«VIVIREMOS UNA ENORME CATÁSTROFE PARA 2027»
En su despacho abre el armario. Ahí se encuentra las carpetas con sus obras aún inéditas. Son más de veinte. Están en carpetas azules. Ha publicado 63 libros, pero ha escrito muchos más. Es un clásico. Ahí están todos. Página a página. Hasta hace nada escribía a máquina –con una Olivetti de 1964– y cree que el ordenador es una cosa moderna que ha venido a complicar la vida. Recuerdo que hace unos años me contó que al escribir a máquina se reducían al máximo las equivocaciones. Ahora se echa el cursor atrás y se pulsa la tecla de delete. Antes cada palabra se pensaba y te jugabas la vida en una sola línea. Si te equivocabas, se usaba el Tipp-Ex para borrar, pero había que tener cuidado porque no se podía emborronar el folio. Ahora te puedes equivocar todas las veces que sea, pero antaño con tres errores por página estabas obligado a repetir la página y se volvía al comienzo. Él es de esa generación. Un periodista de raza, de los de antaño. De los que tenían miedo de estar en la redacción, porque lo normal es que el jefe los mandara a todos a la calle, donde está la información. Ahora, las redacciones se han convertido en lugares silenciosos, apagados y sin vida, donde se caliente demasiado la silla.
Los tiempos han empeorado mucho Después llegó el éxito masivo con obras como –tan masivo que no se ha repetido nada igual en la literatura española: más de 200 semanas seguidas en el primer puesto en ventas– y una segunda etapa de triunfos editoriales con los libros que vinieron tras un trabajo en el que recopila decenas y decenas de episodios protagonizados por testigos que han vivido experiencias que certifican la existencia de vida tras la muerte.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos