mn en el distrito minero
Molango de 1999 a 2015.
Figura 3.74. Centros de adscripción de investigadores
Institución
Clínica Londres
2
Clinica Londres
Facultad de Filosofía y Letras (UNAM)
Instituto de Ciencias de la Atmósfera
(UNAM)
4
Instituto de Física (UNAM)
5
Instituto de Fisiología Celular (UNAM)
6
Instituto de Geología (UNAM)
7
Instituto de Investigaciones Biomédicas
8
9
10
11
12
13
Instituto de Salud Ambiente y Trabajo
Instituto Nacional de Enfermedades
Respiratorias
Instituto Nacional de Investigaciones
Nucleares
Instituto Nacional de Neurología y
Neurocirugía
Facultad de Filosofía y Letras (UNAM)
Instituto de Ciencias de la Atmósfera (UNAM)
Instituciones de investigación
3
Cantidad de investigaciones
1
Instituto Nacional de Salud Pública
Secretaría de Salud del Estado de
Hidalgo
Instituto de Física (UNAM)
Instituto de Fisiología Celular (UNAM)
Instituto de Geología (UNAM)
Instituto de Investigaciones Biomédicas (UNAM)
Instituto de Salud Ambiente y Trabajo
Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias
Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares
2
1
0
1999
Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía
2001
2004
2006
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015
Año
Instituto Nacional de Salud Pública
Secretaría de Salud del Estado de Hidalgo
0
2
4
6
8
Número de investigadores
Editorial
Revista científica
Environmental Research
Investigación
II
XI
Environmental Toxicology and Pharmacology
ELSEVIER
Methods in Physics Research
NeuroToxicology
Science of the Total Environment
V
I
IX
IV
X
National Center for Biotechnology Information Environmental Health Perspectives
Oxford University Press
Springer
Chemical Senses
Environmental Monitoring and Assessment
XII
XIV
VI
Wiley Online Library
Risk Analysis
XIII
11
12
9
6
3
4
2
1
1
1
0
CEE
CONACYT
GEH
IDRC
ISAT
PUMAUNAM
Instituciones de financiamiento
VII
III
Universidad Nacional Autónoma de México
Figura 3.76. Origen del financiamiento de investigaciones sobre la exposición a Mn
en el distrito minero Molango.
Proyectos de
investigación financiados
Cuadro 3.15. Editorial y revista científica de las publicaciones sobre exposición a Mn en el Distrito Minero
de Molango.
CEE
CONACYT
GEH
IDRC
ISAT
PUMA-UNAM
Consejo Estatal de Ecología, Gobierno del Estado de Hidalgo
Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
Gobierno del Estado de Hidalgo
Institute Development Research Center
Instituto de Salud Ambiente y Trabajo
Programa Universitario del Medio Ambiente de la UNAM.
VIII
Fuente: elaborado con base en artículos de investigación referidos.
186
a) las concentraciones ambientales de Mn en los territorios del distrito minero de Molango; b) la
búsqueda de asociaciones entre la exposición a Mn y sus efectos en la salud; y c) los aspectos y
fenómenos sociales derivados de la actividad minera, en la cual se estudian cuestiones de
percepción del riesgo, vulnerabilidad; el estudio de actores, desde una perspectiva de la otredad,
así como la participación y empoderamiento femenino. (Cuadro 3.14).
Las investigaciones analizadas coinciden que el Mn, es un elemento esencial en las
reacciones enzimáticas para la función celular (Calne, 1997 en Torres-Agustín et al, 2013), e
indispensable para el desarrollo y metabolismo del cerebro (Riojas-Rodríguez, 2010), sin
embargo, su exposición en altas concentraciones es neurotóxico generando manganismo, un
síndrome con efectos similares al Parkinson (Calne, 1997 en Torres-Agustín et al, 2013), con
síntomas inespecíficos como dolor de cabeza, fatiga, pérdida de peso (Solís-Vivanco et al, 2009).
Otros efectos, presentados en primates no humanos exponen afectaciones en la función motora.
El Mn se acumula en el sistema nervioso central en estructuras corticales y subcorticales
(Hernández-Bonilla, et al., 2011). Los efectos se presentan en los ganglios basales después de la
inhalación de Mn de manera crónica (Aschner et al, 2009; Calne, 1997 en Torres-Agustín et al,
2013), se ha considerado que la inhalación es la vía más eficiente (Figura 3.77) en contraste a la
ingesta ya que evita la acumulación en hígado y la excreción biliar (Hernández-Bonilla, et al.,
2011). Por otra parte, de acuerdo con Krachler et. al, (1999), es la más peligrosa (Krachler et. al,
1999 en Rodríguez-Agudelo, 2006), al presentarse una inhalación de >1,0 mg/día que puede
afectar la función neuropsicológica (Finley, 2004 en Rodríguez-Agudelo, 2006).
La sobreexposición de Mn en adultos se ha asociado con deterioro cognitivo y
psiquiátrico (Guilarte y Chen, 2007 en Torres-Agustín et al, 2013); mientras que la población
infantil se considera especialmente vulnerable porque el daño a estructuras cerebrales específicas
puede deteriorar las funciones cognitivas (Weiss, 2000 en Torres-Agustín et al, 2013). En
infantes la exposición de Mn e inhalación es mayor ya que este grupo respira más aire por
kilogramo de peso corporal, que los adultos. Resultado de las investigaciones de Cruz y Olvera
(2004) y de Rangel, (2009) se obtuvieron las concentraciones de Mn en cuerpos de agua y en sus
proximidades, así como también Mn en polvo en caminos y viviendas, ambos estudios refieren
que las concentraciones de Mn son elevadas (Figura 3.78).
187
Figura 3.77. Diagrama de las fases del Mn en el organismo humano.
Fuente: modificado de Riojas H. s/f.
A la fecha se continúa investigando los efectos en la salud de la extracción de este mineral
en las localidades de Chiconcoac y Tolago, no obstante, se tiene referencia que la actividad
minera tiende a la expansión en el territorio de la Sierra Alta de Hidalgo (Figura 3.79). Es así
como, en julio de 2018 la empresa Compañía minera Autlán, ingresó una Manifestación de
Impacto Ambiental, en modalidad regional para el proyecto denominado “Planeación estratégica
de la Exploración y Explotación de Manganeso en el Distrito Minero Molango” misma que
quedó registrada como 13HI2018M0031. En dicho proyecto se hace referencia que las
actividades a ejecutarse se basan en la exploración, que consiste en la obtención de muestras de
suelo a través de sondeos o perforaciones para determinar sus propiedades físicas y mecánicas,
así como la composición mineral. Previo al aprovechamiento de los yacimientos se realizará el
retiro de la capa vegetal, la perforación y voladura, la carga y acarreo de material. La explotación
188
consiste en el aprovechamiento de los yacimientos a través del minado a cielo abierto y
subterráneo. Todo ello en una superficie de 7,943.14 Ha de 23,113.2403 Ha que se tienen
concesionadas (DGIRA, 2019).
Figura 3.78. Distribución de concentraciones de Mn en agua y polvo en las proximidades de
la minera Autlán, Lolotla.
Fuente: elaborado con base en Cruz J. y L., Olvera (2004); Rangel P., (2009).
Con fecha del 30 de septiembre de 2019 la DGIRA dirección dependiente de la Secretaría
de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) resolvió negar la autorización
solicitada en materia de impacto ambiental debido a que el proyecto no es congruente con los
instrumentos de planeación y de ordenamientos jurídicos aplicables en el artículos 35, segundo
189
párrafo de la LGEEPA, al contravenir el Programa de Ordenamiento Ecológico Territorial del
Estado de Hidalgo cuya última reforma se publicó en el Periódico Oficial del Estado de Hidalgo
el 02 de julio de 2018. Atendiendo al criterio Mi1 que hace referencia a “se prohíbe la
explotación y extracción minera”, da la naturaleza del proyecto y que, con fundamento en el
artículo 35, fracción III, inciso a) de la LEGEEPA, la DGIRA determinó negar la autorización
solicitada (DGIRA, 2019).
Figura 3.79. Áreas propuestas por la Compañía Minera Autlán para la exploración y
explotación de Mn, en la Sierra Alta de Hidalgo.
A
A
Fuente: elaborado con base en SIGEIA, 2020.
190
En el proceso de autorización de la MIA, resulta de interés la propuesta que genera la
compañía minera respecto a las actividades del proyecto refiriendo que el criterio ecológico ha de
aplicarse y regirse bajo el principio de excepcionalidad y proporcionalidad haciendo referencia
que la Suprema corte de Justica de la Nación en el marco de la política ambiental ha razonado
que dicha restricción debe atenderse en su medida de utilidad para la consecución de fines
constitucionalmente justificados por lo cual, se advierte la recomendación de no efectuar una
interpretación restrictiva de los alcances de los criterios ecológicos; que los criterios ecológicos
no son medidas que necesariamente deban imponerse en la evaluación del impacto ambiental y su
imposición en forma estricta debe realizarse cuando resulte indispensable. En este mismo sentido
se considera que el criterio obedece a un principio de instrumentalidad administrativa y que, los
criterios ecológicos no constituyen en sí fines. Así mismo se presenta el principio de
provisionalidad administrativa que determina que los criterios deben mantenerse vigentes
mientras subsista la necesidad de su aplicación. Por lo
cual los criterios ecológicos del POETEH, se encuentran
sometidos a rebus sic stantibus, y estos principios deben
aplicarse mientras subsista la necesidad de su aplicación
(DGIRA, 2019).
En el proceso de esta planeación se realizaron
Figura. 3.80 Publicación en
Facebook que de acuerdo con
informantes de ChiconcoacTolago, hace referencia a los
hechos ocurridos el 20 de
diciembre de 2017 en las
inmediaciones Tuscalago.
movilizaciones sociales, para evitar la exploración en
áreas circundantes a las comunidades, en este sentido se
cuenta con el relato de un asistente a la manifestación, el
nombre de la persona se omite debido a que facilitó su
testimonio bajo la premisa de que se mantuviera en el
anonimato su identidad, expresando lo siguiente:
…se nos requirió el apoyo seamos ejidatarios o no.
Nos organizamos para llegar con provisiones de alimento a
Tuscalago, se nos pidió llegar a las 10:00 horas y a último
momento se nos requirió llegar dos horas más temprano. En el
sitio se expusieron nuestras exigencias entre las cuales estaba
la atención médica. A lugar se presentó “La licencia”
representante de la empresa, quien estaba acompañada de dos
hombres, debido a que el dueño de la empresa no nos dio la
cara; así como un “hombre” que venía por parte de Gobierno
Municipal.
Fuente: Facebook, 2017.
191
Por parte de “La Licenciada” únicamente recibimos risas sarcásticas y respuestas que aquello
solicitado no lo podía proporcionar. En tanto que, por parte del encargado del gobierno municipal, la
respuesta sólo fue que lo consultaría vía telefónica. Posteriormente, las propuestas de “La licenciada”
fueron: pintar la Galera y proporcionar brigadas de Salud, sin dar una fecha de cuándo llevará a cabo
las acciones.
Nuestra inconformidad a su propuestas fue inmediata, ya que en las brigadas de salud sólo se le
brinda atención a niños donde y se les dan artículos como una playera, o juguetes como una cuerda, una
pelota, y un bombón. También se les enseña a plantar árboles, acción que consideramos es lo mínimo que
pueden hacer. Sobre la cuestión de un médico se expuso que han traído un médico y las recetas no se
surten, mientras que los gases de la empresa nuevamente como hace algunas décadas han generado
irritación en las vías respiratorias y los adultos mayores ya son pocos debido a la contaminación.
Los vecinos se movilizaron hacia la zona para limitar el acceso de los vehículos, pero llegaron
los granaderos bien preparados, quitaron las piedras y las ramas de los árboles que limitaban el paso.
Subieron a los varones a golpes a la camioneta, mismos que gritaban dentro del vehículo a causa de los
golpes que les propiciaban los granaderos. Se lo llevaron, tal vez los dejen libres, esto sólo será para que
escarmienten y que no interfieran con las acciones que desea realizar la empresa, respecto al agua.
Algunos vecinos comentan que no morderán la mano que les da de comer.
Aquellos jóvenes que grabaron fueron pateados y obligados a que eliminaran el contenido
referente a la protesta en sus celulares, los jóvenes contestaban “que es su derecho el manifestarse”, por
esa situación, fueron subidos en las camionetas y amenazados que les sucedería lo mismo que a los
jóvenes de Ayotzinapa si no borraban el video. Posteriormente, pedían pruebas de lo sucedido y ¿cuáles?
Si ellos las borraron” ... (Figura 3.80)
El relato anterior, se complementa una nota periodística publicada en el diario La
Jornada, con los datos siguientes:
Cuadro 3.16. Nota periodística del 21 de diciembre de 2017.
Reprimen protesta contra minera Autlán en Hidalgo
Hidalgo, 21 de diciembre. - Vecinos de las localidades indígenas de Tolago y Chinconcuac, municipio
de Lolotla, que se manifestaban de manera pacífica contra la minera Autlán, fueron dispersados de
forma violenta por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo esta noche. El saldo del
operativo policíaco era de 10 personas detenidas la noche del miércoles.
Por la mañana de ayer, 400 pobladores de dichas localidades se apostaron en las afueras de las
instalaciones de la minera Autlán para protestar por la supuesta contaminación del aire y del agua de un
río producida por manganeso. También reclamaron el incumplimiento de la empresa de instalar una
purificadora de agua.
Los vecinos eran encabezados por Alberto López, comisariado ejidal de Tolago, y Maximino Romero,
delegado de Chiconcuac.
A pesar de que una comisión de inconformes había aceptado participar en una mesa de diálogo con
representantes de la empresa, la cual se realizaba en el auditorio del sindicato de la minera Autlán, los
granaderos, de manera sorpresiva arremetieron contra los manifestantes. De acuerdo a los vecinos
fueron detenidas diez personas, entre ellas […]
192
María Jaime López Hernández, vecina de Tolango, una de las participantes de la manifestación
denunció, que no han podido entablar comunicación con los detenidos. Dijo que ni la Policía Estatal ni
la Procuraduría de Hidalgo ha querido informarles dónde se encuentran los detenidos.
Según los vecinos, por los golpes que recibió por parte de los policías, un hombre identificado como
Oscar Velazco fue trasladado al hospital de Tlanchinol.
Acusaron a los uniformados de robarles teléfonos celulares con los que habían grabado la represión
policiaca. La minera Autlán se localiza en el municipio de Molango y en este complejo se extrae el 80
por ciento de la producción manganeso del país.
Los vecinos aseguran que las emisiones afectan a comunidades de los municipios de Lolotla,
Xochicoatlán y Tepehuacan de Guerrero. Esto, aunado a diversos daños estructurales de las viviendas a
causa de las explosiones de dinamita que realizan los operarios de la minera.
Fuente: Montoya J. (2017).
La minería ha permitido el desarrollo de las actividades productivas así como también ha
favorecido la habilitación del espacio en cuanto a las vías de comunicación. La actividad minera
constituye el principal factor de confluencia de intereses de tipo social, ambiental, de poder, entre
los cuales se han incluido a la ciencia como actor que favorece la legitimación o no de las
demandas realizadas por la población expuesta al Mn. En este proceso se han producido actores
como la sociedad civil del Movimiento Ambientalista de la Sierra Alta Hidalguense, que trabaja
en limitar las repercusiones al medio natural circundante a la zona de operación minera.
Finalmente, cabe mencionar, que al interior de la actividad minera en el ámbito laboral también
se han presentado algunos conflictos entre empleadores y mineros conforme a algunas notas
periodísticas recabadas, por un medio de comunicación local denominado “Criterio Hidalgo”.
193
3.3.4 Distribución espacial de los bienes sociales en el municipio de Lolotla.
En el capítulo I se realizó un esbozo de las cuestiones abordadas por David Harvey para una
justicia distributiva en el ámbito territorial y de la salud, dichas consideraciones fueron
abandonadas por el Harvey, porque la cuestión de justicia en el ámbito espacial necesariamente
requiere del cambio en el sistema económico que permita anular las desigualdades (Santana,
2012). Por lo anterior, resulta inevitable la construcción de un modelo que permita la plena
satisfacción de las necesidades humanas adecuadas para cada persona. Pese a ello, se pueden
elaborar propuestas que contrarresten los efectos de la economía, donde ciertos bienes son
considerados escasos y limitados. Por tal situación se realiza un propuesta de la distribución de
los bienes socialmente necesarios, para ello se retoman los algunos enfoques para la distribución
de bienes conforme al cuadro siguiente:
Cuadro.3.17 Criterios de distribución de los bienes sociales.
John Rawls
Norman Daniels
Shlomi Segall
Principio de la diferencia.
Equitativa igualdad de
oportunidades
Igualitarismo de la suerte.
De presentarse una desigualdad
económica o social estas han de
generarse para el mayor
beneficio de los miembros
menos favorecidos para la
sociedad.
La estructura básica de la
sociedad debe estar diseñada
para que todos participen en ella,
que las ventajas estén al alcance
de todos y como resultado, los
proyectos de vida han de ser
resultado de un proceso
equitativo.
Desde esta perspectiva se hace
énfasis en mitigar los efectos de
la “suerte bruta” presente
cuando las consecuencias no
dependen de la persona, es
entonces cuando se presenta
condiciones injustas. Otro tipo
de suerte es la “opcional”, donde
las consecuencias dependen de
la persona. Rawls y Daniels
abordan una postura similar con
las “loterías sociales” (como el
nacimiento en una familia con
una posición social específica) y
las “loterías naturales”, (talentos
y habilidades de una persona).
Fuente: elaborado con base en Dieterlen, 2015.
Del cuadro anterior se toma como referencia la postura de equitativa igualdad de oportunidades para el
bienestar de la población, y para el caso específico del ámbito de la salud se consideran las condiciones
expuestas en el Cuadro 3.17.
194
Cuadro 3.18. Algunas consideraciones en las que basar la distribución, considerando la
equitativa igualdad de oportunidades.
Necesidad
(demanda latente)
Condiciones sanitarias
en la vivienda. Este
aspecto engloba los
servicios básicos como el
agua potable, drenaje,
sanitario y energía
eléctrica. Estos servicios
contribuyen en la
satisfacción de las
necesidades de
alimentación e higiene
(Juárez y Velasco, 2016).
Educación. El desarrollo
de la capacidad intelectual
representa un aparente
seguro contra la pobreza,
constituyéndose como el
principal factor para el
bienestar (Juárez y
Velasco, 2016).
Contribución al bien
común
La contribución está dada
por el desarrollo de
actividades económicas
que generan polos de
crecimiento, con un
correspondiente efecto
multiplicador que la
propagación
espacialmente el
bienestar.
En condiciones de
desequilibrio las
acciones a ejecutar son
mejorar las asignaciones
de bienes en el territorio o
reorganizar el sistema
espacial.
Mérito
Existen asentamientos
que contribuyen al bien
común y cuya
localización se ubica en
zonas de riesgo. Bajo
esta consideración se
establece que, entonces y
sólo entonces, se justifica
la asignación de
recursos suplementarios
que contrarresten los
efectos negativos en la
población.
Salud. Este aspecto se
orienta específicamente
hacia la derechohabiencia,
la cual es definida como
el derecho de las personas
a recibir servicios
médicos en instituciones
de salud pública o privada
(Juárez y Velasco, 2016).
Trabajo. A través del
trabajo se genera un
ingreso económico que
posibilita la suficiencia
para satisfacer un cúmulo
de necesidades básicas,
entre ellas la
alimentación, la
educación y la salud.
(Juárez y Velasco, 2016).
Igualitarismo de la
suerte
Edad (niñez). La tasa de
supervivencia infantil
presenta variaciones
geográficas, usualmente
zonas rurales con
entornos familiares
pobres y con bajo nivel
educativo la mortalidad
infantil es más elevada. El
riesgo de muerte es mayor
durante el primer mes de
vida, la reducción de esta
es posible a través de la
atención de calidad en el
embarazo y neonatal. La
muerte de un niño es
considerada una tragedia,
así como también la
pérdida de potencial
humano (OMS, 2013).
Distancia entre una
localidad y la vialidad
más cercana. La
situación espacial de
algunas comunidades
puede estar en
condiciones de desventaja
por aspectos como la falta
de recursos que
favorezcan su
conectividad con las vías
primarias de
comunicación.
Fuente: elaborado con base en Harvey, 1979; (OMS, 2013); Juárez y Velasco, 2016.
La propuesta de asignación de recursos considera el estado de la satisfacción de las
necesidades elementales en el ámbito de la vivienda, educación, el acceso a los servicios de salud
195
y el trabajo. En tanto que, también se considera la localización de los servicios e instalaciones
que contribuyen al bien común, como la presencia de oficinas administrativas, de centros de
atención en salud y la realización de actividades económicas como el ecoturismo. Mientras que,
en el apartado del mérito se incluyó a las localidades que se encuentran próximas al módulo de
nodulación que genera beneficios en el sector de la industria, mientras que para estas poblaciones
tienen efectos en su salud al estar expuestas al polvo de Mn.
Del igualitarismo de la suerte, se tomó la “suerte bruta” o “lotería social” desde la postura
de Rawls y Daniels a fin de subsanar las condiciones de desigualdad de las cuales la población no
es responsable. Se tomó a la niñez porque durante los primeros años de vida se requiere de la
asistencia para enfrentar las desigualdades presentes en el espacio, en este mismo sentido la
distancia a las vías de comunicación de las cuales la población joven no es responsable de la
habilitación del espacio para el acceso a los bienes y servicios.
El procedimiento para definir qué localidades se ha de priorizar la dotación de recursos se
incluyó la estandarización de los valores considerados bajo el rubro de necesidad e igualitarismo
de la suerte, mientras que, para los rubros de contribución al bien común y el mérito se le asignó
el valor de 1 para aquellas localidades que cumplen con el criterio de contar con oficinas
administrativas, centros de atención en salud y la realización de una actividad económica;
mientras que, para el criterio de mérito se le asignó el valor de 1 a las localidades más afectadas
por la actividad minera.
Posteriormente, una vez que se estandarizaron todas las variables se procedió a la
generación de agrupación de las localidades conforme a sus condiciones de vida a través del
análisis de conglomerados jerárquicos. Se optó únicamente por la agrupación de condiciones de
vida porque resulta inexacto valorar de entre estas variables cuál de ellas es más importante para
el desarrollo de una vida humana plena. Si bien estas pueden ser ordenadas de acuerdo con la
pirámide de necesidades de Maslow, donde la base de la pirámide debe atender a aquellos
requerimientos de tipo fisiológico como la alimentación, no obstante, también se puede
argumentar lo importante que es el acceso al agua como a la educación, o el acceso a servicios de
salud.
El desglose para cada una de las localidades del municipio de Lolotla de la situación de
cada una de las variables consideradas se muestran en el Cuadro 3.19.
196
Fuente: calculado con base en INEGI, 2012.
Cuadro 3.19. Condiciones de vida en las localidades del municipio de Lolotla consideradas
para establecer la distribución de bienes.
En tanto que, a través del análisis de conglomerados se obtuvo la configuración de tres
clusters, de estos, se denominó a uno de ellos como Grupo I, el cual presenta las condiciones para
197
dotarlas de los bienes y servicios indispensables, mismos que sean aprovechados por las
localidades circundantes en un radio no mayor a 7 Km. Se observa la configuración del Grupo II
grupo que se integra por las localidades que presentan medianamente satisfechas sus necesidades
más elementales y un Grupo III que incorpora las localidades en situaciones de desventaja
principalmente de acceso al servicio de drenaje y de agua potable.
Figura 3.81. Dendrograma de las agrupaciones de las condiciones de vida en las localidades
de Lolotla.
Fuente: calculado con base en INEGI, 2012 a.
Se incluyó un Grupo IV, que está compuesto por las localidades que cuentan con menos
de 10 habitantes y que por cuestiones de confidencialidad el ITER omite exponer cómo están las
condiciones de vida en ellas. Cabe mencionar que las localidades del Grupo I se distribuyen a lo
largo del municipio de Lolotla, lo cual favorece la generación de una estrategia que considere
198
establecer centros de distribución de recursos y que a partir de estos los beneficios sean
aprovechados por las localidades circundantes. El conjunto de localidades principales de norte a
sur son las siguientes: Chantasco-Xuchipantla, Xuchitlán, Chiconcoac-Tolago, AcatepecIxtlahuaco-Chalma y Lolotla (Figura 3.82).
Figura. 3.82. Configuración de localidades de Lolotla para la distribución de recursos.
Fuente: calculado con base en INEGI, 2012b.
Cabe destacar que del Grupo I es conveniente en primer lugar satisfacer sus necesidades
de agua y drenaje, las cuales son deficientes para las localidades de Chantasco y de Xuchipantla.
En tanto que, considerando que esta investigación está orientada a la identificación de las
199
desigualdades en el ámbito de la salud, se propone que en las localidades del Grupo I se
mantengan los servicios ya existentes, se promueva mejorar las condiciones de infraestructura y
del stock de medicamentos y que se doten con personal médico de calidad y en un horario que
cubra las necesidades de la población. Así mismo, se ha de asegurar que las poblaciones
localizadas en los alrededores tengan el acceso asegurado a este servicio. En seguida, se debe
garantizar que en las localidades de Grupo I se presenten las condiciones necesarias para la
presencia de puestos ambulantes que surtan de productos que no se encuentran en la localidad
para generar una variedad en la dieta. Por otra parte, el aspecto fundamental que necesita
desarrollarse en estos cinco centros es la generación de fuentes de empleo, que logren beneficiar
a la población.
En resumen, los aspectos anteriormente referidos consideran mantener, dotar o
incrementar la calidad de los servicios específicamente los de salud en las localidades que a la
fecha cuentan con las mejores condiciones, y se prevé el desplazamiento de las personas en las
localidades que carecen de estos bienes y servicios para acceder a ellos. Los criterios aquí
establecidos se orientan a que la mayor cantidad de personas disfruten de los beneficios a
distribuir sin que ello sea un elemento limitativo para dotar a las localidades de los Grupos II, III
y IV.
200
Conclusiones
La hipótesis de esta investigación sostiene que la satisfacción de las necesidades básicas, la
situación medioambiental y la infraestructura de los servicios de salud, englobados bajo el concepto
de los Determinantes Sociales de la Salud (DSS) están asociados a la condición de salud de la
población del municipio de Lolotla. Después de la revisión de los elementos considerados en la
incidencia de la salud, dicha postura se acepta de manera parcial. Las cuestiones que generan dicha
conclusión se desglosan a continuación.
I.- Determinantes socioeconómicos y ambientales en el municipio de Lolotla
Los DSS se constituyen de elementos de carácter estructural por ejemplo de la política pública,
en materia demográfica, socioeconómica y ambiental implementadas en el espacio geográfico
que habita la población y que inciden en la construcción de su estado de salud. La importancia de
la salud recae en la consideración de ser un bien socialmente apreciado que permite la
autorrealización y que Amartya Sen lo expresa a través del ser y el hacer.
Los DSS, constituyen un marco explicativo de la distribución espacial de la salud, no
obstante, el concepto de determinación puede conducir a prácticas inadecuadas de acuerdo con la
connotación que se emplee. Ya en el siglo XIX su implementación marcó la producción de obras
geográficas caracterizadas por un el evolucionismo darwiniano. Para el siglo XXI, el inadecuado
empleo del concepto de lo “determinado” podría decantar en la elaboración de posturas que
supriman las posibilidades de la población en espacios con condiciones desfavorecidas. En
contraste, se deben abordar propuestas que supongan el desarrollo de una amplia gama de
posibilidades a las cuales la población debe acceder, que conduzcan a un incremento en sus
capacidades a través de prácticas orientadas al desarrollo de la agencia, que se reflejen en su
estado de salud.
En este sentido, la distribución del buen estado de salud no ha de considerarse como un
fin en sí mismo. Las óptimas condiciones de salud implican que cada individuo ejerza su
autonomía y sus libertades. Las capacidades se disminuyen cuando el estado de salud es malo, en
tanto, se requieren de mayores esfuerzos para alcanzar la autonomía y las libertad que le permita
201
al individuo ser. El abordaje de la igualdad de oportunidades para el bienestar desde la
perspectiva espacial de salud permite entender el por qué de la distribución de patrones de
condiciones de salud de la población.
La inequitativa distribución de los bienes sociales por cuestiones estructurales
relacionadas con las políticas públicas o por la cantidad de recursos a distribuir resulta una
barrera al acceso a las posibilidades y la disminución de las capacidades para enfrentar los
desequilibrios económicos y fenómenos naturales. Ante dichos eventos la salud puede verse
comprometida al ser los efectos prolongados y acompañados de la falta de medidas necesarias.
De esta manera, se identificó que el principal aspecto que se requiere subsanar está orientado a la
generación de fuentes de empleo a fin de dotar a la población de ingresos económicos que
permitan cubrir la necesidad básica de alimentación, así como generar el acceso a una mayor
variedad de alimentos nutritivos ya que es una demanda latente identificada a través del trabajo
de campo realizado en 2017.
Las características físicas - naturales del municipio son favorables para ser incorporadas a
esquemas de protección, conservación y restauración de los ecosistemas a través del pago por
servicios ambientales, puesto que en la mayor parte del territorio se distribuye el bosque de niebla
con una riqueza en bio y geodiversidad que proporcionan diversos servicios ecosistémicos. Las
características también resultan adecuadas para una orientación de la economía basada en las
actividades primarias, que constituyen en sí mismo una fuente para el autoconsumo.
La minería, se presenta para un segmento de la población como una opción para la
percepción de ingresos económicos pese a los riesgos laborales que implica. En tanto que, el
sector terciario se encuentra en un estado una emergente con el desarrollo de la zona ecoturística
en la localidad de El Barco. Otras posibilidades de desarrollo, de turismo con fines científicos se
localizan en Huitznopala, sitio que cuenta con recursos geológicos que datan del Protozóico.
Entre los recursos arquitectónicos con valor histórico se encuentra la parroquia de Santa Catarina
en la cabecera municipal y la capilla de San Pedro en la localidad de Ocotlán, ambas construidas
en el siglo XVI.
Un área de oportunidad es la generación de mecanismos eficientes en la distribución de
bienes y servicios en las localidades situadas al norte del municipio debido a la baja compacidad
del territorio. Conforme a los indicadores socioeconómicos se exponen una polarización del
desarrollo del territorio, es así como la zona norte presenta los indicadores de mayor grado de
202
marginación dentro del municipio. Por ello, se propone considerar una regionalización que menos
considere al menos cinco zonas de desarrollo que generen un efecto multiplicador del cual se
beneficien las localidades aledañas. Respecto a los bienes o servicios a proporcionar en las
localidades del norte del municipio, se requiere dotar de manera inmediata agua potable y
drenaje.
II.- La incursión de la Justicia social-distributiva en la Geografía de la salud.
La categoría espacial se ha incorporado en la extensa trayectoria del estudio de la salud hasta la
oficialización de la denominada Geografía de la salud que aborda integralmente la temática en el
ámbito de las enfermedades y de los servicios de atención. En el siglo XX se transitó de la
Geografía médica a la Geografía de la salud, así como también, se adaptaron eficazmente las
aproximaciones teóricas y metodológicas de los enfoques positivistas, de la interacción social,
marxistas y de la estructuración para la explicación de la distribución espacial de la salud; en
tanto que, la innovación tecnológica de los sistemas de información geográfica agilizó los análisis
espaciales. Los principales elementos de la Geografía de la salud quedaron establecidos en el
siglo pasado, esto conduce necesariamente a la innovación o a la recuperación de aquellos
enfoques poco desarrollados, en este sentido es que se plantea la integración de la filosofía
política a la Geografía con el objeto de identificar las consideraciones que se toman en la
distribución de bienes y que consecuentemente generan desigualdades en el espacio.
Al respecto, es fundamental el aporte de D. Harvey en la obra Justicia social y sistemas
espaciales que en el capítulo “Teoría de la Justicia” aborda a la justicia social y distributiva,
enfocada al sector salud. Estas consideraciones enriquecen la manera de analizar el espacio. Con
la integración de la filosofía política en la geografía humana se adoptan criterios indispensables
para atender la desigualdad, el criterio ético se suma las consideraciones de distribución apoyadas
fundamentalmente en el máximo rendimiento o de eficiencia. La teoría de la justicia social tiene
la capacidad de incidir en la Geografía de la salud puesto que la distribución de bienes es algo
inherente a la naturaleza de lo geográfico.
III.- Distribución de la igualdad de oportunidades para el bienestar en el territorio.
Los espacios donde la población vive y desarrolla sus actividades son desiguales desde el
momento en que cada localización cuenta con sus propios atributos y condiciones demográficas
que conducen a necesidades y deseos diferentes. Por ello, surge la intención de homogeneizar las
203
condiciones que procuren el buen estado de salud de la población. En la asignación de recursos
las decisiones presentan una complejidad cuando lo que está en cuestión es la posibilidad de
autorrealización de las personas, no obstante, se ha de establecer el arreglo que beneficie a la
mayor cantidad posible de personas.
La selección de criterios en función de la necesidad, la contribución al bien común, el
mérito y aquellas que igualen las condiciones de la suerte suponen una propuesta para establecer
la distribución de bienes. Los resultados pueden parecer igualmente, injustos cuando aquellas
localidades previamente en un mejor estado tenderán a acumular los beneficios, y aquellas que se
encuentran en desventaja tener una relación de dependencia, no obstante, ha de asegurarse que la
población acceda a servicios básicos como educación, salud, empleo y accesos a bienes de
consumo con pertinente necesidad del desplazamiento.
En tanto, en el ámbito de la justicia y ambiental, de acuerdo con los estipulado en el
artículo 4º de la Constitución, la población tiene derecho a un medio ambiente sano para su
desarrollo y bienestar. Es el Estado el encargado de garantizar este derecho, el daño y el deterioro
ambiental generará responsabilidad para quien lo provoque. Situación por la cual la minera
Autlán adquiere obligaciones por la realización de su actividad cuando con ello se generan
perjuicios a la salud de la población. Los mecanismos de compensación han de establecerse en
común acuerdo con las comunidades, así como también se requiere un cambio en el discurso de
la compañía minera que se asume como asistencial y transitar a una empresa responsable que
intenta remediar los efectos producidos por su actividad al bien más valioso para una persona, la
salud.
La elaboración del presente trabajo de investigación aportó elementos para la
comprensión de la materialidad humana, la cual se encuentra inmersa en el espectro biológico,
histórico-social, y territorial. La escala de análisis es indispensable para establecer relaciones de
determinación. De esta manera, en un entorno controlado donde se expone un individuo a
estímulos, es predecible la respuesta considerando únicamente el plano biológico. Sin embargo,
cuando el análisis se efectúa en una escala donde interactúan estímulos, decisiones y preferencias
se detona la capacidad de agencia humana, si bien se estima la correlación entre variables
socioeconómicas, los indicadores pueden conducir a ciertas conjeturas erróneas por la
multiplicidad de interrelaciones.
204
Reconocer las dimensiones de la naturaleza humana en el plano biológico y social evitará
que la Geografía médica se sature de una carga positivista que no priorice las múltiples
dimensiones de la actividad humana. La revisión historiográfica del municipio de Lolotla expone
que en las últimas décadas del siglo XX se ha acelerado el ritmo de dotación de bienes y servicios
básicos. En este sentido, en la dimensión histórica el devenir del municipio no está determinado,
diversos e impredecibles son los acontecimientos para situarse en un contexto de igualdad de
oportunidades para el bienestar.
A través de la metodología adoptada se logró la consecución de la totalidad de los
objetivos establecidos. Se comprobó que de los aspectos socioeconómicos, aquellos en materia
laboral se vinculan con los niveles de ingreso y estilos de vida, con el consumo de alimentos, el
cual es considera factor esencial para el desarrollo de las cinco principales causas de mortalidad
en el municipio entre el 2000 y el 2013. Mientras que, en el plano ambiental, específicamente con
la extracción minera de acuerdo con diversas investigaciones se arroja que existe una relación de
efectos en la salud de carácter neurotóxico por la exposición a manganeso. Respecto a la
hipótesis, desde una perspectiva filosófica, se rechaza que el devenir de la población esté
determinada, ya que, en la manera de sus posibilidades puede elaborar estrategias que generen un
bienestar en diversos ámbitos, entre ellos la salud.
205
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Guoyou Zhang, Liangfu Chen, Xi Chen, Canfei He, Springer Singapore, pp. 453-467.
215
ANEXO I. ENCUESTA
216
217
218
219
220
221
222
223
224
225
226
227
228
229
230
Anexo II. NOTIFICACIÓN A DELEGADOS DEL LEVANTAMIENTO DE LA
ENCUESTA SOCIOECONÓMICA Y DE SALUD.
231
232
233
234
235
236
237
238
239
240
241
ANEXO III. COMPLEMENTO DE GRAFOS DE RUTAS EN EL SIG QGIS.
Configuración del complemento
Grafos de rutas.
A través del complemento de Grafos de
rutas se calculó la ruta más corta entre dos
puntos en una capa de polilíneas como
resultado se traza esa ruta sobre la capa de red
carretera, de esta manera se optimiza la
distancia o tiempo de viaje.
La configuración de este complemento
para
la
capa
de
polilínea
“Vías
de
comunicación” de las capas F14D41, F14D51,
F14D52 y F14D42. La Figura 3.4. expone el
área de trabajo de QGis con las capas de localidades, las unidades de salud (CLUES) y la red
carretera al norte del municipio de Lolotla, en la Figura 3.5. se resalta en color café la ruta a
seguir entre la localidad de El Barco y la unidad de atención en salud más próxima.
242
Empleo del complemento Grafos de rutas.
Resultados del complemento Grafos de rutas.
243
ANEXO IV. CONCENTRADO DE CRITERIOS ESTABLECIDOS EN EL PROGRAMA
DE ORDENAMIENTO ECOLÓGICO, UNIDAD DE GESTIÓN AMBIENTAL XIV.
Unidad geo ecológica
Alturas
(200-500
m)
erosivas, formadas por lutitas,
areniscas y calizas con selva
perennifolia y subperennifolia
natural y modificada con
focos de agricultura de
temporal, plantaciones de
café y pastizales, sobre suelos
feozem háplico.
Montañas bajas (500-1000
m)
estructuro-denutivas,
formadas por calizas, lutitas y
areniscas con selva alta y
media
perennifolia
y
subperennifolia natural y
modificada
con
café,
agricultura de temporal y
pastizales
sobre
feozem
háplico, litosoles, rendzinas y
feozem.
Principales
problemas
-Escasa infraestructura
de comunicación
-Deforestación
Erosión
-Cambios de uso de
suelo
-Pérdida
de
biodiversidad
-Zona de expulsión
poblacional
-Baja cobertura de
servicios de agua
entubada y drenaje
Políticas
ecológicas
Restauración
Potenciales
-Agrícola
-Pecuario
-Forestal
-Minero
-Ecológico
-Turístico
Uso
propuesto
Predominante
Forestal
Compatible
Flora y fauna
Turismo
alternativo
Ecológico
Condicionado
Ganadería
Agricultura
Infraestructura
Asentamientos
humanos
Minero
Montañas medias (10001700
m)
estructurodenudativas, formadas por
calizas, lutitas y areniscas con
encinares conservados y
modificados,
matorrales
submontano y xerófilo con
áreas
perturbadas
sobre
litosoles, rendzinas y feozem.
Criterios ecológicos
Ag.- 1, 5, 6, 14, 16, 17, 18, 22, 23, 24, 28, 30, 31, 32, 34, 36, 43, 47. P.- 8, 9, 10, 11, 12, 17, 22, 27, 28.
Mi.- 1, 5, 6, 7.
Fo.- 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 10, 11, 12, 15, 16, 17, 18, 19.
Ah.- 2, 5, 7, 8, 11, 13, 18, 25, 26.
In.- 1, 2, 3, 4, 5, 6, 8, 9, 11, 12, 13, 15.
Ei.- 3, 5, 7, 8, 9, 11, 12, 13, 14, 16, 17, 18, 21, 22, 23, 24, 25, 26, 28, 31, 32, 33, 42, 43, 44, 45, 48, 49,
50, 51, 53, 57, 58, 59, 60, 66, 68, 70, 71, 73, 76, 81, 83.
C.- 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 13, 14, 16, 18, 19.
Tu.- 10, 14, 15, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 25, 28, 29, 32, 34, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 43, 44, 45.
Ac.- 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 11, 12, 14, 15, 17, 19, 25, 26, 27, 31, 32, 33, 34, 36, 37, 38.
Pe.- 1, 2, 3, 6, 7, 8.
Ff.- 1, 2, 3, 6, 7, 8, 10, 11, 12, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 21, 22, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 34.
Mae.- 1, 2, 6, 7, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 17, 18, 19, 20, 21,22, 23, 24, 26, 28, 29, 33, 46, 49, 51, 53, 54,
55, 57, 59.
El desglose de los criterios ecológicos para las actividades económicas se muestra en:
http://201.99.98.88/documentos/Estatal/Propuesta_Estatal.pdf
Fuente: POETH, 2001.
244
ANEXO IV. CONCENTRADO DE CRITERIOS ESTABLECIDOS EN EL PROGRAMA
DE ORDENAMIENTO ECOLÓGICO, UNIDAD DE GESTIÓN AMBIENTAL XV.
Unidad geo ecológica
Montañas medias (1000-1700
m)
estructuro-denudativas,
formadas por calizas, lutitas y
areniscas con bosque mesófilo
de
montaña
natural
y
modificado,
pastizales
y
agricultura de temporal sobre
litosoles, rendzinas y feozem
háplico y calcárico.
Montañas altas (1700-2500
m)
estructuro-denutivas,
formadas
por
calizas
cristalinas y en ocasiones
lititas con bosque mesófilo,
pinares naturales densos, pinencinares, pastizales y focos
de agricultura temporal sobre
rendzinas, litosoles y regosoles
eútico.
Principales
problemas
-Escasa infraestructura
de comunicación
-Contaminación
de
corrientes de agua
-Marginación
-Fuerte presión sobre
recursos naturales
-Migración alta
-Baja cobertura de
servicios
de
agua
entubada y drenaje
Políticas
ecológicas
Protección
Potenciales
Uso propuesto
-Agrícola
-Pecuario
-Forestal
-Minero
-Ecológico
-Turístico
Predominante
Áreas Naturales
Protegidas
Compatible
Turismo
alternativo
Ecológico Flora
y fauna
Condicionado
Agricultura
Ganadería
Minero
Infraestructura
Asentamientos
humanos
Montañas altas (1700-2500
m)
estructuro-denudativas,
formadas
por
calizas
cristalinas y en ocasiones
lutitas con pinares, encinares y
pin-encinares, pastizales y
focos de agricultura temporal
sobre rendzinas, litosoles,
castañozem y regosol eútrico.
Criterios ecológicos
Ag.- 1, 4, 5, 6, 10, 12, 14, 16, 17, 18, 19, 22, 23, 24, 28, 30, 31, 32, 34, 36, 43, 46, 47. P.- 2, 3, 8, 9, 10,
11, 12, 13, 15, 17, 21, 22, 27, 28, 30.
Mi.- 1, 2.
Fo.- 1, 3, 4, 5, 6, 8, 9, 10, 11, 12, 15, 16, 17, 18.
Ah.- 2, 3, 4, 7, 8, 11, 13, 18, 25, 26. In.- 14.
Ei.- 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 15, 17, 18, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 32, 33, 40, 41, 42, 43, 44, 45, 48, 49,
50, 51, 52, 53, 54, 60, 66, 68, 69, 70, 71, 73, 76, 81, 83.
C.- 1, 6, 8, 13.- Tu.- 1, 9, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 22, 25, 28, 29, 32, 34, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 43, 44, 45.
Ac.- 1, 2, 4, 6, 7, 8, 9, 11, 12, 14, 15, 17, 19, 25, 26, 27, 31, 32, 33, 34, 36, 37, 38.
Pe.- 1, 3, 6, 7, 8.
Ff.- 1, 2, 3, 4, 5, 7, 8, 10, 11, 12, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 21, 22, 23, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 34.
Mae.- 1, 2, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 17, 21, 23, 24, 27, 33, 34, 46, 49, 51, 53, 54, 55, 57, 58, 59.
El desglose de los criterios ecológicos para las actividades económicas se muestra en:
http://201.99.98.88/documentos/Estatal/Propuesta_Estatal.pdf
Fuente: POETH, 2001.
245
ANEXO V. CONCENTRADO DE LOS PRINCIPALES RESULTADOS ARROJADOS
POR LAS INVESTIGACIONES DE MANGANESO EN EL DISTRITO MINERO
“MOLANGO” EN EL ESTADO DE HIDALGO, MÉXICO.
Manganese survey in airborne particulate matter from a mining area at Hidalgo State, Mexico.
Datos de la
Aldape F., Hernández-Méndez B., y J. Flores. (1999), Nuclear Instruments and Methods
publicación
in Physics Research B., No. 150 pp. 363-369.
Objetivo
Contar con información del contenido de Mn en partículas aerotransportadas en la zona
minera, especialmente de las fracciones de partículas respirables.
Territorio bajo
estudio
Población bajo
estudio
Pruebas
Chiconcoac y Tlaltepingo
Resultados
Muestreo de Mn en aire, del 28 de octubre al 11 de noviembre de 1997. Con dos
muestreos por día, tomando uno de día y uno de noche.
Chiconcoac (05:00 a 17:00 y de 17:00 a 05:00 hrs.)
Tlaltepingo (06:00 a 18:00 y 06:30).
Los toma-muestras empleados son los Stacked Filter Units (SFUs) de modelo Davis que
separan partículas en dos tamaños, partículas finas PM2.5 y gruesas PM15.
El análisis de las muestras reveló la presencia de seis elementos (S, K, Ca, Mn, Fe y Zn)
en la fracción de partículas finas, en tanto que en la fracción de partículas gruesas se
detectaron ocho elementos (S, Cl, K, Ca, Ti, Mn, Fe y Zn). Se encontraron
concentraciones de Mn y S con niveles altos. Las concentraciones de Mn superan los
niveles urbanos de 40 ng/m3 en el 50 por ciento de las muestras.
Exposure to Manganese: Health Effects on the General Population, a Pilot Study in Central Mexico.
Datos de la
Santos-Burgoa C., Rios C., Mercado L., Arechiga-Serrano R.,Cano-Valle F., Alatorre
publicación
Eden-Wynter R., Texcalac-Sangrador J., Villa-Barragan J., Rodriguez-Agudelo Y., y S.
Montes (2001), Environmental Research No. 85, pp. 90-104.
Objetivo
Evaluar el riesgo de la exposición a Mn en población adulta de dos comunidades que
viven en el distrito minero de manganeso.
Territorio bajo
Dos comunidades ubicadas en dos municipios del distrito manganesífero.
estudio
Comunidad “A” Localizada a 2 km de planta minera con 1,257 habitantes.
Comunidad “B” Localizada a 25 km de la planta con 692 habitantes.
Población bajo
73 personas, de las cuales 52 mujeres y 21 hombres.
estudio
Pruebas
Condiciones socioeconómicas, fuentes de emisión de Mn, concentraciones medias de Mn
en aire, agua, suelo, polvo, alimentos, sintomatología respiratoria, exámenes
neuropsicológicos (test Mini-Mental Screening, the Hooper Visual Organization)
Resultados
Las concentraciones de Mn en la comunidad “A” en comida, suelo y pozos de agua son
menores que en la comunidad “B”. Las partículas suspendidas totales, en aire al exterior y
al interior el Mn en polvo fue 2.7, 1.1 y 3.14 veces más alto. La concentración de Mn en la
sangre (MnB) fue de 7.5 a 88 μg /L; las concentraciones de Pb y Mn están altamente
correlacionados, en tanto que se muestra una relación inversa con la hemoglobina. Se
identificó el Mn en sangre como riesgo de incremento de deficiencia cognitiva.
Movilización del Manganeso por erosión hídrica en el Distrito Minero de Molango, Estado de Hidalgo.
Datos de la
Cruz J. y L., Olvera (2004), Tesis para la obtención del título de licenciado en Geografía,
publicación
Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional Autónoma de México, Ciudad de
México, México. 178 pp.
Objetivo
Cuantificar la erosión hídrica superficial del suelo y el aporte de sedimentos ricos en
246
Territorio bajo
estudio
Población bajo
estudio
Pruebas
Resultados
manganeso en cuencas bajo diferente uso de suelo del distrito Minero de Molango,
Hidalgo.
Cuantificación de la erosión hídrica en diferentes usos de suelos en 5 cuencas: a) Cuenca
Otongo, b) Cuenca Tetzintla, c) Cuenca Naopa, d) Cuenca Malila, e) Cuenca Nonoalco.
Métodos: parcelas de clavos de erosión, zonas alteradas por la actividad minera y zonas
agrícolas.
-Muestreo de agua y sedimentos, apoyado por el SIG ILWIS, donde se ubicaron los ríos
principales y secundarios afectados por la actividad minera y agrícola. Los resultados
obtenidos por cada método se extrapolaron para la cuenca.
Los resultados del método de parcelas de clavos de erosión indican que, en el Distrito
Minero de Molango, el uso de suelo minero presenta mayor cantidad de erosión neta, así
como de suelo movilizado respecto del uso de suelo agrícola. Como causa de la
inestabilidad se consideró la falta de cobertura vegetal, la precipitación y el manejo que se
le da a la disposición de presas de lodos y al depósito de polvos, siendo esta última la más
vulnerable a la erosión hídrica debido a la constante deposición de residuos de Mn sobre
una ladera con pendiente elevada. Respecto a la presa de lodos la cantidad de material
erosionado es menor que en el depósito de polvos, dedo al que se tiene un mayor control
de residuos de este tipo, no obstante, las presas son insuficientes para la contención de
materiales residuales del procesamiento de Mn, lo cual genera que estas se saturen y
aunado a la precipitación se saturen y derramen con la consecuente contaminación de ríos.
Para el caso del uso de suelo agrícola los factores que disminuyen la cantidad de erosión
son la cobertura vegetal, la materia orgánica y la capacidad de infiltración del suelo para
la retención de agua.
Motor alterations associated with exposure to manganese in the environment in Mexico.
Datos de la
Rodríguez-Agudelo Y., Riojas-Rodríguez H., Ríos C, Rosas I, Sabido Pedraza E.,
publicación
Miranda J., Siebe C., Texcalac J., y C. Santos-Burgoa. (2006), Science of the Total
Environment, No. 368, pp. 542-556.
Objetivos
Evaluar las alteraciones motoras en una población humana no ocupacionalmente expuesta
en el Estado de Hidalgo.
Territorio bajo
a) Sitios de extracción y procesamiento de Mn: Chiconcoac y Tolago al norte del distrito
estudio
minero; y Malila y Nonoalco al sur del distrito minero.
b) Afloramientos naturales de rocas con Mn: Tlaltepingo y Huitznopala.
c) Comunidades sin fuentes de Mn naturales o antropogénicas: Cuxhuacan y Santa
Mónica.
Población bajo
288 personas de las cuales 168 mujeres y 120 hombres.
estudio
Edad: 20 a 35, 35 a 60 y mayores de 60 años.
Esquema de diagnóstico neuropsicológico.
Pruebas
Concentraciones de Mn en: aire, agua, suelo, cultivos (maíz) y depósitos de desechos
mineros.
Resultados
-La concentración de Mn en aire osciló entre 0.003 y 5.86 μg/m3.
-La concentración en agua se encontró por debajo del límite máximo permitido de acuerdo
con la regulación mexicana (Norma Oficial Mexicana nom-127-SSA1, salud ambiental.
Agua para uso y consumo humano. límites permisibles de calidad y tratamientos a que
debe someterse el agua para su potabilización, México, 1994), que establece un valor de
0,15 mg/L.
-Concentraciones de Mn en suelo oscilaron entre 6 y 280 mg kg− 1, las concentraciones de
Mn en suelo entre 7 y 12 mg kg− 1, se considera moderado para las plantas; las
concentraciones mayores a 50 mg kg− 1, se considera un suministro adecuado, en
Chiconcoac y Tolago la concentración media correspondió a 228 y 111 respectivamente.
-Las concentraciones normales de Mn en tejidos vegetales oscilan entre 40 y 150 mg kg− 1,
en tanto que, para Chiconcoac y Tolago los valores medios identificados fueron de 263 y
73 respectivamente.
247
-En los depósitos de desechos mineros, el contenido de Mn es elevado, los valores de
estos indicadores no son mostrados.
-Por otra parte, la concentración media de Mn en sangre fue de 10.16 μg/l. No se
encontraron asociaciones significativas entre el rendimiento motor y los niveles
sanguíneos de Mn y Pb.
Cognitive impairment in an adult Mexican population non-occupationally exposed to manganese
Datos de la
publicación
Solís-Vivanco R., Rodríguez-Agudelo Y, Riojas-Rodríguez H., Ríos C., Rosas I., y S.
Montes, (2009), en Environmental Toxicology and Pharmacology, No. 28, pp. 172-178.
Objetivo
Examen de las asociaciones entre la exposición a Mn en el aire, los niveles de Mn en la
sangre y las funciones cognitivas en población adulta no expuesta ocupacionalmente que
vive en el distrito minero de Molango.
Territorio bajo
estudio
a) Lugares próximos a las actividades de procesamiento de Mn: Chiconcoac, Tolago,
Malila y Nonoalco.
b) Contacto con depósitos de Mn: Tlaltepingo y Huiznopala.
c) Comunidades sin fuentes naturales o antropogénicas de Mn: Cuxhuacán y Santa
Mónica
288 personas: de las cuales 120 hombres y 168 mujeres.
Edad: 20 a 87 años. (Se excluyó a mineros y trabajadores con contacto al Mn.)
Muestreo de Mn en aire.
Muestreo de Mn en la sangre.
Test de funciones cognitivas:
-Mini Mental State Examination Scale (MMSE)
-Digit Span Forward and Backward
-Word Association Test
-Clock Test
-Word List Test
-Semicomplex Design Test
-Beck Depression Inventory (BDI)
-Geriatric Depression Inventory (GDI).
Población bajo
estudio
Pruebas
Resultados
Media de Mn en la sangre 10.16 ± 4.14 g/L. Media de Pb en la sangre 10.5 g/dL.
No se presentó asociación entre las pruebas cognitivas y las concentraciones de Mn en el
aire o sangre. Los resultados en las pruebas cognitivas se asociaron con el grado de
educación. Se observaron diferencias significativas de absorción de Mn entre hombres y
mujeres. Los valores más altos se encontraron en mujeres, la deficiencia de Fe es un factor
riesgo para la acumulación de Mn.
Exposición a manganeso por resuspensión de partículas en caminos de terracería en el distrito minero de
Molango, Estado de Hidalgo.
Rangel P., (2009), Tesis para la obtención del título de licenciado en Geografía, Facultad
Datos de la
de Filosofía y Letras, Universidad Nacional Autónoma de México, Ciudad de México,
publicación
México. 95 pp.
Análisis espacial de la distribución de Mn en polvo en los caminos y viviendas de las:
Territorio bajo
localidades influenciadas por actividad minera Chiconcoac, Tolago, Nonoalco, y Malila
estudio
-localidades donde no se presenta actividad minera en el municipio de Agua Blanca de
Iturbe.
Muestreo realizado en viviendas de población infantil que participó en un estudio previo
realizado por el Instituto Nacional de salud Pública, en las localidades de Chiconcoac y
Población bajo
Tolago.
estudio
Dentro de cada vivienda se colocó una caja de Petri a una altura variada entre sobre el
nivel del piso. Se divide la masa acumulada en la caja entre los días que estuvo expuesta
248
para así estimar la proporción de acumulación por día.
Pruebas
Resultados
Los caminos de Chiconcoac-Tolago y Nonoalco-Malila, presentaron altas concentraciones
de manganeso con valores que van desde 2 a 209 mg/g. La Carretera Federal por la cual se
traslada el material Mn, presenta una alta acumulación de Mn. en Agua Blanca los valores
obtenidos son de 0.006 a 0.59 mg/g. En viviendas los valores de acumulación diaria son
altas, en Chiconcoac- Tobago de hasta 5.07 mg/g vs Agua Blanca de Iturbe con valores de
0.37 mg/g. Como resultados de la investigación se obtuvo que la acumulación de polvo y
Mn es mayor dentro de las viviendas cercanas a caminos, así como que, los caminos son
una fuente de exposición a Mn para los habitantes del distrito minero, controlar el
cubrimiento adecuado de los camiones de carga que transportan el mineral, en tanto que se
debe regular el uso de material manganesífero como revestimiento de camino de
terracería.
Intellectual Function in Mexican Children Living in a Mining Area and Environmentally Exposed to
Manganese.
Datos de la
Riojas-Rodríguez H., Solís-Vivanco R., Schilmann A., Montes S., Rodríguez S., Ríos C.,
publicación
Y. Rodríguez-Agudelo. (2010), Environmental Health Perspectives, Vol. 118, No. 10,
pp.1465-1470.
Objetivo
Estimar la exposición ambiental a Mn resultante de la actividad minera, del procesamiento
y exploración con la función intelectual de los niños de edad escolar.
Territorio bajo
Localidades rurales próximas a la planta de nodulación de Mn en Chiconcoac y Tolago.
estudio
Localidades no expuestas a Mn con similares condiciones socioeconómicas en el estado
de Hidalgo específicamente en el municipio de Agua Blanca: Chichicaxtle, El Palizar, Los
Cubes y Plan Grande.
Población bajo
100 infantes, para la pob. expuesta/Edad: 7 a 11 años (La población final estudiada
estudio
incluyó sólo 79 infantes)
95 infantes, para la pob. no expuesta /Edad: 7 a 11 años. En ambos casos la población
debe contar con al menos 5 años de residencia en la misma comunidad.
Pruebas
Wechsler Intelligence Scale for Children, adaptada para la población mexicana.
Biomarcadores de exposición: concentraciones de Mn en sangre (MnB) y en cabello
(MnH).
Resultados
La exposición ambiental al Mn en el aire está inversamente asociada con la edad función
intelectual en niños de edad escolar.
Los niños expuestos tuvieron valores medios significativamente más altos para MnH (12.6
μg/g) y MnB (9.5 μg/L), que para los no expuestos (0.6 μg/g and 8.0 μg/L,).
Perceived Health Risks of Manganese in the Molango Mining District, Mexico.
Catalán-Vázquez M., Schilmann A., y H. Riojas-Rodríguez (2010), Risk Analysis, Vol. 30
No. 4 pp. 619-634.
Analizar la percepción del riesgo de Mn describiendo las actitudes de los residentes
adultos hacia sus municipios, mediante la evaluación de la importancia que se le
proporciona a los problemas ambientales, para tal se incluyó el Mn y el reconocimiento de
los vínculos entre Mn salud enfermedad y muerte.
Territorio bajo
Chiconcoac, Tolago, Chipoco, Cuxhuacan, Malila y Nonoalco
estudio
Población bajo
402 habitantes
estudio
Pruebas
Encuesta cuantitativa con los componentes siguientes: información sociodemográfica,
actitud para proteger a su comunidad, clasificación de riesgo local, contaminación por Mn
percibida en diferentes áreas, percepción del vínculo entre Mn – salud y muerte.
Entrevista a profundidad
Recolección de información entre julio y agosto de 2006
Resultados
El 30 por ciento de los participantes consideraron a la naturaleza como aquello que más
les gusta de su comunidad; el Mn es percibido como una el principal riesgo (77 %),
seguido por incendios, vientos, fauna, humo, inundaciones, pesticidas, fertilizantes, lluvia
Datos de la
publicación
Objetivo
249
y el ruido. El 72 por ciento percibió a la concentración de Mn como alta y muy alta a nivel
regional. Los residentes consideran que la exposición a Mn está relacionada con las
afecciones siguientes: alergias, asma, bronquitis crónica, picazón en ojos, cansancio, dolor
de cabeza, pérdida de la memoria y cáncer, esta última afección está también asociada al
tabaquismo.
Este estudio considera que, la falta de servicios públicos y trabajo son percibidos como lo
más importante. Las actividades mineras y la contaminación resultante son percibidas
como el principal riesgo ambiental.
Environmental exposure to manganese and motor function of children in Mexico
Hernández-Bonilla D., Schilmann A., Montes S., Rodríguez-Agudelo Y., RodríguezDozal S., Solís-Vivanco R., Ríos C., y H. Riojas-Rodríguez. (2011), en NeuroToxicology,
No. 32, pp. 615-621.
Objetivo
Evaluar la asociación entre la exposición a Mn y la función motora de los niños en edad
escolar.
Territorio bajo
Localidades rurales próximas a la planta de nodulación de Mn en Chiconcoac y Tolago.
estudio
Localidades no expuestas a Mn con similares condiciones socioeconómicas en el estado
de Hidalgo específicamente en el municipio de Agua Blanca: Chichicaxtle, El Palizar, Los
Cubes y Plan Grande.
Población bajo
Población infantil de 195 niños (100 expuestos y 95 no expuestos a Mn) Edad. 7 a 11 años
estudio
con al menos 5 años de residencia en la misma comunidad.
Pruebas
Evaluación de la función motora:
Grooved pegboard,
Finger tapping,
Test Santa Ana.
Biomarcadores de exposición: concentración de Mn en sangre (MnB) y cabello (MnH).
Resultados
Se observó una ligera asociación negativa entre la velocidad motora y de coordinación y
la exposición a Mn.
Las concentraciones de MnH y MnB fueron significativamente altos en la población
infantil expuesta (12.6 μg/g y 9.5 μg/L) comparado con los no expuestos (0.6 μg/g y 8.0
μg/L).
Datos de la
publicación
Risk perception and social participation among women exposed to manganese in the mining district of the
state of Hidalgo, Mexico.
Datos de la
Catalán-Vázquez M., Riojas-Rodríguez H., y B. Pelcastre-Villafuerte (2012), Science of
publicación
the Total Environment No. 414 pp. 43–52.
Objetivo
Analizar la importancia atribuida al Mn en el proceso de salud-enfermedad-muerte y las
posibilidades de participación de la gestión del riesgo de la población femenina de dos
comunidades que viven cerca de la planta de nodulación en el distrito minero de Molango.
Territorio bajo
Chiconcoac y Tolago
estudio
Población bajo
Población femenina: 39 en Chiconcoac y 50 en Tolago.
estudio
Pruebas
89 entrevistas semiestructuradas y la realización de 6 grupos focales de mujeres de
diferentes edades. Los temas guía de los grupos focales se refieren a las enfermedades se
presentan en la comunidad, las causas de esas enfermedades
Resultados
Se atribuye a la exposición a Mn dolor de cabeza, dolor de pecho, ardor en ojos, tos,
problemas de memoria, dificultades de aprendizaje y crecimiento. Otro de los efectos son
la reducción en la producción de frutas y verduras en la región.
Se requiere de la creación de espacios de comunicación donde se expongan las
preocupaciones de las mujeres, así como su empoderamiento. Las mujeres consideran que
su aporte para reducir la exposición al Mn es mantener las calles y pozos limpios. La
causa de no participar en otro tipo de acciones se debe a que algunos de los esposos
trabajan en la mina y temen a represalias de ser despedidos, y no encontrar otra fuente de
empleo ya que su salud se ve afectada por la exposición al Mn. De promover alguna
participación por parte de mujeres en la gestión del riesgo, los esposos consideran que
250
estas serían tomadas como “locas”, ya que no la empresa minera no les prestaría la
atención que a los hombres. De esta manera, la población femenina, consideran que este
es un problema que debe ser tratado entre hombres, entre iguales. Otras dificultades para
la organización femenina es este asunto es que tienen que pedir permiso a su esposo, la
presencia de machismo y de violencia. Por otra parte, cuando se establecen asambleas
locales la autoridad convoca sólo a hombre, y permite la asistencia de mujeres viudas o
cuando sus maridos no están en la comunidad. La asistencia de las mujeres a asambleas es
cuando se trata del apoyo social “Oportunidades”.
La población femenina de Tolago considera que la contaminación por Mn les ha afectado
y no han recibido los mismos beneficios que la localidad de Chiconcoac.
Effect of environmental manganese exposure on verbal learning and memory in Mexican children
Datos de la
Torres-Agustín R., Rodríguez-Agudelo Y., Schilmann A., Solís-Vivanco R., Montes S.,
publicación
Riojas-Rodríguez H., Cortez-Lugo M., y C. Ríos. (2013), en Environmental Research, No.
121, pp. 34-44.
Objetivo
Evaluar el efecto de la exposición a Mn en la memoria verbal y el aprendizaje en niños de
7 a 11 años.
Territorio bajo
a) Población expuesta, a menos de 1 km de distancia de la instalación de procesamiento de
estudio
Mn, en las localidades de Chiconcoac y Tolago (100 infantes)
b) Población no expuesta, en un radio de 80 km del Distrito minero de Molango en el
municipio de Agua Blanca en las localidades de Chichicaxtle, El Palizar, Los Cubes y
Plan Grande. (95 infantes)
Población bajo
100 infantes, para la población expuesta/Edad: 7 a 11 años (La población final estudiada
estudio
incluyó solo 79 infantes)
95 infantes, para la población. no expuesta /Edad: 7 a 11 años. En ambos casos la
población debe contar con al menos 5 años de residencia en la misma comunidad.
Pruebas
Evaluación cognitiva: Children‘s Auditory Verbal Learning Test (CAVLT)
Cuestionario sociodemográfico
Medición sanguínea de Mn
Medición capilar de Mn
Resultados
Se observó una diferencia estadísticamente significativa en la mediana entre la población
no expuesta y expuesta de 8.0 y 9.5 μg/L respectivamente. Los niveles de Mn en el
cabello para el grupo expuesto fueron 20 veces más altos (mediana de 12.6 y media 14.2
μg/g); que el grupo no expuesto (mediana 0.6 y media 0.73 μg/g).
Se encontró una asociación negativa entre los niveles de Mn en cabello y la subescala de
memoria a largo plazo de la prueba CAVLT. También se observó una asociación negativa
pero no significativa entre los niveles de Mn en sangre y las puntuaciones de CAVLT.
Nonoccupational Environmental Exposure to Manganese is Linked to Deficits in Peripheral and Central
Olfactory Function
Datos de la
Guarneros M., Ortiz-Romo N. Alcaraz-Zubeldia M., Drucker-Colín R., y R. Hudson
publicación
(2013), Chem. Senses, No. 38 pp. 783-791.
Objetivo
Evaluar si la exposición no ocupacional al Mn en el aire se asocia con el decremento de la
función olfativa.
Territorio bajo
Población expuesta: Chiconcoac, Tolago
estudio
Población de control: Calnali
Población bajo
Población expuesta: 25 mujeres y 5 hombres, con una edad media de 39.9 años
estudio
Población de control: 25 mujeres y 5 hombres, con una edad media de 42 años
Pruebas
Prueba estandarizada Sniffin’ Sticks
Resultados
La exposición no ocupacional al Mn en el aire se asocia con el decremento de la función
olfativa.
Risk: For Whom? Representations of Mining Activity by Different Social Actors in the Molango Manganese
District of Hidalgo, Mexico
Datos de la
Catalán-Vázquez M., Riojas-Rodríguez H., y B. Pelcastre-Villafuerte (2014), Risk
publicación
Analysis, Vol. 34, No. 1, pp. 28-43.
251
Objetivo
Territorio bajo
estudio
Población bajo
estudio
Pruebas
Caracterización, análisis de los residentes de las localidades, funcionarios públicos y
representantes de la empresa minera, y las representaciones sociales de estos sobre el
impacto del Mn en la salud, la vida diaria y el entorno local a fin de entender las
posiciones y acciones de los actores sociales relacionadas a la problemática minera,
tratando de dirigir los hallazgos al desarrollo de acuerdos entre los actores sociales.
Chiconcoac, Tolago, Chipoco, Cuxhuaca, Malila y Nonoalco
Población de Chiconcoac, Tolago, Chipoco, Cuxhuaca, Malila y Nonoalco
7 personas de cada comunidad= 42 personas+5 interesadas en participar en la entrevista.
14 funcionarios públicos del municipio de Lolotla.
1 funcionario de la Minera Autlán, que también se desarrolla como funcionario público.
Entrevista a profundidad para la población y funcionarios públicos con las temáticas
siguientes: experiencia en la comunidad, significado del Mn en el contexto local,
conexiones entre Mn y salud-enfermedad-muerte, interacción con instituciones que
gestionan el riesgo.
Para el representante de la minera Autlán las temáticas abordadas fueron las siguientes:
impacto de la actividad minera a nivel local y regional, impactos del Mn en el medio
ambiente, los riesgos a la salud por la exposición a Mn, relación entre la empresa minera y
las comunidades.
Resultados
252
-La población de las localidades consideran que las actividades mineras generan
contaminación, afectando su vida diaria, su salud y medio ambiente. La población
considera una disminución en la cantidad de plantas y en la calidad de cultivos por causa
de la presencia de Mn. El ámbito de la salud los efectos son tos, fiebre, ardor en ojos y
garganta, dolor de cabeza, pecho, pulmones, óseo cuerpo, erupciones en la piel, dificultad
en el aprendizaje, “que los niños olviden todo”, enfermedad de Parkinson, pérdida de
peso, causa de muerte y muerte prematura.
La población de las localidades se percibe vulnerable a los efectos de la exposición a Mn,
mayormente cuando no se cuenta con una alimentación adecuada a causa de la pobreza.
Con relación al riesgo-beneficio, los habitantes consideran que la compañía minera ha
obtenido enormes beneficios de la explotación del mineral, se han generado beneficios
como la generación de empleos, que se han desarrollado algunos proyectos de desarrollo
social, pese a ello estos son insuficientes con relación a la degradación ambiental.
-Los funcionarios públicos consideran que la actividad minera es un generador de
desarrollo regional, de desarrollo social, posibilita el acceso a carreteras y de empleos. La
posición adoptada por los habitantes de las localidades es con la finalidad de obtener
beneficios económicos de la empresa minera. El mayor problema ambiental percibido en
la zona es la basura, no así la contaminación por Mn. Los funcionarios consideran que
desarrollan un papel de agentes intermediario de conflictos entre las localidades y la
empresa, también perciben a la empresa como un sustituto del Estado para la satisfacción
de las necesidades sociales.
Los funcionarios de salud no consideran a la exposición a Mn como riesgo para la salud
de la población, por otra parte, consideran como principal riesgo al clima. Tampoco
asocian las afecciones a la salud como respiratorias agudas, gastrointestinales y
enfermedades en la piel con la exposición a Mn. Por otra parte, no ha sido posible la
elaboración de un plan para la disminuir la exposición a Mn.
-Para el representante de la empresa minera, la empresa es responsable con el medio
ambiente, supervisa los ámbitos que podría afectar, ya que el impacto a la salud es
prácticamente nulo. La empresa es considerada como un benefactor social otorgando más
beneficios de los que debería proporcionar. Adicionalmente, se informó que al inicio del
mandato de cada presidente municipal se reunirá con éste para informar de la cantidad
presupuestaria designada por la empresa para las localidades.
Modeling and estimating manganese concentrations in rural households in the mining district of Molango,
Mexico.
Datos de la
Cortez-Lugo M., Rodríguez-Dozal S., Rosas-Pérez I., Alamo-Hernández U. y H. Riojaspublicación
Rodríguez (2015), Environ Monit Assess, No. 187 pp. 11.
Objetivo
Modelar la contribución de las fuentes de manganeso aerotrasnportadas a las
concentraciones de Mn en interiores en una muestra de hogares de Chiconcoac y Tolago y
la estimación de concentraciones de Mn en hogares de población infantil.
Territorio bajo
Chiconcoac (noviembre, 2006/ mayo, 2007) y Tolago (agosto, 2006/junio 2007).
estudio
Población bajo
67 hogares
estudio
Pruebas
Muestreo de aire dentro y fuera de las viviendas por periodos de 24 horas usando muestras
MiniVol. En el ámbito de la vivienda los toma muestras se colocaron, al interior, en la sala
de estar, por ser el sitio donde los participantes pasan mayor tiempo; en tanto que, al
exterior, se colocaron en el techo. Adicionalmente, se tomaron datos de la velocidad y
dirección del viento de la estación meteorológica de la Minera Autlán
Resultados
Se asumió que las concentraciones de Mn en PM2.5, en cada monitor (MiniVol) eran
proporcionales a las fuentes de emisiones dentro del mismo radio. Las concentraciones
medias de PM2.5 en el interior fueron de 46.4 μg/m3 (rango de 12.8–141.8 μg/ m3); al
interior, las concentraciones medias de Mn fueron de 0.09 μg/m3 (rango de 0.01–0.31
μg/m3). Para el exterior las concentraciones medias de PM2.5 fueron de 36.1 μg/m3 (rango
de 11.6–77.5 μg/m3) y 0.09 μg/m3 para Mn (rango de 0.02–0.27 μg/m3).
Las concentraciones medias de Mn en interiores y exteriores se acercan al doble del límite
recomendado (0.05 g/m3) por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos
de Norteamérica (EPA), con un 44.6 por ciento de las mediciones por encima de este
límite. Las principales fuentes de Mn en PM 2.5 externas son: combustión (actividades en
la planta de nodulación de Mn), suspensión y erosión. Se comprobó un efecto directo de
las concentraciones de Mn al aire libre; y al interior de las viviendas con ventanas abiertas
y la distancia a la chimenea minera. El factor más importante para la infiltración de
partículas en la vivienda es el hábito de mantener las ventanas y puertas abiertas.
253