SIN LÍMITES
CRÍTICAS
EL BARQUITO CHIQUITITO
ANTONIO TABUCCHI
ANAGRAMA, TRADUCCIÓN DE CARLOS GUMPERI, 230 PP., 17,95 EUROS
Carlos Barral, en su libro Cuando las horas veloces, se lamentó de que el poder editorial, en un momento determinado, pasó en España, definitivamente, a los directores comerciales y gestores abstractos. Y otro editor, Martí Martín, explicó en sus memorias que, con el tiempo, el ideal de los directores comerciales, y de los gestores abstractos, será guillotinar los libros antes incluso de que se pongan a la venta. Se supone que el triunfo de los fabricantes de libros sobre los editores de libros, en el sentido anglosajón del término, no es un fenómeno privativo de estos pagos; solo así se explica que una obra como El barquito chiquitito, de Antonio Tabucchi, publicada en 1978, haya estado tantos y tantos años descatalogada e injustamente olvidada en su país de origen. Ahora Anagrama, que ha editado en España la casi totalidad de su obra, la rescata para el público de habla hispana; enhorabuena.
Antonio Tabucchi (Pisa, Italia, 1943-Lisboa, 2012), considerado como el mejor escritor italiano de su generación, tiene una extensa obra como novelista —Sostiene fue llevada al cine con gran éxito— y recibió en vida numerosos premios y reconocimientos. , la segunda de sus obras después de , es la crónica de una familia, la del llamado Capitán Sexto, a partir, milite en la Democracia Cristiana, con gran éxito: «Y en esos años el dinero empezó otra vez a valer algo, de modo que Anselmo Zanardelli, a quien no le faltaba olfato, empezó a vender, y luego a comprar otra vez. Y después a vender de nuevo. De manera que le concedieron el título de Caballero de la Orden al Mérito en el Trabajo» (p. 167). Algunos refranes, solo algunos, son ciertos, como el que predica que en todas partes cuecen habas: recordemos que a , en tiempos, hubo Universidad que lo proclamó doctor honoris causa.
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